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Alcoholismo y Sociedad, Tendencias Actuales - Trabajos de Revisión
Alcoholismo y Sociedad, Tendencias Actuales - Trabajos de Revisión
Resumen
Se hizo una revisión bibliográfica con el objetivo de dar a conocer de forma más actualizada la
repercusión nociva del consumo del alcohol para la salud, la familia y la sociedad, el cual está
tan extendido ampliamente en el mundo y de ello nace una enfermedad, el alcoholismo, cuyas
consecuencias tienen una incidencia biológica, psicológica y social, constituye la toxicomanía de
mayor relevancia a escala mundial por su prevalencia y repercusión. Actualmente se ha
propuesto el término de "síndrome de dependencia del alcohol" por el de alcoholismo. El alcohol,
además de los numerosos problemas médicos que produce, es también una fuente de
problemas sociales. El peligro del alcoholismo está presente por igual en todas las personas. La
adolescencia es considerada un factor de riesgo, donde se pueden favorecer las conductas de
consumo de alcohol, ya sea por la reafirmación de la independencia, la virilidad, la libertad en la
toma de decisiones, la creencia de determinados mitos o la imitación a los adultos. El estrés, los
factores genéticos y ambientales influyen significativamente en el alcoholismo en general y en la
recaída alcohólica.
Palabras clave: alcoholismo, estrés, factores de riesgo, familia, problemas sociales, salud,
síndrome de dependencia del alcohol.
Desde la más remota antigüedad se conocen los efectos nocivos del uso y abuso en el consumo
de bebidas alcohólicas. El alcoholismo es una enfermedad crónica, progresiva y fatal,
caracterizada por tolerancia y dependencia física y por cambios orgánicos patológicos. Existe
predominio del sexo masculino de esta afección, aunque es cada vez mayor su adición por el
sexo femenino y en jóvenes en general , se observa en más del 16 % de las personas mayores
de 65 años y se reporta una alarmante incidencia mundial.1-6
El alcohol, del árabe alkuhi (esencia o espíritu) es la droga más consumida en el mundo. Su
utilización por el hombre, en forma de brebaje, se supone que data de los albores de la
humanidad. La ingestión inicial vinculada con actividades religiosas dio paso a su consumo
colectivo. Desde entonces se distinguieron dos grandes categorías de consumidores, aquellos
que beben dentro de las normas sociales de responsabilidad y los que, desafortunadamente
pierden el control y se convierten en bebedores irresponsables.1-6
Esta concepción terminológica sirve de base, desde el punto de vista médico, a 2 sistemas
diagnósticos empleados casi en paralelos; en Europa son más aceptados los de la OMS (Décima
Edición de la Clasificación Internacional de Enfermedade-CIE-10-1982) mientras que en
Norteamérica los plasmados en el Manual de Diagnóstico y Estadística (DSM IV 1994). La CIE-
10 define el sistema de dependencia alcohólica como un trastorno, no una enfermedad, mientras
que el DSM IV plantea que la dependencia a sustancias psicoactivas, extensivo al alcohol, es un
patrón desadaptativo de consumo que conlleva a un deterioro o malestar clínicamente
significativo. Los principales criterios empleados en ambas son: el excesivo consumo de alcohol,
la repercusión física y psíquica que produce y los conflictos psicosociales, legales, laborales y
familiares que crea.2,3,6 En el anexo 1 se exponen algunos de los criterios más empleados en el
manejo de esta enfermedad. Para el pesquisaje masivo y clasificación de los alcohólicos se
utilizan cuestionarios establecidos mundialmente (Cuestionarios de Identificaciones Diagnósticas
(CID), el CAGE, entre otros) cuyos resultados se aproximan con bastante exactitud a la realidad.
Una regla de oro que no debe ser jamás olvidada es que una vez establecido el comportamiento
ante consumo dañino o dependencia, el objetivo de la intervención médica es lograr la
abstinencia total definitiva, ya que una vez alcohólico, siempre se es alcohólico3, 6, 10-
14 (anexos 2,3).
Es una enfermedad que causa dependencia y que se puede adquirir por varias vías. Se ha
sugerido que resultan factores de riesgo de alcoholismo la soltería, los trastornos nerviosos, la
subescolarización y sobre todo los conflictos matrimoniales y en las relaciones sociales. Se ha
señalado entre las principales motivaciones del alcoholismo en este medio la influencia de
amistades y familiares, ambiente festivo y problemas de la pareja o del entorno, sobre todo en la
actividad laboral. Se atribuyen a la habituación alcohólica causas relacionadas con el estrés, que
provocan alteraciones en la relación social, familiar y económica de los sujetos expuestos a este
riesgo, asociado con trastornos de la personalidad, rechazo al medio, evasión de conflictos,
inmadurez emocional.11-15
Por su gran importancia muchos países dedican cuantiosos recursos humanos y financieros al
manejo de esta toxicomanía y en las investigaciones para dar solución a este mal. En Europa se
estima su costo entre 2 y 3 % del producto nacional. En Estados Unidos se calcula que su
significación económica está en los alrededores de los 100 billones de dólares anualmente. De
un modo similar ocurre en España e Inglaterra.8
El consumo excesivo de alcohol es una de las causas más frecuentes de transgresiones sociales
como violaciones y riñas, práctica de sexo sin medios de protección, abandono familiar y laboral.
Se vincula mundialmente con el 50 % de las muertes ocurridas en accidentes de tránsito y el 30
% de los homicidios y arrestos policiales. Reduce de 10 a 15 años la expectativa de vida y
determina el 30 % de las admisiones psiquiátricas y el 8 % de los ingresos por psicosis. También
se ha responsabilizado con casi la mitad de los condenados por faltas y delitos tan graves como
asesinatos. En este medio se relaciona con la tercera parte de los hechos delictivos y violentos y
entre el 20 y el 25 % de las muertes por accidentes.6, 9-16
Los alcohólicos tienen, como grupo social, uno de los porcentajes más altos de separación
matrimonial y de divorcio. Sin embargo, en estudios realizados en el país se ha encontrado que
alrededor de la mitad de las personas que ingieren bebidas alcohólicas logran mantener vínculo
marital por mucho tiempo.9, 11-13
Muchos autores han estudiado la dinámica familiar en el hogar de procedencia del alcohólico y
señalan su coincidencia con la llamada "crisis familiares no transitorias" (divorcio, enfermedades
crónicas o muerte en uno o ambos padres, hostilidad excesiva, violencia doméstica, pérdida de
la estimación hacia el bebedor, descuido de los hijos, situaciones judiciales, actos deshonrosos,
malas relaciones interpersonales, entre otras). Esta situación se considera que condiciona un
trastorno del aprendizaje en una población específica de niños que se ha denominado "niños con
incapacidad para aprender" con inteligencia normal, que no presentan el perfil característico de
retraso mental y en los que se invocan un déficit cognoscitivo específico para el
aprendizaje.1,15-18 Los resultados de otros autores muestran que no existen diferencias
significativas entre los controles y los niños de alcohólicos severos y antisociales o de
alcohólicos deprimidos o de familia con historia positiva de alcoholismo. Por esta razón,
concluyen que el desarrollo mental global no está asociado con el alcoholismo en los padres.
Esto eleva la posibilidad de que los problemas posteriores en estas áreas puedan reflejar
procesos cognitivos más específicos o el impacto de problemas conductuales y familiares entre
esos niños.8, 15, 17
Salvo algunos países de cultura hindú o islámica donde el consumo de alcohol es menor como
consecuencia de tradiciones o influencias religiosas, alrededor del 70 % de la población, por
encima de los 15 años, ingiere alcohol en determinada cantidad, del 3 al 5 % son dependientes
y, de ellos, el 10 % se convertirán en bebedores problemas en algún momento de su vida.
Actualmente España ocupa el 4to lugar mundial en el consumo de alcohol después de Francia,
Luxemburgo y Alemania. Cada español consume por término medio 108 litros de alcohol al año,
casi el 4 % de la población española (1 600 000 personas) consume diariamente más de 100 g.
Se considera que existe un incremento de consumo de alcohol de alrededor del 30 % en los
países desarrollados durante los últimos 20 años, índice muy superior al esperado por el
aumento de la población en esta etapa. En Cuba, el 45,2 % de la población mayor de 15 años
consume bebidas alcohólicas, con un índice de prevalencia de alcoholismo entre el 7 y el 10 %,
uno de lo más bajo en Latinoamérica, con predominio en edades comprendidas entre los 15 y 44
años. Se señala que en los últimos 15 años el consumo ha aumentado notablemente en nuestro
país, que el 90,4 % de la población inicia la ingestión del tóxico antes de los 25 años y que la
mayoría de los bebedores problema se encuentra entre 25 y 42 años. Se calcula que el
alcoholismo puede incidir hasta en el 40 % en los ingresos de los servicios de urgencia y que el 2
% de los enfermos que ingresan en los servicios médicos hospitalarios sufren de una
enfermedad causada o agravada por el abuso de alcohol.6, 11-13, 16
El alcoholismo se encuentra entre las primeras causas de muerte en varios países como en
España, en donde ocupa el tercer lugar. En los Estados Unidos ocupa el primer lugar de los
fallecidos entre los 15 y 45 años de edad. El alcohol, en sus diversas presentaciones, ya sea de
forma accidental o intencional, ocasiona una de las más importantes intoxicaciones actualmente,
tanto por sus efectos como por el gran número de individuos afectados, ya sea en suicidios,
consumidores esporádicos, alcohólicos crónicos o niños.19-21
Las serias complicaciones de los alcohólicos pueden evitarse con el tratamiento oportuno y
adecuado. En el anexo 4 se exponen las principales afecciones que se asocian con esta
toxicomanía. Es de señalar que a pesar de ser las afecciones digestivas las más mencionadas
popularmente, las miopatías y las neuropatías periféricas son, sin embargo, secuelas más
frecuentes.6, 9
Los problemas relacionados con el tratamiento del alcoholismo son complejos y difíciles, y
rebasan el marco de nuestras pretensiones en este artículo, solo haremos una breve referencia a
este importante aspecto. Los lineamientos generales de la lucha contra esta adicción están
contemplados en el Programa Nacional de Prevención y Control del Alcoholismo y otras fármaco
dependencias vigentes en el país, en donde se enfatiza sobre la necesidad de desarrollar
acciones de prevención y promoción encaminadas a reducir los patrones de consumo alcohólico
excesivo y sus consecuencias sanitarias y sociales, conjuntamente con el manejo
multidisciplinario de estos enfermos, con la participación de todos los niveles de salud a partir del
médico de la familia. En estudios realizados en el país se ha demostrado un bajo nivel de
información de la población sobre algunos efectos nocivos del consumo excesivo e irresponsable
de alcohol. El sistema de creencias sobre el alcohol y el alcoholismo muestra la presencia de
diversos mitos que requieren un adecuado abordaje educativo, válido para toda la población con
independencia de sus pautas de consumo de alcohol. La recaída alcohólica es un gran problema
en el tratamiento del abuso del alcohol y del alcoholismo. El estrés, los factores genéticos y
ambientales influyen significativamente en el alcoholismo en general y en la recaída alcohólica.
En su mecanismo se ha invocado una disfunción de la neurotransmisión dopaminérgica central
en que estímulos neutrales previos se pueden convertir en señales condicionales que activan la
liberación de dopamina, con deseos gratificantes de beber. La lucha contra el alcoholismo
requiere que las instituciones públicas y privadas en sus diversos niveles, aporten una respuesta
en varios frentes que abarca la atención a alcohólicos y drogodependientes, a la represión del
tráfico de drogas y a la formación de profesionales.20-23
Las investigaciones sobre el alcoholismo demandan grandes gastos. Sin embargo, en el país se
realizan innumerables esfuerzos para el estudio y tratamiento de los pacientes alcohólicos. Es
evidente la necesidad desarrollar acciones de prevención y promoción encaminadas a reducir los
patrones de consumo alcohólico excesivo y sus consecuencias sanitarias y sociales,
conjuntamente con el manejo multidisciplinario de estos enfermos, con la participación de todos
los niveles de salud a partir del médico de la familia.
1. Consumo de riesgo
Cuando se cumple solamente el primer requisito, se dice que la persona presenta un
consumo de riesgo (por el peligro de enfermar).
2. Consumo dañino.
Cuando se cumplen los requisitos primero y segundo.
3. Dependencia
Cuestionario CID
Cuestionario CAGE
I. Afectaciones neurológicas
Neuropatía periférica distal, cefalea, temblores, convulsiones (sobre todo en personas
predispuestas a la epilepsia), miopatía alcohólica aguda, degeneración cerebelosa, daño
cortical difuso con demencia alcohólica, lesiones degenerativas del cerebro, médula
espinal y nervios periféricos (en casos avanzados), falta de fuerza muscular, calambres
y dolores en las piernas y los brazos, accidentes vasculares encefálicos. Intoxicación
alcohólica aguda, síndrome de abstinencia, ambliopía alcohol-tabaco, pelagra,
manifestaciones tóxico- metabólicas, enfermedad de Marchiafava-bignami, mielinosis
central de la protuberancia.
II. Efectos sobre el aparato digestivo y glándulas anexas
Glositis, esofagitis, gastritis, diarreas, úlcera gastro-duodenal; várices esofágicas; cáncer
gástrico, de la boca y del esófago; hepatitis, hígado graso, cirrosis hepática, pancreatitis
aguda hemorrágica y pancreatitis crónica.
III. Efectos sobre el aparato cardiovascular
Aterosclerosis temprana, hipertensión arterial, infarto del miocardio, cardiomiopatías.
IV. Efectos sobre el aparato genitourinario
Disfunción sexual, reducción de hormonas masculinas por la acción de alcohol sobre el
testículo y la hipófisis, reducción de la entrada de sangre en los cuerpos cavernosos
debido a la aterosclerosis temprana, deformidades del niño al nacer y graves trastornos
de la inteligencia o la conducta en los casos menos severos (feto alcohólico). Trastornos
vesicales. Cáncer de vejiga.
Trastornos psiquiátricos
Depresión con ideas y conducta suicidas, pesadillas, insomnio, celos enfermizos, alucinaciones
auditivas y visuales, delirios de daño y persecución, alteraciones de conducta.
Summary
A bibliographic review was made aimed at making known in a more updated way, the harmful
repercussion of alcohol ingestion for health, family and society. It is widely spread all over the
world and a disease, alcoholism, is derived from it. Its consequences have a biological,
psychological and social incidence and it is the most relevant toxicomany in the world due to its
prevalence and impact. Nowadays, it has been proposed the use of the term alcohol dependance
syndrome for alcoholism. Alcoholism, produces not only numeorus health problems, but social
problems, too. The danger of alcoholism is present in all persons likewise. Adolescence is
considered a risk factor, where the alcohol ingestion conducts may be favored due to the
reaffirmation of independence, virility, the freedom in the decision-making process, the belief of
certain myths, or the imitation of adults. Stress and the genetic and environmental factors
influence significantly on alcoholism, in general, and on the alcoholic relapse.
Key words: alcoholism, stress, risk factors, family, social problems, health, alcohol dependance
syndrom
Referencias Bibliográficas