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VALORACION DEL

ESTADO
NUTRICIONAL
Estado Nutricional:
Es la condición de la persona que
resulta de la relación entre las
necesidades nutricionales
individuales y la ingestión,
absorción y utilización de los
nutrientes contenidos en los
alimentos.
DEFINICION VALORACION
NUTRICIONAL
• Consiste en la determinación del nivel de salud
y bienestar de un individuo o población, desde el
punto de vista de su nutrición. Supone examinar
el grado en que las demandas fisiológicas,
bioquímicas y metabólicas, están cubiertas por
la ingestión de nutrientes. Este equilibrio entre
demandas y requerimientos está afectado por
diversos factores como pueden ser la edad, el
sexo, la situación fisiológica, la situación
patológica de cada individuo, educación cultural
y la situación psicosocial.
• Es la determinación del estado nutricional
de una persona o población a través de la
colección e interpretación de información
obtenida de estudios dietéticos,
bioquímicos, clínicos, antropométricos u
otros.
• Una nutrición equilibrada implica un aporte
adecuado en nutrientes y energía, específico
para cada individuo. La deficiencia prolongada
de un determinado nutriente, conduce a su
desaparición progresiva en los tejidos, con las
consiguientes alteraciones bioquímicas, que
más tarde se traducen en manifestaciones
clínicas. Por otra parte, consumo excesivo de
uno o varios nutrientes pueden desarrollar
situaciones de toxicidad o de obesidad.
La evaluación del estado nutritivo tiene como
finalidad la detección temprana de grupos de
pacientes con riesgo de padecer malnutrición, el
desarrollo de programas de salud y nutrición y
para controlar la eficacia de distintos regímenes
dietéticos.
• La desnutrición es un trastorno metabólico que hay que
cuantificar. Para ello hay que evaluar los distintos
compartimentos orgánicos:
 El agua corporal total representa aproximadamente el 60% del
peso corporal total.
 El tejido adiposo constituye la gran reserva energética del
organismo y supone el 20 – 25 % de la masa total. Se puede
valorar con la medida de los pliegues cutáneos, ya que se
estima que alrededor del 50% del tejido adiposo de nuestro
organismo se encuentra en tejido subcutáneo.
 La masa magra corporal (20 %) engloba piel, tejido óseo y
fundamentalmente el compartimento proteico, muscular y
visceral (15 %).
 El compartimento proteico muscular se valora con las medidas
de la Circunferencia braquial (CB) y la circunferencia muscular
braquial (CMB) y con el índice creatinina-altura (ICA).
 El compartimento proteico visceral es cuantificable mediante
los niveles de proteínas plasmáticas circulantes (en estrecha
relación con el estado inmunológico).
• La evaluación del estado nutricional de nuestros
pacientes es de gran importancia para reconocer
cuando está indicado el soporte nutricional, para evaluar
el efecto de la enfermedad aguda (estrés, sepsis,
agresión) sobre la reserva energético-proteica y
especialmente para valorar la eficacia de la terapia
nutricional en nuestros pacientes y la repercusión de la
desnutrición sobre diferentes funciones orgánicas
(fuerza muscular, capacidad respiratoria, parámetros
inmunológicos, etc.).
• La valoración del estado nutricional debe reunir
los siguientes aspectos:
• Composición corporal: estudio de las medidas
antropométricas
• Situación del metabolismo: estudio de los
parámetros analíticos
• Situación fisiopatológica: historia clínica y
exploración física
• Informe psicosocial: educación y hábitos
nutritivos
• Historia dietética
Realización de la historia clínica y la
exploración física

• La historia detallada y la exploración nos darán


las pistas iniciales
• En este apartado se recogen datos de
identidad, antecedentes personales y
familiares, tratamiento farmacológico y se
debe realizar una adecuada exploración
física. Se debe prestar especial atención a la
piel, pelo, dientes, lengua, encías, labios y
los ojos, al ser zonas con elevada capacidad
de regeneración y en las que se podrían
encontrar signos tempranos de malnutrición
• La historia clínica se encamina a la investigación de los
diferentes factores cuya presencia plantea un riesgo
incrementado de desnutrición: procesos que aumentan
las demandas metabólicas (sepsis, traumatismos,
cáncer, intervención quirúrgica reciente, quemaduras,
embarazo o SIDA), procesos que incrementan las
pérdidas de nutrientes (diarreas, vómitos, fístulas,
abscesos, malabsorción o diálisis) ,presencia de
enfermedades crónicas (cirrosis, diabetes, E.P.O.C.,
hepatopatía o nefropatía), patología gastrointestinal
(Crohn, colitis ulcerosa, ulcus o resecciones),
tratamientos farmacológicos que alteran la
biodisponibilidad de nutrientes (agentes antitumorales,
inmunosupresores o esteroides), dificultades de
masticación, disfagia, ayuno prolongado, alergias e
intolerancias alimentarias, alcoholismo,
drogodependencias, presencia de ansiedad, depresión o
anorexia y pérdida de peso.
• En la exploración física hay que de detectar signos de
insuficiencia nutricional, aunque sólo son evidentes en
situaciones de carencia extrema: xerosis conjuntival,
manchas de Bitot blefaritis, piel seca y descamada,
estomatitis, glositis, cabello decolorado, hiperqueratosis
folicular, protuberancias costales, edemas o
deshidratación, por señalar algunos.
• Es conveniente también recoger datos sobre las
características socioeconómicas del Paciente
• Investigar sobre posibles causas primarias desnutrición:
situaciones de soledad o marginación, creencias, ritmo
de vida o trabajo.
• El siguiente paso es la cuantificación del grado de
desnutrición mediante parámetros mensurables como
los antropométricos y bioquímicos.
PARÁMETROS O ÍNDICES
ANTROPOMÉTRICOS

• Consisten en medidas corporales que reflejan fundamentalmente el


compartimento graso y la masa muscular esquelética Son mediciones
sencillas y fácilmente reproducibles en manos de personal experto, por lo
que se utilizan frecuentemente en la clínica.
1. Talla.
2. Peso corporal.
3. Medida de los pliegues cutáneos.
4. Medida de la circunferencia muscular braquial.
• Para su valoración todos los parámetros deben relacionarse con las
referencias de normalidad para un grupo determinado e ideal de población
(estándares), aunque debido a su gran variabilidad deben interpretarse a la
luz del contexto clínico.
1. TALLA:
• Se mide en cm. Es conveniente su registro en el momento del ingreso y de
forma periódica en fases de crecimiento. Conviene utilizar un tallímetro de
suficiente precisión y medir al paciente de pie, descalzo, erguido, con los
tobillos juntos, la espalda recta y la mirada en horizontal.
TALLA:
• Es el parámetro fundamental para enjuiciar el crecimiento en longitud, pero
es menos sensible que el peso a las deficiencias nutricionales, por éso sólo
se afecta en las carencias prolongadas, sobre todo si se inicia en los
primeros años de vida, como sucede en los países en vías de desarrollo.
En nuestro medio, la talla aisladamente tiene muy poco valor para evaluar
el estado nutricional, en cambio es extraordinariamente útil combinada con
otros datos antropométricos, especialmente con el peso.
• RELACIONES PESO-TALLA:
• En 1972, Waterlow publicó una nueva clasificación de los estados de
malnutrición, basado en las modificaciones de la relación peso/talla y la
influencia predominante sobre uno y otra de la malnutrición aguda o
crónica.
• Partiendo de estos conceptos, se han establecido algunos índices y se han
construido una serie de gráficas que permiten enjuiciar fácilmente la
situación nutritiva simplemente con el conocimiento de la talla, peso y edad.
• Los más utilizados son los siguientes:
- Índice nutricional:: se basa en la comparación de la
relación simple del peso y la talla del paciente con la
relación del peso y talla medios para la correspondiente
edad y sexo.. La fórmula es la siguiente:
• Peso actual / Talla actual x 100
El valor de este índice permite diferenciar cuatro
situaciones:
• * Inferior a 90: malnutrición
• * De 90 a 100: normal
• * De 110 a 120: sobrepeso
• * Superior a 120: obesidad
- Curvas de distribución del peso para la talla:
- Indice peso/talla (Indice de Quetelet o índice de masa
corporal):
2. PESO CORPORAL:
• Es un parámetro de suma importancia que debería ser registrado al
ingreso y periódicamente como práctica rutinaria. El peso corporal
puede valorarse como:
a) Porcentaje con respecto al peso ideal.
• El peso ideal se calcula a partir de la altura, edad, sexo y
constitución del paciente y está recogido en tablas estándar de
población.
• Este porcentaje se halla mediante la relación:

• DONDE P ES PESO ACTUAL Y PI ES PESO IDEAL


b) Porcentaje de pérdida de peso

• Es el cálculo de la variación de peso respecto del habitual. Se halla


mediante la relación:

• P ES PESO ACTUAL
• Esta pérdida de peso debe de valorarse en función del tiempo
transcurrido
• Si la pérdida de peso es superior al 10% y ha tenido lugar en
menos de 10 días, es muy probable que se deba a un cambio del
estado de hidratación. Al valorar estos porcentajes, hay que tener
presente la posible presencia de derrames, edemas o ascitis, que
pueden desvirtuar el valor del peso corporal.
c) Índice de Masa Corporal.(INDICE DE
QUETELET)
• Es el cociente entre el peso y la talla al
cuadrado. Además de ser un parámetro muy útil
para diagnosticar obesidad y sus grados, es
también un buen marcados de desnutrición
cuando su cifra es inferior a 19 – 20 (Kg. / m2).
• IMC = MC (kg)/T2 (m)
• Donde:
• IMC = Índice de Masa Corporal
MC = Masa Corporal (kg)
T = Talla (m)
m = metros
100 cm = 1 m
3. MEDIDA DE LOS PLIEGUES CUTÁNEOS.
• La medida de su espesor permite estimar con bastante
aproximación la cantidad de grasa subcutánea, que constituye el
50% de la grasa corporal. La medida correcta se hace utilizando un
compás de presión constante, cuya precisión es de 0.2 mm. Los
pliegues tricipital y subescapular son los más usados. El pliegue del
tripces estima la obesidad periférica o generalizada; el
subescapular mide la obesidad troncular.
• En la práctica, se suele elegir la medida del espesor del pliegue
cutáneo del tríceps (PCT) sobre otros pliegues medibles
(subescapular, bicipital, abdominal), por su accesibilidad y por su
buena correlación con la masa grasa.
• Se mide en la parte posterior del brazo no dominante, en el punto
medio entre el acromion y el olécranon, con el brazo relajado y
extendido, se pellizca el tejido subcutáneo, separándolo bien del
músculo, y se aplica un compás lipocalibrador o caliper (tipo Lange
o Harpenden).Se recomienda efectuar tres mediciones
consecutivas y registrar la media aritmética de las tres (en mm),
• Las tablas de parámetros antropométricos de una
población nos pueden servir de base, tomando los
valores del percentil 50 como medida de referencia. En
la práctica diaria se considera:
 Deplección severa ........................... <60% del PCT 50
 Deplección moderada...................... 60-90% PCT 50
 Deplección Leve .............................. >90% PCT 50
4. CIRCUNFERENCIA MUSCULAR DEL BRAZO (CMB)
• Su medida se correlaciona con la cantidad de proteína muscular del
organismo. Se mide en primer lugar el perímetro del brazo o
circunferencia braquial (CB con una cinta métrica y expresado en
cm. La medición se efectúa a nivel del punto medio (hallado para la
medida de PCT) del brazo y sin comprimir con la cinta.
• Posteriormente se determina de forma indirecta la circunferencia
muscular braquial
• (CMB) a partir de la CB y del PCT.
• CMB = CB - (PCT x 0,314)
• Al igual que en el PCT, las medidas de la CMB tomadas se
comparan con las tablas de valores estándar e igualmente se
consideran los distintos grados de deplección.
Composición corporal: Medidas
antropométricas
• Estos datos están basados en la comparación de distintas medidas
corporales respecto a patrones apropiados.
• Las más frecuentes son:
1. Medidas directas:
 Peso y altura
 Envergadura del codo o la muñeca
 Perímetro del brazo
 Pliegues cutáneos: tricipital, subescapular, bicipital y abdominal
2. Medidas indirectas: elaboradas a partir de las medidas anteriores
 Complexión
 Superficie corporal y metabolismo basal (energía consumida para el
mantenimiento de las actividades mínimas del organismo).
 Perímetro y área muscular del brazo
 Índice peso-altura (índice de Quetelet): relaciona el peso y la altura
según la formula:
Índice de Quetelet: Peso (Kg)/Altura2 (m)
 Porcentaje de grasa corporal
Situación del metabolismo: análisis
bioquímicos y hematológicos

• Las muestras se obtienen normalmente de sangre,


orina, heces. Los objetivos de realizar dichas
pruebas son por un lado detectar las posibles
carencias nutricionales, antes de que aparezcan
signos clínicos, por otro lado confirmar el
diagnóstico de malnutriciones específicas y por
último realizar encuestas de población para detectar
posibles déficit en las mismas.
• Se debe valorar:
 Metabolismo de las proteínas
 Metabolismo de los azúcares
 Metabolismo de las grasas
 Metabolismo de las vitaminas
 Metabolismo de los minerales
 Valoración de la respuesta inmunológica
PARÁMETROS BIOQUÍMICOS
1. DETERMINACIONES EN SANGRE
• Se trata de pruebas bioquímicas que miden los niveles séricos de
diversos marcadores nutricionales. La medida de la concentración
en suero de ciertas proteínas circulantes se considera un reflejo del
compartimento de proteína visceral de nuestro organismo. Estas
proteínas transportadoras son sintetizadas en el hígado y reflejan
de forma indirecta el estado de la síntesis hepática proteíca. Tienen
diferente vida media y diferente reserva corporal. Los marcadores
más utilizados son:
 Albúmina: Tiene una vida media 20 días y es la principal proteína
sintetizada en el hígado. Sus niveles séricos se correlacionan bien
con la evolución de los pacientes.
Sin embargo su larga vida media y amplio depósito corporal limitan
su valor como marcador de la reposición nutricional en períodos
breves de tiempo. En realidad, nos informa del estado nutricional
presente, pero no de los cambios agudos de dicho estado. Su
medición puede verse interferida por la presencia de hepatopatia o
por alteraciones del estado de hidratación.
 Transferrina: Su vida media es de 8 a 10 días. Es la proteína
transportadora de Hierro, por lo que su nivel también es
dependiente de la función hepática, hematocrito, presencia de
enfermedades crónicas, infecciones, fallo renal o anemia
ferropénica.
 Prealbúmina: Tiene una vida media de 2 días. Transporta la
hormona tiroidea y sus niveles están condicionados por la
existencia de traumatismos o sepsis.
 Proteína ligada al retinol (RBP): Su vida media es de 10 horas y sus
valores se ven alterados, al igual que en la prealbúmina, por las
situaciones agudas productoras de estrés. La RBP junto con la
determinación de prealbúmina reflejan bien los cambios rápidos en
el estado nutricional.
 Determinación del status vitamínico y mineral: Ante la sospecha de
algún déficit vitamínico o de algún oligoelemento en concreto, se
pueden realizar determinaciones de laboratorio para verificar sus
niveles séricos.
• Esta es la forma más sencilla de valoración, aunque existen otros
métodos más sofisticados que pueden resultar muy costosos y
difíciles de realizar en la mayoría de nuestros centros sanitarios. No
obstante, no debemos olvidar que los niveles plasmáticos de
oligoelementos no son representativos de su «pool corporal total»,
ya que sus mayores depósitos son los intracelulares.
• Las determinaciones más habituales en la práctica son las de:
hierro, zinc, cobre, cromo, selenio, sodio, potasio, calcio, magnesio,
cloro y fósforo.
• Las vitaminas se determinan con menor frecuencia, con métodos
directos (vitamina A, E, C, B12, Fólico, o vitamina D) o mediante
tests indirectos (como la determinación del tiempo de protrombina
para evaluar la vitamina K).
 Otras determinaciones plasmáticas de interés: Colesterol
plasmático, triglicéridos, colinesterasa, hemoglobina, nitrógeno
ureico, transaminasas, CPK o creatinina.
• 2. DETERMINACIONES EN ORINA
 Electrólitos: generalmente Na, K y Cl (para verificar su eliminación)
 pH, glucosuria y osmolaridad.
 Creatinina: a partir de la cual podemos obtener el ÍNDICE DE
CREATININA - ALTURA (I.C.A.)
• Es un parámetro utilizado para la valoración de la proteína
muscular.
• Existen tablas con los valores normales o se puede calcular
aplicando la siguiente ecuación:
• Creatinina Teórica o Ideal =
• 23 mg x Kg de peso ideal (para hombres)
• 18 mg x Kg de peso ideal (para mujeres)
• La limitación fundamental de este índice es la presencia de
insuficiencia renal o la recogida incompleta de orina de 24 horas.


 Urea: con este parámetro, y siempre que la determinación se haga
con medición del volumen completo de orina de 24 horas, se puede
realizar el BALANCE NITROGENADO (B.N.) que se utiliza para
calcular el aprovechamiento proteico., según la siguiente ecuación:
• BN= Nitrógeno aportado - Nitrógeno catabolizado.
• El Nitrógeno aportado se contabiliza a partir de las proteínas
administradas (puesto que 1 g de nitrógeno equivale a 6,25 g
proteína)
• El Nitrógeno eliminado se calcula a partir de la urea excretada en
orina de 24 horas:
• N urinario = UREA (g/l) x 0.56 x Volumen orina de 24 h. (litros).
• A su vez debemos considerar las pérdidas de nitrógeno por heces
(equivalen a 0,5 g/24 h) y por sudor (equivalente al 10% del
nitrógeno urinario calculado) y las pérdidas extras por la presencia
de aspiraciones, drenajes, fístulas, etc. (sí la pérdida es <200 ml se
añadirá 1g. Nitrógeno, entre 200 y 500 ml se añadirán 2g y si es >
500 ml se añadirán 3g.).
• Así el balance nitrogenado se calcula:
Informe psicosocial

• El estilo de vida, la situación


económica, el ambiente cultural y los
factores étnicos, también tienen gran
influencia sobre los patrones
nutritivos.
Historia dietética

• La historia dietética no se utiliza como medio diagnóstico, sino


como fuente complementaria de información para ser
estudiada conjuntamente con el resto de los datos. Esta
técnica tiene muchas limitaciones ya que es muy difícil
conocer exactamente la composición de cada uno de los
alimentos ingeridos y la incapacidad para recordar los tipos y
cantidades de alimento ingeridos.
• Existen muchos métodos empleados, aunque es aconsejable
realizar al menos dos de éstos:
 Encuesta de 24 horas
 Cuestionarios selectivos de frecuencia
 Diario dietético durante 5-7 días
 Control de compras y consumo de alimentos.
 La información obtenida debe ser transformada en términos de
cantidades de nutrientes y energía, esto se puede llevar a cabo
utilizando unas tablas de composición de alimentos.
OTROS
1. VALORACIÓN FUNCIONAL
• Otra forma de valorar la desnutrición es
mediante la medición de la alteración funcional
que ésta ha provocado. De esta forma podemos
utilizar pruebas que reflejan la función muscular
(dinamometría), la función respiratoria
(espirometría) o la función inmune por ejemplo
los tests cutáneos de hipersensibilidad
retardada o el recuento total de linfocitos).
NUEVOS METODOS PARA
VALORACION NUTRICIONAL
• Las diferentes técnicas de valoración de la composición
corporal surgieron a raíz de las dificultades para valorar
el estado de nutrición, sobretodo en pacientes enfermos
y obesos, también la necesidad de poder comparar
diferentes poblaciones de pacientes; ante todo ello
fueron apareciendo y empleándose técnicas más o
menos sofisticadas que son capaces de medir los
distintos componentes corporales.
• Entre ellas están, la dilución isotópica, el análisis de
activación de neutrones, los isótopos estables, la
bioimpedancia eléctrica, la absorciometría, la
densitometría, la tomografía axial computarizada, la
ultrasonografía y la resonancia magnética.
• Bioimpedancia eléctrica (BIA), es una de las técnicas
más fáciles de llevar a cabo ya que no precisa de un
equipo muy elaborado ni es imprescindible que el
paciente colabore. Esta técnica se basa en la resistencia
que ofrecen el agua y los tejidos corporales al paso de
una corriente eléctrica, esta resistencia viene
determinada por el contenido de agua y el contenido de
electrolitos.
• Densitometría, se basa en el Principio de Arquímedes,
el volumen de agua que desplaza un objeto sumergido
es igual al volumen de dicho objeto. Considera al
organismo como un modelo formado por masa grasa y
masa libre de grasa.
• Resonancia magnética, mide directamente la
composición corporal del cuerpo humano y constituye
una técnica segura y no invasiva.
BIOIMPEDANCIA ELECTRICA
• La impedancia eléctrica es especialmente útil en personas desnutridas y en
enfermos de anorexia u otros trastornos de la conducta alimentaria
• Por definición, la impedancia eléctrica es la oposición que presenta un cuerpo,
en nuestro caso un tejido biológico, al paso de una corriente a través de él. Es
un estudio no invasivo, indoloro, que se basa en la aplicación de una corriente
eléctrica a través del organismo y que registra unos parámetros físicos que
dependen del contenido de agua en el cuerpo.
• El principio básico de la técnica es sencillo: se hace pasar una corriente alterna
aplicada entre la muñeca y el tobillo y se mide la capacidad del cuerpo para
conducir o transportar una cantidad de energía eléctrica determinada. Al tener
los tejidos biológicos propiedades eléctricas, su comportamiento frente al paso
de la corriente puede determinar su naturaleza y composición.
• Hay modelos eléctricos que, tras ser descubiertos y estudiados, han permitido
una interpretación fisiológica de la bioimpedancia, es decir, se han traducido
unos datos físicos y matemáticos a un lenguaje biológico. El conocimiento de
los diferentes compartimentos que forman nuestro cuerpo permite determinar
de forma precisa la grasa.
• La masa magra o masa libre de grasa es un compartimiento activo
metabólicamente y contiene los órganos, huesos, sangre o
músculo. En personas desnutridas, en las que el compartimiento
proteico puede estar muy afectado, es importante su valoración.
Igualmente, en enfermos de anorexia u otros trastornos de la
conducta alimentaria, la medida de la masa magra es fundamental.
Las personas mayores también tienden a perder masa magra y
representan un gran grupo de riesgo de desnutrición, por lo que la
determinación de la composición corporal es uno de los datos para
el diagnóstico de este trastorno en el anciano.
• En pediatría también se utiliza, ya que además de las medidas
corporales que dan luz sobre el estado nutricional del pequeño, la
bioimpedancia eléctrica puede ayudar al pediatra a valorar
problemas de niños que no crecen adecuadamente o problemas de
pequeños que sufren obesidad infantil.
• .
Bioimpedancia versus IMC

• La epidemia de obesidad que acecha al mundo occidental ha


contribuido a crear la necesidad de utilizar técnicas que concreten
de qué componentes se conforma nuestro cuerpo y cómo se
distribuyen. La definición de obesidad basada en el
Índice de masa corporal (IMC), que únicamente tiene en cuenta la
altura y el peso, es insuficiente como herramienta de diagnóstico y
como elemento de evaluación durante la terapia de un problema de
peso.
• El IMC no tiene en cuenta si el exceso de peso en relación con la
altura proviene de una proporción de grasa superior a la deseada o
de un problema de ascitis, edema o un desarrollo importante de la
masa muscular. Este hecho puede clasificar, por ejemplo, a un
deportista que realice una actividad de fuerza o a una mujer con
retención de líquidos como obesos
• La aplicación de la impedancia eléctrica en tejidos
biológicos tiene una historia que se remonta a finales del
siglo XVIII, pero no fue hasta principios del siglo XX
cuando se estudió la estructura de estos tejidos a partir
de sus propiedades eléctricas y se demostró que son
conductores.
• A partir de aquí se han aplicado las medidas de la
impedancia eléctrica a varios campos entre los que se
encuentra la determinación de las características de
nuestros tejidos corporales que permite distinguir si hay
edema, determinar el volumen de fluidos, conocer el
volumen intra y extra celular y cuantificar el porcentaje
de grasa y masa libre de grasa (músculos, huesos,
sangre o vísceras).
TIPOS DE VALORACIÓN NUTRICIONAL

• La valoración nutricional se puede enfocar desde diversos puntos


de vista y tendrá diferente planteamiento según el objetivo que se
persiga.
1. VALORACIÓN INICIAL
• Se realiza para determinar la situación nutricional inicial de un
paciente o para estudios de poblaciones. Se utilizarán:
 Parámetros antropométricos.
 Valores plasmáticos de proteínas de vida larga (albúmina
fundamentalmente).
2. VALORACIÓN EVOLUTIVA
• Útil para controlar la eficacia del soporte nutricional instaurado. En
este caso interesan parámetros como:
 Proteínas viscerales de vida media y corta.
 Balance nitrogenado.
3. ÍNDICES PRONÓSTICOS NUTRICIONALES (I. P. N.)
• Tratan de cuantificar el riesgo de complicaciones que puede
presentar el paciente a causa de su desnutrición. Uno de los más
conocidos es el de MULLEN-BUZBY, dirigido a pacientes
candidatos a cirugía digestiva y en el que se consideran los valores
plasmáticos de albúmina y transferrina, así como el pliegue cutáneo
tricipital (PCT) y los tests cutáneos.
• I.P.N. = 158 - (16,6 x albúmina) - (0,78 x PCT) - (0,2 x Transferrina)
- (5,8 x tests cutáneos)
• Los tests cutáneos se valoran:
• 0 = anergia.
• 1 = <5 mm de induración.
• 2 = Respuesta normal.
• Si el IPN <40 existe un bajo riesgo nutricional, entre 40-50 existe
riesgo intermedio y si es > 50 existe un alto riesgo nutricional.
• Hay que tener presente que estos índices pronósticos son válidos
sólo para la población de enfermos para los que fueron creados y
existen otros en la bibliografía, debiendo elegirse el más apropiado
para cada tipo de paciente.

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