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LÍQUIDOS PARA LENTES DE CONTACTO

DEFINICIÓN

Son soluciones especiales que realizan una acción de limpieza profunda. Evitan posibles
patologías oculares.

HIGIENE Y MANTENIMIENTO DE LAS LENTES DE CONTACTO

La higiene adecuada y a conciencia es la condición indispensable para que no surja


ningún problema a la hora de utilizar lentes de contacto. Los dos objetivos principales
de la higiene de las lentillas son: la eliminación de gérmenes. El proceso de higiene
consta de los siguientes puntos:

 Humectación: humedecer la superficie de la lentilla.


 Limpieza: los depósitos pueden eliminarse de forma mecánica, o a través de
iones o enzimas.
 Desinfección: reducción de la colonia de gérmenes
 Conservación: almacenamiento de las lentes de contacto en el estuche provisto
para tal efecto.

No todos los sistemas de cuidado de las lentes de contacto satisfacen de la misma forma
los puntos que acabamos de mencionar. Para las lentillas blandas se emplean
principalmente sistemas de peróxido y soluciones únicas, las características de los
cuales se describen a continuación.

Sistemas de peróxido (desinfección oxidativa)

Los peróxidos se componen de una botella con solución de peróxido al 3% y un


componente neutralizante. Este último está disponible en pastilla o en solución. El
peróxido de hidrógeno al 3% destruye bacterias y hongos en un tiempo de acción
aproximado de entre 20 y 40 minutos. El peróxido oxida las moléculas y componentes
celulares, mediante el oxígeno atómico de alto poder activo que se forma a partir de la
descomposición del peróxido, y los disuelve.

Una vez se ha producido el efecto del peróxido, el peróxido de hidrógeno debe ser
neutralizado junto con las lentillas durante varias horas, para impedir la penetración de
residuos en el ojo que puedan ocasionarle daños. Las lentes de contacto sólo deberán
colocarse en los ojos una vez haya tenido lugar la neutralización. Los sistemas de
peróxido no son apropiados para la conservación a largo plazo y la humectación de las
lentillas. Éstas deben volver a desinfectarse al cabo de pocos días. El empleo de
soluciones de peróxido resulta complicado para algunas personas; lamentablemente es
habitual que los ojos entren en contacto con el peróxido de forma accidental, lo cual
provoca daños significativos.

Soluciones únicas

Se trata de soluciones fáciles y prácticas de usar y, al mismo tiempo, proporcionan


seguridad y eficacia. Permiten limpiar, desinfectar, aclarar, conservar y humedecer las
lentillas mediante el empleo de una sola botella. Por lo general las lentes de contacto
pueden conservarse en soluciones únicas hasta un máximo de 30 días. Este tipo de
soluciones suelen ser más económicas que las de peróxido.

Soluciones únicas de primera generación

Se trata de soluciones fáciles y prácticas de usar, ya que no es preciso que se lleve a


cabo ningún proceso de neutralización. Sin embargo, en estos sistemas, para limpiar las
lentillas debe realizarse un paso manual, que consiste en limpiarlas y aclararlas con los
dedos antes de colocarlas (frotar y aclarar). Mediante este procedimiento se reduce el
número de gérmenes y se elimina una parte considerable de los depósitos. Tras el
aclarado, las lentes deben desinfectarse, introduciéndolas en un estuche que contiene la
solución correspondiente (el tiempo mínimo de desinfección suele ser de entre 4 y 6
horas).

Soluciones únicas de segunda generación


Las soluciones únicas de segunda generación que existen actualmente en el mercado son
las más prácticas de utilizar, el poder limpiador y desinfectante de estas soluciones se ha
incrementado con respecto a las de primera generación porque limpia y desinfecta
eficazmente todas las lentes de contacto blandas, sin necesidad de realizar la limpieza
mecánica habitual hasta ese momento

Limpieza enzimática
Las enzimas actúan directamente sobre los depósitos de las lentillas y los dividen en
pequeñas subunidades que pueden eliminarse fácilmente. Los agentes limpiadores
enzimáticos son eficaces contra los depósitos de proteínas que pueden acumularse con
el paso del tiempo y que constituyen el principal problema de las lentes de contacto
blandas. Por lo general se presentan en forma de pastillas, que deben utilizarse una vez
por semana

Los limpiadores enzimáticos líquidos son muy prácticos y fáciles de usar: se tira una
gota del líquido en el estuche en el que se guardan las lentillas, y durante la noche éste
ejerce su acción de eliminación de los depósitos.

Lágrima artificial
Cada vez son más frecuentes las situaciones en las que, al llevar puestas las lentes de
contacto, se tiene la sensación de que el ojo está muy seco o de que se ha introducido en
él un cuerpo extraño; entre estas situaciones destacan el aire seco, los aparatos de aire
acondicionado y un pestañeo menos frecuente de lo habitual (al trabajar durante horas
delante de una pantalla de ordenador) Las lentes de contacto blandas con una
concentración elevada de agua, en especial las actuales lentillas desechables, pueden
secarse durante le día y adherirse completamente al ojo. Por ello, una vez puestas las
lentillas, es preciso humedecerlas aplicando gotas de lágrima artificial directamente
sobre ellas; de esto modo se devuelve a la lente el nivel de humedad que precisa.

Los agentes humectantes facilitan la colocación y extracción de las lentes de contacto


semirrígidas( los humectantes utilizados deben ser en formato monodosis o con
ausencia de conservantes , tipo timerosal . Estos conservantes se adhieren a la lentilla y
acortan la vida media de la misma, además de producir importantes reacciones
alérgicas.).

CONSERVACIÓN
Por lo general las lentes de contacto pueden conservarse en soluciones únicas durante
varias semanas sin que su poder desinfectante disminuya en modo alguno. Las lentillas
pueden extraerse de su estuche de conservación y colocarse directamente en los ojos. En
los sistemas de peróxido el poder desinfectante se agota tras el proceso de
neutralización: el peróxido desaparece, de modo que el único componente que se
conserva en la solución es la sal común. Si las lentillas se dejan en el estuche durante
varios días o varias semanas, existe el riesgo de que proliferen gérmenes de distintas
clases, como hongos o bacterias. Por consiguiente, si han permanecido guardadas en el
estuche durante un largo periodo de tiempo, antes de colocarlas en los ojos es preciso
volver a desinfectarlas con solución de peróxido nueva (léanse las instrucciones de uso
del producto).

CONSEJOS PARACONSREVAR LA HIGIENE DE LAS LENTES DE


CONTACTO E INCREMENTAR SU COMODIDAD

 Lavarse bien las manos antes de manipular las lentes de contacto.


 Guardar siempre las lentes de contacto en una solución de conservación especial
para lentillas.
 No mezclar nunca las distintas soluciones para el cuidado de lentes de contacto,
a menos que esté indicado de forma expresa que pueden emplearse
conjuntamente.
 No utilizar agua corriente para aclarar las lentillas.

Humedecer con más frecuencia las lentillas una vez puestas.

https://www.youtube.com/watch?v=gT3jutGbnOw

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