Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Clair
La naturaleza del niño pequeño
Pág. 105
“El que es generoso, prospera; el que
da, también recibe”
(Proverbios 11:25, DHH).
Pág. 105
Compartir no es algo natural,
pero es posible.
Pág. 18
Compartir…
¿Cómo
De manera práctica
y con elC ejemplo.
Dios dió lo mejor
?
que tenía, a Jesús.
Pág. 105
Principio 23
Si Dios compartió generosamente lo mejor
que tenía con nosotros, entonces nosotros,
deberíamos compartir generosamente lo
mejor que tenemos con otros.
Pág. 106
Conceptos para compartir
1
7
Generosi- Entender
dad
6 2
Honestidad Temor
5 3
Actitud Control
4
Diferencia
Págs. 106-108
1. Entender los derechos de propiedad.
Instrúyalos en el hábito de
compartir razonablemente.
Pág. 107
4. Enséñeles que compartir es distinto que
dar.
La actitud de
compartir y
de dadivosidad
es más que el
acto mismo.
Anime a sus hijos
a disfrutar de
poder compartir memorizando 2 Corintios 9:7
“Dios ama al dador alegre”.
Principio 24
Compartir con una actitud alegre es más
importante que el acto de compartir en sí
mismo.
Pág. 106
6. Enseñe a su hijo a dar a Dios
un diezmo honesto y una ofrenda
generosa.
Pág. 107
Yendo a lo personal
1. ¿Siempre le doy a Dios un diezmo honesto?
Pág. 107
7. Anime a sus hijos a regalar
algunos de sus juguetes o ropa.
Pág. 109
Regalar de +
Pág. 110
Evaluemos
1. ¿Piensa que el don de la dadivosidad es un don
espiritual? (ver Romanos 12:8 ).
2. ¿Es este don espiritual algo que siente que le ha sido
dado, o tiene a veces que empujarse a seguir la
amonestación de Cristo: “Lo que ustedes recibieron
gratis, denlo gratuitamente”? (Mateo 10: 8 NVI).
3. ¿Qué significa para usted el texto: “Lo que ustedes
recibieron gratis, denlo gratuitamente”?
Pág. 110
“Señor, ayuda a mi hijo a dar en lugar de recibir.
Ayuda a mi hijo a experimentar el gozo de dar.
Que mi hijo sea rápido para dar tiempo, talentos,
dinero, posesiones, agradecimiento, cumplidos,
palabras sanadoras, sonrisas, amor, abrazos,
y una mano o un oído, cada vez que se presente
la oportunidad”.
William y Nancie Carmichael
Pág. 111
d o
Un niño activo, impulsivo,
m i en
s u
rígido, y sumamente intenso,
con ánimo negativo y con
Re
funciones corporales
irregulares que se distrae
fácilmente y egocéntrico, no
es probablemente el niño por
el cual oró.
Pero Dios se lo dio para ayudarlo a crecer
adecuadamente. Al conocer y entender a
su hijo, su amor aumentará.
Principio 23
Si Dios compartió generosamente lo mejor que tenía con
nosotros, entonces nosotros deberíamos compartir
generosamente lo mejor que tenemos con otros.
Pág. 112
Principio 24
Compartir con una actitud alegre es más importante que el
acto de compartir en sí mismo.
Pág. 112