ESTILO:

Estilo natural, abundantes reflejos del habla coloquial en los diálogos. En los fragmentos
narrativos y descriptivos, utiliza un lenguaje lleno de recursos poéticos. El tema de la obra se
basa en la descripción de la realidad desde una perspectiva intimista. La descripción de objetos,
espacios y animales no los hace de manera detallada, sino dándoles valores simbólicos, los
describe como ella los percibe.
Se trata de un realismo impresionista, basado en el punto de vista de la narradora. También
encontramos descripciones expresionistas, el mundo interior de la protagonista se proyecta
hacia fuera, la descripción de personajes y en la deformación de sus rasgos degrada a los
personajes. También utiliza expresionismo para describir el interior de la casa, distorsiona el
espacio creando imágenes misteriosas y oscuras.
Entre los recursos literarios destacan las sinestesias, las metáforas, comparaciones,
repeticiones anafóricas, personificaciones y animalizaciones cuando pretende degradar a un
personaje que le parece antipático.
Las técnicas narrativas; Laforet narra la historia en primera persona del singular, narradora
protagonista, en algunas ocasiones la narradora cede la voz a los personajes.
En cuanto al vocabulario, la autora manifiesta una clara voluntad de reflejar el lenguaje
coloquial, reproduciendo interrupciones, repeticiones, propias a la lengua oral, expresiones del
dialecto canario, el catalan… Se adecua el registro lingüístico a la personalidad de cada
personaje.
En conclusión, el estilo se corresponde muy bien al tema: la introspección, el análisis del estado
de ánimo, en este caso triste. Se produce una gran agitación psicológica.

TEMAS:
Se plantean temas como la amargura de la vida cotidiana, la soledad, la frustración de los
sueños y la muerte. Es sintomática la presencia de personajes atormentados, desorientados y
angustiados.
Estas figuras están en conflicto continuo con la sociedad de posguerra, sin embargo, no buscan
una solución colectiva, sino que se centran en una solución individual, sin ninguna pretensión
de transformar el mundo.
La búsqueda de libertad como una lucha contra la sociedad, a menudo esa rebeldía se encarna
en artistas que llevan una vida bohemia y libre de convenciones sociales.
También son abundantes las referencias a la búsqueda de la liberación por parte de Andrea, un
deseo de liberación femenina con el que se critica ciertas normas sociales. La novela refleja la
situación de sometimiento y obediencia de las mujeres a las convenciones sociales
patriarcales de la época, marcadas por el franquismo. Se percibe el personaje de Angustias,
pero también la violencia con la que Gloria es tratada por su marido.