Está en la página 1de 15

› FUNDAMENTOS CRISTIANOS

EN LA ECONOMÍA Y LA
EMPRESA

PERSONAJES
MONÁSTICOS
SAN ANTONIO
El que nos narra a través de sus obras (Vita Sancti
Antonii y Principia) sobre la vida de San Antonio es
San Atanasio quien era perseguido por sus enemigos
y por el emperador, encuentra refugio en las grutas
de los monjes seguidores de San Antonio.
SAN ANTONIO
En el libro Vita Sancti Antonii San Atanasio nos cuenta la vez que se le
presentó el diablo a San Antonio el cual estaba trabajando en un pequeño
huerto tejiendo esteras, el diablo lo tentó diciéndole que no era un
verdadero monje porque no sabía hacer oración y contemplación
ininterrumpida, es ahí donde presa del abatimiento y la depresión San
Antonio quería dejar todo y regresar a la ciudad pero de pronto se le
apareció un ángel que tejía esteras y rezaba a intervalos regulares y le
dijo: “Haz lo que me ves hacer”.
SAN ANTONIO
En la misma obra menciona para los monjes: “Trabajaba con
sus propias manos porque se acordaba del mando” y “el que
no trabaja ni siquiera coma” ya que de la ganancia era para su
sustento y parte para los indigentes. Los monjes tenían al
trabajo físico como uno de los elementos fundamentales de la
vida del monasterio junto a la oración y el ayuno.
SAN ANTONIO
• La obra “Principia” trata de los consejos fundamentales que
daba San Antonio a quien deseaba seguirlo, la número 50
decía que el monje tenía la obligación de vivir del trabajo
de sus propias manos.
SAN PACOMIO
• Fue un óptimo organizador y sus reglas
constituyen los primeros intentos de una vida
cenobítica.
• Las principales actividades que se realizaban eran
la de tejedores, estereros, sastres, carpinteros,
zapateros, cocineros, enfermeros y agricultores.
• Una de sus principales reglas fruto de la
revelación de un ángel fue “Dejarás que uno coma
y beba según sus fuerzas y le darás un trabajo
proporcionado a ellas. No prohíbas a nadie comer
o beber, pero haz que los que comen y tiene más
fuerzas, ejecuten los trabajos que exigen mayor
vigor y deja para los más débiles los trabajos
menos pesados”.
SAN PACOMIO
• Las ocupaciones más comunes y preferidas de los
monjes eran la confección de cestas, cuerdas y
esteras tejidas con juncos o palmas, además
ayudaban a los campesinos en la siega. Ellos
preferían estas actividades por dos razones: prácticas
y espirituales.
a) Prácticas: por la facilidad y mecanicidad, que les
permitía el trabajo una vez aprendido, ya que les
daba tiempo para la oración y la meditación.
b) Espirituales: para el monje era importante la
soledad, el silencio, el alejamiento de la ciudad con
sus preocupaciones y rumores, esto debido a que
para confeccionar las cestas el material que se
utilizaba se encontraba en el desierto.
SAN BASILIO
• Uno de los Obispos más importantes de su época, sus reglas
constituyen la base y el punto de referencia de las reglas
monásticas occidentales sucesivas.
• San Basilio prefería para sus monjes la actividad de la
agricultura ya que esta tenía un carácter educativo y
político.
SAN BASILIO
a) CARÁCTER EDUCATIVO: ya que recuerda a los monjes que
la fatiga del trabajo manual tiene un valor educativo
fundamental en el camino de la santidad del monje.
b) CARÁCTER POLÍTICO: en un primer sentido ya que les
permitía vivir aislados de las ciudades con todas sus
preocupaciones y distracciones y en segundo sentido
porque les permitía no depender de las autoridades.
SAN BASILIO
• Para San Basilio las herramientas del trabajo tenían
el mismo valor y dignidad que los utensilios
utilizados en una ceremonia religiosa.
SAN AGUSTÍN
• San Agustín en su obra “DE OPERE MONACHORUM” realiza
una crítica muy severa contra los monjes que ya no querían
trabajar, incluso estos monjes se valían de un pasaje
evangélico para justificar su acto “Las aves del cielo y los
lirios del campo no se preocupan del mañana e igualmente
Dios les abastece de lo necesario”
SAN AGUSTÍN
• San Agustín manifiesta “Si cuando vivían en el siglo tenían
con que mantenerse sin oficio y al convertirse a Dios lo
dieron todo a los pobres, hemos de creer en su flaqueza y
tolerarla. Porque esos tales suelen recibir una educación, no
mejor como muchos piensan, sino más afeminada, como es
la verdad, y no pueden tolerar la fatiga de los trabajos
corporales”.
SAN BENITO
El sociólogo e historiador Leo Moulin nos dice que para San
Benito el trabajo manual, intelectual, artístico o artesanal es
elemento esencial de la identidad monástica. Además
manifiesta que era importante trabajar por cuatro razones:
• Para ayudar a los pobres.
• Para evitar el ocio.
• Para el servicio de la comunidad.
• Para desarrollar los dones que Dios ha puesto en nosotros.
SAN BENITO
• Además San Benito dice: “La ociosidad es enemiga del alma,
por ello los monjes deben dedicar unas horas al trabajo
manual y otras a la lectura divina. Si el lugar o la pobreza
exigen que ellos mismos tengan que trabajar en la
recolección, que no se disgusten, porque así son verdaderos
monjes, cuando viven del trabajo de sus propias manos
como nuestros Padres y Apóstoles”.
SAN BENITO
• A pesar de que a los
discípulos de San Benito no
les gustaba el trabajo
agrícola ellos destacaron
como los mejores
agricultores de Europa ya
que ellos entendieron la
importancia del trabajo con
sus propias manos para su
santidad y su desarrollo
como personas.

También podría gustarte