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GENERAL.
Diseñar un plan de inversión para la creación y consolidación de la empresa
INFUSIONA-TE “CASA DE TE “ destinada a la producción y comercialización de
productos a base de infusiones de hierbas aromáticas , en la cuidad de Ilo , mediante el
estudio de las necesidades de mercado y situación económica de la localidad para
establecer la viabilidad de desarrollo del proyecto.
ESPECÍFICOS.
Realizar un estudio de mercadeo, para establecer el plan de marketing
Desarrollar un estudio administrativo definiendo la misión, visión, organigrama,
descripción de cargos y matriz D.O.F.A, con el fin de plantear la estructura de
una empresa productora y comercializadora de infusiones aromáticas .
Realizar un estudio financiero que permita determinar y evaluar la inversión
necesaria para la creación de una empresa productora y comercializadora de
infusiones aromáticas .
Efectuar la evaluación financiera y social del proyecto.
ANTECEDENTES
HISTORIA DEL TÉ
Actualmente el té es la segunda bebida más consumida en el mundo después del agua.
Se cree que se consumen unas 15.000 tazas de té por segundo. Su historia se remonta a
casi 5000 años.
El té tiene su origen en Oriente, donde era valorado por su efecto de bienestar y sus
propiedades medicinales. Más tarde se le consideró un elemento de lujo y distinción,
llegando a ser identificado como un factor de buen gusto y refinamiento. En la
actualidad, el té es reconocido en todo el mundo como medio de placer y deleite.
Existen muchas leyendas y mitos en torno al descubrimiento del té. La más difundida es
la del Emperador chino Shen Nong, alrededor del año 2737 a. de C. Se relata que se
quedó dormido bajo un árbol y durante su sueño se levantó una ligera brisa, varias hojas
de un árbol se desprendieron y se posaron en el agua hirviendo. Fue así como nació el
té.
Otra versión es la japonesa, que cuenta que la costumbre de beber té fue traída desde
India por el Principe Bodhidharma, el fundador del budismo zen.
La palabra Té proviene del chino Cha, que escrita está formada por los ideogramas
correspondientes a "hierba", "hombre sobre la tierra" y "árbol".
Antes de ser llamado “Tea” en inglés, las hojas de té tenían nombres muy variados y
diferentes pronunciaciones en distintas lenguas chinas. El nombre más utilizado era
“Chá” del chino mandarín, pero el nombre inglés tendría origen del dialecto de Amoy
hablado en la costa central de China y en el sureste asiático pronunciado “Te”. Este
nombre se hizo “Thee” en holandés ya que ellos fueron los primeros en tener contacto
con los comerciantes chinos del puerto de Amoy para la importación de té a Europa.
Luego “Thee” paso a ser “Tee” en Alemán y “Tea” en inglés.
En las lenguas española, italiana, danesa, noruega, sueca y húngara se escribe “Té”, en
francés “Thé”, en finlandés “Tee”, en letón “Teja”, en coreano “Ta”, en tamil “Tey”, en
cingalés “Thay” y en la lengua científica “Thea”. El mandarín “Chá” se hizo “Ch’a” en
cantonés y pasó al portugués como “Cha” (en la época del comercio portugués con la
ciudad de Macao, de lengua cantonesa) y después al persa, japonés e hindú, pasando a
“Shai” en árabe, “Ja” en tibetano, “Chay” en turco y “Chai” en ruso.
Como muchas de las cosas que nos rodean, las casas de té tienen su origen en una
práctica oriental, concretamente en una costumbre japonesa conocida con el nombre de
Ceremonia del té (Cha-no-yu). Se trata de una tradición que se originó en el siglo XIII,
cuando los samurais japoneses comenzaron a tomar matcha, un tipo de té verde que se
extraía de la planta del té negro. Para conocer los orígenes y la historia de las casas del
té hemos de conocer la tradición japonesa del Cha-no-yu o Ceremonia del té.
La Ceremonia consiste en preparar y servir el té, pero lejos de hacerlo de forma árida,
como cualquier otra actividad cotidiana, esta práctica adquiere en Japón un valor
solemne, en el que la humildad, la naturalidad, la simplicidad, la moderación, etc. hacen
acto de presencia.
La Ceremonia del té tiene una duración de cuatro horas, si se hace entera (en este
versión recibe el nombre de Cha-ji). En este caso, no se limita a la simple preparación
del té, sino que incluye el kaiseki, que es una comida ligera, el usucha, la toma de un té
ligero y la koicha, que es un té más espeso y pesado. Por último, la persona encargada
de la ceremonia ha de estar familiarizada con una serie de saberes tradicionales, que
abarcan tanto los conocimientos sobre los tipos de té y su producción, como el kimono,
el arreglo floral, la caligrafía, el incienso, etc.
La tarde de té no era parte de la tradición inglesa hasta hace relativamente poco tiempo
(el siglo XIX) gracias a Anna Russel, la séptima duquesa de Bedford quien además era
una amiga muy cercana de la Reina Victoria y una de las figuras más prominentes de la
sociedad aristocrática en Londres.
Su esposo (Francis Russell, séptimo duque de Bedford) con frecuencia invitaba a sus
amigos hombres a reuniones durante el almuerzo para discutir sobre negocios y otros
temas políticos y ambientales mientras disfrutaban de una comida ligera. Como
consecuencia, sus esposas tenían que esperar durante horas hasta que finalizada la
reunión, ellos retornaran a casa para la cena (y no solo eso, durante la década de 1800
en Inglaterra era común hacer solo dos comidas principales al día, el desayuno muy
temprano en la mañana y la cena en la noche).
Como la cena solo se servía entre las 8:00 p.m. y las 9:30 p.m. durante los meses de
verano (aprovechando que los días eran más largos y se podía ahorrar dinero en velas
para iluminar la casa), la Duquesa solía quejarse de ataques de hambre a mitad de la
tarde, acompañados de “una sensación de ahogo” cuando debía esperar por la cena hasta
altas horas de la noche. Así que empezó a solicitar le fuesen servidos bocados de pan
con mantequilla, pasteles, galletas, y una taza de su amado té Darjeeling
aproximadamente a las 4:00 p.m., luego de cierto tiempo empezó a invitar a sus amigas
a que la acompañaran en su habitación en Woburn Abbey en Bedforshire, para luego
disfrutar de una agradable paseo por el campo durante la tarde de verano.
La Duquesa continúo la tradición al regresar a Londres, y al poco tiempo la Reina
Victoria se unió a ella y terminó enamorándose de esta idea, tanto así que empezó a
solicitar que se le sirviera una “cuppa” (taza de té) acompañada de un pastel cubierta
con crema de mantequilla y frambuesas frescas (postre conocido en la actualidad como
un Victorian Sponge Cake). Así, nació oficialmente la tradición del té de la tarde en
Inglaterra.
En la década de 1920 las Tardes de Té pasaron de ser unos cuantos bocadillos y una
taza de té servidos en una vajilla elegante, a convertirse en un evento social de moda en
las clases sociales más altas de Inglaterra. Tan solo imagina la escena: mujeres vestidas
con sus trajes largos más elegantes, guantes y sombreros, solo para la ocasión.
Hasta doscientos personas solían invitarse a las casas de la elite inglesa entre las 4:00
p.m. y las 7:00 p.m. para degustar emparedados, pasteles dulces, tortas, y (obviamente)
unas cuantas tazas de té. Aunque en la actualidad los scones son prácticamente
indispensables en las Tardes de té, estos panecillos se convirtieron en tradición unas
cuantas décadas después).
La servidumbre en estas casas servían a los invitados una gran variedad de
emparedados, tortas, pasteles, y el mejor té con el que contaran, servido en costosas y
elegantes teteras de plata para ser vertido en tazas de porcelana fina china.
Pronto la tradición del Te de la tarde se expandió hasta los hogares ajenos a la elite
inglesa y las familias de clase media de Inglaterra empezaron a disfrutar de un paseo
alrededor del vecindario luego de una taza de té, pasteles y bocadillos. Al poco tiempo,
hombres y señores de los hogares decidieron unirse a la tradición y disfrutar de las
tardes de té.
Al echar un vistazo a los menús en los hoteles es probable que te encuentres con el
término “High Tea” (Té alto), utilizado por las clases más altas para designar su sesión
de té a las 4 de la tarde, seguido de un paseo por los jardines de Hyde Park.
Irónicamente, las clases medias y bajas en Inglaterra toman un “High Tea” un poco más
tarde (generalmente entre las 5:00 p.m. y las 6:00 p.m.). Este tipo de evento no era
considerado una reunión social, como en las clases más altas, sino más bien como una
comida más en el día a día de las clases trabajadoras.
El término tuvo su origen durante la Revolución Industrial cuando los trabajadores
regresaban a casa para comer luego de un arduo día de trabajo. En este contexto, el
término “high” (alto) hace referencia a que era esa su principal comida durante el día, y
no solo una sencilla “Tarde de té”. Como consecuencia todo este embrollo semántico ha
transformado en un tabú para los ingleses confundir el término “High Tea” (Té alto) con
“Afternoon Tea” (Tarde de té).
De igual forma, los términos “High Tea” y “Low Tea” (Té alto y Té bajo) también
hacen referencia a la altura de las mesas en que se sirve el té, con el término “té alto”
empleado cuando éste es servido en una mesa de comedor.
No todos los londinenses acaudalados podían visitar el local de moda. Las Coffee
Houses eran territorio principalmente masculino. La fama del té se extendía como la
pólvora, y nunca mejor dicho porque el Té Verde Gunpowder (Pólvora) se vendía a
precio de oro, y las mujeres de la alta sociedad no querían quedarse atrás respecto a la
nueva moda.
Las infusiones son un tipo de bebida natural que se obtiene a partir de hojas, raíces o
frutos de algunas plantas. Este método para obtener determinadas sustancias de
elementos naturales ha sido usado desde hace milenios por distintas culturas antiguas
para extraer las propiedades y los beneficios de las plantas.
Describiremos qué son las infusiones, qué tipos existen y cuáles son sus principales
beneficios. Nos centraremos concretamente en 6 infusiones muy populares: el té, el
café, la manzanilla, la menta, la tila y el mate.
Infusiones reconocidas como el té verde han sido consumidas desde hace 5 milenios en
países asiáticos como China e India. El café, otra infusión proveniente de Etiopía, se ha
convertido durante los últimos siglos en una de las bebidas más populares del mundo.
1. Té
El té es la infusión más popular del mundo. Originario del sur de China, el té empezó
siendo una bebida medicinal disfrutada sólo por las clases altas de la sociedad hasta que
en el siglo XVI se extendió por Europa y a partir de ese momento se permitió su uso en
toda la sociedad y se popularizó como una bebida de consumo diario por su aroma y su
sabor.
Existe una gran variedad de tés que podemos encontrar con facilidad en nuestros
establecimientos habituales de compra. Los más conocidos en Occidente son el té verde,
el negro y el oolong (o azul).
2. Café
El café es la segunda infusión más consumida en el mundo, superada sólo por el té.
Mientras el té es históricamente más consumido en el mundo oriental, el café forma
parte indiscutible de la cultura y los hábitos alimenticios de Occidente.
El café es una bebida obtenida tras moler y tostar los granos de la planta del mismo
nombre. Su llegada a Europa desde África y Oriente Próximo en el siglo XVI estuvo
marcada por la prohibición durante los primeros años por la religión principalmente en
los países protestantes; no obstante, se convirtió a lo largo de los siglos en una de las
bebidas más populares de Europa y de los países de Oriente Medio.
3. Menta
La menta es una hierba aromática distribuida por todo el mundo y utilizada desde
hace milenios tanto por sus propiedades medicinales como por su uso culinario en
distintos platos.
La menta es una hierba muy apreciada en el mundo árabe por su olor y sabor, y es
empleada tanto en infusiones como en la preparación de platos dulces y salados en
países como Marruecos, Líbano y Turquía.
4. Mate
El mate es la infusión que se obtiene con las hojas de la yerba mate. El proceso previo a
la infusión requiere el cortado, el secado y el molido de la hierba. Debido al sabor ácido
de esta infusión suelen añadirse hojas aromáticas de otro tipo o bien endulzantes
naturales.
El mate es una infusión típica de Argentina, Uruguay y Parguay por ser una bebida que
consumían habitualmente los pobladores indígenas de estas regiones.
El hábito de tomar esta infusión fue asimilado por los colonizadores españoles, hecho
que propició que su consumo haya perdurado hasta nuestros días.
5. Manzanilla
La manzanilla es una de las infusiones más conocidas después de los tés clásicos. Se
trata de una planta originaria de Europa y de Asia, consumida desde la Edad Antigua
por ser considerada una planta con poderes místicos y curativos debido a la gran
cantidad de problemas de salud que puede tratar.
6. Tila
La tila es junto con la manzanilla una de las hierbas más populares por su gran cantidad
de beneficios para la salud. Su potente efecto sobre el organismo la convierte en una
planta muy utilizada en infusiones con valor medicinal.
1. Té
Los beneficios del té pueden variar en función del tipo. Así, por ejemplo, el té verde
tiene propiedades antioxidantes, previene la aparición de enfermedades
cardiovasculares, reduce el colesterol y ayuda a perder peso.
2. Café
El café es una infusión cuyos principales beneficios son los siguientes: la estimulación
del organismo, gracias a su contenido en cafeína; favorece la quema de grasas; tiene un
alto contenido en vitaminas y minerales, y disminuye el riesgo de padecer enfermedades
neurodegenerativas y de padecer también diabetes.
No obstante, el consumo de café debe ser moderado (no más de un par de tazas al
día) puesto que una toma excesiva de esta bebida es perjudicial para el sistema digestivo
y para otras partes de nuestro organismo
3. Menta
Los beneficios para el organismo que ofrece la menta son: tratamiento de enfermedades
gastrointestinales como el síndrome del colon irritable, los espasmos y los cólicos; es un
excelente remedio antiséptico; alivia los problemas respiratorios; reduce los gases y la
inflamación del estómago, así como el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer como el
de próstata.
4. Mate
Según muchas personas, el mate tiene propiedades antioxidantes y vigorizantes, protege
la salud cardiovascular y ayuda a disminuir el colesterol.
5. Manzanilla
La manzanilla aporta una gran cantidad de beneficios. Algunos de ellos son los
siguientes: tiene propiedades antiinflamatorias, mejora los problemas respiratorios y los
dolores estomacales, alivia los dolores crónicos, los menstruales y los debidos
a artritis y reuma, protege el estómago de úlceras y gastritis y funciona como un potente
agente antialérgeno y antibacteriano.
6. Tila
La tila tiene propiedades relajantes, somníferas, ansiolíticas y antiespasmódicas. Por sus
potentes efectos relajantes se recomienda, como en el caso de la manzanilla, no
consumirla si se van a realizar actividades que puedan entrañar un riesgo personal,
además de no ser recomendable en casos de dolor abdominal cuyo origen se desconoce.
INFUSIONES FROZEN
Té verde helado con limón y hierbabuena
El té verde estimula el metabolismo y te ayuda a perder volumen. Prepara una infusión
con tu té verde preferido. Déjala enfriar y échala en una jarra junto con un limón
cortado en rodajas también puedes utilizar lima), hojas de hierbabuena fresca o menta,
hielo y miel, azúcar moreno o estevia si te gusta dulce.
Infusión fría de hinojo
Esta es una planta con grandes propiedades diuréticas. Puedes comprarla en cualquier
herbolario. Prepárala con las cantidades que te indiquen, déjala enfriar, métela en la
nevera y tómate una taza después de cada comida, al menos tres veces al día.
Infusión fría de anís
El anís favorece la digestión y te ayudará a deshinchar la tripa después de las comidas.
Prepara la infusión y añade miel al gusto, déjala enfriar y métela en la nevera. Si no te
gusta demasiado el sabor del anís, prueba a cocerla con una ramita de canela.
Té de verbena
Es ideal para combatir la inflamación y la retención de líquidos. Puedes comprarla ya
preparada para tisana y fresca. Nuestra recomendación es añadir hojas frescas a la tisana
para potenciar su efecto y su sabor, unas rodajitas de limón y miel al gusto. Una vez
hecha la infusión, echa todo en una jarra, deja que se enfríe y métela en la nevera para
tomarla tres veces al día.
Té frío de jengibre y regaliz
Esta planta tiene grandes propiedades para la salud y el sistema digestivo. Combinado
con el regaliz, tiene un gran efecto depurativo. Ideal para tomar entre horas. Puedes
comprar el té de jengibre y regaliz ya mezclado y añadir una cucharadita de jengibre en
polvo después de hacer la infusión. Puedes tomarla así o endulzar con miel y dejar
enfriar en la nevera.
Las infusiones frías calman la sed y nos rehidratan cuando más lo necesitamos. Con
sabores muy variados, ofrecen además todas las propiedades de las plantas y son una
gran alternativa a los refrescos azucarados.
Esta infusión te ayuda a eliminar líquidos a la vez que te remineraliza gracias a los
aportes minerales de la ortiga y del diente de león.La manzana le da un toque dulce que
se potencia con estevia
Infusión relajante de tila, verbena y amapola
Esta infusión es ideal para disfrutar del día de forma más serena y llegar a la noche en
un estado más relajado que te ayude a conciliar el sueño. La verbena y el zumo de
limón de dan un toque cítrico que combina muy bien con la tila y la amapola.
En este agradable té, el sabor amargo y amaderado del rooibos se combina con
el alimonado de la melisa, la citronela y la hierbaluisa, que se suaviza con el
contrapunto anisado del hinojo.Te ayuda a eliminar gases, mejora el sabor de boca y
facilita la digestión.
Para colmarla, nada mejor que el agua fresca, nunca muy fría, o agua templada para los niños,
mujeres embarazadas y personas con problemas digestivos o circulatorios.
Pero contamos con otras muchas opciones, y estas alternativas en momentos de relajación y
compañía pueden apetecer mucho más, como zumos, refrescos, batidos e infusiones.
Las bebidas que más demanda tienen son, ciertamente, los refrescos comerciales, sobre todo
entre los niños y los jóvenes, pero también entre cualquier persona que requiera mucha
hidratación, como los deportistas, o que quiera mantenerse activa durante tiempos
prolongados, como ejecutivos y estudiantes.
Una alternativa saludable a los refrescos comerciales son las infusiones frías. Aportan
los beneficios terapéuticos de las plantas medicinales con que están elaboradas y que
dependen de sus distintos principios activos.
Las infusiones frías se pueden tomar en cualquier momento del día, pero apetecen
especialmente a media mañana o a media tarde, y en todo caso cuando percibamos el
calor con mayor intensidad. Las infusiones con teína, sin embargo, son más
recomendables para acompañar el desayuno o después de las comidas.
En las tardes calurosas del estío, para aplacar la sed en soledad o en compañía, pero
también para combatir el sofoco, el agotamiento y la deshidratación después de la
práctica deportiva o por algún otro esfuerzo físico extenuante, las infusiones frías
pueden resultar muy apetecibles.
Entre sus propiedades generales y ventajas sobre los refrescos cabe destacar
que incorporan plantas medicinales, que son la base de la medicina tradicional. Las
moléculas con las que cuentan son semejantes a las que posee el ser humano, así que
actúan como agentes próximos y no extraños al organismo en el proceso curativo.
Estas plantas no suelen generar adicción, salvo en algunos casos excepcionales, y
muchas actúan como bálsamos digestivos.
Además, los vivos colores de muchos frutos y flores se deben a pigmentos que actúan
como eficaces antioxidantes y antiinflamatorios. Las infusiones que incorporan frutas
nos aportan, aunque diluido, el beneficio nutricional de sus sales minerales y vitaminas.
Y, como en las infusiones herbales el contenido en azúcar es nulo o, si se endulzan, muy
inferior al de los refrescos azucarados, pueden tomarse durante periodos relativamente
largos, en dosis siempre ponderadas.
Finalmente, podemos complementar las acciones de unas plantas y otras para equilibrar
sus propiedades y potenciar su efecto terapéutico y preventivo. Con la ventaja de que, a
diferencia de los fármacos, no suelen tener efectos secundarios. Eso no quiere decir que
las plantas sean inocuas: un mal uso o un sobreconsumo también puede generar
problemas de salud.
Pero los beneficios de las infusiones frías no acaban aquí, sobre todo cuando hace
calor. Al tiempo que hidratan, transfieren al organismo sediento los principios activos y
los nutrientes de las plantas que integran.
La mayoría de infusiones ejercen, asimismo, una función diurética y depurativa, muy
adecuada en los meses de calor, y ayudan a eliminar sustancias de desecho por la orina,
lo que supone un apoyo excelente para perder algunos kilos. Pero hay que saber que no
eliminan necesariamente los acúmulos de grasa. Conviene, además de tomar las
infusiones adecuadas, una dieta ligera equilibrada y ejercicio físico sistemático.
Finalmente, pero no menos importante, las infusiones ofrecen todos esos beneficios sin
dejar de constituir un excelente y apetecible refresco que colma la sed, y no la distrae o
la engaña como hacen los refrescos azucarados comercializados.
Las plantas aromáticas como el hisopo, la lavanda, el tomillo, la menta o la salvia son
ricas en esencia, y muestran una acción digestiva, antiséptica y expectorante de alto
valor terapéutico.
Las umbelíferas, que incluyen el apio, el anís, el hinojo, la alcaravea o el comino,
destacan por su poder carminativo y también digestivo, antiespasmódico y diurético,
que les viene dado por el aceite esencial, los flavonoides y esteroles que figuran entre
sus principios activos más valiosos.
Para tomarla fría, una vez haya perdido el calor, se guarda en la nevera unas horas, o
mejor incluso durante toda la noche. Se le puede agregar un cubito de hielo justo cuando
se vaya a consumir o bien se mantiene durante una hora, antes de consumirla, en el
congelador.
A las hierbas o partes de las hierbas más recias se les puede también dar un breve hervor
y seguir después la pauta anterior.
Los frutos del bosque se pueden someter a una breve decocción o bien macerar en agua
muy fría.
Y en las infusiones que combinan hierbas y frutas frescas deben cortarse estas últimas a
rodajas o cubos, depositarlas en una botella de vidrio, agregar luego el agua fría y las
hierbas, y mantenerlas en la nevera 2 o 3 horas.
Las cantidades de plantas recomendadas son, en general:
20 gramos de planta seca o 30 gramos de planta fresca por 500 ml de agua si se emplea
una tetera
5 gramos por taza de agua en las dosis individuales
Lo ideal es preparar la infusión por la tarde y guardarla en la nevera durante la noche,
para tomarla al día siguiente. Las infusiones frías preparadas en casa pueden
conservarse 48 horas en el refrigerador, pues pasado ese tiempo suelen perder parte de
sus principios activos.
2. Maceraciones en agua fría
Las maceraciones en agua fría son especialmente aptas para incorporar plantas ricas en
mucílagos, gomas, principios amargos y esencias. También plantas con elementos duros
–leños, cortezas y raíces– como el hamamelis, la bardana, el hisopo o la zarzaparrilla.
Se dejan toda la noche o incluso un día o dos para que el agua se impregne bien del
sabor de las plantas.
Hay que asegurarse, no obstante, de que las plantas que se van a preparar en agua fría
estén libres de parásitos, impurezas o suciedad. Conviene por tanto lavarlas bien antes
de depositarlas en la tetera para evitar que contengan focos de bacterias. En una infusión
no habría problema, porque por el efecto del calor quedarían destruidas, pero hay que
extremar las precauciones en las maceraciones.
En las maceraciones deben desecharse las plantas con un mínimo de toxicidad o
potencial irritante, como las plantas ricas en alcaloides, histaminas y algunos glucósidos
o taninos catéquicos, entre ellas la cola de caballo, la ortiga, el enebro o la pasiflora.
POR QUÉ EVITAR LOS REFRESCOS COMERCIALES
Según se desprende de un estudio realizado por el profesor Víctor J. Martín Cerdeño de
la Universidad Complutense de Madrid, los hogares españoles consumen al año 2.120
millones de litros de gaseosas y otras bebidas refrescantes y se gastan por encima de los
1.600 millones de euros en este concepto.
Supone un consumo medio per cápita de casi 47 litros anuales, ¡una barbaridad! Y es la
cola, con un 70%, la principal bebida consumida. La omnipresente publicidad de
refrescos, agresiva y pegadiza en muchos casos, contribuye de forma sustancial a
consolidar este consumo, al igual que el mimetismo social.
Las bebidas gaseosas contienen grandes cantidades de azúcar refinado, pero no solo eso.
También contienen conservantes, colorantes y otros aditivos, como la cafeína, el ácido
fosfórico, o incluso trazas de glutamato monosódico, un potenciador del sabor.
De modo que, de mantenerse un consumo continuado y excesivo de este tipo de
productos, estos pueden acabar generando diferentes problemas de salud ya desde
edades muy tempranas, como sobrepeso, obesidad, diabetes, hipertensión, daños en el
esmalte dental por la acción del ácido, debilitamiento óseo, alergias y trastornos renales,
como la formación de cálculos.
LUMINARIA CARACTERÍSTICAS
CAMPANA E27, 40W 40W
Su luz cálida que realza el 60º
A aspecto dorado de los productos IP40
de panadería, 100-240VAC
CAMPANA E27, 40W Ø318x315mm
TUBO LED T8
Tubos indicados para la
10W / 18W / 23W
iluminación de carne
120º
C para instalarlo en lineales y
IP44
expositores. 100-240VAC
IP20: 60CM – 10W / 120CM - Ø26
18W / 150CM – 23W
ILUMINACIÓN LED
La sustitución de las luminarias y bombillas tradicionales por iluminación LED es ya el
presente de la iluminación.
En los últimos años las bombillas LED han experimentado un gran avance que ha
mejorado sus cualidades y costes, aumentando su eficiencia y haciéndolas asequibles
para todo tipo de usuarios.
– Muy bajo consumo: Consumen 2,5 veces menos que una bombilla de bajo consumo
convencional y 8,9 veces menos que una bombilla incandescente de las de toda la vida.
– Duración: Las bombillas LED no tienen filamentos u otras partes mecánicas que se
rompan con facilidad, o que se puedan fundir. Reduciendo los costes de mantenimiento
y reemplazo.
– Baja emisión de calor: Al consumir poca energía, las bombillas LED emiten poco
calor. Por lo que la eficiencia del producto es muy alta.
– Regulables: Algunos modelos LED son regulables, permitiendo el control del gasto
energético y la creación del ambiente deseado.
– Ecológicos: Las bombillas LED son totalmente reciclables y ecológicas ya que no
contienen mercurio, ni materiales tóxicos como las lámparas fluorescentes, de bajo
consumo…
– Resistencia: Las lámparas LED son mucho más resistentes a los golpes, e incluso
aquellas que poseen un bulbo de cristal pueden seguir funcionando si este se rompe.
Las luminarias LED son productos tecnológicos, que tienen un precio considerable pero
que es recuperado debido a su bajo consumo y al largo periodo de vida útil. (La vida de
un LED equivale a 20 incandescentes o 7 tubos fluorescentes).
SI. Aunque la tecnología LED trabaje a 12 V, se pueden alimentar a 220V gracias a una
pequeña fuente de alimentación electrónica llama Driver.
Las bombillas LED, como todos los productos tecnológicos tienen una vida limitada,
sin embargo la tecnología LED es muy duradera.
Este ahorro energético también dependerá del tipo de bombillas que vamos a sustituir,
de forma genérica una bombillas LED consume 3 veces menos que una bombilla o
foco convencional de bajo consumo y 8 veces menos que una bombilla
incandescente o foco halógeno
BIBLIOGRAFIA
https://www.elle.com/es/belleza/salud-fitness/a28084071/como-deshincharte-
infusiones-frias/
https://blog.ledbox.es/ledbox-2/productos/iluminar-pan-y-reposteria-productos-
frescos
https://www.ecologiaverde.com/iluminacion-ecologica-led-para-cuidar-el-medio-
ambiente-1879.html
http://www.blatem.com/es/actualidad/noticias/ventajas-de-la-pintura-ecologica
https://blog.europan.mx/europan-establecer-panaderia-sustentable
https://www.la-teteria.com/posts/el-origen-de-las-casas-de-te-viajamos-al-
pasado-de-japon