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Taller “Entorno Educativo, Violencias Basadas en Género

y Masculinidades”
Gustavo Adolfo Calle Quintero

Promotor de masculinidades equitativas


Línea de Prevención de Violencias Basadas en Género
Subsecretaría de Equidad de Género
Objetivo del taller

Brindar elementos para la comprensión y manejo de las


violencias basadas en género en el entorno escolar, en una
perspectiva de masculinidades.
Secretaria de Bienestar Social

Misión:

La Secretaría de Bienestar Social es el organismo encargado de liderar la


promoción, protección, restitución y garantía de derechos de quienes por su
condición social, económica, física o mental se encuentran en condiciones de
vulnerabilidad, mediante la formulación, coordinación e implementación de
políticas sociales, en el marco de la Constitución y la Ley.
Secretaría de Bienestar
Social
Grupo de Apoyo Coordinación de
Transversal a la Política Social
Gestión

Subsecretaría de Subsecretaría de Subsecretaría de Subsecretaría


Poblaciones y Étnias Atención Integral a Equidad de Género de la Primera
Víctimas Infancia.
Poblaciones Equipo de
transversalización
Equipo de
Equipo y proyección
Equipo Afro Equipo Centro Primera Infancia
Indígena
Equipo de Regional de Equipo de
Equipo de Programas empoderamiento
Equipo de
Institucion
Atención a Equipo de Niñez
Juventud Adulto Mayor económico político
ales y Victimas y social
Equipo de Nacionales
Equipo de Equipo de
Discapacidad Habitantes
de/en Calle Equipo de Equipo de atención Familia
implementación y prevención de
Equipo de violencias
Equipo de
Recicladore
Carretilleros de Política
s Publica
Equipo de
LGTBI
Subsecretaría de Equidad de Género
Objetivo:

Coordinar y realizar seguimiento a la implementación de la Política Pública


para las Mujeres en el Municipio de Santiago de Cali: Reconocimiento, Equidad
de Género e igualdad de oportunidades, 2010-2020.
Línea de Prevención de Violencias Basadas en Género
Objetivo:

 Desarrollar procesos de prevención de violencias hacia las mujeres que contribuyan a la


construcción conjunta de saberes, desde la equidad de género, para la transformación de
relaciones que se constituyan desde la no violencia, equidad e igualdad de derechos.

Funciones:

• Realizar diagnósticos participativos de la realidad de violencias basadas en género en el


territorio, que permitan definir acciones de intervención en comunas y corregimientos.

• Realizar procesos de sensibilización, capacitación y formación para la prevención de las


violencias basadas en género, con énfasis en violencia contra las mujeres.
Línea de Prevención de Violencias Basadas en Género
Funciones:

• Generar y articular acciones entre las instancias que integran la ruta


de atención por zonas de la ciudad y aquellas co-responsables para
favorecer los procesos de detección, prevención y/o atención a las
violencias.

• Diseñar una estrategia de comunicación pública no sexista para la


ciudad que favorezca la transformación de imaginarios de género y
patrones socio culturales que sustentan las discriminaciones y
violencias.

• Realizar informes periódicos sobre la implementación de la


estrategia de prevención de violencias basadas en género en el
municipio.
VIOLENCIA

Existen muchas definiciones de violencia. Aquí se


entenderá por violencia el conjunto de acciones
que se valen del poder, la dominación y/o la fuerza
para causar daño a otros u otras. La violencia es la
negación del otro o la otra. La violencia no solo es
destrucción física, sino también emocional,
psicológica, cultural, social y económica. La
violencia puede ser estructural, directa o cultural.
Violencia Estructural

Se entiende por violencia estructural el conjunto


de condiciones históricas, generales o macro que
marginan y excluyen a la mayoría de la población
de la posibilidad de vivir en condiciones de
dignidad. La pobreza se considera violencia
estructural en tanto niega condiciones de vida
digna.
Violencia Directa

Se entiende por violencia directa todas las


acciones intencionadas de destruir física,
psicológica, emocional o moralmente al otro u
otra, total o parcialmente. Es la que nos muestran
los medios de comunicación y la que vivenciamos
a diario producto de agresiones, guerras,
confrontaciones armadas, maltratos, entre otros.
Violencia Cultural o Simbólica

Se entiende por violencia cultural o simbólica


todas las formas de discriminación negativa hacia
otros por ser diferentes a un modelo hegemónico
establecido, que se ejercen a través del lenguaje, la
comunicación, la música, las bromas y otras formas
de expresión simbólica.
Discriminación:
Toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo, el color
de la piel, la etnia, la clase social, la orientación sexual, la
identidad de género, la discapacidad, entre otras, que tenga
por objeto o como resultado menoscabar o anular el
reconocimiento, el goce o el ejercicio de los derechos
humanos de esa persona o colectivo en las diferentes esferas
política, económica, social, cultural y civil o cualquier otra
esfera.
Algunas expresiones de discriminación:

- El racismo o discriminación por el color de la piel.


- El sexismo o la estereotipación y estigmatización hacia lo femenino y
lo masculino.
- El machismo o la inferiorización y subordinación de las mujeres.
- La homofobia, lesbofobia, bifobia, transfobia o discriminación a las
personas pertenecientes al grupo social LGBT (Lesbianas, gays,
bisexuales, trans…).
- El clasismo o rechazo a otras personas por su condición social y
económica.
- La discriminación por aspectos físicos o discriminación por la
complexión, estatura, forma del cuerpo, vulnerabilidad física, entre
otros.
- La xenofobia o discriminación a otras personas por su nacionalidad o
identidad étnica.
Identifiquen las violencias y
discriminaciones que se pueden
ejercer hacia estas personas:
“Un adolescente (hombre) de 13 años,
mestizo, proveniente de la sierra
caucana, que vive en Siloé, se encuentra
en quinto de primaria, le gusta jugar
voleibol y frecuentemente se relaciona
con adolescentes (mujeres) de su edad”
“Una niña de 11 años, de origen
afrocolombiana, proveniente del
Pacífico Nariño, que vive en el Distrito de
Aguablanca, se encuentra en quinto de
primaria y trabaja con la madre en un
negocio de comidas”
Interseccionalidad

Se denomina Interseccionalidad a la teoría sociológica que


propone y examina cómo diferentes categorías de
discriminación, construidas social y culturalmente,
interactúan en múltiples y, con frecuencia, simultáneos
niveles, contribuyendo con ello a una sistemática desigualdad
social. Estos ejercicios de discriminación corresponden a
modelos de opresión dentro de la sociedad que se
interrelacionan creando un sistema de opresión que refleja la
"intersección" de múltiples formas de discriminación.
¿Qué violencias o
discriminaciones se ejercen
especialmente sobre ella?
VIOLENCIA DE GÉNERO

La violencia de género es todo tipo de violencia


que se justifica por el solo hecho de que una
persona es mujer, o por que una persona o grupo
de personas se comportan o asumen una
identidad y expresión de género femenina. En la
gran mayoría de los casos la violencia de género se
ejerce hacia las mujeres.
No es usual que un hombre sea
juzgado por ser hombre, quizás por ser
negro, indígena, pobre, discapacitado,
femenino u homosexual, pero no por
ser hombre.
Muchos hombres creen que pueden agredir y
muchas mujeres creen que deben permitir la
agresión. No se trata de que las mujeres agredidas
sean masoquistas sino que muchas han aprendido
desde niñas que los hombres pueden maltratarlas y
que esta es una forma de expresar afecto.

La gran mayoría de mujeres que se someten a las


violencias sufren de baja autovaloración o
autoestima, de dependencia emocional y económica.
Muchos hombres han aprendido desde niños que la
forma de relacionarse es a través del maltrato, han
construido su concepción de ser hombres basados en
una idea de la honra masculina u orgullo masculino
que deben estar demostrando a través del
sometimiento o control de las vidas de las mujeres y
de otros hombres.

Con este fin hombres y mujeres aprenden normas,


valores y estereotipos desde la infancia, como parte
de la socialización de género.
Los estereotipos de género son ideas
preconcebidas, simples, que están muy
arraigadas y determinan las conductas,
comportamientos y actitudes y que se
presentan como generales y como naturales
para mujeres y para hombres.

Los estereotipos femeninos cuentan con


menos prestigio social que los masculinos.
ESTEREOTIPOS FEMENINOS ESTEREOTIPOS MASCULINOS

Espontaneidad Razón
Ternura Violencia
Debilidad Fuerza
Intuición Inteligencia
Subordinación Autoridad
Superficialidad Profundidad
Sumisión Dominio
Pasividad Actividad
Abnegación Inconformismo
Volubilidad Tenacidad
Suavidad Rudeza
Dependencia Independencia
Roles de Género:
Las distintas sociedades adscriben funciones,
actividades o tareas en función del sexo, pero estos
varían en función de las culturas, momentos
históricos y en la mayoría de las sociedades las tareas
o roles que cumplen los hombres gozan de mayor
prestigio social que las realizadas por las mujeres.

Socialización de género:
Procesos de formación y aprehensión que niños, niñas,
adolescentes y jóvenes, hombres y mujeres, realizan sobre
las características, prácticas, representaciones sociales y el
universo simbólico que definen la masculinidad y la
feminidad en culturas y épocas o etapas de la vida
determinadas.
Las relaciones desiguales entre hombres y
mujeres y la violencia se convierten en el
recurso por excelencia para imponer el control y
el poder en general sobre las vidas de las
mujeres en todos los ámbitos y para perpetuar
la posición privilegiada de los hombres en
dichas relaciones.
Ejemplos de privilegios y desigualdades de
género en la escuela:

A los hombres se les estimula una serie de


cualidades como la movilidad, la iniciativa, la
ocupación del espacio, la participación,
usualmente se les libera de cierto tipo de
labores asociadas a la organización,
mantenimiento del espacio, aseo, distribución
de alimentos, entre otras actividades.
La dicotomía Actividad/Pasividad es una
expresión de dominación de lo masculino
sobre lo femenino. Se expresa ahí un rasgo
fundamental de la masculinidad
hegemónica y del régimen patriarcal
heterosexista.
El psicólogo Terry Real, en su libro “No quiero
hablar de ello: superar el secreto legado de la
depresión masculina” explica lo siguiente:

“Masculinidad innata”

Para los bebés se asume que deben ir teniendo menor


necesidad de confort, protección y afecto, justo
después de nacer, pese a que los y las bebés no poseen
comportamientos categorizables por género y tienen
las mismas necesidades de afecto y protección.
El rechazo a lo femenino se vuelve entonces
una condición de socialización de género en
los hombres en el proceso de crianza,
germen de comportamientos violentos de
los hombres hacia las mujeres (Misoginia).

Mencionen frases a través de las cuales se


celebre cuando el niño actúa como
“varoncito”.
La historiadora Stephanie Coontz
define como “mística masculina” esa
que deja a los niños y posteriormente
a los hombres adultos, desmembrados
emocionalmente, con pánico a mostrar
debilidad y la mayoría de las veces
incapaces de reconocer o enfrentarse
a sus sentimientos.
Sue Askew y Carol Ross señalan que la
agresividad y la conducta ruda son bien vistas
en los hombres. Uno de los primeros
escenarios en donde se expresa la homofobia
es la escuela, pues esta se asocia por todos los
actores de la vida escolar, docentes, familias y
estudiantado, como una actitud de afirmación
del estereotipo de la masculinidad “fuerte” y
heterosexual, la cual, desde esa óptica, “debe”
corresponder a los hombres como parte
“normal” de su desarrollo y crecimiento.
Es decir, una condición de socialización
de género en la escuela en los
hombres es la homofobia o el rechazo
de cualquier expresión de feminidad
en los hombres.
Marvin Allen afirma que los mensajes
que animan a los chicos a ser
competitivos terminan generando, de
un lado, dependencia de su intelecto y
del reconocimiento externo, y del otro,
la exigencia de soportar el dolor físico
y reprimir sus sentimientos de
vulnerabilidad.
Se expresa aquí la idea de que se
deben separar las necesidades o
realidades emocionales de las
exigencias físicas y las exigencias
académicas propias de la formación
escolar.
La cultura escolar impone formas
hegemónicas de ejercer la sexualidad.
Estas formas hegemónicas o dominantes
implican privilegios para quienes las
acatan y opresiones para quienes no se
identifican con estas, las enfrentan o
transgreden.
La cultura machista patriarcal transmite la
idea de que la sexualidad masculina es
impulsiva e incontrolable. Mostrarse “viril”,
con capacidad de “conquistar” mujeres y de
tener relaciones sexuales con penetración,
son aspectos centrales en el discurso de los
hombres y en la formación de su “ego”
masculino, constituyendo uno de los
mandatos de la masculinidad.
La visión sobre la sexualidad femenina es
totalmente distinta. La sexualidad femenina es
vista como algo que debe ser controlado y
limitado. Mostrarse reservada, sin experiencia
ni interés de sentir placer, es lo que se valora
en las mujeres. Corresponde a un mandato de
la feminidad.
De allí que muchas veces se asuma que
si las niñas, adolescentes o mujeres
adultas se comportan o se visten de
cierta manera, lo que buscan es seducir
o coquetear a los hombres.
En lugar de crecer con mensajes sobre la
experiencia del placer, se crece con mitos y
estereotipos que reprimen la sexualidad de las
mujeres y manipulan la sexualidad de los
hombres, logrando que ambos crean que hay
solo una forma correcta de experimentarla y
reduciendo la sexualidad de las mujeres al
lugar de un objeto que está al servicio de los
hombres, lugar pasivo asignado a la feminidad.
Las imposiciones de género también se generan
hacia mujeres y hombres que no demuestren su
heterosexualidad constantemente.

La reproducción de esta imposición se inicia


enseñando que la única orientación sexual normal
es la heterosexual; de hecho se enseña que es la
forma “natural” de ser. Luego, se presiona a
adolescentes y jóvenes a demostrar que no son
homosexuales.
FACTORES DE RIESGO Y
FACTORES PROTECTORES
• Las violencias de género se presentan desde los noviazgos,
algunos chicos y chicas establecen estas primeras relaciones
desde modelos de desigualdad, en los que unos y otras
responden a estereotipos sexistas en su comportamiento y en
su forma de relación. Existe por parte de las adolescentes una
falta de percepción de determinadas conductas como sexistas,
como primeras señales de violencia, interpretándolas desde las
ideas del amor romántico como señales de amor: “es tan celoso
conmigo, porque me quiere mucho”.
• El uso de las nuevas tecnologías que han creado nuevos
escenarios y herramientas con las que se puede controlar,
humillar y acosar.

• Muchos chicos y chicas jóvenes tienen ideas, actitudes y


conductas que les hacen especialmente vulnerables frente a las
violencias de género. Por ejemplo, muchos y muchas no
consideran algunos comportamientos (“decirle que no vale
nada”, “hacerle sentir miedo”, “insultarla”, “controlar todo lo
que hace”) como conductas de violencia, lo que hace que pasen
desapercibidas y se toleren sin darles importancia.
En los chicos, el riesgo de ejercicio de violencia aumenta:

• Si han escuchado en personas adultas con mayor


frecuencia mensajes de dominio, sumisión y violencia
que consejos sobre la igualdad y no violencia.

• Si presenta una dureza emocional (los chicos no lloran, no


hay que demostrar debilidad, no hay que pedir ayuda...)
que supone un menor reconocimiento del abuso
emocional como maltrato, hacia sí mismos y hacia las
demás personas.
En las chicas el riesgo de sufrir violencias aumenta
cuando existe:

• Dificultades para reconocer situaciones iniciales de


maltrato o abuso emocional.

• Un menor empoderamiento y menor capacidad


para tomar decisiones y ejercer control sobre su
propia vida, incluyendo su cuerpo.
En docentes el ejercicio y la normalización de las violencias basadas en género
se presenta cuando:

• Existen imaginarios, en forma de percepciones y concepciones, que


promueven actitudes de vulneración de derechos y de no reconocimiento
de las realidades desde un enfoque de diversidad y equidad de género,
incluyendo sus propias realidades.

• Existe resistencia a hacer parte de procesos de formación, en docentes y


personal administrativo, orientados a la equidad y la diversidad de género,
lo que se refleja en posturas dogmáticas y lugares de poder desde el saber.

• Se impone al interior de las instituciones educativas el silencio y la


complicidad hacia actitudes de violencias de género que ejercen docentes y
directivas.
En las familias se incrementa el riesgo de violencias basadas en género cuando:

• Se presenta violencia en dinámicas familiares, en las que se reflejan actitudes de


sumisión, pasividad, dependencia emocional y psicológica, actitud negligente
por parte de la madre y actitudes dominantes, restrictivas y violentas por parte
del padre.
• Se presenta consumo descontrolado de alcohol y SPA en los padres, madres o
cuidadores y antecedentes de maltrato y violencia en los padres y madres.
• Existe confusión en el proceso de crianza y educación, por parte de padres y
madres, con actitudes dominantes, restrictivas o demasiado flexibles.
• Se presentan situaciones de abandono o ausencia de referentes de cuidado en
las vidas de niños, niñas y adolescentes, aunado a contextos sociales de
violencia, que involucran a niños, niñas, adolescentes y jóvenes.
• Se presentan condiciones de pobreza y falta de oportunidades de desarrollo,
especialmente la falta de autonomía económica y social en las mujeres que
hacen parte de las familias.
Trabajar en el contexto escolar la igualdad y la no violencia de género
significa promover factores protectores. Para ellos es importante:

• Escuchar, incentivar y resaltar mensajes y generar espacios


formativos que promuevan la igualdad y la equidad entre hombres y
mujeres en una perspectiva interseccional, aprovechando el ámbito
educativo para hacerlo.
• Facilitar experiencias gratificantes de trabajo en grupos mixtos que
promuevan la igualdad y la equidad de género en todos los
escenarios de la vida escolar.
• Escuchar, incentivar y resaltar mensajes y generar espacios
formativos que promuevan la no violencia y la resolución pacífica de
conflictos.
• Involucrar activamente al estudiantado en procesos de promoción y
fortalecimiento de liderazgos, tanto con hombres como con mujeres,
que propicie su participación en la construcción de diagnósticos
cualitativos y cuantitativos de violencias basadas en género en el
entorno escolar, familiar y social; y en la formulación de propuestas de
prevención de las violencias.

• Aunque es importante que los y las docentes, personal psicoorientador


y directivas reciban información y se capaciten o formen en derechos,
nuevas perspectivas y enfoques, y mecanismos sociales, institucionales
y legales de prevención y atención de las violencias que enfrentan todos
los días en las instituciones; esto no es efectivo, si no se les involucran
como sujetos, antes que como agentes educativos, que han construido
a lo largo de sus vidas percepciones y concepciones que determinan sus
prácticas en sus vidas cotidianas y en el aula.
• Es fundamental que el conjunto de docentes se involucre en
procesos formación y acción de manera comprometida, pues en
muchas instituciones la carga ha recaído de manera exclusiva en
algunos(as) docentes y en las personas que cumplen con la función
de psicoorientadores(as), docentes orientadores(as) y
coordinadores o coordinadoras. En este sentido se debe incentivar
la formulación, puesta en marcha y fortalecimento de proyectos de
aula y proyectos transversales.

• Continuar fortaleciendo los procesos institucionales de prevención y


atención de las violencias de género, generando mecanismos que
permitan prevenir, identificar, atender y realizar seguimiento de las
situaciones de violencia de género en las instituciones educativas.
• Es fundamental que el conjunto de docentes se involucre en
procesos formación y acción de manera comprometida, pues en
muchas instituciones la carga ha recaído de manera exclusiva en
algunos(as) docentes y en las personas que cumplen con la función
de psicoorientadores(as), docentes orientadores(as) y
coordinadores o coordinadoras. En este sentido se debe incentivar
la formulación, puesta en marcha y fortalecimento de proyectos de
aula y proyectos transversales.

• Continuar fortaleciendo los procesos institucionales de prevención y


atención de las violencias de género, generando mecanismos que
permitan prevenir, identificar, atender y realizar seguimiento de las
situaciones de violencia de género en las instituciones educativas.
• Involucrar a familiares, cuidadores o madres y padres de familia, de
forma activa, en ejercicios de diagnóstico y procesos de
sensibilización y formación en promoción de la equidad y la no
violencia de género, a través de las escuelas de familia o en otros
proyectos escolares, desarrollando estrategias que motiven la
participación, especialmente, de los padres (hombres) en escenarios
que propicien reflexiones y acciones alrededor de la promoción de
la equidad de género y la transformación de sus masculinidades en
todos los escenarios de sus vidas.

• Articularse a procesos de movilización social y comunitaria, junto


con otros actores sociales y comunitarios, que se orienten a la
equidad y la no violencia de género.
Muchas gracias!!

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