0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
13 vistas3 páginas
Un buen trato hacia los menores requiere darles amor, afecto y atención; animarlos a jugar y aprender; y responder a sus capacidades emergentes estimulando nuevas destrezas a través de la interacción.
Un buen trato hacia los menores requiere darles amor, afecto y atención; animarlos a jugar y aprender; y responder a sus capacidades emergentes estimulando nuevas destrezas a través de la interacción.
Un buen trato hacia los menores requiere darles amor, afecto y atención; animarlos a jugar y aprender; y responder a sus capacidades emergentes estimulando nuevas destrezas a través de la interacción.