Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
·2·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Leer y escuchar
leer novelas
Una actividad habitual en primer ciclo
La leyenda
del bicho colorado
de Gustavo Roldán
·3·
Leer y escuchar leer novelas
·4·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Índice
07 Presentación
28 Documentos consultados
29 Apéndice
Biografías de Gustavo Roldán
·5·
Leer y escuchar leer novelas
·6·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Presentación
·7·
Leer y escuchar leer novelas
·8·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Leer novelas
en primer ciclo
A lo largo de toda su escolaridad, los niños pueden acceder a la lectura de novelas a través de la voz del docente:
En el primer ciclo, las situaciones de lectura de novelas se caracterizan fundamentalmente por la mediación del docente
que presta su voz para que los niños accedan a un texto extenso y complejo y que selecciona títulos y autores destina-
dos al público infantil1.
La lectura de novelas se puede desarrollar como una actividad habitual, es decir, como una modalidad de organización
del trabajo didáctico, cuya frecuencia permite familiarizar a los niños con un determinado género y que se sostiene a lo
largo de un período de tiempo determinado2.
Es responsabilidad de la escuela ofrecer un repertorio de títulos y autores de novelas que acompañen a los alumnos en
cada grado y contribuyan a conformar un lector asiduo del género. Esta continuidad en la práctica de lectura de novelas,
–ya sea porque las escuchan leer o las leen por sí mismos– puede resultar propicia para el logro de la autonomía de los
alumnos como lectores literarios, quienes pasan de escuchar leer a leer por sí mismos y de leer novelas elegidas por el
docente a seleccionar según sus propias preferencias (autor, temática, género, etc.).
...Como las antiguas y modernas historias de viajes, en La leyenda del bicho colorado, el lector va conociendo las peri-
pecias de la travesía desde el relato del viajero, que ha sorteado innumerables obstáculos y llega ante un auditorio ávido
de escuchar su historia. Probablemente, Gustavo Roldán se nutrió de muchas obras de la literatura como la Odisea, Los
viajes de Gulliver, Robinson Crusoe, Frankenstein, entre muchas otras...
1
En este documento se sugieren títulos de novelas para leer en primer ciclo.
2
Se puede consultar el DC de primer ciclo para diversas propuestas de actividades habituales de lectura y escritura en Prácticas del Lenguaje de 1er. a
3er. grado, pp. 364-369.
·9·
Leer y escuchar leer novelas
En esta novela, el escritor presenta el relato en cada capítulo a través de extensos títulos que tienen un eco en las cró-
nicas de viajes y en novelas de aventuras como Don Quijote de la Mancha y que contribuyen a generar intriga y expec-
tativas en los lectores.
Los niños podrán conocer las imágenes del bicho y de los animales del monte a través de las ilustraciones de Luis Sca-
fati. En el primer capítulo vemos la ilustración del bicho colorado grande, con el mundo a sus pies dispuesto a recorrerlo
con su atadito de viaje. Avanzamos en el texto y, para poderlo distinguir entre los otros animales, aparece detrás de una
lupa. En otros casos vemos su sombra. Las ilustraciones que presentan a otros personajes lo hacen de una manera
sumamente creativa. En el caso de la víbora la conocemos en el capítulo 5 a través de cómo se la imagina el bicho
colorado, luego aparece la imagen de “Esa cuevita tan linda...” en la que se mete el bicho colorado sin saber a quién
pertenecía y vemos dos ilustraciones de la víbora en todo su esplendor, en una de ellas el bicho colorado está otra vez
detrás de la lupa. Recién en el final del último capítulo el ilustrador decide presentar al pichón de picaflor que dialogó
con el bicho colorado durante todo su relato de viaje. Tal vez porque sea él, con un signo de interrogación en la cabeza,
quien emprenda un viaje “...porque, ¿sabe?, me están entrando unas ganas bárbaras de ir a dar una vuelta al mundo para
averiguar quién hace madurar las sandías”.
En el libro Dragón escrito por Gustavo Roldán e ilustrado, al igual que La leyenda del bicho colorado, por Luis Scafati se
pueden observar otras ilustraciones en un tamaño mayor.
El docente puede recorrer la obra de Roldán con los alumnos y observar, según las características de las obras y sus
ediciones, cuáles de los textos están ilustrados totalmente, cuáles solo las tapas, cuáles no tienen ningún tipo de ilustra-
ción; también puede comparar el mismo texto en distinats ediciones.
Sus obras están expuestas en diversos museos del país y del extranjero.
En Dragón, Primera Sudamericana, 3ª. ed. Buenos Aires, 2003.
Por la brevedad de la novela y el ritmo ágil del relato que se repite con algunas variaciones, es conveniente que la lectura
se desarrolle en un tiempo breve, por ejemplo dedicarle todos los días a leer uno o dos capítulos en clase, de modo que
finalice en menos de dos semanas.
Se podría alternar la lectura del docente con la lectura de los niños, si hubiera en la escuela suficientes ejemplares.
Como parte de la secuencia de lectura, se propone que el docente genere, cada dos o tres capítulos, espacios de inter-
cambio entre los lectores para profundizar la interpretación y confrontar ideas y opiniones sobre los personajes, el relato,
la historia del viaje, las formas de escribir de Roldán, las ilustraciones...
· 10 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Para presentar la lectura, el docente puede buscar datos y otras obras de Roldán. Así introduce la novela como parte de
una producción más amplia y les aporta a los niños información para contextualizar la obra que van leer juntos.
El docente puede:
· Mencionar al autor; informar que es argentino, contemporáneo, que sigue escribiendo, la mayoría de sus relatos
tienen como protagonistas a animales del monte chaqueño donde nació.
· Mostrar imágenes del monte o selva chaqueña y de sus animales.
Sin embargo, no es necesario que se presente exhaustivamente la vida del autor o se estudie sobre la región geográfica
donde transcurre la historia, esto demoraría el inicio de la lectura de la novela. Los alumnos podrían seguir igual la historia
sin esta información o el docente podría proponerla como indagación paralela a la lectura de la obra literaria.
Para orientar el intercambio posterior a la lectura de la novela, se detallan algunas intervenciones docentes específicas
relacionadas con características de la historia y el relato en esta obra.
Sobre la historia
La acciones de los personajes se repiten siguiendo un orden: el protagonista pregunta a otro animal “¿qué hace madurar
las algarrobas?”, éste le propone un juego o le plantea otra pregunta, hay una falta de respuesta a la pregunta inicial,
finalmente el protagonista es llevado por su interlocutor a otro lugar donde tal vez su pregunta pueda ser contestada o
se escapa para continuar el viaje. Al final de la historia, el bicho colorado sigue ignorando la respuesta a su pregunta. Es
el colibrí quién va a retomar la aventura planteándose otra pregunta y planeando otro viaje.
Luego de haber leído al menos dos capítulos, es posible establecer relaciones dentro de la historia. La intervención
docente puede guiar a los alumnos a que descubran estas regularidades y puedan usar este conocimiento para anticipar
lo que sucederá en los capítulos posteriores.
· Presentación de los personajes en cada capítulo a través de la reacción y mirada del protagonista.
Características del protagonista: exageración, astucia, curiosidad.
A medida que se avanza en la lectura, aparecen los distintos animales que encuentra el bicho colorado en su viaje, el
docente puede comentar junto con los alumnos las características de estos personajes y su relación con el prota-
gonista (si lo ayudan, si se enfrentan, si serán como los ve el bicho colorado o si sus particularidades están exageradas).
Es conveniente que registren en sus cuadernos estas características para retomarlas en el comentario de capítulos pos-
teriores o utilizarlas más adelante para escribir sobre los personajes.
· El relato de viaje: cambios del protagonista. Paso del tiempo y cambios en el espacio. En su viaje, el bicho colo-
rado se va al hemisferio norte y conoce animales de esos lugares.
—Me habían cambiado las estrellas. No estaban las Tres Marías, ni las
Siete Cabritas, ni la Cruz del Sur. Había otras estrellas diferentes, pero
de las que yo no conocía... ninguna.
—¿Quién hizo eso?
—No sé qué había pasado. Pero ya les digo, así, yo andaba perdido y
encima muerto de frío. p. 51.
· 11 ·
Leer y escuchar leer novelas
La intervención del docente puede orientar a los alumnos para que reparen en algunas transformaciones de la historia
que pueden pasar inadvertidas para ellos, porque se relacionan con información del mundo que no necesariamente po-
seen. El maestro puede aportar información sucinta sobre los animales que se encuentran con el protagonista, que viven
fuera del monte en otras regiones muy alejadas, por ejemplo el coyote o el quetzal. El hecho de que el bicho colorado
se encuentre con un cielo distinto en el que no reconoce las constelaciones también da una pista sobre la extensión y
la duración del viaje.
· En la historia se alternan dos narradores: uno en tercera persona que abre y cierra el relato y el protagonista que
ha concluido su viaje y cuenta sus propias aventuras. Al ser el protagonista uno de los narradores, el lector sabe
que sobrevivió a todas las peripecias, así que podrá anticipar los resultados de algunas peleas. La historia se
cuenta desde su punto de vista y entonces se exageran las descripciones de los animales que lo enfrentan o de
los lugares, las situaciones de peligro y la supuesta valentía y astucia para resolverlas.
El docente tendrá que intervenir con la relectura de algunos pasajes, focalizar en aspectos del relato que los alumnos no
advierten porque están centrados en la historia. Por ejemplo, para los alumnos puede ser sencillo identificar los perso-
najes y sus acciones, pero sin la intervención del docente no pueden reparar que hay dos voces narrativas diferentes.
El docente interviene para que los alumnos puedan diferenciar las distintas voces (personajes y narradores) que
conforman el relato de esta historia, leyendo con ellos distintos fragmentos donde aparecen diversos narradores, apor-
tando información para ayudar a dilucidar quién es quién en la narración y aclarando que el narrador en tercera persona
no es el autor, sino una voz creada por él para contar la historia.
· 12 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
En esta carta del sapo a los lectores se trata este tema de la autoría.
· El bicho colorado tiene un auditorio dentro de la novela que influye en lo que se cuenta. Hay muchas aventuras
que el protagonista decide no relatar y las resume (viajó mucho más de lo que cuenta, conoció otros animales que
menciona al pasar). La actitud del auditorio, ávido de escuchar las novedades, seguramente estimula al narrador-
protagonista a exagerar su actuación frente a los animales que lo desafiaron.
El docente puede releer estos pasajes para resaltar este aspecto del relato. En otra ocasión, finalizada la lectura, las
historias que no contó el bicho colorado podrán dar lugar a la escritura de los niños3.
· Las formas de decir: dichos y frases hechas. Hay un juego en casi toda la obra acerca de la interpretación de
frases o giros de uso común que el pichón de colibrí no entiende, toma literalmente o confunde con otras pala-
bras. Los niños podrán identificarse con este personaje y tener que buscar ellos también el significado de estas
frases, preguntando a otros mayores.
3
Se puede consultar el apartado siguiente sobre escrituras en torno a la lectura de la novela para algunas sugerencias sobre estas situaciones.
· 13 ·
Leer y escuchar leer novelas
Para analizar estas formas de escritura, el docente puede ir haciendo un listado de las frases y giros a medida que van
apareciendo en el relato, proponerles a los alumnos averiguar su significado y, luego, hacer que lo compartan con el
resto de la clase para volver al texto con esa nueva información, que puede generar otras interpretaciones sobre lo que
se cuenta.
· El inicio del primer capítulo y del último son iguales. El relato parece cíclico, como las estaciones por las que
va pasando el protagonista en su viaje (se fue en un verano y volvió en verano). El narrador en tercera persona
intercala comentarios y descripciones. A través de su voz, se cuenta de manera indirecta qué hace madurar las
algarrobas. Desde el primer capítulo responde a esa pregunta inicial y lo vuelve a reiterar en el capítulo 7.
En el inicio, el lector interpreta como una presentación del lugar la descripción que hace el narrador, pues todavía no
conoce la pregunta que guía el viaje del bicho colorado. Pero, al final, la reiteración tiene otro valor para el conocedor
de la historia, quien podrá interpretar en esa descripción la respuesta que el protagonista seguirá ignorando. El docente
tendrá que ayudar a los niños a recordar cómo comenzaba la historia y a buscar en el libro las semejanzas y diferencias
entre el primer y el último capítulo:
¿Qué diferencias hay? ¿Qué información nueva se aporta? ¿Se responde la pregunta el bicho? ¿Qué hará madurar las
algarrobas? ¿Es el canto de las chicharras o es la estación del año?
Tal vez el docente tenga que dar información a los niños sobre la relación entre el canto de las chicharras y la época del
año en la que sucede, para poder ayudarlos a interpretar qué hace madurar las algarrobas.
Las propuestas de escritura colaboran en la interpretación y les permiten a los niños seguir y profundizar la lectura. En la
planificación de la actividad de lectura literaria, representan un equilibrio entre las situaciones de lectura y de escritura.
Las actividades de escritura, que se presentan a continuación, tienen distinto grado de complejidad. Algunas de ellas,
tales como la elaboración de un nuevo capítulo de la novela, será conveniente realizarlas por dictado al docente. Otras,
· 14 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
como la toma de notas de características de los personajes o frases y dichos que aparecen en el texto u otras anotaciones
relevantes para los lectores, pueden llevarlas a cabo los alumnos por sí mismos (en parejas, en tríos o individualmente).
Es condición didáctica para la realización de cualquiera de estas escrituras que los alumnos estén familiarizados con la
novela.
· Escritura de posibles respuestas a la pregunta ¿quién hace madurar las algarrobas? o ampliaciones de la que se
da en el texto (p. 9 y p.73).
· Toma de notas de los personajes que van apareciendo, de sus formas de reaccionar, rasgos, destino en la obra
y los cambios que sufren.
· Escritura de un diálogo entre el bicho colorado y otro animal que no aparezca en el texto teniendo en cuenta:
– La descripción del animal.
– Sus costumbres.
– El reto o el desafío al que somete al bicho colorado.
– Cómo el bicho colorado supera el reto y se traslada a otro lugar.
· Invención de un nuevo capítulo del viaje del bicho colorado a partir de información que el personaje alude pero
no cuenta, como con los viajes que hizo en conejo, en ardilla y en zorro (cap. 5, p. 50).
En este caso, para contribuir a la planificación de este texto, es posible escribir primero entre todos posibles títulos que
anticipen la historia del encuentro con esos otros animales, de acuerdo con la forma que tienen en la novela, ya que son
títulos tan extensos que resumen el argumento:
DONDE SE CUENTA…
AQUÍ SE RELATA EL ENCUENTRO ENTRE…Y…
CUANDO FINALMENTE ENCUENTRA A…
En la escritura de este capítulo se puede utilizar el diálogo previamente producido, vinculándolo con la narración.
· Escritura del inicio de “La leyenda del pichón de picaflor” en la que el pichón sale a recorrer el mundo para ave-
riguar quién hace madurar las sandías.
· Elaboración de una galería de personajes para dar a conocer la novela y el autor a otros alumnos de la escuela.
Las tomas de notas que los alumnos realizaron durante la lectura de la novela pueden servir como base para
elaborar los retratos de los personajes.
· 15 ·
Leer y escuchar leer novelas
Seguir la obra
de un autor: a propósito
de Gustavo Roldán
Para los docentes y alumnos que se hayan entusiasmado por las aventuras y por el viaje del bicho colorado en el monte
chaqueño, es posible continuar disfrutando de las historias de estos personajes a través de la lectura de otros textos del
mismo autor.
Gustavo Roldán ha creado con sus libros un mundo plagado de seres entrañables: el sapo y sus cuentos, las historias y
peleas sin fin del piojo, los avatares de los exóticos elefantes en el Chaco, o lo que sienten y les sucede al tatú, al coatí,
al mono, a la pulga... y a otros animales del monte chaqueño.
Como se señala en el Documento de Actualización Curricular N.° 4 (GCABA, 1996), seguir la obra de un autor es un
comportamiento social, una práctica habitual de los lectores literarios, quienes deciden leer muchas obras de un mismo
autor o eligen qué seguir leyendo basándose en el autor. Proponer esta secuencia de actividades ayudaría a incluir a los
alumnos en prácticas sociales que se dan fuera de la escuela, a promover el conocimiento de autores y a ampliar sus
repertorios de lecturas y modos de leer.
Asimismo, el seguimiento de la obra de un autor tiene un valor didáctico, pues supone la lectura de muchos textos, su
comparación, el reconocimiento de recursos que aparecen en todos, o que el autor utiliza sólo en algunos de estos, la
consideración de las temáticas que aborda en diferentes momentos de su obra, la posibilidad de establecer relaciones
entre sus textos y textos de otros autores, etcétera.
De acuerdo con la propuesta curricular de Prácticas del Lenguaje, se espera que los alumnos, desde primer ciclo, tengan
oportunidades de leer y escuchar leer con frecuencia obras literarias y se adentren en propuestas de lectura literaria de
calidad, de modo que puedan crecer como lectores estéticos y ajustar sus interpretaciones a partir de conocimientos
del género y del autor.
· 16 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
interpretación.
Evocar otros textos a partir de lo leído.
Interpretar a partir de lo que se sabe de otro texto.
pp. 372-373.
Para llevar a cabo el seguimiento de la obra de Roldán, el docente deberá asegurarse la provisión de algunos libros del
autor, al menos 4 ó 5, que puedan estar disponibles para el grado durante un mes, al menos. De modo que, además de
la lectura del docente, los alumnos puedan llevarse dos o más libros para leer o releer por sí mismos.
Para profundizar en la obra de un autor y que los alumnos puedan volver sobre lo leído, es preciso organizar un momento
de la semana dedicado al seguimiento y sostenerlo por cierto tiempo, en este caso teniendo al menos 5 ó 6 sesiones en
las que se alterna la lectura, la escritura e intercambio oral.
Otras situaciones de lectura, escritura y oralidad que acompañan a la lectura de las obras
El seguimiento de la obra de un autor no se agota en la lectura de sus obras, es una secuencia propicia para leer textos
biográficos del autor y conocer otros autores relacionados.
Además, por un lado, los comentarios antes y después de las lecturas, las recomendaciones y la confrontación de inter-
pretaciones son prácticas de la oralidad que apoyan el seguimiento de la obra.
Por el otro, también la escritura es una práctica que ayuda en el seguimiento. Por ejemplo: registrando obras y persona-
jes, anotando datos sobre el autor, comentando por escrito lo que se leyó, caracterizando los personajes, las historias y
el estilo del autor, recomendando y explorando formas creativas de escritura a la manera del autor.
De modo que, en la planificación de la secuencia, el docente podrá incluir situaciones de intercambio oral y escritura,
por ejemplo previendo tiempo para los comentarios y que los alumnos tengan distintas maneras de registrar lo que van
leyendo en hojas, fichas, afiches y en el cuaderno.
· 17 ·
Leer y escuchar leer novelas
El docente les propone a los alumnos conocer otros de los libros de Gustavo Roldán que los alumnos conocen por los
títulos, porque fueron presentados en la secuencia de lectura de la novela.
Según las posibilidades de la escuela, se podría presentar los libros disponibles a partir de:
· La lectura de catálogos y reseñas de editoriales.
· La lectura exploratoria de tapas y contratapas en una mesa de libros de la biblioteca
(organizada en el aula o en la biblioteca).
· La inclusión en la biblioteca del aula de libros de Roldán.
En todos los casos, los alumnos tendrán que leer para distinguir cuáles son las obras del autor, identificar títulos conoci-
dos y algunos nuevos, y conocer las propuestas de distintas editoriales que tienen libros del autor y de otros autores.
A medida que los niños van leyendo, el docente promueve una discusión sobre cuáles son los libros de Roldán, los
títulos, los posibles temas.
De la discusión, el docente va anotando en un afiche los libros del autor. Luego, los alumnos podrían pasar la lista al
cuaderno o a una hoja o ficha de seguimiento del autor.
A esa lista se podrá volver a medida que se lee y discute sobre las obras, para marcar las leídas, para señalar semejanzas
y diferencias, para mirar al final del seguimiento y advertir cuánto se leyó y se conoce sobre el autor.
2. Lectura por parte del docente de otra obra de Roldán previamente elegida por el grupo
De los libros que están disponibles en el aula para hacer el seguimiento, el docente selecciona aquellos cuentos que lee-
rá a sus alumnos y sobre los que se harán intercambios entre todos y aquellos que los alumnos leerán por sí mismos.
La situación de lectura en voz alta por parte del docente4 supone crear condiciones para que todos los niños puedan
seguir esa lectura, sumergirse en la obra y conocer lo que dice el texto, por eso el docente deberá procurar:
· Retomar que se trata de un cuento de Roldán, autor que los alumnos ya conocen por la lectura de la novela
La leyenda del bicho colorado y en qué libro aparece de los que fueron listados para leer.
· Durante la lectura, variar el tono de voz para indicar cambios de personaje, transmitir diferentes emociones y
climas, formas de hablar de los distintos personajes del monte.
· Después de la lectura, quedarse en silencio durante unos segundos para que todos puedan disfrutar del clima
creado y para facilitar la generación de comentarios espontáneos de los alumnos.
· Preguntar acerca de los sentimientos que haya despertado la historia, sobre algún fragmento y/o personaje en
particular y comunicar las propias impresiones como lector.
· Escuchar los comentarios de los chicos, abrir a la opinión de los demás, recuperar diferentes interpretaciones
respecto de una misma cuestión y devolverlas al grupo destacando que son opciones diferentes, que se plantean
para profundizar el intercambio.
· Releer para disfrutar de un pasaje que ha sido elegido como particularmente hermoso, divertido, romántico,
triste, etc. o para precisar la interpretación de un pasaje difícil o dirimir sobre aquellas que reflejan diferencias de
opinión.
Estas son algunas sugerencias de cuentos e intervenciones específicas que el docente puede realizar para esta situación
de lectura de cuentos de Roldán mediada por su voz:
Sapo en Buenos Aires. Los cuentos del sapo en Buenos Aires pueden aportarles a los niños una mirada diferente de la
Ciudad. El sapo describe los objetos, las personas y los paisajes urbanos como él los ve y los entiende. Los cuentos de
este libro son una ocasión propicia para conocer este personaje tan querido para el autor, narrador de muchas de las
historias, confrontar su forma de ver con la de los niños y discutir acerca de cómo los cuentos nos pueden brindar una
nueva manera de mirar lo conocido.
4
Estas son intervenciones generales relacionadas con esta situación de lectura mediada que han sido desarrolladas en otros documentos curriculares:
Documento de Actualización Curricular N.° 2, pp. 18-21
Documento de Desarrollo Curricular “Yo leo, tú lees, él lee”, Capítulo 1 “El maestro lee cuentos”, pp. 15-34
· 18 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Cuentos de Dragón5. Roldán incursionó en las historias de estos personajes míticos que aterran e intrigan a niños y a
grandes desde hace miles de años. El docente puede leer estas historias de dragones y proponerles a los niños compa-
rarlos con los otros personajes o con dragones conocidos en otras historias. Por otra parte, también se pueden observar
y comparar las ilustraciones realizadas por Luis Scafati en este texto y en La leyenda del bicho colorado.
“Nadie es más grande que su sombra” (del libro Como si el ruido pudiera molestar) es otra historia de dragones desde
el relato del sapo, que cuenta una formidable pelea que tuvo con estos animales. Los niños pueden encontrar en las
descripciones del sapo lo que saben sobre los dragones y discutir sobre cómo los vence a pesar de que todas las posi-
bilidades estaban en su contra.
“La noche del elefante”6. ¿En el Chaco hay elefantes? El autor afirma que sí, e incluso se saca una foto junto a uno. Para
apoyar su creencia, escribe un libro sobre historias de elefantes en el monte. Entre ellas, el docente podría compartir con
los alumnos el cuento que explica cómo los elefantes llegaron al monte, esa noche en que decidieron escaparse del circo
y recuperar su libertad. En este cuento se va describiendo “El impenetrable” chaqueño a medida que los elefantes se van
adentrando, a través de imágenes y metáforas, así el autor busca mostrar a sus lectores su mirada sobre esos lugares
donde apenas ha llegado el hombre y donde los personajes van a buscar refugio. El docente puede con la relectura de
algunos pasajes descriptivos del cuento hacer notar a los alumnos estos recursos y discutir sobre el efecto que producen
en ellos como lectores literarios.
“Cada cual se divierte como puede”. En este cuento al sapo no se le ocurren historias que contar, ni siquiera mentiras.
Pero con ayuda del piojo se va creando una pelea formidable del sapo con muchas víboras. En los comentarios poste-
riores al cuento es posible volver para discutir cómo se inventa esta historia, qué rol tiene el auditorio en lo que cuenta el
sapo y qué puede significar el título que se repite en boca del sapo al final del cuento.
“Como si el ruido pudiera molestar”7, del libro que lleva el mismo nombre (Ed. Norma) y “El tamaño del miedo”, así como
“Un monte para vivir” (de Cada cual se divierte como puede) presentan una visión poética y entrañable de los animales
del monte. Podrían generar interesantes discusiones entre lectores sobre grandes temas como la muerte, los miedos, la
opresión de la libertad
Al finalizar los intercambios, el docente puede proponer escrituras que conserven hallazgos y conversaciones sobre lo
leído y que sirvan de insumo para las rondas de lectores, cuando se comente la lectura que los alumnos hagan por sí
mismos. Así, se podrá volver sobre temas que se reiteren y comparar historias y personajes.
La lectura de los alumnos por sí mismos de los libros de Roldán, en primer ciclo, apunta a que los niños se animen a
emprender la lectura de un autor, historias y personajes conocidos. Así, es una condición para proponerla que los alum-
nos hayan escuchado leer y comentado algunos cuentos del autor y el docente siga leyendo mientras los alumnos leen
individualmente o en parejas otros cuentos.
Como marco para esta lectura, el docente promueve la anticipación de las historias, los personajes y los posibles des-
enlaces.
· Una historia más del piojo. El piojo, un personaje de “pelea” sale al monte y sin duda se enfrentará a otros personajes,
no importa cuán grandes y fieros sean: el tigre, el lobo, la serpiente, etc. nada amedrenta al piojo. Además, el piojo le
gusta mejorar sus historias y exagerarlas. ¿Qué le pasará al piojo en esta nueva aventura?
· Otros relatos del sapo. El sapo es el narrador por excelencia, dueño de la sabiduría que le da la experiencia y gran
contador de cuentos. ¿Qué nueva historia podrá contar el sapo? ¿Habrá personajes conocidos (los bichos del monte) u
otros nuevos (dragones)?
· Historias de elefantes. ¿Hay elefantes en el Chaco? Si una noche estos exóticos animales llegaron desde un circo y se
adentraron en el “Impenetrable”. ¿Qué historias podrá generar la presencia de estos enormes animales? ¿Se imaginan
la pelea del piojo y un elefante?
5
Disponible en Internet, con permiso de autor, en la Revista Virtual Imaginaria: http://www.imaginaria.com.ar/02/3/roldan4.htm
6
Disponible en Internet, con permiso del autor, en: http://www.ebicentenario.org.ar/documentos/mat_lengua/La%20noche%20del%20elefante.pdf
7
Disponible en Internet, con permiso de autor, en la Revista Virtual Imaginaria: http://www.imaginaria.com.ar/02/3/roldan5.htm
· 19 ·
Leer y escuchar leer novelas
La propuesta de los intercambios entre lectores de los cuentos que los alumnos lean por sí mismos se centra en la posi-
bilidad de compartir nuevas historias, comparar temas y personajes y expandir el conocimiento de toda la clase sobre las
preferencias y modos de escribir del autor. No se trata de comprobar que los alumnos han leído, sino de que se genere
un genuino intercambio entre lectores de Gustavo Roldán. El docente que conoce la mayoría de las obras actuará como
moderador de los intercambios y como un lector más:
· Propone temas para comentar: ¿Quién quiere contar otra historia del piojo?
· Promueve la comparación entre obras: En estos dos libros, ¿el protagonista es el sapo? ¿Son iguales las histo-
rias que cuenta? ¿Aparecen los mismos personajes? ¿Aparece en otras obras las frases y las bromas que regis-
tramos durante la lectura de los otros cuentos? ¿En cuáles? Voy a anotar lo nuevo que aparece para completar
nuestras notas.
· Recuerda historias leídas entre todos y las relaciona con las nuevas: ¿Se acuerdan que los elefantes se escapa-
ron del circo? ¿Qué les sucede después en otros cuentos?
· Comenta sus impresiones como lector: Me gusta la manera que tiene Roldán de presentar sus historias. Escu-
chen cómo comienza este cuento que leímos:
¿Ustedes se dieron cuenta de cómo empiezan los cuentos que leyeron? ¿En sus cuentos hay descripciones del monte,
se presenta en seguida el problema de los personajes? ¿Los ayuda esa descripción a conocer el monte o a saber qué va
a pasar en el cuento?
Si en las rondas los alumnos se animan a comentar las historias que leyeron, escuchan lo que interpretaron sus compa-
ñeros, vuelven a leer para comparar algún aspecto del relato y conocen otras obras del autor, los propósitos de estos
intercambios han sido cumplidos.
Como parte del seguimiento se les puede proponer a los alumnos escribir una biografía del autor para dar a conocer su
vida y su obra en la escuela.
Para poder escribir sobre el autor, se les propone situaciones de lectura mediada y luego por sí mismos de textos bio-
gráficos8 sobre Gustavo Roldán:
8
Estos textos están disponibles en Internet en:
- Las audiotecas del GCABA en las que se publican biografías y entrevistas a autores: http://www.buenosaires.gov.ar/areas/com_social/audiovideoteca/
literatura/roldan_bio2_es.php
- El sitio de la revista virtual Imaginaria: www.imaginaria.com.ar
- Otros sitios educativos como: http://www.educared.org.ar/galeriadeautores/roldan/
En el APÉNDICE, al final del documento se presentan unas breves biografías de Roldán.
· 20 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Se propone que los alumnos escuchen leer biografías de Roldán, tomen notas de manera colectiva, vuelvan a leer los
textos biográficos y completen las notas por sí mismos (en parejas).
La selección que el docente haga de los textos biográficos resulta esencial para poder llevar acabo estas situaciones de
lectura y escritura. El docente deberá cuidar que los textos tengan distinta manera de presentar la información y datos
diferentes sobre Roldán. Así, por un lado, los alumnos van a poder conocer distintos datos sobre la vida del autor y, por
el otro, se justifica la segunda lectura de biografías y es posible tomar nota de datos nuevos sobre su vida y su obra.
El docente comienza leyendo una biografía de Roldán. Es conveniente elegir para leer una biografía más o menos ex-
tensa y completa del autor.
Mientras lee o después de leer, el docente puede recoger información sobre el biografiado completando junto con sus
alumnos un cuadro como éste:
VIDA OBRA
Este cuadro, que puede quedar en un afiche o en el cuaderno de los alumnos, servirá de base para completar informa-
ción a partir de la lectura de otros textos.
En clases posteriores, el docente puede proponer a los alumnos leer por sí mismos otros textos sobre la vida y la obra
de Roldán. En parejas o en grupos de no más de tres niños, se organiza esta segunda situación de lectura.
En primer lugar, se discute sobre los datos que les interesa conocer acerca de Gustavo Roldán y lo que esperan encon-
trar en un texto que cuenta sobre su vida y su obra como el que ya leyeron. El docente anota en el pizarrón o en un afiche
esas anticipaciones para retomar después de la lectura: datos sobre su familia, sus obras, premios, intereses, relación
con el monte chaqueño, sobre lo que opina de sus personajes y temáticas, etcétera.
Luego, los alumnos leen buscando nuevos datos sobre el autor. Se comenta lo que leyeron y aquellas partes del texto
cuyos datos pueden resultar poco familiares para los alumnos. A partir de lo que se anticipó es posible armar entre todos
un punteo de los datos interesantes que se podrían registrar de esa biografía.
El docente les propone a los alumnos anotar esos datos para tener a mano cuando lean otro texto y finalmente en el
momento en que escriban la biografía. Como es una situación nueva para los niños es conveniente orientar el registro de
datos y dar tiempo para que puedan volver al texto para encontrar esos datos, subrayen y copien los que les parezcan
pertinentes, Para ello, en las discusiones posteriores a la lectura el docente pone explícitamente en discusión qué puede
ser importante saber sobre la biografía de Roldán.
Se trata de reflexionar:
· Sobre los datos centrales de una biografía: datos de la vida del biografiado (nacimiento, familia), su origen, sus
estudios, etc.
· 21 ·
Leer y escuchar leer novelas
· Sobre el hecho de que en la biografía siempre hay un recorte de información en función de una pregunta central:
· ¿Por qué vale la pena escribir sobre la vida de esta persona? ¿Por qué es relevante para ellos y para otros lecto-
res conocer sobre algunos datos de la vida? ¿si es así, cuáles?: datos sobre su relación con el monte chaqueño,
sobre la escritura de los cuentos que lo hicieron famoso o sobre los autores que lo inspiran...
Van a decidir si completan la biografía con otros datos de su vida personal y profesional:
· ¿Escribió sólo cuentos para niños? ¿Qué más podemos decir sobre el autor que nos ayude a hacerlos conocer
mejor? ¿Conocemos sus anhelos, lo que lo movía a escribir? ¿Algunos sucesos de su vida se reflejan en su obra?
Van discutir cómo anotan las fechas y cuáles pueden ser más importante registrar y cuáles no tanto.
De la discusión previa a la lectura sobre lo que les gustaría saber y de estos comentarios sobre lo que saben después de
leer y podría ser de interés para otros lectores, se establecen los datos importantes para notar.
La escritura de las notas podría ser en pareja o de a tres, cada miembro del grupo tendría una tarea:
· Buscar datos a partir de los temas discutidos.
· Escribirlos en la nota.
· Revisar mientras buscan o escriben, o de manera diferida, que sea pertinente lo que se está registrando y esté
escrito de manera legible para poder volver a utilizar las notas cuando lean otra biografía o las usen para escribir
sobre Roldán.
Al final, los alumnos se podrían pasar las notas entre los grupos para revisar si se entiende lo que el otro grupo escribió
o hay que sugerir volver a escribir o completar el texto.
Una posibilidad es pasar entre todos las notas en un afiche para que quede disponible como ayuda para planificar el
texto biográfico. A partir del afiche, los alumnos podrían revisar por sí mismos sus notas, chequear la información ano-
tada y completarlas. Y en última instancia, fijarse si escribieron correctamente algunas palabras: uso de mayúsculas en
nombres propios, ortografía de palabras conocidas de uso frecuente y aquellas que corresponden a algunas restriccio-
nes básicas del sistema de escritura.
En un momento del seguimiento, después de que los alumnos leyeron y comentaron varias obras y anotaron datos sobre
la vida y la obra de Roldán, el docente les propone a los alumnos que le dicten la biografía del autor con la idea de pro-
mocionar a través de ese texto al autor en la escuela: en una cartelera, en la biblioteca, en una presentación.
Para poder participar en el dictado, los alumnos cuentan con las notas registradas y el punteo de lo que no puede faltar
en una biografía. De modo que, ya conocen la organización del texto y su posible contenido por haber leído y escrito
sobre éstos.
Planificar el texto:
Es posible usar los registros de lectura para anotar en una lista (sin escribir el texto definitivo) qué datos se van a incluir
y en qué orden.
Por ejemplo:
· 22 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Empezar a escribir la biografía al dictado supone para los niños adecuar su registro oral a las formas de escribir esos
textos y poder sostener la coherencia en un texto extenso y complejo. Entonces, a lo largo de toda la situación de dic-
tado el docente interviene para que los alumnos dicten “como se escribe”, señalando si pone así tal cual como le están
diciendo o habría que modificarlo para la escritura9, vuelve al plan y a las notas para no perder el hilo del texto y habilita
la palabra de todos, estimulando a que participen niños que por sí mismos no se hacen escuchar.
Comenzar y cerrar una biografía no es una tarea sencilla. Estos textos narrativos no empiezan con “Había una vez”.
¿Cómo empezar el texto? Podría haber distintas posibilidades. En la primera versión el docente puede anotar las posi-
bilidades que luego se van a revisar.
Por ejemplo:
Luego, en el desarrollo el desafío es organizar temporalmente la información marcando claramente el paso del tiempo y
también causalmente, señalando motivaciones, intereses y sucesos en la vida de Roldán que lo hayan llevado a tomar
determinadas decisiones, a escribir, a viajar, a estudiar, etcétera.
En la primera versión, el docente anota distintas posibilidades, se preocupa por la coherencia global del texto: que no
falten datos, que sean pertinentes e interesantes para contar a otros la biografía de Roldán, pero no por cuestiones de
cohesión del texto, que se revisarán posteriormente.
Revisar el texto:
En otra sesión de escritura el docente les propone a los niños revisar en la biografía aspectos del contenido y de la forma
de presentarlo.
¿Están todos los datos que queríamos poner? ¿Pusimos correctamente las fechas y lugares? ¿Queda claro para un
lector que no conoce su vida el paso del tiempo y por qué Roldán hace determinadas cosas?
Luego, puede pasar el texto en computadora y darles a los alumnos una copia cada dos para revisar la cohesión del
texto11.
9
En muchos casos, cuando los niños no tienen frecuentación en la situación de escritura al dictado, comentan qué podría ir en el texto y le dicen al
docente qué incluir: “Poné que Roldán era de Saénz Peña”, el docente puede escribir en un primer momento como le dictan y luego revisar junto con los
alumnos estas partes del texto en las que se nota el dictado, así el docente no reformula solo, sin la discusión y el aporte de los alumnos, lo que estos
le dictan transcribiendo por el sentido en el lenguaje que se escribe lo que estos le están queriendo decir.
10
Para profundizar en los contenidos involucrados en esta situación, se puede consultar el Diseño Curricular de Prácticas del Lenguaje en primer ciclo:
2. Prácticas de la escritura, 2.3. Quehaceres del escritor y adquisición del sistema de escritura, Dictar, pp. 399-400.
11
Para determinar qué se puede focalizar en las revisiones, se puede consultar el DC de Prácticas del Lenguaje, primer ciclo, 2. Prácticas de escritura,
2.2. Quehaceres del escritor, estrategias discursivas y recursos lingüísticos, pp. 393-397.
· 23 ·
Leer y escuchar leer novelas
Se discuten las distintas revisiones y se acuerdan posibles cambios, expansiones, aclaraciones, sustituciones, achica-
mientos. El docente pasa la nueva versión en computadora y la lee por última vez a los alumnos para acordar con ellos
que ese es el texto definitivo.
Luego, se discutirá cómo se presenta a otros alumnos y docentes de la escuela. Por ejemplo:
Las distintas maneras de publicar el texto suponen tomar decisiones sobre la especialización y organización del texto,
tipo de papel, formato, recursos gráficos, ilustraciones, fotografías, dónde ubicar los avisos o distribuir los folletos, entre
otras decisiones que deberán tomar los alumnos como escritores12.
El seguimiento de la obra de un autor no se agota en la lectura única de sus obras. Por lo tanto, no habría que pensar
que seguir un autor priva a los alumnos de leer otras obras. Por un lado, en la biblioteca del aula o de la escuela pueden
circular otras ofertas variadas y seleccionadas por los alumnos para leer o escuchar leer. Por otro, dentro de la secuencia
es enriquecedor para las interpretaciones y los intercambios conocer otras obras de autores relacionados. En este caso
se sugieren obras y autores que el propio Roldán reconoce como inspiración y como sus maestros.
Por ejemplo, la historia del “Hijo del elefante”13 de Rudyard Kipling. Este cuento transcurre en la sabana africana, en las
cercanías del gran río Limpopo, en el que un día un elefantito decide emprender un viaje por que quiere saber qué comen
los cocodrilos. Esta pregunta lo llevará a conocer muchos animales y volver transformado de su viaje. Kipling escribió
esta y otras historias sobre animales para su hija y las recopiló en un libro plagado de historias de viajes, muchos de
los cuales buscan responder a extraños porqués de la naturaleza, como es el caso de este cuento en el que se da una
respuesta poética a la cuestión de por qué los elefantes tienen la trompa larga. Los encuentros, las preguntas, las peleas,
las descripciones de los lugares del viaje podrán ser objeto de discusión y confrontación entre los lectores de Roldán.
Así, los alumnos podrán comprobar por su propia experiencia de lectura cómo Roldán retoma motivos e historias de
otros relatos.
Otras historias famosas de la selva son los Cuentos de la selva de Horacio Quiroga. En estos relatos también se cuenta
para los niños variadas historias de animales. El estilo de Quiroga puede llamar la atención a los alumnos acostumbrados
a los cuentos de Roldán. En los cuentos de la selva el narrador en tercera persona solo cede su voz para hacer dialogar
a los personajes, se desarrolla menos el humor, el doble sentido y los giros del habla cotidiana. Por otra parte, la historia
se narra más en detalle y las peripecias de los personajes aparecen contadas en toda su complejidad, como por ejemplo,
el plan que hace el cazador y el loro pelado para vengarse del tigre o cómo hicieron los flamencos para conseguir sus
medias y qué los motivó a hacerlo. Los alumnos pueden apreciar a través de la lectura del docente y de los comentarios
y relecturas posteriores algunas de estas diferencias de formas de contar historias sobre animales en la selva.
La lectura de cuentos del sapo y otros cuentos u obras de teatro de Javier Villafañe también podrán ser vinculadas con
las obras de Roldán. Don sapo no es solo un personaje entrañable de este autor, tal vez Gustavo Roldán se lo pidió pres-
tado a otro gran autor argentino: Javier Villafañe. Como se explica en esta recomendación del libro de Villafañe “Sueños
del sapo. Cuentos y leyendas” es posible establecer muchos puntos de encuentro en las maneras en que ambos autores
dan vida a este personaje popular:
12
En las prácticas de escritura se contempla en el Diseño Curricular de Prácticas del Lenguaje desde primer ciclo, contenidos relativos a la edición de
los textos como parte del proceso de escritura (p. 392).
13
Disponible en Internet en: http://www.ebicentenario.org.ar/documentos/mat_lengua/El%20hijo%20del%20elefante.pdf
· 24 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
“La tijera que cortaba la tierra” nos atrapa desde el delirio poético que
promete el título; a la manera de un relato mítico, una simple tijera en
manos de una mujer muy hermosa es capaz de crearlo todo.
El cuento del sapo que sueña muy poéticamente con ser árbol, río,
caballo, viento... y finalmente descubre lo maravilloso que es soñar
con ser sapo, es el que da nombre al volumen. Las caricaturescas
ilustraciones de Tabaré acentúan el ingrediente humorístico ya
presente en estos cuentos; va como ejemplo de esto último las dos
versiones del popular pícaro Pedro Urdemales: “La olla mágica”
y “El árbol de la fortuna”.
· 25 ·
Leer y escuchar leer novelas
Posibles continuaciones del seguimiento de la obra de un autor. Escribir como lector para compartir la obra con
otros.
Seguir a través de la lectura y los intercambios la obra de un autor pueden dar oportunidad y sentido para que los
alumnos participen en proyectos de escritura ficcional y no ficcional.
Por ejemplo:
· Escribir recomendaciones de obras Roldán y preparar la lectura de obras del autor para un catálogo.
· Escribir a la “manera de” Gustavo Roldán y hacer una antología de cuentos.
· 26 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
· 27 ·
Leer y escuchar leer novelas
DOCUMENTOS CONSULTADOS
M. E. Cuter, S. Lobello y M. Torres; rev. crítica: D. Lerner. Aportes para el desarrollo curricular: Leer y escribir en el
Primer Ciclo. Yo leo, tú lees, él lee. (2001)
Coordinadora: D. Lerner, M. Castedo, M. Elena Cuter, Silvia Lobello, Liliana Lotito, Nelda Natali, María Elena
Rodríguez, Mirta Torres, Hilda Weitzman de Levy. Diseño Curricular, Primer Ciclo de la Escuela Primaria, Prácticas del
Lenguaje. (2004)
A. Zaina. Diseño Curricular, Nivel Inicial, Niños de 4 y 5 años, Prácticas del Lenguaje, Literatura. (2000)
D. Lerner, H. Levy, L. Lotito, E. Lorente, S. Lobello y N. Natali. Documentos de Actualización Curricular N.° 2.
(en el Área de Lengua.) (1996)
D. Lerner, L. Lotito, E. Lorente, H. Levy, S. Lobello y N. Natali. Documento de Actualización Curricular N.º4.
(en el Área de Lengua.) (1997)
www.revistababar.com
www.cuatrogatos.org
www.educared.org.ar
www.imaginaria.com.ar
www.lecturayvida.org.ar
· 28 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
APÉNDICE
· 29 ·
Leer y escuchar leer novelas
· 30 ·
Ministerio de Educación GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
· 31 ·