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Palabras clave
Lanzamiento, Ocupación de la vivienda, Ejecución de hipotecas, Procedimiento
ejecutivo, Juicio de desahucio, Procedimiento hipotecario, Estado de alarma,
Coronavirus
ÍNDICE:
I. Introducción
II. Aspectos generales
1. El artículo 150 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
2. Los artículos 549 y 686 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
3. Artículo 704 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
4. Artículo 703.1 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
III. Ocupación ilegal de viviendas y ejecución
1. Artículo 441.1 bis de la Ley de Enjuiciamiento Civil
2. Artículos 250.1.4.º y 441.1 bis de la Ley de Enjuiciamiento Civil
IV. Ejecución y arrendamiento
1. Artículo 437.3 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
2. Artículo 440, apartados 3 y 4, de la Ley de Enjuiciamiento Civil
3. Artículo 441.5 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
4. El artículo 549 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
V. Convenios de colaboración suscritos por el Consejo General del Poder Judicial
VI. Normativa aprobada en tiempos de pandemia y pospandemia
1. Escenario primero: juicio verbal por desahucio (artículo 1 del Real Decreto Ley
11/2020)
A) Ámbito objetivo de aplicación
B) Ámbito temporal de aplicación
C) Ámbito subjetivo de aplicación
D) Acreditación documental de las circunstancias
E) Cuestiones procedimentales
2. Escenario segundo
A) Ámbito temporal de aplicación
B) Ámbito subjetivo de aplicación
C) Ámbito objetivo de aplicación
D) Tramitación y resolución de los supuestos contemplados en el artículo 1
bis
3. Escenario tercero
Legislación y otras disposiciones
Jurisprudencia
Bibliografía
I. INTRODUCCIÓN
La jurisdicción civil, en esta materia de vivienda, interviene o actúa normalmente
cuando se presenta una reclamación por incumplimiento de obligaciones económicas,
generalmente en sede de alquiler por el impago de la renta o en el pago de las cuotas
del préstamo hipotecario. También, aunque cuantitativamente en una menor medida,
en las acciones posesorias instadas para la protección del derecho del propietario del
inmueble ocupado sin título. Una vez que se ha dictado la resolución es cuando se inicia
la problemática relativa a la ejecución de los títulos judiciales, tanto sentencias y autos
como decretos.
Dado que una de las sesiones previstas versa sobre la ejecución hipotecaria y otra sobre
la ejecución provisional, en esta mesa redonda me referiré a la problemática que nos
planteamos en litigios relativos tanto a desahucios fruto de contratos de arrendamiento
como a los precarios y a las resoluciones que en materia de ocupación dictamos.
En todos estos supuestos, existe una normativa que puede ser aplicada de forma
generalizada y además una serie de especificidades según el tipo de procedimiento del
que proceda el título ejecutivo. Por otra parte, en materia de vivienda y ejecución hemos
de tomar en consideración no solo las normas de estricto contenido procesales y sus
modificaciones, sino también lo establecido en normas fundamentales como nuestra
Constitución y tratados internacional, además de la normativa dictada a raíz de la
pandemia ocasionada por la covid-19 (especialmente el Real Decreto Ley 11/2020, de
31 de marzo, y sucesivas modificaciones) que ha ido prorrogándose y reformándose con
motivo de la crisis del volcán de la Palma, la guerra de Ucrania y la crisis energética y
de materias primas en la que estamos inmersos.
Así, desde la perspectiva de derechos fundamentales, hemos de citar por su relevancia
los siguientes:
- El artículo 47 de la Constitución española: "Todos los españoles tienen
derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes
públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas
pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del
suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación".
- El artículo 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de
Naciones Unidas que dice: "1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida
adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y
en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y
los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en
caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de
pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de
su voluntad".
- El artículo 11.1 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales
y Culturales, de 19 de diciembre de 1966, establece que "los Estados
Partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda persona a un
nivel de vida adecuado para sí y su familia, incluso alimentación, vestido
y vivienda adecuados, y a una mejora continua de las condiciones de
existencia". España firmó también el Protocolo Facultativo, hecho en Nueva
York el 10 de diciembre de 2008, en vigor desde el 5 de mayo de 2013
y en el cual se faculta al Comité de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales para tramitar y decidir reclamaciones ("comunicaciones", según
el Protocolo Facultativo) formuladas contra los estados miembros. Existen
varios dictámenes desfavorables a España en materia de vivienda, entre
ellos dos de 11 de octubre de 2019 (E/C.12/66/D/37/2018, respecto de
la comunicación 37/2018, publicado el 29 de noviembre de 2019, y E/
Esta modificación se refiere no solo al supuesto regulado en esta ley, sino a todas
aquellas resoluciones judiciales por las cuales se acuerde el lanzamiento, como es el
decreto de admisión de juicio verbal de desahucio por falta de pago o expiración de plazo.
Esta comunicación a los servicios sociales, según dicho precepto, solo procede si el
interesado consiente en ello. La controversia la podemos tener en si opera la necesidad
de consentimiento en todo caso o cuando hay menores o personas con discapacidad
podemos actuar de oficio (Ley Orgánica 8/2015, de 22 de julio, de Modificación del
Sistema de Protección a la Infancia y a la Adolescencia). Por otra parte, hay que indicar
que en materia de juicio verbal de desahucio, como veremos, hay una especificidad.
la cesión de sus datos a estos, a efectos de que puedan apreciar la posible situación de
vulnerabilidad. Eso sí, exclusivamente cuando se trate de vivienda habitual.
Nuevamente se reitera el contenido del art. 150 LEC cuando dice que antes de
ejecutar el pronunciamiento judicial se ha de comunicar a los servicios sociales, previo
consentimiento de los afectados, y que los referidos servicios sociales tienen un plazo
de siete días para adoptar las medidas de protección que consideren procedentes.
Como se infiere, el legislador ha articulado un procedimiento rápido de entrega inmediata
de la posesión, pero ha tratado de "proteger" a los ocupantes ilegales por medio de
la adopción en siete días de medidas por parte de los servicios sociales. El exiguo
plazo conferido a los servicios sociales para adoptar la medida dificulta la posibilidad de
adoptar decisiones de protección o habitacionales a las personas o familias que se ven
inmersas en un proceso de este tipo.
La previsión, para que actúen los servicios de ejecución de los juzgados, no es otra
que esperar los siete días desde la notificación a los servicios sociales y, se haya o no
adoptado medidas de protección, ejecutar la resolución que establece el lanzamiento.
Así el Tribunal Constitucional nos recuerda, en la STC 32/2019, Pleno, de 28 de febrero:
"El derecho a la tutela judicial efectiva (art. 24.1 CE) comprende también el derecho
a la ejecución de las sentencias y demás resoluciones judiciales en sus propios
términos (art. 118 CE)".
"4.º Las que pretendan la tutela sumaria de la tenencia o de la posesión de una cosa
o derecho por quien haya sido despojado de ellas o perturbado en su disfrute.
Podrán pedir la inmediata recuperación de la plena posesión de una vivienda o parte
de ella, siempre que se hayan visto privados de ella sin su consentimiento, la persona
física que sea propietaria o poseedora legítima por otro título, las entidades sin ánimo
de lucro con derecho a poseerla y las entidades públicas propietarias o poseedoras
legítimas de vivienda social".
"No cabe reprochar al legislador que haya adoptado la decisión de articular lo que
pretende ser un procedimiento ágil en la vía civil para la defensa de los derechos de
los titulares legítimos que se ven privados ilegalmente de la posesión de su vivienda,
por entender que los cauces procesales antes existentes no ofrecen una respuesta
plenamente satisfactoria al creciente problema de la ocupación ilegal de viviendas".
Y seguidamente se reforma el art. 441.1 bis LEC, que regula el procedimiento para hacer
efectivo este "incidente de entrega inmediata de la posesión" y dice
El sistema articulado no lo es para todos los supuestos de ocupación, sino que se han
de cumplir una serie de requisitos subjetivos, objetivos y temporales, y, en lo que a
ejecución nos interesa, la formación o emisión del auto que se dictará tras el plazo de
cinco días (plazo por otra parte inferior al establecido para contestar a la demanda que
es diez días conferido) para aportar los títulos ejecutivos. Y preceptúa que en caso de
que no se aporte título o no sea suficiente el tribunal de forma inmediata ordenará por
auto la inmediata entrega de la posesión de la vivienda al demandante. Contra este auto
no cabe recurso alguno y es eficaz frente a cualquiera de los ocupantes que estén en
la vivienda.
Y el apartado 4 del mismo artículo, pero referido a "todos los casos de desahucio", es
decir, no solo para el desahucio por falta de pago, establece:
en que sí. Sin embargo, y para evitar duplicidad de señalamientos en los servicios
comunes que realizan este tipo de acto de ejecución, lo frecuente es señalar una única
fecha posterior al hipotético plazo de oposición.
Además, el referido precepto indica que se procederá al lanzamiento en el día y la hora
fijadas en la resolución, sin necesidad de notificación posterior. Y la fecha de lanzamiento
debe verificarse antes de los treinta días desde la fecha señalada para la vista.
Las medidas que se adoptan son de dos tipos, las informativas o divulgativas y las
medidas de detección de supuestos de vulnerabilidad. Por ello cada Administración se
obliga dentro de su ámbito competencial y se coordinan, de tal manera que el CGPJ
asume una relevante función de información entregando o poniendo a disposición de
los tribunales folletos informativos, formularios normalizados y la información existente
sobre la organización, funcionamiento y competencias de los servicios sociales, y la
Administración de la comunidad o de los municipios en su caso se obliga a facilitar,
a través de las consejerías competentes en materia de políticas sociales, vivienda y
justicia, tanto al CGPJ como a los juzgados de su territorio, toda la información disponible
sobre sus propias estructuras, redes, organización, funcionamiento y recursos de los
servicios sociales y de vivienda, así como la identificación y los datos de contacto del
personal responsable a los efectos de las comunicaciones que sean necesarias y, sobre
todo, a dar una respuesta ágil y a acelerar la tramitación conforme a la normativa de las
solicitudes remitidas tanto por los servicios sociales de las entidades locales como de
los órganos judiciales y servicios comunes, así como a comunicar al órgano judicial y a
la entidad local correspondiente las medidas adoptadas.
Asimismo, atiende a dos momentos distintos, al inicio del procedimiento y cuando nos
encontramos ya en ejecución, momento que con anterioridad a la reforma de 2018 y
la posterior del 2019 era la fase en la que habitualmente al acudir la comisión judicial
a ejecutar el lanzamiento se encontraban con la situación de vulnerabilidad (niños,
ancianos, dependientes...).
Estos convenios, muchos ya renovados en el año 2019, otros no es descartable su
prorroga, se encuentran publicados en el portal de trasparencia del CGPJ.
"2. Para que opere la suspensión a que se refiere el apartado anterior, la persona
arrendataria deberá acreditar que se encuentra en alguna de las situaciones de
vulnerabilidad económica descritas en las letras a) y b) del artículo 5.1 del presente
real decreto-ley mediante la presentación de los documentos previstos en el artículo
6.1 [...]".
Sin embargo, y como hemos indicado, olvida que uno de los requisitos que ha de
concurrir es que el importe de la renta sea superior o igual al 35 % de los ingresos netos,
incluidos los gastos y suministros. Sobre esta cuestión podemos estar ante dos hipótesis,
que desde el juzgado se le exija la acreditación de tal requisito por la documentación que
estime pertinente o, por el contrario, ante la omisión de mención específica considera
suficiente la "declaración responsable del deudor".
Estamos en presencia de un procedimiento que exige para acreditar la vulnerabilidad
prueba exclusivamente documental y, además, indica qué documentos son los
necesarios y exigidos para ello. Sobre esta posible limitación de los medios de prueba
hay que tener en cuenta que el Tribunal Constitucional, en el ATC 146/2016, de 19 de
julio, inadmitió a trámite una cuestión de constitucionalidad planteada en relación con el
artículo 2 de la Ley 1/2013 (relativo a la vulnerabilidad y el lanzamiento en una ejecución
hipotecaria) en la que la Audiencia Provincial de Almería consideraba inconstitucional
dicho precepto porque la limitación de medios probatorios a la documental con
imposición, además, de concretos documentos que tenían que ser aportados, podía
vulnerar los artículos 9.3 (principio de interdicción de la arbitrariedad), 24 (derecho a la
tutela judicial efectiva y derecho a utilizar las pruebas pertinentes para la propia defensa)
E) Cuestiones procedimentales
El artículo 1 establecía el procedimiento que seguir para solicitar la suspensión por
vulnerabilidad y competía al letrado de la Administración de Justicia la decisión sobre
la vulnerabilidad.
Sin embargo, el Real Decreto Ley 37/2020 modificó la competencia en esta decisión.
El procedimiento es el siguiente:
- Solicitud del arrendatario de un incidente de suspensión extraordinaria del
desahucio o lanzamiento ante el juzgado. A los efectos del art. 150.4 LEC
se entiende que concurre el consentimiento de la persona arrendataria por
la mera presentación de la solicitud de suspensión.
- La persona arrendataria debe acreditar que se encuentra en alguna de las
situaciones de vulnerabilidad económica de las letras a) y b) del artículo 5 y
aportar para ello los documentos previstos en el artículo 6.1.
- Aunque el precepto nada indica, de faltar alguno de los documentos previstos
en el artículo 6 es factible requerir para subsanarlo en un plazo razonable
(art. 231 LEC).
- Aportada la documentación completa o parcial, el letrado de la
Administración de Justicia tiene que dar traslado al demandante, quien
dispone de un plazo máximo de diez días para poder acreditar ante
el juzgado, por los mismos medios (prueba documental), encontrarse
igualmente en la situación de vulnerabilidad económica descrita en la letra
a) del artículo 5 o en riesgo de situarse en ella, en caso de que se adopte la
medida de suspensión del lanzamiento. Se entiende también que concurre
el consentimiento del arrendador para hacer la comunicación prevenida en
el art. 150.4 LEC por la mera presentación del escrito alegando su situación
de vulnerabilidad económica.
2. Escenario segundo
El Real Decreto Ley 30/2020, de 22 de diciembre, modificó el Real Decreto Ley 11/2020,
de 31 de marzo, e introdujo el artículo 1 bis.
Esta modificación entró en vigor el día 23 de diciembre de 2020.
Por otra parte, y a diferencia de los juicios de desahucio por falta de pago o expiración,
el precepto solo contempla la suspensión del lanzamiento y no del procedimiento. La
mención a suspensión del procedimiento se contiene solo cuando se habla del auto
que acuerda levantamiento de la suspensión en el que se alude al procedimiento y al
correspondiente lanzamiento.
3. Escenario tercero
El Real Decreto Ley 1/2021, de 19 de enero, de protección de los consumidores y
usuarios frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica modificó el Real
Decreto Ley 11/2020, de 31 de marzo, en su artículo 1 bis para añadir dentro de los
supuestos que pueden ser objeto de suspensión los procesos penales en los que se
sustancie el lanzamiento de la vivienda habitual de aquellas personas que la estén
habitando sin ningún título habilitante para ello. Además, se procede a la modificación
de las letras b) y c) del apartado 7 del artículo 1 bis, que pasaron a redactarse de la
siguiente forma:
En relación con este supuesto, esta pasada semana se ha rechazado por el Tribunal
Constitucional el recurso de inconstitucionalidad interpuesto contra tres incisos de la
disposición final primera del Real Decreto Ley 1/2021 de protección de los consumidores
y usuarios frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica y otro inciso
de su preámbulo que modifica el Real Decreto Ley 11/2020 por el que se adoptan
medidas urgentes complementarias en el ámbito social y económico para hacer frente
al COVID-19. En este sentido, el tribunal ha incidido que se trata de una medida que
responde a una finalidad de interés social (la protección de las personas en situación de
vulnerabilidad como consecuencia de la crisis generada por la covid-19) que incide de
forma mínima y temporal sobre el derecho de propiedad, incidencia que además podrá
ser objeto de compensación económica.
El Constitucional también ha entendido que la norma satisface igualmente la exigencia
constitucional del derecho a la tutela judicial efectiva. Y ha explicado que la ejecutividad
de las sentencias no es cuestionada por la norma impugnada, solamente se dilata por
un breve lapso temporal, y ello de conformidad con la decisión adoptada por el órgano
judicial, una vez ponderadas las circunstancias concurrentes en cada caso.
Del mismo modo, el Pleno ha recordado que la norma ni altera la atribución competencial
de los órganos jurisdiccionales fijada por la ley ni afecta a los elementos estructurales
o esenciales del proceso judicial.
Al hilo de la normativa covid-19 nos podemos plantear cuestiones como las siguientes:
1) ¿Debe limitarse la petición de la suspensión de lanzamiento o pueden hacerse
sucesivas peticiones a las que hay que dar respuesta hasta el mismo momento en el
que se proceda a desalojar la vivienda ocupada?
ya que se desconocen las medidas que hayan adoptado o que adopten los servicios
sociales competentes.
La opinión de los asistentes es que es el juez quien tiene que acordar si se suspende
o no un procedimiento o un lanzamiento incluso cuando no se acompaña de todos los
documentos previstos en el artículo 6, ya que su aportación es precisamente para poder
valorar la vulnerabilidad que desde diciembre le corresponde al juez.
3) ¿Hay que abrir pieza separada para tramitar los incidentes de suspensión?
Es una cuestión controvertida y con efectos más estadísticos que procesales.
Si partimos, como parece criterio mayoritario, de que estas resoluciones no son
susceptibles de apelación, sino de reposición, no parece preciso abrir una pieza
separada, ya que no existe previsión en tal sentido y en nuestra normativa procesal sobre
incidentes caben incidentes que no necesitan abrir pieza separada (art. 207 LEC).
En la comisión de modelos informativos del País Vasco, se vio innecesario abrir dicha
pieza, pero suscita mucha controversia.
Sobre esta cuestión me surgen una serie de dudas como son las siguientes:
4) ¿Cabe recurso contra este auto y cuál?
Por lo que se refiere al recurso que procede contra el auto que se dicte, a mi entender no
es susceptible de recuro de apelación. En este sentido, el AAP de Valencia 341/2022,
Sección 11.ª, de 28 de noviembre, afirmaba:
"Y, en último lugar, por cuanto, la decisión sobre el incidente instado de suspensión
extraordinaria del lanzamiento ante el Juzgado por encontrarse en una situación
de vulnerabilidad económica prevista en la legislación especial, para hacer frente
a las situaciones de vulnerabilidad social y económica en el ámbito de la vivienda,
no dispone que sea susceptible de recurso de apelación y por tanto, ante dicha
omisión, al tratarse de un incidente, deben ser de aplicación las normas generales
de la LEC sobre recurso de apelación reglada en el artículo 455 LEC exigiéndose un
auto definitivo o aquellos otros que la Ley expresamente señale dicho recurso. Y es
más, las cuestiones incidentales (tramitado un incidente, así dispuesto y nominado
por el legislador), resueltas por auto en cuanto deciden la prosecución del proceso
no tienen dispuesto acceso a recurso alguno, máxime cuando el auto dictado no
pone fin al proceso de ejecución".
"Y en cuanto al RDL 11/2020 de 31 de marzo hay que señalar que será en el
momento de proceder al lanzamiento cuando deberán ser examinados si concurren
los requisitos legales para proceder a la suspensión del lanzamiento".
Otras cuestiones debatidas que podemos dejar para el coloquio son las siguientes:
- ¿Es necesario pedirlo con abogado y procurador?
- ¿Puede reiterarse la petición hasta el momento del lanzamiento?
- ¿Qué hacemos si los servicios sociales no emiten el informe?
- Si no hay tiempo antes de la vista para presentar los documentos cuya
subsanación requerimos, ¿hay que suspender la vista?
- ¿Abrimos pieza separada?
Jurisprudencia
search/AN/openDocument/
cdef8d1bc97f261ea0a8778d75e36f0d/20230209.
- AAP de León 14/2022, Sección 2.ª, de 2 de febrero,
ECLI:ES:APLE:2022:29A. Disponible en: https://www.poderjudicial.es/
search/AN/openDocument/f17ae08bb3858a00/20220517.
- AAP de León 103/2022, Sección 2.ª, de 14 de septiembre,
ECLI:ES:APLE:2022:402A. Disponible en: https://www.poderjudicial.es/
search/AN/openDocument/
d1cb414882bd8f34a0a8778d75e36f0d/20230202.
- AAP de Illes Balears 171/2022, Sección 3.ª, de 26 de julio,
ECLI:ES:APIB:2022:67A. Disponible en: https://www.poderjudicial.es/
search/AN/
openDocument/8330bc169ca922cba0a8778d75e36f0d/20230206.
- AAP de Valencia 341/2022, Sección 11.ª, de 11 del 28 de noviembre,
ECLI:ES:APV:2022:1275A. Disponible en: https://www.poderjudicial.es/
search/AN/
openDocument/3abdab1aea0d865ba0a8778d75e36f0d/20230208.
Bibliografía
1. Consejo General del Poder Judicial. Convenios. Disponible
en: https://www.poderjudicial.es/cgpj/es/Temas/Transparencia/Actividad-del-
CGPJ/Convenios/Todos-los-convenios/.
Notas
(1) "a) Que la persona que esté obligada a pagar la renta de alquiler pase a estar en situación
de desempleo, Expediente Temporal de Regulación de Empleo (ERTE), o haya reducido su
jornada por motivo de cuidados, en caso de ser empresario, u otras circunstancias similares
que supongan una pérdida sustancial de ingresos, no alcanzando por ello el conjunto de
los ingresos de los miembros de la unidad familiar, en el mes anterior a la solicitud de la
moratoria:
i. Con carácter general, el límite de tres veces el Indicador Público de Renta de Efectos
Múltiples mensual (en adelante IPREM).
ii. Este límite se incrementará en 0,1 veces el IPREM por cada hijo a cargo en la unidad
familiar. El incremento aplicable por hijo a cargo será de 0,15 veces el IPREM por cada hijo
en el caso de unidad familiar monoparental.
iii. Este límite se incrementará en 0,1 veces el IPREM por cada persona mayor de 65 años
miembro de la unidad familiar.
iv. En caso de que alguno de los miembros de la unidad familiar tenga declarada
discapacidad igual o superior al 33 por ciento, situación de dependencia o enfermedad que
le incapacite acreditadamente de forma permanente para realizar una actividad laboral, el
límite previsto en el subapartado i) será de cuatro veces el IPREM, sin perjuicio de los
incrementos acumulados por hijo a cargo.
v. En el caso de que la persona obligada a pagar la renta arrendaticia sea persona con
parálisis cerebral, con enfermedad mental, o con discapacidad intelectual, con un grado de
discapacidad reconocido igual o superior al 33 por ciento, o persona con discapacidad física
o sensorial, con un grado de discapacidad reconocida igual o superior al 65 por ciento, así
como en los casos de enfermedad grave que incapacite acreditadamente, a la persona o a
su cuidador, para realizar una actividad laboral, el límite previsto en el subapartado i) será
de cinco veces el IPREM".
(2) "2. A los efectos de lo previsto en este artículo se entenderá por unidad familiar la compuesta
por la persona que adeuda la renta arrendaticia, su cónyuge no separado legalmente o
pareja de hecho inscrita y los hijos, con independencia de su edad, que residan en la
vivienda, incluyendo los vinculados por una relación de tutela, guarda o acogimiento familiar
y su cónyuge no separado legalmente o pareja de hecho inscrita, que residan en la vivienda".
(3) "3. No se entenderá que concurren los supuestos de vulnerabilidad económica a
consecuencia de la emergencia sanitaria ocasionada por el COVID-19 a los efectos de
obtener moratorias o ayudas en relación con la renta arrendaticia de la vivienda habitual
cuando la persona arrendataria o cualquiera de las personas que componen la unidad
familiar que habita aquella sea propietaria o usufructuaria de alguna vivienda en España. Se
considerará que no concurren estas circunstancias cuando el derecho recaiga únicamente
sobre una parte alícuota de la misma y se haya obtenido por herencia o mediante transmisión
mortis causa sin testamento. Se exceptuará de este requisito también a quienes, siendo
titulares de una vivienda, acrediten la no disponibilidad de la misma por causa de separación
o divorcio, por cualquier otra causa ajena a su voluntad o cuando la vivienda resulte
inaccesible por razón de discapacidad de su titular o de alguna de las personas que
conforman la unidad de convivencia".
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1 referencia bibliográfica