Lauren Layne - Serie Love Unexpectedly - 5 - Un Ex para Navida 2

Un ex para Navidad – Love Unexpectedly #5 – Lauren Layne
An Ex for Christmas
(Love Unexpectedly #5)
by Lauren Layne
Está haciendo una lista y la revisa dos veces. ¿Pero hay un

buen chico entre todos sus ex novios traviesos?
Cuando un psíquico le dice a la fiestera y supersticiosa Kelly

Byrne que ya conoció a su verdadero amor, se obsesiona con la
idea de localizarlo antes de Navidad. Kelly inmediatamente
escribe una 'Lista de ex' y comienza a contactar a viejos novios
para averiguar cuál es el indicado . Cuando su novio de la
universidad llega a la ciudad, Kelly se convence a sí misma de
que están destinados a serlo. El problema es que las chispas
vuelan con alguien a quien nunca le ha dado una oportunidad:
su mejor amigo, Mark.
Mark Blakely ha visto a los chicos de la lista de Kelly romper

su corazón, y no está deseando verlos hacerlo de nuevo. Mark
siempre ha estado ahí para ella, pero el momento nunca
funcionó para que su relación fuera algo más. Ahora, justo
cuando Mark está listo para seguir adelante, la tensión sexual
entre ellos de repente se sale de los límites. Con la mañana de
Navidad a la vuelta de la esquina, solo espera que Kelly se
despierte y se dé cuenta de que todo lo que quiere ha estado
frente a ella todo el tiempo.
15 de diciembre, viernes por la tarde

¿Recuerdas cuando eras niño y no había mejor sensación que el
último día de clases antes de las vacaciones de Navidad?
Y luego te hiciste mayor y pensaste: “Hombre, esos eran los días.

Ojalá pudiera tener ese momento de pura alegría como adulto".
Consejo profesional: conviértete en maestro de escuela primaria.

La euforia no es la misma que cuando eras niño, pero está muy
cerca.
Diez minutos más. Solo diez minutos más, y luego no es más

que ponche de huevo y Bing Crosby por díaaaaaas .
"¡Adiós, Sra. Byrne, Feliz Navidad!"
"Feliz Navidad, Alex". Revuelvo los rizos rubios de la niña de

tercer grado. O al menos lo intento. Sale por la puerta en un
destello de éxtasis de vacaciones.
“Feliz Hanukkah, señorita Byrne. Y Feliz Navidad. Y feliz

Kwanzaa. Y-"
“Muchas gracias, Danielle. Disfruta tu descanso, cariño ".

La morena salta por la puerta detrás de Alex, y el resto de mi
clase de tercer grado hace lo mismo. Algunos logran un hiper
"¡Feliz Navidad!" o "¡Feliz Hanukkah!" pero al menos la mitad
está demasiado emocionada por las inminentes dos semanas sin
clases. Eso, combinado con la fiebre del azúcar de los cupcakes
de cumpleaños de Olivia M, hace que la mayoría de ellos
exploten por la puerta en un borrón de mochilas brillantes y
uniformes silenciados mientras corren hacia las niñeras y los
conductores privados que esperan.
Y ahora estás pensando, espera, espera, espera, ¿es una de esas

escuelas?
Sí. Totalmente lo es. Soy maestra de tercer grado en Emory

Academy, una escuela preparatoria privada ubicada en el
vecindario de Tribeca en Manhattan. La mayoría de mis
estudiantes tienen padres semi-famosos. La otra mitad son

simplemente ricos a la antigua.
Pero no te atrevas a ser todo un snob al revés conmigo, porque

los niños con cucharas de plata también necesitan buenos
maestros. Además, me gusta halagarme pensando que mi
ambiente de chica de pueblo pequeño que vive en la gran
ciudad las hará más mundanas.
Por ejemplo, el otro día les expliqué cómo solía ir y volver de la

escuela en esta bestia amarilla llamada autobús escolar, y les
voló la cabeza.
"Señorita Byrne?
El último niño en salir por mi puerta es Madison Meyers, una

chica dulce, aunque ligeramente preciosa, con un hermoso
cabello castaño brillante que no puedo evitar notar que es
impresionantemente impermeable al frizz. Ella no lo aprecia
todavía, pero espera hasta la secundaria. Ella, a diferencia de la
tuya, se dará cuenta de que se ganó la lotería del cabello.
Resisto la tentación de tocar mi propio cabello rubio

desordenado y veo cuán fuera de control se han vuelto los rizos,
cortesía de la persistente llovizna de hoy.
"Hey, Madison, ¿qué pasa?"
Se estira y se quita la mochila de piel sintética (o tal vez no tan

falsa; es difícil saberlo en esta escuela).
Empujando su diadema roja brillante más atrás en su cabello

perfecto, se inclina y hurga en su bolso hasta que encuentra lo
que parece ser un fajo de papel triturado cubierto de purpurina.
"Hice esto para ti", anuncia, lanzándomela. "Bueno, Sarah y yo".
Sarah es la niñera de Madison. O al menos lo era, tengo que

preguntarme si este proyecto de arte en particular no hizo que
la despidieran. Conocí a la madre de Madison, y la Sra. Meyers
no me parece del tipo que permitiría brillos en su casa.
"Gracias", le digo, levantando con cuidado el regalo. Me muevo

lentamente, buscando tiempo hasta que pueda ver con qué
estoy lidiando.
Le doy la más mínima sacudida y el fajo se despliega, junto con

una lluvia de purpurina plateada.
Ohhhhh . "¡Un copo de nieve! Es hermoso, Madison ".
"Lo sé." Empuja de nuevo su diadema. "No estaba satisfecha con

el copo de nieve que hice en clase el miércoles, así que quería
redoblar mis esfuerzos hasta producir algo de lo que pudiera
estar realmente orgullosa".
Escondo cuidadosamente mi sonrisa. “Bueno, tu arduo trabajo

valió la pena. Esto va directamente a mi refrigerador ".
Ella sonríe y aplaude en un gesto práctico que he visto hacer a

su madre en las conferencias de padres y maestros. “Estoy tan
contenta. Felices vacaciones, Sra. Byrne ".
"Felices vacaciones, Madison".
Una de las ventajas de trabajar en una escuela privada es que

no tenemos que andar con tanto cuidado en el tema de evitar
las fiestas religiosas frente a las seculares. Se anima a los
maestros a que enseñen a sus alumnos sobre todas las
vacaciones de diciembre y que sigan la dirección de cada
alumno en su saludo preferido.
Madison sale corriendo de la habitación y Jackie Reyes asoma

la cabeza. —“¿Ése es el último?”
"El último."
Jackie, una amigable coordinadora de cuarenta y tantos años

que es responsable de asegurarse de que todos los niños se
vayan a casa con el adulto adecuado, marca algo en su
portapapeles y luego se mueve para seguir a Madison hasta el
área de recogida. Ella retrocede y asoma la cabeza por la
puerta, con una amplia sonrisa en el rostro. "Casi llegamos."
Ella desaparece de nuevo, y miro hacia mi copo de nieve

brillante con una sonrisa.
No es que no ame mi trabajo. Lo hago. He querido ser profesora

desde que tengo uso de razón, y no puedo pedir un entorno de
enseñanza mejor que Emory. Si calificara mi vida profesional
en una escala del 1 al 10, estoy fácilmente en el rango de 9, y
podría ser un 10 si el director Mercedes solo aumentara mi
presupuesto de tecnología en lo más mínimo.
¿Pero mi vida personal?
Estamos flotando en la región de con suerte, 3.
Dos semanas para concentrarme en mí es exactamente lo que

necesito.
Bueno, eso y el ponche de huevo borracho.
Y luces navideñas.
Y el disco navideño de Michael Bublé.
¿Y tal vez algo alto, moreno y guapo para sostener mi mano

mientras suplicaba escuchar “Baby, It's Cold Outside” solo una
vez más?
Oye, una chica puede soñar.
Tarareando “Let It Snow”, me pongo a trabajar ordenando mi

salón de clases, una tarea sorprendentemente abrumadora,
considerando que acabo de limpiar anoche y hoy fue solo
medio día. Hay glaseado de cupcakes verde brillante en los
escritorios, bastones de caramelo triturados en el piso e
interminables trozos de papel de construcción, cortesía de la
sesión de creación de tarjetas navideñas de esta mañana.
Por un segundo, considero quitar algunas de las decoraciones

navideñas que adornan las paredes, ya que la clase no se
reanuda hasta el 3 de enero, pero simplemente no puedo
hacerlo. Quitar las decoraciones navideñas antes de las
vacaciones está mal . Prefiero volver a finales de diciembre
para limpiar que matar mi mojo navideño incluso antes de que

comience.
En cambio, ordeno mi escritorio lo suficiente para que la

directora Mercedes no pueda encontrar algo de qué quejarse si
se registra más tarde.
Estoy cerrando los gabinetes, mi selección de canciones ahora en

"Deck the Halls", cuando un alto más bajo se une a mi fa-la-la-
la . Lo que le falta en tono lo compensa con entusiasmo.
Me doy la vuelta y veo a Jessica Trenton, maestra de primer

grado y mejor amiga del trabajo, subiéndose a mi escritorio.
Tiene un bonito regalo envuelto en oro en la mano, una maleta

junto a la puerta. Jessica y su prometido son de Chicago y se
dirigen a casa para las vacaciones.
"¿Ves? Te dije que tu vuelo no sería cancelado ”, le digo.
"Sí, tenía una fe inmensa en tus hojas de té", dice.
"¡Y sin embargo tenían razón!" Hago un gesto hacia la ventana.

"Lluvia, pero ni un copo de nieve a la vista".
"Punto justo. ¿Sabes que tienes brillantina en las tetas? "

Miro mi suéter negro y pantalones grises. Efectivamente, el copo
de nieve de Madison ha dejado su huella.
“Peligros de tercer grado,” digo, deslizando inútilmente el brillo.
"Te escucho. Encontré un recipiente abierto de Elmer en mi bolso

el otro día ".
“¿Llevas pegamento en tu bolso? Muy rudo ".
“Yo no lo puse allí. No sé cuál de los pequeños monstruos logró

meterlo en mi bolso, pero mi dinero está en Hillary Garrett ".
"¿La dulce pelirroja?"
“Solo dices eso porque su papá es sexy. Ella es bestial ".

“Te encantan los tramposos. Y pensé que su padre era gay ".
"Él lo es. Sin embargo, todavía está caliente ". Jessica mueve las
cejas. “Pero vamos a cosas más importantes. ¿Vas a abrir tu
regalo ahora o vas a insistir en ser ese bicho raro que se niega a
abrir los regalos hasta la mañana de Navidad?”
“Estoy de acuerdo con mi política de raritos,” digo, sacando una

chaqueta olvidada del perchero. "Abrir los regalos antes del día
real disminuye la magia navideña".
"¿ O simplemente extiende la temporada?" Jess se burla,

recogiendo el regalo del tamaño de una caja de zapatos y
sacudiéndome tentadoramente.
Aprieto mis labios. No es un punto terrible. Y realmente podría

ir por un regalo ahora mismo. . . .
"Preguntémosle a Magic 8", proclamo.
Ella pone los ojos en blanco, pero amablemente alcanza detrás

de ella y abre el primer cajón de mi escritorio. Su mano emerge
con una bola Magic 8.
"Recuérdame", dice ella. “¿Cuántos de estos tienes? ¿Cincuenta?"

"Solo tres."
“Tres de más, Kell. Tres de más ".
Es un argumento antiguo, así que no me molesto en señalar que

no son demasiados: necesito uno para casa y otro para el
trabajo, y el pequeño cabe en mi llavero para cuando estoy
fuera de casa. Obviamente.
Nunca se sabe cuándo necesitará la ayuda del destino.
“Muy bien, Magic 8, escuchémoslo. ¿Debería nuestra chica abrir

su regalo ahora o esperar hasta la mañana de Navidad?”
“Preguntas de sí o no” —le recuerdo, colocando el pequeño

chaquetón junto al mío, así que recuerdo dejarlo en los objetos
perdidos y encontrados al salir.
“Bien, ¿cómo podría olvidar todas estas estrictas reglas

científicas? ¿Kelly debería abrir su regalo antes de que me
vaya al aeropuerto, como una mejor amiga normal?” le
pregunta al Magic 8.
Ella lo sacude y yo espero pacientemente, sabiendo ya la

respuesta.
Jessica arruga la nariz ante la respuesta. "De ninguna manera."
"Te lo dije." Arranco la pelota de su mano y la vuelvo a colocar

en el cajón, bloqueándola. “Y en caso de que te estés
preguntando dónde está tu regalo, ya está en el correo. A la
dirección de tus padres. No abrir hasta el día de Navidad, o
Nochebuena como muy pronto, porque soy muy flexible ".
"Sí, tan flexible", dice, saltando del escritorio y entregándome el

regalo.
Coloco el copo de nieve de Madison con cuidado encima del

regalo de Jessica, luego me pongo el abrigo blanco de J. Crew
que obtuve en liquidación el año pasado.
"¿Estás segura de que no quieres venir a casa conmigo?" Jessica
suplica mientras cierro la puerta de mi salón de clases. “Erik
puede conseguirte un boleto usando sus millas. Y mis padres se
mueren por conocerte en persona ".
Le doy los brazos. "Eres dulce y te lo agradezco, pero te prometo

que estaré bien".
"Vas a pasar la Navidad sola", dice Jess con suavidad. Tú . La

nuez de Navidad ".
“Lo sé, pero es solo un año, y en realidad estoy deseando que

llegue. Por primera vez, puedo hacer la Navidad a mi manera
".
Sé que va a ser una gran Navidad, porque la Magic 8 Ball,

versión casera, me lo dijo. Sin embargo, no le digo esto a Jess. En
su mayoría es tolerante con mi naturaleza supersticiosa, pero
tiene sus límites.
Y realmente, no te sientas tan mal por mí solo en Navidad. No

soy huérfana, mis padres no pertenecen a una secta.
Es así: mis padres, que son prácticamente los padres perfectos, se

casaron el 22 de diciembre hace treinta años. Normalmente
mantienen su aniversario bastante discreto, no queriendo que
interfiera con las festividades navideñas, pero este aniversario
es el número treinta para ellos, y ahorré el sueldo de muchos
maestros para enviarlos a su viaje de la lista de deseos: un dos-
semana de crucero por Alaska en Navidad.
Y había hecho lo no reembolsable para que no pudieran

quedarse atrás por culpa.
Entonces, sí, técnicamente voy a pasar la Navidad sin mi

familia, pero no es una triste historia dickensiana aquí.
"¿A que hora te vas?" Le pregunté a Jess después de desviarnos

hacia los perdidos y encontrarnos que se quitara el abrigo y
luego saliera a la tarde lluviosa. Los niños se fueron hace mucho
tiempo, con suerte para construir casas de jengibre o comprar el
árbol de Navidad perfecto, y el patio de la escuela se siente
anormalmente silencioso.
Jess abre su paraguas rojo y, apoyando su bolso en su maleta

con ruedas, busca un teléfono celular. “Voy a tomar un Uber
desde aquí, luego pasaré por la oficina de Erik para recogerlo de
camino a JFK. ¿Y estás segura de que no vendrás?”
"Positivo. Además, mi horóscopo dice que hoy me toca un roce

con la mala suerte. Estoy bastante segura de que esta mañana
se me cayó el rímel al inodoro, pero estaría loca si me subiera a
un avión con ese tipo de pronóstico ".
Jess me da una mirada suave mientras detiene a Uber y llama

a un auto. "Espera. Nuestros cumpleaños tienen cuatro días de
diferencia. ¿No eres tú la que siempre me dice que somos
mejores amigas porque ambas somas? . . ¿Gammas?”
“ Géminis . Y buen punto, tal vez deberías quedarte aquí en

Nueva York ". Le doy una amplia sonrisa mientras me pongo
la capucha por la cabeza.
“Llámame anticuada, pero la Navidad para mí significa un

árbol grande y torcido en la sala de estar de mis padres, y la
media que hice cuando tenía ocho años colgaba de la repisa de
la chimenea. En mi apartamento no cabe ni un helecho, y
mucho menos una chimenea".
"Entonces esa es la Navidad que quiero para ti". Muevo mis

dedos y gesticulo para un abrazo. "Venir venir. Digamos
nuestras despedidas; tu coche está aquí ".
"Tiempo récord, considerando que está lloviendo".
Ella levanta su paraguas más alto y me agacho debajo de él

para darle un abrazo. "Feliz Navidad, cariño".
Ella me aprieta. "¿Cuánto autocontrol te tomó para no cantar la

canción?"
En respuesta, tarareo las primeras notas de "Merry Christmas,

Darling" de Karen Carpenter.
"Pensado así. Bueno, esa soy yo ”, dice, señalando un Honda
negro con la cabeza. “¡Feliz Navidad, mujer! Hazme un favor y
echa un polvo, ¿quieres?”
Ignoro el último bit. "¡Feliz Navidad! Envíame un mensaje de

texto para hacerme saber que tu avión no se estrelló ”, llamo.
Saludo con la mano al auto que se va, e incluso después de que

mi mejor amiga desaparece durante las próximas dos semanas,
no siento ni un ápice de tristeza.
Es Navidad, y tal vez sea porque paso todos mis días pasando
el rato con el grupo de ocho y nueve años, pero siento que tengo
todas las vibraciones felices de la temporada fluyendo por mis
venas.
Y tampoco me duele que tenga las próximas dos semanas libres.

Como dije, Emory Academy está en Tribeca, una parte de

Manhattan de moda y muy cara. Mi apartamento de medio
tiempo está en el cercano distrito financiero, a poca distancia a
pie.
Pero mi casa de fin de semana, mi casa de vacaciones. . .
Norte del estado de Nueva York
¡A la estación de tren vamos!
Mientras camino, reviso la aplicación del tiempo en mi teléfono,

encantada de ver que, si bien hoy no hay más que lluvia,
mañana existe la posibilidad de que caiga nieve. Nada dice
vacaciones de Navidad como la nieve.
Simplemente pierdo el tren, pero hay una voz decente cantando

"White Christmas" cerca, y el andén no está demasiado lleno,
por lo que esperar no es tan malo como podría ser.
Mi mirada se fija en una mujer de mediana edad que ha

acampado debajo de una de las escaleras. No es raro ver a todo
tipo de personas bajo las calles de Nueva York, aunque esta
está mejor vestida que la mayoría. Lleva una blusa blusa roja,
jeans y botines, y está sentada con las piernas cruzadas sobre
una manta a cuadros. Ella tiene ramitas de lo que parecen ser
rosas falsas en su cabello.
Nada de eso es la parte extraña.
Lo raro es que me está mirando. Intensamente.
Hacemos un contacto visual incómodo y le doy una sonrisa

rápida antes de volver mi atención a mi teléfono.
Pero todavía siento sus ojos sobre mí.
No de una manera hostil, no de la manera que me hace

catalogar mentalmente si vi o no a algún policía en mi camino
hacia aquí que me escucharía si gritaba. Tampoco parece
ansiosa por empujarme a las vías del tren, y como ese es el
miedo secreto de todos los neoyorquinos, eso es una ventaja.
Aún así, el enfoque es inquietante. Miro hacia arriba de nuevo

y sus ojos se fijan en los míos. Su mirada oscura es clara y
enfocada, y no puedo decidir si eso es más o menos perturbador
que si ella pareciera algo confusa.
Luego me sonríe directamente. "Kelly".
Se me pone la piel de gallina de inmediato por razones que no

tienen nada que ver con el clima invernal. Ella sabe mi
nombre.
"Ven." Ella llama. "Ven. Ya veo ".
Ahora estás pensando, diablos, no. ¡Correr!
Debería estar pensando lo mismo, y en cierto nivel, lo estoy,

pero. . .
Hay un par de docenas de personas alrededor. Nadie me está

prestando atención, pero no es como si estuviera solo en un
callejón oscuro.
Y mira, ya hemos establecido que creo en el destino

expresándose a través de una bola Magic 8 y horóscopos, y
aunque no lo he mencionado todavía, evito por completo a los
gatos negros, el número trece, y caminar bajo escaleras.
También creo que existe la videncia . Lo sé, porque mi abuela

lo tenía.
La abuela Shirley era una de esas ancianas deliciosamente

chifladas que la mayoría de la gente descarta como
extravagantes, pero nadie puede negar que parecía saber cosas.
Sabía cuándo ganaría mi partido de fútbol y por cuántos
puntos. Ella sabía cuándo nacería la camada de gatitos de su
gato, hasta el último minuto. Una vez incluso predijo un
terremoto, aunque son muy raros en Nueva York.
Ella falleció cuando yo estaba en undécimo grado (ella

también había predicho el cuándo y el cómo de eso), y aunque
no heredé sus talentos, nunca dejé de creer que algunas personas
ven y saben cosas que no deberían ''. Yo lo llamo la Vista.
Me acerco y la mujer sonríe y me hace señas para que me

acerque aún más.
Me detengo a unos metros de distancia. Soy supersticiosa, no

loca.
La mujer se inclina hacia adelante. "Buscas el amor".
Eh. Me tienes impresionada. Quiero decir, ¿la mayoría de los

humanos no buscan el amor? Claro, recientemente estoy soltera
y no quiero estarlo en particular. Y tal vez a veces me esfuerzo
demasiado por encontrar a mi chico para siempre.
Pero no escucho nada más que conjeturas afortunadas genéricas

de esta dama.
“Claro,” digo, ya comenzando a retroceder.
Ella levanta una mano. “¿El que buscas? Tu chico para siempre,
el amor de tu vida. . . "
Me congelo, porque su fraseo se hace eco de mis pensamientos

casi exactamente. ¿Una coincidencia? Quizás. No me alejo
todavía, dispuesto a escucharla.
Ella sonríe de nuevo. "Ya lo conociste".
Parpadeo. "¿Qué? Creo que quizás quieras volver a comprobar

esa bola de cristal. Soy soltera ".
Su sonrisa simplemente crece. “No dije que no estuvieras soltera.

Dije que ya lo conocías. Simplemente lo dejaste ir. Volverá
contigo antes de Navidad ".
Whoa, whoa, whoa . Esto es . . . ¿Eh ?
"¿Me estás diciendo que el amor de mi vida es uno de mis ex?"
Extiende ambas palmas como para decir: ¡ Ahí lo tienes!
Reprimo una pequeña oleada de decepción. Claramente ella no

ha conocido a mis ex. Hay algunos decentes en la mezcla, pero
en su mayoría son falsos, y ninguno de ellos hace que mi

corazón lata más rápido. Bien quizás-
No. No. No vayas allí .
Afortunadamente, siento el estruendo de un tren que se

aproxima, y una mirada por encima del hombro me dice que
mi viaje para salir de aquí se acerca.
"Muchas gracias", le digo con una sonrisa forzada. "Feliz

Navidad."
"Felices vacaciones", dice asintiendo, levantándose y recogiendo

su manta. Aparentemente, ha seguido el ejemplo de Madison
Meyers y se está apegando a la ruta de la PC. Lo
suficientemente justo.
Levanto una mano en un gesto y me dirijo hacia el tren, pero

sus siguientes palabras me dan una nueva ola de piel de
gallina.
“Dile a tus padres feliz aniversario. Treinta será un año mágico

para ellos ".
Giro mi cabeza alrededor. "Cómo hizo-"

La mujer se ha ido.
Como desaparecido, ido.
Dejándome pensando. . .
Si una mujer que nunca había conocido tenía razón sobre el

aniversario de mis padres, ¿también tenía razón sobre otras
cosas?
¿Ya conocí a mi único amor verdadero?

15 de diciembre, más tarde el viernes por la tarde

“Que tengas una pequeña Navidad feliz, que tengas una
pequeña Navidad feliz, que tengas una pequeña Navidad feliz.
.."
Me encanta la canción, toda la canción, pero es solo esa línea

que pasa por mi cabeza, así que esa es la única parte que sale
de mi boca.
Un coche hace un bocinazo amistoso y saludo, aunque no veo al

conductor antes de que pase. Porque ese es el tipo de ciudad que
es Haven. La ciudad del norte del estado de Nueva York a la
que llamo hogar durante la mitad de la semana no es tan
pequeña como para que todos conozcan a todos los demás, solo
lo suficientemente pequeña como para fingir que sí.
Y ahora estás como, espera, ¿la mitad de la semana? ¿Sobre

qué trata?
Es como esto . . .
Nací y crecí aquí en Haven, pero como tantos jóvenes

veinteañeros que crecieron a unas pocas horas de la ciudad de
Nueva York, cuando llegó el momento de conseguir un trabajo,
la ciudad ofreció más opciones. Esto es especialmente cierto para
un maestro de escuela primaria en una ciudad con exactamente
una escuela pública, cero vacantes de trabajo.
Y no me refiero a que de una manera afligida, no pude

encontrar el trabajo de mis sueños en mi ciudad natal. A decir
verdad, estoy un poco emocionada con la forma en que resultó
mi vida. Me encanta mi trabajo en la escuela preparatoria en
Manhattan.
Y me encanta tanto volver a Haven todos los fines de semana.
Verán, la Ciudad de Nueva York es una locura de cara,

especialmente para una chica con el sueldo de un maestro. La
mayoría de mis compañeros de trabajo viven fuera de la
ciudad, pero el destino roció un poco de amor en mi situación de
vida. Tengo un lindo apartamento de una habitación que

comparto con una hermosa pelirroja llamada Waverly. Es una
consultora que viaja de lunes a jueves (Londres en este
momento, pero también ha sido Dubai, Los Ángeles,
Ámsterdam, y eso es solo el año pasado). Convertimos el
enorme dormitorio en dos, y básicamente. . . Compartimos. Yo
vivo allí durante la semana, ella vive allí los fines de semana
mientras yo me dirijo a Haven.
Todos los beneficios de vivir sola, con las ventajas económicas de

tener una compañera de cuarto. Es brillante, ¿verdad? Y sí, es
un viaje largo el viernes por la tarde y el lunes por la mañana.
Pero también significa que puedo ver a mis padres todos los
domingos, pasar las noches de fin de semana bebiendo vino con
la tripulación femenina con la que crecí, atender la casa que me
dejó mi abuela.
Y está mi perro, Rigby, que. . .
Bueno, está bien, Rigby no vive conmigo a tiempo completo. De

hecho, se podría decir que solo tengo la custodia parcial. Ni
siquiera la custodia primaria .
Esto es lo que pasó con eso . Cada año, soy voluntaria en el

refugio de animales local durante las vacaciones de verano.
Todos los años me digo a mí misma que no me llevaré a casa
uno de los animales, porque mi apartamento en Manhattan no
admite mascotas. Y no puedo dejar un perro en mi casa aquí en
Haven, cuando me voy cuatro noches a la semana. Ergo, no
perro.
Pero entonces esta joven de aspecto agotado llevó a Rigby al

refugio durante mi turno. Rigby había pertenecido a la abuela
de la mujer, quien falleció inesperadamente. Dado que la
familia extensa estaba formada por personas felinas o alérgicas
a los perros, el pobrecito no tenía hogar.
Quiero decir, ninguna de las mascotas del refugio tiene casa,

pero. . . bueno, si alguna vez has tenido una mascota, sabes que
a veces hay algo sobre ese animal, ¿sabes?
Además, escuchen esto: al crecer, siempre había querido un

perro, y mis padres siempre habían dicho que algún día. Y
antes de saber que "algún día" en realidad significaba "nunca"

en el habla de los padres, elegí el nombre de mi perro de algún
día: Rigby. Y quería un cocker spaniel.
Avance rápido hasta ese día en el refugio. Aquí estaba un

cocker spaniel negro llamado Rigby que necesitaba un hogar.
Fue una señal.
Como hemos establecido, soy una gran aficionada a las señales.
Entonces lancé un plan. Rigby vino a casa conmigo y durante

el resto del verano se quedó en mi casa en Haven, excepto con
muchos viajes a la casa de mi mejor amigo Mark, cuyo patio
trasero limita con el mío.
Mark Blakely es uno de esos perros, ¿sabes? Tiene los jeans que
no son quisquillosos, el gran patio, y no va a perder su mierda
si hay piel de perro en su cama.
Así que esa primera mañana de septiembre, cuando volví al

trabajo, me presenté en la puerta de Mark con dos pares de ojos
de cachorro: los míos y los de Rigby.
Se había llevado al perro. De hecho, incluso antes de que

apareciera, ya había comprado cuencos para perros y una
cama e instalado una puerta para perros, porque lo había visto
venir. Beneficios para el mejor amigo y todo.
Subí los escalones de la casa de Mark, cambiando mi villancico

entre dientes a "Jingle Bells".
La casa de Mark está básicamente en mi patio trasero.

Técnicamente, nuestros patios traseros están separados por una
línea de propiedad invisible, pero como ninguno de nosotros se
molestó en colocar una cerca o cualquier tipo de divisor, es
prácticamente un gran césped compartido. Creo que nos decimos
a nosotros mismos que lo hacemos por el perro, pero también
tiene otros beneficios: pedir prestada una taza de azúcar (léase:
vino) y cosas así. Además, siempre hay alguien con quien
hablar cuando lo necesitamos. Aunque normalmente soy yo
quien necesita. Mark no habla mucho.
Desde fuera, la casa de Mark se parece mucho a la mía:

pequeña, un poco anticuada. Por dentro, sin embargo, es
asombrosa. Recientemente renovó todo el piso de abajo, y puedo
estar un poco celosa. Derribó el viejo y estrecho porche
envolvente y lo reemplazó por uno dos veces más grande. Tiene
un amplio columpio de madera y dos cómodas sillas al aire
libre, además de una especie de elegante mecanismo
desplegable que le permite sentarse allí incluso cuando nieva y
permanecer completamente seco.
Ahora, si pudiera convencerlo de que coloque algunos miles de

luces navideñas. . .
Abro la puerta trasera de Mark y entro sin llamar (esto es

Haven, no somos grandes en cerraduras). Son las cuatro de un
viernes, lo que significa que estará en su restaurante
preparándose para una noche ajetreada de fin de semana
sirviendo la mejor comida de la ciudad. Podría ser parcial al
respecto, pero no lo creo. Cedar and Salt abrió hace un año y
medio, y desde entonces ha sido prácticamente imposible
conseguir una mesa.
Tarareo suavemente "Let It Snow" mientras llamo a Rigby. Por

lo general, mi perro me recibe en la puerta principal y frunzo el
ceño ante la falta de besos caninos descuidados.
Un momento después entro en otro tipo de besos por completo.
"¡Oh Dios!" Me tapo los ojos con las manos y giro sobre los
talones para darles privacidad. “Oh, Dios mío, lo siento mucho,
y me voy, como, ahora mismo. . . "
Escucho una maldición murmurada (Mark), luego una risa

avergonzada (Sheila).
“Está bien, Kelly. Me estaba yendo. "
"No, no lo estabas", le digo a la novia de Mark sin darme la

vuelta, con las manos todavía sobre mis ojos. "Sé lo que vi, y eso
no se iba".
“Solo me estaba despidiendo. De verdad ”, dice Sheila.

"¿En realidad?" Pregunto con curiosidad, moviendo mis dedos

hacia un lado, para mirar la pared. "Porque parecía ..."
Escucho un gruñido de Mark y sabiamente cierro la boca. Algo

golpea la parte de atrás de mis rodillas, doblándome
ligeramente hacia adelante, y sonrío, inclinándome para
saludar a Rigby.
"¡Ahí está mi buen chico!"
El cocker spaniel negro, retorciéndose, salta emocionado

alrededor de mis pies, haciendo ruidos emocionados alrededor
del enorme hueso de su boca. Un hueso grande .
"Bueno, no es de extrañar que no vinieras a saludar", le digo,

frotando sus sedosas orejas. "Parece que Santa llegó temprano
para ti, ¿eh?"
Se pone boca arriba para que pueda palmear su vientre, todo

sin perder el hueso.
“Nos vemos, Kelly.”
Miro hacia arriba para ver a la novia de Mark encogiéndose

de hombros con su abrigo hinchado.
"¡No!" Me paro. "Tú quédate, yo me iré".
"Sí, eso", dice Mark detrás de mí.
Ambas chicas lo ignoramos. Rigby trota hacia Sheila,

golpeando su hueso contra su rodilla a modo de despedida.
Ella le da una palmadita en la cabeza. Sheila no es realmente

una persona de perros, pero le doy crédito por intentarlo, en
beneficio de Mark. "No, realmente me estaba yendo", dice.
"Tengo que llegar al aeropuerto de todos modos".
"Oh, es cierto. Mark dijo que ibas a volver a visitar al lado de

la familia de tu padre durante las vacaciones. Atlanta?”
"Sí. Buena memoria." Suavemente quita la pata de Rigby de su

abrigo.
“¡Oh, qué divertido! ¿Necesitas que te lleven al aeropuerto?”

Pregunto.
De acuerdo, sí. Sí, es exagerado, considerando que Sheila y yo

no nos conocemos tan bien. Es solo que sé por experiencia que el
mundo de las citas puede ser complicado cuando tu mejor
amigo es miembro del sexo opuesto, así que me esfuerzo mucho
para que ninguna de las novias de Mark se sienta amenazada.
Y me gusta Sheila. Quiero decir, tengo dudas de que ella y

Mark lo lograrán a largo plazo, pero solo porque ella es
Escorpio, y simplemente no es una pareja de amor ideal para el
Virgo de Mark. Quiero decir, ella no es su peor pareja posible,
ese sería mi propio Géminis. Es solo. . . bueno, lo que sea, eso es
para que ellos se den cuenta. O eso me dice Mark.
"Estoy bien. Pero gracias ”, dice con una sonrisa divertida. "Que
tengas una buena Navidad".
"¡Tú también!" Yo digo. Sheila regresa con Mark,

probablemente para un último beso de despedida, y yo me
inclino de nuevo, en parte para darle más atención a Rigby, en
parte para darles un poco de privacidad.
Un minuto después escucho la puerta principal de Mark

cerrarse, y me levanto, preparada para la irritación de mi mejor
amigo porque me lo merezco totalmente.
Saca una cerveza de la nevera, sosteniéndola sobre su ancho

hombro en silencioso ofrecimiento.
"No, gracias." Me dejo caer en un taburete en su isla de cocina.
Le quita la tapa, la tira a la basura y se vuelve hacia mí.
Le doy una amplia sonrisa. "Debería haber llamado".
Mark se encoge de hombros y toma un sorbo de cerveza.

"Probablemente."
“En mi defensa, es viernes por la tarde. Pensé que estarías en el

restaurante ".
"En mi defensa . . . es mi casa."
Aprieto mis labios. "Un punto sólido".
"Ya me lo imaginaba." Toma otro sorbo de cerveza. "¿Qué estás

haciendo aquí tan temprano?"
Por lo general, no regreso a Haven hasta tarde el viernes por la

noche, y Mark y yo hemos caído en la rutina de ponernos al
día con el queso asado a la medianoche después de que él
entregó el restaurante al personal de cierre y se dirigió a casa
para alimentarse solo en lugar de todo el pueblo.
“Último día de clases antes de las vacaciones. Los niños se fueron

a casa al mediodía ".
“Ah. Bien. No es de extrañar que estés de tan buen humor ".
Estoy de buen humor y su comentario me acaba de recordar

por qué.
"Nunca adivinarás lo que me pasó en la estación de tren", le

digo, inclinándome hacia adelante con entusiasmo.
"¿Mmm?" pregunta, menos emocionado.

“Está bien, si te lo digo, no debes poner los ojos en blanco y
decirme que soy una chiflada. ¿Promesa?"
“No.”
Eso es lo que esperaba.
Déjame pintar un retrato para ti. Mark Blakely: seis pies dos,
veintiocho años, cabello oscuro, ojos oscuros, ante, Levi's y
franela, sarcástico y serio, un Virgo, y resulta que es un muy
buen cocinero. No cree en el destino, la fortuna o la suerte.
Yo: Kelly Byrne, veintisiete años. Cinco pies cuatro, más

acolchada de lo que me gustaría, especialmente alrededor del
medio. Cabello rubio espeso, de longitud media. Géminis saliente
con gran interés en las cartas del Tarot, Bolas 8 mágicas,

astrología. . .
Desde fuera, parecería una locura que fuéramos mejores amigos

desde que estábamos en el último año de la escuela secundaria.
Sus padres se mudaron aquí desde Vermont el verano antes de
nuestro último año. Como presidenta de la clase, fui nominada
para mostrarle la escuela al chico nuevo. Había estado callado
y un poco cáustico. Había sido burbujeante y persistente.
Esa es la historia externa que la mayoría de los demás conocen,

y es totalmente cierta.
Sin embargo, hay algo más.
La física fue la única clase que Mark y yo tuvimos juntos en el

último año, y éramos socios. Solos, los dos éramos bastante
mediocres en ciencia; juntos, estábamos logrando flotar en el
rango B + / A-. Normalmente estudiábamos en mi casa, pero un
domingo de mediados de noviembre, mis padres decidieron que
querían renovar sus antiguos pisos de madera antes del Día de
Acción de Gracias. Tuvimos que estar fuera de casa por un día o
dos. Mark y yo habíamos postergado un poco nuestro trabajo
para el día siguiente, la biblioteca estaba cerrada, así que. . . su
casa.
Siempre se había mostrado reacio a dejarme acercarme a su
casa, pero no había dejado que eso me molestara. El instinto me
dijo que se trataba más de protegerme de su casa que de
proteger su casa.
Mi instinto estaba en lo cierto. Mark nunca había hablado de

su hermana, así que asumí que ella era mucho mayor o mucho
más joven y que simplemente no eran cercanos.
Ese domingo lluvioso me enteré de que estaban cerca. Emily era

dos años más joven que nosotros y. . . estaba enferma. Mi tía Ida
sobrevivió al cáncer de mama, así que pensé que había
entendido el cáncer. Me había equivocado terriblemente.
Verlo devastar a una joven de dieciséis años fue muy diferente.

No pasé mucho tiempo con Emily. Fue educada en casa, ya que

sus citas de tratamiento de quimioterapia imposibilitaban
cualquier horario regular. El pensamiento me había resultado
casi insoportable, agonizante y solo.
Mark había dicho que no era así tanto. Ella se estaba

muriendo, sí. Pero no sola. Emily aparentemente siempre había
sido del tipo callado y solitario incluso antes del diagnóstico.
Ella no se había mostrado antipática conmigo ese primer día, ni
ninguno de los días posteriores, simplemente. . . a distancia.
Como si realmente no le importara de una forma u otra si la
amiga de Mark estaba en la casa. Diablos, para el caso, a ella
no parecía importarle si Mark estaba cerca.
Le molestaba. Nunca lo dijo y se esforzó por no mostrarlo. Él se

encogía de hombros cuando ella fallaba en darle las gracias por
el brazalete que él (bueno, nosotros) le había elegido en el
centro comercial. Él nunca se estremeció cuando ella le gritó por
preguntarle cómo se sentía. Fue una situación espantosa. Me
dolería por Emily, obviamente. El destino le había dado una
mala mano, y no todo el mundo maneja eso con el soleado Zen
que ves en las películas.
Pero también me dolería por Mark y sus padres. No solo tenían

la impotencia de ver desvanecerse a alguien que amaban, sino
que también se habían mantenido a distancia.
De todos modos, el punto es. . . Mi conocimiento de Emily, creo
que más que cualquier otra razón, es la razón por la que Mark
y yo nos hicimos amigos: buenos y duraderos amigos, no solo
amigos casuales del último año de la escuela secundaria. No
solo porque conocía esa parte secreta de él, sino porque no se lo
había contado a nadie, ni siquiera a mis propios padres, aunque
Mark finalmente se lo había dicho él mismo, ya que se habían
convertido en pseudo-padres para él mientras que sus propios
padres se habían convertido en consumido por el cuidado de
Emily.
Todavía no sé por qué me dejó entrar . Ni siquiera se lo había

dicho a su propia novia (Melanie, su novia de la escuela
secundaria, cuyo introvertido Tauro encajaba perfectamente
con su Virgo, solo digo). Le pregunté una vez, la tarde después
de su funeral. Emily luchó duro durante años, pero incluso
después de entrar en remisión brevemente y darnos esperanza a

todos, falleció cuando tenía dieciocho años.
Mark y yo teníamos veinte años. Regresé a casa de la

universidad para el servicio conmemorativo, y luego estábamos
sentados en su cama, bebiendo cervezas a pesar de que aún no
teníamos veintiún años, pero dadas las circunstancias, nadie dijo
una palabra.
El servicio había sido pequeño, solo para familias. Bueno, mi

familia y yo, aunque en ese momento había empezado a
pensar en mí mismo como en mi familia. Y le pregunté por qué
. Por qué me lo había dicho cuando no se lo había dicho a nadie
más.
Se encogió de hombros y tomó un sorbo de su Coors. “Solo una

de esas cosas, Byrne. Has pasado tanto tiempo sin hacerlo raro,
no empieces conmigo ahora ".
Lo tengo. Algunas cosas simplemente no estaban destinadas a

ser cuestionadas; simplemente lo eran.
Mark y yo somos una de esas cosas, supongo.
¿A dónde iba con esto? Correcto. Mark y yo somos cercanos, lo

más cercanos que pueden ser un chico y una chica sin tener
relaciones sexuales (lo que nunca hemos hecho, sé que te lo
estabas preguntando). Pero de todos modos, estamos cerca y, sin
embargo, hay algunas cosas en las que no estamos de acuerdo.
Mi "superstición" (su término, yo lo llamo "sabiduría cósmica")

es uno de ellos.
Por eso no va a estar tan emocionado por mi tarde como yo,

pero se lo cuento de todos modos.
"Está bien," comienzo. "Realmente . . . tienes algo de vino? Me

acabo de dar cuenta de que debería celebrar ".
"¿Celebrar lo que lees en tus hojas de té o celebrar el último día

de clases?"
“El último día de clases”, digo. "Y no eran hojas de té, era una
adivina".
Mark gime, pero abre la nevera y saca una botella de mi pinot

grigio favorito. Digamos que estoy aquí con la suficiente
frecuencia como para que él lo mantenga abastecido.
"Está bien, de todos modos, estaba esperando en la plataforma y

siento a esta señora mirándome, ¿verdad?" Comienzo cuando
saca un sacacorchos de un cajón. “Primero creo que tal vez ella
está un poco fuera de lugar, pero luego comienza a hablar,
preguntándome si mis padres están esperando su viaje de
aniversario. Su viaje por el trigésimo aniversario. Por ejemplo,
ella especificó el número exacto, y tenía razón ".
Saca el corcho. “Entonces ella conoce a tus padres, sabe que

están a punto de ir en un crucero de aniversario. Vaya cosa."
“No, ella no los conocía. Nunca la había visto antes ".
Mark se lleva los dedos formando una pistola a la cabeza y

finge apretar el gatillo.
"Está bien, pero esa ni siquiera es la parte genial", le digo

mientras saca un vaso del gabinete.
"No lo digas".
"Y ella me dijo que ya lo conocía".
"¿Ya conocías a quién?"
Pongo los ojos en blanco. "Mi único amor verdadero,

obviamente ".
Mark levanta la vista. "¿Qué?"
“Eso es exactamente lo que me dijo. Dijo que ya lo había

conocido, que ya había conocido a mi único amor verdadero y
que me reuniría con él antes de Navidad. O algo. Estoy
parafraseando ".
Mark me mira fijamente, sus ojos penetrantes. "¿Que se supone

que significa eso?"
"Bien . . . " Me inclino, levanto a Rigby y lo pongo en mi regazo.

Es demasiado grande para esas cosas, pero solo veo a mi bebé
unos días a la semana. Me permite mimarlo. “Lo pensé todo el
camino a casa, y creo que significa que dejé que alguien se
escapara. Claramente, uno de mis ex novios era el indicado ".
"Claramente", murmura, volviendo su atención a mi vino.
"No me crees".
"No", dice poniendo la clase frente a mí. "No creo que una loca
que conociste en el andén del tren tenga una idea brillante de
tu vida amorosa".
"Entonces, ¿cómo se enteró de mis padres?"
“Quizá haya estado antes en la plataforma. Te escuchó por

teléfono planeando el viaje para tus padres ".
Una respuesta lógica, pero no la correcta.
Mi abuela me enseñó a escuchar lo que ella llamaba "aleteo",

que luego supe que era mi instinto, mi intuición. Y estoy seguro
de que esta dama era legítima, realmente tenía la Vista. Y
realmente ya conocí a The One.
Mark estudia mi rostro, luego baja la cabeza en señal de

derrota. "¿Por qué tengo la sensación de que ya tienes un plan?"
Yo sonrío. “Bueno, esa es la mejor parte. Tengo dos semanas

libres, así que el momento es perfecto ".
“El momento para. . .? "
"Mi lista de ex".
Mark simplemente levanta su cerveza, toma un sorbo y espera.
“Mi lista de ex”, repito, “es la lista que haré de todos mis ex
novios. Voy a volver a conectarme con cada uno para
averiguar cuál es el indicado. Va a ser mi regalo de Navidad

para mí, después de todo, la dama hicieron decir que me
gustaría encontrarlo antes de Navidad “.
El resopla. "Entiendo. Entonces, hay una fecha de vencimiento ".
“No, más bien. . . " Agito mi mano. "A veces, las estrellas
simplemente tienen que alinearse, y tienes que ser rápido en tus
movimientos".
Mi mejor amigo me mira fijamente durante un largo momento,

luego niega con la cabeza. "¿Alguna posibilidad de que pueda
optar por no participar en este plan?"
Dejo a un Rigby retorciéndose en el suelo y me paro. "Ninguno.

Pero por ahora, tienes un respiro, porque necesito llegar a casa y
empezar a armar mi lista ".
"Acabo de servir ese vino".
Levanto el vaso en agradecimiento. “Menos mal que tengo un

camino de treinta segundos a casa. Vamos, Rigby, agarra tu
hueso nuevo ".
Mark niega con la cabeza mientras el perro y yo salimos por la

puerta trasera.
Reanudo mi canto. “Que tengas una feliz Navidad, que tengas
una feliz Navidad. . . "
Si todo va según lo planeado, será una pequeña Navidad muy

feliz.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión uno
Jack Chance: Caliente. Gracioso. Muy prometedor. Además, buen amigo de Mark.
Joey Russo: novio de secundaria. Super dulce, pero. . . bueno, ha pasado mucho
tiempo. Vale la pena investigarlo.
Chad Morrister: Gran oyente, sentido del humor sólido. Rompí porque él era mayor
y mi yo de veintitantos años no estaba lista para lo que estaba ofreciendo. ¿Quizás

ahora estoy lista?
Doug Porter: chico de rebote. ¿Quizás no le di suficiente oportunidad?
Stephen Hill: Siempre nos reímos mucho. Me gusta un chico con el que puedo
reírme.
Adam Bartley: Bla. No recuerdo qué color de ojos tiene; eso no es una gran señal.
Colin Austin: El mejor chico con el que he salido. También me rompió el corazón,
taaaan. .
16 de diciembre, sábado por la mañana
“No me siento bien con esto. Rodger, ¿te sientes bien con esto?
Esto no está bien ".
Reprimo un bostezo y tomo otro sorbo de café de la taza de

viaje. “Está bien, mamá. Tú y papá nunca hacen nada por tu
aniversario porque cae muy cerca de la Navidad. Su trigésimo
aniversario de bodas debe ser sobre ustedes dos. ¿Okey?"
Sus manos revolotean ansiosamente, y me estiro a través de la

parte trasera de la cabina del camión para detenerlas con las
mías.
Normalmente disfrutaría de mi primera mañana de vacaciones

de Navidad durmiendo hasta tarde, seguido de gofres y una
película navideña en Hallmark Channel. En cambio, me dirijo
al aeropuerto con mis padres a cuestas.
Ahora, un poco sobre mis padres. . .
¿Sabes cómo el estilo de vida minimalista está de moda en este

momento? ¿Esa idea de que menos es más? Sally y Rodger
Byrne no recibieron el memo. Su casa no solo es sacada de un
reality show de televisión sobre acaparadores, sino que su
afición por las cosas se extiende también a los viajes. Así que
estoy seguro de que puedes imaginar cuántas maletas llenaron
para un viaje de dos semanas (un crucero de diez días por
Alaska, más algunos días para explorar Seattle).
Digamos que su equipaje no cabía en su Honda. O mi Kia.
Por suerte para todos, tengo un mejor amigo que tiene una
camioneta y adora a mis padres casi tanto como yo.
"Estoy con tu madre en esto, Kell", dice papá. “No me gusta que
pases la Navidad sola. No sienta bien ".
“No estoy sola”, digo por novena vez desde que los sorprendí con
este viaje en octubre. “Los padres de Mark me invitaron a pasar
la Nochebuena. El día de Navidad me voy a comer galletas

todo el día en pijama. Mark también puede venir. Si tiene
suerte ".
Mi papá está en el asiento del pasajero y se acerca para sujetar

a Mark en el hombro. “Gracias, hijo. Ya sabes cómo se las
arregla durante las vacaciones ".
Pongo los ojos en blanco. " Ella se divierte apropiadamente, y

estará aún más alegre si sabe que sus padres están pasando el
mejor momento de sus vidas bebiendo champán en un barco
enorme mientras observan ballenas".
Mamá suspira. “Realmente es un sueño hecho realidad. Gracias,

dulzura. Debe haber sido muy caro ".
"Ustedes dos lo valen".
Que era una locura. Pero realmente valen la pena. Y a decir

verdad, hasta ayer había estado experimentando pequeñas
punzadas de melancolía ante la idea de despertarme la
mañana de Navidad sin ellas.
Pero, cortesía de mi nuevo plan, tengo grandes esperanzas de

que mi mañana de Navidad implique un tiempo desnudo
conmigo y con el amor de mi vida a la luz del árbol de
Navidad.
No les cuento eso a mis padres. Obviamente.
Mark me mira a los ojos por el espejo retrovisor como si

estuviera leyendo mis pensamientos, y le hago un gesto con el
dedo.
Él mira hacia otro lado y, unos minutos después, estamos en el

aeropuerto y descargamos las seis maletas de mis padres en la
acera. Si. Seis.
Mamá me abraza una y otra vez, diciéndome una vez más

que puedo ir a pasar tiempo con la tía abuela Velda en
Charlotte si tengo un caso de "los solitarios".
"Estaré bien", calmo, acariciando cariñosamente su cabello gris.

"Tengo a Rigby, Mark y la mitad de la ciudad para vigilarme".
Mark saca las últimas maletas de mis padres de la caja de su

camioneta.
“Está bien, Byrnes. Están listos ”, dice.
Mark sabe que mis padres, especialmente mi mamá, se

preocupaban por mí todo el día, así que después de llamar a
alguien para que lo ayude con su equipaje, lo que da tiempo
para un abrazo más, Mark abre la puerta principal de su
camioneta y casi me empuja adentro.
Cierra las puertas, luego abraza a mi mamá y hace un abrazo

de hombre con mi papá, todo mientras yo miro y saludo con
entusiasmo.
Sigo saludando mientras él se pone detrás del volante y se aleja

de la acera. Saludo y saludo hasta que se pierden de vista,
luego me dejo caer contra el asiento con el más mínimo de los
suspiros. "Espero que se diviertan".
"¿No puedes simplemente revisar tu bola de cristal y

averiguarlo?"
Le doy una mirada jaja , luego lo castigo por su comentario
jugueteando con la radio hasta que encuentro la estación que
no reproduce más que canciones navideñas en diciembre. Luego
lo agrego a sus estaciones de radio preestablecidas,
reemplazando su estación de rock favorita. Eso le enseñará a
burlarse de mí.
"Entonces, mi lista de ex", comienzo, hurgando en su consola en

busca de los mini bastones de caramelo que escondí allí la
semana pasada. Él me mira dos veces, obviamente sin saber
que estaban allí hasta ahora.
Levanto uno y se lo ofrezco.
“No.”
"¿A los dulces o escucharme hablar sobre mi plan?" Digo,

quitando el celofán de un bastón de caramelo y metiéndome el
extremo sin gancho en la boca.
“Ambos”, dice, volviendo su atención a la carretera.
Honro sus deseos. Durante unos treinta segundos.
“La lista es deprimentemente corta”, digo.
Gruñe.
“Nunca me di cuenta de lo patética que era mi vida amorosa.

¿Tú lo hiciste?"
Mark mira su espejo retrovisor y cambia de carril. "¿Podemos no

hacerlo?"
“No incluí a ninguno de mis novios antes del décimo grado.

¿Crees que debería haberlo hecho?”
El resopla. "¿Qué, tu aventura prepúber con Kyle Cameron no

fue una para todas las edades?"
Ignoro esto. "También taché a cualquiera que estuviera

casado ..."
"Inteligente."
"... o cualquiera que haya sido malo".
Mark mira fijamente. "¿Quién fue malo contigo?"
Sonrío ante su protección. “Jeff Downing de undécimo grado fue

una especie de idiota. Me llamó gorda ".
Mark hace un gruñido. "¿Quién más?"
“Elton Drake. Corredor de bolsa con el que salí hace un par de

años. Gritaba mucho ".
“Solo ladrar, ¿verdad? ¿No muerde?"

Le doy una palmada en el brazo. “Solo ladraba. Y lo pateé a la

acera".
Él asiente con la cabeza. "Está bien. Entonces, ¿quién está en la

lista? ¿Cuántas personas estamos hablando? "
"Siete."
"¿Y vas a creerle a una viejecita que uno de ellos es tu alma

gemela, o algo así?"
Estudio su perfil. “¿Por qué estás tan malhumorado por esto?

Tienes a Sheila. ¿Por qué no debería tener a alguien también?”
Mark se rasca la mejilla. “No estoy diciendo que no quiera que

seas feliz. Solo creo que si fueras a ser feliz con alguno de esos
tipos, lo habrías sido. Rompiste con ellos por una razón ".
"Bueno, para ser justos, tres de los siete rompieron conmigo".

"Idiotas".
Sonrío ante su lealtad. "Totalmente. Por eso necesito encontrar

una manera de mostrarles lo que se están perdiendo. ¿Es cierto
que los chicos piensan que las mujeres con disfraces de elfos son
buenas? "
Me lanza una mirada de incredulidad. "¿Qué?"
"Ya sabes", le digo, haciendo un gesto hacia la mitad del muslo.

“¿Calcetines a rayas? ¿Falda verde corta? ¿Lindo sombrero
pequeño?”
El niega con la cabeza. "En momentos como este, merezco un

premio por tener una mejor amiga".
“No es como si te hubiera pedido que me llevaras a comprar el

atuendo. Solo digo que si me ofreciera como voluntario para
disfrazarme como un elfo en el desfile anual de Navidad,
¿estaría caliente?
"Deja de ser rara".
"Eso no es una respuesta."

“Porque fue una pregunta ridícula. Starbucks?”
Le doy una mirada sospechosa. "Crees que Starbucks está

sobrevalorado".
"También creo que puedo comprar mi salida de esta

conversación con una menta froufrou lo que sea".
"No te equivocas", concedo, masticando mi bastón de caramelo.

“No más charlas de elfos a cambio de un Frappuccino de moca
de menta, más chispas. Pero . . . Quiero tu ayuda sobre cómo
debería aproximarme a Jack “.
"Paso."
"Pero él es tu amigo".
“Por eso paso”, dice Mark, entrando en el estacionamiento de

Starbucks. “No quiero meterme en medio de ustedes dos. De
nuevo."
Un punto válido. Jack Chance y yo estuvimos ardiendo y

ardiendo durante unos ocho meses en una de esas relaciones
volátiles de pelea que son tan estimulantes como agotadoras. El
pobre Mark había jugado de mediador más veces de las que me
gustaría admitir.
"Solo dime si está saliendo con alguien", le suplico. "Una

pequeña respuesta, luego te dejo en paz".
En respuesta, Mark sale de la camioneta y cierra la puerta.
"Está bien, entonces", murmuro.
Empiezo a seguir a Mark a la cafetería, pero en el último

minuto saco mi teléfono móvil y le envío un mensaje de texto
rápido. Si el horario de Jack en la oficina del sheriff se parece en
algo a lo que solía ser, se levantará temprano los fines de
semana, pero esta noche estará libre.
“Hola, soy Kelly .” (Por si acaso borró mi número de teléfono,

como dije, las cosas estaban complicadas hacia el final).
“¿ Puedes ponerte al día? ¿Cena esta noche?”
Debe ser una mañana lenta en la estación, porque su respuesta

es casi inmediata: “¡ hola nena mucho tiempo! la cena suena
bien, ¿dónde y cuándo?”
Sonrío triunfante. “¿Qué tal Salt and Cedar, a las 7 pm?”
“perfecto t veo entonces .”
Trato de no encogerme ante el recuerdo de cuánto me volvía

loca su falta de puntuación y las mayúsculas adecuadas.
Dejo mi teléfono en mi bolso y corro detrás de Mark, para

advertirle que sus dos mejores amigos cenarán en su restaurante
esta noche, juntos.
Ah, y necesito averiguar cómo convencerlo de que cuelgue

muérdago. . .
16 de diciembre, sábado por la noche

“Maldición, nena, te ves bieeeen .”
Levanto la vista de la hoja de especiales y sonrío mientras mi

ex cruza el concurrido restaurante hacia mí.
Jack es un poco más bajo que el tipo promedio, pero lo

compensa con una gran sonrisa y grandes hombros, grandes
hombros que se encarga de lucir con camisetas demasiado
ajustadas.
Mantén la mente abierta, Kelly, me recuerdo. Te gustaba,

¿recuerdas? Érase una vez lo amabas. Más o menos .
Me levanto para darle un abrazo, dejándolo permanecer

mientras espero tener la sensación de que él es de quien me
estaba hablando la dama. Huele y se siente familiar, pero. . .
¿me he perdido esto?
Mmm. Demasiado pronto para decirlo.
"Te ves genial", le digo con entusiasmo mientras nos sentamos.

Lo he visto mucho desde que rompimos, pero esta es la primera
vez que me molesto en mirar, y. . . bueno, la camiseta
demasiado ajustada dice que se ha estado cuidando a sí mismo.
Lo cual, está bien, seamos honestos, es más de lo que puedo

decir. Si bien me gustaría afirmar que manejé cada ruptura
obteniendo un "cuerpo de venganza", la verdad es que soy más
una chica de ruptura del tipo de los helados y la televisión.
Y teniendo en cuenta que he tenido tres rupturas desde Jack,

definitivamente tengo tendencia a tener curvas en estos días.
Aunque la forma en que me está mirando dice que no le

importa que al menos parte del peso extra se haya ido a mi
pecho. Eche un buen sostén push-up, y bueno. . . sí, sé lo que
estoy haciendo.
Jack es mayormente un caballero, y arrastra sus ojos hacia los

míos.
Por el rabillo del ojo, veo a un par de mis amigas entrar por la
puerta y dirigirse al bar. Siento una pequeña punzada de
arrepentimiento por haber tenido que decir que no a la
invitación a la noche de chicas. La llamada de Ivy no llegó
hasta después de haber confirmado con Jack. ¿Pero verdad?
Prefiero ponerme al día con las chicas que hacer este incómodo
cómo estás con Jack.
No es buena señal.
Obligo mi atención a mi ex y me digo a mí misma que tenga

una mente más abierta. Nos ponemos al día rápidamente con
los conceptos básicos. Tiempo. Planes de vacaciones. Mis padres,
su hermano. Ambas carreras.
Es una linda conversación. Amable, civil, agradable. Esto

podría funcionar. Sí, de hecho. . .
Aparece una sombra sobre nosotros. "¿Bebidas?"
Miro hacia arriba para pedir una copa de vino blanco, pero
parpadeo sorprendida cuando veo que no es uno de los meseros
habituales que toma nuestro pedido. Es Mark.
"¡Oye!" Yo digo.
"Oye, hombre", dice Jack distraídamente, mirando alrededor de

Mark hacia la barra. "¿Tienes algo bueno disponible estos días?"
"No. Nada bueno. Salí de mi camino para almacenar la

cerveza más mierda que pude encontrar ".
Le doy a mi mejor amigo una mirada de advertencia.

Claramente, sus sentimientos sobre mi plan no han mejorado
desde esta mañana.
La conversación en Starbucks fue algo como esto:
Yo: Oye, Jack y yo vamos a cenar esta noche en Cedar and

Salt.
Él: ¿Por qué?
Yo: ¿Por qué piensas? Ya les dije mi plan. Sube a bordo o

cállate.
Él: ¿Cómo se supone que debo estar callado cuando tú no te

callas por eso?
Yo: Oye, ¿te importaría si colgara un poco de muérdago en ese

pequeño arco entre el bar y el restaurante? Es una especie de
parte de mi plan. . .
Él: [Se aleja ]
Como era de esperar, no hay muérdago colgado en el bar.

Esperaba esto y se me ocurrió un plan de respaldo.
"Tomaré un pinot grigio, por favor."
Jack ordena a una de las IPA locales y Mark se marcha sin

decir una palabra.
Jack levanta las cejas. "¿Qué pasa con tu chico?"
Agito una mano. "Oh tú sabes. Probablemente preocupado de

que vamos a empezar a pelear de nuevo ".
La sonrisa de Jack es lenta y familiar. “Realmente tuvimos las

mejores peleas. Los mejores tiempos de reconciliación también ".
Yo le devuelvo la sonrisa. "Lo hicimos totalmente".
Es cierto, estar con Jack me mantuvo alerta. Pero es un poco

difícil no sentirse cansada ante la idea de pasar por todo eso.
Una copa de vino aparece frente a mí, una cerveza frente a

Jack, colocada con la fuerza suficiente para chapotear
ligeramente.
Suspiro y miro a Mark. "¿No se supone que debes estar en la

cocina?"
Lleva sus vaqueros habituales, combinados con una camisa de

franela verde oscuro remangada hasta los codos y el viejo reloj
que heredó de su abuelo. No hay rastro del delantal que suele
llevar cuando cocina.
Mark no solo es el dueño del lugar, es el jefe de cocina.

Últimamente ha estado transfiriendo más responsabilidad a
Katie, su ayudante de cocina, quien espera que se haga cargo
de la cocina la mayoría de las noches, pero no es propio de él
trabajar en las mesas.
"¿Qué hay de bueno esta noche, amigo?" Jack pregunta,

aparentemente ajeno al estado de ánimo de nuestro amigo. Jack
y Mark son amigos, pero no tan cercanos. Como es evidente en
el hecho de que Jack aparentemente no puede sentir que se
acerca la tormenta.
Ahora que lo pienso, la percepción nunca fue el punto fuerte de

Jack. Siempre ha sido un tipo de hombre que tiene que
golpearlo en la cabeza. No tanto sobre los detalles.
Mark se cruza de brazos. "Todo es bueno."
De acuerdo, ya es suficiente.
Me pongo de pie y, con un dedo de espera aquí en Jack,

arrastro a Mark a la esquina de la habitación. "¿Qué pasa
contigo?" Pregunto una vez que estemos fuera del alcance del
oído de las mesas.
"Me perdonarás si no quiero una escena en mi restaurante".
"El único que provocó una escena ahí fuera fuiste tú".
Mark se estremece, porque sabe que tengo razón. Vuelve a

cruzarse de brazos, pero esta vez es más a la defensiva que a la
ira. “Ustedes dos no fueron buenos el uno para el otro, Kelly. Eso
no va a cambiar porque alguna loca dijo lo contrario ".
“No le propongo matrimonio al chico, solo estamos cenando.

Deja de ser un idiota ".
"Bien", espeta.
"Bien", respondo bruscamente.
Empiezo a volverme hacia la mesa, pero luego dice: "¿Para qué

era el muérdago?"
Sonrío, porque estoy bastante satisfecho con este desarrollo

particular en mi plan. “Es para mi prueba de muérdago. ¿Qué
mejor manera de saber si tengo una chispa con un viejo amor
que besarlo? ¿Y qué mejor excusa para un beso que el
muérdago, verdad?”
Hace un gruñido evasivo.
"Pero resulta que una mierda tensa no me dejó ponerlo en su

restaurante, así que tendré que encontrar una manera de
convencer a Jack de que vuelva a mi casa"
Muevo las cejas y espero que ponga los ojos en blanco. Pero en
lugar de eso, mete las manos en los bolsillos, su rostro ilegible.
Siento una pequeña punzada de. . . ¿dolor? Mark siempre se ha

burlado gentilmente de mis maneras supersticiosas y mis
correspondientes "planes", pero por lo general es bastante
bondadoso. No puedo evitar pensar que lo estoy decepcionando
de alguna manera, y eso. . . bueno, me molesta.
"¿Nos vemos mañana?"
"Seguro."
Regreso a mi mesa, y unos segundos después sale un camarero

para tomar nuestro pedido de comida.
No veo a Mark el resto de la noche.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión dos
Jack Chance: Cena agradable, seguida del Peor.Beso.de.Todos.los.Tiempos. ¿Siempre

fue así? ¿Su lengua siempre se parecía tanto a una babosa muerta? No puedo besar
eso por el resto de mi vida. Simplemente no puedo .
A continuación: Joey Russo, voy por ti. . .

17 de diciembre, domingo por la mañana

A la mañana siguiente, hago lo que cualquier buena hija haría
y le doy "me gusta" obedientemente en todas y cada una de las
fotos que mi madre publicó en Facebook. De su habitación de
hotel. En el aeropuerto de Seattle.
Las veintiunas de ellas.
Incluso el del jabón de baño que aparentemente "huele divino".
Luego les envío un mensaje de texto a ambos padres diciéndoles

que los amo, que lo pasen en grande y que publiquen más fotos.
Teniendo en cuenta que su crucero sale esta mañana, creo que

es seguro decir que las fotos mejorarán de aquí en adelante. . .
Ojala. Pero si todo lo que obtengo son fotos de artículos de
tocador, no me importará mientras se lo pasen bien.
Cumplido el deber de hija, dirijo mi atención al resto de mi feed

de Facebook, sonriendo a todas las fotos de bebés con Papá
Noel. Definitivamente estoy en esa edad en la que cada vez
más amigos tienen hijos. La mayoría de mis amigas de
secundaria todavía viven aquí en Haven, así que podré
arrullar a sus bebés en persona. Pero fui a la universidad en
Boston y mis hermanas de la hermandad están esparcidas por
todo el país. Las redes sociales son imprescindibles para
mantenerse en contacto con ese grupo de amigos.
Estoy a punto de apagar mi computadora portátil cuando mi

mirada se fija en una imagen que me hace hacer una triple
toma para asegurarme de que la veo bien. Eventualmente me
doy cuenta de que lo que pensé que vi es de hecho lo que estoy
viendo.
"Esa perra ", grito, la presión arterial se disparó.
No es una palabra que use a la ligera, ya que estoy a favor de

que las chicas apoyen a otras chicas, pero hay algunas
ocasiones que lo requieren, y esta es una de ellas.
Esta vez cierro mi computadora portátil, no, la cierro de golpe ,

y salgo por la puerta y cruzo mi patio trasero, Rigby ladra
felizmente a mis pies.
¡Ups! Me doy cuenta de que cuando estoy a la mitad del

césped, anoche nevó un poco, y todavía estoy en pijama y
pantuflas rojas. Grito y salto el resto del camino, Rigby
realmente se mete, pensando que estamos jugando.
Doy un golpe rápido a la puerta trasera de Mark, luego entro

de inmediato porque necesito quitarme las pantuflas mojadas,
lo juro.
Rigby se lanza a la cocina delante de mí, sus lindos pies

pequeños dejan huellas de garras nevadas a su paso. Empiezo a
atacar al perro descalzo, luego me detengo cuando veo a mi
mejor amigo sentado en la mesa de la cocina mirándome con
una expresión de desconcierto.
"Oh. Oye." Le doy un gesto incómodo con la cabeza.
Él mira hacia abajo a mis pies descalzos, que prácticamente se

están volviendo azules. "¿En realidad?"
"Estaba en un apuro. ¿Puedo pedir prestados unos calcetines?

Subo corriendo las escaleras hasta su habitación antes de darle
la oportunidad de responder. Eh. Mark hace su cama los
domingos por la mañana.
Interesante.
He estado en su habitación antes, pero sobre todo justo después

de que compró la casa y estaba fisgoneando. Nunca he tenido
muchas razones desde entonces.
Es muy . . . varonil. Hay una cómoda de aspecto antiguo, una

cama grande con una funda nórdica azul marino. Dos
almohadas funcionales y ni una almohada a la vista. Es una
pena. Unos lunares verde azulado serían lo justo para iluminar
la habitación.
Abro el cajón superior derecho. ¡Ups! Boxers, no. Cierro eso y voy
con el cajón superior izquierdo. Calcetines. Bingo.
Agarro un par verde de aspecto difuso, luego parpadeo

sorprendida cuando veo lo que está en el fondo del cajón. Bueno,
no tanto acurrucado como cubierto de calcetines, pero aún así,
está ahí.
Mi bola Magic 8.
Lo levanto con cuidado y la sacudo, sonriendo cuando veo que

todavía funciona.
Técnicamente, no es mi bola Magic 8. Según lo establecido, ya

tengo dos propias, uno para el trabajo y otro para el hogar.
Tres, si cuentas el de mi llavero. No te rías. La bola Magic 8 me
ha ayudado a superar algunos de los principales dilemas de la
vida. Decisiones universitarias, qué ponerse, rupturas. . .
De todos modos, este era un regalo y pensé que se lo había

enviado a Goodwill hace mucho tiempo.
"¿Mark te usa alguna vez?" Le pregunto a la pelota antes de

darle otra sacudida.
Muy dudoso .
Eh. Sí, no puedo decir que no lo vi venir.
Lo guardo y me pongo los calcetines antes de bajar las escaleras.
Mark puso una toalla en el suelo junto a su silla y Rigby se

acurrucó, masticando su pingüino favorito, que se encuentra en
la casa de Mark.
Es una imagen acogedora y me gustaría pensar que encajo. Me

sirvo una taza de café de su cafetera, le pongo un tope en la
taza y me siento frente a él en la mesa.
"¿Cuándo conseguiste las gafas?" Pregunto, tomando mi taza y

estudiándolo sobre el vapor.
Me echa un vistazo por encima del borde superior. "Hace unos

pocos meses. Son anteojos para leer. Hacer los libros me dio dolor
de cabeza ".
"Me gustan."
"Estoy tan contento", dice, recostándose en la silla mientras se

quita los vasos y los coloca sobre su cuaderno. "Ya que solo los
usaba para divertirme, y en absoluto porque estaba tratando
de hacer pedidos para la próxima semana".
Me estremezco. "Lo siento. Olvidé que el hecho de que no

trabajes en el turno del brunch no significa que puedas tomarte
el domingo libre ".
Entrecierra los ojos levemente. "¿Qué ocurre?"

“Nada,” digo, recordando la razón por la que corrí aquí, y
tratando de ganar tiempo.
Mira su taza, la levanta y espera.
Dudo por sólo un segundo, el instinto me dice que

probablemente él no quiere escuchar sobre mi desastroso beso
con Jack, pero necesito hablar sobre eso. Y sí, es un tema mejor
para guardar para mis amigas, pero no viven al lado, entonces.
..
"Entonces, mi prueba de muérdago con Jack".
Cierra los ojos. "No."
"Era . . . bueno, fue concluyente, pero no en el buen sentido ".
Suspira resignado y abre los ojos. "¿Significado?"
Hay un plato de tostadas a medio comer en la mesa, y lo acerco

a mí, sirviéndome de una esquina de masa madre con
mantequilla. “Eh. Bueno, nos besamos. . . y . . . " Doy un mordisco
al pan. “¿Qué son esos pollitos que a veces sirves en el
restaurante? Pero no se llaman pollos ".
"¿Gallinas de Cornualles?"
"Correcto. Esos." Le señalo el brindis. “De todos modos, en el

segundo que Jack puso sus manos en mi cintura, todo lo que
pude pensar fue que sus manos se sentían como gallinas de
Cornualles. Como manos de jamón, excepto. . . manitas de pollo
".
"Has decidido que él no era el indicado porque sus manos son

como gallinas de Cornualles".
"Sí."
Por un segundo, Mark solo me mira fijamente. Luego se frota

las sienes. "¿Cómo es que hemos sido amigos durante una
década y aún puedes sorprenderme?"
"Mejores amigos", especifico.
Simplemente niega con la cabeza.
Dejo caer la tostada en el plato, porque de repente he perdido el

apetito al recordar por qué vine en primer lugar. “Necesito
hablar contigo sobre algo. Tu vida amorosa. No la mía."
"¿Qué pasa con eso?"
Yo trago. "Bueno, ¿sabes cómo te niegas a entrar en Facebook,

porque crees que es una tontería?"
"No mis palabras precisas, pero sí".
“Bueno, todavía estoy en Facebook, y soy amiga de Sheila

porque, bueno, quería que le agradara, y. . . Sheila está saliendo
con su antiguo novio —digo apresuradamente. "En Atlanta".
Exhalo y espero ver en una escala del 1 al 10 qué tan aplastado

se ve y qué tan rápido necesito forzarlo a darle un abrazo.
Su única respuesta es una leve sonrisa. "¿Por qué todas las

mujeres de mi vida se están juntando con exs?"
Abro la boca y luego la cierro. “Esa es una respuesta

notablemente tranquila. ¿Te perdiste la parte tácita en la que
te está engañando? "
Mark toma sus lentes y se los vuelve a poner, la atención ya

regresa a su computadora. "Sheila y yo rompimos".
Yo jadeo. "No lo hiciste. ¿Cuándo?"
Él no responde, y me estiro sobre la mesa para cerrar la

computadora portátil. "¿Cuándo?"
"Viernes por la tarde".
“Pero los vi chicos el viernes por la tarde. . . Entré a ustedes

chicos. . . "
"Diciendo adiós."
"Usted no estaba. Te estabas besando ".
"Un beso de despedida".
"No, no fue. . . . ¿Era que?"
Levanta las cejas. "No eres tan perspicaz como crees, ¿eh?"
“Soy demasiado perspicaz. Sé cuando todos y cada uno de mis

alumnos me están mintiendo ".
“Bien, estoy corregido. Eres excelente para leer a niños de ocho
años. No es tan bueno con alguien mayor de veinte años ".
Aprieto mis labios. "¿Por qué?"
"¿Que por que?"
"¿Por qué rompiste?"
Se pasa la mano por el pelo revuelto. "Si te digo que es porque

ella es Capricornio y yo soy Virgo, ¿lo dejarías?"
"No. Uno, porque ni siquiera crees en esas cosas, y segundo,

porque Sheila es Escorpio ".
Hay un largo momento de silencio, solo interrumpido por el

chirrido del juguete de Rigby.
“Simplemente no estaba funcionando. No tenemos que darle

mucha importancia ".
"Pero rompiste durante la Navidad". Comprendiendo

amaneceres. "Oh hombre. ¿Por eso has estado tan enojado?”
Él pone los ojos en blanco. "¿Me dejarías hacer mi trabajo?"
"Depende".
"¿En?"
Vuelvo a coger la tostada. "¿Puedo usar su camión esta tarde?"
"No." Ni siquiera se molesta en mirar hacia arriba.
"¿Por qué lo estás usando?"
"No, pero la última vez que lo usaste, raspó la mitad de la

pintura".
"Una exageración. Y la Sra. Cleary incluso dijo que no era mi

culpa, y ella pagó por todo ".
"¿Para qué lo necesitas?"
"Todavía no tengo un árbol de Navidad".
Él gime. "Entonces, no solo quieres tomar prestada mi

camioneta, sino llenarla con agujas de pino".
“Es un camión. Se supone que tiene un destino desordenado ".
"UH Huh. Y déjame adivinar. No planeabas ir a una de las

doce paradas de árboles que hay alrededor de la ciudad,
¿verdad? Ibas a cortar el tuyo propio ".
"Por supuesto." Doy un sorbo a mi café. Estoy tratando de

aprender a beberlo negro para reducir las calorías, y es horrible.
"¿Y cómo exactamente ibas a talar el árbol y meterlo tú sola en

el camión?"
Yo sonrío. "Yo no lo iba a hacer".
Mark suspira. "Voy contigo, ¿no?"
"Sí."
"Y ese fue tu plan desde el principio, ¿no?"
"Definitivamente."
Él suspira. "Bien. Déjame terminar mi trabajo ".
"No hay problema", digo, sentándome y apoyando mis pies

cubiertos de calcetines en una de las otras sillas.
Cuando canto en voz baja “Have Yourself a Merry Little

Christmas”, canto todas las líneas en lugar de solo la primera
línea una y otra vez, para no volverlo loco. . . y me pregunto si
debería o no mencionar que me enteré de que mi novio de la
escuela secundaria trabaja en Holly Tree Farm.
17 de diciembre, domingo por la tarde

"No, ese no ".
"¿Qué le pasa a éste?"
Me doy la vuelta hacia donde Mark está tercamente junto a un

árbol que no es el indicado.
Admiro el árbol de hoja perenne impresionantemente simétrico

de dos metros y medio. "No tiene carácter".
Mark se cruza de brazos, la sierra de árbol colgando

ligeramente amenazadora de su mano. "¿Cómo tienen carácter
los árboles?"
“Ya sabes, peculiaridades. Defectos. Calvas Nunca confío en

nadie que sea demasiado perfecto ".
"Soy perfecto".
Sonrío ante su tono práctico. "Sí, cariño. Tal vez por eso nunca
hemos salido, ¿ves? Eres demasiado inteligente, demasiado
guapo, demasiado confiado ".
Entrecierra los ojos, como si intentara medir mi nivel de
sarcasmo, y la cosa es. . . es algo cierto. No sé si lo he
mencionado antes, pero Mark sí. . . es caliente. Como,
supercaliente. Por ejemplo, cuando estábamos en el último año
de la escuela secundaria, lo arrastré al centro comercial para
poder conseguir zapatos para el baile de bienvenida, y un
cazatalentos de modelos de Manhattan prácticamente había
obligado a Mark a tomar su tarjeta.
Todavía se enoja cada vez que lo menciono, pero la verdad es

que es incluso más guapo ahora que en ese entonces. La línea
de la mandíbula está aún más definida, el pequeño hoyuelo de
la barbilla aún más convincente. Agregue la sonrisa
ligeramente torcida, los ojos intensos y la cantidad perfecta de
pelo y, bueno. . .
Es mucho más hermoso que yo.
En lápiz labial, Spanx, sostén push-up y tacones altos, soy un

6½. Con su abrigo de lana, botas de trabajo desgastadas y
jeans baratos, Mark tiene un 10. Lo he visto en un esmoquin
una vez, para la boda de su hermano, y casi me estalla la
cabeza.
Digamos que es algo bueno que me auto-clasificara como

amiga antes de que él tuviera que hacerlo.
Rigby llega brincando entre los árboles con un palo embarrado

en la boca, y yo me agacho y lucho con el palo, arrojándolo —
de acuerdo, bien, tirándolo con torpeza— para que él pueda ir a
perseguirlo.
"Todavía estoy enojado porque le pusiste un suéter a mi perro",

dice Mark, caminando penosamente detrás de mí a través de
los árboles.
"Nuestro perro", le corregí, "lleva su traje de fiesta".
Este año elegí un motivo de muñeco de nieve. Mucho mejor que

el suéter de reno del año pasado, que Mark había argumentado
con razón hacía que el perro pareciera una mierda.
"Hablando de opciones de ropa, ¿qué está pasando con la
tuya?"
"¿Qué quieres decir?" Pregunto, deteniéndome para inspeccionar

un árbol prometedor. Es casi perfecto, pero un poco demasiado
alto para mi sala de estar.
"Quiero decir, te ves terriblemente arreglada para caminar

penosamente por el bosque".
“No estoy disfrazada. Y es sólo porque me estás ayudando que

no voy a burlarme de ti por usar la frase 'arreglada' —digo,
deteniéndome frente a un árbol.
No, el árbol.
"Éste."
Mark se para a mi lado y le da una mirada escéptica. "¿Qué

hay de ese parche de ramas muertas en el medio?"
"Marca de belleza."
"¿La forma en que la parte superior se curva hacia la derecha?"
"Ella tiene curvas".
“'K. ¿Qué pasa con el pájaro muerto a la izquierda?”
Jadeo y busco frenéticamente al pájaro muerto, luego le doy un

golpe en el hombro cuando me doy cuenta de que está
bromeando. “Espera, una cosa más. . . "
Saco el llavero del bolsillo de mi abrigo y sacudo rápidamente

mi bola Magic 8 de viaje.
Es cierto .
Le muestro la respuesta a Mark, que pone los ojos en blanco.
"Vamos. Vamos a cortar —digo, metiendo el llavero en mi

bolsillo.
"Oh, sí, vamos ".
No se mueve y me vuelvo para ver qué pasa.
Mark me mira con una pequeña sonrisa. “Dije que ayudaría. No

es que lo cortara yo solo mientras miras ".
Frunzo un poco el ceño. "Pero tú siempre ..."
“Los tiempos están cambiando, Byrne”, dice, usando la sierra

para indicar el suelo cubierto de escarcha. “Aquí, bájate. Te
guiaré a través de eso ".
"No puedo tumbarme en el suelo con esto", digo, mirando hacia

abajo a mi parka de piel sintética. “Mi parka blanca de piel
sintética. Y mis mejores jeans, los que, incluso a mitad de precio,
son demasiado caros para rodar en la tierra.”
"Pensé que no estabas bien vestido", dice, metiendo la lengua en

su mejilla.
Oh. Ohhhh . Así que así será.
Si tuviera un poco de sentido común, le diría que me vestí bien

porque sé que Joey Russo, un extraordinario novio de la escuela
secundaria, está trabajando en la caja hoy y necesito lucir lo
mejor posible.
Pero no hay nada, y no quiero decir nada, más insoportable

que dejar que Mark se salga con la suya cuando tiene esa
mirada engreída y burlona de ella en su rostro.
Entonces, en lugar de eso, sonrío con gracia y me bajo al suelo

con tanta gracia como puedo, considerando que mis jeans están
ajustados por demasiadas golosinas navideñas y mis botas
tienen un tacón de tres pulgadas. Un tacón grueso, pero aún así.
Parpadea sorprendido, y casi vale la pena la suciedad que estoy

poniendo en mi atuendo.
No pensaba que aceptaría el desafío.
Un caballero me extendería la mano y me ayudarúa a

ponerme de pie, me diría que solo estaba bromeando y que, por
supuesto , cortaría el árbol por mí. Mark es un caballero.
Me entrega la sierra.
O no lo es.
"Acuéstate sobre tu lado derecho, deslízate por debajo de las

ramas tanto como puedas".
"No puedes hablar en serio", murmuro.
Pero hago lo que dice, riendo cuando Rigby se acerca y me

lame la cara.
Empiezo a levantar la sierra, pero mis guantes dificultan el

proceso, así que me los quito y me los guardo en el bolsillo.
Un momento después, mis ojos se abren con sorpresa cuando

siento un cuerpo masculino duro contra mi espalda. "Um, ¿qué
estás haciendo?"
En lugar de responder, me rodea y mueve mis manos como

quiere alrededor de la sierra, luego coloca la sierra contra la
base del tronco.
"Justo ahí", dice, su aliento cálido en mi mejilla.
Durante varios momentos horribles y humillantes, olvido que

este es Mark. Olvido que es mi mejor amigo, el tipo que me ha
visto vomitar después de un vicioso caso de intoxicación
alimentaria, el tipo con el que me he sentado uno al lado del
otro, con mis sudores más feos, viendo El señor de los anillos
(todos ellos ) mientras come nada más que pizza fría y
demasiadas palomitas de maíz.
Claro, lo abracé un millón de veces, le di un beso en los labios a

medianoche en la víspera de Año Nuevo y me quedé dormida
en su hombro una o dos veces a lo largo de los años.
Pero por alguna razón, este momento aquí se siente diferente.

Siento su fuerza, su enorme tamaño. Es duro para mi suavidad,
grande para mi pequeñez. Porque, sí, me hace sentir menuda, y
eso es lindo.
Me digo a mí misma que la conciencia es solo porque él está

tan caliente contra mi espalda en comparación con el suelo frío
debajo de mí. Es el contraste de las dos sensaciones, eso es todo.
Entonces su mano se cierra sobre la mía, maniobrando la sierra

un poco más arriba en el tronco, y casi lloro. Él también se ha
quitado los guantes y sus grandes palmas están calientes y
fuertes en el dorso de mis manos mucho más pequeñas.
"Ahí", murmura, su voz un poco ronca. "No es tan grueso en la

parte superior del tronco".
Yyyyyy ahora estamos hablando de grosor. Y troncos.
Mi boca está completamente seca, y mi cuerpo. . . no tan frio.

Compórtate, Byrne .
Me muevo un poco con el pretexto de obtener un mejor ángulo

del tronco del árbol, y no porque me duela arquearme hacia
atrás hacia su tronco.
No. No. No no no no, no solo tuviste ese pensamiento .
"Tengo esto", digo. Estoy hablando tanto de la tala de árboles

como del control de mis hormonas, y espero que él solo asuma lo
primero.
Agarrando la sierra firmemente con ambas manos, la arrastro

hacia adelante y hacia atrás por el tronco.
No pasa nada. Creo que ni siquiera rasco la corteza.
"Más duro", murmura Mark, un poco impaciente.
Cierro los ojos y respiro hondo. Por muchos motivos.
Y luego hago exactamente lo que necesito para que mi cerebro

vuelva al estado de zona de amigos. Lanzo mi codo hacia atrás,
golpeándolo con fuerza en las costillas. "Ayudame."
Gruñe, aunque estoy seguro de que no lastimé su paquete de
seis en absoluto. Luego desliza su otro brazo alrededor de mí,
cerrando ambas manos sobre las mías.
Es sólo el hecho de que Rigby se haya metido bajo las ramas

para lamernos a los dos sin un romántico gesto lo que me
impide hacer algo idiota, como rodar en su abrazo.
Entonces Rigby sale corriendo para perseguir un pájaro o algo,

y yo vuelvo a donde no quiero estar, físicamente consciente de
mi mejor amigo.
"Quieres golpes lentos y constantes, no cortos y entrecortados",

dice Mark.
Reprimo un gemido.
Demuestra lo que quiere decir, empujando la sierra contra el

tronco y arrastrándola de un lado a otro con ritmo paciente.
Efectivamente, los dientes de la sierra rompen la corteza.
Progreso.
Puse un poco de mi propio esfuerzo en ello, complacida cuando

parece que nuestros esfuerzos conjuntos aceleran un poco el
proceso.
Me concentro en el movimiento de la sierra, tratando de

mantener mi atención en el progreso en lugar de en la
proximidad de Mark.
Cuando estamos un poco más de la mitad del camino, me dice

que me detenga y suelta la sierra.
"¡Pero ya casi terminamos!" Yo protesto.
"Exactamente." Sale rodando de debajo de las ramas, luego se

agacha y me ofrece su mano.
Lo tomo, dejándolo sacarme y ponerme de pie. Choco contra él

un poco torpemente, mis manos sobre sus hombros.
Me arriesgo a echar un vistazo a su rostro, con curiosidad si la

extraña conciencia es unilateral.
Sí. Su rostro luce igual que siempre. No del todo impaciente,
pero tampoco parece un hombre demasiado consciente de mis
encantos femeninos.
No sé si estoy decepcionada o aliviada.
Aliviada, insiste mi cerebro. Lo último que necesito cuando

intento cazar a mis ex es empezar a tener pensamientos sexys
sobre mi mejor amigo.
"Muy bien, ¿recuerdas esto del año pasado?" pregunta,

señalando el árbol ahora inclinado. “Tienes la parte fácil.
Simplemente empújalo ligeramente mientras cortas el último
trozo para que se caiga de mí ".
Me llevo los dedos a la frente a modo de saludo. No dejes que

los árboles aplasten a Mark. “Misión aceptada."
La mirada de Mark se eleva a mi frente, sus ojos siguen el

lugar donde mis dedos tocaron mi frente. Luego da una leve
sonrisa, levantando su propia mano para tocar el lugar. Frota
su pulgar suavemente sobre mi frente. "Te has tocado y tienes
la cara llena de suciedad".
Bien entonces. Eso es sexy.
Sus ojos se fijan en los míos solo por un segundo mientras toca
mi cara, luego retira su mano.
"Ya puedes ponerte los guantes".
Respiro hondo. Correcto .
Mark desaparece una vez más debajo del árbol, y después de

verificar que Rigby está fuera del camino del árbol que cae,
rápidamente corta el último trozo del tronco.
Empujo según las instrucciones y, un segundo después, el árbol

cae suavemente al suelo.
Extiendo una mano para ayudarlo a levantarse, y levanta las

cejas ante la oferta. "Te das cuenta de que te estaría tirando
hacia abajo en lugar de tirarme hacia arriba".
Mi mano se mueve hasta que le doy el dedo medio, aunque

dudo que se dé cuenta con los guantes puestos. “Estoy tratando
de ser amable. Además, ¿soy solo yo, o todo el proceso habría
ido mucho más rápido sin mí? "
"Probablemente", admite con una sonrisa, poniéndose de pie sin

mi ayuda.
Extiendo los brazos hacia un lado para que él tenga que darse
cuenta de que ahora estoy completamente cubierto de barro por
un lado. "Soy un desastre."
Se mira intencionadamente a sí mismo. "Yo también."

"Sí, pero-"
Me detengo, dándome cuenta de que estoy a punto de revelar

la verdadera razón por la que quería talar el árbol hoy en
lugar de esperar hasta mañana, cuando hay menos gente y
cuando el Sr. Gavelroy ofrece un descuento en los árboles entre
semana.
"Pero . . . " Mark deja que la sierra se balancee con un dedo y se

inclina ligeramente hacia adelante.
Me cruzo de brazos. "Nada."
El sonrie. "Mierda."
"Qué-"
"Ese fue Joey Russo ayudando a los Culver a colocar un árbol en

el techo de su auto, ¿no?"
Maldita sea . "Quizás."
"UH Huh." Mark le da a la sierra un pequeño movimiento. "Y

solías salir con él, ¿verdad?"
"Por unos meses, tercer año".

El niega con la cabeza. “Podría haberte ahorrado la molestia.
Ese no es el ex al que te perdiste tener cerca ".
"¿Cómo lo sabes?"
"Porque viene al restaurante una vez al mes e insiste en untar

mi chuletón con salsa de tomate", espeta Mark, moviéndose
hacia la base del árbol caído y haciéndome señas para que me
mueva hacia la cima.
Hago lo que me instruyen. “Está bien, entonces él no tiene buen

gusto en la comida. Pero-"
Mark me mira como diciendo que esto debería ser bueno .

Intento pensar en una defensa para Joey, pero realmente no

tengo una. Mark no solo es quisquilloso acerca de que alguien
"ajuste" sus platos con algo más que preferencias básicas de sal y
pimienta, sino que tiene razón. El bistec en su restaurante es
perfecto como está, con una deliciosa mantequilla aromatizada
con delicadas hierbas y la cantidad justa de hojuelas de
pimiento rojo. La salsa de tomate lo arruinaría.
Él toma la base del tronco y yo me agacho, jugueteando con las

ramas hasta que encuentro un lugar en el tronco que es lo
suficientemente resistente como para no arriesgarme a romper
la parte superior.
Juntos levantamos el árbol a la posición de carga, y Mark silba

para el perro, que llega brincando entre los arbustos.
Gimo cuando veo a Rigby. Su suéter navideño ahora está

totalmente cubierto de barro marrón. "Oh bebe. Eres un
desastre."
"Algo así como su mamá".
Miro a Mark mientras empiezo a caminar hacia atrás. "Si

sabías que estaba aquí para ver a Joey, ¿por qué me dejaste
ensuciar?" Me quejo.
La sonrisa de Mark es toda la respuesta que necesito.
Me había hecho ensuciarme porque estaría saliendo con Joey

Russo.
¡Saboteador!
"Oh, bueno", digo, manteniendo mi voz deliberadamente ligera

y alegre. "Un poco de barro no importará mucho si puedo
llevarlo a la tienda de regalos".
Mark me lanza una mirada penetrante. "¿Porque eso?"
"¿No lo viste cuando pasamos?" Pregunto inocentemente. “Un

gran trozo de muérdago justo encima de la puerta. No podría
ser más perfecto para mi prueba de muérdago ".
La sonrisa de Mark se desvanece por completo, aunque por mi

vida, no puedo entender por qué eso me agrada tanto.

Entonces, Joey ni siquiera me reconoce.
No sé si eso es bueno o no. Quiero decir, no era la chica más

sexy de la escuela secundaria, pero tampoco era un desastre
completo.
Entonces, o he mejorado tanto desde entonces que él estaba

como, "Maldita sea, ¿quién es este bebé que me habla?" o me he
deteriorado tanto que él dice: "¿Por qué esta bruja me hace
perder el tiempo?"
Pero aquí está el truco: vivo en un pueblo pequeño, ¿recuerdas?

No es que Joey y yo sigamos siendo mejores amigos o algo así,
pero lo vi hace unos meses en la fiesta de jubilación de su tío.
Y hablamos .
O me ha olvidado desde entonces o no recordaba quién era yo

cuando hablamos de los méritos de las salchichas frente a los
perros normales.
¿Sabes que? Estoy pensando demasiado en esto. Voy a seguir

adelante como si estuviera teniendo un nuevo comienzo
glorioso, una oportunidad de dar lo mejor de mí.
Y atraerlo bajo el muérdago.
“Oh cierto, Kelly. Oye ”, dice, ya aburrido de la conversación.
Hmm, esto no servirá.
Tal vez es más un tipo de toque y necesita un recordatorio

tangible de, oh, digamos el momento en que lo dejé llegar a la
segunda base después del regreso a casa del tercer año.
"Es tan bueno verte", me entusiasmo, entrando en uno de mis

abrazos característicos.
Y ahora estás como, ¿Qué diablos es un abrazo característico?

Créame, soy muy buena abrazadora. No es una de esas

personas que se aferra demasiado, pero le doy un buen apretón,
y no tengo miedo de meter todo el cuerpo en él.
Noto la mirada de sorpresa de Joey mientras lo rodeo con mis

brazos. Después de un segundo, un largo segundo, sus brazos me
rodean, pero... bueno, digamos que no tiene un abrazo
característico, porque estoy decepcionada.
Y cuando retrocedo, puedo decir que él también lo está.
Veo a Mark sobre el hombro de Joey, hablando con una linda

rubia. Me mira a los ojos por un breve momento, levanta las
cejas como si dijera: " ¿Cómo te va?", Luego vuelve su atención
a la rubia.
Joey arrastra los pies con torpeza. Sintiendo que está a punto de
salir cortésmente de esta conversación, le dirijo una gran sonrisa.
"¿Que has estado haciendo? ¿Cómo están tus padres?"
Historia verdadera: adoraba a los padres de Joey en el pasado.

Quizás incluso más que Joey, si soy muy honesta. Su mamá
siempre tenía algo delicioso en la estufa, y su papá era bajo,
sarcástico, pero realmente dulce.
“Están bien, realmente bien. Ellos son, eh. . . " Se pasa una mano
por la nuca. "Emocionados por su primer nieto".
"¡Oh, no sabía que Sienna y George estaban esperando!" Digo,

refiriéndome a la hermana mayor de Joey y su esposo. No los
conozco bien, pero los veo bastante en el restaurante en las
noches de citas, y siempre parecen tan felices. Serán padres
fantásticos.
Joey tiene una expresión extraña en su rostro. "No, eh . . . te

acuerdas de Raina Joyner? ¿Unos años atrás en la escuela?
¿Como seis años? ¿Fue a Washington High?”
Parpadeo. Ignorando, por un segundo, que si Raina está seis

años detrás de mí en la escuela, no asistimos a la escuela
secundaria al mismo tiempo, así que um, no, no me suena.
Agregue el hecho de que Joey y yo fuimos a Lincoln High, y

que Washington High está a treinta minutos en otra ciudad. . .
"Hmm, estoy luchando por poner una cara con el nombre", digo
cortésmente.
"Correcto. De todos modos, ella, eh. . . nosotros, eh. . . vamos a

tener un bebé."
Me toma un tiempo vergonzosamente largo entender lo que me

está diciendo tan claramente.
Joey Russo está a punto de ser papá.
“Quiero decir, mis padres estaban un poco enojados porque no

estábamos casados, pero estoy llegando a eso. Es por eso que he
hecho algunos turnos extra aquí en la granja de árboles. . . "
Oh, pobre, pobre Joey . Siempre fue un niño dulce y

complaciente con la gente. Es una de las razones por las que
rompí con él cuando teníamos diecisiete años. Siempre hacía lo
que yo quería hacer, y aunque al principio era algo agradable,
se volvía viejo después de un tiempo.
Y lo está haciendo ahora, obviamente sintiendo que estoy

buscando algún tipo de reunión y haciendo todo lo posible para
decirme que está fuera del mercado.
Sonrío y estoy a punto de felicitarlo con entusiasmo, mientras lo

tacho mentalmente de mi lista.
Antes de que pueda hablar, Mark aparece a mi lado, dejando

caer un brazo sobre mi hombro. Al instante sospecho. Mark es
100 por ciento no un tipo de persona de las demostraciones
públicas de afecto, incluso en la forma de amigo casual. A veces
soporta mis abrazos, pero nunca en público. De vez en cuando
me deja unir mis brazos a él como una forma de mantenerlo
cerca mientras hablo con él, pero iniciando. . .
Algo pasa.
"Oye, Joe, ¿cómo te va?" Mark pregunta, extendiendo una

mano a Joey, quien se quita el guante de trabajo.
Los dos hombres se dan la mano, y no me pierdo que Joey

parece aliviado de tener una distracción de hablar conmigo.
Nota para mí mismo: no seas tan fuerte.
"¿Tienes un árbol?" Pregunta Joey, con su atención en Mark,

quien claramente es un objetivo de conversación más seguro
que su pegajosa ex.
"Solo estoy ayudando a Kelly aquí".
“Ah. ¿Necesitas ayuda para cargarlo en tu coche? "
"Nop, todo bien."
Joey parece decepcionado de ver frustrada su ruta de escape.
"¿Estás seguro de que no quieres un árbol para ti?" él pide.
"Mark odia la Navidad", inyecto, cansada de ser ignorada.
Ambos hombres me miran. Mark frunce el ceño. "No."

Lo miro. “Está bien, no lo odias , pero realmente no te
involucras. Nunca consigues un árbol, no cuelgas luces, ni
siquiera me permitiste poner una corona en tu puerta el año
pasado ".
"Porque era blanco y tenía un lazo rosa".
"Era flocado, y el rosa y el blanco estaban muy en ese año".
"Le pedí a la tripulación que pusiera un árbol en el

restaurante".
"Uno falso", discuto. "Es un sacrilegio de Navidad".
Joey está comenzando a retroceder lentamente, pero Mark lo

mira fijamente y hace su movimiento.
Saca algo de su bolsillo y lo cuelga frente a mi frente. "Hey, Joe,

ustedes venden esto?"
"Ah, ¿qué es eso, muérdago?"
Reprimo un gemido y Mark sonríe. "Sí."
Joey se encoge de hombros, luciendo indiferente. "Creo que sí.

¿Le preguntas a los chicos de la tienda de regalos? Creo que son
como tres dólares, cinco si quieres el que tiene el arco ".
Mark me mira y menea el muérdago. “¿Qué piensas, Kelly?

¿Arco o sin arco?
Extiende el muérdago un poco más, levantándolo tan alto como

puede para que quede más o menos colocado entre Joey y yo.
Amplío mis ojos, tratando de que él haga ese silencioso discurso

de mejor amigo que hacemos. Algunas veces.
"Ya tengo muérdago", le digo en un tono ligeramente

amenazador, alcanzando y agarrando su muñeca.
Es más fuerte que yo y se mantiene firme, su brazo apenas se

mueve incluso cuando pongo mi peso en él. "Oh, es cierto.
Bueno, tal vez consiga este, entonces. Recuérdame cómo
funciona de nuevo. . . Quien esté a cada lado del muérdago, se
besan, ¿verdad?”
Dejo de mover su brazo y me conformo con envolver un brazo

alrededor de su cintura y usar mi pulgar para tratar de
excavar en busca de un órgano vital.
Baja el muérdago y saca su billetera del bolsillo trasero, saca

algunas y se las entrega a Joey. “Ya pagué por el árbol, pero
esto es por el muérdago. A no ser que . . . "
Mark comienza a levantar su brazo de nuevo, pero le agarro la

muñeca. "Marcos. ¿Sabías que Joey será papá?
El brazo de Mark se congela, luego lo deja caer de nuevo a su

costado. Cuando miro su perfil, estoy bastante segura de que
está tratando de contener la risa. Sus hombros tiemblan, solo un

poco. Sí. Definitivamente.
Él piensa que esto es divertido .
Mi ex de la secundaria se está alejando lentamente. “Realmente

debería. . . "
Ni siquiera se molesta en terminar su oración antes de empujar

el dinero del muérdago en su bolsillo trasero y dirigirse hacia
una pareja que lucha por conseguir un árbol encima de su Prius.
Me quito el brazo de Mark de mi hombro y me doy la vuelta

para mirarlo. "¿Feliz ahora?"
Está mirando la espalda de Joey con falsa confusión. "¿No era

él?"
Mis ojos se entrecierran. "¿Sabías?"
"¿Sabes qué, que no ha estado suspirando por ti todo este

tiempo?"
"¿Que va a tener un bebé?"
"No. Sin embargo, me arrepiento de no haber visto tu cara

cuando te enteraste. Qué estás pensando . . . ¿madrastra?"
Le clavo un puño en la caja torácica.
Gruñe. "¿Por qué eres tan violenta estos días?"
"Oh, no lo sé". Agarro el muérdago y lo sostengo entre nosotros.

"¿En realidad? ¿Fue gracioso esto en tu cabeza?”
Mark mira el muérdago, luego a mí, levantando las cejas en

pregunta.
Me doy cuenta de que por la forma en que lo he colgado,

parece como si lo estuviera poniendo entre nosotros, y dejo caer
mi brazo apresuradamente. Después de la rareza debajo del
árbol, lo último que tengo que hacer es dejar que mi cerebro
piense en cómo sería. . .
Sí, mira, no. No haciendo eso.
“Me sentí mal por ensuciarte cuando estabas tratando de

cortejar a tu chico de secundaria. Pensé que podría ayudar con
el muérdago, pero como no lo necesitarás. . . " Extiende su mano
para la rama de muérdago. "Mío."
"¿En serio? Acabamos de establecer que no te gusta la basura

navideña en tu casa ".
“Nunca dije eso. Simplemente tiene que ser la mierda correcta ".
"Deberías haber atrapado al que tiene el arco", le digo, mirando

hacia abajo. “Tal vez debería conseguir uno. Este es más bonito
que el que compré en el supermercado ".
“Sí, eso es justo lo que necesitas. Un muérdago de repuesto ”, dice,

arrancando la vegetación de mi mano. "Vamos, llevemos tu
tonto árbol a casa".
"¿Me ayudarás a ponerlo en el stand?" Pregunto, trotando

detrás de él hacia su camioneta.
"¿Tienes un stand?" pregunta, sin darse la vuelta.

¡Ups! Por lo general, mi entusiasmo por el árbol de Navidad se
concentra en el que se instaló en la casa de mis padres, por lo
que no tengo ganas de caminar penosamente hasta su ático
para encontrar el antiguo soporte del árbol.
"¿Podemos parar en Home Depot en el camino de regreso?"

Pregunto.
Mark simplemente niega con la cabeza.
A pesar de su irritación conmigo, se dirige al lado del pasajero

de la camioneta y me abre la puerta, incluso me ofrece una
mano para que me sea más fácil subir a la cabina alta.
"Gracias." Mi voz es un poco gruñona, porque tengo frío y estoy

cubierta de barro, me acabo de dar cuenta de que perdí un
guante y no tengo ganas de buscarlo, y mi lista corta de ex

novios se hizo aún más corta. .
Sostiene mi mano un segundo más de lo necesario, esperando

que lo mire a los ojos. "Incluso sin el bebé en camino, él nunca
sería el indicado".
"No lo sabes".
Mark deja caer el muérdago en mi regazo. "¿No es así?"
Él cierra la puerta antes de que pueda averiguar qué diablos se

supone que significa eso.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión tres
Jack Chance : Mal besador.
Joey Russo : A punto de tener un maldito hijo.
Chad Morrister: Cuidado. Estoy a punto de mostrarte que la diferencia de edad de

diez años ya no es tan mala. . . .
Doug Porter
Stephen Hill
Adam Bartley
Colin Austin
17 de diciembre, domingo por la noche

“Yo también te extraño, mamá, pero estoy bien, lo prometo.
Mejor que bien, estoy teniendo las mejores vacaciones de
Navidad ".
Deliberadamente no menciono que mi escena actual es casi

deprimente. Quiero decir, sí, encendí mi vela de pan de jengibre
y me preparé un martini de menta, y tengo la Navidad con el
Rat Pack sonando de fondo.
Pero . . .
El árbol también está oscuro y solitario en la esquina, y. . .

diablos, estoy sola.
Como se ha mencionado, normalmente pongo toda mi energía

árbol de navidad en mi familia árbol. Mis padres lo recogen en
algún momento de la semana mientras estoy en la ciudad, y
luego voy a su casa el último viernes antes de Navidad y lo
decoramos juntos.
Pensé que si duplicaba la lista de reproducción de mi madre y

su martini característico, y si obtenía un árbol lo
suficientemente perfecto, podría recrear todo, pero me doy
cuenta tardíamente de que lo que hace que la decoración del
árbol de Navidad sea mágica son mis padres y la tradición, no
es el árbol en sí.
Me doy una pequeña sacudida rápida para replantear mi

pensamiento. Sí, estoy solo, ¡pero eso tiene sus ventajas! Para
empezar, comencé una nueva tradición: cortar mi propio árbol.
Algo así como.
Además, mi mamá, Dios la bendiga, es inflexible en poner luces

multicolores en su árbol de Navidad, y yo me encantan las
luces blancas. Entonces, ¿adivinen lo que obtuve en Walmart?
Cerca de mil millones de cajas de luces blancas.
También obtuve todos los adornos nuevos; decidí ir con un tema

blanco y aguamarina, y encontré este enorme paquete de
adornos blancos y verde azulado surtidos en línea por solo
veinte dólares.
¿Un poco genérico? Seguro. Pero se verá como una Tiffany &
amp; Caja de la empresa, y me salvará del golpe extra de
tristeza que recibiría si tuviera que sacar los adornos familiares
sin familia.
“Cariño, espera. Tu padre quiere saludar ”, dice mamá.
Hay un crujido mientras hacen la transferencia.
"Hola, Kelly".
"Oye, papá", le digo, tomando un sorbo de mi bebida y luego

dejándolo a un lado para poder sacar la primera caja de luces.
"¿Podrías decirme que estás pasando el mejor momento de tu

vida para que tu madre deje de preocuparse?"
“El tiempo de mi vida”, digo automáticamente. "En realidad. ¿Se

están divirtiendo? "
“El tiempo de mi vida”, dice.

Sonrío, porque aunque su tono es de broma, puedo decir por el
sonido relajado de su voz que realmente lo está disfrutando. Mi
madre también, como es evidente por el hecho de que pasó la
mayor parte de nuestra conversación dividida entre querer
contarme sobre las ballenas bebés que habían visto y
preocuparse por mi "soledad".
"Sabes, acabo de hablar con Darlene y ..."
"Padre. Te amo, amo a la tía Darlene, pero no amo la Navidad

en Milwaukee. La Navidad es solo un día. Celebraremos
cuando regreses".
“Sé que lo haremos. Y le encontramos el mejor regalo en el

aeropuerto de Seattle ".
Me estremezco. Regalos de aeropuerto. Hurra.
"Suena asombroso. Ahora, ¿qué tal si van a hacer esa cosa de la

degustación de champán de la que hablaba mamá y yo iré a
decorar mi nuevo árbol?”
"¿Es grande?"
"Sí."
"¿Torcido?"
"Siempre."
"Suena perfecto. ¿Mark te ayuda?”
Es técnicamente una pregunta, pero mi padre dice que más a

una declaración, como si fuera una conclusión inevitable de que
mi mejor amiga estaría dispuesto a ayudarme a lug casa un
árbol de Navidad. Lo que supongo que es.
"Él lo hizo. Incluso me ayudó a subirlo al estrado ".
Sin embargo, no había aceptado mi oferta de quedarme y

decorar, pero. . . eh. Realmente no lo esperaba. Mark es un chico.
Tiene sus límites.
Pensé en llamar a una de mis amigas, pero mi mejor amiga
(Ivy) es madre de dos hijos y tiene sus propias cosas navideñas.
Además, ella y yo tomaremos café mañana.
Mi otra mejor amiga de Haven (después de Ivy y Mark) es

Krista, pero está acurrucada en una cabaña de Vermont con su
nuevo novio.
Tengo muchos otros amigos en Haven, pero son más del tipo
"Oye, vamos a tomar una cerveza un sábado", no del tipo "Ven
a decorar mi árbol de Navidad y no juzgues si lloro durante el
día". canción 'The Christmas Shoes' ”tipo.
Mi papá le devuelve el teléfono a mi mamá, quien insiste en

que tome un video de mí mismo decorando el árbol. Me
comprometo a aceptar enviar fotos de cada etapa del proceso
para que ella pueda ver y luego enviarlas de camino a la

degustación de champán.
Entonces solo soy yo, la voz de Dean Martin y un montón de

cajas de luces.
Tomando una respiración profunda, me obligo a cantar junto

con “Silver Bells” mientras saco el primer hilo de luces y
comienzo el tedioso proceso de desenrollar la bobina.
Acabo de enchufar el primer hilo en la pared y comencé a

enrollarlo al azar entre las ramas inferiores cuando hay un
golpe en la puerta trasera.
Probablemente Rigby. He estado tratando de no dejar que mis

sentimientos se hieran por el hecho de que Rigby siguió a Mark
a casa después de la instalación del árbol. Mark dijo que el
perro era neurótico y solo necesitaba algo de tiempo para
acostumbrarse a la novedad del árbol. Una forma amable de
permitirme negar que mi perro quizás esté empezando a
preferir a Mark antes que a mí.
Que es Rigby en la puerta trasera, pero el cocker no está solo.
Mark se puso unos jeans limpios y un suéter negro, su cabello

oscuro no estaba del todo seco después de su ducha después de
la granja de árboles.
También tiene una bolsa de comestibles en una mano y vino

en la otra, lo que sé por experiencia significa cosas realmente
buenas para mi estómago.
“Siento distraerte del proyecto del árbol. Tenía las manos

ocupadas ”, dice a modo de saludo mientras pasa a mi lado y se
dirige a mi cocina.
"¿Estás aquí para ayudarme a decorar?" Digo, sin molestarme

en ocultar el placer sorprendido en mi voz.
“Estoy aquí para probar una nueva receta de pasta en usted

mientras que decoras el árbol.”
Ha comenzado a descargar las provisiones, pero tiene que

detenerse cuando me arrojo sobre él, mis brazos sujetando los
suyos a sus costados. Aprieto tan fuerte como puedo.
"Gracias", le digo, presionando mi mejilla contra su hombro.
Espero que me separe de él o que haga algún comentario en

broma, pero después de un momento de vacilación, me
sorprende levantando una mano y apoyando su palma contra
mi brazo. Es entonces cuando lo supe: él está aquí no para
probar una receta, no para decorar el árbol, sino porque sabía
que yo estaba sintiendo la ausencia de mi familia y quería
estar aquí para mí.
Me aferro por un toque demasiado tiempo, frunciendo el ceño

un poco cuando me doy cuenta de que no estoy lista para
romper el contacto. Debo estar más melancólica de lo que
pensaba.
Hay un susurro de bolsas en la sala de estar contigua, y

lentamente retrocedo para salvar la falda del árbol que compré
en Target de la destreza destructiva de mi perro.
Efectivamente, Rigby sacó la falda del árbol de satén blanco de

la bolsa y se está preparando para arrancar el borde de piel
sintética.
—Lo siento, cariño, ese no —digo, inclinándome para frotar las
orejas del perro mientras rescato la falda del árbol.
Revuelvo hasta que se me ocurre el juguete de perro reno que le

compré exactamente por esta razón, chirriéndolo repetidamente
para excitarlo antes de tirarlo por el pasillo hacia el vestíbulo.
"¿Dónde está su disfraz de muñeco de nieve?" Llamo a Mark.
"Lo quemé".
"Espero que no lo hayas puesto en la lavadora, es solo para

lavar a mano", digo, recogiendo mi martini de menta y
regresando a la cocina.
“Sí, Kelly. Lavé a mano un suéter de perro. Suena como yo ".

Abre un paquete de pechugas de pollo y señala con la barbilla

el vino. "Sírveme un vaso de eso, ¿quieres?"
Levanto la copa de cóctel. "¿No quieres un martini de menta?"
"No."
"Ni siquiera lo intentaste".
“Lo probé el año pasado. Todavía me estoy recuperando ".
“Mejoré la receta”, miento. La "receta" es simplemente

aguardiente de menta, vodka de vainilla y una pizca de
crema, adornada con un bastón de caramelo. Prácticamente la
pesadilla de mi mejor amigo gourmet.
Suspira y me hace un gesto con la barbilla.
Dado que sus manos están sucias con una sustancia pegajosa de
pollo crudo, levanto el vaso y toma un sorbo. Y se estremece.
"Sí, está bien", cedí. "Abriré el vino".
Saco un sacacorchos y una copa de vino mientras él se sirve las

tablas de cortar y los utensilios de cocina, la mayoría de los
cuales son desechos suyos. Soy más del tipo de chica que cena en
el microondas.
"¿Cómo están los padres?"
"Bien. Felices” —digo.
"¿Extrañan a su preciosa hija?"
“Obviamente,” digo, moviendo mis pestañas mientras le entrego

la copa de vino. "¿Qué estamos haciendo aquí?"
“No estoy seguro”, dice, examinando sus ingredientes antes de

volverse hacia el fregadero para lavarse las manos. "Estoy
pensando en algo con un poco de especia cajún, un poco de
riqueza, pero algunos sabores frescos para mantenerlo ligero".
"Si tú lo dices", le digo, hurgando en el perejil, las zanahorias y

el paquete de pasta, buscando algo para picar mientras espera
la inspiración.
Secando sus manos, me ve hurgando y metiendo la mano en la

bolsa, sacando una caja de galletas de lujo y el queso para
untar que sabe por el que tengo una gran debilidad.
Les muestro las manos, y aunque no quiero nada más que

sumergirme, ser la mejor amiga de un dueño de un restaurante
me ha enseñado que la presentación es al menos la mitad del
trabajo de cocinar.
Saco uno de mis platos para servir y lo arreglo todo para que se
vea bastante bonito, tomando prestada una ramita de romero
de Mark para darle un toque más festivo y elegante. Doy un
sorbo al vino de Mark. Decidiendo que va mejor con el queso y
las galletas saladas que con el martini de menta, tomo otro
sorbo.
"¿No tienes un árbol para decorar?" pregunta, sirviéndome un

vaso.
"Sí, pero primero estoy alimentando combustible". Esparcí una

generosa bola de queso en una galleta.
"No vas a arruinar todo mi arduo trabajo de hoy decorándolo
de rosa, ¿verdad?"
“Verde azulado. Y fue nuestro arduo trabajo. Corté al menos la

mitad de ese árbol. Y taché a otro chico de la lista ".
Mi voz es un poco triste y él me mira. "¿De mal humor?"
Doy un bocado a la galleta. “Nah. Fue más vergonzoso que

cualquier otra cosa. ¿Te dije que ni siquiera me reconoció? Sé
que fue una relación de la escuela secundaria, pero vamos. Tocó
mis senos ".
Mark sonríe levemente. "¿Tus senos son memorables?"
"Eso pensé", digo con un toque de mal humor.

Estoy a punto de ponerme otra galleta en la boca cuando veo

la mirada de Mark deteniéndose en dichas tetas.
Parpadeo un poco por la sorpresa y casi bromeo al respecto,

excepto que no lo hago, porque. . . No sé por qué.
La idea de que él mire mis partes femeninas me vuelve loca. . .

hormigueo. Y no platónicamente.
Peligro .
Un segundo después, su atención volvió a las pechugas de pollo,

y me pregunto si tal vez me imaginé el calor en su mirada.
“No te llenes”, dice sin mirarme.
"Sí, mamá " , le digo, poniendo los ojos en blanco y apartando el

queso.
Cojo mi vino y asiento con la cabeza hacia la sala de estar,

donde Rigby va a la ciudad con el chirrido de su nuevo juguete.
"¿Necesitas ayuda aquí, o puedo preocuparme por mi árbol?"
Me despide, coge un celemín de algo verde brillante y lo huele.
Sabiendo por experiencia que él está en la zona, vuelvo a la

sala de estar, subiendo la música mientras lo hago para que los
dos podamos escucharla.
Vuelvo al hilo descuidado de luces centelleantes y termino de

envolverlo alrededor del árbol. Luego agrego otro y otro.
Estoy a medio camino de terminar con las luces cuando me doy

cuenta de que estoy sonriendo, y bueno. . . contenta.
Todavía estoy decorando el árbol yo sola, es cierto, pero ya no

me siento sola. El juguete chirriante de Rigby se mezcla con los
sonidos de los ruidos de la cocina de Mark (y la maldición
ocasional), todo mezclado maravillosamente con la voz festiva
de Sammy Davis Jr.
Ese álbum sigue su curso, y lo cambio a otro, una de esas

compilaciones navideñas que tienen un montón de vocalistas
modernos dando giros divertidos a los viejos favoritos.
Estoy subiendo a la parte superior de la escalera, encendiendo

la última hilera de luces, cuando entra Mark con dos cuencos y
la botella de vino.
“Sabes, cierto, que esos van a ser muy difíciles de eliminar.

Tienes todos los cables enredados ".
“El que no ayuda no tiene voz”, respondo, entrelazando

deliberadamente algunas de las cuerdas en exceso.
"Ah, ya veo. ¿Entonces también es que la que no cocina no

come? "
"No, no va por ese camino", digo, bajando rápidamente la

escalera. Libero la botella de vino de su brazo y lleno mi copa
antes de volver a la cocina a buscar la suya, junto con las
servilletas, ya que él nunca las recuerda.
Cuando regreso, ambos tazones están en la mesa de café, y

Mark está sentado en el sofá, Rigby a su lado, mirando el árbol.
"Hay más luces que agujas de pino en esa cosa", dice.
"Exactamente como debería ser", le digo, dejándome a su lado y
recogiendo el cuenco. "Esto huele increíble".
“También sabe increíble”, dice sin modestia. “Estoy pensando en

incluirlo en el menú de especiales la semana que viene.
Llamándolo Navidad junto al pantano, ya que tiene algo de
criollo ".
"Oh, vaya", digo con un gran bocado. "Tan bueno."
"Te lo dije."
Toma su propio cuenco y enrolla un poco de pasta alrededor de

su tenedor, dando un bocado casi tan grande como el mío.
Rigby resopla de frustración por la falta de compartir, pero

ninguno de nosotros le presta atención mientras llenamos
bocados de pasta en nuestros meses. Al igual que las personas

que han sido amigas durante mucho tiempo (y que se saltaron
el almuerzo), no hablamos hasta que los tazones están vacíos.
Froto mi estómago mientras me dejo caer en el sofá, copa de

vino en mano. “Y me pregunto por qué soy regordeta. Ser
amiga tuyo no es exactamente una receta para un tamaño
cuatro ".
Me mira con expresión de mal humor. "¿Cuántas veces tengo

que decirte ..."
"No hables del cuerpo, lo sé", digo rápidamente. "Lo siento."
Vuelve a mirar el árbol y bebe su propio vino. “No se trata de

ser talla cuatro. No se trata de tener un tamaño de nada ".
Miro, sorprendida. Desde que lo conozco, Mark siempre se ha

negado a complacer cualquier problema de imagen corporal de
mi parte. A veces obtengo la línea "No estás gorda, y no
estamos hablando de eso", pero sobre todo él solo mira con ceño.
Esto es nuevo.
"¿De que se trata?" Pregunto con curiosidad. Realmente quiero

saberlo, ya que Mark no es exactamente un tipo que tenga un
tipo. Ha salido con rubias, morenas, pelirrojas. Baja, alta,
delgada, con curvas. De todos los chicos que conozco, él parece
estar más interesado en la personalidad de una chica que en su
apariencia, y sin embargo, también es un chico. Tiene que tener
algo que lo excite.
En lugar de responder a mi pregunta, hace un gesto hacia los

adornos que aún están en su empaque en el suelo. "¿No
deberías empezar con esos?"
Entiendo. Se acabó la conversación.
"Sí, probablemente", digo con un suspiro, rodando hasta

ponerme de pie. A pesar de la gran comida rica en
carbohidratos, me siento con más energía que cualquier otra
cosa. Para empezar, "All I Want for Christmas" de Mariah
Carey acaba de empezar a sonar, y ese es mi tema.
Eso, y como para la mayoría de la gente, los adornos son mi

parte favorita. Las luces son una especie de dolor en el trasero, si
soy sincera.
Rompo mi surtido enorme de adornos, así como el pequeño

paquete de otra marca, y comienzo a colocarlos alrededor del
árbol, tomando descansos para echar un vistazo a la imagen
del árbol de mis sueños en Pinterest.
"¿No es eso una trampa?" Mark dice, volviendo a la sala de

estar.
Miro hacia arriba con sorpresa, sin darme cuenta de que había
entrado en la cocina en primer lugar. "Dime que no cocinaste y
limpiaste".
El se encoge de hombros. "Es mejor verte bailar alrededor del

árbol agonizando por la ubicación de cada copo de nieve".
"Admítelo," digo, colgando una de las pocas bolas de agua

brillantes que quedan. "Es bonito."
"Es bonito", dice obedientemente, sentándose en el sofá.
Rigby salta a su lado, derritiendo mi corazón cursi al poner su

dulce rostro en la rodilla de Mark. Entonces mi corazón se
convierte en un charco aún más, porque la gran mano de Mark
descansa sobre la cabeza del perro, frotando suavemente los
dedos.
Perro suertudo.
Me estremezco. Chica estúpida .
Vuelvo mi atención al árbol, teniendo mucho cuidado con la

colocación de los últimos adornos, no solo porque quiero que este
árbol se vea increíble en Instagram sino también porque cuanto
antes esté terminado, antes Mark regresará a casa, y No estoy
del todo lista para que termine esta noche perfecta de Navidad.
Finalmente no hay más adornos para colgar, y con un suspiro

que es mitad alegría, mitad tristeza, doy un paso atrás y tomo
una foto. Según lo solicitado, he estado tomando y enviando

fotos a medida que avanzaba en el proceso, y esta vez agregué
un poco de "¡Listo!" con un corazón a su lado.
La diferencia horaria entre Nueva York y Alaska significa que

mamá está despierta y responde de inmediato. “¡Qué hermosa!
Ahora solo necesitas algo para la cima .”
Sorprendida, miro hacia atrás al árbol. "¿Cómo lo olvidé?"
"¿Qué?" Pregunta Mark, sin abrir los ojos desde donde se había
quedado medio dormido hace unos minutos.
"¡Me olvidé de la copa de un árbol!"
"¿Un qué?"
“Algo para la copa del árbol. Estrella. Ángel."
"¿Qué sueles poner ahí?"
"La estrella que hice en segundo grado", digo, mordiéndome la

uña.
"¿Dónde está esa estrella?" pregunta con tono aburrido.

"En una caja en el ático de mis padres con el resto de los
adornos".
“Y el viaje de cuatro minutos a su casa para recuperarlo es. . .

¿demasiado?"
“No, quiero que este árbol sea diferente a mi árbol genealógico.

Quiero que este sea nuestro, que sea mi árbol ".
Me alegro de estar de espaldas a él, porque ni siquiera quiero

ver si escuchó mi pequeño desliz. Obviamente, Mark y yo no
tendríamos un árbol juntos. Es solo. . . me ayudó a cortarlo, a
montarlo y, aunque no colgó ni un solo adorno, estaba aquí y,
bueno, eso significa algo.
No sé por qué me molesta tanto la falta de una copa de árbol.

Ahora que sé que falta, la ausencia es todo lo que puedo notar.
Pero lo que es aún más molesto es que no quiero poner

cualquier cosa vieja allí. Quiero decir, sí, podría conseguir un
lazo blanco y hacer un gran moño como el de la foto de
Pinterest. O estoy bastante seguro de que Target y Walmart
tienen estrellas blancas que funcionarían con la combinación de
colores.
Pero no quiero nada viejo, quiero lo perfecto.
Y no sé qué es.
“Además”, digo apresuradamente, tratando de impulsar el tema,

“esa estrella que hice hace un millón de años es de oro. Este
árbol es aguamarina y blanco ".
"Sí, creo que incluso yo y mi testosterona podemos reconocer la

combinación de colores, Kell", dice, levantándose del sofá y
acercándose a mí. "Lo descubrirás", dice, mirando al árbol en
lugar de a mí.
"¿Descubriré qué?"
Hay una larga pausa antes de que responda.
"La copa de árbol perfecta".

"Oh. Si."
Debe sentir mi cambio de humor, porque pone un brazo

alrededor de mi hombro, la segunda vez ese día, y me acerca
para darme un rápido abrazo lateral.
"Voy a salir", dice en voz baja. "¿Necesito cualquier cosa?"
"No, estoy bien", le digo, dejando que mi cabeza descanse en su

hombro sólo por un segundo, todavía preocupada por la copa
vacía de mi árbol. "Gracias por venir".
Gira la cabeza y aprieta los labios a un lado de mi cabeza. No

es un beso, pero. . . una demora . "En cualquier momento."
Mark se aleja, y por el rabillo del ojo, lo veo darle a Rigby la

orden de quedarse en silencio, diciéndole al perro que no lo siga
a casa esta noche, que se quede conmigo, porque necesito más al

perro.
Es un gesto muy dulce, aunque Mark odiaría que lo viera.
Unos momentos después, escucho que la puerta trasera se cierra

detrás de él, y luego me golpea.
Esta noche entera, no he pensado en lo que sigue, o en quién

será el próximo, en la lista de ex, ni siquiera una vez.
18 de diciembre, lunes por la mañana

“Espera, lo siento. Ejecuta eso por mí una vez más. Pero primero,
¿podemos agregarle Bailey a mi café? Porque creo que es la
única forma en que esto tendrá sentido. Esta vez la versión de
CliffsNotes ".
Ignoro la solicitud de mi amiga por Bailey, principalmente

porque Ivy Cabrera acaba de decirme que está embarazada del
tercer bebé.
Pero obedezco obedientemente la primera petición y repito mis

planes de vacaciones navideñas.
"¿Versión abreviada?" Yo digo. “La señora psíquica en la

estación de tren me dice que ya conocí a mi único amor
verdadero. Y como puedo sentir que mis ovarios se encogen y
no quiero morir como una solterona, decidí rastrear
exactamente de quién está hablando ".
Ivy hace girar un rizo rojo alrededor de su dedo. “Rastrear, es

decir. . . acechar a tus ex? "
“Localizando a mis ex”, corrijo.

Aunque, a decir verdad, puede llegar al acecho.
Me desperté esta mañana con un deliberado cambio de enfoque

en mi causa. Sigo diciéndome a mí mismo que es porque la
Navidad está a la vuelta de la esquina, por lo que el tiempo
corre para encontrar a The One. Es una explicación lógica, pero.
. . no es la explicación completa .
La verdad es que me pasé la mitad de la noche dando vueltas,

pensando no en mis ex, sino en Mark . Y bueno . . . no podemos
tener eso, ¿verdad? Para empezar, no es un ex. Por lo tanto, él
no es el indicado y. . .
Espera, mierda santa. ¿Cuándo he considerado siquiera que

Mark podría ser cualquiera, y mucho menos The One?
El es solo. . . Mark. Mejor amigo. El tipo que siempre ha estado

ahí. El chico que. . .
Bueno, él me prepara la cena, se queda conmigo para que no

tenga que decorar mi árbol sola, adoptó a medias a mi perro, y
ayer se sintió muy, muy bien pegado a mí debajo de las ramas
de un árbol de hoja perenne.
Ivy inclina la cabeza mientras me estudia. "¿Estás bien? Te ves

rara."
Me siento rara.
Es por eso que pasé la mayor parte de mi mañana en el sofá

con mi computadora portátil, admirando mi nuevo árbol, todo
mientras descubría la mejor manera de contactar a mis cinco ex
novios restantes.
Dos de ellos serán fáciles. Doug Porter y Chad Morrister viven

aquí en Haven.
Stephen será un poco más difícil ya que vive en la ciudad, pero

de todos modos he estado pensando en ir a Manhattan para
hacer algunas compras navideñas de última hora. Pero él y yo
estamos en buenos términos, y él ya respondió a mi mensaje de
texto informándome que se quedará en la ciudad hasta el
miércoles, cuando se vaya a la casa de su hermano en Kansas
City.
Eso deja solo a Adam Bartley, quien, por lo que puedo decir, ha
desaparecido de la faz de la tierra, y. . .
Colin Austin.
Colin será complicado. Uno, porque, bueno, me rompió el

corazón. Y porque si Google sabe de qué está hablando, ahora
vive en Portland, Oregon.
Lo que no tiene sentido. El Colin que conocí tenía sangre de

Nueva York corriendo por sus venas. Rara vez lo vi sin traje,
nunca vi un cabello fuera de lugar. Y es cierto que nunca he
estado en Portland, pero parece muy divertido y relajado. Esas
no son palabras que asocio con mi novio de la universidad.
"Hoooo chico", dice Ivy, exhalando y luego tomando un sorbo

de su ponche de huevo con leche. Estamos en Steam Bean, una
cafetería local cuyos lattes son muchísimo mejores que sus
habilidades para nombrar tiendas.
Bebo mi propio moca de menta, con bastones de caramelo

triturados encima. "Lo pondré sobre mi."
—Bueno —dice Ivy, recostándose en su silla y cruzando las

piernas—, “creo. . . Estoy enamorada de este plan. Me gusta,
totalmente ".
Sonrío, porque no es menos de lo que pensé que diría. Si Mark

es el mejor amigo que me mantiene con los pies en la tierra, Ivy
es la mejor amiga que juega conmigo en las nubes.
Ella es buena gente. Alta y ancha, con un gran cabello rizado

(rojo botella, pero le funciona a ella), y una risa fuerte y feliz,
Ivy es casi tan agradable como parece. Hemos sido muy
cercanos desde la secundaria, y la única razón por la que ella es
una especie de segunda mejor amiga de Mark es porque se casó
con su novio de la secundaria cuando tenían diecinueve años.
Y aunque los amo tanto a ella como a Jim en pedazos, incluso

en la escuela secundaria siempre fueron una unidad. Luego
tuvieron hijos y ya sabes cómo va. Entonces, aunque la amo
como a una hermana y siempre supe que puedo contar con ella,
con el tiempo descubrí que primero recurrí a Mark.
De todos modos, ¿cómo llegué a eso?
El caso es que ella es mi gente. Ella cree en el karma. Ella lee su

horóscopo a diario y con frecuencia me envía ideas sobre el mío.
También tuvo una adivina en su cumpleaños durante tres años
seguidos. ¡¿Necesito decir mas?!
"Entonces, sé sincera conmigo", dice Ivy, estirando la mano sobre

la mesa para arrastrar su meñique a lo largo del borde de mi
crema batida, luego metiéndoselo en la boca. “¿Cuál crees que es
realmente? Quiero decir, respeto el proceso de poner puntos en
sus i y cruzar sus t con la lista completa, pero no es posible que
haya pensado que era Joey Russo. Ese niño solía poner salsa de
tomate en su puré de papas ".
Me estremezco ante el recuerdo. “No, creo que nunca pensé que

fuera Joey. Jack tenía un poco más de esperanza, pero. . . no."
Ivy tamborilea con los dedos sobre la mesa. “Está bien, dilema.
Dijiste que tachaste a los hombres casados o involucrados. ¿Y si
es uno de ellos?”
Le doy una mirada. "¿En serio? ¿Crees que mi alma gemela

está casada?”
“Solo digo, ¿y si ? Quiero decir, ¿qué pasa si él es

miserablemente infeliz porque eres su destino pero él no lo
sabía? Tal vez solo tengas que esperar a que se divorcie ... "
Levanto una mano. "No. El amor de mi vida no es un hombre

casado. Simplemente no lo es ".
Ella levanta un dedo sospechoso hacia mí, pinchando una uña

rosa fuerte en mi dirección. "Tu sabes quien es."
Bebo mi bebida. "Si lo hiciera, no tendría que tener la lista,

¿verdad?"
"Máximo contendiente", dice sin piedad. "Lo pondré sobre mi."
Aparto la mirada e Ivy gruñe. "Lo sabía. Todavía estás colgada

de Colin ".
"No lo estoy", digo automáticamente. "Yo no lo estoy

realmente."
“Está bien, pero de todos en tu lista, él tiene que ser la relación

más larga, ¿verdad? ¿Cuatro años?"
"Tres."
"Y él rompió contigo, lo que significa que debes haber sido feliz
en la relación, ¿verdad?"
Mantiene su voz suave, pero el recuerdo todavía duele. "Sí,

pensé que él era el único en ese entonces, pero como dijiste,
rompió conmigo, así que obviamente no lo estaba sintiendo".
“Quizás no era el momento”, señala Ivy. "Ustedes eran niños de

veintitantos años".
"Dice que la chica se casó a los diecinueve".
Ella agita una mano. “Jim y yo somos raros. Y no te desvíes del

punto, sabes que es verdad. Apuesto a que todavía no era tu
momento ni el de Colin.
"No puedo simplemente asumir que es Colin", señalo.
"Bien, bien. ¿Qué debemos hacer para descartar a los demás? "
"Bueno, Doug y Chad están en la ciudad ..."
Su risa me interrumpe. "Oh, Dios, había olvidado que saliste con

ellos".
"¡Son buenos chicos!" Digo a la defensiva.
"Te diré que Chad es decente, si no aburrido como diablos", dice,

bajando la voz en caso de que alguien cercano conozca a los
hombres en cuestión. "¿Pero Doug?"
"Es cierto que fue un rebote", digo, levantando un dedo. "Pero

incluso con esa reputación de playboy, era muy dulce".
"Y te engañó".
"Presuntamente."
Ella pone los ojos en blanco. “Si no supiera que todo ese
pensamiento positivo se basa en un buen corazón en lugar de
ingenuidad, te daría una bofetada tan suave. Bien vale. ¿Cómo
podemos poner a Doug y Chad en su órbita? "
"No solo eso. Necesito que estén a mi alrededor y muérdago ".
Ella parpadea. "¿Qué?"

Bien, me olvidé de decirle eso. “Lo llamo mi prueba de

muérdago. Quiero decir, todo esto está sucediendo en Navidad
por una razón, ¿verdad? ¿Podría ser porque hay muérdago por
toda esta ciudad?”
“Haven es un poco raro con las cosas, pero ¿qué tiene que ver
con tu plan? ¿La adivina te dijo que besaras a los chicos?”
"No, pero es un atajo brillante", señalo. "Piénsalo. ¿Qué mejor

manera de determinar si tienes química con alguien que un
beso? ¿Y qué mejor excusa para besar a un chico al que no has
visto en mucho tiempo que un inofensivo y amistoso beso
debajo del muérdago?”
"Qué asco. Dime que no besaste a Joey Russo. Te recuerdo-"
“Ketchup y puré de papas, lo sé. Y no, no lo besé ".
"¿Sin muérdago?"
“En realidad, lo había. Mark estaba allí, y pensó que sería un

tumulto absoluto colgando muérdago entre nosotros, a pesar de
que sabía muy bien que Joey está a punto de ser padre ... "
"Espera, ¿Mark estaba allí?" Ivy interrumpe.

"Sí, me ayudó a cortar el árbol".
"¿Y él conoce tu plan?"
Me encojo de hombros. "Seguro."
"Quiero decir, no es que me sorprenda que le dijeras", dice,

"sabiendo lo unidos que eres Mark y tú, pero ¿no suele rechazar
este tipo de ideas?"
"Oh, está tratando de derribarlo", murmuro, recogiendo una

pequeña mota de bastón de caramelo de mi montículo de
crema batida que se derrite lentamente.
"Sí", dice Ivy lentamente. "Voy a sugerirte que intentes reunirte

con estos ex sin que Mark esté cerca".
"Bien . . . Quiero decir, sí, supongo que ese es el plan. Aunque

ahora que lo pienso, soy dos por dos con Mark presente para los
encuentros. Primero con Jack en el restaurante, luego con Joey
en la granja de árboles ".
"UH Huh." Ella termina su bebida. “¿Y cómo te fue?

¿Cualquiera termina felizmente?”
"Bien . . . "
“Dulce, mira. Te amo. Amo a Mark. Ustedes son dos de mis

favoritos. Pero cuando se trata de relaciones, los mejores amigos
del sexo opuesto son solo, bueno, no quiero decir problemáticos,
pero es complicado, ¿sabes? ¿Cuántos de tus ex han tenido
problemas con que Mark y tú sean tan cercanos? "
Me muevo en mi asiento. "Unos pocos."
"La mayoría", corrige. "¿Y cuántas de las novias de Mark han

sido frías contigo a pesar de tus intentos de BFF con ellas?"
"Unas pocas."
"Todas", corrige. “No es porque estés saliendo con chicos malos, o

porque él está saliendo con mujeres perras, es solo. . . es normal
que las nuevas relaciones sean celosas, y Mark es un catalizador
malditamente bueno para los celos ".
"¡Es solo Mark!"
“Parece una versión de leñador de Clark Kent, Byrne. A otros

hombres no les encanta que su chica sea la mejor amiga de
Superman sexy y desaliñado ".
Su descripción muestra su rostro, y su cuerpo, perfectamente en

mi mente, y de repente siento que me falta un poco el aliento y,
eh. . . ¿Hace calor aquí?
Aun así, tiene razón. Quiero decir, no me gusta que funcione de

esa manera, pero. . . en cierto modo lo hace. Algunos de los
chicos con los que he salido no parecen preocuparse por Mark,
pero también son los que tampoco parecen preocuparse mucho
por mí. El resto se volvía extraño cada vez que se mencionaba

el nombre de Mark. Incluso Colin, a quien adoraba
abiertamente, se quedaba un poco callado cada vez que Mark
y yo hablamos por teléfono durante la universidad. De todas las
personas en mi vida, Colin fue lo más cerca que estuve de
contarle a alguien sobre la hermana de Mark. Colin y yo
estábamos saliendo cuando Emily murió, y me sentí mal al
decirle a mi novio que me iba a casa a visitar a mis padres en
lugar de toda la verdad: que iba a un funeral.
Pero se había sentido más mal contarle a Colin el secreto de mi

mejor amigo.
Ivy tiene razón. Mantener una relación romántica con un chico

al mismo tiempo que se fomenta una relación platónica con un
chico diferente no es para los débiles de corazón.
“Está bien, mantendré a Mark fuera de esto. Y aquí está la

mejor parte: ya tengo a Doug y Chad en mi radar. Chad
accedió a almorzar, y si Doug me responde ... "
Ivy se ríe. “Dos en un día. Me encanta esto de ti. ¿Pero

realmente crees que podrás determinar cualquier cosa durante
el almuerzo? "
"Para eso es la prueba del muérdago".

"UH Huh. ¿Y cómo planeas atraer a Chad Morrister, un
podólogo de cuarenta y tantos años, debajo del muérdago
durante el almuerzo?
"Tranquila", le digo con una sonrisa. "Lo he invitado a

almorzar".
"¿Y tienes una rama de muérdago?"
"Mejor." Me inclino hacia adelante. "Tengo tres".
Lista de ex de Kelly Byrne: versión cuatro
Jack Chance
Joey Russo
Chad Morrister : Está bien, entonces nuestra ruptura no fue tan amistosa o mutua
como pensaba. Resulta que alguien ha estado guardando rencor porque "lo dejé sin
ceremonias". ¡Ups! Y no tiene ningún interés en "volver a prepararse para ese tipo
de dolor". Doble grito.
Adelante.
Doug Porter, estás despierto y tengo un buen presentimiento sobre ti. . . .

18 de diciembre, lunes por la tarde

“Y necesitamos un poco de Navidad, en este mismo momento. . .
"
Canto la canción a todo trapo, desafinada y todo, mientras lavo

los platos y los pongo en el tendedero. Mi abuela nunca instaló
un lavaplatos, y sigo queriendo hacerlo, pero simplemente no
parece tener sentido ya que ni siquiera vivo aquí a tiempo
completo.
Además, soy un lavaplatos bastante bueno. La cocina, no tanto,

pero la limpieza me parece algo terapéutica.
Estoy hasta los codos en espuma cuando escucho el ladrido feliz

de Rigby y los pasos pesados que tan a menudo lo siguen.
Miro por encima del hombro y sonrío cuando veo a Mark

entrar por la puerta trasera. "¡Oye! Pensé que estarías en el
restaurante ".
"Estoy en camino. Hoy solo estoy trabajando en el turno de la

cena, no en el almuerzo ". Mira la mesa de mi cocina,
frunciendo un poco el ceño cuando ve la mesa que todavía
tiene los dos manteles individuales. "Pensé que tú e Ivy habían
salido a tomar un café".
"Lo hicimos. El escenario del almuerzo era para Chad ".
"¿Chad?"
—Morrister —digo, mirando por encima del hombro de nuevo,

mientras coloco un plato para servir en la rejilla y dejo caer una
sartén en el fregadero lleno de agua para que se empape.
"Salimos ..."
"Recuerdo. Y tú . . . ¿cocinaste?"
Me río de su tono escéptico. “Hice una ensalada de pollo. Tu

receta, por supuesto, aunque, por favor, no se lo digas a mi
madre ".
Espero que sonría. Por lo general, los elogios de su cocina me

dan al menos una media sonrisa. Nada.
"¿Todavía está aquí?"
"Si. Lo escondí en mi habitación —digo, quitándome los guantes

de goma que me puse para proteger mi manicura de bastón de
caramelo.
Los ojos de Mark se mueven hacia el techo.
“Estoy bromeando . El se fue a casa."
Mark se acerca a la encimera y saca un trozo de pollo del

Tupperware que todavía no he puesto en el frigorífico. "El pollo
está demasiado cocido".
"¿No vas a preguntar cómo te fue?" Me cruzo de brazos.
Señala las sobras. "Si le serviste eso, ya sé cómo fue". Le tiro el

paño de cocina y esta vez sonríe. "Bien. ¿Come te fue?"
"No muy bien", le digo, dando un paso atrás y levantándome

sobre el mostrador. “Parece estar un poco, um, amargado por la
forma en que terminaron las cosas entre nosotros. No lo había
visto venir ".
"¿En realidad? ¿Pensaste que estaría feliz de haberlo dejado?”
"Bueno no. Honestamente, no pensé que lo había dejado. Tenía

diez años más, ¿sabes? Él tenía treinta y cuatro años y estaba
listo para establecerse, yo tenía veinticuatro años y todavía
aprendía que los disparos un martes por la noche son una mala
decisión. Pensé que le estaba haciendo un favor cuando le sugerí
que no éramos supercompatibles ".
"¿Supongo que él no sintió lo mismo?"
“Bueno, digamos que cuando aceptó mi invitación a almorzar

tan fácilmente, pensé que era porque tal vez quisiera
reconciliarse. Resulta que fue más para contarme todas las
formas en que su vida ha sido mejor sin mí ".
"Ah."
"Sí", digo con un suspiro. "Era un oso muy herido, o lo que sea".
"No voy a preguntar qué significa eso". Mark camina hacia la

sala de estar, asoma la cabeza. "No hay copa de árbol".
"Sigo trabajando en eso." Salto del mostrador y pongo la tapa

sobre las sobras, aunque sé que probablemente no las comeré.
Mark tiene razón, el pollo no fue bueno y el resto de la
ensalada es aún peor.
"¿Necesitas algo?" Le pregunto, con un poco de curiosidad por

saber por qué pasa a la mitad del día.
Mark señala al perro. “Comió un ala de pollo esta mañana.

Salido de la basura. Por lo general, simplemente se mueve a
través de él. Pero el veterinario siempre dice que lo vigile
mientras digiere, y tengo que ir al restaurante ".
"Claro, puedo quedarme con él un par de horas". Me inclino

para acariciar a Rigby. “¿Pero cuánto tiempo lleva? Tengo
planes esta noche ".
Mark abre la boca y tengo la sensación de que quiere

preguntar, pero se da cuenta de que no tiene el derecho. Somos
cercanos, pero generalmente no exigimos saber cosas sobre la
vida del otro que el otro no ofrece voluntariamente.
En cambio, simplemente asiente. “Debería estar bien para

entonces. Si no, Erika puede pasar ".
Miro hacia arriba. “¿Erika? ¿La camarera en tu restaurante

Erika?”
El se encoge de hombros. "Ella todavía tiene una llave".
"¿Dejaste que tu ex se quedara con una llave?"
Mark se encoge de hombros como si no fuera gran cosa. "¿Qué,

tienes permitido hacer el almuerzo para todos tus ex, pero ni
siquiera puedo hacer que una de las mías revise a mi perro?"
Por un loco momento quiero decirle que cancelaré mi cita con

Doug y veré a Rigby yo misma. Pero luego me doy cuenta de
que si Erika no está aquí, estará en el restaurante. . .
"¿Es ella la razón por la que tú y Sheila rompieron?" Solté.
Su mirada es puramente masculina desconcertada. "¿Es quién?"
“Erika,” digo, con lo que creo que es una paciencia

impresionante.
"Oh. No." Mira su reloj. "¿Por qué?"
"Nada."
Mira, no es que no me guste Erika. Es hermosa, divertida e

inteligente, y perfecta para Mark en personalidad, horóscopo y
su ridícula apariencia.
Pero de todas las ex novias de Mark, Erika Simmons es la que

fue la más amigable conmigo (aunque uso la palabra
libremente), la menos amenazada por nuestra relación, y. . . la
que estuvo más cerca de alejarlo de mí.
Quiero decir, no realmente . Seguimos siendo amigos durante los

dos años que salieron, pero fue diferente. Siempre es un poco
diferente cuando uno de nosotros está en una relación. Tenemos
límites, respetamos a nuestros seres queridos. Pero con ella fue
muy diferente.
Como, diferente como cuando yo estuve con Colin.
Ella también es la única ex a la que le ha hablado de su

hermana, y aunque estaba encantada de que encontrara a
alguien en quien confiar, de verdad, estaría mintiendo si dijera
que no me había sorprendido un poco.
"Está bien, bueno, lo que sea", digo, un poco demasiado rápido.

"Si no ha hecho caca para cuando yo vaya a mi cita, lo dejaré
en tu casa".
"'K."
Se dirige hacia la puerta y luego se vuelve. "¿Cita?"
"¿Qué?"
"¿Dijiste cuando vas a tu cita?"
"Sí. Es cuando dos personas ... "
"¿Con cuál?"
No pretendo hacerme la tonta. "Doug".
Mark jura entre dientes. "No puedes hablar en serio".
Me cruzo de brazos. "Sabías que me iba a reunir con todos mis

ex novios".
“¿Cómo califica? ¿Estuviste conectada por, qué, unos días? "
“Nos vimos durante tres meses,” digo. Aunque la descripción de

Mark no es del todo incorrecta. Doug y yo lo éramos en su
mayoría. . . físico.
Sobre todo porque no teníamos nada de qué hablar.

"Bien", murmura Mark. "Diviértete."
"Adiós", digo bruscamente, mi propia voz un poco irritada.

Estoy acostumbrado al hecho de que Mark no es exactamente
un mejor amigo hablador. De la misma manera que tolera mis
tendencias ocasionales de "woo-woo" y el hecho de que me
exalto demasiado el Día de Acción de Gracias (¡he tenido
algunas cosas muy importantes en juego!), Le devuelvo el favor
poniendo con su cosa tranquila y melancólica.
Pero su irritabilidad de los últimos días realmente está

sobrepasando mis límites.
Mark golpea la puerta trasera y, un segundo después, vuelve a

entrar de golpe. Señala hacia arriba sin mirar en la dirección de
su dedo. "¿En realidad?"
Miro el muérdago con una reverencia. "Estoy cubriendo todas

mis bases".
"¿Supongo que Chad no pasó la prueba del muérdago?"
Resoplé. "Digamos que cuando se lo señalé, al que estaba junto a

la puerta principal, me dijo que estaba cayendo con algo".
La comisura de la boca de Mark se contrae. "Ay."
"Si. Rechazo clásico. Aunque está igual de bien. En ese

momento, todavía me estaba recuperando de su recitación de
mis pecados ".
"Bien." Se aclara la garganta. "Mejor suerte esta noche, ¿ok?"
Pongo una mano sobre mi pecho. "Es eso . . . Se siente un poco

como una disculpa. Por insinuar que Doug no fue más que una
llamada de botín ".
En lugar de responder, mira pensativo el muérdago. “¿Cómo

planeas convencer a Doug bajo uno de estos? ¿Él también viene
aquí?”
"No, vamos a tomar una copa en Weller's", digo, refiriéndome a

una de las tabernas locales. No es un bar de buceo, pero está
bastante cerca.
"¿Tienen muérdago?" pregunta con escepticismo.
Sonrío y hago una pequeña reverencia. “Lo hacen ahora. De

hecho, la mayoría de los establecimientos de la ciudad
recibieron hoy un regalo”.
Sus ojos se apagan. "Qué generoso de tu parte".
“No seas gruñón. Cedar y Salt también obtuvo uno ".
Mark pone los ojos en blanco y sale por la puerta trasera sin
decir una palabra más.
Me encojo de hombros. No sé que esperaba.

18 de diciembre, lunes por la noche

Puaj.
¿Conoces esa sensación molesta cuando descubres que tus

amigos tenían razón y tú estabas equivocado?
Si, eso. Doug Porter lo es. . . una especie de idiota.
Me gustaría pensar que tal vez no era así cuando salimos en su

momento, pero tengo la sospecha de que tal vez sí. Que tal vez
estaba tan insensible después de mi ruptura con Colin que
estaba ciega al hecho de que estaba saliendo con un idiota.
No es que sea malo o cruel. Está absorto en sí mismo como todos

los diablos.
Eso, y aunque el hecho de que no consideramos específicamente

esta noche como una cita tanto como una "puesta al día", es un
poco de mala educación que esté mirando a todas las mujeres
que pasan, ¿verdad?
Y no estamos hablando de una mirada sutil con sus ojos. De

hecho, se aleja de nuestra conversación para poder mirar por
encima del hombro a cualquier mujer.
Actualmente está en medio de la historia 909 sobre su equipo

de fútbol de fantasía, y no puedo dejar de mirar hacia la puerta
donde el muérdago cuelga amenazadoramente.
Cuando entré por primera vez, llena de esperanza y excitación

fuera de lugar de sentir mariposas, estaba encantada de ver
que el gerente lo había colgado, y aún más encantada de ver
cómo los clientes sorprendidos lo usaban. En el transcurso de la
terrible noche, ha habido besos divertidos y divertidos entre
amigos, besos dulces y coquetos entre parejas que parecen estar
en una primera o segunda cita, y un par de besos en la
habitación.
Me tomó cinco minutos darme cuenta de que el dilema de esta

noche no es encontrar una manera de que Doug y yo nos
metamos debajo de ese muérdago, sino asegurarme de que no lo

hagamos.
No necesito una prueba de muérdago para este tipo.
El no es el indicado.
Quiero decir, es guapo. Le daré eso. De todos mis ex, él es el más,

bueno, hermoso. Tiene ojos azules brillantes, cabello rubio espeso
y grandes hoyuelos que luce a la perfección con una sonrisa
digna de Hollywood.
Es su alma la que apesta.
Hasta ahora le he oído quejarse de que sus planes de esquí para

el día de Navidad no funcionan, así que ahora tiene que ir a
casa de sus padres durante las vacaciones. Lo que
aparentemente es "una decepción" ahora que a su padre le
diagnosticaron cáncer.
Si. Lo sé.
Ah, y su cuñada está embarazada y no le gusta verla comer.
Yo solo . . . Quiero decir, no hay palabras. Es como si fuera un

villano de dibujos animados o algo así.
Y pensar que he desperdiciado mi mejor atuendo con este tipo.
Me puse un par de jeans ajustados oscuros que adelgazan mis
muslos mientras logran que mi trasero se vea alegre. Mi suéter
rojo está fuera del hombro y es engañosamente recatado, pero
me queda muy bien en las tetas y de alguna manera está
cortado para darme una cintura que normalmente no tengo.
Incluso estoy teniendo un buen día de cabello, ¿y mi maquillaje

ahumado? Totalmente en el punto.
Como dije, desperdiciado con este tipo.
No me malinterpretes — advirtió Doug. Tuve la misma mirada

degradante a la que han sido sometidas todas las demás
mujeres del bar, pero no me hizo sentir hermosa. Me hizo sentir
como un trozo de carne.
"¿Otro?" pregunta el cantinero, que se detiene frente a nosotros

mientras limpia una copa de vino.
Estoy agradecida tanto por la interrupción como por la ruta de

escape.
"Oh, Dios, no, creo que tengo que irme", digo con una sonrisa
brillante, con las manos en busca de mi bolso. Con mucho gusto
pagaré nuestras bebidas si me saca de aquí.
La mano de Doug se cierra sobre mi brazo. "Aún no. Es

demasiado pronto ".
Mi sonrisa se endurece un poco, porque la forma en que lo dice

es más una orden que una petición. "Realmente debería estar
llegando a casa".
"¿Para qué? Dijiste que tenías dos semanas libres ". Doug da un
bufido burlón. “Debe ser lindo ser profesor. Algunos de nosotros
trabajamos a tiempo completo ".
Tomo una respiración larga y profunda. Oh, bueno. Su actitud

no es desconocida. La mayoría de la gente no es tan burlona,
pero no soy ajeno al mantra de "los profesores apenas trabajan".
No importa que nuestras “vacaciones” de verano se dediquen a
planificar lecciones y que nos paguen frijoles para cuidar a los
seres queridos de otras personas. La mayoría de las veces estoy
más que dispuesto a ir a batear en defensa de mí mismo y de
todos los profesores que trabajan duro, pero algunas personas
simplemente no valen la pena. Y el chico a mi lado es uno de
ellos.
Me vuelvo para pedirle la cuenta al camarero, pero ya ha

centrado su atención en un grupo de mujeres.
"Así que de todos modos", dice Doug, dejando que su mano se

deslice como si decidiera que vamos a extender la velada, "¿qué
ha estado pasando contigo?"
Miro la hora en mi teléfono. No está mal. Solo le ha llevado

una hora y doce minutos preguntar algo sobre mí.
Es muy poco y es demasiado tarde, pero como el camarero

todavía no está mirando en mi dirección y no soy lo
suficientemente grosera como para salir y dejar a Doug con la
cuenta, respiro profundamente para tener paciencia.
"No mucho. Estoy solo por Navidad este año, ya que mis padres
están en un crucero por Alaska por su aniversario ".
Doug apoya la barbilla en su hombro, comiéndose con los ojos a

una de las camareras mientras ella pasa con una bandeja llena
de cervezas. Lindo.
“Y he decidido dejar mi trabajo, afeitarme la cabeza y

mudarme al Pacífico Sur y recolectar tortugas”, digo, para
probar si está escuchando aunque sea un poco.
Simplemente asiente distraídamente y toma su cerveza. "Fresco.

Bueno, puedo decirte esto, te ves bien. Si alguien te importa una
mierda por subir de peso, mándalos a mi manera. Con mucho
gusto les haré saber que algunas mujeres se ven mejor con un
poco de relleno ".
Por un segundo creo que no lo he escuchado bien. Es tan brusco

y casual, como si tuviera derecho a decirle a una mujer cuándo
es atractiva y cuándo no. Como si estuviera bien decirle a una
mujer con la que no ha hablado en años que ha subido de peso.
No es muy frecuente que me quede sin palabras, me gusta
considerarme una chica que piensa en mis pies, pero en este
momento mi mente está en blanco de rabia y dolor. Quizás un
poco de humillación.
Desafortunadamente, son los dos últimos los que están ganando,

porque en lugar de darle la diatriba abrasadora que se merece,
me horroriza sentir que se me humedecen los ojos.
Estoy tan ocupada tratando de contener las lágrimas mientras

Doug sorbe su cerveza, ajeno a mi reacción, que no me doy
cuenta de que ya no estamos solos.
"¿Cómo te va aquí?" dice el recién llegado.

Mi humillación se desvanece un poco, reemplazada por

sorpresa.
Mi turno. ¿Mark?
Mi mejor amigo cambia su mirada irritada del perfil de Doug a

mi cara, sus ojos escrutadores no se pierden nada. ¿Estás bien?
Yo trago. No se .
Es un intercambio silencioso, pero revelador. Mark es protector,

pero siempre ha tenido cuidado de no cruzar la línea hacia el
territorio posesivo de rescatar a la mujercita.
Aprecio que él no crea que deba ser tratada de manera

diferente porque soy mujer. Pero esta noche no se trata de que
yo sea una mujer, se trata de ser una persona, con sentimientos
que acaban de herir. Mark no es el tipo de hombre que deja
que un amigo sea herido, sea hombre o mujer.
"Discúlpate", dice Mark.
"Genial", murmura Doug, arrastrando la palabra burlonamente.

"Veo que todavía tienes a tu perro guardián".
"Discúlpate", espeta Mark de nuevo.

Doug nos mira a ambos con incredulidad. "¿Por qué?"
Mark no responde y me doy cuenta de que no escuchó las

crueles palabras de Doug; solo sabe que me molestaron. Siento
una intensa punzada de gratitud por su inquebrantable lealtad.
Le doy a Doug una mirada de enojo. "Por insinuar que estaba

gorda".
Mark deja escapar un gruñido bajo y Doug levanta las manos

inocentemente con una carcajada. “Whoa, ¿qué? No creo que
estés gorda, cariño, solo dije que te ves bien con unos kilos de
más. Eso es todo lo que quise decir ".
"De todos modos, fue un insulto", digo, alcanzando mi bolso. Dejo

caer un par de billetes de veinte en la barra. Es más que
suficiente para cubrir mis dos vinos y las cervezas de Doug más
la propina, pero no quiero esperar a que me cambien.
Me pongo de pie, y aunque aprecio que Mark me tiende una

mano para sostenerme en mis tacones altos, no la necesito. La
presencia de mi amigo es suficiente para recordarme que hay
buenos tipos en este mundo y que no necesito desperdiciar ni un
pensamiento más en los cojos.
“Ojalá pudiera decir que ha sido un placer verte de nuevo”, le

digo a Doug, “pero. . . " Me encojo de hombros, porque soy
literalmente incapaz de forzar ninguna sutileza.
La mirada de Doug está en algún lugar entre incrédula y

aburrida mientras pasa entre Mark y yo. Luego niega con la
cabeza y toma su cerveza. "Increíble. Algunas cosas nunca
cambian."
Terminé totalmente la conversación y toco la manga de Mark.

Hora de irse.
No se mueve. "¿Que se supone que significa eso?" le pregunta a

Doug.
Oh no. Oh no no no .
"Sabes lo que significa", dice Doug bruscamente.
Froto mi frente. Aquí vamos.
"Iluminame."
Doug deja su cerveza lentamente y se pone de pie. "Significa

que toda esta ciudad está harta de que estés rondando a Kelly
como un maldito perro guardián".
"Mantenerla alejada de imbéciles como tú es difícil".
"¿Soy el idiota?" Doug dice, cruzando los brazos. "¿En serio vas a
actuar como si no hubieras hecho todo lo posible para
asegurarte de que ella y yo terminamos?"
Mark se acerca. “Eso fue todo tu. Tú eres quien la engañó ".
Supuestamente, agrego en silencio. Mark me dijo que pensaba

que Doug estaba haciendo trampa, pero Doug insistió en que no.
Al final, rompimos no porque estuviera convencido de que
había hecho trampa, sino porque no estaba dispuesto a aceptar
la palabra de Doug sobre la de Mark.
¿Ves por qué toda esta situación es incómoda? Confío en mi

mejor amigo, pero nunca me diría por qué estaba tan seguro de
la trampa de Doug.
“Kelly y yo nunca fuimos exclusivos”, dice Doug.
Mi mirada vuela hacia él. ¿Espera, qué? Eso es nuevo para mí.
“Tú y Erika estaban sin embargo, ¿verdad? Oh espera . . . "
Estoy tan sorprendido cuando Doug sale volando hacia atrás

que dejo escapar un grito, pero se pierde bajo la cacofonía de
vidrios rotos cuando el vaso de cerveza de Doug se rompe en el
suelo.
Doug se agarra a sí mismo en el taburete, se lleva una mano a

la boca y le da a Mark una mirada de incredulidad. "¿Enserio
amigo?"
Yo también miro a Mark, viendo como su mano derecha
regresa a su costado, todavía en un puño. Respira con dificultad
y parece más enojado que nunca.
Hora de irse. Es hora de irse.
"Vamos", le digo en voz baja, envolviendo mis dedos alrededor

del brazo de Mark. "El no vale la pena."
Miro con cautela a Doug, pero parece más interesado en evitar

que la sangre de su labio gotee sobre su suéter azul que en
defenderse. Aunque supongo que eso se debe más al hecho de
que sabe que no puede ganar que a la sensibilidad de cualquier
"hombre más grande".
Doug está relativamente en forma, pero delgado hasta el punto

de ser larguirucho. Hay exactamente cero posibilidades de que
gane en una pelea contra Mark. Especialmente cuando mi

mejor amigo tiene un ardiente asesinato en sus ojos.
¿Acerca de? Me pregunto. Estoy seguro de que un poco de eso

se debió a que Doug me hizo llorar, pero también estoy
bastante segura de que hay más.
Una de las camareras nos empuja fuera del camino para

limpiar la cerveza derramada y los vidrios rotos. Mark se pasa
una mano por el pelo y respira hondo.
Luego agrega otros veinte al dinero en efectivo que ya dejé en

la barra y asiente con la cabeza en señal de disculpa hacia el
camarero. Otros veinte le entrega a la camarera, inclinándose y
murmurando algo.
Ella le da una sonrisa y un guiño antes de asentir sutilmente

hacia Doug.
Cuando Mark se pone de pie y me mira a los ojos, todavía está

tenso, pero su mirada es firme. "¿Lista?"
Um, sí .
Mark extiende su mano, y ni siquiera se me ocurre no tomarla

mientras salimos del bar. Casi nadie nos mira, su nivel de
interés disminuyó cuando se dieron cuenta de que no había
pelea.
Dejé que mi mirada se moviera hacia arriba justo antes de salir

por la puerta, casi sonriendo al muérdago y cuán diferente fue
mi noche de lo que había planeado.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión cinco
Jack Chance
Joey Russo
Chad Morrister
Doug Porter
Stephen Hill: Dios, hombre, sé tranquilo. O al menos decente.

18 de diciembre, lunes por la noche

"Te llevaré a casa". La voz de Mark es tranquila, como la noche
que nos rodea. Es la adolescencia esta noche con un viento
amargo, y todos están en casa frente al fuego o acurrucados en
uno de los restaurantes o bares de Haven.
"No, mi auto está estacionado en la parte de atrás", digo,

buscando en mi bolso hasta que saco mis guantes.
"Yo te llevaré".
Miro hacia arriba con sorpresa. No tanto por ser mandón, eso
no es nada nuevo y, por lo general, lo ignoro. Pero hay algo
más en su voz. Y también en su rostro, lo veo, mientras observo
su expresión.
No quiere llevarme a casa por mí. O al menos eso no es del

todo. Mira . . . solo. Pero como él no quiere ser.
"Te traeré de vuelta mañana por tu coche", dice, metiendo las

manos en los bolsillos, apoyando los hombros contra el viento.
"Está bien, claro", le digo en voz baja. "¿Dónde estacionaste?"

"De vuelta en el restaurante".
Trato de no hacer una mueca. Cedar and Salt está a varias

cuadras y la temperatura parece estar bajando a un segundo.
Pero si me voy a morir de frío, quiero que sea con este tipo, así
que sonrío y me encojo de hombros.
Pongo mi brazo en el suyo y él me deja. Caminamos en silencio

durante unos momentos antes de decir lo que hay que decir.
"Gracias."
"¿Por?"
"Por estar ahí".

Me mira durante un largo rato. Y en lugar de decir lo merecido

que te lo dije, se agacha, toma mi mano y la aprieta.
El gesto es tan inesperado y fuera de lugar que mis ojos se

llenan de lágrimas. Me aprieto y miro su perfil, que es duro y
pedregoso en las sombras de la noche. "¿Por qué le pegaste?"
Siento que Mark se encoge de hombros y tira de su mano.

"Como dijiste. Él es un imbécil."
"Si pero . . . Nunca antes te había visto golpear a nadie ".
Otro encogimiento de hombros. "Nunca pensé que nadie más se

lo mereciera".
"¿Porque me engañó?" Pregunto suavemente mientras nos

acercamos a su camioneta.
"Sí." Su voz es cortante como lo es cuando hay más en algo y no

quiere que me entrometa.
Toco su brazo cuando llegamos a la puerta del pasajero del

camión. Es hora de una conversación muy atrasada. " Sabías
que me engañó".
Él mira hacia otro lado.

"Mark ."
"Kelly".
Soy una persona paciente, soy una persona paciente. . .
“Sé que estabas tratando de protegerme en ese entonces,” digo en

voz baja, “Y ahora. Te lo agradezco. Pero soy una niña grande.
No puedo soportarlo. Puedes contarme lo que pasó. Deberías
decirme lo que pasó. Lo que sea que viste. . . "
Su estremecimiento me dice que estoy muerta.
"Dime, o intentaré leerlo en tu palma", digo en broma. Es una

de mis amenazas favoritas. Creo totalmente en el poder de la
lectura de la palma de la mano y las líneas de vida, aunque yo
mismo no tengo el don, y es una de mis actividades favoritas

cuando quiero hacer tonterías. A Mark, eh, no le gusta tanto.
Pero en lugar de sonreír o responder a la pregunta, simplemente

comienza a caminar a mi alrededor hacia el lado del conductor.
"Oye." Agarro su manga. "¿Que está pasando aqui?"
"Déjalo caer. Está en el pasado ".
"Obviamente no. Acabas de darle un puñetazo a un chico. Lo

que sea que pasó en ese entonces todavía te está carcomiendo, y
no solo por mí".
“Eres mi amiga y te engañó. Se me permite enojarme ".
“Maldices si estás cabreado, no le pegas por estar cabreado. No

por eso."
"Yo no-"
"¿Me engañó con Erika?"
Su cabeza se echa hacia atrás y sé que lo hice bien. Siempre

sospeché pero nunca empujé. Ahora estoy deseando haberlo
hecho.
Se pasa una mano por la cara. "Los vi. En mi cama."
Mis ojos se abren de par en par, porque aunque sabía que

venía, escucharlo decir que era mucho peor.
Verás, Doug y yo podríamos haber sido casuales.
Como he mencionado, Mark y Erika no lo eran.
Justo cuando Doug y yo nos juntamos, Mark dio un gran paso

con Erika, que era su novia en ese momento. Le había pedido
que se mudara con él. (Sí, esta es la misma Erika que todavía
tiene una llave).
"Atrapé a tu novio con mi novia", espeta. "¿Feliz ahora que

tienes toda la historia?"
"No, no estoy feliz", respondo. “¿Por qué me lo dijiste?”
Su expresión es de chico clásico: incómodo. "Yo no…" Él mete las

manos de nuevo en los bolsillos y gira los hombros. "No quería
que te enojaras".
“Pero me dijiste que hizo trampa. ¿Por qué no me contaste toda

la historia?”
“Pensé que cuantos menos detalles mejor. Ya sabía de primera

mano que tener una imagen mental real de la infidelidad de tu
pareja es muy diferente a lidiar con el concepto ".
Siento una feroz punzada de ira por lo que tenía que ver y por
lo que ha estado cargando. Doy un paso adelante y envuelvo
mis brazos alrededor de él, presionando mi mejilla contra su
pecho. "Lo siento."
Lo siento encogerse de hombros. "Fue hace mucho tiempo."
“Sí, pero la amabas. Tenía que apestar ".
Está quieto por un largo momento, luego sus brazos se levantan

y lentamente le devuelve el abrazo. "No es por eso que
apestaba".
Frunzo el ceño, no sigo. "¿Qué?"
Sus brazos se aprietan un poco más. “Apestaba, pero no porque

fuera mi novia quien me engañaba. Porque era tu novio quien
te estaba engañando ".
Me inclino un poco hacia atrás para poder mirarlo. “Doug

apenas era mi novio. Llevábamos unos meses juntos. Y,
sinceramente, dado el tipo que conocí esta noche, creo que
probablemente esquivé una bala ".
"Aún no debería haber sucedido", dice en voz baja.
"No. No a ninguno de los dos ".

Se encoge de hombros y yo retrocedo. “Tú y Erika todavía son

amigas. Ibas a hacer que cuidara a nuestro perro, que está bien,
por cierto. ¿Cómo puedes hacerlo sabiendo eso? ¿Teniendo ese
recuerdo?”
Mark se estremece. "¿Tenemos que tener esta charla de chicas?"
Le doy un puñetazo en el hombro. "Sí."
"Bien. ¿Podemos hacerlo en el coche, donde hace calor? "
Oh. Correcto. Mi enojo con Erika y Doug me había calentado

por un tiempo, pero todavía hace mucho frío afuera.
Dejo que me suba al auto, y en el segundo en que se acerca al

lado del conductor y enciende el motor, enciendo la calefacción
al máximo y me giro para enfrentarlo. "Habla."
"¿Acerca de?"
"No me hagas golpearte de nuevo."
Mark pone la camioneta en reversa, y solo cuando estamos en

la carretera principal me responde. “Estuve enojado con Erika
por un tiempo, pero la ira se desvanece más rápidamente que el
dolor, y después de unas semanas me di cuenta. . . no hubo
dolor ".
Arrugo la frente. "¿Cómo es eso posible? Estuvieron juntos

durante años. Le pediste que se mudara contigo ".
“Eh. Más bien le di una llave para evitar que se enojara cuando
trabajaba más tarde de lo esperado y no podía entrar a la casa
".
“Ella podría haber tomado prestada mi llave. Vivo como a diez

pasos de distancia ".
Me lanza una mirada. "¿Qué tan bien crees que habría salido?"
"¿Qué quieres decir? Erika y yo nos llevábamos bien ".

"Solo porque haces que todos se lleven bien contigo, lo quieran o

no".
Entrecierro los ojos y leo entre líneas. "¿Estás diciendo que no le

agrado?"
"Estoy seguro de que le agradaste bastante", dice, bajando un

poco el calor. “A ella simplemente no le gustó nuestra relación.
O el hecho de que vivas en mi patio trasero. Y que tenías una
llave cuando ella no la tenía ".
"Oh." Me doy la vuelta y miro por la ventana. "Supongo que

puedo entender eso".
Me quedo en silencio mientras pienso en todo, y Mark me

sorprende al encender la radio. Me sorprende aún más cuando
es música navideña.
Me vuelvo hacia él y le susurro: "Sabía que eras un fan que

estaba en el armario".
"Cállate."
Sonrío y me vuelvo hacia la ventana mientras “Oh Holy

Night” resuena a través de la cabina del camión. Es una versión
bonita, una que no reconozco que sea vagamente jazzística.
Cuando llegamos al garaje de Mark, otro pensamiento me
viene a la cabeza. “¿Qué estabas haciendo en el bar en primer
lugar? Pensé que tenías que trabajar ".
"Trabajé. Terminé temprano ".
“Has estado haciendo eso mucho últimamente. Llegar tarde,

terminar temprano ".
"¿Entonces?" Su voz está irritada cuando entra al garaje y

presiona el botón para cerrar la puerta del garaje contra el
clima invernal.
Ninguno de los dos se mueve, y espero hasta que el zumbido de

la puerta automática del garaje se detiene, dejándonos en un
oscuro silencio. "¿Te pasa algo?" Finalmente pregunto.
“No.”
Abre la puerta del camión y sale. Inspiro para tener paciencia,

esperando hasta que entre en la casa antes de salir del auto. Su
respuesta no es menos de la que esperaba. No es un hablador.
Pero sé que tengo razón. Ha estado actuando diferente, solo un
poco. En formas que solo un mejor amigo que vive al lado lo
sabría.
Soy paciente con las peculiaridades de Mark. Tiene paciencia

con las mías. Pero estaría mintiendo si dijera que no estoy
llegando a un punto de ebullición con él. Él y yo siempre
insistimos un poco el uno en el otro, pero esta cosa fría / caliente
que hemos estado haciendo no es como nosotros .
Nunca ha sido el Sr. Hablador, pero tampoco suele alejarse en

medio de una conversación, y lo ha hecho algunas veces
últimamente. Y aunque siempre es protector, no suele asaltar
mis citas.
Debo ir a casa. No está de humor para hablar. Claramente.

Empujarlo no funcionará, y todavía. . .
Empujo la puerta de su casa, y en lugar de (sabiamente) salir

por la puerta trasera de mi propia casa, voy de habitación en
habitación buscándolo.
No está abajo. Al escuchar un golpe en el piso de arriba, me

dirijo hacia allí. Rigby me saluda desde lo alto de las escaleras,
y dejo mi bolso, tomándome el tiempo para saludar al perro en
el rellano y darle un buen masaje en la barriga antes de
enfrentarme a mi mejor amigo.
Mark está en su baño, cepillándose los dientes. Ya se ha

cambiado para la cama, vestido con una camiseta blanca
ajustada y pantalones de franela azul colgando a la altura de
las caderas.
Cuando miro hacia arriba, se encuentra con mis ojos en el

espejo, aparentemente resignado a mi presencia.
Escupe y se enjuaga, y después de volver a colocar el cepillo de

dientes en el soporte, se vuelve hacia mí. "¿Qué?"
"Sabes que."
No dice nada.
Me cruzo de brazos. “Estás siendo un idiota. Te apagas cada vez

que trato de hablar contigo, estás golpeando a la gente y ni
siquiera me dices por qué, y luego, entre todo eso, eres amable y
yo no. . . Yo no . . ."
"¿Qué? ¿No sabes qué?” Sus ojos son tormentosos e ilegibles.
Dejo escapar un suspiro. “Es Navidad, Mark. No es el momento

de estar enojado ".
Deja escapar una pequeña risa y se pasa la mano por la nuca.

"No estoy enojado."
"Lo estas, un poco", le digo con una sonrisa. “¿Es Erika? Estás tú .
. . pensando en reavivar las cosas con ella de nuevo? Es que la
razón por la que un puñetazo Doug ahora, después de todo este
tiempo?”
Rigby irrumpe en el baño con un hueso en la boca, y Mark

mira al perro, inclinándose para darle una palmadita cuando
Rigby presiona contra sus espinillas.
"He tenido cosas con el restaurante en mi mente", dice

finalmente, sin mirarme. “He querido durante meses retroceder,
ser menos práctico y dejar que mi personal crezca. Es más difícil
de lo que esperaba ".
Me ablandé un poco, aliviada de haberle sacado algo. Quizás

también aliviado de no haber mencionado el nombre de Erika.
Aunque tampoco respondió a mi pregunta sobre si estaban
reavivando cosas. Y Erika trabaja en el restaurante, lo que
podría significar. . .
"Lo siento", le digo, apoyándome en el marco de la puerta. “Sé

que es tu bebé. Dejar ir es difícil, incluso si es lo mejor para todos
".
"Si."
Rigby rueda sobre su espalda, y es el turno de Mark de frotar

su barriga, el trozo de cola del perro se vuelve loco ante la
atención.
"¿Quieres dejar de pensar en eso?" Pregunto.
Su cabeza se levanta de golpe. "¿Qué significa eso?"
Parpadeo sorprendida por su intensidad. “Solo quiero decir que

me voy a la ciudad mañana. Haciendo algunas compras de
última hora. Todavía tengo que conseguir regalos de Navidad
para mis padres. Y para tí. Me vendría bien la compañía ".
Espero que diga que no. Mark odia Manhattan. Odia ir de

compras aún más. En cambio, se pone de pie y considera. “Hay
un nuevo restaurante en East Village que quería visitar. Será
difícil conseguir reservaciones en el último minuto, pero conozco
al tipo, podría apretujarnos, aunque solo sea en el bar ".
"Bueno, esto funciona perfectamente", digo, dando una pequeña

palmada emocionada. "De hecho, tengo planes para la cena, y
tendrás más suerte acomodándote en el bar si eres solo tú, y ..."
"Espera. Quieres que te acompañe a Nueva York. Justo antes de
Navidad. Donde es el centro turístico. ¿Todo mientras has hecho
otros planes para la cena?”
¡Ups ! Cuando lo pone de esa manera. . .
“Es solo. . . " Trago saliva, nerviosa por explicar, pero sin saber
realmente por qué estoy nerviosa. Aparte de su mirada, eso es.
“Es solo que Stephen está en la ciudad. ¿Conoces a ese tipo de
finanzas con el que salí hace unos meses? Está libre para cenar
y ...”
"¿Sigues con la puta lista?" Mark chasquea. "Después de esta

noche, ¿todavía te aferras a la ilusión de que alguna loca en
una estación de tren conoce tu futuro mejor que tú?"
Lanzo mis manos. “Y así, el idiota de Mark está de vuelta.

Mira, sé que piensas que es estúpido. Crees que todas esas cosas
son estúpidas. ¿Pero no entiendes que al menos tengo que
intentarlo? Si no lo hago, siempre me lo preguntaré. Entonces, si
no quieres que te hable sobre mi lista de ex, puedes decirlo ... "
"No quiero que me hables de tu lista de ex", interrumpe. "No sé

cómo pude haber dejado eso más claro en los últimos días".
Sus palabras fuertes y enojadas parecen resonar en el pequeño

baño, e incluso Rigby se queda quieto, mirando sorprendido por
el tono duro de su persona favorita.
Yo también estoy sorprendida. No tanto que se le haya

acabado la paciencia con todo el asunto de la adivina que-ya-
conocí-a-mi-verdadero-amor, sino porque Mark nunca me ha
gritado. Ni una sola vez. Quiero decir, ya te habrás dado
cuenta de que no es del tipo cariñoso, pero en realidad es un
tipo bastante tranquilo y equilibrado. Incluso cuando está
enojado, lo cual es raro, siempre es una especie de enojo
silencioso, más enojado que enojado, en realidad.
Pero ahora está loco. Lo puedo ver en la tensión de su cuerpo, la

mirada ardiente en sus ojos, el tic en su mandíbula.
Estoy . . . confundida. Y un poco picada.

“Esto hace que dos tipos en una noche hayan dejado muy claro
que no vale la pena escuchar lo que tengo que decir, que no
vale la pena escuchar mis pensamientos y sentimientos.”
Demasiado tarde, me doy cuenta de que he dicho las palabras

en voz alta y los ojos de Mark se entrecierran peligrosamente.
“¿Me estás comparando en serio con Doug Porter en este

momento? ¿Que porque no quiero verte arrojarte a los pies de
hombres que te lastimaron o se equivocaron contigo, estoy en la
misma categoría que un tipo que no tiene ni una pizca de
decencia?”
"Tienes razón", le digo, cerrando los ojos, de repente muy, muy

cansado. "Está bien. Lo siento."
Abro los ojos a tiempo para verlo asentir, aceptando mi

disculpa. Y no ofrece ninguno de los suyos.
"Me voy a casa", digo en voz baja, dando un paso atrás. Veré…
Casi digo que lo veré mañana, por costumbre, pero me corrijo.
"Te veré más tarde."
Mark no dice nada mientras salgo del baño y camino por el

pasillo.
Rigby me sigue por las escaleras y cruza el patio hasta mi

propia casa, y la lealtad del perrito es lo único que me impide
llorar. Ni siquiera sé por qué. Es solo una pelea. Suceden entre
amigos todo el tiempo, probablemente lo olvidaremos mañana,
es solo. . .
Me vuelvo hacia la casa de Mark y miro hacia el segundo piso,

aunque sé que la ventana de su dormitorio está en la dirección
opuesta.
Como era de esperar, no hay nada más que oscuridad, y no

puedo detener la sensación de que las cosas están cambiando de
alguna manera entre nosotros. Y no sé por qué, y no sé cómo
detenerlo.
19 de diciembre, martes por la mañana

Hice el último movimiento de novato de la Costa Este: hice
planes en invierno sin verificar primero el pronóstico.
Idiota, pienso con un gemido mientras me alejo de la ventana

borrosa. Yo se mejor. He vivido en Nueva York toda mi vida, y
mi paso por la universidad en Boston tuvo aún más clima
invernal con el que lidiar.
Habla de lo distraída que he estado que hice planes para ir a la

ciudad de Nueva York, una caminata de dos horas, sin
verificar primero el clima.
¿Recuerdas ese viento amargo que mencioné anoche? Resulta

que esa brisa helada fue la precursora de un infierno de
nor'east.
Enciendo las noticias, pensando que tal vez fue una tormenta
extraña que no vieron venir. Apago el televisor de nuevo una
vez que el meteorólogo de pelo plástico anuncia que "la
magnitud de la tormenta está a la par con lo que hemos estado
prediciendo durante días".
Con dieciocho a veinticuatro pulgadas pronosticadas para el día
siguiente aquí en Haven, y casi eso en la ciudad, hay
exactamente cero posibilidades de que llegue a Manhattan hoy.
Saco mi teléfono, sabiendo que debería enviarle un mensaje de

texto a Stephen. De todos mis ex, Stephen Hill fue uno de los
buenos. Así que estoy confundida y más que un poco frustrada.
Quiero decir, esta señora me dice que me reuniré con mi único
amor verdadero antes de Navidad. Solo tengo unos días más
para hacerlo. Y con Stephen partiendo mañana, no volverá a
Nueva York hasta después de Navidad. . .
Significa que no es él. Stephen no es el indicado. Eso es lo que

pasa con confiar en las cosas que están fuera de ti mismo: si vas
a confiar, tienes que confiar completamente . Tienes que confiar
en que cosas como las tormentas de nieve suceden por una
razón y que tu verdadero destino está en otra parte.
Pero hombre, deseo que las estrellas y los destinos y lo que sea,
puedan ser un poco más obvios a veces. Desearía que la gente
con Sight no solo te dijera pequeños detalles.
Ojalá no estuviera asustada por el hecho de que mi lista de ex

se está reduciendo y al mismo tiempo se siente. . . ¿como alivio?
Nada de esto ha salido como pensé. Al principio parecía una

gran aventura, una aventura fácil , honestamente, ya que no es
como si estuviera tratando de encontrar el amor de mi vida
entre extraños al azar. Estos son tipos que conozco . Chicos que
he amado, al menos algunos de ellos. Pensé que me encontraría
cara a cara con un chico conocido y me di cuenta de que no
podía recordar por qué había roto con él, que lo querría de
vuelta, y él me querría de vuelta, y tendríamos el felices para
siempre y todo eso.
En cambio, lo más cerca que estuve de pensar tal vez fue Jack,
pero nuestra química física aparentemente tenía una fecha de
vencimiento importante.
Tengo dos ex y seis días para irme.
La sospecha que ha estado al acecho desde el comienzo de esto

se siente cada vez más cierta: que mi lista de ex es más o menos
la debida diligencia, para asegurarme de no tentar al destino al
no explorar todas mis opciones. Quiero decir, ¿realmente pensé
que me reuniría con un chico en el que apenas pensaba desde
la secundaria? No tanto. ¿Y Doug? Creo que tal vez supe que
era un idiota desde el principio.
¿El resto? Meh. Y eso incluye a Adam, uno de los dos chicos
restantes.
Es el último que me está sudando las manos.
Colin.
Lo he mencionado antes, pero solo brevemente y, está bien, un

poco vagamente. ¿La verdad? Evito hablar de él. Evito pensar
en él. Gracias a todos los chicos, estaba bien. . . Pensé que lo era
para mí. Claro, estábamos en la universidad y quizás
demasiado jóvenes en el gran esquema de las cosas, pero me

sorprendió cuando él lo terminó con un suave pero brutal "Esto
simplemente no funciona para mí".
También me había lastimado, aplastado.
Colin es ese tipo, ¿sabes? ¿El que en el fondo te preocupa que

nunca hayas superado? El que te preguntas, ¿y si?
Y, sin embargo, es porque es el candidato más probable por lo

que no me he esforzado tanto por encontrarlo.
Si me equivoco con los otros chicos, no es gran cosa.
¿Si me equivoco con él? No quiero volver a pasar por ese tipo
de dolor.
Pero eso no es lo que me tiene atado en nudos. Lo que me

confunde muchísimo es que cuanto más me acerco a tener que
enfrentarme a Colin, más indiferente parezco. Y eso es aún más
aterrador. Porque si no es Adam a quien se refería la mujer, y
no es Colin, significa que Mark tenía razón: era un fraude.
Y significa que estaré completamente solo, todavía.
“Blue Christmas” siempre ha sido mi canción navideña menos

favorita. Y me aterroriza que sea lo que esté escuchando la
mañana de Navidad.
Saco mi teléfono y, decidida a ser valiente, le vuelvo a enviar

un mensaje de texto a Stephen, para al menos comprobar que
está realmente fuera de combate.
Es casi tentador ir directo al grano y preguntar si hay alguna

posibilidad de que todavía esté tan enamorado de mí que se
atreva a enfrentarse a una tormenta de nieve para verme.
En cambio, me conformo con un emoji de copo de nieve seguido

de una cara triste. Eso prácticamente lo resume todo.
Estoy preparando una taza de café que tanto necesito cuando

mi teléfono vibra con su respuesta.
“Ja, sí, me pregunté cuando dijiste que planeabas venir a la

ciudad con la tormenta que se avecinaba. Pero claro, siempre
fuiste del tipo optimista. Me gustó eso de ti .”
¿Ves, Mark? A algunas personas les gusta que soy optimista.
Stephen envía otro mensaje. “Raincheck para después de las

vacaciones? O debería decir . . . control de nieve?”
Yo sonrío. Él es lindo. Seguro, suena genial .
Dejo mi teléfono a un lado, pensando que es el final de todo,

pero suena una vez más. Esto puede resultar incómodo, pero
¿estás saliendo con alguien? Acabo de empezar a salir con esta
chica, y aunque creo que suena raro, ustedes se llevarían muy
bien. Si está preparado para una cita doble con visión de futuro,
avíseme .
Bien entonces. Supongo que eso definitivamente responde a la

pregunta de si él es el indicado.
Busco alrededor de la pila de papeles en mi mostrador hasta

llegar a la lista, arrastrando una línea gruesa a través de su
nombre. El de Doug también, obviamente.
Toco mis labios con el bolígrafo mientras miro los nombres

restantes.
A decir verdad, no me he esforzado tanto por ponerme en

contacto con Adam o Colin, pero el tiempo corre. Hasta este
momento, he tenido la suerte de tener el número de teléfono de
cada chico o ser amigo de él en Facebook, por lo que ponerme
en contacto ha sido tan simple como un mensaje de texto o un
mensaje de Facebook.
Es hora de mejorar mi juego.
Adam solía trabajar como barman en un par de bares. Google

me dice que uno cerró hace un año. El otro no abre hasta las
once, pero anoto el número de teléfono.
También le envié un mensaje de texto a una especie de amigo

que solía salir con uno de los amigos de Adam. Es una
posibilidad remota, pero en este punto haré cualquier cosa para

apoderarse de él.
Y para posponer la búsqueda de Colin.
Lo que hace que haya dos tipos en los que estoy tratando de no
pensar: Colin Austin, que deja el corazón roto de antaño, y
Mark Blakely, el mejor amigo que no actúa como tal.
Sí, sí, estoy siendo una especie de bebé, pero una buena noche
de sueño solo ha servido para enfadarme más por él.
No digo que tenga que creer que mi futuro está escrito en las
estrellas, pero como amigo mío, ¿no debería al menos respetar
que yo lo crea?
Quiero decir, realmente no me gusta el azafrán, pero sigo

escuchando con paciencia mientras explica su versatilidad. No
me importan los diferentes tipos de sal, pero sigo comprando
sales marinas extravagantes de Manhattan para él, ¿no es así?
Es lo que hacen los amigos: apoyarse unos a otros, incluso si uno

debe poner los ojos en blanco con suavidad (¡gentilmente!) Al
hacerlo. Diablos, tal vez es su actitud de mierda lo que me hace
cínico acerca de cómo saldrá todo esto. Y créanme, nadie ha
usado el término "cínico" para describirme.
La cafetera emite un pitido y me sirvo una taza, agregando un
generoso chorrito de mi crema de moca de menta sin azúcar, y
luego camino hacia la puerta trasera, donde Rigby hace una
impaciente necesidad de atender a los negocios.
"Está bien", le digo, empujando la puerta para abrirla. "Pero

recuerda que odias la nieve".
Efectivamente, el perro salta afuera, solo para detenerse

instantáneamente y mirar a su alrededor como si el universo
mismo lo hubiera traicionado.
Me lanza una mirada triste por encima del hombro antes de

caminar penosamente por la nieve, que ya le llega hasta los
hombros, para hacer su trabajo debajo de un árbol, donde hay
al menos protección parcial de la tormenta.
Una ráfaga de viento sopla nieve directamente en mi cara, y

después de un chillido de sorpresa, dejo escapar una risa
encantada, cuando finalmente me doy cuenta de lo que
estamos tratando aquí.
¿Nieve solo unos días antes de Navidad? ¡De esto es de lo que

están hechos los sueños de vacaciones!
Incluso mejor si se aclara para el veintitrés, a tiempo para el

desfile navideño de Haven.
¿Te lo dije? Pedí un disfraz de elfo en línea, después de verificar

con mi antiguo profesor de inglés, que ahora es el maestro del
desfile, que de hecho les encantaría tenerme en la carroza
repartiendo dulces.
Y ahora estás como, Eso es genial, Kelly, pero ¿cómo encaja eso
con tu plan para conquistar a tus ex?
Bueno, déjame decirte. En mi fantasía, Colin llega a la ciudad

ese mismo día porque ha estado pensando en mí. Ya se ha dado
cuenta de que todavía está enamorado de mí, pero verme
adorable con un atrevido disfraz de elfo cierra el trato. No
puede evitar proponerle matrimonio frente a todo el pueblo. La
adivina tenía razón y Mark estaba tan equivocado.
¿Ven? Es una hermosa fantasía.
Entrecierro los ojos para ver si Rigby regresa por mi camino,

pero como esperaba, el perro hace su caminata lunar después de
hacer caca y luego sale corriendo hacia la puerta trasera de
Mark.
Me digo a mí mismo que me quedo en mi propia puerta solo

para poder verificar que Rigby no se quede afuera en la
tormenta de nieve, no porque quiera saber si Mark está
despierto.
El esta despierto.
A través del borrón blanco, veo que su puerta trasera se abre

solo un poco, pero se cierra con la misma rapidez.
Bien entonces.
Negándome a dejar que mi irritable mejor amigo arruine el día

de hoy como lo hizo ayer, voy a mi iPhone y me desplazo por
mis listas de reproducción hasta que encuentro mi lista de
reproducción Winter Wonderland, que es prácticamente todas
las variaciones que puedas imaginar de "Let It Snow", "Winter
Wonderland ”y“ Cariño, hace frío afuera ”. Tarareo junto con los
tres mientras me preparo un elaborado desayuno. . . copos de
maíz.
Mientras sirvo la leche, dejo un vistazo rápido y melancólico

por la ventana hacia la casa de Mark. Apuesto a que está
comiendo panqueques. Y tocino. Apuesto a que pondría chispas
de chocolate en los panqueques si se lo pido.
Yo aparto la mirada.
Llevo mi cereal y café a la sala de estar, me dejo caer en el sofá

y enciendo la televisión en Hallmark Channel, encantada
cuando es una de sus películas navideñas que aún no he visto.
Es particularmente lindo, sobre una ex patinadora olímpica que

regresa a su pequeña ciudad natal del Medio Oeste y consigue
un trabajo ayudando a coreografiar el espectáculo "Holiday on
Ice" de la ciudad. Se enamora del padre de uno de los niños, que
acaba de enviudar, un chico que es lindo de una manera
desgreñada y de hombros pequeños. Realmente no es mi tipo, y
nunca me he metido realmente en el patinaje artístico (se
requiere muchísima coordinación), pero de todos modos tengo
todas las sensaciones de la película.
Otra película comienza inmediatamente después de que

termina la última, y tengo la intención de complacerme cuando
reciba un mensaje de texto de mi madre.
“Escuché sobre tormenta. A continuación, se producirá una

congelación profunda, así que no te olvides de palear las
puertas y la entrada de tu garaje, o te nevarán durante días .”
Arrugo mi nariz, porque. . . uf, tiene toda la razón.

Lo que pasa con las grandes tormentas como esta es que son
súper bonitas al principio, pero si no te mantienes en la parte
superior de la pala, te arrepentirás cuando dos pies de nieve se
conviertan en un sólido bloque de hielo que te impida abriendo
su puerta o sacando su auto.
Me acerco a la ventana. No está tan mal todavía.
“¡En eso, gracias!” Le envío un mensaje de texto a mi mamá.

Luego me sirvo más café, tomo una pila de Chips Ahoy de la
despensa y veo otra película navideña cursi y agradable. Miro
los noventa y cuatro gloriosos minutos sobre un CEO al estilo de
Scrooge y la valiente camarera con la que se ve envuelto en la
nieve en el camino a un elegante viaje de esquí.
Alerta de spoiler: viven felices para siempre.
Cuando se acaba, una mirada al exterior me dice que se acabó

el tiempo. Si no me abrigo y me pongo a trabajar con mi pala
lo antes posible, me arrepentiré.
Subo a la habitación de invitados, donde guardo ropa que se

usa con menos frecuencia, como trajes de baño, ropa para la
nieve y vestidos elegantes que requieren Spanx para abrocharse
la cremallera.
En lo que respecta a la mierda de la nieve, la mía es bastante
linda. Lo conseguí en liquidación a finales del año pasado. Los
pantalones son blancos, con rayas verde azulado en el costado,
y el verde azulado de la chaqueta a juego, con detalles de piel
blanca. ¿Ven? Linda.
Por supuesto, mis guantes rojos y mi gorro verde no

funcionarán, pero eh. . . nadie me va a ver de todos modos.
Entro en el garaje cantando "Tengo mi amor para mantenerme

caliente" y hurgo entre mis cosas que no coinciden hasta que se
me ocurre la pala de nieve.
Afuera está. . . bueno, no tan mal como pensaba. Quiero decir

que hace frío, duh. Pero no como el resfriado de ayer. Y aunque
la nieve es implacable en su esfuerzo por cubrir todas las
superficies posibles, el viento parece haberse calmado un poco, lo
que hace que el proceso de palear sea un poco más fácil de lo

que podría ser.
Primero debería hacer el garaje, pero es lo más difícil y decido

que necesito un calentamiento. Esta es la primera gran nevada
del año, y ha pasado un tiempo desde que removí.
A decir verdad, Mark se encarga de ello la mayoría de las

veces, y. . .
No. No iré allí.
De hecho, empiezo a propósito con la puerta de entrada, la que

da a mis otros vecinos en lugar de a él. El pequeño desaire se
siente bien, incluso si él no lo sabe. O le preocupa.
Cuando el porche está despejado, camino hacia la parte trasera

de la casa, deleitándome con lo difícil que es caminar ahora que
la nieve casi me llega a las rodillas.
Estoy tan ocupada riendo pateando nieve frente a mí que no

me doy cuenta de que hay alguien en mi porche trasero hasta
que casi estoy sobre él.
Mark se vuelve hacia mí. Y sé que es él, incluso con un

sombrero muy bajo sobre la frente, una bufanda que oculta
todo menos la parte superior de la nariz y los ojos.
Nuestros ojos se bloquean, y lentamente se endereza de donde

ha estado palear mi porche. Apoya la base de la pala en el
porche, apoya el brazo en el mango y, con el otro, estira la
mano para tirar hacia abajo el pañuelo azul marino que le
compré por Navidad hace unos años.
"Hola."
¿Hola? ¿Eso es lo que obtengo? Ni siquiera una sonrisa para

acompañarlo.
Mi respuesta es la reacción más lógica y madura que se me

ocurre en ese momento. Dejo caer mi pala, me agacho, preparo
una bola de nieve ordenada. . . y se la arrojo a la cara de mi
mejor amigo.
Extraño su cara. Menos mal, ya que eso es un poco duro. Sin

embargo, golpea contra el centro de su pecho, y me encanta el
drama del momento. Me encanta aún más su parpadeo de
sorpresa, y sé que está pensando, ¿Qué demonios ...?
Mi segunda bola de nieve le pega en la cara.
Supongo que estoy un poco enojada por la forma en que han

ido las cosas últimamente.
Sin otra palabra, deja caer su propia pala, pero yo le di la

espalda y comencé a correr antes de que golpee la nieve.
Y al correr me refiero a que, de manera risible, trato de

alejarme de Mark, cuyo brazo lanzador de la escuela
secundaria me aplastará fácilmente en cualquier pelea de bolas
de nieve.
Su primera bola de nieve me golpea de lleno entre los

omóplatos. No es duro, pero sí lo suficiente. Supongo que él
también está loco.
El segundo es un globo que él mide perfectamente para

estrellarse suavemente en la parte superior de mi cabeza, y dejo
escapar una maldición riendo mientras me quito la nieve de la
cara.
Empiezo a dar la vuelta para pedir una tregua antes de que

me golpeen a fondo, pero de repente un cuerpo choca con el
mío, enviándonos a ambos al suelo.
La caída está mayormente cubierta por la gruesa capa de

nieve, pero mi respiración sale silbando de todos modos, tanto
del suelo debajo de mí como del gran cuerpo encima del mío.
Dejo escapar una pequeña carcajada y empujo a Mark. “Tregua,

gran matón. Iba a admitir la derrota, no tenías que
enfrentarme ".
Simplemente sonríe.
Intenta ser tranquilo al respecto, pero a Mark siempre le ha

gustado la nieve también. La marca tensa y frustrada de
anoche no se ve por ningún lado, y mi corazón se siente un
poco más ligero ante la felicidad juvenil en el rostro de mi mejor
amigo.
"¿Perdón por la entrada, o perdón por ser un idiota anoche?"
Antes de que pueda responder, la rama de un árbol sobre

nuestra cabeza deja caer una enorme pila de nieve
directamente en mi cara.
Dejo escapar un grito de sorpresa que se mezcla con la risa de

Mark.
Con los ojos cerrados, trato de usar mis manos para limpiar la
nieve fría, pero la mayor parte de mis guantes (así como el
hecho de que están cubiertos de nieve) hace que el proceso sea
engorroso.
"Aquí", dice, su rostro tan cerca que puedo sentir su aliento en

mis rasgos congelados.
Un momento después, siento dedos cálidos en mi mejilla, y abro

los ojos para ver que se quita uno de sus guantes y está usando
su mano desnuda para quitarme la nieve de la cara.
Sus dedos se deslizan suavemente sobre mi pómulo derecho,
luego mi izquierdo, deteniéndose solo un poco.
Quiero sonreir O dar las gracias. O recuperar la alegría de hace

unos segundos, que se está convirtiendo rápidamente en algo. . .
No es juguetón.
Su expresión es toda negocios mientras cepilla los cristales de

hielo de mi cara, pero cuando su palma recorre mi cara inferior,
juro que parece acunar mi mandíbula, solo por un segundo. La
forma en que pasa la punta de sus dedos por mis cejas es igual
de gentil.
No me mira a los ojos. Ni una sola vez. No hasta que baja la

mano, sus dedos rozan mis labios en el mismo momento en que
su mirada se eleva hacia la mía.
Se siente como una descarga eléctrica.
El toque de sus dedos en mis labios, el calor de su mirada, el

peso de su cuerpo inmovilizando el mío contra el suelo. . .
De alguna manera, todos esos combinados están creando el

momento más intenso e inesperadamente carnal de mi vida.
Mis ojos revolotean en confusión. No, eso no puede ser correcto.

"Carnal" no es una palabra que asocio con Mark. O al menos no
lo he hecho antes.
Mis ojos se posan en su boca. Tiene un labio inferior tan lleno.

¿Cómo nunca me había dado cuenta de eso antes?
El mío no está tan lleno. Lo que ahora sabe, porque está

tocando ...
No, no más.
Mark mueve lentamente su mano lejos de mi cara y me

muerdo el labio con fuerza para dejar de pedirle que siga
tocándome.
Se coloca en una posición sentada, llevándome a su lado.

Ninguno de los dos dice nada durante un largo e incómodo
momento. Entonces finalmente me mira.
"Lo siento."
Lo estudio, tratando de leerlo, pero vuelve a retirarse. Este no es

el Mark alegremente juvenil ni el Mark seductor con la mirada
acalorada que juro que vislumbré.
"¿Por?" Maldita sea, mi voz es entrecortada.
"Por la pelea de anoche", dice, sus ojos sosteniendo los míos. "Y
por . . . " Señala la nieve detrás de nosotros, donde nuestros
cuerpos dejaron hendiduras.
"Perdonado."
Me estudia de la misma manera que yo lo estoy estudiando a

él, incluso mientras se vuelve a poner el guante. "¿Por ambos?"
Me encojo de hombros y pongo una bola de nieve entre mis

manos. "Quiero decir . . . es una especie de mierda. Sobre anoche,
quiero decir. Este asunto de los ex, es importante para mí
llevarlo a cabo, y supongo que siempre pensé que lo que era
importante para mí también lo era para ti. Pensé que era una
especie de regla del mejor amigo ".
Exhala y mira al frente a la nieve que cae constantemente.

"Estás bien."
Ahueco mi oreja y me inclino. "¿Hmm?"
Empuja una mano enguantada húmeda contra mi cara. "Déjalo.

Sabes que tienes razón. No voy a fingir que estoy de acuerdo
con creer en esta mierda del único amor verdadero antes de
Navidad, pero. . . si necesitas a alguien con quien hablar sobre
estas tonterías, no quiero que vayas con nadie más ".
Aprieto mis labios. "Eso es realmente un poco dulce".

"Tengo mis momentos."
"Tú lo haces. Este ”—señaló a los dos sentados en la nieve—“ no

era uno de ellos ”.
"Te encantaban las peleas de bolas de nieve".
"Todavía lo hago, pero no cuando solo hay dos personas y no

tengo ninguna posibilidad de ganar".
Mark se pasa una mano enguantada por la nariz enrojecida.

"No sé. Me parece que me gusta estar solos los dos ".
Se me corta el aliento, incluso cuando me digo a mí misma que

debo controlarme. No lo dice así. Solo quiere decir aquí mismo,
en este momento. . .
Demonios, no tengo idea de lo que quiere decir Mark.
Y eso es extraño. Podemos ser diferentes, pero nos entendemos.

Siempre he podido leerlo a él, y él a mí. Pero no estoy del todo
seguro de que nos hayamos leído correctamente durante los
últimos días.
"¿Dónde está tu perro asustado?" Pido que nos lleven a un

territorio más seguro mientras examino el patio.
" Tu perro tonto está acurrucado junto a la chimenea, sin querer

tener nada que ver con la nieve".
"¿Sabías?" Pregunté, inclinando mi cabeza hacia arriba y

dejando que los copos de nieve cayeran suavemente sobre mi
rostro. "¿Sobre la tormenta?"
“Escuché a gente hablar de eso en el restaurante, pero no sabía

que iba a ser tan malo. Pensé que solo ellos esperaban tener un
día libre en el trabajo ".
"¿El restaurante está cerrado?"
El se encoge de hombros. "Si. No tiene sentido hacer que los

empleados entren con dificultad cuando la mayor parte de la
ciudad no se molesta en salir ".
"Lo siento. Supongo que su plato de pasta Christmas by the
Bayou tendrá que esperar para hacer su debut ".
"Supongo que sí", dice poniéndose de pie. "¿Tú que tal? ¿La
nieve cancela tus planes de ir a la ciudad?
"Minuciosamente."
Mark extiende una mano enguantada y yo la tomo con las dos

mías, dejándolo que me ayude a ponerme de pie. La mayor
parte de nuestra ropa de nieve nos hace sentir incómodos, y me
golpeo contra él, mis manos enguantadas todavía ahuecan las
suyas.
Miro hacia arriba y él mira hacia abajo. “¿Qué hay de tu lista?

¿El tipo que vive en el elegante ático?”
Me encojo de hombros y sonrío. "Supongo que mi reunión con

Stephen no estaba destinada a ser".
Mark asiente, pero ninguno de los dos se aleja, y una vez más
tengo esa extraña y prohibida sensación de que quiero seguir
tocándolo. Y no con estos malditos guantes, sino piel con piel,
carne con carne.
Doy un paso atrás y luego inclino la cabeza. "¿Cómo sabías que

Stephen vivía en un ático?"
"Me dijiste."
Arrugo la frente. “No recientemente no lo he hecho. Tal vez

cuando él y yo estábamos saliendo, pero han pasado años ".
Mark se vuelve. —No lo sé, Kell. Supongo que ese detalle se me

quedó grabado. No lo hagas raro ".
Lo dejo libre mientras lo sigo de regreso al porche trasero, pero

ahora mi mente está corriendo. Ahora que lo pienso, Mark
siempre parece recordar mucho sobre mi vida de relaciones.
Cuánto tiempo estuve saliendo con cada chico y cuándo. Cómo
y por qué rompimos. Y, aparentemente, dónde vivían.
Hace una pausa, pateando la nieve hasta que llega con mi
pala, que ya ha sido enterrada nuevamente por la nieve fresca.
"Terminaremos tu garaje más rápido juntos".
"¿Qué tal el tuyo?"
"Hecho. Lo haré de nuevo más tarde esta noche ". Recupera su

propia pala del porche y se dirige hacia la puerta de mi garaje.
"No tienes que ayudarme", le digo, siguiéndolo a través de la

nieve que ahora llega hasta las rodillas.
"Notado", dice.
Luego comienza a palear sin decir una palabra más. Yo hago

lo mismo, empezando por el lado opuesto, hasta que media hora
y mucho dolor de brazo después, nos encontramos en el medio.
Y por el medio, quiero decir que lo hizo alrededor de las tres

cuartas partes, pero que quede claro que es mucho más grande.
"Gracias", le digo, un poco sin aliento, mientras examinamos

nuestra (su) obra.
"En cualquier momento."
—Entra —digo, señalando con la cabeza hacia la puerta trasera.

"Nos haré un almuerzo tardío para agradecerte".
"Mejor idea", contraataca. "Ven a mi casa y yo prepararé un

almuerzo tardío".
"Pero-"
“Kelly, he comido tu comida. El mejor agradecimiento que

puedes darme es no someterme a eso ".
Me río. "Lo suficientemente justo. ¿Tienes materiales para un

hot toddy? "
“Estoy bastante seguro de que puedo hurgar en algo”, dice,
levantando la pala hasta el hombro y volviéndose hacia su
casa. "Una bebida alcohólica es probablemente la única forma
de superar la horrible película navideña que me vas a hacer
ver".
Una tarde nevada. Con bebidas para adultos. Y películas

navideñas. Y mi perro.
Y Mark.
Lo sigo, con los pies congelados, la cara entumecida y el corazón

tan lleno que ni siquiera sé qué hacer conmigo misma.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión seis
Jack Chance
Joey Russo
Chad Morrister
Doug Porter
Stephen Hill
Adam Bartley
Colin Austin
19 de diciembre, martes por la tarde

Doy un suspiro feliz mientras pasan los créditos, tarareando
junto con los Beach Boys cantando “God Only Knows”, que es el
final de una de mis películas navideñas favoritas de todos los
tiempos.
Si tienes una pizca de romance y espíritu navideño, sabes

exactamente de lo que estoy hablando.
Love Actually, baby. Esa oda al amor y la Navidad que veo

unas ocho veces cada diciembre.
Escondiéndome más profundamente debajo de la manta que

hizo la mamá de Mark, alcanzo el control remoto y bajo un
poquito el volumen. "¿Quién es tu pareja favorita?"
"¿Mmm?"
Alarmada por el sonido de sueño, giro la cabeza hacia mi mejor

amigo y le doy una patada suave cuando veo que tiene los ojos
cerrados. "Mark Blakely, dime que no te quedaste dormido
durante Love Actually ".
“No me quedé dormido durante Love Actually ”, repite
obedientemente.
Empiezo a patearlo de nuevo, pero me agarra el pie. “¡No lo

hice! Cerré los ojos durante dos segundos porque la película
terminó ".
Entrecierro los ojos. "Entonces, ¿quién es tu pareja favorita?"
"¿De los diez millones?"
"Es lo que hace que la película sea tan especial", insisto.

“Captura todo tipo de amor. Amor nuevo, amor entre hermanos,
amor perdido. . . "
Él levanta una mano. "¿No podemos hacer un club de lectura

aquí?"
"Me gusta más la historia del primer ministro", digo,

alcanzando mi taza de chocolate caliente. Está un poco tibio,
pero nunca dejaré que los malvaviscos se desperdicien.
"¿Porque eso?" pregunta, volviéndose para mirarme.
Son casi las diez, y aparte de hacer una pausa para cenar
(delicioso pollo asado y una especie de patatas
pecaminosamente cursi), y un par de descansos para quitar la
nieve, hemos estado viendo películas más o menos todo el día.
Ha sido el día de nieve perfecto. Bueno, casi perfecto. Preferiría

estar en mi casa, ya que tengo el árbol, y aquí solo está
decorado con un extraño cascanueces que le regaló su tía. Aún
así, su lugar tiene sus ventajas. Sus habilidades culinarias y su
refrigerador surtido, por ejemplo. Su pijama, por otro. Pedí
prestados un pantalón de pijama, una sudadera vieja y un par
de calcetines. Todos los cuales son aproximadamente tres veces
más grandes para mí, pero son muy acogedores.
"Me gusta la forma en que Hugh Grant persigue a su chica por

Londres".
"¿Quieres decir que abusa de su poder al acechar a un ex

empleado?"
Lo patearía de nuevo, pero él todavía sostiene mi pie,
presionando su pulgar contra la parte anterior de mi pie a
modo de advertencia.
“Vamos, pareja favorita. Finge por un segundo que eres

romántico —le engatuso.
Mark suspira. "Bien. Me gusta el chico de los letreros. El que

llama a la puerta de la chica caliente con los carteles ".
Arrugo mi nariz. "Es lindo, pero ni siquiera tiene un final feliz".
"Claro que sí".
“No,” digo enfáticamente. "Ella está casada con el otro chico".

Mark mueve las cejas. "Pero ella besó al tipo de la señal".
"Un beso de despedida", le explico pacientemente. "Para que

pudiera seguir adelante".
Mark me estudia por un segundo. "Eh."
Dejo mi taza en la mesa de café. "Entonces, ¿cuál de las historias

con final feliz es tu favorita?"
Está en silencio por un momento. "Todavía esa".
"Pero ella está con otra persona".
“Por ahora”, dice, soltando mi pie y sentándose derecho para

estirarme. Hace que su camiseta negra se suba un poco,
revelando una pequeña franja de abdominales tonificados, pero
actúo como una dama y no me como mucho con los ojos.
"Solo digo", continúa, "me gustaría ver qué sucede después del
final de la película".
"En realidad, creo que hay un ..."
"No." Él palmea mi rodilla. "Se han alcanzado oficialmente los

límites de mis conversaciones de películas navideñas".
Se pone de pie y recoge ambas tazas, mirando por la ventana.
“La nieve sigue cayendo. ¿Cuáles crees que son las posibilidades
de que puedas convencer a tu perro de que orine en la tormenta
de nieve antes de acostarse?”
Miro hacia donde Rigby está acurrucado en su cama para

perros en la esquina de la sala de estar. "Creo que si le pongo la
correa, probablemente pueda arrastrarlo por el césped de
camino a casa y sobornarlo con una golosina para que orine en
el camino".
“¿Vas a volver a salir con eso? Puedes quedarte aquí."
"No puedo", digo, sin una pequeña medida de pesar, porque la

idea de ponerme las botas y la mierda de nieve realmente no
me atrae. "Soy demasiado mayor para dormir en los sofás de las
personas, especialmente cuando mi propia cama está a treinta

segundos de camino en esa dirección", digo, señalando hacia mi
casa.
“Ok. Te acompañaré ”, dice, llevando las tazas a la cocina.
Pongo los ojos en blanco y lo sigo hasta la puerta trasera, agarro

mis botas y empiezo a meter los pies en ellas. "¿En serio? ¿Me
acompañarás los veinte pasos hasta la puerta trasera? ¿Qué
crees que va a pasar? ¿Me perderé y caminaré hacia un banco
de nieve?”
“¿Recuerdas el viaje de campamento del último año cuando te

perdiste yendo a los baños portátiles que estaban a quince
metros de distancia? Tuvieron que enviar un grupo de
búsqueda ".
Excelente punto.
Me encojo de hombros en mi chaqueta y tiro de mi cabello en

un moño desordenado. “Que bueno que me lo recuerdes, mejor
amigo. ¿Puedo usar estos pijamas en casa? Los lavaré y los
devolveré ".
" Ahora pregunta, después de haberse puesto los zapatos y el

abrigo".
"Gracias", le digo con una gran sonrisa.
Busco la manija de la puerta, pero él está allí, estirando la

mano y cerrando la puerta. "Espera."
Pongo los ojos en blanco y espero a que se ponga las botas. Se

enrolla una bufanda alrededor de su cuello y se pone el abrigo.
La cremallera queda atrapada en la suave tela de la bufanda,
y puedo ver que está a punto de volverse balístico y tira de la
cosa, arruinando la cremallera o la bufanda o ambos, así que
aparto sus manos del camino.
"Quédate quieto".
Es su turno de poner los ojos en blanco, pero hace lo que le pido

y yo muevo suavemente la cremallera de un lado a otro,
tirando ligeramente de la bufanda, hasta que queda libre con

solo un poco de rugosidad en la tela.
—“Ahí” —digo con satisfacción, metiendo la bufanda en su

chaqueta y tirando de la lengüeta hasta su barbilla.
Me preparo para una especie de respuesta burlona de "Gracias,

mamá", pero no llega ninguna.
Miro hacia arriba y tardíamente me doy cuenta de lo cerca

que estoy. Lo suficientemente cerca para oler su colonia, ¿o es
simplemente su jabón? Lo suficientemente cerca para ver el
cosquilleo oscuro de su barba, lo suficientemente cerca como
para ver su pecho expandirse con cada respiración. Lo
suficientemente cerca para recordar cómo se sentía encima de
mí en la nieve. . .
Respiro profundamente y doy un paso atrás, pegando una

sonrisa en mi rostro. "¿Debemos?"
Abre la puerta, poniendo su peso en ella para empujar más allá

del montón de nieve acumulada, antes de hacer un gesto de
barrido hacia afuera, incluso cuando toda la nieve sopla hacia
adentro.
Entrecierro los ojos y entro en la tormenta mientras Mark llama

al perro, una, dos, cinco veces, hasta que un Rigby reacio se une
a nosotros.
El perro aparentemente sabe lo que pasa, porque

inmediatamente se encarga de los asuntos y luego va saltando
por el césped hasta mi casa.
"Supongo que esta noche me está acurrucando", digo

alegremente.
Mark murmura algo en voz baja que juro que suena como
"Perro afortunado", pero cuando miro, no puedo ver sus rasgos a
través del remolino de nieve y no me presta atención.
En realidad, no necesitaba una escolta, obviamente, pero

confieso que la compañía hace que la caminata sea un poco
menos miserable. Mi sombrero todavía estaba mojado, así que
no me había molestado en ponérmelo, y mi capucha no hace

mucho para mantener la nieve fuera de mi cara y cuello.
Para cuando llegamos a mi porche, estoy temblando y

realmente me alegro de habernos tomado el tiempo de palear,
porque ya se ha acumulado más nieve y nos lleva a los dos
abrir la puerta trasera.
En el segundo, la grieta es lo suficientemente grande, Rigby se

retuerce dentro, y un momento después Mark y yo nos
apretujamos también.
"¿Necesitas una toalla?" Pregunto, quitándome el abrigo.
“No, me mojaré de nuevo en el segundo en que regrese”, dice,

pasando sus manos por su cabello.
“Gracias por acompañarme. Puede que no me haya perdido,

pero podría haberme convertido en una paleta tratando de
abrir la puerta".
"Sí."
No hay nada más que decir y, sin embargo, ninguno de los dos
se mueve, y siento una pequeña punzada de pánico porque es
incómodo. Mark y yo no hacemos las cosas incómodas, y sin
embargo el aire sin duda se siente lleno de. . . alguna cosa.
“Bueno, debería. . . " Hago un gesto hacia las huellas nevadas de

Rigby, que tendré que limpiar.
Mark simplemente asiente, luego alcanza la puerta y camina

hacia el porche. "Nos vemos mañana."
"Si. Seguro —digo, con una mano en la puerta mientras me

acerco y levanto la mano en un extraño saludo de despedida.
¿Ven? Incómodo. ¿Qué nos está pasando, cuándo ...
Mark comienza a girarse, luego se vuelve hacia atrás, su

mirada se dirige hacia arriba. Yo también miro hacia arriba, se
me corta el aliento cuando veo lo que está mirando.
Ese maldito muérdago. Mencioné que lo pondría en casi todas

partes de la casa en preparación para mi prueba de muérdago
con Chad.
En ese momento me pareció una parte inteligente de mi plan.
¿En este momento? Apenas puedo recordar el plan. Soy

demasiado consciente de que mi mejor amigo es un chico .
Siempre lo he sabido a nivel cerebral, pero ahora mismo lo sé a
nivel corporal, y. . .
Mark da un paso adelante, una pequeña gota de agua

corriendo por su sien donde la nieve de su cabello se derrite. La
aparta con impaciencia mientras su cabeza se inclina casi
imperceptiblemente hacia la mía.
Mi corazón da un salto de pánico y me aferro

desesperadamente a una forma de mantenerlo ligero, de dejar
de presionar mi boca contra la suya. . .
Le doy una rápida sonrisa y le indico que retroceda. "Oh por

favor. Está ahí desde que Chad vino a almorzar. No tenemos
que hacerlo, ya ha ido más allá de sus deberes de mejor amigo.
Love Actually, ¿recuerdas? No hay necesidad de-"
Se acerca aún más, una leve sonrisa jugando en sus labios.

"¿Kell?"
"¿Qué?"
"Cállate."
Pone un nudillo en la parte inferior de mi barbilla, inclinando

mi cara hacia la suya.
Mi corazón todavía late con fuerza, aunque ahora no se trata

tanto de pánico como. . . querer.
No quiero nada más en este momento que sus labios en los

míos, sus manos en mi espalda acercándome. . .
Los labios de Mark rozan mi mejilla. Mi mejilla .

Se echa hacia atrás un poco, sus ojos clavados en los míos

durante un latido acalorado.
Y luego se aleja. “Buenas noches, Kell.” Su voz es ronca.
"Buenas noches."
Se gira y camina hacia la furiosa tormenta de nieve,

dejándome mirándolo, en su mayoría ajena a la nieve que está
cubriendo el piso de mi cocina, empapando mis pantalones de
pijama prestados.
Ignoro la tormenta de afuera porque soy demasiado consciente

de la tormenta de adentro. . . y la sorprendente comprensión de
que quiero repetir ese beso de muérdago.
Porque una parte de mí desearía que hubiera sido muy, muy

diferente.
20 de diciembre, miércoles por la noche

La noche del nordeste se despejó para la noche siguiente, y
aunque Haven todavía luce el aspecto del país de las
maravillas invernal, las quitanieves se han apagado, lo que
significa que la ciudad también está fuera.
Específicamente, todos y su mamá parecen estar en el

restaurante de Mark esta noche. Mark y yo incluidos, aunque
no en la misma capacidad.
Su ayudante de cocina vive a una hora fuera de la ciudad y no

pudo entrar debido a la nieve, así que Mark está trabajando en
la cocina esta noche.
Por mi parte, estoy feliz en el bar, charlando con el

aparentemente interminable flujo de amigos que siguen
llegando, incluso mientras trato de no mirar a Erika, que está
trabajando en el bar esta noche, luciendo radiante, feliz y
seguro.
¿Seguro porque ella y Mark volverán a estar juntos?
El pensamiento es casi suficiente para hacerme perder el apetito.

Casi, pero no del todo, porque de ninguna manera me estoy
perdiendo la comida de Mark.
Además, necesito ver qué pasa con ellos. Reconocimiento

anticuado, ¿sabes?
Terminé mi primera copa de vino charlando con Ivy y Jim,

saliendo para una noche rara sin niños, y estoy amamantando
la segunda copa que el director de la escuela secundaria y su
esposa insistieron en comprarme.
Cuando ambas parejas finalmente cierran, no estoy del todo

lista para ir a mi casa tranquila, pero de ninguna manera
puedo pensar en otra bebida hasta que haya comido algo.
Lo que significa . . . hablando con Erika. Nuestra conversación

hasta ahora se ha limitado a que ella dijera: "¿Pinot grigio?" y
yo diciendo: "¡Sí, por favor!" y ella diciendo "¿Lo mismo?" y yo

diciendo: "¡Suena genial!"
Ambas somos nauseabundamente alegres y amigables.
Mis opciones ahora son esperar una mesa y comer allí (poco
probable, ya que ha habido una espera toda la noche) o de
alguna manera averiguar cómo hablar con Erika sin darle una
idea de lo que pienso por engañar a Mark con Doug.
Parece leer mi mente, porque después de servir un par de vasos

de rojo para la linda pareja de ancianos en el otro extremo de la
barra, llama mi atención y se dirige hacia mí.
"Hola, Kelly, ¿otro?" Se apoya en la barra y me sonríe como si

fuéramos amigas.
Lo que supongo que somos, pero. . .
¿Siempre ha sido así de bonita? Tiene el aspecto tonificado de

una mujer a la que realmente le gusta hacer ejercicio, y una
coleta rubia larga y elástica que siempre está ligeramente
rizada pero nunca encrespada. Y ojos verdes. Ni avellana, ni
azul, ni verde. Bastante verde.
Es difícil no odiarla.
"Estoy pensando que será mejor que empiece con agua y
comida primero", digo forzando una sonrisa.
"Seguro. Puedo traerte un menú, pero puedo decirte ahora

mismo que el especial de Mark es lo mejor en el menú de esta
noche. Todos lo tuvimos en la cena del personal antes, y pensé
que había muerto e ido al cielo. Lo llama Navidad en Bayou
Pasta ... "
"¡Correcto!" Le interrumpo. “Me encanta ese plato. En realidad,

yo era su sujeto de prueba y lo he estado pensando desde
entonces ".
La sonrisa de Erika se enfría un poco, confirmando exactamente

lo que realmente no había querido saber: todavía ve a Mark
como su territorio de alguna manera.
Hace una semana me habría encogido de hombros y le habría

dejado descubrir su propia vida amorosa.
Pero hace una semana no sabía que ella lo había engañado.

Hace una semana no ...
No que ? No sé cómo terminar esa frase, ni siquiera en mi

propia cabeza.
O tal vez sí.
Hace una semana, no me sentía así por Mark .
"Entonces, ¿el especial, entonces?" Pregunta Erika.
"Por favor. Y, oh, qué diablos, otra copa de vino ".
"Claro", dice, su sonrisa de nuevo en su lugar mientras remata

mi copa de vino con un generoso chorro. Normalmente no lo
haría, pero como puedo tomar un viaje a casa con Mark,
también podría abrazar la temporada navideña, ¿verdad? Lo
beberé despacio, lo prometo.
Erika comienza a alejarse. Luego, golpea la barra con la palma

de la mano y camina en reversa, como si acabara de recordar
algo. "¡Oh! Kell, quería decírtelo. . . " Se inclina más cerca y baja
la voz. "Tengo algo para ti."
Erika saca algo del bolsillo trasero de sus jeans negros y lo

desliza hacia mí.
Cojo la tarjeta de visita, leo el nombre y luego miro confundida.

"Un investigador privado".
"Lo sé, suena cursi, pero es mi primo y en realidad es muy

bueno en su trabajo".
"Eres tú . . . " Intento juntar las piezas aquí. "¿Me estás tendiendo
una trampa?"
Ella pone los ojos en blanco de forma amable. “No, es para tu

lista de ex. Sé que tienes problemas para localizarlos a todos, y
pensé que CJ podría ayudarte ".
Mi estómago da un vuelco. "Como supiste-"
Erika simplemente sonríe.
Mark .
Mark le contó a su ex novia todo sobre mi plan.
Ahora realmente he perdido el apetito. La sensación de traición

es punzante, aunque ni siquiera estoy seguro de por qué. Nunca
le dije explícitamente que era un secreto, es solo. . .
Ayer en la nieve, y nuevamente en ese momento bajo el

muérdago, sentí un poco que tal vez había una posibilidad de
algo.
Ahora, cuando me enfrento a su hermosa ex que parece

quererlo de vuelta, y con el hecho de que se supone que debo
estar enamorada de una de mis ex. . .
La.Navidad.Más.Complicada.De.Todos.Los.Tiempos
Parpadeo rápidamente para evitar que se me humedezcan los
ojos. Una reacción exagerada, seguro, pero no puedo evitar la
sensación de que lo estoy perdiendo .
Y me da un susto de muerte.
"Sí, gracias", me las arreglo, sosteniendo la tarjeta y luego

dejándola en mi bolso. "¿Tomaré el especial?"
"Lo tienes", dice, aunque me da una mirada inquisitiva, como si

tratara de leerme.
Buena suerte. Ni siquiera puedo leer yo mismo.
Erika se aleja, gracias a Dios, porque ahora siento que mis ojos
se llenan de lágrimas, a pesar de mis mejores estrategias anti-
lágrimas.
“¡Hola, Kelly Byrne! ¿Alguien sentado aquí?”
Me vuelvo hacia mi nombre, agradecida por una distracción,

cualquier distracción. Y Hugh Corgy es perfecto para el papel.
Mi último año en la escuela, Hugh tuvo la distinción de ser el
único niño abiertamente gay en nuestra clase, y lo tenía con la
misma confianza feliz que tiene ahora.
Se deja caer en el taburete a mi lado y observa la escena.

"¿Dónde está tu mejor amigo?"
Probablemente follándose a su ex.
Obligo una sonrisa y me vuelvo hacia la cocina, aliviada de

que mis lágrimas hayan retrocedido. "Cocinando esta noche".
"Ah bueno . . . buenas noticias para mi barriga, si no para mis

ojos. Oye, Erika, ¿puedo conseguir un martini Grey Goose con un
toque? "
Ella levanta una mano en reconocimiento de la orden y

alcanza el vodka detrás de la barra, solo para darle un rápido
apretón y fruncir el ceño.
“Oye, Hugh, será solo un segundo, ¿Ok? Necesito correr

escaleras abajo por otra botella de Goose ".
Ella sale de debajo de la barra y uno de los meseros entra para

ocupar su lugar temporalmente.
"Está bien, cariño, no te he visto lo suficiente", dice Hugh,

sirviéndose un sorbo de mi vino. “Dime que vas al desfile.
Mamá está montando un puesto de ponche de huevo y prometí
reclutar clientes. Ella calcula que si hay suficiente demanda, el
alguacil hará la vista gorda para beber en las calles ".
"Estaré allí. Realmente . . . " Me inclino hacia adelante y hago

una pausa con un drama falso. "Seré una de las estrellas".
"¿Princesa de pan de jengibre otra vez?"

“No, le pasé mi corona a Kayla Teek. Soy . . . " Hago un redoble

de tambores con los dedos. "Un elfo."
Hugh levanta la mano para chocar los cinco. "Caliente."
"¡Correcto!" Golpeo su palma con la mía. Eso es lo que traté de

decirle a Mark. A los chicos les gustan las chicas con disfraces de
elfos, ¿no?
“No soy de los que saben mucho sobre las preferencias

heterosexuales, pero incluso yo sé que las mujeres en mallas son
algo bueno. No es tan bueno como los hombres en mallas, pero. .
. " Él se encoge de hombros y guiña un ojo. "Entonces, ¿a quién
estamos impresionando con nuestro gran trasero en medias
verdes?"
Abro la boca y luego la cierro. ¿A quién estoy impresionando?

Cuando originalmente había tramado mi plan, asumí que
todavía habría algunos ex en la carrera. Pensé que tal vez
habría encontrado a The One, y que lucir adorable resultaría
en un beso de noche de invierno frente a toda la ciudad. . .
Ahora, cuando imagino cómo bajará, la única cara que puedo

ver es. . .
"Oye, ahí está", dice Hugh, empujando mi rodilla con la suya y

señalando con la cabeza hacia el arco trasero que conduce a la
cocina.
Miro hacia arriba para ver a Mark entrar por la puerta.
En el mismo momento exacto, Erika sube corriendo las escaleras

desde el almacén de la izquierda, vodka en mano.
Ella choca contra su costado, y ambos se tambalean un poco

hacia atrás, aunque Mark extiende una mano para
estabilizarla.
Él dice algo que la hace reír y Mark le devuelve la sonrisa. Una

sonrisa real, del tipo que ilumina todo su rostro y no es tan
común.
Se me hace un nudo en el estómago. . .

Celos.
Sí, ahí está. Estoy celosa.
Sin embargo, no tan celoso como estoy a punto de estarlo.

¿Recuerdas cómo hace unos segundos estaba todo "Oh, Hugh es
tan genial"?
Eso fue antes de que se cubriera la boca con las manos y gritara
"¡Muérdago!" a Erika y Mark.
Dan una mirada de sorpresa en nuestra dirección. Los ojos de

Mark se fijan en los míos por una fracción de segundo antes de
mirar hacia arriba.
Erika también mira en mi dirección. Luego a Mark, luego en el

muérdago. Las mesas cercanas comienzan a corear “Beso. . .
Beso . . . " al igual que un puñado de personas en el bar.
Hugh me da un rápido codazo en las costillas como si

estuviéramos en esto juntos, y de alguna manera logro sonreír
tan duro que se siente como si mi cara se estuviera partiendo.
Mark no hace muérdago, me recuerdo. O al menos lo controla

con un débil beso en la mejilla, como supe anoche.
Le dará a Erika ese mismo beso indiferente, y luego ...
La mano libre de Erika se desliza alrededor del cuello de Mark

y ella acerca su boca a la de él.
Siento que algo terrible me atraviesa, todo mi cuerpo se calienta

y luego un hormigueo, nada agradable.
Alejala, alejala. . .
Por un momento, Mark no se mueve, y luego apoya su mano

suavemente en la espalda de Erika, dejando que el beso se
prolongue.
Quiero morir.
La multitud grita y se separan. Erika hace una reverencia en

broma y todos se ríen.
Todos menos yo. Y Mark, aunque no parece molesto en lo más

mínimo por el hecho de que acaba de besar a su ex novia en la
boca.
No puedo hacer esto Las dos copas de vino me han vuelto rara,
y necesito hacerlo. . .
Necesito salir de aquí.
"¿Sabes que?" Le digo a Hugh con una risa avergonzada.

“Tengo este molesto dolor de cabeza que simplemente no se
rinde. ¿Quieres acabar el vino mientras Erika prepara tu
martini?
Si puede dejar de besar a su ex el tiempo suficiente para que la

moleste.
"¡Oh! Claro, ”dice Hugh, sus ojos azules preocupados mientras se

vuelve hacia mí. "¿Estás bien para conducir?"
"Sí, ni siquiera he tocado ese", digo, señalando con la cabeza mi

vaso lleno y sacando algo de dinero de mi billetera. "Dile a
Erika que se quede con el cambio, ¿Ok?"
"Seguro. Estás tú-"
Finjo que no me doy cuenta de que sigue hablando y levanto

la mano en señal de despedida.
Media docena de personas me paran a la salida para desearme

feliz Navidad y preguntarme cómo estoy y bla, bla, bla, pero
finalmente, finalmente salgo, y el aire gélido es exactamente lo
que necesito para aclarar mi cabeza.
Bien, entonces estoy celosa. Lo hemos establecido. Lo que no

hemos establecido es por qué. No lo hemos establecido porque
no lo sé.
Siento que no sé nada en este momento. No sé si estoy celosa

porque la besó, o porque están lo suficientemente cerca como
para que él le contó lo estúpido de mi ex — sí, mi ex se siente

realmente estúpido en este momento.
Me froto la frente con una mano, saco las llaves del coche de mi
bolso con la otra.
Quizás el plan no se sienta tan estúpido como. . . lejos. Parece

que no puedo concentrarme en rastrear a Adam o Colin porque
Mark sigue interfiriendo en mi cerebro.
Pero espera, ni siquiera tengo que rastrearlos. Puedo hacer que el

primo perfecto de Erika los rastree.
Ella no quiere ayudarme. Ella solo quiere mantenerme fuera de

su camino.
"Kelly".
Presiono el botón de desbloqueo de la puerta de mi auto e

ignoro la voz.
"¡Kelly!"
La voz de Mark está más cerca ahora, y aunque desearía ser lo

suficientemente rudo como para subir al auto y salir del
estacionamiento al estilo de una película, todavía hay
demasiada nieve y hielo en el suelo.
Y nunca me alejaré de mi mejor amigo, no importa cuán

confundido me sienta ahora.
“Maldita sea, Kelly, ¿esperarías ...?”
Alzo las manos en señal de rendición y me doy la vuelta.

"¿Qué? ¿Qué, Mark?”
Está trotando por el estacionamiento, vestido con pantalones

negros y una camisa blanca de manga larga que no es lo
suficientemente abrigada dado el clima helado.
Arrugo la frente. "¿Dónde está tu chaqueta?"

Se detiene frente a mí, pero no responde a mi pregunta. "Hugh

dijo que parecías disgustada".
“Solo un dolor de cabeza. Bebí mi vino demasiado rápido ".
Alcanza las llaves que tengo en la mano. "Entonces no deberías

conducir".
Retiro mi mano antes de que pueda hacer contacto. "Estoy bien."
Frunce el ceño y me estudia. "No pareces estar bien".
"¿Cómo sabrías? No te he visto en todo el día o la noche ".
Su ceño se profundiza. "He estado trabajando."
"Por eso deberías volver a eso", le digo, señalando con la mano

hacia el restaurante. "Te enviaré un mensaje de texto para
hacerte saber que llegué a casa sana y salva".
Cojo la manija de la puerta, pero me agarra de la muñeca.

"Oye. Puede que no sea el Sr. Sensible, pero sé cuando mi mejor
amiga está molesta ".
"Oh, ¿soy tu mejor amiga?" Pregunto, el temperamento se

rompe un poco. “No estaba seguro. Pensé que tal vez podría ser
Erika ".
"Qué-"
"Le dijiste ", le digo, empujando su hombro.
Ni siquiera se balancea hacia atrás ni una pulgada. "¿Le dije

qué?"
“Sobre mi ex plan. . . cosa."
"No, no lo hice".
"Claro", le digo con una burla. "Estoy seguro de que ella

también tiene la Vidente, y sabía que debía darme la tarjeta
de su primo investigador privado para que pudiera encontrar a
Colin y Adam".
“No tuve nada que ver con eso”, insiste. Su voz es tan tranquila,
tan segura.
Y, sin embargo, solo le dije. Él es el único ...
Oh.
Ohhhh .
Evito gemir en voz alta. Apenas.
Ivy . Le dije a Ivy. E Ivy y Erika son amigas, no las mejores

amigas, pero estaban juntas en el equipo de fútbol en la escuela
y todavía pasan el rato de vez en cuando.
Ivy guardará un secreto si se lo pido, pero no se lo había pedido

a ella. E Ivy habla si no se le dice explícitamente que no lo
haga.
—Bueno, todavía la besaste —digo, sintiendo la infantil

necesidad de acusar a Mark de algo.
Mark frunce el ceño, luciendo completamente confundido. No

puedo culparlo. Apenas sigo mi propia conversación.
"No importa", digo con un rápido movimiento de cabeza. "Me
voy a ir ahora, y te prometo que cuando te vea mañana estaré
menos enojada contigo, ¿está bien?"
“No, no está bien. ¿Por qué estás enojado conmigo en primer

lugar? ¿Es porque crees que le hablé de tu lista o porque la
besé?”
"¡Ambas cosas!" Grito, mi corazón palpitante y el hecho de que

se vea tan bien me vuelve imprudente. “Es un poco de ambos,
¿de acuerdo? Y sé que eso no es razonable, por eso te ruego que
me dejes ir a casa y resolver mi propio cerebro ".
Marcos ha ido muy quieto, con los ojos oscuros a medida que
estudian la cara, en busca de respuestas que sé que no va a
encontrar, porque yo ni siquiera conozco.
"Por favor", le susurro, quitando mi mano de la suya.
Cambia su agarre, su pulgar rozando el pulso de mi muñeca

interna, deteniéndose por el más mínimo momento. . .
Luego me suelta y da un paso atrás, con las manos en los

bolsillos y los hombros encorvados para protegerse del frío.
"Maneja lento. Envíame un mensaje de texto cuando llegues a

casa ".
Me las arreglo para poner los ojos en blanco y sonreír. "'Ok"
Mark no me devuelve la sonrisa. Él sostiene la puerta abierta

para mí y me dejo caer cansada en el asiento del conductor.
"Kelly ..."
"No", le susurro, sin mirarlo. "Por favor."
Inhala, luego asiente. Comprobando que todas mis extremidades

están dentro del coche, cierra la puerta del coche en silencio
pero con firmeza.
Por el rabillo del ojo, lo veo dar un paso atrás, pero no miro en
su dirección mientras enciendo el auto y lo pongo en marcha.
Miro por el espejo retrovisor, solo una vez, cuando salgo del
estacionamiento, pero él ya se ha ido.
Dejo escapar un largo suspiro. "Está bien, Byrne", me animé a

hablar en voz alta. "Cualesquiera que sean estos sentimientos,
debes controlarlos".
Incluso conduciendo por debajo del límite de velocidad para ser

más cautelosa, aún llego a casa en diez minutos.
Rigby está ahí para recibirme y eso me hace sentir un poco

mejor. La música navideña que pongo también ayuda. Opto
por una canción navideña de Luther Vandross. Un poco más
lento que mis opciones habituales de vacaciones, pero encaja
bastante bien con mi estado de ánimo actual.
Enciendo el árbol, mirando con furia la parte superior que

todavía parece irritantemente vacía.
Lleno el cuenco de Rigby con comida para perros. Al menos uno

de nosotros debería comer, y todavía no recupero el apetito.
Aunque ahora es porque mi estómago está más revuelto por lo
que Mark debe estar pensando en este momento.
Estoy segura de que está tan confundido.
Somos dos.
Estoy a punto de poner agua caliente para el té (sí, claro, me

refiero a chocolate ) cuando alguien golpea con rabia la puerta
trasera.
Rigby da un ladrido de advertencia, pero no es terriblemente

amenazante dado que su rostro está lleno de croquetas.
Arrugo la frente. Nadie llega nunca a la puerta trasera. Bueno,

excepto Mark, y normalmente no llama.
No Usualmente. Hoy, aparentemente, es una excepción.
"¿Um hola?" Digo, viéndolo parado allí.

Señala con un dedo enojado hacia el muérdago. "Quítalo."
"¿Qué?"
Extiende la mano y agarra la vegetación, tirándola hacia abajo

con un enojo y tirándola por encima del hombro a la nieve.
“Esa maldita cosa te está volviendo loco. Desaste de eso."
Lo miro boquiabierta, luego señalo. "¡Ve por eso!"
Se cruza de brazos. "No."
“Me gusta el muérdago. Lo necesito para ... "
Tu lista de idiotas, lo sé. Dime, realmente piensas que Colin o

Alan ... "
"Adam."
"¿De verdad crees que alguno de ellos aparecerá en tu puerta en

los próximos tres días antes de Navidad porque algún psicópata
lo 'vio'?"
Me cruzo de brazos. "Sí." Quizás .
Se inclina. "Mierda".
“Sí, es impactante que te sientas así. Lo has escondido tan bien ".
"Lo he soportado bastante bien, pero te tiene actuando como un

loco, y..."
"Me tienes actuando como una loca", grito. "¡Has sido raro,
empujándome incluso mientras jalas a Erika!"
“¿Qué importa, Kelly? ¿Qué importa si me enrollo con mi ex?

¿No es eso lo que estás haciendo?”
Trago y hay un bulto. "¿Entonces tú lo harás? ¿Volverás con

ella?”
Cierra los ojos con un suspiro, se frota los ojos con una mano. "No
sé. No puedo pensar en qué hacer con esa mujer cuando estoy
tratando de lidiar con esta ". Abre los ojos y hace un gesto con
la mano hacia mí mientras lo dice.
"No soy tuya para lidiar con esto", le digo, empujándolo para
salir.
Ya me he quitado las botas y la nieve me empapa los

calcetines de inmediato.
"¿Qué demonios estás haciendo?"
"Cogiendo mi muérdago", llamo por encima del hombro,

pateando mis rodillas hacia arriba mientras entro en el patio,
para que mis pies toquen el suelo helado durante el menor
tiempo posible.
Saco el bulto verde de la nieve un segundo antes de que me

levanten y me arrastren de regreso a la casa.
"Eres una idiota", dice, depositándome en mi cocina, luciendo

furioso y desconcertado.
Presiono un pie encima del otro, tratando de calentarlos,

mientras encuentro el pequeño lazo rojo del que cuelga el
muérdago, y luego le ofrezco el paquete. "Ponlo de nuevo."
Mira el muérdago. "No. El muérdago te vuelve rara ".
"No es tu problema", le digo, señalando hacia arriba. “El clavo

todavía está ahí arriba. Solo tienes que hacer un bucle con esto
".
"¡A la mierda el muérdago, Kelly!"
Yo jadeo. "Retira eso".
"No. Ve a ponerte unos calcetines secos ".
“No.”
Ambos respiramos con dificultad y Mark mira. . . furioso.

Bueno, eso está bien. Yo también estoy un poco furiosa. Furiosa
con él, con Erika, conmigo misma y con esa loca de la estación
de tren.
Furiosa porque ya nada es simple, furioso porque mi corazón

está latiendo con fuerza, dolorido y esperanzado al mismo
tiempo.
Estoy furiosa porque estoy celosa, y eso es nuevo para mí, para
ser honesta. Demonios, estoy tan celosa. Celosa de que la haya
besado de verdad cuando recibí un beso fraternal en la mejilla,
celosa de que la vea como una mujer mientras me trata como si
yo no fuera más que la hermana medio chiflada que cree en las
hojas de té y algo así como cree en Hogwarts. es real.
Sobre todo, estoy furiosa porque he estado esperando toda mi

vida para sentirme así y es con el tipo equivocado, a quien
deseo tanto que sea el tipo correcto.
"Maldita seas, Kelly", dice Mark en voz baja, interrumpiendo

mis pensamientos. “ Maldita ti.”
Mark da un paso hacia mí y coloca sus dedos debajo de mi

barbilla, usando su pulgar para empujar mi cara hacia la suya,
como lo hizo anoche debajo del muérdago.
Excepto que esta vez, cuando baja su rostro hacia el mío, me

besa de verdad.
20 de diciembre, miércoles por la noche

La boca de Mark se mueve hambrienta sobre la mía, sus manos
se deslizan hasta mi cintura mientras me lleva hacia atrás unos
pasos, cerrando la puerta de una patada con un portazo
decisivo.
Debería asustarme, sé que debería hacerlo, pero la verdad es

que lo que más me asusta no es lo incorrecto que es, sino lo
absurdamente correcto que se siente. Como si su boca estuviera
hecha para la mía, como si deberíamos haber estado haciendo
esto hace mucho tiempo.
Enrollo mi brazo alrededor de su cuello, dejándolo acercarme

aún más. Su mano se desliza debajo de mi suéter, su palma está
tibia en mi espalda. . .
Lo que de repente me hace darme cuenta de lo fríos que

todavía están mis pies en sus calcetines mojados. Me aparto con
un pequeño grito ahogado.
"Mis pies", me las arreglo, queriendo que él sepa que no voy a

parar por su culpa.
Él mira hacia abajo y con un rápido asentimiento toma el
control total de la situación, poniendo un brazo alrededor de mi
espalda, el otro deslizándose detrás de mis rodillas y
levantándome hacia él.
Deslizo un brazo alrededor de su cuello, tirando de él para darle

otro beso mientras nos lleva a la sala de estar. Mark se sienta
en el sofá, yo colgada sobre su regazo.
Su boca nunca deja la mía mientras tira de un calcetín mojado,

luego el otro, y envuelve una mano cálida alrededor de mis
pies fríos, amasando suavemente la sensación en ellos.
Le devuelvo el favor, mis manos se deslizan debajo de su

camisa y trazo mis dedos sobre los planos de sus abdominales.
"Nunca agarraste tu chaqueta", murmuro.
En lugar de responder, desliza una mano detrás de mi cuello,

abre mi boca con la suya, la lengua se desliza contra la mía con
una fricción húmeda y deliciosa.
Le devuelvo el beso, dándome cuenta de que probablemente

tiene la idea correcta sobre no hablar. Si hablamos, podríamos
detenernos y yo no quiero detenerme.
Nos besamos para siempre. ¿Minutos? ¿Horas? Su boca es

perfecta, sus manos están por todas partes.
Siento que mi cabeza descansa suavemente contra una de las

almohadas del sofá y mis ojos se abren de par en par cuando
me doy cuenta de que me recostó y se está moviendo para
acostarse a mi lado.
Mark pone su mano contra mi estómago, sus ojos buscando los

míos. ¿Okey?
Respondo envolviendo mi pie ahora caliente alrededor de su

pantorrilla y arqueándome para otro beso. Más que bien .
Ambas manos están debajo de mi suéter, acariciando mis

costados y estómago de una manera que me hace sentir
hermosa en lugar de unas pocas libras más delgada.
Cuando sus dedos rozan el cordón a lo largo de la base de mi
sostén, es el punto sin retorno.
No quiero nada más que ir al límite con él.
Mientras su mano se desliza hacia arriba, contengo la

respiración, solo sale en un gemido cuando su mano roza mi
pecho.
Los labios y la lengua de Mark están calientes en mi cuello

mientras me moldea bajo su palma. Los dedos recorren la copa
de mi sostén y luego debajo. Su pulgar roza mi pezón, y captura
mi jadeo con su boca, besándome tan profundamente como me
explora.
Siento que el calor se acumula entre mis piernas. Me arqueo,

buscando alivio, necesitando su toque.
Él pronuncia un bajo "joder" cuando mis caderas rozan su

erección, la primera palabra que dice desde que me besó, y su
impulsiva suciedad me hace gemir en respuesta.
Mark me tira hacia arriba, sin darme la oportunidad de pensar

o dudar mientras me saca el suéter por la cabeza. Sostiene mi
mirada mientras sus dedos encuentran el botón de mis jeans,
mirando mi rostro incluso mientras tira los jeans ajustados por
mis piernas, tirándolos a un lado.
Entonces sus ojos viajan por mi cuerpo, y estoy demasiado

excitada para sentirme avergonzada, demasiado llena de
lujuria para detenerme en el hecho de que mi estómago no es
plano, que mis muslos no están familiarizados con el concepto
de un gimnasio. . .
Ni siquiera puedo pensar en mi cuerpo, porque estoy demasiado

ocupada mirando el cuerpo de Mark. Lleva la mano detrás de
la cabeza y se quita la camisa con un solo movimiento. Sus
botas y jeans lo siguen en un tiempo récord, y la vista de Mark
Blakely de pie junto a mi sofá vistiendo solo bóxers es lo
suficientemente deliciosa como para que me empuje a una
posición sentada y presione un beso en sus perfectos
abdominales.
"Perfecto", le digo, incapaz de evitar darle una pequeña
palmadita en la mejilla de su (perfecto) trasero.
Su boca se inclina en una media sonrisa y sus ojos son cálidos

mientras levanta una mano hacia mi cara, sus dedos se
enredan en mi cabello.
"Estos son perfectos", dice en voz baja, ambas manos

deslizándose hacia mis senos, levantándome para hacer que mi
escote sea aún más dramático. Él gime y mi boca se seca de
deseo cuando veo la forma en que sus caderas se arquean un
poquito hacia adelante, como si quisiera tocar con su polla mis
pechos.
El pensamiento es casi dolorosamente erótico, más aún cuando

desabrocha mi sostén, dejando que mis pechos se derramen en
sus manos.
Sus dedos juegan con mis pezones, alternando entre bromas y

pellizcos, y para cuando se arrodilla junto al sofá, estoy
jadeando.
Mark presiona una mano en mi estómago, sosteniéndome

contra el sofá mientras inclina su cabeza y envuelve sus labios
alrededor de un pezón.
Me arqueo en su boca mientras su lengua se desliza sobre la

punta de mi pecho, provocando, torturando, luego lo succiona
en su boca una vez más para calmarlo.
Él le presta la misma atención al otro seno, y justo cuando creo

que nada se puede sentir mejor que su boca en mis pechos,
siento su mano entre mis piernas, frotando el cordón de mi ropa
interior.
Me muero por que sus dedos me toquen, realmente me toquen,

pero me hace esperar, frotándome de un lado a otro con la
presión suficiente para provocar, pero no satisfacer.
Solo cuando me inclino y muerdo su hombro en advertencia, se

rinde con una risa áspera, los dedos se deslizan por debajo del
elástico hasta donde estoy mojada y deseosa.
Rueda su lengua sobre la punta de mi pecho mientras desliza
lentamente un dedo dentro de mí.
"Mark." Me arqueo mientras lo digo, presionándome contra su

mano.
Responde agregando otro dedo, estirándome ligeramente. Estoy

tan excitada que si él se acerca a mi clítoris, me correré.
Lo siento sonreír contra mi pecho y me doy cuenta de que lo he

dicho en voz alta, pero estoy demasiado excitada para
avergonzarme.
Se aparta un poco, bajando mis bragas de encaje azul sobre mis

muslos mientras me acuesto en el sofá para que él las devore.
Los arroja a un lado, luego vuelve a bombear suavemente dos

dedos dentro de mí con una mano, la otra se desliza hacia la
parte interna del muslo, abriéndome más para que pueda ...
Mark baja la cabeza, su lengua presiona contra mi clítoris

donde golpea una, dos veces ...
Me fuí.
Nunca he sido del tipo de chica silenciosa, pero nunca he sido

una gritona hasta este mismo segundo, cuando estoy bastante
segura de que mis gritos hacen que las paredes tiemblen tanto
como mi cuerpo.
Algún tiempo después, ¿días? Me las arreglo para abrir un ojo

y lo miro mientras presiona besos suaves justo debajo de mi
ombligo. Me mira a los ojos. "¿Condones?" pregunta
suavemente.
"Arriba", me las arreglo. "Aunque estoy tomando la píldora ..."
Ni siquiera termino la oración antes de que sus bóxers se quiten

y él se agache encima de mí. Supongo que ese es el beneficio de
estar con tu mejor amigo: hay un nivel de confianza allí, por lo
que puedes saltarte conversaciones molestas sobre las pruebas de
ETS.
La punta de su polla empuja mis pliegues y gimo, todos los
pensamientos de pruebas y logística salen por la ventana.
Envuelvo mis piernas alrededor de su cintura y me arqueo,

deseándolo ahora, pero él se detiene, sus dedos encuentran mi
barbilla, obligándome a mirarlo. "Kell ..."
Niego con la cabeza frenéticamente. No quiero hablar No se

trata de lo que está sucediendo entre nosotros y de lo que podría
cambiar. Lo que ya cambió el segundo que nos besamos.
Juro que veo algo parecido al arrepentimiento pasar por su

rostro, pero desaparece en un instante, reemplazado por un
hombre de sangre caliente.
Sus manos se deslizan hasta mis caderas, obligando a la parte

inferior de mi cuerpo a quedarse quieta, para tomarlo
lentamente. Se desliza dentro de mí poco a poco, y me doy
cuenta con cada segundo de lo fuera de mi alcance que estoy
con él.
Soy buena en la cama, pero Mark es fenomenal. Tiene

paciencia y sabe cómo usarla, haciendo que cada momento,
cada sensación sea diez veces más intensa de lo que he
experimentado antes.
¿El momento en que él está completamente dentro de mí? Cielo.

Mejor que el cielo.
Y justo cuando creo que no puedo volar más alto, estar más
excitada, comienza a empujar. Lentamente al principio,
dejándonos encontrar el ritmo del otro, y luego, más rápido, con
más fuerza. . .
Apoya las palmas de las manos a ambos lados de mi cabeza,

estirando los brazos hasta que se apoya sobre mí, observando
mi rostro con feroz determinación.
"Vente", dice con los dientes apretados. “Maldita sea, Kelly,

vente conmigo ...”
Lo hago. Me corro de nuevo, apretándome a su alrededor en el
mismo momento en que se libera dentro de mí.
¿Orgasmos simultáneos? Si me hubieras preguntado hace una

hora, habría dicho que no existen. Equivocada. Existen y lo
son. . . bueno, no hay palabras. No hay palabras para describir
lo que se siente al estar tan cerca de otra persona, para
compartir el momento más íntimo que hay para compartir.
Y por maravilloso que sea el momento, también da mucho

miedo, porque se siente importante . Incluso te cambia la vida.
Mark baja su frente a mi hombro y se queda ahí por un largo

rato mientras ambos recuperamos el aliento.
Intento pensar en algo que decir, pero. . . No tengo nada Él

tampoco, aparentemente, porque incluso después de que se
retira, ninguno de los dos dice una palabra. No cuando nos

cubre con la manta de mi sofá y yo ruedo a mi lado para
hacerle espacio a mi lado. No cuando desliza un brazo tentativo
alrededor de mi cintura, o cuando llevo su mano a mi boca y
presiono suavemente mis labios contra su palma. No cuando
nos quedamos dormidos, saciados y exhaustos frente al
resplandor del árbol de Navidad.
Y no a la mañana siguiente cuando me despierto desnudo, feliz

y. . . sola.
21 de diciembre, jueves por la mañana

"¿Y estás segura de que no te importa recogernos el día
veintisiete?" mi mamá pregunta por quinta vez desde que
respondí su llamada hace diez minutos.
"Sí, estoy segura ", digo, entrecerrando los ojos a la pantalla de

mi computadora portátil para ver si el suéter que estoy
debatiendo comprar para mi papá es morado o azul. El color se
llama real, que puede ir en cualquier dirección, ¿sabes? Y si
fuera para una mujer, simplemente diría: "¡Qué bonito color!" y
no estrés, pero mi papá no es el tipo de hombre que abraza una
camisa morada.
Me dije a mí misma que hoy iría a comprar a la ciudad, pero

vuelve a nevar. Esta vez solo una nevada ligera, y los trenes
todavía están en funcionamiento, pero no puedo emocionarme
con caminar por la Quinta Avenida en el frío, así que me he
conformado con una mañana de compras en línea y tratando
de no pensar en ti. -quién y el tú-sabes-qué-desnudo.
"Está bien, cariño", dice mi mamá, finalmente decidiendo

creerme. “Tu padre y yo estamos muy emocionados de verte, a
pesar de que lo estamos pasando de maravilla. ¿Y tú también
te lo estás pasando bien?”
Sonrío ante su tono demasiado casual. Apostaría cualquier cosa

a que todavía está estresada por mi "Navidad sola", pero que
mi padre le había hecho prometer que no se preocuparía por el
teléfono.
“No estoy sola, mamá. Estuve en Cedar and Salt anoche, todos
estaban allí. Tomé un café con Ivy, almorcé con Kate y no
puedo ni siquiera ir al supermercado sin que alguien me invite
a cenar de Navidad ".
"Oh, aceptarás la invitación de alguien, ¿no?"
“Definitivamente,” digo, solo para hacerla sentir mejor. No es

que no quiera ir a la casa de nadie durante las vacaciones; es
solo que hasta ayer, había tenido la esperanza de que la mujer
de la estación de tren tenía razón y de que tendría a mi único

amor verdadero con quien acurrucarme en la mañana de
Navidad. Y que bebiéramos champán junto al árbol, sin
molestarnos con los regalos, porque el otro es el único regalo que
necesitamos. . .
Sí, eso es demasiado.
El caso es que no he hecho planes para Navidad, porque

imaginé que estas vacaciones navideñas serían muy diferentes.
Pensé que me uniría alegremente con todos mis ex, riéndome a
través de recuerdos felices hasta que encontré el que me dejó sin
aliento. Pensé que tendría un adorno para mi maldito árbol.
No había planeado una tormenta de nieve. O la mayoría de

mis ex son unos idiotas.
O lo que pasó anoche con mi mejor amigo.
“Está bien, cariño, tu papá me está diciendo que cuelgue ahora.

Charlaremos en Nochebuena, ¿de acuerdo? ¿A qué hora vas a
ir a ver a los padres de Mark?
Siento un nudo en el estómago. ¿Cómo se supone que voy a

disfrutar adecuadamente del asado con el Sr. y la Sra. Blakely
después de haber visto a su hijo desnudo?
"¡No estoy segura!" Digo, fingiendo una voz brillante. "Te
avisaré cuando averigüemos el horario".
Y si todavía estoy invitada.
No le he enviado mensajes de texto a Mark desde que me

desperté sola, con el cuello rígido, en mi sofá.
Tampoco me ha enviado un mensaje de texto.
Rigby se ha ido, lo que significa que el perro siguió a Mark a

casa, pero no he estado prestando atención a la puerta trasera
de Mark para ver si el hombre o el perro ha venido o se ha ido.
Mentiras .
He estado prestando mucha atención y nadie ha entrado ni

salido.
Cuelgo con mi mamá y decido usar el suéter para mi papá.

Selecciono envío urgente para asegurarme de que llegará a
tiempo para celebrar con mis padres el día 29 como nuestra
"Navidad tardía".
Le compré a mi mamá una nueva batidora Kitchen-Aid,

porque la suya es mayor que yo y ha comenzado a ponerse
esporádica. Estoy debatiendo entre el blanco y el rosa claro
cuando se abre la puerta trasera.
Miro hacia arriba con sorpresa para ver a Rigby y Mark entrar
en mi cocina como lo habían hecho un millón de veces antes.
Me preparo para que se sienta tremendamente diferente, solo. . .
no es así.
Quiero decir, lo hace porque Mark se ve delicioso con un suéter

verde oscuro y jeans, sin afeitar de una manera que me hace
preguntarme cómo se sentirían sus cerdas entre mis muslos, pero.
..
Mark asiente con la cabeza a modo de saludo, luego va a

servirse una taza de café.
Se deja caer en la silla frente a mí en la mesa de la cocina, el
gesto es tan cómodo y familiar que mi pecho se hincha de
alivio porque no está siendo raro.
Giro el portátil hacia él. "¿Blanco o rosa?"
“Blanco”, dice, sin molestarse en mirar lo que estamos

seleccionando.
Giro la computadora portátil hacia mí y agrego la rosa al

carrito.
"Buena decisión", digo mientras ingreso toda mi información de

pago y pago.
Cuando termino, cierro la computadora portátil y lo encuentro

mirándome. Yo sonrío. "¿Estás tan adolorido como yo?"
Él le devuelve la sonrisa. "Supongo que el otro día me dijiste

que eres demasiado mayor para dormir en sofás".
"Como lo eres tú. Deberíamos habernos movido a la cama como

adultos ".
Se inclina hacia adelante. "Equivocada. No habría cambiado

nada ".
Yo trago. “Yo tampoco, pero nosotros. . . probablemente no

deberíamos hacerlo de nuevo ".
Sueno poco convencido, incluso para mí mismo.
Da un sorbo a su café. "¿Porque eso?"
Rigby apoya la cabeza en mi rodilla y le acaricio las orejas

sedosas.
"Bien . . . las cosas podrían ponerse raras ".
"No son raras ahora".
Arrugo la frente. "No. Pero se supone que deben serlo ".

Sacude la cabeza con cansancio. "Debería haber sabido que
pensarías demasiado en esto".
Me acerco a la mesa y agarro su muñeca. "Dormimos juntos".
Su mirada es ardiente mientras me recorre. Llevo una sudadera

vieja y fea y pantalones de yoga, mi cabello en un moño
mojado. Pero la forma en que me mira me hace sentir como si
estuviera usando pijama de satén y perfume, con trenzas
sedosas.
"Estoy consciente", dice.
"El . . . " Toco mi lengua con mi labio superior. "El sexo hace esto
complicado".
"Solo si lo dejamos".
Me recuesto en mi silla, cruzando los brazos. “Entonces, ¿cuál es

nuestro plan? Nosotros solo . . . tonteamos hasta que uno de
nosotros entra en otra relación? ¿ Entonces qué?”
La cabeza de Mark se levanta, frunciendo el ceño ligeramente

como si no lo estuviera siguiendo.
"Nunca volveremos a ser mejores amigos platónicos, seremos

amigos que durmieron juntos".
"Ya dormimos juntos".
Pero… tamborileo con los dedos sobre la mesa. "¿Quieres dormir

conmigo de nuevo?"
“Sí”, dice, simplemente y sin dudarlo. Decisivo.
Me gusta.
Me gusta mucho.
Me muerdo el labio. "Está bien, ¿qué tal ..."
"No." Toma otro sorbo de café.

"¡Ni siquiera sabes lo que voy a decir!"
"Vas a sugerir que decidamos si volvemos a dormir juntos o no

en función de tu bola Magic 8".
Mi mandíbula cae. "Cómo lo sabes-"
"No estoy tomando esta decisión basándome en un juguete para

niños, Kelly".
"Está bien, está bien", le digo con dulzura, alejándome

lentamente de la mesa. " No tienes que hacerlo". Me pongo de
pie de un salto y corro hacia las escaleras. "Pero necesito un poco
de orientación", grito, subiendo las escaleras de dos en dos.
Mi bola Magic 8, una de ellas, está en mi tocador, donde la

coloqué antes, después de que me guió a través de la difícil
decisión de usar tanga rosa o bragas de bikini negras. La

maldita pelota me llevó hacia la tanga, lo cual es lamentable,
porque. . . bueno, comodidad.
Pero ella nunca me había guiado mal antes, así que ¿por qué
iba a empezar ahora?
Lo levanto. "¿Mark y yo deberíamos dormir juntos de nuevo?"
Confesión: ya le pregunté esta mañana. ¿La respuesta en ambas

ocasiones? Quizás.
Una tercera vez no puede hacer daño, solo tengo que esperar a
que ella tenga más deseo.
Le doy una sacudida, pero antes de que pueda obtener la

respuesta, una mano masculina arranca la bola Magic 8.
"Oye, necesito ..."
"No, no lo harás", dice, sosteniéndolo por encima de su cabeza

incluso cuando hago un salto hacia él. "No necesitas esta bola
estúpida para decidir".
"Llámalo una bola estúpida de nuevo y le doy un rodillazo a

tus estúpidas bolas", murmuro.
Él sonríe y envuelve un brazo alrededor de mi cintura. "No, no
lo harás".
"¡Yo podría!"
"No."
Baja su boca a mi cuello, y no puedo detener el suspiro cuando

sus labios tocan la piel justo debajo de mi oreja. "Espera, si
pudiera ver ..."
"Toma la decisión, Kelly". Su boca se abre sobre mi cuello,

pellizcando ligeramente los dientes.
Yo jadeo. "No puedo-"

"Sí tu puedes."
"Yo…" Trago mientras él besa la piel sensible en la base de mi

garganta. "Tengo miedo", me las arreglo.
Mark se queda quieto y se endereza para poder mirarme a los

ojos. "¿De mí?"
"De nosotros", digo. "De arruinar esto".
Hago un gesto entre nosotros.
La voz de Mark es suave. "¿Anoche se sintió como una ruina?"
Recuerdo la forma en que mis gemidos orgásmicos resonaban en

las paredes. Estaba un poco arruinada. "Bien-"
"Me refiero a una ruina para nosotros ".
Respiro hondo. "No."
"Bien entonces. ¿Qué te hace pensar que lo hará una segunda

vez?
Aprieto mis labios y trato de ser valiente, lo hago, es justo. . .

Doy otro salto por la bola Magic 8, pero él la pone una vez más
fuera de mi alcance.
"Está bien", dice lentamente, buscando mi rostro. "¿Necesitas que

alguien tome esta decisión por ti?"
Asiento con la cabeza y estiro mis manos para agarrar el balón

con una sonrisa.
En respuesta, lo arroja hacia atrás en el pasillo, donde rueda y

choca con la pared.
"¡Oye!" Intento intentarlo, pero él envuelve un brazo alrededor

de mi cintura, impulsándome hacia atrás hasta que mis pies no
tocan el suelo y aterrizo de espaldas en la cama con un oomf .
Mark me sigue a la cama, encerrándome con su gran cuerpo.

"Pregúntame", ordena, sujetando mis muñecas sobre mi cabeza

con una mano.
"¿Preguntarte qué?" Digo, un poco sin aliento.
"Pregúntame qué le preguntaste a la maldita pelota".
Yo trago. "¿Debería acostarme con Mark de nuevo?"
Su sonrisa es lenta y confiada mientras baja lentamente su

cuerpo hacia el mío. "Ciertamente."
21 de diciembre, jueves por la tarde

Puedo hacer una muy buen trabajo de mal humor cuando
Mark tiene que ir a trabajar esa misma tarde.
Está bien. Después de tres (sí, tres) rondas de sexo increíble,

necesito tiempo para averiguar qué diablos está pasando aquí y
cómo me siento al respecto.
Además de averiguar qué hacer con el mensaje de texto que

acabo de recibir.
“¿Oye, Kelly? ¿Es este el número correcto? Jordan Van Doren

me dijo que una amiga tuya le dijo que me estabas buscando.”
Así es. El mensaje de texto en mi teléfono es de nada menos que

Adam Bartley, uno de mis dos ex novios desaparecidos.
Debería estar eufórica. Faltan cuatro días para Navidad, y aquí

la oportunidad de conectarme con mi potencial alma gemela
me está mirando a la cara.
Cojo el teléfono para responder, para preguntarle cómo ha

estado, dónde ha estado. . .
No puedo.
Dejo el teléfono y me muerdo el labio.
Vino. Eso ayudará. Necesito vino.
Pero medio vaso de Chardonnay más tarde, el texto de Adam

sigue sin respuesta.
Irónicamente, la misma persona cuya opinión quiero preguntar

sobre qué hacer es la misma que está causando mi indecisión en
primer lugar.
Cierro los ojos y respiro hondo. Lo que tengo con Mark es solo
sexo. Está separado de mi búsqueda de mi alma gemela.
Allí. Esa es una buena charla de ánimo, ¿verdad?
Funciona, porque levanto el teléfono y respondo. . .
“¡Oye! Sí, estaba pensando en ti últimamente. Ya sabes cómo

me muevo en las vacaciones. Nostálgica y todo eso :)”
Presiono enviar y rápidamente cambio el teléfono por mi vino.

Allí. Eso no estuvo tan mal. Ahora solo tengo que esperar. . .
Mi iPhone vibra. Maldita sea . ¿Qué pasa con todos mis ex

siendo tan rápidos ?
“Sí, recuerdo que siempre llorabas un poco en esta época del año
.”
Entrecierro los ojos. ¿Salimos él y yo en Navidad? No puedo

recordar. A decir verdad, no recuerdo mucho de Adam. Cabello
castaño claro. Ojos cafés. ¿Ojos azules? Tenía una marca de
nacimiento en el hombro derecho, lo sé, y. . .
Sí, eso es todo en lo que respecta a los recuerdos.
“¿Así que has estado bien? ¿Todavía estás en Nueva York?”
Me muerdo el labio mientras espero en agonía un poco. . . a

medida que su escritura se convierte en texto.
Su respuesta hace que se me caiga el estómago.
Sí, pero no la ciudad. Me cansé del negocio, cambié mi traje por

jeans y compré un lugar en el norte del estado .
Yo cierro mis ojos. Septentrional.
Haven está en el norte del estado.
Todo este tiempo he estado esperando una señal de que uno de

estos tipos es el indicado, y aquí uno de ellos está prácticamente
al lado. . .
Pero bueno, espera un minuto. No nos apresuremos. El norte del

estado de Nueva York se aplica a una región enorme. Por lo
que sé, podría estar a cuatro horas de distancia y casado.
“¿Conoce Johnstown? Aproximadamente un viaje en tren de tres

horas hacia el norte. Creciste por ahí, ¿verdad?”
Mierda. Mierda, mierda, mierda . Johnstown está a treinta

minutos en coche de Haven, con tráfico. Y nunca hay tráfico.
Mi próximo paso debería ser fácil. Adam es justo allí. Debería ir

a tomar una copa con él. Si está disponible, significa. . . bueno,
algo. Si no es así, ahí vamos. No pretende ser.
Y si la cara de Mark sigue apareciendo en mi cabeza. . .
Dejo escapar un suspiro. Pero Mark no está aquí, muuuy. . .
Subo corriendo las escaleras, luego vuelvo a bajar, agitando la

preciosa bola Magic 8 (todavía funciona, a pesar del abuso de
Mark).
Es la solución perfecta, la única solución. Solo hay una manera

de averiguar si se supone que debo terminar con todo este
asunto de la lista de ex. O es el destino o. . .
"¿Debería concertar una cita con Adam?" Pregunto mientras me
dejo caer en la silla de la cocina.
No, no, no, no, lo haré desesperadamente para responder,

todavía agitando la pelota.
“Sí .”
Dejo caer mi frente sobre la mesa de madera con un gemido.
Dos minutos más tarde, Adam accede ansiosamente a tomar

una copa. Y esta noche está libre.
Treinta minutos después, salgo por la puerta, conduciendo hacia

Johnstown.
No es la primera vez que mi bola Magic 8 me dice que haga

algo que no quería hacer en particular.
Pero es la primera vez que considero seriamente decirle a esa

maldita cosa que se vaya al infierno.
Lista de ex de Kelly Byrne, versión siete
Jack Chance
Joey Russo
Chad Morrister
Doug Porter
Stephen Hill
Adam Bartley : Finalmente. Un buen ex. Un gran ex. Nos llevamos bien, hablamos
durante horas. Yo. Mi ex. Su nuevo novio. . .
Colin Austin
21 de diciembre, jueves por la noche
Este era mi plan: beber con Adam a las cinco, volver a casa a
las siete. A más tardar.
Incluso con el horario de trabajo impredecible de Mark

últimamente, no puedo imaginarlo saliendo del restaurante
durante la hora punta de la cena. Pensé que lo golpearía hasta
llegar a casa, serviría una copa de vino y, dependiendo de
cómo fuera mi reunión con Adam, averiguaría qué decirle.
Ahora, si estás pensando: "Ese es un plan horrible, estarás en lo

cierto".
Para empezar, no era un gran plan, pero podría haberlo hecho

funcionar si me hubiera quedado con él, lo cual. . . No lo hice.
Así que ahora son las diez en punto, y a pesar de que deseé en
todas las potencias posibles del universo en mi camino a casa
que Mark todavía estuviera en el trabajo cuando llegué a mi
casa, nadie estaba escuchando.
Doy un recorrido informal por la parte delantera de la casa de

Mark antes de entrar en mi propio garaje, y su camioneta está
allí.
Está bien, pero tal vez no sea tan malo. No es como si tuviera
llamadas perdidas o mensajes de texto de él. Tal vez lo cansé de
nuestras escapadas sexuales antes, y se fue directamente a la
cama. Quizás . . .
Entro a mi cocina oscura y dejo escapar un pequeño chillido

ante la figura masculina que se apoya en mi encimera,
bebiendo un vaso de agua.
"¿Espeluznante mucho?" Pregunto, poniendo una mano sobre mi

corazón palpitante mientras dejo caer mi bolso y enciendo las
luces.
Mark toma un sorbo de agua, pero no dice nada. Me mira,

mirando mis botas de cuña, jeans ajustados y camisa de salir.
Sus ojos se mueven rápidamente hacia los míos. "¿Buenas

noches?"
Yo trago. “Fue interesante. ¿Cómo te fué en el trabajo?"
Realmente quiero ese vino, pero en lugar de eso, voy al

gabinete y saco un vaso de agua, esperando que la forma en
que lo lleno de la jarra en el refrigerador parezca casual y no
culpable.
"¿Adam o Colin?"
Busco a tientas la jarra. "Um."
Mark deja su vaso a un lado, apoya las palmas de las manos

sobre el mostrador y espera.
Cierro la nevera y lo miro. "¿Como supiste?"
Su media sonrisa es triste. “¿No eres tú la que siempre me

recuerda que hemos sido mejores amigos durante casi una
década? Sabía dónde estabas porque te conozco ".
Me muerdo el labio inferior mientras lo estudio, tratando de
averiguar qué está pensando, sintiendo. No parece enojado, pero
Mark no es exactamente un tipo de hombre con el corazón en
la manga.
Pero lo último que quiero hacer es jugar con mi mejor amigo, así
que le digo la verdad, aunque no me muestre exactamente de
la mejor manera.
"Tenía miedo de que si te dijera que Adam se acercó, me dirías

que no fuera".
Allí. No es una admisión bonita, pero es honesta.
Por un segundo, Mark no dice nada, luego solo dice una

palabra.
"Adam."
Juro que algo parecido a un alivio pasa por su rostro cuando

dice el nombre. "¿Cómo lo encontraste?"
"Él me encontró, en realidad". Tomo un sorbo de agua. “Hace

unos días le puse las sondas a un amigo en común, pero no
esperaba que saliera nada”.
"Suerte que te equivoques", dice, con la misma voz suave.

"¿Come te fue? ¿Pasó la prueba del muérdago?”
Hago una mueca de dolor, porque la idea de besar a Adam

Bartley es así. . . entonces . . .
"Adam es gay", solté. “Salí a encontrarme con él para tomar

una copa, solo para descubrir que la razón por la que estaba
tan ansioso por conocerme era porque él y su pareja habían
adoptado a su sobrino. Están tratando de llevarlo a la
Academia Emory ".
Hago una pausa, esperando que él diga algo, cualquier cosa.

No lo hace, así que sigo balbuceando.
“Por eso llego tan tarde a casa. Pensé que solo iba a ser un trago
rápido, para ver si él era el indicado, ya sabes, y luego descubrí
muy rápido que ya no estaba interesado en las mujeres, y
comenzamos a hablar sobre escuelas y niños. y luego su
compañero se unió a nosotros, y una bebida se convirtió en
cena, y. . . "
Mark levanta una mano. "¿Por qué no me lo dijiste antes de

irte?"
Dejo escapar un suspiro. "Yo debería. Es solo que pensabas que

todo esto era tan estúpido, y eso fue antes que tú y yo. . . "
Sus cejas se levantan. "¿Sí?"
Me sorprendo sonrojándome. "Sabes."
"Lo hago. Me pregunto qué verbo usarías para describirlo. Me

gustaría saber qué estamos haciendo aquí, Kelly ".
"Fueron . . . " Agito mi mano. "Durmiendo juntos."
"¿Por cuánto tiempo? ¿Hasta que llame tu próximo ex?
"Colin no va a llamar".
Es incorrecto decirlo. Es tan incorrecto decirlo, porque los ojos de

Mark se oscurecen, su voz es un gruñido. "¿Quieres que Colin
llame?"
Yo trago. Hace apenas dos días, habría pensado que sí, que si el
chico con el que pensé que me casaría me llamara y quisiera
verme, movería cielo y tierra para que sucediera. Que si un
chico del que no había tenido noticias en años y tal vez nunca
lo hubiera superado quisiera volver a estar juntos, me habría
sentido vertiginosamente feliz.
Pero por el momento, apenas puedo recordar cómo es Colin. Solo

está Mark, y la forma en que me mira como si fuera suyo, y no
solo como un amigo o compañero sexual.
Cuando no puedo encontrar las palabras para responder a su

pregunta, Mark se aleja lentamente del mostrador, apiñándome
hasta que mi espalda choca contra la puerta del refrigerador.
Sus manos ahuecan mi cara, sus pulgares me obligan a
levantar la barbilla, así que tengo que mirarlo a los ojos. “Me
conoces, Kelly. Mejor que nadie." Sus pulgares rozan mis mejillas
con ternura, en desacuerdo con la expresión feroz de su rostro.
"Tú me conoces, así que sabes que no me gusta compartir".
"Lo sé", le susurro.
"¿Qué va a ser, Kelly?" dice, sus labios deslizándose suavemente

sobre mi mejilla. “¿Vemos adónde va esto con nosotros? ¿O estás
esperando tu milagro de Navidad? "
Es difícil pensar cuando sus manos y su boca están sobre mí.

Algo que creo que él sabe, porque ha encontrado una parte
particularmente sensible de mi cuello y lame.
Intento mantener la cabeza. "Pero esa señora dijo ..."

Mark se queda perfectamente quieto y luego se aleja. “Maldita

sea, ¿todavía con eso? ¿Piensas seriamente que vas a encontrar
al amor de tu vida, alguien a quien dejaste o que te dejó,
esperando debajo del árbol la mañana de Navidad? ¿Incluso te
escuchas a ti misma?”
Envuelvo mis brazos alrededor de mí para protegerme del frío

que viene de mi mejor amigo. "No tienes que burlarte".
Cierra los ojos con frustración. “No estoy tratando de burlarme,

pero de la mujer con la que estoy. . . durmiendo se va corriendo
con los antiguos amantes en el segundo que llaman. ¿Cómo se
supone que me sienta al respecto? "
Yo trago. “No me di cuenta. . . Pensé que tú y yo nos estábamos

divirtiendo ".
"No lo suficiente, obviamente, si te escapas mientras estoy en el

trabajo para encontrarte con un ex".
“¡Era gay! ¡Tiene una relación comprometida con una nueva

familia! "
"¡Lo cual no sabías cuando accediste a verlo!"

Rigby entra en la habitación y luego vuelve a salir cuando
escucha nuestras voces enojadas. No lo culpo. Yo mismo quiero
esconderme debajo de la cama.
Pero no lo hago. No puedo. Porque Mark tiene razón y me he

comportado horriblemente. Pero admitir eso no ayuda con mi
confusión.
Me paso los dedos por el pelo y respiro hondo. "Estoy

confundida. No sé si tratarte como mi mejor amigo o mi novio ".
Espero que uno o los dos nos asustemos con el término "novio",
pero curiosamente la palabra no parece tan incómoda como
anticipo, y eso mismo me llena de un nuevo tipo de terror.
No puedo enamorarme de mi mejor amigo. . . ¿Yo puedo?

Relaja los brazos y se acerca una vez más. Sin tocarme, pero al
alcance de la mano si quiero tocarlo. Que es lo hago.
“¿Qué quieres que sea? ¿Mejor amigo o novio?”
Ambos .
Yo trago. "No sé si estoy listo para ponerle una etiqueta".
"Okey. ¿ Qué sabes tú?”
Extiendo la mano, la coloco suavemente en su pecho y miro

hacia arriba. “Sé que te quiero. Sé que todo lo que puedo pensar
es tocarte y que tú me toques a mí. También sé que tengo
miedo de perderte. De estropear la relación más importante de
mi vida con el sexo ". No dice nada y busco su rostro. “¿No
tienes miedo? ¿O al menos te sientes extraño? Después de todo
este tiempo platónico, como hermano y hermana ... "
“No.”
"¿Qué?"
Toma la parte de atrás de mi cabeza y apoya su frente en la

mía. "Nunca te he considerado como una hermana".
“Claro, pero sabes a lo que me refiero. Todo este tiempo nunca
me has querido así , y me temo que recordarás todas las razones
por las que no lo hiciste, y ...”
Mark pone fin a mi balbuceo con un beso abrasador. "Yo

quería", dice contra mi boca, un poco bruscamente. "Dios, como
he querido".
Mi cerebro trata de comprender sus palabras, trata de entender

lo que quiere decir, de envolver mi cerebro alrededor de eso,
pero. . .
No puedo pensar.
No cuando me besa así, no cuando sus manos me atraen hacia

él, atrayéndome en un beso que consume cada parte de mi
alma.
Levanto las manos a la cara, mis dedos se adentran en su

espeso cabello oscuro mientras finalmente me entrego a lo que
está sucediendo aquí. Quiero a mi mejor amigo, y él me quiere
de vuelta. No en una especie de conexión de una sola vez, sino
de una manera imposible de obtener suficiente el uno del otro.
Las manos de Mark están en mi trasero, su lengua está en mi

boca, y dejo que me levante, envolviendo mis piernas alrededor
de su cintura mientras nos gira, colocándome sobre el mostrador.
Algo se estrella contra el suelo, creo que mi portarrollos de

toallas de papel, pero ninguno de los dos se detiene siquiera.
Me quita la camisa por la cabeza. Rasgo sus botones como una

loca, mis labios codiciosos sobre sus hombros, sus pectorales,
inclinándome para poder pasar mi lengua por las arrugas de su
estómago.
Mark deja escapar un gruñido de placer, permitiendo que mis

labios jueguen con su estómago, mis dedos revolotean sobre la
parte delantera de sus jeans antes de que sus dedos se enreden
en mi cabello, tirando de mi cabeza hacia atrás para un beso
abrasador.
Desliza una mano por mi espalda, desabrochando el sujetador

con un solo movimiento.
Sin sujetador, devora mis pechos, con la mano en uno, la boca

en el otro, cambiando de un lado a otro con determinación
implacable hasta que estoy jadeando su nombre.
Me besa de nuevo, sus dedos encuentran el botón de mis jeans.
"Espera", me las arreglo contra su boca. "Mis botas . . . "
Deja escapar un gruñido de frustración, luego retrocede y

alcanza mis pies. Un momento después, ambas botas tocaron el
suelo, mis jeans y mi tanga se unieron rápidamente.
Dejo escapar una risita avergonzada cuando me doy cuenta de

que estoy completamente desnuda en la encimera de mi propia
cocina. "Espera, no podemos ..."
Sus dedos se sumergen entre mis piernas, el dedo medio gira

lentamente sobre mi clítoris antes de sumergirse y hundirse
dentro de mí.
Aprieto alrededor de su dedo con un gemido.
"¿Qué es lo que no podemos?" pregunta, su boca deteniéndose

contra mi pecho, sus dedos quietos y alejándose.
"No importa", le digo, agarrando su muñeca y empujando su

mano hacia mi centro palpitante.
Lo siento sonreír perversamente contra mi carne antes de que su

lengua se envuelva alrededor de mi pezón, sus dedos jugueteen,
rodeen, se extiendan. . .
Mark se inclina, empujándome hacia atrás suavemente

mientras su lengua se une a sus dedos entre mis piernas,
lamiendo entre mis pliegues con suaves y pecaminosas caricias.
Como antes, me tiene al borde del orgasmo en un período de

tiempo vergonzosamente corto, e incluso cuando mis caderas se
arquean hacia su boca, hay una parte de mí que quiere algo
más. . .
Mi turno .
Me escabullo y él retrocede sorprendido mientras yo salto del

mostrador. "¿Esto no está bien?"
"Lo será", le digo, presionando una mano en su pecho y

caminando lentamente con mis dedos hacia sus jeans.
Mark da un gruñido de sorpresa mientras me pongo de rodillas,

tirando de la mezclilla y los bóxers hacia abajo hasta que tengo
acceso a él, todo él.
Mis labios y mi lengua se burlan, manteniendo mi toque ligero

y fugaz, deseando que él lo necesite. Que necesite de mí .
Su cabeza está inclinada hacia atrás, luciendo hermosamente

masculino, mientras mis labios vagan sobre él, hasta que no
puede más y entrelaza sus dedos en mi cabello, mirando hacia

abajo y encontrándome a los ojos.
"Por favor."
Su ruego áspero es quizás una de las cosas más calientes que he

experimentado en mi vida, y le doy exactamente lo que ambos
queremos. Envuelvo mis labios alrededor de él y succiono,
suavemente al principio, luego con más entusiasmo mientras sus
manos me instan a seguir.
Me deja controlar la situación solo por unos minutos antes de

tomar lo que quiere, su toque es suave y autoritario mientras
mantiene mi cabeza quieta, metiéndose en mi boca codiciosa.
Miro hacia arriba y lo miro a los ojos, ofreciéndome, tal vez

incluso suplicando quedarme de rodillas mientras él pasa por el
borde.
Se muerde los labios en un delicioso momento de indecisión

antes de inclinarse y ponerme de pie.
"Contigo", dice contra mi boca, capturando mis labios en un

beso que me enreda la lengua.
Su brazo rodea mi cintura, levantándome para que mis piernas

se envuelvan alrededor de su cintura.
Me lleva suavemente hacia atrás hasta donde comenzamos el

encuentro, mi espalda hacia el refrigerador, la superficie fría
contra mi espalda es un contraste perfecto con su calidez
presionada contra mi frente.
Mark empuja dentro de mí. Duro. Posesivo. Grito, y él

inmediatamente se suaviza, pero niego con la cabeza y me
arqueo hacia él. Más.
Sus manos agarran mis caderas, mis dedos se clavan en sus

hombros, hasta que el éxtasis finalmente me lleva allí. Cruzo el
borde con un grito, y él se acerca a mí, su propia respiración
áspera coincide con la mía.
Mark me acerca a él, con sus brazos calientes alrededor de mi

espalda mientras me ayuda a ponerme de pie suavemente.
Nos miramos a los ojos durante un largo momento, diciendo en

silencio lo que no estamos listos para decir con palabras: lo que
hay entre nosotros es importante, y mucho más que el sexo .
Se aclara la garganta y da un paso atrás, inclinándose para

recuperar nuestra ropa.
Extiendo la mano y toco su muñeca mientras se pone sus bóxers

y alcanza sus jeans.
"Quieres . . . " Me lamo los labios con nerviosismo. "¿Quedarte?"
Él se queda quieto. "¿Quieres que me quede?"
"¿Demasiado?" Pregunto, alisando mi cabello desordenado hacia

atrás. "Sé que tu propia casa está a solo unos pasos de distancia,
así que tal vez sea mejor ..."
Usa el nudillo de su dedo índice para tocar suavemente mi

mejilla, deteniendo mi balbuceo. "Si. Me gustaría quedarme ".
Mi corazón se aprieta con algo que no sé cómo definir y consigo

sonreír. "Debes saber que a tu perro le gusta acurrucarse en
medio de mi cama".
"Lo sé, porque a tu perro le gusta acurrucarse en medio de mi

cama".
Como si supiera que estamos hablando de él, Rigby entra en la

cocina con un juguete chirriante en la boca, claramente
esperando a ver si es hora de irse a la cama.
"Vamos", le digo, señalando con la cabeza hacia las escaleras.
El perro no necesita más estímulo y se adelanta a Mark ya mí.
Espero que sea incómodo. ¿Cucharemos? ¿Quiere más sexo?

¿Está cansado y simplemente quiere dormir?
“No tengo un cepillo de dientes extra. . . . "

"Viviré", dice, quitando las sábanas de mi cama y dejándose

caer. Rigby salta a su lado, dando dos vueltas y luego se
enrosca en una bola junto a su hombro.
Sonrío al verlo, dándome cuenta de que es uno al que podría

acostumbrarme mucho, mucho .
Me pongo el pijama, luego me lavo los dientes y me lavo la

cara. Cuando regreso al dormitorio, apago la luz, esperando
arrastrarme hacia el único espacio libre, al otro lado de Rigby.
Pero Mark empujó al perro hacia el otro lado, colocándose en el

medio. Sin decir palabra, levanta las mantas, invitándome a
entrar.
Me deslizo en sus brazos y él nos cubre a los dos con las mantas
y luego me acerca a él.
"No te tomé por un abrazador", susurro en la oscuridad.
Está en silencio por un momento. "No lo soy."
Le doy una palmada en el antebrazo, que está envuelto

alrededor de mi cintura. “Odio ser la que te diga esto, pero ¿esto
de aquí? Abrazados".
“Quise decir que normalmente no lo soy. No antes."
"No antes . . .? "
Lo siento sonreír contra mi cuello, negándose obstinadamente a

responder. Yo también sonrío, porque sé lo que no está diciendo.
No antes que yo .
22 de diciembre, viernes por la mañana

La noche siguiente, cuando me siento en el bar de Cedar and
Salt, la situación es muy diferente.
Para empezar, Mark está trabajando de nuevo, pero esta vez

está detrás de la barra, lo que significa que puedo verlo.
La noche está aún más ocupada que la última vez que estuve,
y el entusiasmo previo a la Navidad es contagioso. Mark señaló
que la mayoría de las personas anticipan más tiempo en la
cocina de lo habitual en Nochebuena y el día de Navidad, por
lo que quieren cocinar lo menos posible en los días previos.
"¡Querida!" Me vuelvo para ver a Ivy y su prole entrar por la

puerta y saludarla con la mano, ya que he decidido perdonarla
por contarle a Erika sobre mi lista de ex. No me quedo enojado
por mucho tiempo en la mayoría de las circunstancias, y
definitivamente no en Navidad.
Ella le dice algo a su esposo, quien asiente con la cabeza y lleva

a sus hijos al escritorio del anfitrión.
"¡Hola!" dice mientras se acerca, luciendo cansada pero feliz con

un top azul con hombros descubiertos que hace que su cabello
rojo sea aún más brillante de lo habitual.
"¿Qué estamos bebiendo?" Ella se inclina hacia adelante e

inspecciona. “Martini sucio. Eso es bueno. Muy bueno. Lástima
que esté en el tren de las bebidas gaseosas durante los próximos
meses ". Ella palmea su vientre. “Lo que significa que tendré que
soportar la visita de mis suegros sin alcohol. Horror."
Hago una mueca en su nombre. Sus suegros son buenas

personas pero definitivamente del tipo entrometido.
"Les vamos a dar la habitación de Cory", dice, sin disculparse

comiendo una de mis aceitunas martini. “Lo que significa que
Cory está con nosotros, lo que significa. . . " Ella simula una soga
alrededor de su cuello. "No dormir".
"Pobre bebé", murmuro, frotando su brazo.
“Y tengo deberes de Santa en un par de noches. Pregúntame

cuántos regalos he envuelto ". Ella levanta sus dedos en forma
de cero.
"¿Necesitas ayuda? Puedo ir a cuidar a los niños mañana. O

puedo llevarlos a tomar un helado después del desfile de
mañana por la noche. Te vas, ¿verdad?”
Ella me mira. “¿Alguien en Haven se pierde el desfile

navideño? Hablando de eso, ¿cómo están las mallas verdes?
¿Halagador?"
"No voy a mentir, me veo un poco adorable con mi disfraz de

elfo".
Ivy mira por encima de mi hombro, luego sonríe y saluda. “Oh,

hablando de disfraces de elfos, tendrás compañía. Erika también
es un elfo, ¿verdad?”
Me tenso, pero me doy la vuelta y le sonrío al ex de Mark, que

está trabajando en la barra junto a él.
Erika saca una tapa de una botella de cerveza, la desliza por la

barra hacia el chico a mi derecha, luego pone los ojos en blanco
de manera amable. “Sí, todavía no puedo entender cómo me
convencieron de eso. Pero Ken es mi padrino ”, ese sería Ken
Prismill, el actual Santa residente de Haven,“ y no le voy a
decir que no, especialmente cuando está vestido como Santa ”.
Ivy me asiente. Kelly también estará allí. Mis hijos estarán

esperando bastones de caramelo dobles. Hablando de . . . " Mira
por encima del hombro hacia donde su esposo está sentando a
sus hijos. "Hora de la comida."
Ivy se pone de pie y nos da a Erika y a mí un movimiento de

dedo. “¡Nos vemos mañana, señoras! ¡Kell, te enviaré un mensaje
de texto sobre esa oferta de regalo! "
La saludo, luego me giro hacia la barra, preparándome para

tener una pequeña charla con Erika, pero ella se ha ido, y
Mark está en su lugar, inclinado sobre la barra y mirándome.
Él asiente con la cabeza hacia mi martini ahora medio vacío.

"¿Otro?"
La pregunta es casual. Una que le pediría a cualquier cliente,

una que me pidió un millón de veces antes, cuando le hice
compañía mientras trabajaba como camarero.
¿Pero la forma en que me mira? ¿Con una pequeña sonrisa y

mucho calor? Eso es nuevo.
Y me gusta. Mucho.
"No, estoy bien por ahora", digo, sacando la aceituna restante y

metiéndola en mi boca. No quiero que sea sexy, pero la forma
en que Mark mira mis labios me hace sentir como si fuéramos
las únicas dos personas en la habitación y que estamos a punto
de estar desnudos. . .
"¿Mark?" Erika reaparece a su lado, poniendo una mano en su

brazo para llamar su atención e ignorándome por completo.
“Penny dijo que te necesitan en la cocina. La rúcula que
obtuvimos esta mañana no es buena y quieren saber en qué
quieres comer ".
Quiero apartar su mano de su brazo, lo cual es un poco inusual

para mí. Nunca he sido del tipo celoso y posesivo, pero al ver a
Erika tocar a mi hombre. . .
¡Vaya! ¿De dónde vino ese pensamiento? Mark y yo somos solo.

. . ¿Qué? ¿Que estamos haciendo?
Mark aparta la mirada de mí y le da a Erika un gesto de

reconocimiento con la cabeza. "Seguro gracias."
Sale de detrás de la barra. Erika se queda donde está por un

momento, y siento que me está estudiando, incluso mientras
mantengo mi atención en el menú frente a mí.
De acuerdo, tengo todo este menú memorizado. Demonios, soy

yo quien lo mecanografió por él, porque Mark es un
mecanografiador muy lento. Pero me temo que si la miro, verá
lo que estoy pensando, y realmente no estoy de humor para un

escenario de “El niño es mío”.
"¿Necesitas algo?" Erika pregunta.
Miro hacia arriba. Pregunta cargada, o. . .?
Ella sonríe, y parece amigable, aunque quizás un poco forzada.

Yo le devuelvo la sonrisa. “No gracias, estoy bien por ahora. De
hecho, necesito ir al baño. ¿Puedes asegurarte de que nadie se
apodere de mi lugar? "
"Absolutamente, no hay problema".
Mark regresa a la barra justo cuando salto de mi taburete y,

maldita sea, mi estómago da un vuelco en esa especie de
mariposa del nuevo amor. Obligando a las mariposas a alejarse,
le doy una sonrisa brillante y un saludo amistoso.
Eso es lo que haría normalmente. ¿Correcto?
Mierda, esto es exactamente por lo que he sido cauteloso con

esto, no quiero empezar a actuar raro, y. . .
Todavía estoy saludando.

Mark pone los ojos en blanco, pero su sonrisa atípica me hace
pensar que sabe exactamente cuál es mi trato y está
secretamente complacido de que esté tan nervioso.
Me tropiezo con Hugh en mi camino hacia el baño de mujeres,

y él me sostiene por los brazos para estabilizarme.
“¡Oye, Byrne, he estado preocupado por ti! ¿Estás bien después

de la otra noche?”
La otra noche . . . como la noche anterior a darme cuenta de

que quería a mi mejor amigo de la manera bíblica, y antes de
actuar en consecuencia.
"Sí, estoy bien", le digo, acariciando su brazo. "Mejor que bien,

en realidad".
Me mira de reojo. “Te ves. . . sonrojada. ¿Quién es el

afortunado?”
Por un segundo me muero por decirle exactamente quién es mi

chico, pero me muerdo la lengua. Mark y yo ni siquiera hemos
hablado de lo que somos, mucho menos con otras personas.
Una de las camareras sale del baño y se aprieta junto a mí y

Hugh con un guiño juguetón mientras señala hacia arriba.
Hugh y yo miramos hacia arriba. Muérdago .
Hugh mueve las cejas juguetonamente y, colocando ambas

manos en mis mejillas, me da un beso contundente. "No le digas
a tu novio misterioso", grita por encima del hombro mientras
regresa al restaurante.
Sacudiendo la cabeza, sigo dirigiéndome hacia el baño,

sonriendo al pensar que hace solo unos días la vista del
muérdago me había hecho pensar en algo completamente
diferente: adivinos y ex novios. ¿Bien, qué puedo decir? Supongo
que, después de todo, tal vez la mujer fuera un fraude. Lo
intenté con mis ex novios, lo hice, y simplemente no estaba
destinado a ser.
Pero no todos .
Mi paso vacila un poco ante el pensamiento prohibido, al
darme cuenta de que tal vez no traté de contactar a Colin con
tanta fuerza como pude.
Dejo el pensamiento a un lado.
Me lavo las manos cuando se abre la puerta del baño. El baño

es pequeño, lo suficientemente grande para dos cubículos y un
lavabo. Agarro una toalla, con la intención de apartarme del
camino para el recién llegado, pero me congelo cuando veo
quién es.
"Oye, Erika".
La ex de Mark no responde a mi sonrisa. Tampoco se aparta del

camino ni entra en el baño. Ella no está aquí para orinar. Ella
está aquí para hablar.
"¿Que esta pasando?"
Tiro mi toalla de papel a la basura. "¿Que quieres decir?"
Ella se cruza de brazos. “Tú y Mark. ¿Están juntos ahora?
"¿Él te dijo eso?" Pregunto, genuinamente sorprendido. Mark y

yo no nos hemos tocado en toda la noche, así que apenas
estamos agitando la bandera del sexo.
Ahora sonríe, pero es un poco triste. “No tenía que hacerlo.

Olvidas que lo conozco ".
"En realidad, nunca lo olvido", digo, antes de que pueda darme

cuenta de que traiciona mis celos.
Hay un largo momento de incómodo silencio, luego Erika mete

las manos en los bolsillos traseros de sus jeans. “Mira, Kelly, sé
que han pasado años y estas son noticias viejas, pero me enteré
de la pelea de Doug y Mark la otra noche, y me enteré de que
estabas allí. Me di cuenta de que probablemente te habías dado
cuenta. . . "
"Que tú y Doug durmieron juntos".
Cierra los ojos por un segundo. "Si. Eso. De todos modos, me hizo
darme cuenta de que te debo una disculpa. Ya le he pedido
perdón a Mark, un millón de veces, pero tardíamente me di
cuenta de que yo también te lastimé ".
“No tanto,” digo, en serio. "Pero agradezco la disculpa".
"Lo lamento", dice, mirando sus zapatos. "Mucho. Estaba

borracha, como súper borracha, y Mark y yo nos habíamos
peleado, y. . . "
Levanto la mano para detener la confesión. “Realmente no te

culpo por la ruptura de Doug y yo, lo prometo. Fue hace mucho
tiempo-"
"Nos peleamos por ti", me interrumpe, mirándome a los ojos.
"Yo-" Mi cerebro tartamudea en confusión. "¿Qué hay de mí?"
“No lo sabes. . . " Erika inhala y parece considerar sus palabras.

“No sabes el efecto que tienes en él. Cuánto orbita a tu
alrededor, y tú solo ... "
"¿Yo sólo qué?" Entrecierro los ojos. “Respeto sus relaciones y él

respeta las mías. Somos amigos ".
"Lo sé", dice Erika, extendiendo las palmas de las manos en

señal de rendición. “Siempre nos diste a Mark y a mí nuestro
espacio cuando él y yo estábamos saliendo, y lo aprecio, pero
solo estoy preguntando. . . Sea lo que sea que esté sucediendo
entre ustedes dos, no lo uses ".
"Ahora espera", le digo, bien y enojado ahora. “Tú eres la que lo

engañó. No puedes decirme ... "
"Me preocupo por él", dice Erika en voz baja. "Nunca dejé de
preocuparme, y sé que no lo merezco después de lo que hice,
pero no puedes romperle el corazón".
“¡No lo haría! Quiero decir, él no corre el riesgo de eso. Es

simplemente-"
“Realmente no quiero ni necesito saber detalles. Solo quiero

plantar una semilla. Las relaciones de Mark, ¿cuánto duran?”
"¿Qué?" Dejé escapar una risa sorprendida. "No lo sé, no hago

un seguimiento"
"Empieza", dice bruscamente, alcanzando la manija de la

puerta. “Empieza a prestar atención y verás que él solo está en
una relación mientras tú estas en una relación. Cuando estás
soltera, él se asegura de que también lo sea ".
Yo la miro. "Eso es ridículo."
Su sonrisa es un poco triste. "¿Lo es?"

Ella se marcha, dejándome totalmente confundida y más que

un poco conmocionada.
Esta equivocada. Mark ha tenido muchas novias. También hay

muchas rupturas, pero no tienen nada que ver conmigo.
Intento pensar en las líneas de tiempo de sus relaciones, pero la

verdad es que no le he prestado mucha atención. Claro, estoy
segura de que hay algunas coincidencias entre nuestras
rupturas, pero ese tipo de coincidencia seguramente sucederá en
el transcurso de diez años, ¿verdad?
Ni siquiera estoy molesta con Erika, en realidad no. Ella solo

está siendo protectora. Obviamente, ella todavía tiene algo por
Mark, ¿y quién puede culparla? El tipo es el mejor hombre que
conozco, ridículamente bueno en la cama. . .
Hago una pausa al salir del baño y niego con la cabeza en la

dirección de mis pensamientos. De repente, unos dedos se
envuelven alrededor de mi muñeca, llevándome a un pasillo
oscuro que conduce a una puerta lateral que rara vez se usa.
Chillo de sorpresa y me encuentro presionada contra la pared,

labios firmes sobre los míos, lengua inteligente jugueteando con
mis labios para profundizar el beso.
Mark .
Mis brazos se elevan hasta su cuello, tirando de él con un suave

suspiro mientras le devuelvo el beso con entusiasmo.
Es extraño. Besarlo se siente maravillosamente nuevo y fresco, y

al mismo tiempo cómodo y atemporal, como si hubiéramos
estado haciendo esto, o estuviéramos destinados a hacerlo, desde
siempre.
Siento que algo golpea suavemente contra mi pantorrilla, y

retrocedo un poco para mirar una bolsa de la compra.
"¿Yendo a algún lugar?"
Besa mi nariz y agarra mi mano, arrastrándome hacia la

puerta. "Tengo hambre."
“Es conveniente, entonces, que estemos en un restaurante. O no”

—agrego mientras me saca al aire helado de diciembre.
No llevo puesto mi abrigo, pero no me atrevo a protestar.

"Tengo mi amor para mantenerme caliente" y todo eso. La
manada de ratas estaría orgullosa.
Libera mi mano para sacar las llaves del auto del bolsillo de sus
jeans, presionando el botón. Su camión emite un pitido y abre la
puerta del pasajero como lo ha hecho un millón de veces.
"Entra."
Mark le da a mi trasero una bofetada juguetona mientras hago

lo que él dice. No ha hecho que un millón de veces, pero eso
también se siente natural y familiar. Familiar nunca se ha
sentido tan estimulante como en este momento.
Lo empujas a tu órbita .
Dejo a un lado las palabras de Erika.
Mark se sube a su costado, pero en lugar de encender el motor,

me entrega la bolsa.
Miro dentro y saco una barra del delicioso pan francés casero
del restaurante. También hay una botella de vino, un
sacacorchos, una especie de pasta en un recipiente para llevar,
platos de papel y utensilios para comerlo todo, y. . .
Saco el último paquete y gimo de éxtasis. "¿Son estos los

brownies de mantequilla de caramelo salado?"
El se encoge de hombros.
Son mis favoritos y él lo sabe. Pero casi nunca los hace. En parte
porque le ha entregado la mayoría de las tareas de los postres
al personal, e incluso cuando hace el postre, afirma que le lleva
demasiado tiempo. Tienen como seis capas: una corteza hecha
con mantequilla dorada, caramelo, chocolate, pretzel salado,
algo más, algo más. . . de todos modos, aparentemente toman
horas.
“Dijiste que no los harías más. Que no valían la pena ".
Me mira. Mira hacia otro lado. "La expresión de tu cara ahora

mismo vale la pena".
La declaración es tan dulce, tan diferente a él, que creo que me

la he imaginado. El hecho de que no me mira a los ojos me dice
que no lo he hecho.
Me lanzo por la cabina de la camioneta y le planto besos en la

cara y el cuello. Se ríe y trata de apartarme, aunque el esfuerzo
es poco entusiasta.
"¿Podemos comer?"
"Bien, bien", digo, retrocediendo y dejándome caer en mi propio

asiento. “Pero recuérdame por qué estamos comiendo en tu
camioneta cuando hay un, oh, cómo se llama. . . un restaurante
a unos metros de distancia?”
"Ese lugar apesta", dice, aceptando el plato de papel que le

entrego.
“Sí, he oído eso. El propietario y el jefe de cocina es un verdadero

idiota".
"Mmm." Lucha con la botella de vino y el sacacorchos que le
entrego, sirviéndonos a cada uno un poco de vino en un vaso de
plástico.
“De verdad”, digo alrededor de un bocado de pasta una vez que

he cargado nuestros dos platos. "¿Por qué estamos de picnic en el
coche?"
"Se supone que debes pensar que es romántico".
Lo juro mientras dejo caer un trozo de pasta en el asiento del

pasajero y lo recojo con mi servilleta. "Muy."
“No me gusta comer frente a mis empleados”, dice después de un

momento.
Suena un poco avergonzado por la admisión, y lo miro. "¿Por

qué?"
"No sé. La mayoría de las recetas son mías, la mitad de las

veces que cocino es mía. Se siente . . . raro comerlo con una
audiencia ".
“Vulnerable. Eso es lo que quiere decir con "raro". Se siente

vulnerable.
"Estás comiendo frente a mí".
"Sí, bueno . . . " Hace un gesto con el tenedor hacia mis senos, y
miro hacia abajo para ver un trozo de queso.
Suspiro, saco otra servilleta y limpio el desorden, aunque la

mayoría de las veces solo unto aceite. "Normalmente soy muy
elegante en las citas".
Por el rabillo del ojo, lo veo quedarse quieto, luego me da una

media sonrisa. “¿Eso es lo que es esto? ¿Una cita?"
"Bueno, no muy bueno", digo, haciendo un gesto a nuestro

alrededor. "No hay velas ni música".
Extiende la mano y marca la radio. Comienza a sonar el icónico

“What Are You Doing New Year's Eve” de Nancy Wilson.
"¿Mejor?" él pide.
Sonrío y vuelvo a hurgar en mi pasta. "Mucho."
Comemos en un agradable y agradable silencio. La comida es

deliciosa, el vino es increíble. Lo único que impide que este
momento sea perfecto. . .
Dejo mi plato a un lado y me vuelvo hacia Mark. "Erika me

habló".
Se encoge de hombros y clava un tomate con el tenedor. “Ella es

camarera. Ese es su trabajo ".
“No, quiero decir, como. . . me arrinconó en el baño y me habló

".
El tenedor de Mark se detiene a medio camino de su boca.

Luego deja caer su tenedor y deja el plato en el tablero con un
gruñido molesto. "¿Supongo que no solo quería pedir prestado
lápiz labial?"
"Creo que ella todavía siente algo por ti", le digo en voz baja.
"Si."
Siento una pequeña punzada por la forma sencilla y práctica

en que lo dice. "¿Ha dicho algo sobre querer volver a estar
juntos?"
"Si."
Otra punzada, más fuerte esta vez. "¿Has pensado sobre eso?"
No dice nada, y se siente como un cuchillo en el estómago,

aunque sé que debería estar feliz por él si eso es lo que quiere.
"Ella te engañó", le digo, porque la idea de que mi amiga

volviera a ese tipo de relación. . .
Bebe un trago de vino. "Es más complicado".
“Um, me dijiste que la pillaste a ella y a Doug en tu cama. Eso

es brutalmente simple ".
“Sí, y apestaba, pero ella y yo no éramos. . . Rompí con ella un

par de días antes ".
"¿Qué?" Me doy la vuelta en mi asiento para enfrentarlo más

completamente. "¿Por qué no mencionaste eso el otro día cuando
estabas golpeando la cara de Doug?"
"Ya te dije que no golpeé a Doug por lo que me hizo".
No. Lo hizo por lo que Doug me hizo a mí .
"Así que tú y Erika ni siquiera estaban juntos".

Exhala y apoya la cabeza en el reposacabezas. "Es complicado.

Le dije que no estaba seguro de que las cosas estuvieran
funcionando. Ella estaba enojada, me pidió que me tomara un
tiempo para pensarlo. Acepté a regañadientes, pero entonces
sucedió lo de Doug y, bueno. . . eso lo hizo fácil ".
Me estremezco ante el paso en falso de Erika. "¿Ella le suplicó

que lo reconsiderara y luego se acostó con otra persona?"
"Ella estaba sufriendo", dice encogiéndose de hombros. "No me

encanta, pero lo entiendo".
Mis cejas se levantan. “Eso es muy. . . grande de ti ".
Se da vuelta y le da una leve sonrisa. "Pareces sorprendida."
"Solo estoy tratando de juntar las piezas".
Se acerca y toma el recipiente de plástico que contiene los

bizcochos de chocolate. "¿Quieres?"
Lo hago y, sin embargo, estoy bastante segura de que está

tratando de distraerme, y no lo voy a permitir.
"¿Tu ruptura con Erika tuvo algo que ver conmigo?" Pregunto.
Su brazo se detiene, su cabeza se levanta bruscamente. "¿Qué?"
"No es nada", digo apresuradamente. "Es solo algo que dijo

Erika, pero probablemente era rara porque se dio cuenta de que
estábamos durmiendo juntos"
"¿Qué dijo ella?"
Yo trago. “Algo sobre cómo estás solo en relaciones cuando yo

estoy en relaciones. Y que cuando estoy soltera, tú estás soltero ".
El se encoge de hombros. "Si eso es cierto, es una coincidencia".
"Bien", estoy de acuerdo rápidamente, aliviada por su

indiferencia. "Totalmente."
Si fuera inteligente, nos distraería a los dos con brownies, pero

en cambio tengo que ir y abrir la boca una vez más, porque
tengo que saberlo. . .
“Después de que tú y yo hayamos terminado. . . sea lo que sea,

¿crees que tú y Erika volverán a estar juntos?”
"No lo sé, Kell", dice, arrancando la tapa del recipiente de

brownie. Su tono es cansado y molesto. "¿Importa?"
Me mira a los ojos mientras hace la última pregunta, y me

pregunto si es retórica o si realmente me está preguntando.
¿Importaría si volviera a salir con su ex novia? ¿De verdad

saliendo, no solo ligar como él y yo lo estamos haciendo?
¿Importaría si volvieran a estar juntos y permanecieran juntos?
¿Si se casaran? ¿Tuviste bebés?
Algo aterrador y amargo me atraviesa mientras obligo a mi

cerebro a seguir viajando por ese camino. Porque incluso si no es
Erika, será otra persona. Un día Mark y yo no estaremos
solteros al mismo tiempo. Un día no volverá a estar soltero, sino
en una relación con alguien que tiene un anillo en el dedo. Que
se despierta a su lado todas las mañanas y se burla de él todas
las noches. Quién puede probar todas sus recetas, cuyo árbol de
Navidad le mostrará cómo cortar. . .
"¿Kelly?"
Lo miro. Está esperando mi respuesta. Una broma arrogante

está en la punta de mi lengua, pero no puedo hacer que salga.
En lugar de eso, extiendo la mano y pongo la palma de la

mano en su mejilla. "Lo único que importa es que estés feliz".
Sus ojos buscan los míos por un momento, luego me sorprende

levantando la mano y alejando mi mano de su rostro y
plantando un rápido y dulce beso en mi palma.
"¿Brownie?" pregunta, volviendo su atención al postre.
Sonrío ante la simple pregunta. Por la maravillosa sencillez de

nosotros. "Si. Sí, quiero un brownie ".
Y estoy aterrorizada de querer mucho más que eso.

23 de diciembre, sábado por la tarde

"¿Bien? ¿Qué piensas?” Pregunto, dándome vuelta de un lado a
otro frente al espejo de cuerpo entero de mi habitación.
No hay respuesta.
Me vuelvo y miro al hombre que está recostado en la cama,

que no me presta atención. Aparentemente no puedo competir
con el juguete chillón de reno.
"Rigby, bebé". El perro levanta la cabeza y mueve su cola

rechoncha. "¿Me veo adorable o me estoy volviendo absurda?"
Extiendo los brazos hacia los lados para mostrar mi disfraz de

elfo, girando hacia adelante y hacia atrás para que el perro
pueda obtener el efecto completo.
Rigby me mira con tristeza y apoya el hocico en el edredón,

moviendo la cola aún más rápido.
Yo suspiro. "Tenía miedo de eso. ¿Está demasiado apretado?”
Miro por encima del hombro a mi trasero en el espejo.

En el modelo en línea, el disfraz tenía medias a rayas con un
lindo vestido verde y un pequeño sombrero alegre.
¿Sobre mí? El vestido apenas cubre mi trasero. Inclinarse está

completamente fuera de cuestión, al igual que respirar.
—Talla mediana mi trasero —digo, tirando inútilmente del

cinturón ajustado.
No estaba tan apretado cuando me lo probé hace un par de

semanas. Mis cinco libras de vacaciones han llegado
oficialmente.
¿Además? El conjunto hace que mi cintura se vea pequeña, las

tetas se ven alegres. Al menos estoy bastante segura de que lo
hace.
Miro a mi perro, que está tumbado de espaldas, masticando

felizmente su juguete boca abajo.
Quizás necesito una segunda opinión.
Termino de maquillarme, cuidando un poco la sombra de ojos.

Pensé que quería ir con un labio rojo brillante y navideño, pero
en el último minuto, había optado por un ojo ahumado y un
labio desnudo. Y en lugar de la manicura roja que he estado
visualizando durante semanas, me pinto las uñas de un blanco
nieve brillante, con destellos plateados en la parte superior.
Los zapatos también son diferentes. En lugar de los tacones de

plataforma sexy, voy con mis botas de lluvia rojas.
Sé que es extraño, pero se siente importante cambiar mis

expectativas para la noche. Cuando imaginé por primera vez
toda esta tontería de los elfos, había tenido una visión muy
diferente de mi situación.
Hemos hablado de esto, ¿verdad? Mis sueños demasiado vívidos

de estar en ese flotador, viéndome adorable e irresistible
mientras uno de mis ex novios mira y piensa, Maldita sea, fui
tan tonta como para dejar que se escapara .
Y, por supuesto, lo miraría, pensando: Ese es él. Ese es el
indicado .
En este punto, a veces mi fantasía se descarrilaba: por ejemplo,

que la adivina de la estación de tren saldría de las sombras, se
convertiría en, como, una hermosa hechicera, y resplandecería
feliz mientras El y yo nos besamos. .
Probablemente habría música.
Quizás una propuesta. . .
El juguete de Rigby chirría, haciéndome retroceder al presente,

al mundo real. Sí, eso no está sucediendo. Y para recordarme a
mí mismo, ajusté mi ropa en consecuencia para que coincida
con mi cambio de mentalidad.
Toda la historia de la segunda oportunidad en el amor es

buena, te lo concedo, pero no funcionó para mí. Y lo intenté,
realmente lo hice. Con todos excepto Colin, pero si no puedo
encontrarlo, no puedo encontrarlo, ¿verdad?
Rigby rueda hacia atrás sobre su vientre y me da una mirada

juiciosa. ¿Lo intentaste siquiera?
“Sí, Rigby. Lo intenté. Ahora vamos, vamos a ver a tu papá,

veamos si podemos convencerlo de que lo lleve al desfile para
no tener que estacionar dos autos ".
Agarro mi abrigo y mi bolso y cruzo el césped hasta la casa de

Mark.
Está nevando, solo un poco, lo cual es encantador. Aún mejor, el

pronóstico promete ráfagas pero no acumulación. Suficiente
para agregar un poco de encanto navideño a la noche para los
niños (y, está bien, los niños adultos) sin convertirse en un
desastre húmedo.
Llamo una vez a la puerta trasera de Mark y entro. Está en la

mesa de la cocina, mirando su computadora portátil y
comiendo un sándwich. Me da una mirada rápida, luego una
segunda, más prolongada, mientras deja el sándwich en el
plato.
"¿Bien?" Digo, extendiendo los brazos y dando vueltas.
Espero que se ría, y lo hace, pero no es una risa mala. “Mira. . . "
"Elige esas palabras con cuidado", digo, caminando hacia la

mesa y sirviéndome un bocado de sándwich. "Hay mostaza en
esto".
"Porque disfruto de la mostaza".
Hago una mueca y la devuelvo. “Me olvidé de eso de ti. Tienes

suerte de ser bueno en la cama, porque la mostaza es lo peor. De
todos modos, ibas a decir que miro. . .? "
"¿Elffy?"
"Ooh, lo siento", digo. "La respuesta correcta fue apasionante e

irresistible".
“No estoy seguro de poder tener esos pensamientos sobre mi

mejor amiga. De todos modos, no en voz alta ".
"Por esta noche, puedes pensar en mí como la chica con la que

te estás acostando en primer lugar".
"Está bien, entonces", dice, empujando su silla hacia atrás y

rodeando la mesa para envolver sus brazos alrededor de mi
cintura. "La chica con la que me estoy acostando se ve sexy".
"¿Y?" Digo, levantando un dedo.
El sonrie. "E irresistible".
Luego lo demuestra bajando su cabeza hacia la mía y

besándome con un entusiasmo lento y deliberado que arruina
mi brillo de labios cuidadosamente aplicado, pero. . .
Pregúntame si me importa.
Le devuelvo el beso, presionando contra él mientras sus manos

acarician hacia arriba y hacia abajo sobre la curva de mi
cintura, hacia abajo sobre mis caderas, deslizándose hacia
arriba de nuevo, las manos deslizándose debajo de la falda
corta para que lo único que separe sus manos de mi piel sea el
medias finas.
"Me gusta cada vez más este conjunto", dice, empujando mi

cabeza hacia atrás para besar mi cuello.
“¿He mencionado que mi tanga es roja? ¿Y diminuta?”
Mark gime contra mi garganta. "¿Tenemos que ir al desfile?"
¡Correcto! El desfile.
Empujo sus hombros y doy un paso atrás, mirando el reloj.

"¡Deberíamos irnos!"
"¿Deberíamos?" pregunta con sarcasmo, sus ojos recorriendo con

avidez mi cuerpo.
Me muerdo los labios. “No lo hagas. No hagas eso, o Santa y los

niños se sentirán muy decepcionados por la falta de un elfo
adorable ".
"Es mejor que estén decepcionados a que yo", dice con un

suspiro.
Pero va al armario y agarra su abrigo.
"¿Tus padres van a estar allí?" Le pregunto mientras lo sigo al

garaje y subo a la camioneta.
Los padres de Mark viven un poco fuera de la ciudad y son lo

suficientemente amables pero un poco solitarios. Vienen a
algunos eventos de la ciudad, pero no a todos.
"No. Estaban pensando en ello, pero mamá dijo que tenía

demasiado que cocinar para mañana por la noche ". Me mira
mientras hace retroceder la camioneta fuera del garaje. "Sigues
viniendo, ¿verdad?"
"¡Por supuesto! ¿Todavía estoy invitada?” Lo digo en broma, un

poco confundida por su expresión seria. Entonces la duda se
filtra. “A menos que sea extraño. Quiero decir, una cosa es
invitar a tu mejor amiga temporalmente huérfana a cenar con
la familia en Nochebuena. Otra cosa completamente para
llevar a la chica con la que te acuestas a cenar con la familia ".
No dice nada y la duda se intensifica.
"Tú . . . ¿Les dijiste?"
"Sí, por supuesto. Siempre les cuento a mis padres los detalles de
mi vida sexual. ¿No es así?”
Me río y le doy un puñetazo en el hombro, la duda se aleja un

poco ante sus bromas.
Él mira hacia arriba. "¿Le dijiste a los tuyos?"
“Absolutamente no,” digo, encendiendo la radio. Solo quedan un

par de días más de música navideña, tengo que llenarme. “Mis
padres ya albergan el sueño secreto de que tú y yo nos

enamoraremos y tendremos bebés. No quiero avivar el fuego ".
Las palabras se escapan en broma (aunque es cierto, mis padres

realmente lo desean), pero en el momento en que están ahí
afuera, resuenan entre nosotros de manera incómoda, y daría
cualquier cosa por recuperarlas.
Para colmo de males, "All I Want for Christmas Is You" de

Mariah Carey sale en la radio y, aunque nunca lo había
pensado, la canción es bastante romántica.
Así que ahora mencioné las palabras "amor" y "bebés" en la

banda sonora de "Solo te quiero para mí". La canción nunca se
ha sentido más conmovedora. . . o más cierto.
Cierro los ojos con fuerza mientras la comprensión me atraviesa.

Mark es lo que quiero para Navidad.
Y no solo por Navidad, no solo ahora. La idea de no estar con

él se siente mal, a pesar de que todas las señales han señalado
que no pertenecemos juntos.
Nuestras señales están todas mal. Yo soy Géminis, él es Virgo.

Pesadilla .
No es un antiguo amor que vino a buscarme antes de Navidad,
es un nuevo amor.
No ha habido señales, ni señales, y mi abuela siempre decía

que cuando algo está bien, el universo te lo hará saber. Le
indicará directamente, sin preguntas, sin vacilaciones.
Nada de eso ha sido ni remotamente cierto con Mark, y aún

así. . .
¿Y si estoy enamorada de él de todos modos? ¿Qué pasa si

estoy maravillosa, incontrolable e irreversiblemente enamorada
de mi mejor amigo?
Dejo escapar una risita ahogada y él me da una mirada

alarmada.
Mariah sigue cantando. "Solo te quiero para mi . . . más de lo

que podrías imaginar. . . . "
Te equivocas, Mariah. Él podría saberlo. Podría decírselo.

Debería decírselo. Es mi mejor amigo, le cuento todo, cómo no le
voy a decir. . .
Mark levanta la mano para saludar a alguien por la ventana,

reduciendo la velocidad del automóvil mientras nos acercamos
al estacionamiento asignado para el estacionamiento del desfile.
Incluso con las ventanas cerradas, puedo escuchar el entusiasmo

afuera. Una banda en vivo toca "La abuela fue atropellada por
un reno".
Y alguien debe estar repartiendo campanas, porque todos los

niños las tienen, agitándolas en una cacofonía alegre y
desordenada.
La camioneta de Mark casi se ha detenido mientras esperamos

a que la multitud se mueva para poder estacionar en un lugar,
y alguien golpea alegremente el capó y saluda.
Es Jack Chance, el primer ex novio que busqué en toda mi

extraña lista de ex. Él tiene su brazo alrededor de una linda
rubia que no reconozco, y se ve feliz y relajado.
“Todos los años, olvido lo popular que es esta maldita cosa”, dice
Mark mientras un voluntario lo lleva a un lugar de
estacionamiento disponible detrás de la tienda de artesanías.
Asiento, incapaz de animarme a hablar. Necesito. Necesito

decírselo, pero con cada segundo, siento que el momento se está
escapando.
Apaga el motor y me mira con curiosidad. "¿Qué pasa

contigo?"
Oh nada. Estoy locamente enamorada de ti, y no estoy segura

de que sientas nada más que una pasión pasajera por mí .
Tengo que decírselo.

Pero no puedo. Porque todo lo que puedo pensar es que si esto es

unilateral, lo perderé .
Termina "Todo lo que quiero para Navidad" de Mariah.
Suena un comercial.
Momento terminado.
"¡Nada!" Digo, forzando una sonrisa. Cojo la manija de la

puerta. "¿Debemos? Santa y los elfos son la última carroza, pero
se supone que debo llegar un poco antes. Te encontraré después,
¿Ok?
"Kelly, espera ..."
Salgo de la camioneta antes de que pueda terminar su frase,

me doy la vuelta y le hago un gesto maníaco mientras me
dirijo hacia Main Street.
Algunas personas gritan mi nombre, y aunque sonrío y saludo

a todos, no me detengo, ni siquiera cuando escucho un par de
silbidos y "¡Oye, elfo sexy!"
El aire nocturno está tan lleno de alegría navideña que no me

sorprendería que Rudolph cruzara el cielo. Es todo lo que espero
cada año y, sin embargo, mientras camino a ciegas entre la
multitud, todo lo que puedo pensar es que desearía que
comenzara a nevar de nuevo.
Y que los copos de nieve disfrazarían mis lágrimas.


El resto del equipo para la carroza del Polo Norte ya está allí
cuando finalmente llego al final de la línea.
Incluso en mi extraño estado de ánimo, no puedo evitar dar un

pequeño suspiro de placer cuando lo veo. El tema cambia
ligeramente cada año, siendo Santa y los elfos la única
constante. Por lo general, es un trineo, una casa de pan de
jengibre o una especie de castillo de hielo, pero este año han
hecho que todo parezca una bola de nieve, con lo que parece un
enorme paraguas de plástico en la parte superior y una, Dios,
maquina de nieve.
“Si se está preguntando, sí, fue aproximadamente la mitad del

presupuesto total del desfile”, dice Josie Brag sonriente, quien se
inclina con ambas manos en una oferta silenciosa para subirme
a la carroza.
Dudo por un segundo, porque la mujer está vestida como la Sra.

Claus, y yo no soy exactamente una pluma. . .
Menea los dedos. "Pruébame. Empecé CrossFit ".

Bien entonces. Efectivamente, ella me levanta con relativa
facilidad, aunque me tropiezo torpemente con un trío de
estudiantes de secundaria que también están vestidos de elfos.
Una de las chicas me tranquiliza con una rápida sonrisa antes

de volverse hacia sus novias y hablar en voz baja. “De todos
modos, entonces, no sé cuántas veces tengo que decirlo, pero
Dylan y yo somos, como, solo amigos. Solo que nadie parece
creernos ".
"¿Me pregunto por qué podría ser eso?" dice una voz baja en mi
oído.
Me doy la vuelta y me encuentro cara a cara con Erika. Ella

también está vestida como una elfa sexy, solo que optó por el
disfraz con la altura de la rodilla en lugar de la altura del
muslo, y se fue con todo el look de lápiz labial rojo que había
sido mi plan original. Ella lo mece, por cierto.
Erika me da una sonrisa que es más amigable de lo que

esperaba, luego asiente con la cabeza a los adolescentes y baja
la voz a un susurro. “Han estado discutiendo el tema de los solo
amigos durante treinta minutos. ¿Cuánto tiempo hasta que ella
y Dylan se ligan?”
Me encuentro sonriendo de vuelta, porque si estoy leyendo bien

la situación, la sonrisa de Erika tiene una tregua escrita por
todas partes. Ella solidifica esto mirando a su alrededor y luego
rápidamente sacando un frasco de su media rayada. "¿Un trago
de whisky agrio?"
"Oh, eso es rudo", le digo con reverencia, aceptando la oferta de,

bueno. . . muchas razones.
"Eso es lo que obtienen por hacer que una camarera se disfrace

de elfo". Ella toma un sorbo del frasco cuando se lo devuelvo y
luego lo vuelve a colocar en su calcetín.
Cuando se endereza, se pasa una mano nerviosa por el cabello.

“Mira, Kelly, realmente te debo una disculpa por el otro día.
Estaba celosa y me sobrepasé ... "
"Diez años", le interrumpo.
Ella parpadea. "¿Eh?"
Asiento con la cabeza hacia los adolescentes que aún cotillean.

"Diez años. Eso es lo que les tomará a ella y a su mejor amiga
conectarse ".
"De ninguna manera", dice Erika, sacudiendo la cabeza. “Digo

dos meses. Solo les tomó a tí y a Mark diez años porque. . . "
"¿Pero porque?" Le pregunto cuando no continúa, porque estoy

un poco desesperada por la respuesta.
Ella sonríe desconcertada e inclina la cabeza. "¿Estás bien?"

Si hubieras preguntado quién sería la primera persona a la que

le diría sobre mis sentimientos recién descubiertos por Mark,
nunca le hubiera dicho a Erika Simmons.
Y, sin embargo, siento que si no se lo digo a alguien, saldré de

mí y. . .
"Creo que estoy enamorada de Mark", le digo.
Sus ojos se abren de par en par por un segundo, luego se inclina

hacia su petaca. "Feliz maldita Navidad para mí".
"Lo siento", le digo, ya lamentándome de mi arrebato. "Sé que

te preocupas por él y esperabas ..."
Ella agita una mano mientras toma un sorbo. "Está bien. Es

mejor, de verdad. Durante un tiempo esperé que tal vez me
perdonara, pero de todos modos no iba a funcionar. Para
empezar, el nuevo restaurante lo mantendrá ocupado en la
ciudad y ... "
Mi mundo se queda en perfecto silencio con solo el zumbido de

mis oídos por un momento.
Levanto una mano. "¿Qué? Lo siento, ¿qué?”

Su expresión está realmente desconcertada ahora. “Cedar and
Salt se está expandiendo a Nueva York. Acaba de comprar un
pequeño lugar en el Village. ¿No te lo dijo?”
Abro la boca, luego la cierro de nuevo, logrando negar con la

cabeza, aunque todavía no despeja las telarañas.
“Eso no puede ser correcto. ¿Cuánto whisky amargo has bebido?”

Ella se ríe, pero no es cruel. “Obviamente necesitas un poco más.
“¿No te lo dijo?”
—“Yo ... no. No lo hizo. ¿Estás segura?”
Ella se encoge de hombros. "Bastante segura. Es por eso que ha

contratado a un nuevo jefe de cocina y por qué ha sido tan
ceñudo todo el tiempo. Su nivel de estrés se ha disparado ".
"¡Lugares!" resuena la voz de Ken Prismill, el Santa favorito de

Haven durante los últimos diez años. "¡Nos mudamos en cinco!"
Baja un poco la voz. "Kelly, es bueno verte, querida."
Trato de manejar un saludo, pero mi mano solo llega hasta mi

frente mientras me froto por el repentino mareo. ¿Mark abrirá
un restaurante en Nueva York?
¿Y no me lo dijo?
Mejor amigo mi culo. Los mejores amigos se cuentan estas cosas.

¿Dónde vivirá? ¿Qué hay de su casa aquí? ¿Y Rigby? ¿Qué
pasa con nosotros?
El pánico se apodera de mi garganta ahora, y Erika pone una

mano alarmada en mi brazo. "¿Estás bien?"
"Si. No. No lo sé ".
“Respira hondo”, dice Erika. “Tal vez simplemente no quería

decírtelo hasta tener los detalles. O tal vez estaba tratando de
sorprenderte. Ustedes estarán más cerca ahora, ¿verdad? "
¿Físicamente? Seguro. ¿Emocionalmente? No tengo ninguna

maldita idea. ¿Aquí me estoy enamorando del chico, y él está
haciendo el movimiento más grande de su carrera y no me lo
cuenta?
Dejé que Erika me llevara al costado del flotador. Escucho a

Santa y a la Sra. Claus decirme cómo debo dejar caer los mini
bastones de caramelo a la multitud, no arrojarlos.
Asiento con la cabeza, sonrío, incluso consigo reír cuando veo

que Ken ha vestido a su nuevo cachorro como Rudolph y lo ha
puesto a la cabeza de la carroza.
Por dentro, sin embargo, soy un desastre.
Apenas me doy cuenta cuando el flotador comienza a moverse.

Reparto bastones de caramelo, saludo, sonrío, canto junto con
"Jingle Bells", pero todo el tiempo estoy tratando de averiguar
por qué no lo menciona.
Como la mayoría de la ciudad, el desfile es siempre un punto

culminante de Navidad para mí, pero este año apenas lo
registro. Todo lo que quiero es quitarme este disfraz de elfo
demasiado ajustado, ponerme sudaderas, acurrucar a mi perro y
tal vez gritarle a mi mejor amigo.
No veo a Mark entre la multitud, pero tampoco veo a nadie,

cortesía del hecho de que mis ojos siguen llorosos.
Lo sé. Adelante, dilo. Soy un desastre.
Después de lo que parecen días, la miseria finalmente termina.

Santa ho-ho-hos hasta que la carroza finalmente,
afortunadamente, se detiene al final de la ruta.
Cada año hay un estudio fotográfico improvisado al final de la

línea del desfile, donde los niños pueden hacer solicitudes de
último momento a Santa, la mascota Rudolph, etc., así que mi
trabajo aún no está terminado.
Nos recibe una multitud alegre, la mayoría con ganas de selfies

con Santa, aunque también hay algunas demandas para
nosotros los elfos.
Incluso mientras sonrío para cámara tras cámara, vigilo a la

multitud en busca de Mark. No sé qué voy a decir cuando lo
vea.
¿Por qué no me hablaste del nuevo restaurante? Y por cierto, te

amo . Sí, eso debería ir muy bien .
La multitud comienza a disminuir un poco, y hago otro escaneo

rápido, preguntándome dónde está Mark ...
¿Espera, qué?
Muevo la mirada hacia atrás. Podría haber jurado que vi. . .
Me quedo completamente quieto cuando veo al hombre parado

a un lado cerca de la mesa de fotos donde el personal del
anuario de la escuela secundaria administra las fotos de Santa.
Que no es . . . no puede ser . .

"¿Colin?" Digo en un susurro.
Él sonríe cuando lo miro a los ojos, y mi mundo entero parece

girar.
Mi ex novio, el ex novio, está aquí. En Haven. Justo a tiempo

para Navidad.
Como prometió la adivina.


De alguna manera fuerzo mis pies hacia adelante, moviéndome
hacia mi ex, quien me saluda con una sonrisa tímida y un poco
avergonzada. "Hola Kelly."
Solo puedo mirar.
Se ve igual, pero diferente. Familiar, pero. . . ¿incorrecto?
Ese es mi primer pensamiento. Se ve mal. Quiero decir, no el

hombre, está bien. Apuesto por lo que recuerdo.
Pero su presencia aquí se siente mal y. . . extraño.
Colin es de Oklahoma y tiene una gran familia allí. ¿Qué

diablos está haciendo aquí en mi pequeña ciudad natal dos días
antes de Navidad?
Se mete las manos en los bolsillos de su abrigo, sonriendo un

poco más mientras me mira. “Mira. . . " Su expresión es cálida.
"Te ves increíble."
"Tú también", le digo, aunque mi voz suena rígida. No sé si se

ve increíble, pero se ve bastante bien. Ha perdido la flaqueza
de la juventud, sus hombros son más anchos. Su barriga
también, si voy a ser quisquillosa. Lo cual no debería ser, dado
el hecho de que mi propio cinturón está demasiado apretado.
Es solo que es difícil no mirarlo y ver a Mark. O más bien, vea

todas las formas en que él no es Mark.
Alguien choca contra mí por la espalda y me tambaleo un poco

hacia adelante. Colin me agarra del brazo.
"¿Qué estás haciendo aquí?" Pregunto, mirándolo a los ojos. Son

marrón. ¿Siempre fueron marrones? Podría haber jurado que
tenía los ojos color avellana, pero ahora todos los detalles
parecen confusos.
Se ríe y se pasa la mano por el pelo. "Vas a pensar que estoy

loco".
Siempre con el hábito de hacer que los demás se sientan

cómodos, extiendo los brazos hacia los lados. “Estoy usando un
disfraz de elfo. Pruébame."
El brazo de Colin cae y respira hondo. "No puedo dejar de

pensar en ti".
Lo miro fijamente. "¿Qué?"
"Lo sé", dice, levantando los hombros. “Han pasado años, y

siempre te he recordado a ti, a nosotros, con cariño, pero por
alguna razón estas últimas dos semanas, simplemente. . . No
puedo sacarte de mi mente ".
No puedo evitarlo. Cierro los ojos y trato de contener mi risa de

incredulidad, porque es exactamente lo que imaginé. Es mi
fantasía hecha realidad, el único chico al que nunca superé
apareció de la nada, diciendo que me quiere de vuelta. . .
Especie de. Quiero decir, Colin no ha dicho eso en realidad, pero

está aquí y ...
"Quiero otra oportunidad", dice, acercándose y colocando

suavemente sus manos en mis brazos. “Sé que han pasado años,
y esto debe parecer una locura, pero. . . Vamos, Kell, siempre te
han gustado estas cosas ".
Arrugo la frente. "¿Qué cosas?"
El se encoge de hombros. "¿Destino? ¿Almas gemelas? Estar

destinado a ser, incluso después de todo este tiempo ".
Respiro profundamente y pienso en esto. Creo en todo eso. O al

menos lo hice. Y está el hecho no insignificante de que esto es
exactamente lo que predijo la mujer del tren: que encontraría al
que dejé escapar antes de Navidad, y. . .
Bueno, me encontró, pero aún así. La misma diferencia.

"Al menos tómate una copa conmigo", suplica Colin, pasando

una mano por su cabello rubio. “O café. Cena. Brunch mañana.
Cualquier cosa."
Debería decir que sí. Se lo debo a los tres años que Colin y yo
pasamos juntos. Se lo debo al hecho de que ha viajado Dios sabe
hasta dónde llegará el veintitrés de diciembre.
Se lo debo a mi lista de ex, y mi fe en el destino, y. . .
"¡Oye, oye!" Un hombre de mediana edad aparece a nuestro

lado, dándole a Colin un juguetón puñetazo de hombre a
hombre en el hombro. "Bien hecho, persuadiendo al elfo sexy
debajo del muérdago".
Reconozco al chico. Uno de los clientes del restaurante de Mark,

que siempre parece una bebida pasada de moda. Lo ignoraría,
pero ahora otros se han unido también, empujándome hacia
adelante mientras apuntan hacia el muérdago.
Lo juro por Dios, si no vuelvo a ver el muérdago después de esto.

..
Colin me da una sonrisa tímida pero no del todo decepcionada,

y antes de que me dé cuenta de que no va a decirles a todos
que se pierdan, sus manos están sobre mis hombros y me está
tirando hacia adelante, sus labios encontrando los míos. . .
Es el final perfecto para mi historia, ¿verdad?
La mujer que cree en el destino y la fortuna busca a todos sus

ex novios menos a uno con la palabra de un adivino, y luego
aparece el que se escapó, justo a tiempo para un beso navideño
bajo el muérdago.
Es perfecto. En teoría. Es una gran historia, seguro, excepto. . .

No creo que sea mi historia.
Incluso cuando Colin profundiza el beso, lo que nos hace ganar

algunos silbidos y risas, no siento nada.
O más bien, siento algo, pero no es lo que pensé que sentiría.

Me siento aburrida .
Y más enamorada que nunca de Mark.
Colin podría ser el tipo que el destino eligió para mí, pero. . . él
no es el que yo elijo.
Suavemente me relajo, y aunque Colin me deja terminar el

beso, mantiene sus manos sobre mis hombros.
—“Un trago, Kelly. Solo para ponernos al día ".
Puaj.
No quiero a Colin ahora mismo, nunca. Pero tampoco quiero

avergonzar al tipo frente a un número creciente de
espectadores.
No le debo mucho a Colin, pero al menos le debo la cortesía de

decepcionarlo en privado.
"Claro, una bebida suena genial", digo, forzando una sonrisa.
Las personas más cercanas a nosotros aplauden alegremente, sin

idea .
El alivio está escrito en todo el rostro de Colin mientras asiente
y finalmente deja caer las manos. Exhalo aliviada cuando él
retira el contacto.
Pero el alivio es de corta duración, porque sobre el hombro de

Colin, mis ojos chocan con una familiar mirada oscura.
Siento un millón de emociones a la vez cuando Mark y yo nos

miramos a través de la multitud. Pánico. Lujuria. Daño. Ira.
Amor.
Lo amo , y él acaba de verme besar a otro hombre y aceptar

una cita.
"Mark."
Digo su nombre. O al menos creo que sí, pero tal vez no, porque
nadie más parece responder, ni siquiera Colin, e incluso cuando
Colin dice algo sobre llevarme, mis ojos no abandonan a Mark.
Su mirada abandona la mía.
Sin una palabra, se da vuelta y se aleja.
Lista de ex de Kelly Byrne: versión ocho

Jack Chance
Joey Russo
Chad Morrister
Doug Porter
Stephen Hill
Adam Bartley
Colin Austin
¡Maldita sea!

"Mark. ¡Mark! ¡Detente! ¿ Puedes esperar?”
Mi mejor amigo no se da vuelta, pero no dejo de perseguirlo.
Y ninguno de nosotros ni siquiera mira a la horda de personas

que nos miran.
Y ni siquiera me preguntes por Colin. No sé a dónde fue, no me

importa. Le deberé un correo electrónico más tarde, pero Mark. .
.
Le debo mucho más que eso.
"Mark. ¡Maldita sea!"
Veo a una mamá tapar los oídos de su hijo y mirarme, y me

siento mal, lo hago, ¡pero este es mi corazón en la línea, gente!
Lo alcanzo justo cuando su mano está en la manija de la puerta

del camión. Lo aparto y él se da vuelta.
Lo que veo en su rostro casi me deja sin aliento. Ira, sí, pero
también dolor, dolor que está tan descaradamente sin disfraz
que mis propios ojos se llenan de lágrimas.
“Yo…” Me doy cuenta de que estoy tan mal preparada para este
momento. Para toda esta escena, de verdad.
"¿Qué?" Se mete las manos en los bolsillos, apoya los hombros

contra el viento y la nieve cada vez mayor, y. . . yo. Está
preparado para el dolor que yo le cause.
"Él acaba de aparecer", digo. "No le dije que viniera, lo juro ".
"¿Querías que lo hiciera?"
“Yo ... no. Realmente no he pensado en él desde que tú y yo. . . "

Se acerca con expresión enojada. “Desde que tú y yo qué, Kelly.

¿Conectamos? "
"No hagas que suene tan barato", le digo, empujándolo un poco

hacia atrás.
—No soy yo quien lo rebaja, Kell. Soy el que está planeando

picnics para nosotros. Tú eres el que está besando a otros chicos
".
Hago una mueca porque tiene razón, muy bien.
"¿Qué está haciendo aquí?"
“Bien. Colin. Me encojo de hombros. "Te dije. Simplemente

apareció ".
"Besarte. Y tomar unas copas ".
"El beso fue solo por el muérdago"
"¿Si? ¿Cómo le fue? Mark pregunta, su voz fría. “¿Pasó su

prueba? Ese ha sido el plan, ¿verdad? Ponlos debajo del
muérdago, averigua si son el Príncipe Azul predestinado.
“Sí, pero eso es lo que estoy tratando de decirte. No le pregunté

aquí. ¡Ni siquiera pude encontrarlo! "
"Pero lo intentaste".
"¡Podrías dejar de interrumpirme!" Empujo sus hombros con

frustración reprimida, aunque no se mueve.
Pasa una mano por su cabello, su propia frustración es evidente.

"Bien. Solo respóndeme esto. Si hubieras podido encontrar a
Colin, ¿le habrías pedido que viniera? ¿Encontrarías una
manera de verlo?”
"Yo-yo no sé."
Mark hace una mueca, solo un poco. “Y el hecho de que

apareció. ¿Coincidencia? ¿Destino?"
"No existe tal cosa como la coincidencia", digo, antes de que

pueda pensarlo mejor.
Deja escapar una risa sin alegría. "Bien. No claro que no. El
exnovio que te rompió el corazón debe estar aquí como parte
del gran plan del universo, ¿verdad?”
Me froto la cara con las manos con frustración porque parece

que no podemos estar en la misma página. “Mira, Mark. Me
persiguió después de que . No estoy lista para terminar con esto
todavía ".
"¿Por qué?"
La pregunta es brutalmente simple. Como debería ser la

respuesta. . .
"Creo que estoy enamorada de ti."
Se queda muy quieto, su mirada se oscurece con algo que

parece esperanza antes de apagarla. Mark niega con la cabeza.
"Crees."
“Bueno, quiero decir. . . esto es nuevo y ... "
“No es nuevo, Kelly”, grita. Un par de personas nos miran con

asombro y él cierra los ojos y baja la voz. “He estado aquí por
diez años. Diez malditos años he esperado a que superaras tus
suposiciones infantiles de que no estamos hechos el uno para el
otro por nuestros cumpleaños, o porque tu maldita bola Magic 8
no decía 'alma gemela' cada vez que decías mi nombre, o lo
que sea. "
“Espera, ¿qué ? "Mark-"
“Diez años, he estado aquí”, dice de nuevo, sus manos envuelven

mi parte superior de los brazos y me dan una pequeña
sacudida, “esperando que veas que soy el indicado para ti.
¿Quieres saber por qué Erika y yo rompimos? Por tí. Ya no
estabas con Colin, y cualquier tonto podría ver que Doug iba a
ser un rebote a corto plazo. Como un tonto, pensé que era el
momento, pero luego te fuiste de nuevo, con otro tipo. Luego
otro."
“¡Tú también estabas en relaciones! Muchisimas. ¿Cómo se

suponía que iba a conocerte? . . Espera, ¿has tenido sentimientos
por mí todo este tiempo?”
En lugar de responder a mi pregunta, mira hacia otro lado, su

mirada distante. Luego sus ojos vuelven a los míos. "Voy a abrir
un restaurante en Manhattan".
Momento extraño.
“Lo sé, Erika lo mencionó. ¿Por qué no me lo dijiste?”
“Serán siete días a la semana al principio, hasta que lo ponga

en funcionamiento, pero luego dividiré mi tiempo. Entre
semana allí. Los fines de semana aquí ".
Como mi horario . “Eso es genial, pero ¿qué pasa con el gran

secreto? ¿No pensaste que me gustaría saber que mi mejor
amigo iba a vivir en la misma ciudad todo el tiempo en lugar
de la mitad del tiempo? ¿Que no me emocionaría que mi mejor
amigo estuviera dando un gran paso adelante en su carrera? "
“Tenía la esperanza de que cuando te enteraras no serías mi

mejor amiga. O al menos no solo eso. Estaba esperando mi
momento, esperando que cuando encontrara un apartamento
allí, no fuera mi apartamento, sino nuestro apartamento ".
Mi cerebro se apresura a resolver todo esto, pero es demasiado.

No puedo pensar, no sé cómo sentirme
“Estoy enamorado de ti, Kelly. He estado enamorado de ti desde

el día que te conocí. Te amaba como un chico ama a una chica
en ese entonces, cuando eras la única que estaba ahí para mí. Y
ahora te amo como un hombre ama a una mujer, porque eres
la único que quiero. Para siempre."
Mi corazón da un salto, pero no ha terminado.
Su voz es triste. Resignada. “Pero no lo hago... " Él le da a su

cabeza una rápida sacudida. “No quiero tomarlo con calma. No
puedo sentarme y esperar a que averigües si sientes lo mismo ".
Mi corazón tropieza en mi pecho. "Mark-"
Me lleva la mano a la mejilla y, aunque el gesto es gentil, la

expresión de su rostro es de resignación y mi corazón late más
rápido por el pánico.
—“No puedo seguir esperándote, Kelly. No puedo seguir

desperdiciando año tras año esperando que sientas lo mismo,
solo para perderte cada vez que una carta del tarot o una bola
de cristal te lleva a otra parte".
Sus labios son suaves contra los míos, un susurro de un beso que
es a la vez tiernamente tierno y desgarradoramente agridulce.
"Mark." Mi voz es un susurro roto, y levanto dedos desesperados

a su muñeca, aferrándome. "Te dije que creo que te amo".
Su sonrisa es triste. “Quiero más que 'creo', Kell. Merezco algo

mejor." Suavemente se aleja, entregándome las llaves del auto.
"Tómalo. Encontraré otro viaje ".
Impotente, lo veo irse. Y mientras las lágrimas corren por mi

rostro, me doy cuenta de por qué su beso parecía tan
brutalmente agridulce.
El beso fue una despedida.


"Gracias de nuevo por invitarme a esto", le digo a Erika
mientras la sigo por el auditorio, poniendo tazas junto a los
platos que ella coloca en cada lugar.
Ella mira por encima del hombro con una leve sonrisa. "Eres
bienvenida. Pensé que le vendría bien algo para distraerte. . .
sabes."
Si. Sí, lo sé. Sé muy bien que mi ex novio voló a Oklahoma esta
mañana después de una conversación dolorosamente incómoda
sobre panqueques en el restaurante local. Le dije que aunque
estaba bastante segura de que alguien quería que estuviéramos
juntos. . . no fui yo.
¿Pero a quién estamos engañando? Colin no es el problema

aquí.
El verdadero problema es que Mark está en casa de sus padres.

Sin mi.
No estaba del todo sin invitación. La mamá de Mark llamó

esta mañana diciendo que a todos les encantaría invitarme a
cenar, y que el papá de Mark podría venir a buscarme,
llevarme allí y luego llevarme de regreso a casa.
Eso casi lo dice todo, ¿no? Mark no me odia tanto como para
querer que esté sola en Nochebuena, pero tampoco puede
soportar pasar tiempo a solas conmigo.
Le mentí a su mamá, le dije que el dolor de garganta con el

que había estado luchando toda la semana finalmente había
ganado y que estaba enferma.
Soy la peor. Tiene que haber un lugar especial en el infierno

para las personas que mienten en Nochebuena a los padres de
su mejor amigo, pero la alternativa era impensable. No puedo
sentarme en la mesa del comedor frente a él comiendo puré de
papas y sabiendo que las cosas nunca volverán a ser iguales
entre nosotros.
Erika me envió un mensaje de texto para ver si estaba bien, y

cuando le conté toda la triste historia, insistió en que fuera al
auditorio de la escuela secundaria para ser voluntaria con la
cena para los desamparados que ella había ayudado a
planificar. Desesperada por una distracción, acepté felizmente.
“Ceno con mi mamá”, continúa, “pero si quieres venir después,

iba a ver películas navideñas. No he visto Love Actually este
año. Parece tu mermelada. ¿Todo ese romance cursi?”
Hago un gruñido grosero.
"¿No?" ella pregunta.
"Digamos que me recuerda a Mark".
Mientras estaba despierta anoche, toda la noche, repetí los

eventos de la noche una y otra vez, e hice la conexión no tan
agradable entre nuestra conversación la semana pasada sobre
el beso entre el personaje de Keira Knightly y el tipo de la
señal.
¿La peor parte? Yo era quien le había informado a Mark que

había sido un beso de despedida.
Poco sabía que me explotaría en la cara.
Ella me mira con lástima. “Lamento decirte esto, pero eso es lo

que pasa cuando te enredas con alguien que eres tan cercano.
Todo te recordará a él, al menos un poco ".
"Dios, gracias por eso".
Erika se encoge de hombros. —“No te voy a mentir, Byrne, es

difícil superarlo. Sugiero mucho vino y entrenamiento para un
maratón. Trabajó para mi."
Arrugo mi nariz. "¿Un maratón? ¿Qué eres, una especie de

monstruo?”
El vino, sin embargo. . . Tengo la plena intención de respaldar

esa iniciativa.
"¿Estás lista para decirme lo que pasó?" pregunta mientras

terminamos de poner la mesa final.
"No." Enderezo un tenedor en uno de los ajustes. "Ni siquiera

estoy segura de saber lo que pasó".
Ella le da a mi hombro una palmadita comprensiva. “Las

puertas se abren en cinco. Ya tenemos mucha gente para servir
comida, pero los invitados siempre disfrutan de la compañía. Y
nadie habla tan bien como tú ".
No me siento en lo más mínimo habladora, pero puedo fingirlo.

Alguien pone música navideña. Una situación desafortunada
de jazz suave que tiene demasiados bucles y variaciones en los
coros familiares para que cualquiera pueda tararear
correctamente.
Unos minutos después, llegan los primeros invitados.
Haven hace esto todos los años, abriendo el gimnasio de la

escuela secundaria a aquellos de la comunidad que han
atravesado tiempos difíciles y no pueden pagar una comida
caliente. Ojalá pudiera decir que he estado más involucrado en
el pasado, pero esta es la primera vez para mí. Sin embargo,
normalmente soy el anfitrión de la versión de Acción de
Gracias, así que sé por experiencia que todo lo que esta gente
quiere es una comida caliente y un toque de alegría navideña.
Pego una sonrisa y hago las rondas, felicitando el cabello,

repartiendo bastones de caramelo a los niños, deseando que
sean las muñecas y los videojuegos que sospecho que realmente
quieren pero que no obtendrán.
Me complace decir que con cada minuto, mi ánimo se levanta

un poco. Alguien cambia la música del álbum de Navidad de
Nat King Cole, y aunque no hay árbol de Navidad, alguien ha
colgado luces centelleantes del techo y hay coronas de flores en
cada mesa.
También hay muérdago en la puerta, y se necesita todo mi

autocontrol para no tirar ese pedazo de mierda ofensivo a la
nieve.
La multitud comienza a disminuir un poco, y acabo de

comenzar a recoger platos, y sigo charlando con las personas
que se demoran con el café y la tarta, cuando siento que me
miran.
Siento un hormigueo en la columna vertebral con un misterioso

déjà vu, escaneo la habitación y jadeo cuando encuentro la
fuente de la mirada.
Es ella .
La mujer de la estación de tren de Manhattan me está

mirando, levantando su vaso de plástico con sidra de manzana
a modo de saludo cuando nuestras miradas se encuentran.
Su sonrisa es amplia y amistosa. Y eso me cabrea.
Dejando los platos en una bolsa de basura, camino hacia su

mesa y me dejo caer en la silla frente a ella. "Tú."
Ella sonríe más ampliamente. "Yo."
"¿Quién eres?"
Simplemente da un sorbo a su bebida, la sonrisa nunca se

desvanece.
Lo intento de nuevo. "¿Cómo me encontraste?"
Aún así, nada más que la sonrisa. No está del todo vacío, creo
que ella sabe dónde está y quién soy yo, pero definitivamente
hay algo. . . de otro mundo sobre ella.
"¿Lo enviaste?" Pregunto, inclinándome hacia adelante y

tocando su mano suavemente. "¿Enviaste a Colin?"
La mujer parpadea.
“Mira, sé que estabas tratando de ayudar, y estoy segura de

que en alguna versión del futuro estoy destinada a estar con
Colin, pero siento que necesito decírtelo. . . Traté de seguir tu
consejo, traté de encontrar a mi exnovio, y ese no es el camino

para mí ".
Toma un sorbo de su sidra y luego la deja. "¿Quién es Colin?"
¡Ah! Aparentemente ve caras pero no nombres. “Mi novio de la

universidad. Nunca lo olvidé, o eso pensé. Pero luego vino aquí,
y fue como este perfecto momento predestinado, excepto que no
fue perfecto en absoluto ".
Ella toma un bocado de pastel, imperturbable por mi confusión

interior, pero parece que no puedo dejar de balbucear.
"Creo que crees que viste a alguien por mí, de verdad", le digo,
tratando de decírselo con suavidad. “Pero aunque Colin y yo
somos compatibles, quiero decir, él es Libra, hola , no lo amo.
Amo a alguien más, y él significa mucho más para mí que
cualquier profecía, visión o destino. . . "
Mi voz vacila cuando me doy cuenta de lo que estoy diciendo.

No es que pueda amar a Mark. No es que crea que lo amo. No
es que esté tratando de resolver las cosas.
Ya lo he descubierto. Lo descubrí hace tanto tiempo, solo he sido

un idiota, escondiéndome detrás de las bolas de Magic 8 y
obligando a alguien más a tomar la decisión por mí, porque era
más fácil. Es más fácil que una galleta de la fortuna me diga
mi futuro, porque significaba que no podía cometer errores.
"Excepto que hice uno", susurro. "No pude ver lo que ha estado
frente a mí todo el tiempo, y lo amo".
Lo digo de nuevo, más alto, la verdad me hace reír. "Amo a

Mark".
Veo que algunas personas me miran, incluida Erika, que pone

los ojos en blanco desde el otro lado de la habitación pero sonríe
un poco.
Necesito encontrarlo. Decirle. Conquistarlo.

Me levanto y miro a la mujer. “Tenías razón sobre el

aniversario de mis padres. Te lo daré. Pero te equivocaste acerca
de que el amor de mi vida era un ex novio ".
"Yo nunca dije eso." Su voz es clara y firme.
Arrugo la frente. "¿Qué? Si lo hiciste. En la estación de tren, me

dijiste ... "
“Que ya conociste a tu único amor verdadero. Nunca dije que

hubieras salido con él ".
Estoy a punto de decirle que no estoy de humor para discutir

sobre semántica, pero luego las piezas encajan en su lugar.
Ya habías conocido a tu único amor verdadero. Nunca dije que

hubieras salido con él .
Cierro los ojos y me río. "Mark. Estabas hablando de Mark. Todo

este tiempo. . . "
Me río más fuerte, un sonido vagamente loco, pero ella no

parece darse cuenta.
Empuja su plato hacia mí. "¿Puedo comer un poco más de

pastel?"
"Tarta. Quiere pastel ". Me río de nuevo y me dirijo hacia la
puerta.
“Erika, ¿puedes traerle a la mujer otra rebanada de pastel? Te

lo debo".
"¡No arruines esto!" ella me llama.
No tengo la intención de hacerlo.
De hecho, tengo el plan perfecto.

24 de diciembre, tarde
Mi plan es brillante, todavía confío en eso.
Solo hay un problema. Si bien es brillante en teoría , depende

de una cosa que no puedo controlar: Mark debe estar aquí.
Y no está.
Solo me toma una hora conseguir todo lo que necesito, aunque

tuve que rogarle a Jackie en la farmacia que mantuviera la
tienda abierta un poco después de las 5:00 PM, hora de cierre
de Nochebuena, para poder conseguir todo lo que necesito.
Sin embargo, una vez que tuve los suministros, el plan se

completó en cuestión de minutos.
Y luego esperé. Y esperé.
Mark dejó a Rigby por mí, sospecho que para no estar

totalmente sola en Nochebuena, y después de tener todo listo,
me acomodo con el perrito en mi sofá.
Pensé en hacerlo en la casa de Mark, pero el plan realmente

funcionará mejor con un fondo de árbol de Navidad, y Mark
no tiene uno. Será una historia más romántica cuando se lo
contamos a nuestros hijos y nietos.
Yo espero. Yo espero. Debería cenar, pero estoy demasiado

emocionada. Me distraigo con las películas navideñas, pero
mantengo el volumen bajo, con un oído atento a la puerta.
A las nueve en punto apago la televisión por completo y reviso

mi teléfono. Quizás cambió sus planes. Tal vez no está
planeando volver a su casa esta noche después de todo y no vio
mis mensajes de texto.
Quizás necesito ir con él.
Le llamé. No contesta.
Dejo un mensaje (o veinte, ¿quién cuenta?) Diciéndole que

necesito verlo, que es urgente.
Pongo música navideña y espero.
Y espero.
La medianoche va y viene, y trato de divertirme pensando en

Cuento de Navidad y en lo que me dirían esta noche los
fantasmas de la Navidad pasada, presente y futura.
Pasado y presente me llamarían idiota, probablemente.
Sin embargo, no el Fantasma de la Navidad futura. Él o ella

asentía con aprobación a mi plan y me aseguraba que iba a
vivir feliz para siempre con mi mejor amigo y el amor de mi
vida. . . .
A las 2:00 am me encuentro acostado de lado frente al árbol de

Navidad, Rigby acurrucado contra mi espalda.
Mientras Bing Crosby canta “Have Yourself a Merry Little

Christmas”, dejo que las lágrimas caigan al reconocer lo que está
sucediendo aquí.
No viene.
Y esta no es una feliz Navidad.
25 de diciembre, temprano en la mañana
Mark
Apoyo un hombro contra la puerta y contemplo la escena
frente a mí, con una sonrisa jugando en mis labios.
Mi mejor amiga es realmente una adorable idiota.
La cabeza negra de Rigby se levanta cuando me ve, un

pequeño trozo de cola menea salvajemente. Me llevo un dedo a
los labios para decirle al perro que se quede callado y,
milagrosamente, parece entender.
Apoya la cabeza en su pata y se queda donde está, pegado a

la forma dormida de Kelly.
Entrando en la habitación, dejo la bolsa de lona en el suelo y

me acerco a ella.
Lleva pantalones de pijama azul con copos de nieve, calcetines

Grinch y el suéter rojo horriblemente feo que insiste en usar
cada Navidad.
Extiendo la mano para despertarla cuando noto que en lugar
de una almohada, ella apoya la cabeza en su brazo y su brazo
está estirado. . . una pila de cartulina blanca?
¿Qué ha estado haciendo este pequeño bicho raro ahora?
Suavemente le quito los carteles de debajo del brazo y, aunque

hace un ruido somnoliento, moviéndose levemente, no se
despierta.
Veo grandes bloques de escritura, sé inmediatamente lo que

estoy mirando. Una situación de Love Actually .
Debería esperar a que ella se despertara, para hacer esto a su

manera. Pero cuando has esperado diez malditos años. . .
suficiente.
El primer letrero simplemente dice:
Mark .
Lo deslizo a un lado y leo los carteles que siguen.

Se que en lo que respecta a los planes.
Este no es el mas original.
Ni siquiera es mi favorito.
Para que conste, preferiria que vivamos en Londres,
Y que voy de puerta en puerta cantando villancicos.
Pero te gusta estar aquí, y asi . . .
Aquí estoy.
Diciendote en estupidos carteles.
Que Te Amo.
Te amo todo el camino.
Sin dudarlo.
“No lo creo."
Amo la forma en que me miras.
La forma en que me desafías.
La forma en que siempre estas ahi para mi.
Incluso cuando no me lo merezco.
No te merezco.
Yo se eso.
He sido lenta, despistada y ciega.
He buscado el amor en todos los lugares equivocados.

Escuche adivinos en lugar de mi corazon,
Y horoscopos de confianza en lugar de mi corazon.
Ya termine con eso.
Tu y yo estamos destinados a ser.
No porque este en las estrellas.
O una galleta de la fortuna.
Pero porque somos perfectos el uno para el otro.
Tengo mas que decir, pero me estoy quedando sin poster, a pesar de que compre
todo el inventario.
Y porque te amo.
Estoy enamorada de ti.
(Y no te molestes en decirme que es demasiado tarde).
(Te recuperare. Sabes que lo hare).
Todo lo que quiero para Navidad . . .
Eres tu.
Mientras deslizo el último póster a un lado con una mano

ligeramente temblorosa, miro a mi mejor amiga. Kelly está
despierta. Mirándome.
Sus ojos están llorosos mientras me da una pequeña sonrisa.

"Hola. Feliz Navidad."
"Feliz Navidad", le digo, esperando que ella piense que mi voz

es ronca por la falta de sueño, y no porque mis propios ojos
estén peligrosamente cerca de lagrimear.
Se sienta y se pasa la mano por el cabello desordenado. El lado

derecho de su cara está arrugado por dormir torpemente en su
brazo, pero nunca se vio más hermosa.
“Um. . . " Hace un gesto hacia los carteles. “Iba a hacer esto de
manera un poco diferente. Anoche-"
“No recibí tus mensajes hasta ahora,” digo, juntando mis manos
entre mis rodillas mientras me quedo agachada cerca de su
lado. Lo suficientemente cerca para tocarla, pero no lo hago.
Aún no.
"¿Estuviste en casa de tus padres?"
Asiento con la cabeza.
"¿Cómo están?"
Yo sonrío. "¿De verdad quieres hablar de mis padres ahora

mismo?"
Ella ríe. “Bueno, no, prefiero saber lo que piensas sobre lo que
dije. . . lo que escribí . . . " Kelly vuelve a señalar los carteles.
En lugar de responder, me pongo de pie. "Tengo algo para ti."
Rebusco en la bolsa de viaje que traje conmigo, sacando una

bolsa de regalo con rayas rojas y doradas y otro paquete, este
envuelto en un periódico de diez años.
Me vuelvo hacia donde está sentada con las piernas cruzadas
junto al árbol de Navidad, pero antes de acercarme a ella,
presiono play en su iPhone, que está conectado al altavoz. Bing
Crosby o Frank Sinatra (diablos, nunca puedo notar la
diferencia) comienzan a cantar sobre la nieve.
Volviendo a su lado, me bajo a una posición sentada a su lado

y le entrego el paquete de periódicos primero.
Ella me mira con curiosidad. "¿Qué es esto?"
La miro, mi orden clara. Ábrelo .
Ella lo hace, retirando con cuidado el viejo papel de periódico y

mirando el bulto seco y marrón en su regazo.
Me aclaro la garganta, sintiéndome un poco tonto. "Es, ah, un

ramillete".
Ella lo toma con cautela con dos dedos. "Bonito. Um, ¿cuántos
años tiene?
Yo sonrío. "Diez años."
"Explica por qué las rosas no lo lograron".
“Eran rosas, en el pasado. Para combinar con tu vestido ".
“Para combinar. . . " Su voz se apaga y sus ojos van del ramillete
a mí. "¿Mi vestido de graduación?"
Me encojo de hombros nerviosamente, ya no estoy convencida

de que sea una buena idea. “Me armé de valor durante un mes
para pedirte que fueras mi cita. Los dos estábamos solteros para
entonces, y pensé que sería un momento tan bueno como
cualquier otro para contarte cómo me sentía ".
"Pero insistí en ir con mis amigas", susurra, tocando suavemente

un pétalo seco.
Me aclaro la garganta. "Si. Bien. Conseguí esto por si acaso, me

dije a mí mismo que iba a pasar por tu casa, dar el discurso. . . .
"
Cuando levanta sus ojos hacia los míos, vuelven a brillar con
lágrimas sin derramar. "Oh, Mark, si tuvieras ..."
"Podría haber evitado este choque de trenes, ¿eh?" Pregunto,

señalando con la cabeza la pila desordenada de carteles.
Ella se ríe y aprieta el ramillete contra su pecho. "Me encanta."
"Yo estaba pensando . . . " Me aclaro la garganta de nuevo.

Dios, estoy tan fuera de mi elemento aquí. Pero ella lo vale. Ella
siempre ha valido la pena.
Muevo la barbilla hacia el árbol. “Sé que es pequeño, pero

estaba pensando que podría serlo. . . sabes. Para la cima ".
Sus labios se abren con sorpresa, pero la sonrisa que sigue vale
la pena cada momento de mi incómoda incomodidad. "La copa
de mi árbol".
Me encojo de hombros. "No es azul"
"Aguamarina."
Pongo los ojos en blanco. "Sé que no es aguamarina ni blanca,

pero ..."
"Es perfecto", dice, tocando mi mano. "Perfecto."
Yo trago. Uno más para ir. . .
Le arrojo la bolsa de regalo. "Tu verdadero regalo".
Se mete el pelo detrás de la oreja y levanta las cejas. “Lo

envolviste. Esa es la primera vez ".
Niego un poco con la cabeza y Kelly sonríe. "O tu mamá lo

envolvió".
"No me dejaba salir de casa hasta que ella encontrara un

pañuelo de papel a juego".
Kelly levanta con cautela dicho papel de seda de la bolsa y
mira dentro, luego me da una mirada escéptica. Ella mete la
mano y saca una bola Magic 8. "¿En caso de que pierda a los
demás?"
Aquí no pasa nada . Me acerco más a ella y deslizo una mano

hacia la parte posterior de su cabeza, mi pulgar vagando sobre
su pómulo.
Sus ojos se calientan, y aunque no quiero nada más que besarla

— demonios, más que eso — asiento con la cabeza hacia la bola
Magic 8. "Sacúdelo."
"¿Qué pregunta debo hacer?"
Yo soy el que hace la pregunta .

"Agítalo", digo de nuevo.
Ella hace lo que le digo, y yo miro, con el corazón en la

garganta, mientras mira hacia la pequeña pantalla.
Ya sé lo que dice. He pasado en el pasado Dios sabe cuántas

horas desmontando la maldita cosa y hackeándola para decir lo
que quiero que diga.
"¿Mark?" ella levanta sus ojos hacia los míos.
Ella mira hacia abajo de nuevo a la pelota, y yo también. En

lugar de la mierda habitual de sí / no / tal vez, tiene dos
palabras simples:
“Cásate conmigo.”
Ahueco su rostro con ambas manos y lo digo en voz alta.

“Cásate conmigo, Kelly. Y no me importa una mierda que sea
demasiado pronto, porque si hay dos personas que se conocen
por dentro y por fuera, son unas con diez años de historia, la
mayor parte como vecinos y amigos ... "
"Mejores amigos", corrige. "Y co-padres de un bebé peludo".
"Correcto. Entonces, si no lo haces por mí, hazlo por Rigby ".

Sus ojos revolotean por encima de mi hombro. “Tu perro está
junto a la puerta. Tiene que ir al baño ".
“Tu perro puede esperar, maldita sea, y ese es un tema increíble

para un momento como este, Byrne. Responde la pregunta. Y
recuerda todas esas cosas cursis que escribiste en los carteles
cuando respondas ".
Gira un poco la cabeza y me da un beso en la mano. "Tal vez

debería preguntarle a la bola Magic 8".
Estoy anticipando esto. "Quizás deberías."
Parpadea sorprendida, luego baja la mirada hacia la pelota que

aún tiene en las manos y la agita.
No me molesto en mirar hacia abajo. Sé lo que dice.
"Sí", lee. Entonces ella se ríe. "¿Hay una opción de 'no'?"
"Definitivamente no."
"¿Cómo manipulaste una bola Magic 8?"
“Kelly. . . " Estoy muy cerca de suplicar ahora.
Se inclina hacia adelante y besa mi boca. "Sí. Sí, me casaré

contigo ".
Mis ojos se cierran con alivio. Después de una maldita década

de espera, finalmente obtuve lo que quería para Navidad. Lo
que he querido para cada Navidad durante los últimos diez
años.
“Estaba pensando que te compraríamos un anillo juntos. En

Nueva York. Después de buscar un apartamento —digo, entre
besos.
“Me encanta ese plan. Te amo."
"Yo también te amo."

"Oh, eso me recuerda". Ella retrocede. “Vi a la dama. La adivina
de la estación de tren ".
"¿Oh sí?"
Kelly asiente. “Resulta que la escuché mal. Ella no dijo que The
One era un amor pasado, solo que había estado allí todo el
tiempo. Ella estaba hablando de ti ".
La acerco y beso su frente, sonriendo mientras lo hago. "Lo sé."
Fin
Traducido por Belen Chavez

Lauren Layne - Serie Love Unexpectedly - 5 - Un Ex para Navida 2

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Lauren Layne - Serie Love Unexpectedly - 5 - Un Ex para Navida 2

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Un ex para Navidad – Love Unexpectedly #5 – Lauren Layne

Un ex para Navidad – Love Unexpectedly #5 – Lauren Layne

Está haciendo una lista y la revisa dos veces. ¿Pero hay un

Cuando un psíquico le dice a la fiestera y supersticiosa Kelly

Mark Blakely ha visto a los chicos de la lista de Kelly romper

15 de diciembre, viernes por la tarde

Y luego te hiciste mayor y pensaste: “Hombre, esos eran los días.

Consejo profesional: conviértete en maestro de escuela primaria.

Diez minutos más. Solo diez minutos más, y luego no es más

"¡Adiós, Sra. Byrne, Feliz Navidad!"

"Feliz Navidad, Alex". Revuelvo los rizos rubios de la niña de

“Feliz Hanukkah, señorita Byrne. Y Feliz Navidad. Y feliz

“Muchas gracias, Danielle. Disfruta tu descanso, cariño ".

Y ahora estás pensando, espera, espera, espera, ¿es una de esas

Sí. Totalmente lo es. Soy maestra de tercer grado en Emory

estudiantes tienen padres semi-famosos. La otra mitad son

Pero no te atrevas a ser todo un snob al revés conmigo, porque

Por ejemplo, el otro día les expliqué cómo solía ir y volver de la

El último niño en salir por mi puerta es Madison Meyers, una

Resisto la tentación de tocar mi propio cabello rubio

Se estira y se quita la mochila de piel sintética (o tal vez no tan

Empujando su diadema roja brillante más atrás en su cabello

"Hice esto para ti", anuncia, lanzándomela. "Bueno, Sarah y yo".

Sarah es la niñera de Madison. O al menos lo era, tengo que

"Gracias", le digo, levantando con cuidado el regalo. Me muevo

Le doy la más mínima sacudida y el fajo se despliega, junto con

Ohhhhh . "¡Un copo de nieve! Es hermoso, Madison ".

"Lo sé." Empuja de nuevo su diadema. "No estaba satisfecha con

Escondo cuidadosamente mi sonrisa. “Bueno, tu arduo trabajo

Ella sonríe y aplaude en un gesto práctico que he visto hacer a

"Felices vacaciones, Madison".

Una de las ventajas de trabajar en una escuela privada es que

Madison sale corriendo de la habitación y Jackie Reyes asoma

Jackie, una amigable coordinadora de cuarenta y tantos años

Ella desaparece de nuevo, y miro hacia mi copo de nieve

No es que no ame mi trabajo. Lo hago. He querido ser profesora

¿Pero mi vida personal?

Estamos flotando en la región de con suerte, 3.

Dos semanas para concentrarme en mí es exactamente lo que

Bueno, eso y el ponche de huevo borracho.

Y el disco navideño de Michael Bublé.

¿Y tal vez algo alto, moreno y guapo para sostener mi mano

Tarareando “Let It Snow”, me pongo a trabajar ordenando mi

Por un segundo, considero quitar algunas de las decoraciones

para limpiar que matar mi mojo navideño incluso antes de que

En cambio, ordeno mi escritorio lo suficiente para que la

Estoy cerrando los gabinetes, mi selección de canciones ahora en

Me doy la vuelta y veo a Jessica Trenton, maestra de primer

Tiene un bonito regalo envuelto en oro en la mano, una maleta

"¿Ves? Te dije que tu vuelo no sería cancelado ”, le digo.

"Sí, tenía una fe inmensa en tus hojas de té", dice.

"¡Y sin embargo tenían razón!" Hago un gesto hacia la ventana.

"Punto justo. ¿Sabes que tienes brillantina en las tetas? "

“Peligros de tercer grado,” digo, deslizando inútilmente el brillo.

"Te escucho. Encontré un recipiente abierto de Elmer en mi bolso

“¿Llevas pegamento en tu bolso? Muy rudo ".

“Yo no lo puse allí. No sé cuál de los pequeños monstruos logró

"¿La dulce pelirroja?"

“Solo dices eso porque su papá es sexy. Ella es bestial ".

“Estoy de acuerdo con mi política de raritos,” digo, sacando una

"¿ O simplemente extiende la temporada?" Jess se burla,

Aprieto mis labios. No es un punto terrible. Y realmente podría

"Preguntémosle a Magic 8", proclamo.