Origen de La Literatura Venezolana

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Origen de la literatura Venezolana

La literatura en Venezuela se remonta a la literatura oral de los indígenas, algunas de


las cuales han sido registrados hoy en día. La literatura escrita comenzó a
desarrollarse durante la época de la colonia, y los escritos de la época fueron
dominados por la cultura y pensamiento de España. La primera manifestación
literaria de la que se tiene conocimiento en nuestro país es la llamada literatura
indígena, la cual ha sido conservada por la tradición. Esta manifestación aunada a la
literatura colonial, particularmente las reseñas pormenorizadas sobre las peculiares
características del nuevo mundo escritas por los colonizadores españoles o crónica de
indias, constituyen el punto de partida de la literatura en el país. La literatura
indígena, propia de las culturas desarrolladas antes de la llegada de los
conquistadores españoles, fue conservada por la tradición oral. Tras una ardua labor
de investigación posterior se han logrado publicar interesantes colecciones de
cuentos y tradiciones, como las recopiladas por Fray Cesáreo de Armellada en su libro
Taurón Pantón, ilustrativo grupo de relatos de los indios pemones del sur de
Venezuela. Las crónicas de indias hechas por los conquistadores son otro precedente
de la literatura nacional. La primera crónica que inaugura este género dentro de
nuestro continente es la Tercera carta de relación a los Reyes Católicos, escrita por
Cristóbal Colón, tras su tercer viaje, al tocar tierra firme en territorio venezolano. En
este texto, Colón hace referencia a la extraordinaria belleza natural de la región, así
como también a las costumbres de sus habitantes.

La literatura Republicana de inicios del Siglo XIX no es muy abundante pues los
intelectuales y políticos estaban ocupados en las guerras libertarias. Sin embargo,
surge la oratoria como forma alternativa para propagar las ideas independentistas y
cuya belleza retórica y estilista hace que se le ubique dentro del espectro literario.
En este período sobresale también la producción poética de Andrés Bello, primer
poeta en proponer la creación de una expresión lírica americana. Su poesía es
considerada como precursora de la temática latinoamericana en la lírica continental,
tal como se puede observar en Alocución a la poesía (1823) y en Silva a la agricultura
de la Zona Tórrida (1826). En vísperas de la independencia, llega la primera imprenta
a Caracas y con ella surgen importantes periódicos, entre los que destaca El correo
del Orinoco, a través de los cuales se difunden las ideas libertarias. Sin embargo,
antes de la aparición de los primeros periódicos, estas ideas eran principalmente
difundidas a través de la oratoria, pues las imprentas españolas difícilmente
accederían a la publicación de ideas que atentaran en contra de su hegemonía.
Fue después de 1880 cuando se perfiló en Venezuela un movimiento literario de más
ambiciosa inspiración. En el género narrativo, el descubrimiento del naturalismo
inspiró a Tomás Michelena una novela: Débora (1884) y a Manuel Vicente Romero
García, su obra Peonía (1890), primera tentativa de novela criolla integral.
La Novela, muchos autores coinciden al afirmar que la novela venezolana surge a
mediados del Siglo XIX, tras la publicación de Los mártires, de Fermín Toro en 1842.
Las primeras novelas venezolanas siguen los postulados de las corrientes literarias
que para la época prevalecían en el ámbito mundial. A excepción de las inscritas en
el marco del modernismo, movimiento literario de origen latinoamericano.
La novela venezolana a principios del Siglo XX:
El año de 1910 se toma como punto de partida de nuevas experiencias estéticas que
reaccionan en contra del modernismo e intentan escribir acerca de la vida común. De
manera que se perfila una nueva expresión literaria de carácter realista, en la que
reaparecen viejas esencias del costumbrismo. En este momento de la trayectoria de
la novela venezolana son relevantes los nombres de José Rafael Pocaterra, Teresa de
la Parra y Rómulo Gallegos, entre otros. Un punto de referencia dentro de la
novelística nacional lo constituye Rómulo Gallegos, quien publicó diez novelas
ambientadas en distintos espacios de la geografía venezolana, conectadas con las
concepciones positivistas y de un profundo realismo social. Reinaldo Solar (1920), fue
su primera novela, a la que siguieron La trepadora (1925), Doña Bárbara (1929),
Cantaclaro (1934), Canaima (1935), Pobre negro (1937), El forastero (1942), Sobre la
misma tierra (1943), La brizna de paja en el viento (1952) y Tierra bajo los pies
(1971). Características comunes de estas obras serían su alto sentido pedagógico, la
lucha entre civilización y barbarie como temática recurrente, además de la
interpretación de aspectos controversiales, algunos autores afirman que Gallegos,
quien llegó a ser Presidente de la República, trazó su ideología política a través de la
escritura de sus novelas.

Los nuevos clásicos venezolanos: Con una abundante producción literaria, no sólo
dentro del plano de la novela sino también en otras categorías genéricas, destaca la
labor de Arturo Uslar Pietri y Miguel Otero Silva. Estos autores se consideran como
pertenecientes al canon literario venezolano y se constituyen en autores clásicos del
Siglo XX. Arturo Uslar Pietri, quien ganó el premio “Príncipe de Asturias” en España y
el “Premio Rómulo Gallegos” en Venezuela con su novela La visita en el tiempo, se ha
constituido en un punto de referencia dentro de la producción novelística nacional.
Dentro nuestra cultura literaria se pueden destacar el cuento: que en los comienzos
de la cuentística venezolana, las revistas como El cojo ilustrado juegan un papel
fundamental para la difusión de las obras de los escritores dedicados a este género,
el ensayo: muchos autores coinciden en señalar que el origen del ensayo venezolano
se remonta a los años finales del siglo XIX. En este período los ensayistas se
dedicaron a reflexionar en torno a la identidad nacional. El objetivo principal de sus
escritos fue el de elaborar las bases ideológicas para fundar la nación recién
independizada. En el modernismo esta temática se amplía al incluir lo estético y lo
literario, la poesía: a principios del Siglo XIX Andrés Bello despunta como uno de los
poetas más significativos del momento con una obra que se inscribe primero dentro
del neoclasicismo y luego dentro del romanticismo. Estos movimientos literarios de
origen europeo, al igual que el parnasianismo, tuvieron gran repercusión en los
primeros poetas venezolanos. Andrés Bello escribió sus famosas silvas entre 1823 y
1826 en un estilo emparentado con el movimiento neoclásico que dictaba las pautas
en la literatura de esos días.

Para finalizar nuestra intervención en el tema podemos acotar, que nuestra literatura
en Venezuela desde la época colonial se vio influenciada por la tendencia Europea,
ya que, desde el mismo momento que llegan los españoles a nuestro país comienzan
a relatar el nuevo mundo que encontraron. Ya en el siglo XIX impulsado por el motor
de la independencia se abre la puerta donde con la pluma de Andrés Bello se
comienza a relatar la cultura de nuestro país, es por ello que se afirma que la
Literatura va más allá de simples relatos coherentes, ya que, a través de ella
podemos conocer, como decimos al principio, las costumbres, cultura, ideológias,
cambios y evoluciones que a través del tiempo ha hecho la humanidad entera.

MANIFIESTO DE CARTAGENA

En este manifiesto, Bolívar expone sus consideraciones sobre la situación actual de la


guerra de independencia, en especial las causas que llevaron al fracaso la primera
república.

Así, Bolívar destaca la adopción de un gobierno que adoptó un sistema federal con
sus consecuencias fatales para los intereses de unificación de la república; por otra
parte la orientación que tuvieron los magistrados para procurar el orden social
quienes consideraron que el mismo se conformaba y construía con la promulgación de
leyes. De manera tal, que tuvimos filósofos por gobernantes y filantropía por
legislación, lo que contribuyó a la disolución total de la primera república.

Por ello, a cada conspiración y acto de corrupción y desobediencia sucedía el perdón


que no hacía más que mandar a hacer el crimen, más aún cuando la república se
encontraba en construcción social y política.

Contrarios a levantar tropas disciplinadas y fuertes, el gobierno procuró la instalación


de soldados y demás burócratas que contrarios a defender los intereses de una
república que perseguía su fortificación, contribuyeron al agotamiento del erario
público.

El sistema federal adoptado por el gobierno exacerbó el caudillismo que terminó


dando como resultado la rivalidad entre las provincias y ciudades de Venezuela, más
aún cuando la unificación de la patria se encontraba en gestación.

Por otra parte, la adopción de una nueva y desconocida moneda que pretendía
mediar las relaciones comerciales generó una gran incertidumbre que aún la
población no se encontraba en capacidad de comprender como la expresión abstracta
del valor de los bienes y servicios. De manera tal que, la población percibía que con
la moneda se les estaba despojando del valor intrínseco (valor de uso) que poseían
los bienes y servicios, aumentando así el descontento de la población ante el nuevo
sistema político independiente de la corona española.

Además de todo ello, lo que más debilitó a la república fue el sistema federal que
adoptó, que siguiendo las máximas exageradas de los derechos del hombre promovió
la anarquía. Debido que a pesar de las bondades del sistema federal, es el más
inadecuado para nuestros pueblos, dado su oposición a los intereses de unificación de
una república que recién nacía.

En síntesis, Bolívar resume las causas principales que dieron al traste con la primera
república expresando que en primer lugar debe colocarse la constitución federal que
era tan contraria a los intereses de la república como favorable a las intenciones de
los enemigos. En segundo lugar, el espíritu de misantropía que se apoderó de
nuestros gobernantes. Tercero, la oposición de conformar un cuerpo de soldados con
cuya fuerza pudieran replegar los ataques de los enemigos y por último, el terremoto
que fue explotado por el fanatismos de la iglesia católica la cual lo utilizó para
infundir miedos a la población difundiendo la creencia de que el mismo era la
respuesta de dios ante los intentos de independencia de la corona española.

La carta de Jamaica

DESARROLLO

La “Carta de Jamaica”, la escribe Bolívar en respuesta a otra carta anterior de un


amigo, en la que le solicita informes sobre el acontecer del proceso político y
revolucionario en el “Nuevo Mundo” El número de sus pobladores, las políticas de
cada provincia; si desean repúblicas o monarquías y, le pide que le envíe toda clase
de información al respecto. Y a qué fuentes debe ocurrir. Sintiéndose obligado El
Libertador, a dar una respuesta a su gran amigo, le dice casi al inicio de la escritura;
con toda la modestia que lo caracterizó, que tan sólo podrá suministrar algunas
ingenuas expresiones de su pensamiento. Explica Bolívar: “Toda idea relativa al
porvenir de este país me parece aventurada. Nosotros, que apenas conservamos
vestigios de lo que en otro tiempo fue, y que por otra parte no somos indios, ni
europeos, sino una especie de mezcla entre los legítimos propietarios del país y los
usurpadores españoles; en suma, siendo nosotros americanos por nacimiento, y
nuestros derechos los de Europa, tenemos que disputar a estos, a los invasores, el
derecho a permanecer y ser libres en nuestro país. Por tanto sería una especie de
adivinación indicar cuál será el resultado de la línea política que América siga. Aquí,
Bolívar reconoce el derecho de legítima propiedad del suelo americano, a los indios y
fustiga la usurpación del Imperio Español. Refiere El Libertador a su amigo, las
bárbaras atrocidades cometidas por los españoles en el “Hemisferio de Colón”, “tan
atroces y fabulosas, que parecen superior a la perversidad humana. Se nos vejaba
con una conducta que, además de privarnos de los derechos que nos correspondían,
nos dejaba en una especie de infancia permanente. Tan infaustas verdades se creen,
porque existen testimonios de personas respetables que sirvieron como historiadores
imparciales que hicieron justicia al cielo y al Filantrópico obispo de Chiapas, El
Apóstol de La América, Bartolomé de Las Casas, que dejó para la posteridad una
breve relación de los hechos. Verdades, que gracias a la virtud de aquel amigo de la
humanidad, se atrevió a denunciar con tanto fervor y firmeza ante su gobierno y
contemporáneos, aquellos actos tan horrorosos de un frenesí sanguinario”

Refleja Bolívar su emoción, al referirse a un pasaje expreso en la carta de su amigo,


en el que le confirma su deseo de que los sucesos que acompañaron las armas
españolas, le sean favorables a quienes le acompañen ahora en su gesta libertadora.
Y Bolívar escribe:”Yo tomo esta esperanza por la predicción, si la justicia decide las
contiendas de los hombres, el suceso coronará nuestros esfuerzos; porque el destino
de América se ha fijado irrevocablemente: el lazo que la unía a España está cortado.
Lo que antes nos enlazaba hoy nos divide; pero aunque los sucesos hayan sido
parciales y alternados a nuestro favor, no podemos confiar de la fortuna”. Menciona
El Libertador, que las provincias del “Río de la Plata” han conducido sus armas
vencedoras al Alto Perú, a Arequipa y han inquietado a los realistas de Lima. Dándole
la libertad acerca de un millón de habitantes. Refiriéndose a la lucha de Chile por su
libertad dice: “El pueblo que ama su independencia, al fin la logra”. Comenta que
para el momento de la conquista, había en Venezuela, cerca de un millón de
habitantes y que a causa de la guerra por la dominación, desapareció cerca de tres
cuartas partes de esa población primitiva.

Haciendo referencia al Barón de Humboldt, Bolívar escribe: “En Nueva España había
en 1808, siete millones ochocientos mil almas con inclusión de Guatemala. Desde
aquella época, la insurrección que ha agitado a casi todas sus provincias, ha hecho
disminuir sensiblemente aquel computo que parece exacto; pues más de un millón de
hombres han perecido, como lo podrá usted ver en la exposición de Mr. Walton que
describe con fidelidad los sanguinarios crímenes cometidos en aquel opulento
imperio”. En su memorable carta Bolívar relata, que las islas de Cuba y Puerto Rico,
entre ambas podían formar una población de setecientas a ochocientas mil almas, y
eran lasque poseían los españoles más tranquilamente, porque estaban fuera del
contacto de los independientes y se preguntaba: ¿No son americanos estos insulares?
¿No son vejados? ¿No desearan su libertad?Bolívar, califica de demencia la pretensión
de España, de querer reconquistar la América, sin marina, sin riqueza y casi sin
soldados, puesto que con los que contaba apenas eran suficientes para retener a su
propio pueblo a la fuerza y de forma violenta. Comenta El Libertador a su amigo:
“Europa haría a España un bien si la disuadiera de su obstinación temeraria, porque
le ahorraría cuando menos los gastos que expende y la sangre que derrama. Y que a
bien tendría fijarse en sus propios espacios y fundar su propiedad y poder sobre bases
más sólidas que las de conquistas inciertas. Bolívar, abrigaba esperanzas se que las
naciones cultas se apresurarían a auxiliarlos en bien de que las ventajas serian
reciprocas para ambos hemisferios, pero sus esperanzas se frustraron, porque no solo
los Europeos sino también los del Norte se mantuvieron inmóviles y espectadores
ante la contienda. Afirma Bolívar en su “Carta de Jamaica”, refiriéndose al trato que
dio Bonaparte a Carlos IV y a Fernando VII, reyes de una nación que por espacio de
tres siglos aprisionó a la América Meridional, que fue un acto manifiesto de
retribución y justicia divina y al mismo tiempo, una prueba de que Dios sostiene la
justa causa de los americanos y les concederá su independencia. “Fernando VII con
su usurpador, ambos europeos, solo padecen destierros, El Uliman de Chile, terminó
su vida de un modo atroz”. Escribe Bolívar: “los acontecimientos de la tierra firme
nos han probado que las instituciones perfectamente representativas, no son
adecuadas a nuestro carácter, costumbres y luces actuales. En Caracas, el espíritu de
partido formó su origen en la sociedad, asambleas y elecciones populares y estos
partidos nos tornaron a la esclavitud. En tanto que nuestros compatriotas no
adquieran los talentos y las virtudes políticas que distinguen a nuestros hermanos del
Norte, los asientos enteramente populares, lejos de sernos favorables, temo mucho
que vengan a ser nuestra ruina”. El Libertador hace referencia también a un
pensamiento de Montesquiu, que reza: “Es más difícil sacar un pueblo de la
servidumbre que subyugar uno libre”. “Esta verdad está comprobada por los anales
de todos los tiempos, que nos muestran las más de las naciones libres, sometidas al
yugo, y muy pocas de las esclavas recobrar su libertad”. Se preguntaba Bolívar.
¿Seremos nosotros capaces de mantener en su verdadero equilibrio la difícil carga de
una República? ¿Se puede concebir que un pueblo recientemente desencadenado, se
lance a la esfera de la libertad, sin que, como a Ícaro, se le deshagan las alas, y
recaiga en el abismo? “Tal prodigio es inconcebible, nunca visto. Por consiguiente, no
hay un raciocinio verosímil, que nos halague con esta esperanza. En este documento
están plasmados varios de los más famosos pensamientos del Libertador. Entre ellos:
“yo deseo más que otro alguno ver formar en América la más grande nación del
mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad y gloria”. “Para que un
solo gobierno dé vida, anime, ponga en acción todos los resortes de la prosperidad
pública, corrija y perfeccione al Nuevo Mundo, sería necesario que tuviese las
facultades de un dios y, cuando menos, las luces y virtudes de todos los hombres”.
“El interés bien entendido de una república se circunscribe en la esfera de su
conservación, prosperidad y gloria”. “Voy a arriesgar el resultado de mis cavilaciones
sobre la suerte futura de América; no la mejor, sino la que sea más asequible”.
Expresa Bolívar su visión de conformar una gran nación, uniendo a la Nueva Granada
con Venezuela, si llegasen a convenir en formar una república central, cuya capital
sería Maracaibo o una ciudad que llevase el nombre de Las Casas (en honor al héroe
de la filantropía), fundiéndolas desde los confines de ambos países, en el soberbio
puerto de Bahía Honda. Asegura Bolívar que esta posición aunque desconocida sería
ventajosa en todos los aspectos. “Su acceso es fácil y su clima puro y saludable, un
territorio tan propio para la agricultura como para la cría de ganados, y una grande
abundancia de maderas de construcción. Los salvajes que la habitan serían
civilizados, y nuestras posesiones se aumentarían con la adquisición de la Guajira.
Esta nación se llamaría Colombia como tributo de justicia y gratitud al creador de
nuestro hemisferio”. “Su gobierno podrá imitar al inglés; con la diferencia de que en
lugar de un rey habrá un poder ejecutivo, electivo, cuando más vitalicio, y jamás
hereditario si se quiere república “Continúa diciendo Bolívar: “De todo lo expuesto,
podemos deducir estas consecuencias: las provincias americanas se hallan lidiando
por emanciparse, al fin obtendrán el suceso; algunas se constituirán en repúblicas
federales y centrales; secundaran monarquías casi inevitablemente en las grandes
secciones, ya en la actual, ya en las futuras revoluciones”.“Es una idea grandiosa
formar de todo el mundo nuevo una sola nación, con un solo vinculo que ligue sus
partes entre sí y con un todo. Ya que tiene un origen, una lengua, unas mismas
costumbres y una religión, debería por consiguiente, tener un solo gobierno que
confedere los diferentes estados que hayan de formarse. Mas no es posible porque
climas remotos, situaciones diversas, intereses opuestos, caracteres desemejantes
dividen a la América. ¡Que bello sería que el Istmo de Panamá fuese para nosotros lo
que el Corinto para los griegos! Yo diré a usted lo que puede ponernos en actitud de
expulsar a los españoles y de fundar un gobierno libre. Es la unión, mas esta unión
nonos vendrá por prodigios divinos, sino por efectos sensibles y esfuerzos bien
dirigidos”. “Cuando los sucesos no están asegurados, cuando el Estado es débil, y
cuando las opiniones se dividen, las pasiones las agitan y los enemigos las animan
para triunfar por este fácil medio”. Para finalizar su carta y sin dejar de lado su gran
modestia, Bolívar escribe: “Tales son señor, las observaciones y pensamientos, que
tengo el honor de someter a usted para que los rectifique o deseche según su mérito,
suplicándole se persuada que me he atrevido a exponerlos, más por no ser descortés
que porque me crea capaz de ilustrar a usted en la materia”.

CONCLUSIÓN

Como punto final a este ensayo podemos decir que es un análisis de la situación que
en ese momento vivía Venezuela, Colombia, Perú, México, Panamá, Ecuador, Chile,
entre otras naciones, por la opresión de España, Esta nación solo trajo desolación y
muerte a toda la América meridional, manchando el suelo patrio con la sangre
inocente de sus moradores que en su mayoría eran indígenas, que lucharon hasta la
muerte por defender su territorio y el honor de sus mujeres e hijas. Los españoles
implantaron la más terrible esclavitud a todos los pueblos del “Nuevo Continente”.
Lograron permanecer por más de tres siglos, cambiando nuestras costumbres,
culturas y creencias. Imponiendo a la fuerza su credo, religión, vicios y demás.
Saquearon, asesinaron, violaron, vejaron, humillaron y esclavizaron a todo ser
viviente que fuese hijo de nuestra América. Algo parecido ha hecho Estados Unidos,
con todos los pueblos pobres del mundo. Los someten, esclavizan, y dominan
negándoles el derecho a ser libres y soberanos y cuando algún pueblo se revela,
imponen su voluntad a la fuerza, llegando incluso al asesinato de líderes populares y
hasta de presidentes constitucionales de países que han intentado hacer valer su
soberanía y lograr su plena libertad. Gracias a la gran visión de estadista del
Libertador Simón Bolívar y a su gran preocupación por la emancipación, logró la
libertad de seis naciones que estuvieron oprimidas por el yugo español. Bolívar;
siempre pensó en la unión latinoamericana, con la idea de fortalecer a los pueblos en
la defensa, para evitar se continuaran sucediendo las invasiones de otros países.
Fortalecer el comercio y poder competir con los demás países latinoamericanos y
europeos de forma libre e independiente. Hoy podemos decir que en Venezuela;
Bolívar ha vuelto a resucitar convertido en millones de compatriotas. Venezolanos
que guiados por un líder indiscutible, como lo es el Comandante y Presidente
Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Rafael Chávez Frías,
hemos asumido la responsabilidad de lograr que nuestro País sea nuevamente libre y
soberano. Por los siglos de los siglos. Tendiendo nuestra mano amiga a los pueblos
caídos, para que se levanten y juntos, unidos todos, podamos lograr que el sueño de
Bolívar; Libertador del continente americano, sea al fin una verdadera y feliz
realidad. “Debemos hacernos fuertes, donde el enemigo es débil “Simón Bolívar. De
la carta de Jamaica la cuestión más relevante es como Bolívar postula el porqué es
de beneficio para el mundo tanto en ese momento como en un futuro que América no
solo se libere del maltrato proveído por sus colonizadores sino también de la
necesidad de que este continente, y se refiere especialmente a la nueva Granada
actúe como un país independiente; En pro de esto recurre a su magnífica oratoria y
al sentimiento patriota que lo embargaba para exponer de la forma más clara y
conmovedora la situación que atraviesa el continente, aun más relevante es la forma
compleja como conoce y entiende todo el contexto americano aun sabiendo la
dificultad del momento para que esto fuera así y que aunque aclara (y aun
subestimándose) que le es difícil conocer la situación en toda su extensión es notorio
el dolor que le causa ver al pueblo americano (por qué no lo define como propio)
sometido aun después de que en el antiguo continente el contexto hubiera cambiado
tanto en relación a la libertad y el buen trato de los hombres el cual es parte
esencial del argumento de Bolívar , y que este usa siendo critico y severo con
relación al comportamiento del gobierno español , que aunque critica por la barbarie
de sus actos también expone lo poco acertado de su reconquista (siendo muy
objetivo en este punto) debido a la situación económica, social y política de la
metrópoli en el momento como un punto que encausaba aun mas los movimientos
independistas , básicamente con relación a España dice que no son capaces de
mantener una estabilidad en la península , lo cual los incapacita para mantener
orden y control sobre el nuevo reino , y en consecuencia lo agresivo de su regreso ,
comportamiento contraproducente para estos por la conciencia y claridad como
síntoma general de los americanos que les da mayor fuerza y fe en su fin de
independencia. Bolívar plantea muchos argumentos, datos y análisis de la situación
del momento y a la vez pone sobre la mesa fuertes razones de porque las naciones
extranjeras, Inglaterra principalmente como precursor de las ideas de la ilustración y
como contrario por no decir claro enemigos de España, debía ser consecuente y dar
apoyo a las campañas independistas americanas, principalmente tras la derrota de
napoleón, tanto por conveniencia económica como por ratificar sus luchas en favor
de los preceptos de ilustración, y Estados Unidos como nación vecina debía actuar en
vías de garantizar su seguridad , de su beneficio económico y como precursora de las
campañas de independencia en el nuevo continente; aunque con nostalgia precisa de
la siguiente manera la posición de estos : "La Europa misma, por miras de sana
política, debería haber preparado y ejecutado el proyecto de la independencia
americana, no sólo porque el equilibrio del mundo así lo exige, sino porque éste es el
medio legítimo y seguro de adquiriese establecimientos ultramarinos de
comercio...Sin embargo... no sólo los europeos, pero hasta nuestros hermanos del
norte se han mantenido inmóviles espectadores de esta contienda...".Aunque al
parecer el interés principal de Bolívar con la redacción de la carta era llamar la
atención sobre la situación actual de América y los beneficios que traería el que esta
lograra liberarse del yugo español, en lo concerniente a los ideales de Bolívar con
relación a los procesos de emancipación y la organización política de los estados
posterior a ellos pone todas su fe en la libertad del nuevo mundo , acuña a este ideal
que no solo es esperanzador si no también posible debido a la conciencia y lucidez de
los ciudadanos americanos que cansados y consientes del sometimiento habrían
empezado aunque no de forma arrasadora con las distintas campañas libertadoras de
las cuales según el Libertador y expresado de la siguiente forma saldrían victoriosos :
“El suceso coronará nuestros esfuerzos porque el destino de América se ha fijado
irrevocablemente." . Por último plantea como seria la forma ideal de enfrentar la
organización política de las nacientes naciones, que recalca deben estar en manos de
los criollos; de la siguiente forma presenta el conocimiento del momento en relación
a este tema: “Estábamos abstraídos y ausentes del universo en cuanto es relativo a la
ciencia del gobierno y administración del estado. Jamás éramos Virreyes, ni
gobernadores, sino por causas muy extraordinarias; Arzobispos y Obispos pocas veces;
diplomáticos nunca; militares sólo en calidad de subalternos; nobles sin privilegios
reales; no éramos, en fin, ni magistrados, ni financistas y casi ni aún comerciantes:
todo en contravención directa de nuestras instituciones" todo lo anterior en
consecuencia a el manejo tirano que daban los españoles a el nuevo reino , y que al
fin y al cabo actúo en su contra pues incentivo aun más los intereses emancipadores ;
como forma de gobierno resalta la necesidad de un gobierno centralista, aun
caracterizando a el federalismo como el ideal pero no apropiado debido a que
culturalmente los estados estaban vinculados con una metrópoli , que además era un
símbolo de cohesión para los estados y que además les permitiría actuar en unión y
mayor fuerza en los procesos que se darían en respuesta a las recientes
independencias, una de las más concretas citas que reflejan lo anterior es :"Los
estados americanos ha menester de los cuidados de gobiernos paternales que curen
las llagas y las heridas del despotismo y la guerra".

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