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ORIGINALES o
Rev. Logop. Fonoaud., vol. II , n. 2 (69-78 ), 19 82 .

TRASTORNOS DE LA FLUIDEZ DEL HABLA:


DISFEMIA Y TAQUIFEMIA*
Po r Miquel Serra Raventós
Profesor de Psicolingüística.
Universidad Central. Barcelona.

PROBLEMA Y CONCEPTO DE FLUIDEZ MODELO SIMPLE DE PRODUCCIÓN


fluidez es una de las dimensiones del habla y, DEL HABLA

L
A
como tal, se aprende, se desarrolla y se auto-
Antes de entrar en consideraciones más precisas,
matiza, pero en este proceso, o en el estadio
es importante tener una idea sobre cómo pensamos
final, se dan muchas disrupciones. Son típicos los ti-
que se produce el habla, para así intentar entender
tubeos deliberativos, las prolongaciones reflexivas
mejor dónde se puede situar el trastorno. Laver
iniciales (e...), atrancarse en articulaciones comple-
(1970) propone, por ejemplo, los siguientes niveles:
jas (trabalenguas) o también la inestabilidad (emo-
1) planificación centra1: ideación, programación del
ciones fuertes). Todo ello se considera normal y no
plano neurolingüístico (unidad?, realidad reglas?, et-
tiene ninguna connotación negativa.
cétera); 2) ejecución: regulación motora, ejecución
Pero existen otras disrupciones que se consideran
miodinámica; 3) control: autorregulación correctora
más excepcionales, por no decir anormales (excepto
con los canales : auditivo, táctil, propiceptivo (recuér-
a los 3-4 años). Se trata de repeticiones de fonemas,
dese el sistema del huso muscular con fibras alfa y
sílabas, palabras, revisiones de palabras o frases
gamma sobre el cual se basa una hipótesis explica-
(volver atrás), iteraciones, fonación disrítmica y pau-
tiva interesante) y, finalmente, cognitivo.
sas de tiempo (tensas).
La interrupción de la fluidez afecta lógicamente a
todas las demás dimensiones del habla y la comu-
ALGUNOS DATOS GENERALES
nicación y es vivida como un handicap, tanto para
el emisor como para el receptor, con todas las con-
Inicio
secuencias que esto comporta. Tal como lo explica
Johnson (1959): «La disfemia es un problema de la Entre 18 meses y 9 años (Bloodstein, 1969). Nor-
conducta del habla en el cual se pueden destacar tres malmente se considera entre 3 y 4 años, la fijación
factores básicos: 1) la falta de fluidez en el habla, también se puede dar a los 6 (lectura) y a los 12-13.
dándose repeticiones de partes de palabras, palabras (Véanse los patrones de inicio y evolución de Van
enteras, prolongaciones de sonidos, interjecciones de Riper, más adelante.) Según Johnson no se da de
sonidos o palabras y pausas excesivamente largas; forma instantánea (1959).
2) la reacción de los oyentes frente a las repeticiones
del parlante, valorándolas como indeseables, anóma- Incidencia
las o inaceptables; y 3) la respuesta del parlante
frente a la reacción del oyente, frente a su proble- Según la ASHA (1952-1959) se encontró que, en
ma y la propia idea de persona disfémica». Véase los EE. UU., del 0,7 al 1 % de los niños en edad
también cómo inicia Travis su definición (1971): escolar eran disfémicos. Estos datos son parecidos a
«Trastorno nervioso de origen probablemente psi- los que se dan para otros países. Es interesante se-
cológico que afecta el ritmo y la fluidez...». ñalar que según diversos autores, incluyendo Van
* Traducido del catalán por A. de Quadras. Riper, creen que la incidencia tiende a disminuir

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ORIGINALES

(¿?). Se sabe que es más frecuente entre niños que cho pensar en este origen. Por ejemplo, en la hiper-
entre niñas. La proporción que se da es desde 2,2/1 tensión que se ve en una disartria atáxica (frica-
hasta 5,3/1. ción —› explosión, prolongaciones, etc.); en el ataque
fonético de la disartria espástica; en las repeticiones
que se parecen a la inercia señalada por Luria (1973)
TEORÍAS: NATURALEZA Y CAUSAS al hablar de la afasia motora eferente o cinética (pá-
gina 185); y finalmente en otros trastornos ya más
Van Riper (1971) cita que Sikorski ya en el año diferenciados como, por ejemplo, el habla parkinso-
1889 se preguntaba si se trata de un solo trastorno niana. Pero hasta ahora ningún estudio neurológico,
o bien de diversos que se han agrupado debido a ni central ni periférico, ha sido concluyente. Entre los
que no han sido suficientemente analizados. Hoy factores neurológicos evolutivos han habido dos áreas
aún no podemos contestar a esta pregunta tan sim- muy estudiadas y de interés: la lateralización y la
ple y básica. Las complejidades de sus manifestacio- percepción auditiva central. La presencia de una
nes conjuntamente con la dificultad de establecer mala lateralización entre muchos tartamudos hizo
una frontera precisa han hecho que las múltiples in- pensar en ello como un factor determinante (véase
vestigaciones no hayan llegado a nada definitivo, una buena revisión de este tema en Travis, 1978).
manteniéndose el misterio etiológico que siempre le Más recientemente se está hablando de una mala la-
ha rodeado. teralización de las áreas del lenguaje, pero sin mucha
Las diversas clasificaciones hechas hasta ahora no evidencia de ello. Por lo que se refiere a la percep-
han permitido establecer grupos «discretos» (Ro- ción auditiva, y a raíz de las conocidas experiencias
binson, 1964, 100-l). Se puede decir que el único de Lee (1951) en las que se provocaba una tarta-
acuerdo que hay entre los autores es que no existe mudez artificial por una autorregulación auditiva re-
una sola causa sino que se trata de una interacción trasada (Delayed Auditory Feedback o DAF), se ha
de factores diferentes en cada sujeto. investigado extensamente esta posibilidad. Parece que
algunos tartamudos, ajustando el tiempo a un cierto
Teorías orgánicas nivel, hablan mejor (...) (ya se han fabricado apara-
tos para esto...). Por otro lado, tenemos que decir
- Factores genéticos. En una amplia revisión, que los atascos que se provocan en las personas de
Beech y Fransella (1968) encontraron suficientes mo- habla fluida no son como los de un tartamudo... (para
tivos para considerarlo como un factor importante, una revisión, véase Sodeberg, 1969). También se ha
aunque no era claramente suficiente. En general se visto que el «masking» con el DAF disminuye el
cree que la herencia puede incidir en una facilitación bloqueo, aunque aquí podría haber un «efecto de
para que la fluidez sea frágil y vulnerable, necesi- distracción» y una modificación de las condiciones
tando factores ambientales para desencadenarla y vocales, siendo ambos factores suficientes para expli-
psicológicos para mantenerla. No se puede olvidar car una mejora transitoria. Se espera que lo más im-
aquí el hecho de la sensibilización familiar o la po- portante de estas investigaciones sea un mejor co-
sibilidad de imitación en la solución de un conflicto, nocimiento del papel del control auditivo en la fluidez
factores que pueden confundirse con los genéticos. (y en el habla), más que información sobre la tar-
Personalmente he tenido la suerte de haber podido tamudez.
estudiar tres generaciones de una familia muy nu- - Crítica a las teorías orgánicas. El principal he-
merosa sin poder llegar a ninguna conclusión, ni ge- cho, en este sentido, es que la tartamudez es un fe-
nética ni ambiental, después de un análisis detalla- nómeno episódico. Ciertamente hay trastornos de
dísimo. este tipo, como la epilepsia, o estados, como la an-
- Factores neurológicos. La dificultad de hacer siedad, que podrían relacionarse con ella, pero no
las transiciones de forma suave está presente en conclusivamente (la ansiedad, en la tartamudez, es
muchos trastornos claramente neurológicos y ha he- más un efecto que una causa del bloqueo).

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Teorías psicogénicas ciado es la expectativa de miedo, y el segundo por


tratarse de una habituación que reduce la ansiedad,
La concomitancia de este tipo de factores es un como también ocurre al recitar una serie conocida
hecho evidente. La cuestión está entonces en pre- (nombres naturales) o al recitar una poesía.
guntarse: ¿causales o consecuentes? En relación con
- Trastorno diagnosogénico. Wendell Johnson, de
la posible causalidad, se ha de constatar que en mu-
quien hemos reproducido su definición, fue el pri-
chos niños e incluso adolescentes no parece haber
mero en sistematizar el estudio de la influencia de la
ningún factor psicológico asociado, al menos eviden-
evaluación negativa del bloqueo por parte de los
te. Si esta causalidad se sospecha pero no se ve cómo
padres como sensibilizador y fijador del problema.
demostrarla, lo que sí se comprueba es que estos fac-
Recuérdense los tres factores mencionados en su de-
tores aumentan el problema y, sobre todo, lo man-
finición. Piénsese en qué solución puede encontrar
tienen (angustia y tensión, miedo y evitación).
el niño cuando «la autoridad, el ser querido y la
- Personalidad y teorías dinámicas. ¿Se puede sabiduría» le dicen que hable despacio, y que, al
hablar de un perfil de personalidad típico entre los hacerlo, continúa bloqueándose como antes. El con-
tartamudos? Está bien claro que no. Pero sí que se flicto es evidente... También se ha dicho antes que
encuentra una tendencia más alta en neuroticismo e los antecedentes también son sensibilizadores de la
inadaptación, cosa, por otro lado, que también se en- familia, haciendo más probable y más intensa la eva-
cuentra en cualquier grupo sensibilizado. Otra cues- luación negativa.
tión es si se puede ver un perfil desde un punto de
- Teoría del acercamiento-evitación y del conflic-
vista dinámico. Mediante las técnicas proyectivas
to del rol. Wishner (1969) con su «teoría de la ex-
sólo se ve también un nivel más alto de ansiedad.
pectativa» nos replantea la antigua teoría de Sheenan:
Coriat (1943) habla de una fijación oral (dependen-
del exterior se crea ansiedad al niño al corregirle, y
cia, pasividad, necesidad casi compulsiva de coger o
de aquí se forma un hábito de evitación y de posposi-
ingerir, demandas narcisísticas del exterior). Stein
ción evitando ansiedad y autorreforzándose. Pero la
(1953) habla de una regresión al balbuceo en las re-
evitación también puede ser una conducta desapro-
peticiones y de la agresión que significan las prolon-
bada por el exterior, hablando y reduciendo la an-
gaciones. Barbara (1962, pág. 160) opina que sólo se
siedad a pesar del bloqueo. Esto provoca el dilema
puede decir que es un trastorno neurótico que se ma-
de acercamiento-evitación, típica fuente de angustia
nifiesta en el habla. Fenichel (1945) veía en ello
y neurosis. Éste también era el inicio de la explica-
una fijación anal... Frente a estas opiniones se podría
ción de la conocida teoría de Sheenan (1958), que se
pensar si es útil o no una psicoterapia como trata-
ha ido desarrollando hasta lo que ahora se llama
miento. Stein, respondiendo a esta pregunta, dice:
«teoría del conflicto del rol» (1970). A modo de sín-
«sí, pero no porque sea tartamudo, y ayudando a la
tesis se puede decir que, basándose en el hecho de
logopedia».
que sólo se tartamudea en ciertas situaciones (no
ocurre nunca hablando a un animal, a un bebé, o a
Teorías conductuales
personas «inofensivas»), cree que existe un conflicto
¿Es la tartamudez una conducta aprendida? Algu- del yo al representar determinados papeles.
nos hechos parecen apoyarlo: la tendencia al bloqueo - Crítico de las teorías conductuales. Las explica-
en situaciones o palabras determinadas (no al fonema ciones de este tipo parecen muy próximas a la com-
en sí, aunque los tartamudos lo digan a menudo). prensión del mantenimiento de la tartamudez y tam-
También lo hace pensar la adaptación progresiva que bién a algún aspecto de su inicio, pero no a todos.
se manifiesta al repetir frecuentemente la situación, ¿Por qué, por ejemplo, algunos niños, frente al mismo
por ejemplo al leer sucesivamente un párrafo. De castigo, no fijan el tartamudeo? Tampoco se responde
todos modos esto no es conclusivo. El primer argu- a una cuestión esencial como es: ¿de qué tipo y nivel
mento se puede rebatir diciendo que lo que está aso- de aprendizaje se trata?

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ORIGINALES

Ideas populares le hablan más deprisa, dejan el modelo infantil y le


exigen más porque ya sabe hablar. El niño, por tanto,
Es importante conocer lo que piensa la gente sobre vive en una presión comunicativa más fuerte.
la tartamudez y cómo reacciona frente a ella, ya que A este tipo de repeticiones lo llamamos «disfemia
tanto el tartamudo como el terapeuta lo han de saber fisiológica» o primaria, que puede pasar a transicio-
para poder romper este arquetipo social. En el fondo, nal con una diferencia de grado en frecuencia e in-
lo que preocupa es la reacción de los demás y la tensidad de los bloqueos, y un inicio de consciencia
idea que se forman del tartamudo como persona. y frustración por el problema. Si los bloqueos pasan
Como se verá, esto es un punto terapéutico básico. a ser casi constantes y ya hay miedo que deriva en
Si el tartamudo está en un bloqueo, el oyente se es- evitación clara, se considera entonces secundaria
panta, se alarma y el tartamudo no sabe qué hacer (Van Riper, 1954). Bloodstein (1961) prefiere subdi-
y esto le aumenta la tensión. El oyente necesita saber vidir los periodos evolutivos en fases, pero básica-
que el tartamudo no tiene una crisis y no ha perdido mente está de acuerdo con Van Riper. Como estas
sus facultades. Si el tartamudo es capaz de mirarle o fases son las descripciones más conocidas, se resu-
incluso ironizar sobre la situación, la «tensión comu- men en el cuadro siguiente.
nicativa» entre los dos baja, haciendo más fácil la Recientemente, Van Riper (1971) ha reelaborado
fluidez. El tartamudo, por tanto, ha de saber enseñar la descripción de tipos y niveles, prefiriendo ahora,
al interlocutor cómo se le ha de tratar (véase más después de un trabajo inmenso, hablar de tipos evo-
adelante: mecanismos de defensa en la terapéutica). lutivos (tracks), donde se ve claramente que no todos
Como el tartamudo también es «gente» se ha de los inicios tienen una evolución parecida. Debido a
saber qué idea tiene de lo que es y deja de ser la la importancia de este trabajo también ofrecemos
tartamudez. La mayoría de personas sin un conoci- a continuación un cuadro del mismo. Es importante
miento próximo del problema tienen un «modelo de fijarse en los puntos que son motivo de análisis, pues
enfermedad» para explicarlo (opinión que incluso se serán los que se tendrán que investigar en la anam-
encuentra entre algunos profesionales). Los que co- nesis clínica. La descripción evolutiva puede ayudar
nocen más el problema piensan igual, aunque saben a evaluar el grado de problema que se presenta.
«que es difícil de curar», pero también esperan la
«pastilla» o el «tratamiento (truco) definitivo». Soy
de la opinión de que hasta que el «paciente» no en- ACTITUD DE LOS TARTAMUDOS HACIA LA
tienda lo que quiere decir una terapia o una rehabi- COMUNICACIÓN Y AUTOCONCEPTO.
litación en la que no hay «recetas mágicas» sino mo- EVALUACIÓN
dificación de actitudes, reaprendizaje de la fluidez y
defensa del yo frente a la agresión social, es mejor Antes ya se ha hablado de la importancia de este as-
no empezar el tratamiento. pecto. Aquí sólo añadire:nos algunos datos. Según
algunos autores parece ser que entre los profesiona-
les se tiende a exagerar la afectación por el proble-
EVOLUCIÓN, SINTOMATOLOGÍA Y TIPOS ma, sobre todo en adolescentes en la fase III. Para
apoyar esta opinión, se habla del poco interés por el
Es sabido que todo niño pasa por un periodo en el tratamiento, pero esto parece explicarse mejor ya
cual la fluidez se altera. Normalmente coincide en sea por una habituación, o más profundamente por
el salto de la estructura simple a la compleja, alre- una represión. Un buen instrumento para conocer el
dedor de los tres años. Se trata de un titubeo sin es- autoconcepto es la escala de Erikson (1969). Frecuen-
fuerzo, inconsciente y muy ligado a la planificación temente este autoconcepto o consciencia de tartamu-
central. dez no tiene relación con el grado objetivo del pro-
Pero esto también se puede ver desde otro punto blema. Es decir, no hay una correlación entre fluidez
de vista. Es cuando los padres ya no lo ven tan niño, y angustia. Dada la importancia de estos factores,

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TABLA I. — Fases, tipos y síntomas en la evolución de la tar- TABLA II. — Inicio de la tartamudez. Según VAN RIPER
tamudez. Según VAN RIPER (1954) y BLOODSTEIN (1961) (1971)

Primaria Fase I Repeticiones sin esfuerzo y Ítem I II III IV


cortas.
Prolongaciones inconscien- Inicio 2,6-4 Primera No Tarde,
tes. frase importa después
de cuatro
Transicional Fase II Repeticiones más rápidas e años
irregulares con prolonga- Anterior- Fluido No muy Fluido Fluido
ciones alargándose (o tam- mente fluido
bién la postura articulato-
ria). Aparición Gradual Gradual Súbita Súbita
Consciencia esporádica del
problema. Evolución Cíclica Regular Regular Errática
Gusto por la comunicación. Remisión Largas Sin Muy Sin
pocas
Fase III Aumento del número de re-
peticiones en cada convul- Articula- Buena Pobre Normal Normal
sión. ción
Posturas con tensión.
Consciencia y frustración es- Velocidad Normal Rápida Lenta Normal
tablecidas pero que no lle-
gan a evitar el habla, ni Repeticio- Silábicas Vacíos, Prolonga- Atípico
hay miedo. nes revisiones ciones sin
en sílaba voz, blo-
Secundaria Fase IV Miedo (escondido) y evita- y palabra queo la-
ción (abierta) hacia fone- ríngeo
mas, palabras, personas y Tensión Sin Sin Bastante Variable
situaciones.
Movimientos de compensa- Temblor No No Sí Algunas
ción.
Lugar Palabras Pueden Palabras Palabras
iniciales ser todos iniciales iniciales y
o después especial-
nosotros utilizamos una doble medida para describir de pausas mente de
al tartamudo. En primer lugar, la fase (según Bloods- contenido
tein) y después un doble parámetro: en primer lugar Patrón Variable Variable Constante Constante
la fluidez (de 0 a 5) y después la autoconsciencia
Habla Integrada Dudas, Fluida Fluida
(también de 0 a 5). Aunque sea poco fiable, todo el normal vacíos,
mundo conoce la inestabilidad de la tartamudez: es interrup-
una medida útil y, en todo caso, mejor que el diag- ciones, in-
nóstico solo. cluso sin
Una buena guía para la evaluación sigue siendo la espasmos
antigua ecuación de Van Riper (1954): Conscien- No No Mucha Mucha
cia
(C × F × A × Cu × H) + Tc Frustra- No No Mucha No
Disfemia = ————————————
Ac + f ción
Miedo No. No. Miedo y No es
C: Castigo H: Hostilidad Quiere Quiere evitación clara pero
F: Frustración Tc: Tensión comunicativa hablar hablar a situa- quiere
A: Ansiedad Ac: Autoconfianza ciones hablar
Cu: Culpabilidad f: Fluidez

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ORIGINALES

TABLA III. — Tipos evolutivos de la tartamudez. Según VAN RIPER (1971)

Características evolutivas
I II III IV
Crece el número de re- Conductas parecidas pero Crecimiento y frecuencia cam- Más titubeo en más situaciones
peticiones de sílabas y con más velocidad bian poco la conducta. Signos
la velocidad se hace de frustración
irregular
De repeticiones pasa a Poco cambio en la forma Aparecen: Tensión de labios, Poco cambio en la forma. Mono-
prolongaciones fijaciones lengua, sonidos más sintomático y simbólico
largos
Las prolongaciones se Poco cambio pero cierta Temblor, contorsiones, esfuer- Poco cambio
hacen más tensas, con consciencia. Poca frustra- zo, estiramiento de mandíbu-
temblor, esfuerzo y frus- ción la. Frustración considerable
tración
Tensión exagerada, con- Crece duración de dis- Mecanismos de interrupción Poco cambio en tipo pero crece
torsiones, disminuye el fluencias, más repeticiones son evidentes. Baja la veloci- duración y visibilidad. No inte-
habla, preocupación silábicas, cierta consciencia dad más titubeo, más rechazo rruptores o nuevos esfuerzos. Más
de hablar cantidad de habla
Miedo a situación y pa- Temores ocasionales a si- Miedo intenso a sonidos y pa- Poca evitación, no demasiada evi-
labras. Evitación tuaciones, no a palabras o labras, mucha evitación. Cam- dencia de miedo a palabras. Po-
sonidos, largas cadenas de bio de hábitos en la forma. cos loci consistentes. Muy cons-
repeticiones silábicas Extrañeza. Decrece cantidad ciente de la tartamudez. Buen
de habla. Contacto de ojos contacto de ojos. Poca variabili-
pobre. Titubea en habla nor- dad en la conducta del tartamu-
mal. Bloqueo no vocalizado do. Habla mucho. Pocos bloqueos
frecuente. Paros tónicos con silenciosos tanto tónicos como
cierres múltiples clónicos

Como es de suponer no se trata de algo preciso, es el paso al estadio II, es decir, el inicio de fuerza
sino de un índice para poder llegar a una predicción o tensión en la expresión y evitar que la frustración
aproximada. esporádica sea constante, y, aún más, que pase a ser
miedo acompañado de autoculpabilización. No se
trata de «no hacer nada y esperar». Es una preven-
ción muy activa, que se concreta a menudo en mo-
TRATAMIENTO DE LA TARTAMUDEZ dificar los hábitos comunicativos en la familia y en
EN LOS NIÑOS la escuela.
- Transicional. En caso de estar en un estadio II
- Primaria o fisiológica. Aquí el objetivo es la avanzado, es recomendable una terapia genérica ines-
prevención del hábito de los bloqueos por el am- pecífica de soporte comunicativo. Una terapia espe-
biente. Se trata de poner atención al grado de exci- cífica en algunos niños podría convertirse en un pre-
tación y de tensión al hablar y evitar la consciencia cipitador haciéndoles pasar a un estadio IV.
de ello: «La tartamudez es un trastorno que se - Secundaria. Aquí el objetivo es parecido al de
puede evitar». Se ha de prestar una atención especial los adultos, pero disminuyendo la terapia informati-
a las familias sensibilizadas por antecedentes. Lo que va y de racionalización. Es mejor una modificación
se ha de hacer es un tratamiento preventivo cuando de actitudes a partir de hechos y actos concretos. Se
existe riesgo de tartamudez. El límite de este riesgo ha de informar a los padres y maestros.

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TRATAMIENTO DE LA TARTAMUDEZ La última fase en este método es la de «iniciación»


EN LOS ADULTOS (nuevo inicio en condiciones diferentes). Como se
puede ver, se intenta una nueva forma más suave y
Nota: La mejor recopilación de métodos, tanto lenta de tartamudez: se anticipa, se relaja y se re-
antiguos como actuales, es la realizada por Van Riper gulan las secuencias. Se ha de decir que es un método
(1973). peligroso (véanse las críticas de Sheenan, 1970) ya
Si, como hemos visto, es díficil definir y clasificar que se puede crear otro tipo de evitación situando el
lo que es la tartamudez, y si uno es de la opinión de problema en un nivel de acceso más difícil. Sheenan
que son síntomas asociados a diferentes trastornos, propondría, a raíz de su teoría del «conflicto del rol»,
lógicamente tiene que concluir que no existe un úni- el bloquearse abiertamente, observando cada uno de
co o mejor tratamiento. Éste se ha de «hacer a me- los aspectos físicos, psíquicos y sociales, y modifi-
dida», sabiendo que no se trata de algo fijo. Por carlos directamente a partir del análisis realizado.
este motivo se dice que no hay un método perfecto Johnson, por su lado, dice que todo aquello que se
pero que con todos se nota mejora. aprende se puede desaprender, ya sea indirecta o di-
- Objetivos. Decidir cuáles son los objetivos del rectamente. Desaprender quiere decir en este caso
tratamiento ya puede ser conflictivo: ¿ha de modi- romper con las secuencias o condiciones que han lle-
ficarse la tartamudez por un habla nueva alternativa? gado a ser habituales. El mismo sujeto las ha de ir
¿Se han de reducir los bloqueos haciéndolos más probando y evaluando. En este punto es necesario
suaves? ¿O bien se han de eliminar a partir de evitar que el habla fluida se vaya reforzando cada vez más.
los factores bloqueantes? Es decir, que se vaya enfocando la atención hacia
- Técnicas y objetivos. Las técnicas más corrien- esta habla, y que se vea la tartamudez como un epi-
tes para el primer objetivo son el habla rítmica (¡tan sodio en evolución y no una situación fijada o total.
a menudo entendida solamente como habla silábica!) - Terapia de grupo. Se ha de considerar más
y el habla prolongada, donde los sonidos se alargan como una situación que como un método. Tiene una
artificialmente. Ambas son poco naturales y hay di- gran ventaja. Permite practicar en una de las comu-
ficultades para pasar del «ejercicio» a la comunica- nicaciones más difíciles que hay, como es el hablar
ción espontánea. Son útiles en el estadio III y el ini- en público. Si el grupo es homogéneo y el paciente
cio del IV. Si el sujeto lo relaciona con el aspecto se siente bien acogido en él, puede ser un comple-
positivo del éxito inicial puede llegar a constituir un mento óptimo. En algunos sujetos no es favorable.
buen método, si no, no es seguro en absoluto. Tam- - Modificación de los hábitos psicolingüísticos y
bién se ha de saber emplear en el momento adecua- creación de mecanismos de defensa comunicativa.
do. En el segundo objetivo, la terapia pretende con- Con este título, puede que demasiado exagerado, qui-
trolar progresivamente el habla natural, cosa que no siera hacer una síntesis del procedimiento que em-
consiguen los métodos anteriores. Este control se hace pleo. Lógicamente no hay nada inventado y está ses-
o bien por la «tartamudez voluntaria» o bien, más gado por opiniones y práctica personal. Aunque no
corrientemente, por la modificación de la tartamudez. en sentido riguroso, se pueden fijar tres etapas:
Esta modificación se hace en varias fases: «desensi- Información: si el sujeto puede aprovecharlo, se
bilización» (reducción de emociones), «cancelación» trata de explicarle qué es la fragilidad de la fluidez,
(pararse al percibir el bloqueo tendiendo a hacerlo al cómo se enmarca dentro de su comunicación en ge-
observar su posibilidad). neral, por qué es afectada y qué afecta, etc. Poste-
Nota: Obsérvese que esto va en contra de los «mé- riormente se explica en general qué es una terapéuti-
todos distractivos» tan extendidos, consciente o in- ca, sus problemas y probable evolución (sin entrar
conscientemente, y que pretenden eliminar el síntoma en detalles y siendo maximalista) y las condiciones
haciendo prestar atención a otros hechos. Esta re- mínimas necesarias.
flexión se puede aplicar a muchas técnicas conocidas La segunda etapa es la del análisis y la reflexión:
y a otras que se exponen aquí. aquí el objetivo es conocer y modificar las opiniones

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ORIGINALES

del sujeto sobre el problema. Concretamente, se es- quier sensibilización es muy difícil de extinguir del
tudian sus hábitos psicolingüísticos : cómo reacciona todo. Van Riper, en una conferencia que dio al re-
y habla en diversas situaciones (le hablan desde de- tirarse, dijo que aunque él hablase perfectamente no
trás), formas (le hablan impetuosamente), personas sabía si considerarse tartamudo o no...
(un desconocido), según la función (critica, reflexiona, - Fin de la terapéutica. Se ha de pensar que el
manda, etc.) y según el nivel (explica, razona, des- mantenimiento del trastorno puede formar parte de
cribe). Lógicamente si este análisis no se hace ope- las defensas del sujeto. Si éste evoluciona favorable-
rativo, es inútil. mente se puede crear una situación de «desprotec-
Por esto es necesario ir creando los mecanismos de ción» que puede causar otros problemas o una re-
defensa comunicativa (tercera fase). Ésta consiste en caída. Lógicamente también se ha de ir con cuidado
que el sujeto vaya aprendiendo recursos, que no tie- si se ha creado (erróneamente) una situación de de-
nen por qué ser verbales, y que permitan establecer, pendencia.
tanto para él como para los demás, las condiciones
mínimas. Es difícil sintetizar en qué consisten estos
recursos, pero algún ejemplo podrá ilustrarlo. Véase DISFEMIA Y TAQUIFEMIA: DIFERENCIAS
que se puede utilizar la mayoría de técnicas: ¿Cómo Y SIMILITUDES
evitar el impacto inicial al responder a una pregun-
ta? Se puede hacer repitiéndola, y esto no rompe la Taquifemia
comunicación y permite un tiempo de reflexión y de
adaptación muy importante. ¿Cómo iniciar una con- Van Riper (1954, 25) describe la taquifemia como
versación en una situación de tensión? Creando un una habla caracterizada por «un fraseo y unas pau-
automatismo rítmico previo y disponiendo de un in- sas impropias debidas a una velocidad excesiva, y
troductor en el que se esté seguro. También se puede también contrayendo u omitiendo sílabas». Tam-
mirar al interlocutor reflexionando qué importancia bién se habla de «monotonía» y de «dificultades en
tiene que vea que él se bloquea, etc.; depende de encontrar palabras». Froeschels (1946) dice que el
las situaciones y el mismo sujeto ha de encontrar síntoma más claro es que tienen una habla dema-
sus soluciones, aunque se le pueda ayudar. Quizás siado rápida en relación con su habilidad para en-
estos ejemplos podrían inducir al error de «las re- contrar palabras y construir frases. Otro concepto
cetas» cuando lo que se pretende es todo lo contra- interesante es el de Wohl (1970) cuando habla de
rio. Se intenta una reflexión abierta con el sujeto, «festinación» o aceleración progresiva a medida que
para mejorar sus condiciones comunicativas de todo se va hablando. La falta de inteligibilidad típica del
tipo. Conociendo las funciones y los niveles de la taquifémico sería causada por los errores menciona-
comunicación con sus connotaciones emocionales, se dos, pero teniendo en cuenta que también se encuen-
pueden variar enormemente las posibilidades de flui- tran frecuentemente en su escritura (lo cual no ocurre
dez (según el individuo y el momento en que está). en el disfémico). Una vez descritos los síntomas prin-
- Éxitos y fracasos. Está muy extendida la idea cipales, se ha de decir que parece haber una mayor
de que las terapéuticas son un fracaso y que «no hay contribución de factores genéticos (Luchinger, 1970),
nada que hacer». Personalmente, creo que esto es que la evolución conoce mal y que la autocons-
cierto en una minoría de pacientes. Pero también di- ciencia es diferente de la del tartamudo y muchísimo
ría que el problema de éstos no es la fluidez sino la más variable (Weiss, 1964).
psicopatía subyacente. De cara a la mayoría de los
tartamudos, se puede decir que se puede obtener una Tratamiento de la taquifemia
mejora importante y a menudo decisiva (y no sólo
por efecto de la edad) sin poder garantizar que sea Froeschels (1946) explica muy claramente cuáles
definitiva si no sabe mantener los nuevos hábitos co- son los objetivos para el tratamiento del taquifémico:
municativos. Por otro lado se ha de saber que cual- «El interés principal se ha de centrar en el orden co-

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TABLA IV. - Diferencias en la falta de suavidad en las transicio- rrecto y enlace entre la fase del pensamiento y la del
nes en disfémicos y taquifémicos. Según DALTON y HARDCASTLE habla. Debido a que el habla es más accesible al logo-
(1977)
peda que el pensamiento, las técnicas han de ayudar
a que el paciente controle la precisión, y por tanto
Ítem Taquifémico Disfémico
también el tempo y la articulación». Una de las téc-
Pausas Pocas Muchas: En la res- nicas que él empleaba era el aprendizaje de una trans-
piración: inhalacio-
nes sonoras, exhala- cripción de la fonética, ayudándose con dibujos y ha-
ciones excesivas. ciendo que el paciente hablase o escuchase y transcri-
Dentro grupos tóni- biese al mismo tiempo. Como se puede ver, éste y
cos: frecuentes y otros tratamientos parecidos, que requieren un esfuer-
largas
zo voluntario, son difíciles de generalizar a situaciones
«Tempo» Rápido Lento
Irregular Irregular normales. El pronóstico dependerá del éxito en esto.
Elisiones La grabación y evaluación posterior del habla es bas-
Repeticiones y Frecuentes en
Bloqueo con tensión tante útil (no molesta ni frustra como con los disfémi-
prolongaciones segmentos y
frecuentes, tanto en cos) pero no se puede hacer de forma pasiva. La re-
sílabas articulación como en flexión psicolingüística comentada para los disfémicos,
laringe
puede ayudar a una adaptación de los hábitos y estra-
Diferencias entre disfémicos y taquifémicos. Según WEISS tegias comunicativas de acuerdo con las diferentes si-
(1964)
tuaciones. Concretamente, es interesante un control
Ítem Taquifémico Disfémico del tempo ideacional por la escritura (más lenta, me-
Consciencia del Ausente Presente
problema nos redundante y, por tanto, menos propensa a omi-
Habla en tensión Mejor Peor siones y prolongaciones). Posteriormente se va ha-
Habla en relax Peor Mejor blando «como si se estuviese escribiendo».
Prestando atención Mejor Peor - Crítica. Las críticas antes hechas a los trata-
al habla mientos de la disfemia siguen siendo válidas aquí, aña-
Habla después de Mejor Peor diendo además el problema de una mayor variabilidad
una interrupción en los síntomas y en los sujetos. Entre estas diferen-
Respuestas cortas Mejor Peor cias está la de aquellos que, a medida que pasa el
Otras lenguas Mejor Peor tiempo, empeoran y cuya habla parece «parkinsonia-
Lectura texto Peor Mejor na» sin que tengan la enfermedad. Aquí todo trata-
conocido miento parece inútil. Otros sujetos, al revés, van con-
Lectura texto Mejor Peor trolando inconscientemente su tempo, y sólo en mo-
nuevo
mentos excepcionales vuelven a hablar mal. Como se
Escritura Precipitada, Contraída,
repetitiva, forzada, puede ver, pues el tratamiento que generalmente
desinhibida inhibida se hace es inespecífico, y no resulta satisfactorio para
Actitud hacia la Descuidada Espantada un buen número de casos.
propia habla
Actitud psíquica Emprendedor Retraído
Aptitudes escolares Debajo de la Bien a superior RESÚMENES
media
EEG Disritmia Normal Disfemia
difusa
(a menudo)
Trastorno probablemente multidimensional, con
Finalidad Dirigir la Distraer la atención
terapéutica atención a los de los detalles del raíces y consecuencias psicológicas importantes. Sus
detalles del habla síntomas no son solamente bloqueos, prolongaciones
habla _ y repeticiones, sino toda una actitud comunicativa de

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