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3.ª edición
ELSEVIER
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INFORMATICA
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BIOMEDICA 3.ª edición
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melchorsm@unam.mx
adrianfile@gmail.com
Facultad de Medicina
ELSEVIER
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IN DICE DE CAPITULOS
ix
X ÍN DICE DE CAPÍTULOS
«Cualquier médícó
OBJETIVO que pueda ser
reemplazado por
Analizar el concepto actual de Informática Biomédica y su importancia en la salud de la población.
una computadora
merece serlo.»
WARN ER V. SLACK
IN TRODUCCIÓN
Imagine cómo sería su vida sin las computadoras ni las tecnologías de información y comunicación
(TIC). ¿Qyé implicaría esta hipotética situación? ¿Puede imaginar una sociedad moderna funcional sin
la presencia ubicua -visible o no- de las computadoras y la tecnología? No hay faceta de las actividades
del ser humano en el siglo XXl que no utilice de alguna manera la búsqueda y aplicación de datos e
información. Ejemplos abundan: instituciones bancarias, agencias de viajes, vuelos en avión, estudios
universitarios, la búsqueda de pareja y, por supuesto, la atención y cuidado de la salud, entre muchos otros.
En la actualidad es imposible aprender y practicar la medicina moderna, así como planear y desarrollar
investigación básica o clínica de calidad en ciencias de la salud, sin el uso efectivo de las tecnologías de la
información para el procesamiento de datos y la generación de conocimiento. La sociedad espera de los
profesionales de la salud que estén capacitados en el uso de la tecnología para proporcionar atención
de calidad, y los pacientes emplean cada vez con más frecuencia la Red y la información disponible para
convertirse en una nueva generación de consumidores informados de su atención médica.
En este capítulo se ofrece un panorama general de la Informática Biomédica (IB) y se analiza
la evolución de su definición y las perspectivas futuras de esta disciplina.
Usted se encuentra en la sala de urgencias de un hospital de segundo nivel de atención en la provincia y recibe
a una mujer de 25 años de edad con embaraw de 38 semanas que acude por dificultad para respirar. Tiene una
evolución de 3 días con rinorrea, tos, fiebre, dolor de garganta, malestar general y dolor muscular, así como
el antecedente de contacto reciente con un caso de infección por virus de influenza HlNL
A la exploración física la paciente tiene fiebre de 39 ºC, frecuencias cardíaca y respiratoria de 110/min
y 30/min respectivamente, presión arterial normal, saturación de oxígeno del 88% y el latido cardíaco fetal es
de 160/min. Muestra datos de dificultad respiratoria con cianosis peribucal, tiros intercostales y estertores
alveolares en ambas bases pulmonares. Usted hospitaliza a la paciente y solicita es tudios de laboratorio
y gabinete para poder tomar decisiones cünicas informadas.
El caso presenta múltiples retos para la obtención efectiva y eficiente de datos e información, los cuales
tienen implicaciones informáticas para su adecuado manejo epidemiológico, diagnóstico y terapéutico:
0 Disponibilidad inmediata de la historia clínica obstétrica previa.
e, Información epidemiológica, clínica y de laboratorio del contacto con HlNl,
e, Registro y captura de los datos clínicos de la paciente en el servicio de urgencias y su disponibilidad
durante el resto de la estancia hospitalaria o para su traslado a un tercer nivel de atención.
0 Procesamiento rápido, disponibilidad e in terpretación de los estudios de laborato rio y gabinete.
0 Reporte adecuado y oportuno a los sistemas de vigilancia epidemiológica locales y nacionales.
© 2018. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos
2 INFORMÁTICA BIOMÉDICA
Cienci as
cognitivas, Bioingeni eria
toma de
decisiones Informática
Biomédica
Epidemiología
Ciencias y estadística
administrativas
Ciencias
Ciencias
biomédicas
clínicas
básicas
FIGURA 1. 1 Esquema de las diferentes ciencias y disciplinas que confluyen en la Informática Biomédica. (Adaptado a partir
de un diagrama provisto por la American Medica/ lnformatics Association [AMIA], abril de 2017. Reproducido por cortesía de la AMIA
y del Dr. Edward Shortliffe.)
un enfoque demasiado restrictivo. Esta categoría de definiciones tiene dos consecuencias negativas:
lleva a introducir el uso de las computadoras en todos los puntos posibles para resolver problemas
en medicina («si lo que tienes es un martillo, todo te parece un clavo»), cambiando el objetivo de
mejorar la calidad de la atención médica por el de «computarizar» el sistema de salud, lo cual no
necesariamente es bueno sin una estrategia integral con visión de largo plazo; y la segunda, quizá
más importante, es que estas definiciones no contienen los conceptos más importantes del uso de la
IB que no recurren a las computadoras, como los procesos cognitivos de razonamiento clínico, las
heurísticas que los profesionales de la salud utilizamos en las decisiones diagnósticas y terapéuticas,
los flujos de trabajo en los ambientes clínicos, los factores de ingeniería humana para la prevención
de errores en medicina, entre otros.
o Definiciones basadas en roles, tareas o dominios: esta categoría se centra en la función de la
informática dentro de las organizaciones; por ejemplo, informática de enfermería, informática de
salud pública e informática clínica. La desventaja de esta definición es que tiende a fragmentar la
disciplina de la IB y sus interacciones entre los componentes del equipo de salud (médico, veterinario,
enfermera, salubrista, ingeniero, odontólogo, administrador, laboratorista), e implica que los proyectos
de informática elaborados solo serán aplicables y relevantes al área en que se generaron.
o Definiciones orientadas a conceptos: se dirigen a modelos conceptuales específicos, como el de datos,
información, conocimiento y sabiduría (Ackoff, 1989). Estas definiciones se enfocan en conceptos
más amplios e importantes que las herramientas; el inconveniente es que en ocasiones pueden ser
definiciones muy complejas y no lo suficientemente detalladas para operacionalizarse y ser entendidas
"= por los usuarios (Tabla 1.1).
:ª
'O
Para fines de este libro se usará la definición de la American M edica! Informatics Association (AMIA,
g www.amia.org), la organización más importante del mundo que agrupa a los expertos de esta disciplina:
" «Informática biomédica es el campo científico interdi sciplinario que estudia y persigue el uso efectivo
.i de datos, información y conocimientos biomédicos, para la indagación científica, la solución de pro-
g- blemas y la toma de decisiones, motivada por los esfuerzos para mejorar la salud humana» (Kulikowski
B et al., 2012; Shortliffe, 2010). Esta definición es una de las más aceptadas por los organismos académicos
internacionales que se dedican a la investigación y aplicación de la disciplina, y combina las categorías
-~ de rol, tarea o dominio con la orientada a conceptos (datos, informac ión, conocimiento). Consideramos
que la taxonomía de datos-información-conocimiento-sabiduría tiene la suficiente importancia como
@ para dedicar un capítulo de este libro al tema (capítulo 2).
4 INFORMÁTICA BIOMÉDICA 7
TABLA 1. 1 Algunas definiciones de Informática Biomédica
Autores
G rNme$ y ShortlifTe, 1990
Deflnlclón
Ca'.npo que _se OC\1p• de lns tarens cognitivas, de procesamiento
d~ mfo~nnnón y de comunicaci6n de b prJctica, educación
Categorfa
Basad:1 en dominio,
y r.ueas
-
e 11 wcst1gaci6n médirns, incluyendo las ciencias de l:1 información
J' la tecnología parn apoyar estas tareas.
Shortliffe y Blois, 20 14 Campo científi co que se ocu pn de la in fo rm ación, los datos Orientada
Y el conocimiento biomédicos, y su alm acenamien to, recuperación a concepto~
Yuso óptimo para resolver problemas y tomar decisiones.
Van Bemmcl, 1984 Comprende los aspectos teóricos y prácticos del procesa miento Y Basada en dominios
la comunicación de la información basados en el conocimiento y rareas
Yla experiencia derivados de los pr~cesos en medici na y el cuidado
de la salud .
Van Bemmel En la informática médica se desarrollan y evalúan métodos Basada en roles,
y Musen, 1997 y sistemas para la adquisición, el procesamiento y la interpretación tareas y dom inios
de datos del paciente con ayuda del conocimie nto que se obtie ne
en la investigación científica.
Wikipedia, 2017b Es la aplicación de la informática y las comunicaciones al área de O rientada
la salud mediante el uso del software médico, form ando parte a tecnología
de las tecnologías sanitarias. Es la intersección de las ciencias de la de la información
información, las ciencias de la computación y la atención de la salud.
Se ocupa de los recursos, los dispositivos y los métodos necesarios
para optimizar la adquisición, el almacenamiento, la recuperación
y la utilización de la información en salud y biomedicina.
Bcmstam et al., 2010 Es la ciencia de la información en la cual esta se define como Orientada
datos con significado. Informática biomédica es la ciencia a conceptos
de la información aplicada a, o estudiada en, el contexto de
la biomedicina.
El grupo de trabajo de la AMIA agrega los siguientes cuatro corolarios a la definición anteriormente
anotada (Kulikowski et al., 2012):
l . La IB desarrolla, estudia y aplica teorías, métodos y procesos para la generación, almacenamiento,
recuperación, uso y compartición de datos, información y conocimientos biomédicos.
2. La IB aporta y potencia a las ciencias y tecnologías de la computación, de la comunicación y de la
información para su aplicación en medicina y ciencias biomédicas.
3. La IB investiga y apoya el rawnamiento, el modelaje, la simulación, la experimentación y la trans-
lación a través de todo el espectro de moléculas a poblaciones, tratando con una variedad de sistemas
biológicos y construyendo puentes entre la investigación básica clínica y la práctica en los sistemas de
atención de la salud.
4. La IB utiliza las ciencias sociales y de la conducta para informar el diseño y evaluación de soluciones
técnicas y la evolución de sistemas complejos económicos, éticos, sociales, educativos y organizaciona-
les, reconociendo que los usuarios de la información biomédica en última instancia son seres humanos.
La página de Internet de la AMIA contiene una sección dedicada a «la ciencia de la informá-
tica» donde puede obtenerse una presentación en PowerPoint del modelo conceptual propuesto:
h ttp://www.amia.org/abo ut-amia/science-informatics.
La Figura 1.2 muestra de manera gráfica la 1B en perspectiva, mostrándola como un continuo extenso,
desde el aspecto más básico con sus respectivas teorías, métodos y técnicas (lo que la hace ciencia per se)
hasta sus interacciones bidireccionales con las diferentes aplicaciones en las ciencias de la salud (desde
la bíoinformática hasta la salud pública) en el creciente espectro de procesos moleculares a aplicaciones
poblacionales (Kuhn et al., 2008; Kulikowski et al., 2012; Shortliffe y Blois, 2014).
Es importante aclarar que "bioinformática» se refiere específicamente a la informática biomolecular
con aplicaciones en genómica (capítulo 30) y que lo que antes se llamaba «informática médica» ahora se
refiere como informática clínica, por lo que el término «Informática Biomédica» usado en este libro cubre
las dos y, aún más, incluye la informática en enfermería, en salud pública, etc. Otro término que también
se emplea en el área es «informática en salud» (health infarmatics, e-health), que generalmente engloba
la informática clínica y la informática en salud pública (Hersh et al., 2010; Shortliffe y Blois, 2014).
CAPÍTULO 1 INTRODUCCIÓN A LA INFORMÁTICA BIOMÉDICA S
También vale la pena sefialar que la disciplina de 1B tiene límites indefinidos; por ejemplo, la farma-
cogenómica, en la que se superponen _la_ inform:í_ti ca cl1~ica y 1~ ~ioinf~rmática; las_ imáge~es bio~o-
leculares, en las cuales se mezclan la b10111formáttca y la mformattca de tmagenologia; y la mfo rm áttca
del consumidor de servicios de salud, en la que se combinan la info rm áti ca clínica y la informática de
salud pública. Al superponerse varias de las disciplinas sefialadas en la Figura 1.2, las fronteras que las
dividen se convierten en un blanco móvil que fluye de manera permanente de acuerdo con los avances
de las diferentes ciencias, como un todo en el que los componentes se nutren y potencian entre sí, un
sistema complejo adaptativo y dinámico (Shortliffe y Blois, 2014; Stead et al. , 2011).
Se remite a los lectores interesados en la historia de la IB al tratado de Edward Hance Shortliffe
(Shortliffe y Blois, 2014) y a la siguiente fuente en la Red: http://www.m c.vanderbilt.edu/dbmi/
bmigradprog/background.html.
El lector puede consultar a Bernstam et al. (2010) para una discusión más amplia sobre las di-
ferentes implicaciones de la definició n moderna de IB. El texto ofrece varias perspectivas que
propician una profunda reflexión sobre el tema, entre ellas la distinción clara de la IB con campos
como la ciencia de las computadoras y la inteligencia artificial; la brecha que separa a los seres hu-
manos de las computadoras, con énfasis en la superioridad del ser humano sobre la máquina; y la re-
levancia educativa del estudio de la información, además de otros aspectos importantes (Bernstam
et al. , 2010).
.s
c..
8 Procesos
Tejidos
8 celulares y Individ uos Poblacio nes
& moleculares y órganos (pacientes ) y sociedad
..:
-~ 12
FIGURA · ES.quema conceptual de la Informática Biomédica y sus múltiples relaciones con los espectros de la investigación
¡;¡ Y de la com_ple¡,dad de los sistemas biológicos. {Adaptado de un diagrama provisto por la American M edica/ lnformatics Association
© [AMIA] , abnl de 2017. Reproducido por corres/a de la AMIA y del Dr. Edward Short/iffe.)
6 INFORMÁTICA BIOMÉDICA
7
Para la solución del problema clínico descrito se requieren algunas piezas fundamentales: la repre-
sentación de datos, información y conocimiento; el almacenamiento y recuperación de la información
(tanto de la estructurada corno de la no estructurada); el procesamiento de las señales; el análisis de
decisiones; los sistemas expertos (naturales y artificiales); el diseño de la interfaz de la tecnología con el
usuario; y los diversos estándares para tener una comunicación y un funcionamiento fluidos y efectivos
en la atención médica .
La c.iencia de la IB tiene múltiples áreas de aplicación en la atención de la salud, incluidas las si-
guientes:
• Modelos biomoleculares, medicina genómica.
• Sistemas de archivo y transmisión de imágenes (PACS, picture archiving and communications system)
digitales.
O Sistemas de cardiología.
0 Sistemas de información de laboratorios clínicos y de investigación.
GI Herramientas educativas.
La 1B se ha convertido en uno de los pilares de la atención médica de calidad en varias partes del
mundo y existe el consenso de que aún es dolorosamente subutilizada en países tanto desarrollados
como en vías de desarrollo (Kuhn et al., 2008; Shortliffe y Blois, 2014); en consecuencia, es necesario
promover su conocimiento a todos los niveles de las instituciones educativas y de salud, iniciando
desde la formación de pregrado y continuando en el posgrado (Hersh et al., 2010; Sánchez-Mendiola
et al., 2011, 2013; Shortliffe, 2010). El crecimiento e incorporación de la 1B en la práctica de la medicina a
nivel internacional ha avanzado al grado de que, en el año 2011, el American Board ofMedical Specialties
de Estados Unidos aprobó la 1B como una nueva especialidad clínica. Lo anterior ocurrió después de un
largo y complejo proceso que legitimó esta disciplina ante la comunidad médica internacional y que ha
llevado a la elaboración tanto de las competencias nucleares de IB necesarias para impartir educación de
posgrado en la disciplina como de los exámenes para certificar a médicos con la especialidad (Kulikowski
et al., 2012).
En la actualidad existen varias fuerzas que impulsan el desarrollo y crecimiento de la IB:
Ahora imagine el siguiente desenlace del caso clínico, analícelo y reflexione sobre él:
o Resultó imposible conseguir el expediente obstétrico previo de la paciente y fue necesario integrar
un nuevo expediente en papel, en el que capturó otra vez la información para enviarlo a la sala de
hospitalización.
o Los estudios de laboratorio y gabinete se realizaron y tuvo que recogerlos personalmente en diferentes
lugares del hospital y a distintas horas, con la pérdida de tiempo que ello implica.
o El acceso a Internet es deficiente, así que no pudo enviar el reporte al sistema epidemiológico local
de manera oportuna; tan solo se limitó a escribir un documento en el formato en papel que remitió
a la instancia administrativa correspondiente.
o Al no tener información científica reciente y de calidad disponible electrónicamente, y con la biblioteca
del hospital cerrada por ser de noche, solo dispuso como fuente de consulta de una edición antigua
del Harrison de medicina interna.
et Pidió consulta con el ginecólogo y el infectólogo del hospital, quienes no estaban disponibles por el
momento (les dejó un recado escrito en el puesto de enfermeras).
o Ante este escenario, usted decidió solicitar el traslado de la paciente a otro hospital para su atención
médica apropiada, lo cual lo obligó a escribir una nota e indicaciones de traslado en un formato en
papel (lo que requiere capturar de nueva cuenta toda la información porque el expediente y las notas
que se generaron al ingreso se quedarán en el archivo del hospital).
·,:;
-'5 Ahora discuta con sus compañeros sus experiencias person al es con el sistema de salud (como paciente,
lí
·e como familiar de paciente y como profesional de la salud) y las implicaciones que percibe para el uso de
2
¡¡ la IB en escenarios similares.
-~ En conclusión, es necesario incorporar de manera razonada la IB en nuestros procesos de atención
l
de la salud, y los profesionales de la medicina deben adquirir las competencias necesarias en este campo de
la ciencia.
&
... Referencias
..:
·,:
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8 INFORMÁTICA BIOMÉDICA
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COMUNICACIÓN,
ESTÁNDARES
E INTEROPERABILIDAD
Fabián Fernández Saldívar / Esteban Arrangóiz Arechavala /
Manuel Millán Hernández
«La comprensión
OBJETIVO mutua sería
Describir los elementos necesarios para el manejo de información en sistemas relacionados
enormemente
facilitada por el
con las ciencias de la salud: comunicación, estándares e interoperabllldad.
uso de una lengua
universal.»
N IKOLA TESLA
IN TRODUCCIÓN
Como se describió en capítulos anteriores, la Informática Biomédica implica el manejo y uso de infor-
mación para lograr establecer elementos de certeza en la toma de decisiones y la solución de problemas
en medicina. Para este capítulo se analizaron diversos modelos teóricos que describen la importancia
de procesar adecuadamente los datos que provienen del entorno, para convertirlos en información
que potencialmente tenga la capacidad de brindar la comprensión o el aprendizaje de un fenómeno
relacionado con las ciencias de la salud. De este modo, entendemos que, cuando existe esta comprensión,
se tiene el potencial de predecir el comportamiento del fenómeno de estudio ante la variación de los
factores implicados, es decir, de adelantarse a los resultados posibles luego de intervenir y así poder elegir
el resultado más favorable: una decisión médica acertada. Por esta razón, la optimización del sistema de
información dentro del fenómeno de la comunicación puede proporcionar una ventaja considerable en
la solución de problemas.
Es evidente que existen diversos niveles de incertidumbre en la toma de decisiones en medicina,
dependiendo del número de variables relacionadas, las consecuencias de la decisión que se va a elegir,
los costos implicados, el tiempo disponible para seleccionar una solución, y todo esto está estrechamente
relacionado con la cantidad de información disponible; de este modo, mientras más información acertada
se logre obtener respecto al comportamiento de un sistema, menor será la incertidumbre de los posi-
bles resultados. A continuación, analizaremos la estrecha relación entre la información y el proceso de
comunicación.
Dos pacientes adultos que presentan múltiples lesiones secundarias a un accidente automovilístico acuden
para recibir atención médica al servicio de urgencias de un hospital de segundo nivel. Al intentar realizar el
interrogatorio de primer contacto, el personal de salud se percata de que los pacientes son sordomudos, lo
cual dificulta el proceso de atención médica. (¿Usted qué haría para brindar la atención?) El médico adscrito
a cargo de la guardia le indica a su equipo de trabajo que navegue en Internet para consultar herramientas
que les ayuden a traducir el lenguaje de señas y poder realizar el interrogatorio.
En el caso descrito resulta evidente la necesidad de expresar y comprender las manifestaciones presentes
en el proceso de salud-enfermedad y la importancia de las tecnologías como elementos potenciadores de
las capacidades humanas, para poder ver, escuchar, expresar y entender más allá de nuestras posibilidades;
en la actualidad, las tecnologías de la información y comunicación (TIC) y los estándares representan un
elemento indispensable en el proceso de atención médica, desde la obtención, almacenamiento y manejo
de los datos, hasta la interoperabilidad para su intercambio y uso en la toma de decisiones.
Dchemus consielcmr que los sistemas de comunicación que integran la toma de decisiones en medicina
numcntnn ele c:omplejidnd al agregar otros elementos de por medio, como sistemas automáticos de manejo
y nn~lisis ele in fo rm ación, sistemas ele t·elecomunicacioncs y sistemas de alm ace namiento y difusión,
~ntrc otros. De este modo, se d~l~c anali za r el fcnóm ~no de cormrni cación _en lo_s sistemas tecnológicos
111vol11crados en la toma de dec1s1oncs para los profcs1onales de la salud e 1dcnt1ficar la importancia de
estable'.'~r estñ~1?arc ~ entre h~manos-humanos, hum anos-máquinas y máqu inas-máquinas para lograr
transmitir y ut1h z.ar 111formac1ón.
COMUN ICACIÓN
Exi sten múltiples niveles de interacción entre los sistemas que competen a la Informática Biomédi ca,
y en todos ~ll_os existe m_1 potencial intercambio de información que puede aportar elementos en la
~oma de dec1s1ones; por e_¡emplo, la composición molecular en el material genético de un paciente, al ser
interpretada_ adecuad~mente, puede proporcionar información respecto a la probabilidad de desarrollar
acondroplasia produc'.d~ por las mutaciones c. l 138G >A (p.Gly380Arg) 0 c.1138G > C (p.Gly380Arg)
del FGFRJ (?antillan-Garzón et al., 2015), como si se tratara de un mensaje codificado en el material
geneti~o del paciente, con el potencial de ser comprendido una vez que se descodifique en términos
entend1bles para los médicos.
Ejemplificad_o en_ otro nivel, un hombre de 22 años de edad acude a consulta para conocer la probable
causa de d?s ep1sod1?s de pérdida de conciencia. La historia clínica del paciente describe antecedentes
de convuls10nes febnles cuando era niño. Los resultados del examen neurológico, el electrocardiograma
)' la tomografía computarizada fueron normales. También se realizó una prueba de inclinación de 80º
)' sus resultados fueron compatibles con el diagnóstico de síncope vasovagal (Noguera Alfonso et al., 2007).
En este caso se puede identificar cómo la información relevante se encuentra en un mensaje codificado
)' almacenado años atrás en la historia clínica del paciente y en los estudios realizados.
El proceso de intercambio de información ha sido descrito en diversos modelos de comunicación pro-
puestos por autores como Lasswell, quien plantea las siguientes preguntas para identificar los elementos
presentes: ¿quién dice qué? -emisor/mensaje-, ¿en qué canal? -medio-, ¿a quién? -receptor-
)' ¿con qué efecto?-reacción/decisión- (Lasswell, 1985).
Imaginemos a un médico analizando los estudios de un paciente preguntándose: ¿qué me tratan de
decir todos estos hallazgos clínicos? Le sugerimos al lector que relacione estas preguntas con los escenarios
clínicos descritos e intente identificar los elementos de comunicación y las potenciales causas de errores
en todo el proceso, derivando en la toma de decisiones equivocadas o acertadas.
Como Sajid Lonngi menciona, «la comunicación es una actividad de intercambio de información
entre dos o más participantes que transmiten o reciben significados a través de un sistema compartido
de signos y normas semánticas» (Lonngi, n.d.). Es interesante reflexionar que muchos pacientes envían
múltiples mensajes al médico aun sin la intención de hacerlo, por ejemplo, mediante la manera en que
describen elementos subjetivos u objetivos, o mediante el análisis del laboratorio; del mismo modo, si un
médico no puede ocultar su reacción al estar revisando los resultados del laboratorio frente al paciente,
puede estar enviando mensajes de certeza o incertidumbre sin darse cuenta.
Finalmente, Lonngi describe tres categorías de sujetos principales en las que se puede clasificar la
comunicación en general: los seres humanos (lenguaje), los organismos vivos (biosemiótica) y los dis-
positivos de comunicación habilitados (cibernética). En nuestro contexto, los tomadores de decisiones
en las ciencias de la salud pueden actuar dependiendo de la información que procede de los pacientes, de
sus pares, de investigadores y científicos, del análisis computarizado de dispositivos tecnológicos e incluso
de fenómenos holísticos relacionados. De este modo, la complejidad del análisis de los fenómenos de
comunicación resulta ingente; sin embargo, en este capítulo nos centraremos (desde la perspectiva de la
Informática Biomédica) principalmente en los elementos de cibernética que intervienen en el proceso
de intercambio de información en ciencias de la salud.
Nuestra limitación para predecir el resultado futuro de las acciones tomadas hace complicada la toma
de decisiones, pero la información disponible de los posibles resultados disminuye la incertidumbre;
de este modo, integrar un análi sis probabilístico entre los factores de error en la transferencia de los
mensajes y la capacidad de predecir los efectos que un mensaje puede causar 1se convierte en un elemento
'Como el propuesto por Weaver y Sh annon (1 964), teoría de la inform ación o teoría matemática de la comunicación, quienes
establecieron los _principios para el manejo auto matizado de información codificando mensajes matemáticamente en su obra
Recm t Contnbullons lo The Mathmwticnl Theory oJC0111111unimtion.
CAPÍTU LO 3 COMUNICACIÓN , ESTÁNDARES E INTEROPERABI LIDAO 19
Fuentes de ruido
Situación o contexto
Situación o contexto
del em iso r
del receptor
FIGURA 3. 1 Esquema del modelo de comunicación adaptado del diagrama esquemático de un sistema general de comunicación .
(Adoptado de Shonnon. 200 / .)
re-: generalmente tiene una capacidad limitada para recibir todos los datos enviados por el en1isor y logra
recibir adecuadamente solo algunos; esta cantidad de info rmación que un receptor tiene la capacidad de
"
-~ 'Vale la pena aclarar que el fe nómeno de com unicación puede se r comp lejo y dinám ico, considerando que también el personal de
it primer contacto o los médicos tratantes se convierten en em isores de in formación (p. ej. , emiten el mensaje de que desconocen
W el lenguaje de señas) ; sin embargo, manrend rcmos los ejemplos de los concept os mci1¡:ionad" s relacionados con los elementos
(Q) más representati vos por sentido común.
20 INFORMÁTICA BIOMÉDICA
percibir se conoce como «capta•. En una consulta médica, por ejemplo, el paciente (emisor) provee de
datos al médico tratante (receptor), quien debe descodificar la información que llega a él de manera verbal,
mediante la ex-ploración física o exámenes de gabinete o de laborato rio. Los errores de comunicación
que pueden derivar de parte del receptor están asociados con la incapacidad de descodificar el mensaje
por falta de contexto, desconocimiento de la codificación, actitud inadecuada debido a prejuicios, falta
de empat:ía o voluntad e incapacidades físicas, entre otros . En los escenarios clínicos es común el error
de cierre premat1.1ro en los diagnósticos, un fen ómeno que limita a los médicos para que amplíe n el
contexto de la infom1ación analizada de un paciente con datos adicionales (a pesar de que estos datos
puedan estar disponibles), ignorando de este modo posibilidades O resultados relevantes en el proceso
diagnóstico. Este error se atribuye al médico como receptor, al limitar su capacidad de integrar la mayor
cantidad de información disponible en su generación de diagnósticos. .
El contexto donde se desarrolla la comunicación se denomina «situación o marco de referencia",
y es el conjunto de circunstancias que afectan tanto al emisor como al receptor condicionando la inter-
pretación del mensaje . Las circunstancias involucradas pueden tener una connotación política, social,
cultural e incluso ~emporal; por ejemplo, cuando un paciente proveniente del municipio de Zinaca~tán,
en el estado de Chiapas, en México, quien únicamente habla la lengua tzotzil, se encuentra en una umdad
de atención médica en Ciudad de México y recibe una explicación por parte del personal de enfermería
respecto a la suministración de su tratamiento después de presentar un probable cuadro de influenza. En
este caso, resulta evidente que la diferencia en el contexto cultural, social, político e incluso religioso entre
el personal de enfermería (emisor) y el paciente (receptor) representa un reto en la transmisión eficiente
de la información. En este caso, al igual que en el caso clínico del inicio del presente capítulo, es posible
conocer el estándar utilizado en la codificación establecida por el emisor con ayuda de herramientas
tecnológicas, por ejemplo, traductores.
En un sentido más general, el objeto de la comunicación es la transmisión de un mensaje, definido
como la secuencia de signos, símbolos o señales que el emisor elabora y envía a uno o varios receptores
a través de un canal de comunicación. Cuando el mensaje aporta elementos de utilidad que el receptor
logra identificar o contextualizar, entonces el mensaje se considerará como información. Como describe
la Norma Oficial Mexicana NOM-024-SSAJ-2012, la información (en el contexto clínico) proporciona
elementos relevantes para la salud o el tratamiento de un paciente y se registra por o en nombre de un
profesional de la salud; puede incluir información del paciente, de los familiares o del entorno. Im-
plica la codificación de datos (como potencial información, conocimiento y evidencias) relacionados
con la generación, acceso, difusión y uso del personal, servicios, recursos, afiliados, derechohabientes,
beneficiarios, pacientes, tratamientos y resultados dentro del sector salud. Incluye indistintamente
información estadística, epidemiológica y financiera {Secretaría de Salud, 2012).
La representación de una idea o fenómeno contenido en el mensaje mediante un vocabulario o
conjunto de signos y símbolos no arbitrarios se denomina «codificación». Esta codificación permite
también el almacenamiento del mensaje, como es el caso de libros de texto (codificados con letras), bases
de datos, documentos, publicaciones, historias clínicas, imágenes radiológicas, etc. En general, hay dos
niveles de codificación de estos datos médicos: la abstracción y la representación. La abstracción implica
la exploración de los datos registrados y su asociación con una terminología o etiqueta que los describa
de forma general y breve. Por ejemplo, a un paciente que fue admitido en el hospital y cuenta con un
largo y complejo historial médico, con fines de facturación y administración, puede referírsele únicamente
con un diagnóstico de infarto de miocardio, o «121», reduciendo el conjunto completo de información
a un código único. La representación, por otro lado, busca codificar tanto detalle como sea posible;
por ejemplo, incluir en extenso un registro médico con los códigos para cada hallazgo físico, examen
de laboratorio realizado y medicamento administrado. Estas codificaciones facilitan la comunicación
y el intercambio automático de información entre sistemas. Cuando dos o más tecnologías, sistemas o
componentes tienen la capacidad para intercambiar información y usarla, se dice que tienen el atributo
de interoperabilidad (Ojeda, 2017). La capacidad de generar sistemas interoperables ha implicado un
avance considerable en el manejo eficiente de la información, integrando diversas organizaciones con
objetivos consensuados y comunes, obteniendo beneficios mutuos.
Para ejemplificar la relevancia de la codificación en medicina, imaginemos cómo sería trabajar en un
hospital donde cada paciente tuviera una historia clínica con datos en diferentes sistemas de unidades,
es decir, en el que algunos pacientes tuvieran el registro de su talla expresada en centímetros, otros en
yardas y unos más en pulgadas; la temperatura de unos en grados Fahrenheit y la de otros en grados centí-
grados, y el peso, en kilogramos o libras. Esto generaría una gran confusión, problemas de comunicación
_ _ _ _ _ __ CA
_· E
_s_
rA_'N_D
_A_R_Es_E_1_
Por esta razón son necesarios normns o acuerdos que permitan el uso de la mi sma codificación entre
diferentes sistemas para incrementar la posibilid ad de transmitir y obte ner datos médicos con menor
probabilidad de errores, por ejemplo, pílrn compartir In información de los pacientes entre diversas ins-
tituciones medi!lntc e.,pedientes clínicos electrónicos.
Integrar la capacid ad de comunicación entre di fe rentes tecnologías para el intercambio y uso de
díltos de fo rma eficn, precisa y sólida requiere una codificación cntendible por parte de todos los sis-
temas implicados en el proceso, es decir, una codificación estandarizada, normada o regulada para poder
funcionar (Organización P!lnamerirnna de la Salud, 2011). Además de fac ilitar el manejo e intercambio
de la información, los estándares deben considerar la seguridad de la inform¡¡ción, garantizando la con-
fidencialidad o propiedad por la que la información no estará disponible y no será revelada a individuos,
entidades o procesos sin autorización.
Organismos de estandarización
Clasificación Internacional de Enfermedades
Revisada por la OMS, la CIE-10 (o ICD-10 en inglés) se publicó en 1992. Consiste en una codificación
de una letra y dos dígitos seguidos de un punto y un tercer dígito que proporciona un nivel adicional
.§ de detalle, por lo general, .Oa .7, que se utiliza para especificar otras formas del término principal; .8, que
::g:: suele referirse a «otro», y .9, que designa «sin especificar» (Cuadro 3.1). Los términos tienen una es-
: tructura jerárquica, como se muestra en el Cuadro 3.1, que indica la clasificación específica de las neu-
,g" monías debidas a otros microorganismos infecciosos.
-~ Puede consultarse desde diversos catálogos disponibles en Internet o directamente en la página web
·~ dela OMS.
:,
"'
-~ SNOMED
.g_ Contiene los términos para más de 344 000 conceptos. SNOMED CT (c!inical termi110/ogy, terminología
clínica) permite agrupar un alto nivel de detalle, descripciones de los conceptos en múltiples idiomas,
extensibilidad con términos locales, defini ción de subconjuntos, etc. Intenta abarcar todo el espectro del
-~ control del vocabulario en el dominio de la salud y no se limita a proveer una lista válida de términos,
1;l sino que cada término está definido por sus relaciones con el resto, y estas relaciones son entendibles
¡;j
@ por un sistema informático.
22 INFORMÁTICA BIOMÉDICA
DICOM
Imágenes Digitales y Comunicación en Medicina (DICOM) se ha convertido en uno de los estándares
más populares en este campo. Permite la comunicación de diagnósticos, información de tratamientos,
imágenes y datos asociados de cualquier tipo. El estándar DICOM está estructurado como un documento
multicapa en el que cada una puede integrar diferentes tipos de información; se basa en estándares
de salud desarrollados por el American National Standards lnstitute (ANSI) y el Health lnformation
Standard Board (HISB), y en cooperación activa con Health Leve! Seven (HL7 [http://www.hl7.org]).
Además de utilizarse en procedimientos radiológicos típicos, también se emplea en cardiología, endos-
copia y oftalmología.
The Ostracoda are small Crustacea, the body consisting of very few
—about eight—segments, and being completely enclosed in a
carapace, which has the form of a bivalve shell. Development is
direct, without a Nauplius stage.
The Ostracoda[82] are marine and fresh-water animals that can be
divided into several families, differing slightly in habits and in
structures correlated with those habits.
The Cypridae and
Cytheridae include all the fresh-
water and a vast majority of
marine genera, adapted for a
sluggish life among water-plants,
though some can swim with
considerable activity. The
common Cypris and Candona of
our ponds and streams are
familiar instances. The Fig. 74.—Candona reptans. A, Natural
movements of these animals are size; B, X 15. a, 1st antennae; b, 2nd
effected by means of the two pairs antennae; c, walking legs. (After Baird.)
of uniramous pediform antennae
which move together and in a vertical straight line. In the Cypridae
(Fig. 74) there are, besides the mandibles, two pairs of maxillae, a
pair of walking legs, and, lastly, a pair of appendages, which are
doubled up into the carapace, and are used for cleaning purposes. In
the marine Cytheridae there is only one maxilla, the last three
appendages being pediform and used in walking. The telson in the
Cytheridae is rudimentary, but is well developed in the Cypridae. The
heart is altogether absent.
In many of the fresh-water forms, e.g. common species of
Candona and Cypris, males are never found, and parthenogenetic
reproduction by the females appears to proceed uninterruptedly.
Weismann[83] kept females of Cypris reptans breeding
parthenogenetically for eight years. He also remarks on the fact that
these, and indeed all parthenogenetic female Ostracoda, retain the
receptaculum seminis, used normally for storing the spermatozoa
derived from the male, unimpaired.
Some of the Cytheridae occur in deep water. Thus Cythere dictyon
was frequently taken by the Challenger in depths of over 1000
fathoms, but the majority prefer shallow water.
SUB-CLASS II.—MALACOSTRACA.
Division. Phyllocarida.
SERIES 2. EUMALACOSTRACA.
Before entering on a description of the members of this Series it is
necessary to introduce and justify a new scheme of classification
which has been proposed by Dr. W. T. Calman. This scheme
necessitates the abandonment of the old Order Schizopoda, and also
ignores the distinction which used to be considered fundamental
between the sessile-eyed Crustacea (Edriophthalmata) and the stalk-
eyed forms (Podophthalmata).
The old group of Schizopoda, to which Nebalia and the isolated
form Anaspides, to be considered later, are undoubtedly related,
represent very clearly the stem-forms from which the various
branches of the Malacostracan stock diverge. No doubt they are
themselves specialised in many directions, since they are a dominant
group in present day seas, but their organisation is fundamentally of
a primitive type. We see this especially in the comparative absence of
fusion or reduction of the segments of the body externally and of the
nervous system internally, and in the simple undifferentiated
character of the trunk-limbs, all of which conform to the primitive
biramous type. The most anterior thoracic limbs of the Schizopods
are of particular interest. In the higher Malacostraca three of these
limbs are usually turned forwards towards the mouth to act as
maxillipedes, and the most anterior of all, the first maxillipede, is
apt, especially in the Decapoda, to take on a flattened foliaceous form
owing to the expansion of the basal segments to act as gnathobases
(see Fig. 1, A, p. 10). Now this appendage in the Schizopods preserves
its typical biramous character, and resembles the succeeding thoracic
limbs, but in many of the species the basal joints show a tendency to
be produced into biting blades (Fig. 1, E, p. 10), thus indicating the
first step in the evolution of the foliaceous first maxillipede of the
Decapoda. The primitive character of the Schizopods is also
indicated by the fact that most of the Decapoda with uniramous
limbs on the five hinder thoracic segments pass through what is
known as the “Mysis stage” in development, when these limbs are
biramous, the exopodites being subsequently lost in most cases.
The “Schizopoda” include a very large number of pelagic Crustacea
of moderate size, which superficially appear to resemble one another
very closely. The slender, elongated body, the presence of biramous
limbs on all the thoracic and abdominal segments, and the
possession of a single row of gills at the bases of the thoracic limbs,
are, generally speaking, typical of the families Mysidae,
Lophogastridae, Eucopiidae, and Euphausiidae, which go to make up
the old Order Schizopoda.
It has, however, been pointed out first by Boas,[87] and
subsequently by Hansen and Calman,[88] that the Euphausiidae are in
many respects distinct from the other three families, and agree with
the Decapoda, while the Eucopiidae, Lophogastridae, and Mysidae
agree with the Cumacea, Isopoda, and Amphipoda.
It has, therefore, been suggested by these authors that the
classification of the Malacostraca should be revised, and Calman (loc.
cit.) has brought forward the following scheme:—
The division Peracarida, including the Eucopiidae,
Lophogastridae, and Mysidae (= Mysidacea), the Cumacea, Isopoda,
and Amphipoda, is characterised by the fact that when a carapace is
present it leaves at least four of the thoracic segments free and
uncoalesced: by the presence of a brood-pouch formed from the
oostegites on the thoracic limbs of the female: by the elongated
heart: by the few and simple hepatic caeca: by the filiform
spermatozoa: and by the direct method of development without a
complicated larval metamorphosis. The biting face of the mandible
has a movable joint, the “lacinia mobilis.”[89]
The division Eucarida, on the other hand, including the
Euphausiidae and the Decapoda, shows the converse of these
characters. The carapace coalesces with all the thoracic segments,
there is never a brood-pouch formed from oostegites, the hepatic
caeca are much ramified, the heart is short, the spermatozoa are
spherical with radiating pseudopodia, the development is indirect
with a complicated metamorphosis, and the mandible is without a
lacinia mobilis.
Corresponding divisions are made by Calman to receive the other
Malacostraca, namely, the Phyllocarida for Nebalia, the Syncarida
for Anaspides, and the Hoplocarida for the Stomatopoda or
Squillidae.
The important array of characters which separates the
Euphausiidae from the other Schizopods and unites them with the
Decapoda can no longer be neglected, and the consideration of
Anaspides and its allies will further emphasise the extreme difficulty
of retaining the Schizopoda as a natural group. In the sequel
Calman’s proposed scheme will be adopted.
DIVISION 1. SYNCARIDA.
Order. Anaspidacea.
DIVISION 2. PERACARIDA.
Order I. Mysidacea.
The Mysidacea, although pelagic, are not very often met with in
the true plankton on the surface; they generally swim some way
below the surface, going down in many cases into the abysses. For
this reason they thrive excellently in aquaria, and the common Mysis
vulgaris is often present in such numbers in the tanks at the
Zoological station at Naples as to damage the other inmates by the
mere press of numbers. The Mysidacea, like the majority of the
Peracarida, undergo a direct development, and hatch out with the
structure of the adult fully formed.
Many of the Mysidacea bear auditory sacs upon the sixth pair of
pleopods, a characteristic not found in the Euphausiacea.
Fam. 1. Eucopiidae.—The curious form Eucopia australis (Fig.
79) described by Sars,[95] may be chosen as an example of the
Mysidacea.
The peculiarity of this form consists chiefly in the immense
elongation of the endopodites of the fifth, sixth, and seventh thoracic
appendages. Characteristic of the Mysidacea is the freedom of the
hinder thoracic segments from fusion with the carapace, otherwise
this animal is seen closely to resemble the Euphausia figured (Fig.
102). Eucopia australis, like so many of the Mysidacea, is a deep-sea
animal, being brought up with the dredge from over 1000 fathoms; it
is very widely distributed over the Atlantic Ocean.