Así fue y Pariacaca tenía que convertir los campos en tierra con riego para dormir con la mujer.

Cuando concluyó el acueducto, Pariacaca y la mujer subieron hasta el precipicio Yanaccacca.

Ahí, cuando ya durmieron, la mujer y Pariacaca se van hasta la bocatoma del acueducto de
Cocochalla y la mujer de nombre Chuquisuso se convirtió en yerta piedra.

Cómo, los Cuparas adoran a esa mujer llamada Chuquisuso

Por eso los habitantes de este ayllu la veneraban por días con comida, bebida, le limpiaban el
acueducto y la representaban con una mujer. A día de hoy, los hombres celebran la acequia
con bebida y comida por el deseo de hacerlo, pero otros lo olvidan si tienen un buen
sacerdote. Huallallo Carhuincho tuvo un enfrentamiento con Pariacaca donde Huallallo perdió
y se quedó viviendo en la laguna Mullococha. Y cuando Pariacaca ganó, se fundieron los cinco
halcones.

El hombre pensó que Huallallo se podría enfurecer pero Pariacaca le dijo que no temiera. El
hombre con temor hizo caso a la órdenes Pariacaca y volvió al mismo lugar cinco días después
para observar la lucha. Huallallo huyó a la región Anti y uno de los hijos de Pariacaca se fue
hacia la entrada de dicha región para vigilarlo. Siendo vencedor, Pariacaca, luchó otra vez
contra una mujer llamada Manañamca pues sabía que vivía con Huallallo.

Ella hirió con una piedra a uno de los hijos de Pariacaca quien era Chuquihuampo. Después, la
mujer quedó arrotada y fue arrojada al mar donde Chuquihuampo está vigilando su regreso sin
falta de comida. Cómo Pariacaca, cuando hubo concluido de hacer todo, empezó a dar
instrucciones para ser adorado. Después de haber sido derrotado, Huallallo fue sentenciado a
comer perros y ordenó a los huancas ser adorado y estos también comían perros.

Todos los pueblos hablados antes de la provincia de Huarichirí y de Chaclla Mama tenían
yuncas y estos fueron empujados hacia abajo por Pariacaca quien creó a sus hijos para que
sean vencedores. Los hijos de Pariacaca vencieron a los yuncas. Los yuncas derrotados
empezaron a olvidar a su dios antiguo y empezaron a adorar a Pariacaca. Pariacaca en la parte
alta habitó e hizo que fuera adorado por Huacasas bailando y cantando tres veces al año.

Un hombre del ayllu de Cacasica decide qué día van los hombres a adorar a Pariacaca. El
hombre que se casa con una mujer del pueblo de Surco es ensalzado y auxiliado. Estando en la
adoración a Pariacaca, ofrecían una cría de llama. Al día siguiente recorrían todos los pueblos y
los cerros durante 5 días.

Se compara el temor de los cristianos con el temor de los antiguos hombres por ser buena
persona para su Padre. En otros cerros también se adora a Pariacaca de forma distinta.
Hombres de todos los sitios iban hasta Pariacaca y cuando regresaban a sus pueblos eran
cuestionados para saber el estado de su Padre. Esta adoración ya no se hace, pero los yuncas
hacen las ceremonias a escondidas por los montaraces.

Cómo era Chaupiñamca, dónde vivía, de qué modo se hacía adorar. Chaupiñamca era mujer de
Huatyacuri. Chaupiñamca era muy promiscua y en una oportunidad tuvo relaciones con
Runacoto a quien prefirió entre todos los huacas. La fiesta de Chaupiñamca se celebra en
Junio, fecha coincidente con el día de Corpus Christi.
En el Auquisma, celebraban a Chaupiñamca después de Pariacaca con unos bailes y cantos con
pumas. A Chaupiñamca le gustaba ver la parte íntima de los hombres en las danzas. Hablando
de este baile nos referiremos también a Tutayquiri, hijo de Pariacaca. Él dijo que a los yuncas
de Llacsatambo los iban a mirar con desprecio.

Estos hombres cuando fueron atacados se desplazaron hacia Colli. Cómo los hijos de este
Pariacaca empezaron a vencer a todos los yuncas. En los antiguos tiempos, los hermanos hijos
de Pariacaca ya tenían mucho poder. Tutayquiri venció a Iscamayo y consideró a los yuncas sus
súbditos.

Se dice que Chaupiñamca pudo haber creado a Pariacaca. Chaupiñamca tuvo hermanas. La
gente como no creía en Chaupiñamca iba donde Llacsahuato. Por eso, a Chaupiñamca se le
adoraba como un cumplimiento.

Con la huaca Uypayhuachac se tenía que hablar cara a cara y luego ayunar durante un año sin
pecar con alguna mujer. Para que las personas hablasen con las huacas, primero tenían que
hablar con sus hijos, padres o abuelos, sino ellas los hacían regresar. Cuniraya Huiracocha fue
el más adorado. En ese momento, cuando Cuniraya y el Inca Huayna Capac abrieron la caja
apareció una princesa, entonces el inca se quedó con ella y mandó a un ayllu a que regrese al
Cuzco.