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Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y

entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del


Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria
Bienvenidos a nuestro final de la serie:
Señales de los tiempos del fin.
Estamos en las festividades de Otoño y ya hemos ensayado el día de la aclamación, el día de escuchar la teruáh,
el día de la alarma, porque se tocará el shofar (trompeta) y ocurrirá la redención final, sin embargo antes de ello
seguiremos viendo las señales que habló Yeshúa antes de su regreso majestuoso.

El tema de temas de estos últimos años y décadas es definitivamente el regreso de Mashíaj cuando aparezca en
los cielos, ya hemos hablado sobre señales que son evidentes en la tierra, en sus habitantes y también en los
astros, ya también hemos desmentido el sistema tradicional judío-cristiano dispensacionalista basado en la
psicosis del anticristo, la gran tribulación y todas esas doctrinas de la última semana de Daniel.

Lo que proponemos es dar una alternativa diferente a la ya conocida por todo el mundo cristiano y mesiánico,
una alternativa que enumera las señales dichas por Yeshúa.

Éstas como lo hemos mencionado abarcan dos etapas, los eventos del primer siglo con la destrucción de
Yerushaláyim y el juicio o castigo al pueblo el cual determinó Yeshúa y los eventos después de casi dos mil años
sobre el regreso de Yeshúa.
Así en clases pasadas hablamos de:
Persecuciones a los discípulos, la buena nueva a los israelitas en todo el mundo conocido en el primer siglo,
persecuciones y muertes de los apóstoles, huida a las montañas por el asedio romano, la abominación desoladora
romana y finalmente la destrucción de Jerusalén y la muerte de muchos así como el fin del liderazgo judío
fariseo.
En seguida hemos visto un periodo de tiempo profético de casi dos mil años y que están detallados en el libro de
Apocalipsis, hechos desarrollados en la historia de las naciones y que concluirán con el regreso de Yeshúa, los
cuales Yeshúa menciona en el monte de los olivos de forma clara y son:

Guerras, pestes, hambruna, pérdida del amor y por ende aumento de la iniquidad, violencia, falsos profetas,
falsos mesías, tiempos como los de Noé en donde no había justicia, sobre abundaba la maldad, había
multiplicación de la humanidad, había intervención angelical maligna, inmoralidad también como en Sodoma y
Gomorra, habló también de señales geofísicas como terremotos, señales en la luna y el sol, caída de meteoritos
que aumentan actualmente y finalmente la última señal que será, la señal en definitiva de su aparición.

Esta señal es la última y la que esperamos sea vista y reconocida por el mundo entero.
De esta señal hasta hoy especulamos, cuando Yeshúa menciona que se verá la señal del hijo del hombre en el cielo,
en realidad no menciona qué señal específica y cómo se llevará a cabo.

La tradición cristiana predice que será una cruz en el cielo literalmente, otros dicen que una alineación planetaria
formando una cruz, otros dicen que fue una nube literal en el año 1963, otros aseguran que verán a la misma
imagen del Jesús católico pintado en los cuadros, otros creen que verán su rostro, otros dicen que ya regresó en
1917 pero que como resucitó en espíritu sólo se puede ver con ojos espirituales, otros dicen que en realidad será
una nave extraterrestre, otros que será la estrella hexagrama relacionada a la estrella de Jacob “maguen David”,
otros que será un gran cordero en el cielo pintado, otros que un león, también se dice que pueden ser dos soles,
otros el planeta X, alguien hace poco dijo que era el cometa ISON “I Son”, y otros un evento cósmico
inigualable, todos proponen y aseguran sus posturas.

Las especulaciones ciertamente son porque en efecto no hay nada claro sobre el tema a simple vista, Yeshúa
dice: verán la señal del hijo del hombre, luego habrá lamento y enseguida aparecerá, hay tres pasos en esta frase,
aparece la señal (ot), luego los habitantes se lamentan y en seguida desciende.

Algunos creen que simplemente su aparición es la señal, pero sin embargo el texto diría: aparecerá él que es la
señal descendiendo, o alga parecido.
¿Qué dicen las Escrituras sobre su señal (ot) y sobre el hijo de Adám?

Recordemos primero que Yeshúa lleva el título de ben Adám, aún él siendo Ben Elión, Yeshúa se hizo carne
naciendo de una mujer, realmente no es simiente de Adám sino como la profecía lo dice, simiente de la mujer y
aunque la mujer no tiene simiente lo que el texto se refiere es que nacería de mujer aún siendo un ser celestial
enviado por el Padre desde los cielos.

Del libro de Daniel Yeshúa toma el título hijo de Adám (hijo de hombre) Daniel en una visión ve nada más y
nada menos que al Mesías siendo empoderado delante del Padre, siendo reconocido, siendo heredero del reino,
esta escena es la misma de Apocalipsis cuando él sube y ofrece su corbán en los cielos, Yeshúa en el plano de la
redención debió presentarse como ben Adám para hacer un corbán y ser aceptable sin faltas.

Este “simple texto” y “simple título” nos puede dar una referencia para poder saber algo más sobre la ot (señal)
de él.

Esta ot (señal) en las Escrituras está relacionada también simplemente a las otot “señales” que el Padre dio
anticipadamente, y estas están en los cielos, en todos los astros.
Ya sabemos que el Padre puso señales en el cielo.

Gen 1:14 Dijo luego Elohim: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y
sirvan de señales para las estaciones (moedim), para días y años, Gen 1:15 y sean por lumbreras en la expansión
de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así.

Ya hemos hablado antes de este tema pero lo retomaremos un poco más.


En las Escrituras vemos señales que el Eterno ha puesto en los cielos, simplemente la luna es una ot (señal) que nos
dirige en las festividades, la ot debe mostrarse desde oriente hasta occidente de tal manera que todo el mundo la puede
ver en el mismo día, el sol día a día contando los días de la semana, las estaciones llevándonos por el ciclo de la
siembra y la cosecha, y la traslación tanto de la tierra en el sol como el sistema solar en la galaxia anunciándonos los
tiempos y edades.

Hemos hablado de los eclipses en ocasiones pasadas, ellos han sido una señal no sólo para Israel sino para todas
las naciones, hemos visto juicios y castigos cuando aparecen estos en momento específicos de la profecía, justo
ahora estamos contando próximamente la segunda luna roja de 4 que habrá en las festividades, la primera trajo
una señal de muerte y ocurrió, uno de los brazos de la bestia en medio Oriente provocó una guerra que trajo más
de dos mil muertos, una operación de la maldad y de aquel que vino a matar, hurtar y destruir.
Los próximos eventos veremos qué nos anuncian y qué ocurre finalmente.

Tenemos otro tipo de otot (señales) en los cielos, y estas son las constelaciones y las conjunciones, éstas son
reconocidas en las Escrituras como señales que anuncian algo, recordemos que el Creador puso señales, incluso
la historia de la redención en los cielos, pero la humanidad se corrompió con esa sabiduría y terminó dando culto
a los astros, lo cual se le denomina tradicionalmente como astrología, aunque el estudio de los astros podría estar
bien enfocado, la astrología hoy día está asociada al estudio de la influencia que tienen los astros en la vida del
hombre y no necesariamente al estudio de los astros como señales desde el principio.

Antes de avanzar, para aquellos que estén sospechando que hablaremos de astrología y crean que estemos
cayendo en idolatría no se me adelanten, nadie aquí hablará de la influencia de los astros en sus vidas sino de las
señales bíblicas de los astros en los eventos proféticos, tales como los eclipses y las conjunciones.

Sabemos de antemano lo que dice la ley, la toráh, y aunque algunos ya invalidaron la toráh (ley) aquí decimos
que este aspecto con los astros sigue siendo una prohibición para efecto de saber qué influencia tendrá un astro
en cada uno de nosotros.
El culto a los astros prohibido
Deu 4:19 No sea que alces tus ojos al cielo, y viendo el sol y la luna y las estrellas, y todo
el ejército del cielo, seas impulsado, y te inclines a ellos y les sirvas; porque YHVH tu
Elohim los ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos.

Astrología
f. Ciencia que pretende conocer y estudiar la influencia de los astros en el destino de los hombres y pronosticar, por la
posición y aspecto de aquellos, los sucesos terrestres.
Diccionario Enciclopédico Vox 1. © 2009 Larousse Editorial, S.L.

Astrología (astɾolo'xia)
sustantivo femenino estudio de la ubicación y el movimiento de los cuerpos celestes como una forma de descifrar el
destino del hombre.

En la serie ángeles caídos vimos cómo estos seres entregaron este conocimiento al hombre y el hombre les rindió culto,
investigaron la influencia en ellos y se dejaron guiar bajo su signo y no bajo la voluntad del Eterno. Este conocimiento
fue prohibido por el mal uso de los misterio revelados
El Mazzarot bíblico
Job 38:31 ¿Podrás tú atar los lazos de las Pléyades, O desatarás las ligaduras de Orión?
38:32 ¿Sacarás tú a su tiempo las constelaciones de los cielos, O guiarás a la Osa Mayor
con sus hijos? 38:33 ¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos? ¿Dispondrás tú de su
potestad en la tierra?
H4216 ‫ ַמּז ָָרה‬Mazzará apar. de H5144 en el sentido de distinción; alguna constelación
notoria (solo en plur.), tal vez colect. zodíaco:-Osa Mayor. Compárese con H4208.

2 reyes 23:5 Y quitó a los sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que quemasen
incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a
los que quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, y a los signos del zodíaco, y a todo el ejército de
los cielos.

H4208 ‫ ַמ ָּזלָה‬mazzalá apar. de H5140 en el sentido de llover; constelación, i.e. signo del zodíaco (tal vez
porque afecta el clima):-signos del zodíaco. Compárese con H4216.
Cabe mencionar que la palabra para cielos en hebreo, shamáyim, expresa no necesariamente las nubes o el cielo
azul sino el firmamento también y los lugares superiores, por ello vemos en la Escritura que Elohim habitan en
los cielos y de él son los cielos de los cielos.

La raíz para shamáyim es shamé:


H8064 ‫מיִם‬ ַ ‫ׁש‬
ָ shamáyim
dual de singular que no se usa ‫מה‬ ֶ ‫ׁש‬
ָ shamé; de una raíz que no se usa que
significa ser elevado; firmamento (como arriba; el dual tal vez alude al arco
visible en el que se mueven las nubes, así como al éter más alto en donde
giran los cuerpos celestes):-aire, cielo, contemplador (de las estrellas),
nube.
Hemos citado también antes este texto revelador que habla de cómo shamáyim habla de
la majestad de Elohim , el firmamento cuenta lo hecho:

1 ... Los cielos cuentan la majestad de Elohim; y el firmamento anuncia la obra de sus
manos. 2 Día tras día emite palabra a otro; . noche tras noche declara sabiduría 3 No hay
lenguaje, ni palabras, ni es oída su voz (no necesita hablarlo porque ahí está anunciado). 4 salió su
voz por toda la tierra, sus palabras llegan hasta los confines del mundo ...
- SALMO 19: 1-4
Señales del clima Vs otot del tiempo profético.
Mat 16:1 Los fariseos y los saduceos fueron a ver a Yeshúa y, para tenderle una trampa, le
pidieron que hiciera alguna (ot) señal milagrosa que probara que él venía de parte de Elohim.
Mat 16:2 Pero Yeshúa les contestó: "Por la tarde dicen ustedes: 'Va a hacer buen tiempo,
porque el cielo está rojo'; Mat 16:3 y por la mañana dicen: 'Hoy va a hacer mal tiempo,
porque el cielo está rojo y nublado.' Pues si ustedes saben interpretar también el aspecto del
cielo, ¿cómo es que no saben interpretar las señales de estos tiempos?

Yeshúa es confrontado por los fariseos en su proceso de análisis para saber si era el Mesías,
los fariseos esperaban milagros relacionados a los que se veían en la época de los profetas, y
aunque Yeshúa hacía muchos milagros, los fariseos simplemente se negaban a creer, Yeshúa
les dice que sus obran dan testimonio de él y que había señales de los tiempos que le
anunciaban, además de que les hablaría de la señal de su resurrección, que era la señal de
Jonás, que al tercer día saldría de entre los muertos.
Otot (señales)
Gen 1:14 Dijo luego Elohim: Haya lumbreras en la expansión de los cielos
para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días
y años,

H226 ‫ אֹות‬ot
probablemente de H225 (en el sentido de aparecer); señal
(literalmente o figurativamente), como bandera, baliza, monumento,
augurio, prodigio, evidencia, etc.:-dar (por señal), divisa, enseña,
maravilla, señal.
Una señal que hasta el día de hoy causa intriga
Y vamos a entrar en materia proponiendo como ya algunos autores lo han hecho una posible, y digo posible
porque aunque pudiera ser la señal un evento astronómico o cósmico celeste más admirable, este que
mencionaremos tiene gran aceptación sobre todo en los últimos años cuando se hace uno de las herramientas
informáticas astronómicas.
Y esta señal está relacionada a Yeshúa no sólo a su regreso sino a su mismo nacimiento, algunos estarán
pensando ya y preguntándose ¿se estará refiriendo a la estrella de belén? Pues ni era estrella ni era de Belén,
tampoco era la estrella del oriente ni tampoco al parecer fue un evento extraordinario que escapó a la vista de
todo el mundo conocido en el primer siglo especialmente de los líderes los cuales no se daban cuenta de que se
observó en el firmamento.

Por mucho tiempo se especuló sobre este asombroso suceso, todavía hace unos pocos años los que
estuvimos en el cristianismo se nos engañó olímpicamente con toda la tradición cristiana respecto a la
nativitis, ya saben, el 25 de diciembre, día en realidad del nacimiento de tamúz, los tres reyes magos de
diferentes continentes y aspecto racial, que ni eran reyes ni eran magos como los conocemos, sobre sus
nombres y regalos, y todo tipo de fábulas inventadas y todavía enseñadas como fe, además de Santa
Claus como nueva adquisición de esta fiesta pagana.
Descubrimientos recientes.
A partir de la información reconsiderada sobre algunos sucesos como la misma muerte de Herodes el Grande, las
posturas en cuanto a la famosa estrella de Belén se han enriquecido, no sólo porque ya no podrá sonar como
fábula artificiosa la aparición sobrenatural de una estrella en el firmamento que guía a tres hombres en sus
respectivos caballos, camello y elefante, y que son guiados hasta que la esplendorosa estrella se posa en el cenit
del firmamento para anunciar el punto exacto en donde acaba de nacer un rey y que está en pañales y cuyo
espectáculo hubiera quedado en la memoria de toda la humanidad de singular evento sin precedentes, pero que a
la vez casi nadie se enteró más que unos estudiosos de las señales (otot) de los astros y además de su respectivo
evento profético!!!
Estudiosos que por cierto han sido calificados como magos astrólogos del zodiaco.

Sin duda que aquellos sabios astrónomos y astrólogos, en el buen sentido de la palabra, se habrían
ridiculizado de la fábula cristiana y sus consciencias idólatras.

¿Cuál era entonces esa señal a la que hoy día se está concluyendo?
Mat 2:1 Cuando Yeshúa nació en Betlejem de Yehudáh en días del rey Herodes, vinieron del oriente a
Jerusalén unos rabmagig, Mat 2:2 diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella
hemos visto en el oriente, y venimos a honrarle. Mat 2:3 Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén
con él.

Y por qué no habrían de turbarse si ellos no vieron nada de estrella, no se posó sobre Israel, no sabían que había
ocurrido, esperaban al Mesias pero les pasó de noche la señal, señal que por cierto ya había ocurrido hacía un
año o más de cuando llegaron los sabios!!!

Sabemos de la estrella que:

- Significaba el nacimiento del Mesías.


- Significó la realeza.
-Tenía una relación con el pueblo de Israel, la judea de aquella época.
-Se levantó en el este, al igual que otras estrellas y se vio desde el oriente.
-Apareció en un momento preciso.
-Herodes no sabía cuando apareció porque los fariseos y los líderes no se percataron.
-Su presencia perduró durante un plazo de tiempo.
-Fue antes de que los sabios arribaran a su paso al sur de Jerusalén a Betlejem.
-Se posó o “detuvo” en Betlejem vista desde el oriente.
¿Reyes magos u oficiales sabios?
G3097 μάγος mágos
de origen extranjero [H7248]; mago, i.e. científico oriental; por implicación mago:-
mago.

H7248 ‫ ַרב־מָ ג‬Rab Mág


de H7227 y una palabra foránea para mago; mago en jefe; Rab Mag, oficial babilonio:-
Rabmag.
Actualmente todas las fuentes no muestran que seguramente eran sabios de origen israelita, tal vez judíos o
levitas que quedaron en la diáspora después del exilio babilónico, en ciudades del antiguo imperio persa,
que fueron de la escuela de profetas del Daniel el profeta, todos instruidos del mazzoret hebreo para
reconocer en el tiempo señalado el nacimiento del Mesías según Daniel lo había profetizado aprox. 500
años antes, sabios que no necesariamente adivinaban ni hacían magia ni hechizos sino que conocían las otot
de los cielos y esperaban al Rey Mesías en su tiempo habiendo visto la señal en los cielos, Rey que
reconocieron y dieron honores y regalos como lo refiere el salmo 72.
En el año 6 a.e.c. ocurrió una conjunción planetaria (acercamiento aparente en el cielo de dos o más planetas), nada habitual.
Júpiter se paseó casi justamente por delante de Saturno, hasta en 3 ocasiones en poco tiempo, en la constelación de Piscis. Los
magos interpretarían este hecho como: un gran rey (Júpiter) de Justicia (Saturno) nace entre los judíos (Piscis). El símbolo de
los peces (Piscis) está asociado a la simbología antigua del cristianismo y algunos estudiosos del tema indican que proviene
precisamente de la posición de Júpiter y Saturno en dicha constelación, de esta asociación viene la era de piscis relacionada
con el pescador. Nótese que hablamos de interpretación mazzorética de los astros que referían cosas o lugares, no dar culto a
los astros sino comprender la historia futura como un hecho que ocurría en ese momento.

Se esperaba la llegada del Mesías, según los profetas, y estos signos indicaban que el hecho estaba ocurriendo, al menos para
los Sabios de oriente. Para los antiguos Júpiter es el dios principal y Saturno su padre. ¿Qué acontecimiento más grande se
podía pedir para el nacimiento del Mesías según las naciones? Y no una sola vez confluyeron los planetas, sino tres. Reyes,
dioses y pescadores, una simbología concordante con la aparición de una gran figura, al menos para aquellos que esperaban
al Mesías y lo descifraban según la ciencia recibida.

“Después de oír al rey Herodes, ellos (los Sabios) partieron. La estrella que habían visto en el este iba delante ellos, hasta
que se detuvo en el lugar donde estaba el niño” (Mateo 2.9). El planeta Júpiter se desplazó lentamente hacia el este en el
año 7 a.C. (-6), iba delante de los Magos, hasta que se posicionó y al poco comenzó su camino hacia el oeste. No es
necesario entender al pie de la letra que los sabios siguieron a los planetas Júpiter y Saturno, ya que se desplazan muy
lentamente en el cielo, pero tal vez, ese acontecimiento fue lo suficientemente grande para los sabios, como para
desplazarse hasta Belén y preguntar por el nacimiento del Mesías.
Un mosaico de la emperadora Teodora. Detrás de ella
vemos unos Magos persas.
Sabios astrónomos babilónicos o persas
Otra conjunción interesante fue la de Júpiter y régulus o régulo en el año 2 a.e.c. este evento
fue también significativo porque habría de anunciar la relación del Rey con relación al León
de Judáh como se le ha referido, vemos a Régulo el astro más luminoso de Leo y además
entre los antiguos denota realeza como su nombre lo indica, es una de las 4 estrellas reales de
los antiguos mesopotámicos de visibilidad azul y muy brillante.
En 1925 se encontró una tablilla de arcilla a 100 km de Babilonia, con caracteres cuneiformes, que habla de la conjunción triple entre Júpiter y
Saturno, así que fue visible en toda aquella zona. Dicha conjunción planetaria o acercamiento entre los dos grandes planetas, es posible
reproducirla hoy con programas informáticos de astronomía. La tablilla está en el museo estatal de Berlín. Los sabios conocían que un
acontecimiento astronómico se repetiría por tres veces durante varios meses. Probablemente partieron de oriente cuando el fenómeno comenzó,
llegando a Belén, cuando éste concluyó. El viaje que realizaron duró varios meses. Hubo otras conjunciones planetarias en los años 5, 3 y 2 a.e.c.
Aunque éstas están algo lejos de la fecha del nacimiento de Mashíaj que se estima en el 7 al 6 a.e.c.

Incluso la Luna en fase creciente hizo su aparición muy próxima y bajo los planetas Júpiter y Saturno el día 2 de noviembre del año 7
a.e.c. Un acontecimiento prácticamente único. El 25 de febrero del año 6 a.e.c. Otro fenómeno celeste tuvo lugar: Júpiter y Saturno
estaban muy próximos, aún menos que en el año 7 a.e.c., pero un tercer planeta brillante, Marte, se colocó justo entre ellos. El
astrónomo Kepler, que descubrió las leyes del movimiento de los planetas, observó este fenómeno entre el 19 y el 24 de diciembre de
1603 con los planetas en conjunción: Júpiter, Saturno Mercurio y tras numerosos cálculos, llegó a la conclusión de que se repetía cada
805 años y que había sucedido entre los años 7 al 6 a.e.c. con los planetas gigantes, aunque en aquella ocasión Júpiter solo pasó una vez
cerca de Saturno y no tres veces como la del año 7 a.e.c. Por lo que fue un acontecimiento maravilloso y rarísimo en el cielo.

Tal vez no fue un acontecimiento el que indicó el camino de los sabios a Belén, sino la suma de todos ellos. Los sabios, verían las
primeras señales del nacimiento, con la triple conjunción planetaria de Júpiter y Saturno en el 7 a.e.c., en febrero del 6 a.e.c. una
conjunción de Júpiter, Saturno y Marte, en mayo Júpiter, Saturno y Venus, los tres planetas más brillantes del cielo y siempre en Piscis.
Los magos, ante las señales del nacimiento del Mesías anunciado por los profetas, estarían preparados para partir.
Si nos basamos a las señales (otot) de los astros cuyos registros están en los profetas, en Job, en los salmos y
desde Génesis, los únicos astros señales y guías desde el punto natural creíbles y observables por los sabios en
razón a las mismas señales y fuera de la fábula católica son estos que hemos mencionado, estos además fueron
dados al hombre y a las naciones para que supieran que el Creador de los cielos estaba mandando un mensaje
desde la bóveda celeste, este suceso finalmente sería una señal de los cielos implícita en la tierra del ben Elión
(hijo del Altísimo) hacia un ben Adám (hijo de hombre).

Lo más interesante es que esta conjunción según mi investigación no se ha dado en los dos mil años en la
misma región, han habido muchas conjunciones y alineaciones pero esta volverá a repetirse en el 2015.

A partir de Sukot de 2015 después de la cuarta luna de sangre de la tétrada Jupiter saldrá otra vez desde el
oriente y hará conjunción en esta ocasión con Venus.
Dato adicional sobre Venus en la antigüedad.

Al encontrarse Venus más cercano al Sol que la Tierra (es un planeta interior), siempre se puede encontrar en
las inmediaciones del Sol (su mayor elongación es de 47,8°), por lo que desde la Tierra se puede ver sólo
durante unas pocas horas antes del orto (salida del Sol), en unos determinados meses del año, o también durante
unas pocas horas después del ocaso (puesta del Sol), en el resto del año. A pesar de ello, cuando Venus es más
brillante, puede ser visto durante el día, siendo uno de los tres únicos cuerpos celestes que pueden ser vistos de
día a simple vista, además de la Luna y el Sol.

Venus es normalmente conocido como la estrella de la mañana (Lucero del Alba) < ¿casualidad? > o la estrella
de la tarde (Lucero Vespertino) y, cuando es visible en el cielo nocturno, es el segundo objeto más brillante del
firmamento, tras la Luna.

http://es.wikipedia.org/wiki/Venus_(planeta)
Al respecto llama la atención la alusión de Kefas sobre este astro al
amanecer, ya que sale primero y luego el sol como señal de que la luz
está pronta a revelarse después de las tinieblas de la noche..

2 Ped. 1:19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual


hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar
oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en
vuestros corazones;
La conjunción Júpiter - Venus a ese nivel, y en esa constelación (Leo...el Leon de Juda) No ha podido ser
vista en estos 2000 años desde Israel y menos en Jerusalem... aunque ha pasado varias veces, pero
simplemente desde Jerusalem o babilonia no ha podido ser vista por la noche en todo este tiempo, desde
aquellos tiempos.

Si esto es verdad hay un indicio e indicativo interesante desde los cielos para esas fechas, ya mucho hemos
hablado de la tétrada, vamos para la segunda luna de sangre, a final de este año hebreo nos espera también
un eclipses total de sol en el norte de Europa y será entre piscis.
Eclipses de luna y sol, conjunciones, constelaciones ¿hay una señal de todo esto o
simplemente es algo de la naturaleza sin sentido?

En tiempo bíblicos todos estos eventos pasaban desapercibidos para muchos, ya sea
porque no estaban familiarizados o simplemente porque no tenían las herramientas como
hoy nosotros.

La verdad es que no sabemos nadie si esta u otra es la señal de Yeshúa que anuncia
definitivamente su retorno, pero de que son señales nunca vistas antes y en tiempos
proféticos y con tantas más señales ya mencionadas eso no cabe la menor duda.

Queda observar y esperar, la primer luna de sangre ya ocurrió y nos trajo consecuencias sin lugar
a dudas, viene la segunda luna de sangre y el eclipse solar, el próximo año 2015 traerá muchas
noticias proféticas pero sin dudas, por ahora ahí está una posible señal de Yeshúa, el Rey entre
Leo, Júpiter quien juzga o trae justicia y Venus la estrella de la mañana.
Podría ser una simple coincidencia astral, o una
señal contundente y definitiva para las naciones.
Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y
entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del
Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria

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