Delitos contra la libertad de

autodeterminación y la
seguridad individual
 ¿Constituirá amenaza si una
persona interpela a otra
señalándole que lo demandará,
si no le paga lo que debe?
 ¿Constituirá amenaza si un
menor de edad (14), que antes
ha hurtado en el mall, es
detenido y en medio del
forcejeo le dice a su aprehensor
(funcionario policial) que
“donde lo encuentre lo va a
matar”?
 Delito de Amenazas

Art. 296. El que amenazare

seriamente a otro con causar a él
mismo o a su familia, en su persona,
honra o propiedad, un mal que
constituya delito, siempre que por
los antecedentes aparezca verosímil
la consumación del hecho, será
castigado:
1º. Con presidio menor en sus
grados medio a máximo, si hubiere
hecho la amenaza exigiendo una
cantidad o imponiendo
ilegítimamente cualquiera otra
condición y el culpable hubiere
conseguido su propósito.
2° Con presidio menor en sus
grados mínimo a medio, si
hecha la amenaza bajo
condición el culpable no
hubiere conseguido su
propósito.
3° Con presidio menor en su
grado mínimo, si la amenaza
no fuere condicional; a no
ser que merezca mayor pena
el hecho consumado, caso
en el cual se impondrá ésta.
Tanto el art. 296 como el 297 dan cuenta
de distintos tipos de amenazas
(constitutivas o no de un mal que
constituya delito; condicionales o
incondicionales), variando la pena según
los requerimientos típicos previstos en la
ley.
No obstante, las amenazas comparten
los siguientes requisitos comunes: (i) la
seriedad y (ii) la verosimilitud.
 Tipicidad objetiva

Amenazar: RAE:

Dar a entender con actos o palabras

que se quiere hacer algún mal a
alguien
Amenazar es formular una declaración de
voluntad, destinada a ser conocida por otro,
cuyo contenido intelectual exterioriza la
resolución de causar un mal a otro (en
algunos casos subordinada esa resolución al
cumplimiento de una condición impuesta por
el agente al sujeto pasivo), y en que la
realización del mal que se anuncia se presenta
según el sentido de la declaración (seriedad y
verosimilitud) como dependiente de la
voluntad del que formula la declaración
¿Será amenaza el soliloquio conminatorio?

¿Lo será si el doctor me dice que debo

consumir la medicina receta, pues si no voy a
morir?

¿Lo será si es un tercero el que ejecutará el

mal y yo no puedo detenerlo? ¿Y si pudiera
detenerlo?
 Tipicidad objetiva

Seriedad de la amenaza (referido a su existencia)

Es esencial que la seriedad sea medida desde la

perspectiva del sujeto pasivo
PMR entienden que no debe haber asomo de burla
o broma, dándose a entender la decisión de quien
la realiza de llevarla (en realidad) a cabo. La
amenaza que se profiere en broma o en un
momento de exaltación no será delito, como
tampoco lo serán las simples advertencias de males
futuros cuya realización no depende de quien las
hace.
Sin perjuicio de considerar al sujeto pasivo para
determinar la seriedad, no debe perderse de vista que no
se configura el tipo, si la declaración de voluntad no ha
sido formulada para ser entendida como amenaza, esto es,
cuando es evidente que estamos frente a un juego o una
exageración.
En este sentido, el tipo penal no protege al sujeto pasivo
de sus simples temores o de sus propios y evidentes
errores. Hay amenaza si alguien me encañona con un
arma que es de juguete, mas no lo parece así en el caso
concreto; pero no hay amenaza si alguien me interpela
con la espada de He-man, que en realidad es de juguete.
¿Se configura el tipo si me amenazan con un arma
de fuego de juguete, pero que parece real?

¿Se configura si me amenazan con una espada de

la guerra de las galaxias?
 Tipicidad objetiva

Verosimilitud de la amenaza (atiende

al mal con que se amenaza, conforme
a una perspectiva ex ante).

Al igual que la seriedad, debe ser analizada desde la

perspectiva del sujeto pasivo: lo que es verosímil para unos,
puede no serlo para otros.
 Tipicidad objetiva

PMR entienden que debe tratarse de un mal

que, por la forma y circunstancias en que se le
señala a la víctima, sea para ella creíble su
realización futura atendida la situación concreta
en que se encuentra, aunque no sea posible de
realizar por razones que el propio amenazado
desconoce.
 Tipicidad objetiva

Sujeto activo: “El que”.

Bien jurídico: Seguridad individual.
GD entiende la seguridad individual como
un estado de cosas con arreglo al cual cada
persona puede abrigar la fundada
confianza en que su estatus jurídico
personal será respetado; seguridad
individual significa incolumidad del
estatus jurídico personal.
 Dos dimensiones

Dimensión objetiva, en este aspecto la

seguridad individual indica la real
protección del estatus jurídico personal de
toda turbación que lo amenace.

Dimensión subjetiva, es la seguridad

individual el espíritu de sosiego o de
tranquilidad que en la representación
psíquica del sujeto crea en la situación real.
La realmente importante, y la que toma en
cuenta el delito de amenazas, es la objetiva,
esto es, la real protección del estatus
jurídico personal de turbaciones que lo
amenacen. No lo es la subjetiva, ya que el
delito de amenazas no requiere haber
perturbado síquicamente al sujeto pasivo:
este puede haberla recibido impertérrito.
Sin perjuicio de que el Derecho no protege
al particular frente a temores desligados de
la realidad.
 Tipicidad objetiva

Sujeto pasivo del delito: puede serlo

cualquier individuo, aunque debe
comprender el sentido conminatorio.

En cuanto al sujeto pasivo del mal

amenazado, puede serlo el mismo
individuo o su familia (aunque debe
tratarse de particulares: ver art. 264).
¿Qué debe entenderse por
familia?
 Para los efectos de este artículo se
entiende por familia el cónyuge, los
parientes en la línea recta de
consanguinidad o afinidad legítima, los
padres e hijos naturales y la descendencia
legítima de éstos, los hijos ilegítimos
reconocidos y los colaterales hasta el
tercer grado de consanguinidad o
afinidad legítimas.
 Norma poco feliz, pues
¿quiénes faltan en esa
descripción?
 Tipicidad objetiva

Bienes sobre los que debe recaer la

amenaza: sobre la persona (vida,
salud e integridad corporal) del
amenazado (o de alguno de sus
familiares), su honra o propiedad
Tipicidad objetiva del art. 296

A los elementos antes expuestos, se

añaden los siguientes:

La amenaza debe consistir en un mal

que constituya delito.
Otro elemento: se impone una condición y esta se
cumple.

La penalidad varía según si:

1º. Con presidio menor en sus grados medio a

máximo, si hubiere hecho la amenaza exigiendo una
cantidad o imponiendo ilegítimamente cualquiera
otra condición y el culpable hubiere conseguido su
propósito.

2° Con presidio menor en sus grados mínimo a

medio, si hecha la amenaza bajo condición el culpable
no hubiere conseguido su propósito.
Otro elemento: no se impone una condición.

En cuanto a la penalidad, se debe distinguir:

3° Con presidio menor en su grado mínimo, si la

amenaza no fuere condicional.

A no ser que merezca mayor pena el hecho

consumado, caso en el cual se impondrá ésta
(art. 69).
 Circunstancia agravante
especial

Cuando las amenazas se

hicieren por escrito o por
medio de emisarios, éstas se
estimarán como circunstancias
agravantes.
Art. 297. Las amenazas de un
mal que no constituya delito
hechas en la forma expresada en
los números 1º o 2º del artículo
anterior, serán castigadas con la
pena de reclusión menor en sus
grados mínimo a medio.
Tipicidad objetiva del art. 297

A los elementos antes expuestos, se

añaden los siguientes:

La amenaza debe consistir en un mal

que no constituya delito.
Otro elemento: se impone una condición y esta se
cumple.

Acá la penalidad no varía:

1º. Ya sea que si hubiere hecho la amenaza exigiendo

una cantidad o imponiendo ilegítimamente
cualquiera otra condición y el culpable hubiere
conseguido su propósito.

2° Ya sea si hecha la amenaza bajo condición el

culpable no hubiere conseguido su propósito.
 Tipicidad subjetiva

Dolo directo
Art. 298. En los casos de los dos
artículos precedentes se podrá
condenar además al amenazador
a dar caución de no ofender al
amenazado, y en su defecto a la
pena de sujeción a la vigilancia
de la autoridad.
Tipo privilegiado

Art. 494. Sufrirán la pena de multa de

una a cuatro unidades tributarias
mensuales:

4° El que amenazare a otro con armas

blancas o de fuego y el que riñendo con
otro las sacare, como no sea con motivo
justo.
Tipo privilegiado

Lo trascendental dice relación a “como

no sea con motivo justo”.

Causales de justificación y exceso. Caso

del carabinero.
 Art. 161-B

Art. 161-B. Se castigará con la pena de reclusión

menor en su grado máximo y multa de 100 a 500
UTM al que pretenda obtener la entrega de dinero o
bienes o la realización de cualquier conducta que
no sea jurídicamente obligatoria, mediante
cualquiera de los actos señalados en el artículo
precedente. En el evento que se exija la ejecución de
un acto o hecho que sea constitutivo de delito, la
pena de reclusión se aplicará aumentada en un
grado.