• Busca destruir las plagas como sucede en la naturaleza, usando
depredadores que maten a quienes dañan los cultivos; por ejemplo, las mariquitas reducen el número de pulgones. Este método de manejo también involucra a los parasitoides, patógenos y herbívoros. Puede aplicarse aumentando la población de depredadores en su hábitat primario o importando especies desde otras regiones. La explotación de las propiedades alelopáticas y de eliminación de plagas también es útil. PESE A SUS VENTAJAS EL MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS TAMBIÉN PRESENTA DESVENTAJAS:
• Los depredadores importados pueden no realizar la tarea que
se buscaba que hicieran; • Los animales importados pueden convertirse en plaga ellos mismos si no hay enemigos naturales que controlen su población en este nuevo entorno; • La reducción de población de ciertas especies puede atraer plagas secundarias. • El manejo integrado de plagas en su variante de control biológico emplea soluciones innovadoras. Por ejemplo, la empresa israelí BioBee erradica con éxito las moscas de la fruta mediterránea mediante insectos estériles. Neutraliza a los machos y los libera en la naturaleza. Su apareamiento con hembras salvajes fértiles no da lugar a descendencia. Esta solución es extremadamente útil para los propietarios de huertos y viñedos en Israel. En el lado contrario, en Argentina, el manejo de control biológico se usa mayoritariamente de forma experimental, debido a la falta de tecnología que produzca biocontroladores a gran escala y la falta de conocimiento sobre un uso adecuado de insumos en el campo. • Los biopesticidas son repelentes naturales que contienen extractos o aceites de plantas. Un remedio clásico para combatir las polillas es el aroma de lavanda. CONTROL FISICO/MECÁNICO
• Esta opción de manejo integrado de plagas consiste en:
• Labranza para destruir malas hierbas o huevos/larvas; • Cobertura de malas hierbas para evitar que sigan creciendo, privándolas de luz solar; • Eliminación manual; • Vaporización de suelos para eliminar bacterias patógenas que causan las enfermedades de las plantas; • Construcción de pantallas contra aves e insectos; • Construcción de vallas y/o colocación de trampas como barrera contra animales salvajes; • Colocación de espantapájaros en los campos. • Aunque estas soluciones pueden dar resultados, son costosas. CONTROL CULTURAL
• El manejo integrado de plagas mediante control cultural se basa en:
• Rotación de cultivos, cuando los cultivos alternativos no son objetivo de la plaga existente. Por ejemplo: los roedores atacan cultivos de granos; las aves y caracoles, a las fresas; los escarabajos de la patata, a patatas, tomates y berenjenas. Si el hábitat no es propicio y no tienen alimento, las plagas se marcharán a otro lugar. •Cambios en la irrigación. Demasiada agua provoca enfermedades en las raíces de las plantas.
•Conservación de plantas, o cuarentena, cuando un cultivo se aísla hasta
que está lo suficientemente maduro para resistir la amenaza de las plagas. CONTROL QUÍMICO
El manejo integrado de plagas en su variante de control químico
implica el uso de plaguicidas cuando el resto de métodos no pueden combatir eficazmente la invasión o cuando su aplicación es imposible debido a determinadas circunstancias. Es clave: • Minimizar el daño en organismos no objetivo (humanos, animales y cultivos); • Asegurar un efecto duradero sin que las plagas desarrollen resistencia; • Tratar sólo las áreas necesarias, no todo el campo.