EL ANIMAL SIMBÓLICO

El presente ensayo tiene como finalidad el reflexionar y analizar el tema del

“animal simbólico”; básicamente es tratar de describir como se concibe el hombre
así mismo desde sus orígenes, pero principalmente se trata de diferenciar al ser
humano de los animales, identificando sus semejanzas y diferencias. Siendo el
lenguaje la más importante característica que nos diferencia de los otros seres
vivos, mas específicamente de los animales, que aunque estos también tiene un
lenguaje, sus objetivos son distintos. Así mismo se intenta encontrar el origen de
este.

Todo esto basado en teorías, experimentos y criterios de muchos autores de

renombre, no solo filósofos; ya que este es un tema de interés para muchas ramas
de la ciencia.

Tal vez una de las primeras reflexiones del hombre sobre si mismo la hizo
Sófocles en una de sus obras, donde describe cada rasgo de éste, desde sus
habilidades de supervivencia, lenguaje, ingenio, hasta la dominación de todo lo
que se le interponga, exceptuando la muerte. Por lo que desde tiempos antes de
Cristo, ya distinguía sus fortalezas y algunas debilidades, concibiéndose como un
ser capaz.
Siglos después Giovanni Pico della Mirandola apoya a Sófocles y lo reitera así: «Me
parece haber entendido por qué el hombre es el ser vivo más dichoso, el más
digno por ello de admiración y cuál es aquella condición suya que le ha caído en
suerte en el conjunto del universo, capaz de despertar la envidia no sólo de los
brutos, sino de los astros, de las mismas inteligencias supramundanas. ¡Increíble y
admirable!»1. Estos comentarios vienen a romper con los esquemas de los
antiguos filósofos, ya que se veían así mismos como algo superior a las demás
cosas, y él nos dice lo contrario, viendo al hombre como algo indeterminado en el
universo, es decir que el hombre decide por si mismo que “ser” y “hacer de si
mismo”.
1
De la dignidad humana, de G. Pico della Mirándola, Madrid, Editora Nacional.
 Siempre se ha dicho que el hombre es distinto a un animal y a una
divinidad, pero ¿Cómo diferenciarlos?. Para esto lo primero es buscar las
similitudes, que en el caso de un dios no tiene nada, pero con los animales se
suelen hacer comparaciones por características iguales o similares, lo que nos deja
pensar que los hombres tienen parte animal, lo que se llego a comprobar con la
teoría de la evolución de Charles Darwin aunque no sea aceptado por muchas
religiones quienes se aferran a concebir al hombre como algo superior a todo lo
demás.

Esta es una de las 3 “humillaciones teóricas”, es decir teorías o

fundamentos que revelan que el hombre no es como se quiere ver, sino que
descubren que se van pareciendo a lo que no quieren ser. Las otras 2
corresponden a la teoría heliocéntrica (Copérnico, Kepler y Galileo); y la otra por
parte de Sigmund Freud con su estudio sobre la consciencia.

Continuando con las similitudes del hombre con el animal, se encuentra un

concepto muy común en el que llamamos al hombre como el “animal racional”,
como el mas inteligente de todas las especies, pero como cito Roger Scruton, «las
definiciones de la razón y de la racionalidad varían grandemente; varían tanto
como para sugerir que, mientras pretenden definir las diferencias entre hombres y
animales en términos de razón, los filósofos están en realidad definiendo la razón
en términos de la diferencia entre hombres y animales» 2. La razón se puede definir
como el saber hacer algo para lograr lo que te propones; pero realmente el animal
también encuentra la forma de cubrir sus necesidades o fines determinados, la
diferencia radica en que el hombre siempre esta insatisfecho y busca nuevos fines
que aun desconoce.

Es aquí donde ambos hacen uso de su inteligencia, los animales por parte
de sus instintos, sin lo cuales no podrían sobre existir, pero estos siendo los mas
elementales; sin embargo el hombre hace uso de instintos naturales más
diversidades o derivados de ellos que no son para nada vitales o necesarios.
2
An Intelligent Person's Guide to Philosophy, de R. Scruton, Londres Duck-worth.
Otra gran diferencia entre un animal y el ser humano es que el humano se
equivoca repetidamente pero al mismo tiempo sabe adaptarse mejor a los cambios
dependiendo de la situación, y los animales cometen menos errores mientras los
problemas no presenten cambios.

En cuanto a las cuestiones sociales, las diferencias son grandes en cuanto a

su organización y el aspecto en que los animales no son capaces de distanciarse
de cosas necesarias para su especia, y el hombre puede despegarse de ellas más
fácilmente. Se hace una distinción entre los lugares en los que habitan; se le llama
“medio” al de los animales y en este no existe nada neutral o es bueno o es malo;
y “mundo” al del hombre, donde existe todo.

En nuestro mundo aunque es el mismo y pertenecemos a la misma especie,

existen muchos compartimientos, todo esto debido al LENGUAJE.

Existe una gran diferencia entre el lenguaje animal y el humano. El animal

por una parte todo el tiempo tienen un fin biológico y de supervivencia, sobre algo
que se “tiene que” decir; y el humano es para hablar de lo que sea en cualquier
tiempo, su significado es una abstracción; nos sirve para hablar de lo que
“queremos decir”, lo que es algo primordial para nuestro lenguaje, ya que no
importando el idioma nosotros “queremos saber” que significa.

Desde niños se da una posibilidad del aprendizaje de hablar; pero realmente

lo que existe es una “intención” por su parte, lo que diferencia en su caso a los
primates que no la tienen, que aunque se les adiestre para poder comunicarse con
señas, dicen cosas que realmente no nacen de ellos.

Algunos lingüistas como Edward Sapir y Benjamin L. Whorf hablan sobre la

posibilidad de que cada idioma significa un mundo y que cada grupo que lo usa
tiene un universo propio; pero esto es poco acertado ya que aunque aprendas un
nuevo idioma, no se olvidara el 1ero que aprendiste. Es decir que depende de cada
individuo su deseo por comunicarse con los otros a pesar de las barreras
lingüísticas. << No hay querer decir sin querer entender y hacerse entender... >>3

Después de todo esto surge la incógnita de cómo es que surgió el lenguaje,

si es propio del hombre, este no puedo haberlo inventando. Por lo que una de las
suposiciones más aceptables fue que al mismo momento que surgió la humanidad,
surgió el lenguaje no como lo conocemos ahora, sino por gritos o gestos de
primates, que al final acabaron evolucionando en nosotros al igual que su
lenguaje.

Ernst Cassirer afirmó que «el hombre es un animal simbólico» 4. Pero para
entender a lo que se refería con esto, debemos entender que es un símbolo, que
viene siendo la representación de algo (idea, emoción, etc.) que el mismo hombre
creo, no que se dio por medios naturales; por lo que estos no son innatos y deben
ser aprendidos. Estos representan algo físico pero son dirigidos a algo mental que
existe.

Al crear nuestra realidad como algo simbólico, acabamos pensando que

todo lo que existe es simbólico; de donde surge un gran problema que es el de
saber distinguir entre lo simbólico y lo que no.

Finalizando, para mi esto es adentrarse en uno de los tantos problemas que

el hombre o animal simbólico crea al pensar en su propio existir, lo que puede
llegar a ser algo sin fin, ya que todo va como un ciclo, pensando en su propio
origen se plantea problemas y para entender y solucionar los problemas tiene que
saber de donde surgieron, todo es como una gran cadena.

Considero que el hombre es una especie más de los animales, tendremos

muchas diferencias, pero también muchas similitudes que nos hacen pensar y
comprobar que realmente somos “animales”, cosa que no se debe de tomar como
una ofensa como generalmente se entiende, sino como una comparación de

3
Las preguntas de la vida. Fernando Savater “El animal simbólico”
4
Antropología filosófica, de E. Cassirer, México, Fondo de Cultura Económica.
nuestro origen y de nuestros similares, ya que al final somos un animal racional y
significante que tiene intereses distintos a otros animales