Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Modalidades en
educación. Educación
formal
03
/ 1. Introducción y contextualización práctica 3
/ 2. Atención a la infancia 4
/ 16. Bibliografía 11
© MEDAC 978-84-18864-30-8
Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin la autorización escrita de los titulares del copyright,
bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción, transmisión y distribución total o parcial de esta obra por
cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático.
Comparar los diferentes tipos de centros y programas de educación formal, no
formal e informal en la actualidad
/ 2. Atención a la infancia
Antes de conocer las modalidades de educación, debemos saber que en nuestro país la escolarización de los niños y
niñas es obligatoria desde los 6 hasta los 16 años. La etapa de infantil se encuentra organizada en dos: de 0 a 3 años
y de 3 a 6 años. Aunque ambas son voluntarias, el segundo ciclo de infantil es gratuito. Así, podemos apreciar que
hay un tramo de edad que no tiene escolarización obligatoria. Por este motivo, surgen programas de atención a la
infancia que incluyen instituciones, organizaciones y demás personas que velan por el cuidado y la educación de los
niños, como es nuestro caso.
• La incorporación de la mujer al mundo laboral: hay más niños que necesitan atención por más tiempo.
• La educación no formal: debido a la situación de la mujer y de las largas jornadas de trabajo, la educación
formal no es suficiente para cubrir las necesidades de nuestra sociedad.
Por todo ello, surge la necesidad de diseñar un sistema que cubra esta nueva perspectiva de atención a la infancia,
protegiendo a la infancia y la familia y atendiendo a la variedad de situaciones. Así, en la actualidad, los programas
de atención a la infancia abarcan diferentes modalidades en función de las necesidades, del momento, del tiempo o
de los intereses.
De esta manera, la educación formal se corresponde con el sistema educativo que, como hemos visto, se encuentra
regulado por leyes que aseguran que todos los niños tengan el derecho a recibir educación, y que cumplan unos
objetivos generales en función del momento evolutivo en el que ese encuentran.
Esta educación formal está estructurada cronológica y jerárquicamente a través de diferentes órganos de gobierno.
El espacio y el tiempo en el que se desarrolla la educación formal es específico y también lo organiza el gobierno.
Ejemplo de ello son la fijación de los días lectivos y los festivos del año, el horario escolar que deben cumplir o las
escuelas que están a disposición de, sobre todo, la administración pública. Lo mismo ocurre con los recursos de los
centros de nuestro sistema, los cuales deben estar aprobados y acogidos a una normativa.
Enlaces de interés...
En el siguiente enlace podrás acceder al documento del Ministerio de
Educación y Ciencia sobre la LOE. https://bit.ly/30PfZq5
Hoy en día se subraya la necesidad de esta modalidad educativa debido a la evolución de la sociedad, lo cual se
refleja, entre otras cosas, en incorporación de la mujer al trabajo y en las dificultades para conciliar vida familiar
y laboral. De este modo, la educación no formal también está orientada a
conseguir unos objetivos y contenidos relacionados con el desarrollo del
niño, pero está estructurada de manera diferente a la educación formal.
Entre sus principales características encontramos que es una educación organizada y planificada, que no
requiere de una ley educativa que la estructure, su organización puede realizarse en función de competencias
del alumno y sus profesionales han de estar especializados, pero pueden ser diversos.
La principal diferencia la vamos a encontrar en el modo en el que se desarrollan y en las diferentes formas que
toman. Destacamos los más relevantes:
• Educación no formal: ludoteca, granja escuela, programas de animación sociocultural, aulas hospitalarias, etc.
Como ves, la etapa de Educación Infantil se divide en dos ciclos. Como educadores vamos a poder trabajar en ambos
ciclos, pero con algunas diferencias entre ellos:
2. Segundo ciclo: no podemos trabajar como tutores del aula, pero sí como auxiliares.
La escuela de Educación Infantil en la actualidad, además, ha superado ciertas barreras del pasado:
• Ya no se utiliza la denominación «guardería», puesto que el modelo que se ofrece va más allá del modelo
asistencial del que surgieron en un primer momento.
• Se trata de una etapa educativa con identidad propia: no solo sirve para preparar al alumnado para la siguiente
etapa, la Educación Primaria, sino que se rige por sus propios objetivos, contenidos y principios metodológicos
establecidos en nuestra normativa.
• La finalidad principal es «contribuir al desarrollo físico, afectivo, social e intelectual de los niños y niñas»
(art.2, Real Decreto 1630/2006).
EDUCACIÓN INFANTIL
1º CICLO 2º CICLO
Las escuelas infantiles también podemos clasificarlas en función de la base pedagógica sobre las que se sustentan.
Por ello, podemos encontrarnos con centros de educación infantil Montessori o Waldorf, entre otros. Siguen la
normativa, pero la metodología que emplean es diferente a la convencional.
También podemos encontrarnos con centros clasificados en función del idioma: centros de educación infantil
bilingües o, directamente, centros de educación infantil cuya totalidad de clases se imparte en un idioma que no es
la lengua materna del país (centros en los que los niños hablan durante toda la mañana en inglés, por ejemplo, y no
se habla castellano).
Para analizar las características que debe tener un centro de Educación Infantil debemos fijarnos, en primer lugar,
en la importancia que tiene el contexto que le rodea, que va a configurar la vida en nuestra escuela, la metodología
y el funcionamiento. Con contexto nos referimos a diversos ámbitos: contexto geográfico y contexto sociocultural.
El contexto geográfico se refiere a la ubicación de nuestra escuela, comenzando por el país, la comunidad, la ciudad
o el municipio en el que se encuentre. ¿Por qué es esto importante? Porque los niños que vivan en el norte de un país
tendrán unos recursos naturales y un clima que será diferente a aquellos que se encuentre en el sur y esto, de forma
inevitable, afectará al día a día de los niños.
También nos referimos con contexto a la zona urbana, pues nos va a indicar el nivel de las familias y, por lo tanto,
las necesidades e intereses que puedan tener nuestros alumnos. Por ejemplo, si nos encontramos en una zona
socioculturalmente desfavorecida, nuestras actuaciones estarán dirigidas a evitar que esos niños caigan en riesgo
de exclusión social.
Como comentamos anteriormente, en la escuela infantil se encuentran aquellos niños que tienen entre 0 y 3 años
de edad, pero no todos están en el mismo grupo o aula, sino que se dividen en función de su año de nacimiento o,
incluso, a veces, en función del mes. Obligatoriamente, la escuela deberá contar con:
Lo mismo sucede con la educación infantil en el segundo ciclo (3, 4 y 5 años). A veces, en la escuela habrá más de un
aula para cada tramo edad, pues el número que hemos comentado es el mínimo que debe tener. En el caso de que
haya dos unidades del tramo de edad de 1-2 años, estos pueden dividirse en función del mes de nacimiento: los niños
que hayan nacido de enero a junio en un grupo y los que hayan nacido de julio a diciembre en otro.
Observa que a mayor edad, más elevado el número de alumnos que puede haber por clase. Esto se debe a que los niños
mayores son más autónomos y no van a requerir tanta atención (con respecto a suplir sus necesidades biológicas).
A continuación, vamos a analizar algunas de las características generales que debemos tener en cuenta en una
escuela infantil:
• Tamaño. Debe ajustarse al número de aulas y unidades que tenga el centro. Al ser niños de corta edad no es
conveniente que sea excesivamente amplio, puesto que podría transmitirles frialdad.
• Localización. Es importante que esté cerca de núcleos urbanos o de zonas de alto tránsito de gente. Por
ejemplo: en un barrio poblado o en una zona que recoja muchos centros de trabajo, de manera que los padres
puedan acudir cómodamente cuando lleven y recojan a sus hijos a la escuela. Se trata de cubrir necesidades
de la sociedad, por lo que debemos ir allí donde la sociedad necesite una escuela infantil.
• Luz. Resulta beneficioso que contemos con luz natural para crear un
clima más cálido.
• Facilitadora: pone al alcance de los niños las herramientas que ayudan a su desarrollo.
• Activadora psicológica: analiza la evolución del niño y crea entornos favorables para su desarrollo, teniendo
en cuenta el espacio y la organización.
• Integradora social: para aquellos niños que tengan alguna dificultad, que proceden de otras culturas,
religiones, etc.
Nudo. ¿Cómo crees que está reaccionando este profesional?, ¿es competencia de la escuela ese establecimiento de
normas o no?
Desenlace. Por supuesto que es competencia de la escuela y parte fundamental del funcionamiento de la misma,
pues como educadores no nos limitamos a atender a los niños solo de manera asistencial, sino que, como hemos
visto anteriormente, tenemos una función potenciadora, activadora psicológica o compensatoria. Por ello debemos
tener en cuenta que siempre le ofrecemos a los niños una educación globalizada, trabajando todos los aspectos del
desarrollo del niño: cognitivo, motor, afectivo, social, moral, sexual, etc.
TÉCNICO EN EDUCACIÓN INFANTIL
/ 11 MEDAC · Instituto Oficial de Formación Profesional
La escuela de educación infantil pertenece a la educación formal, y como tal, se encuentra estructurada, planificada
y reglada. Hemos dejado atrás aquella visión de la escuela como un espacio en el que «guardamos» niños mientras
los padres trabajan. En la actualidad la escuela cumple una gran variedad de funciones, no solo la de atender a las
necesidades primarias de los niños. Recuerda las funciones:
• Activadora psicológica.
/ 16. Bibliografía
Garganté, A. B., y Font, C. M. (2004). La práctica psicopedagógica en educación formal (Vol. 24). Editorial UOC.
Gutiérrez Cuevas, Pilar (1995). La educación infantil: modelos de atención a la infancia. Revista Complutense de educación, 6(1), 101
Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa. Boletín Oficial del Estado, nº295, 97858-97921
Real Decreto 1630/2006, de 29 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas mínimas del segundo ciclo de Educación infantil. Boletín Oficial del Estado, nº4.