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Es necesario volver al concepto original de la radio, recordar que este medio fue
diseñado básicamente para tres propósitos: Informar, educar y entretener. Como
sucede regularmente en muchas disciplinas de la vida, lo primero que
olvidamos es lo primero que aprendimos y todo lo que se haga en radio fuera de
estos tres enfoques, es un desatino “mortal”.
Como dice la canción “por eso y muchas cosas más...” te presento 5 cosas que
todo locutor debe saber
Así como van las cosas en poco tiempo tendremos que usar lupa para encontrar
fragmentos sueltos de buen lenguaje en la radio. A la estirpe de “carniceros” del
idioma no les basta con desafiar al diccionario, sino que hacen uso y abuso de
lenguaje soez, ofensivo y morboso, que no liga de ninguna forma con los
propósitos de la radio… no caigas en esa tentación!
No despegues los pies de la tierra, en este medio no hay estrellas, deja que el
público te otorgue el crédito merecido y no lo hagas tú. Muchos son los que al
aire en comunicación con la gente son un dulce que empalaga, pero cuando
algún oyente llega a saludarlos a la estación, no se sacan las gafas oscuras y
saludan con sonrisas falsas. En este punto el locutor ya sea deportivo, comercial,
de cabina o periodista adopta la misma hipocresía de la clase política…uyyy que
feo!
Todo locutor repite hasta la saciedad los números en cabina para permitir el
contacto con “su gente”, pero cuando esa llamada llega en tiempo off cuando
suena música o comerciales, es más probable que Nicaragua llegue a un
Mundial que el locutor responda esa llamada…que mala onda!