El tubo de ensayo es un utensilio indispensable en el ámbito de la Medicina y de la
ciencia en general. Se trata de un recipiente cilíndrico de vidrio, cerrado por un extremo, que se utiliza para realizar experimentos y análisis a pequeña escala, especialmente en el laboratorio. Cómo se usan los tubos de ensayo Los tubos de ensayo de vidrio se utilizan para calentar la materia que contienen. Son bastante delgados, pero moderadamente fuertes, por lo que son un recipiente muy bueno para calentar pequeñas cantidades de materia (siempre que no sea metal o algo similar que pueda derretir el vidrio). Por esta razón, casi todos los tubos de ensayo de vidrio tienen fondos redondeados y se utilizan principalmente en laboratorios de química. Para qué sirve el Tubo de Ensayo? Gracias al diseño, el tubo de ensayo es de fácil manipulación, por lo que transportar estas sustancias que se llevarán a pruebas y experimentos es sumamente seguro, tomando en cuenta lo largo del instrumento requiere una inclinación considerable para poder volcar por accidente el contenido, mientras que la forma que toma la boca del tubo facilita su traspase a otros envases. Además de contener las sustancias, el tubo de ensayo sirve para someter el contenido a altas temperaturas. En estos casos, para manipular el instrumento se requiere de unas pinzas comúnmente de madera, para evitar el contacto con el tubo que se encontrará a altas temperaturas. Usos del Tubo de Ensayo El tubo de ensayo por lo general, viene con un una gradilla, que es donde se guardan el instrumento sirviendo de sostén, o también donde juntaremos las muestras o mezclas con las que se trabaje. Tipos de Tubos de Ensayo Tubo de ensayo de plástico Estos tubos de ensayo están hechos con un material llamado termo plástico, para que pueda soportar el ataque químico que surge de las mezclas que en el instrumento se preparan Tubo de ensayo de vidrio Este instrumento está hecho con vidrio borosilicatado, capaz de soportar altas temperaturas. ¿Qué es una Gradilla de Laboratorio? Se trata de un equipo de laboratorio que es utilizado para mantener en posición vertical varios tubos de ensayo al mismo tiempo. También puede ser usado cuando es necesario mantener gran cantidad de soluciones, para trabajar en simultáneo. ¿Para qué sirve la Gradilla de Laboratorio? Gracias a la variedad de diseños, se pueden ubicar en ella tubos de ensayo de diversos tamaños, además las gradillas son fundamentales porque permiten que estos se mantengan firmes, mientras los analistas observan los cultivos. Estas son resistentes a temperaturas altas o muy bajas, lo que demuestra que pueden ser usadas en diferentes experimentos. La gradilla de laboratorio te ofrece la posibilidad de mantener en perfecto orden cada uno de los tubos de ensayo que tengas en tu laboratorio, bien sea para muestras médicas o soluciones para estudios e investigaciones. Usos de la Gradilla de Laboratorio La función principal de la gradilla de laboratorio es facilitar por completo el manejo y uso y transporte de los tubos de ensayo que contienen soluciones o muestras médicas. Se puede considerar un instrumento de primera necesidad dentro del laboratorio. Gracias a este maravilloso instrumento, podrás manipular de forma sencilla los tubos de ensayo, de lo contrario el uso de ellos sería un poco más complicado. Sin el uso de la gradilla de laboratorio, no tendrías un lugar seguro donde colocarlos mientras se manipulan las sustancias que en ellos se encuentran. Tipos de Gradillas de Laboratorio Gradillas con Tapa Sirven para almacenar las muestras que se refrigeran por largo tiempo. Gradillas de un Solo Uso Son las más comunes, las que se pueden encontrar de forma convencional dentro del laboratorio, además son las más económicas del mercado. ¿Para qué se utiliza la gradilla de alambre plastificado? Su principal función es facilitar el soporte y el manejo de los tubos de ensayo. De este modo, los tubos se mantienen en posición vertical, evitando que rueden y se partan o que se derramen las muestras que contienen. Gracias a las gradillas, se consigue una mayor comodidad al trabajar en el laboratorio, ya que sin ellas no se tendría dónde apoyar los tubos de ensayo, lo que podría provocar, por ejemplo, quemaduras.