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BLOQUE C
EL S.XX ESPAÑOL: DE LA CRISIS DEL 98 AL FIN DE LA DICTADURA FRANQUISTA
TEMA 9 LA SEGUNDA REPÚBLICA (1931-1936)
9. 3 EL BIENIO DE LA CEDA Y DEL PARTIDO RADICAL. EL FRENTE POPULAR. DESÓRDENES PÚBLICOS, VIOLENCIA Y
CONFLICTOS SOCIALES.
EL BIENIO RADICAL-CEDISTA (CONSERVADOR):
Elecciones de 1933 y formación de un nuevo gobierno conservador: En el otoño de 1933, el presidente
AZAÑA dimitió como jefe de gobierno ante el malestar social generado tras los incidentes de Casas Viejas, y el
presidente de la República, ALCALÁ ZAMORA, disolvió las Cortes y convocó elecciones para el 18 de noviembre.
Fueron las primeras elecciones en las que las mujeres pudieron votar. El sistema electoral era mayoritario y
primaba a las candidaturas más votadas en cada circunscripción; la derecha venció al presentarse unida,
mientras que la conjunción republicano-socialista fracasó al concurrir el PSOE en solitario. Así, se inician dos
años de gobierno conservador, conocidos como el BIENIO RADICAL-CEDISTA. Dos fuerzas políticas obtuvieron
los mejores resultados: en el centro, el Partido Radical de LERROUX y a la derecha, la CEDA de GIL ROBLES, que
era el grupo parlamentario más numeroso, que representaba a los sectores conservadores y católicos, y
mostraba una dudosa fidelidad a la República. Por ello, ALCALÁ ZAMORA encargó la formación de gobierno al
Partido Radical, que necesitaba del apoyo parlamentario de la CEDA para poder gobernar. La victoria de la
derecha fue contestada por una insurrección armada organizada por la CNT que fracasó, causando muertos,
encarcelamientos y represión en las filas anarquistas.
Política contraria al Bienio Reformista: El gobierno de LERROUX paralizó gran parte de las reformas
anteriores: frenó la reforma agraria devolviendo los territorios a la nobleza, anulando la cesión de tierras a los
campesinos y decretando la libertad de contratación y de salarios, etc, a lo que los campesinos respondieron
con huelgas. Paralizó la tramitación de nuevos Estatutos de autonomía, como el vasco, también anuló medidas
llevadas a cabo por el gobierno catalán que convertía a los arrendatarios (rabassaires) en propietarios en un
plazo de 12 años. Contrarrestó la reforma religiosa reanudando la financiación estatal a la Iglesia y aprobó una
amnistía para los golpistas que apoyaron al GENERAL SANJURJO y para los colaboradores con la dictadura de
PRIMO DE RIVERA. Por último, obstaculizó la reforma educativa, reduciendo el presupuesto educativo, los
programas de construcciones escolares y de extensión cultural.
Reacción de los sectores populares, sindicatos y partidos de izquierda: El sector más izquierdista del PSOE
se fue radicalizando, y junto con los anarquistas, enfrentándose abiertamente contra el nuevo gobierno, con la
proliferación de huelgas y conflictos. El PCE abandonó su enfrentamiento con el PSOE, y creó un Frente
Antifascista, germen del futuro Frente Popular. Esto endureció la postura de la CEDA y de su presidente GIL
ROBLES, que exigía al Partido Radical, con el que gobernaba en coalición, más contundencia en el
mantenimiento del orden público, mientras sus Juventudes de Acción Popular (JAP) actuaban como una milicia
de ultraderecha. El presidente LERROUX terminó accediendo a las reclamaciones de la CEDA y les otorgó tres
carteras ministeriales en 1934.
Revolución de octubre de 1934: La entrada en el gobierno de la ultraderecha fue considerada una amenaza
por la izquierda más radical y por los nacionalistas catalanes, temerosos del fin del régimen democrático desde
dentro, como acababa de ocurrir con el ascenso de los fascistas en Alemania y Austria. Al día siguiente de la
formación del nuevo gobierno, por iniciativa de la UGT, con escasa participación de la CNT, se produjo una
huelga general y manifestaciones en las grandes ciudades. El movimiento insurreccional solo tuvo amplia
repercusión en Barcelona y Asturias:
-Barcelona: La insurrección tuvo carácter político nacionalista. El presidente de la Generalitat LLUIS
COMPANYS (Esquerra Republicana) proclamó el Estat Catalá dentro de la República Federal Española.
Se organizó una huelga general por parte del PSOE, UGT, PCE y Unión de Rabassaires(campesinos). El
escaso apoyo ciudadano y la negativa de la mayoritaria CNT a participar en la huelga, hicieron fracasar
la insurrección, que acabó con más de 3500 detenidos (incluído el gobierno de la Generalitat).
-Asturias: Los mineros y obreros creyeron que había llegado el momento de realizar una revolución de
carácter social, una insurrección armada revolucionaria, en la que colaboraron anarquistas, socialistas
y comunistas. Gran parte de la cuenca minera asturiana fue controlada por los mineros durante una
semana, hasta que fueron neutralizado con la llegada del ejército africanista al mando del GENERAL
ESQUEMA HISTORIA ESPAÑA 2ºBACH.
Prof. Gema Neumann
FRANCO. La represión fue durísima: más de 1300 mineros muertos, 2600 heridos, 5000 detenidos,
represión, torturas, etc.
contra la República y Falange fomentó un clima de violencia y crispación (“dialéctica de los puños y las
pistolas”). Por su parte, la izquierda del PSOE (LARGO CABALLERO) y los anarquistas de la CNT fomentaron la
movilización popular: huelgas en las ciudades y ocupación de tierras en los campos extremeños y andaluces. La
violencia política y la conflictividad social entre la izquierda y los falangistas de ultraderecha, provocaron más
de 400 muertes en estos meses previos a la guerra civil. La derecha llegó a la conclusión de que solo un golpe
militar podía evitar una inminente revolución socialista.
El fin de la II República: El 12 de julio fue asesinado por pistoleros de derechas el TENIENTE JOSÉ CASTILLO,
miembro de la Guardia de Asalto republicana, por su posicionamiento favorable al socialismo y por pertenecer
a la UMRA (Unión Militar Republicana Antifascista). En respuesta a este hecho, el 14 de julio el dirigente JOSÉ
CALVO SOTELO (líder de Renovación Española, partido monárquico cercano a ideologías de ultraderecha) fue
asesinado por un grupo de izquierdistas.
La sublevación militar contra la II República se inició en Marruecos el 17 de julio, dando lugar a un golpe de
Estado que fracaso pero la negativa de los golpista a deponer las armas desencadenó la Guerra Civil.