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WORLD PROJECT
LADIES
TABLA DE CONTENIDO
Personajes ........................................................................................................ 5
Personajes
baloncesto y, lo que era más horrible, cada una de las tablas del techo
estaba tallada de forma intrincada.
La alfombra bajo sus pies era tan suave como caminar sobre una nube.
Las ventanas estaban impecables, como si las pulieran a diario. Las
paredes estaban adornadas con decoraciones de una belleza
deslumbrante, y la habitación desprendía un aroma que destilaba nobleza.
Y así, cuando reconoció la enorme cama que ocupaba el centro de la
habitación, comprendió por fin que se trataba de un "dormitorio normal".
"¿Qué estás haciendo?"
Enamorado de la habitación, Shota gritó de repente y rodó por el suelo ante
la inesperada voz que le llegaba desde atrás.
Una vez más, se quedó sin palabras. No tenía palabras para describir la
sobrecogedora belleza de la mujer que tenía detrás.
Su voluptuosa figura que no podía ocultarse ni con un abrigo. En contraste,
su postura era digna. Llevaba un abrigo azul marino oscuro sobre una
camisa blanca, erguida y con una postura perfecta. Su atuendo era
anticuado, pero su aspecto era el de una mujer de carrera con éxito en una
gran empresa.
"¡Gokk!"
Las obras de arte que habían parecido tan radiantes ahora parecían basura
en un instante debido a su belleza. Su presencia le dejó sin aliento.
"Um, ¡lo siento!"
Recuperando la compostura, inclinó inmediatamente la cabeza. Ni siquiera
sabía por qué se disculpaba, pero lo hizo para no molestarla.
"¡Bueno! Después de pensar que había vuelto a casa, ¡terminé aquí! Yo,
bueno, tampoco lo entiendo muy bien, pero, en fin, ¡lo siento!".
Se frotó la cabeza con la intención de hacerse un rasguño en la frente, pero
en lugar de eso, su cara quedó atrapada por la mullida alfombra. No
obstante, siguió disculpándose seriamente, esperando las siguientes
palabras de la mujer.
"... ¿Um?"
"El príncipe falleció hace un año en un accidente. Y fue el único que heredó
el linaje real en este país. Actualmente, no hay sucesor al trono en este
país".
Con un tono decidido pero firme, Berlina tomó la palabra.
"B-Bueno, ¿por qué no elegimos un nuevo rey? Tener una elección o algo
así ".
"Eso también es difícil. Después de todo, no hay ninguna razón que pueda
convencer a todos. En el peor de los casos, podría llevar a una guerra civil
entre los nobles con poder".
"Y nuestros países enemigos no pasarán por alto tal agitación.
Especialmente el Imperio Viante, nuestro país vecino, aún posee la
intención de invadir nuestro país. Si mostramos alguna debilidad, lanzarán
inmediatamente un ataque".
"Ya veo... Así que es por circunstancias políticas".
"Así es. Por eso el príncipe está postrado en cama y yo me encargo de
todos los asuntos. Sin embargo, incluso esta fachada ha llegado a su límite.
Fue entonces cuando apareciste, que se parece al príncipe. Esto debe ser
obra de Dios".
"Ya veo... ¿Tú crees?"
En medio de la sensación de que estaba siendo arrastrado a algo increíble,
la mano de ella envolvió suavemente la suya. Sin embargo, aquel calor le
pareció la mano de la muerte.
"Hey, Shota. Parece que no tienes a dónde ir en este mundo. Si cooperas
con nosotros, me aseguraré completamente de tu bienestar. Te trataré
como a un príncipe y te ofreceré la máxima hospitalidad".
"P-Pero..."
"Por supuesto, no te obligaré. Sin embargo, aunque es primavera, las
noches siguen siendo frías. Y si llueve, seguramente hará mucho frío. Y si
accidentalmente te adentras en los barrios bajos, existe la posibilidad de
que te roben. Es sólo cuestión de que te desnuden. En caso de
emergencia..."
"¡Lo entiendo! Lo comprendo. ¡Cooperaré tanto como sea posible!"
"¡A-Ah!"
Dio un respingo sorprendido cuando Berlina se burló de él.
"Hehe, el Príncipe Shota es tan lindo."
"¡No digas eso! ¡No me mires con esos ojos!"
"Ya veo. Si ese es el caso, entonces las cosas serán más fáciles. ♪"
Sus ojos se convirtieron en medias lunas. Una mirada diferente y sugerente
que le aceleró el corazón.
"Príncipe Shota... Ya que tenemos esta oportunidad, ¿te gustaría practicar
de antemano?"
"Q-Qué quieres decir... ¡¿huh?!"
Flap. Junto con el sonido de la tela, su chaqueta cayó al suelo. Y sin
ninguna pausa, los botones de su camisa blanca se fueron desabrochando.
“¿B-Berlina?”
Sus hombros quedaron al descubierto cuando la camisa se deslizó hacia
abajo, revelando sus pechos llenos. Sólo podían describirse como
melones, y no sólo grandes. Cubiertos por la ropa, escondían un par de
picos increíbles que parecían grandes sandías.
Aunque cubría la parte más valiosa con la mano derecha, las partes
superior e inferior de sus pechos eran claramente visibles. Parecía aún
más provocativa por el intento de ocultar una parte.
"Oh vaya. Tu reacción ya es así... Qué lindo. ♪"
"¡Ah!"
Shota se cubrió rápidamente la entrepierna con la mano. Pero ya era
demasiado tarde, su mirada ya había trazado la forma de su órgano
masculino.
"Así que te gustan los pechos de las mujeres".
"B-Bueno..."
"Puedes ser sincero al respecto. No es algo de lo que avergonzarse. Es
una prueba de que, como hombre, posees una función respetable. Así que,
por favor, muéstrame con más confianza. Príncipe su pe-ne. ♪"
¡(E-Esto es el pecho de una mujer! ¡Es tan suave que cambia de forma!
¡Está pulsando con un ruido sordo! ¡Increíble! ¡Yo-yo nunca supe que una
cosa tan maravillosa existiera en este mundo!)
Quería tocarla más. Quería amarla más. El hilo de la razón emitió un
chirrido. A su vez, el instinto de procrear empezó a buscar a la "mujer" que
tenía delante.
"Ahora, Príncipe Shota, puedes hacer lo que te plazca ♪"
Su mano rozó su entrepierna. Incluso a través de sus pantalones, Shota
pudo sentir el cuidadoso roce, haciendo que su corazón se acelerara.
"¡B-Berlina... yo... yo...!"
¡Spurt!
Un calor se extendió por su entrepierna. Sin darse cuenta, Shota soltó su
semilla y se agarró la entrepierna con los ojos muy abiertos.
"Oh querido."
Incluso Berlina no pudo evitar una risa irónica. La ligera vergüenza y
confusión en su rostro eran extremadamente embarazosas. Había
alcanzado el clímax con sólo tocarle el pecho. Era una primera eyaculación
tan lamentable para un príncipe que debía iniciar una vida de procreación.
...
Una hora más tarde, Shota, a quien Berlina había dado una muda de ropa,
decidió dejarse guiar por el castillo.
"Por favor, no te desanimes. Es bueno ser activo en la procreación, ¿no?"
"Pero aun así... haaah"
Eyaculación innecesaria. Es la mayor humillación para un hombre. Y si la
mujer incluso le cambiara y le lavara la ropa, sería patético y le haría llorar.
"Ahora vamos a recuperar la compostura. Ese traje te sienta bien".
"¿Tú crees?"
Miró su reflejo en la ventana del castillo y sonrió ambiguamente. La lujosa
seda se sentía suave contra su piel, la sensación del vaivén de los
accesorios, y nunca antes había experimentado llevar una capa, lo que le
hacía sentirse incómodo.
"¡Eso no! ¡¿No deberíamos detenerlo?! P-Porque, esa es una espada real,
¿verdad?"
"Hehe. Bueno, por favor, observa atentamente".
Berlina respondió con una tranquila sonrisa a su petición de ayuda. A Shota
le habían dicho que no le permitirían presenciar ninguna muerte, así que
decidió observar la situación como le habían ordenado.
El gran hombre rugió y blandió su espada de dos manos con todo su
cuerpo. Para él, parecía una tormenta de ataques feroces. Sin embargo,
Éclair esquivó, desvió y bloqueó cada uno de ellos.
Finalmente, una vez que Éclair dio un paso adelante, las tornas cambiaron
en un instante. El hombre cayó de espaldas contra los afilados golpes.
Éclair tranquilamente apuntó su espada a su cara.
"Asombroso. Vencer a semejante oponente".
"Esa es la 'Princesa del Relámpago Púrpura'. Es la mejor espadachina del
reino que lucha con la agudeza de un rayo".
Se limitó a asentir a su explicación. Además de su habilidad para derrotar
al gran hombre, su aspecto era realmente elegante. Su armadura marcial
encajaba perfectamente con su fresco perfil.
"¿Eh?"
En ese momento, una mirada fría atravesó a Shota. La detenida Éclair lo
miró con ojos llenos de una mezcla de odio e ira.
"He hecho algo... ¡Oh no!"
En ese momento, una esfera de luz descendió del cielo, emitiendo llamas
carmesí que se extendieron por el cielo.
"¡Príncipe Shota!"
Las ventanas tiemblan mientras la brillante luz roja oscurece su visión. En
ese instante, Berlina le cobijó, colocando su cuerpo frente a él para
protegerle. Las llamas se apaciguaron rápidamente y el silencio volvió a
los alrededores.
"¿Estás bien, Príncipe Shota?"
"G-Gracias, Berlina. ¿Qué demonios...?"
Cuando levantó la cara del pecho de Ella, vio a una joven delante de él.
Estaban en el segundo piso, pero la chica estaba a la altura de sus ojos.
"Oh cielos, que conmoción tenemos aquí."
"¡¿Está volando?!"
Era, sin duda, una joven hermosa. Su falda roja se extendía como los
pétalos de una flor, adornada con preciosas cintas por todas partes, y su
cabello dorado y suelto parecía estar hecho de tela dorada. Parecía la
princesa de un cuento de hadas. Sin embargo, flotaba en el aire como en
un escenario.
"¡Lady Torte! ¡¿Qué demonios está pasando?!"
"Por favor, absténgase de gritar tan alto, Primer Ministro Aventbrodt. Sólo
era un ejercicio de entrenamiento con mi 'Báculo Mágico'. El proyectil se
dejó llevar y acabó volando hacia esta dirección".
La chica llamada Torte no muestra ningún signo de remordimiento y se
yergue orgullosa con el pecho bien alto. Aunque su altura no es
comparable a la de Berlina o Éclair, su actitud y su escote son de una talla
L. Además, un llamativo collar se balancea en el escote abierto de su
vestido abierto de par en par, haciendo difícil desviar la mirada.
"Entonces, ¿quién es ella?"
"...Ella es Lady Tortege. Es la tercera hija de la prestigiosa familia Colazio,
que es un linaje de magos. Lady Tortege también posee excepcionales
habilidades mágicas".
"Ah, una maga. Ya veo."
Shota sintió que se daba cuenta. El mundo que hasta ahora le había
parecido una extensión de la realidad había sobrepasado por completo los
límites del sentido común, y podía sentirlo en los huesos.
"Además, esa bala mágica es para entrenar. Aunque parece llamativa, su
poder es bien conocido. Es sorprendente que los caballeros tengan tanto
pánico. No son muy impresionantes, ¿verdad?"
Las cejas de Éclair se crisparon al no poder ocultar su desprecio ante las
palabras de Torte.
"Ya veo, tiene razón. Es sólo un juguete para espadas de madera después
de todo. Hacer un gran alboroto por ello realmente empaña el nombre de
un caballero".
"... ¿Dijiste algo, princesa espadachín?"
Shota oyó el sonido helado del aire. Los soldados que empuñaban sus
espadas, así como la gente que parecía acompañar a Torte, que llegó
tarde, contuvieron la respiración y observaron el desarrollo de la situación.
Una mujer caballero podía incluso derrotar a un gran hombre y a una chica
mágica que bailaba en el cielo. Shota no podía ni imaginar lo que pasaría
si estas dos luchasen.
"... ¿Están esas dos en malos términos?"
"Te lo explicaré más tarde. Pero primero, es necesario calmar esta
situación".
Berlina le lanzó una mirada de reojo, dándole una desagradable
premonición. Podía sentirlo claramente en su mirada.
Éclair empuñó su espada y Torte creó descargas eléctricas a su alrededor.
Los soldados apretaron los puños, dispuestos a servir de escudos si era
necesario, en la tensa situación.
"¡Bajen sus espadas, ambos bandos! ¡Están ante el Príncipe!"
Su severa reprimenda resonó, y la animosidad entre las dos chicas
disminuyó.
"Lady Berlina, pero..."
"Tú... ¡No puedes hablar en serio!"
El ambiente a su alrededor cambió en un instante. Decenas de ojos miraron
a Shota.
(No se darán cuenta, ¿verdad?)
Hizo todo lo posible por ocultar su tembloroso cuerpo de las penetrantes
miradas. Sin embargo, los soldados soltaron sus espadas e inclinaron
apresuradamente la cabeza. Torte, que volaba por los aires, también
aterrizó y realizó una respetuosa reverencia.
"Pedimos disculpas por nuestra descortesía, sin saber que era ante el
Príncipe".
"¡Por supuesto, no hablábamos en serio! ¡Ohohoho!"
Las miradas de asombro y reverencia de los que antes estaban llenos de
espíritu de lucha. Una sensación de escalofrío se extendió desde su
estómago a través de sus extremidades en el mundo con vistas desde
arriba.
...
Ha ocurrido algo escandaloso. Shota lo pensó de nuevo.
"¿Es correcta la etiqueta?"
"Cuando se extiende una mano, se besa el dorso de esa mano... ¿verdad?"
"Sí. Ese es el saludo para una dama. Sin embargo, no debes besar
primero. Debes esperar el saludo de la otra persona. De lo contrario, no
serás capaz de mantener tu dignidad como príncipe."
Se le secó la garganta con una pizca de anhelo. Se estaba celebrando un
lujoso evento a un paño de distancia. No pudo evitar sentirse incómodo
ante la idea de exponerse ante auténticos nobles.
El regreso del "príncipe” parecía haberse extendido por todo el país en
medio día. Los preparativos para una audiencia se hicieron
apresuradamente ese día, y parecía que por la noche se iba a celebrar una
gran reunión con la asistencia de nobles de renombre. Por supuesto, entre
ellos había muchas posibles novias para el príncipe.
"Por ahora, esta noche sólo son saludos, así que no te pongas demasiado
nervioso. Si surge algún problema, puedes marcharte con la excusa de que
te encuentras mal".
"¡Okay!"
Cuando tocó el timbre, la charla cesó bruscamente. Incitado, salió al
pasillo.
(... ¿Es el lugar de la fiesta de una supermodelo?)
Lo que le esperaba allí eran miradas envidiosas de mujeres bellamente
vestidas. Eran hijas de la nobleza que habían dedicado la mayor parte de
estaba allí, no había nadie más que pudiera manejar esta situación,
excepto él.
(¡Tengo que hacer algo! ¿Qué puedo hacer? ¡Ah, pero esto es lo único!)
Shota bajó del trono y se acercó a los dos que seguían discutiendo.
"Tu ropa está cubierta de adornos vacíos. ¿Cuánta gente podría ser
alimentada con pan y sopa sólo con ese atuendo?"
"¡Es natural que los nobles se disfracen! ¡Lo estás mostrando
deliberadamente!"
"Este es mi atuendo formal. No necesito vestido. Como heredero del
nombre de Dejune"
"Disculpe, Princesa."
Cogió la mano amenazadora de Éclair y rozó suavemente con sus labios
el dorso de la misma. La sensación áspera de los guantes de cuero era un
poco dolorosa, pero no importaba.
"¡¿Su Alteza?! ¡Q-Qué estás haciendo!"
Éclair, que había estado llena de hostilidad hace unos momentos, ahora
estaba desorganizada. Él suspiró en silencio en su corazón por su
reacción. Al menos ahora no empezarían una pelea. Pero extrañamente,
las mujeres de alrededor permanecieron en silencio y observaron la
situación con la respiración contenida, tragando saliva.
"──Su Alteza, yo-yo soy, así..."
Éclair levantó la cara, con las mejillas sonrojadas y los ojos nadando. Justo
antes de formular su pregunta sobre su expresión, el sonido de una
campana reverberó en la sala.
"Discúlpenme. Es hora de que el príncipe descanse. Esta audiencia ha
terminado".
Logró contener las ganas de desmayarse al ver a Berlina. Cuando soltó la
mano de Éclair, ésta hizo una reverencia y abandonó rápidamente la sala,
seguida por las demás mujeres.
En medio de todo, Torte se dio cuenta de repente y me miró. Su rostro
palideció, no como las miradas perplejas a su alrededor, como si hubiera
visto un fantasma.
...
"Lady Éclair vino vestida de militar para encarnar la ‘nobleza’,"
Berlina resumió a Shota, que había vuelto al dormitorio.
Comprendió que no podía seguir diciendo nada, aunque tener a una mujer
hermosa sentada a su lado no era algo a lo que estuviera acostumbrado.
"Parece que Lady Éclair no sólo considera que la nobleza está por encima
del pueblo llano, sino también como alguien que sirve al pueblo y al país.
Desde su perspectiva, otros nobles pueden parecer quienes saquean la
riqueza del pueblo y se entregan a la superficialidad".
Explica Berlina.
Recordó la mirada fría y llameante que Éclair había mostrado durante su
entrenamiento.
"... ¿Hice algo realmente malo?"
"En este momento, es difícil de decir. Sin embargo, es cierto que sus
acciones no eran propias de la realeza. Parece que Lady Éclair tampoco
esperaba recibir la cortesía de una noble".
Una provocación máxima hacia la nobleza y, en última instancia, hacia el
príncipe. Si acudir con armadura a un lugar de emparejamiento no tenía
precedentes, tratar ese atuendo rudo como el de una noble era, sin duda,
algo inaudito.
"Pido disculpas. Es culpa mía por abandonar la escena".
Se apresuró a saludarla con la mano.
"¡No, no es culpa tuya! Al final, ¡lo hice por mi cuenta!"
"Eres muy amable, príncipe Shota. A partir de ahora, te enseñaré a ser un
'príncipe' como es debido para que algo así no vuelva a ocurrir. Sin
embargo, puede suponer una carga para ti..."
"...lo entiendo. Yo también soy un hombre. Ya que hemos llegado a esto,
¡asumiré la responsabilidad!"
"¡Ese es un espíritu admirable, Príncipe Shota!"
Squelch.
Sólo el sonido de ella agarrando el pene cubierto de saliva bastó para que
casi alcanzaran el clímax. Entonces, la yema de sus dedos estimuló el
glande como si lo acariciara.
"¡Haah! ¡Ahí...!"
Despegó la fina piel con la punta de los dedos, dejando que la saliva se
filtrara. Extendió delicadamente el prepucio como si manipulara una
delicada obra de arte.
"Ahora, por favor, sal. Príncipe pen-e ♪"
Se oyeron ruidos de pelado cuando la punta ligeramente sucia se reveló.
Y justo cuando la piel alcanzó la parte superior del glande, Berlina tiró
rápidamente de la piel hacia la base.
"¡Fuguu!"
¡Rebota!
"Ya está, está pelado. Ah, qué magnífica forma"
Apareció el glande rojo brillante, y su voz se hizo aún más húmeda.
Antes de que tuvieran tiempo de avergonzarse de que les vieran el pene
completamente erecto, los suaves dedos de la mujer volvieron a agarrar el
tronco.
"Es un poco sucio, ¿no?"
Había esmegma adherido a la punta. A pesar de haberse bañado, lo que
salga inevitablemente saldrá.
Experimenta una ardiente sensación de vergüenza por el hecho de haber
sido sorprendido presenciando algo sucio. Sinceramente, es incluso más
vergonzoso que haber eyaculado con solo tocarse el pecho.
"¡Lo siento! Lo limpiaré ahora mismo..."
"Ah~m ¡Mwuah! ¡Muah!"
Debido al abrumador placer, su brazo, que estaba a punto de retirar la tela,
se detiene. Cada delicado mechón de pelo le roza las piernas y la parte
baja de la espalda. En el centro, un calor que nunca antes había sentido le
cubre la ingle.
"¡Eh, eh!"
"Muah...Chu...hehe, lo limpiaré enseguida, ¿okay? ♪"
No se dio cuenta inmediatamente de que le estaban lamiendo. Por
supuesto, conocía ese tipo de juegos, pero nunca había pensado que le
ocurriría a él.
"¡Ugh...! ¡Esto! Se siente... ¡bien!"
Lo dijo descaradamente. La textura ligeramente áspera de la lengua. El
calor de la saliva calentada por la temperatura corporal de la mujer. Sobre
todo, la constatación de que se estaba introduciendo un pene en la boca,
que se supone que sirve para respirar y comer, excita su cuerpo. Pero justo
antes de alcanzar el clímax, su orgullo masculino interfirió en el placer.
"¡Señorita Berlina! ¡Ese lugar... está sucio!"
"¿Cuántas veces tengo que decirte que te dirijas a mí correctamente? Vas
a ser un príncipe, así que, por favor, deja que se te impregne en la lengua.
De lo contrario, voy a dejar de hacer lo que se siente bien, ¿sabes? "
Apretó la base con los dedos y acarició la punta con la lengua.
"¡Guh! Lo siento.
Después de agarrar firmemente el pene, sintió que el agarre se soltaba
rápidamente. Presa del pánico, le agarró la mano para detenerla.
"Hehe, te he asustado demasiado, ¿verdad? Pero no hay nada sucio,
¿sabes? Además, aunque estuviera sucio, cuidar de un lugar así es un
honor para una mujer".
"¿Honor?"
"¿Los lugares sucios no deberían mostrarse a cualquiera? Permitir que
alguien los vea significa que te tiene en alta estima. Esa es la insignia de
honor de una mujer ♪ por lo que, incluso recibir este tipo de servicio no es
vergonzoso en absoluto ♪"
"¡Eso... hguuh!"
¡Squish! ¡Mwah! ¡Suck!
Lamió desde la base hasta la parte superior del glande. La saliva se
esparció por la cabeza, que se volvió brillante como un espejo pulido. No
era un simple placer. Era algo más que el placer de lamer la suciedad. Es
el hecho de que aceptara y recibiera incluso sus partes sucias lo que le
sobrecoge.
Berlina comprendió en su mente que se trataba de una experiencia
necesaria. Sin embargo, se desborda el deseo que superaba todo lo que
había sentido antes.
"¡B-Berlina! ¡Y-Yo! ¡Ya!"
"...Sí, está bien, Príncipe."
Mientras tiraba de una cuerda de entre sus muslos, Berlina soltó
lentamente la boca y se desabrochó todos los botones que le quedaban de
la camisa. El sonido de las telas rozándose entre sí se oía con fuerza. Los
latidos de su propio corazón, tan fuertes y distractores, parecían
molestarla.
Plururun.
En cuanto se quitó la camisa, su voluptuoso busto estalló como una
explosión. Verdaderamente, las palabras "pechos enormes" eran
totalmente apropiadas para sus grandes pechos a los que uno nunca
podría acostumbrarse incluso después de verlos una vez. Sus ojos estaban
completamente cautivados por las colinas gemelas.
Una vez más, Shota lo confirmó con la mirada,
"¿Esto está bien?"
Berlina le cogió del brazo y respondió dejándose tocar los pechos.
"¡Uwahh! ¡Tan suave! ¡E-Este es el verdadero negocio!"
La suavidad de una almohada de espuma viscoelástica cien veces más
blanda. Sin embargo, si aflojaba el agarre, rebotaba y conservaba su
forma, transmitiendo un latido palpitante a las yemas de sus dedos.
De repente, las yemas de sus dedos tocaron la punta roja. Una firmeza
completamente distinta a la de los pechos. Sin embargo, no era una dureza
áspera; más bien, parecía erótica, como el punto sensible de una mujer.
(Los pechos y los pezones son muy diferentes. Es muy interesante. Y es
realmente excitante).
Una parte de su cuerpo más caliente que su piel tocó la punta. El tubo que
se retorcía mordisqueó repetidamente el glande.
Al pasar por este túnel caliente, le quedó claro que eso era lo que quería.
A pesar de pensar que no serviría de mucho, le agarró la cintura con la
mano. Berlina sonrió y bajó lentamente la cintura.
Squish... Guppu... ¡Splat!
"¡Wow... ah, ahhhhhhhhh!"
El calor de fusión envolvió la punta de su vara de carne. Aunque sólo una
pequeña parte de su cuerpo estaba envuelta, todo su cuerpo saltó hacia
arriba. La lanza de carne avanzó hacia la pared carnosa con un sonido
blando. Sentía como si todo su cuerpo estuviera siendo tragado por un
profundo agujero de carne que parecía no tener fondo.
"¿Va todo bien?"
Aunque se retorcía de placer, no podía evitar preocuparse por la sensación
de atravesar el cuerpo de la otra persona.
Sin embargo, tenía una sonrisa relajada en la cara y su vagina abrazaba
con fuerza el pene de él. Esa expresión era a la vez adorable y
tranquilizadora sinceramente.
"Felicidades por perder tu virginidad ♪"
Se lo susurraron mientras le acariciaban la mejilla. Una emocionante
sensación de ser un hombre se extendió por todo su cuerpo.
"Oh, puedo sentirlo. La cosa de su majestad dentro de mi cuerpo... su
robusta cosa palpitando dentro de mi cuerpo... ¡permitiéndome hacer de su
alteza un hombre con mi cuerpo...!"
Felizmente, Berlina acarició su abdomen, sintiendo su pene allí.
Los movimientos de sus caderas se volvieron gradualmente más atrevidos
y, antes de que él se diera cuenta, empezaron a emitir obscenos chirridos.
Shota podía sentir claramente el calor del néctar de amor extendiéndose
por toda su vara de carne.
"Mmgh... Su Alteza, ya no puedo detener mis caderas ♪ Me estoy moviendo
♪ No puedo evitar moverme ♪ ¡Ah! ¡Haah!"
"¡Ugh! S-Su, Su Alteza, ¡lo está manejando todo! ¡Está tan caliente, se
siente tan bien!"
¡Spurt! ¡Squish! ¡Splotch!
Con la mano en el pecho, Berlina empezó a mover las caderas arriba y
abajo. Podía sentir el sonido que se filtraba de la conexión hasta sus oídos.
Estaban enredados.
El pelo de la Berlina es precioso. Sus pechos tiemblan, rebotan y bailan
frente a mí en un movimiento circular.
(¡W-Woah, esto es increíble! ¡Mi pene está siendo manoseado, y sus
pechos tiemblan así delante de mí! ¡Ah, aah! ¡Su culo rebotando se siente
tan bien!)
Le temblaba la cintura. Ya estaba acabado debido al sexo real.
Todo su cuerpo se llenó de placer como nunca antes, hasta el punto de
cuestionarse lo que solía hacer con sus propias manos. Aunque acababa
de eyacular hacía un rato, el deseo de soltar jugos le golpeaba en la salida,
y sus testículos se tensaron dolorosamente.
"Hehe. Has estado obsesionado con este lugar desde antes ♪"
Diciendo esto, Berlina acercó sus pechos con sus propios brazos. Su ya
voluminoso escote es levantado por sus brazos y acercado a mi cara.
Los pezones estaban tan duros y erectos que pudo ver cómo el sudor
desaparecía en el profundo valle. Una verdadera montaña de pechos. Ante
esto, su racionalidad cedió fácilmente.
"¡Be-Berlina! ¡M-Mostrando tus egoístas pechos así!"
"Ah, tan intenso♪ no tienes que ser tan codicioso, siéntete libre de tocarlos
tanto como quieras ♪".
Pellizcó sus pezones entre sus dedos índice y corazón, amasando
vigorosamente sus grandes pechos. Era una sensación diferente a la de
antes, empujando contra los pechos que presionaban desde arriba. Sus
dedos se hundieron más. Sintió todo su cuerpo entre las manos.
La situación de saborear tanto sus pechos como su lugar secreto por
encima de todo satisfacía sus deseos de hombre.
"¡Hyaah! ¡Puedo sentirlo aquí también!"
Habían pasado tres días desde que Shota llegó al mundo diferente.
Mientras aprendía los conocimientos como príncipe, también pulía su
encanto como hombre. Esa era la vida que le esperaba en el Reino de
Keze. Por supuesto, también había tareas que tenía que hacer como
príncipe.
Uno de ellos era público.
"Bueno entonces, si me disculpan. Espero que Keze y Vianté tengan una
buena relación a partir de ahora".
Haciendo una cortés reverencia, el hombre abandonó la sala de
audiencias. Vigiló su espalda y tomó aire.
"De alguna manera, se sentía diferente de lo que esperaba. Keze y Vianté
no se llevan bien, ¿verdad?"
"Este saludo fue probablemente sólo una sonda. Probablemente querían
evaluar el estado del príncipe y la situación actual en el Reino de Keze."
El Reino de Keze y el Imperio Vianté. Berlina le había enseñado a Shota
que estos dos países habían estado en guerra hasta hacía veinte años. El
hecho de que un enviado hubiera traído un homenaje de felicitación por el
regreso del príncipe le puso nervioso y le produjo dolor de estómago.
"Por cierto, ¿por qué el Imperio Vianté no ha atacado hasta ahora? ¿No es
una gran oportunidad ya que el príncipe está enfermo?"
"Es una pregunta válida. Hay dos razones para ello. Una es que temen el
poder militar del reino, y la otra es que los lazos económicos entre ambos
países son demasiado fuertes. Príncipe Shota, ¿puede explicar el 'Bastón
Mágico'?"
"Bueno, si pones un tubo lleno de magia en el bastón, puedes usar esa
magia una vez, ¿no?".
"Sí. Su alcance es inferior al de un arco y su poder dista mucho del de la
magia verdadera, pero el hecho de que permita usar la magia sin
entrenamiento fue extremadamente innovador".
...
"Oh, lo sabía; esto me viene mejor después de todo".
Se sentía aliviado con camisas y pantalones informales, como un
ciudadano. Deseó poder hacer de príncipe con este atuendo. Berlina tosió
y carraspeó mientras miraba a Shota.
"Esta es una medida excepcional. No me gustaría que siempre vistieras
así".
"Oh, ahaha... De ninguna manera, no así. Pero sólo mirar esta ciudad es
agradable".
El camino, que continuaba empedrado, tenía algo que atraía su curiosidad.
Sin embargo, comparado con el castillo, el pueblo parecía algo sucio, con
muchas calles sin pavimentar.
"Es como... la cara y la cruz de una moneda".
"¿Una moneda? ¿La ciudad?"
"No sólo la ciudad, sino muchas cosas. El príncipe y los ciudadanos, el
castillo y la ciudad, el reino y el país enemigo, y también hombres y
mujeres. Es como si ambos bandos no se notaran, aunque estén uno al
lado del otro..."
"... ¿Es así?"
Berlina sacó una moneda de cobre del bolsillo. La moneda, bellamente
pulida, era la moneda corriente del país. Recibió la moneda y le dio la
vuelta. No podría responder dónde estaba el límite entre la cara y la cruz
de la moneda, aunque se lo preguntaran.
"Bueno, eso es porque no soy una persona de este mundo... ¡ah!"
Cuando levantó la cabeza en respuesta a un olor súbitamente fragante,
divisó una gran bandera triangular. Debajo de ella, sobre una mesa, se
exhibía una variedad de panes. El brillo del pan lustroso y el dulce aroma
a canela hicieron que se le contrajera el estómago.
"Un puesto de panadería... Parece delicioso".
Habiendo probado la cocina de la corte hasta saciarse, Shota aún deseaba
algo así. Mientras Shota miraba el puesto, Berlina asintió.
"No puedo usar la magia... Nací incapaz de usar la magia. Alguien como
yo no debería haber pertenecido a la prestigiosa familia mágica Colazio".
Con una expresión sin vida en el rostro, empezó a hablar. Su mirada estaba
desenfocada, y siguió hablando de sus propias circunstancias, casi como
si estuviera monologando.
"En lo que la familia Colazio es particularmente hábil se llama Magia
Encantadora. Es un tipo de magia que imbuye de poder a los objetos. El
'Bastón Mágico' también se inspiraba en eso. El collar contenía varios
hechizos mágicos, y se activaba dependiendo de la contraseña. Sólo lo
usaba cuando era necesario... Yo misma no puedo usar ningún tipo de
magia".
Ahogó un sollozo y se mordió el labio. Era algo que nunca debía saberse.
El hecho de que se lo contara a un completo desconocido debía de deberse
a que su entorno actual era aterrador.
(...Ella también está asustada. No, debe ser porque no tiene magia que
usar, debe estar aún más asustada que yo).
Extrañamente, su corazón se calmó. Quizá porque Torte parecía más
tranquilo, pero los barrios bajos que volvían a ver no eran más que una
calle sucia que podía encontrarse en cualquier parte.
"De todos modos, volvamos. Si el collar está en algún lado, debería estar
donde caímos".
"...quería comer pan."
"¿Eh?"
"La pastelería que vi en el carruaje... Es una barbaridad comer de pie, pero
era muy interesante. Pero no pude comerlo. Mi padre dijo que no... En vez
de pensar en eso, debería intentar caerle bien al príncipe, aunque sea un
poco".
Un escalofrío recorrió su espina dorsal.
"La familia Colazio no me necesita porque no sé usar la magia. Pero estoy
dispuesta a dedicarme a estar unida al príncipe... Y aun así, aunque le di
mi primer beso al príncipe── ¡aun así!".
Su expresión se torció de rabia.
"Oh, ¿por qué el príncipe muestra gratitud a una mujer tan inútil? ¿Qué
debo hacer? ¡He memorizado la etiqueta perfecta! ¡Sé bailar y hacer otras
artes mejor que nadie! ¡Tengo más conocimientos que esos eruditos de
allí! ¡Pero aun así! ¡Si no soy elegida por el príncipe! Realmente me
convertiré en nada..."
Su voz se debilitó hacia el final. Le cogió la mano con fuerza y regresaron
al lugar del accidente.
"Hemos llegado, esto es todo."
De vuelta al lugar del accidente, apartaron los escombros. Pero no
pudieron encontrar el collar. Vieron fluir un río cercano. Parecía un río sucio
donde se hundía la basura. Shota se quitó los zapatos y se metió en el río.
"¡Ouch!"
¿Ha pisado una baldosa? Le duele el pie derecho. Pero no le importó.
Recogió y desechó lo que encontró en el fondo del río. Torte observaba
atentamente cómo sus pies se ensuciaban cada vez más.
"Hmm... Esto tampoco es. Espera un poco más. Definitivamente lo
encontraré."
"Oye, ¿por qué me ayudas cuando ni siquiera te he prometido darte una
recompensa? Es bastante antinatural cuando lo pienso".
Se rio débilmente, pensando que tal vez no habían reflexionado lo
suficiente. Pero se preguntó por qué, el propio Shota también estaba
preocupado. En el momento de su ruptura, pensó que ella definitivamente
le apoyaría.
"Quizá porque éramos algo parecidos. También he sentido que me
aplastaba una realidad imposible, y siento que la persona que era entonces
se parece a ti ahora. Esa es probablemente la razón".
"...Eres una persona extraña. Eres la persona más excéntrica que he
conocido. Pero... eres la primera persona que me dice algo así".
Miró al río con cara decidida. Extendió aún más su hermoso zapato hacia
el río.
"¡Eh! ¡E-Espera, Torte!"
"¡Es mi responsabilidad que salga así! ¡Por eso yo también ayudaré!"
El rojo fresco tocó sus pequeños labios. Ella presionó con fuerza el
miembro más profundamente en su boca refinada, aceptándolo con toda
su boca.
"Mmkuu, es g-grande... pero, pero no perderé... ¡nfuuh!"
¡Squelch! ¡Suck!
Su pequeña boca se estiró hasta el límite y las lágrimas brotaron de las
comisuras de sus ojos. Pero no se detuvo, no dejó de introducir la polla en
su garganta. Enarcó las cejas y tragó lentamente el miembro cubierto de
saliva que había en lo más profundo de su boca.
"Oh, ahora mismo estoy sirviendo toda tu boca... estoy feliz. Y esta es la
primera vez que mi cuerpo se ha puesto así de caliente ♪ Por favor, déjame
hacer más ♪"
¡Munch! ¡Chup! ¡Slurp! ¡Bchup!
Torte empezó a mover vigorosamente la boca. Sentía como si estuviera
saboreando cada parte de su cuerpo, igual que cuando comía pan. Se llevó
el glande a la boca y frotó la carne de la mejilla contra la punta. La
sensación de la mejilla rebotando, y la mejilla hinchándose a la forma del
glande, lo deleitaron.
"¡Fu! ¡Nhuk! ¡Ahah! Tu olor me está llenando...♪ los dos sabores se están
mezclando dentro de mí ♪"
Torte le rodeó la cintura con la mano y hundió la cara en su entrepierna.
Sin darse cuenta, las yemas de sus dedos alcanzaron sus testículos y
confirmaron su gordura.
"Es pesado aquí también ♪ Sé lo que es. Es el semen que hay aquí dentro,
¿verdad? La semilla para dar a luz a un niño... ¡mmm! ¡Me estoy
excitando!"
¡Squelch! ¡Juk! ¡Jupuu!
Cuando su boca se apretó, toda su boca se entrelazó alrededor del pene.
Su lengua se movió sutilmente, dando una sensación resbaladiza al
frenillo.
La suave estimulación de frotarse suavemente las pelotas y la intensa
estimulación de una mamada. Los dos placeres contradictorios coexistían
en la parte inferior del cuerpo, entumeciéndole el coxis.
"Mmm... Es extraño. Tiene una forma rara, y un olor raro... Pero mi corazón
late tanto... Chuu ♪".
Como un pájaro picoteando, su boca tocó la punta. No era un estímulo
fuerte lo que se llevaba a la boca, pero apretaba el ano con un placer que
apuntaba con precisión a la zona erógena.
(Aunque pensaba que estaba acostumbrado con Berlina... ¡Es...
completamente diferente!)
La diferencia de textura, la forma en que se pega la carne, los hábitos de
juego oral y manual. Me doy cuenta de que hasta la más mínima diferencia
puede cambiar por completo la sensación de placer.
"...Puff. ¿Cómo está? ¿Es satisfactorio mi servicio?"
Si lo recibió como respuesta silenciosa a que apretaba los dientes para
soportar el placer, pregunta tímidamente Torte sin dejar de sujetar el pene.
(¡Uh, esa mirada hacia arriba con cara de ansiedad! ¡Esto es malo! ¡Y
todavía está agarrando mi miembro!)
Con su apariencia de dama, su mirada tímida y la combinación
contrastante de genitales masculinos, creaba una sensación perversa tan
fuerte que hacía volar la racionalidad.
"¡Me siento muy bien! ¡Estoy tan contento de haberte elegido, Torte!"
Respondió con una gran sonrisa.
"¡Me alegro! ¡Haré todo lo posible para que te sientas aún mejor!"
Una felación con el pelo alborotado. Incluso el aliento de Torte
descansando en su ingle se sentía placentero.
"T-Torte... yo... ya..."
El pene, que fue estimulado por el servicio oral, se hincha aún más. Los
testículos masajeados con pequeñas manos se tensan, y el semen se
eyacula en el pene.
"Vas a eyacular, ¿verdad? ¡Ah, el pene se ha hecho aún más grande!"
Acarició el suyo, que se erguía con venas abultadas, como si se tratara de
un amante querido. Sin dejar de sonreír, abrió la boca en la punta del pene.
"Ah... ¡Aaaaaah!"
¡Rip, rip, rip, rip!
La sensación de que la membrana se desgarra poco a poco la pared
vaginal aprieta el pene proporcionalmente. Los movimientos que intentan
atraerlo hacia dentro se hacen aún más intensos, dispuestos a aceptarlo
todo de él.
Los brazos que le rodeaban la espalda le sujetaban con fuerza. Mientras
grababa en su corazón la sensación de tomarla primero, la punta de su
vara de carne se introdujo en su vagina.
"Mmff... ¡Ahhhhhhhh!"
¡Splash splash splash splash!
Su cuerpo se levantó de un salto, doblando su espalda hasta el punto de
casi romperse. Su vagina, que aceptaba a un hombre por primera vez, se
tensó intensamente y abrazó dolorosamente el palo de carne.
"Uhh... Aah... Hah... hah..."
"T-Torte. ¿Estás bien?"
"S-Sí... Me dolió un poco, pero esto debe ser lo que significa ofrecer la
virginidad. Ah... Lo- lo siento... Estoy tan feliz que estoy llorando..."
Temblaba mientras se le llenaban los ojos de lágrimas y sonreía.
Shota sintió claramente la sangre de una virgen en su vara de carne.
Mientras memorizaba firmemente el calor, la abrazó con fuerza.
No hubo necesidad de movimientos intensos. Se conectaron y se sintieron
mutuamente. Sólo eso, les produjo una increíble sensación de satisfacción.
"...está caliente, apretado, y se siente como si me abrazaran
completamente."
"Yo también ♪ Se siente como si todo mi cuerpo estuviera conectado a ti,
Príncipe Shota...♪"
Era una vagina estrecha. Sin embargo, no se sentía desagradable ni tensa,
sino más bien como una suave cuna. Tal vez la tensión se había aflojado
durante el abrazo, ya que su vagina se aferraba con fuerza a su miembro.
"...voy a moverme, Torte."
El semen brotó de golpe. Salió disparado hacia el útero con una fuerza
mayor que al eyacular en la cara y el semen se liberó hacia su vientre.
La polla saltó y todo su cuerpo se convulsionó en respuesta.
Una fuerza imparable que se sentía golpear. El semen codicioso y
abundante del hombre no puede ser tragado completamente por el coño
inexplorado y fluye hacia atrás con un sonido lascivo.
"¡Ah, está saliendo! Dentro de mí... el esperma del Príncipe... ♥ Yo... me
he convertido realmente en una novia, ¿no es así. ♥?"
Se le saltaron las lágrimas y saboreó su primera eyaculación vaginal.
Sin dejar de mirarla a la cara, vertió hasta la última gota en sus entrañas.
"Torte..."
"Príncipe Shota... ♥"
Smack.
Intercambiaron un apasionado beso y se abrazaron fuertemente en la
cama.
Sus cuerpos volvieron a encenderse y no tardaron en reanudar su intenso
coito.
"Ah... Príncipe Shota, la mañana ha llegado."
"...Hmm, tienes razón."
Al final, se enredaron el uno con el otro durante toda la noche. Shota
también, pero sobre todo fue Torte quien le persiguió apasionadamente.
La cama estaba empapada de sudor y fluidos corporales de ambos.
Notaron una mancha de sangre roja entre la humedad y ella se sonrojó
avergonzada.
"A partir de ahora, espero trabajar contigo, Príncipe ♥".
"Sí, yo también".
Se cogieron fuertemente de la mano, sus labios se encontraron
innumerables veces. Como si bendijera su unión, el sol de la mañana brilló
en la cama.
"Haré un esfuerzo para llevarme bien con las otras novias también. Espero
que las presentes algún día".
"... ¿Eh? ¿Otras?"
Shota parpadeó un rato, sin entender sus palabras.
No fue hasta un tiempo después cuando conoció el término concubina.
Había pasado una semana desde el encuentro con Torte. Durante el día,
Shota acumulaba conocimientos como príncipe y, por la noche, seguía
pasando los días en estrecho contacto con Berlina y Torte.
Un día, participó en un evento llamado "Festival de la Caza de Espadas".
Este evento, que se celebraba una vez al año para profundizar en la
amistad entre la familia real y los nobles, incluía competiciones de esgrima
y caza, y parecía ser un lugar para elevar el honor y la reputación entre las
jóvenes que lo presenciaban. En ese momento, los nobles frente a él
estaban alzando sus nombres y luchando con espadas.
"...nunca pensé que existiera la costumbre de casarse con varias esposas".
Sentado en el asiento de invitados, murmuró por enésima vez. Berlina y
Torte, que estaban sentadas a su lado, suspiraron y acercaron sus sillas.
"Una vez que te conviertes en rey, es natural tener muchos herederos. Para
asegurarse de que, aunque le ocurra algo al niño, es costumbre tener tres
o más esposas en la familia Keze".
"Realmente vienes de un mundo diferente... Aquí es de sentido común".
No podía cerrar la boca abierta. Entendía que era la ley de este mundo,
pero como alguien que ni siquiera tenía novia, la sensación de amar a
varias mujeres en sí era como imaginar el lado oscuro de la luna.
En ese momento, se oyó el sonido de una espada afilada y las espadas
bailaron en el aire.
"...Hmm. Parece que ella es la ganadora de nuevo este año ".
"Éclair, como siempre, ¡haces lo que te da la gana!"
Torte hinchó las mejillas al ver a una caballera de pelo negro sola entre el
público. Pero no había ningún sentimiento de culpa o inferioridad en su
tono. Shota se sintió aliviado ante ese hecho.
"Bien entonces, con Lady Éclair como oponente. Príncipe, por favor."
"Me-Me pregunto si estaré bien. Después de todo, no tuve mucho tiempo
para practicar esgrima".
Medio inconsciente al oír esa voz, saltó por el acantilado junto con Éclair.
◆
Los dos, que habían caído al río con éxito, subieron a la orilla y rodaron
hasta una cueva cercana.
"¡Muy bien! ¡Ahora sólo queda parar la hemorragia!"
Éclair retiró hábilmente la flecha y detuvo la hemorragia. Por fin, Shota
respiró aliviado. El dolor punzante continuaba de forma intermitente, y la
cabeza le daba vueltas, quizá debido a la hemorragia.
"Éclair, ¿estás bien? ¿Estás herida?"
"Soy diferente a ti en términos de entrenamiento. No hay un solo rasguño
en mi cuerpo".
"Ya veo, ya veo. Okay, me alegro".
En respuesta, se tumbó junto a la cueva. El tacto fresco del suelo era
agradable contra su cuerpo febril.
"No podemos encender un fuego aquí. Sería como revelar nuestra
ubicación. Con esta lluvia, tampoco podemos esperar que nos busquen.
Aunque creo que la lluvia cesará mañana por la mañana".
Murmuró resentida por la lluvia que aún no daba señales de amainar. Al
darse cuenta de que no podían hacer nada más, exhaló y lo miró.
"¿Por qué me protegiste?"
"Por qué... Ah, me pregunto por qué".
Reflexionó con la mente confusa. En aquel momento, actuó por instinto. Su
cuerpo se movió espontáneamente y la protegió. Era difícil expresar ese
sentimiento con palabras, pero si tenía que decirlo...
"Creo que fue porque quería convertirme en príncipe".
"¿Qué?"
"¿No lo dijiste? Un príncipe es alguien que se convierte en la aspiración del
pueblo. Si hay un subordinado verdaderamente maravilloso al servicio del
príncipe que está en peligro, ¿no lo ayudaría el príncipe?".
"¿De qué estás hablando? No eres un príncipe, ¿verdad?"
"...Ah...n"
La manta habló. Era una voz seductora y femenina. Sólo por esa voz, uno
podía imaginar que la persona debía ser muy hermosa. Si pudiera usar
libremente este cuerpo, sabía que podría experimentar una felicidad
increíble.
"...Sho...ta"
Como si le hubieran dado a un interruptor, sus ojos se abrieron.
Frente a él había un montículo blanco, un estrechamiento de color
chocolate y una boca inferior palpitante. Inmediatamente lo reconoció como
las nalgas de una mujer.
"¡Eh, eh!"
"Oh, bien. Te has despertado. Chuugu."
"¡Éclair! ¿Qué haces?"
Al levantar su pesado cuerpo, Éclair giró las nalgas hacia él y enterró la
cara en su entrepierna. Su rostro se llenó de auténtico alivio y exhaló un
cálido suspiro sobre los genitales de él.
"Tuviste fiebre y te desmayaste. ¿No te acuerdas?"
"¿Eh? Oh, claro."
"No tenía nada que ponerme, así que te calenté con mi cuerpo. Y cuando
te despertaste, me di cuenta de que tenías el bajo vientre anormalmente
hinchado. También sale pus transparente... Pensé que podía ser un
síntoma de envenenamiento, así que intentaba quitarte el pus al menos.
Oh, está saliendo otra vez".
Se llevó a la boca su erección matutina y la chupó con avidez. Gracias a
su bien entrenada función cardiorrespiratoria, el fuerte vacío succionó el
pre-semen.
(¡Esto... esto es peligroso! ¡Podría llevárselo todo!)
Desde su punto de vista, se sentía similar a la sangría que ella le había
hecho ayer, pero ser manipulado con tanta fuerza en la debilidad de un
hombre hacía imposible reprimir su complejo de inferioridad. Y como se lo
habían hecho mientras dormía indefenso, su polla ya estaba a punto de
estallar.
Para calentar su cuerpo, ella presionaba todo su cuerpo contra él. Como
resultado, él era incapaz de mover su cuerpo correctamente y tuvo que
rendirse a ella.
Sintió una textura regordeta en el bajo vientre. El sudor de su cuerpo se
filtraba por el hueco de su piel, haciendo que pareciera que se había
convertido en uno con Éclair.
(Bueno, a lo mejor todavía tengo fiebre o mi cuerpo está increíblemente
sensible, y encima, ¡si ve algo así!).
Sus nalgas bailaban ante él. Eran fuertes y firmes, diferentes tanto de la
amplia Berlina como del pequeño físico de la Torte. Se balanceaban
completamente indefensas. Dejaban al descubierto su adorable estrechez
y una zona íntima que parecía aún más joven de lo que aparenta.
Su polla temblaba. El conducto espermático cumplió su función, llenando
el pene con una gran cantidad de semen.
Éclair le chupó el pene con seriedad. Aunque estaba convencido de que
no debía mostrar esa faceta de sí mismo, sentía el mismo deseo de
mostrarla.
"Mm... El olor es cada vez más fuerte. ¿Lo soltarás todo?"
"¡No, para! Ahh"
Le chupó la punta del pene como golpe final. Esta estimulación le puso la
mente blanca.
¡Bu-guuuu! ¡Byuruu!
"¡Qué... qué... ahh!"
Un placer imparable salió disparado de su uretra hacia la boca de ella. El
semen y su saliva se mezclan como un guiso. Ella parece soltarlo
rápidamente, pero la eyaculación sigue saliendo hacia su cara.
Los elegantes rasgos de su rostro se cubrieron de un blanco desordenado.
El semen salpicó incluso su lustroso pelo negro, lo que no podía esperarse
de alguien que sólo blandía una espada, y tiñe su color.
Tanto si se trataba realmente del efecto del veneno como si su instinto de
supervivencia se vio estimulado mientras estaba al borde de la muerte, la
cantidad era la más notable de los últimos tiempos.
(Esta chica realmente confió todo a la espada. Ni siquiera tiene tiempo para
aprender sobre el amor y esas cosas. Ni siquiera entiende lo que significa
ser reconocida como mujer).
Una oleada de deseo brotó cuando la observó mirando inocentemente los
genitales masculinos. Era como una hoja de papel en blanco. Quería
hacerla suya. Quería mostrarle lo atractivo que era su cuerpo y lo preciosa
que era su forma de vida.
Y si era posible, quería recibir su amor a cambio.
"Porque te quiero".
"¿Eh?"
Probablemente, Éclair nunca había esperado aquellas palabras. Como era
de prever, le miró con expresión estupefacta.
"Te quiero. Por eso mi cuerpo reaccionó así y eyaculé".
"¿Tú... me amas?"
Asintió con la cabeza.
"N-No, bueno, um, es un tipo de admiración que tienen los nobles y los
caballeros... algo así…"
"Por supuesto, eso es verdad. Pero te quiero como mujer. Por eso mi
cuerpo reaccionó. Soy yo diciendo que te quiero".
Éclair abrió mucho los ojos y su expresión se congeló como si se hubiera
detenido en seco.
Cuando su expresión, ligeramente vacilante, desapareció, grandes
lágrimas comenzaron a brotar de las comisuras de sus ojos.
"¿Estás bien?"
"Estoy bien. Es sólo que..."
Se secó las lágrimas una y otra vez, pero seguían brotando. Mientras las
dejaba correr por sus mejillas, sonrió.
"¡Estoy... increíblemente... feliz!"
Fue una respuesta bastante torpe, pero su rostro también esbozó una
sonrisa.
Los dos se abrazaron una vez más, confirmando la presencia del otro. Sus
pieles se rozaron, sus olores se mezclaron y continuaron abrazándose
como un solo ser vivo.
"Shota, sobre la conversación de ayer..."
"¿Sí?"
"Tus palabras... realmente me tocaron la fibra sensible. Una luz brilló en la
oscuridad. Sinceramente, me estaba perdiendo en el camino que debía
tomar. Pero tú me salvaste".
"Bueno, no quería decir nada tan importante".
"Sí, puede ser. Pero está bien. Ser capaz de mostrar a los demás el
camino, eso es lo que hace a un rey. Seguramente te convertirás en un
buen rey".
Éclair agarró con fuerza la mano de Shota. La fuerza de su agarre
expresaba una confianza más allá del razonamiento.
"Hmm... ¿qué es esta sensación? Siento el cuerpo caliente... ¿También
tengo fiebre?".
Expresó su confusión, mientras su cuerpo se calentaba.
"No. Al igual que yo estoy excitado, tu cuerpo también está ansioso."
"¿Mi cuerpo...? E-Eso es..."
"...Haciendo un bebé."
Su cara se puso roja como si se hubiera encendido una llama.
"¡Si oigo esas palabras... mi cuerpo se calienta aún más...!"
Squelch... Slip...
Cada vez que sus muslos se rozaban, un líquido obsceno emitía un sonido.
Puede que Éclair ni siquiera supiera el significado de eso.
"Sho-Shota... Q-Qué debo hacer... ¿Cómo puedo calmar estos latidos
acelerados?"
Sin duda, su corazón latía más rápido que nunca. Con un coraje más fuerte
que cargar en el campo de batalla, Éclair dijo:
"Quiero... quiero hacer un bebé contigo, también."
(Mientras sus piernas y manos son firmes, esta zona es blanda. Pero el
interior del agujero está apretado y succiona mi lengua. Y ella es estable
incluso en esta posición).
No pudo evitar sentirse impresionado por su excepcional estabilidad,
incluso en posición elevada. Parecía que el entrenamiento la había hecho
muy flexible.
"Ahora bien, ¿está bien? Finalmente... ¡Mwah!"
"¡Hah, Aaaah!"
Cuando le dio la última chupada, las piernas de ella se estiraron. Sintió una
ligera sensación de logro al oír sus gemidos en una voz que nunca había
oído antes.
"Uf. Si está tan mojado, debería estar bien".
"Ah, ah... ¿Se acabó? Hehe, ahora nuestro bebé..."
"Aún no ha terminado. Ya que estamos bien preparados, voy a poner esto
aquí".
"... ¿Eh?"
Mostró su virilidad completamente erecta ante su cara de sorpresa.
En ese momento, a Éclair se le fue el color de la cara.
"¿Qué estás diciendo? Es imposible que algo tan grande quepa ahí".
Su rostro esbozó una sonrisa ante su inocente reacción. Tanto si percibía
su seriedad en aquella expresión como si no, cerró la boca con fuerza y se
decidió.
Había un escalón convenientemente saliente en la cueva. Si colocaba las
manos en él, sus nalgas quedarían a la altura perfecta.
"¿Así que sólo tengo que sacar el culo así?"
"Sí, pareces muy travieso".
Sus impresionantes nalgas blancas temblaban ligeramente. En el centro,
su húmedo coño ya goteaba jugos de amor sobre su vello púbico, ansiando
impacientemente más.
"Oh, se ha hecho mucho más grande... Parece que se está hinchando aún
más que antes... ¡gulp!".
¡Squelch! ¡Squeeze!
Con un ligero movimiento de sus caderas, su boca produce un dulce
sonido. Su voz, que normalmente suena segura, ahora era aguda y llena
de anhelo, provocó un intenso deseo que le erizó toda la espalda.
"¡A-ahhh! Me hormiguean los brazos y las piernas... ¡Nunca había sentido
nada igual! ¡Todo mi cuerpo se siente como si fuera a estallar! ¡R-
Rompiendo ahhhhh!"
¡Squelch! ¡Slosh! ¡Thud! ¡Squish!
En respuesta a la opresión de su vagina, similar a la de exprimir el semen,
Shota también gimió y empujó sus caderas. Mientras agarraba su cintura
bien definida con su firme elasticidad, se movió vigorosamente hacia
adelante y hacia atrás, haciendo que los empapados lugares secretos
emitieran un intenso sonido de aplastamiento.
El sonido resonó en la cueva, magnificando varias veces el obsceno ruido.
Es como si todo el cuerpo estuviera siendo bañado con el sonido similar a
un pistón y su voz.
(¡Su voz y sus sonidos eróticos resuenan en mi cabeza! Hey, ¡esto es
realmente bueno! Es una experiencia sexual que no puedes tener en la
habitación de un castillo.)
Excitado con un sonido sin precedentes, su polla se erizó con toda su
fuerza debido a la combinación no sólo de la sensación física sino también
de la estimulación del sonido.
Esta ardiente pasión era la misma para Éclair, y su rostro, mientras recibía
sus empujones, se convertía en un rostro derretido con la lengua extendida
y las cejas fruncidas.
"¡Ah! ¡Es increíble! Mi cuerpo está haciendo tales sonidos... ¡ah!"
Con un sonido chirriante, su glande roza la pared posterior de su vagina.
En ese momento, ella suelta un grito agudo y su cuerpo se retuerce sin
control.
"¡Qué clase de voz estoy haciendo! No puedo creer que esté haciendo
semejante voz... ¡pero! ¡Ah! ¡Faahhh!"
La carne se golpeaba. Cada vez aparecían ondulaciones en sus regordetas
nalgas que las hacían temblar. Sintió la sensación suave y envolvente de
De mala gana, Éclair le agarró la mano para detenerle. Los pechos que
estaban siendo masajeados volvieron a su forma original, y ella se levantó
del sofá.
"Iré a verte más tarde."
"Sí. ¡Discúlpeme entonces!"
El anterior comportamiento tierno y dependiente ha desaparecido, y Éclair
ha salido con confianza de la habitación con la espalda erguida.
"Ella es muy seria. Aunque vaya a ser princesa, no necesita participar en
los entrenamientos del escuadrón de caballeros."
"Parece que quiere pasar tiempo como comandante hasta la boda real.
También tiene la tarea de entrenar a su sucesor. Y luego está la idea de
Torte del 'Báculo Mágico'".
Torte, que antes le había preguntado por las armas, intentó mejorar el
Báculo Mágico con sus propias ideas. Con su apoyo, el prototipo de su
Báculo Mágico se puso a prueba.
"Parece estar recibiendo buenas evaluaciones. Podría cambiar el sentido
común del campo de batalla una vez más".
"Por supuesto. Recibí consejos tuyos, después de todo. Hay cosas que se
pueden hacer incluso sin usar la magia".
"Bueno, sólo transmití lo que sabía. Torte fue quien realmente lo utilizó.
Debería darle una recompensa adecuada. Me pregunto qué le gustaría".
"¿Cualquier cosa estaría bien?"
"Sí, siempre que esté dentro de mis posibilidades".
"Ya veo. Entonces..."
El príncipe también tenía escritorio. Sellos de autentificación y revisión de
documentos. Para ello, en el palacio real se preparó una espléndida mesa
de despacho para el estudio del príncipe.
Pero su mirada no se fijó en absoluto en los documentos. Apretó con fuerza
los dedos sobre el escritorio, casi hasta entumecerlos.
"¡Ugh...ahh!"
"No estoy... celosa de Torte ni nada de eso... Sólo... quiero que me trates
con justicia ya que también soy tu mujer".
La boca de Shota se aflojó en una sonrisa cuando la mirada de Éclair se
desvió.
"En ese caso, si no te importa, déjame ver los bonitos pechos de Éclair".
"S-Sí. ¡Entendido!"
Éclair se aflojó la corbata y se desabrochó lentamente la camisa, dejando
al descubierto su amplio pecho mientras la camisa se estiraba y tiraba por
la presión interior, llegando a cierto punto.
¡Pop!
La voluptuosidad de Éclair quedó expuesta al salir.
Sus pechos se alzaban desafiantes y arrogantes. Eran tan glamurosos que
no cabían en la palma de una mano. Los pezones rosados estaban erectos
y brillaban bajo la luz del sol. A pesar de exponer semejante atractivo
sexual, vestía un valiente uniforme militar, lo que creaba un gran contraste.
"Que la guapísima Éclair tenga unos pechos tan espléndidos es realmente
injusto. Vamos, levanta las manos y muéstrame más".
"¿Así?"
Ella levantó obedientemente ambas manos. Al levantar los brazos, sus
pechos también se elevaron, acentuando aún más su firme forma.
"Mmm...Que me chupen los pechos...nnn ♪"
Smack, slurp.
Shota apretó la cara contra los pezones expuestos, haciendo ruido a
propósito, y chupó los pezones hinchados y erectos.
"Mmm, sabe delicioso. Aunque no debería tener leche, tiene un sabor dulce
y huele a nata. ¿Qué te parece esto?"
"¡Allí también!"
La sujetó, que no quería, y acercó la nariz a su axila. Tal vez debido a su
reciente entrenamiento, había un ligero olor a sudor.
"Mmm, tu sudor... está un poco húmedo... qué lascivo".
"¡Ah! ¡Uh!"
La espalda de Éclair se crispó al sentir el pene clavarse profundamente en
su interior. Se abrazó con fuerza a su cuello, soportando el placer que
recorría todo su cuerpo.
Sus pezones erectos, apretados contra el pecho de él, estaban sujetos con
fuerza. Mientras escuchaba su respiración caliente, Shota exploró
cuidadosamente el interior de su vagina.
(¡Su coño está cada vez más suave! Sin embargo, sigue siendo
increíblemente apretado a pesar de que se está volviendo más suave).
Al principio, su lugar secreto era obstinadamente firme, pero a medida que
sus cuerpos se entrelazaban, se fue suavizando y adaptando a la forma de
él. La intensa sensación de estrechez se mantuvo, y su vagina, ahora
pegajosa y adherente, se había convertido en una digna obra maestra.
Como resultado, la propia Éclair estaba cada vez más expuesta al placer.
"¡Ah!"
Éclair se apresuró a sofocar la voz que dejó escapar involuntariamente.
Miró hacia el caballero, preocupado por el capitán que no había regresado.
"Si haces ruido, tus compañeros se darán cuenta".
"¡Ah!"
Éclair se tapó la boca con la mano derecha y reprimió desesperadamente
un grito. A pesar de las lágrimas en los ojos por el placer, intentó ocultar
los gemidos como si no quisiera que la vieran, lo que no hizo sino excitar
aún más la naturaleza sádica de Shota.
(Ya veo, creo que entiendo por qué Torte hizo lo que hizo).
¡Squelch! ¡Squelch! ¡Splat! ¡Thwack!
"¡Ah! Ahh!"
Con cada empuje de sus caderas, su silencioso acuerdo se rompía. A
pesar de los desesperados esfuerzos de Éclair por contener la voz, de las
comisuras de sus labios escapaban gemidos incontrolables.
"¿Qué?"
Sorprendido por la repentina sugerencia, Shota, que se estaba entregando
al placer, abrió mucho los ojos.
"¡Dinos, Príncipe! ¿Qué quieres que hagamos? ¡Cumpliré cualquiera de tus
deseos!"
Respirando agitadamente, los dos acercaron sus rostros. Abrumado por
sus expresiones serias, descubrió la jugada en la que había estado
pensando.
"B-Bueno entonces. ¿Puedo tener mi pene apretado entre sus pechos...?".
Sintió un atisbo de vacilación y le preocupó que su petición pudiera
desanimarles. Sin embargo, su excitación disipó sus preocupaciones. Torte
y Éclair apretaron sus pechos desbordantes contra su entrepierna.
"Mm, Príncipe... ¿Así?"
"Um... Tengo que presionar mi cara contra esta cosa..."
Ligeramente insatisfechas, ambas empujaron sus pechos contra él,
envolviendo su pene en su escote.
Cuatro suaves pechos aplastaban su virilidad. El placer era tan intenso que
Shota sintió que la parte inferior de su cuerpo se derretía.
Tanto Torte como Éclair poseían unos impresionantes pechos grandes.
Cuando se combinaban, sus efectos se duplicaban, y el nivel de excitación
se elevaba al cuadrado.
"Okay, por favor, muévete así... ¡Lo quiero!"
"Frotando tu polla con nuestros pechos... ya veo♪"
"Déjamelo a mí. Te haré sentir el cielo con mis pechos♪"
¡Squish! ¡Squeeze! ¡Rub!
Ambas se agarraron los pechos con las dos manos y los movieron arriba y
abajo, manipulando su vara de carne.
El mero hecho de que le apretaran ya era suficiente para que sus caderas
se sacudieran de placer, pero el movimiento añadido lo hacía realmente
insoportable.
"¡Ah! ¡Es delicioso! ¡Mmm! ¡Vas a eyacular con los pechos de Torte!
¡Smooch! Smooch!"
"Lo estás disfrutando con la punta de mi lengua, ¿verdad? Aunque lo
disimules, me doy cuenta. ¡Tu semen está subiendo en tu polla con un
ruido sordo! ¡Munch! Chup!"
Con sus pechos y sus bocas, las dos dan servicio al pene, masajeándolo
hasta dejarlo hecho un lío. Todas las sensaciones que no sean de placer
se adormecen, y sólo el pene erecto continuó volviéndose más y más
sensible.
"¡Ah! ¡Ahhh!"
¡Squeeze! ¡Nibble! ¡Suck! ¡Lick! ¡Suck!
La mezcla de fluido y saliva goteaba sobre el pene. Con la adición de aceite
lubricante caliente, el placer de la follada de tetas se transmitía aún más
directamente. La sensación de los dedos de las dos personas sobre los
pechos se sentía a través de ellos. Estaba claro que aplicaban presión al
manipular el pene, y su espíritu de servicio hacía temblar el corazón.
"¡Ugh! ¡Ya estoy!"
Al darse cuenta de que su límite estaba cerca, las dos sacudieron sus
pechos apasionadamente y utilizaron sus bocas para dar servicio al pene
de abajo a arriba, empujando el semen hacia arriba. Con movimientos
intensos, toda la longitud del pene fue manipulada rápidamente desde la
base hasta la punta. Shota alcanzó rápidamente el clímax.
"¡Ugh! ¡Ya viene! ¡Ya viene!"
"¡Por favor! ¡Dame tu semen en mi boca!"
"¡Eyaculación! ¡Semen! ¡Lo quiero! ¡Por favor, córrete en mi cara!"
¡Squirt! ¡Drip! ¡Squeeze! ¡Tremble!
Cuatro pechos rebotando bailando vigorosamente. Novias buscando
desesperadamente la eyaculación. Y en medio de todo, su propia polla
siendo empujada dentro y fuera. Shota finalmente llegó a su límite al
presenciar este espectáculo.
"¡Ahh, haaaaaaaaaaan!"
¡Splash! ¡Squirt! ¡Gush! ¡Squirt!
Ahora le tocó a Éclair entrar en pánico. Al igual que con Torte, le tapó la
boca y ella se dio cuenta de que resistirse era inútil, por lo que
obedientemente se sentó en la cama.
Las dos que antes discutían con vehemencia ahora intercambiaban
miradas, aparentemente conscientes la una de la otra, creando una
atmósfera intrigante.
"Ustedes dos son similares. Incapaces de expresar plenamente sus
verdaderos sentimientos, y testarudas. Por eso creo que se pueden llevar
bien".
Acarició suavemente las cabezas de las dos, que bajaron la cara en
respuesta.
"Nos convertiremos en una familia, así que quiero que ustedes dos se
lleven bien. ¿Verdad?"
"B-Bueno, si el Príncipe lo dice..."
"No estábamos peleando a propósito ni nada."
"Y.… para ser honesto, es realmente placentero cuando somos nosotros
dos".
Cuando se le escapó la otra verdad oculta, Torte le miró con ojos
exasperados, mientras Éclair asentía con seriedad.
"¿Es eso lo que pretendes? Príncipe, sigues siendo un pervertido, como
siempre".
"Pero está bien. Si es lo que quieres".
Las dos se desplomaron sobre su pecho con una sonrisa lasciva,
masajeando suavemente la polla, que ya estaba erecta de nuevo.
"Éclair, lo siento. Estaba siendo terca por un momento".
"No, dije demasiado, Torte. Lo siento mucho".
Risita "Hay semen en tu cara♪ beso"
Torte extendió la lengua y lamió la mejilla de Éclair.
"Mmm, gracias, Torte. Déjame devolverte el favor. Lamer, lamer."
En respuesta, Éclair también le correspondió. Las dos se lamieron la cara,
acabaron entrelazando sus lenguas y finalmente apretaron sus bocas.
"El color es más oscuro en el lado de Éclair. Oh, Torte tiene un lunar en el
ano".
"P-Por favor, no digas eso..."
"Mmm, es embarazoso... ya sabes."
Squish
Cuando se juntaron las dos nalgas con las manos, se hizo claramente
visible un precioso ano. El borde exterior era de color chocolate, y la
entrada rosada asomaba en el centro. Los pliegues se estiraban y luego
volvían al compás de la respiración de las dos personas.
"...voy a meter el dedo. Tengo que aflojarlo bien, o puede doler. Vamos a
mojarlo con nuestros jugos de amor".
Las partes íntimas de las dos ya estaban fibrosas. Cuando apretó el dedo
contra ellas, hicieron un sonido pegajoso y sofocante, y ellas gimieron:
"Ahhh♪".
"Apliquemos bastante... Las dos se han puesto muy mojadas. Parece que
cada vez es más erótico. ¿Debería... introducirlo?"
Con la mano derecha sobre Torte y la izquierda sobre Éclair, les tocó el
ano con el dedo corazón humedecido.
"S-Sí... ¡Fuu!
"Por favor, ven... ¡Ahh!"
¡Squelch! ¡Squelch!
Cuando introdujo el dedo en el ano, hubo una ligera resistencia, igual que
cuando les rompió el himen.
La rosada abertura tembló una vez, pero se relajó lentamente para aceptar
el dedo de Shota. Shota lo acunó en la mano y presionó con el dedo.
Su dedo corazón se hundió en ellas, alcanzando finalmente la base por
completo. La suave carne de sus nalgas abrazó amablemente su mano,
sintiéndose increíblemente placentera.
"E-Está dentro... la punta de tu dedo ha llegado a lo más profundo del
agujero impuro..."
"Se siente... diferente. Me hace temblar la columna vertebral..."
"¿Eh?"
Torció la cabeza ante las palabras de Torte.
"¿Significa eso que me utilizó como su material? ¿Pero por qué haría algo
así? Si hubiera querido, podría habérmelo dicho".
Dicho esto, de repente se dio cuenta de que últimamente no tenía mucho
contacto con Berlina. No sólo eso, sino que las interacciones habían
disminuido gradualmente, salvo los intercambios profesionales.
"Ahora que lo pienso, siento que me ha estado evitando últimamente".
"¿Podría ser que le hicieras algo a Lady Berlina?"
"Príncipe, usted ha sido todo un alborotador, ¿verdad? ¿Quizás ha
acumulado algo de estrés mental?"
"Ugh, cuando lo dices así..."
Ya había recibido varias enseñanzas de ella como su mentora. Además de
eso, también se ocupaba de las tareas políticas habituales. Además,
estaba su viaje por el cielo con Torte y la intensa batalla con Éclair...
cualquiera de las cuales podría haber puesto su vida en peligro. Sólo
recordar la ira y la confusión de Berlina en ese momento le dolía el corazón.
"Sí, intentaré hablar con Berlina. Gracias a los dos".
"De nada ♥"
"No es para tanto, de verdad ♥".
"El mero hecho de tener a alguien con quien hablar se agradece. Me ayuda
a calmarme".
En el mundo en el que no tenía familia ni conocidos, en el que conocía el
verdadero nombre y hablaba libremente, la existencia de estos dos que
podían proporcionarle eso era realmente preciosa.
(Ahora que lo pienso, al principio fue Berlina quien lo hizo por mí).
Berlina le aceptó, le dio un lugar al que pertenecer e incluso alivió su
frustración sexual. En aquel momento, sólo estaba confuso, pero ahora,
mirando hacia atrás, fue realmente como un sueño. Pensar en lo que
habría pasado si hubiera conocido a alguien que no fuera ella era
escalofriante.
(Sí, hablemos con propiedad. Seguro que así se resuelven las cosas).
Con esa decisión en mente, recuperó la conciencia y volvió la atención a
las novias que tenía delante.
Las dos habían alcanzado el orgasmo varias veces la noche anterior con
intensa pasión. Al principio, el cuerpo de él se había cansado rápidamente
por eyacular una sola vez, pero a medida que se acostumbraban a
practicar sexo, eran capaces de satisfacerse plenamente el uno al otro
incluso al hacerlo simultáneamente. Y ahora, por la mañana, su pene, que
debería haber estado agotado, recuperó su vigor al verse abrazado por sus
cuerpos desnudos. Mientras era complacido por un placentero tratamiento
de erección matutina, su polla volvió a estar dura una vez más. Las dos la
lamieron diligentemente con sus lenguas.
"A pesar de haber soltado tanto ayer, se ha vuelto así de duro otra vez♥"
"Nhufu... Como era de esperar, es una fuerza digna de un rey♥"
Le colmaban la polla erecta de besos y piropos genuinos. Para estas
queridas chicas, sus testículos estaban en plena producción, creando una
descendencia tras otra.
"Hmph, que lindo♪ Está temblando♪"
"Está produciendo esperma para nosotras, ¿no?"
Le besaron los testículos por ambos lados. A diferencia del pene, no era
una estimulación intensa, pero el suave tratamiento de un órgano con el
que no se solía jugar le produjo una sensación de dicha. Las arrugas de su
escroto fueron estiradas con sus lenguas, como si estuvieran comiendo
albóndigas, e incluso se lo llevaron todo a la boca.
A la luz del sol de la mañana, sus propias vesículas seminales estaban
siendo chupadas por las hermosas chicas.
(Me alegro...)
En medio de la abrumadora sensación de felicidad que incluso le daba
miedo, eyaculó sobre los rostros de las dos chicas.
◆
A pesar de tener una vida sexual satisfactoria, se avanzaba poco en la
conexión con Berlina.
"Estas copas son una reliquia familiar. Realzan el sabor del vino de uva y
lo hacen más sabroso".
A través de una investigación previa, se confirmó que Berlina podía
manejar bastante bien el alcohol. Aprovechando la ocasión, los dos trajeron
carne seca, frutos secos, nueces y otros aperitivos y los dispusieron sobre
la mesa.
"Ahora, Lady Berlina, por favor, disfrute sin vacilar".
"El espacio del vaso equivale al espacio del corazón. Por favor, coman y
beban a gusto".
"Sí, muchas gracias".
Al principio, bebía con reserva, pero a medida que las dos la animaban a
beber más, el ritmo al que se vaciaba su copa era cada vez más rápido.
Como resultado, su rostro empezó a teñirse del mismo tono carmesí que
el vino.
(Hehehe, tal y como estaba previsto).
(Ah. Si la emborracho un poco más, podré escuchar sus verdaderos
sentimientos).
Haciendo contacto visual, Torte y Éclair chocaron sus copas, creando un
brindis anticipado.
----Y una hora más tarde.
Berlina se había "completado" más de lo que ambas habían previsto.
"Entonces, ¿me están escuchando las dos?"
"Sí, estamos escuchando".
"S-Sí. Sin embargo, Lady Berlina, ya nos lo ha dicho tres veces".
"¡Por eso! Ser Primer Ministro no es tan fácil como parece. Incluso escribir
una sola carta requiere una cuidadosa consideración, ¡y el simple hecho
de gestionar mi agenda me supone un tremendo esfuerzo! Y nadie lo
entiende, ni siquiera los nobles que no dejan de agobiarme con exigencias
irrazonables. Ya estoy harta. Me he planteado convocarlos varias veces
para darles un sermón".
(Es bastante ligera. Berlina sigue siendo una chica, después de todo).
Aunque luchaba y se agitaba, su resistencia era ridículamente débil
comparada con la de caminar por el aire con Torte o escapar de la muerte
por los pelos con Éclair.
"¡Hyan!"
Al depositarla en la cama, Berlina dejó escapar una voz inesperadamente
adorable. La Berlina seductora que una vez le había seducido había
desaparecido, y ahora se aferraba a las sábanas como una chica que
experimenta el primer amor.
"Berlina..."
Se subió a la cama y se arrastró hacia ella. Ella gritó e intentó escapar,
pero él la agarró de la mano y cubrió su cuerpo con el suyo.
"Por favor, Príncipe... Esto es... Tienes unas prometidas maravillosas,
¿verdad?".
"Fue Berlina quien dijo que debería casarme al menos con tres esposas".
"Sí, pero... Debe haber alguien mejor que yo..."
"No, quiero a Berlina. Sólo te quiero a ti".
"Me he dedicado al país... no puedo convertirme en tu esposa ahora".
"Dijiste que el príncipe es el reino mismo, ¿verdad? Eso significa que te
estás dedicando al príncipe, ¿verdad?"
"B-Bueno..."
Cubriéndose la cara con ambas manos, Berlina sacudió suavemente la
cabeza.
"Por qué yo... Debería haber alguien más adecuado para el príncipe..."
"...Tú, que dijiste que el estatus no importa, ¿estás diciendo eso?"
Dijo con tono acusador. De repente dejó de moverse.
"Me salvaron esas palabras. Había estado pensando si podría soportar ser
un príncipe, aunque sea una posición indigna, y fueron tus palabras las que
me dieron el empujón. Y.… me di cuenta de lo maravilloso que es tocar a
una mujer por primera vez... Así que es realmente frustrante que lo
niegues".
La abrazó con fuerza, la apretó tan fuerte que le dolía el cuello y la suavidad
de sus pechos le oprimía el pecho.
Podía oler su aroma. El dulce perfume, el alcohol y un leve rastro de su
olor natural.
"¡Te quiero! ¡Te quiero tanto! ¡No quiero dejarte ir! ¡Quiero estar contigo
para siempre!"
La abrazó con fuerza mientras lloraba a lágrima viva. Sintió un auténtico
alivio ante aquel abrazo sincero, ligeramente distinto al de la primera vez
que la abrazó, sin ninguna pretensión.
"...Sí, hay algo que quiero que prometas hacer."
"...?"
Hizo un signo de interrogación dentro de su corazón.
"Cuando lo hagamos, quiero que me llames por mi nombre en vez de
Príncipe. Siempre me has llamado Príncipe".
"Bueno, eso es..."
Ahora comprende que ella había trazado una línea en su mente. Lo había
educado como príncipe, no como hombre.
Sin embargo, a partir de ahora, las cosas son diferentes.
"...Entendido. Príncipe Shota."
Berlina pronuncia su nombre como si lo recordara en su boca.
Atraído por esas palabras, besó sus labios.
"... ¿Por qué? Me da vergüenza decirlo otra vez".
"Sí, tienes razón. Aunque ya lo hemos hecho muchas veces".
Desabrochó uno a uno los botones de su ya holgada camisa. Cada vez,
sus voluptuosos pechos rebotan como si expresaran alegría como una
criatura viva.
"...Ngh."
Con un pequeño gemido, su camisa se abrió. Al bajarle la ropa hasta la
mitad del cuerpo, quedó al descubierto el hemisferio superior de su pecho.
desvió ligeramente la mirada con vergüenza era igual que una chica
experimentando su primer enamoramiento.
"Es hermoso, Berlina."
Lo dijo una vez más. Esta vez, ella no dijo nada, sino que frunció el ceño y
bajó la cara, con cara de preocupación.
"Ah..."
Lamiendo la base del cuello, luego bajando lentamente la lengua, sus
labios presionaron contra sus pezones.
"Tus pechos, son realmente increíbles. Son tan grandes que cubren
completamente mi cara, dulces como un batido".
Sorbe, sorbe y chupa.
Mientras le chupaba el pezón, un leve aroma pasó por sus fosas nasales.
Pensó que olía parecido al talco de bebé que había olido cuando era más
joven. Mientras tanto, su cuerpo rebosaba encanto femenino.
La frase "cubrirme completamente la cara" no era una exageración. En
realidad, los pechos de Berlina eran tan grandes como la cabeza de una
persona. Si enterrara la cara en ellos, quedaría cubierta por los pechos.
"Ahh... se siente tan bien... me siento tan segura aquí contigo..."
"Si tú eres feliz... yo también lo soy".
Berlina abrazó suavemente a Shota, que había enterrado la cara en su
escote. Al hacerlo, pudo oír los latidos de su corazón aún más cerca, y
sintió una sensación de alivio lo bastante fuerte como para quedarse
dormido.
(¡No, no puedo! ¡También tengo que hacer que se sienta bien! De verdad,
¡sus pechos! Son hechizantes)
Estuvo a punto de dormirse con los pechos como almohada, pero levantó
la cara con pura fuerza de voluntad.
"Te gustó cuando hice esto, ¿verdad?"
"¡Mm! ¡S-Sí!"
Le masajeó enérgicamente los pechos desde la base hasta la punta. Al
hacerlo, dejó escapar una dulce voz y la espalda de ella se estremeció.
Con tensión en el esfínter, levantó con fuerza las caderas de ella y la cubrió
con su propio cuerpo. Haciendo rebotar sus caderas contra el suave cojín
de sus nalgas.
¡Thrust! ¡Squelch! ¡Gush! ¡Plunge! ¡Puff!
"¡Ah! ¡Ah! Es... ¡intenso!"
Aprovechando el resorte de sus caderas, empujó con fuerza, como si
aplastara sus cuerpos. La dura sensación del cuello del útero en la punta
le produjo un deseo irresistible. La penetró violentamente y se retiró con
rapidez.
"¡Agh! ¡Es... increíble! ¡Ser follada por tu polla!"
¡Rebotando, rebotando!
Con cada embestida, su cuerpo curvilíneo lo tentaba en círculos. Parecía
ondularse, vibrando aún más intensamente debido al placer.
"M-Más... ¡ahn!"
Frota, frota... ¡tira!
Sacó la polla que tenía enterrada en lo más profundo. Una descarga
recorrió el cuerpo como si hubiera pasado un rayo, haciendo que el
corazón saltara y que la mano que sujetaba la pierna apretara con fuerza.
Por otro lado, su cuerpo temblaba aún más violentamente que el de él. A
pesar de babear saliva dulce por la boca con sólo un beso en el útero,
apretó los dientes y frunció las cejas, soportando el placer de que le
rasparan rápidamente los pliegues vaginales.
"Me-me encanta esto... ♥ Me encanta... ♥ Más, más, por favor ♥"
Sus brazos y piernas, envueltos alrededor de su espalda, apretaron con
fuerza su cuerpo. Utilizando esa fuerza, golpeó sus caderas, su carne
golpeando con tal fuerza que parecía que iba a estallar.
¡Smack, smack, smack! ¡Squelch! ¡Squelch! ¡Splat!
El sonido agudo de la carne al chocar era agradable. El calor de sentirse
abrazado. El hecho de que lo deseara tanto le excitaba aún más.
"¡Se siente tan bien aquí! ¡Tu punto G! ¡Ya lo he encontrado!"
"¡Ah... ahí! Ah, ah, ah, es... ¡intenso!"
"Berlina, hay un punto más que sé que te hará sentir bien, ¿verdad?"
"¿Eh...?"
Le sonrió con picardía, con los ojos húmedos de placer. Luego, movió
ligeramente la mirada por encima del cruce.
"¡Eso... ahí! ¡Si me tocas ahí ahora...!"
Su glándula clitoriana, profundamente roja y congestionada. Una de las
pocas zonas del cuerpo de la mujer que era especialmente sensible y la
llevaba fácilmente al clímax.
"¡Espera... si me tocas ahí ahora...!"
Berlina, incapaz de articular palabra correctamente, alzó la voz alterada.
Le apretó el clítoris hinchado con el pulgar.
"¡Ahhh...!"
Mientras él hacía rodar la perla roja con la punta de los dedos, ella dejó
escapar una dulce voz que nunca antes había oído y apretó el puño. La
estimulación adicional añadida a su ya sensible cuerpo, hizo que su
espalda se arqueara como un arco.
El útero, la vagina, el punto G y el clítoris.
Un conjunto de zonas erógenas concentradas en el bajo vientre de una
mujer. Las acariciaba amorosamente con todo su cuerpo.
"¡Yo... voy a.… romperme! Mi cabeza ya está... ¡explotando! ¡Ya no puedo
entender nada!"
Con la lengua fuera, gritó.
Su actitud fría y serena de primera ministra ya no existía. Ahora, frente a
él, había una mujer que gritaba de placer.
(¡Yo... quiero liberarlo! ¡Dentro de Berlina!)
La ya una vez liberada lanza de carne palpitaba con el deseo de
reproducción. Mientras empuja hacia adelante y hacia atrás contra las
paredes de carne con un glande firme y erecto, el semen que se llenó
rápidamente se acumula en la punta.
Las tres bocas se abrieron a la vez y los seis pechos temblaron. Las babas
goteaban de sus labios mientras sus verdaderos sentimientos se
derramaban.
"Quiero hacerlo".
Cuando las tres retrocedieron sin dejar de escupir hilos de saliva, se
inclinaron hacia sus pantalones.
"Nngh, hace cosquillas."
Incluso el roce de las yemas de sus dedos al desabrocharse el cinturón se
sentía como la caricia de una súcubo sobre su sensible piel. Decidido a no
eyacular al menos hasta estar fuera, aguantó el picor de la estimulación.
Agitar
En cuanto se quitó el cinturón, la polla salió disparada. Sería creíble decir
que era de acero debido a su extraordinaria firmeza.
(¿Es... es esto realmente una parte de mi cuerpo?)
Una inimaginable escultura de carne que ni uno mismo puede creer. El
glande es puntiagudo como una lanza, y la vara alargada palpita con
fuertes vasos sanguíneos. Los testículos se hinchan y demuestran
visiblemente la tremenda vitalidad. No es producto de la imaginación sentir
que la temperatura ambiente ha aumentado tres grados.
A pesar de tal expansión, la sensibilidad de la sensación sexual no se había
embotado, sino que se había vuelto más sensible en proporción a su
tamaño.
"Wow ... tu polla es realmente algo."
Incluso Éclair, que había experimentado con numerosas espadas, quedó
sorprendida por su impresionante tamaño. Tanto Berlina como Torte se
quedaron sin aliento y fascinadas por su entrepierna.
"¡E-Este olor... es increíble! ¡Tan fuerte!"
"¡Simplemente la preeyaculación que ya está saliendo es tan espesa que
parece que podría provocar un embarazo!".
Alientos calientes soplan desde todas las direcciones. En respuesta, la
vara de carne saltó hasta el ombligo y golpeó el abdomen.
que no sea loable para una dama, pero en la alcoba, era la mayor forma
de elogio para la polla.
Sus lenguas continuaron alcanzando el prepucio. Deslizando hábilmente
sus lenguas en su tensa piel, lo despegaron lentamente sin causarle ningún
dolor. Un esfuerzo conjunto de las tres novias. Finalmente, su piel se
despegó por completo, revelando el glande cubierto de esmegma y babas.
"¡Mm! ¡Ah, ah! ¡El sabor es persistente en mi garganta!"
"¡Huff! ¡Esta polla palpita como si estuviera a punto de salirse de mi pecho!"
"¿Sigue creciendo? ¡Estoy orgullosa de tener un marido tan fuerte!"
Servicio minucioso a su pene con seis pechos. Siendo acariciado hasta el
glande por tres lenguas.
Envueltos en sus cuerpos empapados de sudor, sus mitades inferiores se
sentían como si se hubieran fundido, compartiendo el calor corporal.
"¡Mis piernas hormiguean y están entumecidas! Ku, me... ¡estoy corriendo!"
Ya fuera por el efecto del afrodisíaco o por la sobreexcitada triple follada
de tetas, a pesar de tener normalmente mucha resistencia, todo su cuerpo
le pedía eyacular.
Su cuerpo tembló, y una pequeña cantidad de fluido lechoso goteó de la
punta. Las tres novias lo notaron con agudeza. Las caricias con la lengua
se hicieron más intensas. Este acto, que normalmente causaría dolor, se
sentía increíblemente placentero debido al dulce servicio que estaban
recibiendo hoy.
"Así... ¡Me corro! ¡Lo soltaré todo!"
Se agarró con fuerza al sofá y levantó las caderas en sincronía con el
pecho. En su mente, sus miembros se habían encogido y todo su cuerpo
se había convertido en una barra de carne. Frotándose. Abrazado por los
encantadores pechos de la mujer, repetidamente. Finalmente, guiado por
ellas, su glande se puso aún más erecto que antes.
"Nhah♥"
Verdaderamente una fuente de semen. Su mayor poder eyaculatorio
debido al afrodisíaco elevó el semen sin esfuerzo, lloviendo sobre los
"Te gusta esta posición, ¿verdad? La parte que está conectada puede ser
vista por todos, es una posición embarazosa".
"¡Eh, eso... eso es...!"
¡Splash!
Le levantó los muslos y se la introdujo sin preguntar. La polla llegó a lo más
profundo de ella de golpe, intercambiando un beso caliente con su vientre.
El estro1 inducido por afrodisíacos, masturbación indirecta por follada de
tetas.
Por encima de todo, sus sentimientos por Shota la habían preparado
completamente para aceptar una polla. Utilizando su propio peso, él
empujó sin vacilar hasta el fondo. Separando las paredes vaginales
mientras la cubría de jugo de amor.
"¡Es tan profundo de repente! Oh, oh, ¡por favor córrete ya!"
Sólo con la inserción, el interior de sus muslos temblaba de placer,
haciéndole sentir un hormigueo en la columna vertebral.
"Haha, Berlina debe ser una zorra para llegar al clímax tan fácilmente".
"Yaa ♪ P-Por favor no digas eso♪"
Berlina gritó avergonzada, aunque se le había trabado la lengua por el
orgasmo. Sin embargo, también era cierto que el tono de su voz estaba
lleno de alegría. Placer debido a la timidez. Berlina había soportado la
presión del Primer Ministro, había empezado a sublimar la vergüenza en
placer tras convertirse en su novia.
"¿Está bien? Las dos están mirando, ¿sabes?"
Al darse cuenta de esas palabras, Berlina notó que Torte y Éclair
observaban su coito. La temperatura en sus brazos aumentó.
"P-Por favor, n-no mires... ¡hauuuu!"
¡Squelch!
Al agitar su cuerpo, el sonido del agua resonó por toda la habitación, más
profundo que antes. Estaba claro que Berlina sentía más que antes.
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Periodo recurrente de receptividad sexual y fertilidad en muchas hembras de mamíferos; celo.
Frunciendo las cejas, mordiéndose los labios, apretando los puños. Berlina
aguantó; haciendo todo lo posible para sincronizar el clímax de él con el
suyo. Incluso en esos momentos, era adorable.
"¡Umm! ¡Las dos!"
"Mmm. Has bajado demasiado la guardia, Shota, Enséñame tus grandes
pelotas así ♪"
"Piensa también en la persona que espera. Date prisa, libéralo e
introdúcelo en nosotras/"
Antes de que se diera cuenta, ambas habían dejado de chuparle los
pechos y movieron sus caras hacia la zona de su entrepierna. Extendieron
sus lenguas desde ambos lados y lamieron ambos testículos al mismo
tiempo.
Besando repetidamente los cojones, dejaron luego que sus lenguas
subieran hacia la unión. Lamieron tanto el semen como los jugos del amor
desde la base del pene hasta el clítoris de Berlina como si lamieran un polo.
(¡Esto, esto es peligroso! ¡Se siente bien tanto dentro como fuera! ¡No hay
tiempo para dejarse llevar por este placer!)
Aunque esperaba que las otras esposas se involucraran, el placer iba más
allá de lo imaginable.
"¡Ya, ya! ¡Me corroooooo! ¡Voy a preñarte, Berlina!"
"¡Sí, por favor! Por favor, fecunda a Berlina con tu enérgico semen a tope".
¡Splash! ¡Suck! ¡Squelch! ¡Plunge!
Cada vez que la carne penetraba, sus caderas se elevaban de forma
natural, y un placer estremecedor recorría su espina dorsal como
electricidad. Agarró con fuerza las piernas de Berlina, enterrando los dedos
en ellas, y movió vigorosamente las caderas y los brazos. Aparte de la
sensación del pene, ya no sentía nada más. La presión contra su espalda
y el estrechamiento de su vagina apenas mantenían conectada su
conciencia.
(¡Me corro!)
Le levantó las caderas todo lo que pudo y luego las dejó caer de golpe.
Apretó la polla como si estuviera penetrando en su útero. En un instante,
su visión estalló en blanco.
"¡Me corrooooooooooooooo!"
¡Spurt! ¡Spurt! ¡Squirt! ¡Squirt!
El placer le recorrió desde la columna hasta la ingle y explotó de golpe.
Todo su genital se convirtió en una bomba, expulsando semen y
liberándolo en la vagina de Berlina. Con cada descarga, sus caderas
rebotaban repetidamente. El calor que se acumulaba poco a poco en su
vagina envolvió su polla. Como si la lamiera, sus ondulantes paredes
vaginales succionaban el semen cada vez más profundamente.
Era una sensación diferente a la de eyacular en su boca o en sus pechos.
Una sensación de logro relacionada con dar vida circuló por todo su
cuerpo.
"El Rey... Estoy embarazada... ♥ Dentro de mi vientre, está golpeando y
golpeando ♥"
Berlina declaró su propia impregnación en un lenguaje entrecortado. Su
cariñoso gesto de acariciarse el bajo vientre, incluso con el pene aún
dentro, sugería que estaba realmente convencida del nacimiento de una
nueva vida.
"...La siguiente es Torte."
¡Squooshhh!
Tras confirmar que la respiración de Berlina se había calmado, Shota sacó
su pene.
Inmediatamente se abrazó a Torte. No había necesidad de descanso. El
pene que acababa de sacar mantenía un tamaño superior al habitual.
"Después de ver algo así, no puedo estar satisfecha con actos ordinarios,
¿verdad?"
"Por supuesto que no. ¿No dije que las tratare por igual?"
Empujó a la pequeña Torte hacia abajo. Ella se dio la vuelta en la cama y
sus bonitos y grandes pechos rebotaron. Al tomar sus labios, los ojos de la
noble joven se humedecieron con un encanto que se derretía.
"A Torte le encanta esto. Apretar nuestros cuerpos el uno contra el otro,
fundirnos hasta que ya no podamos distinguir los límites".
"P-Porque... puedo sentirte más... ♥"
Con voz aguda, Torte le rodeó la espalda con sus delgados brazos. El
calor, como de caramelo derretido, se le pegó a la ingle.
Levantó las caderas para alinear sus posiciones. La entrada de Torte era
estrecha, como una pequeña grieta, incluso cuando estaba mojada. Era
una fruta azul inmadura. Lentamente, bajó las caderas, saboreando la
sensación.
"¡Mm, nh-guhh!"
Squish squish
El sonido de su carne separándose era claro. A pesar del doloroso sonido,
la expresión de Torte era de puro éxtasis. Se introdujo lentamente,
aplicando presión con su peso. Esta estimulación lenta y pegajosa era la
mejor manera de hacer sentir a Torte.
¡Slurp... slurp!
"Oh, ah, está dentro de mí... ♥"
Golpeando contra su útero, hizo temblar sus caderas. Aunque no es tan
profunda como Berlina, la estrechez que hace ondular toda la vagina es
única en Torte. El movimiento de los labios de ella tragándose
desesperadamente su gruesa polla también le excitó como hombre.
Cuando retiró la cintura, la vagina se movió como guiándola. Las
profundidades se estrecharon y empujaron la punta hacia fuera, viendo
salir abundantes jugos amorosos. Los movimientos parecían como si cada
pliegue de la vagina tuviera voluntad propia.
Con un sonido aplastante, salió. Una vez más, metió su cintura en Torte.
"Shota, quiero un beso ♥ Yo también quiero un beso ♥"
"Te gusta besar, ¿eh? Muy bien. Abre la boca y saca la lengua".
Obediente, Torte abrió la boca de par en par. La besó, con la intención de
devorar sus labios enteros. La boca de Torte, como un guiso mezclado con
varios fluidos corporales. Metió la lengua y dejó que la saliva fluyera en
ella.
"¡Acabamos de empezar!"
"Oh~ algo aún más asombroso está por llegar. Me va a dar un placer
intenso con profundas embestidas que me convertirán en una mujer. El
placer es abrumador. Aah~"
¡Splash! ¡Squelch! ¡Thump, thump, thump! ¡Splat!
Empujó sus caderas dentro de Éclair con todas sus fuerzas. Incluso desde
atrás, se podía ver su voluptuosa figura sacudiéndose. Sin embargo, el
cuerpo de Éclair permaneció inquebrantable. En lugar de perder la postura,
movió su cuerpo en sincronía con el movimiento de las caderas del hombre,
permitiendo un pistonazo en una dimensión superior.
(¡Esta fuerza es lo que hace especial a Éclair! ¡Aprieta aún más dentro de
ella!)
Aunque las paredes vaginales en sí son blandas como la masa de pan, la
compresión de los músculos es intensa.
Suave pero firme. Esta sensación contradictoria es demasiado estimulante
para la sensible polla. Si se la hubiera introducido a Éclair al principio,
podría haber eyaculado rápidamente.
"Te tocaré los pechos".
"Éclair, ¿qué te parece esto?"
“¿Berlina? ¿Torte? Qué estás... ¡mmm!"
Éclair, que estaba a cuatro patas, hizo que Berlina se deslizara por debajo
de ella y se agarrara a sus pezones erectos. Por otro lado, Torte rodeó a
Éclair por delante y la besó acaloradamente.
"Hmm, bueno, este debería ser el final. Planté mi semilla en los seis, no,
nueve hoyos... "
Su pene se salió y las tres se desplomaron sobre la cama.
Sus bocas, vaginas y anos. Temblaban mientras el semen fluía de cada
uno de sus agujeros. Todos sus cuerpos estaban cubiertos de semen,
apenas quedaba un lugar sin tocar.
"Hahaha... como era de esperar... ese es el límite..."
Llevaban un día entero follando sin parar. Había perdido la cuenta después
de veinte eyaculaciones. Se relajó y se desplomó en la cama con sus
queridas novias.
"Mm.…"
Las novias, que ya deberían haber perdido el conocimiento, se apoyaron
en él. Se confió a su calor y las convirtió en una manta.
"Buenas noches... a todos."
Un cierto calor estaba a punto de nacer en su interior.
...
◆
El tiempo pasó desde entonces. Pasaron días turbulentos, cambiaron las
estaciones y Shota llegó por fin al día del parto de sus novias.
"...No puedo creer que todas den a luz el mismo día. Están demasiado
cerca".
Sólo podía reírse mientras miraba a los tres adorables bebés que tenía en
brazos. Todos cumplían años el mismo día.
"Tendremos que decidirlo con el nacimiento del segundo hijo, ¿no? ♥"
"¿Lo sabías? Parece que el estado de la vagina cambia después de dar a
luz ♥"
"Hehe, nuestra salud es perfecta, Shota... bueno, tú♥"
Mientras las tres sonreían seductoramente, su ingle palpitaba igual que
aquella noche. Incluso como madres, su "feminidad" parecía no verse
afectada.
Agradecimiento
Este volumen llega ustedes gracias al grupo que lo tradujo del japonés a
ingles Sasa Novel y que gracias a ello podemos traducir este volumen al
español.
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