Está en la página 1de 18

Afilado de Instrumentos

Periodontales.
• Para no perder tiempo y operar de forma inadvertida, los
odontólogos deben familiarizarse bien con los principios del afilado y
poder aplicarlos para obtener un filo agudo en los instrumentos que
manipulan.
FILO Y FORMA DE REVISARLO
• El borde cortante de una cureta está formado por la arista entre el
frente y las superficies laterales del instrumento.
• Cuando el dispositivo tiene filo,
el borde es una línea delgada.
El filo se puede valorar a simple vista y mediante el tacto a través de
uno de los sig. modos:
1. Colocar el instrumento debajo de una fuente luminosa.
a) Si refleja luz al observador, está romo.
b) Imposible ver línea brillante en instrumento afilado.
2. Valoración táctil pasando el instrumento sobre un vástago de acrílico
“poste de prueba del filo”.
a) Instrumento sin filo se desliza.
b) Instrumento filoso “muerde” la limadura.
Finalidad del afilado.
• Es importante restablecer el borde de corte sin distorsionar los
ángulos originales del instrumento. Cuando se alteran dichos ángulos,
el instrumento no funciona como fue diseñado para operar, situación
que limita su eficacia.
Piedras de afilar.
Pueden ser naturales (piedras de aceite de India y Arkansas) o
sintéticas (carborundum, rubí y piedras cerámicas).
• Para instrumentos muy romos se utilizará piedra con grano grueso
para cortar con mayor rapidez.

Se clasifican en:
• Rotatorias montadas: se montan en un mandril
metálico y en una pieza de mano. Es difícil
controlarlas con precisión, desgastan rápido y
generan mucho calor por fricción lo que afecta
el temple del instrumento.
• Piedras desmontadas: disponibles con
variedad de tamaños y formas. Se
pueden emplear de dos maneras:
1) Estabilizar el instrumento y sostenerlo
inmóvil mientras se pasa la piedra
sobre él.
2) Contrario a la forma 1.
Principios del Afilado
1. Elegir una piedra adecuada para el
instrumento.
2. Usar una piedra esterilizada si el
instrumento no se esteriliza antes de
usarse.
3. Establecer el ángulo adecuado según su
diseño.
4. Conservar una toma firme y estable del
instrumento y la pierda de afilado.
5. Evitar una presión excesiva, para no desgastar tanto el instrumento.
6. Prevenir la formación de rebabas.
7. Lubricar la piedra durante el afilado, aceite para naturales, agua
para las sintéticas.
8. Afilar los instrumentos al primer signo de mellado.
Afilado de Instrumentos Individuales.
• Curetas universales: el operador debe tener en mente que el ángulo
entre la cara de la hoja y la superficie lateral de cualquier cureta mide
entre 70 y 80°. Este es el diseño más eficaz para eliminar el cálculo y alisar las raíces.

ángulo menor a 70° es muy delgado/ángulo de 90° o mayor implica uso de más
fuerza.
• Afilado de la superficie lateral:
1. Aplicar la piedra de afilado a la superficie
lateral de la cureta para que el ángulo
entre la cara de la hoja y la piedra oscile
entre 100 y 110°.
2. Trabajar hacia la punta, activando la
piedra con movimientos cortos de arriba
abajo. Se ejerce ligera presión uniforme y
se asegura conservar el ángulo.
3. Revisar el filo y continuar conforme sea
preciso.
4. A medida que se desplaza la piedra , terminar cada sección con un
movimiento en dirección al filo para reducir la formación de
rebabas.
5. Cuando se afila adecuadamente un borde, el opuesto puede afilarse
de igual manera.
• Curetas específicas de áreas (Gracey).
Al igual que una cureta universal, la de
Gracey posee un ángulo de 70-80°
entre la cara y la superficie lateral de
su hoja. Por tanto, la técnica pasa
puede servir para una de Gracey, pero
la manera óptima es la siguiente:
1. Se sostiene la cureta para que la cara de la hoja quede paralela al
piso y se identifica el borde por afilar (recordando que sólo se usa
un borde cortante).
2. Se aplica la piedra a la superficie lateral para que el ángulo entre la
cara de la hoja y la piedra tenga entre 100 y 110°.
3. Ejecutar movimientos cortos de arriba abajo, desde el vástago de la
hoja hasta la punta curva.
4. Conservar la curvatura volteando la piedra mientras se afila el
vástago hacia la punta.
• Cinceles y azadones.

Los cinceles tienen un solo borde cortante


recto perpendicular al vástago, el extremo
de la hoja se encuentra biselado a 45° para
formar el filo.
• Bisturíes periodontales.

El más usado es el bisturí de hoja


plana para gingivectomía y los
bisturíes interproximales
estrechos.
• BISTURÍES DE HOJA PLANA PARA GINGIVECTOMÍA.

Poseen hojas planas y anchas, casi perpendiculares al vástago inferior


del instrumento. Cuando estos instrumentos se afilan sólo es preciso
desgastar el bisel en su dorso.

Es posible lograrlo llevando la hoja a lo largo de


una piedra de afilar plana fija o sosteniendo el
instrumento inmóvil y pasando la piedra a lo
largo de su hoja.
• BISTURÍES INTERPROXIMALES.

Sus hojas tienen dos bordes cortantes rectos y largos que se unen en el
extremo muy aguzado del instrumento. Éstos se pueden afilar al igual
que los bisturíes de hoja plana para gingivectomía.

También podría gustarte