Está en la página 1de 64

TEORÍA GENERAL DEL

PROCESO
CONCEPTO DE DERECHO: Para Acosta Romero, el derecho es un
sistema de normas bilaterales, exteriores, heterónomas y coercibles ,
con profundo contenido consuetudinario, espiritual y ético, y que sirve
de instrumento a una determinada sociedad humana para encauzar y
regular la interferencia intersubjetiva de sus componentes, así como
las relaciones con otras sociedades humanas y busca de la
realización de los fines comunes y en vista de los valores que les son
correlativos como la justicia, la libertad, la seguridad y la justicia
social.

CONCEPTO DE DERECHO PRIVADO: García Máynez señala que es


el conjunto de normas que regulan las relaciones jurídicas entre
personas que se encuentran legalmente consideradas en una
situación de igualdad, en virtud de que ninguna de ellas actúa, en
dichas relaciones, investida de autoridad.
CONCEPTO DE DERECHO PÚBLICO: el Diccionario Jurídico
Mexicano señala que derecho público viene a ser entonces el
conjunto de normas que regulan el ejercicio de la autoridad estatal,
determinando y creando el órgano competente para ejercerla, el
contenido posible de sus actos de autoridad estatal y el
procedimiento mediante el cual dichos actos deberán realizarse. Un
posible criterio de diferenciación entre ambos derechos lo
constituye el de la subordinación del particular frente al Estado y la
coordinación de los particulares entre sí.

CONCEPTO DE DERECHO SOCIAL: el señalado diccionario


señala que es el conjunto de normas jurídicas que establecen y
desarrollan diferentes principios y procedimientos protectores a
favor de las personas, grupos y sectores de la sociedad integrados
por individuos socialmente débiles, para lograr su convivencia con
las otras clases sociales, dentro de un orden jurídico.
Las características principales del Derecho Social son:
a) No se refieren a individuos en general, sino en cuanto
integrantes de grupos sociales bien definidos;
b) Tienen un marcado carácter protector hacia los sectores
económicamente débiles;
c) Son de índole económica;
d) Establecen un sistema de instituciones y controles para
transformar la contradicción de intereses de las clases sociales
en colaboración pacifica y convivencia justa, y
e) Tienden a limitar las libertades individuales.
Teoría, del griego theorein (“observar”), sistema lógico formado por el conjunto
de conceptos, proposiciones y definiciones que se encuentran relacionadas
entre sí con el objetivo de describir, explicar, predecir y controlar los fenómenos
de que se ocupa; la teoría viene a ser la unidad de fundamentación y/o
demostración del conjunto vinculado y cohesionado de verdades que integran la
ciencia.
General, que se refiere al conjunto de un tema o materia y no a un aspecto
particular de ella.
Proceso, secuencia de pasos dispuesta con algún tipo de lógica que se enfoca
en lograr algún resultado específico; es una forma determinada de accionar. En
el contexto del derecho, un proceso hace alusión a los diversos pasos que
deben seguirse de modo obligatorio a la hora de llevar adelante un juicio .
Respecto de la Teoría General del Proceso, el Diccionario Jurídico Temático de
Derecho Procesal establece que es la Disciplina que reúne, ordena y explica de
modo teorético y sistematizado el fundamento, los elementos, las conexiones,
los principios y los presupuestos de los fenómenos procesales y
procedimentales.
Para Ovalle Favela, la ciencia del derecho procesal se puede dividir en dos
partes: una parte general que se ocupa del estudio de los conceptos,
principios e instituciones que son comunes a las diversas disciplinas
procesales especiales (TGP), en tanto que su parte especial está constituida
por las diversas disciplinas procesales que se ocupan de manera específica
del estudio de las normas, principios e Instituciones que regulan cada
proceso jurisdiccional en particular. Así, esta materia tiene como objeto el
estudio teórico del proceso, por lo que no estudia las distintas normas
jurídico-procesales positivas de una determinada materia, sino que tiende a
encontrar y analizar lo que las citadas normas tienen de común.
Por su parte, Niceto Alcalá-Zamora y Castillo, dice que la Teoría General del
Proceso es el “conjunto de conceptos, principios e instituciones comunes a
las distintas ramas del enjuiciamiento”. Sin embargo, Briseño Sierra sostiene
que el Derecho Procesal «…es el conjunto de normas y principios jurídicos
que regulan tanto el proceso jurisdiccional como la integración y
competencia de los órganos del estado que intervienen en el mismo»
FORMAS DE RESOLVER LA CONFLICTIVA SOCIAL
INTERSUBJETIVA.

Al convivir y desarrollar sus actividades cotidianas, las personas se


entrelazan en una serie de relaciones con otros individuos que, por lo
general, derivan en acuerdos de voluntades, pero también puede ocurrir
que las relaciones generen desacuerdos por la contraposición de los
intereses involucrados; al respecto, Carnelutti establece que existen dos
extremos en ese choque de fuerzas: el contrato y el delito. Para resolver
un conflicto de intereses intersubjetivo o litigio, se identifican tres formas
básicas: Autotutela, Autocomposición y Heterocomposición.
AUTOTUTELA O AUTODEFENSA: consiste en la imposición de la propia
pretensión en perjuicio del interés ajeno (Niceto Alcalá–Zamora y
Castillo); es la forma egoísta y primitiva de solución de los conflictos,
muy cercana a la animalidad.
En ella, el más fuerte o el más hábil impone, por su inteligencia, por su
destreza o habilidad, la solución a su contrario; por lo tanto, el conflicto
se resuelve no en razón de a quien le asiste el derecho.
Este es un medio de solución egoísta, porque uno de los sujetos en
conflicto y a veces los dos, resuelven o intentan resolverlo mediante la
acción directa, en lugar de servirse de la acción dirigida hacia el Estado
a través del proceso; al respecto, el Articulo 17 Constitucional prohíbe
esta forma de solución al preceptuar que “ Ninguna persona podrá
hacerse Justicia por si misma, ni ejercer violencia para Reclamar su
Derecho…”.
De la misma manera, el citado precepto garantiza la tutela jurisdiccional
al establecer: “…Toda persona tiene derecho a que se le administre
justicia por tribunales que estarán expeditos para impartirla en los plazos
y términos que fijen las leyes, emitiendo sus resoluciones de manera
pronta, completa e imparcial”.
Sin embargo, los siguientes son algunos casos, entre otros, en los cuales la
autotutela está prevista por la ley:
 Legitima defensa penal.
 Retención de equipaje.
 Corte de ramas y raíces provenientes del periodo contiguo.
 Persecución de animales o enjambres de abejas propios en predio ajeno.
 Derecho sancionador de los padres.
 Robo de famélico.
AUTOCOMPOSICIÓN. Es el acto jurídico por virtud de la cual las partes en
un litigio lo componen por sus propios medios: la autocomposición surge
indudablemente de la evolución humana porque hay en ella un alejamiento
del primitivismo. En la autocomposición las propias partes encuentran la
solución al conflicto, ya sea a través del pacto, de la renuncia o del
reconocimiento de las pretensiones de la parte contraria.
Es un medio de solución parcial porque proviene de una (unilateral)
o de ambas partes en conflicto (bilateral). Consiste en la renuncia a
la propia pretensión o en la sumisión a la de la contraparte.
Alcalá Zamora clasifica a la Autocomposición desde el punto de
vista de su relación con el proceso:
 Extra-Procesal: Antes del proceso y que se puede oponer como
excepción por la parte demandada.
 Intra-Procesal: dentro del proceso y que se presenta en dos
vertientes:
 Que se produzca solo entre las partes.
 Mediante la intervención de la autoridad judicial.
 Post-Procesal: Si se origina después de la sentencia firme y
afecta su ejecución.
UNILATERAL: DE LA DEMANDA
 RENUNCIA. - DESISTIMIENTO: DE LA INSTANCIA
DE LA ACCIÓN (del
derecho o la pretensión)
 RECONOCIMIENTO. - ALLANAMIENTO.
BILATERAL:
 TRANSACCIÓN.- NEGOCIO JURÍDICO QUE IMPLICA UN
PACTO ENTRE LAS PARTES; ACUERDO DE VOLUNTADES
QUE IMPLICA EL OTORGAMIENTO DE RECÍPROCAS
CONCESIONES ENTRE LAS PARTES A EFECTO DE
RESOLVER EL CONFLICTO DE INTERÉS.
.
HETEROCOMPOSICIÓN: vía de solución de un conflicto intersubjetivo
que las partes dirimen frente a un tercero ajeno a fin de que lo resuelva
imparcialmente; fundamentalmente existen dos formas por excelencia de
esta figura de solución: el Arbitraje y el Proceso.
En ambas, el tercero (árbitro y juez, respectivamente) desarrollará una
serie de actos junto con las partes y los terceros ajenos a la relación
sustancial, que culminarán en la resolución del caso que le haya sido
sometido, siendo que la diferencia sustancial entre ambas figuras lo
constituye el tipo de resolución que cada uno de ellos emite: Laudo y
Sentencia.
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL DERECHO
PROCESAL.
Eduardo B. Carlos, señala que la Teoría General del Proceso “…estudia
el conjunto de normas jurídicas que regulan el proceso, por cuyo medio
el Estado, ejercitando la función jurisdiccional asegura, declara y realiza
el derecho”, así como la integración y competencia de los órganos del
estado que intervienen en él, siendo que el contenido de su estudio son:
 LOS CONCEPTOS
 LOS PRINCIPIOS
 LAS INSTITUCIONES (JURÍDICAS) COMUNES A LAS DISCIPLINAS
DEL DERECHO PROCESAL.
En principio, los conceptos, para Moulines, Carlos (1997) son las
unidades más básicas de toda forma de conocimiento humano.
Son construcciones o autoproyecciones mentales, por medio de las
cuales comprendemos las experiencias que emergen de la
interacción con nuestro entorno.
Para Hilary Putnam (1975), estas construcciones surgen por medio
de la integración en clases o categorías que agrupan nuestros
nuevos conocimientos y nuestras nuevas experiencias con los
conocimientos y experiencias almacenados en la memoria.
Por su parte, Ramiro J. Podetti señala que «,,,los conceptos en la
Ciencia Procesal son las nociones fundamentales de orden
sistemático que no están definidas, sino establecidas en las leyes
positivas», a las que el autor identifica como “Trilogía Estructural
de la Ciencia del Proceso”:
 Acción.
 Jurisdicción.
 Proceso.
En la TGP, también existen otros conceptos secundarios :
 Los sujetos procesales (el juzgador, las partes y los terceros).
 Procedimiento, competencia, actuaciones judiciales, plazos
para actuar, pruebas, resoluciones judiciales, recursos, etc.
 Los sistemas de apreciación o valoración de las pruebas (libre,
tasado o legal, mixto y el de la “sana crítica”: sistema ubicado
entre la prueba legal y la libre convicción, en el cual el juzgador
aprecia los elementos probatorios conforme a las reglas de la
lógica y la experiencia).
ACCIÓN.- La palabra acción tiene su origen en la expresión latina
actio, que significa ejercer, realizar, el efecto de hacer, posibilidad
de ejecutar alguna cosa; era un sinónimo de actus que aludía, en
general, a los actos jurídicos.
En el ámbito jurídico, la acción se concibe como aquella actividad
que realiza el sujeto, produciendo consecuencias en el mundo
jurídico; así, es el medio que otorga el Derecho para poder llevar
una pretensión jurídica a la justicia a través de una demanda .
La pretensión es un elemento indispensable para que se integre un
litigio. En su significado más general, puede entenderse como
“intención”, “propósito”, “finalidad”, “deseo” o “ambición” y, de forma
más real, como “objetivo”, “derecho”, “reclamación”, “demanda”,
“aspiración”.
En el área jurídica, el significado de pretensión encierra un querer,
una intención de exteriorizar la voluntad a fin de someter un interés
ajeno al propio.
La acción procesal puede concebirse como el poder jurídico de
provocar la actividad de juzgamiento por un órgano jurisdiccional
que decida los litigios de interés jurídico; el derecho, la potestad, la
facultad o actividad, mediante la cual un sujeto de derecho provoca
la función jurisdiccional .
Un conflicto de intereses será un litigio cuando tiene trascendencia
jurídica; el litigio es el antecedente de un proceso que es la forma
heterocompositiva de resolverlo y la acción es el medio para
introducir un litigio al proceso.
EXCEPCIÓN. Proviene de la raíz latina Exceptio; en su natural
interpretación gramatical es la acción de exceptuar, excluir o no
comprender a algo o a alguien .
Dentro del medio forense, se trata de excluir la acción, el
presupuesto procesal o el derecho sustantivo en que se apoya la
acción; se pretende, en suma, la exclusión total o parcial de la
pretensión del actor.
Para Eugene Petit la excepción “no es más que un medio de defensa
muy especial que el demandado puede hacer valer en el curso del
proceso”.
En este sentido, se considera como un medio para tratar de detener
la tramitación del proceso (excepción dilatoria) o para desvirtuar la
procedencia de la acción intentada por la contraparte (excepción
perentoria).
En un sentido amplio, se entiende como el Derecho Subjetivo
procesal que tiene el demandado para contradecir u oponerse a la
acción o a la pretensión hechas valer por la parte actora ; así, se
identifica con el derecho de defensa en juicio . Dentro de este
significado también se designa a la excepción como «derecho de
contradicción”.
La excepción hace referencia al poder que tienen el demandado
para oponer, frente a la pretensión del actor, cuestiones que
afecten la validez de la relación procesal e impidan un
pronunciamiento de fondo sobre dicha pretensión, alegando que no
se han satisfecho los presupuestos procesales (cuestiones
procesales) o aquellas cuestiones que, por contradecir el
fundamento de la pretensión, procuran un pronunciamiento de
fondo absolutorio, aduciendo la existencia de hechos extintivos o
modificativos de la relación jurídica invocada por el demandante
(cuestiones sustanciales).
Respecto de los presupuestos del proceso, los entendemos como el
conjunto de condiciones cuya presencia o ausencia es necesaria para
la válida integración y desarrollo de la relación procesal ; los podemos
dividir en previos al proceso y previos a la sentencia.
Competencia.
Respecto de los sujetos: Capacidad Procesal
Representación
Previos Legitimación.
al Proceso
Cosa Juzgada
Respecto del objeto: Litispendencia
Caducidad de la
Acción.
El incumplimiento de los presupuestos procesales previos al proceso
puede ser denunciado al juzgador a través de las excepciones
procesales denominadas: de incompetencia, de falta de capacidad,
legitimación o personalidad, de cosa juzgada, de litispendencia o de
caducidad de la acción (cuando ésta no fue ejercida dentro del plazo
que la ley determina para ello). Sin embargo, habría que hacer notar
que el código adjetivo civil faculta al juzgador para estudiar y resolver
de oficio sobre los presupuestos procesales de competencia y de
personalidad.

Respecto de los PRESUPUESTOS PROCESALES PREVIOS A LA


SENTENCIA, considerados como las condiciones necesarias para la
regularidad del desarrollo del proceso sin cuya satisfacción el juez no
debe pronunciar sentencia definitiva sobre la pretensión litigiosa, se
pueden mencionar: la vía procesal, la realización legal del
emplazamiento, el otorgamiento de oportunidades probatorias y la no
existencia de la caducidad de la instancia.
Sin embargo, sólo los defectos concernientes a la vía procesal o
tipo de juicio, pueden ser denunciados ante el juez por medio de
la excepción de improcedencia de la vía; las demás se
combaten por incidente de nulidad, por la promoción de la
declaración de caducidad de la instancia o por los medios de
impugnación.

La ley adjetiva civil distingue entre excepciones procesales


dilatorias y perentorias; al respecto, establece que, “Salvo la
incompetencia del órgano jurisdiccional, las demás excepciones
procesales, y las objeciones aducidas respecto de los
presupuestos procesales se resolverán en la audiencia previa,
de conciliación y de excepciones procesales, a menos que en
disposición expresa se señale trámite diferente”, señalando que
son excepciones procesales:
I. La incompetencia del juez;
II. La litispendencia;
III. La conexidad de la causa;
IV. La falta de personalidad del actor o del demandado, o la falta de
capacidad del actor;
V. La falta de cumplimiento del plazo a que esté sujeta la
obligación;
VI. Se deroga;
VII. La improcedencia de la vía;
VIII. La cosa juzgada, y
IX. Las demás a las que les den ese carácter las leyes .
Respecto de la distinción entre excepción y defensa, Alcalá
Zamora nos dice que el derecho francés considera que “…la
defensa implica la discusión relativa al derecho subjetivo
(pretensión de fondo), mientras que la excepción se refiere a la
regularidad de las formas del procedimiento”; en este sentido,
las defensas equivalen a las excepciones sustanciales y las
excepciones a las procesales.
Independientemente de todo lo anterior, la SCJN ha establecido
criterio firme respecto de que “…las excepciones proceden en
juicio aunque no se exprese su nombre, bastando con que se
determine con claridad el hecho en que se considere la defensa
que se hace valer.” De esta manera, se identifica la excepción
con la defensa.
JURISDICCIÓN: del latín Jus o Juris que significa derecho y Dicere
que significa declarar; entonces, etimológicamente, Jurisdicción
significa “declarar el derecho” y ello se materializa al emitir la
sentencia, lo cual es la función judicial propiamente dicha. Gómez
Lara señala que “Es una función soberana del Estado, realizada a
través de una serie de actos que están proyectados o encaminados
a la solución de un litigio o controversia mediante la aplicación de
una Ley general a ese caso concreto controvertido, para
solucionarlo o dirimirlo, investigando la procedencia (si a las partes
les asiste el derecho) y, posteriormente, declarándolo ”.
La importancia de la jurisdicción radica en conceder eficacia a los
derechos otorgados por las normas jurídicas, a través de la
creación de órganos competentes para estudiar la cuestión
planeada y llegar a una resolución que trata de aplicar, al caso
concreto, la justicia contenida en las normas jurídicas en forma
general .
En el derecho mexicano, el artículo 17 Constitucional establece las
bases de la función jurisdiccional; ese numeral señala que nadie
podrá hacerse justicia por su propia mano, sino que para eso
estarán los tribunales, para impartirla, la cual será gratuita
quedando prohibidas las costas judiciales.
Por su parte, el doctor Fernando Flores García nos dice que “La
jurisdicción puede concebirse como una potestad-deber atribuida e
impuesta a un órgano gubernamental para dirimir litigios con
trascendencia jurídica…”
Ahora bien, Desde el punto de vista de la existencia o no de una
controversia, la jurisdicción de clasifica en:
 Voluntaria, en donde la jurisdicción propiamente no existe: los
interesados, sin que haya promovida entre las partes una
cuestión contradictoria o controvertida, acuden ante el órgano
jurisdiccional para solicitarle su intervención por derivarse del
derecho objetivo la necesidad de ello .
Esto es, se gestionan actos únicamente con efectos declarativos,
no existe una controversia entre dos o más sujetos, sino que el
proceso involucra a una sola persona denominada “promovente”,
que acude ante el órgano jurisdiccional a que éste examine,
certifique o dé fe de algún acto.
En sentido estricto material no es jurisdicción : fundamentalmente
lo que se busca en ella es que se diga el derecho frente al
antagonista planteado ante el juzgador ; en modo alguno tiene
naturaleza jurisdiccional ya que carece de los elementos propios
de esta función pública:
 Del elemento objetivo que es el litigio propiamente dicho
sobre el que se ejerce dicha función, y
 De la finalidad que es la resolución de litigios, que en este
caso es inexistente.
De lo anteriormente señalado, podría considerarse jurisdicción
desde el punto de vista formal por la sola intervención del
órgano jurisdiccional, aunque desde el punto de vista material
estamos en presencia de una función administrativa .
 CONTENCIOSA*, que es la típica jurisdicción desde el punto
de vista material ya aquí si existe la controversia entre partes
que originará el desempeño de la función jurisdiccional ,
aunque desde el punto de vista formal fuera otro órgano del
estado, y no el poder judicial, quien desempeñara dicha
función jurisdiccional.
Ahora bien, dentro de la clasificación de la Jurisdicción, tenemos:
 Federal, que es la que corresponde al Poder Judicial de la
Federación;
 Local, que es la que corresponde a cada uno de los poderes
judiciales de los estados de la república y del Distrito Federal;
 Concurrente, en la que se permite intervenir en el mismo género
de asuntos al Poder Judicial de la Federación o al Poder Judicial
de la entidad federativa de que se trate (por tener competencia
territorial). En la jurisdicción concurrente, el actor decide si el
asunto lo somete al órgano judicial federal o al estatal, al
concederle a ambos la facultad de ejercer jurisdicción.

* El adjetivo calificativo “contenciosa” deriva de la expresión “contención” que, en


la acepción usada, significa lucha, batalla, combate, enfrentamiento, litigio,
controversia, pugna, y alude a la presencia necesaria de una situación concreta en
la que los sujetos reclaman hechos y derechos en posición de antagonismo.
Para Cipriano Gómez Lara, en el derecho mexicano la
jurisdicción concurrente es un fenómeno de atribución
competencial simultánea, a favor tanto de autoridades judiciales
federales como de autoridades judiciales locales ; el supuesto
está contemplado en el art. 104 de la Constitución Federal , el
que ordena que, tratándose de la aplicación de las leyes
federales y en caso que sólo afecten interés particular pueden
conocer, indistintamente y a elección del actor, los tribunales
comunes de los estados o del Distrito Federal, o bien los jueces
de distrito, que pertenecen al sistema judicial federal .
 Auxiliar, es aquella que prestan los tribunales de los estados
y del Distrito Federal a los órganos del Poder Judicial de la
Federación, cuando colaboran en el desempeño de las
funciones de estos.
Jurisdicción y competencia no son conceptos sinónimos: la jurisdicción es
una función del Estado, mientras que la competencia es el limite de esa
función, o sea, su ámbito de validez.
EN SENTIDO LATO, la competencia puede definirse como el
ámbito, la esfera o el campo dentro del cual un órgano de
autoridad puede desempeñar válidamente sus atribuciones y
funciones: es el texto legal el que determina, marca o limita
el ámbito competencial de cada órgano.
COMPETENCIA
EN SENTIDO ESTRICTO, desde el punto de vista procesal,
se puede afirmar que “La competencia es en realidad la
medida del poder o facultad otorgado a un órgano
jurisdiccional para entender de un determinado asunto; es
decir, es el ámbito, esfera o campo dentro de los cuales un
determinado órgano jurisdiccional puede desarrollar sus
funciones”
LA COMPETENCIA se encuentra íntimamente vinculada al estudio de la
jurisdicción, de tal manera que no puede haber Juez competente sin
jurisdicción; es la medida del poder perteneciente al juez; es una aplicación
del principio fundamental de la división del trabajo y por eso el poder se
divide, se distribuye entre los jueces. Todos los jueces ejercen jurisdicción,
pero cada uno de ellos tiene delimitado el campo en que la ejerce . La
jurisdicción es el poder perteneciente a todos los jueces en conjunto:
representa la función de aplicar el derecho, mientras que la competencia, es
la aptitud legal de ejercer dicha función con relación a un caso determinado,
pero no es posible hablar de competencia sin jurisdicción.
La competencia jurisdiccional puede tener 2 dimensiones o manifestaciones:
 Competencia Objetiva, que es la genuina competencia porque se refiere
al órgano jurisdiccional, con abstracción de quién sea su titular en un
determinado momento.
 Competencia Subjetiva, que no alude al órgano jurisdiccional sino a su
titular, o a las personas físicas encargadas del desempeño de las
funciones del órgano.
Tradicionalmente, se ha hablado de 4 criterios para determinar la
competencia objetiva:
Por materia, que surge como consecuencia de la complejidad y
especialización de la vida social moderna y se da en función de las normas
jurídicas sustantivas que deberán aplicarse para dirimir o solucionar la
controversia, conflicto o litigio, presentado a la consideración del órgano
respectivo.
Por grado: Este criterio presupone las instancias del proceso y trae
aparejada la cuestión relativa a la división jerárquica de los órganos que
desempeñan la función jurisdiccional; así, la primera instancia se lleva ante
los jueces de primer grado y la segunda, ante los jueces de apelación o de
segundo grado.
Por territorio: implica una división geográfica determinada por distintas
circunstancias y factores; para la organización judicial, en todos los Estados
de la Federación se hacen reagrupamientos de varios municipios, creando
circunscripciones territoriales que están fijadas en las leyes orgánicas de los
poderes judiciales respectivos, las cuales determinan el número de distritos,
sus denominaciones y los municipios que comprenden.
La competencia se determina en razón de la cercanía del órgano
judicial con el lugar en que se encuentra situado algún elemento
del proceso (personas u objetos). Aún y cuando la competencia es
indelegable es decir, las partes no la pueden dejar de lado, éste
tipo de competencia puede serlo por convenio expreso cuando se
trate de cuestiones del derecho privado, generalmente establecido
en una cláusula específica.
 Por cuantía o importancia del negocio: por el monto pecuniario en
el litigio se fijan límites de acuerdo a cantidades específicas para
que determinados juzgados conozcan de asuntos cuya suerte
principal se encuentre dentro de dichos límites.
 El Turno: criterio de afinación de la competencia que se presenta
cuando en el mismo distrito judicial existan 2 o más jueces que
tienen la misma competencia, tanto por materia, como por
territorio, grado y cuantía. Es un sistema de distribución de los
asuntos nuevos entre diversos órganos jurisdiccionales; por lo
regular, en razón del orden de presentación de dichos asuntos,
siendo que una oficialía de partes común es la que distribuirá los
asuntos nuevos entre los juzgados.
 La prevención: También es un criterio de afinación de la
competencia y se presenta cuando existen 2 o más tribunales que
son igualmente competentes para el conocimiento de algún
asunto: la prevención implica que el juez que primero conoce del
asunto es el que determina a su favor la competencia, excluyendo
a los restantes: significa la aplicación, en materia judicial, del
principio: “El que es primero en tiempo, es primero en Derecho”.
Por otra parte, tenemos otra clasificación de jurisdicción, que la
divide en:
 Propia que es la conferida por la ley a un determinado órgano de
acuerdo con su función.
 Delegada que es aquélla que se ejerce por encargo o comisión
de otra autoridad, como los exhortos que son comunicaciones
que se establecen entre dos autoridades del mismo grado
jerárquico y en las cuales una de ellas solicita o exhorta a la otra
para que realice determinada diligencia. La autoridad a quien se
encomienda dicha diligencia será la exhortada, y su función
únicamente se circunscribe a dicha encomienda.
 La forzosa es aquella que debe conocer única y exclusivamente
la autoridad, sin que pueda ser delegada o prorrogada a otra
autoridad; póngase como ejemplo al proceso de desafuero,
entendido como el juicio entablado de forma exclusiva por el
órgano legislativo contra un funcionario público que se encuentra
relacionado con la posible comisión de un delito.
 Prorrogable, la que se puede atribuir a un juez que no la
tiene, y se actualiza en el momento en el que las partes
deciden someterse a la competencia de un juez distinto a
aquél que debía conocer de la controversia. Lo que se
prorroga es la competencia, no la jurisdicción.
Así, el Estado, que tiene múltiples atribuciones tendientes a la
satisfacción de necesidades colectivas, es el que actúa a
través de sus órganos que son centros de atribuciones o
facultades y deberes; en el caso de la jurisdicción, los
órganos son los juzgados o tribunales cuyos titulares son
jueces o magistrados quienes tienen como fin tutelar los
derechos subjetivos públicos y privados. El órgano
especializado en declarar el derecho es el Poder Judicial.
PROCESO: Conjunto de actos del Estado como soberano, de las
partes interesadas y de los terceros ajenos a la relación
sustancial, actos todos que tienden a la aplicación de una ley
general a un caso concreto controvertidos para solucionarlo y/o
dirimirlo. Es la forma heterocompositiva de resolución de un litigio;
es decir, la solución imparcial a cargo de un órgano de autoridad
del Estado: el juzgador que interviene a instancia de una de las
partes y cuya autoridad deriva del imperio del propio Estado y de la
fuerza de ley.
Es un conjunto de actos relacionados entre si por la unidad del
efecto jurídico final, por medio de los cuales se constituye,
desarrolla y termina la relación jurídica que se establece entre el
juzgador, las partes y las demás personas que en ella intervienen y
que tienen como finalidad, dar solución al litigio planteado a través
de una decisión del juzgador sustentada en el derecho aplicable,
basada en los hechos afirmados y probados.
Para Humberto Briseño Sierra, el proceso jurisdiccional, es el “…
conjunto de actos desenvueltos por el órgano estatal jurisdiccional
por las partes interesadas y por los terceros ajenos a la relación
sustancial, actos todos que están proyectados y que convergen en
el acto final de aplicación estatal de una ley general al caso
concreto controvertido, para dirimirlo o para solucionarlo en el acto
por el cual se sentencia”. El proceso puede tener tres finalidades
respecto del derecho sustantivo:
 Asegurarlo de modo provisional, a través de las medidas
cautelares;
 Declararlo a través de una sentencia, para aquellos casos en
que exista incertidumbre o debate sobre su interpretación; y
 Realizarlo al dar cumplimiento a una sentencia constitutiva (por
medio de la cual se crea una nueva situación jurídica o se
modifica una anterior), o al ejecutar una sentencia de condena
(que es la que ordena una conducta determinada a la parte
demandada o inculpada).
Así, el proceso constituye la vía jurídica más desarrollada para dar
solución institucional al litigio, entendiendo a éste como una
especie de la fenomenología de la conflictiva social y definido
como el conflicto de intereses jurídicamente calificado existente
entre dos o más sujetos de derecho.
PRINCIPIOS DEL PROCESO.

Para Andrés de la Oliva, los principios procesales son las ideas y


reglas que constituyen puntos de partida para la construcción de
los instrumentos esenciales de la función jurisdiccional, en el
sentido de originarlos (de ahí el término de principio); son los
criterios inspiradores de la capacidad de decisión y de influencia
del órgano jurisdiccional y de las partes en el nacimiento del
proceso, en su objeto, en su desenvolvimiento y en su terminación.
Ovalle Favela define los principios procesales como “…aquellos
criterios o ideas fundamentales, contenidos en forma explícita o
implícita en el ordenamiento jurídico, que señalan las
características más importantes del derecho procesal en un lugar
determinado, así como las de sus diferentes sectores y que
orientan el desarrollo de la actividad procesal.”
Respecto de los principios, algunos son aplicables a todos los
procesos (igualdad, contradicción, economía procesal, probidad,
preclusión, inmediación, publicidad, etc.), y otros son específicos
para cada tipo de proceso, como el publicístico, el dispositivo y el de
justicia social.
DE IGUALDAD DE LAS PARTES. Principio jurídico natural del
proceso según el cual las partes deben ser tratados de forma
igualitaria, deben tener las mismas oportunidades de actuación
dentro del proceso sin que ninguno se encuentre en situación de
inferioridad: deben disponer de iguales medios para defender en el
proceso sus respectivas posiciones; deben ser titulares de derechos
procesales semejantes, de ahí que parte de la doctrina llame a este
principio de «igualdad de armas». Lo que se persigue con este
principio es evitar suspicacias sobre las proposiciones de las partes;
para la eficiencia de la contradicción solo se requiere que se le haga
del conocimiento a la parte la providencia respectiva, puesto que con
ello se le da la posibilidad de combatirla.
A este respecto, se considera que el principio de contradicción deba
tener íntima relación con el PRINCIPIO DE PUBLICIDAD, el cual
consiste en dar a conocer las actuaciones realizadas en el proceso
por el funcionario judicial.
El Principio de ECONOMÍA PROCESAL se define como la aplicación
de un criterio utilitario en la realización empírica del proceso con el
menor desgaste posible de la actividad jurisdiccional, lo que significa
obtener el resultado más óptimo en el menor tiempo, con el mínimo
esfuerzo y los menores costos; se logra concentrando las cuestiones
debatidas en las menores actuaciones posibles, incluso lo referente a
la prueba, y respetando los plazos legalmente fijados.
Los puntos del criterio utilitario se refieren a la duración del proceso y
al costo de la actividad jurisdiccional: el proceso tiene una dimensión
temporal y significa un gasto para el Estado, tratando únicamente de
regularlo en forma tal que no conspiren contra el justiciable.
DE PROBIDAD O DE LEALTAD PROCESAL. El vocablo tiene su
origen en la voz probitas y significa bondad, rectitud de ánimo,
hombría de bien, integridad y honradez en el obrar; es sinónimo de
honorabilidad (Diccionario de la Lengua Española). La probidad, en
términos generales, es la rectitud y moralidad a que tiene que
ajustarse la conducta humana.
Este principio considera que el proceso es una institución de buena
fe y por tanto los jueces deben velar por que no sea utilizada por
las partes para obtener fines ilegales, fraudulentos o dolosos o
alegar hechos contrarios a la realidad, así como tampoco utilizar
medios que tiendan a entorpecer la buena marcha del
procedimiento.
DE PRECLUSIÓN, vocablo típicamente jurídico, íntimamente ligado con
los aspectos temporales del proceso, cuyo significado alude a la sanción
que trae consigo el desaprovechamiento de los términos por la parte
interesada. Cipriano Gómez Lara señala que «…es la pérdida de los
derechos procesales por no haberlos ejercido en la oportunidad que la
ley da para ello…así, precluye un derecho al no contestarse una
demanda, al no ofrecerse pruebas, al no impugnarse una resolución,
dentro de los plazos y oportunidad que la ley procesal fija para ello.
La regla es que si no ejercita el derecho dentro del término legal que le
ha sido fijado, se extingue ese derecho en perjuicio del omiso; es la
pérdida de una facultad procesal.
Al respecto, Luis Guillermo Torres Díaz apunta que «La finalidad
inmediata del proceso es la resolución del litigio mediante la sentencia…
en vista de lo cual se hace imperativo sancionar la inactividad procesal
imputable a las partes mediante la preclusión y la caducidad.
Ambas son instituciones que tienen la misma naturaleza y esencia, la única
diferencia entre ellas es de grado puesto que la caducidad podría
considerarse una preclusión máxima; es decir, si la preclusión es la pérdida
de un derecho procesal, la CADUCIDAD es la pérdida de todos los
derechos procesales a causa de la inactividad de las partes, inactividad
total y bilateral que opera una vez que transcurre determinado plazo que la
ley señala.
Cabe aclarar que, así como la inactividad de una o de ambas partes durante
el plazo que se les señaló para realizar determinado acto procesal trae
consigo la preclusión o pérdida del derecho que tuvieron para llevar a cabo
dicho acto, la inactividad procesal de ambas partes (ya no respecto de un
acto procesal determinado sino de todo el proceso) durante un periodo
prolongado, tiene como consecuencia la caducidad de la instancia o
extinción anticipada del proceso, de tal modo que quedan sin efecto legal
todos los actos procesales realizados en la instancia de que se trate. Así, La
caducidad es una sanción a la inactividad procesal de las partes reconocida
en la legislación como una forma de extinción del proceso sin sentencia, por
falta de promoción de las partes que impliquen impulso al proceso.
Prescripción (del latín praescriptio), en derecho, consiste en la formalización de
una situación de hecho por el paso del tiempo, lo que produce la adquisición
de un derecho o la extinción de una obligación; esto quiere decir que el
derecho a desarrollar una determinada acción puede extinguirse cuando pasa
un cierto periodo de tiempo, produciéndose la prescripción.
En síntesis:
 La prescripción ataca la acción y la hace ineficaz.
 La preclusión sanciona la falta de oportunidad de un acto procesal.
 La caducidad sanciona la inactividad procesal total.
Por lo que toca a las características comunes a todos los procesos, de acuerdo
con Gómez Lara, tenemos:
 La existencia del Litigio, el cual es el contenido de todo proceso: incluso en
el proceso penal encontramos el conflicto entre la pretensión punitiva del
Estado, a través de la acusación, frente a la resistencia del procesado y los
órganos de la defensa.
 La resolución de los litigios, lo cual es la finalidad de todo proceso.
 La existencia del denominado triángulo procesal: juez o tribunal las
partes contrapuestas entre sí y supeditadas a aquel.
 La organización judicial con sus jerarquías y competencias, como
presupuesto de todo proceso.
 La secuencia u órdenes de etapas, desde su inicio hasta su fin, que no
son necesariamente idénticas de un tipo procesal a otro, pero lo que si
es común es que existen al menos dos grandes etapas en el proceso: la
de instrucción y de juicio.
 En todo proceso hay un principio de impugnación (medio de combatir las
resoluciones judiciales incorrectas, ilegales, equivocadas, irregulares,
injustas o no apegadas a derecho), siendo que las finalidades de todo
medio de impugnación son:
 Confirmación de la resolución.
 Modificación de ésta (se cambia sustancialmente su contenido o
alcance), o
 Su Revocación (se deja sin efecto, insubsistente).
PARTES EN UN PROCESO CIVIL
En todo proceso existen sujetos procesales y que por éstos se puede
entender a toda persona que tiene participación dentro de un proceso, ya
sea de carácter principal, eventual o accesorio; sin embargo, no todos los
sujetos procesales o intervinientes en general tienen el carácter de parte,
pero es indiscutible que las partes u otros intervinientes eventuales, en su
caso, sí tienen el carácter de sujeto procesal; por ejemplo, el órgano
jurisdiccional es un sujeto procesal indispensable o principal, pero no tiene
carácter de parte, como tampoco lo tiene un sujeto que pueda intervenir
eventualmente con el carácter de auxiliar, testigo, perito o abogado.
Los denominados sujetos procesales suelen ser clasificados desde
diferentes puntos de vista, pudiendo encontrarse denominaciones como las
siguientes:
Principales o indispensables: actor, demandado y el órgano de la
jurisdicción.
Eventuales: como los terceros interesados o llamados al juicio.
Necesarios: en función de los fines del proceso como los testigos,
peritos e intérpretes, o bien los órganos de representación, autorización
o asistencia de incapaces (M.P., padres, tutores, curadores, psicólogos,
trabajadores sociales, etc.).
Auxiliares: como suele considerarse al personal de los órganos
jurisdiccionales.
Desde una perspectiva general, se dice que parte, proviene de la raíz
latina pars, partis que significa porción de un todo y sinónimo de
fracción, fragmento, partícula o pieza, lo que lleva a la comprensión de
que en el todo de la relación jurídica procesal existen elementos,
factores o componentes que mantienen un vínculo en función de la
finalidad del proceso; estos elementos son de carácter personal y se
traducen en las partes. Esta idea suele coincidir con la idea de
relacionar la existencia de partes con la noción de derechos,
obligaciones o pretensiones de carácter subjetivo y derivadas a su vez
de relaciones jurídicas generalmente contractuales
 EL ACTOR O DEMANDANTE, es la persona que se constituye
ante el órgano jurisdiccional a promover un Juicio mediante la
presentación de su demanda en la cual hace valer algún interés
o pretensión deducida en contra de la parte demandada.
 LA PARTE DEMANDADA. Es la persona contra la cual se
encamina el procedimiento con base en el interés que en su
contra tiene la parte actora, y que se contiene en la propia
demanda.
 EL JUEZ. Es la persona facultada por el Estado que se encarga
de la administración de justicia durante el proceso, es el titular
de un órgano jurisdiccional encargado del despacho de los
asuntos que le son turnados. Debe dirigir y resolver el litigio de
manera imparcial, mediante la aplicación de una Ley General
aplicable al caso concreto controvertido.
 EL MINISTERIO PÚBLICO. Institución que depende del
Poder Ejecutivo, tanto en el ámbito federal como en el
de los Estados o del Distrito Federal y que puede
comparecer con el carácter de parte durante el
Proceso Civil, ya sea en defensa de los intereses del
Estado o como representante de intereses sociales o
del interés público. Cabe señalar que le pueden dar
vista para conocer de posibles delitos que se cometan
durante el desarrollo de un procedimiento, sin que
estos determinen la integración de algún delito, ya que
no tienen la función de Investigador.
 LOS TERCEROS. En derecho, se da el nombre de
tercero a toda persona ajena a una relación jurídica
determinada; traído el concepto al campo procesal,
fácil es afirmar que tercero es quien no es parte de un
proceso. El elemento diferenciador (el interés jurídico)
hace que, al hablar de terceros, el concepto deba
referirse a todos aquellos que en mayor o menor
medida están interesados en el resultado del litigio
porque los afecta actual o potencialmente. Así, son
personas distintas a las partes que pueden intervenir
en el juicio en virtud de un interés que se deduce de
éste, ya que pueden resultar perjudicadas por la
sentencia que se dicte.
 LOS TESTIGOS. Personas ajenas a la relación sustancial
establecida entre las partes que litigan, cuyo papel es
rendir declaración en un Juicio sobre hechos de los que
tienen conocimiento directo por haberlos percibido a
través de sus sentidos, hechos que deben tener relación
con los puntos controvertidos en el juicio y deben ser
probados por las partes, a cuyo fin tiende su intervención.
 LOS PERITOS. Son personas expertas en alguna
materia; su tarea es colaborar con el Juez o Magistrado
que conozca del asunto, a efecto de orientar su criterio
respecto de algunos datos aportados por las partes y que
requieren de conocimientos especiales de su dominio.
Estos auxiliares del juzgador elaboran un dictamen al que
se conoce como peritaje o dictamen pericial, que es útil
para resolver el asunto.
 LOS ABOGADOS. Son Profesionales del Derecho
que brindan asesoría y representación a sus clientes
en cuestiones jurídicas. Su función principal es la de
asistirlos para emprender acciones legales,
defenderlos ante los Tribunales y asesorarlos en todo
tipo de negociaciones. En los Juicios Civiles resulta
indispensable la participación de estos profesionistas,
ya sean particulares o defensores de oficio, en virtud
de que en esta materia las formalidades pueden ser
determinantes y el Juez no puede suplir deficiencias,
salvo en materia familiar.
ETAPAS QUE INTEGRAN EL PROCESO
En principio, el proceso puede dividirse en dos grandes etapas:

 De instrucción. En esta gran etapa, siguiendo a Gómez Lara, se


comprenden todos los actos procesales del tribunal, de las partes
y de los terceros ajenos a la relación sustancial con el objetivo de
instruir al juzgador, de hacerle del conocimiento el contenido del
litigio a efecto de que cuente con todos los elementos para que
realice el pronunciamiento que lo resuelva.

 De juicio. En esta etapa se desenvuelve la actividad del órgano


jurisdiccional que consiste en la valoración de todo lo actuado en
la secuela procesal y con base en ello, emita la sentencia que
resuelve el conflicto de interés planteado por las partes.
Sin embargo, didácticamente se considera que la relación
jurídica procesal se desarrolla a través de diversas etapas
procesales que son cada una de las subdivisiones que
presentan los procesos y en cuyo transcurso tendrán lugar
determinados actos y hechos jurídicos materiales a cargo
tanto de las partes como del juzgador.
• EXPOSITIVA, POSTULATORIA O POLÉMICA
• PROBATORIA
• PRECONCLUSIVA (ALEGATOS)
• CONCLUSIVA (SENTENCIA O DE JUICIO)
• IMPUGNATIVA (RECURSOS)
• EJECUTIVA
ETAPA EXPOSITIVA, POSTULATORIA O POLÉMICA

Es aquella durante la cual las partes exponen o


formulan sus pretensiones o defensas y en materia
civil, se integra por la demanda, el emplazamiento y
su traslado, la contestación y, en su caso, la
reconvención interpuesta por el demandado, su
contestación por el actor, las vistas y la citación a la
Audiencia Previa y de Conciliación.
ETAPA PROBATORIA

Que tiene por objeto la aportación por las partes de todos


los medios de prueba con que cuenten a efecto de
acreditar lo establecido por cada una de ellas en la etapa
postulatoria, con el objetivo de proporcionar al juzgador
los elementos de convicción para decidir a quien le asiste
la razón jurídica. Esta etapa se integra por cuatro fases:

 Ofrecimiento.
 Admisión.
 Preparación.
 Desahogo.
MEDIOS DE PRUEBA
 CONFESIONAL
 INSTRUMENTAL DE ACTUACIONES
 DOCUMENTAL PÚBLICA
 DOCUMENTAL PRIVADA
PERICIAL
 RECONOCIMIENTO O INSPECCIÓN JUDICIAL
 TESTIMONIAL
 FOTOGRAFÍAS, COPIAS FOTOSTÁTICAS Y DEMÁS
ELEMENTOS (DERIVADOS DEL DESARROLLO
TECNOLÓGICO)
 PRESUNCIONES (LEGAL Y HUMANA)
ETAPA PRECONCLUSIVA

Es considerada la última de las etapas del periodo de


instrucción y en ella las partes realizan la argumentación
lógico-jurídica respecto de lo suscitado en la secuela
procesal, a través de la exposición de sus alegatos o
conclusiones; esto es, fundamentalmente relacionan sus
respectivos planteamiento con el resultado del desahogo
de los medios de prueba, señalando cómo soportan los
extremos planteados en sus respectivas pretensiones o
defensas de tal manera que con ello demuestran que la
razón jurídica les asiste y por ello la resolución judicial les
debe ser favorable.
RESOLUTIVA O DE JUICIO

En esta etapa tiene verificativo la función primordial del


juzgador ya que en ella y luego de la valoración de todo lo
suscitado en la secuela procesal, se emite la sentencia
que dirime la controversia planteada.

En efecto, aquí se materializa la función jurisdiccional al


resolver el litigio aplicando una ley general al caso
concreto controvertido bajo la aplicación de la lógica
formal
IMPUGNATIVA

En esta etapa, cuando alguna de las partes considere que


la decisión judicial les causa agravio porque ha sido
dictada de forma incorrecta, ilegal, equivocada o irregular,
o bien pronunciada sin apego a derecho, el inconforme
puede interponer los recursos que las leyes previenen a
efecto de que se efectúe el reexamen o revisión del acto
procesal impugnado, ya sea por el mismo órgano
jurisdiccional o por su superior jerárquico y este nuevo
examen puede confirmar, modificar o revocar la señalada
resolución.
ETAPA EJECUTIVA

En el supuesto de no interposición de recursos, o de la


improcedencia legal del recurso interpuesto, el interesado
promueve para que se declare que la sentencia se convierta en
verdad legal, en cosa juzgada o en sentencia ejecutoriada, que son
expresiones sinónimas.

Se puede prescindir de esta etapa cuando las partes formulen un


convenio que se eleve a categoría de fuente de obligaciones, como
si se trata de sentencia ejecutoria.

En todo caso, es factible que el perdedor en la contienda judicial


acate voluntariamente el contenido de la sentencia o bien que ello
no ocurra, en cuyo caso tendrá que implementarse el cumplimiento
forzoso de la sentencia mediante actos coactivos del juzgador.

También podría gustarte