Está en la página 1de 4

LA ULTIMA NOCHE.

Había una vez una familia que vivía en el campo, en una casa grande con caballerizas,

gallineros y corral para caballos y vacas, ellos en su hogar eran muy felices.

La familia estaba formada por 3 personas, mama, papa y un hijo eran una familia

pequeña pero muy feliz, los tres solían salir a pasear por la tarde todos los días en sus

caballos por el campo hasta el atardecer cuando el sol se ocultaba volvían a su hogar a

disfrutar de una rica merienda que la madre preparaba con ayuda del padre e hijo.

Cada quien tenia sus obligaciones y quehaceres en el rancho, el padre se levantaba

muy temprano a ordeñar las 2 vacas que tenían y juntar los huevos que las gallinas

ponían, la madre prendía la estufa, para preparar el desayuno, para su hijo, a Gilberto

le tocaba partil la leña para todo el dia y darle de comer a los caballos y alas gallinas

antes de irse a la escuela dejaba ensillado su caballo para no perder tiempo después

de desayunar, cuando gilberto se iba a la escuela, su madre lavaba y planchaba la ropa

para toda la semana como ya era tradición su mama partía al pueblo a comprar las

cosas del mandado y los ingredientes que necesitaba para elaborar queso y los

pasteles de manzana que vendían en el bazar de los miércoles.

Gilberto era muy buen estudiante era el primero en su clase de matemáticas y muy

buen lector, en la clase de educación física siempre era elegido para representar a su

escuela y al pueblo de Valle lindo en los encuentros deportivos que ser realizaban en

los alrededores del pueblo.

Gilberto se caracterizaba por ser muy valiente en los rodeos y concursos de lazo que

organizaba la presidencia municipal, en alguna ocasión salvo a un amigo de ser


cornado por un toro que se salió de un corral y se metió en la escuela y el muy valiente

tomo su cuerda y lo lazo llevándolo al corral de donde salió, hizo todo con tan solo 10

de edad.

Al regresar a su casa su perro solovino lo esperaba en la entrada del cerco del rancho,

moviendo la cola, ladrando y dando vueltas de felicidad al ver llegar al Gilberto a su

casa, esto daba aviso a su madre de que gilberto había llegado a casa y su madre

comenzada a poner los platos y cucharas para comer los tres en familia.

Después de comer ayudaba a su mama a lavar los trastes y a trapear toda la casa,

cuando terminaba se dirigía a ver los nuevos pollos que su papa había traído, hacia su

tarea antes de dar su paseo en caballo.

Así transcurrían sus días y cuando era viernes su mama le preparaba su platillo favorito

como pago por haber realizado sus obligaciones de la semana.

Un dia hizo mucho aire y no se podía salir tumbo la puerta del corral, las vacas y

caballos corrieron asustados para todas partes, el techo del gallinero voló por los aires

con todo y gallinas las laminas de su casa no se desprendieron ya que su tata era un

hombre precavido construyó la casa entre los arboles del rancho para que cuando los

aires fueran fuerte no pudieran destruir su casa, después del viento llego la lluvia que

hizo crecer el arroyo que está en la entrada del pueblo y su rancho, después de

componer la puerta del corral y reparar el gallinero comenzó el trabajo mas difícil

atrapar a las gallinas y meter las al gallinero esto duro todo el día ya que su papa no

estaba en el rancho y hizo el trabajo Gilberto.


Pero el verdadero trabajo estaba por venir encontrar los caballos y las dos vacas, por

sin leche no hay queso ni pastel para vender, así que alisto su mochila y sus cosas para

salar a las vacas. Ese día no hubo paseo por la tarde, cenaron y platicaron mucho

tiempo, se despidió de su mama y su papa y se acostó ya que el tenia pensado salir

muy temprano, antes de que salieran los primeros rayos de sol, solo pensaba en ayudar

a su familia por que los animales eran lo único de valor que tenían en su familia.

Muy temprano antes de que cantara el gallo salió de su casa y siguió las huellas de las

vacas y caballos se interno en las montañas cercanas al rancho en busca de sus

animales y su caballo favorito.

Es día su mama dijo mi hijo a de ver amanecido muy cansado, su mama alzaba la

cocina se dio cuenta que su hijo no estaba en su cuarto se había salido, muy asustada

empezó buscarlo ya que él nunca se salía sin avisar, se cansó de buscarlo en las

caballerizas y gallinero , al no encontrarlo muy asustada fue a buscar a su esposo al

molino que en donde estaba trabajando, para así los dos buscarlo, buscaron por los

alrededores de su casa, el tiempo pasaba, después de varias horas se preocuparon

más y más, los primeros rayos de luz aparecieron e iluminaron el campo, su madre no

paraba de llorar, el esposo al ver a la madre de su hijo en esa situación salió de su casa

y se dirigió al establo, el padre muy inquieto, tomo su caballo mas veloz y se dirigió al

pueblo a buscarlo, después de pensar y pensar donde podría estar, se dirigió a los

pueblos y ranchos a buscarlo y nunca lo encontró, después de varios días volvió a casa

con un gran angustia y desesperación inmensa y los padres ya nunca supieron de su

muchacho ni de su paradero esa fue la ultima noche que lo vieron.


FIN

También podría gustarte