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CARACTERÍSTICAS DEL ANTIGUO RÉGIMEN

A. Definición corta

El Antiguo Régimen fue un sistema político, un sistema económico y un sistema


social. Se denomina así al periodo anterior a las Revoluciones liberales, y
correspondería por tanto a gran parte del siglo XVIII, con claros antecedentes en
siglos anteriores.

Así, el Antiguo Régimen es un término con el cual se define la Edad Moderna tras
superar la etapa medieval y feudal y se caracteriza por mantener el modo de vida
basado principalmente en una economía agraria de tipo señorial, el absolutismo
monárquico y la sociedad estamental.

B. Ampliación de la definición

El absolutismo es la forma de poder político del Antiguo Régimen. Para justificar


este sistema se recurría a la religión, ya que era Dios quién elegía al Rey
(“Monarquía absoluta de derecho divino”)

Todo el territorio pertenecía al monarca absoluto y de él emanan las instituciones.


Su poder no tenía más limitaciones que la ley divina y aplicaba las leyes ya que era
la autoridad máxima de gobierno y de justicia (no existe por tanto división de
poderes).

La sociedad de esta época sigue siendo estamental caracterizada por la desigual


jurídica y el inmovilismo, ya que cuando nacías en un estamento pertenecías a él
toda la vida.

La sociedad estaba dividida en tres órdenes o estamentos. El primero era el clero; al


segundo pertenecían los nobles. Ambos grupos eran considerados “privilegiados”,
ya que eran quienes poseían la mayor parte de las propiedades y no pagaban
impuestos, entre otros privilegios. El llamado Tercer Estado estaba formado por el
resto de los habitantes del reino (los sectores populares urbanos, burguesía y
campesinos). Estos últimos, que eran la gran mayoría, eran los más perjudicados ya
que tenían que pagar impuestos, y carecían de privilegios; la mayoría simplemente
podían tener recursos para la propia supervivencia; aunque un pequeño grupo (la
burguesía) tenía una fuerte capacidad económica e intelectual, a pesar de esto no
podían acceder a la élite política y social, por lo que eran los promotores de las
revoluciones (americana, francesa...).

La economía se basaba en la agricultura, que era la principal fuente de riquezas y


a ella se dedicaba la mayoría de la población. La tierra se transmitía en herencia
(amortizada) por lo que no podía ni comprarse, ni venderse. La Corona, la nobleza y
la Iglesia eran los principales titulares de los señoríos.

Según la zona en la que trabajaban los campesinos y el contrato que tenían, sus
condiciones cambiaban. (La peor situación fue la de los andaluces por el predominio
de los latifundios, un único propietario poseía las grandes extensiones.)

Debido a la dependencia económica de la agricultura (de subsistencia), la


mortalidad estaba muy relacionada con las malas cosechas, las plagas, etc.

La industria tradicional o artesanal se organizaba en forma de gremios para


controlar la producción y la creación de nuevas industrias.

El mercado interior se limitaba a intercambiar de forma local o comarcal. El


principal problema era que el mercado se basaba en una economía agraria de
autoconsumo, por lo que no había productos para la venta. Únicamente el comercio
colonial y de productos de lujo tenía alguna importancia.

C. Contexto destacado

La etapa medieval y feudal cambió a finales del siglo XV para iniciar la Edad
Moderna. El siglo XVIII, por su parte, fue una época de transición entre la Edad
Moderna y las revoluciones liberales. Aún así, la sociedad española del siglo XVIII
era claramente estamental y dominada por los grupos privilegiados: el clero era
poco más del 2% de la población pero controlaba el 40% de las propiedades
territoriales; la nobleza, un 5%, poseía numerosos señoríos y privilegios.

La agricultura era todavía la fuente esencial de riqueza, y a ella se dedicaba el 80%


de la población. A principios del siglo XVIII se creo una cierta paz internacional, lo
que favoreció el aumento de la población y por lo tanto la producción y el desarrollo
del comercio colonial. No obstante, la industria tradicional (gremial) y el comercio
interno siguen siendo enormemente débiles, en general.

El absolutismo se impuso definitivamente en España con la llegada de los Borbones,


quienes llegaron al poder tras la Guerra de sucesión (1700-1713).

Todo empezó con la muerte de Carlos II, quien murió sin descendencia, Felipe V fue
elegido como sucesor, lo que creó un conflicto internacional con distintos intereses
(holandeses, ingleses, franceses, imperio Habsburgo) e incluso tomó en España
carácter de guerra civil.

Los primeros Borbones españoles, Felipe V y Fernando VI, se dedicaron a unificar


los territorios peninsulares (Decretos de Nueva Planta). Su dedicación a mejorar la
situación interna del país provocó la perdida del poder e influencia española
internacional (ya muy mermada desde el siglo pasado).

Uno de los principales motores de cambio que supuso el siglo XVIII fue la
Ilustración.

La Ilustración en España dio nuevas ideas a los grupos sociales que se enfrentaron
al Antiguo Régimen. Muchos de los ilustrados creían que una mejora de la
educación sacaría al país del fracaso, y cambiaría la sociedad, por eso defendieron
la necesidad de imponer una enseñanza obligatoria, útil y práctica.

Otra preocupación de los ilustrados fue la economía y propusieron una serie de


reformas que ayudasen al crecimiento económico,(mejoraron la agricultura, el
comercio y la industria).

Durante el reinado Carlos III, este se mostró partidario de algunas ideas ilustradas,
pero sin ponerse en contra el poder absolutista, ya que la realeza dependía del
sistema estamental.Todo esto dio lugar al reformismo borbónico, una corriente del
despotismo ilustrado.

Fue con la Revolución francesa y su impacto en España cuando comenzó la crisis


del Antiguo Régimen y con ello el derrumbamiento del mismo a inicios del siglo XIX.

D. Imagen relacionada
ok, mañana explico cómo se sube esto
´animo con la presentaci´on

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