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• En definitiva, las ciudades, como portadoras de civilización, adquieren la función predominante - destructoras, ya que
destruyen la naturaleza, y con ella su propia población.
LA TRANSFORMACIÓN DE UNA CIUDAD COMPATIBLE CON LA BIOSFERA Y
EL DESARROLLO DE UNA PERSONA
Se considerarán tecnologías compatibles con la biosfera las medidas que brinden una oportunidad
económica para utilizar desechos industriales y domésticos, materias primas de baja calidad y recursos
renovables para crear productos de alta calidad que compitan con los bienes tradicionales obtenidos de los
recursos naturales inicialmente extraídos.
Principio 6. Crear un clima social armonioso.
Con base en este principio, es conveniente evaluar la estabilidad interna y el bienestar de la ciudad, el
progreso en el desarrollo humano y en la restauración de la Naturaleza. Para tal evaluación, se deben utilizar
indicadores: tensión social, clima moral, lo que se denomina "felicidad terrenal" - bienestar familiar,
nacimiento de hijos y otros indicadores caracterizados por datos estadísticos de información sobre la
situación social por región (tasa de natalidad y mortalidad, la prevalencia del comportamiento desviado
debido al alcohol y las drogas, la esperanza de vida), la calidad de la fuerza laboral, la evaluación real del
potencial humano y más.
Principio 7. Satisfacción de las necesidades humanas racionales a través
de las funciones de la ciudad.
Para el desarrollo armónico de una persona, sus necesidades racionales como (vida, emociones,
voluntad, cordialidad y bondad, deseo de conocimiento, necesidad de creatividad, sentido de la belleza)
deben ser satisfechas con las funciones de la ciudad: soporte vital, entretenimiento y emociones, poder,
misericordia, adquisición de conocimientos, conocimiento del mundo y creatividad, conexión con la
naturaleza. Ninguna de las necesidades del individuo es la principal, todas ellas son necesarias, y sin
satisfacción de ninguna de ellas, una persona no será armoniosa.
Principio 8. Confiabilidad.
Las relaciones entre las comunidades sociales deben basarse en los principios de compatibilidad
biosférica. Si la interacción se basa en la cooperación entre personas y grupos de personas, entonces el
desarrollo del individuo y la sociedad será amigable y armonioso. De lo contrario, aparecen masas
desorganizadas de personas (multitudes y sus otras variedades) que generan rumores, pánico y miedo en
la sociedad, que son débiles o incontrolables por la ciudad y el país en su conjunto.
Las ciudades deben desarrollar su propio estilo, tener fechas memorables, vacaciones en la ciudad.
La capacidad de administrar el poder implica conocer las funciones de la ciudad, su situación política,
económica, social, ambiental, la relación entre grupos e individuos, sus intereses, comprender la estrategia y
tácticas mediante las cuales se adquiere y retiene el poder. La cognición contribuye al establecimiento de
conexiones de múltiples niveles dentro y entre regiones, el desarrollo de una idea nacional, una estrategia,
como base para el uso de estructuras de poder internas, la planificación de la defensa nacional, la imagen del
país, etc.
Conclusiones
Los problemas de una ciudad moderna muestra que todos ellos se encuentran entre dos extremos: la destrucción de la Naturaleza y la
degradación del hombre. En el contexto de una población en declive, es necesario transitar hacia una planificación urbana basada en el
principio de crear ciudades compatibles con la biosfera que desarrollen personas.
Desde la academia es nuevo la introducción de un triple equilibrio entre a) el potencial de vida de la Biosfera, b) el tamaño de la población, c)
la necesidad de las personas y la tecnosfera de los recursos de la biosfera y la capacidad de la biosfera de las regiones para satisfacer estas
necesidades. Esta es la base para tomar decisiones sobre recursos, población e innovaciones necesarias.
La consolidación legislativa del triple equilibrio a nivel autonómico permite mejorar deliberadamente la simbiosis de ciudad y naturaleza.
Los problemas no resueltos de la ciudad se proponen eliminar mediante métodos programa-objetivo basados en el uso del conocimiento y la
solución conjunta desde una idea hasta preparar a los consumidores para un nuevo producto.
Cualquier ciudad independiente de su tamaño y ubicación, debe proporcionar a cualquier persona las mismas condiciones para el desarrollo,
para satisfacer las necesidades racionales, es decir , así la ciudad crea un entorno favorable para la vida y el desarrollo humano.
Finalmente, la doctrina de urbanismo y planificación estratégica de la ciudad en armonía con la biosfera permite resolver sistemáticamente el
problema de la transformación urbana, su desarrollo innovador y el desarrollo humano a largo plazo.
MUCHAS GRACIAS POR SU ATENCION
La conciencia de las personas sobre su existencia es, quizás, la mayor fuerza que mueve la vida.
No hay nada más fuerte que la sed de conocimiento, el poder de la duda... Y esta búsqueda, este
deseo es la base de toda actividad científica...
Según cifras del Ministerio del Ambiente, en 2016 el país contaba con 12 631 197
hectáreas de bosque nativo y en 2018 ya tenía 116 857 hectáreas menos. En 18 años —
entre 1990 y 2018— se han perdido poco más de 2 millones de hectáreas de bosque en
el país.
El aire que respiramos los ecuatorianos está contaminado. Lo dicen las mediciones y estudios realizados por el ministerio del ambiente del
ecuador, la organización mundial de la salud (OMS), la organización panamericana de la salud (PAHO), algunos municipios y universidades.
Ciudades como Ambato, Cuenca, Ibarra, Latacunga, Manta, Milagro, Portoviejo, Quito, Esmeraldas, Santo Domingo y Loja sobrepasan los límites
de contaminación permitidos por la OMS y la norma de calidad del aire ecuatoriana. Otras ciudades no tienen estudios recientes.
Otras causas para que exista contaminación en el aire son las vías sin asfaltar, las construcciones sin terminar y las emisiones producto de la
quema de leña o del uso del gas licuado de petróleo, por ejemplo. En esmeraldas, el humo de la refinería de petróleo es una fuente de
contaminación.
En la Amazonía son los derrames de petróleo, la incineración del gas natural que emana de los yacimientos, la generación de energía con
plantas termoeléctricas y la minería no metálica.
La organización mundial de la salud dice que por la mala calidad de su aire, en las ciudades aumenta el riesgo de accidentes
cerebrovasculares, enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón y enfermedades respiratorias crónicas y agudas, como el asma o la neumonía.
Las patologías del corazón, covid-19, diabetes mellitus, influenza y neumonías, hipertensión, accidentes
cerebrovasculares o ACV, problemas del sistema urinario, accidentes de tránsito y la cirrosis. Son las principales causas de
muerte en Ecuador.
Los datos constan en el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).