Epidemiologia y salud mental

Le damos la suficiente importancia a nuestra salud mental?, La salud mental es el equilibrio

que debe existir entre el sujeto y el medio que lo rodea, sea este social, económico o
cultural, busca principalmente el bienestar emocional, psicológico y social, de tal manera
que si uno de esto se encuentra fuera del balance, pueden manifestarse consecuencias que
generará una cadena de problemas, como el estrés, que posteriormente podrá manifestarse
en acciones como la mala toma de decisiones y manejo inadecuado de situaciones bajo
presión.

La salud física es muy importante en la vida, sin embargo, la salud mental es absolutamente
esencial para su existencia social, bienestar, felicidad, capacidad de trabajo y espíritu de
supervivencia. Las enfermedades mentales son aquellas que incluyen una amplia variedad
de afecciones que influyen en el comportamiento, pensamiento y estado de ánimo de las
personas. Es entonces que junto a la epidemiología nos mostrara como es un enemigo
silencioso que incluso podría estarnos afectando (1).

Una gran cantidad de problemas, asociados a trastornos mentales, hacen ya parte común de
las enfermedades epidemiológicas a nivel mundial, y se apunta que va seguir siendo un
problema muy común en nuestra sociedad, haciendo alusión a problemas mentales como
depresión y ansiedad, teniendo en cuenta que estos se dan por factores de riesgos como
presión social, economía de la familia, desempleo, estrés laboral y familiar, principalmente
(2).

¿Pero cómo se define a la salud mental?, la OMS define a la salud mental como “un estado
de bienestar en la cual el individuo consciente de sus propias capacidades, pueden afrontar
las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz
de hacer una contribución a su comunidad” (3).

Partiendo de esta definición, es normal pensar que gran parte de la población ha sufrido en
algún momento de su vida o pasado por problemas relacionados a estrés, depresión,
llegando incluso a pensar en pensamientos suicidas, sin embargo, la diferencia radica
principalmente en como cada individuo afronta dicho problema, siendo que, si la negativa
situación no se erradica por completo conlleva a situaciones, que inclusive pueden ser
trágicas (4).

Es por la epidemiología que sabemos que las enfermedades de salud mental es una
pandemia silenciosa hoy en día, que inclusive estaba presente mucho antes de la aparición
de COVID-19, y lo único que hizo el coronavirus fue a darlo a destacar, es la organización
mundial de la salud que establece una relación directa con la enfermedad y los factores
como, la pobreza, y las condiciones de vida de las personas (4)

Sin embargo, fue gracias a la pandemia que se pudo notar la importancia de la salud mental
y como este juega un rol importante dentro de la salud, no hay salud sin salud mental, el
miedo al contagio, las imágenes diarias de cientos de personas fallecidas, el aislamiento y la
escasez no fueron mas que unos de los cuantos indicadores que estimulaban la depresion, la
ansiedad, y el miedo a no poder vover a ver a sus familias (5).

A pesar del fin de la pandemia, dichos problemas siguen vigentes y es que no era el
COVID-19 el singular causante del mismo, viene a algo más arraigado a el desarrollo e
influencias de la personas, un tema no tan frecuente y que debe ser tomado muy en
consideración es el autoestima, que a raíz del boom de las redes sociales se ha percibido un
cambio en el deseo de ser reconocido y porque no, autosatisfacer el deseo de ser visto como
alguien atractivo, alguien famoso, alguien a quienes las personas miran con ojos de
admiración (6).

En las redes sociales un like o un me encanta, puede llegar a producir satisfacción a tal
punto que podría elevar el autoestima de una persona insegura, sin embargo el mismo
genera un estrés que incluso un solo comentario negativo criticando su apariencia, podría
llevarlo a una depresión y ansiedad genuina, y es que no todo es color de rosa, es por ello
que cuantificar la cantidad de personas exactas que no gozan a plenitud de la salud mental,
es muy difícil, debido a lo herméticos que son algunas personas al hablar de sus
sentimientos (7).

No solo la autoestima se ve afectado por el particular uso de las redes sociales, la adicción a
las mismas genera ansiedad, debido a que es “relativamente nuevo” los estudios
relacionados a este fenómeno, de no ser atendida con la debida atención que necesita, es
muy probable que en episodios futuros de epidemiología se hable a extensas de este tema y
como su impacto a afectado de manera negativa a la mayoría de la población (8).

En resumen, la salud mental es un tema muy importante que a veces se descuida o se

minimiza, todos deberíamos cuidar nuestra salud mental tanto como nuestra salud física, y
buscar ayuda profesional cuando sea necesario. También la sociedad debería ser más
consciente y solidaria con las personas que sufren de trastornos mentales, y no
estigmatizarlas o discriminarlas.

La epidemiología y la salud mental se relacionan porque la primera nos permite conocer la

magnitud, las razones y los efectos de los problemas de salud mental en la sociedad, así
como de planificar e implementar acciones de prevención. La epidemiología y la salud
mental son áreas fundamentales para mejorar la calidad de vida y el bienestar de las
personas. Por eso, es necesario que se invierta más recursos y esfuerzos en su estudio,
prevención e intervención, y que se promueva una cultura de respeto y solidaridad hacia
quienes sufren de trastornos mentales.
 BIBLIOGRAFÍA

1. Calderón M. D. Epidemiología de la depresión en el adulto mayor. Rev Med Hered. el 16 de

octubre de 2018;29(3):182–91.

2. Tuarez G, Mero G, Saldarriaga M, Castro J. Epidemiología de los problemas mentales:

Factores de Riesgo y Causas en Habitantes de Latinoamérica. Rev Hig de la Salud.
2022;7(2):22–17.

3. OPS/OMS | Organización Panamericana de la Salud. “No hay salud sin salud mental”
[Internet]. 2020 [citado el 7 de julio de 2023]. Disponible en:
https://www.paho.org/es/noticias/8-10-2020-no-hay-salud-sin-salud-mental

4. Rivas LXC. La Salud Mental, un verdadero problema de salud pública. Rev Colombiana
Salud Libre. 2018;13(1).

5. Huarcaya J. Consideraciones sobre la salud mental en la pandemia de COVID-19. Rev Peru

Med Exp Salud Publica. 2020;37(2):327–34.

6. Martínez A. Pandemias, COVID-19 y Salud Mental: ¿Qué Sabemos Actualmente? Rev

Caribeña de Psicología. 2020;4(2):143–52.

7. Critikián DM, Núñez MM. Redes sociales y la adicción al like de la generación z. Rev de
Comunicación y Salud. 2021; 11:55–76.

8. Reyes V, Ávila J, Capps J. Relación del Uso de Redes Sociales con la Autoestima y la
Ansiedad en Estudiantes Universitarios. Rev Enseñanza e Investigación en Psicología.
2021;3(1):149–139.