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La maestra jardinera y la educación musical

Introducción:

Cuando se nos planteo la responsabilidad de realizar un trabajo que tratara sobre este tema,
reflexionamos, y debatimos mucho, sobre la mejor manera de realizarlo. Por momentos se
tornó complicada la tarea, pero luego después de recabar mucha información, leerla, hacer
una selección de lo mas importante, pudimos ir armando un marco teórico.

Pero como la tarea del docente en la sala de nivel inicial, no es solamente bajar contenidos,
surgió la idea de plantear algunas actividades, juegos, de manera que uno pudiera comenzar a
ampliar el espectro a nivel de las posibilidades con las que cuenta un docente para trabajar
esta disciplina.

En muchos casos, en las salas los docentes no saben como enseñar música, o se remiten a
realizar siempre las mismas actividades. Lo importante es descubrir la necesidad que el
docente sea responsable en su tarea como educador, y transmisor de placer por la escucha, o
por la producción. Es responsable de la incentivación, estimulación de los niños. ¡qué
responsabilidad más grande!, ¿no?.

Creemos que nada mejor que poder ver a través de estas hojas y de la investigación, y la
capacitación constante la mejor forma de poder trasmitir la música.

Los invitamos a que puedan hacer un acercamiento a lo que consideramos que es la relación
de la maestra jardinera y la música, los contenidos y las actividades, la forma de bajarlos en las
diferentes edades.

La música

La música puede considerarse una forma de lenguaje en la que la función expresiva es una de
sus manifestaciones fundamentales.

La música ha adquirido el valor de un instrumento de comunicación masiva que llega y


moviliza a los seres de cualquier edad, condición social o recursos económicos

Edgar Wilems dice que, “la música favorece el impulso de la vida interior y apela a las
principales facultades humanas: la voluntad, sensibilidad, amor, inteligencia, imaginación
creadora.”

Los niños y la música.


Los niños disfrutan de la música, gustan de ella. Se emocionan al ir experimentando
emociones, sentimientos, gozando con los sonidos, que oyen y producen. Es un lenguaje que
permite que los niños se comuniquen con el interior de sus sensaciones, y a la vez entre ellos.

Pueden hacer música, pueden expresar a través de su composiciones e improvisaciones, con


sencillos materiales los sonidos que mejor comunique lo que sienten.

Es en el contacto con los otros niños y con la docente que se enriquece este don musical que
el niño posee. Se puede acrecentar la evolución de capacidades naturales, y la construcción
progresiva del conocimiento, sin olvidarnos del goce , y la vivencia, puesta al servicio de la
creación musical.

La canción es uno de los medios mas representativos para introducir al niño en el mundo de la
música, dado que a través de ella, ya fuera escuchándola o asumiéndola como una actividad,
se pone en juego elementos imponderables; el ritmo, la entonación, la inclinación.

El niño nace al mundo del arte popular a través de una sabia conjunción de poesía y música.

Ese mundo poético convocado por las primeras manifestaciones aumenta su valor afectivo y su
fuerza comunicativa cuando va acompañado de una melodía .

La Finalidad de la enseñanza de la música es Colaborar

con el proceso educativo, a los efectos de lograr el integral desarrollo del individuo.

Objetivos generales

Conocimiento

a) de la importancia de la música

b) de las relaciones y ubicación de la música en el desarrollo histórico del hombre

c) de las relaciones existentes entre la música y otras áreas de conocimiento

d) del lugar que la música ocupa en la sociedad contemporánea

Automatismo

a) habilidad de escuchar la música

b) habilidad para cantar y emitir su voz correctamente(articular, respirar, modular, etc.)

c) destreza en la ejecución de un instrumento musical

Actitudes

a) valorará la música como medio de autoexpresión


b) deseará continuar con sus experiencias musicales

c) será capaz de discriminar con respeto la música, ejerciendo libremente su criterio

Los campos de la educación musical

Es un proceso integrado por tres aspectos:

1- Educación auditiva para la captación de los sonidos de distinta intensidad y altura, en sus
ordenamientos sucesivos (intervalos y melodías) y simultáneos (acordes y armonía)

2- Educación del sentido rítmico

3- La música proceso que englobe la totalidad de experiencias emocionales de goce estético y


satisfacción afectiva, que se dan en la relación niño-música.

Los medios

1- La voz, que constituirá una de las formas preferenciales de la actividad escolar.

2- El cuerpo, en movimiento

a) sonoro, palmeteos y distintos golpes aprovechando las distintas partes del cuerpo

b) insonoro, gestos, movimientos mímicos y coreográficos

3- El instrumento, rítmicos y melódicos de acuerdo a las posibilidades psicomotrices de cada


etapa de maduración.
Hacer música en el jardín

La propuesta de actividades a nivel de la sala en el jardín, no puede ser desorganizada.

Cotidianamente estamos en contacto con la música, lo que no significa que podamos, tanto los
niños como los adultos estar aumentando nuestra capacidad, de percepción, de reproducción
de sonidos, de creación, ni siquiera juicio crítico sobre distintas obras.

Es verdad que la música integra la vida de los niños, ya no es patrimonio de unos pocos que
podían tener un instrumento, ejecutarlo, o simplemente estar en un concierto, o en contacto
con un coro.

La tecnología, brinda la posibilidad de educarse musicalmente.

Al ser la música una parte importantísima de la educación de los niños, no debe ser tomado
como un instrumento de relleno de las actividades en la sala, tomarlo con ligereza, restándole
importancia, es algo que la escuela no debiera hacer.

Como dice el prediseño curricular de la ciudad de Buenos Aires: “ la escuela tiene el


compromiso de resguardar ese espacio de conocimiento y sensibilización que la música
necesita para su desarrollo”.

Es el jardín de infantes el que debe aportar la continuidad a esta educación musical al alcance
de todos que provee la vida moderna, sistematizarla y asegurar la vivencia de los hechos
musicales de los alumnos.

Puede valerse el docente, de varias herramientas, empezando por el cuerpo, vivenciando la


música con todos los sentidos posibles, a través del juego, de la utilización de instrumentos
musicales, de la creación de cada niño.

Lo importante es que el docente a demás de saber música sienta la música. Si la maestra


incluye a la música en cada momento en la sala: cuando guardan, cuando hacen una ronda,
cuando saludan a la bandera en momentos en que el grupo debe reunirse, que sepa la maestra
hallar el ritmo, acento y pulso, que emita su voz en forma melodiosa, que trasmita el encanto
de un silencio y el carácter de un trozo musical.

Es importante que la docente esté en contacto con un profesional del área, ya que le amplia
las posibilidades. La maestra de música, puede ayudar a la maestra de la sala, orientarla, de
manera que haya continuidad y unidad de la acción, lo que sin duda redundará en beneficio
para los niños y sus aprendizajes.
Como disciplina requiere un tiempo, apoyo institucional, apropiación por parte de los alumnos,
y la responsabilidad del docente de buscar los medios adecuados para poner al niño en
contacto con la música y bajar contenidos.

Habría que afianzar en los niños, y porque no en los grandes, el placer por la escucha, la acción
y la producción musical.

Para esto es importante la realización de este trabajo, donde como futuras docentes podamos
reflexionar acerca de nuestra tarea, importancia con respecto a la educación musical en el
nivel inicial.

Necesidad de elegir un repertorio para el niño

Lo importante es brindar a los niños un repertorio musical que lo familiarice con expresiones
válidas.

No se trata de convertir a los niños en “aprendices” de músico, sino de permitirles ejercitar


criterios para sus propias elecciones, convirtiéndolos en buenos oyentes.

La misión del docente consiste en revisar, con cuidado y conocimiento, toda aquella
producción que elaborada o no especialmente para la infancia, es oportuno y eficaz que le sea
alcanzada.

No es conveniente ni justo reducir el ámbito musical a lo que se viene repitiendo desde hace
mucho tiempo. pero si desdeñar las composiciones tradicionales, generalmente de raíz
folclórica, ya que el niño esta en condiciones de acceder a formas de música concreta ,
aleatoria , electrónica , funcional, etc. ya que las bandas sonoras de las series, las películas, el
cine, discos con narraciones grabadas, las transmisiones radiales, etc., lo han acostumbrado ya
a escuchar estos sonidos. Estos elementos podrian complementar y mejorar o remplazar la
natural entrega de caudal musical a los niños.

Algunos criterios de selección

Para seleccionar la música infantil es necesario agrupar el material con cierta unidad de
criterio.

En primer lugar rescatar las compilaciones de obras generalmente de tipo popular o folclórica,
que vienen de generación en generación y que pasan del adulto al niño en forma espontánea.

En segundo lugar las canciones de raíz anónima y popular que también han pasado de
generación en generación sin perder sus características. Que anecdotizan el mundo
circundante, animanizando animales y objetos.
En tercer lugar los autores que escriben melodías y letras directamente para la infancia. Se
encuentra en esta producción una gama variadisima de composiciones, desde muy simples
que enfatizan en la función rítmica de los sonidos, pasando por la música, hasta las piezas más
complicadas.

También queda la posibilidad de seleccionar entre una producción que no fue concebida
estrictamente para esta edad.

Propuestas de clasificación

1- Música escrita y publicada en libros y folletos

1.1- Los cuentos musicales aparecen (síntesis entre 2 elementos literatura y música)

2- música grabada

2.1- Los discos y cassettes instrumentales

2.2- Los discos con poesías, cuentos, relatos y leyendas.

La respiración...

Saber respirar equivale a saber vivir. No es posible sobrestimar la importancia de la


respiración. Sin embargo, la mayoría de los hombres y de los maestros desconoce su función
vital.

Todos respiramos; pero que distancia entre lo que generalmente hacemos como tal, y lo que
significa la respiración verdadera.

Lo que generalmente practicamos es una respiración superficial y deficiente que nunca llega a
hacer trabajar nuestros pulmones debidamente. Aprovechemos nuestra educación musical
para implantar al mismo tiempo una enseñanza de la correcta respiración. El efecto sobre las
voces será sumamente beneficioso.

Se debe comenzar la educación musical con ejercicios respiratorios.

Con el niño pequeño se puede iniciar jugando.

La respiración tiene dos faces: la inspiración y la espiración.

La segunda es la que determina nuestra capacidad retórica y de canto; pero la segunda


depende directamente de la primera.
Mayor el caudal del aire que inspiramos, más largas pueden ser las frases que declaramos o
cantamos, y mayor el número de matices de que disponemos en la expresión hablada o
cantada.

Hemos de enseñar al niño como inspirar sin esfuerzo la mayor cantidad de aire posible; y cómo
espirarla con la mayor lentitud y bajo el absoluto control de nuestra voluntad.

La inspiración puede efectuarse tanto por la nariz como por la boca. En los primeros ejercicios
se recomienda la inspiración nasal, por varias causas. La inspiración ha de llenar los pulmones
que se ensanchan; ha de obrar sobre el diafragma que poco a poco adquiere dureza,
resistencia. Se debe evitar que los hombros se levanten; que los músculos de la cara y el cuello
se endurezcan, se pongan en tensión; que el vientre se encoja. Por el contrario, ha de
permanecer tranquilo todo el cuerpo, sin tensión los músculos nombrados, y el movimiento
del vientre ha de ser hacia fuera.

La respiración no debe resultar un esfuerzo, hay que graduarla de acuerdo al físico y a la edad
del niño el tiempo que emplea para la inspiración y su fase complementaria, la espiración, han
de ajustarse a las posibilidades del niño; el caudal de aire aumenta, por otra parte, muy
rápidamente con los ejercicios. Una vez inspirado el aire, lo retenemos un breve instante para
preparar la espiración. En ésta creamos, abriendo la boca, condiciones análogas a las del
canto. Para poder controlar el escape de aire se recomienda que los dientes superiores toquen
levemente el labio inferior.

Dos consecuencias aparentemente negativas puede tener la iniciación de los ejercicios


respiratorios. Estas no se producirán si acostumbramos al niño pequeño a respirar bien; pero si
cuando nos ocupamos de jóvenes o adultos que nunca así lo hicieron.

En los primeros dias el diafragma dolerá un poco; son dolores musculares como ocurre cada
vez que empezamos hacer funcionar y trabajar a algún músculo de nuestro cuerpo.

Tampoco debe inquietarse el alumno cuando las primeras respiraciones profundas le


provoquen mareos, esto señala que sólo ahora nuestra respiración empieza a funcionar bien y
había sido superficial y deficiente hasta ese momento.

Los efectos benéficos de la respiración honda y correcta se muestran relativamente pronto.


Síntomas de fatiga, de desgano desaparecen con rapidez. Aumenta el apetito y el bienestar
general. Niños y personas nerviosas aprenden a dominarse.
La voz...

El educador tiene que tener conocimiento del proceso de fonación.

El pulmón es el fuelle que provee el aire. Trabaja como vimos, en íntima relación con el
diafragma. El aire llega por vía de la inspiración cuya intensidad es el factor decisivo en el
proceso fonético. Al espirarse el aire a de llegar con suficiente fuerza a las cuerdas vocales para
ponerlas en movimientos y producir de esta manera los sonidos que deseamos.

Las cuerdas vocales forman parte de “la garganta” como popularmente llamamos al conjunto
de órganos vocales; se hallan en el centro de la región glótica de la laringe.

La laringe es el órgano principal de la voz; es de suma complejidad y maravillosa perfección


superando a todos los instrumentos musicales que ha sabido crear el ingenio del hombre. El
aire transformado en sonido adquiere sus elementos: fuerza, altura, timbre, expresión.

La voz a de pasar por resonadores para ser audible y musicalmente aprovechable. En el cuerpo
hay gran cantidad de resonadores los principales son los faciales: paladar óseo, faringe bucal y
nasal, las cavidades diseminadas entre la mandíbula superior y la frente. Pero la caja de
resonancia es mucho mayor aún: abarca a toda la cabeza, toda la cavidad torácica, y como
dijimos el cuerpo entero.

El docente no debe explicar a los niños el funcionamiento “detallado” de los órganos a los
niños. Mediante este conocimiento el educador velara por el buen uso de la voz.

El niño imita la voz de los adultos que lo rodean: de los padres, maestros. Pero existen en
nuestra época otros ejemplos que el niño emula y que no siempre son los más adecuados: la
voz de la radio, del disco, del cine y de la televisión.

Los niños imitan a famosos cantantes virtuosos de la voz, con sonidos sobreagudos que
pueden poner en peligro su voz.

La voz es un órgano delicado soporta el esfuerzo como lo demuestra claramente él bebe. No se


resiente por fuerte uso. Las deformaciones vocales son la consecuencia de los excesos las
fatigas vocales, de la mala respiración, de la falta de articulación, en el empleo de la voz en
registros no normales.

Niños "desafinados" y "desentonados"


La tendencia a desafinar puede ser momentánea o crónica.

Puede existir en determinado registro: en las notas graves o en las agudas. O puede abarcar
toda la extensión de la voz aunque esto es más raro.

La desafinación crónica - el cantar no correctamente en la línea melódica pedida – puede tener


su causa en el oído o en una falla de la emisión vocal, generalmente en la respiración.

En el primer caso basta a veces colocar al alumno desafinado entre dos buenos cantantes y su
oído deficiente puede curarse solo.

Diferente es el tratamiento cuando la desafinación es debida a los defectos de emisión vocal.


Su causa puede ser entre otras un espasmo muscular en el momento del canto; se cura
sencillamente mediante un total relajamiento de los músculos en el momento de la emisión
vocal. Más frecuentemente es la desafinación a causa de una insuficiencia respiratoria; ocurre
especialmente en voces fuertes voluminosas. Una voz potente requiere un mayor volumen de
aire, de respiración. La curación a esta clase de desafinación esta en los ejercicios respiratorios.

Otra cosa es la desentonación que es una anomalía más grave que la desafinación; pude ser
parcial o total.

Casi siempre se considera al niño desentonado como un caso perdido.

La buena entonación depende de dos factores: del oído y de la capacidad de realizar, de


reproducir mediante la voz, la música oída

El niño pequeño quizá pueda sustituir en alguna melodía notas por otras sin que tengamos el
derecho de hablar ni de la desafinación ni de la desentonación.

La época en que el niño desentonado era rechazado debe ser terminadas. Los niños
desentonados requieren un tratamiento musical diferente.

La musicalidad se manifiesta de diferentes maneras. Existen niños con excelente entonación y


una asombrosa capacidad de retener y reproducir inmediatamente una melodía percibida;
poseen lo que puede llamarse sentido melódico. También existe un sentido rítmico: la
capacidad de captar ritmos muy complicados y de reproducirlos de inmediato y aún más de
reproducir ritmos nuevos. Ambos sentidos no van siempre unidos. Un niño puede poseer el
don melódico y carecer de la facultad rítmica y viceversa, puede ser eminentemente rítmico y
fallar en la parte melódica.

Muchos niños desentonan por causas que no pueden achacarse ni al oído ni a la voz.
Existen impedimentos psíquicos, por ejemplo: un niño canta con enorme esfuerzo, quizá en el
afán de igualar a los compañeros que más se destacan en la clase. Grita por ende endurece los
músculos del cuello, pone la cabeza en posición antinatural, etc.

Sus propios nervios en tensión le impiden escuchar las notas propuestas y el canto de los
compañeros. Un remedio apropiado es pedirle que cante muy suave con una leve sonrisa con
total relajamiento de los músculos.

El maestro debe echar mano a recursos psicológicos, tiene que quitar del niño desentonado la
sensación de “ser distinto” de los demás, de tener menos condiciones musicales de “no
servir” para el canto. Le debe dar confianza en sí mismo, le celebrara el más mínimo éxito.

La correcta entonación se enseña, pero resultará más fácil si se enseña desde pequeño.

Los cantos infantiles

Los cantos infantiles son una actividad en la cual los niños aprenden, ya sea jugando y otras
cantando diferentes melodías, con temas variados, que ayudan a ampliar sus conocimientos
sobre el medio ambiente que los rodea.

Esta actividad tiene pór objetivo, aumentar el vocabulario así como estimular la atención y la
memoria, fomentar en el niño el gusto por la música, ejercitar las cordinaciones motoras, así
como sociabilizarlo.

Durante esta actividad, la docente deberá mostrar alegría y entusiasmo para alegrar al grupo y
de esta forma hacer que ellos participen activamente.

Forman parte de esta actividad todos los cantos que en un momento dado la docente
enseñara al niño, así como los juegos que por un lado les proporcionaran diversión y por el
otro ayudarán a que el niño se adapte a cualquier medio ambiente.

Los cantos infantiles se organizan de la siguiente forma:

Se formará un círculo con los niños, para que la docente pueda observar a todos los niños y
ellos a su vez la observen y sigan los movimientos que ella realiza.
Se platicará con los niños para así llamar su atención.

Se dará unos minutos de descanso.

Se cantará una canción que los niños ya conozcan.

Pasos a seguir en la enseñanza de los cantos infantiles:

Se les platica o cuenta una historia a los niños relacionado con el tema de la canción a enseñar.

Se les enseñará a los niños algunos movimientos que se harán durante la canción; por ejemplo
si la canción habla de un pecesito, se les enseña a mover la mano como si fueran un pecesito.

La docente cantará la melodía para que los niños la escuchen.

Se les explicará el significado de algunas palabras no conocidas por los niños.

La docente cantará un párrafo pequeño, hasta que los niños lo repitan con ella, y así
sucesivamente toda la canción.

Al final cantarán la melodía completa, y realizarán los movimientos siguiendo a la docente.

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