DERECHO PROCESAL PENAL I

FACULTAD DE DERECHO Y CC. PP.

Integrantes:

-CONTRERAS FLORES MILAGRITOS - N0020118

STEFANY REYES CRISANTO -N00306275
PEREDA CORCUERA ABIGAIL -N00123080

Curso:

Derecho Procesal Penal I

Docente:

Dr. Ricardo Luperdi Gamboa

TRUJILLO – PERÚ
 DERECHO PROCESAL PENAL I

I. INTRODUCCIÓN

El proceso penal se caracteriza por poseer tres etapas: la investigación preliminar, la etapa
intermedia y el juzgamiento. En la primera versa lo más importante del proceso, pues, si no
se realizan las diligencias pertinentes para corroborar la existencia del ilícito, no habría forma
de iniciar el proceso de forma eficiente. En este sentido, es imperativo que el Ministerio
Público cuente con una estrategia que les permita comprobar la veracidad de los hechos; por
ejemplo, desarrollar un análisis del caso y distinguir la dificultad que este podría implicar. El
Ministerio Público no puede actuar a ciegas en la investigación, debe tener cautela para no
afectar el tránsito de esta misma; es decir, es un trabajo de consciencia y análisis profundo,
sin perder la vinculación de sus diligencias con los principios que rigen al proceso penal.

Adicionalmente, el Ministerio Público debe tener en cuenta que un caso penal es de gran
importancia a nivel de sociedad, pues, es de interés público. Sobre este punto, es pertinente
aseverar que una comunidad, azotada por la existencia de algún delito, está sumamente
interesada en cómo va el curso de la investigación.

La investigación preliminar tiene como objetivo comprobar si existe un ilícito; es decir, si hay
o no un delito. En este sentido, la resolución de un caso penal depende de dos técnicas:

● LA SUBSUNCIÓN: Comprobación o concurrencia de las características típicas de

todo delito. Se debe partir desde las características típicas generales hacia un
acomodo respecto a las características típicas particulares según el caso.

● LA ARGUMENTACIÓN: Constituye la exigencia de la motivación de toda decisión: es

decir, la explicación de estas.

En el presente informe elegiremos un caso penal actual, donde abordaremos las estrategias
fiscales que aplicaríamos y los respectivos actos de investigación y pruebas.

II. ANTECEDENTES DEL CASO ELEGIDO:

“ Ni bebé, ni embarazo, ni secuestro: el caso que mantuvo en vilo a Perú nunca existió”

El día 20 de octubre del presente año, se reportó como desaparecida a una mujer identificada
como Gabriela Sevilla, quien supuestamente se encontraba gestando. El caso comenzó
cuando dicha persona se dirigía a una clínica para dar a luz; sin embargo, Gabriela Sevilla
nunca llegó a la clínica. Al cabo de un día y medio, dicha mujer aparece en un hospital, donde
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aseguró que habría sido víctima de un supuesto secuestro, ejecutado por tres hombres,
quienes la habrían intoxicado, golpeado y hecho “parir”, para posteriormente arrebatarle a
Martina, su hija recién nacida. No obstante, al realizarse los exámenes correspondientes, se
determinó que Gabriela Sevilla no había estado embarazada; es decir, su útero no habría
alojado a ningún bebé; por lo tanto, la bebé que se proclamaba como arrebatada, no existió.

Después de lo sucedido, su pareja Ramiro Gálvez Ramírez, de 36 años, declaró ante la

Policía, lo cual cambió radicalmente el panorama. Él señaló que la fecha prevista para el parto
era a finales de agosto lo cual generó una serie de dudas, señala que Gabriela nunca le había
mostrado sus evaluaciones clínicas, solo un informe de un ginecólogo obstetra y un par de
fotos de las ecografías que se realizó, indicó también que ellos habían estado separados y
que conviven desde hacía tres meses. Un día antes que Gabriela desaparezca habían
discutido, recalcó, porque él había descubierto que el informe médico que le presentó era
falso y que ninguna de las consultas en la clínica donde supuestamente iba a dar a luz habían
sido por embarazo. Al día siguiente, Gabriela le escribió a Ramiro insistiendo que no mentía
y que se le había roto la fuente, le mandó una foto de una toalla ensangrentada y le dijo que
se iba a la clínica, que se encontraran allí, pero ella no llegó al lugar.

Además se conoce que la mamá de Gabriela estaba enterada de toda la mentira, sin
embargo, fue ella quien organizó una vigilia y clamaba por Martina, su supuesta nieta.

En redes sociales circula un video en el cual se ve a Gabriela Sevilla llegando en la

madrugada del viernes a dicho hospital en compañía de su madre a paso ligero, sin mostrar
ninguna complicación. Se ha dado a conocer también que a través de Marketplace, el sitio de
comercio online de Facebook, Gabriela puso a la venta productos de bebés, se dice que son
los regalos de su baby shower.

DESCRIPCIÓN DEL DELITO:

Artículo 144.- Fingimiento de embarazo o parto

La mujer que finge embarazo o parto, para dar a un supuesto hijo derechos que no le
corresponden, será reprimida con pena privativa de libertad no menor de uno ni mayor de
cinco años.

La misma pena privativa de libertad y, además, inhabilitación de uno a tres años, conforme al
Artículo 36 inciso 4 (incapacidad para ejercer por cuenta propia o por intermedio de tercero
profesión, comercio, arte o industria, que deben especificarse en la sentencia) se aplicará al
médico u obstetra que cooperen en la ejecución del delito.
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III. ESTRATEGIA DE INVESTIGACIÓN

● LA SUBSUNCIÓN

Conducta Típica

Partiendo desde la conducta típica de fingir, propiamente dicho, un embarazo, será de

relevancia investigativa el uso de artificios que puedan dar cuenta, a simple vista de
ajenos a la sintomatología, el claro estado de gestación.

La señorita Gabriela Sevilla, por su parte, ha logrado concretar concretar dicha

conducta típica, pues se tiene registro audiovisual de un vientre pronunciado en su
persona, lo cual es de extrañeza, ya que en las evaluaciones de carácter obstetra que
se le realizaron, dan por resultado la inexistencia de un embarazo, por lo que se
procederá a una pericia psicológica con el fin de descartar un embarazo psicológico.

Tipicidad Subjetiva

El ilícito en el presente informe, es meramente doloso; por consiguiente, al descartar

un embarazo psicológico mediante una pericia psicológica, se tendrá por entendida la
actitud o intención maliciosa ejercida por la señorita Gabriella Sevilla en contra de su
pareja; puesto que ha podido prever un perjuicio dirigido a Ramiro Gálvez. Dando así
por entendido que la señorita Sevilla cumple con la especificación de tipicidad
subjetiva.

Coautor

En tanto el artículo 144, en su párrafo segundo, se estipula que la misma pena

privativa de libertad se aplicará al médico u obstetra que cooperen en la ejecución del
delito.

Teniendo en cuenta la calidad de EXTRANEUS del obstetra implicado en el ilícito,

puesto que el delito es de carácter especial propio, y solo lo cumple la señorita Sevilla.
Se mantendrá vigente el pedido de misma pena para el obstetra, además de su
inhabilitación correspondiente según el mismo artículo.

IV. ACTOS DE INVESTIGACIÓN

INDIVIDUALIZACIÓN DE LA PERSONA IMPUTADA:

● Solicitar DECLARACIÓN TESTIMONIAL DE GABRIELA SEVILLA para obtener su

versión de los hechos.
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● Solicitar PERICIAS MÉDICAS para acreditar la inexistencia del embarazo y parto de

la señorita Gabriela Sevilla.

● Solicitar PERICIA PSICOLÓGICA para descartar algún trastorno psicológico que haya
causado la comisión del delito.

● Solicitar HISTORIAL MÉDICO DEL GINECOOBSTETRA para acreditar la inexistencia

del embarazo.

● Solicitar INFORME DEL MÉDICO LEGISTA para descartar la existencia de violencia

física o sexual.

● Solicitar COPIAS DE LAS CÁMARAS DE SEGURIDAD desde donde empezaron los

hechos con el fin de corroborar las declaraciones tanto de la implicada principal como
las de sus familiares.

● Solicitar INSPECCIÓN Y RECONSTRUCCIÓN de los hechos acontecidos con el

objetivo de hallar posibles contradicciones en tanto a las declaraciones y
manifestaciones en el lugar de los hechos.

V. ACTOS DE PRUEBAS

A. ACREDITACIÓN DEL HECHO DELICTIVO: Ministerio Público

● Reconocimiento del médico Legal

● Investigaciones previas del caso

Las investigaciones por parte del Ministerio Público, se iniciaron el día 21 de octubre del
presente año, pasadas las 8:00 a.m., por parte de la Segunda Fiscalía Corporativa Penal de
Surco, iniciando diligencias, a cargo del fiscal Paulo Loayza Calderón, aperturando con un
reconocimiento médico legal y otros procedimientos legales. Por otro lado la Policía Nacional
del Peru informó que la Direccion Contra la Trata de Personas y Trafico Ilícito de Migrantes
estaría realizando las investigaciones del caso, para un esclarecimiento de los hechos, en
coordinacion con los representantes del Ministerio Público.

El Ministro del Interior Willy Huerta, confirmó que Gabriela Sevilla no estaba embarazada,
asimismo los médicos del Hospital Militar informaron que ella estuvo desaparecida por 36
horas y apareció sin su bebé y sin ningún rasgo de periodo de gestación, ya que en el lapso
del tiempo de las declaraciones de Gabriela Sevilla, dio una breve declaración a los médicos
de turno del Hospital, determinando, por parte de los resultados médicos, que ella no estaba
embarzada.
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El Ministro del Interior, Willy Huerta, estuvo acompañado del Ministro de Defensa, Daniel
Barragán y el Fiscal Paulo Loayza Calderon para poder realizar las respectivas diligencias
dentro del Hospital Militar, debido a que Gabriela Sevilla dio una breve declaración al personal
del equipo médico.

B. DE LA ACUSADA: Gabriela Sevilla

● Declaración testimonial.

● Pericias médicas.

● Pericias Psicológicas.

● Perícias Toxicológicas.

● Historial por parte del Ginecoobstetra.

● Informe del médico Legista.

● Copias de las cámaras de seguridad.

● Inspección y reconstrucción de los hechos.

Según el Ministro Willy Huerta, Gabriela Sevilla se ha demostrado renuente a colaborar con
las investigaciones para esclarecer su situación. Así mismo según la evaluación clínica
precisaría que su historial clínico de Gabriela Sevilla, reportará las siguientes lesiones; como
Hemodinámicamente estables, con valores normales de presión sanguínea y frecuencia
cardiaca, presenta desgarros himeneales antiguos, osea que ya no conservaría su virtud, no
presenta signos de parto vaginal reciente, ni antiguo, descartando así su declaración;
asimismo, presenta signos de lesiones traumáticas corporales recientes, como golpes y
hematomas, y requiere incapacidad médico legal.

Por otro lado, Beat en respuesta a lo declarado por Gabriela Sevilla, aseguró que no se
concretó ningún viaje de taxi desde la cuenta de Gabriela; además, apoyaron en las
indagaciones; los familiares salieron a contradecir dicha afirmación presentando una
fotografía que ella envió desde el taxi a su pareja, en la que se apreciaría al conductor desde
la parte posterior de dicha unidad de transporte.

RESPONSABILIDAD DEL ACUSADO

La determinación de solicitud de pena privativa de libertad en contra de Gabriela Sevilla y del

obstetra que habría coadyuvado en la comisión del ilícito penal, se ha realizado mediante el
sistema de tercios de determinación penal. Teniendo en cuenta que la pena máxima
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estipulada en el artículo N° 144 C.P es de 5 años y la pena mínima es de 1 año, se determina

que cada tercio deberá comprender un periodo de 16 meses; por lo que el tercio inferior estará
comprendido desde un año hasta los 2 años y 4 meses de pena; el tercio intermedio estará
comprendido desde los 2 años y 4 meses hasta los 3 años y 8 meses; y el tercio superior
estará comprendido desde los 3 años y 8 meses hasta los 5 años de pena.

Ahora, para determinar en concreto la pena a solicitar, se tendrá en cuenta el número de

atenuantes y agravantes que se puedan encontrar en el caso concreto, estos indicadores
están estipulado en el artículo N° 46 del Código Penal; a continuación, hacemos de cuenta al
literal A) del inciso 1 - artículo 46 C.P, en el cual se acredita como circunstancia de
atenuación “la carencia de antecedentes penales”. Por otro lado, hacemos de cuenta
también el literal F) del inciso 2 - artículo 46 C.P, en el cual se toma en cuenta como
circunstancia de agravación “la pluralidad de agentes que intervienen en la ejecución del
delito”.

el atenuante, se hace en mención de que la implicada Gabriela Sevilla no cuenta con

antecedentes penales; mientras que el agravante se toma en cuenta debido a que para el
sostén de los artificios con el fin de hacer creer un embarazo, se hizo con la colaboración del
obstetra encargado del proceso de gestación de la implicada principal.

Ahora, en la individualización de la pena, en el presente caso se encuentran comprendidos

atenuantes como agravantes de la pena, por lo que la individualización estará comprendida
en el tercio intermedio, lo cual se computa desde los 2 años y 4 meses hasta los 3 años y 8
meses de pena; por lo presente, se procede a solicitar la imposición de dicha pena
comprendida en el marco establecido en este punto, a consideración del juez.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

● Gómez, R. (2022). Ni bebé, ni embarazo, ni secuestro: el caso que mantuvo en vilo a

Perú nunca existió. Lima - Perú. P. El País. Recuperado de:
https://elpais.com/internacional/2022-10-27/ni-bebe-ni-embarazo-ni-secuestro-el-
caso-que-mantuvo-en-vilo-a-peru-nunca-existio.html

● Sánchez, P. (2020). El Proceso Penal. Ed.Iustitia. Lima - Perú.