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De acuerdo con cifras proporcionadas hoy por el Instituto de Estadística en

un nuevo informe que nos brinda la UNESCO calificó los datos como "una crisis de
aprendizaje" y manifestó que pone en peligro la consecución del Objetivo de
Desarrollo Sostenible número 4, que busca lograr una educación de calidad.

Más de 387 millones de niños de educación primaria (56%) y 230 millones de


adolescentes de enseñanza secundaria (61%) no alcanzan los conocimientos
mínimos en lectura y matemáticas. El estudio también indica que dos tercios de
esos menores asisten a la escuela.

África subsahariana, con 202 millones, es la región del mundo con el mayor
número de niños, niñas y adolescentes que no están progresando en estas
materias, con casi 9 de cada 10 niños entre 9 y 14 años.

En América Latina, un joven requiere de más de una década de estudios formales


para culminar la educación secundaria. En muchos países de la región se trata de
un paso importante que los jóvenes y sus padres celebran como un gran logro
familiar. Sin embargo, los miles de días levantándose temprano, los desvelos de
padres y niños, los innumerables gastos y sacrificios no parecen estar dando el
resultado esperado.

De acuerdo con un informe que acaba de publicar el Instituto de Estadísticas de la


UNESCO, más de la mitad de los jóvenes en América Latina y el Caribe no
alcanzan los niveles de suficiencia requerida en capacidad lectora para el
momento en el que concluyen la educación secundaria. En total, hay 19 millones
de adolescentes en esta situación.

Estudiantes con problemas de comprensión lectora


- 14%: Norteamérica y Europa
- 31%: Este y sudeste asiático
- 36%: América Latina y el Caribe
- 57%: Asia occidental y norte de África
- 88%: África subsahariana

Según la última encuesta sobre consumo de lectura publicada por el Dane, los
niños de entre 5 y 11 años leen, en promedio, 3,2 libros al año.

https://www.eltiempo.com/vida/educacion/habitos-de-lectura-de-los-ninos-en-colombia-150516
Los niños y jóvenes se están convirtiendo en un ejemplo para los adultos a la hora
de leer. Puede que lo hagan en tabletas, computadores o en el celular, pero cada
vez consumen más literatura. Y aunque queda un largo trayecto para alcanzar un
nivel de lectura alto, las cifras demuestran un avance significativo.

La lectura tiene una gran cantidad de beneficios en la vida de todas las personas y es la
base de la cultura. Mediante la lectura accedemos a una parte importante de la
información, ayuda en el desarrollo de la imaginación y de las capacidades mentales y, en
particular, resulta esencial durante la etapa escolar; de hecho, la tasa de éxito (o fracaso)
escolar está fuertemente ligada a la capacidad del niño para leer y comprender
adecuadamente lo que lee. Un niño que lee adecuadamente es un niño que está más
cerca de triunfar en los estudios y, por ello, el contacto con los libros debe ser incentivado
en los más pequeños tan pronto como sea posible. En este sentido, el papel de los padres
es esencial.

Es un aspecto clave para que más adelante se sientan atraídos por la lectura y
para que no se convierta en una actividad tediosa, por lo que no sienten ningún
interés, algo que ocurre bastante a menudo. En conseguir esta motivación, los
padres son esenciales y tienen un papel muy relevante. Muchos padres se
preguntan como enseñar a leer a sus hijos y qué pueden hacer para incentivar
este hábito.

En primer lugar, hay que tener claro que no se debe forzar al niño a aprender a
leer anticipadamente. Muchas investigaciones en pedagogía sugieren que se
comience con la enseñanza formal de la lectura a partir de los 6 o 7 años. Sin
embargo, esta recomendación cambia cuando es el niño el que muestra interés y
curiosidad por la lectura y siente el deseo de aprender a leer, cuando se fija
mucho en los libros, pregunta por las letras, etc. En estos casos, no sólo no
debemos frenar su motivación, sino que debemos ayudarle a introducirse
paulatinamente en la lectura.

Gracias a esto estaremos contribuyendo a que, a la larga, su aprendizaje se vea


reflejado y lo mejor es trabajar en los primeros pasos del niño con la lectura
recurriendo a una cartilla para aprender a leer recomendada por los expertos
de esta manera nos aseguraremos de seguir unas pautas que nos aseguren que
proceso de aprendizaje es el adecuado. El niño aprenderá más rápido y sobre
unas bases más firmes.
A pesar de que hay niños que tienen un interés natural por la lectura y otros que
no lo muestran, hay algunas recomendaciones que los padres pueden tener en
cuenta para motivar a los niños a leer y crear una visión positiva hacia la lectura.
Uno de los aspectos más importantes es el ejemplo que tiene en casa. Los niños
deben tener un referente en los padres para crear una afición por la lectura. Si no
ven leer a los padres, difícilmente desarrollarán interés hacia los libros.
Por otro lado, Deben tener una amplia variedad de cuentos y es importante que
los padres se los lean a menudo para crear un hábito y para que se familiaricen
con los libros.
más recomendables deben ser aquellos que se adecúen a la edad del niño y a sus
gustos. Es importante que tengan una buena selección de cuentos, que puedan
coger cuando les apetezca. Por otro lado, para que tengan contacto con la lectura,
es muy buena idea de este modo, comenzarán a familiarizarse con la búsqueda
de libros y a descubrir nuevas lecturas e irán conociendo las diferentes temáticas
que existen y todos los tipos de libros que se pueden encontrar.

La dramatización de historias o de los libros cuando se están leyendo a los niños


es otra de las mejores actividades que se pueden hacer, pero no hay nada mejor
que hacer una interpretación de las historias, que consiga interesarlos y divertirlos.
Además, a los niños se les debe ofrecer libertad para elegir los libros que quieran
y para dejar un libro cuando no les apetezca leer o nos les guste la historia. No se
debe forzar a leer a un niño, pues lo único que se conseguirá es que pierdan
interés por la lectura y que acaben considerándola como una actividad aburrida.
Como hemos comentado la lectura tiene múltiples beneficios. En primer lugar, es
indispensable en el desarrollo de las capacidades mentales del niño, en el
desarrollo de la memoria, del lenguaje, de su capacidad de abstracción, así como
de su imaginación.
Además, la lectura les ayuda a conocer más sobre el mundo en el que viven, a
conocerse a sí mismos y a su entorno más a fondo. Es una fuente única de
nuevas experiencias.
Por ello, es tan importante que empiecen a familiarizarse con los textos cuanto
antes, aunque no hayan aprendido a leer aún, por ejemplo, teniendo presentes los
libros o contándoles cuentos, para que cuando se les inicie en la lectura en la
escuela, no les resulte una actividad extraña.
Para Consuelo Gaitán, directora de la Biblioteca Nacional, existe una mala
percepción sobre los jóvenes: se cree que no leen por el simple hecho de no tener
libros en las manos. Pero de lo que la gente no suele percatarse es de que lo
hacen en soportes distintos. “Los jóvenes no solo usan las tabletas y los celulares
para jugar o chatear, sino que se unen a clubes de lectura y leen revistas
especializadas –afirma Gaitán–. Los temas y contenidos que consumen son muy
distintos a los que nosotros leíamos. Están las sagas, la literatura fantástica, las
historias de zombis y los cómics”.

Incluso existe la idea equivocada de que las redes sociales y las nuevas
tecnologías están alejando a los niños y a los jóvenes de la lectura. Pero los
‘booktubers’ demuestran lo contrario al aprovechar plataformas como YouTube
para reseñar libros y hablar de la lectura.
Juana Silva, coordinadora de contenido juvenil e infantil de la Cámara del Libro,
explica que la diferencia entre un joven que lee y uno que no lo hace es grande.
“Aquel que se acerca a un libro porque le atrae encuentra empatía, se ve a sí
mismo reflejado en los personajes y entiende distintas realidades. Le es más fácil
comprender el mundo y desarrolla habilidades sociales”, dice.

Y la directora de la Biblioteca Nacional añade: “La literatura amplía la capacidad


de interpretar el mundo, muestra diferentes perspectivas, formas de vida y de
pensar que no necesariamente conocemos, culturas maravillosas. Además,
despierta criterio para no tragar entero. Son herramientas fundamentales para la
ciudadanía”.
Según el ‘Estudio internacional de progreso de comprensión lectora’, leer es
fundamental en el proceso de aprendizaje de los niños. El documento sostiene
que los estudiantes lectores son exitosos académicamente y no solo en lenguaje,
sino también en matemáticas, ciencias naturales y sociales, y demás áreas.

Además, explica que, sin importar su nivel socioeconómico, los niños que nacen y
crecen en hogares en los que se recrea la tradición oral a través de canciones,
cuentos y juegos de palabras, y donde se lee en voz alta a los pequeños, tienen
muchos beneficios. “Son niños que se expresan mejor, viven el aprendizaje formal
de la lectura y la escritura con mayor facilidad y tienen más posibilidades de
convertirse en lectores autónomos y críticos”, añade el mismo estudio.

De los consejos que dan los expertos a quienes deseen fomentar el hábito de la
lectura en sus hijos hay dos que son claves: no obligar y ser ejemplo.

Si la lectura se impone, los niños y jóvenes la verán como una obligación y no


como un acto motivado por un deseo genuino. Esto suele ocurrir en los colegios,
donde a los estudiantes les dicen qué libros leer, cuándo y en cuánto tiempo. Y
esto termina aburriéndolos. Además, es necesario dejar que ellos elijan los libros
según sus gustos.

Por otro lado, si el niño observa que sus padres leen frecuentemente y que,
además, disfrutan de esta actividad, es muy probable que imiten esa práctica.

Desde la familia se pueden generar espacios de lectura. Por ejemplo, la tradición


de leer un cuento en voz alta antes de dormir es una práctica que no se debería
perder.

Según el Ministerio de Educación, para formar lectores que incorporen la lectura


en su vida cotidiana y se desenvuelvan con destreza frente a la escritura es
necesario promover una cultura lectora. Y eso implica, entre otras acciones,
fomentar el acceso a los textos para que estén al alcance de los lectores y
garantizar que sean realmente apropiados, leídos y usados de diversas maneras.
Es preciso, por ejemplo, dar a conocer a las familias los lugares y mecanismos a
través de los cuales se puede acceder a los materiales de lectura.

Una buena idea es acudir a las librerías independientes y a los espacios no


convencionales, donde los niños se puedan acercar de una manera espontánea a
los libros y otros materiales de lectura.
Planteamiento del Problema

En este apartado empezamos partiendo de la pregunta problema del proyecto


aplicado ¿Qué aspectos del entorno inciden en el proceso de lectura del grado 2
del centro educativo la capilla?, desde el nacimiento, la lectura hace parte de la
vida de los seres humanos, por ejemplo, los bebés aprenden a leer los gestos de
los adultos. En este sentido, Freire (1981) menciona que la lectura permite leer el
mundo y, a su vez, que La lectura del mundo precede a la lectura de la palabra, y
la comprensión del texto al ser alcanzada por su lectura crítica implica la
percepción de relaciones entre el texto y el contexto.

Así mismo, la lectura es un medio de liberación que permite dar fin a prejuicios,
pues leer puede ayudar a reflexionar sobre la existencia. En relación con ello,
Garrido (1997) expone que La enseñanza de la lectura no puede reducirse a la
simple alfabetización, a la mera adquisición de la habilidad de reconocer las letras
y las palabras; debe incluir el desarrollo de la capacidad de entender y sentir el
texto, así como de la afición a la buena lectura (pp.5- LA ENSEÑANZA DE LA
LECTURA EN LA EDUCACIÓN INICIAL 24 24 6). Aún más, leer tiene un
significado que supera lo formativo, pues crea experiencias. Por ello, Garrido
(1997) plantea que para tener una buena lectura hay que sentir y comprender el
texto de una manera diferente, es decir, combinando las frases, los párrafos o los
capítulos, de modo que se llegue más allá de lo que dice el texto.

Teniendo en cuenta lo anterior el motivo principal de la presente investigación


consiste en incentivar a los niños en la lectura todo esto con el fin de adquirir
pensamientos críticos y reflexivos por el entorno que los rodea. Partiendo de una
gran serie de actividades implementadas por medio de unidades didácticas
abordadas directamente desde el contexto comunitario con productos del medio y
recursos ancestrales y culturales

También es importante mencionar que la oralidad cultural como parte de la


enseñanza de la lectura en la primera infancia ayuda a los niños a la construcción
de su identidad y, lo más importante, a reconocer a otras culturas como parte de
su vida social. Y a demás por medio de la lectura unificar mas las relaciones
familiares en el ámbito de la vida cotidiana cuando se leen cuentos y se sigue la
rutina siendo los padres un ejemplo a seguir para los niños despertando el interés
por la lectura

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