suelta lágrimas producidas por la emoción, Jesús no se está refiriendo a cualquier lágrima humana, sino a las de ciertas personas. No todo el que sufre será consolado, sino sólo aquellos que encajan en la descripción del maestro. Los que lloran ¿Quiénes?
•Se refiere a quienes carecen la alegría propia
del mundo y lloran al contemplar los males que esclavizan al pueblo por culpa de los pecados de sus moradores. •Son los que se preocupan y sufren por la maldad del mundo; viven doloridos ante el dolor que causa tanto pecado y rebelión contra Dios. Los que lloran ¿Quiénes?
•Su llanto es de carácter espiritual. Lo único que
puede proporcionarles consuelo es la salvación gratuita que trae el Mesías. •Son los que se afligen porque en el mundo, Dios no es tomado en cuenta. •Se apenan porque la sociedad se muestra tan cerrada a los valores del Reino de Dios. El llanto Cristiano
Por el pecado Por el pecado
personal a su alrededor El llanto Cristiano Por el pecado personal
•Al contemplarnos a nosotros mismos tal cual somos
frente a la santidad de Dios, no tenemos más remedio que reconocer nuestra incapacidad moral e impotencia para cambiar las cosas mediante nuestro propio poder. •Es abrumadora la incoherencia moral en el ser humano. Esto debe llevarnos a reconocerla y clamar por ayuda al Señor. (Rom. 7:15,18) •El llanto producido por el arrepentimiento es algo positivo que nos ayuda a buscar la paz con Dios. El llanto Cristiano Por el pecado a su alrededor
•El cristiano verdadero no sólo llora por sus pecados,
sino también por los de sus semejantes. •Conoce el ideal de Cristo pero también la cruel realidad de la maldad del mundo. •Reconoce que todo se debe a lo mismo: a esa necia actitud humana que tanto repugna a Dios y que la Biblia llama pecado. •Llora cuando el mundo ríe. Llora de tristeza ante la falta de fe, amor, humildad y esperanza. Aplicaciones “… ellos serán consolados”
•Practiquemos a menudo la oración reflexiva y el
examen de nuestra consciencia. •Practiquemos la disciplina de la confesión de pecados regularmente. Confesemos no sólo acciones y palabras, sino también actitudes, motivaciones, deseos, etc. (lo que no se ve ni escucha). •Seamos conscientes de que llorar por nuestra condición de pecador y la de nuestros hermanos, nos lleva al arrepentimiento sincero y que nos conduce hasta los pies del Maestro. Aplicaciones “… ellos serán consolados”
•Recibamos con gozo la verdad del evangelio: que la
sangre derramada por Jesucristo nos limpia de todo pecado y nos abre las puertas de la felicidad eterna. •No nos dejemos seducir por la falsa alegría del mundo. Avivemos nuestra esperanza de que al regreso del Señor, la maldad será erradicada de la tierra y toda lágrima será enjugada para siempre. Habrá nuevos cielos y nueva tierra en los cuales morará la justicia de Dios.