Está en la página 1de 77

iQuérete bonito

Introducción
En los últimos meses he tenido platicas muy interesantes y
muy nutritivas acerca del amor propio. En las charlas con
amistades y con mi hermana he ido profundizando cada
vez más en el tema del amor propio, y si bien, ya lo venía
practicando desde hace un tiempo, hoy por hoy me parece
un tema que se tiene que abordar en la vida de cada ser
humano como algo fundamental, ¿por qué? porque desde
lo que crees que vales y mereces te relacionas toda tu
vida, y esto incluye tu vida sentimental, fraternal y laboral.
Yo he visto grandes genios, ingenieros súper inteligentes
con miedo a levantar su voz para pedir un aumento de
salario o defender una idea (aún cuando su trabajo es lo
que mueve todo el proyecto o toda la empresa), por
inseguridad, por falta de amor propio.
He visto mujeres hermosas e inteligentes estar con
cualquier patán, porque alguna vez éste patán les habló o
les cantó bonito.
He visto madres y abuelas “abnegadas” renunciar a sus
sueños, y no solo a sus sueños, sino a su esencia, para
convertirse en lo que la sociedad les dijo que tenían que
ser.
Las vi apagarse poco a poco y el día que faltaron,
realmente nadie las extrañó.
Hay muchísimos más ejemplos de grandes seres humanos
que nunca llegaron a ser todo lo que podrían haber sido
solo porque no hubo alguien que les dijera realmente
cuánto valían y de lo que eran capaces.
Yo estoy convencida que Dios puso grandeza en cada ser
humano, creo que cada uno de nosotros es un héroe en
potencia, creo que cada uno de nosotros fue diseñado
para brillar y destacar en algo, y necesitamos creer en eso,
creer en lo que Dios puso dentro de nosotros, dejar de
compararnos y dejar de tratar de parecernos a lo que la
sociedad hoy están llamando “exitoso”.
A lo largo de la Biblia encontrarás muchísimos ejemplos
de personas que no creían en sí mismos, personas llenas
de temores e inseguridades y como un encuentro con
Dios, y una palabra de parte de Dios, sacó todo el
potencial que ya había sido depositado en ellos para
cumplir su propósito en esta tierra.
A lo largo de estas 4 semanas, juntos y de la mano del
Precioso Espíritu Santo iremos creciendo en nuestro valor y
en nuestro amor propio, así que quiero invitarte a orar un
momento y pedirle a Dios que empiece la obra de
restauración en tu amor propio y que cada día vaya
haciendo crecer en ti la identidad que verdaderamente
tienes.

Erika Jacques.
Dedicatoria
Diana, en los últimos meses hemos estado más cercanas,
cercanas en corazón y espíritu, y creo que justo en este
tiempo se vuelve a sentir nuestra relación como la relación
que teníamos cuando éramos niñas… Manita, tú me
inspiraste a escribir este devocional, en medio de nuestras
largas y cotidianas conversaciones he confirmado cuán
necesario es que cada uno de nosotros sepa con certeza
cuánto vale y que no se conforme con menos de eso en
esta vida.

Oro para que sigas y sigamos sanando y creciendo, y


convirtiéndonos en lo que Dios dijo que somos. Oro y
espero con tanta ilusión el día que vivas completamente
libre, completamente sana y completamente feliz, y ¿sabes
qué? siento que ese día está muy cerca y eso me llena de
gozo.

Manita, este devocional es para honrarte a ti, a todas las


mujeres que en algún momento nos dejamos a un lado
para cumplir las expectativas de alguien más, es para
todas esas mujeres que sacrificaron su vida por amor a su
familia o su pareja.
Entiendo que lo hicieron con gusto, porque fue de todo
corazón y con mucho amor, pero también es para decirles
que es tiempo de brillar y de volver a tu esencia, es tiempo
de amarte a ti. Es tiempo de cuidarte a ti y de sanarte a ti.
Es un tiempo de amor y valor propio.
Eres la mujer más íntegra que conozco, eres hermosa,
inteligente, valiente, fuerte, eres increíble y yo amo ser
testigo de la persona que has sido y de lo que serás, amo
ser tu hermana, y siempre digo que tu vida fue el regalo
más grande de la mía. Mi infancia nunca hubiera sido lo
mismo sin ti; verdaderamente hicimos y éramos magia
cuando éramos niñas.

P.D. Te amo Manita


¿Cómo funciona?
Nuestro deseo es que puedas vivir la experiencia
completa en este devocional, estamos seguros que
cada día Dios tiene algo especial para revelarte.

Hemos asignado dos páginas por día, en ella


encontrarás:
Capitulo sugerido para su lectura.
Versículo Selah (De autora).
Carta de amor (De autora para Dios).
Sección para tu "Versículo Selah".
Sección de "Reflexión"

Te invitamos a seguir los siguientes pasos para


llevar a cabo el devocional:
Lee "Versículo Selah"
Lee el capitulo correspondiente al día.
Identifica tu "Versículo Selah" (El que haya
sobresalido durante tu lectura y tenga mayor
revelación para ti)
Lee el devocional de la autora.
Comparte con el grupo lo que Dios te está
hablando.

BIENVENIDO (A)
Semana 1
Día 1
Lectura del día: Isaías 43

“... Porque tú eres muy precioso para mí. Recibes


honra y yo te amo.”
Isaías 43:4

¡Vales mucho!
Esta es la primera declaración. ¡Vales mucho! Dios
mismo te ha escogido, te ha rescatado una y mil
veces y Dios mismo te ha llamado para que le
conozcas personalmente.
Quiero decirte que tu valor no está en tus logros
académicos, ni en cuánto dinero tienes en tu cuenta
de banco, no está en tu belleza física ni en lo joven
que eres, tu valor no está en el número de seguidores
que tienes ni a cuantas personas les gusta tu
contenido en redes sociales, tu valor no está en
cuántos hombres están esperando en salir contigo ni
cuántos de ellos te reaccionan o comentan tus
publicaciones, tu valor no está en si tienes pareja o
estás soltera.
Tu valor está en quien te lo dió, está en quién eres
verdaderamente, en tu corazón y en tu esencia, tu
valor está en tu sonrisa y en la paz con la que te
permitas vivir, tu valor es único porque tú eres única e
inigualable.
Versículo Selah

Toma un momento para preguntarle al


Espíritu Santo cuánto vales y escribe lo que te
contestó:
Día 2
Lectura del día: Salmo 139
“Tú creaste mis entrañas, me plasmaste en el seno de
mi madre: te doy gracias porque fui formado de
manera tan admirable. ¡Qué maravillosas son tus
obras! Tú conocías hasta el fondo de mi alma”.
Salmo 139:13-14

¡Eres una maravilla de Dios!


La segunda declaración es: Eres un prodigio, eres
una maravilla de Dios.
Haz un Selah por un momento y medita con cuánta
delicadeza fuiste pensado, planeado y formado,
¿crees que si no fueras especial o importante para
Dios, se hubiera tomado el tiempo de pensarte y
formarte? Eres sumamente especial e importante. Y si
alguien te ha dicho o te ha hecho creer lo contrario es
hora de que te sacudas esas mentiras y en voz alta
declares esta verdad sobre tu vida: ¡Soy importante!
¡Soy especial! ¡Soy una maravilla de Dios! y ¡Valgo
mucho!
Repite estas declaraciones las veces que sean
suficientes, porque anhelamos de todo corazón que
este día abraces el valor sobre tu vida, anhelamos
que seas sanada en tu valor propio, porque amada
amiga, eres sumamente especial e importante.
Versículo Selah

¿Del 1 al 10 hoy en cuánto está mi valor


propio?
Día 3
Lectura del día: Filipenses 4

“Yo todo lo puedo en aquel que me fortalece.”


Filipenses 4:13

¡Eres fuerte!
La tercera declaración es: ¡Eres fuerte! ¡Puedes con
TODO! ¡Puedes TODO! pero no en tus fuerzas
humanas, no con tus propias estrategias ni con tus
propios pensamientos; eres fuerte porque Dios te
fortalece, porque el Señor está contigo en todo
momento y en todo lugar, eres fuerte porque cuando
no podemos más es posible ir a cargar nuevas
fuerzas a los brazos de Papá, y si entramos en su
Presencia debilitados, salimos de ella como
superhéroes recargados.
Versículo Selah

Si te sientes cansado y debilitado, toma un


momento para orar y pedirle a Dios que te
diga que piensa de tus fortalezas y
debilidades, escribe que te contestó:
Día 4
Lectura del día: Efesios 2
“Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de
nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las
cosas buenas que preparó para nosotros tiempo
atrás.”
Efesios 2:10

¡Eres la obra maestra de Dios!


¡Eres la obra maestra de Dios!
Si esto no te emociona, no sé qué más podría hacerlo,
medita un momento en lo hermoso que es el cielo y todas
las estrellas que hay en él, piensa en las flores y en los
pájaros cantando, piensa en las montañas y en las
cascadas, piensa en el mar y en el sonido de las olas, ¿es
sumamente hermoso, verdad? ¿Pues qué crees? Tú eres
aún más hermosa y perfecta que todo eso junto. Tú eres la
obra maestra de Dios, no hay imperfección en ti, cada
parte de tu ser fue delicadamente diseñada; por favor
toma un momento para meditar en esto y reconcíliate con
tu cuerpo, reconcíliate con tu personalidad y con tu única
manera de ver la vida, por favor reconcíliate con tu
sentido del humor y con tu manera de reír, por favor toma
un momento para sacudirte las mentiras que creíste de ti
por muchos años, tantos años que tal vez viene desde tu
infancia, pero por favor vuelve a ser tú, porque tal como
eres, eres perfecta, ¡eres una obra maestra!
Versículo Selah

¿Puedo empezar a verme como Dios me ve?


Día 5
Lectura del día: 1 Juan 3
“Miren con cuánto amor nos ama nuestro Padre que
nos llama sus hijos, ¡y es lo que somos!
1 Juan 3:1

¡Eres hija de Dios!


Tu identidad es ésta. Eres hija de Dios, eres amada,
escogida y llamada.
Tal vez el mundo no ve nuestro valor real, pero con
que tú lo sepas es más que suficiente.
No podemos vivir tratando de convencer a las
personas de cuánto valemos, pero si podemos vivir,
actuando y relacionándonos desde el amor y la
identidad que sabemos que tenemos. Así que vive
sabiendo lo valiosa, amada, única y maravillosa que
eres y no trates de convencer a nadie. Quien
verdaderamente valga la pena de estar en tu vida,
verá quién eres y quien no pueda ver tu valor, solo
déjalo ir, no trates de convencer a nadie. Cuando tu
te das tu valor y vives conforme a él, solitas llegan
cosas y personas maravillosas a tu vida. Confía.
Versículo Selah

¿Estoy viviendo y me estoy relacionando


desde mi identidad de hija de Dios?
Nada puede cambiar quien realmente eres...
Querida hermana, quiero contarte una historia de cuando
tenía 12 años.
Cuando cumplí 12 años me cambié de ciudad casi
terminando el ciclo escolar, gracias a Dios una tía conocía
al director de una escuela y me aceptaron en clase pero
tuve que terminar el ciclo escolar en el grupo vespertino, y
no es que yo tenga algo en contra de este horario, es que
yo nunca había estado en él y desconocía el ambiente.
Todo era nuevo para mí, la ciudad era nueva, la escuela
era nueva y ese horario con ese ambiente eran nuevos…
Solo tenía 12 años y me hice chiquita desde que entré a la
escuela.
Recuerdo que el primer día llegué a clases con un overall y
dos coletas, me veía y era tan niña a lado del resto de
compañeros, que desde que ellos inmediatamente lo
notaron y me dieron mi primer sobrenombre “la nueva”,
un par de días después llegó otro niño y me cambiaron el
apodo para dárselo a él, así que ese día me empezaron a
decir “la güera” a la par de “la fresa”... Semanas después
en una clase de educación física, todos los compañeros
me aventaron las pelotas de volley ball al mismo tiempo,
recuerdo que yo solo me cubrí la cabeza y cuando
terminaron de aventar los balones, corrí con el maestro y
le dije que mis compañeros me estaban agrediendo… El
maestro no les dijo nada a ellos, sino a mi y sus palabras
fueron “pues es que te lo ganas güera”. Así que después
de ese evento, los niños empezaron a llamarme “la
agredida”.
Al terminar el ciclo escolar ya tenía muchos apodos,
“nueva”, “güera”, “fresa”, “agredida”... Pero en mi boleta
de fin de año solo decía Erika L. Jacques García.
Nada de lo que estos chicos decían de mí había cambiado
mi registro oficial, ninguno de los sobrenombres modificó
mi verdadero nombre.
A lo que voy con esto es que no importa cuantos nombres
hayas recibido a lo largo de tu vida, cuantos
sobrenombres te hayan dado para descalificarte o para
hacerte sentir algo o alguien que no eres.
Tu identidad sigue intacta y tú no eres lo que la gente dice
que eres, tú eres quien Dios dice que eres. Eres una hija
de Dios y tu identidad sigue intacta delante de Él.

Tú eres:
Eres Hija de Dios.
Eres creación maravillosa.
Eres fuerte.
Eres una obra maestra.
Y ¡vales mucho!

Esa es tu verdadera identidad y por más que escuches lo


contrario, nada ni nadie podrá modificar tu esencia ni tu
identidad.
Tiempo Selah
¿Qué me mostró Dios esta semana?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
¿Cómo puedo aplicarlo a mi vida?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
Semana 2
Día 6
Lectura del día: Isaías 62
“ Serán llamados como “pueblo santo” y “el pueblo
redimido por el Señor”.
Isaías 62: 12

¡Eres Redimida!
¿Qué quiere decir esto? Quiere decir que has sido
rescatada de la muerte, que todo tu pasado quedó atrás,
que puedes soltar y perdonar todo lo que te lastimó antes,
que te puedes perdonar a ti misma por los errores que
cometiste o las malas decisiones que tuviste, quiere decir
que puedes vivir con la cabeza en alto, que no hay nadie
que pueda juzgarte ni condenarte porque Jesús pagó todo
por ti, Jesús limpió todo por ti y borró todo de ti.
Hoy puedes reconciliarte contigo misma. Si Dios ya te
perdonó, ¿quién eres tú para juzgarte y para castigarte?
Quiero invitarte a hacer la siguiente oración en voz alta:
“Padre yo recibo tu perdón y lo agradezco, y hoy yo
también decido perdonarme; me perdono por mis errores,
me perdono por malas decisiones, me perdono por
lastimar a personas que amo. Me perdono por cualquier
cosa que hice en el pasado y también perdono a las
personas que me lastimaron, porque a partir de este
momento no quiero cargar con ninguna culpa y con
ningún resentimiento. Perdono porque el perdón es el
arma que Dios mismo me entregó para sanarme y hoy
decido usarla, en el nombre de Jesús, amén.”
Versículo Selah

Hoy decido soltar mi pasado, ¿cómo me


hace sentir?
Día 7
Lectura del día: Salmo 100

“¡Reconozcan que el Señor es Dios! Él nos hizo, y le


pertenecemos, Somos su pueblo, ovejas de su prado!”
Salmo 100:3

¡Le perteneces a Dios!


¡Qué seguridad de vida! Qué tranquilidad me da
saber que le pertenezco a Dios, saber que no camino
sola, saber que tengo a Quién correr cuando las
cosas se complican, qué seguridad saber que todas
las veces que sentí que no encaje en algún lugar es
simplemente porque no pertenecía a ese lugar,
pertenezco al cielo, mi vida y tu vida tienen Dueño y
tienen un sello que te hace diferente al resto. Es por
esto que no encajabas en ciertos lugares, y ¿sabes
qué? puedes dejar de intentar pertenecer o encajar a
un lugar o a un grupo de personas cuando ya sabes
a Quién si perteneces y en donde sí encajas
perfectamente.
Versículo Selah

¿He sentido que no pertenezco a ciertos


lugares?
Día 8
Lectura del día: Isaias 49

¡Yo no los olvidaría a ustedes jamás!


Mira, he escrito tu nombre en la palma de mi mano,
en mi mente siempre está tu imagen.
Isaías 49: 16

¡Nunca serás olvidada!


Sé que hay momentos en la vida en los cuales
sentimos que Dios nos ha olvidado, incluso hay frases
literales al respecto, pero Dios no olvida a los que
invocan Su Nombre.
Sé que habrá momentos de dificultad más adelante,
sé que tendrás nuevos desafíos en cada temporada
de la vida, pero en todos ellos puedes confiar en esta
palabra “Dios no me olvida”, puedes vivir seguro/a y
afrontar cada temporada de la vida sabiendo a
Quién perteneces y sabiendo que jamás te olvida, ni
siquiera cuando tú lo has llegado a olvidar a Él… Él
es fiel y su amor por ti perdura para siempre.
Versículo Selah

¿Puedo sentirme segura/o sabiendo que


Dios no se olvida de mí?
Día 9
Lectura del día: Proverbios 31:10-31

“Ella está vestida de fortaleza y dignidad,


y se ríe sin temor al futuro.”
Proverbios 31:25

¡Eres digna!

Digna de ser amada, de ser escuchada, digna de ser


valorada; Mereces todo lo bueno que Dios y la vida
quieren darte. Mereces un amor bonito, amistades
lindas, una vida tranquila, feliz y pacífica, mereces
todo lo bonito que te has atrevido a soñar.
Eres digna de todo lo bueno en esta vida.
Hermana, sé que hubo momentos y circunstancias en
la vida en los que dudamos de merecer cosas
buenas, porque tal vez hemos fallado, porque tal vez
hemos sido víctimas de personas que nos hicieron
sentir inmerecedoras, culpables o incluso sucias, pero
hoy vengo a recordarte que delante de Dios tu valor
no cambia ni disminuye y delante de Dios eres
DIGNA de cosas buenas y hermosas.
Versículo Selah

Toma un momento para escribir como te


hace sentir esto:
Día 10
Lectura del día: Juan 3:1-21
“No hay condenación para todo el que cree en Él.”
Juan 3:18

¡Estás libre de condena!

Querida hermana, no hay nadie que hoy pueda


acusarte y mucho menos condenarte por tu pasado.
Sé que no siempre hemos vivido de la mejor manera,
que hemos tenido errores como todo ser humano, tal
vez hemos hecho cosas que no le hemos contado a
nadie por vergüenza o por dolor, sé que la vida no
siempre ha sido fácil… Pero también sé que Dios
sabía todo de nosotras aún antes de llamarnos y así,
con todo y nuestras fallas, con todos nuestros errores
y con todo nuestro dolor eligió llamarnos, eligió
amarnos y decidió borrar todo lo que antes nos
condenaba. Así que, es tiempo de soltar nuestro
pasado; es tiempo de perdonarnos a nosotras
mismas y dejar de ser nuestro más grande juez, es
tiempo de dejar de castigarnos por los errores que
antes tuvimos y es tiempo de abrazar la vida plena,
libre y feliz.
Versículo Selah

Escribe una carta soltando tus cargas y


perdonándote por tus errores pasados:
¡Quiérete bonito!
Querida hermana, todas y todos en algún momento de la
vida nos hemos sentido insuficientes, hemos sentido que
por más que nos esforcemos no cumplimos las
expectativas de alguien que amamos, y ese alguien
pueden ser nuestros padres, nuestros esposos o novios o
incluso, nuestros hijos… Pareciera que nunca damos el
ancho por mucho empeño que le pongamos a las cosas.

Yo por algunos años estuve en una relación donde se me


pedían cosas que iban en contra de mi esencia misma,
una relación en donde me pidieron cerrar mis redes
sociales, donde me pidieron hablar menos o reír más
bajito en público, una relación donde me pidieron bajarle
dos rayitas a mi personalidad y a mi manera de vestir,
porque “el famoso era él”. Tristemente intenté hacerlo
para salvar mi matrimonio, pero en el proceso yo me iba
perdiendo, me iba sintiendo cada vez más miserable y
más perdida en mi propósito de vida, cada día era un día
gris, y para esa persona aún no era suficiente. Él seguía
hablando con otras personas en redes sociales, mientras
yo había cerrado las mías y cada vez que podía me decía
que “quién querría estar con una mamá” (como
haciéndome el favor de estar conmigo porque nadie más
se fijaría en mí)
Todo lo que hice me hizo sentir que no era suficiente ni
para él, ni para la familia ni para el ministerio que
compartimos.
Hasta que un día Dios me habló al oído y me dijo: “ERES
MÁS DE LO QUE HACES.”
Al principio no entendí bien, aunque me gustó mucho la
frase; poco a poco fui meditando y observando lo que hacía.
¿Y qué hacía? Cuidaba a mis hijos, limpiaba la casa, hacía
las compras y la comida, aportaba económicamente a la
casa y prácticamente mantenía a esa persona… Realmente
estaba haciendo mucho, entonces ¿cómo es que soy más
que esto? ¿Soy más que mamá, esposa, predicadora?

Un día mientras caminaba en el parque con Zoe en su


carreola, empecé a hablar con Jesús de este tema y
abiertamente le pregunté a qué se refería Dios cuando me
dijo que Soy más de lo que hago.
Jesús me respondió que mi valor no estaba en mis
actividades, que yo no valía por cuanto aportaba
económicamente en casa, me dijo que mi valor no estaba en
ser esposa o madre, y que tampoco estaba en la carrera que
había estudiado o en lo FIT que pudiera estar… Me dijo que
mi valor estaba intacto delante de Dios, porque mi valor
estaba en Cristo Jesús y todo lo que Cristo es, yo también lo
soy.
Me dijo que ellos me habían formado con una imagen
perfecta y me pidió que no me negara a mi misma. Me dijo
que amaba oírme reír, me dijo que no tenía que bajarle dos
rayitas a mi intensidad para hablar, para reír o para vivir…
Porque ellos me habían hecho así, intensa, apasionada, libre
y feliz y que nada los complace más que verme vivir y
disfrutar la vida desde mi diseño original.
Así que, querida hermana, no vinimos a complacer a nadie
aparte de Dios y de nosotras mismas.
Ámate como eres, ríe, sueña, baila, viaja, canta, platíca, haz
nuevos amigos, metete a clases de algo que ames, vuelve a
tu esencia y no vuelvas a permitir que alguien más te quiera
decir cómo vivir y cómo portarte… Por favor, “Quiérete
bonito.”
Tiempo Selah
¿Qué me mostró Dios esta semana?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
¿Cómo puedo aplicarlo a mi vida?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
Semana 3
Día 11
Lectura del día: Salmo 18

“ Dios me arma de fuerza, y hace perfecto mi camino.


Me hace andar tan segura como un ciervo, para que
pueda pararme en las alturas de las montañas.
Entrena mis manos para la batalla; fortalece mi brazo
y me entrega la victoria.”
Salmo 18:32-35

Hermana, no sé qué situación estás pasando ahora,


realmente no sé a qué o a quién le tienes miedo en tu
vida, pero sé que alguna vez yo tuve gigantes delante
de mí que me paralizaban solo de pensar en
enfrentarme a ellos, y ¿sabes qué? Dios me sostuvo
en esas batallas de la vida y contra esos gigantes, y
no solo que me sostuvo sino que me fortaleció en
medio de esos procesos y me entregó la victoria en
cada uno de ellos.
Así que quiero animarte a seguir confiando en Dios y
tomar esta Palabra como yo la hice.
Deja que Él te fortalezca, te anime y te entregue la
victoria.
Versículo Selah

¿Cuáles son los gigantes que ahora estoy


enfrentando?
Día 12
Lectura del día: Salmo 25
“Él les mostrará el camino que deben seguir. Vivirán
en prosperidad, y sus hijos heredarán la tierra. El
Señor es su amigo y les enseña su pacto.”
Salmo 25:13-14

¡Eres amiga de Dios!


No sé tú, pero a mí esta declaración me llena de
alegría y tranquilidad. ¡Que privilegio y que
tranquilidad saber que Dios es mi amigo!
Puedes vivir confiada sabiendo que Dios mismo te
mostrará el camino que debes seguir y las decisiones
que debes tomar, puedes vivir confiada sabiendo que
Dios mismo cuida de tus hijos, que los toma como
suyos.
Puedes vivir confiada sabiendo que en cualquier
momento o en cualquier lugar estará tu amigo
acompañándote con una tacita de café.
Quiero invitarte a que esta semana hagamos una cita
con Jesús, aparta un día y un horario como lo harías
con cualquier otro día, ponte linda y sal por un café
pensando y sabiendo que Quien te acompaña es
Jesús y luego platica con Él de todas las cosas que
mueres por contarle a alguien.
Versículo Selah

¿Qué día de esta semana reservaré para mi


cita con Jesús?
Día 13
Lectura del día: Salmo 34

“Oré al Señor, y Él me liberó y me libró de todos mis


temores. Los que buscan su ayuda estarán radiantes
de alegría.”
Salmo 34:4-5

¡Dios te libra de todos tus temores!


Tristemente somos la generación de los ataques de
miedo o de ansiedad (productos del miedo al futuro),
la generación que habla y alimenta sus temores como
hablar del clima, que ha normalizado vivir con
miedo… Pero hermana, no es normal y ese estilo de
vida no es para nosotras.
Nosotras podemos recurrir a Dios y con certeza te
puedo decir que Él siempre nos librará de todos los
temores.
Yo les he contado abiertamente de la temporada que
le tuve mucho miedo a la muerte, y cómo cada vez
que sentía miedo por algo, escuchaba la Voz de Dios
en mi cabeza diciendo “Tranquila, YO estoy contigo.”
Pero no solo se quedó conmigo en esos momentos de
temor, sino que me curó completamente del miedo a
la muerte.
Te comparto esto para que cuando sientas temor
recuerdes que ÉL siempre está con nosotras.
Versículo Selah

¿A quién o a qué recurro cuando siento


temor?
Día 14
Lectura del día: Salmo 37

“Confía en el Señor y haz el bien; entonces vivirás


seguro en la tierra y prosperarás. Deléitate en el
Señor y él concederá las peticiones de tu corazón.”
Salmo 37:3-4

¡Eres hacedora de bondad!


Un fruto automático cuando hemos confiado en Dios es
hacer el bien; nosotros no hacemos el bien porque las
personas que nos rodean se lo merezcan, no hacemos el
bien para recibir un favor o un agradecimiento de quien
recibe nuestra bondad; hacemos el bien porque al estar
llenos de Dios, lo que sale naturalmente de nuestra vida es
bondad.
Realmente no importa quién la recibe, lo que importa es lo
que damos, porque lo que damos es de lo que estamos
llenos.
Versículo Selah

¿Qué he estado dando últimamente a las


personas que se me acercan?
Día 15
Lectura del día: Efesios 4:17-32
“Pónganse la nueva naturaleza, creada para ser a la
semejanza de Dios,
quien es verdaderamente justo y santo.”
Efesios 4:24

¡Eres justa y santa!


Gracias a Jesús hoy tú y yo podemos llamarnos justas
y santas. Sé que probablemente te estás preguntando
si verdaderamente lo serás, porque sigues fallando y
no siempre te conduces con justicia o santidad. Pero,
¿un árbol de manzanas deja de serlo cuando no está
dando su fruto? Claro que no, simplemente no está
bien alimentado o no es temporada. Lo mismo es con
nosotros, no somos lo que somos por nuestras obras
sino por nuestra naturaleza, y nuestra naturaleza es la
misma de Dios, entonces si no estoy produciendo
estos frutos sólo es un indicador de que necesito más
agua(Jesús) y más luz (Su Palabra).
Versículo Selah

¿Puedo reconocer estos frutos de justicia y


santidad en mi vida?
Eres más de lo que la gente dice de ti.
Querida hermana, quiero abrirte mi corazón y tocar un
tema que me costó un tiempo superar: La opinión de los
demás.

Al no crecer con una autoestima sana, crecí dándole


mucha importancia a lo que la gente dijera de mí porque
inconscientemente quería gustarle a todos porque tenía
muchos tanques de amor por llenar.
Las opiniones ajenas me afectaba mucho positiva y
negativamente pero entre más conozco a Dios y mi valor,
menos me importa lo que la gente opine.

Hace un par de años que me separé de mi ex esposo,


llegué a escuchar el clásico comentario “fracasaste”.
Recuerdo que lo pensé por varios días y no porque me
haya afectado el comentario sino porque yo estaba muy
lejos de sentirme fracasada. Yo me sentía libre, en paz y
plena. Me sentía así porque decidí escogerme a mí por
encima de las opiniones públicas.
Cuando volví a ver a esta persona le dije: ¿Sabes? Estuve
pensando en lo que me dijiste la última vez que hablamos
y quiero decirte que no me siento fracasada. Para mí,
fracaso hubiera sido permanecer en un lugar donde no
me quieren y donde me siento infeliz y miserable solo por
lo que la gente va a opinar de mí, fracaso sería
desperdiciar la única vida que tengo y perder más años y
más sueños solo porque la gente me va a poner una
etiqueta de “divorciada”.
Y sí, no te voy a negar que ha habido personas que me
han etiquetado y me filtran desde esa etiqueta, pero son
muchas más las personas que me aman y las que inspiro.
Son más las personas que pueden ver mi esencia y la
victoria de Dios en mi vida, que las pocas que quieren
detenerme o criticarme por una decisión valiente que tomé
por amor a mí y a mis hijos, ¿y sabes qué hermana? No
tengo el menor interés en cambiar su opinión respecto a
mí.
Yo vivo tan tranquila y tan en paz con mi vida que
realmente no me interesa lo que se dice de mí, y mucho
menos me meto en la vida de los demás.
Así que cuando tengas delante de ti la decisión de vivir por
ti o vivir de lo que otros dirán, decide por ti. Te lo
agradecerás toda la vida.
Tiempo Selah
¿Qué me mostró Dios esta semana?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
¿Cómo puedo aplicarlo a mi vida?

_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
_______________________________________
Semana 4
Día 16
Lectura del día: Filipenses 4
“No se preocupen por nada, en cambio oren por
todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias
a Dios por todo lo que él ya ha hecho. Entonces
experimentarán la paz de Dios, la cual supera todo lo
que podemos entender. Y la paz de Dios cuidará su
corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.”
Filipenses 4:6-7

¡Tienes libre acceso a La Paz de Dios!


Qué hermoso capítulo porque dice que para querernos bonito
hay que cuidar lo que pensamos.
Nadie más que tú puede controlar lo que estás pensando
querida hermana.
Qué increíble pensar que la cura de la ansiedad si existe… Qué
regalo tan grande nos dejó Jesús cuando dijo que nos regalaba
paz en la mente y paz en el corazón. La verdad este pasaje
bíblico es completamente real amigas y yo misma lo he
experimentado.
Claro que todas hemos tenido temporadas en nuestras vidas
donde el futuro parece incierto y causa ansiedad pensar en el
mañana… Pero, aquí está la cura: Platíca con Dios de todo lo
que te preocupa y agradece por todo lo que ya te ha dado.
Sé que es sencillo pero es real, y no solo eso; cuando la Palabra
dice que agradezcamos por todo lo que ya hemos recibido se
refiere a pensar profundamente en todo lo bueno que ya hemos
recibido, se refiere a hacer memoria de los favores y
bendiciones de Dios. Cuando practicamos este agradecimiento
consciente empezamos a vivir más confiados y más tranquilos
respecto a nuestros futuros.
Versículo Selah

Toma un momento para agradecer


conscientemente lo que Dios ha hecho por ti:
Día 17
Lectura del día: Colosenses 3
“Ya que han sido resultados a una nueva vida con
Cristo, pongan la mirada en las cosas de arriba.
Piensen en las cosas del cielo…”
Colosenses 3:1

¡Pon la mirada en las cosas del cielo!

Amo este capítulo de la Biblia, porque dice en qué y


en dónde debemos fijar nuestros pensamientos y dice
que es lo que nos viste a nosotras.
Nosotras no tenemos que preocuparnos por las
tendencias de moda (no digo que estén mal o que no
nos arreglemos), porque a nosotras más allá de un
buen vestido o unos lindos zapatos, nos viste la
compasión, la bondad, la humildad, la gentileza, la
paciencia y el amor.
Y eso querida hermana, nunca, nunca pasa de moda,
ni se hace viejo, ni se arruga.
Versículo Selah

¿Cómo puedo empezar a practicar esto en


mi vida?
Día 18
Lectura del día: 1 Tesalonicenses 4

“Pónganse como objetivo vivir una vida tranquila,


ocupense de sus propios asuntos…”
1 Tesalonicenses 4:11

Qué capítulo tan práctico y tan lindo, porque para


quererse bonito es muy importante procurar vivir una
vida tranquila y no meternos en la vida de los demás.
Hermana querida, no quiero que esto parezca un
regaño porque no lo es. Realmente no sé quien tiene
el devocional en sus manos en este momento, pero
creo que todas en algún momento hemos hablado o
nos hemos metido en la vida de otras personas, y te
aseguro que eso nos ha traído problemas.
Dios anhela que vivamos una vida tranquila y una
manera de tener tranquilidad, es no meternos en
asuntos ajenos.
Así que hoy hagamos consciencia de esto y
empecemos a vivir enfocadas en el cielo y solo en
nosotras mismas; en amarnos, y valorarnos, en
agradecer todo lo que somos y todo lo que Dios ha
hecho en nosotras. Procuremos vivir bonito.
Versículo Selah

¿Cómo puedo empezar a practicar esto?


Día 19
Soaking grupal
Versículo Selah

Agradecimiento
Día 20
Agradecimiento y Testimonios
Versículo Selah

Agradecimiento
Despedida
Hermana hemos terminado estas 4 semanas de sanidad y
camino hacia nuestro amor propio y quisiera preguntarte
“¿cómo te sientes?”. No tienes que contestarme ahora, pero
quiero que medites en esto durante este tiempo. Quiero pedirte
que procures practicar todo lo que vimos en estas semanas. Sé
que este proceso no es de la noche a la mañana y que una vida
no se cura en cuatro semanas. Sé que las experiencias propias
de las que escribí fueron procesos que yo pasé por años y que
han traído al lugar en el que hoy estoy, pero mi anhelo es que
lo que yo pasé no lo tengas que pasar tú, y que lo que yo sané
en años tú lo sanes en meses, mi anhelo es verte sana, feliz y
radiante tal como Dios te diseñó.
El anhelo de mi corazón es ver a todas las mujeres que rodean
mi vida siendo ellas y viviendo en paz y llenas de gozo, mi
anhelo es ver a las mujeres que rodean mi vida viviendo la
mejor versión de ellas mismas, la versión que Dios diseñó que
fueran.
Oro en el nombre de Jesús para que tu proceso de sanidad y
amor propio terminen pronto y muy pronto puedas verte y
amarte como Dios lo hace.

Eres increíble
Eres única e irrepetible
Eres inolvidable
Eres amada
Eres talentosa
Eres inteligente
Eres humilde y bondadosa
Eres hermosa
Eres feliz
Eres plena…
Con amor:
Erika Jacques.
Otros devocionales
Contactanos

Erika Jacques

Tel. 442 834 4650


avivamifuego.mx@gmail.com
@aviva_mifuego
Aviva mi fuego

También podría gustarte