El entorno empresarial:

La empresa no es un ente aislado, sino que interacciona con todo lo que la rodea. Esto es
lo que se conoce como entorno empresarial.

Las empresas no tendrían razón de ser si no hubiera una relación con los clientes o con los
proveedores que les suministran las materias primas. También están afectadas por la
competencia, las leyes que dicte el Gobierno sobre pago de impuestos, el respeto al medio
ambiente... En definitiva, no se puede entender la empresa sin tener en cuenta su
entorno.

Al relacionarse con su entorno se dice que la empresa es un sistema abierto. Es un sistema

porque consta de una serie de elementos interrelacionados, y es abierto porque está en
continua interacción con el exterior.

Sistema empresarial: Conjunto de elementos (subsistemas) relacionados entre sí y con su

entorno, encaminados a cumplir una serie de objetivos.

Son varios los subsistemas que componen el sistema empresarial. Los más importantes
son el de producción, el comercial, el financiero y el de recursos humanos. Todos ellos se
relacionan en mayor o menor medida con el entorno, lo que deberá tenerse en cuenta
para diseñar el proyecto empresarial.

Podemos definir al ENTORNO como el conjunto de elementos formales e informales, de

todo lo que rodea a la empresa, que le afecta o puede afectarle, y sobre el que la dirección
de la misma no tiene en ningún caso capacidad de dominio completo.

La empresa y su entorno turbulento:

La globalización, el progreso tecnológico, la desregulación, etc. generan lo que en el mundo actual
se ha dado en llamar entorno turbulento y en el que la evolución de normas, valores y estilos de
vida, afectan a la actuación de todas las empresas.

El endurecimiento de la competencia a todos los niveles, y el incremento de temas que afectan a la

actividad empresarial, con los grados de incertidumbre que todo esto genera, n os conduce a
hablar de la gestión empresarial en el marco permanente de un entorno turbulento.

Seste entorno implica afrontar continuamente nuevas situaciones, lo que acarrea grandes fracasos
empresariales y éxitos espectaculares, que tienen un común denominador: la actitud y los métodos de
gestión y dirección de sus dirigentes.
 El entorno competitivo
El mercado moderno está definido por la competitividad. Las empresas buscan su cuota en el
mercado de venta. En épocas recesivas se produce una lucha sin cuartel para no perder
cliente.

Los factores que definen el entorno competitivo son:

❖ Cantidad de empresas que componen la oferta.

❖ Movimiento de entradas y salidas de empresas en ese sector.
❖ Existencia de grupos de empresas competidoras con rasgos diferenciados.
❖ Agresividad comercial y publicitaria.
❖ Innovaciones de los productos.

El entorno tecnológico
El progreso de la tecnología condiciona el desarrollo de las empresas.

Los factores que definen el entorno tecnológico son:

❖ Disponibilidad de medios.

❖ Calidad de los productos y servicios.

❖ Precios más bajos por ahorro y costos.

❖ Mejora de la información y transferencia en los mercados.