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UNIDAD V:

"ASPECTOS CLÍNICOS Y TERAPÉUTICOS"

Dispositivos terapéuticos para la asistencia de los problemas relacionados al consumo de


drogas: La comunidad terapéutica como modelo y alternativa para el cambio.-Mariano Carrizo

Hablar de drogas es hablar de personas que las consumen, de situaciones y contextos en los que se
vinculan estas drogas y estas personas, y de múltiples posibilidades para esta tríada( sustancia- sujeto-
contexto)
Algunas de estas alternativas de relación se encuadran, dentro de lo que se denomina "consumos no
problemáticos de drogas"(uso experimental o esporádico)
Otras formas de relación posible entre las personas y las sustancias manifiestan características singulares
que pueden ubicarse dentro de "Los criterios diagnósticos de abuso y dependencia del DSM 4" plantean
que la relación sujeto droga ASUME una condición mórbida por la cual eventualmente la o las personas que
establezcan dicha relación, podrían demandar a requerir asistencia terapéutica de algún tipo, para resolver
los problemas vinculados al consumo.
Hablar de drogas, es también hablar de aquellas estrategias que se han dado en el devenir histórico, para
enfrentar y tratar de resolver con mayor o menor éxito, los consumos problemáticos de drogas.
Si bien en una rápida mirada a los dispositivos actuales, podemos ver una heterogeneidad significativa,
pueden rastrearse pautas comunes de origen, en la gran mayoría de los programas terapéuticos vigentes.
Dichas divergencias en las definiciones del método tienen que ver con cuestiones más generales tales
como, variables socio-políticas, demográficas y epidemiológicas y otras muy particulares como la
singularidad de los técnicos y profesionales que componen las instituciones
La intención del presente capítulo tiene que ver con poder identificar los antecedentes históricos de las
modalidades asistenciales, reconocer sucesos particulares y las condiciones que dieron lugar a las mismas.

La comunidad terapéutica.Su aplicación en adicciones


Hablar de dispositivos terapéuticos es hablar irremediablemente de la comunidad terapéutica (CCTT).Las
mismas se han erigido históricamente como la alternativa hegemónica, para la asistencia de personas con
problemas de consumo de drogas, las prácticas y representaciones que emanan de ella, aún impregnan de
manera insoslayable, la lógica de acción de los dispositivos actuales.
De León, dice que: La comunidad terapéutica ha demostrado ser eficaz instrumento para el tratamiento del
abuso y dependencia de sustancias, y los problemas relacionados en la vida del paciente. "La comunidad
terapéutica es fundamentalmente una estrategia de autoayuda, desarrollada en un principio en un marco
independiente de la psiquiatría, la psicología y la medicina convencionales"
En forma Complementaria, Pozo y Gómez, plantea que a diferencia de otras modalidades de tratamiento,
"La comunidad terapéutica constituye un medio terapéutico cuyo régimen diario consiste en actividades
estructuradas y no estructuradas, e intervenciones sociales que se desarrollan en situaciones y en entornos
formales e informales".
Para Nida, "Las comunidades terapéuticas son ambientes residenciales libres de drogas, que usan un
modelo jerárquico con etapas de tratamiento, que reflejan niveles cada vez mayores de responsabilidad
personal y social"
En su manejo habitual la noción de comunidad terapéutica contiene al menos un doble sentido: por una
parte es un concepto técnico y científico, y por otra parte es un término mediático con una fuerte carga
emocional y simbólica(visión estereotipada y fantasiosa que circula mediáticamente)
El modelo actual de viene de dos corrientes, La primera, orientada hacia la asistencia de diversos
problemas de Salud Mental en general. La segunda, planteada específicamente para el tratamiento de
adictos.

El Modelo Jones
El esquema terapéutico así denominado, surge a partir de la necesidad de revisar los parámetros
asistenciales, en Salud Mental vigentes en la época,su propuesta metodológica reconoce dos antecedentes
fundamentales( tratamiento en el Centro Mill Hill de Londres, y su continuidad en el Hospital Henderson)
A partir del año 1947, se comenzó a desarrollar "Los principios de establecimientos abiertos con terapias de
grupo" ,se comienza a desarrollar el concepto de comunidad terapéutica. Jones, desarrolla aspectos más
conceptuales en torno a la asistencia, recuperando los fundamentos de la psiquiatría social.
La idea de Jonas surge a partir de una mirada crítica y de una reacción ante las condiciones de los servicios
en Salud Mental de esa época, las condiciones de hacinamiento, las altas tasas de cronicidad, o la negación
de ciertos derechos humanos básicos, a partir de los abusos de poder propios de la jerarquización absoluta
y cristalizada en los dispositivos y en la simetría de las relaciones.Se trata de un intento de establecer un
sistema democrático en los hospitales, donde la denominación de los médicos se reemplazará por una
comunicación abierta de contenido y sentimientos, compartiendo los pacientes y el personal, la
información, la toma de decisiones y la solución de los problemas.

La Comunidad "Democrática"
Jones, propone un cambio sustancial hacia la dentro de dichas instituciones, incorpora la idea de lo
democrático como instancia de encuentro y socialización entre los profesionales a cargo de los servicios y
los usuarios de los mismos, redefinir los términos de la relación médico- paciente imperante,
deconstruyendo así las jerarquías establecidas hegemónicamente.
Se planteaba un sistema igualitario, en donde todos asumían los mismos deberes y los derechos como
miembros iguales Dentro de este dispositivo- sociedad
Principios:
-La toma de decisiones se llevaba a cabo en instancias de asamblea, en donde, tanto los profesionales,
como los miembros internos participaban igualitariamente.
-Se pone en práctica y revaloriza el concepto de "equipo terapéutico", como grupo de trabajo, asumiendo
una nueva dinámica de funcionamiento: las reuniones de equipo
-La preeminencia de lo grupal, como dispositivo, las dinámicas de grupo en el Aquí y ahora, en donde esté
se configuraba como un instrumento con dos finalidades: La terapia y el aprendizaje.
-Se organizan prácticas socioeducativas (socio terapia) con la finalidad de que los usuarios, adquieran,
entrenen y puedan instrumentar nuevas herramientas y recursos (destrezas sociales) para asumir
progresivamente responsabilidades, en torno a su vida y las decisiones que definían el curso de la misma.
-En las dinámicas grupales, La confrontación aparecía como el mecanismo clave que permitía allanar los
conflictos interindividuales y avanzar en el proceso terapéutico.
-El principio fundamental que regía el marco de las intervenciones tenía que ver con que "toda intervención
en este campo, era eminentemente terapéutica" y el fin principal de tales intervenciones tenía que ver con
favorecer procesos de maduración en las personas.
El modelo de jóvenes encontró posteriormente anclaje en los dispositivos asistenciales para pacientes
psicóticos.

El Modelo Daytop
Este modelo sienta sus presidentes de manera singular en los grupos de autoayuda, que alcanzaron
protagonismo en la década del 50 en los Estados Unidos.
Dos causas pueden remitirse en torno a dicho fenómeno por un lado el rechazo y descreimiento del aporte
profesional e institucional en el campo del tratamiento de las adicciones, por otro el movimiento impulsado
desde ese país hacia el
desinternamiento de grandes masas de personas hacinadas en instituciones de Salud Mental, como una
reacción crítica hacia las condiciones imperantes en las mismas.

Synanom
En el año 1958, Charles Dederich, funda en su propia residencia,el centro Synanom. Él, junto a otros
miembros de alcohólicos anónimos comienzan a captar a personas con problemas de consumo de alcohol y
otras drogas fundamentalmente heroinómanos.
Ofrecian un espacio de contención cerrado, en donde Los adictos permanecían todo el tiempo en la
residencia, asumiendo que el resto de la sociedad no estaba preparada para aceptarlos ni darles inclusión y
tratamiento.
Se constituye como una comunidad Residencial para adictos a drogas que no ofrecía financiación pública,ni
trabajo terapéutico reglado, ni la participación de ningún profesional, actuaba formando una "familia
sustituta", donde Los adictos desarrollaban su proyecto de vida al margen de la sociedad.
Sus rasgos principales fueron Una firme posición de abstinencia, Un fuerte culto del dominio de Sí, y la
Autodeterminación.
Tales métodos expresan con bastante claridad, la articulación que se dio desde este modelo entre los
grupos terapéuticos y los grupos de autoayuda propios de AA.
Los lineamientos internos fueron creciendo rigidez y verticalismo, esto sumado a las características de
personalidad particulares de su fundador y llevaron a que la iniciativa terapéutica se transformará en un
culto y luego en secta,de la que Dederich se autoproclamara su dudoso líder.

Daytop Village
El Dr Alexander Bassin y Daniel Castiel, recuperan los lineamientos fundamentales de Synanom y fundan en
1963 junto al padre William o Brian, de la Iglesia Católica de los Estados Unidos la comunidad Daytop
Lodge, posteriormente Daytop Village.
Se fue gestando un modelo mixto, con intervención profesional.
Los planteos terapéuticos de Carriel y sus colaboradores, eran de corte bien directivo y dónde eran
comunes estilos de confrontación directa, alentando actitudes auto-responsables entre Los adictos.Se
promovía el concepto de reality therapy,scream therapy.
Como la iniciativa comienza en relación a la asistencia de personas provenientes de contextos carcelarios,
el modelo de prisión aparece como forma de organización interna, que estructura y regula la cotidianidad.
Aportes del modelo:
-El hecho de definir el tratamiento por etapas
-La articulación entre profesionales y adictos recuperados, en la composición de los equipos terapéuticos
-El uso del conjunto como herramienta terapéutica
-La regulación jerarquizada en los roles y pautas de convivencia interna, en la comunidad terapéutica
Las críticas centrales:
Se trata de otra cuestión que podemos explicitar como la unilinealidad de los objetivos organizados en
torno a la opción de la "perspectiva de la recuperación de la vida correcta"
No tiene en cuenta las características diferenciales de cada adicto, lo cual también se contrapone a la
noción de indicación terapéutica.

El desarrollo del modelo de CCTT en Europa: "El proyecto Uomo"

Don Mario Picchi, comienza en el año 1968 un centro de acogida para desamparados, brindándoles
servicios básicos de contención, muchos de ellos presentaban problemas de consumo de drogas.
En el año 1971 asume la conducción y liderazgo de la Organización Civil "Centro Italiano de Solidaridad"
Durante el período comprendido entre los años 1970 y 1980, se percibe fuertemente en Italia la influencia
del psiquiatra Franco Basaglia, quien al frente del movimiento de antipsiquiatría o de la psiquiatría
democrática bregaba por un modelo asistencial en Salud Mental, por fuera del sistema solar hegemónico
del manicomio, comienza a tomar forma el modelo italiano,Mario Picchi y Juan Pares Plans, fundan
proyecto Uomo
Características de Proyecto Uomo:
El proyecto Uomo, avanza en la definición de un modelo propio, el reconocimiento de la importancia del
abordaje familiar, la definición de objetivos terapéuticos más individualizados y la conformación de equipos
mixtos integrados por profesionales ex adictos y también voluntarios, son algunos de los ejes más
significativos, de dicho cambio.
Bajo la influencia directa de Progetto Uomo, surgen múltiples propuestas terapéuticas similares en Italia,
asimilado en otros países como España( en 1989, Proyecto Hombre)

Las CCTT en Argentina,desde sus orígenes a la actualidad


Las primeras experiencias terapéuticas vinculadas al consumo de drogas en Argentina, debemos distinguir
entre aquellas desarrolladas desde el ámbito gubernamental, y las que surgieron en el ámbito privado, de
las organizaciones sociales y de salud ONGs.
De las propuestas estatales, la primera entidad dedicada en nuestro país el problema del consumo de
drogas fue El fondo de ayuda toxicológica(F.A.T) fundada en 1966 por el profesor Alberto Calabrese.En la
actualidad la FAT sigue prestando servicios de asistencia, prevención, asesoramiento y docencia en torno a
las adicciones.
En el año 1973, se crea por Ley N°20.332, el Centro Nacional de Reeducación social ( tratamiento médico,
psicológico y social, de personas comprometidas con el uso de drogas y sus grupos familiares)
Ambas instituciones proveían un sistema de asistencia ambulatoria, en torno a la articulación entre la
toxicología y la psiquiatría, fueron incluyendo aportes del psicoanálisis y la psiquiatría social.
En la década del 70, Aparecen las primeras comunidades terapéuticas para usuarios de drogas, generadas a
partir de iniciativas privadas.(Programa Andrés, El mismo Carlos Novelli funda una comunidad
terapéutica,Un viaje de Vuelta también apareció a fines de los 70)
Hasta el momento las CCTT en el país combinaban aportes de los modelos americanos y la alternativa
Italiana desarrollada por Uomo.Durante los años 80, se dan circunstancias particulares que inclinan la
balanza definitivamente en nuestro país, hacia el modelo italiano.
Como correlato de estas iniciativas se conforma en Argentina, la primera escuela de formación en el campo
de las tóxico dependencias en el año 1987.

En Córdoba
En la provincia de Córdoba y en el ámbito público la referencia primaria tiene que ver con el Instituto
Municipal de Alcoholismo,fundado en 1961 por el Dr Miguel Belascuain, aquel que acuñara la célebre frase
"No es alcohólico quien quiere, sino quien puede"
En 1981, lleva a la órbita provincial a dicho centro,el Instituto es declarado por decreto nacional como
Centro Nacional de referencia sobre alcoholismo.
Es a partir de allí cuando asume su denominación actual, "instituto provincial de alcoholismo y
drogadicción", podemos destacar que hasta el año 2000, solamente atendió a varones en tanto se
consideraba al consumo de alcohol y otras drogas, como un problema casi exclusivo de las personas de
dicho sexo.
Otra referencia ineludible en el campo de la prevención y asistencia tiene que ver con el trabajo de la "casa
del joven" y "el programa de atención en Salud Mental para jóvenes" de la dirección de salud mental de la
provincia.
En 1986 cambia su denominación por programa de atención al joven, se comienzan a desarrollar nuevas
alternativas asistenciales En dónde podía verse la intención de actualizar los dispositivos, optando por
configuraciones grupales por sobre el abordaje individualizado.
En el año 1990 y en función de la experiencia acumulada en el trabajo el abordaje ambulatorio con jóvenes,
se crea el "Programa El puente".En la actualidad la función primordial de casa del joven es la de planificar,
ejecutar y evaluar acciones de prevención, asistencia y rehabilitación para la población entre 14 y 24 años
de edad en el área de Salud Mental.
Es de suma importancia reconocer también el recorrido histórico realizado en relación a la asistencia de las
problemáticas vinculadas al consumo de drogas, desde los centros asistenciales monovalentes del interior
provincial.
En relación a las iniciativas del sector privado, con esquemas que buscaron amalgamar las escuelas
americanas y el modelo italiano con un menor registro de los aportes de Maxwell Jones y su propuesta de
las CCTT democráticas.
Durante la última década en todo el país y particularmente en Córdoba, se han ido gestando y
Estableciendo modificaciones significativas en el campo asistencial referido al consumo de drogas, de un
movimiento de recambio generacional, ideológico, político y técnico al interior de las
organizaciones.Existen antecedentes similares de cambio y transformación en otros países y
particularmente en España.

Los ejes del cambio.La conformación de los equipos técnicos


Es muy notable en los últimos años la tendencia a profesionalizar los servicios y darle un marco
transdisciplinario a a los mismos, si bien esta propensión se inicia comienzo de los 90, en esa época los
dispositivos asistenciales, generalmente estaban conformados de manera equilibrada por profesionales y
ex adictos o voluntarios formados, en la actualidad podemos ver una polarización hacia la conformación de
equipos altamente profesionalizados, con menor presencia de operadores.
Los equipos tienden a ser más flexibles y menos rígidos menos directivos, y menos enfocados en el control

Las Modalidades asistenciales y el resguardo de los derechos de las personas asistidas


Las opciones terapéuticas para personas con problemas de consumo están definidas a partir de la
asistencia ambulatoria, la internación prolongada comienza a perder el registro de alternativa única.
Es imperante señalar la necesidad de adecuación a las nuevas reglamentaciones en Salud Mental, Ley
23657.Los parámetros legales remarca la necesidad de reconvertir los dispositivos de salud y garantizar que
las situaciones de internamiento sean realmente excepcionales, de corta duración y monitoreo permanente
y sólo cuando se hayan agotado otras alternativas válidas.
Los esquemas ambulatorios han demostrado facilitar procesos terapéuticos más Genuinos y sólidos en
tanto se desarrollan en torno a la trama relacional del paciente

La individuación de los tratamientos


Dijimos que En España se utilizó la figura del café para todos para Designar la propensión de homogeneizar
la problemática de consumo y ofrecer en tanto un dispositivo único de asistencia poco flexible como para
adecuarse a las particularidades del individuo, en la actualidad los dispositivos de abordaje se han
complejizado, especializado de acuerdo a las características de la demanda, sostener abordajes acordes a
las características de la demanda, en un proceso de diferenciación permanente y progresivo.
Este tipo de estrategias diferenciadas tienen que ver con el objetivo institucional de priorizar y jerarquizar
el área de diagnóstico y admisión, en función del crecimiento técnico y científico en dicha área el proceso
diagnóstico inicial se ha ido enriqueciendo y complejizando, dotándolos de información clínica, altamente
valiosa y significativa.A partir de un plan de tratamiento individualizado, a partir de un diagnóstico
exhaustivo de la persona, sus dificultades y recursos, en donde constan objetivos, a partir de un diagnóstico
exhaustivo de la persona sus dificultades y recursos en donde constan objetivos particulares, lo cual trae
aparejado una mayor adhesión al tratamiento
Como un eje correlativo de singular importancia, debemos mencionar la tendencia de los equipos técnicos
de comenzar evaluar los procesos y resultados terapéuticos.

La duración de los tratamientos


Los plazos en que se definen los procesos terapéuticos se han acortado ostensiblemente, los mismos
estarán definidos por las particularidades de la problemática en cada sujeto y no por una consideración
general.
Otra alternativa diferencial tiene que ver con cambios en la secuenciación por etapas del tratamiento,
históricamente a partir de este esquema la mentada etapa de reinserción social se ubicaba
tradicionalmente al final del mismo en la actualidad trabajamos desde la concepción de que los procesos de
reinserción o revinculación de la persona con su medio deben fomentarse desde el inicio mismo
históricamente a partir de este esquema la mentada etapa de "reinserción social" se ubicaba
tradicionalmente al final del mismo. En la actualidad, trabajamos desde la concepción de que los procesos
de reinserción o revinculación de la persona con su medio, deben fomentarse desde el inicio mismo de
tratamiento.

El corrimiento del eje en la abstinencia


Durante mucho tiempo y aún con gran supremacía en la actualidad, los tratamientos han estado orientados
centralmente a suprimir el consumo.
Actualmente los equipos técnicos plantean mayor flexibilidad y tolerancia con las situaciones de recaídas,
reconociéndolo como parte del proceso terapéutico y avanzar por un lado en el desarrollo de estrategias de
prevención de recaídas y también en el trabajo terapéutico sobre los fenómenos de recidiva cuando éstos
acontecen.Algunas instituciones pueden permitirse que sus estrategias terapéuticas no estén orientadas al
logro de la abstinencia total, sino que pueden establecerse parámetros y objetivos particulares según el
caso y la demanda.(enfoque de reducción del riesgo)

La importancia Diagnóstica
En la actualidad, siguen siendo pocos los centros de tratamiento que cuentan con equipos debidamente
formados, dotados de estrategias y dispositivos específicos para el desarrollo de tareas diagnósticas.
Es vital el reconocimiento de las herramientas clínicas diagnósticas que propone el DSM 4 y el CIE 10.
El diagnóstico de la Comorbilidad: Uno de los aspectos más significativos del trabajo en instancias
diagnósticas, tiene que ver con la identificación y el relevamiento clínico, de trastornos asociados al
consumo de drogas. ( trastornos psicológicos y psiquiátricos que aparecen vinculados al consumo de
drogas, "Patología Dual" : coexistencia de dos trastornos: uno debido al abuso de sustancias y otro tipo
psiquiátrico o psicológico)
Se requiere de mucha precisión para el diagnóstico comorbilidad, resultando muy complejo establecer una
pauta de la etiología origen de los trastornos.
Razones más relevantes para la identificación de la comorbilidad:
 claridad diagnóstica
 curso y pronóstico variado
 permite determinar las necesidades terapéuticas y potenciar la eficiencia terapéutica
 se asocia con una mayor morbilidad y mortalidad
 se asocia con un incremento de la conducta suicida
 se asocia con un incremento de la conducta homicida
 se vincula con una mayor necesidad de hospitalización y tiempo de estancia

Existen pocas instituciones en la actualidad, que desarrolla en dispositivos asistenciales específicos y


adecuados a las necesidades de las personas con trastornos comórbidos.

El aporte de las Ciencias Comportamentales


Reconocimiento y empleo de los parámetros teóricos y técnicos de las ciencias del comportamiento,
aplicadas a los consumos problemáticos de drogas, las mismas abordan el abuso de drogas desde el
reconocimiento de sus causas y consecuencias
Terapia Cognitiva de Beck
Propuesta del refuerzo comunitario de Meyer y Smith
El enfoque de prevención de recaídas de Marlatt y Gordon...etc
La importancia fundamental del abordaje psicológico en el tratamiento de los consumos problemáticos de
drogas lo plantea, Becoña Iglesias, cuando habla de la centralidad de tratamiento psicologico en adicciones.

La intervención comunitaria y el trabajo en Prevención


En la actualidad toda aquella persona que se precie de trabajar en investigación, docencia asistencia,
vinculada al campo de los consumos problemáticos de drogas, no puede desconocer la importancia vital de
fomentar el desarrollo de tareas preventivas en distintos ámbitos( comunitario, educativo, laboral)
"La prevención es un proceso activo de implementación de iniciativas tendientes a modificar y mejorar la
formación integral y la calidad de vida de los individuos, fomentando el autocontrol individual, y la
resistencia colectiva de la oferta de drogas" Definición de Martín.
Desde hace pocos años, en función de la experiencia capitalizada a partir de la asistencia, algunas
instituciones vinculadas históricamente a la asistencia, han comenzado a desarrollar actividades en el
campo de la promoción de la salud la prevención.
Un factor más que significativo para el análisis, tiene que ver con la alarmante (e histórica) ausencia de
políticas públicas en este ámbito.
Las únicas alternativas vigentes en prevención, son aquellas vehiculizadas por las organizaciones de la
sociedad civil.

El Posicionamiento Social
Históricamente, las comunidades terapéuticas han mantenido un perfil muy particular en relación a su
integración en el entramado de las organizaciones de la sociedad civil.
No son muchos los ejemplos de CCTT, que han podido vincularse activamente con otras instituciones en un
plano de articulación sociopolitica, sí recuperamos su devenir veremos que muchas de estas instituciones
han situado sus dispositivos en zonas rurales, en condiciones muy particulares de aislamiento, "dinámica
intramuros"
Una mirada parcializada aún imperante sobre el individuo o la problemática puede ser una de las causas de
tal situación,la misma debe ser entendida siempre como una grave limitación de las instituciones en tanto
pierden contacto con las referencias políticas, ideológicas y científicas, que en cualquier campo de
intervención social, enriquecen, dan vida, y permiten el crecimiento institucional.
En el Modelo psicosocial(Helen Nowlis) nos hemos situado con un posicionamiento activo asumiendo
protagonismo y representación En diversas redes.
Conclusión
Los cambios y las modificaciones, descriptos anteriormente, han dado lugar a nuevas configuraciones en los
modelos actuales de asistencia en drogodependencias.No obstante, debemos reconocer la influencia
significativa hasta la fecha de los modelos tradicionales de CCTT.
De los mismos aún podemos reconocer en nuestras prácticas:
● El reconocimiento y aceptación del valor del aprendizaje social como alternativa
● El sostenimiento de la idea de comunidad relacionada al ámbito grupal
● La revalorización del aporte técnico en la correlación entre lo terapéutico y lo educativo o
socioeducativo
● El reconocimiento de la capacidad de contención diferencial de estos dispositivos asistenciales.

Todavía CT "Pensar la comunidad terapéutica en la postmodernidad"- Martín


Teruel
Introductorias
La comunidad terapéutica, es una manera de concebir un proceso de internación, se ha constituido en un
modelo de referencia para el abordaje no sólo de las toxicomanías y los programas de consumo sino
también otra de las llamadas patologías del acto.
El carácter referencial de las comunidades terapéuticas se ha dado a partir de haberse mostrado como un
sistema eficiente para suspender la ingesta compulsiva y modificar algunas conductas antisociales.
Este trabajo pretende si debe rescatar las utilidades de una comunidad terapéutica, pero desde la fan de
pensar nuevamente en la práctica que tiene lugar dentro de este dispositivo, cuestionandola para hacerla
más fértil
Ejes tradicionales de una CT
Las comunidades terapéuticas tuvieron un surgimiento para dar una respuesta en donde no había,para
Grimson, "La aparición de comunidades terapéuticas para adictos tuvo que ver con brindar un tratamiento
integral en el área de la drogodependencia, y a la vez para dar respuesta a una problemática social grave, la
marginación de los afectados por las políticas de salud".
Importaba detener los episodios de intoxicación y trabajar en torno de un reaprendizaje de conductas,
incorporando nuevas habilidades de afrontamiento y estrategias de autocontrol.Además, se sostenía en
una estricta presentación de contingencias, por lo general punitivas, a los comportamientos que infringían
las normas establecidas.( recuperar los valores humanos olvidados por los adictos, los ideales de
adaptación, para reinsertar socialmente aquellos afectados)
Los consumos de hoy
En la organización social de la modernidad se han producido profundas transformaciones caracterizadas
por el debilitamiento de la tradición como fuente de referencia orden y seguridad.( aceleración del
desarrollo y las innovaciones de la tecnología)
Estamos ante la caída de las certidumbres, la era de los descartables, donde resulta progresivamente más
difícil hallar referente fijos.El síntoma cuál por excelencia Resulta ser la angustia, presentada en múltiples
constelaciones.
En otras épocas el uso de drogas se encontraba más o menos acotado algunas franjas de la población, es el
contexto actual el que ha ubicado a las drogas, como recurso global ofrecido por el mercado, mediante el
cual se propone al sujeto, la vía para intentar dar una respuesta "La angustia" frente a los padecimientos
que le pone por delante su existencia.
Hoy no hay un adicto prototípico si es que alguna vez lo hubo.
Comunidad terapéutica si
Existe un punto de debate esencial en torno de los fenómenos de consumo, cuando reciben el estatuto de
adicción o dependencia por la nosografía del DSM 4.
Cuestionamientos y críticas formuladas a esta clase de montaje, buena parte de las reconsideraciones que
tuvieron lugar respecto de la comunidad terapéutica, han surgido en el seno mismo de ésta.
En primer lugar, la frecuente presencia de actings, hace que numerosas oportunidades sea necesario
recurrir a un aparato, que puede funcionar como límite al daño en el cuerpo , y el consumo en su faceta de
goce destructivo.
Lo que se juega en las toxicomanías, es un goce que ha hecho cortocircuito con el otro, sin posibilidad de
captura por la palabra, cuyo valor de sentido ha sido desplazado por el goce del acto de intoxicación, el
toxicómano, procura eludir la regulación que supone el goce fálico.("no pienso"). Muchos de estos
pacientes llegan caracterizados por una "auténtica condición asintomática", para quién es lo que hacen con
las drogas, no resulta algo susceptible de cuestionamiento.
Ubicar a la comunidad terapéutica como alternativa de abordaje, supone, pensarla justamente como
función para desarticular este mecanismo, al que Tarrab, ha definido como "operación toxicómana" y
Gutiérrez Segú, refirió bajo la expresión "ideología toxicomana".
La CT constituye un montaje que pone una barrera a ese goce, haciendo evidente una falta, la de la droga.
( interrumpir el consumo, propiciar por el sesgo de un contexto estructurado, la recirculación de la ley.
Confrontar al toxicómano con la falta, es intervenir en la dirección opuesta del repliegue ante la angustia,
para lo cual dijimos, que el tóxico era funcional.) Posibilitar la aparición de la duda y la pregunta

Una CT para el sujeto


La comunidad terapéutica, es un recurso que suele alcanzar éxito en cuanto al logro de la obtención del
consumo, Pero ese no puede ser el único objetivo a perseguir en el abordaje de estas problemáticas. Es
necesario pensar la abstinencia "Como corte en acto, no como un fin en sí misma, sino como la puesta en
función de Lo Real del agujero, que abre la dimensión de la falta, que posibilita la emergencia del sujeto".
Además propiciar la interrupción de la ingesta, la CT tiene que posibilitar ir más allá de las drogas.
El abordaje no puede consistir en forzar la adaptación al deseo del otro, sino en propiciar el surgimiento de
la demanda del sujeto.
Será conveniente que el rasgo normativo explicitado en las numerosas pautas existentes en una CT, este
acentuado en términos de aquello que no estará permitido, masque de imposiciones.(pretende un
acotamiento pulsional, no la ciega obediencia al ideal de la institución)
El tratamiento institucional tiene que abrir la posibilidad para una clínica del sujeto,una CT en tanto
posibilite al sujeto pasar del goce sin medida de la droga, a confrontarse con su propia división subjetiva,
puede permitir entrar en el campo del deseo.
La clínica a la que nos referimos, implica favorecer el surgimiento de un sujeto de la palabra, que pueda
correrse de la inscripción en la categoría anónima de "adicto", desidentificándose a esa condición, dado
que esta es una definición que eclipsa el sujeto, a la cual no queda nada que agregar.
Una crítica a un modo en que de forma frecuente las instituciones para toxicómanos y adictos dirigen sus
intervenciones. Propiciar un movimiento del paciente para que problematiza su consumo no debe
estancarse en un nominalismo.
No existe la verdad universal que avale sostener una suerte de pedagogía de la recuperación, tiene que ver
con que comience interrogarse respecto de sí mismo.
La terapéutica de las toxicomanías no puede desconocer la singularidad de cada sujeto. La CT tendrá que
tomar el desafío de erigirse en un marco posible, para que el que ha llegado como adicto, devenga sujeto y
logre particularizarse, asumiendo la responsabilidad que le corresponde, por lo que hace con esa falta que
le es constitutiva.
Sobre las Condiciones de posibilidad de tratamiento en las Toxicomanías-Mario Kameniecki
La clínica de los problemas vínculos al consumo de drogas plantea diversas dificultades, consideraciones
previas cuyo propósito, es transmitir la puesta en acto de las operatorias que pueden hacer posible un
tratamiento.
Una de las dificultades genéricas en esta clínica, es que las personas que piden asistencia,vienen a quejarse
de un acto: el consumo de drogas y no tienen síntomas, nos encontramos, frente a alguien, a menudo en
posición de objeto.
Sabemos de esa identificación con el significante "adicto" que otorga una consistencia, a la cual el sujeto,no
está dispuesto a renunciar.Consolidado es esta cristalización se atrinchera y no se hace responsable de su
acto, la culpable es la sustancia y es la causa de su adicción.
No quiere saber nada de la castración,sus relatos en las entrevistas pueden lograr nuestra propia división
subjetiva y los que nos angustiamos somos nosotros,habría que preguntarse, de que sufren, de que
padecen, ya que por alguna razón concurren y piden asistencia.
Veamos algunas de las posibles respuestas: vienen porque algo en la relación con la/las sustancia/s
evidencia algún fracaso.La luna de miel se termina aunque los usuarios de drogas tengan la ilusión de que
pueda durar para siempre.
Otras veces, vienen porque perdieron el control sobre el consumo y los desbordó.
En estos casos, está arraigada la idea de que el sujeto controla el consumo y que siempre será así( a
menudo, estas personas piden tratamiento con la secreta esperanza de recuperar el control)
¿Que hacer frente a estas situaciones? Solamente el sujeto inviste a la sustancia y no hay transferencia, la
palabra no opera como portadora de efectos.
Otra situación, se trata de personas que viven de rebotar( rechazados), en distintos servicios. También
vienen personas traídas o por 3eros, donde el problema es de otros, no del sujeto.
Veamos que operaciones( preliminares) intentamos poner en juego, para que algún tratamiento pueda
tener alguna condición de posibilidad:

Operación de alojamiento
Significa estar dispuesto y disponible para ese sujeto singular y ofrecerle, escucha y tiempo.
Intentar toda maniobra posible para alojar al que consulta. La premisa es la operatoria de inclusión,
paulatina en un dispositivo.
Provocar/promover/constituir una demanda
Implica que hablemos nosotros, que aportemos palabras, frente al silencio de quien consulta ya que no es
poco común que al cabo de un par de entrevistas, en las que prácticamente cuentan lo mismo(consumo,
sustancia, efectos.), alegan que ya no tienen nada más que decir.
No existe la característica tríada( síntoma- demanda- transferencia). Si nos quedamos callados ante el
silencio de quien consulta es posible que no vuelvan. Le damos más valor a la constitución de un lazo que a
la Interpretación.

Construir/inventar el síntoma
Vienen en posición de objeto, para que hagamos algo con ellos, y en consecuencia dejen de consumir, sin
ninguna implicación subjetiva, sin síntoma, ya que el consumo de drogas no lo es, al menos lo que
constituye un síntoma para el PSA.
Cuya causa y agente es atribuida.
Tienen una transferencia Imaginaria sobre esos objetos-productos de goce.Una operatoria mediante la cual
el lugar de ese goce,constituido por la sustancia, puede ser ocupado por quien está en posición de
escuchar, un desplazamiento de lo real por lo simbólico orientado a producir una transferencia simbólica.
En la toxicomanía el sujeto ha encontrado una solución a la castración, a su división, por lo cual el estatuto
de la palabra está en problemas y esta no opera.
El sujeto viene en una posición de descreimiento de la palabra revelando de esta manera su desafiliación
del otro.

Introducción a la clínica con toxicomanías y alcoholismo ( La Tesis Freudiana sobre


la adición- Fabián Naparstek)
Lo que habíamos visto es cómo Freud ubica en el centro un malestar, y cómo para ese malestar, había
diferentes respuestas. Dentro de ellas estaban los narcóticos,agregamos en la lista al amor, la religión, el
delirio o la sublimación.
Los narcóticos producían un efecto químico para el organismo y habíamos subrayado que cada una de las
respuestas puede estar lo que contiene de remedio o de beneficio. Ya que puede romper el lazo sustraerse
de la realidad, es decir, que eso mismo que en un principio es buscado para no estar sometido a las
frustraciones de la realidad, eso mismo es un peligro.
Para distinguir las Neurosis de las Psicosis, a unas la llama neurosis de transferencia y a las otras las llama
neurosis narcisistas, que no tiene un lazo transferencia (las que no pueden Establecer un lazo con el otro)
Hay una ruptura muy fuerte de lazo con el otro.
En la actualidad, ofrece una única respuesta por la vida del consumo. Hay una respuesta para todo el
mundo por igual, para que todos puedan gozar de la misma manera, por la vía de ese consumo uno podría
paliar ese malestar, y al mismo tiempo es un consumo masivo.
Lacan, enunciado lo que él llamaba la universalización generada por la ciencia "globalización" que define la
cultura de la segregación.
Freud, destaca respecto de lo femenino, el sostiene que el primer ser segregado de nuestra cultura es la
mujer, la mujer en tanto y en cuanto es para el niño "la que no lo tiene"
Hacen falta entonces dos condiciones para Freud, ver alguien quien no lo tiene y la amenaza de castración
cuando se juntan ambas cuestiones, es cuando en términos de Freud, la castración se establece como tal.
En todo caso uno podría preguntarse por qué la castración instala una teoría de la falta, la respuesta de
Freud, es porque se parte de la idea de que todo el mundo lo tiene, que es la Premisa Universal del pene,
una premisa al complejo de castración.(Todo el mundo goza con lo mismo que goza Juanito en el "hace
pipí", cuando se encuentra con alguien que no lo tiene, supone un goce diferente, amenazante.
Esto es lo que está en la base de la segregación, segregar el que goza de manera distinta. El miedo a la
castración es el temor a perder su propio goce, un goce diferente que puede amenazar al propio.
Vean, si no todos los fenómenos de segregación cuando Lacan, habla del gueto y dice que los nazis fueron
precursores, hoy tenemos muchísimos ejemplos desde los barrios cerrados, los countries, las granjas. Se
junta la gente que supone que obtiene la misma satisfacción.
Se trata del goce del consumo, y el goce del consumo puede ser el consumo mismo, o puede ser la
abstinencia, están los que se juntan porque no quieren gozar de lo que gozan los del contry. Pero el
fenómeno de segregación es crucial, dentro de la toxicomanía porque desde que tenemos toxicomanía es
constante el tratar de internarlos, de mandarlos a una granja, aislarlos, etc. Asimismo, es importante
destacar el fenómeno de autosegregacion, barrios que se arman para toxicómanos. No necesariamente se
los manda por obligación y así se los deja gozar tranquilos.
Hay toda una problemática que es colateral al tema de la toxicomanía, que es la problemática de la
criminalidad, del contagio de enfermedades etcétera. La llamada política de reducción de daños, no ataca a
la toxicomanía, la toxicomanía queda intacta, lo cual no le quita importancia a esta política. Aunque su
implementación ha demostrado que la toxicomanía es bien diferente del conflicto social de los daños
colaterales.
Es importante poder diferenciar lo que es la segregación de la discriminación, discriminar tiene una
connotación que es distinguir las diferencias, discriminación se da la posibilidad de soportar las diferencias
y de convivir con ellas. La segregación implica separar al diferente. Esta idea de que estamos en la época
donde los ideales ya perdieron su valor, tiene como consecuencia la segregación, la dificultad de convivir
con lo diferente, de soportar la diferencia. En cambio lo que se intenta instalar en la unificación para todo
el mundo, y contra eso hay bolsones, insisto, con esto de resistencia a esa unificación.
Ustedes saben que hay muchas referencias en Freud, al consumo de narcóticos, "El malestar en la cultura",
lo que quiero comentar ahora es la de la Carta 79 que dice lo siguiente se me abierto la intelección de que
la masturbacion, es el único gran hábito que cabe designar "adicción primordial" y las otras adicciones sólo
cobran vida como sustitutos y relevos de aquella. Es decir que hay una sustitución de la masturbacion por
esas adicciones.
Lacan, dice que "La droga es lo que permite romper el casamiento del cuerpo con el pequeño pipí".
Retomando a Freud,lo primero que indica es que la adicción, esa masturbacion, está en íntima relación con
el autoerotismo, En "Fantasías histéricas y su relación con la bisexualidad", que hacen referencia directa a
la relación entre la masturbacion y el autoerotismo.( Tiene 2 partes el texto)
En la primera parte dice, el acto masturbador se dividían por entonces en dos partes la evocación de la
Fantasía y llegada este punto culminante, los manejos activos conducentes a la satisfacción sexual, esta
composición es más bien como ya sabemos una soldadura. En un principio la acción presenta un carácter
puramente autoerótico, más tarde esta acción se fusionó con una representación optativa.
El acto masturbador se divide en dos partes: una cosa es la evocación de la Fantasía, otra son los
movimientos mecánicos, es decir los tocamientos concretos para producirse la excitación. La idea de Freud
es que el acceso al estudio de la masturbación no es sino con ambas partes, supone que estas dos partes
que se encuentran en cualquier acto masturbador,en su momento,estaban divididas. Estas 2 cosas que le
llama una "composición, fusión" en un tiempo estaban divididas. Por lo tanto lo que encontrábamos en
algún tiempo eran sólo los movimientos activos mecánicos, a lo cual se llama puro autoerotismo, en un
segundo momento a eso se le funciona o se le agrega la Fantasía.
Él distingue en cualquier acto onanista, lo que es de la fantasía de lo que son los movimientos mecánicos,
dice que en un momento sólo teníamos esto: El puro autoerotismo la Fantasía aparece en un segundo
momento.
En Lacan, se destaca el hecho de que el significante toca al cuerpo,con solo pensar,puede el órgano
excitarse. Con "sólo pensar" me estoy refiriendo los significantes, la excitación por la vía del pensamiento,
es el significante que excita al cuerpo.
Freud, se ve en la necesidad de ubicar un momento previo a eso, como si hubiese un momento previo a
que el significante mueva el órgano "Puro Autoerotismo". En el organismo están las dos cosas, digamos
funcionan dos cosas juntas, están los tocamientos y está la evocación de la Fantasía y esto también está en
el acto sexual. En el acto sexual está todo lo que tiene que ver con los movimientos mecánicos para llevar
adelante el acto sexual, pero también está la evocación de la Fantasía. Lo que está diciendo es que en algún
momento ese onanismo no estaba anudado a una fantasía, y a ese momento lo llama puro autoerotismo.
Composición, fusión, soldadura. Son los términos que utiliza Freud para relacionar una cosa y la otra
efectivamente no vienen juntas. Aclara que era en un principio, aunque no dice ni cómo ni cuándo.
El planteo de Freud es que para que haya un síntoma hacen falta tres condiciones necesarias:
1) Hay que dejar de masturbarse, para Freud no hay masturbación y síntoma la vez.
2) Una vez que es dejada, hace falta que esa energía no sea derivada de otra manera o sustituida por otra
cosa, da entender así que habla allí de la sublimación.
3)Hace falta que la Fantasía pase a ser inconsciente, si se dan esas 3 condiciones tenemos la posibilidad de
que esto se descargue por la vía del síntoma, lo cual ya es toda otra cuestión.
Tiempo 0: Puro Autoerotismo
Tiempo 1: Onanismo como soldadura
Tiempo 2: Síntoma
La tesis de Freud se la puede entender como, ubicar a la adicción en lugar de la sustitución de un puro
autoerotismo sin sentido alguno sin que esté aún articulado a la Fantasía o a la palabra. No parece seguir el
camino del síntoma ,hemos destacado, que para Freud, Síntoma y masturbacion son respuestas
estructuralmente diferentes.

La Toxicomanía: una tesis de ruptura-Moreira Diego


La "resolución de Frankfurt" de ciudades europeas sobre política de drogas de 1990, es reductible a una
frase tan consabida por todos que casi es innecesario el fracaso de la sociedad de consumo ante la ingesta y
el abastecimiento de sustancias.
La demanda de drogas continúa al día de hoy a pesar de todos los esfuerzos educativos, y todo indica que
tendremos que seguir conviviendo con la existencia de drogas y consumidores de drogas en el futuro.
Considero que la mera razón especuladora ha constituido a la comunidad internacional y a nuestro país en
particular, en un gran casino, en el cual es imprescindible apostar, especular y ganar. Este casino que se
configura como un mercado único de los goces, es decir de placeres sufrientes, Está inmerso en un tiempo
sin historia, en un tiempo vacío, fugaz y acelerado.
Sólo ocupado por números cantidad de frivolidades y un sujeto contable(esencia de la sociedad de
consumo)La droga y ya desde la conquista de América se ha constituido en una mercancía presente en la
acumulación primitiva de capitales y desde luego en las posteriores.

La Toxicomanía como tesis de Ruptura


En la concepción del psicoanálisis, la toxicomanía no es un síntoma freudiano( en tanto habla) ni tampoco
es una estructura, es decir no es una articulación significante como tal, más bien se trata de un acto que
sustituye releva la palabra en su dimensión simbólica. Este acto se puede enlazar a cualquiera de las
diversas estructuras a saber: neurosis, perversión y psicosis (también no desencadenadas)
En Lacan, aparecen pocas referencias sobre la droga, nos habla de una tesis de ruptura expresada en la
clausura de las jornadas de carteles de la E.F.P (1975): La droga se constituye como la única manera de
romper el matrimonio del cuerpo con el pequeño-hace -pipí, se trata de una ruptura con el llamado goce
fálico, con un goce que de alguna manera está ligado a la palabra.
Por el contrario el goce en la toxicomania, es del orden de un goce cínico, que rechaza toda dimensión del
otro. En este sentido la adicción no se constituye como una formación de compromiso al estilo del síntoma
de Freud, sino como "una formación de ruptura" (Laurent, 1999) Entonces de lo que se trata es del goce y
su tratamiento, del goce como satisfacción de la pulsión o querencia, por lo cual es necesario considerar
una escala que va más allá de la familia la metáfora paterna -Edipo-(Lacan, 1969/70)
En este contexto el acto de la ingesta adquiere el valor de un fármakon. Es decir de aquello que los griegos
caracterizaban por ser a la vez remedio y veneno. El privilegio de un aspecto del otro, depende del sujeto
(Derrida, 1968) así el acto de tomar la cicuta de Sócrates se transforma como resultado del logos socrático y
de la fundamentación filosófica del Fedón de Platón, en recurso de liberación y salvación.

La Toxicomanía, la suplencia del nombre del Padre(Sinthome) y el suplemento


Ahora voy a intercalar dos modalidades de la toxicomanía cuyos rasgos no son circunstanciales, una que se
despliega por la vía de la suplencia y la otra por la vía del suplemento (Le poulichet, 1987).
Comencemos por la ingesta que se realiza vía suplencia en el seminario 23, Lacan, al ocuparse de Yoice, nos
dice que "El retrato del artista", tendría que llamarse más bien "Un retrato del artista", poniendo especial
énfasis en la contradicción gramatical "del" ,dado que el artista es él, el único y no hay otro.
En tanto fracasa en velocidad de vértigo la Constitución de Nombre del Padre se genera un pasaje a ser
Padre de un Nombre "artista" para cuya construcción se apela una elección narcisistica singular (vía
identificación) lo que salió de uno mismo.
Ahora ahora bien, la suplencia del Nombre del Padre opera, como un rasgo que distingue al sujeto del
inconsciente. El nombre así establecido sobre la función fallida del significante que denominaremos
Nombre del Padre.
En este contexto, es notorio que la droga se pueda constituir en suplencia de un Otro y no como un mero
artilugio enunciativo, sino que de alguna manera garantiza la funcionalidad del cuerpo y de lo anímico. Se
recurre a la ingesta, cuando cobra valor un goce no acotado por la palabra y ni por catáfilas imaginarias.
La función de la toxicomanía implica acotar la intrusión o la mirada del Otro, donde las aberturas del cuerpo
(zonas erógenas) no admiten su cierre.Uno de los extremos de la ingesta se enlaza una retracción casi
autística,en un esfuerzo para generar un borde que implica una diferencia.
Aquí es necesario precisar que el recurso de la ingesta en su valor de suplencia del nombre-del-padre
(forclusión de sentido) no siempre pone en evidencia un proceso psicótico, en ocasiones la alteración de la
función paterna es puntual, de manera que se constituye una particular modalidad de goce, un goce que no
responde a la eficiencia de lo simbólico. La suplencia es lo que posibilita el vivir, al generar una específica
organización del goce.
Finalmente, la ingesta que se despliega vía el suplemento procura, sostener una función yoica mediante el
recurso de la desmentida, Hay un cuestionamiento del orden fálico sin solución del Nombre del Padre, que
se basa en un desgarro de la estructura yoica.
En tanto suplemento, el montaje adictivo, se constituye como un modo de lograr una "prótesis narcisista".
Con la particularidad de que estos sujetos no ponen en duda ni la existencia del otro, ni la de ellos mismos,
pero que sí están desgarrados por la hiancia que separa el yo real (al decir freudiano) de la ideal.
En su función la toxicomanía, procura sostener una "impostura" (estructural) que fracasa. A la vez que
mitiga el dolor del no-ser. La droga se instaura como un suplemento imaginario, que posibilita sostener la
insignia del falo y un reconocimiento, al precio de congelar el propio deseo.
Lo insoportable aquí no es la amenaza de la invasión del otro y el aniquilamiento subjetivo, sino la
castración. De ahí que muchas veces el recurso "Salvador" precipite a pasajes de "hacerse daño", "hacerse
un resto" o caer en "el intenso placer de no hacer nada".
La toxicomanía también es utilizada como un quitapenas para melancólicos. Este último dice la dificultad
frecuente en los adictos, de trabajos y elaboraciones de duelos que parecen imposibles de realizar. Así, la
adicción es conservadora en doble aspecto: de una imagen yoica (valorizada y anhelada por perdida) y del
objeto al que no puede renunciar. Simulacro de la muerte, o simulacro en la locura, para protegerse de la
castración.El acto toxicómano aparece también como una promesa de salir de un vacío, de una envoltura
cerrada de nada en que se ha transformado el sujeto por su identificación con el objeto perdido.
En el trabajo con la castración y sus juicios, el neurótico utiliza con frecuencia montajes y argumentos
adictivos con un valor transgresivo. Así, un muchacho de 18 años decía: "fume marihuana años en casa y
nadie se dio cuenta". Típica escena donde alguien, ubicado en el lugar de Otro, resulta miope, cómplice o
impotente para cumplir con los requisitos ese Otro engañado debe ocupar un lugar simbólico y sostener un
juicio de existencia: los padres, profesores, la policía, los analistas.
En la perversión propiamente dicha, en cambio, la transgresión mantiene una doble ilusión: se sabe sobre
el goce y no se registra la y hiancia respecto del ideal. La droga sirve aquí para sostener esa creencia y algo
más: es un modo de hacerse cada vez mejor instrumento de escena en que se dirime la repetición del acto.
Le sirve para cumplir mejor el papel de "regiseur" y de instrumento principal en la representación perversa,
donde el partener neurótico será el encargado de soportar la angustia y su condición de sujeto escindido.
Elude la castración al precio desconocer su deseo y el sometimiento a una adecuación fálica: el de ser un
instrumento del Otro del goce.

El quitapenas Freudiano
Para Freud, La ingesta Adictiva, es el método o recurso "quitapenas" más descarnado y efectivo con que se
cuenta, para aliviar el sufrimiento del propio cuerpo
Pero este método, tiene para el psicoanálisis sólo un valor descriptivo o fenomenológico en tanto remite a
una intoxicación previa del paciente [endógena] por sustancias derivadas de un quimismo particular
(pulsional) de carácter autoerótico.
En la carta 79, que Freud le envía su amigo Fliees, afirma que la masturbación es la adicción primordial y
que como relevos de esta Aparecen las otras grandes adicciones como el tabaquismo y el alcoholismo a
este núcleo autoerótico se le adjunta un interlocutor delirante como tramitación de un deseo sexual o
previsto de argumentos alucinatorios que ejerce su vasallaje.Dicho de otra manera la adicción a la ingesta o
relevos es sólo una manifestación o exteriorización de cierta tramitación pulsional, que puede especificar
en un fragmento autoerótico [goce] acompañado de pánico hipocondríaco y otro psicótico conformado por
delirios y/o alucinaciones.

Los Goces y la Toxicomanía (Clase V) Fabián Naparstek


Para abordar la clínica en estos sujetos podemos plantearnos como una pregunta, qué tipo de satisfacción
encontramos en la toxicomanía y alcoholismo ustedes saben que no todas las formas de satisfacción son
iguales. Es lo que vimos en "El malestar en la cultura", cuando decíamos que algunos encontraban
respuestas por las vías del amor, por la sublimación, el síntoma, como forma de salida a la satisfacción
pulsional, aunque bien diferentes, que atraviesan diferentes, recorridos.
Vamos a dar algunas nociones sobre el concepto de goce y luego vamos a tomar un artículo de Jacques
Alain Miller qué se llama "Para una investigación sobre el goce autoerótico", que habla específicamente o
directamente sobre la toxicomanía.Lo que Lacan llama goce no figura como un concepto de Freud en tanto
tal, al menos nominado de este modo. Sin embargo, tenemos una idea muy clara en Freud de lo que luego
Lacan será el goce,que está expresada de diversas maneras. Es decir, que es Lacan quien extrae esta idea de
Freud. Lacan de una idea Freudiana,toma un concepto central, en el andamiaje de su enseñanza, es un
concepto muy raro, por lo menos por la época de Freud, porque rompe con una concepción, de años y
años. Según Lacan, es una Concepción que aparece en Sade, así lo plantea en su texto "Kant con Sade" .Esta
concepción rompe con un pensamiento muy antiguo, con la idea del hedonismo qué parte de Aristóteles.
Se trata de la idea que hace coincidir la satisfacción con el bien. Es decir, creer que todo aquello que nos da
satisfacción es un bien para el individuo, es una idea que llevo mucho tiempo a lo largo del pensamiento
humano. Más bien Freud sostiene, y esta es la idea rara, que hay muchas cosas que nos dan satisfacción, y
no implican ningún bien para el individuo, digo para el individuo no hace falta que haya nadie que esté
sancionado desde afuera para decir sí eso está bien o no está bien para ese individuo. Hay cosas que dan
satisfacción y aparecen como sufrimiento, por ejemplo la idea que Freud tiene sobre el síntoma supone que
es sufrimiento, y que mantiene inconscientemente una satisfacción.
También se presenta en la idea de la pulsión de muerte, en donde hay una tendencia de satisfacción que va
hacia la muerte, también el puro principio del placer, de alguna manera también llevaría a la muerte.
En cuanto al principio del placer, Freud se vio obligado ponerle un principio de realidad para pensar en la
idea de que el ser humano se adapta a su medio.
Lacan, en el seminario 20, se pregunta ¿qué es el goce? y responde que: "se reduce aquí no ser más que
una instancia negativa" El goce es lo que no sirve para nada, Lo Define con todas las letras, e Insisto, que lo
extrae de Freud, cuando Freud habla de la satisfacción del chupeteo, muestra muy bien que una cosa es
que el niño se alimenta, y otra bien diferente, Es que además hay un Plus,haya una satisfacción en más y
que efectivamente, eso no sirve absolutamente para nada(pulsión acéfala y anárquica porque no es de
nadie, no responden a un amo y menos al sujeto.
En algún sentido la satisfacción de la pulsión es para la satisfacción misma, Uno podría decir que Dora se
satisface oralmente, pero estrictamente es la pulsión oral la que se satisface ahí y no Dora.(Estas ideas son
las que Lacan termina denominando Goce, la pulsión de Muerte, el goce sexual mismo, cuando quieren
ponerle la mano encima, si puedo llamarlo así, ya no es para nada sexual y se pierde,no hay más Goce que
el de morir)
La otra noción del goce, es una noción que proviene del discurso jurídico y es la noción de usufructo,
cuando en el discurso de las leyes, se dice que puede hacer usufructo de tal bien, implica el disfrute de la
cosa en tanto se transforma en un objeto de apropiación, uno puede usar como quiere, jurídicamente
hablando, de aquello que posee, por supuesto con ciertas restricciones.Lo que plantea Lacan, es que el
discurso jurídico lo que intenta hacer es repartir, es ordenar ese campo del goce: "el usufructo, quiere decir
que se puede gozar de sus medios, pero no hay que despilfarrarlo, se puede gozar de ella a condición de no
usarla demasiado. Allí reside la esencia del derecho, repartir distribuir lo que toca al goce.
La idea de Freud es que cuando se construye la cultura, cuando se mata el protopadre y luego se realiza el
pacto fraterno, ahí hay una distribución del goce.
El pacto implica que ninguno de nosotros va lugar del protopadre y se reparten el goce que tenía el padre,
el protopadre mítico que supuestamente era el goce total(padre que gozaba de todas las mujeres) Lo
reparten por la negativa, es decir se aseguran que al menos una no va a tener, todos nos aseguramos que
nadie va a tener a todas, se reparte por lo que cada uno se pierde, se hace intervenir la ley.
Hay una relación estrecha entre el cuerpo y el goce, es más la idea de Lacan, es que el lugar del goce es el
cuerpo, Lacan empieza a definir el ser humano como lo que él va a llamar "el parletre" ya no tanto porque
es un ser que habla, sino porque es un ser que goza. Ahora, el acento lo va a poner, en que por ser un ser
parlante es un ser que goza. Define al goce como la relación del ser parlante con su cuerpo, que "La
dimensión entera el goce es a saber, la relación de este ser parlante con su cuerpo, ya que no hay otra
definición posible el goce nadie. Parece haberse dado cuenta de que en este nivel es donde está la
cuestión.Es decir que el cuerpo es un cuerpo de instinto, por eso Lacan ubica muy bien la cuestión del goce
en el punto de la pulsión, ya que se ve muy claramente que la pulsión no es más que el encuentro de
lenguaje y con un cuerpo, hay un recorrido en Lacan que va hacia una pluralización del goce,aunque al final
de su enseñanza hable del goce uno.
En el seminario 19, hace una distinción entre "el goce sexual" y lo que él llama "el goce a secas" ,es cuando
uno puede decir "el goce al natural", el goce, cuando todavía no tiene ningún condimento de la vida
humana. Si bien no de la vida humana, porque el goce es propio de la vida humana, pero no tiene ningún
aditivo.
La definición del goce que veníamos dando, el goce es la relación del parlante con el cuerpo, no es más que
ese goce a secas, ese choque entre el significante y el cuerpo como resultado tenemos goce, llamémoslo
pulsional.Entonces, lo primero que hace Lacan para hablar del goce a secas, es distinguirlo del goce sexual.
Es aquí donde entra en juego todo lo que se relaciona con el término falo, creer que el goce coincide con
los sexual,es por excelencia, una idea fálica. Es el falo, entre otras cosas que hace creer que el goce y lo
sexual van de la mano. Es a partir de que se instala la castración que el destete es sancionado como pérdida
del falo, pero, retroactivamente. A partir de la castración toda pérdida sancionada hacia atrás, es vivida
como castración. Pero se ve que es necesaria la instalación de la castración, para que todo eso sea
significado de esa manera. Lacan hace coincidir el goce sexual con la castración, ubica el ser sexuado de
manera secundaria respecto de un goce asexuado, en seminarios anteriores planteaba, que para creer que
el encuentro con el otro sexo puede implicar una satisfacción, hace falta hacer del otro sexo la metáfora del
objeto perdido, es decir, que hay una operación a hacer para que el otro sexo, sea aquello que está perdido
para uno y uno salga su encuentro para recuperar eso de lo que está falto. La descripción que hace de esa
satisfacción pulsional de las zonas erógenas, es llamada para Lacan asexual. En el ejemplo del objeto oral,
los pechos, se ve cómo tiene que haber una operación para que se transforme en un objeto sexual para un
hombre. Hace falta pasar por la castración, sino muy bien Podría ser una glándula mamaria, para así decirlo
de alguna manera. Es decir, que eso tiene que ser coloreado falicamente. El goce del chupeteo, el goce de
largar o retener las heces, no tienen en sí mismo nada sexual, es el falo el que hace de eso algo sexual, y
ese goce asexual, ese goce pulsional es el que Lacan llamaba goce a secas, es el que Lacan definía como el
que no sirve para nada. Es el falo entre otras cosas, el que nos hace creer que el goce tendré alguna
utilidad, que el goce serviría para que se encuentran los sexos, y una vez que se encuentren los sexos, eso
serviría para la reproducción y así sucesivamente.
Más bien la idea de Freud es que nada en el goce de antemano al menos, está predestinado para la
supervivencia de la especie, al contrario eso lleva la muerte.
Es cuando se introduce el falo, que ese goce de alguna manera entra al mercado de intercambio,ese goce
tiene alguna utilidad, puede ser vendido y puede ser comprado, ese goce tiene un valor. Lacan dice que no
tiene ninguna utilidad y eso cambia a partir de que se entra en el mercado del falo, justamente eso empieza
a tener un valor si se le puede poner un precio, se entiende que el goce sexual no tiene ninguna relación
con el semejante,Lacan habla del goce uno, finalmente o el que llama el goce del idiota y es para seguir
retomando lo de autoerotismo, ese puro autoerotismo que no sirve para nada.
Es recién cuando se establece la Fantasía, que uno tiene la creencia de que la satisfacción es con un
partenaire, es con la Fantasía que se agrega un objeto. La Fantasía es el primer ámbito en donde aparece
un partenaire, aunque más no sea fantaseado por el individuo.
A partir de aquí se dan las condiciones necesarias para el síntoma,Freud dice que puede ser el síntoma o
puede ser otra cosa, puede ser la sublimación y no está dicho por él, pero puede ser el amor también.
Quiero decir que el amor está sostenido por esta misma fantasía, Freud lo demuestra claramente con lo
que llama la condición erótica. Todo amor está sostenido en una condición erótica, no es más que la
Fantasía o condición fetichista según la época.El punto es que la Fantasía se establece una relación a un
partenaire, donde uno cree que para encontrar satisfacción hace falta un complemento, si partimos de la
idea de que hay una satisfacción que no sirve para nada, sólo eso empieza a tener un valor, sólo esto
empieza a tener una utilidad, a partir de la instalación de esa fantasía, Recuerden que nosotros habíamos
ligado ese punto con la inscripción del falo, así lo habíamos nombrado y habíamos marcado que una vez
que esté está inscripto tenemos la posibilidad de la puesta en función del falo, que es cuando a eso se le
pone en el mercado de intercambio, y esto por supuesto implica arriesgarlo obviamente con la lógica
propia del falo.
Hay que hacer una salvedad muy fuerte respecto de la actualidad, por qué el mercado ya no responde a lo
mismo, pero se supone que el mercado tenía ciertas leyes que implican las leyes de intercambio.
Dice Miller: "decir que con la droga se trata de un goce que no pasa por el otro, es pues un punto de
referencia muy flojo y que quizás habría que ajustar, comenzando por oponer este goce con el goce
homosexual, que moviliza el cuerpo del otro con la condición de que sea el mismo que entonces pasa por el
otro, pero con la condición de reducirlo a lo mismo".
El primer planteo de Miller es la idea de que hay cierto goce del toxicómano y del alcohólico que no pasa
por el otro,Miller retoma la tesis de la ruptura de Lacan, pero en primer lugar lo pone en términos del otro.
En todo caso lo que está planteando Miller es que, en la toxicomanía no se pasa por el otro sexo, que
supone tener que pasar por el encuentro con el cuerpo de otro y qué implica la diferencia.
A su vez,vimos que ese pasar por Otro supone poner en función al falo.Esta es una versión que toma Freud
del "Malestar en la Cultura" del peligro de la droga cuando dice que puede desenganchar al sujeto de la
realidad,planteando que habría una ruptura con el Otro sexo.Sin embargo,Miller aclara que en la
toxicomanía no se trata sólo de eso,es decir, que la solución toxicómana al malestar no se busca por la vía
de encontrar, de hacer del otro la metáfora del objeto perdido,aunque con esto no alcanza.Es más radical y
no alcanza con decir que no pasa por el otro, porque hay formas de ir al encuentro sexual sin encontrarse
con la diferencia y entonces da el ejemplo de la homosexualidad masculina.En ese caso hay una exigencia
de que haya un cuerpo, existe la presencia de un cuerpo pero con la pretensión de que ese cuerpo tenga lo
mismo que lo de uno, se enamora de muchachos, desde el lugar de la madre identificado, muchachos que
son idénticos a sí mismo, finalmente, Miller, agrega una indicación más dice que existe otro tipo de goce,
que no pasa por el cuerpo del otro, sino por el propio y que se inscribe bajo la rúbrica del autoerotismo.
Digamos que es un goce cínico que rechaza al otro, que rehúsa que el goce del cuerpo propio sea
metaforizado por el goce del cuerpo del otro y que opera como un cortocircuito, llevado a cabo en el acto
de masturbación que precisamente asegura el sujeto su casamiento con El pequeño Pipi.No pasa por el
otro y tampoco por un otro semejante, en el sentido de la homosexualidad se queda consigo mismo, sigue
siendo un goce que más bien ubicamos en el Paso uno, sigue siendo un goce sexual, no necesita ir al campo
del otro y le alcanza con su propia fantasía, le alcanza con lo que tiene entre las piernas y por así decirlo de
alguna manera, no necesita ir en busca de eso afuera, aunque aún no deja de estar articulado falicamente.
Como primera medida no va en busca del otro sexo, si bien eso es muy amplio ya que hay gente que no va
en busca del otro sexo, aunque va en busca de otro cuerpo que sea idéntico a sí mismo, busca su propio
cuerpo directamente, eso tiene algo de goce fálico, sea porque se busca el falo en el semejante o porque se
busca la masturbación.Sin embargo el goce de la toxicomanía es el que rompe con Lo fálico, Miller dice: "es
la huida ante el hecho de plantearse problemas sexuales, es previo a plantearse el problema sexual, es un
goce que lleva la muerte literalmente, es el goce a secas, se lo puede nombrar así.
No querer saber nada con lo sexual, si entendemos lo sexual en término fálico, no es el encuentro
solamente con el encuentro con el cuerpo del otro sexo, sino que puede ser el encuentro con el cuerpo del
mismo sexo, que puede ser la masturbación mismo lo cual no impide distinguir una cosa de la otra.
Estamos distinguiendo tres ámbitos y en los tres habíamos dicho que se puede hacer un uso de la droga: Se
puede hacer uso de la droga para insubordinarse al servicio sexual, para mantenerse estancado en el goce
del onanismo, como soldadura para tratar de acceder al otro sexo, como una muleta en términos de
Freud.Aunque lo que llamamos un verdadero toxicómanos lo ubicamos del lado de aquel que se
insubordina al problema sexual cuando se suelta del otro y de los fálico iba a parar a un sin límites maníaco,
el desencadenamiento de la toxicomanía, para diferenciarlo de un momento previo de consumo que no
responde a la Manía por el tóxico.
En la clínica necesario que hagamos un diagnóstico de lo que ubicamos como la función que cumple esa
droga para ese sujeto, esa o las drogas para ese sujeto. Por supuesto que se va articular modos diferentes
en cada estructura : neurosis, psicosis y perversión.
La droga puede cumplir múltiples funciones en la estructura de alguien, hay que poder articular estas dos
cuestiones estructura y función de la droga.La clínica muestra allí que también hay múltiples usos y en
algunos podría ser una suplencia para la ausencia del nombre del padre.
La toxicomanía y alcoholismo son dos modos patológicos que exhiben la características del goce a secas de
una manera terrible y con consecuencias funestas para quien lo padece. La clínica en estos pacientes no
permite pensar en un análisis en el sentido de la interpretación de los sueños, ya que lo que venimos
desplegando es que hay un rechazo al otro, cuando decimos rechazo al otro y a los fálico incluimos allí al
inconsciente, si la entrada en análisis supone la puesta en forma del síntoma y el funcionamiento del
inconsciente, eso mismo ya implica una salida del rechazo propio de estas patologías.

Para una Investigación sobre el goce autoerótico - Jacques Alain Miller


El Psicoanálisis no atañe al sujeto sino en tanto que éste se relaciona con la categoría del falo, en tanto se
inscribe en la función fálica según modalidades diversas.
Esta categoría está claramente articulada en Freud, puesto que el distingue parte del registro del fín sexual,
el del problema sexual, es decir, del problema de la castración en tanto concierne a un saber, un
conocimiento sobre el sexo.
Tratándose de la toxicomanía ¿ésta categoría freudiana de falo aparece o no como operatoria?
Hay así una dificultad. Su signo es que comúnmente en la cura del toxicómano, se habla del destete y no de
la castración¿ creemos poder efectuar esta operación de renuncia a la droga por la palabra o bien el
destete de la o de las sustancias tóxicas es la condición la condición previa a la cura por la palabra?
La segunda opción es la que nos ha presentado Olievenstein

Un real que insiste


Es cierto que la toxicomanía le impone la modestia al psicoanalista, si Lacan invitaba a los psicoanalistas a
no retroceder frente a la psicosis, es justamente porque el psicótico es demandante con respecto al
psicoanálisis¿Pero lo es el toxicómano? Y si lo fuera ¿no sería más bien el analista el que retrocede frente a
la toxicomanía? En efecto, la toxicomanía presenta al analista un síntoma sobre el cual los efectos de
verdad de la palabra pueden aparecer sin asidero, un síntoma, pues, que obliga a definir las estructuras de
ficción de la verdad y un real que resiste o que insiste.
Nos queda que la droga da lugar a una auténtica experiencia para el sujeto, que no podríamos poner en
duda, y que incluso ha producido su propio vocabulario, no es sin embargo una experiencia de lenguaje,
sino por el contrario lo que permite un cortocircuito sin mediación, una modificación de los estados de
conciencia, la percepción de sensaciones nuevas, la perturbación de las significaciones vividas del cuerpo y
del mundo.

El objeto droga
¿Qué podemos decir de la toxicomanía?Los psicoanalista subrayan que algo está obstaculiza la entrada y el
mantenimiento en análisis del toxicómano, se trata entonces de un saber negativo.La primera de estas
preguntas se refiere el término mismo de toxicómanos. ¿En qué medida es un atributo clínicamente válido
del sujeto, es aquel el sujeto de la palabra? con gusto habría planteado al profesor Bergeret esta pregunta:
¿Es la toxicomanía una categoría clínica bien formulada? y ¿En qué sentido? ¿Cómo se articula con las
estructuras freudianas? ¿No habría que distinguir la toxicomanía como categoría clínica y el objeto droga,
para retomar una expresión usada aqui -el objeto droga- en tanto puede encontrarse inscripto en
diferentes estructuras clínicas: neurosis, psicosis perversión?
Quizás, encuentre allí su lugar el dicho de Lacan: "La droga es lo que permite al sujeto escapar o romper su
casamiento con "El pequeño pipí"
No es una definición de la toxicomanía, sino una tentativa de definición de la droga, en tanto tal,quizás en
la experiencia analítica nos preguntemos menos por la toxicomanía, que por la droga en su relación con el
sujeto.

Un objeto causa de goce


La droga aparece como un objeto que concierne menos al sujeto de la palabra que el sujeto del goce, en
tanto ella permite obtener goce sin parar. Por el otro la experiencia de la toxicomanía, parece hecho en
efecto para justificar, el uso que hacen algunos, de entre nosotros, del término goce como distinto del de
placer.El placer está siempre coordinado a la noción de una armonía, de un cierto buen gusto, incluso de
una sabiduría.Hasta la psiquiatría soviética cuando trata de comprender la toxicomanias encuentra la
paradoja de este curioso hedonismo de este deseo hipertrofiado de obtener placer, En consecuencia me
parece que la experiencia toxicómana, justifica que se introduzca el término de goce, para calificar lo que
en este caso se sitúa "Más allá del principio de placer" lo que no está ligado a una moderación de la
satisfacción, sino por el contrario a un acceso, a una exacerbación de la satisfacción, que concluye con la
pulsión de muerte.
De este modo la fórmula de Markos Zapiropoulos, "el toxicómano no existe" se justifica ciertamente, si se
designa así, el hecho de que la categoría clínica de la toxicomanía, no está bien formulada.Pero no resulta
menos por ello, que con el nombre de toxicómano, se designe a un sujeto que ha entrado en cierta relación
con la droga y que consiente en definirse cada vez más, en simplificarse así mismo en esta relación con la
droga.
La droga se transforma en el verdadero partenaire esencial, incluso exclusivo del sujeto, un partenaire que
le permite hacer un impasse con respecto al otro, y particularmente con respecto al otro sexual. No
podemos hacer de la droga una causa del deseo, como máximo podemos hacer de ella una causa de goce,
un objeto de la más imperiosa demanda, y qué tiene en común con la pulsión anular al otro- la droga como
objeto, da acceso a un goce que no pasa por el Otro y en particular por el cuerpo del otro como sexual-

Insubordinación al servicio sexual


En la experiencia analítica encontramos corrientemente el recurso a la droga como salida de la angustia,
Como salida a la angustia frente al deseo del otro, con el fin de apartarse de ello, decir que con la droga se
trata de un goce que no pasa por el otro, es pues un punto de referencia muy flojo, que habría quizá que
ajustar.
Comenzando por oponer este goce con el goce homosexua,l que moviliza el cuerpo del otro con la
condición de que sea el mismo, que entonces pasa por el otro, pero con la condición de reducirlo a lo
mismo. Agreguemos que esto sólo vale para la homosexualidad masculina, la que exige que el cuerpo del
otro presente un rasgo particular, el estar en posición de órgano. Desde allí podemos hablar de la
generación de la castración, como principio de perversión, Pero esto supone que el problema sexual haya
sido planteado como tal por el sujeto, y que le haya encontrado esta solución, entonces tendríamos que
contrastar Primero: el goce que no pasa por el otro y el goce homosexual, Segundo: existe otro tipo de goce
que no pasa por el cuerpo del otro, sino por el propio cuerpo, que se inscribe bajo la rúbrica del
autoerotismo, digamos que es un goce cínico que rechaza el otro, que rehúsa que el goce del cuerpo propio
sea metaforizado por el goce del cuerpo del otro, que opera ese cortocircuito llevado a cabo en el acto de
la masturbación, que precisamente asegura el sujeto su casamiento con "El pequeño Pipi"
El cínico contraviene la interdicción que recae sobre el goce, y qué es ante todo interdicción del goce
autoerótico, la interdicción del incesto, como interdicción del cuerpo de la madre, no hace más que
metaforizar la interdicción primordial del goce autoerótico.
La especificidad del goce toxicómano que ,en efecto, no pasa por el otro, pero tampoco por el goce fálico.
En la toxicomanía no podemos hablar en tanto tal de forclusión, dado que en la psicosis ,si bien, hay
forclusión de la castración,está retorna de lo real en particular en la paranoia.Si quisiéramos encontrar una
categoría dónde poner la toxicomanía enfrente de la forclusión en la psicosis, podríamos quizás apelar a la
insubordinación al servicio sexual.

Un plus de goce particular


Aquellos que no son toxicómanos, y aquellos que nos entregaron dos veces a esa experiencia, no se han
aplastado por la palabra.Es Por qué existe un goce de la palabra al cual estamos enganchados es
precisamente por eso que hacemos tantos coloquios, lo que llamamos destitución subjetiva, desde
entonces sería también el destete del goce de la palabra, y el final del Análisis un desenganche, pero
evidentemente la droga materializa o subjetiviza este goce, que no es un placer, este goce que no vale más
que la vida como función vital.
Si en el análisis nos enfrentamos con un sujeto que juega su partida en relación con un saber sobre el sexo
y que la juega en la palabra, por el contrario el que es llamado sujeto de la toxicomanía es un cínico
extremo.
En la experiencia analítica ¿no se puede mantener que, en la droga,la posición subjetiva está no obstante
implicada? El problema es obtener del sujeto sentido y en particular sentido sexual a su dependencia.La
toxicomania lo obtaculiza, pues en el análisis el sujeto espera el objeto del sujeto supuesto saber-y es lo
que establece la transferencia- es decir que el objeto en cuestión, el plus de gozar se sostiene
esencialmente de la palabra, mientras que la toxicomanía el plus de gozar está adherido a un producto de
la Industria.En el fondo el analista debería ser un dealer de la droga de la palabra.
Deshacer la identificación
¿El acceso al goce de la droga para un sujeto no ha estado siempre atrasado por lo que le ha venido de la
palabra?En su punto de origen¿La elección de la droga no estado siempre condicionada por el significante?
para esta pregunta hay solo respuestas particulares, caso por caso.La posibilidad del Análisis pasa por el
esfuerzo de deshacer la identificación bruta al< yo soy toxicómano> en consecuencia, desde el punto de
vista de la experiencia analítica, todo lo que refuerce esa identificación está contraindicado, es menester
que aparezca para el sujeto, no como necesaria, sino como contingente.

Cinco axiomas aplicados a la clínica de las Toxicomanías- Dario Galante

En la clínica actual, el psicoanalista suele encontrarse con un sujeto desorientado, podemos verificar en el
campo de las toxicomanías, que muchos pedidos de tratamiento, no son más que una demanda en el que el
discurso capitalista ya operó en su faceta más estragante, frecuentemente se demandan tratamientos para
moderar el consumo, para poder seguir consumiendo.La proliferación de objetos que el mercado ofrece,
produce la paradoja por la cual se promociona un goce, en el que el sujeto queda atrapado en un falso
dilema, al no haber una responsabilidad orientada, surge la ansiedad, confundiendo así una práctica de
goce con una elección.A su vez se impulsó una cura el malestar contemporáneo con los métodos propios
que el sistema ofrece, como fantasía, una ficción basada en la idea de que se puede abordar el sufrimiento
sin pasar por el síntoma.(Esto es posible en principio, sobre todo si partimos de la idea de que tratar un
malestar, no es lo mismo que transformarlo en una experiencia en la que un sujeto puede hacer algo
distinto con un inefable)

El tóxico y el cuerpo
Qué es lo que lleva a un sujeto a querer incorporar una y otra vez un tóxico en el cuerpo? Esa pregunta es la
clave para entender la problemática de las Toxicomanías, el asunto no pasa por el consumo en sí, que
puede ser ocasional, sino por la repetición de la práctica.
Jacques Lacan cuando el el seminario 19 plantea la relación desordenada que tiene el ser hablante con su
cuerpo, atribuyéndole al goce la causa de tal perturbación y al lenguaje la función de suplencia que
ordena,en cada sujeto un modo particular, la intrusión del goce en la repetición corporal.
Miller plantea en relación a lo que dice Lacan que el goce material es uno, goce del propio cuerpo,siempre
es el cuerpo propio el que goza, es decir que uno puede drogarse con drogas, con el trabajo, la pereza, lo
que que quiere decir que el lugar propio del goce es en todos los casos el propio cuerpo.Originariamente
está el goce del cuerpo y luego el objeto del goce, siendo las drogas uno de esos objetos posibles.

El ser y el cuerpo
Para el hombre, su falta en ser,como efecto del significante,divide su ser de su cuerpo.Por un lado se
es(ser) y por otro lado se tiene un cuerpo(tener) Por el hecho de poseer un cuerpo el hombre también tiene
síntomas, los imprevistos que suceden en el cuerpo, señalan que no se es un cuerpo, sino que se lo tiene.
Estos sucesos como tantos otros son acontecimientos discursivos que dejan huellas en el cuerpo,que
producen síntomas.
El significante tiene efecto de significado y al mismo tiempo afecta al cuerpo, el afecto esencial es la marca
del lenguaje sobre el cuerpo, diferenciamos lo que puede ser un acontecimiento que genera angustia, de la
marca del lenguaje sobre el cuerpo.
Está idea del lenguaje como traumático conduce a Lacan a trabajar paulatinamente sobre una idea del
sujeto con un complemento corporal y ese complemento corporal se va construyendo en la
conceptualización del objeto a, este objeto marca el exceso de goce que el sujeto padece en el cuerpo, por
el solo hecho del lenguaje.Es un objeto en el que se destacan 2 vertientes: por un lado, en términos lógicos
es un vacío, el segundo aspecto es que es una extracción corporal, Lacan salva está dicotomía con el
término Parletre, lo que deja huellas en el cuerpo del sujeto.
Miller, dice que partir del seminario 20 Lacan, a trabajar el pasaje del sujeto al parletre, es un pasaje que
tiene como consecuencia un mayor peso que cobra el cuerpo en la dirección de la cura.Se pasa de este
modo del significante puro (sujeto) el sujeto más el cuerpo Parletre.En el seminario 21, dice que el
acontecimiento no se refiere a lo simbólico, en tanto lo que sucede en la historia el sujeto, sino lo real a lo
que se escribe Más allá del desciframiento, la definición del síntoma como acontecimiento del cuerpo nos
permite analizar un rasgo muy presente en la práctica de las toxicomanías, en el que el cuerpo no significa
como síntoma.
LOS CINCO AXIOMAS
Si algo nos enseña la clínica de las toxicomanías y precisamente esto, el goce está en el cuerpo.En mundo
de hoy, el mundo de las adicciones, en el que todo puede convertirse en una adicción, condiciona de modo
muy particular los casos que llegan a la consulta del analista.
En seminario "El lugar y el lazo", Miller plantea que podríamos forjar principios verdaderos axiomas que
hoy encontramos en lo que yo llamaba el mundo, nuestro partener mundo, Miller propone allí 5 axiomas
que pueden darnos una orientación muy precisas de Cómo llegan los sujetos hipermodernos a la consulta.

-Primer axioma: el deseo manipulado en el sentido de la demanda


El primer axioma consiste en reducir el deseo y falsearlo, para convertirlo en demanda, determinado de
este modo una oferta acorde a esta manipulación.Es un procedimiento relativamente sencillo, que explica
en parte el auge de determinadas psicoterapias, que ofrecen tratamientos Fast Food.
De este modo se construye un deseo con el formato de la demanda, Por ejemplo si el sujeto está excedido
de peso, se lo conduce a que quiera adelgazar, dando por entendido que el deseo de un sujeto excedido en
peso, es adelgazar.

-Segundo axioma:el derecho al goce


Implica la inserción del goce en el registro del deseo, toca muy de cerca a quienes trabajamos en el campo
de las toxicomanías.Si ponemos el acento en este individuo contemporáneo cansado, atormentado, por la
inseguridad en sus múltiples formas, agobiado por la falta de certidumbre y que llega a la noche su casa y
se enchufa el televisor a mirar lo que se le ofrece, es posible entender mejor porque se reivindica el
derecho al goce. Es importante, destacar la relación existente entre el encierro en el que un individuo
puede caer y el encuentro con un goce envasado y de rápido acceso, se reivindica entonces el derecho a
gozar del cuerpo.

-Tercer axioma: la palabra concebida como instrumento de bienestar


Esto sustrae a la palabra de su función de verdad, para convertirla en una función de equilibrio psíquico, un
medio de homeostasis, Este sería un principio catártico, basado en la idea de que hablar hace bien, lo que
en parte es cierto.
Nuestra clínica nos muestra el límite de esta idea, lo constatamos por ejemplo en los casos de alcoholismo,
el alcohólico suele hablar y mucho, sin embargo, es el mejor ejemplo de que hablar no es decir y que se
puede hablar mucho para no decir nada.Es importante destacar en este punto, que los individuos no van al
terapeuta necesariamente efectuar un cambio en sus vidas, sino que muchas veces van a justificar su modo
de vida y sus miserias.Es primordial ubicar la repetición y la justificación asociada en sujetos de porque se
drogan.(goce de lalangue)

-Cuarto axioma: el sentido es invitado a jugar contra lo real


El riesgo más próximo es que un individuo puede jugar analizar su consumo para precisamente seguir
consumiendo, es decir que puede hablar por ejemplo una y otra vez durante años sobre su adicción a
determinada sustancia, para precisamente justificar su consumo. En este punto le corresponde al analista
forzar la idea de que hay un real, y que ese real afecta al cuerpo, debido a que la metonimia servicio el goce
es cómplice de la situación que se denuncia.

-Quinto axioma: No juzguéis


En la hipermodernidad se denuncia la inexistencia de un fundamento real para jugar al otro, esta falta de
fundamento está basada en cambio en el rol de la autoridad, actualmente atravesamos una etapa de
consensos, que si bien tienen su lado positivo, en un punto se torna desconcertante.
En muchos casos esta pluralidad esconde una dificultad para establecer un juicio, habría que diferenciar en
este punto, lo que sería jugar determinada situación, de hacer una valoración moral.El tratamiento de las
toxicomanías, implica, Además del análisis de cada situación en particular, la toma de decisiones
concomitantes a ese análisis.
Estos cinco axiomas muy presentes en la clínica de las toxicomanías son obstáculos a considerar sobre todo
en los inicios de tratamiento, lo que es indicativo de algún modo, de estas nuevas presentaciones del
malestar contemporáneo.

Esa Repetición.Notas sobre las recaídas- Lic Martín Carlos Teruel.


Retornos
Un hecho frecuente en las instituciones abocadas al tratamiento de las toxicomanías radica, que una
cantidad considerable está compuesta por sujetos que se han tratado con anterioridad, se trata de
toxicómanos con antecedentes de tratamientos: psicoterapéuticos, psiquiátricos, en comunidades
terapéuticas, en grupos de autoayuda.
En cualquier caso se trata de individuos sobre los que se supone, que en algunas circunstancias previas, se
propusieron abandonar el consumo. Naturalmente, la ocurrencia de una recaída, genera profundas
inquietudes, sobre esto se han intentado diferentes vías explicativas. Una de ellas: La escasa motivación al
cambio del adicto, evaluación sostenida esencialmente en el hecho de que la mayoría de los casos la
demanda no proviene de una formulación del toxicómano, quién a lo sumo,cede a un forzamiento ejercido
exteriormente por otros.
Se ha recurrido también explicaciones que aluden a los "boicots" ejercidos por la familia y el entorno del
paciente, con el sujeto adicto llega un entorno primario, en el que existen modalidades de relación que han
sido incidentes en la formación y soporte del cuadro de adicto, Ahí la noción de codependencia.
Otro eje de consideración del problema, alude a las responsabilidades del o los terapeutas, ligadas a las
estrategias e intervenciones elegidas y desarrolladas en el abordaje efectuado, pareciera que no siempre se
consideran suficientemente los episodios de retorno al consumo como cuestiones inherentes a la
naturaleza del problema para Pensar las recaídas.

Revisar la brújula
Para el modelo teórico propuesto por Marlatt y Gordon, las recaídas se producen al exponerse el sujeto a
una situación de riesgo, sin ser capaz de responder con las estrategias de afrontamiento pertinentes, para
garantizar el mantenimiento de su abstinencia.
Por lo tanto se tratará de que el sujeto desarrolle un tipo de respuesta conductual ante situaciones
riesgosas, de manera que disminuye la probabilidad de caer en la ingesta.Si, por el contrario no afronta con
éxito este tipo de situaciones, la probabilidad recaer aumentará, dada la disminución de su percepción de
autoeficacia y además el forzamiento que le proporciona la experiencia positiva, derivada del episodio
ingesta.
Como no se tarda en advertir esta premisa de la prevención de recaídas, sustenta su confianza en introducir
un saber a ser aprendido por el paciente.
De ahí que se otorga gran importancia en este esquema el entrenamiento en habilidades-
fundamentalmente sociales y de afrontamiento--Todo en el marco de las leyes del condicionamiento
operante, lo cual Funciona muy bien en el plano del instinto,ahora ¿esto funciona también para que al
toxicómano, no se le haga agua la boca, ante su droga?

La pulsión no es el instinto
El instinto designa: "Al conjunto de pautas de reacción en los animales que contribuyen a la conservación
de la vida del individuo y de la especie"
Lo pulsional se trata de otra cosa es un concepto introducido por Freud, en Tres ensayos (en 1905) que se
sitúa en un plano diferente en tanto su función no responde a la coerción biológica.La actividad pusional no
se detiene con la satisfacción eventual que pudiera obtener del objeto, sino que es incesante y se satisface
"del retorno sobre sí misma bajo la forma de un circuito que bordea el contorno del objeto"
La pulsión no se satisfacen al hallazgo de objeto, sino por el recorrido de su propio circuito, es decir se
basta a sí misma.Entonces, cuando se trata de lo pulsional, las expectativas no pueden quedar cifradas en
un proceso de aprendizaje por qué la pulsión no se aprende.

Un cuerpo mutilado
La atención del consumo de drogas ha tomado del modelo sanitario clásico, la idea de qué se trata de
separar al organismo de un cuerpo extraño, con el propósito de que aquél recobre su integridad,las drogas
son un mal, aunque ya freud, advirtió que lo que hace bien no es sinónimo de bienestar para el sujeto.
Le Poulichet designa como operación del fármakon al acto que por lado, vehiculiza repliegue narcisista
filtrando una serie de representaciones, y por otra parte, presta un cuerpo, en una operatoria que queda al
descubierto, ante su ausencia,introduce la metáfora del miembro fantasma, para pensar a la abstinencia
como la forma invertida de la independencia.
Así, si el fármaco ha recubierto al cuerpo de una completud, la interrupción de la droga es experimentada
por el sujeto como una efracción evocando una forma de mutilación, una falta que cobra la figura de una
lesión, que como el miembro fantasma -órgano amputado- que empero duele, persiste dolorosamente
dejando al sujeto en una experiencia de desvalimiento, ante la cual el cuerpo pareciera demandar la
restitución de ese órgano capaz de ligar las excitaciones, que por no hallar anclaje en las cadenas
significantes, no pueden ser toleradas.
Además, se trata de un modo de satisfacción inmediato configurado en una indiferenciación del yo y el
otro, de manera que se opone a la temporalidad que ordena toda cadena significante, ahora bien frente a
la tenencia se suscitan variadas manifestaciones de urgencia corporal para la restitución del
tóxico(dependencia física) denominado síndrome de abstinencia.Lo que se presenta es una auténtica falta
de órgano figurada en el tóxico ausente, que deja el sujeto con un cuerpo incompleto y en una dramática
posición de estar desvalido.
Y aquí cabe hacer mención a otra de las recurrentes características que se encuentran en los pacientes
adictos a drogas, se trata de "lo insoportable del acto de diferir y lo intolerable de una espera de la
satisfacción".De ello se desprende una experiencia de abolición de la temporalidad operada por el
fármakon, en tanto este proporciona una inmediatez, que excluye la dimensión de la ausencia poseyendo
"un poder de borradura o disolución de las representaciones como un filtro de olvido"

Excitación y soluciones químicas


Claramente la generalización del uso de sustancias hace cada vez más variadas las formas de presentación
de los usuarios de drogas y obliga a desarrollar los principios generales y los a priori al momento de iniciar
un recorrido terapéutico, dónde lo que se trata en primer lugar es de localizar la función del tóxico en cada
caso.
El uso del tóxico Configura un intento de solución, constituye un impasse sobre la palabra, promoviendo
una anulación del otro para el acceso a un goce autoerótico sin partenaire, no acotado por la función
simbólica.
Si la operación de producción del sujeto consiste en la pérdida estructural la intoxicación permite sostener
una completud ilusoria, constituye un recurso por medio del que se pretende revisar la interrogación
acerca de la cuestión subjetiva, que siempre se halla atravesada por la castración y la angustia que
desencadena.
Hasta aquí, entonces, se propone que con las drogas se tapona la angustia se cancela el dolor de existir.
Lo que en la fenomenología que se observa repetidamente en los programas de tratamiento bajo la figura
de la desvalorización que experimenta el paciente, se articula para Gutiérrez Segú, con un déficit libidinal
de la estructura narcisista al no haber sido reconocida su alteridad, lo que lo ha dejado alojado como objeto
de goce.Queda entonces configurada una vinculación problemática, casi dramática entre el sujeto
toxicómano y su deseo.
Vale decir si el recurso al tóxico es movilizado por algo que pertenece al orden del malestar, este no sé liga
exclusivamente a las sensaciones, que de su modo de presentarse se atribuyen a la categoría del
padecimiento presente, porque hay también un malestar en la tensión frente a la aparición de lo bueno por
lograr.

Implicancias para la clínica


La localización que formulamos respecto de la insuficiencia del abordaje, en términos de de modificación
de patrones comportamentales, porque hay un eje de la conducta humana -la pulsión- que no responde a
la ley del efecto, y Por ende, no puede ser absorbida por un proceso de aprendizaje y entrenamiento
Si respecto de detener la carga pulsional hay un imposible, no se trata de retroceder ante los intentos de
responder con un dispositivo asistencial, que permite a los usuarios problemáticos de psicoactivos,
construir sus alternativas para arreglarse con ello.
No se propone desterrar los montajes que las instituciones pueden ofrecer, incluidos los programas de
prevención de recaídas, que se basan en los procedimientos conductuales. El desafío es ir más allá, en todo
caso valiéndose de los mismos, todo lo que sea posible sin ignorar que no es ahí donde se agota el
abordaje.
Al toxicómano no es el consumo lo que lo lleva a la consulta, sino el fracaso de lo que por la vía del
consumo conseguía, en tanto la sustancia no presenta para el que consume una pregunta, sino que por el
contrario da certidumbre la de un goce que "se presenta como lo más asegurado"
Así, al contrario de la idea de la ingesta de drogas como autodestrucción se impone no dejar de contemplar
la perspectiva de una operación esencialmente conservadora, que protege a una forma de narcisismo.
Se sabe,desde ya,que existe en el consumo la veta autodestructiva,pero no es esto lo único que hay que
ver.
Esa otra función, la que aparece como un modo de autoconservación.De ahí que la supresión del tóxico
normalmente evaluada como un paso hacia la salud del paciente no puede ser escindida de los efectos
dolorosos y de conmoción, que habrán de tener del carácter angustiante, que supone quedarse sin el
recurso que permite afrontar las vicisitudes de la existencia.
Lo que aquí se plantea es la no renuncia a llevar a cabo una clínica del sujeto, por qué tiene que ver con la
singularidad y el modo en que cada quien edificará su proceso a partir en su versión particular, y para eso
hay que ir al encuentro del sujeto que ha quedado detrás de la categoría social de "drogadicto".
Otro punto importante, reside,en no entregar respuestas a quién aún, no se ha formulado preguntas,
puesto que no existe la verdad universal, que avale sostener una suerte de pedagogía de la recuperación.El
recorrido de un sujeto del tratamiento, aún en el marco de una serie normalizante para todos, tiene que
ver, con que comience a interrogarse respecto de sí mismo.

Toxicomanías y Psicosis I- Clase VIII- Carolina Zaffore (Libro de Fabián Naparstek,


Introducción a la Clínica con Toxicomanías y Alcoholismo)
El tema es trabajar sobre toxicomanía y psicosis, este sería el tema general.
Voy a tomar dos textos: "Psicosis ordinarias y toxicomanías" un artículo de Fabián Naparstek y otro de Eric
Laurent "Tres observaciones sobre la toxicomanía", aparece una reformulación o incluso un
cuestionamiento a la tesis central de la función de la droga, me refiero a la función cómo lo que permite
romper el matrimonio con él hace pipi(Lacan)
La idea de esta clase va a ser, justamente poner a prueba esta formulación lacaniana en relación con la
psicosis.
Ustedes saben que Freud no ha tratado adictos es más hay un caso donde el envía a Sudamérica a un sujeto
que consumía, indicando que no había ningún tratamiento posible para alguien así, sin chances de
someterlo a un psicoanálisis.
Para Freud, las adicciones se presentaron como algo que no entraba directamente en el psicoanálisis,
tampoco la psicosis.Lo cual indica ya, desde Freud, y mucho más acentuado desde Lacan, que si uno
somete a un psicótico un análisis hay un peligro claro de desencadenamiento.Cuando uno intenta hacer
pasar los fenómenos elementales como dice Lacan, las alucinaciones propias de la psicosis por el Edipo o
por la interpretación se topa con un límite, no tienen la misma estructura un síntoma neurótico y un
fenómeno elemental.Lacan, Define dos mecanismos diferentes para la neurosis y para la psicosis, se trata
de situar como la fenomenología de la psicosis no responde el mecanismo de la represión y no supone la
lógica edípica, la castración en términos freudianos.
El adicto es alguien, con quien verdaderamente lleva todo un trabajo conseguir que algo de su adicción se
empieze a poner en palabras, que se empiece a formalizar una demanda de tratamiento.
La toxicomanía y la psicosis, de ninguna manera pueden situarse en el mismo nivel, no podemos afirmar en
términos diagnósticos que la adicción es una estructura más.
La función del tóxico o la función de la droga en cada sujeto, va un poco en contra de suponer que la
adicción es un grupo homogéneo, una estructura más, tal como la neurosis, la psicosis y la perversión.
En relación con el diagnóstico quiero ubicar dos consecuencias muy importantes:
1)Una es barrer con la idea de la adicción como una estructura más, es decir que esta categorización, que
viene desde el discurso social "soy drogadicto" "soy drogodependiente", otorga un nivel de identificación
en el sujeto, que da cuenta de una homogeneidad ficticia, habrá que ver preferentemente como cada uno
se relaciona con el tóxico.
2)La segunda, Es que la pregunta por la función del tóxico, nos va a servir muchísimo para poder verificar
un diagnóstico diferencial.No estoy señalando la función de la droga como tapón de la estructura, sino que
la pregunta por el modo en que un sujeto enuncia el consumo, en qué coyuntura, cómo se viene articular
en su economía psíquica, también va a ser la posibilidad de pescar su estructura, percatarse si se trata de
un neurótico o si se trata de un psicótico.
Este punto es clínicamente crucial, porque es el problema de muchos tratamientos en las comunidades
terapéuticas, donde son todos tratados como adictos.Allí la identificación es la noción más fuerte, hay una
fraternidad alrededor del mismo problema "para todos" y por lo tanto una cura tipo un mismo tratamiento
"para todos".
Entonces, lo que me parece crucial es poder situar ante todo la pregunta por el diagnóstico diferencial, en
todos los casos, Aunque la presentación de un sujeto sea por la vía de la adicción, Aunque la consulta se
limite a un problema de adicción.De hecho mucho psicotipos llegan a la consulta, por un problema con las
drogas y no por la psicosis.
Hay casos donde uno puede verificar cierto logró terapéutico en términos de abstinencia a determinada
sustancia, y sin embargo el tiempo parece un desencadenamiento.Es decir, que estos elementos de la
clínica, nos permiten cuestionar un poco la idea de abstinencia como fin en sí mismo.Son cuestiones que
atañen también a la "posición ética del analista", es decir qué función cumple el tóxico para cada sujeto en
particular.
Eric Laurent, va a ser contundente en el planteo de su tesis el va ubicado como esta idea de la canela
función del tóxico como lo que permite romper el matrimonio con el falo, no es válida para la psicosis, el la
va a llamar una formación de ruptura opuesta a la formación de compromiso, matrimonio con el falo,en los
casos de psicóticos que consuman esta ruptura con el otro no se verifica, no se verifica que la droga venga a
romper con el falo, a romper con el otro sino lo contrario. Él ha encontrado casos donde los psicóticos
consumen pero más bien como un modo de lanzarse al otro, y no de romper con el otro.En la psicosis hay
una ruptura radical con el falo.
Sin embargo, como bien decía esta tesis de ruptura habla de una ruptura con la significación fálica, pero no
de la forclusión del significante paterno.Se ve bien Así que el uso del faro es organizar el mundo, esa es la
función simbólica del falo,en ese modo de hacer pasar el goce peniano, el goce autoerótico al campo del
otro con el falo, hacer pasar ese goce por el discurso.El uso del falo es eso, hacer de ese órgano algo en el
campo del otro, hacerlo pasar por el discurso.Es es el problema en la psicosis, cuando a falta del falo no se
puede hacer pasar ese órgano el campo del otro.
Demos ahora un paso más en el planteo de Eric Laurent, cuando sostiene que no se trata tanto de que la
droga viene al lugar de romper con el falo, sino que la ruptura está de antemano.Es Exactamente la misma
que tomó Freud para hablar en "Pérdida de la realidad en Neurosis y Psicosis", plantea que la neurosis hay
una huida de la realidad, una pérdida parcial de la realidad, pero que en la psicosis hay una ruptura inicial y
el delirio bien hacer un modo de reconstituir esa realidad.
En la Psicosis la droga viene más bien al lugar de intentar restituir esa ruptura,no se presenta como en la
Neurosis(el tóxico lugar de no querer saber nada del otro,de la castración del otro,al lugar del
autoerotismo)
Para situar algo de la certidumbre del goce hay una certeza que no es del orden de la psicosis, Pero hay una
convicción de que esa sustancia otorga un goce, hay un saber sobre el goce que da la ingesta.
Lacan, indica que en la psicosis hay un punto, una ruptura, un agujero que está de antemano, y en todo
caso, el trabajo del delirio, es un intento de reconstruir esa realidad o de reconstituir los lazos libidinales.
Otros ejemplos muy interesante que presenta Eric laurent en este artículo son los casos de psicosis donde
se puede verificar que no se trata de una manera descontrolada de un tóxico o de varios tóxicos, sino que
tomando un término de Esquirol, él la llama "Monomanía" porque se trataría de una Manía limitada,
acotada a determinado tóxico.
Hay que situar en cada caso si ese objeto está articulado en el otro si hay una relación asociativa,
significante o no sin duda, es la chance del análisis, que algo de eso comienza a circular simbólicamente,
sino no hay análisis posible.Hay que poder deslindar los niveles de la significación y de cómo esa
satisfacción se engancha con el otro. Freud hace todo un trabajo para situar como en el autoerotismo se
suelda una fantasía, que le suelda un elemento del campo del otro, es decir que un autoerotismo puro, es
difícil de pensar.
En cuanto a esta idea de E. Laurent, él habla de verificación clínica: prestar atención en determinados casos
de psicosis, donde el tóxico viene más bien a ordenar, abre la perspectiva de un intento de anudar, de
estabilizar, con todos los peligros que eso conlleva, porque sin duda, no es lo mismo una suplencia
delirante, que la ingesta real de una droga.Es interesante en términos de función, entonces la pregunta es,
si más bien viene a deslocalizar un goce, o si es un intento fallido de localizar un goce.
En el campo de la psicosis, Ese es todo el problema es el falo, el que permite localizar un goce es el falo, el
que permite regular el goce y todo el problema es, cómo se las arregla el psicótico para regular o lograr
hacer algo con ese goce, sin el instrumento fálico, muchas veces la relación a una sustancia es un intento
más, de regular sin el falo ese goce que lo invade.
Podemos decir entonces que la adicción para un psicótico, podría ser perfectamente una respuesta, un
modo de nombrarse, un modo de otorgarse un ser.

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