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Aristóteles:

Según Aristóteles el hombre es una sustancia viviente hilemórfica, ya que cuenta con
coprincipios, uno es el CUERPO (materia), de lo que está hecha la sustancia, y el otro
principio es la forma, lo que nos hace ser humanos y no otra cosa, nuestro principio vital
llamado ALMA.
Este filósofo dice que el hombre es un ANIMAL RACIONAL, ya que está incluido
dentro del grado de los animales reuniendo sus facultades, pero a la vez superándolas.
El hombre está constituido por conocimiento intelectual, porque es capaz de conocer la
esencia de los objetos, lo que los hace únicos, en este caso superando el conocimiento
sensible de los animales, que conocen, a través de sus sentidos, solo la forma de los
objetos, los accidentes. El hombre también está constituido por la voluntad, la cual es el
apetito inteligible, y lo hace capaz de poder elegir y por lo tanto de tener libertad,
superando el apetito sensible de los animales, los cuales solo tienen tendencia hacia
algo, son movidos por el deseo o rechazo según sus sentidos.

Baron D’Holbach:
Según D´Holbach el hombre es un SER MATERIAL, físico, organizado o conformado
para sentir, pensar y ser modificado de modos que le son propios. Son producto de la
Naturaleza, al igual que los demás seres, son regulados y determinados por las leyes que
la Naturaleza les otorga a quienes produce, desarrolla, enriquece, hace crecer, los
destruye y/o descompone haciéndolos cambiar de forma.
Para este filósofo, los movimientos del hombre no son espontáneos, ni su voluntad libre,
ya que desde que nace hasta que muere es modificado por causas que influyen sobre él,
completamente fuera de su poder.

Reflexión:
Estas definiciones sobre el hombre, me hacen pensar en muchas cosas que hablamos en
nuestra vida diaria que tienen su origen en estos filósofos, cuando se habla de alma, por
ejemplo, tiene diferentes significados según cada filósofo. También cuando se intenta
definir al hombre se entre cruzan muchos de estos conceptos y miradas.
Como estudiante me va a servir como base para pensar nuestra forma de pensar,
nuestros posibles orígenes o composiciones como humanos. En cuanto a mi tarea
docente, me gustaría llevar varios de estas definiciones al aula, quizás de forma más
sencilla, pero algunas ideas me resultaron sumamente interesantes, como es el caso de D
´Holbach, cuando expone que hay cosas que no podemos responder o conocer, porque
nuestra experiencia no nos lo permite, no somos capaces de resolver esos problemas, y
por lo tanto no nos debería interesar. Coincido en partes y en partes digo que tenemos
que investigar lo desconocido. También es el caso del sistema simbólico de Cassirer,
donde la pedagogía Reggio Emilia, propuesta por el pedagogo Loris Malaguzzi,
promueve el aprendizaje basado en los 100 lenguajes de los niños.

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