Está en la página 1de 295

5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.

com

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro Castilian trabaja de encubierto en la milicia de los cazadores.


Cuando se entera de una misión para destruir a la completa manada de su
compañero, corre a avisar a Conner McGregor a tiempo. Pero Conner no
cree a Siro respecto a que sean compañeros y le dispara.
Conner McGregor quiere creer al cazador que le advierte sobre el
ataque inminente, pero todo el mundo sabe que los compañeros se
encuentran por el olor y Siro no tiene el olor de una pareja. El cazador tiene
que estar mintiendo.
Yuri Miroslav se enfurece cuando sigue la pista de su compañero y
encuentra que le dispararon y está sangrando. Tiene que ayudarle a escapar
de los cazadores antes de que pueda demostrar al hombre que son
compañeros. Incluso entonces no puede reclamar a Siro porque el hombre
es un Tri-Omega y su otro compañero no sólo es peligroso, es un

McGregor, y de la manada McGregor no se puede fiar.


Cuando Siro, Yuri, y Conner se juntan, es peligroso para todos ellos.
Si son capaces de aprender a estar juntos en lugar de estar solos, podrían
tener una oportunidad de vida a través del desorden al que son atraídos. De
lo contrario, corren el riesgo de perder más que sus vidas. Están en peligro
de perderse el uno al otro.
1

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Vas a decirme lo que te tiene tan molesto?


—Casi que no. —Conner McGregor se divertía despreocupadamente
por la pregunta. Leyland Summers siempre estaba tratando de asegurarse
de que todos a su alrededor fueran tan felices como él. Era como la misión
del hombre en vida o algo así. Conner sólo no quería ser una mascota del
proyecto de Leyland.
—Podría ayudar hablar de ello.

—Lo dice el hombre con dos compañeros. —Conner se rió.


—Así que, ¿es porque no estás establecido regularmente? —
preguntó Leyland—. ¿Es por eso que estás de tan mal humor?
Conner puso los ojos en blanco y se apoyó contra el mostrador.
Sostenía su taza de café con ambas manos y bebió un largo trago, cualquier
cosa para evitar tener que responder al pequeño tri-omega. Le gustaba
Leyland bastante, pero no lo suficiente como para hablar de su vida sexual
o la falta de la misma.
Si no fuera por el hecho de que los dos muy grandes compañeros de
Leyland barrerían el suelo con él, Conner hubiera dicho exactamente a
Leyland cómo se sentía acerca de hablar de su vida sexual. Era un tema
totalmente fuera de los límites en su libro.
—Sólo estoy tratando de ayudar, Conner.
2

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner suspiró. —Lo sé, Leyland.


Leyland frunció el ceño y se mordió el final de su pulgar, lo que era
realmente un buen aspecto para el hombre. Conner imaginaba que más o
menos conseguía lo que quisiera por lo que a sus compañeros concernía.
Jake McAlester y Lucas Jones no tenían absolutamente ninguna resistencia
a uno de los pequeños pucheros de Leyland.
—Tal vez podríamos hacer una fiesta, —dijo Leyland de pronto, su
sonrisa brillando
circundantes. —. Podríamos
Podrías invitar aallí.
conocer a alguien algunas de las manadas de lobos

—Leyland, agradezco tu preocupación por mi vida sexual, pero es


sólo eso, mi vida sexual.
—Conner…
Conner rodó los ojos. —Soy perfectamente capaz de encontrar mi
propia cita, muchas gracias.
Leyland frunció el ceño de nuevo. —Sólo quiero hacerte sentir
mejor, que te sientas más cómodo aquí.
—Leyland, puedes leer a la gente. —Una hazaña que todavía
asustaba a Conner un poco—. ¿Parece que estoy incómodo aquí?
—No, pero…
—Estoy bien, Leyland, sólo un poco envidioso.
—¿De mí? —Los ojos de Leyland se agrandaron y una mano
revoloteó a su cuello.
—Más de la relación que tienes con Jake y Lucas. Creo que incluso
estoy celoso de Brom, Daniel, y Jaryn. —Se rió Conner—. Menos los
niños, por supuesto.
3
La expresión de Leyland se calmó y se puso serio. —¿No te gustan

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

los niños?
—Me encantan los niños. —Sonrió. La reacción de Leyland divirtió
a Conner—. Con tal de que pertenezcan a otra persona.
—Creo que ha sido genial tener a los hijos de Brom aquí. Cailin y
Iain son tan lindos, y traen a Jake y a Lucas de rodillas todo el tiempo.
Un estallido de risa salió de la boca de Conner antes de que pudiera
detenerla. —¿Y tú no lo haces? Te he visto utilizar esa pequeña mirada de
pucherito en tus compañeros más de una vez. Consigues lo que quieres.
Leyland sonrió y se echó hacia atrás su cabello castaño claro con su
mano. No se veía el más mínimo arrepentimiento. —Es un don.
—Es manipulación y condenadamente bien que lo sabes.
—Funciona, ¿no es así? —Se rió Leyland.
Conner abrió la boca para decir algo acerca de Leyland manipulando
a sus compañeros cuando el teléfono sonó. Alargó la mano sobre la cabeza
de Leyland y cogió el teléfono colgado de la pared y se lo llevó a la oreja.
—Rancho Wolfrik.
—Estás en peligro, —susurró una baja voz masculina a través del
teléfono.
Las cejas de Conner se alzaron por la sorpresa. Eso no era algo que
escuchara cada día. —¿Perdón?
—Estás en peligro, —susurró la voz— tú y el hombre contigo.
—¿Quién es? —Conner apagó la cuestión a través de los dientes
cerrados. No le gustaban las voces misteriosas, pero incluso le gustaban
menos los mensajes crípticos.
—Tu vida está en peligro, Conner. 4

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner
arrastrarse se espina
por su puso dorsal.
rígido, sintiendo un profundo y oscuro frío

—¿Cómo sabes quién soy yo?


—¿Conner? —Una pequeña voz se tambaleó a su lado.
Conner miró a Leyland cuando el hombre lo agarró del brazo.
Empezó a mover la cabeza para decir a Leyland que se quedara quieto.
Necesitaba averiguar quién demonios le estaba llamando y por qué.
Y entonces vio un punto láser rojo en el armario de la cocina por
encima de la cabeza de Leyland.
Conner dio la vuelta para mirar por la ventana de la cocina, tratando
de localizar quién tenía una luz láser apuntando a la casa. No podía ver
nada más que los verdes campos de hierba rodeados por colinas cubiertas
de árboles. No había ninguna persona a la vista.

—¡Conner! —La voz a través del teléfono se estaba poniendo más


áspera, pero aún hablaba en un susurro —. No me estás escuchando. Tú y el
hombre que está contigo estáis en peligro. Tenéis que salir de allí.
—¿Quién eres? —Conner exigió de nuevo, la ira empezando a
fortalecer su voz. Empezó a sentir un hormigueo a lo largo de su piel como
si todo el pelo estuviera empezando a ponerse de punta. Si no supiera
mejor, Conner habría pensado que tenía una especie de premonición,
porque sintió como si algo se acercara, algo malo.
—Considérame un amigo, —respondió la voz.
—Me gusta saber los nombres de mis amigos.
—Sólo sal de ahí. No estás a salvo.
—¿Cómo lo sabes?, —preguntó Conner mientras empezaba a
retroceder de la gran ventana sobre el fregadero. Estratégicamente, la 5

cocina no era el mejor lugar para estar en una pelea, pero el resto de la casa

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

era aún peor.


La cabaña donde vivía con Leyland y sus compañeros era hermosa,
pero también era una pesadilla si alguien estaba tratando de buscar en el
interior. Una pared de ventanas y puertas francesas forraban todo un lado
de la cabaña.
Puesto que el techo se arqueaba y las vigas eran abiertas, cualquier
bala que pudiera ser disparada dentro podría alcanzar cualquier objetivo
potencial. Sólo las
tenían ventanas. habitacionesLeyland
Y actualmente, y los baños parecían
y Conner seguros,
estaban e incluso
en la cocina, al
otro lado de la casa de seguridad.
—¡Abajo! —Espetó la voz.
Conner volvió a mirar alrededor para ver de nuevo la luz del láser
que se había movido y estaba ahora en la cabeza de Leyland. Dejó caer el
teléfono y alcanzó a Leyland. Conner utilizó el peso de su cuerpo para
llevarles a ambos al suelo de madera justo cuando la ventana de la cocina
quedó destrozada.
—Conner, —gritó Leyland.
Conner agarró a Leyland y tiró de él hacia el lado de la cocina junto
a la ventana, presionándolo hacia abajo sobre el suelo. Utilizó los armarios
y gabinetes como una barrera natural de las balas que empezaban a disparar
a través del lado de la casa.
—Leyland, —Conner gritó a través del fuerte y escalofriante ruido—
habla con Jake y Lucas. Hazles saber que nos están disparando.
—¿Disparando? —exclamó Leyland—. ¿Alguien nos está
disparando?
Conner se encogió ante el temor de que pudieran escuchar la voz de
Leyland. El hombre estaba aterrorizado. Conner inclinó su cuerpo sobre la 6
parte superior de Leyland para protegerlo del cristal y astillas de madera

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

por la balas golpeando los gabinetes.


—¡Habla con tus compañeros!, —gritó—. Adviérteles. Diles que
avisen a Brom.
Leyland asintió. Su cuerpo se estremeció debajo el de Conner más
grande. Conner se frotaba la mano hacia arriba y hacia abajo lo cual podía
llegar a la espalda de Leyland sin rodarle fuera de él. Leyland, obviamente,
nunca había disparado, y Conner necesitaba calmarlo si tenían esperanza de
salir de este lío.
Tan repentinamente como había comenzado, el tiroteo se detuvo. El
abrupto silencio era casi tan alarmante como el tiroteo lo había sido.
Conner se calmó y trató de escuchar todo lo que pudo, pero el único sonido
en la habitación era su pesada respiración y los sollozos de Leyland.
—¿Has hablado con Jake y Lucas? —Murmuró Conner en la oreja
de Leyland.
—Sí, —dijo Leyland en voz bastante alta.
—Shh, —dijo Conner rápidamente—. No sé quién está ahí fuera o si
pueden oírnos. Tienes que ser lo más silencioso posible.
—Está bien, —susurró Leyland mucho más tranquilo ahora. Tenía
los ojos tan redondos como platos.
—Tenemos que irnos, Leyland.
—¿Irnos? —La cara de Leyland estaba surcada de lágrimas mientras
miraba de nuevo por encima de su hombro —. Pero Jake y Lucas van a
llegar. Debemos permanecer aquí y esperarles.
Conner se alejó de Leyland, pero se quedó cerca del suelo. —Lo
siento, cielo, pero el que nos está disparando podría estar haciendo su
camino hacia la casa. No queremos que nos atrapen en la cocina si lo
7
hacen.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

El rostro
que fuera de Leyland
posible. palideció
Ya estaba aún más,
ceniciento. —¿Dey Conner
verdad no había
crees quepensado
van a
venir aquí?
—No lo sé, pero no podemos correr ningún riesgo. Tenemos que
salir de la cocina, por si acaso.
Leyland sollozó, pero asintió con la cabeza. —¿Qué necesitas que
haga?
—Buen hombre. —Sonrió Conner. Sabía que Leyland estaba
aterrorizado, y con toda la razón, pero el hombre estaba funcionando, y eso
era algo. Si Conner podría devolver a Leyland a sus compañeros para que
pudieran mantenerle seguro, entonces podría tratar de averiguar quién
estaba disparándoles.
Conner hizo un gesto con la mano para que Leyland lo siguiera y
permaneciera abajo en el suelo. Leyland asintió y empezó a arrastrarse por
el suelo. Conner empezó a seguir detrás de Leyland cuando vio el teléfono
colgando. Él nunca lo había vuelto a colgar.
Conner agarró la pierna de Leyland para que dejara de arrastrarse por
la cocina y luego se llevó el dedo a la boca para decir a Leyland que se
quedara tranquilo. Una vez que Leyland asintió con la cabeza, Conner
recogió el teléfono y lo sostuvo en la oreja.
—¿Estás ahí? —Susurró Conner.
—Oh, gracias a Dios, todavía estás vivo.
Conner estaba un poco preocupado por la cantidad de alivio que
pudo escuchar en la voz del extraño. No conocía a este hombre. Conner era
muy bueno reconociendo voces, y estaba absolutamente seguro de que
nunca le había oído antes.
—Apenas. 8

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Estás herido?
—Sólo mi orgullo, —resopló Conner.
Había sido tomado por sorpresa. No solía ser tan estúpido. Tal vez
vivir en el Rancho Wolfrik le había hecho suave. El vigilante Conner
estaba normalmente despierto y listo para cualquier cosa. Lo había
necesitado estar al vivir bajo el gobierno de Alfa Angus McGregor.
El hombre era una amenaza para la sociedad. Después de vivir bajo
el gobierno del alfa durante casi toda su vida, Conner lo sabía por
experiencia personal. Si Conner tuviera que elegir a alguien que quisiera
tratar de matarlo, Angus McGregor habría sido su primera opción.
El alfa tenía una razón personal para tratar de matar a Conner.
Después del fiasco de un par de meses anteriores con el alfa tratando de
matar a su hijo, Brom, y robar los hijos del hombre, Conner había
desafiado al hombre por el liderazgo de la manada en frente de todo el
Consejo del Lobo.
Mientras que su desafío había sido temporalmente dejado a un lado,
Conner era el primero en la fila para luchar contra el hombre, si salía de la
línea o iba en contra del mandato del Consejo manteniéndose alejado de
Brom, sus compañeros, y sus niños.
El Alfa Angus McGregor odiaba a Conner.
—Las heridas de bala son más difíciles de sanar que tu orgullo, —la
voz desconocida, dijo.
—¿Por qué me lo advertiste?
Un largo silencio vino a la línea telefónica.
—Hola, —preguntó Conner, cuando el hombre no respondió.
—Estoy aquí. 9

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Por qué me lo advertiste? —preguntó Conner de nuevo.


—Tuve que hacerlo.
—¿Por qué?
—Tú no quieres saber.
—Si no quisiera saber nada, nunca hubiera preguntado. —Conner
podría haber jurado que oyó una risa baja, pero podría haber estado
equivocado. Empezó a sentirse frustrado con la misteriosa voz al teléfono.
El hombre no estaba cediendo cualquier información.
—¿Quién eres tú?
—No quieres saber eso tampoco.
Conner gruñó profundamente en su garganta. —Mira, estoy muy
cansado de que te andes por las jodidas ramas. Quiero saber quién diablos
eres tú.
—Soy tu amigo.

10

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro Castilian colgó el teléfono móvil en la mano antes de que


Conner pudiera responder rápidamente y luego miró a su alrededor para ver
si alguien le había visto hacer la llamada. Ser atrapado no era parte de su
plan, pero no podía permitir que Conner fuera herido, no importa cuánto
peligro pudiera haber en advertir al hombre.
Se metió el teléfono en su compartimento oculto en su negro
pantalón de combate y luego volvió a conectar el dispositivo de
comunicación en su oído. Había desconectado el pequeño auricular antes
de hacer su llamada. No tenía sentido dejar que alguien más escuchara su
conversación con Conner. Esto podría significar la vida de ambos, si
alguien lo hiciera.
Siro recogió su rifle de francotirador. Con una última mirada a su
alrededor para asegurarse de que nadie lo había visto hacer a su llamada, se
alejó del árbol en el que se había estado escondiendo detrás y se abrió
camino hasta el borde de la línea de árboles, donde los demás hombres en
su escuadrón estaban estacionados. Se colocó detrás de un árbol más
grande y se puso en cuclillas, escuchando la charla sobre el comunicador en
su oreja.
—¿Puede alguien ver algo? —alguien preguntó.
—No hay movimiento en la casa.
Siro dio un suspiro de alivio al oír la respuesta. Conner y Leyland no
habían sido vistos. Sólo esperaba que le escucharan y consiguieran largarse
de la casa, porque el infierno venía y estaba fuertemente armado. 11

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro sabía
en disparar que elQuerría
a la casa. líder deentrar
su escuadrón no se
y asegurarse dedetendría simplemente
que el trabajo se hizo.
Y el trabajo implicaba algo que ponía a Siro enfermo del estómago,
asesinando a todo el mundo en la propiedad.
—Smyth, muévete en posición, —dijo el teniente Albright —. Quiero
que nos cubras mientras entramos.
Un hombre a varios pies de distancia de Siro se adelantó hasta
quedar
empezóena la cima su
montar de rifle
una pequeña colina. Sededejó
de francotirador altacaer sobre Siro
potencia. su estómago
conocía ya
todos los hombres en el pequeño escuadrón con el que estaba y Smyth era
del que más necesitaba preocuparse. Era el segundo francotirador en el
equipo, siendo Siro el primero.
—Foster, ve con Anderson y tomar el flanco derecho. Jones y
Lancer, tomad el flanco izquierdo. Iré por el centro. —La risa del teniente
Albright era fría—. Y recordad, chicos, las órdenes son nada de
sobrevivientes.
Siro frunció el labio superior, haciendo una mueca mientras se movía
para unirse a Anderson. Eso no era lo que quería oír, pero no se sorprendió.
El teniente tomaba su trabajo muy en serio, y era un hombre sediento de
sangre. Le gustaba su trabajo un poco demasiado.
Siro comenzó a preguntarse sobre las ventajas de estar de encubierto
con los cazadores, se abrió paso por el lado derecho de la colina hacia la
casa. Se hacía cada vez más y más difícil mantener su cubierta como
cazador, especialmente cuando era enviado en misiones tales como esta.
Hasta ahora, Siro había sido capaz de evitar cualquier matanza
absoluta, ya sean lobos o humanos, pero había maltratado a algunos para
mantener su tapadera. Y estaba asqueado por cada cosa que hizo, asqueado
y avergonzado.
12
Sólo que no veía una salida a lo mismo. Había estado trabajando en

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

secreto
perfecto durante años.
shifter para Su habilidad
trabajar como Su
de encubierto. tri-omega
habilidadleeraconvirtió en el
el olor. Podría
enmascarar un olor, mejorarlo, o incluso emitir otro olor. Y podía hacerlo
con más que él mismo. Podía hacerlo para cualquiera que estuviera
tocando.
Ninguno de los cazadores sabían que era realmente una de las
especies que estaban cazando. Olía igual que cualquier otro idiota con un
arma y odiaban a alguien que fuera diferente.
Sin embargo, estar rodeado de gente diariamente que odiaba a los de
su tipo sólo porque eran diferentes empezaba a agotarle. Cada nueva
misión era cada vez más difícil de completar.
Siro estaba cansado. Tener a su compañero estando en la mira de los
cazadores era el colmo. Sabía que estaría defraudando a un montón de
gente si detenía su trabajo de encubierto, pero proteger a su compañero
parecía mucho más importante que cualquier dato de información que
pudiera reunir trabajando con los cazadores.
Su único pensamiento ahora era cómo llegar a Conner antes de que
uno de los otros cazadores lo hiciera. Si salvaba a otros shifters en el
camino, mucho mejor. Pero Conner era su primera prioridad. Sólo esperaba
que Conner estuviera usando la cabeza y se largara de la casa.
Anderson tenía explosivos.

Técnicamente, se suponía que Siro no supiera acerca de los


explosivos, pero podía oler las sustancias químicas volátiles en Anderson.
Otra faceta de su capacidad tri-omega era que podía oler aromas que otra
gente no podía, incluso los lobos.
Aunque le habían dicho que sólo estaban yendo a una misión de
exterminio, Siro sabía que el plan era destruir todo el Rancho Wolfrik y
todos sus edificios. Albright no tenía intención de dejar un simple edificio 13

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

en pie.
Siro sabía que sólo tenía una oportunidad de salvar a las personas en
el rancho, y sus posibilidades de salir de esta con vida eran bastante tenues.
Había entrenado con los hombres con los que estaba, y eran buenos en lo
que hacían. Sólo podía esperar que él fuera mejor.
Siro llegó al porche trasero al mismo tiempo que Anderson lo hizo.
Se alegraba de haber sido emparejado con el hombre en lugar de uno de los
otros. Dudaba
sólo podría serque fuera
capaz de capaz
salvarde mantener
a los el rancho
que estaban de de
dentro serladestruido,
casa antespero
de
que explotara.
Siro miró a Anderson y asintió con la cabeza hacia la casa. Anderson
asintió con la cabeza hacia atrás y luego hizo un gesto con los dedos para
que Siro encabezara primero. A Siro no le gustó, pero no podría
exactamente negarse sin inclinar su mano.

Siro se movió hacia el porche, manteniéndose en cuclillas bajo el


suelo de madera. Cuando llegó a la primera de las numerosas ventanas a lo
largo de ese lado de la casa, se asomó por el borde, escaneando el interior
de la casa lo más rápido que pudo.
Sabía que el Teniente Albright entraría a través de la puerta de la
cocina y los otros dos hombres en el equipo entrarían a través de la puerta
principal. Eso dejó el lado de la casa con la pared de ventanas a él y
Anderson.
Siro vio la puerta de la cocina abrirse lentamente mientras atrapaba
un poco de movimiento por el rabillo del ojo. Vio la puerta del dormitorio
cerrarse justo cuando volvió la cabeza. Siro rogó que fuera donde Conner
estaba. Y esperaba que Conner tuviera una manera de salir de esa
habitación. Sería buscado, y si alguien le hallaba en el interior sería
tiroteado.
14

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

A menos que…
Siro miró atrás a Anderson y le indicó con la mano que iba a
encabezar abajo a las puertas dobles que conducían a la misma habitación
donde esperaba que Conner estuviera dentro. Le dijo a Anderson que
entrara a través de las puertas dobles que conducían a la sala principal.
Golpearían la casa en dos frentes diferentes.
Porque se suponía que él no supiera acerca de los explosivos, sabía
que la ideaSiro
la cabeza, le gustaría a Anderson.
se deslizó a lo largo Tan pronto hasta
del porche como que
el hombre
llegó a asintió con
las puertas
dobles en el extremo final. Apretó la mandíbula al abrir la puerta, rezando
para que no estuviera a punto de ser disparado. No tenía ni idea de qué tipo
de recepción iba a conseguir.
Conner no tenía ninguna razón para confiar en él.
Siro entró en la habitación y cerró suavemente la puerta a su espalda.
Un rápido vistazo a la habitación le mostró que estaba vacía. Siro levantó la
nariz en el aire y olió. La satisfacción frunció los labios mientras seguía a la
mejor fragancia que había olido alguna vez derecho a la puerta del baño.
Siro dejó caer las manos alrededor de su M16 y abrió lentamente la
puerta, manteniendo los brazos en alto en el aire. Si Conner de hecho
estaba escondido en el cuarto de baño, Siro no quería parecer como una
amenaza y posiblemente perder la cabeza antes de que tuviera la
oportunidad de conocer realmente a su compañero.
—Vadim Miroslav te envía sus saludos, —murmuró tan pronto como
entró en el cuarto de baño, esperando que sus palabras evitaran que su
garganta fuera degollada—. Te da la bienvenida a la isla de Vourdala.
Sabía que había acertado cuando de pronto sintió una fría hoja
presionar contra su cuello y un cuerpo duro presionado contra su espalda.
Siro ni siquiera podía respirar. Sólo levantó las manos más arriba en el aire 15

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

y esperaba que su compañero tuviera paciencia.


—Hola, Conner.
—¿Quién eres tú? —Las palabras fueron susurradas desde el hombre
detrás de él.
—Has preguntado eso antes. —Siro sintió una oleada de diversión en
sus propias palabras—. La respuesta sigue siendo la misma, pareja.

—No somos pareja. —La voz de Conner era dura y exacta.


—Inténtalo de nuevo, Conner.
Siro gruñó cuando peligrosamente se estaba dando la vuelta para
enfrentar a Conner. Al menos el cuchillo no estaba aún detenido en su
garganta. El aliento de Siro tartamudeaba en su garganta cuando levantó los
ojos y consiguió su primera mirada de cerca de su compañero.
Siro había visto a Conner desde la distancia en la reunión del
Consejo del Lobo en la isla de Vourdala cuando el ejecutor de la manada
desafió al Alfa McGregor. Había sido increíblemente caliente entonces.
Siro había fantaseado incluso sobre las imágenes del hombre.
Pero nada podría haberlo preparado para Conner McGregor en vivo.
Sus enormes hombros llenaban la camiseta que llevaba, casi reventando las
costuras. Se puso de pie alto y erguido como un altísimo abeto, sólo un par
de pulgadas más bajo que Siro.
Pero era la fuerza inherente de la mandíbula cuadrada en la cara de
Conner la que atrajo más a Siro. La sombra de una barba dio a Conner
incluso un aura más varonil. Siro tuvo el impulso loco de frotar su mejilla
contra la de Conner.
Incluso empezó a inclinarse en dirección de Conner.
La hostilidad en los ojos de color verde pálido de Conner prometía 16

represalias si lo hacía. Siro sonrió y dio un paso atrás. Ya habría tiempo

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

más
lugar,tarde para
tenían quefrotarse
escaparpor
contodo
vida.el cuerpo delicioso de Conner. En primer
—Mi nombre es Siro Castilian. Soy un amigo del Alfa Vadim
Miroslav.
—Estás mintiendo.
—El hermano de Vadim, Niko, está acoplado a mi hermano Serge.
—Rodó Siro sus ojos cuando Conner se limitó a seguir mirándolo —. Dijo
que contara a Leyland que Sasha necesitaba ayuda para cavar otra piscina
en su patio trasero.
Siro todavía no entendía exactamente lo que quería decir, pero al
parecer Conner lo hacía. La tensión en su rostro poco a poco comenzó a
desvanecerse lejos sólo para ser sustituida por confusión. Siro podía ver las
preguntas que venían.
—Mira, no tengo tiempo para explicaciones en estos momentos. Los
cazadores están ya entrando a hurtadillas en la casa para matar hasta el
último lobo vivo aquí y volar cada maldito edificio en este rancho.
Tenemos que largarnos todos de aquí ahora.
—Ya he enviado a Leyland a través de la ventana.
Siro miró por encima del hombro. La gran ventana sobre la bañera
estaba abierta, las cortinas blancas soplando con la brisa. —¿Va hacia sus
compañeros?
—Igual que estoy diciéndote. —Rió Conner—. Sólo porque digas
que conoces al Alfa Miroslav no significa que realmente lo hagas. No creo
una palabra que salga de tu boca.
Siro quería golpear a Conner pero se conformó con rodar los ojos.
—Mira, entiendo que no me conozcas. De verdad lo hago. Pero
17
tienes que confiar en mí.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¡No tengo que hacer una mierda!


Siro gruñó mientras se llenaba de frustración. La vida de Conner
estaba en juego aquí, junto con todos los demás. Agarró a Conner por la
camisa y lo sacudió. —¿Qué parte de los cazadores vienen no entiendes?
Los ojos de Conner se estrecharon. Agarró las manos de Siro y las
quitó de la camisa, empujando a Siro un paso atrás. —Oh, entiendo que los
cazadores se acercan. Uno de ellos está de pie justo en frente de mí.
—Mira, ¡estúpido hijo de puta! —espetó Siro— Tú… —Siro de
repente olió algo más, o más bien a alguien más. Y quienquiera que fuese,
estaba rápidamente acercándose a la posición suya y la de Conner —.
Tenemos que ir ahora, —susurró ásperamente.
—Yo no voy a ninguna parte contigo.
—¡Eres el hombre más obstinado que he conocido! —Gruñó Siro en
vez de gritar como quería. Tenía que sacar a Conner de allí lo más
rápidamente posible. Mientras que podría enmascarar el olor de Conner, no
podía ocultar al hombre mismo. Conner era lobo de cabo a rabo.
Siro se deslizó detrás de la puerta justo cuando se abrió. Sacó el largo
cuchillo de combate de la vaina en su muslo y lo levantó en el aire y luego
rezó para que solo un hombre entrara por la puerta. No sería capaz de matar
a dos de ellos antes de que llegaran a su compañero.
En el momento en que el hombre entró por la puerta, Siro empujó
para cerrar la puerta con el hombro y lo agarró. Envolvió su brazo sobre la
cabeza del hombre y le cortó el cuello con el cuchillo que sostenía. Al
segundo sintió líquido caliente salpicar sobre su mano, Siro dejó caer el
cuerpo hasta el suelo.
Rápidamente abrió la cerradura de la puerta y luego se puso en
cuclillas al lado del cuerpo, reconociéndolo como Anderson. Bueno. Siro
comenzó a pasar por la mochila del hombre, con la esperanza de que 18

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Anderson
estaban ya todavía tuviera
dispuestos para los explosivos encima. Si no lo hacía, entonces
marcharse.
—¿Qué estás haciendo?
—Buscando explosivos.
—¿Por qué?
—Así no pueden volar la casa de Jake.
—¿Por qué te importaría?
Siro suspiró y miró a su compañero. Aún podía ver la cautela en los
ojos de Conner, pero ahora estaba teñida con curiosidad. —Porque va a ser
un completo infierno mucho más fácil sacar a todos fuera de aquí, si el
lugar no está explotando a nuestro alrededor.
Los ojos de Conner se entornaron especulativamente. —¿Quién eres
tú?
—¿De verdad, hombre? —Siro Saludó al cuerpo muerto a sus pies —
. Te dije quién era. Acabo de matar a un hombre para salvar tu culo. ¿Crees
que podrías darme un poco de descanso ahora?
—No.
Siro chasqueó la boca cerrada y apretó los dientes. Su compañero era
imposible, y si no estuvieran en tanto peligro, Siro imaginó que podía
apreciarlo. Por el momento, sin embargo, sólo quería golpear a Conner
directamente en la boca.
—Mira. —Siro estaba de pie, empujando la mano por su corto pelo
en un gesto de frustración—. Tu vida está en peligro. Cada última persona
en este rancho está en peligro. Estos hombres son fanáticos. No pararán
hasta que cada uno de nosotros haya muerto. ¿Entiendes eso?
19
Conner sonrió, cruzando los brazos sobre el pecho. —Entiendo que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

viniste con ellos.


—¡Yo no soy tu enemigo!
—Demuéstralo.
Vaya, no tenía tiempo para esto.
—¿Y cómo demonios quieres que haga eso?
—Cambia
—¿Ahora?
—Sí, ahora mismo. Si eres un lobo shifter, entonces no deberías
tener ningún problema en cambiar.
No tenía tiempo para cambiar. Tenían que irse ahora, maldita sea.
Anderson podría estar muerto, pero el resto de los cazadores no estarían
lejos detrás de él. Siro ni siquiera tenía tiempo para dejar que su olor
verdadero llegara. Tomaba una gran cantidad de energía enmascarar su
olor. Una vez que apagaba el enmascaramiento, Siro dudaba que tuviera la
energía para encenderlo de nuevo. No era que el mismo enmascaramiento
fuera difícil pero sí el cambio entre tener olor y no tenerlo. Eso le drenaba
casi cada vez.
Además, tenía una especie de esperanza de que Conner le creería
teniendo en cuenta todo lo que le había dicho el hombre. Un cazador
normal no debería saber acerca de Vadim y Sasha o su conexión con
Leyland. Pero cuando Conner continuó mirándole, Siro sintió la esperanza
desvanecerse.
Terco lobo del culo.
Siro negó con la cabeza al dejarse caer de nuevo junto al cadáver de
Anderson y empezó a revisar a su manada de nuevo. —Sabes, la buena
apariencia sólo te llevará llegar tan lejos. Después de un tiempo, ese rostro 20

hermoso tuyo va a empezar a arrugarse y hundirse y tendrás que confiar en

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

tu cerebro, y luego ¿dónde estarás?


—Sería estúpido creer en la palabra de un desconocido que es quien
dice que es, sobre todo dado que llegó con un grupo de personas que
comenzaron disparándome.
Siro se puso el arnés de dos puntos sosteniendo su rifle en su lugar.
Tiró por encima de su cabeza y arrojó el arma a Conner, contento de que el
hombre la atrapara antes de que cayera al suelo. Le encantaba esa arma. —
Espero que sepas cómo usar una de esas.
La ceja rubio oscura de Conner se arqueó por un momento, y luego
miró el arma. La mandíbula de Siro cayó y el orgullo comenzó a llenarle
cuando Conner expertamente comprobó el arma, el cargador, el alcance de
alta potencia, y después cargó un cartucho en la recámara.
Manejaba el M16 como un experto.
Conner levantó la vista, la comisura de sus labios encrespándose. —
No, nunca he manejado una en mi vida.
Siro resopló, sacudiendo la cabeza. —Maldita sea, eres un terco del
culo hijo de puta.
—Sí.
—Mira la ventana mientras termino de buscar a este tipo. Si tengo
suerte, todavía tiene los explosivos encima. —Siro realmente no quería
correr por la explosión de las casas. Eso nunca resultaba bien —. ¡Sí! —
Anderson no había colocado los explosivos todavía.
—¿Los encontraste?
—Sí. —Siro volvió a subir la cremallera de la bolsa y luego se la
quitó a Anderson. Se puso de pie y tiró la bolsa a los pies de Conner —.
¿Esta habitación tiene un armario o algo lo suficientemente grande como
21
para ocultar su cuerpo?

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Los ojos de Conner se estrecharon de nuevo. —¿Por qué?


—Estos chicos tienen un pésimo sentido del olfato. Cuanto más
tiempo podamos engañarles en el pensamiento de que Anderson está
poniendo estas cargas, más tiempo tendremos para largarnos de aquí.
—Ya te lo dije, amigo. Yo no voy a ninguna parte contigo.
Oh, esto no podía estar pasándole. Conner iba a conseguir que les
mataran a ambos. Y eso era sólo algo que Siro no podía dejar que
sucediera. Si tenía que morir, que así fuera, pero no podía dejar que su
compañero muriera.
—Bien, entonces dispárame y puedes irte.
Siro parpadeó y se estrelló contra la pared detrás de él cuando el
dolor explotó en su hombro. Apretó su mano sobre la enorme herida para
detener el flujo de sangre. Su mandíbula casi cayó en el pecho mientras
miraba fijamente a través del cuarto de baño a su compañero. —Jodido, me
disparaste.
Conner se encogió de hombros, sin parecer en lo más mínimo
arrepentido. —Me dijiste que lo hiciera.
—Pero realmente no pensé que lo harías.
—Sólo es para demostrarte que no deberías estar pensando.
Siro quedó asombrado con su compañero mientras lentamente se
deslizó por la pared hasta sentarse en el suelo. —Jodido, me disparaste, —
susurró de nuevo—. No puedo creer que me dispararas.
Conner se inclinó y agarró la correa de la mochila, balanceando la
bolsa sobre su hombro. —Mira, amigo, no te conozco. Ni siquiera te he
visto antes. ¿Y esperas que me crea alguna dudosa historia del culo acerca
de que eres mi compañero y tratando de salvarme? Creo que jodidamente
22
no.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

volver— Pero es cierto,


a comenzar a subir—por
murmuró Siroabierta
la ventana mientras observaba
—. Soy tu pareja. a Conner

23

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

El hombre estaba jodidamente loco.


Conner sabía que podría detectar a su compañero desde el primer
momento que lo oliera. No había duda de la forma en que un compañero
olía, y Siro Castilian no olía como un compañero. Por supuesto, Siro
intrigaba a Conner más que cualquier otro hombre que hubiera conocido en
años, pero eso no le alejaba del hecho de que Siro no olía como un
compañero.
A Conner no le gustaba la idea de simplemente disparar a alguien.
Sentía frío, aunque Siro era un cazador inclinado a tratar de matarlo y todo
el mundo lo sabía. Conner prefería luchar uno-a-uno, en una pelea justa.
Siro podría haber tenido un cuchillo, pero él seguía estando más o menos
desarmado.
Simplemente no le cayó bien a Conner.
Pero tampoco iba a dejar que ninguno de sus amigos muriera. Tenía
que llevarles a un lugar seguro, y luego pensaría en Siro. ¿Quién sabía? Tal
vez el hombre pudiera estar a salvo. No todos los cazadores eran malos. La
mayoría de ellos estaban simplemente equivocados en sus creencisa de que
los cambiaformas eran malos. Tal vez Conner pudiera convencer al hombre
de lo equivocado que estaba.
Después que salvara a sus amigos.
Conner se puso en cuclillas cerca del suelo y se abrió paso entre el 24
granero y alrededor del lago a las otras casas, donde esperaba que los

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

demás
atacaronestuvieran
el rancho, esperando.
pero tenía laNo sabía exactamente
esperanza cuántas
de que hubieran personas
golpeado a la
casa principal primero.
Cuando Conner llegó al borde de la casa de Brom, se puso en
cuclillas por una ventana y se asomó por el borde, mirando dentro. La casa
parecía bastante normal. Nada parecía fuera de lugar. Pero también estaba
vacía. Desde donde estaba, Conner no podía ver una sola persona.

desde Entrar por la puerta


casi cualquier punto principal
de vista.noEso
eradejaba
una opción. Podríaenserel visto
a la puerta lado
opuesto de la casa que daba a la cocina. Era también el lado de la casa
donde los vehículos se encontraban estacionados.
Conner se levantó y se dirigió hacia el lado opuesto de la casa,
asegurándose de que se agachaba al pasar las ventanas. Si había alguien
esperándole en el interior, no quería que supieran que iba a venir.

Conner aminoró la marcha al llegar a la parte posterior de la casa al


otro lado. Podía oír voces, apresuradas y ansiosas voces. Rezó para que se
tratara de los miembros de la manada Wolfrik y no los cazadores.
Conner aplastó la espalda contra la casa y luego olfateó el aire. Había
un leve rastro de lobo, pero había olor humano también. La preocupación
de Conner se duplicó, apretando en sus entrañas. Sabía que no había seres
humanos viviendo en el rancho, sólo lobos shifters.

Cuando oyó el crujido suave de una puerta abrirse, un sonido débil,


pero uno que estaba totalmente fuera de lugar con el silencio, Conner se
asomó alrededor de la esquina. Rápidamente retrocedió y se presionó
contra la casa cuando vio a dos hombres vestidos con uniformes negros
pisando dentro de la cabaña.
No pertenecían a la manada, lo que significaba más probablemente
que eran parte del equipo cazador que atacó el rancho. Conner no sabía si 25
sus amigos estaban dentro de la casa o no. Sus coches estaban aparcados a

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

un lado de la casa, lo que significaba que probablemente estuvieran.


También significaba que tendría que entrar para averiguarlo.
Conner solía ser el ejecutor para la manada McGregor. Incluso si no
tenía ese cargo, estaba arraigado en él proteger a su manada. Proteger la
manada estaba arraigado en todos los lobos, pero era diez veces peor en un
ejecutor. No sólo Conner sentía la necesidad de proteger a su manada,
sentía la necesidad de destruir a cualquiera que les hiciera daño y los
barriera de la faz de la tierra.
Conner sacó la mochila de su hombro y la bajó al suelo. Se debatió
sobre llevar el M16 en la casa. Un rifle significaba que no tendría que
acercarse a sus objetivos. Podía eliminarles a una distancia. Demonios, la
maldita cosa incluso tenía un silenciador. Nadie podría escucharlo si
apretaba el gatillo. Pero disparar un arma también dificultaría la capacidad
de Conner para utilizar sus garras.

Y Brom lo mataría si disparaba en la casa del tipo.


Conner estableció el M16 abajo al lado de la mochila de explosivos.
Con suerte, tendría la oportunidad de agarrarla más tarde. No quería que
uno de los niños se encontrara con ella por accidente. Esperó hasta que la
puerta de la cocina se cerró y luego rápidamente se abrió camino por el
lado de la casa.
Rápidamente se asomó por la ventana de la cocina en el fregadero y
vio a dos figuras oscuras dirigiéndose desde la cocina y más dentro en la
casa. Esperó a que la cocina estuviera despejada y luego lentamente avanzó
para abrir la puerta, haciendo una mueca cuando chirrió.
Conner rezó para que los dos intrusos no lo oyeran.
Se deslizó en el interior de la casa y tendió la mano contra la puerta,
como si cerrara, con la esperanza de que no hiciera mucho ruido. Tan
pronto como la puerta se cerró, Conner extendió sus garras y luego levantó 26

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

la nariz endeel nuevo.


y husmeó aire y comenzó a olfatear. Se acercó a la entrada de la cocina

Qué bien, se habían separado y habían ido en diferentes direcciones.


Eso haría más fácil eliminarles. Pero también significaba que podrían
eliminar a Conner con la misma facilidad, o a uno de los miembros de su
manada.
Conner decidió ir tras el cazador haciendo su camino a través del
suelo del primer
casa. Después de piso.
haber Siguió
estado el
en olor deldehombre
la casa en numerosas
Brom en la parte trasera de la
ocasiones,
conocía el diseño de memoria. Esperaba que fuera una ventaja frente a los
cazadores.
El fuerte olor a humano venía del estudio. Conner no era un
especialista en combate en absoluto, pero sabía que el cazador estaba
buscando habitación por habitación. Si el hombre se encontraba
actualmente en el estudio, entonces la habitación de la familia sería el
próximo.
Conner se apresuró en esa dirección tan rápido como pudo, mientras
mantenía firmemente sus sentidos en su entorno. Se deslizó más allá de la
puerta del estudio, deteniéndose justo en el otro lado de ella para escuchar
y asegurarse que el cazador en verdad estaba dentro.
Lo estaba.

Conner podía oler el fuerte hedor corporal humano y un recién


disparado arma, que le dijo que era uno de los hombres que tenían que
habían disparado a Leyland. Cuando Conner oyó pasos que se acercaban
hacia el estudio, rápidamente se dirigió a la habitación de la familia y
esperó justo al lado de la puerta.
Cualquier idiota lo detectaría al momento en que entraran. Conner
sólo podía tratar de ser más rápido que el actual idiota dirigiéndose hacia 27
él. Se preparó y esperó, su corazón latiendo fuera de control cuando fuertes

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pisadas se acercaban a su posición.


El cañón de un arma de fuego apareció en la puerta seguido casi
inmediatamente por un cuerpo vestido de uniforme táctico negro. El cañón
del rifle giró a la izquierda y luego comenzó a oscilar hacia la derecha,
donde Conner estaba parado de pie.
Conner agarró el cañón con una mano, haciendo una mueca cuando
el caliente metal quemaba en la palma de su mano. Ignoró el dolor y tiró el
rifle
hombrelo más fuerte
gruñó que pudo.
y comenzó A medida
a oscilar haciaque el arma arremetió libremente, el
Conner.
Conner arrojó el arma al otro lado de la habitación con una mano y
golpeó en el brazo del hombre con la otra. Oyó un grito agudo y sintió el
caliente derrame de salpicaduras de sangre en su rostro. Conner gruñó bajo
en su garganta cuando entró a matar. Hizo una mueca mientras hundía sus
afilados colmillos en la garganta del hombre y la sangre de mal sabor, llenó
su boca.
Nunca entendería cómo la gente podía morder a los humanos. El
sabor era desagradable. Cuando un sonido de gorgoteo lento llegó a sus
oídos, Conner extrajo los dientes y escupió la sangre que había llenado su
boca. Dejó caer las manos y observó desapasionadamente cómo el cazador
se deslizó por la pared y luego se desplomó en el suelo, la sangre de su vida
derramándose sobre la alfombra de color marrón claro hasta que estaba
oscura y saturada.
A Conner no le gustaba mucho matar, pero comprendió la necesidad
de ello, especialmente cuando su manada estaba en peligro. Si los
cazadores no esperaban ser asesinados, no debían atacar a las manadas de
lobos.
Conner pasó la camisa a través de la boca para quitar la sangre
restante de la cara mientras observaba al cazador tomar su último aliento de
vida. Odiaba esta mierda. Deseaba que los cazadores sólo les dejaran 28

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

jodidamente en paz.
En todos sus años, nunca había matado a nadie que no lo mereciera.
No atacaba a las personas sólo por ser quienes eran. Desde luego, no
perseguía a familias enteras, mujeres o niños. Había algunas líneas que aún
no cruzaría.
Con el olor repugnante de la sangre llenando sus fosas nasales,
Conner salió de la habitación de la familia y comenzó a hacer su camino
escaleras arriba. No
sus hijos estaban estaba Incluso
situados. muy seguro de dónde
podrían Brom,
no estar susdecompañeros
dentro la casa. Peroy
Conner no podía correr ningún riesgo. Tenía que estar seguro. Y eso
significaba registrar el lugar y eliminar a los otros cazadores.
Sólo esperaba que pudiera hacer las dos cosas antes de que más
cazadores llegaran. Conner era bueno, pero incluso no sería capaz de luchar
contra toda una unidad de cazadores armados con mierda por cerebros y
sed de muerte de cualquiera que era diferente a ellos.
Conner estaba agradecido de que la casa de Brom fuera construida
recientemente. Las escaleras estaban libres de chirridos, al igual que el
piso. No hizo ningún sonido cuando siguió el olor del otro cazador
escaleras arriba y abajo del pasillo a uno de los dormitorios.
Su corazón empezó a latir más rápido cuando oyó voces altas,
levantadas mezclarse con réplicas airadas. El aroma del miedo llenaba el
aire. Se mezclaba con el odio puro. Era un odio tan fuerte que casi
abrumaba todo lo demás en el aire.
Conner se atragantó por el olor pútrido. Sabía que los cazadores
odiaban a su especie, pero este nivel de odio iba más allá de cualquier cosa
que alguna vez había experimentado antes, a excepción quizá del Alfa
Angus McGregor. Ese hombre odiaba a todos y a todo. Pero este cazador,
quienquiera que fuese, verdaderamente se acercaba mucho al ex alfa de
Conner. 29

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

eso lo Por
que mucho que anoConner
importaba pudieraaún
soportar el odio,
más. Sabía queera
unoelde
temor de que oliera
sus miembros de
la manada tenía que estar dentro de la habitación con el cazador. Sólo
esperaba que no fuera uno de los niños.
Conner aplastó la espalda contra la pared y miró a través de la
pequeña ranura donde la puerta conectaba con la pared. Podía ver sombras
que se movían en la habitación, pero no podía distinguir las formas exactas.

¡Mierda!
habitación antes Eso significaba
de que que en
supiera dónde realidad
estaba el quetendría que entrar
permanecía de pie.enEso
la
iba a hacerlo sólo un poco más duro el conseguir un salto sobre el cazador.
Conner se movió para dar un paso dentro del cuarto cuando una voz llena
de miedo y una fuerte advertencia le congeló en su camino.
—Toca un pelo de la cabeza y no vivirás para ver la puesta de sol
hoy.

Conner conocía esa voz. Era Brom, y parecía enfadado. Conner sabía
por las palabras de Brom y el tono de su voz que el cazador tenía que tener
a alguien que a Brom le importaba a su alcance. Eso no era bueno.
—Un paso atrás, saco de pulgas, —una extraña voz espetó—. Un
paso atrás o cortaré la garganta de oreja a oreja.
El gruñido fuerte y retumbante de Brom llenó el aire.
Oh, mierda, esto se iba a ir de las manos muy rápidamente. Conner
se acercó a la puerta y olfateó el aire. Trató de separar los olores llenando
sus sentidos. Había tanto miedo y odio y agresión en el aire que era difícil
separarlos, pero poco a poco, Conner lo hizo, y entonces olió a humano.
Fue suficiente para decir a Conner exactamente dónde estaba el
cazador de pie. Esperaba que Brom, o cualquier otro que estuviera en la
habitación, pudiera oler el hedor de la sangre en la ropa de Conner y sabía
que estaba de pie junto a la puerta. No estaba tan seguro de que pudiera 30

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

derribar
cuchillo.al cazador, no si el humano estaba reteniendo a alguien a punta de
Necesitaría un poco de ayuda.
Conner se acercó más a la puerta abierta y rascó ligeramente en la
madera por si acaso. Con la superior audición de lobo de Brom, el hombre
lo oiría. Esperaba.
—Sólo pon el cuchillo abajo, te dejaré salir de aquí —dijo Brom, sin
dar a Conner indicios de que el hombre le hubiera oído en absoluto.
—¿Esperas que me lo crea? —Escupió el hombre—. Vosotros las
bolas de pelo chupadores de sangre sois todos iguales.
—¿Sabes acerca de los compañeros?, —preguntó Brom—. Porque
tienes a mi compañero, Jaryn, bajo el cuchillo en tu mano. Y haré cualquier
cosa para asegurarme de que esté a salvo, incluso permitirte salir de aquí.

Bueno, así que Brom lo había oído.


Bueno es saberlo.
Ahora, para determinar con precisión que el hijo de puta retenía a
Jaryn. Conner volvió a olfatear, siguiendo el rastro del humano con su
nariz. Sabía que los hombres estaban de pie en el interior de la guardería de
los niños. Los había visitado allí. También sabía que había una cuna contra
la pared a la derecha y una cama de niño que estaba establecida en contra
del muro a la izquierda. Cajas de juguetes, estanterías, aparadores estaban a
lo largo de los muros en el medio.
Conner rascó la pared otra vez, esperando que el sonido pudiera
inducir a que Brom le diera más información. Tenía una idea general de
dónde estaba el cazador y rezó con todo en él para que Iain no estuviera en
la cuna, ya que olía como si el cazador y Jaryn estuvieran de pie justo en
frente de ella. 31

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

si no te—dejo
Mira,ir.hombre,
Mi otro—compañero
dijo Brom— ya. ha
Nunca vas aa los
sacado salirniños
de aquí con vida
de aquí y ha
ido en busca de ayuda. Si no liberas a Jaryn, voy a salpicar tus tripas por
toda la cuna de mi hijo, y odiaría desordenar su linda pequeña cuna.
Los labios de Conner se torcieron en una pequeña sonrisa. Así que,
bueno, Brom sabía que estaba allí. El hombre obviamente lo había
escuchado y estaba haciendo todo lo posible para dar información a
Conner sin dejar que el cazador supiera que estaba allí.
—¿Qué otra pareja? —Gruñó el cazador.
—Algunos de nosotros las bolas de pelo tenemos dos compañeros.
—Brom se rió—. ¿No lo sabías?
Si Conner no supiera que el cazador nunca iba a dejar esa habitación
con vida, habría golpeado a Brom por regalar secretos de los lobos
shifters. Cuanto menos los cazadores supieran de su especie, mejor. Sin
embargo, dadas las circunstancias, él sabía que los latidos del cazador
estaban contados. Si Brom no lo mataba, Conner lo haría.
—¡Eres repugnante!, —gritó el cazador—. ¡Un monstruo!
—Si encuentras la idea de dos compañeros tan repugnante, —dijo
Jaryn calmadamente desde el lado derecho de la habitación —, entonces
¿por qué está tu polla tan dura? Puedo sentir cavando en mi culo cada vez
que empujas contra mí.
Las cejas de Conner se alzaron por la sorpresa. ¿Estaban tratando con
un pervertido ahora?
El sonido repentino de Brom gruñendo cortó el aire. Conner se tensó,
sabiendo sin sombra de duda que tenía meros segundos para entrar en la
habitación y tratar con el cazador antes de que Brom destrozara al hombre
en pedazos. Brom nunca soportaría que otro hombre, amenaza real o no,
tocara a su compañero. 32

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Y sobre todo no a Jaryn.


El hombre estaba tan malditamente enamorado de sus compañeros
que hizo a Conner hacer una mueca de dolor cada vez que lo miraba. Jaryn
era dulce, modesto, y todo su mundo giraba en torno a Brom, Daniel y sus
cachorros. No miraría a otro hombre, lobo-shifter o humano, más de lo que
estaría dispuesto a volver a la manada McGregor.
Cuando los gruñidos de Brom comenzaron a mezclarse con suaves
gritos
Rascó de
en Jaryn, Conner
la pared otra sabía
vez y que habíaporllegado
esperó el momento
un momento. de actuar.
Luego, con la
esperanza, de que Conner se zambullera en la habitación, apuntando en el
lado correcto de la habitación.
Tuvo tiempo suficiente para ver la sorpresa en el rostro del cazador
antes de caer al suelo junto a él. Conner estaba arriba y deslizando sus
afiladas garras en el brazo que sostenía el cuchillo en la garganta de Jaryn
en el momento siguiente.
Oyó tanto al cazador como a Jaryn gritar, a Brom rugir. Conner
agarró el brazo ensangrentado que sólo había arañado y tiró el cuchillo
lejos de Jaryn. Agarró a Jaryn por el brazo y lo empujó en dirección a
Brom.
Y entonces se acercó más, por encima del cazador asustado. Conner
frunció su labio superior de nuevo y gruñó al hombre. —Será mejor que
hagas las paces con el Dios quequiera que adores, —gruñó.— ¡Vas a
morir!
Conner levantó la mano libre y movió rápidamente sus garras. No
había nada perverso en observar los ojos del cazador ampliarse y un miedo
abrumador llenarlos cuando el hombre echó un buen vistazo a las garras de
Conner.
Por lo general no se divertía con el terror que llenaba a su presa, pero 33
esta vez era diferente. Esta vez, el hombre no sólo había amenazado a la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

manada de Conner.
de esa manada. Eso Había amenazado
por sí solo firmó laa sentencia
uno de losdemiembros más
muerte del inocentes
cazador.
Conner dirigió una rápida mirada a Brom y a Jaryn. Brom tenía sus
brazos firmemente envueltos alrededor de Jaryn. El rostro de su compañero
estaba enterrado en la garganta de Brom. Brom asintió a Conner. Como no
quería estropear la guardería infantil, Conner agarró al cazador por la parte
de atrás de su cuello y lo empujó hacia la puerta.

este ahí—abajo.
Hay un lío en la sala familiar abajo, —dijo Conner—. Eliminaré a

Brom asintió.
Conner apretó la presión sobre el cuello del cazador, cuando el
hombre comenzó a pelear con él. Lo esperaba. No esperaba un tercer
cazador venir corriendo por el pasillo hacia él, blandiendo sus armas.
Conner saltó fuera del camino, cayendo de nuevo en la habitación
sólo a tiempo. Vio cómo el cazador que había estado reteniendo se sacudió
cuando su cuerpo estaba acribillado a balazos. Por Dios, estos gilipollas
incluso iban tras sus propios hombres.
Justo cuando vio un destello de material negro, la puerta se cerró de
golpe.
Conner parpadeó sorprendido al ver a Jake apoyarse en la puerta y
girar la cerradura. No había visto a Jake en la habitación cuando entró
corriendo, así que ¿De dónde había salido?
—¿Jake?
Jake hizo una mueca cuando se dio la vuelta y miró a Conner. —
Necesitamos marcharnos. Sólo tenemos unos minutos antes de que lleguen
los demás aquí, y bloqueen la puerta —Jake señaló por encima del hombro
con el pulgar— no va a detenerles por mucho tiempo. 34

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner
habitación, lentamente
cuando lo hizo.se—puso de pie,
Huh, sólo por mirando
curiosidad,alrededor de la
¿cómo diablos
esperas que hagamos eso cuando la única salida está bloqueada por
cazadores?
Conner oyó una risa ahogada detrás de él. Se dio la vuelta,
preocupado por la cordura de Brom. Ahora no parecía la hora de reírse.
—Aprendí una cosa cuando nos fuimos de la manada de mi padre. —
Brom apuntaba
gran porción a una como
cortada, sección
unadepuerta
la pared
—. de la cunaa nunca
Aprendí que parecía tener
dar por un
hecho
mi seguridad, o la de mi familia. Cuando construimos la casa, Jake y yo
diseñamos una completa habitación refugio con un túnel de emergencia
que nos lleva lejos del rancho.
Conner entrecerró los ojos. —Y nadie me habló de esto ¿Por qué?
—Conner, ni Lucas ni Leyland lo sabían, —dijo Brom.
—Nadie, excepto Daniel, Jaryn, y Jake.
—Uh-uh.
—No era nada personal, Conner, —dijo Jake—. Te lo hubiéramos
dicho, pero acabamos de terminar el maldito túnel la semana pasada y
estábamos trabajando en los diseños para una habitación refugio en mi
casa. En realidad no ha sido momento para decirle a nadie.

—¿Podemos ir, por favor?, —preguntó Jaryn—. Tengo muchas


ganas de salir de aquí antes de que más cazadores lleguen.
—Apresurarse hasta podría no ser tan mala idea, —dijo Conner
mientras se dirigió a la rotura en la pared junto a la cuna —. Sé de muy
buena tinta que tienen previsto volar el rancho después de matarnos a
todos.
35
—¿De muy buena tinta? —preguntó Jake.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner
hombro. —Uno se de
encogió de hombros
los cazadores me mientras
arrinconómiraba
en el por
baño.encima
Trató del
de
convencerme de que estaba allí para salvarme, que era mi compañero. No
hace falta decir que no le creí. Tomé su rifle y una bolsa de explosivos y
me largué hacia aquí.
Las cejas de Jake se bajaron por la cara. —¿Dónde está este cazador
ahora?

—Le
palabras disparé.en —
sonaban laConner se había
boca. No sorprendió de razón
ninguna lo amargo
lógica que
para esas
que
estuviera molesto porque hubiera disparado contra un cazador. No sentía
remordimientos por el del piso de abajo que había matado. ¿Por qué con el
del baño?—. La última vez que le vi, estaba sentado en el suelo de tu cuarto
de baño, sosteniendo su hombro.
—¿No lo mataste?

Conner tragó antes de responder a su alfa. Él era el ejecutor de la


manada. Ocupaba el mismo puesto aquí como lo había hecho en la manada
McGregor. Jake debería asumir que eliminaría una amenaza para la
manada. El alfa tenía derecho a exigir saber por qué Conner no había
matado al chico en el baño.
—No, no lo maté. —Conner volvió a tragar saliva, el nudo en la
garganta cada vez más grueso, mientras trataba de elegir cuidadosamente
sus palabras—. Me entregó su pistola y me dijo que le disparara. No puedo
sólo matar a un hombre desarmado, Jake. —Incluso si él le había
disparado.
Las cejas de Jake alcanzaron su punto máximo en la parte superior de
sus ojos. —¿Te entregó su arma?
—Y la bolsa de explosivos.
—¿Estás seguro de que no era tu pareja? 36

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

No olíaConner puso
como un losoojos
lobo comoenmi
blanco en este momento. —Sí, estoy seguro.
pareja.
—¿A qué olía entonces? —preguntó Jake—. ¿Humano? ¿Cazador?
¿Algo más?
Conner frunció el ceño al pensar en volver a lo ocurrido en el cuarto
de baño. Recordaba claramente olfateando el aire cuando Siro dijo que eran
compañeros y la forma en que su corazón se hundió cuando no olió a
compañero.
que no olía aPero cuanto
humano, más pensaba
cazador, o algunaenotra
ello, mástampoco.
cosa se daba cuenta Siro de

La preocupación comenzó a montarse duramente sobre Conner, y


pasó de la leve preocupación a francamente asustado. Se volvió para mirar
a su alfa, un profundo miedo edificándose dentro de él. —No tenía ningún
olor en absoluto.
—¿Y sólo estás tratando de averiguarlo ahora? —Jake espetó.
—Tenía mi mente en otras cosas, —gritó Conner enseguida mientras
dio un paso hacia Jake —. Como mantener a tu compañero con vida, así
como a mí mismo.
Los labios de Jake se apretaron un momento por lo que se refería a
Conner. Y luego suspiró. —Está bien, es justo, pero es posible que desees
averiguar exactamente por qué este hombre no tenía olor. No me parecería
raro de estos cazadores, y si pueden enmascarar su olor de alguna manera,
podríamos estar en serios problemas.
—¿Crees que… —Conner se humedeció los labios, casi con miedo
de expresar su pregunta, pero necesitando saber la respuesta — ¿crees que
pudo haber estado diciendo la verdad acerca de ser mi pareja?
Jake negó con la cabeza. —No, probablemente sólo te estaba
jodiendo. Podemos siempre oler a nuestras parejas, Conner. Lo sabes. El
olor de una pareja es parte de lo que nos dice que hemos encontrado a 37

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

nuestros compañeros.
—Sí, tienes razón. —Y eso entristecido más a Conner que cualquier
cosa que pudiera imaginar. Había estado buscando a su compañero durante
tanto tiempo que sabía lo que era un compañero. A veces, dudaba que
alguna vez encontrara a la única persona que el destino había decretado que
era suyo.
Y la idea de que un cazador lo hubiera puesto en su agonía personal
ytener
usado contra
en sus él, envió
manos el temperamento
a ese cazador y golpearledelaConner
cabeza acontra
dispararse. Quería
la pared unos
pocas veces, tal vez más que un par de veces.
Pero sobre todo quería saber cómo el cazador había enmascarado su
olor. Como Jake dijo, si los cazadores sabían cómo hacerlo, entonces
estaban en serios problemas. Y Conner sólo sabía un modo de averiguarlo.
—Una vez que todo el mundo baje al túnel, —dijo Conner—. Voy a
regresar a ese tipo. Si todavía está vivo, podría ser capaz de decirnos cómo
enmascaró su olor, y creo que tenemos que saber eso.
—Estoy de acuerdo, —respondió Jake—. Pero asegurémonos de que
todos estén a salvo primero.
Conner asintió y dio un paso atrás cuando Jaryn y Brom comenzaron
a desfilar ante él. —¿Exactamente a dónde conduce este túnel? —Conner
necesitaba saber para poder planear su viaje de regreso a la casa del rancho.
—Una vez bajo tierra, conduce a los bosques detrás del granero. Pero
hay un conducto que guía al establo. Esa es probablemente tu mejor
oportunidad de volver a la casa principal. —Jake negó con la cabeza,
pareciendo sombrío —. Habíamos planeado cavar un túnel desde el establo
a la casa principal, pero el trabajo no debía comenzar hasta la semana que
viene.
—Entonces supongo que echaré una carrera para la casa. 38

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Esto podría no ser una buena idea, Conner.


—No, tengo que saber, Jake, de una forma u otra. Este hombre
intencionalmente me jodió, y me gustaría saber por qué, y cómo lo hizo.
—¿Estás seguro de que no olía como un lobo?
Conner asintió. —Estoy seguro. —Deseaba que no lo estuviera.
—Lo siento, Conner.
Conner pasó la mano por su corto pelo rubio rojizo, asintiendo a las
palabras de su Alfa. —Sí, yo también.
En realidad no parecía haber mucho más que decir después de eso.
Conner siguió a Jake y los otros a una habitación pequeña y luego observó
con curiosidad cuando la puerta se cerró y fueron selladas en su interior.
Brom se acercó a la pared y tecleó un código escrito en una plataforma
perforada, y una puerta en el lado opuesto de la habitación se abrió.
Jake fue primero, Brom y Jaryn detrás de él. Conner se unió en la
retaguardia, cerrando la puerta detrás de él. Siguió a los otros hacia abajo
un tramo de escaleras hasta donde Daniel estaba esperando con los
cachorros, Leyland, y Lucas.
Conner rápidamente escaneó a todo el mundo con los ojos,
comprobando cualquier signo de lesiones. Una vez se había asegurado de
que ninguno de los miembros de su manada resultaron heridos, asintió a
Jake. —¿Cuál es el camino al granero?
Jake señaló hacia una dirección. —El granero es ese camino. Sales
en el cuarto trastero. Asegúrate de cerrar la puerta detrás de ti. El código
para volver al túnel es el cumpleaños de Leyland. Estaremos esperándote
en el bosque detrás del granero. Tienes veinte minutos antes de que nos
marchemos.
39
Conner asintió. Entendió que la primera prioridad de Jake necesitaba

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ser sus miembros de la manada. —Estaré allí.


—Si no llegas a tiempo, llama a Caleb Hunter. Vamos a tratar de
dirigirnos hacia él.
Conner asintió. —Entendido.
Conner vio a su manada alejarse, bajando por el túnel en la dirección
opuesta a donde él se dirigía. Esperó hasta que desaparecieron de la vista y
luego se volvió y se dirigió al túnel hacia el granero.
Estaba impresionado con las medidas de seguridad que Jake y Brom
habían puesto en marcha y todavía un poco molesto que no se lo hubieran
dicho, aunque entendía por qué. Aún así, los hombres habían hecho
malditamente bien. Cuando Conner llegó a la caja de seguridad en el marco
del cuarto trastero, entró y cerró la puerta y se dirigió al teclado numérico
en el otro lado de la habitación.
Conner se rió mientras tecleaba la fecha de nacimiento de Leyland en
la plataforma. Podría pensar en un montón de otros códigos para usar, pero
esa era una fecha que ni Jake ni Lucas era probable olvidaran, si no querían
escuchar un berrinche de Leyland de proporciones épicas.
Conner rápidamente abrió la puerta y salió a la habitación. Cerró la
puerta y luego miró alrededor de la pequeña sala. Cerró la puerta secreta,
que ni siquiera podía decir que estaba allí. Era realmente muy brillante.
Conner se deslizó lentamente hacia la puerta del cuarto trastero,
olfateando el aire a su paso. Por suerte, sólo olía al olor normal que un
establo huele, estiércol, caballos, cuero, cosas que se suponía que debían
estar en un granero. Y no olía a ningún ser humano.
Cuando llegó a la puerta del establo, Conner la resquebrajó para
abrirla y miró a la casa, agradecido de que todavía estuviera en pie. Sin
embargo, la observaba, y los alrededores, hasta que estuvo seguro de que
nadie lo viera salir corriendo de la casa. 40

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

puerta,Conner tomó
corriendo poruna
el respiración profunda
lado de la casa dondey se
luego salió corriendo
localizaba pordel
la ventana la
baño. Estaba a mitad de camino cuando una pared de calor le golpeó de
plano sobre su espalda. Hacía tanto calor que Conner sentía el vello de sus
brazos chamuscarse.
Se quedó allí, en el suelo, tratando de recuperar el aliento y
preguntándose qué demonios había pasado, cuando los sonidos de una gran
explosión alcanzaron a la onda expansiva. Conner rápidamente se acurrucó
en un posición fetal y cubrió la cabeza cuando madera y escombros
cayeron encima de él.
El latido del corazón de Conner tronaba en sus oídos,
ensordeciéndole a cualquier otra cosa. El ruido era tan fuerte que se
preguntó si su cabeza iba a explotar al igual que la casa. Cuando Conner
fue finalmente capaz de levantar la cabeza y la mirada hacia la que solía ser
su casa del alfa, su corazón dio un vuelco.
El lugar estaba totalmente destruido. Lo que quedaba era de madera
ardiendo. Humo se elevaba en el aire, convirtiéndolo en gris y oscuro y
haciendo que los ojos de Conner quemaran. Conner se puso en pie y se
tambaleó hacia el desastre quemando.
Las lágrimas comenzaron a llenar sus ojos en la medida que se
acercaba. La destrucción de la casa era completa. Nada podría haber vivido
a esa explosión. Nada, ni mucho menos un ser humano. Si Siro había
estado en el interior de esa casa cuando estalló, estaba muerto ahora.
Conner se dejó caer de rodillas y agarró su pecho, su corazón de
repente dolía más de lo que había pensado alguna vez que una persona
podía sobrevivir. No sabía quién había sido Siro, pero algo profundo dentro
de Conner le dijo que el hombre era importante para él.
Y Conner lo había matado.
41

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro se despertó con un grito doloroso. Sus ojos se giraron


bruscamente alrededor de la habitación mientras registraba su entorno,
tratando de averiguar dónde estaba y por qué dolía condenadamente tanto.
Se sentía como si alguien estuviera clavándole un atizador al rojo vivo en
su hombro.
Siro fue a agarrar su hombro sólo para darse cuenta de que sus
manos estaban atadas. Estaba acostado en una cama, y el gancho de sus

manos estaban
Comenzó atadas
a entrar para fijarse
en pánico en la pared,
al instante, justolaencima
moviendo cuerda de
quesuataba
cabeza.
sus
manos, tratando de liberarse.
—Pasé por un montón de problemas para rescatar tu culo y suturarte.
Te agradecería si no destruyeras mi trabajo.
Siro se quedó inmóvil, registrando el lugar a quienquiera que hubiera
hablado con él.

Vio una figura apoyada contra la pared de la habitación. Amplio,


hombros fuertes reducidos a un increíble paquete de seis en el abdomen y
caderas delgadas. Siro apenas podía distinguir una mandíbula cincelada,
excepto que el resto de la cara del hombre estaba emsombrecida por la
oscuridad.
—¿Quién eres tú? —preguntó Siro—. ¿Dónde estoy?
42

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Ahora estás a salvo.


La voz era profunda y áspera, pero totalmente irreconocible. No era
uno de los cazadores que conocía, pero eso no significaba que no fuera un
cazador. Por supuesto, también podría ser uno de los miembros de la
manada de Wolfrik, también.
Siro trató de ser casual, cuando olfateó el aire, girando su rostro
hacia el brazo. Si este hombre era cazador, Siro no quería que fuera visto
husmeando
instante que nada.
Siro eraSiunselobo
trataba de un shifter lalobo,
y, a continuación, el hombre
actuación sabría al
se acabaría.
No olía a nada.
Ni a una maldita cosa.
Y eso preocupaba a Siro tanto como si hubiera olido a cazador. No
conocía a ninguna otra persona sobre la faz de la tierra que pudiera
enmascarar su olor como podía. Quienquiera que fuera este hombre, era
peligroso.
Con cautela, Siro volvió a mirar al hombre. —¿Quién eres tú?
—Un amigo.
Siro resopló. No tenía amigos. En su línea de trabajo, nunca se
prestaba a tener amigos. Podría tener que matarlos. Asimismo, no se fiaba
de nadie para no traicionarle. Eso era sólo para los cazadores, así como
también para el Consejo del Lobo. Ambos eran un puñado de bastardos
chismosos renegados desleales por lo que a Siro concernía. No confiaba en
ninguno de ellos.
—No tengo ningún amigo.
—Eso es muy malo. Podrías utilizar unos pocos.
—¿Quién eres tú? —preguntó de nuevo Siro. Su curiosidad por el 43

hombre en las sombras crecía. No podía verlo. No podía olerle. Y desde

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

luego, no podía
rompecabezas entenderle. Eso lo convertía en peligroso y un
a resolver.
—Como te dije, Siro, soy un amigo.
Los ojos de Siro se entrecerraron ante la mención de su nombre real.
—¿Cómo sabes mi nombre? —Era especialmente curioso teniendo en
cuenta que pasaba por Foster cuando estaba de encubierto. Nunca usaba su
verdadero nombre.
—Sé mucho de ti.
Siro sintió algo caliente llenarle cuando oyó la misteriosa risita suave
del hombre. Y eso le asustó realmente. Consideró luchar con sus ataduras
de nuevo, pero tan fuertes como eran, dudaba que pudiera soltarse antes de
que el hombre lo detuviera.
Y eso significaba que tenía que esperar el momento oportuno.

—Por ejemplo, sé que no eres realmente un cazador.


Siro dejó caer la cabeza sobre la almohada detrás de él. Su vida
acababa de ser un completo infierno mucho más interesante, y más
precaria.
—¿Cómo sabes eso?
—Oh, tengo mis maneras, tal como tú.

—Eso no es una respuesta, —espetó Siro.


—Claro que lo es. —El hombre se echó a reír, y una vez más Siro
sintió algo cálido pulular a través de su cuerpo —. Es la respuesta que das
cuando sabes algo y no quieres que nadie más sepa lo que sabes o cómo
sabes lo que sabes.
¿Eh?
44

Siro de repente se sentía como si estuviera jugando a un juego de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

quién
estoy. está primero. —Está bien, si no me dices eso, entonces dime dónde
—Desafortunadamente, estás en el infierno de los cazadores.
El aliento de Siro se atascó en la garganta. Estaba en algún lugar con
cazadores, atado, y había un hombre que parecía saber exactamente quién
era en realidad. Sí, estaba jodido. Pero tal vez podría obtener sólo un poco
más de información en caso de que pudiera escapar, si con suerte podía
escapar.
—¿El campamento base?
—Un campamento secundario establecido no lejos del rancho
Wolfrik, —el extraño respondió—. Dado que muchos del equipo fueron
asesinados durante la redada en el rancho Wolfrik, se decidió trasladarse a
una nueva ubicación donde todo el mundo pudiera reagruparse, en caso de
que los lobos estén sobre nosotros, entiendes.
—Por supuesto. —Siro entendía perfectamente. Le habían
fastidiado—. ¿Quién sobrevivió?
—Seguro que ya sabes la respuesta a eso.
—No te habría preguntado si lo supiera, —espetó Siro. Hombre, este
tipo estaba realmente empezando a ponerle de los nervios.
—Bueno, tú mataste a Anderson, así que él no. —El hombre de
pronto se echó a reír, lo cual Siro encontró absolutamente fuera de lugar y
extrañamente excitante. Dios, estaba tan jodido —. Me gustaría que
mantuvieras esa pequeña información para ti mismo. El teniente ya está
ansioso acerca de que uno de sus mejores hombres perdiera la vida. No
sabemos lo que haría si se enterara de que fuiste tú.
Siro se quedó boquiabierto al hombre. ¿En serio? ¿Estaba sugiriendo
que Siro no dijera que había matado a Anderson? ¿Al igual que planeaba 45
alardear de ello? Siro cerró bruscamente la boca, no muy seguro de si

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

estaba
o no. tratando con alguien con todas las células de su cerebro funcionando
—¿Qué pasó con el resto del equipo?
—Uno de los lobos shifters mató a Smyth, y Lancer fue tiroteado por
el teniente.
Siro rápidamente hizo un recuento de los miembros cazadores del
equipo de ataque. —¿Entonces, el teniente Jones y yo fuimos los únicos
que lograron salir?
—Técnicamente, sí. —Siro vio el movimiento de cabeza del hombre
mientras asentía—. El Teniente logró salir sin un rasguño. Corrió como un
cobarde que es después de disparar a Lancer. Volví por ti antes de que la
casa estallara.
—Uh, ¿gracias? —Considerando que tenía las manos atadas por
encima de su cabeza, Siro no estaba seguro de que debiera dar las gracias al
extraño hombre, pero parecía lo cortés que hacer.
—No hay de qué, Siro.
—Mira, ¿quién demonios eres tú? —Espetó Siro, cansando de
cualquiera que fuera el juego al que el hombre estaba jugando —. Si no
puedes…
—¡Silencio! —El hombre de repente gruñó bajo en su pecho, y fue
ese gruñido el que convenció a Siro para cerrar la boca. Había oído
gruñidos antes, pero sólo de otros lobos shifters.
Este hombre tenía que ser un lobo.
Pero eso sólo trajo dos preguntas, quién infierno era y por qué estaba
en medio del infierno de los cazadores.
Siro oyó la puerta empezar a abrirse y cerró bruscamente los ojos, 46

tratando de liberar la tensión en su cuerpo por lo que parecía que estaba

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

inconsciente.
hedor. Sabía quién iba a venir a través de la puerta justo por el

El Teniente Albright.
—¿Ha despertado ya? —preguntó el teniente.
Cualquier tensión que Siro acababa de liberar, vino de regreso el
irritante sonido. Sólo esperaba que el teniente no lo viera. Podría escuchar
el agravamiento de la voz de Albright y se preguntó hasta qué punto el
teniente realmente sabía. ¿Sabía Albright que Siro había matado a
Anderson? ¿Estaba el enfermo hijo de puta incluso planeando su muerte?
—No, señor, —respondió el hombre en las sombras, su voz sonaba
totalmente diferente de lo que había sido sólo un momento antes. Ahora,
sonaba agudo y algo servil y casi ansioso —. No no ha dicho ni pío desde
que fue traído, señor.
—Está bien, —dijo Albright—. Ven por mí en el instante en que
comience a moverse. Tengo algunas preguntas para él.
—Sí, señor.
Siro no se atrevió a abrir los ojos o moverse. Ni siquiera respirar, ni
incluso cuando oyó la puerta cerrarse. Por lo que sabía, se trataba de un
truco y Albright todavía estaba en la habitación a la espera de que se
moviera.

—Puedes abrir los ojos ahora. —La profunda voz ronca estaba
atrás—. Se ha ido.
Siro abrió sus ojos lo suficiente para ver a través de sus pestañas.
Registró la habitación. Estaba vacía, excepto por el hombre en la esquina,
así que Siro los abrió el resto del camino. —¿Sobre qué diablos era todo
eso?
47
—No podía dejar que supiera que estabas despierto, Siro.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

El hombre
realmente se levantó
mala sensación en ladeboca
repente, y Siro comenzó
del estómago. Cuando elahombre
tener una
dio
un paso hacia él, Siro se encogió de nuevo. Nunca lo admitiría a una
persona viva, pero estaba asustado. Y al parecer, el hombre lo sabía. Se
detuvo justo cuando llegó al lado de la cama en la que Siro estaba tumbado.
—Te lo dije, Siro, estás a salvo.
—¿En serio? ¿Crees que estoy a salvo? ¿Estás jodidamente loco?
Estoy atado,
y Albright la lesionado, en conmigo.
tiene tomada el infierno¿Cómo
de loses
cazadores de acuerdo contigo,
eso seguro?
—Soy un amigo, ¿recuerdas?
El hombre sostenía un cuchillo. Antes de que Siro pudiera llegar a
importarle, el hombre se inclinó y le cortó las cuerdas que lo sujetaban
abajo. La boca de Siro se abrió cuando el hombre simplemente reemplazó
el cuchillo en la vaina del muslo y lanzó una pila de ropa sobre la cama.
—Vístete. No tenemos mucho tiempo antes de que el teniente
vuelva, y no va a tomar mi palabra de que estás fuera de combate por
mucho tiempo. Finalmente, va a tratar de despertarte para poder
interrogarte.
—¿Por qué te importa? —preguntó Siro mientras agarraba la ropa y
comenzó a ponérsela. No era tan estúpido como para cuestionar, a caballo
regalado no le mires el diente. Si este hombre tenía un plan para sacarles
de aquí, estaba en ello. Podría perder al chico más tarde.
Otra risa profunda llenó la habitación. —No me creerías si te lo
dijera.
—Pruébame, —dijo Siro mientras se levantaba y subía su uniforme
negro por sus piernas. Siro gruñó y casi se cae de nuevo un momento
después, cuando se agarró de repente. Sólo los brazos envueltos alrededor
de él lo mantuvieron de estrellarse de nuevo en la cama —. Hey, qué… 48

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Las palabras
estrellándose en losdesuyos.
Siro Siro
fueron sofocadas
resistió por dos
durante un conjunto
segundos deantes
labios
de
ceder a la seducción del beso del hombre. Enterrando una mano en el pelo
del hombre, Siro se concentró en besar y lamer sus exuberantes labios.
Se devoraron el uno al otro hasta que la respiración llegó a ser
imperativa.
Cuando el desconocido se alejó finalmente, Siro estaba jadeando
pesadamente, nunca
de labios juntos. había
Había sentidoesetanto
sentido besoplacer
todo con sólo la abajo
el camino simplehasta
presión
los
dedos de los pies.
A medida que sus ojos se posaron lejos de los labios del hombre a los
ojos, Siro inhaló bruscamente cuando reconoció al hombre que lo miraba.
—¿Jones?
—Soy tan Jones como tú Foster.
—Entonces, ¿quién…?
—Tus preguntas pueden venir más tarde, Siro, —dijo el hombre
mientras presionaba su dedo contra los labios de Siro —. No tenemos
mucho tiempo. Tenemos que irnos.
Siro frunció el ceño y se echó hacia atrás, fuera de los brazos de
Jones. —Sólo porque tu beso sea bueno no significa que vaya a confiar en
ti. Por lo que sé, esto es alguna trampa elaborada por Albright para hacerme
hablar.
Jones suspiró. —Desafortunadamente, en las próximas, —el hombre
miró hacia su reloj— tres horas y cuarenta y nueve minutos, y dieciséis
segundos, no puedo demostrarte que no te quiero hacer nada malo. Si
pudieras ver la manera de confiar en mí hasta entonces, todas tus preguntas
serán respondidas.
49
—Entonces dime tu nombre real, —dijo Siro—. ¿Puedes al menos

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hacer eso?
—Mi verdadero nombre es Yuri Miroslav. —El rostro del hombre se
iluminó de pronto mientras sonreía —. Y soy tu pareja.

Había algo profundamente gratificante en ver la mandíbula de Siro


caer. El hombre se sorprendió con claridad, y Yuri no pudo evitar reírse de
la imagen de asombro que tenía. —Veo que has oído hablar de mí.
—He oído hablar de la manada Miroslav, —respondió Siro mientras
miraba a Yuri con un cierto grado de precaución en sus rasgos —.
Realmente no puedo decir que haya oído hablar de ti.
Siro estaba mintiendo, y ambos lo sabían. Como centinela del
Consejo del Lobo, Siro sería completamente consciente de que se
encontraba en el interior de un círculo de cualquier manada de lobos, y
Yuri era el Beta de la manada Miroslav, una posición que se había ganado a
través de años de duro trabajo. Además, sus hermanos Niko y Serge
estaban acoplados.
—Si tú lo dices, Siro. —Yuri no iba a llamar abiertamente a su
compañero mentiroso, incluso si lo fuera. Era de mala educación y grosero,
y si había aprendido cualquier cosa de ver a sus padres juntos, sabía que
podía no ser grosero con su compañero. Su madre le abofetearía por tonto.
Justo tenía poco más de tres horas para marcharse, y luego Siro
sabría que él decía la verdad. El tiempo anterior hasta entonces sería
interesante decir lo menos posible. Siro era un hombre terco, un
personalidad caprichosa que Yuri encontró divertida en el momento, pero
sabía que podía llegar a ser irritante dado el tiempo suficiente.
50
—Si bien entiendo tus dudas, —dijo Yuri mientras caminaba a la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pared en laenque
escondido su había
cuerpo.estado apoyado
Se dio y agarró
la vuelta las dos armas
para ofrecérselas que quien
a Siro, había
habían sido despojado de sus armas cuando había sido traído al recinto —.
Nuestro tiempo aquí es limitado. Debemos irnos.
Una de las cejas de color marrón oscuro de Siro llegó a subirse sobre
la frente cuando lentamente tomó las armas de Yuri. Se deslizó el cuchillo
en la parte de atrás de su pantalón y después comprobó la pistola. Parecía
aún más sorprendido cuando encontró el cargador lleno de balas.
—¿Me estás dando un arma cargada?
Yuri se encogió de hombros. —Dispárame si eso te hace sentir
mejor.
Yuri estaba desconcertado por la repentina y desconsolada mirada
que venía del rostro de Siro antes de que el hombre dejara escapar una
risita nerviosa resonando. Había una historia detrás de esa mirada triste, y
Yuri estaba decidido a averiguar de qué se trataba. Sólo tenía que esperar
hasta más tarde para cuestionar al hombre sobre ella. En este momento, su
escapada necesitaba tener precedencia.
—Pareces tener todas las respuestas, —dijo Siro mientras se
deslizaba hacia atrás y cargaba un cartucho en la recámara —. ¿Quieres
decirme cómo demonios vamos a salir de aquí?
—Más allá de salir por la puerta, no tengo la menor idea. —Yuri
tenía un plan básico en mente y un deseo. No era mucho para seguir
adelante, pero era todo lo que tenía en ese momento —. Albright cuenta con
una guardia exterior para evitar que escapes. Si de repente te despertaras, y
yo siguiera mis órdenes… —Yuri sonrió con malicia— como buen
pequeño soldado que soy, te llevaré conmigo a Albright, sobre todo si se
trata de impresionarle.
—¿Y piensas que es un buen plan? 51

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Saldremos por la puerta y pasaremos la guardia.


—También nos matarán, —insistió Siro.
—¿Tienes una idea mejor? —preguntó Yuri—. Soy todo oídos.
Las cejas de Siro se juntaron cuando frunció el ceño profundamente
y miró alrededor de la pequeña habitación donde estaban. Por lo general se
utilizaba exactamente por la razón que Siro estaba allí, para evitar que un
cautivo escapara. Había cuatro paredes y una puerta, y así era. Las paredes
estaban hechas de cemento como el suelo y el techo. Era una caja
inexpugnable.
—¿No creo que pudiéramos cavar nuestra salida?
—No. —Yuri sonrió a pesar de su respuesta. Encontraba el sentido
del humor de Siro muy divertido —. Las paredes son de diez pulgadas de
grosor y reforzadas con barras de acero.

—¡Cristo! —Siro empujó una mano por el corto cabello castaño


oscuro—. ¿Cómo demonios hacen estos idiotas para encontrar lugares
como éste?
—Mi conjetura sería porque no son todos son idiotas. Algunos de
ellos, y sólo un puñado de ellos te importa, en realidad tienen dos células
cerebrales para frotar juntas.
Siro disparó a Yuri una mirada que habría hecho a un hombre más
débil sacudirse en sus botas. Una vez más, Yuri sólo lo encontraba
divertido. Siro era sexy como el infierno cuando su ira se levantaba. —No
estoy diciendo que no sean idiotas fanáticos que necesiten ser derribados
antes de que se reproduzcan, pero eso no necesariamente los hace
estúpidos.
Siro dejó escapar un suspiro que sonó tan frustrado como Yuri se
sentía. Se encontraban en una situación sin salida, pero estaban vivos, y, lo 52
más importante, estaban juntos. Así que ese conocimiento solo le dio a

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuri la fuerza para luchar su salida del infierno de los cazadores en el que
se encontraban.
Siempre supo que su compañero sería un hombre. Simplemente
nunca esperaba que fuera un hombre tan atractivo. Siro era un sueño
húmedo viniendo a la vida. Era unos centímetros más alto que Yuri y varias
libras más pesado, pero todo eran deliciosos músculos dorados.
Su cabello castaño oscuro muy corto y muy cerca de su cabeza. No
tenía
estabaunseguro
mal físico el ahombre
de que Siro se ylesepararía
ajustaba a su estilo
el corazón de vida,
si dejara peroel Yuri
crecer pelo
un poco más largo.
Los ojos, sin embargo, eran los que tenían a Yuri tan hechizado. Los
ojos de Siro resplandecían de azul. Yuri no podía decidir si se trataba del
profundo azul del Mar Mediterráneo o más de un azul resplandeciente.
Pero eran definitivamente azules.

Y parecían ver directamente el alma de Yuri cada vez que el hombre


le miraba. Yuri lo había notado la primera vez en la reunión del Consejo
del Lobo de la Isla de Vourdala. Los miembros de todas las manada de
lobos conocidas estaban obligados a asistir, no todos los miembros de la
manada, pero sin duda el círculo íntimo. Como beta de la manada de su
padre, había sido obligado a asistir.
Y después de ver a Siro allí, se alegró de haber ido. No había dicho
nada al hombre en el momento porque podía decir por la manera en que se
quedó en las sombras que Siro no había querido llamar la atención. Pero
había hablado con su padre y rastreó la identidad de su pareja.
Después de saber que Siro estaba trabajando para el Consejo del
Lobo, de encubierto en uno de los grupos de cazadores, había ido a su
padre y le pidió tiempo suficiente para ir tras su compañero y traerle a casa.
No sabía lo dispuesto que Siro estaría a renunciar a su trabajo para el 53
Consejo del Lobo, pero esperaba que el hombre no luchara contra ello.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Sólo sabiendo
conducía a Yuriela peligro en Su
la locura. el que su compañero
necesidad estaba
de proteger a sudiariamente,
compañero
estaba tan arraigada en él que Yuri apenas podía respirar hasta que tuvo a
Siro a la vista.
Yuri se agachó, agarró la cuerda que había atado alrededor de las
manos de Siro, y luego la extendió hacia él. —¿Qué bueno eres en fingir?
La ceja oscura de Siro se arqueó, al mismo tiempo que su cabeza
retrocedía.
cada onza Yuri sintió
de su la comisura
control de losSiro
no reírse. labios curvarse
había de nuevo,
estado y tomó
trabajando de
encubierto en varias misiones durante años.
Era un maestro en fingir.
—Bien, lo entiendo, —dijo antes de que Siro pudiera decir nada —.
Oculta tu arma de fuego en la parte delantera de tus pantalones y envuelve
esta cuerda a las muñecas. Se supone que tienes que estar atado,
¿recuerdas?
Siro frunció el ceño ante Yuri por un momento, pero finalmente hizo
como Yuri solicitada, empujando el arma en la parte delantera de sus
pantalones antes de envolver la cuerda alrededor de sus muñecas. Yuri se
acercó y tiró de la cuerda con más fuerza alrededor de las muñecas de Siro
y colocó los extremos en las palmas de las manos del hombre.
Antes de que se apartara, se agachó y le apretó la mano en contra del
arma dentro del pantalón del hombre. Yuri miró a los ojos azules de Siro
oscurecerse mientras deslizaba abajo su mano a lo largo del rifle. Oyó una
suave inhalación cuando sus dedos rozaron la punta de la polla de Siro.
—No dispares a nada que podamos desear utilizar más tarde.
—Tengo un compañero, —graznó Siro.
—Sí. —Yuri asintió mientras soltaba su mano —. Como eres un tri- 54
omega, supuse que tendrías dos compañeros, aunque no estaba al tanto de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

que lo hubieras
aterrador encontrado.
pensamiento —Yuri
lo golpeó de un
—. Es repente frunció
hombre, el así?
¿no es ceñoNo
cuando un
estamos
acoplados a una mujer, ¿verdad? Porque no sabría qué demonios hacer con
todos esas piezas adicionales.
La mandíbula de Siro cayó, y de repente se alejó de Yuri. —¿Quién
eres tú? —Susurró Siro. Había una gran cantidad de miedo y de ira en la
voz de Siro, cambiando el tono como si Siro no pudiera decidir qué tenía
que abordar en primer lugar.
—Cálmate, amor, —dijo Yuri en voz baja mientras se acercaba al
cuerpo rígido de Siro. Curvó su mano alrededor de la nuca del cuello de
Siro y apretó al hombre más cerca, descansando la frente juntos —. No
tengo intención de hacerte daño a ti y a nuestro compañero, y como he
dicho, en unas tres horas, sabrás que digo la verdad. Sólo dame ese tiempo
para demostrarte que nunca te haré daño.
Los ojos de Siro parpadearon por un momento y Yuri oyó el trago
fuerte del hombre antes de que Siro le devolviera la mirada. —¿Por qué
tres horas?
—Soy un lobo shifter, cariño. Huelo como lobo. Me dieron un suero
que oculta mi olor para que pudiera infiltrarme en el grupo de cazadores y
encontrarte. Esto desaparece en unas tres horas. —La confusión de Yuri
creció en el asombro que cruzó el rostro de Siro —. Asumí que era el
mismo suero que tú utilizas.
—No, yo… —Siro negó con la cabeza. Su boca se abrió y cerró un
par de veces y luego se cerró de forma definitiva lo que dio a Yuri una
pausa. Siro obviamente quería decir algo, pero tenía miedo de confiar en
Yuri.
Yuri presionó el dedo contra los labios de Siro. La confianza del
hombre no vendría fácil, pero tenía toda la intención de ganarla y
mantenerla. —Dime cuando estés listo, Siro, y no antes. No pido nada de ti, 55

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

excepto
confiar enlasmí,próximas
me iré. horas. Si después de eso no sientes que puedes
Sería la maldita cosa más difícil que hiciera Yuri alguna vez, pero si
su pareja realmente no lo quería, no obligaría al hombre. Y ahora mismo,
Yuri no pensaba que Siro supiera lo que quería. El hombre estaba tan
confundido que no sabía en qué dirección estaba. De estar en sus zapatos,
Yuri imaginó que se sentiría de la misma manera.

Siro no sabía en quién confiar.

56

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro estaba totalmente asustado, y no le gustaba sentirse así. La suya


era una vida de peligro. Lo sabía. Aceptaba eso. Ser capaz de enmascarar
su olor era una habilidad que lo puso en la mejor posición posible para
infiltrarse en los grupos de cazadores y recoger información. Pero también
significaba que tenía que mantener su ingenio sobre él.
Yuri le hacía sentirse atolondrado.
El hombre sabía demasiado sobre él y sobre los lobos shifters. Eso lo
hacía peligroso. El hecho de que Yuri supiera que era un tri-omega le hacía
a Yuri letal. Siro sólo rezaba para que las palabras del hombre resultaran
ser verdad. Realmente no quería tener que matar al tipo.
Yuri estaba empezando a gustarle. En circunstancias normales,
habría golpeado al tipo. Yuri era caliente. Pero estas no eran circunstancias
normales. Eran tan fuera de lo normal que era Siro no se sorprendió que no
estuviera soñando.
Demonios, ¿tal vez lo estaba?
—Tienes cuatro horas y no más de un segundo. —Eso era sólo un
poco más de tiempo de lo que Yuri había pedido, pero podría darles un
poco de tiempo para hablar una vez que este suero de Yuri desapareciera.
—Gracias. —Yuri habló en un tono extraño pero suave —. Eso es
más que justo.
Yuri se acercó a la puerta e inclinó ligeramente la cabeza. Siro se 57

preguntó si el hombre estaba escuchando, y si era así, qué estaba oyendo.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

¿Realmente
Siro una líneaYuri
paraera un lobo
ganar shifter, o simplemente estaba alimentando a
su confianza?
¿Y por qué demonios esa idea le hacía a su pecho doler tanto?
Siro apretó los dientes y apartó la mirada. Había algo acerca de Yuri
que le llamaba, y eso hacía a Siro enojarse. Sabía quién era su compañero,
incluso si el hombre le había disparado y se marchó. No tenía necesidad de
tener sentimientos por alguien más.
Comprendió que estaba destinado a tener dos parejas. Todos los trio-
megas lo hacían. Necesitaban dos compañeros para mantenerse sano y
seguro. Conner McGregor era uno de sus compañeros. Yuri profesaba ser
el otro, pero Siro no sabía si el hombre decía la verdad o no. No olía como
pareja.
Y Siro encontraba ese hecho increíblemente divertido de una manera
muy triste, del tipo perverso de paso. Había estado tan seguro de que sería
capaz de convencer a Conner de que eran compañeros cuando el otro
hombre no podía olerle. Conner le había disparado en su lugar.
Ahora, Siro estaba en la misma situación, sólo que él era el que no
podía oler a su compañero. De pronto tuvo conocimiento de primera mano
de por qué Conner exactamente había sido tan incrédulo. Y esa fue la única
cosa en mantener a Siro de disparar a Yuri.
Le daría al hombre la oportunidad de demostrar su valía. Si Yuri lo
traicionaba, Siro le perseguiría y haría su muerte tan dolorosa como fuera
posible. Pero le daría al hombre las horas que pidió, incluso si era sólo
porque quería darle a Yuri la oportunidad que Conner no le había dado.
—¿Cómo podemos hacer esto?
Yuri alzó la mano por un momento, inclinando la cabeza aún más
cuando se presionó contra la puerta. Después de un momento, su rostro se
volvió sombrío hacia Siro. —Creo que tenemos menos tiempo de lo que 58

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pensé que teníamos.


otro grupo Acabo
de cazadores de oír hacia
se dirigen a alguien decirleEstán
el recinto. al guardia
a puntofuera que
de salir
en una hora.
—¡Mierda!
—Necesitamos irnos antes de que lleguen.
—Uh, sí.

—Cuando salgamos de la habitación, quiero que finjas que no estás


bastante despierto todavía. Actúa aturdido, tambaleándote un poco, y
mantén la cabeza hacia abajo.
—¿Por qué diablos iba yo a querer hacer eso? —espetó Siro.
—Porque si crees que eres fácil de controlar, no te verán como una
amenaza.
Bueno, eso tenía una especie raro sentido, de manera psicópata.
—Y si algo sale mal, nadie pensará nada sobre ti cayendo de rodillas,
ya que —Yuri hizo comillas en el aire, lo que parecía totalmente ridículo
viniendo del hombre—. Fuiste disparado. —Los ojos de Yuri bajaron a la
cintura de Siro—. Podría darte el tiempo extra que necesitas para conseguir
tu arma.
Bueno, eso tenía mucho sentido. Siro mentalmente retiró su psico-
comentario. Yuri había pensado obviamente este plan mucho, lo que hizo
que Siro se preguntara qué hacía el hombre para ganarse la vida. El Yuri
Miroslav que conocía de los registros del consejo no parecía ser esto a la
vez.
—Bien, considérame atontado. —A pesar de cómo demonios se
suponía que iba a lograr eso, Siro no tenía ni idea. Pero lo haría si eso
significaba que era capaz de largarse del recinto de los cazadores. Haría
59
mucho de cualquier cosa para escapar.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cosa, yBueno,
él sabíacasi cualquier
cuál cosa.
era el por quéNo iba a decirle
el hombre queríaa Albright unaAlbright
interrogarlo. maldita
era un cabrón escurridizo y los instintos de Siro le estaban diciendo que el
hombre sabía que era un lobo shifter. Cómo se enteró Albright, Siro nunca
lo sabría. Pero lo había hecho, lo que significaba que Siro no escaparía,
estaría muerto al amanecer.
Siro extendió las manos. —Hagamos esto.

como te—sea
Mantén la maldita
posible, —dijo cuerda envueltatomaba
Yuri, mientras alrededor de tus
a Siro por muñecas
el brazo ytanto
tiró
de él adelante—. Diga lo que diga, sólo sígueme la corriente. ¿Entiendes?
Siro rodó los ojos. Su voz estaba cargada de sarcasmo cuando
respondió. —Este no es mi primer rodeo, hermano.
Los ojos de Yuri se estrecharon. —Sólo hazlo.
Siro apretó los labios. Se divertía con la pequeña muestra de fastidio
de Yuri, y no sabía por qué. Estaban en una situación de vida o muerte, y
Yuri podría estar mintiendo acerca de ser su compañero o podría estar
diciendo la verdad. Siro se imaginó en las próximas horas, ya sea que
estuviera acoplado o muerto.
Tal vez eso era lo que le divertía tanto. Dios, era un enfermo hijo de
puta. Tal vez había estado colgado con los cazadores demasiado tiempo. —
Muy bien, vayamos a este espectáculo en la carretera. Me gustaría estar
fuera de aquí antes de que Albright vuelva. He oído hablar de sus técnicas
de interrogatorio, y planeo estar vivo en la mañana.
En todo caso, la expresión de Yuri se volvió más sombría. Siro
estaba bastante seguro de que incluso vio una pequeña curva en sus
palabras. El bajo gruñido y retumbante que de repente llenó el aire,
sorprendió a Siro tanto que por primera vez en más años de lo que podía
recordar, no pudo evitar la sorpresa fuera de su cara. 60

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Sólo
le hubiera me gruñía
gustado, a mí.
pero su —La voz depor
consternación Siro
el era másque
sonido inestable delaloboca
salió de que
de Yuri lo había derribado. Siro de repente necesitaba saber si Yuri hablaba
la verdad, porque si la forma en que su cuerpo se estremeció cuando el
hombre gruñó era algo en lo que basarse, al lobo de Siro le encantaba el
sonido—. Déjame ver tus dientes.
Los ojos de Yuri se abrieron como platos, con una expresión de
asombro viniendo de su rostro antes de que sus labios se curvaran para
revelar dos afilados dientes de aspecto canino. Siro tragó saliva mientras se
acercó y acarició una de sus yemas de los dedos contra uno de los dientes
blancos nacarados.
—Tú… —Siro volvió a tragar saliva.
—Lo sabrás con seguridad en menos de cuatro horas, Siro, —dijo
Yuri como si hubiera leído su mente, a pesar de los pensamientos que
estaba recogiendo, Siro no tenía ni idea. Tantos pensamientos corrían por la
cabeza que resultaba casi imposible decidirse por uno solo.
Yuri de pronto se inclinó hacia adelante y tomó los labios de Siro, en
un duro y apasionado beso que freía el cerebro. Todo se desvaneció,
incluso la constante preocupación de Siro que tenía de que iba a ser
capturado. La angustia que sentía que Conner no sólo había rechazado su
apareamiento, sino que le había disparado y lo dejó, algo que casi lo llevó a
sus rodillas casi todo a la vez que pensaba en ello.
Y la soledad constante que había sido parte de la vida de Siro desde
el día en que su hermano gemelo y dos de sus padres habían sido
brutalmente llevados de su lado por los mismos cazadores, se infiltró.
Siro no sabía nada excepto la dura presión de los labios de Yuri en
contra de los suyos y la excitación abrumadora que inundó su cuerpo,
llenando cada fibra de su ser con la necesidad de hacer a Yuri suyo.
61
Cuando Yuri finalmente levantó la cabeza, Siro gimió y persiguió al

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hombre conla los


volviendo labios.a La
realidad Sirosuave
con risa de Yuri golpe.
un decisivo de repente lo trajo
Era algo así de vuelta,
como ser
golpeado por un camión.
Un camión muy grande.
Siro sintió su rostro enrojecer mientras apartaba la mirada. Su
vergüenza era una cosa viva y respirando. Había estado tan consumido por
el beso de Yuri que se había olvidado del peligro en el que estaban. Era un
idiota.
—Hey. —Siro miró hacia arriba cuando sintió frotar el pulgar de
Yuri a través de sus labios. No estaba seguro de lo que esperaba ver en los
ojos de Yuri cuando lo miró, pero no era el profundo anhelo que hizo que
el corazón de Siro doliera o la comprensión —. Sólo unas cuantas horas
más, Siro.
Siro asintió con la cabeza, rezando para que Yuri hablara la verdad y
que la verdad saliera en unas pocas horas, como dijo. Necesitaba que Yuri
estuviera diciendo la verdad. Después de ser rechazado por Conner, Siro
tenía miedo de lo que podría hacer si Yuri estaba mintiendo. Sólo no podía
tomar tanto rechazo.
Incluso podría ofrecerse a Albright.
—Vayamos.
Yuri agarró a Siro por los brazos de nuevo y abrió la puerta. El
guardia que estaba en la puerta inmediatamente se volvió hacia ellos,
bajando el rifle y apuntando el cañón a Siro. Yuri rápidamente levantó su
mano.
—El Teniente quiere verlo, —dijo Yuri mientras sacaba a Siro por la
puerta.
Siro dejó caer la cabeza hacia adelante y se hizo a sí mismo tropezar 62
en la puerta, golpeando el marco en el camino. No le gustaba ese dolor que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

al instante bajara
el guardia se encendió a través de su hombro, pero al menos consiguió que
el arma.
—Se supone que vayas a buscar a Albright cuando se despierte,
Jones, —dijo el guardia—. No se supone que deba salir de esta habitación.
—Ah, vamos, Tom, —dijo Yuri en voz alta y quejumbrosa que
rallaba los nervios de Siro como uñas de las manos hacia abajo en una
pizarra—. Albright nunca me va a ascender si no me dejáis mostrar lo que
puedo hacer.
está atado —Yuri en
y estamos hizo un gesto
el centro dela recinto
las manos atadas
rodeado dede Siro —. ¿Adónde
soldados. Además,
puede ir?
—No me gusta, Jones. Albright dio instrucciones muy claras.
—¿Por favor? —Yuri engatusó—. Voy a llevarlo directamente a
Albright. Lo juro. Puedes incluso ver desde la puerta para asegurarte de que
no trata nada.
Siro podía ver la vacilación del guardia mientras se asomaba a él a
través de sus pestañas. Con la esperanza de inclinar la balanza a su
dirección, Siro dejó escapar un pequeño gemido y dejó que la rigidez de
sus piernas se fueran, dejándose caer hacia el suelo. Tal como había
pensado que sucedería, Yuri lo agarró y le evitó golpear el suelo.
—Caray, ¿qué coño le ha pasado?
—Le dispararon cuando lo encontré, —dijo Yuri—. Tiene un agujero
de buen tamaño en el hombro. Albright me hizo coserle, pero no es como si
fuera un médico ni nada. Hice lo que pude, pero no estoy seguro de que
fuera suficiente para mantener a este imbécil con vida el tiempo suficiente
para que el teniente lo interrogue.
Tom resopló mientras agarraba la manilla de la puerta de la
habitación de Siro y Yuri acabara de salir y cerró la puerta. —Mejor
esperas que quede con vida el tiempo suficiente para que el Teniente la 63

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pregunte.
saber qué Albright
demoniosestá molesto de que Anderson fuera asesinado, y quiere
sucedió.
—Sí. —Yuri tiró de Siro por el brazo —. Como le dije a Albright,
Anderson estaba muerto cuando llegué. Este idiota fue tiroteado, y su arma
había desaparecido. Si tuviera que adivinar, diría que alguien mató a
Anderson, disparó a Foster, y tomó su arma. Más allá de eso, no puedo
decir.

en los Tom se frotó


ojos del la barbilla
guardia mientrascon la mano.
le miraba Siro como
abajo se estremeció ante el de
si fuera escoria odio
la
tierra. —Yo estaba realmente esperando que matara a todos esos hijos de
puta cuando la casa explotó, pero si lo que dices es correcto, algunos de
ellos podrían haber escapado.
—Por eso creo que Albright quiere hablar con Foster, y cuanto más
rápido le lleve al Teniente, más rápido podremos averiguarlo.

—Está bien, te escucho, —dijo Tom con gran alivio de Siro —.


Albright se encuentra en el centro de mando. Lleva a este tipo a la oficina
en el pasillo sur y comunicaré por radio a Albright y le haré saber que vas.
—Gracias, Tom, —dijo Yuri con esa voz feliz y emocionada que
irritaba los nervios de Siro. Sonaba como un perrito ansioso.— Sólo sé que
Albright me va a ascender si es capaz de sacar cualquier cosa de este tipo
antes de que estire la pata.

—Eso sí, no la jodas, hombre, —dijo Tom mientras alcanzaba el


walkie-talkie pegado a su cadera —. Si este tipo sangra antes de que
Albright tenga la oportunidad de interrogarlo, la va a tomar con tu culo.
Yuri prácticamente rebotó en los talones de los pies. Era repugnante.
Siro se sentía mal del estómago con el entusiasmo en el rostro de Yuri. —
Lo pillo, Tom. Te prometo que lo llevaré directamente a la sala sur. Sólo
hazle saber que ya vamos. 64

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuripero,
brillantes sonrió cuando Tomsinasintió,
extrañamente, mostrando
caninos. suscontento
Siro estaba dientes blancos
de que suy
cabeza estuviera inclinada hacia abajo. No quería que nadie viera los ojos
en blanco que le dio cuando Yuri se bombeaba el puño como un
adolescente que acababa de recibir las llaves del coche de su padre. Y en
ese momento, con la luz del pasillo brillando sobre su cara y la sonrisa de
felicidad en los labios, Siro casi podía imaginar a Yuri ser un adolescente.
Por desgracia, le recordó a Siro que todo esto podría ser algún
elaborado truco ideado por sus captores. Albright y sus superiores eran lo
suficientemente enfermos como para planear algo como esto si se habían
enterado que era un lobo shifter.
Siro a propósito se tambaleaba junto a Yuri cuando le dio un tirón
por el pasillo en el brazo. Sólo por este espectáculo extra, se balanceaba un
poco cuando llegaron al final del pasillo y doblaron la esquina. Pero al
segundo que estaban fuera de la vista del guardia, Siro le dio una mirada
enojada a Yuri.
—¿Sobre qué demonios fue eso? —Gruñó a través de los dientes
apretados—. ¿Qué pasa con la actuación del ansioso-perrito?
Yuri se rió. —¿Quién dice que es una actuación?
Siro frunció el ceño. Sabía que era una actuación porque no había
manera en el infierno de que Yuri pudiera fingir la voz ronca profunda que
de pronto estaba usando una vez más. Y Siro se negó a admitir que se
sentía atraído por una de las voces que Yuri utilizaba, y mucho menos por
ambas.
La otra cosa que le dijo que era todo una actuación, era el hecho de
que no creyó ni por un momento que Yuri tuviera un hueso sumiso en su
cuerpo. El hombre no era necesariamente material de alfa, pero no estaba
en la parte inferior de la manada tampoco. Si recordaba los registros del
Consejo del Lobo con suficiente precisión, Yuri Miroslav era el beta de su 65

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

manada.
Tan pronto como llegaron a la sección de cruce del pasillo que se
abría en cuatro direcciones diferentes, incluyendo por la que estaban
viniendo, Yuri dirigió a Siro por la derecha y abajo por un pasillo corto a
una puerta.
Se detuvo en la puerta, tirando de ella sólo para abrir una rendija y
mirar a través de ella antes de que se cerrara de nuevo en silencio y luego,
se volviera
Yuri a Siro.
de nuevo —Bueno,
al camino por mira,
el queelhabían
pasillovenido
sur es—esey camino,
esta es la—entrada
señaló
norte. Esto conduce afuera. Una vez que abra la puerta, tenemos unos
cincuenta metros de terreno abierto que cubrir antes de llegar a los árboles.
¿Estás preparado para eso?
—Puedo hacerlo. —Incluso si no podía, Siro no estaba dispuesto a
admitirlo a Yuri. Masticaría acero antes de que admitiera que su hombro
palpitaba y su estómago estaba tan mareado que se sentía como si fuera a
arrojar sus galletas. Tenía que cambiar para sanar, y eso no iba a suceder en
medio del infierno de los cazadores.
—Tenemos que caminar de forma casual hasta que seamos
localizados. Cuantas menos razones tengamos para ser sospechosos, mejor.
Siro asintió comprendiendo y luego siguió a Yuri a la puerta de
entrada norte. Vio la línea de árboles casi de inmediato. Yuri tenía razón.
Tenían mucho camino por recorrer antes de que llegaran a ella.
Por suerte, parecía que había suficientes vehículos y material apilado
aquí y allá, que podían esquivar entre las cosas sin ser localizados. No fue
hasta los últimos pocos metros donde estarían directamente a campo
abierto.
Cualquiera observando sería capaz de detectarles.
Siro se sentía como que había predicho su propio futuro, cuando pasó 66

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

junto a la última
grito atravesó pila de
el aire de la
cajas y comenzó
noche. a cruzar
Se agachó el campo
y comenzó abierto ymás
a moverse un
rápido.
—Muévete, Yuri —le espetó a medida que más gritos llenaban el
aire.
—¡Corre! —gritó Yuri cuando las balas rasgaban el suelo por sus
pies.
Siro dejó caer la cuerda que había estado sosteniendo y se puso en un
estallido de velocidad, sólo perdiéndose ser disparado mientras corría hacia
las sombras del bosque. Oyó pisadas fuertes de Yuri golpeando el suelo
detrás de él.
Cuando Yuri gruñó y el sonido de sus pasos se detuvieron, Siro se
volvió a ver al hombre apoyado en un árbol, sosteniendo su brazo con una
mano. La sangre goteaba por entre sus dedos.
—¡Te han disparado!
—¡No me digas! —espetó Yuri.
Siro frunció los labios hacia atrás y gruñó mientras corría al lado de
Yuri. Sacó su camisa por la cabeza y empujó la mano de Yuri fuera del
camino, enlazando el tejido alrededor de la herida. Siro oía a la gente
gritando y corriendo y sabía que no tenían mucho tiempo para largarse de
allí.
—¿Por dónde? —preguntó.
Yuri señaló más profundamente en los árboles. —Tenemos alrededor
de unas veinte millas de caminata antes de llegar a cualquier atisbo de
civilización, e incluso eso es cuestionable. Los cazadores tienen sus
conexiones muy profundamente arraigadas en el área local. No estoy
seguro de que podamos confiar. 67

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Sólo llévame a un teléfono y vamos a estar bien.


Yuri arqueó la ceja y luego se apartó del árbol y empezó a dirigirse
hacia el bosque. Siro lo vio alejarse. Una vez que Yuri fue tragado por la
oscuridad, Siro inclinó la cabeza y miró hacia el recinto de los cazadores,
escuchando y oliendo el aire.
Había una gran cantidad de actividad a sus espaldas. La gente corría
alrededor y gritaba. Se oyó el disparo ocasional, y se acercaban a su
posición. Pero
adónde Siro también
y Yuri sonaba
fueron. comodisparando
Estaban que los cazadores no sabían
salvajemente en elmuy bien
bosque.
Esa era una buena cosa. Eso podría darle a él y a Yuri tiempo para escapar.
Después de una última mirada al recinto, Siro se dio la vuelta y salió
tras Yuri. Veinte millas era un largo camino para ir de excursión, sobre
todo con dos piernas. Y no estaba dispuesto a cambiar a su forma de lobo
hasta que supiera con certeza que Yuri era de fiar. Esa sería la forma más
rápida de lo que podía pensar para conseguir ser disparado. Si todo esto era
un juego elaborado, podría tener la oportunidad de jugar como si fuera un
malentendido siempre y cuando no cambiara en frente del hombre. Si
cambiaba, no habría duda de que no era humano.
Quería creer que Yuri estaba diciendo la verdad, pero había
aprendido al principio de su vida que la gente a menudo decía cosas que no
querían decir o las decían para conseguir lo que querían. La gente, tanto
shifters de lobos como seres humanos, mentían cuando convenía a sus
necesidades. Siro confiaba en muy pocas personas en su vida, y en este
punto, no importa cuánto lo quisiera, no confiaba en Yuri.
Pero, maldita sea, quería hacerlo.
Yuri le atraía, y esa era la única razón por la que había decidido dar
tiempo al hombre para demostrar sus palabras. Esto no quería decir que no
estaría observando a Yuri de cerca, porque lo haría. No importa lo mucho
que se sintiera atraído por Yuri, hasta que supiera con certeza que el 68

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hombre
confianzaletendría
estabaque
contando la verdad, no confiaba en él. Y aun así, su
ser ganada.
Habiendo crecido bajo la atenta mirada del Consejo del Lobo, Siro
había aprendido a observar a todos y a no confiar en nadie. Imaginó que el
Consejo del Lobo se estableció originalmente para ayudar a sus semejantes,
pero con los siglos, se había convertido en un grupo de personas que
buscaban lo que pudieran obtener de la vida, a costa de cualquiera.

propioElpadre.
únicoPuede
hombre
quedelhaya
consejo
tenidoenque
el que confiaba
ocultar quién sin
era duda era del
al resto su
consejo, pero su padre siempre le había colmado de amor y afecto en
privado.
Siro odiaba las circunstancias que los habían puesto en esa posición,
pero lo comprendía. Su padre ocultó su existencia para evitar que el
consejo se lo llevara y lo entrenara para ser su marioneta, como les ocurrió
a muchos tri-omegas.
En los últimos años, sólo un tri-omega nacía por generación. Cuando
nacía uno, él o ella podría ser entregado al Consejo de Lobo para ser
criado. Eran celebrados, casi adorados. Eran protegidos por el consejo y se
les permitía desarrollar sus facultades para el mayor bien de todas las
manadas de lobos.
Pero estaban naciendo demasiados en esta generación. Habían
desbaratado todo el sistema del equilibrio. Las manadas mantenían a sus
tri-omegas escondidos, manteniéndolos virtualmente prisioneros. Eso
suponiendo que no trataran de matarlos primero por ser raros.
El Consejo del Lobo estaba en un frenesí tratando de localizar a cada
trio-mega existente. Decían que era por la seguridad de los tri-omegas, pero
Siro no creía eso ni tampoco lo hacía su padre. El Consejo del Lobo estaba
tratando de construir una base de poder utilizando las habilidades de los
trio-megas. Siro simplemente no sabía cuál era su objetivo final. 69

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Y eso asustaba a morir.


Si alguien se enteraba de lo que era, le impedirían ir en misiones y le
obligarían a permanecer en la sede del Consejo. La única manera de que
un tri-omega pudiera eludir ser llevado por el consejo era estar acoplado.
El apareamiento dentro del mundo del lobo era un vínculo sagrado que
revocaba incluso los deseos del alfa o los del Consejo.
Todo el mundo respetaba el vínculo.
Siro fácilmente alcanzó a Yuri, a mirar al hombre tal como corría por
el bosque con él. ¿Estaba Yuri diciendo la verdad? ¿Eran compañeros?
Incluso si lo fueran, ¿cuál sería el motivo de reconocerlo? Conner nunca
iba a aceptarle, por lo que significaba que no podía ser reclamado por Yuri,
no a menos que quisiera morir.
Si un tri-omega no era reclamado por sus dos compañeros en una
cierta cantidad de tiempo, moriría. Había un aditivo genético en la saliva de
sus compañeros que se introducía en su sistema la primera vez que le
reclamaba. Como tri-omega, su cuerpo no lo producía.
Después de ser reclamado por primera vez, tenía que ser
regularmente reclamado por sus compañeros para reintroducir dicho aditivo
en su sistema. Podía estar sin ello durante aproximadamente una semana,
pero no más que eso y moriría.
Eso no lo dejaba con muchas opciones. Diablos, no dejaba a Siro con
una sola opción. Yuri parecía desearle, pero era obvio que Conner no lo
hacía, lo que significaba que Siro no podía permitir que Yuri lo reclamara.
Estaba tan seriamente jodido. Tal vez debería haberse revelado a sí mismo
a los cazadores.
Podría haber sido una muerte más rápida.

70

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Los pies de Conner se arrastraron mientras se abría camino a través


del bosque hacia el lugar donde se suponía que debía encontrarse con su
manada. Había pasado del dolor agonizante al adormecimiento. El
conocimiento de que había matado a un hombre que podría haber sido su
compañero era un gran peso sobre él. Puede no haber desencadenado la
explosión que mató a Siro, pero podría también haberlo hecho.
Había apretado el gatillo.
Había una profunda necesidad creciente en Conner, cada vez más
grande con cada paso que daba, descubrir si Siro había dicho la verdad.
Estaba empezando a sospechar que Siro la decía. Era la única manera de
explicar la repentina obsesión de Conner con el hombre.
Pero eso también significaba que Conner había matado de hecho a su
pareja. La angustia que inundaba a Conner fue suficiente para considerar
arrojarse a los cazadores. Nunca tendría otro compañero, y él tendría que
vivir por el resto de sus días sabiendo que había matado su única
oportunidad de ser feliz.
Estaría mejor muerto.
Pero tal vez merecía vivir con el conocimiento de lo que había hecho
como castigo por matar a su pareja. Conner se dio cuenta de que Siro había
intentado casi todo para convencerlo de que eran pareja. Había sido
demasiado terco para escuchar.
71

Oh, por supuesto, el hombre no tenía olor, pero seguramente ¿había

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

una
parteexplicación
fundamentalpara
deeso? Tenía
la vida delque haberla.
lobo. El olor
El olor, del compañero
el sonido, y la vistaera
deuna
un
compañero estaban todos diseñados para reunirlos.
Conner respiró hondo y dejó de caminar cuando otro pensamiento de
repente lo golpeó. Estuvo a punto de caer de rodillas en agonía. Así como
era, no pudo impedir el pequeño aullido y gemido que escapó de sus labios.
Puede que no haya sido capaz de oler a Siro en el momento, pero su
visión había sido
vuelto negros monocroma,
lupino. lo habían
Sus caninos que significaba que sus
caído también, y suojos
pollasesehabían
llenó
tanto que le dolía. En ese momento, lo había atribuido a que se enfrentaban
con un enemigo, pero ¿qué pasa si se equivocaba?
Esas eran señales de que había encontrado a su compañero, pero eran
algo que también le ocurría a un lobo cuando se enfrentaba al peligro. Y
había estado tan centrado en el peligro que corría, que nunca pensó en
comprobar y ver si los ojos de Siro le brillaban con luz, otro signo de un
compañero.
Excepto por el olor, todas las señales estaban allí que Conner había
encontrado a su compañero, o más bien que su compañero lo había
encontrado a él. Pero todo también señalaba a Siro siendo el enemigo,
sobre todo porque no había olor de compañero de Siro.
Conner se agarró del pelo y tiró, un gruñido de frustración
explotando de su boca. Sin el olor de apareamiento, no podía estar seguro,
y Siro no tenía olor.
¡Espera!
¿Tal vez esa era la respuesta? Siro no tenía olor, ninguno en
absoluto. No olía como compañero o humano o cazador. No tenía ningún
olor en absoluto. Si Siro había ocultado su olor de alguna manera, como
Conner asumía, entonces podría haber estado diciendo la verdad. 72

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Pero eso no cambia el hecho de que el hombre estaba muerto.


O que Conner le había matado.
Sólo había un hombre que sabría a ciencia cierta. Conner necesitaba
ayudar a mantener la seguridad de su manada y luego necesitaba hablar con
Vadim Miroslav. Siro había dicho que el Alfa de la isla de Vourdala le
había enviado. Si eso fuera cierto, entonces Vadim conocería a Siro y
podría confirmar si el hombre era un lobo shifter o no.
Al menos así Conner sabría la verdad.
Joder, odiaba esa mierda. Odiaba no poder confiar en nadie y tener
que mirar a todos como si pudieran traicionarle. Había estado viviendo con
ello durante tanto tiempo, que era una segunda naturaleza para él.
Realmente dudaba que viera a cualquiera sin querer al instante saber
si lo apuñalarían por la espalda. Nunca dio a nadie el beneficio de la duda
en el primer encuentro. Había aprendido muy temprano en su vida que tal
movimiento podría firmar su sentencia de muerte.
Los hombres en la manada de Wolfrik fueron las primeras personas
que habían iniciado en darle su confianza, y aun así se contenía un pedazo
de sí mismo de ellos. Acercarse demasiado a alguien les daba el poder de
hacerle daño, y Conner nunca lo permitiría. Había aprendido a protegerse a
sí mismo mientras crecía en la manada McGregor, y era algo que dudaba
que alguna vez olvidaría.
El Alfa Angus McGregor había sido un buen maestro. Ni siquiera
parpadeaba cuando apuñalaba a otro miembro de la manada en la espalda o
les enviaba a su muerte. Destrozaba familias con la más pequeña
provocación y tomaba lo que sentía que se le debía a él como alfa de la
manada.
El hombre no tenía alma. Se la habían succionado al nacer. Conner
tenía un desafío permanente contra el alfa. Si en cualquier momento el 73

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hombre ibacumpliría
Conner se en contray lucharía
de las normas del Consejo
por el liderazgo del Lobo,
del alfa el desafío de
de la manada.
Conner no tenía ninguna duda de que iba a suceder en algún
momento. El Alfa McGregor estaba demasiado lleno de sí mismo para
dejar que los mandatos del Consejo evitaran lo que él quería, y lo que
quería era la muerte de su hijo, Brom, y la custodia de los cachorros de
Brom. Incluso había ordenado una cacería para tratar de matar a Brom, y
sus compañeros, con el fin de conseguir los cachorros. Ese era el por qué el
consejo ordenó que el hombre no podía tener contacto con Brom, sus
compañeros o sus cachorros.
Eso funcionaba bien.
No.
Conner sabía que los cazadores eran tenaces y tenían una buen
servicio de inteligencia, pero parecía haber un poco de demasiada
información sobre lobo-shifters en los últimos tiempos. Alguien tenía que
estar alimentándoles la información, y la apuesta de Conner era que se
trataba del Alfa Angus McGregor. Sería como si el hombre traicionara a
toda sociedad de lobo que se construía para salirse con la suya.
Lo único que le dio una pausa con esa idea era el hecho de que los
cazadores habían salido a matar a todos en el rancho, incluyendo a los
cachorros. El Alfa McGregor nunca haría nada para poner en peligro a sus
nietos. Los quería demasiado.
Conner empezó a caminar de nuevo, sabiendo que tenía que llegar al
punto de encuentro antes de que todos se fueran sin él. No le quedaba
mucho tiempo tampoco. Sabía que si su manada estaba sin él, podría llamar
cuando llegara a un teléfono y alguien vendría por él, pero todavía ... sólo
sería más fácil reunirse y viajar con ellos ahora.
Además, estaba empezando a oscurecer y Conner no tenía ni idea de 74
si había más cazadores vagando por los bosques o no. No era exactamente

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

seguro ser un para


no era seguro lobo cualquier
caminando en estos momentos. Diablos, probablemente
persona.
Los depredadores estaban fuera de casa y el bosque era peligroso. Y
Conner era uno de los mayores peligros. Estaba enojado y herido, y quería
desquitarse con alguien.
Cualquiera.
Y los dos hombres cojeando por el bosque hacia él lo harían muy
bien.
Conner se trasladó a un grupo de árboles y rápidamente se quitó la
ropa. Podría necesitarla más adelante. Tomando una respiración profunda,
se dejó caer hasta el suelo del bosque y se permitió el cambio a punto de
comenzar. Escalofríos atormentaron su cuerpo cuando los huesos se
resquebrajaron y se reformaron solos. Sus sentidos se intensificaron, y el
aire frío de la noche llenaba sus fosas nasales.
Pero eso fue todo lo que olía.
Conner retrocedió de repente al recuerdo de cuando había estado en
el cuarto de baño con Siro. No había sido capaz de oler a Siro entonces, y
no podía oler a los dos hombres que venían hacia él. Eso era lo único que le
impidió saltar a los dos hombres cuando le pasaron e inmediatamente
rasgarles.
En cambio, salió detrás de ellos y gruñó.
Ambos hombres se congelaron.
Conner bajó la cabeza y volvió a gruñir, dejando al descubierto su
fuertes dientes. Quería saber quiénes eran, y quería saber por qué no podía
olerlos. Si no le daban las respuestas que quería, los mataría.
Estaba jodidamente cansado de esta mierda.
75

Cuando uno de los hombres se dio la vuelta y la luz de la luna

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

iluminó su rostro,
a cambiar sorprendió
a su forma a Conner
humana. lo suficiente
A medida que su para obligarlo
cuerpo a volver
se realineaba,
Conner cayó de espaldas a su culo, mirando al hombre.
—¿Siro? —susurró, casi temeroso de decir el nombre del hombre
algo más fuerte.
—¿A quién esperabas? —se burló Siro—. ¿Al conejo de Pascua?
—Estás vivo.
—No gracias a ti, —gruñó Siro.
Conner estaba confundido. Siro parecía tan enfadado. Demonios, la
cólera en los ojos azules de Siro por sí sola era suficiente para hacer
temblar a Conner. Teniendo en cuenta lo dispuesto que Siro parecía antes
de que Conner lo aceptara, Conner estaba un poco sorprendido por la ira
que venía del hombre ahora.

—Siro, qué…
—Tenemos que irnos, Siro.
Conner se volvió hacia el otro hombre. —¿Quién eres tú?
El hombre simplemente arqueó una ceja oscura. —¿Quién eres tú?
—Conner McGregor.

nombre,Conner
pero no
noestaba
era elseguro de lo que esperaba
odio instantáneo cuando dio
que sangraba en sual hombre su
ojos azul
celeste o la forma en la que agarró a Siro y volvió a tirar de él. Conner miró
entre los dos hombres, sin gustarle la forma en que el extraño se aferró a
Siro ni un maldito poquito.
—Siro, ¿qué está pasando aquí? —preguntó Conner.
—Has perdido el derecho a preguntarme una maldita cosa cuando 76

jodidamente me disparaste. —Siro sacó su brazo del agarrón del extraño y

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

apuntó convolver
No quiero su dedo a Conner.
a poner — Me
los ojos en tidejaste morir,
otra vez. Estásy muerto
ahora tepara
voymí.
a dejar.

La mandíbula de Conner cayó cuando Siro giró sobre sus talones y se


alejó entre los árboles. ¿Siro estaba realmente tan enojado de que Conner le
hubiera disparado y no quería volver a verlo? No era como si hubiera
apuntado a un órgano vital ni nada. Y sin ser capaz de oler a Siro,
seguramente ¿sus acciones podían ser justificadas bajo las circunstancias?

—¿Tú eres el que le disparó?


Los ojos de Conner viraron bruscamente al otro hombre, y de nuevo
una vez más se preguntaba quién demonios era él y por qué tenía el
derecho a estar tocando a Siro en absoluto. —¿Quién eres tú?, —preguntó
Conner de nuevo. Se tragó su miedo cuando el hombre de repente se acercó
a él, agitando sus garras fuera y sujetándolas contra la garganta de Conner.
—Te mataría aquí y ahora, excepto que sé quién eres. —El hombre
se inclinó hacia la garganta de Conner y le olió, diciéndole a Conner en
términos inequívocos que el hombre era un shifter.— Puedo olerte, lobo.
Conner frunció el ceño en confusión. —¿Eres un lobo?
La risa áspera que llenaba el aire envió un escalofrío de temor hacia
abajo en la columna vertebral de Conner.
—Siempre supe que la manada McGregor no era de fiar, pero nunca
pensé que tratarías de matar a tu propio compañero. —El labio del hombre
se curvó como si estuviera disgustado con sólo mirar a Conner —. Aunque,
después de todo lo que he aprendido acerca de tu manada, creo que no
debería estar sorprendido. El Consejo del Lobo debería ordenar que fuérais
exterminados cada uno de vosotros.
La mano de Conner se movió a su garganta cuando el desconocido le
soltó y se levantó, alejándose de él. Se frotó la piel magullada donde el
hombre lo había sostenido mientras trataba de averiguar qué demonios 77

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

estaba pasando.
—¿Quién eres tú? —preguntó una vez más, necesitando saber tal vez
más de lo que necesitaba para respirar.
—Uh-uh, —dijo el hombre mientras negaba con la cabeza.— No
estoy a punto de darte toda la información que te dará otra oportunidad de
matar a Siro.
—¡No estaba tratando de matarlo!
El hombre soltó un bufido. —Seguramente me pareció de esa manera
a mí.
Conner puso los ojos en blanco. —Mira, no lo entiendo. Yo estaba…
—Amigo, no necesito entender. Le disparaste a Siro. Lo dejaste para
que muriera. Eres un McGregor. Eso es todo lo que necesito saber. —El
hombre comenzó a retroceder de nuevo —. Mantente alejado de Siro o te
mataré.
Conner se sentó en el suelo, las agujas de pino cavando en su
desnudo culo mientras observaba al extraño despegar detrás de Siro.
Todavía no sabeía quién era el hombre, pero era obvio que odiaba a Conner
con pasión.
Conner no podía entender por qué.
¿Qué había hecho para provocar tanto odio en alguien que nunca
había conocido? Sí, había disparado a Siro, pero no había sido un disparo
mortal. Y había vuelto por el hombre después de asegurarse que su
manada estaba a salvo. ¿Acaso eso no cuenta para nada? Tal vez lo haría si
Siro le hubiera dado la oportunidad de explicar.
Pero no lo había hecho.
Y ahora, nunca lo haría. 78

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

grandeConner se aferró
que apenas podíaa su pecho Se
respirar. cuando
sentíaempezó a doler.
como si acababaEl de
dolor
verera tan
a Siro
morir en esa explosión de la casa de nuevo. Se sentía como si su
compañero estuviera muerto.
Aunque todavía no estaba seguro de que Siro fuera su compañero.
Conner quería darse la vuelta, acurrucarse en una pelota, y morir. No
podía recordar haberse sentido alguna vez en ese nivel de angustia, ni
siquiera cuando
Esto era casi su alfa le había
entumecimiento traicionado
en su intensidad.a él y a su completa manada.
Un ruido repentino detrás de él captó la atención de Conner y le sacó
de su lucha interna. Se dio la vuelta y levantó la nariz hasta el aire,
aspirando violentamente.
Cazadores.
Conner volvió a mirar en dirección Siro y se alejó. Los dos hombres
estaban fuera de la vista, pero no estaban tan lejos por delante. Si los
cazadores les oyeran, Siro sería asesinado con seguridad y, luego Conner
nunca tendría la oportunidad de averiguar si Siro era verdaderamente su
compañero. Los dos hombres habían sido heridos. No había manera de que
pudiera luchar contra un grupo de cazadores en su estado actual.
Sabía lo que tenía que hacer, incluso si eso significaba su propia
muerte.
Conner rodó a cuatro patas y se permitió cambiar de nuevo. Gimió
cuando sus huesos y sus músculos se contrajeron y cambiaron. Una vez que
estaba a cuatro patas en lugar de dos, levantó la cara en el aire de la noche
y dejó que su angustia llenara el aire en un profundo y conmovedor aullido
de dolor, pesar y sufrimiento.
Oyó un aullido en respuesta, pero podría haber sido incluso su
imaginación jugando una mala pasada. No fue un grito de bienvenida. 79

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Sonaba más como


Siro se había un aullido furioso, y venía de la dirección que en la que
marchado.
A Conner le dolía el corazón mientras se alejaba del sonido y
comenzó a hacer su camino a través del bosque hacia los cazadores.
Caminó por el bosque hasta llegar a un pequeño claro.
Conner podía ver a varios cazadores puestos en cuclillas en la hierba
alta y sabía que no tenía oportunidad en el infierno de golpearles a todos. Si
se iba a asegurar de que Siro escapara, sólo había una manera de hacer eso.
Conner cerró los ojos por un momento y levantó la nariz hasta el
aire, oliendo. Olió el bosque y los árboles, un ciervo en la distancia, y los
cazadores. Incluso podía oler el aceite para armas en los rifles que llevaban
los cazadores.
Pero no podía oler a su compañero. Sólo una vez, Conner deseaba
poder haber conseguido un aroma de Siro. Incluso si tenía que morir,
quería saber si Siro era suyo o no. Y le hubiera gustado oler el dulce aroma
que todo el mundo siempre le decía que un compañero despedía.
Simplemente no estaba destinado a ser.
Conner abrió los ojos y contempló el pequeño campo. Dejó a un lado
la necesidad de su compañero, junto con los últimos restos de su
humanidad, enterrando ambos profundamente dentro de sí mismo, donde
no obstaculizaría su capacidad para luchar.
Ya era hora de que se convirtiera en la máquina de matar que todo el
mundo creía que era. Con un gruñido profundo, Conner saltó al claro y fue
detrás de los cazadores, decidido a matar a cada maldito último de ellos o
morir en el intento.

80

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuri se sacudió cuando oyó un aullido angustiado llenar el aire de la


noche. Se volvió para mirar a Siro cuando el hombre dio un alarido en
respuesta, que le aterró hasta el hueso. Había tanto dolor y rabia en ese
sonido que Yuri se preguntó cómo Siro seguía en pie.
—¿Siro?
—Él me disparó, Yuri.

—Lo sé. —Yuri recordaba cómo su corazón se estrelló contra su caja


torácica cuando encontró a Siro sentado en el suelo con un agujero en su
hombro. Ver a su compañero sangrar por todo el lugar no era algo que
alguna vez quisiera volver a ver.
—Yo sabía que no podía olerme, pero nunca esperaba que me
disparara. Podría haberme dado el beneficio de la duda. —Yuri inhaló
fuertemente por la agonía de los ojos de Siro cuando el hombre levantó el

rostro para mirarlo—. Sólo jodidamente me disparó.


Yuri apretó la mandíbula, su ira contra el hombre que había
disparado a su compañero volvió a él con prisa. Quería decir que entendía
que Conner lo hubiera hecho, pero no lo hizo. Todo lo que podía pensar era
en la herida abierta en el hombro de Siro. Un par de centímetros a la
izquierda y no estarían teniendo esta conversación. Su compañero estaría
muerto.
81

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuri no podía perdonar eso.


—Lo sé, compañero, y lo siento. —Yuri ni siquiera podía empezar a
describir cuánto lo sentía. Sabía que Conner era su otro compañero. Lo
había olido en el lobo. Había sido uno de los más dulces aromas que había
olido nunca.
Y entonces se acordó de que Conner había admitido disparar a Siro.
El hecho de que Conner fuera un McGregor no le sorprendió después de
eso. En en
confiar realidad explicabaMuchos
un McGregor. las cosas
depor
susloamigos
que a él concernía.
habían No seesopodía
aprendido por
las malas.
—He oído que hay un suero que están desarrollado para una tríada
acoplada en caso de que uno de los compañeros muera, —dijo Yuri
lentamente—. Si Conner es incapaz de ser parte de nuestras vidas, todavía
hay un camino para que estemos juntos.

—Asumiendo que seas mi pareja.


Yuri sonrió. —Lo soy —le echó un vistazo a su reloj, su sonrisa
creciendo— y sabrás que digo la verdad, en menos de treinta minutos,
cuando el suero que tomé para ocultar mi olor desaparezca.
Los ojos de Siro se estrecharon. —Yo sé que no me puedes oler, así
que ¿cómo sabes que soy tu pareja?
—Te olí en la reunión del Consejo que se celebró en la isla de
Vourdala. Yo estaba allí como el beta de mi manada. Tú estabas allí
también.
—¿Por qué no me hablaste entonces?
—Tú no querías que te vieran. Recuerdo el momento en que te olí.
Sabía que eras mío, y comencé a buscarte. Estabas de pie en el fondo de la
sala, escondiéndote en las sombras cerca de una puerta. Tu postura decía 82
que no querías ser abordado en ese momento, así que esperé para descubrir

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

quién eras y rastrearte bajo diferentes circunstancias.


Siro resopló.
Yuri se reía mientras agitaba su mano alrededor del bosque. —Esto
no es exactamente lo que tenía en mente.
—¿Cómo me encontraste? —preguntó Siro mientras cruzaba sus
brazos sobre su pecho.

—Le pregunté a mi padre acerca de ti, y luego me fui a mi hermano


Vadim después que supe quién eras. Me dijo lo que haces. Te habías
marchado ya a tu siguiente misión, por lo que tomé un par de semanas para
hacerte un seguimiento y otro par de semanas para trabajar mi manera de
entrar en el campamento de los cazadores.
—Si tan sólo hubieras estado aquí un par de semanas, ¿cómo fuiste
asignado a esta misión en el Rancho Wolfrik? Albright parece un poco
más inteligente que eso.
—El Teniente Albright tiene la misma aflicción que tiene todo
gilipollas que le gusta, la necesidad de que acaricien su ego. Le halagué
bastante y actué como un recluta novato con culto a los héroes, y el hombre
estaba dispuesto a pasar por alto mi tiempo limitado en su grupo.
Siro resopló. —Albright es un idiota.
—Dime algo que no sepa, —respondió Yuri—. Se tragaron cada
maldita cosa que les dije como si fuera el evangelio. Si no supiera que el
tipo era un idiota, habría estado un poco preocupado acerca de todo el
tiempo que quería pasar conmigo.
La ceja oscura de Siro se arqueó. —¿Oh?
Yuri sintió su rostro ruborizarse al ver la mirada que su compañero le
estaba dando, y no podía recordar la última vez que se había sonrojado.
83
Bajó los ojos y le dio patadas a las hojas bajo sus pies. —Nada pasó, pero

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

estaba
novato tratando
que teníade interpretar
ganas un papel.
de aprender. Albright
Después de losme vio como
primeros pocosundías
chico
de
seguirle a su alrededor con estrellas en los ojos, empezó a llevarme en
todas sus misiones de entrenamiento. —Yuri se encogió de hombros—.
Después de eso, fue fácil convencer a Albright para que me llevara cuando
iba a exterminar a los que están en el rancho.
Cuando Siro comenzó a caminar de nuevo, Yuri se apresuró a
ponerse a su altura y luego caminó a su lado. No estaba seguro de lo que su
compañero pensara de sus palabras o el papel que había desempeñado para
ser aceptado entre los cazadores.
¿Estaba Siro enojado con él?
—¿Siro?
—Si ya estabas en el campamento, ¿por qué no sólo me abordaste y
me dijiste lo que estaba pasando? ¿Por qué esperar hasta que estuviéramos
en el rancho?
—¿Me habrías creído si me hubiera acercado a ti en el campamento
y te hubiera dicho que yo era tu pareja?
Siro se sobresaltó por un momento, y luego se echó a reír. —No.
—Razón por la cual yo estaba tratando de convencer a Albright de
que me dejara ir en más misiones que fuiste asignado. Estaba esperando
que el suero desapareciera mientras estábamos en una misión y luego tú
sólo lo sabrías, pero luego las cosas se fueron a la mierda y recibiste un
disparo.
Las cejas de Siro se juntaron. —¿Justo cuándo se supone que este
suero desaparezca de todos modos?
—Pronto, mi pareja. —Rió Yuri—. Pronto.
84
—¿No podrías simplemente cambiar o algo así sabría la verdad?

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

conocerYuri podía ver


la verdad. el anhelo
Sabía en losdel
que el medio ojos de Siro,
bosque la desesperación
no era necesariamentepor
el
mejor lugar para revelarse a su compañero. Tenían cazadores detrás de
ellos y a Siro herido.
Pero la mirada de dolor oscureciendo los ojos azules de Siro no era
algo que Yuri siempre quisiera volver a ver. Alargó la mano hacia el borde
de la camisa y la sacó sobre su cabeza. Después de caer al suelo, Yuri
rápidamente desató las botas y se las quitó de sus pies y luego empujó sus
pantalones por las piernas. Incluso se quitó la camisa atada alrededor de la
herida en el brazo.
Una sonrisa cruzó sus labios cuando oyó inhalar fuerte a Siro cuando
por fin estaba en toda su gloria desnuda. Era bueno saber que su compañero
se sentía atraído por él. Yuri sólo deseaba poder oler la excitación de Siro.
Esa maldita cosa de la falta de olor estaba empezando a conducir a Yuri a
la locura.
Yuri se dejó caer de rodillas y cedió a su lobo. Hizo una mueca
cuando sus huesos se movieron y cambiaron, y pelo brotó a lo largo de su
piel. El cambio real tomó unos pocos segundos, pero se sintieron como
eones. Cuando Yuri finalmente levantó la cabeza para mirar a su
compañero, su visión era monócroma.
Pero eso no le impidió la belleza de su compañero.
Yuri se acercó más cuando Siro se puso en cuclillas. Embistió la
cabeza contra la pierna de Siro, su lobo gimiendo al no ser capaz de oler el
aroma de su compañero. No había ningún olor en absoluto. Su lobo sabía
que estaba mal, y no le gustó.
—Dios, eres hermoso, —susurró Siro, mientras sus manos se
enterraban en la piel de Yuri —. Nunca he visto un lobo negro puro antes.
Yuri se pavoneaba bajo las caricias suaves de Siro. Era realmente la 85
primera vez que su compañero voluntariamente le había tocado, y se sentía

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

mejor
a sentirdelas
lo que Yuridenunca
manos Siro había
sobreimaginado
él cuandoque lo haría.enNo
estuviera podíahumana.
forma esperar
Había estado soñando con ello desde que Siro le vio por primera vez en el
salón de baile en la isla de Vourdala.
Yuri comenzó a transformarse de nuevo en su otra forma, cuando
escuchó una ramita golpear en los arbustos a varios pies de ellos. Yuri se
puso tenso y se adelantó para colocarse entre la amenaza que venía a ellos
y su pareja. Enseñó los dientes y emitió un gutural y bajo gruñido, una
advertencia a cualquiera que se avecinara.
—¿Qué pasa, Yuri? —Siro susurró mientras se levantaba, pero
mantuvo los dedos enterrado en la piel de Yuri.
Yuri no lo sabía. Podía oír algo, pero no estaba seguro de qué se
trataba exactamente. Pero definitivamente había algo ahí fuera. Yuri
comenzó a empujar hacia atrás contra Siro, tratando de que su compañero
se volviera a levantar. Bruscamente se dio la vuelta para mirar hacia su
compañero cuando sintió una bofetada en la parte posterior de su cabeza.
—Termina esa mierda.
Yuri dio su mejor impresión de rodar los ojos teniendo en cuenta que
estaba en forma de lobo y luego miró de nuevo a donde podía oír las hojas
crujiendo y rompiendo ramas. Los sonidos eran cada vez más fuertes. Yuri
comenzó a gruñir de nuevo, sus músculos tensándose mientras se preparaba
para la batalla.
El rumor se hizo más fuerte y las ramas de los árboles a varios pies
frente a él comenzaron a moverse. El gruñido de Yuri se hizo más fuerte,
más amenazador. Quería todo lo que venía hacia él para saber que
defendería su territorio, principalmente a Siro.
Las ramas se partieron, y de repente el más bello lobo de color claro
que Yuri había visto en su vida se abrió camino hacia ellos y colapsó en el 86
suelo. Yuri se acercó un paso y olfateó el aire. Olía a sangre, mucha sangre,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

y a residuos de un arma, y…
Yuri gritó mientras saltaba hacia delante y corrió hacia el cuerpo del
suelo. Comenzó a cambiar cuando se agachó junto al cuerpo. Al segundo
sus ojos volvieron a la normalidad, Yuri respiró hondo.
—Conner, —susurró.
El ligero dorado del abrigo del lobo estaba cubierto de sangre. Yuri
no estaba seguro de que hubiera un lugar en él que no estuviera empapado
en sangre. Yuri no sabía dónde tocar al lobo que no tuviera un corte o una
abrasión de algún tipo.
—¿Qué te ha pasado, Conner?
Yuri comenzó a alcanzar a Conner pero rápidamente retiró la mano
de nuevo cuando vio al lobo temblar y el cambio comenzó a venir a él.
Tardó más de lo debido y parecía doloroso como el infierno, pero después
de unos momentos, la forma humana de Conner estaba en frente de Yuri.
Y se veía tan mal.
—¿Conner?
El verde pálido de los ojos se teñían de rojo mirándole. —¡Co-r-rre!
—Los ojos de Yuri miraron arriba cuando los árboles que Conner había
caído justo empezaron a crujir otra vez. Algo además de su compañero
venía a través de los árboles. Conner comenzó a luchar. Yuri miró de
nuevo, la preocupación creciendo en la frente cuando vio a Conner intentar
cambiar. No estaba teniendo mucho éxito. Yuri sabía que era por las
heridas que había sufrido. Los lobos cambiaban para sanar, pero si estaban
demasiado heridos, era difícil cambiar, a veces imposible.
—Siro, —Yuri dijo mientras miraba a su otro compañero—. Cuida
de Conner. Estaré de vuelta.
87
Yuri no esperó una respuesta. Sólo cambió y se fue hacia el ruido en

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

el bosque.deRezó
y cuidara para Tan
Conner. que enojado
Siro pusiera a un lado
y resentido su ira
como hacia
estaba su compañero
hacia el hombre,
Yuri no pensaba que sólo dejaría a su compañero tendido en el suelo,
sangrando.
Eso no significaba que estuviera dispuesto a perdonar a Conner por
disparar a Siro, pero en última instancia, Conner seguía siendo su pareja.
Hasta que pudieran encontrar una manera de hacer frente a las necesidades
de un tri-omega, tenía que mantener a Conner vivo.
Yuri se congeló cuando olió el aroma inconfundible de los seres
humanos. Se puso en cuclillas entre los arbustos y esperó, tratando de
determinar cuántos eran y en qué dirección venían. No tenía ninguna duda
de que eran cazadores.
Yuri cerró bruscamente el hocico cuando vio a un cazador
escondiéndose entre la maleza. Su pecho retumbó con la necesidad de
gruñir y defender su territorio, pero sabía que dejar que el cazador supiera
su ubicación sería perjudicial para matar al chico. Yuri necesitaba que el
cazador veiniera un poco más cerca.
Yuri se acurrucó en la maleza cuando el cazador se deslizó más allá
de su ubicación. Al segundo, el cazador pasó junto a él, Yuri cambió y saltó
sobre el tipo. Lo agarró por el cuello con una mano y cubrió la boca del
cazador con la otra.
Un simple giro de su brazo y cualquier cosa que el cazador fuera a
hacer se había ido para gritar muerto en un rápido golpe en su cuello. Yuri
escaneó los alrededores mientras bajaba al cazador al suelo. Quitó el
comunicador de auriculares del cazador y luego tomó su rifle, cinturón de
municiones y equipo.
Yuri abandonó al cazador donde estaba y se apresuró a regresar a
Siro y a Conner. Se sorprendió al ver que Siro había trasladado a Conner a
un lugar escondido cerca de la base de algunos árboles. Lo más 88

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sorprendente
acunada en suaún fue que Siro se sentó en el suelo con la cabeza de Conner
regazo.
—¿Cómo está? —preguntó Yuri silenciosamente por si acaso
hubiera algún cazador cerca.
—Se desmayó hace unos minutos, —dijo Siro mientras acariciaba
con sus dedos por el lado de la cara de Conner — pero su ritmo cardiaco es
todavía fuerte.
Yuri asintió. —Tenemos cazadores que vienen detrás de nosotros.
Ve si puedes lograr que Conner cambie y luego lo mueves. Voy a tratar de
detener a los cazadores de la mejor manera que pueda. —Yuri dejó caer los
artículos que había hurtado del cuerpo del cazador muerto en el suelo junto
a Siro—. Voy a tratar de obtener una segunda radio. Estaré en el canal
cinco. Los cazadores siempre usan el canal siete.
—Yuri —Siro gritó cuando Yuri comenzó a alejarse. Yuri se detuvo
y volvió a mirar a su compañero. Siro boca se abrió y se cerró y luego se
abrió de nuevo, como si quisiera decir algo, pero tuvo un momento duro
formando las palabras—. Ten cuidado, ¿de acuerdo?
Enterrando una mano en el pelo de Siro, Yuri estrelló sus labios con
tanta fuerza que sintió el sabor de la sangre. Rápidamente lamió las gotas
pequeñas de ambrosía y luego reclamó la boca de Siro con una intensidad
salvaje, saqueando con la lengua.

El gemido que oyó, sacudió a Yuri, atravesando su cuerpo para


establecerse en sus bolas. No podía esperar a que el suero se disipara y Siro
supiera que eran compañeros. Quería reclamar al hombre y dejar que todo
el mundo supiera que Siro era suyo.
Sabiendo que tenía que ir, Yuri mordisqueó a lo largo del labio
inferior de Siro por un momento, chupando suavemente para calmar el
escozor de su boca, y luego se echó hacia atrás para mirar a los ojos 89
aturdidos de Siro. —Tendré cuidado, Siro. —Yuri sonrió, dejando a Siro

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ver
que la felicidad dentro de él brillando en su rostro —. Tengo un compañero
reclamar.
Yuri no esperó respuesta de Siro, sobre todo porque no quería oírla.
Sabía que Siro quería creerle, pero no tenía la confianza del hombre
todavía. Y tenía que mantener a Siro, y a Conner, vivos para ganarla.
Con ese pensamiento en mente, Yuri cambió de nuevo a su forma de
lobo y se arrastró entre la maleza. Esperó en su escondite, olfateando el aire
y escuchando, hasta que el cazador siguiente estuvo cerca de su ubicación.
Una vez más, Yuri permitió que el cazador pasara y luego cambió y
lo mató. Le quitó la cazadora de su equipo y lo escondió bajo un arbusto
para agarrarlo más tarde y luego trasladarlo a un nuevo lugar donde
esconderse.
Lo hizo una y otra vez hasta que no pudo oír nada más que cazadores
en el bosque u olerlos. Yuri no tenía ni idea de cuánto tiempo había pasado
o si Siro y Conner habían hecho lo que él instruyó y se habían alejado.
Yuri cuidadosamente hizo su camino de regreso a través del bosque,
observando a los cazadores cada paso del camino. Estaba enfadado
consigo mismo de que los cazadores hubieran llegado tan cerca de él sin ser
conscientes de ello. Fue un movimiento estúpido. No había dejado de rezar
para estar tan cerca de él desde justo después de su primer cambio. Nunca
debería haber sucedido.

La única excusa de Yuri era su obsesión con Siro. Sabía que había
estado abrigando a su compañero, pero ni siquiera eso era suficiente. Había
puesto la vida de su compañero en peligro por su imprudencia. No podía
volver a suceder.
Yuri tropezó hasta detenerse al llegar a un pequeño claro. El aire en
sus pulmones lentamente silbó hacia fuera a través de sus labios mientras
miraba por encima de la carnicería en la hierba alta. Una batalla de 90
proporciones épicas había ocurrido aquí. La sangre y los cadáveres eran

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

una pista enorme.


Yuri miró los árboles de los alrededores por un instante y luego,
cuando estuvo seguro de que no había nadie alrededor, hizo su camino a
través del campo. Miró los cuerpos mientras caminaba, asegurándose de
que cada uno estaba muerto y quitando su equipo de ellos.
En el momento en que llegó a la línea de los árboles, Yuri tenía un
puñado de auriculares, armas, municiones y cinturones. No estaba seguro
de que lo necesitara, pero no estaba seguro de que no lo hiciera.
Y pagaba por estar preparado.
No pasó mucho tiempo para que Yuri volviera al lugar donde había
dejado a Siro y Conner. Ambos estaban eufóricos y tristes a la vez cuando
encontró el espacio vacío. Con suerte, eso significaba que Siro había
conseguido que Conner cambiara y luego conseguió que ambos estuvieran
seguros.
Yuri levantó la nariz en el aire y respiró hondo. Un profundo y
necesitado, estremecimiento rasgó a través de su cuerpo cuando dos olores
diferentes llenaron sus ventanas de la nariz. Al parecer, Siro ya no estaba
tratando de enmascarar su olor. Yuri olía a sus dos compañeros.
Y olían a gloria.
Yuri sintió un profundo gruñido edificarse en su garganta cuando la
necesidad de encontrar y reclamar a sus compañeros lo llenaba. Comenzó a
cruzar los árboles y la maleza mientras seguía a los aromas dulces, cada
uno distintivo, cada uno fuerte y seductor.
Yuri no estaba seguro de exactamente qué lejos caminó por el
bosque antes de llegar a un estrecho camino de tierra, pero no importaba en
el momento que localizó a Siro de pie en medio de la calle mirando hacia
los árboles en el lado opuesto.
91

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Siro?
La cabeza de Siro giró bruscamente. La mirada cautelosa en su rostro
descolorido cuando vio a Yuri allí de pie.
—¿Dónde está Conner?
Siro hizo una mueca y miró hacia los árboles. —Cambió y se marchó
tan pronto como llegamos a la carretera.

—Bueno, mierda. —Yuri miró por encima del hombro de Siro a la


vacía carretera de tierra. Se pasó una mano por el pelo y frotó los músculos
tensos en la parte posterior de su cuello. Conner estaba herido, y si el
campo que había encontrado era algún indicio, estaba herido de gravedad.
El cambio le ayudaría, pero Yuri estaba bastante seguro de que Conner
necesitaba más que eso—. ¿Sabes adónde se dirigió?
—No. —Siro sacudió la cabeza y volvió a mirar a Yuri —. No dijo
una sola palabra desde que se estrelló entre los árboles y nos dijo que
corriéramos.
Yuri podía ver las emociones en conflicto en la cara de Siro. El
hombre estaba preocupado por Conner pero también estaba todavía enojado
con él. Yuri se sentía de la misma manera. Estaba furioso con Conner por
disparar a Siro, pero la preocupación que sentía por su compañero herido
rápidamente ganó el primer lugar en su mente.
—Tenemos que encontrarlo, Siro.
—Tal vez no quiera que le encontremos.
Yuri dejó escapar un suspiro. Sabía que tenía que ir con cuidado
cuando Siro estaba preocupado. El hombre estaba en el límite, sin saber en
quién podía confiar y en quién no podía. Personalmente, Yuri pensaba que
Siro había estado en el modo de juego de espías demasiado tiempo. Estaba
quemado. 92

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cuáles— Tenemos
son nuestrosque encontrarlo,
sentimientos Siro,de—Conner,
acerca repitió Yuri
sigue—siendo
. No importa
nuestro
compañero y está seriamente herido. Podría morir aquí. —Yuri apretó los
labios un momento antes de empujar un poco más —. ¿Es eso lo que
quieres?
—¡No!
Yuri parpadeó sorprendido en la palabra bruscamente gruñida de
Siro.
dijeronLos puños
a Yuri cerrados
mucho y el
acerca de profundo tic enellahombre,
cómo se sentía mandíbula de Siro
incluso le
si Siro
no lo hacía. Estaba preocupado por Conner como Yuri.
—Entonces vamos a ir a buscarlo. —Yuri se dirigió hacia el bosque
y había dado varios pasos cuando se dio cuenta de que Siro no le seguía. Se
detuvo y se volvió para mirar al hombre—. ¿Siro?
—Yo… puedo olerte, —susurró Siro.
Yuri ocultó su sonrisa mordiendo su labio. Poco a poco se paseó de
nuevo a su pareja, disfrutando de los ardientes ojos azules de Siro
ampliándose. —Y entonces ¿qué hueles, Siro?
La boca de Siro se abrió y luego se cerró como un pez. Pero sus ojos
se comían a Yuri como un buffet para un hombre hambriento. —Tú eres
mi compañero.
Yuri sonrió. —Ya te lo dije.

93

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner envolvió su brazo sano alrededor de su estómago para sujetar


sus costillas.
de los Estaba
cazadores bastante
habían seguro
llegado de par
con un quede
unas pocaspatadas
buenas estabanantes
rotas.
deUno
que
Conner pudiera esquivarle y derribar al hombre.
Su otro brazo colgaba inútilmente a su lado. Sabía a ciencia cierta
que estaba roto. El borde del hueso estaba pegado fuera de su piel entre la
muñeca y el codo. Por suerte, después de haber cambiado, la maldita cosa
había comenzado a sanar y la hemorragia se había desvanecido a un
pequeño goteo. Todavía dolía como el infierno, sin embargo. No utilizaría
el brazo a corto plazo.
Conner sabía que sólo tenía que llegar hasta el punto de encuentro y
entonces podría perder el conocimiento. Jake y Lucas se asegurarían de que
fuera atendido. Necesitaban saber que los cazadores se encontraban en la
zona.
Esa era la misión de Conner. Empujó todo lo demás en el fondo de
su mente, el dolor de sus heridas, su preocupación por los cazadores, y la
imperiosa necesidad de saber si Siro era, de hecho, su compañero. Lo único
importante era llegar a Jake y Lucas.
La luz del día fue poco a poco desapareciendo del cielo, y la
oscuridad había comenzando a establecerse. Una fría y baja niebla, se
había movido a la zona y flotaba sobre el suelo, haciendo que Conner fuera
dando tumbos mientras se tropezaba con troncos y arbustos.
94
Caminó a través de los bosques, concentrándose en nada más que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

llegar a supodría
otra cosa manada antes deSisalir
importar. de latiempo
se diera zona. Nada más importaba.
para considerar Ninguna
las otras cosas
golpeando alrededor de su cráneo, Conner sabía que iba a volverse loco.
Conner se tambaleó a través de un claro entre los árboles y casi cayó
de rodillas. Más allá de la línea de árboles era un estrecho camino de tierra,
y en esa carretera había tres vehículos. Conner parpadeó rápidamente
cuando las lágrimas llegaron a sus ojos mientras rápidamente contaba
cabezas y se dio cuenta de que cada miembro de su manada estaba a salvo.
Conner se abrió paso a través del último arbusto que lo separaba de
los miembros de su manada y se tambaleó hacia ellos. Oyó un grito subir y
sonidos de pies que corrían. Conner no podía decir quién lo agarró
enseguida, pero el olor era reconfortante, diciéndole que era uno de su
manada.
—Jesús, Conner, ¿qué te ha pasado? —preguntó Jake mientras
Conner cuidadosamente bajaba al suelo.
—Los cazadores, —susurró Conner—. ¡Tienes que correr!
—¡Mierda!, —la cabeza de Jake giró bruscamente hacia arriba —.
Caleb, ¡que todo el mundo sea cargado ahora mismo!
—Estoy en ello.
El profundo suspiro de Conner salió como un silbido doloroso
cuando la presión sobre sus costillas le robó el aliento. Se sintió aliviado de
que hubiera sido capaz de transmitir la información de los cazadores a Jake.
El alfa sabría qué hacer.
—Vas a estar bien, Conner.
Conner balbuceó y ahogó una carcajada, apretando el brazo envuelto
alrededor de sus costillas. No iba a estar bien. Dudaba que alguna vez
estuviera bien de nuevo. Sólo quería dormir y olvidar que hoy había 95

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pasado. —Cansado.
Jake frunció el ceño mientras revisaba a Conner por encima. Al
parecer, no le gustó lo que vio porque su ceño se profundizó, tirando de las
comisuras de su boca. —Sólo trata de mantenerte despierto un poco más,
Conner. Necesitamos llevarte a uno de los vehículos.
Demonios, podía dejarlo allí para todo lo que a Conner le importaba.
Tenía los huesos pesados y cansados. Todo le dolía, incluso su alma. Se
preguntó cómohaber
tanto. Debería la tierra aún se movía
implosionado porcuando
ahora. todo le dolía condenadamente
—Conner, hombre. ¿Estás todavía conmigo?
Conner parpadeó y se volvió para mirar a Jake de nuevo. Jake, su
alfa. Un buen hombre. —Estoy aquí.
—Háblame de los cazadores, Conner.

—Volaron tu casa. —Conner hizo una pausa para tomar una


respiración mientras recordaba su angustia cuando la casa estalló —.
Ellos… nos están rastreando. Sabían exactamente dónde estábamos,
cuántos de nosotros había, todo. —Una vez más las palabras comenzaron,
Conner al parecía no podía parar. Tenía que sacar todo antes de perder el
conocimiento—. Tiene que haber un traidor, dándoles información. Mi
apuesta sería el Alfa McGregor. Los cazadores sabían demasiado. Están
bien equipados y organizados. Estos no eran cazadores normales, son más
como una unidad militar.
—¡Joder! —Jake se hundió de nuevo en su culo, empujando una
mano temblorosa a través de su cabello castaño oscuro. Conner nunca
había visto al fuerte alfa tan ansioso. En realidad parecía asustado cuando
levantó sus ojos de cobre para mirar a los otros preparados para salir.
—Jake.
96

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Sí, Conner? —Jake miró abajo de nuevo hacia él.


—La isla de Vourdala. —Conner se pasó la lengua por los labios
resecos—. Que todo el mundo vaya a la isla de Vourdala. Estarán a salvo
allí. No los lleves al consejo. Hay demasiados idiotas egoístas en el
consejo. Solamente confía en Vadim Miroslav.
—Está bien, Conner. —Jake sonrió débilmente mientras palmeaba en
el hombro no herido de Conner —. Voy a llevar a todos a la isla de
Vourdala.
La lucha por mantenerse despierto drenó a Conner en las palabras de
Jake, y cerró los ojos. Vadim Miroslav había ayudado a salvar Conner, y
era un hombre que Conner respetaba en gran medida, casi tanto como
respetaba a Jake. Sabía que si Jake podía llevar a todos a la isla de
Vourdala, estarían a salvo.
El Consejo del Lobo habría sido su segunda opción si no supiera que
algunos de los compinches del Alfa McGregor se sentaban en el consejo.
No tenía ninguna duda de que a la primera oportunidad transmitirían
cualquier información que reunieran para el despreciable alfa.
No, estaban más seguros yendo a la isla de Vourdala.

Conner se despertó con un suave movimiento de balanceo. Por un


momento, pensó que iba a estar enfermo cuando su estómago rodaba.
Tragó rápidamente. Una vez que la sensación pasó, movió sus dedos y
luego los dedos de los pies. Todo parecía funcionar bastante bien, incluso si
había un ligero tinte de dolor. Pero no era una agonía insoportable, de
modo que tenía que ser bueno.
97
Conner hizo un balance de lo que podía oír y oler. Sabía que estaba

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

en unaoler
podía especie de cama
el océano, porque
lo cual era demasiado
explicaba blanda para
el movimiento ser el También
de vaivén. suelo. Y
estaba el rumor suave del motor en la distancia.
Conner empezó a deslizarse a sí mismo en una posición sentada justo
cuando la puerta se abrió. Se quedó inmóvil, sus músculos tensándose hasta
que vio la cabeza de color marrón claro de Leyland asomándose por la
habitación.

camino—abriéndola
Oye, estásy entró
despierto.
en la — Leyland
pequeña empujó—la. ¿Cómo
habitación puerta te
el sientes?
resto del

—Estoy vivo. —Lo que realmente era una sorpresa. Estaba seguro de
que iba a morir de sus heridas—. ¿Dónde estamos?
—Bueno, alguien insistió en que fuéramos a la isla de Vourdala, así
que estamos en un ferry hacia allí.
Conner casi cerró los ojos con alivio. Su manada estaría a salvo en la
isla de Vourdala. Se alegró de que Jake le hubiera escuchado, aunque se
sorprendió de que lo hubiera hecho. Jake no sabía mucho acerca de que
confiara en él tan bien.
—¿Deberías estar corriendo de un lado para otro tú solo? —
preguntó Conner cuando miró al pequeño hombre arriba y abajo —. ¿Dónde
están tus compañeros?
—Ah, diablos no, tú también. —Leyland puso en blanco sus
hermosos ojos verdes—. Estoy en un jodido ferry en medio de un océano
helado. Nadie va a llevarme aquí. Demonios, nuestra manada entera está a
bordo junto con la manada de Caleb Hunter. Estoy seguro.
—Así habla el hombre que recibió un disparo en su propia casa.
Los ojos de Conner se deslizaron más allá de Leyland al ver tanto a
Jake como a Lucas parados en la puerta mirando a su compañero. Se rió 98

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cuando Leyland pisó el pie, bien en su camino a una crisis en toda regla.
—¿En serio? —Las manos de Leyland golpearon abajo sobre sus
caderas—. Recuerdas que puedo congelar a la gente, ¿no?
—No, a menos que desees conseguir tu dulce pequeño culo azotado,
—espetó Jake—. Y no de una manera divertida tampoco.
Leyland respiró hondo. —No te atreverías.

Era como ver algo en estéreo. Tanto Jake como Lucas arquearon una
ceja a Leyland como si fueran a hacer exactamente lo que amenazaban.
—Lo harías. —Las cejas de Conner se dispararon arriba cuando
Leyland comenzó señalando con el dedo a sus dos compañeros —. Hazlo y
considera mi culo fuera de los límites para los dos.
—Ya conoces las reglas, amor, —dijo Jake—. No necesitamos
joderte para morderte. Sólo tenemos que estar excitados, y podemos pasar
de esa manera el uno con el otro. Ni siquiera tienes que estar involucrado.
Leyland gruñó y pisó el pie de nuevo. Conner estaba esperando que
su cabeza girara y explotara. En cambio, Leyland cruzó cabreado el cuarto,
empujando su camino más allá de sus compañeros y desapareciendo a
través de la puerta. Jake se echó a reír cuando Lucas rodó los ojos y
despegó detrás del pequeño hombre. Cuando volvió de nuevo a su atención,
Conner se sorprendió al ver diversión en los ojos del alfa. Después de todo
lo que acababa de oír, esperaba que Jake estuviera enojado.
—¿No deberías ir por él? —preguntó Conner.
—No, Lucas lo encontrará y lo follará en sumisión.
Conner sentía que sus cejas iban a salirse de la parte superior de la
cabeza con las veces que las disparaba arriba.
—¿Sumisión? 99

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—DeLe
invencible. vezgusta
en cuando,
pensar deLeyland necesita
sí mismo que le yrecuerden
como grande malo, peroque
no no es
lo es.
Lucas y yo le dejamos sin castigo muchas veces porque casi nos tiene
envueltos alrededor de su dedo, pero cuando se trata de su seguridad, nos
negamos a ceder, y lo sabe. Sólo le gusta poner a prueba los límites de vez
en cuando.
—¿Y follándole en sumisión arregla eso?

Jake se rió. —Joder a Leyland arregla casi cualquier cosa.


Está bien, entonces.
Conner realmente no estaba seguro de qué decir a esa declaración así
que se quedó en silencio.
—¿Cómo te sientes? —preguntó Jake mientras se paseaba lejos en la
habitación.

—Mejor.
—Estábamos preocupados allí por un rato. Estabas en bastante mal
estado, y no estábamos seguros de que lo lograras. Has estado inconsciente
durante casi tres días.
Conner resopló. —Soy muy terco para morir.
—Bueno, un poco menos de terquedad no te hubiera puesto en tal
mal estado. Tenías tres costillas rotas, una fractura compuesta en tu brazo
derecho, y más cortes y magulladuras de lo que he visto en la vida, a una
persona respirando.
Conner hizo una mueca, tragando. —Me gusta superar las
expectativas.
—Te agradecería si trataras un poco menos.
100
—Veré qué puedo hacer.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Jake cogió
su regazo. —Sólouna para
silla yponerte
la acercó,
al sentado
día cony doblado
las cosasconantes
las manos en
de que
aterricemos, seguí tu consejo y estamos de camino a la isla de Vourdala.
—Leyland me lo dijo.
—¿También te dijo que un miembro del Consejo del Lobo está a la
espera por nosotros?
Conner parpadeó ante el hombre. —Uh, no.
—El anciano Remus Dmitriev tiene algunas preguntas para nosotros.
Parece que tus sospechas sobre tu ex alfa podrían haber sido correctas. El
anciano Dmitriev ha estado investigando algunos rumores que han estado
circulando por el consejo sobre la participación del Alfa McGregor en un
poco de información confidencial que misteriosamente se filtró a los
cazadores.
Conner gruñó cuando hizo una bola con los puños. —Sabía que ese
gilipollas estaba involucrado. Podría haber estado tratando de sacar a Brom
fuera del cuadro diciendo a los buscadores dónde estábamos, pero no tiene
ni idea del odio que los cazadores tienen hacia nosotros. Matarán a cada
hombre, mujer y niño hasta que ya no exista.
—Eso no es excusa para su comportamiento si, efectivamente,
alimenta a los cazadores con información, Conner, —contestó Jake—. Si el
Alfa McGregor estaba involucrado en el ataque a nuestra manada, tiene que
pagar por sus crímenes.
Conner frunció los labios de nuevo y prácticamente escupió su
respuesta. —Espero que se pudra en el infierno.
—Bueno, supongo que eso responde una pregunta.
Conner entrecerró los ojos a su alfa. —¿Qué pregunta?
101
—Estaba preocupado de que estuvieras molesto porque el Alfa

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

McGregor
todo lo quepudiera tener
él hacía, que comparecer
el hombre fue tu alfaantedurante
la justicia.
variosA años.
pesar Incluso
de que
cuando te uniste a otra manada, es difícil romper esos lazos.
—¡Diablos, no! —espetó Conner—. La existencia del hombre tiene
que terminar antes de que pueda destruir a nadie más. Hacerle comparecer
ante el consejo es un camino demasiado fácil para un monstruo como
McGregor. —Se negó a dar al hombre el título respetuoso de alfa, no
ahora—. Tiene que morir.
—Si McGregor es declarado culpable, será llevado ante el consejo.
Sin embargo, todavía tienes un desafío permanente en su contra. Si se
hallan pruebas de que ha estado filtrando información, podría ser motivo
para emitir tu desafío de nuevo. ¿Estás listo para eso?
—Jake, yo no quiero ser un alfa. —Él no era material de alfa. Lo
sabía en el fondo de su alma. Además, la idea de ser responsable para
cualquier persona, especialmente una manada entera de gente, hizo que su
estómago se cortara.
—Podría llegar a eso, Conner. Sabemos que McGregor es sucio.
Simplemente no puedo probarlo. Todavía. Si la evidencia que seamos
capaces de reunir no es suficiente para que el consejo encarcele al hombre,
puede que tengas que seguir adelante con el desafío.
Conner se pasó la mano por encima de su estómago, tratando de
aliviar el repentino calambre en el abdomen. —¿No podría desafiarle,
matarle, y luego girar el liderazgo hacia ti?
—¡Oh diablos, no! —Jake comenzó a agitar las manos hacia atrás y
adelante, su frente palideciendo rápidamente—.Tengo suficiente en mis
manos con la gente en nuestra manada. Controlar a Leyland es un trabajo
de tiempo completo. No necesito a más personas para seguir la pista.
—Entonces alguien más, —insistió Conner—. Hay más de un par de 102
hombres en mi manada anterior que serían buenos para el puesto. Una de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ellas puede hacerse cargo.


—Esa es tu elección, Conner. Una vez que ganes el desafío, tienes el
derecho de entregar la posición de alfa a quien tú elijas. Pero hay que
pensar largo y tendido acerca de eso antes de tomar una decisión. Creo que
serías un alfa bastante bueno. Seguramente conoces qué es lo que no debes
hacer.
Conner resopló. —Es por eso que no quiero ser alfa.
—Sigo pensando que serías bueno para el puesto, —dijo Jake
mientras se ponía de pie—. Piensa en ello, ¿eh? Tienes tiempo para decidir.
En este punto, ni siquiera sé si surgirá. Por el momento, sólo estoy tratando
de poner a todos a salvo en la isla de Vourdala.
—¿Hablaste con el Alfa Miroslav?
—Sí. —Jake se detuvo a medio camino de la puerta y se volvió para
mirar a Conner mientras se frotaba la parte posterior de su cuello —. Dijo
que somos más que bienvenidos, especialmente cuando podría utilizar
hombres extra para ayudar alrededor de la isla. Ha tenido que reforzar la
seguridad allí desde que su hermano trajo a casa un montón de tri-omegas
un par de meses atrás. Hay gente que han estado tratando de irrumpir en la
isla a izquierda y derecha.
—¿Sabe el Consejo Lobo de esto?
Jake apretó los labios mientras asentía. —Ellos son parte del
problema. Quieren que todos los tri-omegas no acoplados sean entregados a
ellos, y Vadim se niega. Dijo que ha escuchado acerca de lo que sucede con
el tri-omega que es entregado al consejo, y no va a formar parte de ese tipo
de esclavitud.
—¿Esclavitud?
—El consejo quiere que los tri-omegas no acoplados sean colocados 103
bajo su cuidado y —Jake hizo comillas en el aire con sus dedos —.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Protección.
tanto. Demonios, incluso quieren a los acoplados, pero no pelean eso

Conner frunció el ceño. —¿Pero por qué?


—Dicen que es porque los tri-omegas pueden ser adecuadamente
entrenados y mantenidos a salvo de aquellos que, o bien tratan de usarlos
para su propio beneficio o matarlos. Pero Vadim ha escuchado historias de
abusos de tri-omegas, por lo que no está dispuesto a entregarlos bajo su
protección al consejo o cualquier otra persona.
—Me alegro por él. —Conner apretó los dientes para no gruñir a la
idea de que gente como Leyland y Jaryn podrían ser objeto de abuso sólo
porque eran diferentes. Deben ser tratados como si fueran especiales, no
encerrados en algún lugar—. Creo que el Consejo no tendría reservas sobre
el uso de los tri-omegas para sus propios fines.
—Exactamente.
—Por lo tanto, vamos a ayudarles en todo lo que podamos entonces.
—Sí. —Jake se rió—. Esa declaración podría tener más peso si
pudieras estar en tus propios pies sin ayuda.
Conner sintió que su rostro enrojecía mientras apartaba la mirada.
Jake tenía razón. Probablemente no podría luchar con una mosca en estos
momentos. —Voy a estar de pie para cuando lleguemos a la isla de
Vourdala, —dijo con más valentía de la que sentía.
—Tienes tres días.
Tres días.
No hubo mucho tiempo para recuperarse de las heridas que había
sufrido. Pero Conner se negó a ser portado a la isla de Vourdala. Saldría del
ferry por sus propios pies, o no lo dejaría en absoluto. —Estaré listo.
104

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Esperaba.

105

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Estaremos allí bastante pronto.


Siro envió a Yuri una pequeña sonrisa, que no sentía. No podían
llegar a la isla de Vourdala lo suficientemente rápido para él. Cada
momento que se deslizaba sin saber dónde estaba Conner o lo mal que
estaba herido era insoportable.
No había habido ninguna señal de que Conner estuviera en el bosque.
Siro y Yuri habían seguido un rastro de sangre hasta un pequeño camino de
tierra. El olor de varios otros shifters había llenado la zona, junto con el
olor a gas y aceite. Los aromas mezclados con las huellas de neumáticos
que habían encontrado convencieron a Siro de que Conner había escapado
de los cazadores, pero todavía no le dijo dónde estaba su compañero.
La ira que Siro sentía hacia Conner fue disminuyendo con cada
minuto que no sabía lo que estaba pasando con Conner. La preocupación
estaba empezando a ocupar el asiento delantero en los pensamientos que
flotaban a través de su cabeza. Sabía que Conner estaba herido. No sabía
cómo de malo o si estaba recibiendo atención médica.
Demonios, ni siquiera sabía si Conner estaba vivo en este punto.
Siro rezaba para que lo estuviera. No estaba exactamente listo para
perdonar a Conner por dispararle, pero eso no significaba que no quisiera
saber si el hombre estaba vivo o no, a pesar de lo que había dicho a Conner
atrás en el bosque.
106

Esta afirmación todavía hacía que Siro se estremeciera cada vez que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pensaba en ella. las


posible, soltando Había sido que
palabras deliberadamente cruel tanto
realmente no quería decir. como le fue
Había estado
tan enfadado y dolido. Todavía lo estaba.
Lógicamente, comprendió de dónde venía Conner, especialmente
después de conocer a Yuri. Eso todavía no significaba que el rechazo del
hombre no hubiera lastimado. Conner no sólo lo había rechazado, sino que
había disparado a Siro. Podía haberlo matado.

menosSimplemente
no una maneranoque
había
Sironinguna
pudieramanera
ver. Su de volver dehabía
compañero eso, intentado
o por lo
matarle. Era tan simple como eso. Si eso no era el jódete más grande del
mundo, no sabía lo que era.
Conner no lo quería, y sin Conner, Siro no podía tener a Yuri. Estaba
jodido de cualquier manera que lo mirara. No por vez primera en su vida,
odiaba lo que era. Ser un tri-omega había llevado todo de él, su familia,
cuando la mayoría de ellos habían sido asesinados por los cazadores, el
amor y la atención de su madre y su otro padre, pudiendo crecer con su
hermano, y ahora había alejado a sus compañeros de él. ¿qué de bueno
tenía ser un tri-omega si alguien le traía a alguien tanto dolor de corazón?
Siro ni siquiera tenía el deseo de hacer el trabajo de encubierto ya
más. Era como si la lucha hubiera salido de él. Sólo quería llegar a la isla
de Vourdala, donde estaba su hermano Serge, y olvidar alguna vez que era
un tri-omega o cualquier otra cosa.
—¿Estás escuchando?
—¿Qué? —Siro se apartó de la ventana en la que estaba mirando
para ver a Yuri.
Yuri puso los ojos en blanco. —Adivino las respuestas a esa
pregunta.
—¿Qué pregunta? 107

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Te pregunté si estabas escuchándome.


—Oh. —Siro rápidamente miró por la ventana otra vez cuando su
rostro se calentó—. Lo siento. Supongo que no soy muy buena compañía
en estos momentos.
—Lo encontraremos, Siro.
Siro se llevó un susto de muerte cuando sintió los brazos de Yuri
envolverse a él por detrás. Debería estar acostumbrado a ello por ahora
tanto como el hombre trató de tocarle, pero no lo estaba. Había crecido en
un mundo donde tocar no era una buena cosa. Había aprendido desde el
principio a no mostrar sus emociones, ya sea física o mentalmente.
Yuri era todo lo contrario. De la forma en que lo dijo, sus padres y
hermanos demostraban su cariño por los demás constantemente. Y él
parecía decidido a ser exactamente de la misma manera con Siro. Siempre
estaba tocando y besando a Siro, abrazándolo y tratando de estrecharle. Era
inquietante.
Agradable.
Pero aún inquietante.
—¿Cómo puedes estar seguro de que lo encontraremos? —preguntó
Siro en voz baja mientras seguía mirando por la ventana pequeña y redonda
del ferry—. No tenemos ni idea de dónde está. Diablos, ni siquiera sabemos
si está vivo.
—Lo vamos a encontrar, Siro. Te lo juro. Tenemos que hacerlo.
Había un hilo de desesperación en la voz de Yuri. Fue suficiente para
llamar la atención de Siro, y se volvió para mirar al hombre. Los ojos
azules de Yuri estaban moteados con ansiedad y un poco de desesperación.
El corazón de Siro empezó a doler de nuevo, pero esta vez fue por Yuri y
no por Conner. Ambos hombres eran sus compañeros, y parecía que Yuri 108

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

podría haber conseguido el mal final del acuerdo.


—Lo siento, Yuri. —Siro curvó su mano alrededor de la parte
posterior del cuello de Yuri y tiró de la cabeza del hombre hacia adelante
hasta que sus frentes descansaban una contra la otra—. Tú no mereces esto.
—Hey, ahora, nada de eso. Vamos a salir de esto.
—¿Cómo? —La voz de Siro rompió—. ¿Y si nunca encontramos a
Conner?
—Lo vamos a encontrar, amor. Me niego a pasar el resto de mi vida
sin mi compañero. Tenemos que encontrarle para que pueda reclamarte
como mío.
Siro sabía que toda esta situación era difícil para Yuri. Incluso podría
ser más difícil para él de lo que era para Siro. Sabía que Yuri estaba
sintiendo la necesidad de reclamarle, para marcarlo, pero no podía. Si Yuri
le reclamaba antes de que encontraran a Conner, Siro podría morir.
Sentía la misma necesidad. Quería reclamar a Yuri tanto como quería
ser reclamado por el hombre. Y cuanto más pensaba al respecto, más Siro
comenzaba a pensar que eso es exactamente lo que necesitaba hacer.
—Sabes, —susurró Siro mientras levantaba su cabeza — nada en el
libro de las normas dice que no pueda reclamarte.
—Siro…
—Sólo escúchame. —Siro rápidamente levantó la mano y apretó los
dedos contra los labios de Yuri para detenerle de hablar. Había una
necesidad cada vez mayor dentro de Siro por asegurarse de que Yuri era
suyo. Era casi dolorosa en su intensidad. Ponía a Siro inquieto —. Los dos
sabemos que no puedes morderme hasta que encontremos a Conner o
encontremos una manera de romper la influencia que tiene sobre mí. —Siro
tragó duro, esas palabras sabían amargas en su boca, pero necesitaban ser 109
dichas—. Pero eso no quiere decir que no pueda reclamarte o incluso

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

morderte.
—Siro…
—¿Por favor? —Siro nunca había suplicado en su vida, pero estaba
dispuesto a ponerse de rodillas y suplicar si fuera necesario. La necesidad
de reclamar a Yuri y hacer al hombre suyo para que todo el mundo lo viera,
estaba llevándole a pasarlo muy duro. Y necesitaba que terminara antes de
llegar a la isla de Vourdala. Siro no sabía por qué, sólo sabía que tenía que
ser.
—Pero ¿qué pasa con Conner?
—No lo sé. —Siro sintió un nudo obstruyendo su garganta mientras
tragaba—. Pero sí sé que Conner no es mi único compañero. Tú eres mi
compañero tanto como él, y estás aquí, ahora.
Las cejas oscuras de Yuri se fruncieron sobre la frente. —No voy a
ser un reemplazo de Conner, Siro.
—Olvida que incluso mencioné nada, —espetó Siro mientras trataba
de empujar más allá de Yuri. Supongo que ninguno de mis compañeros me
quiere. Ser un tri-omega realmente apestaba. Tal vez sólo debería arrojarse
a un lado del barco antes de llegar a la isla.
—Maldita sea, Siro. —Siro gruñó cuando fue agarrado y estrellado
de nuevo en la pared. Yuri estaba de repente en su rostro, presionándole,
empujando en él con su cuerpo grande y musculoso—. No vas hacer esto.
—¿Hacer qué?
—Descartarme a mí o a mis preocupaciones.
¿Era eso lo que estaba haciendo?
—Siro, tienes miedo, y con razón. —La intensidad en la voz de Yuri
disminuyó, dando a su tono una cualidad casi susurrante —. Sé que estás 110

preocupado acerca de Conner. Yo también lo estoy. Pero el sexo no va a

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hacer que la situación se vaya.


—Yo no estaba tratando de… —Siro frunció el ceño en
concentración. ¿Era eso lo que había estado tratando de hacer? Si lo fuera,
entonces ¿por qué sentía tal abrumadora necesidad de reclamar a Yuri antes
de que atracaran? Siro negó con la cabeza —. Yo no estaba tratando de
descartar tus preocupaciones o el hecho de que estoy preocupado, pero
algo…

Ohsonar
Le haría hombre,
comonoun
había manera
completo de explicar
idiota la urgencia
si siquiera que Siro
lo intentaba. Yurisentía.
nunca
le creería, ni en un millón de años.
—Algo está haciendo que tu nudo en el estómago apriete al igual que
tus nervios se están deshilachando.
La boca de Siro se abrió cuando una descarga rodó a través de él. —
Sí.
Yuri hizo una mueca y asintió. —Lo sé. Yo también lo siento.
Simplemente no sé lo que es.
—Te juro que no estoy tratando de usarte como reemplazo de
Conner. Es todo lo contrario de hecho. Me siento como que si no te
reclamo antes de llegar a la isla de Vourdala, entonces te perderé, y no
podría soportar perder a mis dos compañeros.
Siro se apoyó en la mano callosa de Yuri curvada alrededor de la
mejilla. Sólo el olor de su compañero filtrándose en los poros fue suficiente
para calmar a Siro temporalmente. Aspiró profundamente, necesitando más
del olor. Infierno, se bañaría en él, si pudiera.
—Dios, qué bien hueles.
Yuri se rió. —¿Ahora que me puedes oler, quieres decir?
111
—Sí. —Siro estaba un poco avergonzado cuánto el olor de Yuri le

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

afectaba. La primera
había disparado por élvez
queque
casihabía olido
lo llevó al rodillas.
a sus hombre, Entendía
una rachala de lujuria
mecánica
de cómo Yuri había ocultado su olor y por qué. Simplemente no había
entendido cómo algo tan fuerte podría ser enmascarado por simples
productos químicos.
Y nunca quería experimentar la pérdida de ese olor de nuevo.
—Déjame reclamarte, Yuri, —susurró Siro, poniendo todo lo que no
podía decir en sus ojos—. Por favor.
Yuri miró por un momento, con los labios apretados. Siro casi
pensaba que el hombre iba a rechazarle, y no sabía lo que haría si eso
sucediera.
—Te das cuenta de que nunca me ha tocado estar abajo antes,
¿verdad?
Siro parpadeó. —¿Qué?
Los labios de Yuri se curvaron en una sonrisa. —¿Me veo como un
chico de abajo para ti?
—Bueno… no, pero ¿nunca realmente has estado abajo antes?
—Culo virgen total.
Siro estaba bastante seguro de que iba a desmayarse allí mismo, y él
nunca se había desmayado en su vida. Siro comenzó a sonreír al pensar en
todas las cosas, y posiciones, que podía enseñar a su compañero.
—Oh, cariño, tengo una sorpresa para ti.
Los ojos de Yuri bajaron a la erección presionando contra los
vaqueros de Siro. —He visto esa sorpresa antes.
Oh, el pobre hombre. No tenía ni idea.
112

—Ven conmigo. —Siro agarró la mano de Yuri y tiró de él hacia el

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

borde de que
Mientras la cama que habíaníntimo
nada demasiado compartido durante las
había ocurrido entreúltimas noches.
ellos, Siro no
había sido capaz de negar la necesidad de Yuri para abrazarle por la noche.
Incluso sufrió por encontrar a Yuri enroscado en torno a él todas las
mañanas.
Hizo a Yuri feliz.
Y eso hizo feliz a Siro.
¿Quién sabía?
Siro tiró a Yuri para detenerse en el borde de la cama y alcanzar los
botones de su camisa. De hecho, era un par de centímetros más alto que
Yuri, quien trajo la frente del hombre sobre la barbilla de Siro. Aún así, el
hombre no se quedó atrás. Yuri tenía músculos de sobra y millas de dorada
piel bronceada que Siro tuvo el impulso de lamer.
Siro se tomó tiempo para explorar la piel sedosa de Yuri mientras
empujaba la camisa de anchos hombros del hombre. Una vez que la camisa
cayó al suelo, Siro acarició las manos por encima de los gruesos hombros
de Yuri a su musculoso pecho.
—Me gusta esto, —dijo al tiempo que pasaba los dedos por el
cabello oscuro sobre los músculos pectorales del hombre. Sólo había un
puñado de pequeños pelos rizados extendiéndose sobre su pecho y luego
arrastrándose hacia abajo a una estrecha flecha que guiaba debajo del
borde de la cintura del hombre.
Dos discos redondos ligeramente de color marrón, estaban
enclavados en toda ese oscuro pelo que atrapó la atención de Siro. Mantuvo
sus ojos fijos en los de Yuri cuando se inclinó y mordió uno. Las fosas
nasales de Yuri se dilataron, pero ningún sonido escapó de los labios
apretados del hombre.
Eso cambiaría. 113

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Sirodientes.
entre los se inclinó
Yuriy se
pellizcó el otro pero
puso rígido, pezón, succionándolo
todavía en susonido
ningún nuevo boca,
escapó de su boca. Siro mentalmente se encogió de hombros. Quizás Yuri
no era aficionado a los pezones de hombre. No todo el mundo lo era.
Pero no sabía de un hombre en el planeta que rechazara un conjunto
de labios cálidos envueltos alrededor de su polla. Siro se deslizó hasta el
suelo y llegó a las botas de Yuri. Oyó reír a Yuri cuando se sacó una bota y
la arrojó por encima del hombro y luego la otra.
La risa de Yuri se detuvo cuando Siro alcanzó la cremallera en los
vaqueros del hombre. El bulto en sus pantalones pulsaba y creció
lentamente cuando Siro tiró de la cremallera hacia abajo para mostrar una
de las más bonitas pollas que alguna vez había visto. Era gruesa, larga, y
goteaba.
No le había ido mal en el departamento de parejas. Yuri era un dios
dorado con un chorro de negro pelo que ligeramente se rizaba alrededor de
su cabeza y caía a sus hombros en ondas suaves. Sus ojos azul celeste
dominaban su rostro, haciendo que su mandíbula cuadrada y pómulos
fuertes se destacaran.
Era impresionante.
Siro se puso en pie y señaló la cama. —Ponte cómodo.
Yuri arqueó una ceja. —¿En serio?
Siro sonrió y alcanzó el borde de su camisa de algodón. La llevó
sobre sobre su cabeza y la dejó caer al suelo, sin preocuparse por donde
caía. Yuri se quedó allí y se quedó hasta que Siro hizo una pausa.
—¿Yuri?
Los ojos de Yuri se abrieron por un momento, y luego su rostro se
sonrojó como si hubiera sido sorprendido haciendo algo que no debería 114
estar haciendo. Siro sonrió mientras el hombre se apresuró a subir a la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cama. A Yuri lemuchos


su compañero, esperaban más que unas pocas sorpresas. Tenía planes para
planes.
Siro esperó hasta que Yuri se acomodó en la espalda en medio de la
cama y luego quitó las botas de sus pies, pateándolas lejos. Podía sentir
todo el peso de la mirada intensa de su compañero cuando se contoneaba
fuera de sus vaqueros.
Una vez que estuvo desnudo, Siro levantó sus ojos para encontrarse
con
Sirolos de Yuri
como nada llenos dehecho.
lo había lujuria.SuElrespiración
calor en losseojos de su pareja
enganchó calentó a
en su garganta,
robando las palabras que había estado a punto de hablar.
Se fue con la acción en su lugar.
Siro agarró su dura polla y le dio un golpe largo y lento. Vio el
intenso anhelo en los ojos de Yuri, cuando el hombre se dio cuenta de lo
que estaba haciendo. Los ojos del hombre cayeron a la polla y un suave
sonrojo llenó su cara. Pero fue la forma en que la polla de Yuri palpitaba y
se meneaba que llamó la atención de Siro.
—¿Te gusta lo que ves, Yuri? —Siro dio a su polla otra larga caricia
desde la raíz hasta la punta y luego retrocedió de nuevo. Sus bolas se
sentían pesadas, dolorosas. La necesidad de hundir su eje en el cuerpo
bienvenido de Yuri era casi abrumadora.
Pero tenía que tomarlo con calma, no importa la cantidad de control
que llevara. Yuri nunca había estado en el extremo receptor, y Siro se
acurrucaría y moriría si hiciera esta experiencia incómoda para su
compañero.
La respiración de Yuri parecía tartamudear en su pecho cuanto más
observaba a Siro acariciarse él mismo, lo que dijo a Siro un montón de
cosas. Yuri disfrutaba viendo. Sería bueno si alguna vez fuera capaz de
resolver las cosas con su otro compañero. 115

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

La otra
el hombre no cosa quetan
se veía la poco
respiración irregular
afectado de Yuriaparecer.
como quería dijo a Siro, fue que
Y teniendo
en cuenta lo que Siro tenía reservado para el hombre eso era una cosa muy
buena.
Siro dejó caer su mano alrededor de su polla y se subió al extremo de
la cama, arrojando un tubo de lubricante al lado del hombre. Subió
lentamente su camino hasta que se cernía sobre la parte superior de Yuri,
sus manos apoyadas a ambos lados de la cabeza del hombre y acurrucó su
cuerpo entre los muslos de Yuri.
—Te va a gustar esto, —susurró Siro—. Prometido.
Antes de que Yuri pudiera protestar o incluso hablar, Siro bajó la
cabeza y reclamó los labios del hombre. El primer beso era ardiente,
quemando justo a través del cuerpo de Siro hasta su alma. No hubo
comienzo lento y gradual incremento en intensidad. Fue directamente
abrasador al segundo que la lengua de Yuri tocó la de Siro.
Siro apartó su boca de la de Yuri y lentamente besó un camino abajo
del cuello del hombre contra su pecho. Todavía tenía dudas acerca de la
aversión de Yuri al juego del pezón. Pasó la punta de su lengua alrededor
de los pezones de Yuri, provocando las duras pequeñas protuberancias y
prendiéndose a ellas, chupando cada una.
Siro movió su mano libre hacia abajo entre sus cuerpos, trazando sus
dedos sobre la dura polla de Yuri. Yuri abrió los muslos más amplios,
animando a más toques. Siro continuó el asalto a los pezones de Yuri
mientras utilizaba su pulgar para frotar la punta que goteaba del hombre.
Bombeando toda la longitud con la mano, usó todos los trucos que
conocía para construir el placer de Yuri.
Cuando Yuri se arqueó fuera de la cama y un gemido de aliento
escapó de sus labios, Siro deslizó hacia abajo su cuerpo a dura erección 116
goteando pre-semen a lo largo de su estómago. Tragando la erección hasta

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

la raíz, Siro
ofensiva sostenía
fuerza las caderas de Yuri hacia abajo, sin preocuparse de la
que utilizaba.
Chupaba ferozmente, necesitando sentir la semilla de su compañero
en su boca. Tenía que probar la entrega de su pareja. Masajeó el delicado
saco debajo de la polla de Yuri mientras pasaba la lengua por encima de la
ranura a la cabeza del largo eje del hombre y fue recompensado por el
cuerpo tensándose de Yuri.

Siro
y fuera deltomó
culoel apretado
lubricantedey manchó sus dedos. agregando
Yuri lentamente, Deslizó un un
dedosegundo
dentro
cuando pensó que su compañero podía soportarlo. Presionó un poco más
cada vez, hasta que Yuri estaba meciéndose hacia adelante y hacia atrás,
rogando por más. Cuando la garganta de Siro masajeó su longitud y jodía al
hombre con sus dedos, Yuri se vino, gritando el nombre de Siro.
Siro subió entre los muslos de Yuri y colocó su pene en la apertura
de Yuri. Bajó la vista y se encontró con los ojos azules de Yuri, lentamente
empujando dentro del culo del hombre. Una vez que estuvo todo el camino
dentro, se conmovió cuando su polla estaba envuelta en el calor húmedo.
Siro se detuvo, con las manos apoyadas a cada lado de la cabeza de Yuri, y
se quedó mirando a la hermosa cara del hombre.
—Mío, —gruñó posesivamente, sintiendo algo salvaje y fiero
apoderarse de él, lo que le obligó a reclamar su compañero dentro y fuera.
—Tuyo, Siro.
Yuri envolvió una de sus piernas alrededor del muslo de Siro, y se
sacudieron juntos por un momento, golpeándose, acariciando la piel
resbaladiza, explorando cómo cada uno de ellos se sentía contra el otro.
Siro podía sentir los músculos internos de Yuri ondeando a su
alrededor, abrasándole, llevándole al borde del abismo. Agarró las caderas
de Yuri cuando comenzó a moverse más, moviéndose más rápido y más 117
profundo con cada embestida. Sintió el culo de Yuri apretar con fuerza

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

alrededor dejuntó
hasta que se su polla,
en susconstruyendo el placer
bolas y se detenía en suque crecía dentro de Siro,
cuerpo.
—Siro.
Una palabra.
Una simple palabra, y eso significaba más para Siro que cualquier
orgasmo que alguna vez pudiera, especialmente cuando Yuri inclinó la
cabeza hacia atrás y mostró su garganta.
Siro gimió cuando se inclinó y hundió sus dientes en la carne blanda
del hombro de Yuri. Sangre dulce y caliente salpicaba a través de la lengua
de Siro, trayendo una ola de placer y plenitud diferente a todo lo que había
sentido alguna vez.
—Yuri, —susurró Siro en silencio cuando sintió un aleteo en su
cabeza.— Mi compañero.

—Sí, —contestó Yuri sólo en voz baja.


Con una ráfaga de duros y rápidos golpes, Siro se congeló, enterrado
tan profundo dentro del culo de Yuri como pudo conseguir. Sacó sus
colmillos de la carne tierna de Yuri, echó la cabeza hacia atrás y rugió su
finalización, inundando el pasaje interior de Yuri con su propia semilla
caliente. Oyó a Yuri gritar y miró justo a tiempo para ver el semen del
hombre derramarse sobre el estómago.

Después de unos momentos, y varias respiraciones profundas, Siro


sacó su polla del culo de Yuri y se dejó caer al lado del hombre. Sonrió
intencionadamente, mientras observaba a Yuri tratar de recuperar el aliento.
—Te dije que tenía una sorpresa para ti.
Siro se rió cuando Yuri simplemente levantó su dedo medio y luego
le hizo un gesto. Por una vez, él era el que se acercaba y se envolvía
118
alrededor de su compañero. Se acurrucó dentro, dejando caer la cabeza

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hacia abajo sobre el pecho de Yuri y sintiendo los brazos de Yuri a su


alrededor.
—Gracias. —Necesitaba decirlo. El alivio que llenó a Siro ahora que
sintió la conexión entre ellos era casi tan abrumador como la intensa
necesidad que había tenido de reclamar al hombre.
Yuri le apretó el hombro y plantó un pequeño beso en la sien de Siro.
—En cualquier momento, pareja.
Siro esperaba sinceramente que Yuri quisiera decir eso, porque todo
lo que les estaba esperando en la isla de Vourdala podría probar el vínculo
creciente entre ellos. Siro sólo esperaba que Yuri todavía estuviera a su
lado cuando todo estuviera dicho y hecho.

119

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

isla deYuri miró a Sentía


Vourdala. Siro ponerse másansiedad,
la misma ansioso cuanto
pero nomás se como
tanto acercaban
Siro.a El
la
hombre parecía casi frágil, como si un viento fuerte le partiera a la mitad.
Yuri no podía explicar qué era lo que les estaba causando a ambos estar
incómodos, pero se alegraba de que Siro le hubiera reclamado.
Diablos, no habían estado haciendo otra cosa que dejar que Siro le
reclamara durante los últimos tres días. El culo de Yuri dolía, pero era un
dolor cómodo, incluso bienvenido. Podría estar sentado un poco gracioso,
pero llegó con el conocimiento de que Siro era suyo y él era de Siro.
Nadie podía quitarles eso. Ni el consejo, ni un alfa, ni siquiera los
cazadores. Nadie. Siro era suyo, así de simple. Y en el momento en que
descubriera cómo burlar el vínculo de apareamiento tri-omega, lo
demostraría al reclamar a Siro justo como Siro lo reclamó a él.
Yuri estaba un poco sorprendido de ver otro ferry atracado en el
muelle cuando llegaron a una esquina de la punta de la isla. Había pensado
que en el que estaban era el único que iba a la isla.
Parecía haber mucha actividad y un montón de gente saliendo del
otro ferry. Curioso, Yuri subió a la barandilla para estar junto a Siro.
Asintió con la barbilla hacia la isla.
—¿De qué crees que se trata?
Siro se encogió de hombros. —Me pillaste. 120

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Cualquiera
apoyado viendo a mirando
en la barandilla, Siro habría pensado
hacia la islaque estabacomo
curioso casualmente
Yuri lo
estaba. Salvo que Yuri sabía que era diferente. En los días que habían
estado juntos, Yuri había comenzado a notar los sutiles movimientos de su
compañero y los no tan sutiles.
Ni un solo gesto en vano o casual. Todo lo que Siro hacía, desde la
forma en que respiraba a la forma en que inclinaba la cabeza para mirar
algo, era usado para explorar la zona y evaluar los posibles peligros.
—Estoy ansioso, Siro, —dijo Yuri a través de la conexión mental
que habían establecido entre ellos cuando Siro le reclamó — y no sé por
qué.
—Yo también lo siento, —respondió Siro tan silenciosamente—. Y
cada vez es más fuerte.
—Tal vez la isla de Vourdala no sea la mejor opción para nosotros.

—No puedo prometer que lo sea, pero sé que aquí es donde se


supone que estemos. —Los labios de Siro se apretaron mientras miraba
más de cerca a las personas bajar del ferry en la distancia—. Sólo es que no
sé por qué.
—¿Qué ves?

Yuri era el beta de la manada de su padre. No fue entrenado como un


agente de encubierto para el Consejo. Podría conocer una amenaza cuando
estaba en su cara, pero tenía serias dudas de que conociera una a esta
distancia.
Siro era diferente. Había estado trabajando para el Consejo durante
años. Estaba paranoico, pero tenía derecho a estarlo. También era bueno en
su trabajo. Por lo que Vadim había sido capaz de descubrir a través de sus
contactos, Siro nunca dejaba un trabajo sin terminar y nunca fallaba en una
asignación, no importa cuánto tiempo le llevara. 121

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siroenvería
confiaba cosas que lo
su compañero Yuri no o cosas
suficiente paraque
quehabía pasado
él fuera por alto.
en cabeza enYuri
este
tipo de situación. Eso no quería decir que no se presentara al lado del
hombre si la mierda venía en su camino, porque lo haría. Sólo dejaría a
Siro escoger y elegir sus batallas.
—Hay un montón de gente saliendo de ese ferry, gente que no
reconozco, —finalmente respondió Siro—. Tienen que ser lobos o lobos
para acoplarse o Vadim nunca los dejaría en su isla. Cerró todo el lugar a
extraños cuando todos los omegas tri-empezaron a aparecer.
—Por lo tanto, ¿están aquí por invitación?
—Invitación o solicitud.
Yuri movió la cabeza con desaliento. Había realmente estado
esperando un lugar donde él y Siro pudieran pasar desapercibidos mientras
buscaban a Conner. No parecía que fuera a suceder. —Si Vadim sigue
dejando que la gente entre, va a quedarse sin isla muy pronto.
Siro sonrió. —Estoy seguro de que lo sabe, pero Vadim no es el tipo
de hombre que rechace a alguien cuando les puede ayudar. Concedido, las
cosas en la isla de Vourdala están poniéndose interesantes, pero algunas
personas necesitan lo que él puede darles.
Yuri estaba confundido. —¿Una isla de vacaciones?
Siro negó con la cabeza. —Un lugar para esconderse.
Yuri no podía discutir eso. Esa era la razón de que se dirigieran a la
isla de Vourdala para ocultarse.
Cuando el ferry entró en el muelle, Yuri siguió a Siro por el tablón
de madera hasta el muelle. No era como si tuvieran cualquier tipo de bolso
que agarrar. Las pertenencias de Yuri estaban en casa en el territorio de la
manada de Miroslav. Yuri no estaba muy seguro de dónde Siro llamaba su 122
casa, pero esperaba que el hombre estuviera de acuerdo en irse a vivir con

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

él.
Era un tema que no habían hablado todavía.
Una gran multitud se había reunido justo al borde del muelle donde
comenzaba a conducir a la ciudad. La curiosidad de Yuri era abrumadora,
pero no estaba seguro de que el anuncio de su llegada para que todos lo
oyeran fuera un buen plan.
Siro parecía tener otras ideas, sin embargo. De repente se quedó más
rígido, y una amplia sonrisa movió los labios. Las cejas de Yuri se
dispararon cuando Siro de repente levantó la mano en el aire y gritó a
alguien en la multitud.
—¡Serge!
Yuri puso los ojos en blanco cuando Siro comenzó a correr a través
del muelle. Rápidamente lo siguió, chillando en la parada cuando un muy
alto hombre con el pelo rubio como el sol se separó del grupo y comenzó
hacia ellos.
Un gruñido empezó a construirse en el pecho de Yuri. Cuando los
dos hombres se abrazaron y se acariciaron el uno al otro en la espalda, Yuri
se salió de sus casillas. El gruñido que había estado conteniendo se liberó, y
saltó hacia adelante para separar a los dos hombres. Se colocó entre Siro y
el extraño y se agachó en una postura defensiva. —¡Mío!
Un momento después, Yuri estaba frotando la parte de atrás de su
cabeza y mirando a su compañero en confusión. —¿Por qué me pegaste?
—Ese es mi hermano Serge.
—Oh. —Yuri frunció el ceño, tratando de ocultar su vergüenza,
mientras se acercaba más a Siro—. Lo siento.
—No. —Serge rió—. Si mis compañeros no conocieran a Siro,
123
estarían actuando de la misma manera, y créeme cuando te digo que tú no

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

has visto nada hasta que hayas visto a mi Niko lanzarse a un ataque.
—Escuché eso.
La cabeza de Yuri se giró bruscamente. Conocía esa voz, a pesar de
que no había visto al hombre al que se le atribuía eso, en varios meses. —
¿Niko?
—¿Yuri?

De repente, Yuri era el que abrazaba a otro hombre y le daba una


palmadita en la espalda. —¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó mientras
se echaba hacia atrás—. Pensé que estabais ayudando a reunir a los tri-
omegas y traerlos aquí de vuelta a la seguridad.
Antes de que Niko pudiera contestar, un gruñido profundo y gutural
llenó el aire, haciendo que los pelos de la nuca de Yuri se pusieran de
punta. Se dio la vuelta para mirar fijamente a Siro horadando a su
hermano. Tenía los dientes al descubierto en una amenaza obvia.
—Ahora, Siro, no hagas nada de lo que te arrepientas. Niko es mi
hermano al igual que Serge es el tuyo.
Siro parpadeó, la fiereza de repente drenándole fuera de su postura.
—Tu hermano está acoplado a mi hermano. Ya lo sabía. Lo hacía.
Conocí a Niko justo después de que se acopló a Serge y a Federov Vasiliy.
Sólo es que… cuando fuiste a darle un abrazo, yo… — Siro se encogió de
hombros, pero Yuri pudo ver que su compañero estaba avergonzado.
—Está bien, Siro. Sentí lo mismo cuando te vi abrazar a Serge.
Siro le envió una pequeña sonrisa y se volvió a sus hermanos,
señalando a la multitud con la mano. —Entonces, ¿qué es todo esto? —
preguntó—. Pensé que Vadim cerró la isla a los extraños.
—La manada de Jake McAlester fue atacada por los cazadores, — 124

dijo Serge cuando miró a la multitud sobre su hombro —. Su casa fue

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

destruida
traído aquíy ayatodo
no era seguropara
el mundo parasuellos permanecer en el rancho, así que ha
protección.
Yuri podía ver la duda en los ojos de Siro cuando volvió a mirarle.
—¿Siro?
—Conner es uno de los miembros de la manada de Jake McAlester.
—¿Conner McGregor? —Niko preguntó—. ¿Es ese del que estás
hablando?
Siro se quedó inmóvil. —Sí. ¿Por qué?
—Sólo que le llevaron al recinto del alfa.
—¿Por qué? —preguntó Siro con una voz tan carente de emoción
que hizo que la piel de Yuri hormigueara.
—Bueno, uno, resultó herido en el ataque al rancho. Está
recuperándose, pero no está completamente en pie todavía. Llegó más o
menos hasta el muelle antes de que necesitara ayuda.
—¿Y dos? —Gruñó Siro.
—El Anciano Dmitriev quería hablar con él.
Siro escapó antes de que Yuri pudiera detenerlo. Puso los ojos en
blanco y envió una pequeña sonrisa a Niko y a Serge antes de despegara
detrás de su compañero. Siro era rápido, muy rápido. Subió a la colina y a
la puerta del recinto del alfa antes de que Yuri siquiera llegara dentro de la
puerta.
—¡Siro, detente, maldita sea! —La orden fue gritada a través del
enlace de su compañero.
Sorprendentemente, Siro se detuvo en la puerta y sólo lo contempló.
Le dio tiempo a Yuri para acercarse al nivel del hombre. Cuando Yuri
125
alcanzó el porche y se detuvo junto a Siro, estaba confundido porque la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ansiedad era descaradamente evidente en sus ojos azules.


—¿Siro?
—No sé si puedo hacer esto.
—Entonces no lo hagas, —dijo Yuri—. Podemos esperar y ver a
Conner después que hayamos descansado. Está aquí en la isla, por lo que
no debería ser muy difícil encontrarlo. Una vez que hayamos tenido la
oportunidad de descansar y recuperarnos del todo, podemos hablar con
alguien acerca de esas inyecciones que el consejo está creando para ayudar
a los tri-omegas.
Siro no mostraba sus emociones muy a menudo, así que cuando se
volvió a mirarle, Yuri inhaló profundamente en lo que estaba viendo. El
conflicto de sentimientos que continuaban en los ojos azules de Siro trajo
lágrimas a los ojos de Yuri.
—Yo no… —Siro se humedeció los labios, como si hubiera
desaparecido súbitamente la sequedad y no pudiera pronunciar otro sonido
sin mojarlos—. No sé qué hacer.
La opresión en el pecho de Yuri disminuyó. Puede que no fuera
capaz de infiltrarse en un grupo de cazadores durante meses, pero sabía
cómo tomar decisiones cuando nadie más lo hacía. Eso es parte de lo que
hacía de él un buen beta.
—Vamos, amor. —Yuri cogió el pomo de la puerta y empujó la
puerta para abrirla—. Tenemos que ir a hablar con Conner y ver si
podemos resolver las cosas entre nosotros. Si Conner realmente no quiere
ser nuestro compañero, luego, vamos a ir al consejo.
Siro asintió rápidamente como si el discurso estuviera más allá de él.
Yuri agarró el brazo de Siro y lo acompañó a la gran mansión. Se
encontraron inmediatamente con dos guardias armados, y Yuri podía ver
más guardias más abajo en el pasillo. El lugar era como Fort Knox. 126

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Soy
a alguien que Yuri Miroslav,
fue traído justoydesde
este es
el Siro
ferry.Castilian. Estamos aquí para ver
Conner McGregor.
Uno de los guardias se adelantó, asintiendo con la cabeza. —Niko
llamó por radio y dijo que vendríais. El Sr. McGregor y el Anciano
Dmitriev están en el estudio. Os acompañaré allí.
—Gracias.
Yuri mantuvo un firme control sobre el brazo de Siro cuando fueron
guiados por el pasillo hasta una habitación en el otro extremo. El guardia se
detuvo ante una de las puertas y llamó suavemente. Después de un
momento, se abrió la puerta y dio un paso atrás.
Sintió un pequeño estremecimiento expandirse por Siro, mientras
entraban en la habitación grande. Yuri se dio cuenta de que no sabía nada
de Conner McGregor y mucho menos de lo que había ocurrido entre él y
Siro más que no sea que Conner disparó a Siro. No tenía ni idea de cómo
esta confrontación afectaría a Siro, y eso preocupaba a Yuri.
Yuri escaneó la habitación el segundo que entró. Un hombre más
viejo se sentó en uno de los sofás de la sala, mirándoles con evidente
sorpresa. Dos guardias armados estaban de pie detrás del anciano. Y de pie
cerca de una ventana estaba Conner. Incluso vestido y no cubierto de
sangre, Yuri reconoció a su pareja.
—Siro.
Siro asintió respetuosamente al anciano. —El Anciano Dmitriev. —
Yuri sintió ponerse rígido cuando Conner se volvió para enfrentarlos —.
Conner.
—Siro. —La respuesta de Conner fue susurrada, sorprendida.
—¿Os conocéis? —preguntó el anciano mientras su cabeza se movía
a un lado y a otro entre ellos. 127

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

repente—Yuri
Sí, nos
sabíaconocemos. —La amandíbula
que lo que estaba de de
punto de salir Siro era firme,
la boca y de
de su pareja
no iba a ser bueno—. Conner me disparó y luego me dejó morir.
—No lo hice… —Conner cerró la boca bruscamente y se volvió
hacia la ventana. Sus hombros estaban rígidos, sus manos apretadas en
puños. Parecía aferrarse a su control de un hilo —. No te dejé para morirte,
—dijo Conner en voz tan baja que casi Yuri no le escuchó, con su oído
superior—. Volví por ti.
—¡Todavía me disparaste!
—Sí, Siro, —espetó Conner mientras se daba la vuelta para mirar a
Siro—. Te disparé. Mi manada estaba siendo atacada y entraste y trataste
de convencerme de que eras mi compañero cuando obviamente estabas con
los cazadores. ¿Qué más se suponía que debía hacer?
—Podrías haberme dado el beneficio de la duda.
—No tenías olor, —insistió Conner.
—¿Y ahora?
Yuri se quedó sin aliento cuando una ola de calor le golpeó. De
pronto estaba rodeado por el olor delicioso de Siro. Estaba en todas partes,
llenando la habitación por completo. Sabía al segundo que la seductora
fragancia alcanzó a Conner y el hombre olía el perfume de Siro por primera
vez. El hombre se quedó quieto, y, por un momento, sus ojos verde pálido
nadaron en lágrimas.
Conner parecía derrumbarse sobre sí mismo, pero el movimiento fue
tan breve que Yuri se preguntó si lo había visto o sólo imaginado. Cuando
parpadeó, Conner estaba nuevamente de pie, si no un poco más rígido.
Sus fosas nasales se abrieron por un momento, como si estuviera
tratando de tomar el olor de Siro, pero no, y luego se volvió para mirar al 128
Anciano Dmitriev, inclinando la cabeza respetuosamente. —Haré como

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

quieras,
condición.iréLo voluntariamente, Anciano
que discutamos queda Dmitriev, pero sólo con una
entre nosotros.
—Si ese es tu deseo, —respondió el anciano.
Conner miró a Siro otra vez, y luego sus ojos se desviaron a Yuri por
un momento. La angustia nadaba en sus verdes profundidades turbias antes
de que asintiera con la cabeza al anciano. —Así es.
—Muy bien. —El anciano Dmitriev se quedó y le hizo señas a los
dos guardias de pie junto a él. Yuri comenzó a gruñir cuando los guardias
caminaron a los flancos de Conner uno a cada lado. No sabía qué infierno
estaba pasando, pero no le gustaba.
Conner cruzó la habitación y se detuvo frente a Siro. Cuando levantó
la mano hacia la cara de Siro, Siro se estremeció de nuevo. Conner inhaló
suavemente y apretó la mano en un puño. Poco a poco la dejó caer hacia
abajo a su lado y colgaba lánguidamente. Las emocionesque habían
inundado los ojos de Conner se desvanecieron hasta que no quedaba nada
sino un verde vacío.
—No te preocupes, pareja, —dijo Conner en silencio, escupiendo la
última palabra como si dejara un mal sabor en la boca—. No me he
olvidado de lo que me dijiste de nuevo en el bosque, y pasado mañana,
nunca me verás de nuevo.
Las cejas de Siro se fruncieron mientras su cabeza se inclinaba hacia
un lado en obvia confusión. La risita Conner de se llenó de amargura y
resignación. Yuri se estremeció ante la frialdad en el rostro de Conner. —
Te voy a dar exactamente lo que quieres.

129
No había lucha en Conner mientras era escoltado abajo a las celdas

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

del
quesótano
luchar,y su nueva casa
ninguna razóndurante las próximas
para resistirse. Lo horas.
había No tenía nada
perdido por lo
cuando le
disparó a su compañero.
El aliento de Conner se entrecortó en el pecho al pensar en Siro. El
hombre realmente era su compañero, y también Yuri. Lo había olido en
ambos hombres, lo que significaba que uno de ellos era un tri-omega. Eso
explicaba mucho, tal como que Conner no pudiera olerlos antes. Conner
casi se echó a reír histéricamente mientras recordaba su deseo de oler a su
pareja sólo una vez más. Ahora que lo tenía, deseaba nunca haber olido a
Siro o a Yuri. No saber era menos doloroso que saber y no poder tener a
sus parejas.
Conner dijo a Siro la verdad. Nunca olvidaría las palabras de odio
del hombre hacia él. Siro no quería tener nada que ver con él. Deseó que
Conner hubiera muerto. Cuando las puertas de las celdas rechinaron detrás
de él, Conner no pudo reprimir su amarga pequeña risa. Siro iba a
conseguir exactamente lo que quería.
Conner no sabía cómo el Alfa McGregor lo había hecho, pero había
encasquetado a Conner sus propios crímenes. Y ahora, Conner tendría que
pagar con su vida. Había pruebas suficientes contra Conner que no había
manera de convencerse a sí mismo de su castigo.
No sabía exactamente cómo era el proceso, pero teniendo en cuenta
las acusaciones en su contra y la evidencia abrumadora, Conner dudaba que
incluso se le diera la oportunidad de defenderse. A los ojos del Consejo del
Lobo, ya era culpable. Lo había visto en los ojos del Anciano Dmitriev
cuando el hombre le preguntó. El hombre estaba asqueado con él.
Infierno, Conner estaba asqueado consigo mismo. No por los
crímenes de los que se le acusaba sino porque había caído en la trampa del
Alfa McGregor tan fácilmente. Tendría que haberlo visto venir. Debería
haberlo esperado. El Alfa McGregor nunca se detendría mientras hubiera 130

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

una amenaza para él o su posición.


Conner se volvió hacia los barrotes de hierro cuando los guardias
comenzaron a alejarse. —¿Podría por favor informar a mi alfa de que estoy
aquí y pedirle que venga a verme antes de mañana?
Tenía que asegurarse de que Jake comprendiera que no había hecho
lo que se le acusaba. Ya no tenía la esperanza de que sus compañeros le
creyeran. Lo querían muerto. Pero respetaba a Jake. El hombre lo había
salvado cuando
necesitaba sabernadie
si elmás lo haría.
hombre Jake asqueado
estaba merecía una
conexplicación, y Conner
él como todos los
demás.
Uno de los guardias le gruñó y siguió caminando. El otro asintió con
la cabeza y luego siguió al primer guardia de vuelta por las escaleras.
Conner se acercó y se sentó en el catre de metal del tipo banqueta y tiró de
sus rodillas hasta el pecho. No había ni siquiera una ventana en la celda de
detención. Sólo algunas barras y paredes de cemento. Estaba desnuda y
fría, al igual que Conner se sentía.
Era un infierno.

131

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Qué demonios fue eso? —Siro gritó al anciano Dmitriev mientras


agitaba
dónde losullevan?
mano hacia la puerta que Conner acababa de abandonar —. ¿A

—¡Siro! —Yuri agarró el brazo de Siro y lo sacudió —. No puedes


hablar con un anciano de esa manera.
Siro rodó los ojos. —El anciano Dmitriev es mi padre. Puedo hablar
con él de cualquier maldita manera que me plazca.
—Él es… —la cabeza de Yuri dio media vuelta —. ¿Tú eres su
padre? —El anciano se rió.
—Lo soy.
—Todavía no deberías hablar con él de esa manera, Siro.
Siro ignoró a Yuri y se dirigió al otro lado de la habitación para
pararse frente a su padre, plantando las manos en las caderas. —¿Qué está
pasando, padre? ¿Por qué está Conner bajo la guardia, y dónde se lo llevan?
—Me temo que no puedo responder a eso, hijo mío. —El anciano
con calma cruzó las manos sobre el regazo, sin mirar en absoluto nervioso
por la enojada ira de Siro—. Como escuchaste, Conner ha solicitado que lo
que discutamos en nuestra reunión permanecezca entre nosotros.
—Él es mi pareja. —Siro tragó, un escalofrío le rellenó cuando el
rostro de su padre palideció—. ¿Qué?
132

—¿Estás seguro de que es realmente tu pareja, Siro? ¿Hay alguna

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

forma de que pudieras estar equivocado?


—Sí, estoy seguro. Yuri y Conner son mis compañeros.
—Oh, esto no es bueno. —El anciano se puso en pie disparado y
comenzó a caminar, empujando la mano por el pelo, agitando las perfectas
hebras peinadas grises—. Esto no es bueno en absoluto.
—¿Padre?

El viejo Dmitriev se detuvo y se volvió para mirar a su hijo. —¿Te


ha reclamado?
Siro frunció el ceño. —No, todavía no. Tenemos algunos problemas
que resolver primero.
—¿Y tu otro compañero? —Los ojos del anciano se deslizaron a
Yuri—. ¿Te ha reclamado?
—No, estábamos esperando a Conner.
El anciano se relajó visiblemente, presionando su mano contra su
pecho. —Está bien, eso es bueno. Podemos trabajar con esto.
—¿Trabajar con qué?
—El consejo ha estado trabajando en un suero para tri-omegas que
no puedan aparearse con sus compañeros por una u otra razón. Con mis
contactos en el consejo, estoy seguro de que puedo conseguir algo de ese
suero. Esto no será un problema.
—¡No! —espetó Siro. No sabía por qué, después de todas sus
palabras y el resentimiento por lo que Conner había hecho, pero ahora que
la oportunidad de librarse de su compañero estaba delante de él, Siro no lo
deseaba. De hecho, se le puso la carne de gallina sólo de pensarlo —. No, y
no tomaré ningún suero.
133
—Siro, tienes que hacerlo, —dijo el anciano—. Es la única manera

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

de salvarte.
—¿Salvarme de qué? —espetó Siro—. ¿Qué está pasando?
—No puedo hablar de ello contigo, Siro. Es un asunto del consejo.
—Siro apretó los dientes para evitarse a sí mismo de gritar a su padre.
Sabía que había cosas que ocurrían en el consejo que su padre no podía
discutir con él. Siempre había sido así, y nunca le había molestado en el
pasado.
Esto no era el pasado y su compañero estaba involucrado en esta
ocasión. Siro quería saber qué demonios estaba pasando, y lo quería saber
en este mismo segundo. —Así que ayúdame, Padre, si no me dices qué
demonios está pasando con mi compañero, voy a salir por esa puerta y
nunca me volverás a ver.
—Siro, —exclamó Yuri detrás de él.
Siro ignoró a Yuri una vez más y se quedó mirando a su padre,
dejando que el hombre viera la verdad de sus palabras en sus ojos. Siro
sabía que había ganado la batalla de voluntades cuando los hombros de su
padre se desplomaron y se volvió a caminar hacia la ventana. El anciano
Dmitriev empujó la cortina y miró a través del cristal.
—Te conozco, Siro, —dijo el anciano en voz baja—. A pesar de que
no hemos sido capaces de reconocer nuestros lazos en público, te he visto
convertirte en el hombre que eres hoy, un hombre del que cualquier padre
estaría orgulloso. Pero si te digo lo que sé, tratarás de detenerlo, y no estoy
seguro de que haya una manera de detenerlo.
El anciano miró por encima del hombro, con los ojos llenos de
tristeza. —Me preocupo por ti, hijo mío.
—Cuéntame. —Siro se preparó para la respuesta de su padre.
—La evidencia ha sido presentada ante el consejo, irrefutable 134
evidencia, de que Conner McGregor ha estado ayudando a los cazadores,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

dándoles
de treinta información
personas. confidencial que ha llevado a la muerte a no menos
—No. —Siro se negó a creerlo. Conner hacía un montón de cosas,
pero nunca traicionaría a uno de los suyos—. No me importa la evidencia
que tengas. No lo creo.
El anciano Dmitriev sonrió con tristeza. —No, no pensé que lo
hicieras.
—Conner nunca haría esto.
—Las pruebas dicen lo contrario.
Los ojos de Siro se estrecharon. —¿Qué pruebas?
—Conversaciones grabadas, transacciones electrónicas, archivos de
computadora. —El anciano suspiró y se acercó a sentarse en el sofá de
nuevo—. Hemos sospechado desde hace tiempo que alguien estaba
filtrando información a los cazadores, pero no sabíamos quién. Hace un
mes, uno de los técnicos municipales descubrieron que grandes cantidades
de dinero se transfirieron a la cuenta bancaria personal de Conner. Cada
una de estas transferencias coincidió con un ataque a una manada de lobos,
y todas se originaron a partir de una cuenta bancaria financiada por
cazadores.
—Conner no tiene una cuenta bancaria personal. —Siro lo había
comprobado cuando investigó a Conner. Él habría sabido si el hombre
tuviera grandes cantidades de dinero en efectivo. No lo tenía. Conner había
dejado básicamente su última manada con la ropa que llevaba puesta.
—Nuestros datos dicen lo contrario.
—Vuestros registros están equivocados.
—Incluso si eso es verdad, no puedes refutar los archivos que se
135
encuentran en su computadora, Siro. Tenemos archivo tras archivo en una

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

carpeta
Conner ydeloslos lugares, listas de miembros, y correos electrónicos entre
cazadores.
Bueno, eso era algo difícil de explicar, excepto… —¿Cómo supiste
acerca de estos archivos? —preguntó Siro—. ¿Quién te avisó?
—Uno de los miembros del Consejo recibió una denuncia anónima
de que Conner estaba involucrado con los cazadores. Confiscamos su
ordenador y pudimos encontrar los archivos y correos electrónicos.
—Mierda.
Las cejas del anciano se alzaron. —¿Perdón?
—Es una mierda. A Conner le han tendido una trampa.
—¿Y crees esto porque…?
—Debido a que Conner McGregor dejó la manada McGregor hace
más de dos meses sólo con la ropa que llevaba puesta. Estuvo aquí en la
isla de Vourdala para la reunión anual del Consejo del Lobo. Después
desafió al Alfa McGregor, no se le permitió incluso volver a su casa y
recoger sus pertenencias personales, lo que significa que su equipo ha
estado en su casa allá en la manada de McGregor, donde cualquiera podría
haber conseguido apoderarse de él.
Siro juró que podía ver la maquinaria del cerebro de su padre
funcionar cuando el hombre lo miró fijamente. De repente, el anciano
Dmitriev se puso de pie y sacó su teléfono móvil. Empezó a marcar casi de
inmediato y luego miró a Siro mientras sostenía el teléfono en la oreja.
—Robby, soy Dmitriev, —dijo—. ¿Estás en alguna parte que
puedas hablar conmigo en privado? Esto es importante. —El anciano
estaba en silencio por un momento, y luego asintió—. No, esperaré.
Cubrió la parte inferior del teléfono con la mano. —Robby es mi
136
experto en tecnología. Va a ponerse en una línea segura en caso de que su

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

teléfono esté pinchado.


—¿Robby?
—Le conociste en tu misión a Rusia cuando encontraste a tu
hermano. Es el hermano de Juliette.
Claro. Siro recordó al hombre. Robby era realmente muy bueno. A
Siro le gustaba. No era un guerrero, aunque le gustaba pensar en sí mismo
de esa manera. Pero Siro no tenía ni idea de que Robby fuera un espabilado
del ordenador.
—Está bien, escucha con atención, Robby, —dijo el anciano
Dmitriev cuando comenzó hablando al teléfono de nuevo —. Quiero que
vayas a aquellos archivos que encontramos en el equipo de Conner
McGregor y te andes con pies de plomo. Quiero saber exactamente cuándo
esos archivos se han creado y por quién. También quiero saber si esos e-
mails fueron enviados. Ve si puedes encontrar la dirección del proveedor
de Internet.
Siro se volvió cuando vio a Yuri agitando su mano. —¿Qué?
—Dile a Robby que averigüe qué grupo de cazadores ha estado
transfiriendo dinero en la cuenta de Conner y cuándo fue creada esa cuenta.
El grupo cazador que se infiltró parecía saber un poco demasiado acerca de
dónde la manada de Jake McAlester estaba viviendo y todo lo que había
allí. No sé si Conner tenía algo que ver con ello, pero alguien le dijo al
Teniente Albright dónde se encontraba.
Siro negó con la cabeza. —Conner no tenía nada que ver con esto. Él
no es así.
Los labios de Yuri se tensaron por un momento, extendiéndose en
una delgada línea. —Él te disparó, Siro.
Siro se encogió de hombros. No podía explicar eso. Conner le había 137
disparado, pero Siro sabía en lo profundo de sus huesos, que el hombre no

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

tenía
habríanada que ver
revelado a sícon los ataques
mismo a Connera si
loscreyera
miembros
que de la manada.
el hombre Nunca se
era malo.
—No puedo explicarlo, Yuri. Sólo sé que Conner no lo hizo. —Yuri
no parecía convencido.
Siro necesitaba creer a Yuri. Necesitaba a Yuri de su lado. Siro se
acercó y colocó sus manos sobre el ancho pecho de Yuri, buscando en la
cara del hombre. —Por favor, créeme, Yuri. Conner es un montón de cosas,
pero nunca traicionaría a nuestra especie. Sólo eso no es propio de él.
Yuri miró Siro durante lo que pareció un millón de años antes de que
finalmente resoplara un profundo suspiro y empujara la mano por su pelo
negro. —Yo no sé qué creer, Siro. Te disparó y dejó que te muerieras. Para
mí, esas son las acciones de un hombre que podría hacer cualquier cosa. —
Algo que Siro sólo podría describir como agonía sombreó los ojos de
Yuri—. No sabes lo que fue entrar en ese baño y encontrarte sangrando por
todas partes. No sabía si sería capaz de salvarte o no.
—Conner dijo que había vuelto por mí.
—¿Y le creíste?
—Sí. —No tenía ni idea de por qué Siro creía a Conner, pero lo
hacía.
Los hombros de Yuri se hundieron. —Está bien, Siro, jugaremos sin
embargo esto como desees. Sólo dime qué quieres que haga.
—Estar a mi lado.
La comisura de la boca de Yuri se curvó hacia arriba con un toque de
una triste sonrisa. —Siempre.
La emoción que esa sola palabra invocaba en Siro era una que no
conocía, y no estaba seguro de cómo procesarlo. Se preocupaba acerca de
138
su padre y de su hermano e incluso de su gente en algún nivel. Pero nunca

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

había tenido a nadie que fuera sólo para él.


Era un solitario.
Siempre lo había sido.
Ahora, no sólo tenía a alguien con quien quería compartir su vida,
sino a alguien que estaba dispuesto a estar a su lado, incluso si no tenía la
misma creencia en Conner que Siro tenía. Eso era algo que Siro nunca
había experimentado antes.
—Gracias, no pareces…
Siro parpadeó sorprendido cuando Yuri apretó un dedo contra sus
labios. Eso era algo que nunca había experimentado antes de la reunión con
Yuri, y ahora había pasado varias veces. Realmente necesitaba discutir eso
con su compañero antes de que estrangulara al hombre.
—No trates de analizarlo, Siro. —Yuri sonrió—. Sólo acéptalo y
averigua cómo vamos a salvar a Conner.

—¿Estás seguro de que es una buena idea, Siro?


—Shh. —Siro hizo un gesto con la mano a Yuri —. Los guardias van

a escucharte.
—¿Y no crees que van a escucharnos entrar a escondidas en la celda
de Conner?
—No, si mantienes tu gran boca cerrada.
Yuri frunció el ceño a Siro. No tenía una gran trampa, maldita sea.
Sin embargo, tenía una preocupación legítima de que éste era un jodido
139
plan. Sólo Siro podría pensar en él, lo que dijo a Yuri, sin lugar a dudas que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

se había acoplado a un hombre loco.


Esta mierda era peligrosa.
Si uno de los guardias los capturaba o, peor aún, un miembro del
consejo, estaban jodidos, y no en la manera divertida tampoco. Yuri no
tenía idea de por qué había accedido aún al plan.
Oh, cierto.

Yuri puso los ojos en blanco. Siro había trazado el plan mientras lo
jodía en el colchón. Yuri había estado loco con el placer. Habría accedido a
cualquier cosa en ese momento. Su pene le había conseguido un montón de
problemas.
—Vadim realmente necesita entrenar a sus guardias mejor. —Siro se
dejó caer a sus rodillas ante la puerta que conducía a las celdas en el sótano
y comenzó a trabajar en la cerradura con un conjunto de herramientas que
retiró de su bolsillo—. Un niño de dos años de edad, podría colarse aquí.
Yuri se encontró sonriendo con una extraña sensación de orgullo
cuando Siro sin esfuerzo abrió la puerta en cuestión de segundos. —¿Es
raro que me excite totalmente que puedas hacer eso? —susurró.
Siro sonrió por encima de su hombro. —Deberías verme cuando
estoy realmente intentando. Eso ayudaría a que realmente funcionara.
—No quiero saber.
Siro tenía habilidades que desafiaban una explicación lógica. Por un
lado, lo había mantenido con vida a Siro, y Yuri estaba agradecido por eso.
Pero por otra parte, ¿qué clase de vida había llevado Siro que las cosas que
hacía eran normales?
—Cuando todo esto termine necesitamos tener una conversación
seria sobre tu profesión elegida, Siro. —Era hora de que su compañero se
140
retirara del negocio de encubierto. Tan bueno como era en infiltrarse en los

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

grupos de cazadores
deformada y quienquiera
la perspectiva que elenconsejo
del hombre enviara
la vida. detrás
Incluso condesuél,plena
tenía
confianza en la inocencia de Conner, Siro seguía viendo lo malo en las
personas en el primer encuentro en lugar de lo bueno.
Siro metió las herramientas en el bolsillo y luego se puso en pie. Giró
el pomo y abrió un poco la puerta, mirando dentro. El camino debe haber
quedado claro porque Siro abrió la puerta y entró en el oscuro pasillo que
conducía a las escaleras.
Yuri le siguió en silencio y cerró la puerta detrás de él. —¿Debería
vover a bloquear los controles en caso de que alguien compruebe?
Siro negó con la cabeza. —Es posible que necesitemos hacer una
escapada rápida.
Sí, eso no sonaba bien. Si las cosas se pusieran tan mal que
necesitaran hacer una escapada rápida, podrían también delatarse ellos
mismos. Yuri era una beta. Conocía batallas de frente. No se escondía bajo
el amparo de la oscuridad.
Esto era realmente jodido.
Bajaron los escalones de piedra sin incidentes. Yuri estaba realmente
sorprendido cuando ningún guardia se encontró con ellos en la parte
inferior de las escaleras. Vadim realmente era laxo en su seguridad. Tendría
que hablar con su hermano sobre eso.
Las dos primeras celdas estaban vacías, pero el corazón le dio un
vuelco cuando Yuri alcanzó la tercera. El cabello rubio fresa de Conner se
podía ver sólo sobre la parte superior de una manta descolorida gris que
cubría una forma larga en la cama en un rincón.
Yuri se aferró a los barrotes y miró a través de ellos una vez que Siro
otra vez se puso a trabajar en la cerradura. En cuestión de segundos, la
puerta estaba desbloqueada y abierta. Yuri estaba una vez más agradecido 141

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

por las habilidades de Siro.


Algo profundo y oscuro estaba desgarrando sus entrañas al ver a su
compañero a través de los barrotes de una celda. No había tenido mucho
tiempo para procesar el hecho de que había encontrado a sus dos
compañeros, pero sabía seguro que no le gustaba mirar a Conner a través
de barras de hierro.
Era un error.
Yuri entró en la pequeña celda después de Siro. Se sentía un poco
estúpido cuando ambos se quedaron allí y miraron al otro lado de la
habitación a Conner. Uno de ellos debería decir o hacer algo. Lo que fuera.
—¿Es hora de irse ya? —Conner preguntó mientras empujaba la
manta de su cara y la volcaba. Su grito silencioso llenó el silencio en la
habitación. Conner se incorporó rápidamente, balanceando sus piernas por
encima del lado de la cama—. ¿Qué estáis haciendo aquí?
Cuando Siro se limitó a mirar a Conner, Yuri sabía que tendría que
decir algo. Nunca esperaba que dijera lo que salió de su boca. —Eres
nuestro compañero. ¿Dónde más podríamos estar? —Los ojos de Conner se
estrecharon.
—Vete.
—Sí, no va a suceder.

Conner murmuró algo bajo su jadeo y volvió a recostarse en la cama,


dándose la vuelta para alejarse de enfrentar a Siro y a Yuri. Y eso sólo le
pilló a Yuri a contrapelo. Dejando a Siro, donde al parecer estaba
congelado, Yuri irrumpió a través de la celda y tiró de la manta de Conner.
—¡Hey! —gritó Conner mientras trataba de agarrar la manta.
—Me tomó mucho trabajo entrar en este maldito lugar, —espetó
142
Yuri mientras sostenía la manta fuera del alcance de Conner —. Lo menos

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

que podías hacer es escucharnos.


—No tienes nada que decir que quiera escuchar.
Yuri miró hacia abajo a Conner por un momento y luego le arrojó la
manta. Se dio la vuelta y echó a andar hacia la puerta, agitando su mano en
Siro. —Vamos, Siro, esto fue un error. Nunca va a escucharnos.
—No.

La voz de Siro era tan tranquila, tan silenciosa que prácticamente


hizo eco a través de la habitación con su fuerza subestimada. Esto fue
suficiente para detener a Yuri en seco.
—¿Siro?
Los ojos de Siro nunca vacilaron de Conner mientras lentamente se
acercó al hombre. —¿Por qué me disparaste?
Conner resopló mientras se deslizó de nuevo en la estrecha cama y se
apoyó contra la pared de cemento. No se veía como si tuviera la intención
de responder a Siro. De hecho, el frío brillo en los ojos, dijo que no diría
una palabra, bajo pena de muerte.
—Dime, —insistió Siro.
Una congestionada y fría expresión se estableció en el rostro de
Conner. —Sabes por qué te disparé. Viniste a mí con alguna historia loca
del culo sobre ser mi compañero, pero no tenías olor. Y luego me
entregaste una pistola y me dijiste que te disparara. ¿Qué más se supone
que debía hacer? —La ceja rubia oscura de Conner se arqueó —.
¿Devolverte el arma?
—Nunca esperé que realmente me dispararas, Conner.
Conner apoyó la cabeza contra la pared detrás de él, suspirando
profundamente. —Y nunca esperé que estuvieras diciendo la verdad. 143

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Podrías haberme dado el beneficio de la duda.


—Y tú podrías haber tomado dos segundos y dejarme olerte. —
Conner hizo un gesto con la mano alrededor de la habitación —. Y luego,
nada de esto habría sido un problema.
—¿Me estás echando la culpa de estar aquí?
—Oh, no. —Conner se rió amargamente —. Mi maravilloso
alojamiento descansa completamente sobre la cabeza del Alfa McGregor.
No tuviste nada que ver con eso. Me refiero a todo lo demás. Si me
hubieras dejado olerte, aunque fuera sólo por un momento, habría sabido
que ibas a decir la verdad y tal vez las cosas se habrían vuelto de manera
diferente.
—Por lo tanto, ambos la jodimos.
Yuri sintió el peso de los ojos de Conner en él cuando el hombre
echó un vistazo más allá de Siro. Puso los ojos en blanco y dio un paso más
para estar junto a Siro. —Está bien, todos la jodimos. ¿Mejor?
Una de las esquinas de la boca de Conner se torció hacia arriba. —Si
uno de nosotros es culpable de ser estúpido, entonces todos nosotros lo
somos.
—Yo no le disparé a Siro. —Eso todavía cabreaba a Yuri. Estaba
bastante seguro de que siempre lo haría. Todavía no podía sacar las
imágenes de Siro sangrando de su cabeza. Tenía pesadillas sobre no
alcanzar a Siro a tiempo para salvarlo.
Los labios de Conner se curvaron hacia abajo mientras sus ojos se
apartaron lejos de los de Yuri. —Regresé por él.
—No tenías que pegarle un tiro en primer lugar, —espetó Yuri.
—¡Habrías hecho la misma maldita cosa! —Conner saltó a sus pies y
144
golpeó su mano contra el pecho de Yuri.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Yo nunca le dispararía a mi compañero.


—Yo no sabía que era mi compañero, ahora, lo hago ¿no? —Los
ojos de Conner se redujeron y veía a Yuri arriba y abajo como si fuera un
bicho que quisiera aplastar bajo su bota—. No tienes idea de cuál era la
situación. No estabas allí, así que no me digas que habrías hecho las cosas
de manera diferente cuando no sabes de lo que estás hablando.
—Oh, pero yo estaba allí.
Conner parpadeó, sus pestañas aleteando locamente mientras miraba
a Yuri. —¿Tú estabas allí?
—Sí, estaba allí. ¿Quién crees que encontró a Siro desangrado en ese
cuarto de baño después que le dispararas? ¿Quién crees que lo sacó de la
casa antes de que explotara y le consiguió un tratamiento médico?
Conner frunció el ceño, sus ojos azotando entre Yuri y Siro por un
momento antes de empezar a retirarse. —¿Eres un cazador?
—Diablos, no, no soy un jodido.
—Entonces, ¿qué estabas haciendo ahí?
—Estaba allí por Siro. —Los labios de Yuri se apretaron mientras los
presionaba juntos—. No tenía ni idea de que tú estuvieras ahí.
Yuri se sentía mezquino y rencoroso. Estaban discutiendo sobre Siro
recibiendo un disparo, y Yuri odiaba siquiera pensar en ello. Pero, en el
brillo de angustia que de repente llenó el color verde pálido de los ojos de
Conner antes de que el hombre mirara hacia otro lado, la ira se desvaneció.
—No, supongo que no. —La voz de Conner estaba llena de derrota.
Sus hombros cayeron de repente, y se sentó en la cama, mirando hacia
abajo en sus manos cuando las dejó colgando entre las piernas —. Entonces,
¿por qué estáis los dos aquí? ¿Para venir a restregármelo?
145

—No, Conner, —respondió Yuri: —lo creas o, estamos aquí para

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

rescatarte.
La cabeza de Conner se acercó. Miró fijamente a Yuri por un
momento antes de que una carcajada amarga estallara más allá de sus
labios. —¿Rescatarme? ¿Estás loco?
Yuri asintió y se volvió para mirar a Siro. —Sí, más o menos.
—Está bien. —Hilos de diversión se mezclaban a través de la voz de
Conner—. Así que, dime, ¿cómo vais a rescatarme? Esto debería ser
interesante.
—Es realmente simple, —dijo Siro mientras daba un paso hacia
adelante, invadiendo el espacio personal de Conner hasta el punto de que el
hombre se dejó caer aún más en la cama —. Te vamos a reclamar como
nuestra pareja.

146

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

La boca de Conner cayó cuando una descarga rodó a través de él.


Lanzó un rápido vistazo a Yuri y después volvió a mirar a Siro. No podían
hablar en serio. —Estás jodidamente loco, —susurró—. No me puedes
reclamar.
—Danos una razón por la que no, —exigió Siro.
—Porque… porque… —Tenía que haber una razón, una buena. Pero
maldita sea si podía pensar en una —. Simplemente no puedes.

omega,—de
Oh,
ahípero sí podemos,
la manera en que Conner,
fui capaz—dedijo Siro—
ocultar mi. olor
Ya ves,
de ti.soy
Esaun
es tri-
mi
capacidad. Y si te reclamo, no pueden separarte de mí. Necesito a ambos
de mis compañeros para sobrevivir.
Por un momento, sólo un breve momento, Conner había sentido
esperanza. Las palabras de Siro alejaron esa esperanza como si la hubiera
ahogado en el mar. No había pasado por alto la marca de reclamo en la
garganta de Yuri, y sabía que Siro le había reclamado. No había una sola
que hiciera juego en el cuello de Siro, lo que significaba que Yuri no había
reclamado a Siro.
Eso explicaba muchas cosas.
Yuri y Siro no irrumpieron en la celda de Conner para reclamarlo
porque lo quisieran o incluso para mantenerle a salvo. Querían reclamarle
para que Yuri pudiera reclamar a Siro. Conner era sólo un medio para un
147
fin.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—No.
Las cejas de Yuri se alzaron. —¿No?
—No, yo no voy a dejar que me reclames. Probablemente voy a estar
muerto al final de la semana. Yo no voy a llevaros a los dos conmigo. —Y
no quería sentir la dicha de tener a sus compañeros cuando realmente no le
querían.
Sólo que no se lo admitiría a ellos.
Infierno, tenía un momento difícil con admitirlo para sí mismo.
—No creo que lo entiendas, Conner, —dijo Siro—. No te estamos
dando una opción.
Los ojos de Conner se abrieron a la luz salvaje empezando a brillar
en los ojos azules de Siro. Cuando Siro se acercó y empezó a cernirse por
encima de él, uno de los brazos del hombre se colocaron a ambos lados de
la cabeza de Conner, Conner trató de deslizarse hacia atrás hasta que chocó
contra la pared.
Conner se estremeció cuando Siro se inclinó y acarició el costado de
su cuello. Ondas de placer acumuladas estallaron en él. —No, yo… yo no
estoy de acuerdo con esto.
—¿Quieres que me detenga, Conner? —Siro susurró contra su piel—
. ¿De verdad quieres que me detenga?
El delicioso aroma de Siro lo estaba inundando, contrarrestado sólo
por la fuerte fragancia masculina de Yuri cuando el hombre se dejó caer
sobre el colchón al lado de Conner y comenzó a acariciar su gran mano
sobre el pecho de Conner.
—Voy a parar si eso es lo que realmente quieres, Conner, —dijo
Siro—. Nunca te forzaría. Sólo dinos lo que quieres.
148

Conner gimió cuando sintió la lengua de Yuri barriendo a través de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

su piel.que
fuerte, ¿Había algo que
necesitaba se sintiera
negar tan profundo
el anhelo bien? Conner sabía para
que tenía que tenía quepara
ambos, ser
Siro y Yuri.
Simplemente no podía decidirse a pronunciar las palabras que les
detendría y lo dejarían en paz una vez más. No tenía la fuerza, no cuando
los dos hombres estaban haciendo su mejor nivel para volverle loco.
Y eso podría ser lo que le condenara al infierno hasta el final.
—No te detengas, —susurró Conner mientras las lágrimas brotaron
de sus ojos y las golpeó para cerrarlos. El aliento de Conner quedó atrapado
en su garganta cuando sintió las manos de alguien moverse bajo el
dobladillo de su camisa. Había sido tanto tiempo desde que alguien lo había
tocado tan íntimamente, y por ello, que fuera su compañero era abrumador.
Cuando su camisa estuvo subida arriba hasta el pecho y luego sobre
su cabeza, Conner no se resistió. Sólo levantó los brazos en el aire y
permitió que el material fuera empujado sobre su cabeza. Sus zapatos y los
pantalones fueron los siguientes. Antes de que Conner se diera cuenta,
estaba acostado en la cama desnudo como el día en que nació.
Sólo fue cuando Siro y Yuri ambos se establecieron a ambos lados de
él que Conner se dio cuenta que estaban tan desnudos como él. Sus ojos se
abrieron de golpe, la necesidad de ver a sus compañeros más importante
que ocultar las lágrimas que se reunían en ellos. No tenía la menor idea de
cuándo había llegado a desnudarse, pero al parecer se había perdido mucho,
porque maldita sea.
Sus compañeros eran preciosos.
Conner rezó con todo lo que tenía para tener una oportunidad de
explorar las millas de piel dorada y bronceada antes de que sus compañeros
decidieran que no lo necesitaban más. No necesitaba mucho, sólo un poco
tiempo para disfrutar de Siro y Yuri. No pediría más. 149

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Ni siquiera rogaría.
Lo juro.
Los olores combinados de sus compañeros lo estaban volviendo loco.
Las seductoras fragancias eran tan fuertes que Conner preguntó cómo
podría habérselas perdido. Comprendió que la capacidad tri-omega de Siro
era ocultar su olor, pero eso no explicaba cómo se había perdido el dulce
olor de Yuri.
Un gemido ansioso cayó de sus labios cuando las manos de alguien
comenzaron a vagar sobre el pecho. Su estómago se contrajo con la
necesidad. Conner pasó la lengua por los labios y se estremeció cuando su
pezón fue encontrado y jugaron con él. Siempre le había gustado que
jugaran con sus pezones. Era como si esa pequeña protuberancia apretada
tuviera línea directa a su polla. Cada vez que su pezón era retorcido, su
polla se movía.

Conner se mordió el labio para contener las súplicas que luchaban


por rasgar desde la garganta. No sabía lo que estaba permitido y lo que no.
¿Podría tocar a sus compañeros como ellos lo estaban tocando a él? ¿Tenía
ese derecho?
—Por favor, —dijo finalmente alrededor de un roto gemido cuando
su necesidad se convirtió en demasiada.
—¿Eres mío, Conner? —Siro gruñó mientras rozaba sus labios a lo
largo de la línea de la mandíbula de Conner.
—Sí, —exclamó Conner, inclinando sus caderas arriba a modo de
invitación—. ¡Por favor!
La polla de Conner se endureció como el acero. Sus pelotas
apretadas. Sacudió la cabeza de las lágrimas en sus ojos cuando los dedos
Siro se retorcieron en su pelo, inclinando la cabeza hacia un lado. Conner
gritó cuando afilados dientes le perforaron. 150

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vínculoConner
de su envolvió
compañero susdeslizarse
brazos alrededor del No
en su sitio. cuello de Siro aalnada
se parecía sentirque
el
hubiera sentido jamás. Lo estremeció hasta muy dentro de su alma. Sus
dedos le susurraron a través del suave pelo en la nuca del cuello de Siro,
acariciando suavemente mientras Siro bebía.
Lamiendo la sangre goteando del cuello de Conner, Siro apartó las
piernas de Conner con sus poderosos muslos. El cuerpo de Conner
hormigueó con su necesidad de venirse. Contuvo la respiración mientras
esperaba lo que estaba por venir, lo anticipaba.
Siro liberó a Conner y levantó sus piernas en el aire. Su mano bajó a
jugar con la rígida polla de Conner. Conner se estremeció cuando el pulgar
de Siro apretó contra la cabeza de su polla, acariciando su total longitud de
la raíz a la punta antes de pasar a su culo.
Una gran mano frotaba los globos redondos de su culo. Otra mano
trazaba su pliegue, de arriba a abajo y luego vuelta otra vez. Su apretado
anillo de músculos se tensó y agitó, tratando de meter las provocadoras
yemas de los dedos en el interior. Sus uñas se clavaron en los brazos de
Siro cuando los dedos manchados del hombre se condujeron rápidamente
dentro del culo de Conner, bombeando dentro y fuera.
Conner se mordió los labios para no rogar cuando de repente Siro
salió de él. Luego, la polla del hombre apretó contra la apertura del agujero
de Conner. Conner echó la cabeza hacia atrás, gimiendo largo y fuerte
cuando Siro empujó hacia adelante, enterrando su polla dentro del cuerpo
bienvenido de Conner.
¡Joder! Siro se sentía tan bien en su interior, duro, enorme, llenando
a Conner hasta que no había espacio para nada más. Siro se movía hacia
adelante y hacia atrás, en el interior del culo de Conner. Cada empuje
estiraba el interior de las paredes de Conner, haciéndole doler aún más. El
corazón de Conner latía hasta en la garganta, dificultándole la respiración. 151

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Tenía que correrse más que lo que necesitaba respirar.


Yuri estaba de repente cerniéndose sobre él. Tomó la boca de Conner
en largos y adormecedores besos, acalorados besos. Su boca batallaba con
la de Conner por el dominio, que Conner voluntariamente le entregó al
hombre.
El aliento de Conner escapó en un largo y lento siseo cuando sintió
la misma cálida y húmeda boca moverse a lo largo de la de la curva de su
cuello. No podía
Yuri estaba aspirar
besando porsuficiente
el cuello,aire en sus pulmones,
raspando los dientesy anololelargo
importaba.
de la
tierna carne.
—Conner. —Yuri dijo su nombre suavemente, y el dulce sonido se
hundió en el alma de Conner y apretó su cuerpo en urgente necesidad.
Conner se volvió a mirar a Yuri. Tragó duro, incapaz de apartar la
mirada del hambre abrasador en los ojos de Yuri. Conner sentía el latido
rápido del corazón del hombre tan claramente como sentía su corazón
bombear en su pecho.
—¿Eres mío, Conner? ¿Mi compañero?
—¡Sí! —su voz era dolorosamente ronca de necesidad.
Yuri sonrió, y entonces Conner sintió la caricia de la lengua de Yuri
barrer por su cuello. Su grito ronco llenó la habitación cuando los colmillos
del hombre atravesaron su carne. Las llamas del deseo se extendieron por el
cuerpo de Conner, prendiéndole en fuego cuando el vínculo entre ambos
estalló a la vida.
Siro debió haber sentido la conexión entre Yuri y Conner caer en su
lugar porque de repente se echó hacia atrás, envueltas las piernas de Conner
sobre sus brazos y golpeó en el culo de Conner como si fuera a morir sin
ello. Calor candente cruzó como un rayo por Conner, un placer tan intenso
que rayaba en el dolor. 152

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—resistencia.
ninguna Tócate a ti mismo, —exigió Siro, su voz severa sin tolerar

Conner envolvió su mano alrededor de su polla, y su tacto,


combinado con los golpes de Siro en el culo, le condujeron por encima del
límite.
El grito necesidad de la liberación de Conner hizo eco a través de la
habitación, cuando roció blancas cuerdas de semen por todo su abdomen.
Los
llenópropios
el culo gemidos de Siro llenaban el aire también, y su semilla caliente
de Conner.
—Mi turno, —dijo Yuri cuando saltó arriba y se puso de pie al lado
de la cama.
Tan pronto como Siro salió de Conner y se desplomó hacia abajo en
la cama junto a él, Yuri agarró a Conner y se dio la vuelta sobre él en su
estómago. Subió a Conner a cuatro patas y alineó su polla contra la entrada
de Conner y condujo su polla dentro con un empuje. Conner gimió
mientras la larga y gruesa polla de Yuri, rozaba su próstata con cada tirón
rápido de las caderas de Yuri.
Su dolorida polla se llenó una vez más y se balanceaba arriba y abajo
con la fuerza del hombre chocando contra él por detrás. Afortunadamente,
una fuerte mano se envolvió alrededor de su pene y lentamente acarició la
ya sensible carne.

Conner sintió su necesidad llegar a su cima casi de inmediato cuando


la mano de Siro le trabajó hasta el final. Gritó cuando llegó a su clímax por
una segunda vez. Podía sentir a Yuri aún latiendo en su interior cuando su
liberación cubría la cama delante de él.
Oyó el largo y prolongado gemido de Yuri en la distancia, y luego,
calor líquido llenó su cuerpo, cubriendo su aún ondulante canal con
esperma caliente. Yuri empujó dentro de él un par de veces más antes de 153
calmarse por un momento y luego, lentamente, saliendo del culo de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner.
Conner se estremeció y gimió cuando Yuri le bajó al colchón junto a
Siro antes de descender al otro lado de Conner. Conner jadeaba
pesadamente, dándose cuenta de que Siro estaba justo en frente de él,
mirándolo fijamente.
Siro sonrió cuando tiernamente acarició desde el pelo de la espalda
húmeda de sudor a la cara de Conner. —Ahora, eso no fue tan malo,
¿verdad? —preguntó.
Conner no podía sostener la mirada de Siro. Bajó los ojos y se quedó
mirando al pecho muscular del hombre. Lágrimas obstruían la garganta de
Conner mientras negaba con la cabeza. Se estremeció de temor y necesidad
a partes iguales. Podía sentir el vínculo entre él y sus compañeros, pero no
sabía dónde eso les dejaba. Sólo porque Siro y Yuri le hubieran reclamado,
no significaba que realmente lo quisieran.

—¿Y ahora qué? —susurró.


—Ahora, guapo, —dijo Yuri mientras se inclinaba sobre el hombro
de Conner y bajaba la mirada hacia él — nos aseguramos de que el Consejo
sepa que has sido reclamado y no puedas ser separado de tus compañeros.
—¿Y si no nos creen?
Conner se estremeció con renovada lujuria cuando Yuri le sonrió y
lamió la marca de mordedura en el cuello. Nadie nunca le había dicho que
la marca de su compañero se convertiría en una zona erógena. Una lamida
y podía sentir su agotada polla palpitar, tratando de volver a la vida.
—No creo que eso sea un problema. —Había una definida indirecta
de diversión en la voz de Yuri mientras levantaba la cabeza.
—¿En serio?
154
—Supongo que no, pero…

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

puertaEl
delresto de golpeando
sótano las palabras de abrirse
para Conneryseel perdieron
sonido de con
pieselcorriendo
ruido depor
la
las escaleras. Los pelos de los brazos de Conner se levantaron, erizándose
cuando un profundo mal presagio le llenó de aprensión.
Esto no iba a ser bueno.
Conner se levantó de entre sus compañeros y se agarró a su ropa. En
el momento en que Siro y Yuri se pusieron de pie y empezó a tirar de su
propia ropa, Conner
estaba tirando ya tenía
de su camisa lossupantalones
sobre y loslazapatos
cabeza cuando puestos.
puerta de Sólo
su celda se
abrió.
Conner se tensó, caminando rápidamente entre sus compañeros y
cualquier amenaza que pudiera venir hacia ellos. Dejó escapar un suspiro
de alivio y trató de relajar sus hombros cuando vio a Jake parado en la
puerta. El hombre había estado allí antes, tranquilizando a Conner sobre
que creía que era inocente de los cargos contra él. Conner no tenía ni idea
de por qué estaba allí esta vez.
—¿Alguna vez tratas de llamar?
Los labios de Jake se apretaron en las palabras cortadas de Conner.
—Acaba de vestirte. Tenemos problemas.
Conner levantó una ceja ante el alfa. —¿Qué clase de problemas?
—De tu clase, —dijo Jake mientras sostenía una bolsa de lona negra
a Conner.
¡Maldita sea!
Conner rápidamente terminó de vestirse y luego se volvió a mirar a
sus compañeros. —Sería mejor si os quedarais aquí. —Incluso cuando dijo
las palabras, sabía que sus compañeros no se quedarían. Simplemente no
eran ese tipo de hombres. 155

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

La cabeza
insultarlo. de Siro
—¿Vamos otra se echó hacia atrás como si Conner acabara de
vez?
Sí, no creía que fuera a ser tan fácil. Conner sintió su cara
ruborizarse mientras empujaba la mano por el pelo y frotaba la tensión en
la parte posterior de su cuello. No estaba muy seguro de cómo explicar
esto.
—Mira, tengo un conjunto particular de habilidades. Es lo único en
lo que soy realmente
habilidades bueno.
es necesitado, Y si Jake
entonces no esestá bienpara
seguro y mi únicofuera
ti salir conjunto de
por ahí.
Sería mejor si sólo permaneces aquí.
Yuri cruzó los brazos sobre el pecho, pareciendo severo e imponente.
—No sólo me dices que me quede en casa donde es seguro. ¿Qué parezco?
¿Una mujercita?
Siro sólo pareció sorprendido. —Recuerdas lo que hago para vivir,
¿no?
—¿Por favor? —Él podía esperar.
—No va a suceder, Conner, —espetó Yuri cuando terminó de
ponerse la última de sus ropas—. Nosotros vamos donde tú vayas.
Maldita sea. Pensé que dirías eso.
—Bien, pero no te metas en mi camino.
Conner tomó la bolsa de lona de Jake y la puso en el suelo. La abrió
y sacó la doble funda de hombro y un chaleco que había hecho por encargo.
Agarró las pistolas y registró cada arma para llenar los cargadores antes de
colocarlas en sus fundas correspondientes. Los cuchillos estaban en varios
diferentes bolsillos ocultos en el chaleco y unos pocos en sus botas.
Los últimos artículos que Conner retiró de la bolsa eran cargadores
156
de munición extra, una escopeta de calibre 12, su orgullo y alegría, un rayo

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

de combate
versión M40A4 del
modificada con Schmidt
cargador&desmontable,
Bender 3-12supresor
x 50 dedelaráfaga,
policíay con
una
tirador II LP de alcance telescópico. Tenía una velocidad inicial de 2.550
pies por segundo y un alcance de hasta 1.000 yardas.
Conner podría disparar a las alas a una mosca a mil pasos con ella.
Cuando se levantó, Siro y Yuri lo miraban, igualando las miradas de
aturdimiento y asombro en sus rostros.

estabas—hablando?
¿Qué demonios
—Yuri son
cruzóestas habilidades
los brazos específicas
sobre su de lasexigía
pecho mientras que
una respuesta.
—Era un matón del Alfa McGregor. ¿Cómo crees que hacía cumplir
las cosas?
—Conner, eso es un rifle de francotirador, —dijo Siro, mientras
señalaba al rifle especialmente modificado en manos de Conner.
Conner sonrió mientras miraba a su rifle. —Sí, y es una belleza. La
mandé hacer un par de años atrás. Nunca me defraudó.
—¿Por qué de repente me da la impresión de que realmente podrías
haberme matado si quisieras?
Conner levantó la vista. —No estaba tratando de matarte, Siro. Ya te
dije eso. Donde apunto, golpeo.

—Conner, tenemos que irnos, —dijo Jake desde la puerta—. Vadim


y Lucas ya están en los muelles.
Conner asintió. —¿Puedes tomar esa bolsa para mí? —preguntó
mientras señaló a su bolsa de lona. Una vez que Siro la había agarrado,
Conner se volvió y se apresuró detrás de Jake cuando el hombre volvió a
subir las escaleras. Podía escuchar a Yuri y a Siro seguirle —. Entonces, ¿a
qué nos enfrentamos? 157

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Hay
advertido un barco
ya que de shifters
se alejen tratando
dos veces de llegar
y luchado contraaellos
la isla.
en laLes hemos
costa una
vez. Vadim no cree que se den por vencidos hasta que tengan lo que
vinieron a buscar.
—¿Tri-omegas?
—Sí.
—¿Voy a advertirles o a sacarles? —Conner estaba ya procesando la
situación, apagando todo excepto la calma que necesitaba para hacer su
trabajo. Había aprendido hace mucho tiempo cómo desactivar sus
emociones para que no estuviera conectado con lo que estaba haciendo. Era
triste, pero era un hecho de la vida. No podía matar a las personas si sentía
por ellos.
—Trata de advertirles, pero toma cualquier acción que necesites para
evitar que aterricen. Tenemos demasiados tri-omegas aquí para darles una
oportunidad de que lleguen a la orilla.
—Entendido.
—Aquí, —dijo Jake mientras sostenía un pequeño comunicador en el
oído—. Toma esto para que podamos hablar si es necesario.
Conner tomó el comunicador y se lo puso en la oreja sin queja.
Estaba acostumbrado a recibir órdenes de su alfa, por lo que no discutió.
Jake nunca pediría nada a Conner que no pudiera hacer. El hombre no se
parecía en nada al ex alfa de Conner.
Cuando llegaron a la planta principal, Conner dejó a Jake atrás y
corrió por la casa y por la puerta principal. Jake había dicho que Vadim y
Lucas estaban en los muelles, y desde la isla sólo había un conjunto de
muelles, que le dio una idea bastante buena de dónde la batalla estaba
teniendo lugar.
158

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Tenía que llegar a un terreno más alto.


Cuando Conner llegó a la cima de la colina que conducía al pueblo,
echó a correr en dirección a uno de los hoteles en el borde del muelle.
Había examinado el lugar la última vez que estuvo en la isla de Vourdala y
sabía que el techo del hotel le daba una perfecta vista del muelle entero.
—Conner, maldita sea, —espetó Siro—. ¿Deberías frenar la mierda?
—No puedo, —dijo Conner mientras avanzaba corriendo—. Tengo
que entrar en posición.
Un repentino movimiento por el rabillo del ojo de Conner le llamó la
atención. En un abrir y cerrar de ojos, Conner sacó una de sus pistolas y
apretó el gatillo justo cuando un hombre se apresuró corriendo de entre los
árboles a él y sus compañeros.
El hombre cayó al suelo, un agujero justo entre los ojos.

—No me jodas, —susurró Yuri.


Conner no esperó a que sus compañeros dijeran nada más. Golpeó el
comunicador en su oreja. —Jake, la isla ha sido atacada. Estoy en la parte
superior de la colina de la panadería Pauline. Tenemos un intruso
derribado.
—Entendido, —respondió Jake—. Haz tu camino abajo hasta el
muelle y dales a Vadim y a Lucas asistencia. La resistencia ligera ya no es
necesaria.
Los labios de Conner se apretaron en la orden. —Entendido.
Por mucho que no le gustara hacerlo, Conner puso su rifle bajo unos
arbustos. Tomó algunas hojas caídas y ramas y se aseguró que su preciada
posesión estuviera bien escondida de cualquier persona que pasara y se
puso de pie para enfrentarse a sus compañeros.
159

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Alguno de vosotros sabe cómo disparar un arma?


Siro asintió, y Conner recordó el arma que el hombre había llevado
la primera vez que se conocieron. Eso estaba bien. Conner podría utilizar
cualquier ayuda que pudiera obtener.
Yuri negó con la cabeza. —He disparado un arma, pero no soy muy
bueno. Cuando estaba con los cazadores, yo sólo les seguía por ahí detrás
de ellos llevando las municiones. —Yuri se encogió de hombros —. Por lo
que ellos sabían, yo era un ingenuo chico un poco verde. En realidad, nadie
lo dudó.
Conner entregó la escopeta a Yuri junto con el cinturón de munición.
—Este es un arma SRM de alta capacidad Modelo 1216 Rotary-Mag
escopeta de combate semi-automática. Hay cuatro recámaras que giran en
el cargador. Cada recámara tiene cuatro municiones, para un total de
dieciséis municiones. Para llegar a la siguiente recámara, simplemente gira
el cargador. ¿Crees que puedes manejarlo?
Yuri asintió.
—Sólo tienes que apuntar en la dirección general y apretar el gatillo.
Golpearás lo que está en el camino. —Conner se volvió a Siro. Metió la
mano en la bolsa y sacó dos pistolas más —. ¿Supongo que sabes cómo
disparar uno de estos?
Siro revisó las recámaras y, a continuación abofeteó el cargador
antes de tirar del pestillo hacia atrás y rodar las recámaras. —Lo
averiguaré.
Conner se rió mientras le entregaba a Siro unas municiones
adicionales. —Estas balas están hechas especialmente para mí. Son de plata
en la punta, así que no seas disparado con una. —Se volvió para mirar a
Yuri—. Las municiones también tienen astillas de plata en ellos, así que ten
cuidado. 160

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—plata.
balas de Lo tengo. —Yuri tragó saliva y asintió —. No ser disparado con las

—Yo como que preferiría si trataras de no recibir un disparo en


absoluto. —Conner hizo una mueca—. No parece estar funcionando para
nosotros hasta ahora.
Siro se reía. —¿Cierto?
—No lo sé. —Yuri miró la escopeta en su mano hacia arriba y hacia
abajo antes de mirar a Conner —. Estoy aprendiendo todo tipo de cosas.
El corazón de Conner subió a su garganta. —Estaría encantado de
llevarte a un campo de tiro algún día y mostrarte todo lo que quieras si
prometes no ser disparado.
—Está bien. —Yuri tenía una gran sonrisa en su rostro mientras
rodaba los ojos—. Si insistes.

—Lo hago.
—Bueno, compañeros, permaneced cerca y manteneos fuera de la
línea de visión el uno con el otro. Si alguien comienza a disparar contra
nosotros, caed al suelo y empezad a disparar.
Conner empezó a dirigirse por el muelle, rezando con todas sus
fuerzas que sus compañeros vivieran en los próximos minutos. Sabía que
Siro tenía alguna experiencia con la lucha, pero no sabía nada de los
conocimientos de Yuri, lo que le hizo darse cuenta de lo poco que sabía
acerca de los hombres a los que se unió. Tal vez, si tuvieran realmente
suerte, sobrevivirían para llegar a conocerse mejor.

161

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro miró la espalda de Conner con confusión e incertidumbre


mientras corría colina abajo detrás de él. Con cada paso que daba, se dio
cuenta que tenía que reconsiderar totalmente su opinión sobre Conner. El
hombre no era quien Siro creía que era.
No estaba muy seguro de qué pensar de este nuevo giro de las cosas.
Conner conocía claramente sus armas y había disparado a ese intruso justo
entre los ojos sin vacilar. Era evidente, ahora, que Conner podría haberle
matado fácilmente de nuevo en el baño.
Pero no lo había hecho.
Conner le había disparado deliberadamente en el hombro, y ahora
Siro entendía que Conner le hubiera apuntado al hombro y no en ninguna
otra parte. No estaba tratando de matar a Siro, sólo detenerlo en caso de
que estuviera mintiendo por no ser un cazador. Tal vez Conner le había
incluso dicho la verdad acerca de venir a por él. Tal vez Conner pensó que
tenía todos los explosivos y no sabía que Anderson ya había establecido
volar la casa. El tiro no hubiera sido un disparo asesino aunque dolió como
el infierno. ¿Tal vez Conner pensó que podía volver antes de que Siro se
desangrara hasta la muerte?
Eso puso un nuevo punto de vista sobre toda las cosas en lo que se
refería a Siro. Conner no era el hijo de puta que Siro había comenzado a
pensar después de recibir un disparo del hombre. Siro no estaba seguro de
quién era Conner. Los informes que había recibido cuando había 162

investigado a Conner antes de encontrarse con él, nunca hablaban sobre el

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

uso de Conner
pasado por altode armas o su capacidad con ellas. De alguna manera, había
eso.
Siro comenzó a preguntarme si sabía algo sobre el chico en absoluto.
Conner se detuvo de repente, sosteniendo su mano en el aire en un
gesto para detenerlo. Siro se calmó e inclinó la cabeza hacia arriba,
olfateando el aire. Podía oler la brisa del mar, el olor a pescado que parecía
siempre colgar alrededor de un muelle.
Y… algo más.
Siro escaneó su entorno. Habían bajado hasta la colina y a la zona
principal de la ciudad. Había unos cuantos árboles aquí y allá, pero la
mayoría edificios. Podía oler los lobos y sabía que había algunos en el área
inmediata. No sabía si eran aliados o enemigos.
—¿Conner? —susurró a través del vínculo que sabía había sido
establecido cuando reclamó a Conner como su compañero—. ¿Qué es eso?
El ligero estremecimiento que sacudió el cuerpo Conner fue su única
respuesta física. Conner parecía tan sorprendido que Siro se preguntó por
un momento si se había olvidado de que sus compañeros podían hablar
telepáticamente entre sí.
—Estamos siendo asaltados, —respondió Conner finalmente a través
de su enlace—. Hay por lo menos tres lobos a la izquierda de nosotros
unos cincuenta pies fuera. Nos han seguido incluso durante el último par
de bloques.
Maldita sea.
—Yuri, ¿has oído eso? —preguntó Siro a su otro compañero.

—He oído.

Bueno, el vínculo estaba trabajando entre los tres. 163

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Seguimos adelante o nos enfrentamos a estos idiotas? —preguntó


Yuri.
—No podemos permitir que nos pasen, —dijo Conner. No movió un
músculo, sin embargo. Nadie sería capaz de decir que estaba hablando o
intrigando. Se veía tan quieto como una estatua —. Vadim y Lucas están
abajo en el muelle. Somos todo lo que se interpone entre estos shifters y
esos refuerzos en el complejo del alfa.

—¿Cómo quieres hacer esto? —preguntó Siro. Tenía algunas ideas,


pero quería escuchar lo que Conner tenía que decir. Sorprendentemente, se
veía entusiasmado con la entrada de Conner.
—Yurinecesita seguir bajando la colina hacia el muelle. Vadim y
Lucas necesitarán su ayuda. Cuando lleguemos al final del bloque, Siro,
parte a la derecha. Voy a partir a la izquierda. Utiliza tu capacidad de
ocultación dónde te encuentres y luego espera a que vengan por ti.

Maldita sea. Eso era un buen plan.


—Entendido.
—No me gusta, —dijo Yuri mientras comenzaba a caminar hacia
adelante como si no supiera nada de los hombres escondidos en los
arbustos listo para atacarles en todo—. Pero voy a hacerlo. Sólo contacta
conmigo o me vuelvo.
Conner gruñó en voz baja. Siro vio una curva de leve sonrisa hasta la
esquina de su boca mientras Yuri se paseó por delante de ellos. —Es muy
lindo cuando está dictando las normas.
Los ojos de Siro se agrandaron. —¿Lindo? ¿Estás llamando a Yuri
Miroslav, el Beta de la manada Miroslav, lindo?
Conner se volvió a mirar a Siro. Había un destello de sorpresa en sus
ojos. —¿Eso es lo que es? 164

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Siro se rió en silencio. —Sí.


Conner hizo una mueca mientras miraba detrás de Yuri, una vez más.
—Tal vez deberíamos mantener el comentario de lindo entre nosotros.
—Demasiado tarde, pareja, —cortó Yuri.— Y tendrás que pagar por
ese comentario la próxima vez que te metas en la cama. Puede que no sea
un crack en disparar como vosotros, pero tengo mis propias maneras de
torturar a mis compañeros.
Conner de repente se sobresaltó, y Siro no pensó que tuviera nada
que ver con los shifters acechando.
—¿Va a haber una próxima vez? —Susurró Conner.

Siro frunció el ceño. ¿Qué demonios significaba eso? —Por supuesto


que la hay. ¿Por qué pensarías de manera diferente?
Conner lentamente giró para enfrentar a Siro, la sangre drenando su
cara. —¿En serio? —preguntó en voz alta.
—Conner…
—No. —Las fosas nasales de Conner quemaban. Su boca se apretó
en desaprobación—. Me dijiste que me considerabas muerto para ti, que
nunca querías volver a verme otra vez. No me llegas a decir algo así a mí y
luego volver y simplemente asumir que voy a rodar y mostrarte mi vientre.
—Los ojos de Conner se entrecerraron mientras señalaba su dedo a Siro —.
Puedes irte a la mierda.
Una carcajada resonó entre los árboles, enviando un instintivo miedo
deslizándose por la columna vertebral de Siro. Siro aumentó la presión
sobre las pistolas en sus manos mientras echó una rápida mirada alrededor
de la zona. Sabía que estaban siendo observados. Podía sentir los ojos
encima de él. Pero para que alguien riera abiertamente… eso no podía ser
bueno. 165

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner,
Conner—sentía

haciadijo Siroel amomento,
él por través de estaban
su enlace. A pesar Siro
en peligro. de laesperó
ira quea
que el hombre dejara a un lado sus diferencias hasta que se ocuparan del
peligro frente a ellos.
—Lo siento. —Los labios de Conner se apretaron, pero ni un
músculo en el cuerpo del hombre se movía —. Sólo evita el movimiento
hasta que ataquen. Pero prepárate, porque van a atacar.

nuevo.Siro parpadeó
¿Cómo podía alel ver a Conner
hombre empezar
estar tan a caminar
tranquilo? por laa colina
Siro estaba de
punto de
salirse de sus casillas. No lo demostró. Nunca lo hacía. Pero la anticipación
de la batalla que se avecinaba era horripilante.
El ataque se produjo antes de llegar al final del bloque. Tanto como
Siro había estado esperando por ello, todavía se sacudió con sorpresa
cuando un hombre saltó hacia él, con las garras extendidas con intención
letal.
Siro saltó hacia atrás y apuntó con su arma al chico, apretando el
gatillo en rápida sucesión. No era el tirador preciso que Conner era, pero
golpeó el centro de la masa del hombre en ambas ocasiones. El shifter soltó
un salvaje grito y cayó al suelo en un charco de sangre. Siro no pensaba
que fuera a levantarse. Al menos, esperaba que no.
Después de recuperarse de su sorpresa y el susto de hacer a su piel
estremecerse, Siro volvió para ver a Conner en una lucha por su cuenta.
Desafortunadamente, se trataba de una lucha cuerpo a cuerpo. Y era una
sangrienta. Siro sólo no podía entender de dónde provenía la sangre.
Se apresuró a acercarse, con la intención de ayudar a Conner en el
momento en que tuvo un tiro claro. Dos hombres salieron de los arbustos
antes de que pudiera llegar a su compañero. Siro dispararó a uno de ellos y
sabía que su disparo había dado al tipo cuando gruñó y se encorvó hacia el
suelo, pero el otro sacó la pistola de la mano antes de que Siro pudiera 166

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

dispararle.
La cabeza de Siro se echó hacia atrás cuando el puño del hombre se
estrelló contra su mejilla. Se tambaleó hacia atrás varios pasos antes de que
fuera capaz de detenerse. Cuando volvió a mirar, vio el puño del hombre
viniendo hacia él de nuevo. Siro levantó el brazo para detener el golpe. El
dolor le destrozó su control cuando las garras del shifter se clavaron en la
carne de su brazo en vez de golpearle.

GruñóElalcuerpo
shifterdey Siro se puso
extendió sus rígido congarras,
propias una olagolpeando
de furia sin sentido.
al hombre.
Sangre salpicaba por encima de su camisa cuando sus garras hicieron
contacto y rasgaron el hombro del chico. Siro escuchó un fuerte estruendo
pero no hizo caso, yendo detrás del shifter una y otra vez hasta que el
hombre cayó de nuevo en la tierra en un caos sangriento.
Su pecho se hinchó y se volvió para ver quién más tenía que luchar.
Sus cejas se alzaron, la ira llenando sus ojos azules cuando vio a Conner de
rodillas, frente a él. Y un hombre alto, que Siro no reconocía, estaba detrás
de Conner con una garra envuelta alrededor de la garganta de Conner.
Miró a Conner de debajo de sus largas pestañas. —Conner, ¿estás
bien? —preguntó en silencio, porque no quería que el hombre que
amenazaba a Conner supiera que estaban hablando entre sí.
—Define bien, —respondió Conner silenciosamente.

—¿Puedes escapar de él?


—No, a menos que quiera mi garganta desgarrada.

Eso no era exactamente lo que Siro quería oír.


—Dispárale.
—Yo no soy tan bueno en disparar, Conner. —Ni siquiera estaba
167
seguro dónde estaban sus armas. Una de ellas había sido arrojada lejos. La

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

otra había llegado a perderse durante la pelea.


—Entonces tenemos un problema, porque él no es el único.

Siro se puso rígido cuando de pronto se dio cuenta de una presencia


detrás de él. Antes de que pudiera darse la vuelta y defenderse de quien
estaba de pie detrás de él, Siro sintió un agudo dolor en su espalda.
Quemaba por todo él, extendiéndose a lo largo de su cuerpo como hilos de
candente agonía.
Siro se quedó sin aliento y se dejó caer de rodillas. No podía apartar
la vista de la angustia en los ojos horrorizados de Conner. Había algo
apremiante en ellos y algo que arrancó el corazón de Siro.
—Conner.
Los ojos de Conner brillaron por un momento, pero luego Siro
parpadeó y las lágrimas que le pareció ver en los ojos de su compañero se
habían ido. Una máscara fría cayó sobre el rostro de Conner, toda la
emoción desvaneciéndose de sus pálidos ojos verdes. Era extraña y no una
mirada que Siro quisiera ver en su compañero en los ojos de su pareja,
nunca.
Siro cayó de bruces sobre el suelo duro así justo cuando vio a Conner
reaccionar a su situación. No lo habría creído si no lo hubiera visto con sus
propios ojos. Conner se dio la vuelta y pasó sus garras a través del
abdomen del hombre que le retenía. El hombre apenas había comenzado a
sangrar antes de que Conner se moviera otra vez, volviéndose para mirar al
hombre que estaba detrás de Siro.
En ese momento, Siro comprendió que su modesto compañero era un
depredador peligroso y furioso. Y eso le hacía letal. La tensa mandíbula de
Conner fue el único movimiento que delataba qué enfurecido estaba. Y se
había ido antes de que nadie, excepto Siro, se diera cuenta.
Conner permaneció absolutamente inmóvil por un momento. Siro 168

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sentía,
tensarse.más
—Noquese veía,
te ha los
dadomúsculos
el permisoflexibles
del Alfasutiles de para
Miroslav su compañero
estar aquí,
McGregor.
—¡Te dirigirás a mí como Alfa McGregor!
—No. —Conner sacudió la cabeza lentamente—. No creo que lo
haga.
Siro gruñó cuando una bota golpeó en sus costillas. Deseó tener la
energía para mirar a Conner y decirle que se callara de una puta vez, pero
no lo hizo. Así era, las cosas que lo rodeaban estaban empezando a ponerse
borrosas.
—Pagarás por ello con tu vida, McGregor. No sólo has invadido el
territorio de otra manada, sino que has atacado a mi compañero. Te mataré.
—sonrió malignamente Conner—. Y sabes que puedo hacerlo.
—No si yo te mato primero.
Conner ni siquiera se inmutó cuando el Alfa McGregor tendió una
pistola y apretó el gatillo. Siro supo el instante en que la bala se estrelló en
Conner. Se sentía casi como si fuera su propio dolor.
Siro hizo un último intento de ayudar a Conner antes de desmayarse.
—Yuri, —suspiró en silencio mientras sus ojos se desvanecieron para
cerrarse y todo dejó de ser.

Yuri subió corriendo la colina tan rápido como sus piernas se lo


permitieron. Sabía que sus compañeros estaban en peligro. No sabía cómo
lo sabía. Casi había estado en el muelle cuando una sensación de muerte
inminente se había apoderado de él. Había sido tan fuerte que casi lo había 169

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

bajado de rodillas.
Su espalda y su hombro le dolían como si le hubieran sobrecargado o
tal vez tirado de un músculo. Su cara le dolía como si alguien le hubiera
pateado. Entonces se enfadó, más enfadado de lo que nunca recordó haber
estado. Estaba enfurecido, como si quisiera rasgar miembro a miembro a
alguien y verle lentamente sangrar hasta la muerte, cuanto más lenta mejor.
Yuri nunca había experimentado algo así. Su hermano Vadim era un
exaltado. Niko
evaluar una era el que
situación tenía
antes mal genio.
de actuar. PeroYuri era el calmado.
de repente, Le gustaba
por primera vez en
su vida, se encontró queriendo matar a alguien.
No sabía quién era ese alguien.
Yuri desaceleró cuando vio movimiento en la calle varios edificios
delante de él. Se movió entre las sombras creadas por los edificios y subió
con cuidado su camino hacia adelante, sujetando la escopeta en sus manos
como un salvavidas.
Podía ver a dos hombres enfrentarse uno contra otro. Uno tenía
cabello rubio fresa y se puso a la altura de Conner. Estaba obviamente
sangrado. El otro hombre con cabello entrecano parecía más viejo y menos
musculoso. Se quedaron a varios metros de distancia, y parecían estar
hablando, a pesar de que Yuri no pudo entender sus palabras.
—Yuri.
Yuri parpadeó rápidamente cuando se recostó contra la pared del
edificio.
—¿Siro?

Nada.
Ni siquiera un gemido.
170

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Siro, ¡maldita sea, respóndeme!


—Tranquilo, Yuri, —Conner exigió a través de su enlace—. Estás
distrayéndome.
—¿Dónde demonios estás?

—¡Calla, Yuri!

Yuri sabía que el hombre de pelo ligeramente rubio era Conner por la
forma en que sus manos se apretaban a los costados y la cabeza se giraba
levemente en dirección de Yuri. Yuri estaba demasiado lejos como para
leer lo que había en los ojos de Conner, pero sólo por un momento, las
nubes se abrieron y la luz de la luna brilló en su rostro devastado. Yuri
inhaló en la angustia que podía ver en la cara de Conner.
—¡Conner! —Yuri gritó al darse cuenta de la intención de Conner
antes de que su compañero se volviera hacia el hombre frente a él, el que
sostenía el arma. Yuri comenzó a correr más rápido de lo que nunca había
corrido en su vida, pero sabía incluso antes de que sus piernas empezaron a
moverse, que era demasiado tarde.
Lágrimas emborronaron la visión de Yuri al ver a su compañero
saltar hacia el otro hombre. Hubo un destello de un cañón de un arma, y el
cuerpo de Conner se sacudió. Conner pareció estremecerse por un
momento y luego fue por el hombre de nuevo.
Un cañón brilló de nuevo y Conner se fue abajo.
Yuri rugía en angustia y enojo.
Apuntó el arma en la mano al hombre que había disparado a su
compañero y empezó a apretar el gatillo tan rápido como su dedo sacudiría.
Cuando una recámara estuvo vacía, Yuri dio la vuelta al cargador como
Conner le había mostrado y empezó a tirar de nuevo del gatillo.
171
En el momento en que llegó al lugar de la matanza, Yuri seguía

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

tirando
garras, del
congatillo en una pistola
la intención vacía.
de rasgar al La arrojó que
hombre a un había
lado y alejado
extendióa sus
su
compañero de él una pieza cada vez.
Pero no parecía ser otra cosa más que destrozar. Conner había dado a
Yuri la escopeta porque no estaba familiarizado con las armas. Ahora, sin
embargo, tenía mucho sentido. Todos y cada uno de sus dieciséis tiros
habían alcanzado su objetivo.

El hombre
sangrienta masa deque yacía
carne en el suelo
desgarrada a sus rotos.
y huesos pies no
Susera más
ojos sinque
vidauna
se
quedaron mirando al cielo, la sorpresa y la conmoción aún brillando en sus
oscuras profundidades.
Yuri dio la espalda al hombre, quienquiera que fuese, y cayó a sus
rodillas en el suelo frío y duro. Siro estaba tumbado boca abajo sobre un
lado de él, Conner en el otro. Ninguno de los dos se movió, excepto para el
lento hilo de sangre que goteaba de sus cuerpos. Yuri sentía cada caída al
suelo como un cañón sonando en su cabeza.
—¿Siro?, —susurró en un suspiro antes de mirar a su otro
compañero—. ¿Conner?
Yuri oyó que alguien venía detrás de él. No sabía si era amigo o
enemigo, y no le importaba. De alguna manera, en alguna pesadilla
macabra, ambos de sus compañeros le habían sido arrebatados.

Nunca sabría qué tipo de persona era Conner en el fondo. Nunca


llegaría a experimentar a su compañero follándole en el colchón o ver a
Conner conducir a Siro a la distracción.
Nunca llegaría a ver a Siro y a Conner discutir y hacer las paces,
porque sabía que iban a discutir. Ambos hombres estaban acostumbrados a
tomar sus propias decisiones. No estaban acostumbrados a ceder el control
a nadie. 172

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Nunca haría… nada con sus parejas.


Yuri alcanzó la escopeta que había arrojado lejos momentos antes.
Se quitó el cinturón de cartuchos extra que Conner le había dado y retiró
uno. Sus dedos buscaron a tientas la apertura del cargador mientras trataba
de encontrar la manera de cargar la maldita cosa.
Conner no le había mostrado eso.
Las lágrimas comenzaron a gotear por las mejillas de Yuri cuando
gemidos de frustración salieron de sus labios. Sus dedos se sentían como si
fueran inútiles gotas de carne. Los gemidos de Yuri se hicieron más fuertes,
más frustrados.
Se apartó cuando sintió que alguien agarraba su hombro. Tenía que
llegar a cargar la escopeta. Era más imperativo que cualquier cosa que
hubiera hecho en su vida. La escopeta era lo último que Conner le había
dado. El hombre le había confiado el arma. Tenía que asegurarse de que
estaba listo en caso de que Conner lo quisiera de vuelta.
Y la especial arma de Conner, Yuri hizo una pausa para tratar de
cargar la escopeta y miró a su alrededor. Sabía que Conner había escondido
el rifle en los arbustos en algún lugar, o tal vez era más atrás de la
carretera. Esta zona no parecía familiar.
Yuri sabía que tendría que ir a buscarle. Al parecer significaba algo
especial para Conner. El hombre estaría muy molesto si algo pasaba con el
arma hecha por encargo.
—Yuri, —dijo alguien cuando una mano apareció delante de su
cara— vamos dame el arma.
—No. —Yuri sacudió la cabeza, apretando la pistola en el pecho
para que no se la pudieran quitar—. Esta es la escopeta de Conner. La va a
necesitar.
173

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Ahora mismo, te necesita a ti.


La cabeza de Yuri subió rápidamente. —¿Qué? —Apartó la mirada
de Vadim a Conner donde yacía en el suelo, a pocos metros de él. Sólo que
ahora estaba de espaldas y mirando directamente a Yuri. Lucas arrodillado
en el otro lado de él.
Yuri dejó caer la escopeta y se apresuró por el difícil terreno al lado
de su compañero. Había tanta sangre que no sabía dónde tocar a Conner sin
hacerle daño.
—Conner, —susurró en un sollozo roto.
—Va a estar bien, Yuri, —dijo Lucas—. Nada vital ha sido
golpeado.
—¿Nada vital ha sido golpeado? —espetó Yuri mientras miraba a
Lucas—. Conner es vital.

Lucas miró compungido cuando metió su cabeza. —Quiero decir


ningún órgano vital fue afectado. Conner debería recuperarse muy bien.
Yuri sabía que Conner estaba sufriendo. Podía verlo en el
oscurecimiento del color verde pálido de los ojos del hombre, aunque
Conner no hizo un solo sonido de angustia. —Eres un bastardo testarudo,
— susurró Yuri—.Está bien admitir cuando te duele.
Conner dejó escapar un resoplido un poco débil. —Estoy bien.
—Tienes tres agujeros de bala sobre ti, Conner, —dijo Lucas—. No
está bien. Ryland ya viene desde el recinto del alfa. Es un sanador. Una
vez que trabaje en ti, entonces te devolveremos a la casa. Tendrás que
descansar un poco, pero te irá bien en unos días.
La cabeza de Conner se volvió. Sus dedos temblaban mientras
señalaba. —¿Siro?
174

—Estoy mejor que tú, estúpido idiota. Yo no salté en frente de una

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

bala.
Yuri se quedó sin aliento al oír la voz de Siro y se dio la vuelta. Siro
permanecía tendido sobre su estómago, pero tenía los ojos abiertos y le
miraba a él y a Conner. Vadim estaba aplicando presión a la herida
sangrienta en su espalda.
—Siro.
—Y tú… —Los ojos de Siro se alejaron de la tierra sobre el cuerpo
tendido detrás de Yuri. Cuando volvieron a Yuri, no había una pizca de
diversión en ellos—. ¿Qué fue con eso? Pensé que no sabías cómo disparar
un arma.
—No sé.
—Podrías haberme engañado, —resopló Siro.
—¿Tú hiciste eso?
Yuri miró a Conner. El hombre tenía la cabeza vuelta hacia atrás
mientras miraba el cuerpo a varios metros de distancia. —Tal vez, —
contestó Yuri vacilante. Conner parecía tan sorprendido de que Yuri no
estuviera seguro de si debía admitir los disparos o no.
—Amigo, has matado al Alfa McGregor. —Los ojos verdes de
Conner se pusieron intensos y casi orgullosos —. Eso te convierte en el
nuevo Alfa de la manada McGregor.

175

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¡No! —espetó Yuri—. No voy a hacerlo.


—Tienes que hacerlo, Yuri.
—El infierno que lo hago.
Conner se recostó en el sofá y se mordió el labio para evitar reirse
mientras veía a Yuri discutir con su hermano. Esperaba que su pareja
iniciara su salida airada en cualquier momento. Yuri y Vadim habían
estado en ello durante más de una hora, y a Yuri claramente se le estaba
acabando la paciencia con su hermano.
—Yuri, —dijo Vadim— mataste al Alfa de la manada McGregor.
Las reglas dicen que te conviertes en el nuevo alfa.
—¡No!

Sí, allí estaba de pie.


Vadim giró los ojos. —Es la ley, Yuri.
—¡A la mierda la ley!
—No dejes que mi padre te oiga decir eso, —dijo Siro mientras
caminaba al estudio—. Lo consideraría un motín.
176
La mirada de Yuri se estrechó en la de Siro. —Siro, dile que no

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

tengo que ser alfa.


—Uh… —Los ojos de Siro iban a un lado y a otro entre Yuri y
Vadim como una pelota en un partido de tenis. Comenzó a sacudir la
cabeza—. No voy a participar en esa conversación. Tengo la esperanza de
echar un polvo en algún momento en este siglo.
Yuri pisó el pie de nuevo, un gesto que Conner encontraba adorable.
—¡Yo no quiero ser alfa!
—Entonces abdica, —dijo Conner. No podía entender por qué no se
lo había planteado antes.
Silencio absoluto flotaba en el aire por un momento.
—¿Qué? —preguntó Yuri finalmente.
Conner suspiró. —Abdica. Hay un montón de gente en la manada
que podrían ocupar el cargo de alfa. Entrevístales, escoge la mejor opción,
y hazle a él, o a ella, el nuevo Alfa de la manada McGregor. Mientras que
la ley dice que tienes que ser alfa si desafias y matas al alfa actual, también
dice que puedes escoger tu sucesor y renunciar, si así lo deseas.
Los ojos de Yuri miraron bruscamente a su hermano, estrechándose
con suspicacia. —Y no me dijiste esto ¿por qué?
El rostro de Vadim enrojeció. Le dio una pequeña sonrisa a Yuri
mortificada cuando se encogió de hombros. —No pensé en ello.
—Te voy a matar, —dijo Yuri simplemente al levantar sus manos e
irse para su hermano.
Vadim se echó a reír y saltó fuera del camino justo cuando Siro
atrapó a Yuri alrededor de la cintura y lo contuvo de atacar a su hermano.
—Cariño. —Siro se rió mientras sostenía la espalda de Yuri tirando arriba
y junto a su frente—. Si atacas a tu hermano, entonces vas a terminar
177
encima haciéndote cargo de otra manada.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Maldita
No quiero sea.cargo
hacerme —Yurideseotra
hundió contra
manada, Siro, —
pero… la Los
lucha drenándole
ojos de Yuri —
se.
estrecharon en Vadim—. Tal vez le diga a Sasha que vas a cortarle su
asignación para ropa.
—¡No te atreverías! —espetó Vadim. El alfa parecía más
aterrorizado por la idea de que su compañero estuviera molesto con él de lo
que lo hacía alguien tratando de apoderarse de su manada. Conner recordó
al pequeño rubio color miel y sabía que Vadim tenía derecho a estar
preocupado. Sasha era un infierno sobre ruedas.
Yuri se limitó a sonreír con picardía.
—Oh, eso es bajo, Yuri, —dijo Vadim— incluso para ti.
—No hay que romper este momento de unión fraternal, —dijo
Siro— pero he tenido noticias de mi padre sobre la situación de Conner.
Conner se animó. Mientras que no le habían hecho permanecer en la
celda en el sótano, estaba todavía bajo vigilancia debido a las acusaciones
contra él. Incluso ahora, dos guardias estaban colocados fuera de la puerta
del estudio en caso de que tratara de escapar.
—Y creo que podemos resolver el dilema de Conner mientras
resolvemos el de Yuri.
Ahora, Conner estaba más que curioso. Estaba intrigado. —
Explícate.
Siro aflojó su agarrón en la cintura de Yuri y comenzó a pasear hacia
Conner. Y estaba paseando. El hombre se movía con facilidad y gracia,
como si el aire mismo se apartara para dejarle pasar.
Hacía calor.
—Sabemos que McGregor estaba involucrado en las acusaciones en
178
tu contra, Conner. Simplemente no podemos probarlo. Todavía no. Y va a

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ser aún más difícil demostrarlo ahora que él está muerto.


Yuri se sonrojó y bajó la mirada al suelo. —Lo siento.
Conner le sonrió a su compañero. —Yo no. Me estabas salvando y a
Siro.
—Podría haberle herido en vez de matarlo.
—Claro, porque sabes cómo disparar tan bien. —Puso sus ojos en
blanco—. Yuri, hay una razón por la que te di la escopeta. Sólo apuntar y
disparar. No involucra verdadera puntería. Pero sí saca todo a su paso.
—Sí, pero…
—Ya basta, Yuri, —se quejó Siro—. Hiciste lo que tenías que hacer.
Nadie te culpa por eso.
—Sólo que ahora no tenemos forma de probar que Conner es
inocente. —La mandíbula de Conner cayó. En el último par de días,
mientras todo el mundo se había estado recuperando del ataque a la isla,
Conner y sus compañeros habían hecho un montón de cosas, la mayoría de
ellas en la cama. Ni una sola vez habían hablado de su culpabilidad o
inocencia.
—¿Crees que soy inocente?
La mirada enojada de Yuri volvió a Conner, clavándolo al sofá. —
¡Por supuesto que eres inocente!
—¿Por qué crees eso? —preguntó Conner, con miedo a esperar—.
Estabas enojado conmigo por disparar a Siro. Has dicho que no esperabas
nada más de un McGregor. ¿Qué ha cambiado de opinión? Sigo siendo la
misma persona que era cuando nos conocimos en el bosque.
Los hombros de Yuri se hundieron. Conner podía sentir el peso de la
mirada de su compañero, hasta que Yuri se pasó una mano por la cara, 179

suspirando profundamente. —Estaba enojado, Conner, pero también estaba

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

equivocado. Realmente
disparaste a Siro. no entendía
Y tú podrías haberlolamatado,
situaciónpero
en no
quelo estabas
hiciste. cuando
—Yuri
sonrió.— Pensabas que era un cazador, y todavía no lo mataste.
Conner bajó los ojos y comenzó a estudiar con atención sus dedos. El
calor brillando en los ojos de Yuri le ponía nervioso. No podía recordar que
nadie nunca pareciera así en toda su vida, y tenía miedo de definir
exactamente qué es lo que quería decir.

—Yo
tener en no quería
cuenta. hacerle daño,
Los cazadores pero
estaban tenía más
atacando queela mundo
a todo mí mismo
que que
me
importaba. No podía correr el riesgo de que estuviera mintiéndome.
Demasiada gente dependía de mí.
Conner saltó cuando de repente sintió unos brazos envolverse
alrededor de él desde atrás. Conner se estremeció ante el cálido aliento que
podía sentir soplando contra su piel. No se había dado cuenta de que Siro se
había movido hasta que sintió al hombre detrás de él.
—Te perdono, Conner, —murmuró Siro en su oído —. Podría haber
tomado dos segundos en asegurarte de que supieras quién era yo. En su
lugar, esperaba que me creyeras, un total desconocido. Y un total
desconocido con un cuento extravagante justo en medio de un ataque de
cazadores. Tengo tanta culpa por recibir un disparo como tú.
Conner sintió que las lágrimas le picaban las comisuras de sus ojos.
—Gracias, —susurró.
—Enséñame a disparar como tú y lo daremos por terminado incluso.
—Uh, he estado haciendo esto durante muchos años, Siro. Esto no es
algo que sólo se aprenda durante toda la noche.
—Yo no voy a ninguna parte, Conner, —respondió Siro—. Tengo
tiempo.
180

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Eso va para mí también.


Los ojos de Conner miraron adelante cuando sintió las manos
acariciar sus muslos clavados a los vaqueros. Tragó saliva con dificultad,
su boca babeando con la humedad en el calor ardiente en los ojos de Yuri.
El hombre estaba de rodillas en el suelo justo entre las piernas de Conner.
Yuri sonrió. —Nosotros no vamos a ninguna parte, Conner.
Conner sólo no sabía qué decir a eso, así que no dijo nada. La
esperanza que estaba empezando a florecer dentro de él, era demasiado
temerosa para confiar plenamente en ella. Lo quería demasiado. Las
palabras de Siro y Yuri del bosque todavía resonaban dentro de él, y tenía
miedo de creer que habían cambiado de opinión tan fácilmente.
—Tal vez tengamos que convencerlo, Yuri.
La insinuación sexual era tan pesada en la voz de Siro que Conner se
estremeció. El sexo entre ellos era fantástico. Era la vida fuera de la cama
con la que tenían problemas. Si sólo pudiera pasar el resto de sus vidas
jodiendo, sería genial.
Doloroso, pero genial.
—Ninguno de los dos ha reclamado a Siro todavía, Conner.
Conner se quedó boquiabierto y luego dejó caer la cabeza hacia atrás
en el sofá para obtener una mejor visión del cuello de Siro cuando el
hombre se inclinó sobre él. —¿Yuri no te ha reclamado todavía? —Había
pensado asegurarse de que Yuri reclamaría a Siro la primera oportunidad
que tuviera ahora que era seguro hacerlo. Conner tendría que hacerlo.
Siro negó con la cabeza. —No.
—Estaba esperando por ti, Conner. —Las manos de Yuri se
movieron cada vez más cerca del creciente bulto detrás de la cremallera de
181
Conner—. Desde que Siro me reclamó al principio, pensé que era sólo

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

justo que tú fueras el que lo reclamara en primer lugar.


A Conner de repente le costaba respirar. Los dedos de Yuri estaban
dibujando pequeños círculos sobre sus pantalones vaqueros, el calor de
ellos abrasando a través de la tela de algodón. El aliento caliente de Siro
estallaba por el cuello y, más específicamente, a través de la mordedura de
apareamiento que el hombre había dejado un par de noches atrás.
Hizo a Conner anhelar.
Necesitar.
Y sin embargo… —Sé cómo el vínculo de los tri-omega funciona.
No quiero reclamar a Siro sólo para que tú puedas.
Conner estaba cansado de ser utilizado por la gente que se suponía
que le importaban. Por una vez, quería que fuera querido por él mismo,
sobre todo cuando se trataba de sus compañeros. Esta fue la única vez que
se negó a ser el segundo mejor, incluso si todo dentro de él le gritaba que
sólo aceptara lo que se le ofrecía y no esperar más.
Tenía que esperar más.
—Conner, —dijo Siro lentamente mientras se inclinaba aún más en
el sofá para mirarlo— ¿sabías que el consejo ha desarrollado un suero para
tri-omegas de modo que ya no necesitamos a ambos de nuestros
compañeros para sobrevivir?

Las cejas de Conner se alzaron. —¿En serio?


¿Por qué no había oído hablar de esto?
—Sí. —Una pequeña sonrisa curvó las comisuras de la boca de
Siro—. No necesito que me reclames para que Yuri me reclame. Puedo
sólo obtener el suero y Yuri me puede reclamar sin ti. —La mano de Siro
de repente salió disparada y agarró la barbilla de Conner en un abrazo
182
apretado—. Quiero que me reclames porque eres mi pareja.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Somos— Los tres


mucho másnos pertenecemos
fuertes mutuamente,
uno al lado del otro queConner, —agregó Yuri
si permanecemos —.
solos.
Conner intentó volver la cabeza para mirar a Yuri, pero el control de
Siro sobre su barbilla apretaba, mantuvo su cara donde estaba.
—No tienes que estar solo nunca más, Conner, —dijo Siro con
calmada resolución—. Vamos a estar junto a ti.
Conner gimió cuando se apartó y volvió a mirar a Yuri. Su
resistencia a los hombres que lo rodeaban se escabulló. No podía negar más
la necesidad de ardor en los ojos de lo que podía negar la suya propia.
Quería esto demasiado. Si eso significaba que su corazón se desgarraba de
su pecho en algún lugar del camino, bueno, entonces, se ocuparía de eso
cuando pasara.
—Está bien, —murmuró en voz baja, sin poder dar Siro y a Yuri
cualquier otra respuesta.
La sonrisa de Yuri fue instantánea y enorme en su hermoso rostro. —
Gracias, Conner. No lo lamentarás.
Eso queda por ver.
Cuando Siro no dijo nada, Conner volvió a mirarlo, excepto que el
hombre ya no estaba inclinado sobre el sofá. Un poco sorprendido de que
no hubiera sentido a Siro moverse, Conner miró por encima del hombro, en
busca del hombre. La lengua de Conner pegada al cielo de su boca cuando
se dio cuenta de que Siro estaba de pie justo detrás de él, quitándose su
ropa.
Maldita sea.
Así que iba a echar un polvo.
Empezó a darse la vuelta para ponerse de rodillas para poder ver a
183
Siro, pero una mano en su pecho lo detuvo. La cabeza de Conner giró

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

bruscamente, su boca abierta al ver a Yuri quitarse la ropa también.


—Quédate ahí, —dijo Yuri, el deseo comenzando a apretar su voz—.
Este es nuestro espectáculo.
¿Otra vez?
—¿Alguna vez voy a participar?
—Oh sí. —Siro se rió mientras caminaba, desnudo, en torno a un
lado del sofá—. Sólo queremos asegurarnos que estés bien y listo para mí.
Conner frunció el ceño y luego se agachó para desabrocharse los
vaqueros. Sacó su polla dura hacia fuera y la sostuvo en la mano. —¿Acaso
esto da a entender que no estoy listo?
—No. —Los ojos de Siro adquirieron una profunda mirada,
calentada mientras se lamía los labios—. Parece como si fueras lo
suficientemente fuerte para golpear una piedra.
—Soy lo suficientemente fuerte para golpear tu culo, —dijo Conner
a través de una amplia sonrisa burlona mientras le daba un golpe a su larga
y dura polla de la raíz hasta la punta y luego de vuelta otra vez.
Siro gimió.
—¿Es esto lo que quieres, Siro?
Siro asintió con la cabeza rápidamente.
Conner empujó sus pantalones vaqueros más abajo en sus piernas
hasta que se agruparon alrededor de sus botas. Se recostó en el sofá y
extendió sus muslos tanto como pudo antes de agitar la mano hacia su
erecta polla.
—Es toda tuya, pareja. Ven por ella.
Conner instantáneamente se dio cuenta de que había mordido más de 184

lo que podía masticar cuando Siro gruñó y se lanzó sobre él. Antes de que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pudiera
golpeó lapronunciar una de
parte de atrás solalapalabra
gargantaacerca de ir lento, la cabeza de su polla
de Siro.
Las mejillas se ahuecaron cuando Siro comenzó a rozar la cabeza
hacia arriba y hacia abajo. Los ruidos de sorber húmedo de la boca se
deslizaban hacia arriba y hacia abajo de la dolorida polla de Conner,
chupando duro y rápido, haciendo a Conner estremecerse de deseo.
Conner gimió cuando Siro arremolinó su lengua alrededor de la
cabeza
punta dedesu
su pene,
polla. Conner
Cuandobombeaba
la lengua de
susSiro presionó
caderas haciaenlalaboca
ranura
de en la
Siro.
Acunó la parte posterior de la cabeza de Siro mientras veía a su polla
lentamente deslizarse dentro y fuera de la boca de su compañero. Era un
espectáculo totalmente erótico.
—Siro, cariño, me voy a venir si sigues haciendo eso. —No era que a
Conner le importara si se corría. Justo lo contrario, de hecho. Sólo quería
correrse en el culo de Siro.
—Sólo un poco más, Conner, —dijo Siro mientras levantaba la
cabeza—. Yuri casi ha acabado.
Conner tenía que parar y respirar profundamente mientras Siro le
tomaba profundo en la boca y empezaba a chupar de nuevo.
Espera.
Los ojos de Conner subieron hasta donde Yuri estaba arrodillado
detrás de Siro. Se abrieron lentamente al darse cuenta de lo que el follar las
caderas de Siro significaba.
—Quiero ver, —dijo, sin avergonzarse en lo más mínimo de que
hubiera un suplicante tono en su voz. Ver a Yuri estirar a Siro de repente
llegó a ser más importante que conseguir una mamada de clase mundial.
Yuri miró y sonrió, y luego le dio un golpecito a la cadera de Siro. 185
Tanto como quería ver el espectáculo que tenía delante, Conner todavía

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

gemía en protesta
un pequeño ruidosocuando
pop. la boca de Siro se deslizó fuera de su polla con
Siro subió hasta en el regazo de Conner, a horcajadas sobre sus
desnudos muslos. No era exactamente la posición que Conner había
previsto cuando dijo que quería ver, pero no se quejaba. Puso todo el,
glorioso, cuerpo de Siro justo en frente de él.
—Maldita sea. —Las manos de Conner se sacudieron cuando las
sacó
liso yhasta
piel el pecho de que
bronceado Siro.seElondulaba
hombre realmente tenía un
y daba vueltas magnífico
sobre pecho,
sus gruesos y
musculosos abdominales y pectorales. Era como una lamida digna de un
patio de recreo.
Los pezones de Siro se endurecieron cuando Conner pasó los dedos
por encima de ellos. Miró a los ojos del hombre cuando le oyó silbar. La
lujuria ardiendo en los ojos azules de Siro era tan caliente que Conner
sintió que su polla se sacudía en respuesta. Las gotitas de líquido
preseminal se filtraron por el costado de su eje antes de que corriera entre
sus muslos.
Conner deslizó las manos por el pecho Siro, hasta que llegó al
abdomen duro como una roca del hombre. Se inclinó y exploró la
extensión dorada del pecho de Siro con su boca. Sus labios provocaron los
oscuros pezones del hombre, que se habían hinchado en picos tensos. Sus
labios trazaron un sensual camino abajo por el pecho de Siro a sus costillas.
Cerró los ojos y respiró por la boca para evitar ser arrastrado por el
aroma celestial del hombre en sus pulmones. Su control estaba
deslizándose, y estaba a punto de correrse.
—Siro, —gruñó mientras sus ojos se abrieron de golpe —. Te
necesito ahora.
¡Desesperadamente! 186

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

maneraConner
en quedebería
Siro lehaber estadopero
sonreía, preparado
estaba para lo que iba
demasiado a venir por
fascinado por la
la
transformación en el rostro del hombre para prestar atención a lo que Siro
estaba haciendo en realidad.
Hasta que sintió que alguien envolvía los dedos alrededor de su pene.
Cada pensamiento en la cabeza de Conner se desvaneció y lo único
que podía pensar era acerca de lo bien que se sentía al tener a alguien más
tocándole
hacia arribaeny lugar de suvolvió
lentamente propiahacia
mano. Y luego
abajo Sirodelevantó
a la polla sus caderas
Conner.
—¡Oh, joder! —Conner gritó mientras su cabeza cavaba de nuevo en
el sofá—. Realmente no deberías haber hecho eso.
Antes de que Siro pudiera hundirse en la polla de Conner el resto del
camino, Conner le agarró por la cintura y lo volcó sobre su espalda. La
suave exclamación de sorpresa de Siro se volvió en un fuerte rugido de
placer cuando Conner se estrelló contra él hasta que un soplo de aire no
podría haber llegado entre ellos.
Mientras lo hacía, sentía a Yuri presionar contra él por detrás. Sus
manos comenzaron a rozar a lo largo de los lados del cuerpo de Conner
antes de deslizarse abajo por el pliegue de su culo. Conner inhaló
bruscamente cuando el dedo de Yuri violó su culo, no porque le doliera
sino porque el placer era tan intenso que la lujuria pasó por él con tal fuerza
que se mareó.
—Yuri, —se quejó Conner y empujó hacia atrás contra el dedo en el
culo.
—Te tengo, cariño. —El aliento de Yuri era cálido y húmedo contra
la cara de Conner, e hizo a su corazón acelerarse.
Conner estaba confundido acerca del sexo por primera vez en su
vida. No sabía si conducir su polla adelante en el culo apretado de Siro o 187

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

replegarse y empalarseAmbas
cosas eran fantásticas. a sí mismo en losa dedos
lo llevaban gruesos
un nivel de Yuri.
de éxtasis Ambas
que no sabía
que existía.
Conner era tan consciente de dónde la carne caliente de ambos de sus
compañeros tocaban la suya que un profundo sentimiento de paz entró en
su ser. Poco a poco, movió sus manos abajo por la piel alisada del sudor de
Siro, rozando los lados del cuerpo de Siro a sus caderas.

Hizo una pausa, las manos apoyadas a ambos lados de Siro.


La humedad se agrupó en la boca de Conner cuando Siro puso sus
manos detrás de las rodillas y tiró de sus piernas arriba hasta el pecho y por
fuera, dejándose al descubierto a sí mismo de la manera más íntima. Agarró
las caderas de Siro y observó que sus cuerpos se reunían cuando empezó a
moverse dentro y fuera de la apretada entrada de Siro, más duro, más
rápido y más profundo.

Los empujes de Conner aumentaron en ambas cosas, la velocidad y


la fuerza mientras se conducía a sí mismo dentro y fuera de su compañero.
Podía sentir el culo de Siro ondeando a su alrededor cada vez que su polla
se hundía en el apretado control del hombre. Los dedos de Yuri empujaron
dentro de él cada vez que se retiraba. El placer se construyó dentro de
Conner hasta que pensó que iba a perder la cabeza.
—Siro, —rogó Conner.

Siro inclinó la cabeza hacia atrás sin decir palabra y desnudó su


garganta. Era probablemente el primer gesto sumiso que el hombre había
hecho nunca en su vida. Algo cambió dentro de Conner, a sabiendas de que
era el primero en llegar alguna vez a este nivel de confianza del hombre.
Conner se inclinó y acarició la suave piel justo debajo de la oreja de
Siro, lamiendo a través del fuerte pulso latiendo a golpes allí. —Gracias, —
murmuró justo antes de hundir sus dientes en la carne del hombre tan 188

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

profundamente como pudo.


Dulce y caliente sangre inundó la boca de Conner justo cuando un
grito ronco resonó en la habitación y el líquido abrasador salpicó contra su
abdomen. Siro abrió la boca y soltó las piernas. Agarró los hombros de
Conner herméticamente.
Conner extrajo los colmillos y rápidamente lamió la marca de la
mordedura para cerrarla. Cuando el placer se convirtió en insoportable,
Conner
brazos, yvolvió
golpeóa elerguirse,
culo deldejó caer las piernas de Siro a lo largo de sus
hombre.
Con una ráfaga de duros y rápidos empujes, Conner condujo su polla
tan profundo como pudo y se quedó inmóvil. Estaba congelado en una nube
de éxtasis mientras rugía su finalización. Sintió su cuerpo disparar chorro
tras chorro de semen en el culo de Siro. Gruñó cuando el canal ondulante
de Siro ordeñaba las últimas gotas de él.

Conner dejó caer su cabeza sobre el pecho de Siro. Descansó un


momento, recuperando su fuerza y trazando profundas bocanadas de aire en
sus pulmones.
Justo cuando pensaba que podría tener el poder para levantar la
cabeza, Conner sintió algo empujar largo, duro y sedoso contra su apretado
anillo de músculos.
—¿Yuri? —Conner se quedó sin aliento cuando una mano se posó en
su cadera.
—¿Esperabas a alguien más?
—No.
—¡Bien! —Yuri salpicó su palabra al estrellar su polla en el culo de
Conner.
189
Yuri impuso un ritmo duro y rápido golpeando a Conner una y otra

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vez
haciadeadelante,
nuevo. Conner jadeaba
conducía pesadamente.
a Conner en el culoCada vez que
de Siro hastaYuri
queempujaba
su polla
comenzó a tomar interés.
Los ojos de Siro se abrieron cuando la polla de Conner se endureció
en su interior. Conner se limitó a sonreír y fue con ello. Envolvió su mano
alrededor de la polla de Siro y comenzó a acariciarlo al ritmo de los
empujes de Yuri. Cada uno de sus propios golpes se reunía en especie por
sus compañeros hasta que Conner se sintió bruscamente fuera de control.
Inclinó sus caderas, y el nuevo ángulo aseguró que la polla gruesa de Yuri
se clavara en su punto dulce con cada empuje.
El culo de Siro de repente se contrajo alrededor de la polla de Conner
con casi brutal intensidad. Echó la cabeza hacia atrás, gritando cuando el
semen se disparó de su polla salpicando por encima de su estómago y la
mano de Conner. Conner gruñó una vez y se estrelló contra Siro,
inundando el culo del hombre de nuevo. Cuando la última gota se disparó
de ambos,jadeaban.
mientras Conner se derrumbó encima de Siro, su respiración mezclándose

Los empujes de Yuri se desaceleraron, y se inclinó para besar a


Conner un sendero hasta que Conner estuvo de vuelta en su hombro.
Conner se estremeció al sentir los dientes de Yuri raspar sobre su piel
caliente. Apretó los músculos internos, masajeando la longitud de la polla
de Yuri.

—Se su-se supone que muerdas a Siro, —Conner recordó a Yuri.


El profundo gruñido de Yuri resonó en la habitación. Agarró a
Conner por la piel del cuello y lo mantuvo en su sitio mientras se inclinaba
ante él y hundió sus colmillos en la garganta de Siro. Conner tenía un
asiento de primera fila para ver a Yuri reclamando a Siro.
Las lágrimas obstruyeron su garganta en la hermosa vista. Conner
podía sentir el momento de su enlace a tres bandas encajando en su lugar. 190

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Donde
queridosiempre se había sentido solo, Conner de repente supo lo que era ser
y necesitado.
Siro se estremeció debajo de él. La polla de Yuri se hinchó dentro de
Conner, estirando su culo casi hasta el punto del dolor. Su ritmo se
tambaleaba, cada vez más errático y casi frenético. Cuando Yuri levantó la
cabeza y rugió su liberación, Conner rápidamente usó su lengua para lamer
la sangre derramándose desde el cuello de Siro hasta que ninguna gota se
mantuvo.
Conner gimió cuando Yuri se retiró de él y se dejó caer en el suelo
junto al sofá como si sus piernas se hubieran entregado a él. Sabiendo que
no había nada que hacer, Conner hizo lo mismo. Descansó la cabeza en el
borde del sofá y sonrió al ver a Yuri jadear. Su sonrisa creció cuando sintió
la mano de Siro moverse por su pelo.
Se sintió contento.

—Chicos, montásteis un fantástico espectáculo.


Los ojos de Conner se abrieron como platos mientras su cabeza se
levantó y se dio la vuelta. El aire que quedó en sus pulmones salió en un
lento siseo cuando localizó a Vadim sentado en una silla al otro lado de la
habitación, con los pantalones vaqueros extendidos abiertos. Un muy
desnudo Sasha estaba extendido a lo largo del regazo de Vadim, y jadeaba
tan fuertemente como Yuri.

Había una manta en el suelo a los pies de Vadim.


El olor del sexo y semen era fuerte en el aire. La cara de Conner
ardía cuando de pronto se dio cuenta de que no todo se trataba de él y de
sus compañeros. Había olvidado por completo que Vadim siquiera estaba
en la habitación. Y había estado tan involucrado en reclamar a Siro, y ser
jodido por Yuri, que no había oído a Sasha entrar en la habitación. No
podía dejar de preguntarse a quién más podría haber pasado por alto. 191

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner estaba tan jodidamente avergonzado.


—Podríamos vender entradas de los tres jodiendo, —dijo Vadim—.
Haríamos millones.
La ligera risita de Sasha llenó el aire.
—Hey, Sasha, —dijo Yuri sin levantar la cabeza— Vadim me dijo
que va a cortarte la asignación para prendas de vestir.

Conner golpeó una mano por la cara cuando Sasha levantó la cabeza
y fulminó con la mirada a su compañero.
—¿Que va a hacer qué? —gruñó Sasha.
Los dientes de Vadim se apretaron. —Maldita sea, ¡Yuri!

192

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Todavía no me has convencido de que esta sea una buena idea, —


Yuri se quejó mientras se dirigían por el largo camino hacia el recinto del
alfa de la manada McGregor.
Siro puso los ojos en blanco.
Habían estado teniendo esta conversación exacta la semana pasada.
Nada había cambiado. Yuri todavía tenía que hacerse cargo de la manada
McGregor hasta encontrar un reemplazo, y Conner todavía estaba con la
soga al cuello.
Por lo menos se les había concedido una pequeña cantidad de tiempo
para tratar de probar la inocencia de Conner. Es probable que no hubiera
ocurrido si el padre de Siro no fuera un miembro del consejo. Los dos
hombres grandes en el asiento trasero de la camioneta podrían haber
ayudado, también.
Siro miró por el espejo retrovisor. Neil y Frances eran realmente
grandes, también. Vadim había elegido a dos de sus más grandes guardias
para acompañarles en su pequeño viaje y mantener un ojo sobre Conner.
Siro quería gruñir cada vez que pensaba en alguien vigilando a su
compañero, pero se contuvo, o algo así.
Siro no sabía exactamente lo que Vadim les había dicho a los dos
hombres, pero seguían mirando a Conner como si estuviera a punto de
brotarle otra cabeza. Conner ya les hizo gestos tantas veces que su dedo 193

estaba en grave peligro de ser permanentemente congelado arriba en esa

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

posición.
Al menos Conner no estaba armado, porque habría disparado a uno
de los guardias por ahora. Siro estaba seguro de que Conner no estaba
armado. Había registrado a su compañero él mismo, de la cabeza a los pies
y cada pulgada entre ellos. ¿Y qué si les había hecho retrasar unos minutos,
como treinta, y bajar hasta el ferry?
La expresión del rostro de Yuri cuando abordaron el barco había sido
de conocimiento ytomó
Afortunadamente, un unos
poco días
de para
celosllegar
porque no había
a tierra firme. sido
Todosincluido.
habían
estado sonrientes por el momento en que estaban atracando al puerto.
Por desgracia, esas sonrisas se habían desvanecido cuando llegaron a
territorio de la manada McGregor hace dos horas. Siro podía sentir el
nerviosismo de Conner a pesar de que el hombre se sentó en el asiento
trasero. Era casi una cosa viviente, respirando y que habitaba el vehículo.

Conner estaba aterrorizado de volver a su antigua manada.


Yuri, por otra parte, estaba amplificado hasta el punto de salirse de
sus casillas. Sus rodillas estaban sacudiéndose mientras se tocaba la pierna
sin descanso en el suelo del coche. Sus dedos estaban tocando algún patrón
de los vaqueros que sólo Yuri sabía.
Y estaba sudando.
Siro no habría estado tan preocupado de que Yuri estuviera sudando
si no estuviera a cinco grados bajo cero. La nieve se apilaba y alineaba a
cada lado de la carretera cuando se dirigían abajo. Siro tuvo que utilizar la
mayor parte de su concentración sólo para mantener la SUV en la carretera
y estaba conduciendo un cuatro ruedas.
—Puede que no sea nuestra idea más brillante, Yuri, —dijo Siro—.
Pero es la única que tenemos en este momento.
194
Yuri gruñó con los dientes apretados y golpeó su cabeza hacia atrás

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

en
solocontra de sua alguien
nombrar reposacabezas. —¿Porcargo
para hacerse qué de
no la
puede el Anciano
manada? Dmitriev
¿Por qué tengo
que hacerlo yo?
—Sólo estoy adivinando aquí, —dijo Conner desde el asiento
trasero— pero mi apuesta sería que es porque eres el alfa.
—No ayudas, Conner, —gruñó Yuri.
—¿Quieres una mamada? —Conner saltó de repente sin perder el
ritmo.
Siro se atragantó con el aire a punto de salir de su garganta. Agarró
el volante más estrictamente para mantener el coche en la carretera,
mientras se desviaba. Se sorprendió de que Conner hubiera dicho eso con
dos desconocidos en el coche, incluso si había hecho callar a Yuri.
Siro miró por el espejo retrovisor de nuevo. —No creo que esa oferta
sea válida para cualquier otra persona, porque si lo es…
Conner le guiñó un ojo. —Tal vez.
—Oh, diablos, ¡no! —espetó Yuri—. Si tengo que ser el alfa,
entonces tu boca es mía.
Siro parpadeó y se volvió para mirar a Yuri.
Yuri devolvió la mirada atónita a Siro, la boca abierta como si
acabara de darse cuenta de lo que dijo. Poco a poco empezó a negar con la
cabeza como si quisiera negar sus palabras. —No quise decir eso, Siro.
Siro comenzó a reír. No podía evitarlo. El horror de la cara de Yuri
no tenía precio. Sabía que Yuri nunca le impediría tener intimidad con
Conner, o viceversa. También sabía que eran los nervios de Yuri los que
hablaban o gritaban, según el caso, y no realmente Yuri.
Siro detuvo el coche a una parada y luego se inclinó para envolver su 195

mano alrededor del cuello de Yuri. Atrajo al hombre en un profundo pero

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

rápido
vamos abeso
estaryaapoyó
tu lado.laNo
frente contra
vamos la de
a dejar queYuri.
nada — Cariño, Conner y yo
te suceda.
Yuri tragó saliva. —¿Lo prometes? —susurró.
—Bueno, si él no lo hace, lo haré yo, —dijo otra voz cerca de ellos.
Siro sonrió cuando se volvió para ver la cara de Conner a sólo pulgadas de
la suya y la de Yuri. Conner estaba sonriendo —. Y la oferta de una
mamada sigue abierta y en espera de ser aceptada.
—¡Hecho! —Siro y Yuri ambos dijeron al mismo tiempo.
—Fantástico. —Conner se echó hacia atrás en su asiento y cruzó los
brazos sobre el pecho —. Entonces, ¿podemos conseguir esta muestra en la
carretera? Me gustaría dejar esto terminado y acabado y volver a casa para
que pueda cumplir esa promesa antes que nada salga mal.
Siro se rió mientras ponía en marcha el coche. No podía discutir las
palabras de Conner. Hasta ahora, a pesar de que habían sobrevivido a todo
lo que les lanzaban contra ellos y salir vencedores, todavía parecían tener la
peor suerte posible. Cada vez que uno de ellos se daba la vuelta, algo malo
estaba pasando.
Pero al menos esta vez, cuando se dirigían hacia el peligro, estaba los
tres de pie juntos en lugar de tres individuos separados tratando de luchar
por su cuenta. Eso tenía que cambiar su suerte.
¿Cierto?
—Esto es, —murmuró Conner desde el asiento trasero cuando el
coche se ralentizó—. Debería haber una puerta justo a la vuelta de la
esquina. McGregor la utilizaba para mantener al menos cuatro hombres
armados en la puerta en todo momento, a fin de ir poco a poco. No serán
visibles hasta que estés prácticamente encima de ellos.
Siro frenó la SUV a paso de tortuga. No hizo el camino más fácil de 196
conducir, pero al menos mantuvo el vehículo de deslizarse en la cuneta a su

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

paso alrededor de una curva cerrada en la carretera.


—Están esperando, ¿no? —preguntó Yuri.
—Sí, —dijo Siro—. El viejo Dmitriev llamó y les dijo que veníamos.
Les explicó la situación.
Siro estaba agradecido de que sus compañeros comprendieran la
necesidad de mantener su relación con el anciano en secreto. Ya no tenía
miedo de que el consejo descubriera su status de tri-omega, pero todavía
quedaba la posibilidad de que su padre pudiera tener problemas por
ocultarlo durante tantos años.
—¿Les dijo que yo iba a venir? —preguntó Conner.
—Nope. —Siro envió a Conner una rápida sonrisa en el espejo—. Le
pedí que no lo hiciera. Pensé que si alguien sabía que ibas a venir podrían
intentar destruir cualquier evidencia antes de que llegáramos aquí.

—Supongo que eso tiene sentido. —Conner hizo una mueca —. Pero
tengo que advertirte que mi regreso podría no ser bienvenido, Siro. No me
marché exactamente en el mejor de los términos.
—No creo que nadie en la manada McGregor pueda quejarse a ti por
eso, Conner. —Yuri volvió a su asiento para mirar a Conner —. Tenías una
razón legítima para salir. Desafiaste al Alfa McGregor porque era un asno.
Y sabes tan bien como yo que si hubieras vuelto a las tierras de la manada,
no habrías vivido para ver otro día.
—Eso no significa que vaya a ser bienvenido de nuevo.
—Yo creo que te quedarás sorprendido, —dijo Yuri.
—Bueno. —Siro desaceleró el vehículo a una parada cuando una
gran puerta de hierro apareció a la vista—. Estamos a punto de averiguarlo.
Siro casi gruñó cuando dos hombres armados salieron de las 197

sombras. No era el hecho de que fueran shifters, porque podía oler eso.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Pero no le gustaban
empezaron los rifles
a llevar armas de alto
en lugar de poder en sus
combatir a lamanos.
antigua¿Cuándo
manera? shifters
Y ¿por qué no consiguió la información?
¿O al menos su propia arma?
Siro pulsó el botón y bajó la ventanilla cuando uno de los shifters
pasó hacia el lado del coche. —Llevo al Alfa Miroslav e invitados.

El hombre se inclinó un poco en la cintura y echó un vistazo al


coche. Siro no sabía si el hombre estaba contando cabezas o qué, pero sabía
que no le gustó la cautelosa mirada que apareció en el rostro del hombre o
la forma en que sus manos se apretaron en su arma cuando sus ojos se
posaron en Conner.
—¿Hay algún problema? —preguntó cuando el hombre se puso de
pie.

—A Conner McGregor no se le permite las tierras de la manada.


Siro apretó los dientes. —¿Por orden de quién?
—Del Alfa McGregor.
—El Alfa McGregor está muerto, —espetó Siro, la ira empezando a
apretar su voz—. Y no creo que tu nuevo alfa sea muy feliz de que niegues
a su compañero el acceso a su territorio.

La sangre abandonó el rostro del hombre mientras sus ojos se


volvieron hacia el asiento trasero. Se lamió los labios como si estuvieran
repentinamente secos. —¿Conner es el compañero del Alfa Miroslav?
La sonrisa de Siro era diabólica, y lo sabía. Sólo que no le importaba.
—Yo también.
Los ojos del guardia se detuvieron de nuevo en Siro tan rápido que
198
prácticamente se desorbitaron de su cara. —¿Tú y Conner ambos estáis

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

acoplados al Alfa Miroslav?


—Sí. —Siro no dijo nada más que eso. No estaba dispuesto a
explicarle a un desconocido que era un tri-omega. Nadie necesitaba saberlo
a menos que fuera absolutamente necesario. Y ahora mismo, no era
necesario.
Siro arqueó una ceja cuando el hombre de repente golpeó un
pequeño dispositivo negro en la oreja. No podía esperar a escuchar lo que
el hombre tenía que decir.
—El Alfa Miroslav ha llegado, señor. —Los ojos dorados del
hombre se redujeron en Siro—. Sus compañeros están con él, señor, así
como dos guardias. —El hombre estuvo en silencio por un momento y
luego asintió con la cabeza—. Sí, señor.
Dio un paso atrás y agitó su mano hacia la puerta. Siro miró adelante
justo a tiempo para ver la puerta comenzar a abrirse. Los dos guardias se
quedaron a un lado de la carretera, permitiendo que el coche pasara.
Cuando la puerta se abrió, dos guardias estaban de pie allí. Ellos, también,
se hicieron a un lado.
Siro condujo el coche por la puerta lentamente, manteniendo un ojo
avizor sobre todos los guardias. Estaban un poco confundidos en cuanto a
por qué la guardia no había mencionado que Conner era uno de los
compañeros de Yuri.

¿Y quién demonios era señor?


—Conner, ¿tienes alguna idea de con quién el guardia podría haber
estado hablando? ¿El beta tal vez? —preguntó Siro mientras conducía el
vehículo hacia abajo por el camino de entrada hacia las luces en la
distancia.
—Joder, —juró Conner—. Espero que no. El beta es tan malo como
McGregor lo fue. 199

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Sabemos
¿Cuántos que McGregor
de la manada planeó
crees que la invasión
estaban de la isla —
involucrados? de Realmente
Vourdala.
quería saber a qué clase de peligro se dirigían.
—El beta estuvo involucrado con seguridad, —dijo Conner—.
McGregor era inteligente, pero también estaba loco. Su beta era más o
menos todo lo que le mantenía en jaque. Era un poco el cerebro detrás de la
escena. Bajo circunstancias normales, se habría hecho cargo de la manada
si cualquier cosa le pasara a McGregor. —Conner se rió—. Supongo que
no estaba esperando a Yuri.
—Cariño, nadie espera a Yuri.
—¡Hey! —Gruñó Yuri.
Siro sonrió cuando se acercó y le dio unas palmaditas al duro muslo
de Yuri. —Sólo quería decir que te has vuelto tan tolerante y
despreocupado que nadie espera que seas el hombre fuerte y poderoso que
eres.
—Mentiroso, —respondió lacónicamente Yuri, pero Siro podía ver la
sonrisa en la cara de Yuri cuando rápidamente se volvió a mirar por la
ventana.
El corazón de Siro comenzó a latir erráticamente cuando se
detuvieron delante de una mansión grande. No era una casa fea, sino un
poco grande para el gusto de Siro. Estaba acostumbrado a vivir en un
apartamento de un dormitorio, uno en el que casi nunca estaba.
Siro apagó el motor y luego apoyó los brazos en la parte superior del
volante mientras miraba hacia la gran casa. Las luces resplandecían en casi
todas las ventanas, y el olor de los múltiples shifters flotaba a través del
aire. O la manada tenía una gran fiesta o estaban esperando a Yuri.
—¿Adónde vamos a vivir? —preguntó Siro.
200

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Qué? —Exclamó Yuri.


—Sólo me preguntaba dónde vamos a vivir. La manada de Conner se
ha trasladado a la isla de Vourdala. Tengo un pequeño apartamento de
mierda en el que casi nunca estoy. Y tú eres el Beta de la manada de
Miroslav. —Siro miró a su compañero—. Sé que no has renunciado a tu
posición como beta de la manada de tu padre todavía, pero podrías tener
que hacerlo. Una vez que tu lobo siente este tipo de poder, no podrías
establecerte para ser el segundo al mando nunca más.
—Dios. —Yuri metió la mano por el pelo, agitando los extremos
hasta que quedó prácticamente de punta —. Ni siquiera he pensado en eso.
Diablos, ni siquiera he llamado a mi padre todavía.
—¿Cómo crees que va a reaccionar?
—Por extraño que parezca, creo que estará orgulloso de mí.
—¿Va a dejar que renuncies sin alboroto?
Yuri frunció el ceño. —Sí, pero ¿por qué iba yo a querer hacerlo?
Esa pregunta rogaba ser contestada, pero Siro no tenía una respuesta,
al menos no una que no lo hiciera ver como un completo gilipollas. Yuri
trabajó muy duro para ser el beta de la manada de su padre. ¿Qué razón
podría Siro darle para convencer a Yuri para que abandonara su posición?
Yuri de repente gritó y se agarró a la parte posterior de su cabeza. La
mandíbula de Siro cayó al darse cuenta de que Conner había golpeado al
hombre en la parte posterior de la cabeza. Poco a poco se volvió a mirar
por encima del hombro a Conner.
Los ojos de color verde pálido de Conner brillaban de furia. —Así
que, ¿Siro y yo sólo se supone que renunciemos a nuestras vidas para
seguir a tu alrededor porque tú eres el Beta de la manada Miroslav?
201
Los ojos de Yuri se abrieron como si de repente se diera cuenta de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cómo sus palabras podrían haber sonado. —Bueno, no, pero…


—¿Pero qué? —gruñó Conner.
—Creo que eso es algo que tendremos que discutir, —dijo Yuri
finalmente, su tono de voz débil, como si esperara que Conner lo golpeara
de nuevo.
—Mejor.

Yuri dejó escapar un profundo suspiro y se pasó la mano por el pelo


de nuevo. —Esta cosa de las parejas lleva un poco de tiempo
acostumbrarse a ello, ¿no?
Siro se rió. —Lo hace, pero somos tres hombres semi-inteligentes.
Creo que vamos a encontrar una manera de salir del paso. —Siro sacó las
llaves de arranque y las deslizó en el bolsillo antes de agarrar la manija de
la puerta—. O podríamos pasar el resto de nuestras vidas en la cama. No
parece que tengamos ningún problema allí.
La sonrisa que se dibujó en el rostro de Yuri tardó en llegar, pero
cuando se extendió por sus labios, se movió hacia arriba y la diversión
bailaba en sus ojos. —No podríamos hacer muchas cosas de esa manera.
—¿A quién carajo le importa? —preguntó Conner desde el asiento
trasero—. Considérame dentro del plan.
Siro se reía mientras salía del coche. Sabía, lógicamente, que los tres
no podían pasar el resto de su vida en la cama. No conseguirían hacer nada
excepto gastar cada botella de lubricante existente. Sonaba bien, pero
realmente había vida fuera de la cama, y Siro quería experimentarla con sus
compañeros, toda la misma.
Esperó hasta que Conner y Yuri se unieron a él en su lado del coche,
los dos guardias esperando a pocos metros de distancia, y luego se volvió a
mirar a sus compañeros. —Voy a entregar mi dimisión al consejo cuando 202

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

volvamos a la isla de Vourdala.


Yuri pareció aliviado cuando se hundió de nuevo en el lado de la
SUV. —Oh, gracias a Dios.
Conner sólo se veía confundido. —¿Por qué?
Siro hizo una mueca, mirando a la mansión iluminada. —Estoy
cansado de ir de encubierto y esconder quién soy de todo el mundo que me
importa. Ahora que he encontrado a mis compañeros, prefiero tratar de
descubrir quién soy realmente.
Siro apretó los labios mientras lanzó una mirada rápida a los
guardias. Sabía que podían oírle hablar, pero eran lo suficientemente
educados como para mirar hacia otro lado, dando a Yuri, Siro, y Conner
algo parecido a la privacidad. —Estaba esperando que mis compañeros
estuvieran a mi lado cuando lo hiciera.
—Somos más fuertes de pie uno al lado del otro que estando solos,
—Conner murmuró, repitiendo las palabras de Yuri de la noche en que
habían reclamado a Siro.
Siro ofreció a Conner una pequeña sonrisa tímida. —Sí.
Conner estaba radiante. —Funciona para mí.
Los ojos de Siro se desviaron hacia su otro compañero, esperando la
respuesta de Yuri a sus noticias.
—No puedo pensar en muchas cosas que no haría para evitar que
trabajaras para el consejo, Siro, —respondió Yuri finalmente—. No me
gusta la idea de que salgas y te pongas en peligro cuando no estamos allí
para evitar que tu culo reciba un disparo.
—Porque no está en peligro de recibir un disparo mientras esté con
nosotros, ¿quieres decir? —los ojos de Conner se dispararon de un lado a
203
otro entre Siro y Yuri antes de empezar a morderse los labios. Siro podía

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ver la necesidad de reirse histéricamente construyéndose en el rostro de


Conner.
Los labios de Siro se torcieron cuando los ojos de Yuri se
estrecharon en Conner. Podía ver por dónde iba esta conversación, y no era
bueno. Mientras que Yuri había perdonado a Conner por dispararle,
todavía no le gustaba hablar de ello.
Rápidamente se interpuso entre los dos hombres e hizo un gesto
hacia la casa,
recibiendo un con la esperanza
disparo. —Tenemosde alejar su atención
que entrar de cualquier
y descubrir persona
este lío antes de
pasar a otras cosas.
Yuri refunfuñó algo en voz baja mientras caminaba más allá de Siro
que Siro no podía distinguir. Frunció el ceño. Realmente necesitaban
sentarse y tener una conversación sobre el tema de Yuri con Conner.
Para la mayor parte, todo era sobre el disparo. Pero había todavía un
persistente resentimiento e ira en Yuri que ni ni Siro ni Conner habían sido
capaces de penetrar. Si no lo trataban muy pronto, crearía un problema aún
mayor del que tenían ya.
Siro esperó hasta que Conner estaba a su lado y luego siguió a Yuri
hasta los escalones de la puerta principal de la mansión. Estaba un poco
sorprendido encontrar a Yuri enojado y molesto de repente mirando como
si no tuviera cuidado en el mundo. Sabía que era una cosa de beta o, en el
caso de Yuri, una cosa de alfa. Pero todavía desconcertante.
Siro se tensó cuando la puerta se abrió y Conner inhaló suavemente.
—¿Conner? —preguntó a través de su enlace sin apartar la vista del
hombre de pie en la puerta—. ¿Qué pasa?
—Tenían que saber que ibas a venir, Siro, —respondió Conner a
través del mismo enlace por el que Siro había hablado —. Tenían que saber
que yo soy el compañero de Yuri. 204

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Por qué? —¿Y por qué demonios estaba Conner tan molesto?
Estaba prácticamente temblando en sus botas.
—Ese es Whitney.

—¿Quién es Whitney?

El trago de Conner fue audible. —Mi amante.

205

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuri gruñó cuando su mano salió disparada y se envolvió alrededor


del cuello tirando
las manos del hombre
de suque abrió
brazo, la puerta.
mientras Podía oír
arrastraba a la gente
al hombre gritándole,
hacia él hasta
que estuvieron nariz con nariz.
—¡Conner es mío! —gruñó mientras le enseñó los colmillos afilados
al hombre. Fue una clara amenaza. Si el hombre siquiera pensara en
Conner, Yuri iba a rasgar su garganta. Conner era suyo, ¡maldita sea!
Los ojos del hombre se desorbitaron, y su cara se puso roja. Yuri
sabía que tenía un estricto control sobre su garganta, pero no era tan
apretado. Whitney todavía podía respirar, lo que instantáneamente puso al
tanto a Yuri en el hecho de que algo más estaba pasando aquí. Podía
sentirlo en el aire y verlo en el extraño brillo parpadeando en los ojos del
hombre.
—Toca a mis compañeros, cualquiera de ellos, y te mataré. —Con
eso, Yuri arrojó al hombre lejos de él, y se volvió hacia sus compañeros,
ambos de los cuales le tenían agarrado de sus brazos. Yuri se los quitó de
encima y plantó sus manos en las caderas mientras miraba a Conner —.
¿Algo se te olvidó decirnos, Conner?
—Joder, Yuri, no se puede atacar a la gente así, —dijo Conner
mientras pasaba la mano por la cara —. Todo el mundo va a pensar que eres
tan malo como McGregor.
Yuri inclinó la cabeza hacia un lado, cuando el significado detrás de 206
las palabras de Conner penetraron en su cerebro y luego tomaron vida

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

propia. Nocara.
una bonita se había hecho beta de la manada de su padre porque tuviera

Tenía un montón de cerebro para ir con esa cara. Él era el pensador


en su familia. Siempre trataba de ver una situación desde todos los lados, y
podía hacerlo en cuestión de segundos. No necesitaba días para reflexionar
sobre algo. Necesitaba unos pocos segundos para pensar en ello y llegar a
una conclusión.

LaLe
gustaba. conclusión a la sobre
daba dentera, que estaba llegando
todo porque eraamante
el ex una que a Yuriestaba
de Conner no le
involucrado. Y Yuri sabía a ciencia cierta que Whitney era el ex amante de
Conner porque Conner lo había dicho y la culpa estaba escrita por todo el
rostro del hombre. Pero también sabía que Conner no había tenido contacto
con nadie de su manada anterior desde que se fue. En cuanto Yuri podía
ver, no quería ponerse en contacto tampoco.
Eso le dijo a Yuri que no tenía nada de qué preocuparse en cuando a
su compañero concernía. También le dijo que la situación había arrastrado
justo a sus compañeros dentro de una tormenta de mierda de proporciones
épicas. Esta vez, podrían no llevarse sus vidas.
—¿De qué coño estás hablando? —espetó Yuri lo suficientemente
fuerte para que alguien le escuchara, y había un montón de gente que podía
oírle. Una pequeña multitud se había formado cuando Yuri estaba gritando.
Cada uno de ellos le habría escuchado.
En silencio, envió un grupo diferente de palabras a sus compañeros.
—Te das cuenta de que me están tendiendo una trampa, ¿no? Alguien a
propósito tenía a Whitney para responder en la puerta para que yo
perdiera la calma.
Conner frunció el ceño y miró hacia donde Whitney estaba
comenzando a levantarse del suelo. —Bueno, funcionó, —respondió
silenciosamente—. Sólo aterrorizaste a media manada. 207

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuricomo
fijamente hizosiuna mueca
fuera cuando
el hombre delmiró
saco.aNo
loseraextraños
una granque le miraban
multitud, pero
estaban allí un número suficiente de personas de pie en la puerta de entrada
para que Yuri supiera que se suponía que fueran testigos de su llegada.
—Y estoy seguro de que es exactamente lo que esperaban. —Yuri
arqueó una ceja para enfatizar sus palabras—. Entonces, ¿por qué no les
das lo que quieren?

Los jodida
realmente ojos de Conner
estúpido dieron la vuelta. —Debido a que es una
idea.
—¿Tienes una mejor?

Los labios de Conner se retorcieron como si estuviera tratando de


impedirles que subieran. —No, no en realidad.
—¿Puedes recibir un golpe?

Las cejas de Conner se alzaron. —Estás jodidamente loco —dijo tan


fuerte como Yuri había hablado.
Yuri golpeó a Conner justo en la boca. Hizo una mueca cuando la
cabeza de Conner volvió hacia atrás. Conner levantó rápidamente la mano
a la boca. Cuando la alejó un momento después, había sangre en los labios
y las puntas de sus dedos.
—¡Yuri! —Siro gritó mientras rodeaba a Conner y apretó al hombre
en sus brazos—. ¿Para qué demonios hiciste eso?
—Se lo merecía, —gritó Yuri en voz alta.
—¡Al diablo que lo hacía! —espetó Siro de vuelta, disparándole
miradas diabólicas.
—Parecía como la cosa que hacer en ese momento. Quieren crear
una brecha entre nosotros. Dejemos que piensen que lo tienen. —Yuri trató 208

de no dejar que su angustia se mostrara en su rostro mientras miraba a

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner. No tenía
viera bueno. intención
La visión de ladesangre
lastimar
de asuConner. Sólo hizo
compañero quería hacer
a su que se
estómago
encogerse—. Lo siento, cariño. No quise pegarte tan duro.
—Golpeaste como una niña, —dijo en silencio. Conner escupió la
sangre en su boca y lamió la sangre de sus labios. Lo que dijo en alto era
completamente diferente—. ¡Maldito hijo de puta!
—Yo soy el alfa aquí, —gruñó Yuri—. Respetarás mi posición.
—No te excedas, grandote, —dijo Siro a través de su enlace —. No
queremos que piensen que estás demasiado loco. Recuerda que no
tenemos a los guardias de Vadim al tanto de este pequeño plan tuyo. Lo
que sea que vean, lo llevarán de vuelta a su alfa, lo que significa que tienen
una buena oportunidad de volver al consejo.
Yuri miró a Neil y a Frances, quienes estaban mirándole como si le
hubiera crecido otra cabeza más. Le guiñó un ojo a los guardias y luego
vio caer sus bocas abiertas. —Vas a tener que explicárselo más tarde
cuando les tengas solos. Tienen que seguir el juego ahora.
Yuri apretó los labios para no reírse cuando vio a uno de los guardias
haciendo una mueca de dolor y se dio cuenta de que Conner le había dado
un codazo al hombre. Neil, el guardia, al instante se puso rígido y le miró.
Yuri le dio otro guiño, esperando que el hombre captara la idea.
Yuri se volvió y señaló con el dedo a Conner. —Mantente alejado de
Whitney. Si me entero de que has tenido algo que ver con él, tendré al
consejo destituyéndote como mi compañero. Y no pienses ni por un
segundo que no puedo hacerlo, porque puedo. El consejo ya quiere poner tu
culo lejos. Yo soy lo único que se interpone entre ti y una muy larga pena
de prisión.
—Yuri, —lloriqueó Conner.
Yuri habría pensado que Conner estaba jugando si no hubiera visto 209

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

lágrimas salirYdeeste
del mundo. los ojos
plandelsuyo
hombre. Bueno,resultando
no estaba así que eraser
el mayor gilipollas
bastante como
pensaba que sería. Estaba haciendo daño a sus compañeros, y nunca
pretendió que eso sucediera. Algo sobre la situación sólo le dijo que esta
era la manera que tenía que jugar las cosas.
—¿Hasta qué punto planeas llevar este pequeño espectáculo tuyo,
Yuri? —Siro preguntó mientras sus brazos se apretaron alrededor de los
hombros de Conner. La mirada en los ojos de Siro habría derribado a un
hombre más débil. Así las cosas, la mirada hizo a Yuri sentirse como que
acababa de matar al perrito de alguien.
—Cariño, —susurró silenciosamente mientras se giraba para mirar a
Conner, poniendo todo lo que sentía por el hombre en sus palabras, —
sabes que te amo.
Yuri se había dado cuenta hace varios días. Decir que estaba
sorprendido por cómo se sentía después de estar tan enojado con Conner
después que el hombre hubiera disparado a Siro, era un eufemismo. Se
había sentido totalmente conmocionado.
Le había tomado un largo paseo y unas pocas horas de búsqueda del
alma admitir incluso para sí mismo que Conner no era el monstruo que
había representado en su mente. No había sido malicioso en sus disparos a
Siro.
Había sido realmente muy inteligentes acerca de lo que había hecho
en el marco de las circunstancias, y no había matado a Siro como
fácilmente podría haberlo hecho. Sólo le hizo ir más despacio.
Conner era en realidad un hombre muy dulce, una vez que Yuri fue
más allá de su duro exterior. Quería lo que todos los demás querían,
alguien que lo amara incondicionalmente. Nunca pensó que lo
comprendería. Yuri y Siro necesitaban demostrárselo al equivocado
hombre. Este era el primer paso en esa dirección. 210

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—No, no lo sé, —respondió Conner casi al instante.


—Oh. —Yuri se rascó un lado de su cabeza, sintiéndose un poco
avergonzado de que ésta fuera la situación en la que se encontraban la
primera vez que le dijera a su compañero que lo amaba. Su momento no
podía haber sido peor—. Bueno, lo hago.
—¿Y has elegido ahora para decírmelo? —Conner podría haber
estado hablando a través de su enlace, pero Yuri todavía podía sentir la
acusación en sus palabras silenciosas, y se estremeció.
—Lo siento.

Los ojos de Conner se estrecharon. —Esta no fue una de tus más


brillantes ideas, Yuri.
—Oh, sí que lo es. —Yuri puso los ojos en blanco cuando Conner y
Siro ambos lo fulminaron con la mirada —. Mira, toda la cosa completa del
“daño a Conner” no se suponía que fuera parte de este plan, y siento lo
que pasó. Esa no fue mi intención.
—¿Justo cuál diablos era tu plan? —espetó Siro, dejando que Yuri
supiera que el hombre aún estaba enojado.
—Creo que nuestro pequeño espectáculo ha dado a nuestros
anfitriones la idea de que no estoy contento con Conner como pareja y que
podría estar dispuesto a mirar de otra manera sobre las acusaciones en su
contra. —Yuri mordió su labio por un momento cuando una risa amenazó
con liberarse—. También puede ser que piensen que soy un poco loco.
—¿Quieres decir que no lo eres? —preguntó Conner.

—No exactamente. —Sonrió Yuri—. Piensa en el espectáculo que


acabamos de montar y luego piensa por qué estamos aquí. A continuación,
añade eso a todo el conjunto.
211
Yuri sintió una gran satisfacción mientras veía el comienzo de la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

comprensión
palabras habíacruzar
hecho.los
Norostros
fue unde sushábilmente
plan compañeros de lo que
pensado, perosucuanto
guerramás
de
profundo se metió en él, más sentido tenía.
Alguien estaba fuera para conseguir a Conner. Si quienquiera que se
creyera que Yuri no estaba contento con Conner, y que Yuri estaba un poco
loco, podría pensar que se parecía mucho a lo que el Alfa McGregor había
sido y trataría de trazar sus planes.

queríaConner
decirlo,de repente
Yuri, extendió
—dijo en vozlaalta,
mano y agarró el
pareciendo másbrazo de Yuri. —
desesperado deNo
lo
que Yuri nunca lo había visto—. Lo que quiera que hubiera entre Whitney
y yo sucedió hace mucho tiempo, antes de que incluso dejara la manada
McGregor.
Yuri parpadeó hacia abajo a Conner, preguntándose cuál era su plan
de juego. Su compañero no le rogaría más que se disparara un tiro él
mismo. Conner simplemente no era ese tipo de hombre. Pues bien, en la
cama podría rogar, pero eso era totalmente diferente a esta situación.
—Ni siquiera he hablado con él desde que salí de la manada. Te lo
juro.
—Ya veo que no, —gruñó Yuri antes de volver los ojos hacia los
guardias—. Si camina un paso hacia Whitney o incluso hablas con él,
quiero saber. ¿Entendido?

—Sí, Alfa Miroslav, —Neil respondió rápidamente.


Frances se limitó a asentir.
—Creo que los guardias están a bordo con este pequeño plan,
incluso si se confunden. —Yuri empujó a Conner atrás hacia Siro como si
no pudiera soportar tocarle. Mientras lo hacía, dejó que sus dedos pasaran a
lo largo del costado del hombre—. No le digas a nadie que trabajan para
mi hermano. Quiero que todos crean que Neil y Frances son mis guardias. 212

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Por qué? —preguntó Conner.


Yuri sonrió. —Porque si soy tan malo, entonces lo más probable es
que mi guardias sean malos también.
—Tiene sentido. ¿Qué quieres que haga ahora?

—Es simple, cariño. Intenta conseguir a Whitney a solas y averigua


quién es el que nos está tendiendo la trampa.

—¿Estás seguro?
Yuri miró Conner derecho a los ojos. Quería que su compañero viera
qué malditamente serio era. —Confío en ti, Conner.
Los músculos de la garganta de Conner se movieron para tragar, y
Yuri sabía que estaba tratando de contener una nueva oleada de lágrimas
por aparecer. Deseó más que nada en ese momento poder tomar a Conner
en sus brazos y susurrarle palabras tiernas, una vez más, pero no podía.
—Te amo, Conner. No importa lo que pase, no olvides eso.

Yuri miró a Siro, que seguía observando el rostro de Conner tan


atentamente que nunca lo había visto. —Te quiero, también, Siro, para que
lo sepas.
Los ojos azules de Siro estaban ardiendo cuando su cabeza se
levantó. —Necesitamos discutir nuestras habilidades de comunicación,
Yuri. Tu tiempo es una mierda.
Yuri se mordió el labio. Plantó las manos en las caderas y dejó caer
su cabeza. Se dio cuenta por el brillo en los ojos de Siro que el hombre
estaba desesperado por repetir sus palabras, pero ahora no era el momento
y los dos lo sabían.
Yuri respiró hondo y dio la vuelta. —¿Quién está a cargo por aquí?
—espetó en voz alta y con firmeza como pudo reunir teniendo en cuenta 213

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

los sentimientos que le inundaban en este momento.


—Creo que ese sería usted, —un hombre de cabello oscuro con un
bastón dijo mientras se alejaba de la pequeña multitud mirándoles. Varias
personas se quedaron mirando la arcada que conducía a otra habitación. El
hombre inclinó la cabeza hacia un lado, dejando al descubierto la garganta
en respeto—. Alfa Miroslav.
Los ojos de Yuri se estrecharon. No le gustaba aquel hombre. Se dio
cuenta al instante de que estaba involucrado de alguna manera en lo que
estaba pasando.
El mal vertiendo de aquel hombre era tan espeso que casi ahogó a
Yuri.
—¿Quién eres tú? —preguntó Yuri.
—Soy Nazar, —respondió el hombre— el Beta de la manada
McGregor.
Yuri siguió para mirar al hombre mientras consultaba a su
compañero. —Conner, ¿qué me puedes decir sobre este hombre?
Conner respondió al instante. —Él es el cerebro detrás de Alfa
McGregor, así que ten cuidado. Si percibe una debilidad, va a explotarla
para su propio beneficio.
—Queda por ver si sigues siendo el beta aquí. —Yuri podía ver la
rabia apenas contenida en Nazar cuando su mandíbula se marcó.
Simplemente levantó una ceja hasta que el hombre bajó los ojos.
—Como desees, Alfa, —respondió Nazar.
Por Dios, ¿cómo su padre o Vadim hacen esto cada segundo de cada
día? Habían pasado como dos minutos y Yuri estaba dispuesto a tirar la
toalla de alfa. Yuri pronto tuvo un nuevo respeto por su padre y su
214
hermano. Se volvería loco si tuviera que hacer esto todos los días por el

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

resto de su vida.
—¿Supongo que el Consejo te ha informado de la desafortunada
muerte del Alfa McGregor?
—El anciano Dmitriev llamó y me informó de que el Alfa McGregor
murió durante un desafío y que te has hecho cargo de la manada. —Nazar
parecía escoger sus palabras con mucho cuidado, como si Yuri tratara de
averiguar cuánto sabía realmente sobre la presencia del alfa McGregor en
la isla de Vourdala—. No estaba informado de la manera que murió.
—Yo lo maté. —Yuri cruzó los brazos sobre el pecho y miró al otro
hombre hasta que Nazar, una vez más bajó los ojos—. Eso es todo lo que
necesitas saber.
—¿Cuándo será devuelto su cuerpo, Alfa? —preguntó Nazar—. Me
gustaría informar a su familia sobre cuándo podrían tener los servicios para
él.
—¿Qué familia? —espetó Yuri—. Hasta donde yo sabía, el Alfa
McGregor era viudo y sólo tenía un hijo. La manada de Brom fue
recientemente atacada por los cazadores. Su paradero se encuentra
actualmente desconocido.
—¿Los cazadores? —el asombro en el rostro de Nazar era una
mentira y Yuri lo sabía. Lo veía en el brillo de alegría en los ojos oscuros
del hombre—. ¿Hubo algún herido?
—Varias personas murieron, —dijo Yuri. No se extendió en su
explicación. Nazar no tenía por qué saber que los que habían muerto todos
habían sido cazadores—. Mi opinión es que la casa de Alfa McAlester fue
volada.
—Eso es horrible. —La preocupación ató la voz de Nazar, pero la
mirada calculadora en sus ojos cuando miró más allá de Yuri le dijo que el
beta sabía mucho más de lo que estaba diciendo—. ¿Cómo sucedió esto? 215

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

allí, —— Noalosus
dijo sé.compañeros,
—Yuri se volvió
y no para mirar a sus compañeros
específicamente a ninguno de—ellos
. Fuiste
—.
¿Cómo sucedió esto?
—¿Conner estaba allí? —gritó Nazar—. ¿Él los traicionó?
Y la razón por la que Yuri había comenzado esta pequeña farsa de
repente quedó clara para él. Se había preguntado qué había hecho él para
fingir ser un idiota, porque eso era extremo incluso para él. Acababa de
tener un impresión instintiva.
Yuri sonrió cuando se dio la vuelta para hacer frente a Nazar. —¿Yo
dije eso?
—Bueno, no, claro que no, pero si él estaba allí…
—Nunca dije específicamente que Conner estuviera allí.
—¡Por supuesto que estaba allí! —gritó Nazar—. Vive en ese
estúpido rancho.
—Eso no quiere decir que estuviera allí.
—Pero él mató…
¡Bingo!
—¿Él mató a quién, Nazar?

—Bueno,
cazadores. —Nazarnos estaba
enteramos de marcha
dando que Conner
atráshabía matado
lo más rápidoa uno
que de los
podía.
Yuri podía verlo. El hombre se había cequivocado y lo sabía.
—Conner, —dijo Yuri sin volverse a mirar a su compañero: —¿Has
matado a uno de los cazadores?
—Le disparé a uno en el baño.
216
—Mira, ahí. —Nazar hizo un gesto con la mano hacia Conner—.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Mató a uno
ellos todo de los cazadores. Probablemente estaba en connivencia con
el tiempo.
Yuri inclinó la cabeza hacia un lado, un ceño un poco curioso
cruzaba su frente. —Si estaba aliado con los cazadores, entonces ¿por qué
mató a alguno de ellos?
—Bueno, es obvio, —dijo Nazar.
—No para mí.
—Estaba traicionándoles al igual que ha traicionado a todos.
Traicionó al Alfa McGregor en la reunión del Consejo del Lobo. Todo el
mundo lo sabe. —Varias cabezas de la multitud asintieron, diciendo a Yuri
que lo que realmente sucedió nunca había sido transmitido a los miembros
de la manada—. Traicionó a su nueva manada al decirles dónde estaban
Brom y los cachorros. Y traicionó a los cazadores por tratar de matarles.
Los de ojos Nazar se estrecharon como si pensara que de repente
tuviera una pierna en marcha. —Va a traicionarte, también, Alfa Miroslav,
si lo dejas.
Hubo varios gruñidos de la multitud reunida detrás de Nazar, que no
eran buenos. Si el sentimiento público iba a favor de ese imbécil, Conner
podría estar en problemas.
—Explícate a qué te refieres, —dijo Yuri—. ¿Cómo traicionó al Alfa
McGregor en la reunión del Consejo del Lobo? Yo estaba en la isla ya que
era el beta de la manada de mi padre, pero me perdí esa reunión en
particular. ¿Qué ocurrió exactamente y cómo estaba Conner involucrado?
—El Alfa McGregor estaba tratando de ayudar a su nuera para
mantener la custodia de sus cachorros. Brom comenzó a hacer salvajes
acusaciones. El Alfa McGregor me dijo que él se negó a hablar en contra
de las cosas que Brom dijo porque no quería traer la vergüenza al buen
nombre de su nuera. Ella nunca podría haber vivido a través de la 217

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vergüenza.
—Eso explica lo que pasó con Brom, pero no lo que sucedió con mi
pareja.
—Obviamente, vio una oportunidad para tratar de tomar el control de
esta manada. Al Alfa McGregor se le rompió el corazón cuando le
apartaron sus nietos de él. Conner utilizó ese momento de debilidad para
desafiar al Alfa McGregor de tal manera que el Alfa McGregor nunca
podría haber aceptado. Habría ennegrecido su nombre y el de esta manada.
—¿Es eso lo que pasó, cariño? —preguntó Yuri silenciosamente,
sabiendo la completa historia por su su hermano y Jake —. ¿Intentaste
tomar ventaja de un desamparado, desconsolado anciano?
—Sí. —Conner rió a través de su vínculo —. Eso es lo que pasó.

—Eres un niño malo. Voy a tener que castigarte después.

La silenciosa y cálida risa de Conner, fue toda la respuesta que el


hombre dio.
—Así que, Conner desafió al hombre, —dijo Yuri a Nazar—. Eso no
significa que Conner lo traicionara. No tengo ninguna duda de que
cualquier número de personas en esta manada me desafiaría a mí si se les
diera la oportunidad. Sucede, especialmente en nuestro mundo.
—Los desafíos pueden ser parte de nuestro mundo, pero traicionar a
nuestras manadas no, y eso es exactamente lo que Conner hizo. Puedo
demostrarlo.
—¿Oh? —Deslizó una ceja negra sobre el ojo de Yuri —. ¿Y cómo
puedes probar ahora lo que estás diciendo? Si estás soltando mierda para
conseguir enfadarme con mi compañero, no va a funcionar. Si tiene
pruebas tangibles, quiero verlas.
218
—Ya he enviado la información al consejo, —dijo Nazar como si

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

estuviera
que estabaorgulloso
filtrando deinformación
sí mismo. Al menos —
al consejo eso. Ellos
le diolouna ideatodo,
tienen a Yuri
susde
e-
mails a los cazadores detallando lugares de carga y listas de miembros,
información de su cuenta bancaria, todo ello.
Las cejas de Yuri se reunieron en un ceño enojado. —¿Qué
información de cuenta bancaria?
—La cuenta bancaria de Conner recibió varios depósitos grandes. Yo
la revisé.
cada Losvez.
maldita depósitos coincidían con un cazador atacando a la manada

—Este hombre está realmente convenciéndose él mismo para una


celda en la cárcel, ¿no? —Siro preguntó, usando su enlace —. Me gustaría
tener una grabadora para que pudiera mostrar esto a mi padre.
—Oh, no tengo duda alguna de que tu padre tiene oídos aquí en
alguna parte. No está dispuesto a permitir que nosotros vengamos aquí y
hagamos frente a estas personas por nuestra propia cuenta, y los guardias
de Vadim no cuentan.
—Sólo ¿cómo descubriste esta información, Nazar, y cómo puedo
tener en mis manos una copia? —Sólo para impresionar, Yuri lanzó una
fulminante mirada por encima del hombro a Conner—. Me gustaría ver qué
tipo de cosas mi compañero estaba haciendo antes de conocernos.
—Las cosas que fueron capaces de encontrar sólo se remontan a un
par de meses, Alfa Miroslav, así que no puedo decir cuánto tiempo ha
estado Conner en contacto con los cazadores, pero sospecho que ha sido
por un tiempo muy largo. Eso explicaría muchos de los ataques en las
manadas de la región.
Y ese fue el primer gran error de Nazar. Yuri se preguntaba si nadie
era lo suficientemente inteligente como para hacer los cálculos y llegar a la
misma conclusión que Yuri había llegado. De acuerdo con lo que Robby 219
había podido encontrar, los depósitos bancarios y los correos electrónicos

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

habían comenzado después que Conner abandonara la manada.


—Todavía estaría interesado en cualquier cosa que me pudieras
mostrar. Me niego a estar rodeado de personas que podrían apuñalarme por
la espalda. —Yuri fulminó a Conner de nuevo —. Especialmente cuando
estoy dormido en mi propia cama.
—Está todo en la computadora de Conner.
—¿Su computadora?
—Sí, y me temo que el consejo la tiene. Mandaron a alguien aquí
para conseguirla hace un par de semanas después que informé de lo que
había encontrado.
—¿Cómo lo encontraste?
—Las cosas de Conner estaban siendo empacadas, para que
pudiéramos enviárselas. Su apartamento era necesario para otros miembros
de la manada. Cuando encontré su ordenador portátil, quería comprobar y
asegurarme de que no tenía cualquier cosa de la manada en él, sólo para
estar seguro, se entiende. Si se corriera la voz a otros acerca de nuestro
funcionamiento interno de la manada, podría poner a los miembros de
nuestra manada en peligro.
—No, por supuesto, totalmente entiendo eso. —Tonterías—. Lo que
pasa en la manada tiene que quedarse en la manada.

Nazar juntó las manos y sonrió como si acabara de conocer a un


alma gemela. —Exactamente.
—Mi padre es de la misma manera, y yo aprendí de él.
—He oído hablar de tu padre. Tengo entendido que tiene una de las
más fuertes manadas en el Consejo.
—La tiene, —Yuri dijo con orgullo—. No es un hombre con el que 220

te puedas meter. A pesar de ser su hijo y beta no me atrevería a enfrentarme

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

con él.
—Suena mucho como el Alfa McGregor.
—No dudé en encargarme del Alfa McGregor. —Yuri ni siquiera
había pensado en ello. El hombre había estado tratando de matar a sus
compañeros.
—Sí, bueno, tal vez era hora de un nuevo alfa de todos modos. —La
sonrisa de Nazar era fría y calculadora e hizo que Yuri deseara un baño —.
A veces sangre nueva es exactamente lo que una manada necesita para
prosperar.
Yuri dio a Nazar una sonrisa con los labios apretados. Sólo si se trata
de la sangre de Nazar. —¿Por qué no me muestras lo que tienes sobre mi
pareja?

221

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner sentía como si estuviera caminando por el borde de un


acantilado. Después que Yuri le había golpeado en la boca, el idiota plan
que su compañero tenía en mente comenzó a aclararse. A Conner no le
gustaba, pero podría respetarlo.
Era un buen plan.
Estúpido, pero bueno.
Sin embargo, si el plan fracasara, o Nazar lo calara, tendrían que
correr, y Conner no estaba seguro de poder correr tan rápido. La mitad de
la manada estaba de pie detrás de Nazar, y más de uno de ellos disparaba
miradas diabólicas a Conner.
Se le había partido el corazón cuando tuvo que dejar su manada.
Sintió como si estuviera dejando a su familia, a la gente que le importaba.
Ahora estaba empezando a preguntarse si ese cariño había sido solo de un
lado. Si las miradas que estaba recibiendo eran una indicación, la manada
prefería verlo colgado por las pelotas que darle la hora del día.
Incluso Whitney estaba mirándole. El hombre se había levantado del
suelo y ahora se levantó en la parte inferior de la gran escalera
serpenteante. Sus ojos parpadearon de Yuri y Nazar a Conner y Siro y
luego de vuelta otra vez. Parecía estar mirando cada pequeña maldita cosa
que estaba pasando.
222
Conner no había mentido acerca de que Whitney era su amante. No

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

habían tenido
que nadie relaciones
realmente íntimas
sabía. en mucho
Conner tiempo,
sólo dejó mucho
que todo más tiempo
el mundo del
pensara
que estaban juntos porque la vida para Whitney no había sido demasiado
buena. Como amante de un ejecutor, sin embargo, no mucha gente se metía
con Whitney por temor a Conner.
A Conner le hubiera gustado tener un momento para escaparse y
preguntar a Whitney qué demonios estaba pasando. Si bien no había estado
cerca desde hace tiempo, y ciertamente no se habían visto en unos pocos
meses, Conner nunca pensó que Whitney le traicionaría.
No así.
—¡Conner!
Conner saltó, con los ojos volviéndose hacia adelante en la severa
reprimenda de Yuri. Sabía que se suponía que estaba actuando en un papel,
pero no le gustaba particularmente ser regañado por su compañero. Sólo el
estricto control de la mano de Siro en su brazo le impidió entregar a Yuri la
cabeza.
—¿Sí, Yuri? —preguntó tan mansamente como su ira permitiera.
—Nazar y yo vamos a ir al estudio, donde podamos hablar. Siro y
mis guardias te acompañarán a una habitación para descansar. Te quedarás
allí. ¿Entendido?
Conner asintió.
—¿Necesita descansar, Alfa? —dijo Nazar cuando se volvió para
estudiar a Conner—. ¿Fue herido durante el ataque al rancho del Alfa
McAlester?
—No, Conner fue herido cuando una banda de delincuentes shifters
atacó la isla de Vourdala. No se ha recuperado totalmente. —Yuri sacudió
la cabeza como si estuviera disgustado con Conner —. El consejo puede 223
que le quiera con la soga al cuello, pero me niego a que muera bajo mi

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vigilancia. Si su
los cargos en el consejo
contra. lo quiere, van a encontrarle con vida para enfrentar
Conner parpadeó cuando la sorpresa rodó a través de él. Podría tener
uno o dos músculos rasgados todavía, pero aparte de eso, estaba bien, y
Yuri lo sabía. Conner y Siro ambos se habían recuperado totalmente de sus
lesiones.
Entonces, ¿cuál era su juego?
—Yo puedo escoltarle a tus aposentos personales si quisieras, —dijo
Nazar.
—No, —dijo Yuri casi al instante—. Hasta que sepa si puedo confiar
en Conner o no, me niego a dormir en la misma habitación que él. No
quiero despertar con un cuchillo en mi espalda. Estoy seguro de que se le
puede organizar otro alojamiento para él.
—Hay algunas habitaciones para invitados arriba donde puede
esperar en caso de que sea tu preferencia, Alfa Miroslav.
—Ve que se haga, —dijo Yuri mientras se alejaba.
Conner trató de averiguar cuál era el plan de Yuri hasta que vio a
Nazar moverse hacia Whitney. Y entonces se preguntó cómo demonios
Yuri había sabido que Nazar asignaría a Whitney para escoltarlo a su
habitación.

—Whitney, muestran a las parejas del alfa una de las habitaciones


arriba.
—¡Él no habla con Conner! —espetó Yuri.
Whitney visiblemente se estremeció. —No, señor.
—¡Entonces, vamos! —Yuri agitó la mano en despedida. Whitney se
apresuró a subir las escaleras. Conner echó un rápido vistazo a Yuri cuando 224

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

empezó a seguir.
—Ten cuidado, Yuri. No te olvides que Nazar es un hombre muy
inteligente. Si empieza a vislumbrar nuestra pequeña farsa, llámanos y
saldremos corriendo.
—Tendré cuidado, cariño, —dijo Yuri—. Habla con Whitney y
averigua lo que sabe.
—Asumiendo que quiera hablar conmigo después que le asustaste a
morir.
—Tan sólo trata, Conner. Tenemos que saber lo más que podamos.

—Lo haré.

De mala gana, Conner volvió y siguió a Whitney por las escaleras.


No se sorprendió en lo más mínimo cuando Whitney les condujo al
segundo piso y al dormitorio azul, como se le llamaba. A Whitney le
encantaba el azul.
Al acercarse a la puerta, Conner se desaceleró. Whitney mantenía la
puerta abierta, pero mantuvo la mirada baja, como si tuviera casi miedo de
mirar arriba y ver a Conner. O tal vez estaba asqueado, como todos los
demás en la manada parecían estar.
Cuando Conner llegó a la puerta, dio un paso hacia ella como si fuera
a caminar en el interior, pero justo cuando pasó Whitney, Conner le agarró
y empujó al hombre en la habitación delante de él. Oyó a Siro decir algo a
los guardias, y luego la puerta se cerró detrás de ellos.
—Habla, Whitney, —exigió Conner mientras cruzaba sus brazos
sobre su pecho y miró al hombre que había sido su amante una vez hace
tiempo—. Y más vale que tengas una excusa muy buena para tu
comportamiento.
225
—Se supone que no hable contigo, —le susurró Whitney, todavía

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

negándose
habitación, acomo
mirar asilos ojos amiedo
tuviera Conner.deIncluso se trasladó
ser atrapado al otro lado
demasiado cercade de
la
Conner.
—Entonces háblame, —dijo Siro mientras daba un paso adelante
para estar al lado de Conner—. Mi nombre es Siro Castilian.
—Sé quién eres. —Los ojos se color marrón oscuro de cobre se
asomaban arriba a Siro por debajo de una caída de flequillo oscuro
castaño—. He visto tu foto.
—¿Oh? —preguntó Siro—. ¿Y dónde has visto mi foto?
—Nazar la tiene en un archivo en su escritorio.
—¿Un archivo? —Siro llegó a ponerse tan quieto como la muerte —.
¿Un archivo sobre mí específicamente?
—No. —Whitney se encogió de hombros—. Creo que debe ser un
archivo de uno de tus amigos o algo así, porque su nombre era Foster.
Conner sintió su ira desinflarse como un globo pinchado. —¿Nazar
tiene un archivo de un hombre llamado Foster? —Él miró a Siro por el
rabillo de su ojo. No estaba en lo más mínimo sorprendido de encontrar el
rostro de su compañero desprovisto de todo color—. ¿Había algún otro
archivo?
Whitney apretó los labios.
Conner rodó los ojos. —¿Siro?
—Whitney, ¿Nazar tiene otros archivos en su escritorio?
—Había unos pocos más, pero yo sólo vi los nombres de algunos
arriba antes de que Nazar volviera a entrar en la habitación. Si me hubiera
sorprendido mirando, me habría matado.
226
—¿Cuáles eran los nombres que viste, Whitney?

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Whitney
¿Por qué quieresladeó la cabeza a un lado, mirando con curiosidad a Siro. —
saber?
—Es muy importante, Whitney. Por favor, sólo responde a la
pregunta, y luego voy a responder a la tuya.
—Tenía un archivo sobre ese tipo llamado Foster, uno de alguien
llamado Jones, un tal Albright, y alguien llamado Vena o algo así.
—¿Venahav? —Jadeó Siro—. ¿Boris Venahav?
—Sí, creo que ese era su nombre.
—¡No me jodas! —Siro susurró mientras se tambaleaba hacia el lado
de la cama y se sentó. Parecía desconcertado, y eso era algo que Conner
nunca había visto en su compañero, ni siquiera cuando le disparó al
hombre.
—¿Siro?
—Durante mi trabajo de encubierto oí un rumor, una que nunca pude
probar porque no hay imágenes conocidas de este tipo así que nadie sabe
exactamente quién es, pero Boris Venahav se supone que es el líder de los
cazadores, Conner. Todos ellos.
Conner de repente se sintió tan enfermo como Siro. —¿Por qué…?
—¿Nunca has visto una foto de este tipo? —preguntó Whitney,
interrumpiendo a Conner—. Nazar tiene una en su expediente. Yo la vi.
—¿Por qué Nazar tendría una imagen del líder de los cazadores en
un archivo en su mesa? —preguntó Conner, terminando su pregunta.
—Es probable que esté tratando de obtener información sobre él para
que pueda mantener a nuestra manada segura.
—Whitney, no entiendes, —dijo Siro—. Ni siquiera los cazadores
227
saben el aspecto de Boris Venahav. Nadie lo hace. El hombre es un

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

completo
la gente demisterio. Da alascargo.
alto nivel órdenes pornunca
Pero teléfono, y sólo
ha sido habla
visto poralguna vez con
cualquiera de
ellos.
—¿Cómo puedes estar seguro? —preguntó Whitney.
—He trabajado de encubierto para el consejo desde hace varios años,
Whitney. Casi parece como si hubiera pasado más tiempo en el
campamento de un cazador que en mi propio apartamento. —Siro parecía
muy sombrío
momento, mientras
y miró haciadejaba caer su
sus manos —. cabeza,
Conocí apretó
a un los labiosdepor
montón un
gente
mientras estaba de encubierto, incluso algunos de los mejores idiotas. Y si
hay algo que parecía cruzar la mente de todos era que el líder de los
cazadores nunca fue visto por nadie. Diablos, incluso mi propio
comandante en la unidad del cazador en la que estaba infiltrado se quejaba
de ello.
La cabeza de Siro se alzó y miró a ambos a Whitney y a Conner. —
Entonces, eso nos hace preguntar ¿por qué Nazar tiene una foto de Boris
Venahav y cómo la obtuvo?
Whitney levantó la mano en el aire. —¿Puedo hacerte una pregunta?
—Sí, por supuesto, Whitney, —dijo Siro.
—¿Por qué estás tan preocupado por cómo Nazar obtuvo la imagen?
Creo que sería una buena cosa que Nazar tenga una imagen de este hombre.
Si podemos identificarlo, entonces sería más fácil atraparle.
Dios ama a Whitney, pero no era el más brillante lápiz en la caja. —
Whitney, —dijo Conner— simplemente no tiene sentido que Nazar pueda
tener una foto de Boris Venahav cuando ninguno de los cazadores aún lo ha
visto.
—Nazar está tratando de proteger nuestra manada, —insistió
Whitney, pero incluso él no parecía muy convencido por sus palabras. 228

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—¿Cómo
plan para estabadetratando
acusarme traicióndeaproteger a laque
todos los manada
me cuando
importaninventó su
con los
cazadores?
Los ojos de Whitney se estrecharon. —Oí lo que hiciste.
—¿Y qué oíste, Whitney? —preguntó Conner—. ¿Oíste cómo me he
estado comunicando con los cazadores, enviándoles información sobre
otras manadas? ¿O sobre todo ese dinero que he estado haciendo por
traicionar a nuestra especie? ¿Te has enterado de eso, también?
—Sí, —Whitney escupió—. Me enteré de todo esto.
—Eso es bastante asombroso, Whitney, —dijo Siro—.
Especialmente teniendo en cuenta que todo lo que Nazar encontró en el
equipo de Conner ocurrió después de que dejara la manada, incluyendo esta
maravillosa cuenta bancaria que Conner supuestamente tiene, y que fue
abierta después de su marcha y que no tiene acceso a ella.
La boca de Whitney se abrió.
—Creo que es bastante asombroso que mi compañero pueda tener
acceso a una computadora aquí en este territorio cuando está todavía en
territorio de Wolfrik.
—¿No habéis oído hablar del acceso remoto? —preguntó Whitney.
Conner tenía idea porqué nunca había oído hablar de él.
—El tipo de alta tecnología del consejo nunca encontró pruebas de
acceso de control remoto, —dijo Siro—. ¿Cómo se explica eso?
—Podría haber pagado a alguien para hacerlo.
—¿Quién, Whitney? —preguntó Siro—. ¿Tú?
—Nunca traicionaría a mi manada, —exclamó Whitney.
229

—Hemos sido amantes, Whitney, —dijo Conner—. Todo el mundo

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

lo sabe. Yo
necesitara estaba más
a alguien para cerca depara
trabajar ti que
mí de nadie
en el más tú
interior, enserías
la manada. Si
la opción
más probable.
—Pero yo no… —La cara de Whitney se tornó pálida —. Yo no
hice… nunca haría…
Conner arqueó una ceja. —Ni yo lo haría, Whitney, pero ¿ves lo que
puede suceder cuando alguien comienza a hacer acusaciones infundadas?
La gente oye
el regazo, vanloa que quiere oír, y si esa suposición se coloca lo suficiente en
creerlo.
Los hombros de Whitney cayeron, y toda la lucha parecía drenarle.
—¿No traicionaste a la manada?
—No, Whitney, —respondió Conner—. Yo no traicioné a la manada.
—Entonces, ¿por qué te fuiste?

Conner suspiró. Podía oír la pregunta subyacente en las palabras de


Whitney, la cuestión que tenía miedo de preguntar. —No tuve elección,
Whitney. McGregor intentó matar a Brom y a sus compañeros. Ordenó una
búsqueda de ellos. Casi mató a Jaryn.
—¿Jaryn? —Susurró Whitney—. Pero… pero… Jaryn era un buen
tipo. No le haría daño a nadie. ¿Por qué trataría de matarlo el Alfa
McGregor?

—Brom reclamó a sus compañeros y decidió dejar la manada. Llevó


a sus cachorros con él. El Alfa McGregor no podía permitir eso. —Conner
estaba empezando a preguntarse lo que se le había informado a la manada
cuando Brom y Jaryn la dejaron—. El alfa había estado durmiendo con
Marla durante varios meses. Brom lo sabía, pero no le importaba. Marla no
era su pareja.
—Pero tuvieron cachorros juntos. 230

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—No tienes
ellos, Whitney. que estar
Además, Marlaacoplado a una
no ha sido alguien para crear
significativa un niño
madre. Una con
vez
que descubrió que Brom se retiraba como beta y que el alfa McGregor no
iba a casarse con ella, dejó que Brom tuviera los cachorros.
—El Alfa McGregor dijo que lo traicionó en la reunión del consejo y
que se negó a estropear el nombre McGregor diciéndole al consejo que
había un traidor en su manada. —Whitney tragó fuerte cuando bajó la vista
para mirar sus dedos—. Yo pensé que era por eso que me dejaste atrás,
porque nos traicionaste a todos.
Conner suspiró. —No, cariño, me fui porque me vi obligado a
desafiar al alfa después de haber mentido al consejo sobre ordenar una
cacería a Brom y sus compañeros. Brom sentía que sería demasiado
peligroso que yo volviera. No creía que fuera a vivir un día si lo hiciera,
porque tenía un desafío permanente contra el Alfa McGregor.
Whitney era un alma gentil. Era muy parecido a Jaryn excepto que
no era un tri-omega. Sólo era muy dulce. Era uno de las razones por las que
Conner había permitido a todos creer que eran amantes mucho después de
que no lo eran. Whitney necesitaba protección.
—Nunca quise dejarte aquí, Whitney. No tuve otra opción.
Los nudillos de Whitney se volvieron blancos mientras retorcía los
dedos juntos. Las lágrimas comenzaron a rodar por su rostro. —Las cosas
se pusieron muy malas después que te fuiste, Conner. El Alfa McGregor se
desvió hasta el extremo. Llegó a estar tan obsesionado con conseguir a sus
nietos de vuelta, que incluso Marla abandonó.
—¿Estaba obsesionado con lograr a los niños de Brom? —preguntó
Siro. Whitney asintió.
—Es prácticamente de todo lo que hablaba.
—Maldita sea. —Conner se frotó la parte de atrás de su cuello, 231

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sintiendo sus músculos cerrarse y apretarse—. Esto explica muchas cosas.


—¿Cómo es eso? —preguntó Siro.
—Piensa en ello, —dijo Conner mientras miraba a Siro—. McGregor
quería a sus cachorros de vuelta. ¿Y si de alguna manera contactó con los
cazadores y organizó para ellos atacar a la manada de Wolfrik con el fin de
conseguirlo?
—Pero los cazadores estaban tratando de matar a todos.
Conner resopló. —Cariño, en los cazadores no se puede confiar. Si
piensan que puede acabar con nosotros, lo harán, y por cualquier medio
posible. Si McGregor les estaba dando información, se lo habrían tragado y
utilizado esa información para tomarla tanto como a muchos de nosotros
les fuera posible.
—Así que, básicamente, el Alfa McGregor traicionó a la manada de
Jake con los cazadores para conseguir a sus cachorros de vuelta, pero ¿los
cazadores le traicionaron?
—Eso es lo que estoy pensando. No entiendo por qué me arrastró a
mi a ello. Sé que me odiaba, pero…
—Simple, —dijo Siro—. Necesitaba un chivo expiatorio en el caso
de que su pequeño plan fuera descubierto, y quería sacarte de la imagen
antes de pudieras desafiarlo. Mediante la organización de un ataque contra
la manada de Wolfrik, podía matar dos pájaros de un tiro.
—Eso tiene sentido, —Conner se estremeció— en una enferma y
perversa manera. Pero eso no explica por qué Nazar está todavía en su
diatriba de que soy el malo aquí.
Siro sonrió. —Voy a arriesgarme aquí y decir que es porque Nazar es
un idiota.
232
—Bueno, eso es cierto, —dijo Whitney—. Nazar es tan malo como

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

el Alfa McGregor, si no más. Está loco y es inteligente.


—Whitney, nos vendría muy bien tu ayuda aquí, —dijo Siro—.
Necesitamos saber todo lo que sabe Nazar. ¿Nos puedes ayudar?
—¿Me llevarás contigo cuando te vayas?
—Whitney…
—Puedo ser bueno para ti, —dijo Whitney cuando se dejó caer de
rodillas a los pies de Siro —. Pregúntale a Conner. Hay un montón de cosas
que puedo hacer.
Conner gimió, sabiendo que esta conversación estaba encabezada por
el tono de súplica en la voz de Whitney. Whitney era un hombre dulce,
terriblemente equivocado. Había sido tan maltratado en los últimos años
que pensaba que el sexo era la manera de conseguir lo que quería.
Conner había estado halagado cuando Whitney había venido a él y
habían empezado a dormir juntos, hasta que descubrió que Whitney sólo
estaba durmiendo con él para su protección. No es que el tipo fuera malo en
la cama ni nada, porque no lo era. Incluso parecía disfrutar de ello. Pero su
corazón no estaba realmente en ello.
Whitney veía al sexo como una herramienta que se utilizaba para
conseguir lo que quería, y Whitney quería ser protegido. El momento en
que Conner se dio cuenta de eso, había dejado de dormir con Whitney, pero
continuó para protegerlo de otros.
La mirada de horror en la cara de Siro era flagrante. Estaba mirando
abajo a Whitney como si hubiera perdido la cabeza. Incluso tenía las manos
levantadas en el aire como si quisiera que no se produjeran malentendidos
acerca de si estaba tocando al hombre o no.
Conner sabía que tenía que intervenir antes de que Siro dijera algo
que devastaría a Whitney. Extendió la mano y agarró el brazo de Whitney y 233
tiró de él alrededor. —Whitney, Siro, Yuri y yo estamos acoplados el uno

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

al otro.
Whitney palideció. —Bueno, puedo hacerlo con los tres.
El corazón de Conner empezó a doler por el hombre. —No, cariño,
no compartimos.
—Pero… —Whitney pasó la lengua por los labios, sus ojos marrones
cobre rodando por la habitación: —puedo hacerlo. Sabes que puedo.
Sólo…
Conner presionó el dedo sobre los labios de Whitney. —No,
Whitney.
—Pero yo no me quiero quedar aquí. —Los ojos de Whitney se
humedecieron—. Son mezquinos conmigo.
La mandíbula de Conner se tensó. Si alguna vez se enterara de quién
estaba siendo mezquino con Whitney, le destrozaría. —No tienes que
quedarte aquí, cariño. Te llevaremos con nosotros cuando nos vayamos. Y
no tienes que dormir con nosotros tampoco. Será igual que antes, excepto
que tendrás a tres personas para mantenerte a salvo.
—¿Me llevarás contigo? —los ojos de Whitney se abrieron
ampliamente cuando sus palabras susurraron en sus labios —. ¿En serio?
¿Me lo prometes?
—Te lo prometo, Whitney, y nunca he roto una promesa, ¿verdad?
—No, Conner.
Conner se puso en cuclillas delante de Whitney. Sonrió para que
Whitney viera que no estaba enojado. —Necesito que me digas todo lo que
sabes, Whitney. Y entonces quiero que te vayas a tu habitación y empaca lo
que quieras llevar contigo. No vas a regresar.
—Y no puedes decírselo a nadie, —añadió Siro—. Esto tiene que ser 234

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

un secreto entre tú, yo, Conner, y Yuri. Nadie más puede saber.
Las cejas oscuras de Whitney se arrugaron juntas sobre su pálido
rostro. —¿Por qué tiene que ser un secreto?
—Tengo miedo de que la gente sea mala contigo y podrían tratar de
detenerte que salgas con nosotros. Si no lo saben, no pueden detenerlo.
—¿El alfa tratará de hacer que me quede aquí?

Conner volvió a sonreír. —No, Whitney. Yuri querría llevarte con


nosotros.
—¿Está seguro?
—Lo estoy, cariño.
Whitney lanzó una rápida mirada a Siro y luego se inclinó hacia
Conner. —¿Es el alfa mezquino? —susurró.

—No, cariño, Yuri es casi tan dulce como tú.


—Pero te golpeó.
—No tenía la intención de hacerme daño, y me advirtió antes de que
lo hiciera. Estaba montando un espectáculo para Nazar. No queríamos que
Nazar supiera que sospechaba que él estaba mezclado con la participación
del Alfa McGregor con los cazadores.

de él. La sangre de Conner se volvió fría cuando oyó una risa baja detrás
—Bueno, es interesante saber eso.

235

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

La rendija
sólo una cabeza de Siro de
y trató se sentía
evaluarcomo que iba aSabía
su situación. explotar.
que Abrió
no eralos ojos
bueno.
Además del dolor de cabeza enorme que sentía, su cuerpo se sentía como si
una apisonadora hubiera pasado justo por encima de su parte superior.
Eso significaba que una de dos cosas había pasado. O bien había
conseguido un furioso desgarrón, o una alfombra succionadora le aturdió o
alguien le había dado una paliza. Teniendo en cuenta que su boca no sabía
como si tuviera bolas de naftalina en ella, iba con la teoría del golpe
derribándole. Tener las manos atadas a la espalda fue otra gran pista.
Siro estaba bastante seguro de que todavía estaba en la misma
habitación que había estado la última vez que recordaba cualquier cosa.
Estaba en el suelo, sin embargo, y no en la cama. Desde su posición
tumbado, Siro podía ver dos cuerpos más en el suelo.
El único justo enfrente de él era Conner, y se veía tan mal como Siro
se sentía. Su mejilla estaba hinchada y amoratada, y había sangre seca allí
en el labio. También había varios rasguños y moretones en el pecho.
Siro cuidadosamente olfateó el aire. Cuando determinó que no había
nadie más en la habitación, se movió alrededor hasta que pudo empujarse a
sí mismo en una posición sentada y luego miró a otro cuerpo.
Era Whitney.
Estaba despierto, pero estaba atado y amordazado. Tenía los ojos 236

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

llenos de lágrimas
inconsciente mientras—miraba
de Conner. Whitney,a Siro desde
¿estás el otro
bien? lado delpor
—Excepto cuerpo
una
contusión oscura en su cara, parecía relativamente ileso.
Whitney asintió.
—¿Sabes quién nos atacó? —Siro no tenía ni idea. Había sido
golpeado en la parte posterior de la cabeza con algo antes de que pudiera
volverse para ver quién había hablado con Conner. No tenía idea de lo que
había pasado después.
Whitney volvió a asentir.
—¿Fue Nazar? —Más lágrimas se filtraron fuera de los ojos de
Whitney cuando confirmó uno de los temores de Siro, pero no su peor —.
¿Has visto a Yuri?
Whitney negó con la cabeza.

—¿Sabes si Nazar lo tiene? —el corazón de Siro se disparó a la


garganta cuando el asentimiento de Whitney dio vida al peor temor de
Siro—. ¿Sabes dónde? —el aumento de las lágrimas en los ojos de
Whitney fue toda la respuesta que Siro necesitaba —. Maldita sea.
Siro miró alrededor de la habitación y trató de evaluar el peligro en
el que estaban mientras pasaba sus dedos sobre las cuerdas atando sus
muñecas juntas. Ya no estaba interesado en probar la inocencia de Conner.
Ahora, su interés principal era conseguir que todos se preocuparan sobre la
seguridad, y Whitney, también, por supuesto. El resto de la manada podrían
ir a joderse por lo que a él se refería.
Siro fue capaz de resolver lo de las cuerdas con la suficiente rapidez.
Era simple cuerda de nylon, pero también era de dos pulgadas, una cuerda
de tres cabos de nylon, lo que hizo un poco más difícil de sacar. Se
utilizaba generalmente para el remolque de cargas pesadas, sistemas de
poleas y tornos. Este tipo de cuerda tenía la resistencia de tracción de unos 237

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

40.000 kgs.
Siro pesaba sólo un poco menos que eso.
Siro se dejó caer en el suelo en la dirección opuesta que había estado
antes y rodó hacia Conner hasta que estaba de espaldas al hombre. Tocó
alrededor hasta que encontró la apertura en la bota de Conner. Llevando su
mano dentro, sintió a lo largo de la pierna de Conner hasta que encontró
exactamente lo que estaba buscando.
Siro casi gritó de emoción cuando su mano se cerró en torno a la
empuñadura del cuchillo que Conner tenía en su bota. Alguien había
despojado del chaleco a Conner, por lo que al parecer sabía de las armas
que guardaba en ese sitio. Pero habían pasado por alto el cuchillo en la bota
de Conner.
Siro hizo una mueca cuando se hizo un corte en su dedo mientras
empezaba a cortar las cuerdas que ataban sus muñecas. Las manos iban a
estar hechas un lío por el momento en que terminara. Podía ver eso ahora.
Los cuchillos no eran para lo que estaba hecho. Ese era el departamento de
Conner.
—¡Sí! —susurró en voz alta Siro cuando las cuerdas finalmente
cayeron y fue capaz de liberarse. Rápidamente se incorporó y se frotó las
rojas marcas estropeando sus muñecas. Como no quería empujar a Conner
en caso de que estuviera gravemente herido, Siro subió por encima de su
compañero y empezó a cortar sus cuerdas. Una vez que Conner estuvo
libre, Siro volvió y liberó a Whitney.
—Conner, —dijo mientras se inclinaba sobre su compañero y trató
de despertarle—. Cariño, necesito que abras los ojos. —Siro ligeramente
golpeó al ileso lado de la cara de Conner al no obtener una respuesta —.
¿Cariño?
—Después que le dejaron inconsciente, le apalearon a base de bien. 238

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Siro miró por encima del hombro—. ¿Ellos?


—Nazar y un par de sus guardias personales.
Maldita sea. —¿Qué pasó con mis guardias?
—No lo sé. Nunca los vi.
Vadim iba a colgarlo de los huevos si algo les pasara a Neil y a
Frances. —Dime exactamente lo que pasó, Whitney, —Siro ordenó al
comenzar a comprobar el cuerpo tumbado de Conner por lesiones. Tal vez
Conner estaba herido peor de lo que pensaba originalmente.
—Nazar entró justo cuando Conner estaba explicando acerca del
pequeño espectáculo que pusisteis en marcha por él. Estaba realmente
enojado. Te golpeó en la cabeza con ese estúpido bastón que siempre lleva
con él. Conner trató de saltarle, pero dos de los guardias de Nazar se
apresuraron y le retuvieron.

—¿Y después de eso? —preguntó Siro cuando Whitney dejó de


hablar, a pesar de que no estaba seguro de querer saber.
—Comenzaron a preguntar a Conner todo tipo de preguntas acerca
de ti y de Yuri, el Consejo del lobo, los cazadores, y la seguridad en la isla
de Vourdala. Cada vez que Conner se negaba a responder lo golpeaban.
—Tú estúpido, terco del culo hijo de puta, —murmuró Siro.
—No soy un hijo de puta, —murmuró Conner—. Mis padres se
casaron.
Siro se echó a reír cuando el puro alivio trajo lágrimas a sus ojos. —
Sigues siendo un estúpido, terco del culo hijo de puta.
Siro rodó suavemente a Conner sobre su espalda. De cerca, los
moretones en el rostro de Conner se veían aún peor, y Siro no había
pensado que fuera posible. Tocó suavemente la inflamación en el pómulo 239

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

de Conner.
—Mira lo que le hicieron a su hermoso rostro.
—Voy a sanar. —Conner gimió cuando trató de incorporarse,
agarrándose a sus costillas—. Mierda, eso duele.
Siro se acercó y ayudó a Conner a sentarse el resto del camino.
Realmente no le gustaba lo pálido que estaba Conner. Parecía un fantasma.
—¿Tienes alguna lesión grave?
—Solamente a mi orgullo, —resopló Conner.
Siro sonrió. —Ya me has dicho eso antes.
—Sí, pero esta vez cuando llegue a mis manos un arma no estaré
apuntándote.
Conner echó un vistazo alrededor de la habitación. Sus ojos
brevemente se establecieron en Whitney, volviéndose cada vez más
oscuros y más furiosos cuando vio la herida en la cara del hombre. Luego
volvieron para buscar en la habitación. Cuando se volvió a él, Siro podía
ver el miedo creciendo en ellos y sabía lo que Conner iba a hacer antes de
que abriera su boca.
—No sé dónde está, cariño, —dijo Siro antes de que Conner pudiera
hablar—. Éramos los únicos en la habitación cuando me desperté. Whitney
dijo que nunca vio a Yuri.
—¿Le has llamado?
Los labios de Siro se apretaron. —No he tenido la oportunidad
todavía. Estaba demasiado ocupado tratando de desatarnos y despertar tu
culo perezoso.
—Y se te olvidó que podías comunicarse en silencio, ¿no?
240
Siro dejó caer la cabeza, sin querer que el repentino rubor cubriera

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sus mejillas para ser tan descarado. —Se me olvidó.


Conner resopló. —Entonces, ¿no te parece que sería mejor?
Siro asintió.
—Voy a comprobar a Whitney mientras contactas con Yuri.
Siro vio cuando Conner hizo una mueca mientras se deslizaba por el
suelo hacia Whitney y comenzó a hablarle en un tono bajo. Deseó que
Conner dejara de tratar de salvar al mundo y darse cuenta de que no era
invencible, pero dudaba que alguna vez fuera a pasar. Era parte de lo que
Conner era, una parte que Siro quería y admiraba, incluso cuando eso le
cabreaba.
—Yuri,¿puedes oírme? —susurró Siro a través del enlace que tenía
con Yuri y Conner. Rezó con todo lo que tenía para que Yuri estuviera
bien.

—¿Siro?
—Oh, Dios mío. —Siro cerró los ojos y exhaló un profundo suspiro
de alivio—. ¿Estás bien, cariño?
—Sí, estoy bien. ¿Por qué?

—¿Estás solo?

—No, estoy en el estudio hablando con Nazar.

El corazón de Siro le dio un vuelco justo de nuevo en su garganta. —


Estás en peligro,Yuri. Nazar sabe sobre nuestra pequeña farsa. Me golpeo
y dio una paliza a Conner antes de atarnos a ambos.
—Bueno, eso explica dónde se fue antes. Me dijo que necesitaba dar
órdenes a sus guardias para la noche y que estaba organizando la cena. Se
había ido sobre una media hora. Cuando regresó, empezó a hacerme todo
241
tipo de preguntas que no preguntó antes.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

ira delYuri se quedó


hombre en silencio
que venía pordeunsumomento,
a través pero Siro
vínculo fuerte podía—sentir
y clara. la
¿Estáis
Conner y tú bien?
—Estamos un poco golpeados, y creo que Conner podría tener
algunas costillas magulladas, pero estamos vivos.
—Está bien. —La respuesta de Yuri fue bastante simple, pero Siro
podría decir que Yuri se aferraba a su rabia por un hilo. No culpaba al tipo.
Sus compañeros
destrozar a alguienhabían sido Yuri.
tanto como objeto de amenazas y daño. Siro quería

—Tienes que salir de ahí, cariño.

—No es muy fácil hacerlo en este momento.

—Sólo trata. Conner y yo vamos a ir a buscar a los guardias de


Vadim y a continuación, trataremos de dirigirnos hacia ti. No reveles que
sabes algo. —Siro se detuvo cuando tuvo otro pensamiento, uno que traía
alrededor golpeándole la cabeza—. Y aléjate de ese maldito bastón que
Nazar tiene. Le gusta golpear a la gente en la cabeza con él.
—¿Su bastón?

Siro se detuvo. Había algo en el tono de Yuri que no sonaba del todo
bien. —Yuri, ¿qué estás pensando?
—Mi padre tiene un bastón que se parece mucho al de Nazar. Fue un

presente mío, de Vadim, y Niko cuando éramos niños. Es hueco, y nosotros


cuatro somos los únicos que sabemos eso. Solíamos pasar notas a nuestro
padre poniéndolas en su bastón.
El aliento de Siro tartamudeaba en su garganta. —Y estás
pensando…

—Me pregunto si el bastón de Nazar es hueco también, —dijo


242
Yuri—. Y si lo es, ¿qué tiene dentro de él?

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Tenemos que conseguir ese bastón, Yuri.


—Voy a trabajar en conseguir el bastón. Vosotros dos vais a buscar
a los dos guardias de Vadim y luego encontrais la manera de largarnos de
aquí.
—Voy por ti pronto, Yuri.
—Cuento con ello.

Siro se volvió para mirar a Conner y vio lágrimas en sus ojos. —Está
bien. Nazar sigue jugando el juego.
—¿Por qué? —preguntó Conner.
—Creo que está tratando de ver cuánto sabemos. Si dispone de un
archivo sobre mí, es más que probable que sepa quién es mi padre.
—O tal vez alguien en el consejo le ha estado pasando información
sobre ti, —respondió Conner—. Podría no saber acerca de tu padre en
absoluto.
Siro esperaba que Conner tuviera razón. Puede que no fuera lo más
cercano a su padre como él deseaba, pero respetaba al hombre mucho. Y
entendía por qué su padre mantenía su distancia en público. No era porque
su padre no lo quisiera, sino porque lo hacía. Simplemente no quería que
alejaran a Siro de él.
—Espero que estés bien, —dijo Siro cuando él mismo se puso de pie
y se acercó a la puerta del dormitorio—. ¿Puedes luchar?
—Bueno, no voy a ganar ningún concurso de técnica, pero creo que
puedo mantenerme yo solo.
—Puedo pelear, —dijo Whitney—. Conner me enseñó a defenderme
yo mismo. Incluso me enseñó cómo usar una pistola y un cuchillo. Prefiero
los cuchillos. 243

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vientoSiro deseaba
podría poder
soplarle. creerquiero
—Sólo a Whitney, perosi parecía
que pelees quedefenderte,
tienes que un fuerte
Whitney. ¿Entendido?
—Realmente puede luchar, Siro. —Conner parecía un padre
orgulloso mientras miraba hacia abajo en la parte superior de la cabeza de
color castaño de Whitney—. Tomó el cuchillo de combate como si hubiera
nacido para ello. Es tan bueno como yo sino mejor.

menos— Todavía
gente sólo quiero
matemos, menos que lucheque
tenemos si tiene que nuestras
defender defenderse. Cuanto
acciones al
consejo cuando todo esto haya terminado.
—Eres mucho más optimista de lo que yo lo soy, —dijo Conner
mientras se impulsó a sus pies y luego volvió a bajar para ayudar a
Whitney a ponerse de pie—. Sólo estoy esperando salir de esta con vida.
Más o menos dejé por imposible al consejo hace siglos.

—No todos los miembros del Consejo del lobo son malos, Conner.
—No estoy seguro de que puedas convencerme de eso, Siro. Hasta
ahora, mi trato con ellos no ha sido tan bueno.
—Desafortunadamente, el poder tiende a hacer que los hombres
buenos hagan cosas malas, y el consejo no es inmune a eso. Hay algunas
manzanas podridas. Pero también hay algunas personas en el consejo que
realmente se preocupan por nosotros y tratan de hacer de nuestro mundo un
lugar mejor para vivir.
La ceja de Conner se arqueó sobre su cara. —¿Tu padre?
—Mi padre es uno de ellos. Es el único en quien confío, pero eso es
sólo porque soy paranoico y no confio en nadie. —Siro sonrió con un
destello en los ojos ofendidos de Conner —. Además de mis compañeros,
quiero decir. Si me fueras a traicionar, lo harías en mi cara.
244

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

El rostro de Conner enrojeció. —Diablos, sólo te dispararía.


—Exactamente.
Siro se volvió y apretó la oreja contra la puerta, escuchando incluso
cómo olfateaba el aire. Podía oler al shifter, pero eso no le sorprendió.
Estaban dentro del recinto del alfa. Sólo tenía sentido que el lugar oliera a
shifter.
Lo que no podía oler era a los guardias de Vadim. No sabía quienes
montaban guardia ante la puerta, pero no eran Neil o Frances. —Hay
alguien en la puerta, pero no sé quién es. No huelen como Neil y Frances.
—¿Cómo quieres hacer esto?
—¿Hay alguna otra forma de salir de esta habitación?
—Sólo a través de las ventanas, —dijo Conner.
—Uh… eso no es exactamente cierto, —dijo Whitney—. Hay un
paso oculto detrás de la chimenea.
La mandíbula de Conner cayó. —¿Es por eso que te gusta la
habitación azul tanto?
Whitney asintió. —Cuando Nazar me envía arriba a esperarle, me
escondo aquí. Si él viene a buscarme, uso el paso para escapar. Se enoja
cuando no puede encontrarme, pero es mejor que si en realidad me
encuentra.
Siro inclinó la cabeza mientras contemplaba a Whitney y procesaba
la información que había estado recogiendo sobre el hombre toda la noche.
—Whitney, ¿cuánto tiempo lleva Nazar detrás de ti?
—No lo sé. —Whitney se encogió de hombros mientras miraba hacia
abajo a sus manos. Comenzó a retorcerlas juntas otra vez, un gesto que Siro
estaba llegando a ver como algo que Whitney hacía cuando estaba 245

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

nervioso—. Un tiempo, supongo.


—¿Alguna vez te ha atrapado? —Siro se dio cuenta por la forma en
que la sangre desapareció del rostro de Whitney que el hombre entendió
exactamente lo que Siro estaba preguntando. Siro también podía ver la
respuesta en la cara blanca de Whitney.
—Un par de veces, —susurró Whitney.
—Lo voy a matar, —gruñó Conner.
—Vamos a trabajar en la búsqueda de Neil y Frances, conseguir a
Yuri, y conseguir salir todos de aquí. El consejo puede regresar y hacer
frente a toda esta mierda. Quiero a mis compañeros y mis amigos en un
lugar seguro.
—Supongo que eso significa que nos dirigimos de nuevo a la isla de
Vourdala. —Siro asintió.

—Así es.
—Pero, yo no puedo ir a la isla de Vourdala, —insistió Whitney—.
Yo no soy un tri-omega.
Los ojos de Siro se quebraron en Whitney. —¿Qué acabas de decir?
—Yo… yo no puedo ir a la isla de Vou-Vourdala, —tartamudeó
Whitney cuando sus ojos se redondearon en su cara.

—¿Qué sabes acerca de los tri-omegas en la isla de Vourdala? —


preguntó Conner.
—Sólo lo que he escuchado, —dijo Whitney rápidamente.
—¿Y qué es exactamente lo que has oído? —preguntó Siro mientras
se alejaba de la puerta. No estaba tratando de asustar a Whitney, pero
necesitaba aber lo que el hombre sabía de los tri-omegas buscando refugio
246
en la isla de Vourdala.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Fue justo
había enviado arribadespués depor
a esperar queél,Conner
así quesalió de alatravés
escapé manada. Nazarpara
del pasaje me
escapar cuando me enteré de que Nazar y el Alfa McGregor discutían en su
estudio.
—¿Qué estaban discutiendo, Whitney?
—El Alfa McGregor quería volver a la isla de Vourdala y tomar a
uno de los tri-omegas él mismo. Dijo que no era justo que un alfa tuviera
tantos
estaba ydiscutiendo
que el Alfaque
de la
nomanada de Vourdala
era el momento necesitaba
adecuado, que compartir.
necesitabaNazar
tener
un mejor plan en su lugar.
—Whitney, ¿sabes cómo el Alfa McGregor murió?
Los ojos de Whitney parpadearon arriba y abjo entre Siro y Conner.
—¿Perdió un desafío contra el Alfa Miroslav?

—Es cierto, pero estaba invadiendo la isla de Vourdala. Tenemos la


sospecha de que estaba allí para secuestrar a un tri-omega. Un bote lleno de
soldados trataron de abrir brecha varias veces en la isla, pero fuimos
capaces de contenerlos. De alguna manera, sin embargo, fueron capaces de
llegar a tierra. Yuri mató a McGregor después de que me apuñaló por la
espalda y disparó a Conner. No quería ser alfa. Sólo estaba tratando de
defender a sus compañeros.
Un pequeño destello melancólico brillaba en los ojos de Whitney. —
Me gustaría tener alguien así.
—Lo harás, cariño. —Conner dio una palmadita en el hombro a
Whitney—. Hay todo tipo de chicos muy agradables en la isla de Vourdala.
Vadim no permite que la gente mala se una a su manada, sólo buenos.
Estoy seguro de que encontrarás a alguien que sea bueno para ti.
Siro fue sorprendido por la feliz pequeña sonrisa que llegó a la cara 247
de Whitney. Conner estaba hablando con el hombre como si fuera de dos

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

años
había de edad
sido que había
su amante una perdido
sola vez.a su perrito, no a un hombre adulto que
No le gustaba, pero no estaba seguro de que fuera su lugar decir
cualquier cosa. Conner, obviamente, conocía a Whitney mejor de lo que
Siro lo hacía.
—Whitney, ¿nos puede mostrar este pasaje?
—Es aquí mismo, —dijo Whitney cuando se acercó a la chimenea y
presionó uno de los ladrillos.
Siro estaba intrigado, y también impresionado, cuando la chimenea
simplemente se abrió y pudo ver un paso estrecho de piedra detrás de él. Se
preguntó qué otras sorpresas había dentro de la enorme mansión y cómo
podría conseguirlas en su propia casa.
Esto era genial.

—Vamos. —Whitney hizo un gesto con la mano cuando comenzó a


entrar en el pasaje—. La mayor parte de él está hecho de piedra, pero aún
así no duele que estés lo más silencioso posible. Hay agujeros de escucha
por todas partes.
—¿Agujeros de escucha? —¿Qué demonios era un agujero de
escucha?
—Hay pequeños agujeros en las paredes para que puedan escuchar lo
que las personas en las habitaciones están diciendo. También hay agujeros
de observación. Están cubiertos de modo que nadie sepa que están allí, pero
las cubiertas pueden moverse para que se pueda ver en las habitaciones. —
Rió Whitney. Su rostro se sonrojó cuando miró por encima del hombro —.
No creerías algunas de las cosas que he visto.
—Oh, sí, lo haría, —dijo Conner—. Esta manada está llena de
pervertidos elegidos por el Alfa McGregor y Nazar. Cualquier persona con 248

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cualquier escrúpulo se quedaba en la manada hace mucho tiempo.


—Shh. —Whitney se llevó el dedo a los labios y luego señaló un
gracioso círculo de aspecto gris que colgaba en la pared. Cuando Siro llegó
al lado de Whitney, el hombre se acercó y empujó el círculo del camino.
Siro frunció el ceño pero se inclinó y miró. Su boca se abrió y
rápidamente empujó el círculo atrás en su lugar.
—¿Qué viste? —preguntó Conner en silencio.

—¿Sabes toda esa mierda del Alfa McGregor que estaba soltando
sobre no tener a dos hombres homosexuales en la manada?
—Sí.
—Era una estupidez.

Conner frunció el ceño y apretó más allá de Siro para empujar el


círculo arriba fuera del camino. Un momento después, lo dejó caer de
nuevo en su lugar y apoyó la espalda contra la pared de piedra. Su rostro
estaba enrojecido. —Ni siquiera sabía que esa posición fuera posible.
Siro se rió en silencio. —¿De verdad?
—Me pregunto si el Alfa McGregor sabía de los cuatro.

—Tenía que hacerlo, —respondió Siro—. No hay forma de que


cuatro chicos pudieran estar jodiendo así y no oler a sexo. El Alfa
McGregor lo habría sabido al segundo que llegara a menos de dos pies de
cualquiera de ellos.
—Wow, eso explica muchas cosas.

Siro miró a Conner, confundido. —¿Cómo qué?


—Después de que McGregor se saliera de su pequeña tangente
delante del consejo, comencé a preguntarme por qué mi relación con 249

Whitney había sido pasada por alto si odiaba tanto a los gays. Sabía que

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Whitney
hecho deyque
yo estábamos
Brom era juntos,
su hijo yy ayoélno.
no parecía
Pero conimportarle. Lo atribuí
Nazar yendo al
detrás de
Whitney de esa manera, McGregor tuvo que haber sabido acerca de él,
también.
Siro nunca consideró eso. Si McGregor sólo había estado estaba
soltando la boca, luego lo hizo sobre casi todo lo que había dicho en la
reunión del Consejo en un montón de mierda. Y eso hizo que Siro se
preguntara cuál había sido el verdadero plan de McGregor.
Por desgracia, en realidad no tenían tiempo para que Siro
reflexionara esa teoría. Necesitaban rescatar a los guardias de Vadim,
conseguir a Yuri, y luego largarse de allí. —Bueno, vamos a movernos. —
Siro alargó sus brazos a los dos hombres—. Si mantienes tu mano sobre mí,
puedo ocultar tu olor, así como el mío. Nos podría dar una ventaja extra.
Quiero llegar a Yuri antes de que Nazar averigüe que Yuri sabe lo que está
pasando.
—Entonces realmente tenemos que darnos prisa, —dijo Conner
mientras agarraba el brazo de Siro—. Yuri es pésimo en fingir.

250

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Yuri trató de actuar interesado cuando Nazar continuaba sin cesar


sobre todos las cosas horribles que su compañero había hecho. El hombre
era un loco, pero un loco inteligente. Nazar sabía que Yuri estaba jugando
un juego. Sólo que no se dio cuenta que Yuri sabía que Nazar sabía.
Pero no tardó mucho en darse cuenta.
Yuri también tenía mucha curiosidad en saber si el bastón de Nazar
era tan hueco como el de su padre lo había sido. Apostaba a que lo era.
También apostaba que era por eso que el bastón nunca dejaba el lado de
Nazar. Nadie sospecharía que Nazar mantenía información importante en
su bastón.
Bueno, nadie sino Yuri.
—Todavía no entiendo lo que esto demuestra, Nazar.
Nazar resopló como si estuviera exasperado con Yuri. —¿Quieres
una bebida, Alfa Miroslav? Me he enterado de que Alfa McGregor
mantenía
elaborado.un muy bien surtido mueble bar y tenía sólo el mejor whisky
—Prefiero scotch, pero supongo que hay que conformarse con
whisky.
Nazar sonrió mientras se acercaba a una licorera de cristal en un lado
de la mesa cerca de la puerta. —Me aseguraré de tener algo de scotch de
importación si eso es lo que prefieres. 251

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

con él.Yuri
No arqueó una cejaNazar
podía evitarlo. a pesar de que
estaba la espalda
realmente del hombre
tratando estaba
de hacerle la
pelota. —De verdad quieres quedarte como beta aquí, ¿verdad, Nazar?
—Sí, Alfa. He mantenido mi posición durante un montón de años, y
preferiría seguir manteniéndola. —Nazar tuvo otra gran sonrisa en su rostro
cuando se volvió a Yuri, con un vaso en cada una de sus manos —. Estoy
seguro de que podemos llegar a un acuerdo mutuamente beneficioso aquí.
No tengo planes para tratar de desafiar la posición de alfa. Nunca he
deseado ser el líder. Prefiero trabajar detrás de las escenas.
—Ya veo. —Yuri tomó el vaso que Nazar le tendía. Lo sostuvo en
los labios, pero no tomó un sorbo. Había algo casi demasiado ansioso en
los ojos Nazar cuando el hombre lo observaba. Yuri no confiaba en él.
Los ojos de Yuri casi se salieron de quicio de su cabeza cuando
Nazar rodeó su lado de la mesa y se apoyó contra ella. El hombre estaba
tan cerca que estaba prácticamente en el regazo de Yuri. Era todo lo que
Yuri podía hacer para no arrebatar el brazo hacia atrás cuando Nazar
comenzó a arrastrar sus dedos hacia arriba y abajo de su piel.
—Hice un montón de cosas para el Alfa McGregor. Estoy seguro de
que puedo hacer lo mismo por ti.
¡Santa mierda!
—Éramos muy cercanos, aunque yo no siempre estuve de acuerdo
con algunas de las decisiones que tomó. Yo lo apoyé, ya que era mi alfa,
pero era un hombre débil. —Nazar se inclinó más cerca, demasiado cerca
para comodidad de Yuri—. No te ves como un hombre débil, Alfa
Miroslav.
La incomodidad de Yuri escaló a niveles de pánico cuando Nazar se
quedó cerca y se movió detrás de él. Por suerte, pudo ver el reflejo del
hombre en el gran espejo que colgaba sobre la chimenea. Podía al menos 252

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

decir que el hombre no tenía la intención de apuñalarlo por la espalda.


—No, —reflexionó Nazar casi perezosamente mientras miraba a
Yuri. Sus manos cayeron sobre los hombros de Yuri y empezó a
masajearlos—. Pareces un hombre muy fuerte, un hombre poderoso.
Apuesto a que toda esa fuerza te da apetitos poderosos, ¿no es así?
¿Este tipo iba jodidamente en serio? Yuri sintió que su estómago
empezaba a apretarse y a revolverse cuanto más el beta le tocaba. Cada
caricia hizola alengua
y le pasó su pielaarrastrarse.
través de laCuando
piel deNazar se inclinó
su cuello, Yuricerca
sintiódeganas
su oreja
de
vomitar. Comenzó a luchar para escapar sólo para darse cuenta de que
Nazar le había agarrado y el hombre era mucho más fuerte de lo que
parecía.
—Es realmente una pena que estés perdiendo todo ese poder sobre
esas dos patéticas excusas de hombres, Alfa Miroslav. Yo hubiera sido una
opción mejor.
Yuri podía ver claramente que el juego había terminado. Nazar
estaba mostrando su mano. Lo único que Yuri podía hacer ahora era
alejarse del loco. Yuri comenzó a inclinarse hacia adelante para sacar a
Nazar de su espalda.
Demasiado tarde, vio una jeringa en la mano de Nazar. Antes de que
Yuri pudiera alejarse, o incluso llamar a sus compañeros, sintió un fuerte
dolor en la garganta justo debajo de la oreja, y luego una sensación de ardor
llenó su cuello y se extendió por el resto de su cuerpo.
Yuri comenzó a entrar en pánico cuando no podía mover, ni un
músculo, o incluso una pestaña. Nada se movía. Estaba paralizado. Sólo
podía mover los ojos. Y no le gustó lo que vio.
Nazar tiró la jeringa usada en el escritorio y luego de forma casual se
acercó a la puerta. Dos guardias entraron en la habitación cuando abrió la 253
puerta. Nazar hizo un gesto con la mano a Yuri. —Llevadle arriba a mi

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

habitación y conseguid que esté listo. Estaré en un minuto.


—Sí, Alfa Nazar.
¡Alfa, mi culo!
Puro terror atravesó a Yuri cuando los dos guardias simplemente lo
recogieron y lo sacaron de la oficina. Su temor aumentó cuando pasaron a
una persona tras otra y nadie hizo nada para detener lo que estaba pasando.
De hecho, parecían emocionados.
Era como si supieran lo que estaba pasando y lo quisieran.
Yuri sintió que su estómago se revolvía aún más a medida que le
llevaban arriba a un dormitorio grande. Lo dejaron caer bruscamente en la
cama y luego los dos guardias comenzaron a despojarle de las ropas de su
cuerpo.
Yuri sólo podía sentarse allí y dejar que sucediera. No importa
cuánto estuviera gritando en su cabeza, ni un sonido salió de su boca. Ni
siquiera podía alcanzar a sus compañeros. Se sentía como si algo estaba
bloqueando el vínculo entre ellos.
Lágrimas llenaron los ojos de Yuri y se derramaron por sus mejillas
cuando finalmente estuvo desnudo. Una gran almohada en forma de cuña
fue colocada en medio de la cama. Yuri fue rodado sobre su estómago y
cubierto con ella. El lado de la cara se estrelló contra el colchón y su culo
apuntaba hacia arriba justo en el aire.
Yuri podía sentir su cara encendida de vergüenza y pena, ya que los
guardias comenzaron a hacer bromas y golpeaban su culo desnudo.
—Vas a disfrutar de esto, Miroslav, —dijo uno de los guardias—.
Pero no tanto como el Alfa Nazar lo hará.
Si Yuri pudiera haberse estremecido cuando un dedo solitario bajó
254
por el pliegue de su culo, lo habría hecho. Así las cosas, no podía ni

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

siquiera gemir una protesta. Nadie debería tocarlo excepto sus compañeros.
¡Nadie!
—Ten cuidado, —advirtió uno de los guardias justo cuando Yuri
sintió un dedo comenzar a empujar en su culo —. Sabes que Nazar no lo
quiere extendido antes de que llegue a él. Le gusta mejor cuando tienen
dolor.
—Tal vez no debería haber intentado desafiar al Alfa Nazar entonces
—el primer guardia respondió—. El alfa va a hacerle pagar por lo que ha
hecho. Cuando Nazar termine con él y sus pequeños compañeros, ni
siquiera el consejo será capaz de encontrar un pedazo de ellos.
—Nazar planea mantener al tri-omega. Quería uno hace tiempo.
—Habría tenido uno si McGregor no la hubiera jodido tanto.
—Simplemente no puedo creer que el Consejo enviara uno justo ante
nuestra puerta.
—El consejo está lleno de idiotas.
—Trae la otra jeringa. Oigo al alfa que viene.
¡No! Yuri silenciosamente gritó. Sus ojos parpadearon para cerrarse
cuando sintió la aguja penetrar en los músculos de la cadera. El ardor que
sentía antes no fue nada comparado con el resplandor de fuego que se
desató sobre él esta vez. Yuri sintió que su cuerpo entero estaba en llamas.
—Eso es correcto, —dijo uno de los guardias mientras golpeó a Yuri
en el culo de nuevo—. Se siente bien, ¿no es así?
¡No!
—Sólo se pondrá mejor. —La risa del hombre era maníaca—. Este
es un suero especial creado por el propio alfa. El primero hizo imposible
255
que te movieras o hablaras. Este, sin embargo, este es especial. Va a hacer

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

que
vecessientas cada maldita
más intenso. cosa rogando
Vas a estar que el alfa
porteél,haga, sólo será
también… como
bueno, veinte
si puedes
hablar de eso.
Yuri sintió el colchón hundirse cuando el guardia se sentó. Gruñó
silenciosamente cuando su pelo fue agarrado, y su rostro fue levantado. El
guardia estaba sonriendo justo hacia él como si estuviera encantado de ver
a Yuri en esta posición humillante.

—Crees
aquí antes que que eres
tú. El tanNazar
Alfa inteligente. Sabíamos
tiene ojos quién
en todas eras yLoque
partes. llegabas
sabe todo.
Incluso tiene ojos en el campamento del cazador. Puede hacerte
desaparecer en un abrir y cerrar de ojos. Puede hacer que tu familia
desaparezca. En el momento en que haya terminado contigo, estarás
rogando para morir. Pero vas a morir sabiendo que Nazar tiene a tus
compañeros y que está haciendo exactamente lo mismo con ellos.
La cama se empujó como si alguien la hubiera golpeado, y
rápidamente el guardia miró hacia arriba. —¿Qué?
—Tenemos que irnos. El alfa ya casi está aquí.
—Está bien. —El guardia se volvió de nuevo a Yuri por un
momento—. Cuando sea mi turno, voy a comerte el culo tan duro que vas a
sangrar.
Los ojos de Yuri se llenaron de lágrimas.
—Oh, ¿no sabías nada de eso? —El guardia se echó a reír e inclinó
la cabeza de Yuri para que pudiera ver la cámara de vídeo conectada a la
cabecera—. El Alfa Nazar siempre va primero, pero luego el resto de
nosotros tenemos la oportunidad de tu culo, y el que él apruebe en primer
lugar consigue ir después del alfa la siguiente vez. —El hombre continuó
riendo cuando apartó la cabeza de Yuri lejos y salió de la cama —. El Alfa
Nazar graba todo para que podamos observar en grupo cuando estés 256
muerto. Tienes la oportunidad de estar en cámara indiscreta mientras que el

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

alfa te enseña quién es el jefe.


Jodidamente perfecto.
Su humillación iba a ser captada por la cámara todo el tiempo y
utilizada como excitación para un grupo de pervertidos. Eso era
precisamente lo que quería oír antes de que suplicara por su propia muerte.
Yuri respiraba en jadeos superficiales y rápidos. El fuego quemando
a través de su cuerpo era cada vez más intenso con cada segundo que
pasaba. Empezó a sentir el aire moverse a través de su piel desnuda como
dedos tocándolo por todos lados. Nadie lo tocaba, y sin embargo se sentía
como un millón de manos que se movían sobre su cuerpo.
Yuri se tensó cuando escuchó la puerta abrirse.
—¿Está listo para mí?
—Sí, Alfa Nazar.
—Bien, —respondió Nazar—. Ve a la habitación azul y tráeme a
Conner. Él es el siguiente.
Yuri sintió cómo una mano se cerró en torno a su garganta en las
palabras de Nazar. No podía permitir que esto sucediera a Conner. Conner
era dulce. Era amable a pesar de su conocimiento de las armas y las peleas.
Sólo quería encontrar a alguien que cuidara de él y que le importara a
cambio. No se merecía esto.
Yuri apenas podía contener sus puras emociones bajo control cuando
la puerta se cerró con un suave golpe. Esto fue todo. Estaba indefenso y
solo con un loco decidido a devastarle de la peor manera posible. No
importa lo que pasara después de esto, si Nazar le tomaba, Yuri sabía que
nunca sería el mismo. Siempre vería a Nazar, incluso cuando estuviera con
sus propios compañeros.
257
Sería destruirle.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

movía— enDeberías haber


la línea de aceptado
visión de Yurimi
—.trato, Yuri, —
El Consejo deldijo
LoboNazar
creemientras
que eres se
el
alfa aquí, pero sólo porque les dejé pensar eso. En verdad, yo soy el Alfa
aquí y ha sido así por un largo tiempo. Pero como te dije, prefiero
permanecer detrás de las escenas. Dejé que el mundo viera a McGregor
como el alfa, porque eso es lo que querían ver.
Nazar se reía y golpeó duramente el culo de Yuri. Yuri hizo una
mueca cuando el dolor resonó a través de él como una bala. El guardia
estaba en lo cierto. Todo era más intenso, lo que significaba que estaría
rogando por morir.
—McGregor era un tonto, pero era un tonto fácilmente manipulable.
Desafortunadamente, estúpidamente creía que podía llevar una incursión en
la isla de Vourdala sin mi ayuda. Eso le llevó a la muerte, como viste. Si
me hubiera escuchado, habríamos tenido incluso más tri-omegas de los que
tu hermano tiene.
Nuevas lágrimas brotaron de los ojos de Yuri cuando Nazar golpeó
la mejilla del culo. La agonía de ese pequeño golpe fue tan intensa que la
sentía a lo largo de todo su cuerpo. Yuri no estaba seguro de que viviera
para lamentar cualquier cosa que Nazar le hiciera.
—Tu compañero será el primero en mi harén de tri-omegas. Por el
momento en que mi plan se desarrolle, voy a ser imparable. Voy a tener
todos los trio-megas que quiera, y nadie será capaz de quitármelos. Ni tú ni
el Consejo o incluso los estúpidos cazadores.
¿Por qué los locos sienten la necesidad de explicar sus acciones
cuando sólo deben seguir adelante con el asesinato? se preguntó Yuri.
Prefería estar muerto que escuchar a Nazar seguir y seguir.
—Y pensar que el Consejo me envió mi primer juguetito justo a mi
puerta. —Nazar se rió de nuevo. Esta vez cogió un puñado de pelo de Yuri
y tiró de su cabeza hacia atrás hasta una casi imposible posición —. ¿De 258

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

verdad crees que no lo sabría? ¿Qué no me enteraría de tu pequeño plan?


Yuri miró. Eso era lo único que podía hacer dadas las circunstancias.
—Sabía que estabas montando un espectáculo para mí desde el
principio. No eres muy imaginativo, aunque el puñetazo en la boca de
Conner era bastante impresionante. No pensé que hubiera ese tipo de
violencia en ti. El informe de mi amigo en el consejo que me dio sobre ti
ciertamente no decía eso.
Nazar dejó caer la cabeza de Yuri atrás en el colchón antes de
caminar a la cámara de vídeo en la parte superior de la cama y
comprobarla. La inclinó hacia abajo un poco. —No queremos que nadie se
pierda nada. A mi manada también le encanta ver que reprendo a la gente.
El aliento de Yuri parecía quedar atrapado en la garganta cuando
Nazar comenzó a desabrocharse la camisa. Tal vez quería que el hombre
siguiera hablando. Escupir sus locas divagaciones evitaría que Nazar lo
tocara.
Yuri llegó a estar cada vez más incómodo cuando Nazar caminó
fuera de su vista. No le gustaba no saber dónde estaba el hombre. Podía oír
movimiento. Simplemente no podía verlo.
Yuri se estremeció y lloró en silencio cuando sintió otra aguja
introducirse en la cadera. Ésta no quemaba, por lo menos no de inmediato.
En su lugar, hizo que Yuri se sintiera un poco como si su cabeza se
rellenara con algodón.
—Guardo esta pequeña inyección para mis juguetes especiales. —La
risa de Nazar dio la vuelta por todo Yuri, irritando todos sus nervios —.
Creo que tu padre va a disfrutar de la cinta que voy a enviarle de ti rogando
que te folle. Hará cualquier cosa que yo quiera para que no lo haga público.
No hay manera en el infierno que vaya a rogarte nada, imbécil. Yuri
sólo deseaba que Nazar pudiera oír las palabras flotando a través de su 259

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cabeza. No le rogaría al hombre una mierda, ni siquiera su propia muerte.


La ira de Yuri hacia el hombre se convirtió en una furia hirviendo en
forma de calor que se movió a través de su cuerpo y de repente se dio
cuenta de lo que había hecho Nazar. La intensidad del fuego que ardía en
su cuerpo adquirió nuevos niveles, dolorosos, niveles desgarradores.
—¡Jodido
gilipollas! —Yuri parpadeó conmocionado cuando se
enteró de que sus palabras hicieron eco a través de la habitación. Podía
hablar
¡Ouch!
Hizo una mueca cuando Nazar golpeó el culo de nuevo. Al parecer,
todavía podía sentir, sin embargo.
—Ahora, ¿es esa la manera de hablar con el hombre que va a ser tu
alfa?

—Nunca vas a ser mi nada, hijo de puta, —espetó Yuri—. Te veré


muerto por esto.
—¿En serio? ¿Y cómo vas a lograr eso? —Los dientes de Yuri se
juntaron, cuando las manos de Nazar se movieron sobre su culo y hasta
arriba a su espalda para empuñar su pelo. Gruñó cuando su cabeza fue
retirada hacia atrás.
—Estás totalmente a mi merced, Yuri. No hay nada que tú o tus
compañeros puedan hacer para detenerme.
Yuri respiró hondo. Dado que no podía contactar con sus
compañeros a través de su vínculo, no podía estar seguro de que no
hubieran sido tomados como rehenes de nuevo.
—Oh, sí, lo sé todo sobre el pequeño plan que tú y tus compañeros
cocinaron. Siempre lo he sabido. Sabía que Siro iba de encubierto. Sabía
260
que Conner se quedaba con el Alfa McAlester. Incluso sabía acerca del

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

plan que McGregor


regresaran ideó para
de Brom. ¿Quién conseguir
crees queórdenes
que dio las esas sucias
a los pequeñas
cazadores ratas
para
matar a todo el mundo?
La risa de Nazar arremetió contra Yuri. Su ira se agarró a él como
garras. Gruñó cuando su cabeza fue aplastada hacia abajo en las mantas.
Trató de contener la respiración. Cuando eso no funcionó, intentó respirar a
través de la tela de la manta debajo de él. Poco a poco, el aire comenzó a
convertirse en una necesidad y una de la que estaba profundamente carente.
—¿Entiendes ahora, Yuri? —Escupió con desprecio Nazar—. Soy
dueño de ti. Puedo hacer lo que quiera. Puedo hacerte gritar.
El grito de Yuri llenó el aire cuando la mano de Nazar alcanzó entre
las piernas y apretó sus testículos con tanta fuerza que luces brillaron ante
sus ojos. Estaba furioso por su vulnerabilidad al hombre loco y quería
destrozar la garganta del hombre.

—Puedo hacerte llorar.


Yuri sintió presionar la polla de Nazar entre las mejillas de su
trasero. Comenzó a sentirse derrotado cuando las lágrimas brotaron de sus
ojos. Nazar estaba ganando, y Yuri no sabía cómo detenerlo.
—Incluso puedo hacerte rogar.
Yuri sintió la cabeza de la polla de Nazar empezar a presionar dentro
de él. Abrió la boca para hacer lo único que se había prometido a sí mismo
que no haría, rogar. Antes de que las palabras pudieran formarse en su
boca, la puerta se abrió de golpe.
Yuri oyó el grito de Nazar, y luego líquido caliente salpicó la espalda
de Yuri. El miedo se precipitó a través de Yuri, peor que cuando se dio
cuenta de que no podía moverse. Nazar se dejó caer sobre el colchón, sus
ojos sin visión mirando directamente a Yuri.
261
Yuri captó el destello de tela blanca con el rabillo del ojo y echó un

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

vistazo
¿Marla?a la persona que está más allá del cuerpo muerto de Nazar. —
—Tenía que morir. Mató a mis cachorros, —susurró—. Puede que
no haya sido una madre muy buena, pero aún amaba a mis cachorros.
—Marla, los cachorros no están muertos.
Los ojos de Marla se movieron de Nazar a Yuri. —Sin embargo, dijo
que los cazadores mataron a todos en el Rancho Wolfrik. Le oí hablar y a
Angus. Angus había hecho un trato con los cazadores para entrar y
conseguir los cachorros. Nazar estaba tratando de convencerle de lo
contrario. Dijo que en los cazadores no se podía confiar para cumplir un
acuerdo hecho con shifters. Y luego todo el mundo estaba muerto.
—Te lo juro, Marla. Los cachorros no están muertos.
—Pero Nazar dijo a los cazadores que mataran a todo el mundo. Dijo
que iba a darles más dinero para financiar sus misiones si se aseguraban de
que todos en el rancho estuvieran muertos, especialmente los cachorros.
—Conner y Siro pudieron advertir a todo el mundo. Brom y los
cachorros están en la isla de Vourdala.
Marla parecía nerviosa. Sus manos comenzaron a temblar, y lo
mismo hizo el gran cuchillo ensangrentado en la mano. —¿Mis cachorros
están vivos?

—Sí, lo juro.
Las cejas de Marla se juntaron al mirar hacia atrás a Nazar. No creo
que me dejen verlos ahora que he matado al alfa.
—Marla, yo soy el alfa ahora. Maté a Angus McGregor en un desafio
al atacar a mis compañeros. El consejo me envió aquí para hacerme cargo
de esta manada.
262

Marla empezó a sacudir la cabeza. —No puedes salvar a la manada.

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Todos tenemos que morir.


Yuri exactamente no estaba en desacuerdo con eso. No estaba seguro
de cuántos miembros de la manada se encontraban en lo que Nazar y
McGregor estaban llevando a cabo, pero apostaría a que era una buena
cantidad. Yuri dejaría que el consejo lo averiguara. Sólo quería ir a casa
con sus parejas.
—Marla, si me ayudas a volver con mis compañeros, voy a llevarte a
ver a tus cachorros.
—¿Lo harás? —preguntó Marla—. ¿Lo prometes?
Yuri no estaba muy seguro de que Marla estuviera allí en este
momento, pero le habría prometido la luna si eso significaba que podía
volver a sus compañeros. —Te lo prometo, Marla. Incluso declararé ante el
consejo y les diré todo lo que descubrí aquí sobre lo que Nazar ha estado
haciendo.
—Está bien, pero… —Marla frunció el ceño más profundamente —.
Sé lo que Nazar te dio. Es lo que le da a toda la gente que ha traído a sus
habitaciones. No soy lo suficientemente fuerte para levantarte, y tú no serás
capaz de caminar por tu cuenta durante un par de horas.
—Mis compañeros fueron llevados a la habitación azul. Podrías
intentar encontrarles.
—Está bien.
Antes de que Yuri pudiera decir más, Marla se había ido. Justo así. Y
Yuri estaba atrapado mirando a los ojos de un hombre muerto.

263

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Para,
arrastrarse por—sugruñó Conner
espalda. Olióenelvoz baja mientras
círculo la aprensión
de observación de la empezó
pared —a.
Puedo oler a Yuri.
—Se supone que debe estar abajo en el estudio con Nazar, —insistió
Siro.
—¿Yuri? —Conner llamó silenciosamente—. Yuri, ¿me oyes?

La aprensión que había estado sintiendo volvió con absoluto miedo


cuando Yuri no le respondía. Como no quería perder el tiempo discutiendo
con Siro, Conner se acercó y empujó el círculo del camino y miró a través
de los agujeros de observación.
Conner gritó y se deslizó lentamente abajo por la pared. Se sentía
como si estuviera congelado en un limbo donde todas las decisiones y
acciones eran imposibles. El horror de lo que había visto no podía ser real.
Simplemente no podía. Lo habría sentido. Estaba seguro de ello.
—¿Conner?
Conner sólo hizo un gesto con la mano hacia los orificios de
observación. Lágrimas comenzaron corriendo por su rostro, y fue incapaz
de detener su abundante flujo. Ni siquiera tenía fuerzas para hacerlo. Su
tristeza era como un peso muerto en su pecho, presionando hacia abajo.
—Yuri está muerto, —gritó cuando su angustia alcanzó su punto 264

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

máximo.
—¡No, no lo estoy!
Conner parpadeó y luego saltó de nuevo a sus pies. Empujó a Siro
fuera del camino y miró por el agujero de observación de nuevo. —¿Yuri?
—Estoy aquí, —dijo Yuri—. ¿Dónde estás?
—En la pared.
Yuri se rió. —Podría ser.
—¿Estás bien?
—Estoy vivo. —El tono de voz de Yuri no sonaba muy
tranquilizador. La sangre que cubría al hombre y el cuerpo junto a él no
hizo que su situación pareciera tranquilizadora tampoco.
—¿Qué pasó?
—¿Crees que podríamos discutir eso una vez que nos pongamos en
camino? —preguntó Yuri—. Haría cualquier cosa por largarme
jodidamente de aquí. —Las últimas palabras de Yuri fueron gritadas,
diciendo a Conner que el hombre estaba cerca del final de su control.
—Whitney, —dijo Conner cuando se volvió para mirar a su ex
amante—. ¿Hay algún camino a esta habitación sin que nadie nos vea?

en un —parYodeasumiría que lapero


habitaciones, chimenea. Sólo
creo que la he
todas utilizado
podrían de una
tener esa entrada
manera
secreta.
—¡Encuéntrala! —Conner empezó a mover sus manos a lo largo del
muro de piedra, buscando algún tipo de palanca o ladrillo o algo que le
permitiera entrar en la habitación con Yuri.
—¡La encontré! —Siro giró algo de aspecto metálico y una sección 265

de la pared se empujó hacia adentro. Siro corrió y se dirigió derecho a la

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cama.
Conner llegó a la cama justo cuando Siro estaba rodando a Yuri en
su espalda. Se dejó caer de rodillas junto a la cama y empezó a pasar sus
manos sobre el cuerpo de su compañero. —¿Estás…?
—¡No me toques! —gritó Yuri.
El corazón de Conner estalló de dolor mientras rápidamente levantó
sus manos del cuerpo de Yuri. —Está bien, Yuri. No voy a tocarte. —Eso
le mataría, pero si su compañero no quería su tacto, Conner no podía
obligar al hombre.
—Me dio una inyección de algo, —jadeó Yuri, obviamente
doloroso—. Me duele cuando me tocas.
—Él hace eso, —dijo Whitney—. Le gusta más cuando la gente a la
que folla siente dolor.

Conner apenas podía respirar cuando de repente se dio cuenta de que


Yuri estaba desnudo. —Yuri, él…
—No. —Yuri sonrió con dureza, lo que parecía extraño teniendo en
cuenta la situación—. Lo creas o no, Marla se acercó y lo apuñaló en la
espalda antes de que pudiera. Pero estuvo horriblemente cerca. —Yuri
tragó duro—. Demasiado cerca.
—¿Marla? —preguntó Siro—. ¿Marla McGregor?
—Si. Oyó a Nazar dar órdenes a los cazadores para matar a todos en
el rancho, y luego, más tarde, Nazar, dijo que todos habían sido asesinados.
Ella pensaba que Nazar había ordenado matar a sus cachorros, cosa que
hizo. Pero no sabía que estaban vivos. —El ojo de Yuri se dirigió a
Conner—. Le prometí que la llevaría de regreso a la isla de Vourdala para
que pudiera ver a los cachorros.
266
—Está bien. —Conner no sabía cómo Brom se iba a sentir sobre eso,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pero
ella losique
Marla había—salvado
quisiera . ¿Dóndea está
su compañero
ahora? de Nazar, Conner le daría a

—Fue a buscaros.
—Oh, bueno, nos escapamos a través de un pasadizo secreto en las
paredes.
—Sí. —Dio Yuri a Conner con una medio sonrisa de lado—. Ya vi
eso.
—Puedo ir a buscarla, —dijo Whitney.
—¡No!, —exclamó Conner—. Quiero que te quedes aquí, donde
pueda mantenerte a salvo.
—No, en serio, Conner, —dijo Whitney mientras retrocedía hacia la
puerta—. He estado merodeando este lugar durante años. Puedo hacerlo.
Justo cuando Whitney llegó a la puerta, y empujó para abrirla,
Whitney salió volando por la habitación. Conner se levantó y atrapó a
Whitney antes de que pudiera caer al suelo y rápidamente empujó al
hombre detrás de él mientras se volvía a enfrentar a quien había abierto la
puerta.
El alivio tomó la fuerza de las piernas de Conner cuando vio a Neil y
a Frances entrar con Marla. Se sentó en el borde de la cama y dejó caer la
cabeza entre las manos. Realmente necesitaba unas vacaciones. Esta mierda
era una locura. No sabía cómo lo había hecho Siro durante tantos años.
Pero sabía que no iba a dejar que Siro lo hiciera más.
Era jodidamente peligroso.
—No pude encontrar… oh, ellos te encontraron. —Marla echó un
vistazo a todo el mundo en la habitación y luego de vuelta a Yuri. Ella
actuaba como si no hubiera un cuerpo muerto en la cama y Yuri no
267
estuviera desnudo y cubierto de sangre —. ¿Podemos irnos ahora?

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

—Sí, Marla, —contestó Yuri—. Podemos irnos ahora.


—¿Cómo quieres que hagamos esto, Yuri? —preguntó Conner
mientras levantaba su cabeza.
—No me puedo mover. Vas a tener que llevarme.
—¿Crees que puedes manejarlo si te envuelvo en una manta en
primer lugar? —preguntó Siro.

—No me importa si tienes que arrastrar mi culo desnudo de aquí, —


espetó Yuri—. Sólo quiero salir de aquí.
—Está bien. —Siro miró hacia Conner—. Cariño, ¿encontrarías una
manta limpia para envolver a Yuri? No quiero esta. —Siro señaló a la
manta ensangrentada debajo de ellos.
Conner asintió y empezó a mirar alrededor de la habitación por otra
manta. Vio una limpia plegada con un conjunto de sábanas en una silla
junto a la ventana. Se acercó a coger la manta, pero cuando su mano tocó
las sábanas para moverlas, se dio cuenta de que eran de muy alta calidad,
sábanas de seda. En realidad podrían sentirse mejor sobre la piel de Yuri
que la manta. Conner tomó ambas y las trajo de vuelta a la cama.
—Whitney, agarra una toalla limpia del cuarto de baño. Vamos a ver
si podemos quitar un poco de esta sangre sobre Yuri.
—¡No! —espetó Yuri—. Sólo quiero irme.
Había tal súplica escrita en los ojos de Yuri que Conner no podía
negar a su compañero, aunque quería desesperadamente quitar la sangre de
Nazar sobre Yuri. Además del hecho de que el olor de la sangre fresca era
probable que llamara la atención a cada shifter en el espacio de quince
metros a su alrededor, Conner no podía soportar la idea de que cualquier
cosa de Nazar tocara a su compañero.
268
—Está bien, cariño, lo que tú digas. —Conner sacudió la sábana y

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

cuidadosamente
formaron en sus laojos
colocó sobre
cuando Yurielsiseó
cuerpo
y sedepuso
Yuri. Las—lágrimas
rígido se
. Lo siento,
cariño, —susurró Conner.
—Sólo hazlo, —escupió Yuri a través de sus dientes apretados —.
Cuanto antes acabes de una vez, más pronto podremos salir de aquí.
—Está bien, Yuri.
Conner tragó duro cuando agarró la manta y la sacudió. Esperó a que
Siro levantara a Yuri en sus brazos y luego cubrió al hombre con la manta.
Yuri estaba pálido y sudoroso en el momento en que puso su cabeza en el
pecho de Siro.
—Coge el bastón, la jeringa que Nazar usó sobre mí, y el video de la
cámara. Vamos a necesitar todo esto como evidencia para el consejo. Pero
asegúrate usar algo para recogerlos en caso de que el consejo quiera huellas
digitales.
—¿Qué cámara?
—Arriba de la cama.
Conner sintió un gruñido profundo construirse en su garganta cuando
vio la cámara de vídeo encaramada en la cabecera. —¿Quería grabar en
vídeo violarte?
—Parece que Nazar y su manada tienen bastante de su pequeña
empresa pasando aquí. Droga a sus víctimas para que no se puedan mover
y luego las dispara con algo que les hace sentir todo veinte veces peor, y
entonces les viola con la cámara. Cuando termina esto, el resto de la
manada consigue una oportunidad a quien sea que cabree a Nazar.
El gruñido de Conner empezó a crecer más fuerte, hasta que sus ojos
se posaron en Whitney, que estaba pálido como la sábana que envolvía a
Yuri. —Whitney, ¿sabes algo de esto? 269

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Whitney apretó los labios mientras sus ojos se apartaban.


—¡Whitney!
—¡No, Conner! —Yuri espetó cuando Conner comenzó a llegar al
hombre—. Déjalo en paz. Si era una de las víctimas de Nazar, entonces tal
vez no quiera que nadie sepa. El hombre era un loco, y las cosas que me
habló que me haría… —Yuri negó con la cabeza—. Incluso no lo desearía
a McGregor.
—Está bien. —Conner rápidamente tomó los elementos que Yuri
había indicado usando un pañuelo de papel para hacerlo así que sus huellas
no borraran las pruebas, entonces las metió todas en una funda de
almohada—. Whitney, ya que tienes experiencia en escapar de este
infierno, abre el camino.
Whitney asintió con la cabeza y se lanzó a través de la abertura en la
pared.
—Neil, sigue detrás de Whitney y mantenlo a salvo. Frances, te
quiero en la retaguardia. Asegúrate de que nadie nos sigue.
Neil se movió al pasaje después de Whitney. Siro llevaba a Yuri
después, y luego iba Marla. Conner se acercó y cerró la puerta del
dormitorio. No resistiría a nadie por mucho tiempo, pero tal vez les daría
unos segundos adicionales para escapar.
Una vez hecho esto, se apresuraron por el pasillo. Una vez que
Frances le siguió dentro, Conner movió la manija de metal que Siro utilizó
para abrir la puerta. Le dio la vuelta en la dirección opuesta y vio cómo la
puerta secreta se cerraba.
El pasaje estaba a oscuras, pero la visión de shifter de Conner le
permitió ver a dónde iba. De vez en cuando, pasaba por una habitación que
tenía luz en ella y voces. Conner trataba de ser lo más silencioso que pudo
mientras se apresuraba a través del pasaje. 270

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

a todoFue un proceso
el mundo lento,frente
detenerse pero después de unos
a una pesada diezde
puerta minutos,
hierro. Conner vio
Por suerte,
esta parte del pasaje era bastante amplia y todos cabían de pie el uno junto
al otro.
—¿Dónde está Whitney? —preguntó Conner cuando se dio cuenta
de que faltaba el hombre.
—Tenía que agarrar algo, —dijo Siro—. Me dijo que esperara en la
puerta de hierro y que estaría de vuelta.
—¡Ah, diablos! —Conner empujó la mano por su pelo, la frustración
montándole con fuerza. Si algo le pasaba al lindo chico, nunca se lo
perdonaría—. No puedo creer que lo dejaras ir.
—Conner, Whitney es un hombre hecho y derecho. Puede tomar sus
propias decisiones.
—Puede que sea un hombre hecho y derecho, pero es demasiado
dulce para tomar sus propias decisiones. Se acostumbra, Siro. No puede
decir que no a la gente porque tiene miedo de disgustarles. Necesita un
jodido guardián.
—Yo me encargo de él, —dijo Neil.
Conner frunció el ceño mientras miraba al guardia. —¿Por qué harías
eso?

Neil se encogió de hombros. —Es lindo.


—¡No! —Las fosas nasales de de Conner soplaron con rabia apenas
contenida. Señaló con el dedo a Neil—. Aléjate de él. No necesita a nadie
cuidando de él porque piense que es lindo.
—Conner, sé razonable, —dijo Siro.
Conner gruñó. 271

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Los ojos de Siro se abrieron como platos al oír el sonido. —¡Conner!


—Demasiado fuerte, —dijo una voz aguda desde detrás de ellos —.
¡Demasiado fuerte!
Conner se dio la vuelta, las garras extendidas y listo para la batalla,
hasta que vio a Whitney corriendo por el pasillo hacia ellos, una bolsa en
sus manos. Y estaba corriendo tan rápido como sus piernas le llevaban.
—¡Ve! —gritó Whitney—. Ve por la puerta. ¡Ve!
Neil tenía la puerta abierta y estaba ayudando a la gente a través de
ella en el parpadeo de un ojo. Conner se quedó donde estaba y esperó a que
Whitney le alcanzara. Agarró a Whitney y se dirigió hacia la puerta,
Frances cerrando la marcha.
Justo cuando Conner y Whitney llegaron a través de la puerta,
Conner oyó gruñir a Frances, y luego el hombre cayó contra él. Conner
sabía que Frances había sido golpeado. Empujó a Whitney lejos de él y
luego llegó de nuevo a Frances, arrastrándolo por la puerta.
Conner apenas podía ver a la gente apresurándose hacia él hacia
abajo al pasaje cuando cerró de golpe las grandes puertas de hierro.
Rápidamente miró a su alrededor para interponerse contra la puerta, pero
no encontró nada.
Sabiendo que no había nada que pudiera hacer para evitar que la
puerta fuera abierta desde el interior, Conner tomó a Frances, enlazó el
brazo del hombre alrededor de su cuello y comenzó a medio llevarle, medio
arrastrando al hombre lejos de la puerta.
—¡Al suelo!
Conner se tiró al suelo al instante, tirando hacia abajo a Frances con
él. No estaba muy seguro de que uno de sus compañeros le hubiera gritado,
pero tenían que haber gritado por una razón. Y puesto que confiaba en sus 272

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

compañeros, golpear el suelo sólo tenía sentido.


La fuerte explosión que fue detrás de él y sacudió el suelo debajo, sin
embargo, no tenía sentido. Conner sintió una explosión de calor
moviéndose hacia él, por lo que rápidamente se dio la vuelta en la parte
superior de Frances, tratando de proteger al herido lo mejor que pudo.
Conner apretó los dientes cuando la explosión quemó la piel. El calor
fue intenso pero se fue tan repentinamente como había llegado. Conner
esperó un momento y luego, lentamente, levantó la cabeza para mirar a su
alrededor.
No sabía exactamente lo que había pasado, pero la puerta de hierro
por la que había pasado había desaparecido. Al parecer había sido
construída justo en la ladera de una montaña, porque parecía que la
completa maldita montaña acababa de caer sobre la entrada.
Conner se sobresaltó cuando escuchó un montón de gritos. No
sonaban enfadados, sino más como una celebración. Se volvió para mirar
delante de él, y pudo ver a toda una multitud de personas, no sólo a sus
compañeros.
Su alfa estaba allí con Lucas. Vadim estaba arrodillado en el suelo,
inclinado sobre una camilla. Siro arrodillado en el otro lado, así que Conner
sólo podía suponer que el cuerpo en la camilla era Yuri. Serge estaba de pie
detrás de su hermano. Demonios, incluso Niko estaba allí.

—¿Crees que podrías quitarte de mí ahora?


—Oh, lo siento, —dijo Conner mientras rodaba fuera de Frances—.
¿Puedes levantarte por tu cuenta?
—Me golpeó en la pierna, así que puede ser que necesite un poco de
ayuda para caminar, pero creo que puedo conseguirlo por mi cuenta.
Conner no estaba tan seguro, pero no iba a discutir con el hombre. Se 273
puso de pie y colocó el brazo del hombre alrededor de su cuello otra vez,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

entonces
sonido delesulevantó.
boca. Frances gruñó un poco, pero aparte de eso, no vino un
—Gracias, a propósito, —se quejó Frances.
Conner sonrió. Podía oír lo difícil que era agradecer por el tono
rígido de la voz de Frances. —De nada.
—¿Qué demonios estás haciendo aquí? —preguntó Conner tan
pronto como se dirigió a la multitud de personas reunidas.
—Hemos oído que podrías tener un poco de problemas. —Jake
sonrió mientras encogía sus anchos hombros —. Pensamos que podrías
venir a ver los fuegos artificiales.
Conner miró por encima del hombro a la pila de rocas y escombros
que momentos antes había sido una puerta. —Sí, se puede decir eso. Pero,
¿cómo sabías que había que poner los explosivos aquí? Podríamos haber
salido en cualquier lugar.
—Cuando Robby estaba rebuscando en las acusaciones contra
Conner, se encontró con unos planos que tenían la entrada y pasadizos
secretos sobre el mismo. Nos dimos cuenta que podíamos ir en ese camino
y rescataros si estuvierais en problemas, pero también necesitaríamos una
salida, por lo que equipamos el túnel para volarlo. Simplemente no imagino
que todo saliera de esa manera. Si hubieras estado cinco minutos antes,
habrías atrapado a Lucas colocando los explosivos.
—Bueno, no puedo decir que esté triste de verte. Iban justo en
nuestra cola. Si no hubieras volado ese túnel, nos habrían atrapado. —
Conner se estremeció ante lo cerca que habían estado de perder la batalla —
. Todavía podrían. Dudo que esta sea la única entrada a este lugar.
—No te preocupes. El viejo Dmitriev envió guardias del consejo con
nosotros. Van por la parte delantera de la casa y las otras entradas,
deteniendo a todos los que sobrevivieron a la explosión. El Consejo del 274

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Lobo no está realmente feliz con lo que han encontrado hasta ahora.
—Entonces van a estar realmente molestos cuando descubran qué
más ha estado sucediendo aquí.
Jake arqueó una ceja. —¿Oh?
—Esto va mucho más allá de una traición por parte de un loco alfa.
Unos pocos hombres que Conner no reconoció se separaron del
grupo y tomaron a Frances, caminando con él a otra camilla. Conner vio a
un tipo con una bolsa de médico desplegable junto a él y empezó a golpear
alrededor de la herida de Frances.
—¿Dónde está Ryland? —Habría asumido que el sanador estaría allí
para algo así.
—Esta era una misión estrictamente no tri-omega, —dijo Jake
mientras palmeaba a Conner en la espalda—. No podía correr el riesgo de
que pudiera ser superado y uno de ellos pudiera llevarle de nosotros.
—Oh, definitivamente nos superan. —Se rió Conner bruscamente—.
Hay una manada entera allí que ha perdido totalmente sus canicas. El
Consejo de Lobo tiene que venir y tratar con ellos, porque mi compañero
no va a hacerse cargo de esta manada, alfa o no.
Jake frunció el ceño. Lanzó una rápida mirada a Lucas y luego
volvió a mirar a Conner. —¿No crees que le corresponde a Yuri tomar esa
decisión?
—¡Oh diablos, no! —espetó Conner—. Esta vez voy a tomar yo las
decisiones. Siro va a renunciar al consejo. Yuri va a renunciar como Beta
de la manada Miroslav y como Alfa de la manada McGregor, y todos
vamos a trasladarnos a la isla de Vourdala.
Conner estaba enfermo y cansado de que la gente que le importaba
275
saliera herida. Él había terminado. La isla de Vourdala ofrecía seguridad,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

incluso si tuvieran que tener un alto nivel de seguridad.


—Eso te incluye a ti y a Leyland y a Lucas y al resto de nuestra
manada. Es el único lugar donde todos vamos a estar a salvo.
—Conner, Nazar está muerto, —dijo Siro mientras permanecía de
pie y se acercó—. No puede hacernos daño nunca más.
—Pero sus amigos pueden, y hasta que sean capturados, ninguno de
nosotros está a salvo, especialmente los tri-omegas. Tenemos que reforzar
la seguridad en la isla Vourdala y que todos sepan que si tratan de irrumpir
en la isla, tendrán que pagar por ello con su vida.
—Conner, ya estamos haciendo eso, —insistió Jake.
—¡No! —espetó Conner—. No es suficiente. ¿No entiendes eso? No
estamos seguros.
—Conner, —susurró una voz a través del enlace que Conner tenía
con sus compañeros.— Te necesito.
La queja de Conner fue olvidada al instante al oír el sonido de la voz
de Yuri. Se acercó y se dejó caer al lado de la camilla. Conner comenzó a
llegar a la mano de Yuri, hasta que recordó lo que Yuri había dicho de
tocarlo. En cambio, se inclinó y sonrió a su compañero.
—¿Cómo estás?
Yuri sonrió. —Puedo mover mis brazos.
Conner casi lloró. Así las cosas, tuvo que parpadear varias veces para
evitar que sus lágrimas corrieran por su rostro. —Eso es bueno, cariño.
Estarás mejor en poco tiempo.
—Vamos a estar bien, Conner.
Conner pasó la lengua por los labios resecos. —Yuri…
276

—Nos pusimos de pie uno al lado del otro en lugar de solos, y

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sobrevivimos.
—Apenas, —susurró Conner en un sollozo—. Él casi…
—Pero no lo hizo, cariño. —Conner se mordió el labio cuando vio
un pequeño estremecimiento ondular a través del fuerte hombre —. Con
toda su planificación y connivencia, había una cosa en la que Nazar no
pensó, y que fue lo que finalmente le derribó.
Las cejas de Conner se juntaron en confusión. —¿Qué?
Yuri se rió y miró hacia el lugar donde la montaña se había
derrumbado sobre la entrada secreta. —Es peligroso cabrear a nuestra
familia.

277

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro estaba de pie junto a su hermano y saludó a su padre cuando vio


el ferry que llevaba al anciano trasladarse hacia el mar. Habían sido un par
largo de semanas, pero había terminado por fin.
Robby había sido capaz de descubrir que toda la evidencia en contra
de Conner fue fabricada, y podía demostrarlo. El consejo había estado
satisfecho con la evidencia que Robby había reunido, y tuvo que desestimar
todos los cargos contra Conner.
Mejor aún, habían descubierto un montón de pruebas dentro del
bastón de Nazar. Incluso Siro se había sorprendido. La información que
encontraron implicaba a varios grupos de cazadores, un par de alfas de
manadas, y un muy cabreado miembro del consejo. Whitney había sido la
tarjeta de sorpresa. Las cosas que había traído no eran objetos personales
como todo el mundo pensaba. Se había colado en el despacho de Nazar y
tomado varios archivos, algunos discos de computadora y otros vídeos que
mostraban las atrocidades que Nazar y su manada habían perpetrado a
víctimas inocentes.
Por desgracia, el archivo con la imagen de Boris Venahav en ella
faltaba, por lo que Siro aún no sabía quién era el hombre. Pero alguien lo
hacía. Siro sospechaba que alguien en el consejo la había tomado cuando la
oficina de Nazar había sido allanada. Simplemente no podía probarlo. Su
padre estaba tranquilamente mirándole, pero no era fácil ir, considerando
que ninguno de ellos sabían en quién podían confiar.
278
La manada McGregor estaba siendo desmantelada y cada miembro

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sometido a interrogatorio
consejo. Con las cosas quey una posible
Whitney penatraído,
había de prisión
Siro en
no una
teníacárcel del
ninguna
duda de que varios de ellos iban a pasar mucho tiempo en la cárcel.
Y no podría estar más feliz por eso.
Su ira contra Nazar brotaba cada vez que Yuri se despertaba en
medio de la noche gritando. Hubo momentos en que deseaba que Nazar aún
viviera sólo para poder matarlo. Yuri estaba aterrorizado de ser restringido
de cualquier manera. Ni siquiera le gustaba ser abrazado.
Se estaba creando un gran problema entre Yuri, Siro, y Conner, pero
sobre todo para Conner. Sentía que debía haber sabido lo que Nazar era ya
que había pertenecido a la misma manada unos pocos meses y esto había
estado sucediendo durante años. No era capaz de sacudirse a sí mismo de la
culpa, no importa lo que Siro y Yuri dijeran.
—Está empezando a gustarme.
—Eso espero. —Siro miró a su hermano—. Es tu padre.
—No, quería decir él. —Serge señaló al pequeño hombre de pelo
castaño que estaba saltando arriba y abajo mientras trataba de llegar a la
galleta que Neil sostenía en el aire por encima de su cabeza —. Ciertamente
parece gustarle más a Neil.
—Por Dios, no dejes que Conner te oiga decir eso. Va a ponerse
hecho una furia.
Serge tenía el ceño fruncido en su rostro cuando se volvió para mirar
a Siro. —¿No te parece extraño que tu compañero sea muy protector con su
ex-amante?
—Me parecería extraño si no hubiera un ex en esa frase. —Siro se rió
mientras miraba a Whitney agarrar la camisa de Neil y comenzar subiendo
hasta la parte delantera del hombre. Neil se rió y deslizó un brazo bajo 279
Whitney para evitar que se cayera y luego le entregó la galleta —. Ahora,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

eso es extraño.
Siro se volvió con Serge y comenzó a hacer su camino de regreso a
la colina hacia el recinto del alfa. —Así que ¿estás pegado alrededor de la
isla, entonces? —preguntó Serge.
Siro rió cuando se metía las manos en los bolsillos. —Sí, parece que
es así.
—¿No más trabajos de encubierto?
—No. —Siro miró alrededor del pequeño pueblo tranquilo. No era
un lugar enorme, aunque estaba creciendo un poco. Pero la gente estaba
feliz aquí—. Creo que me necesitan aquí. La isla de Vourdala está
creciendo cada día. Tengo habilidades, y pueden ser objeto de buen uso
aquí.
Se hizo el silencio entre Siro y Serge durante unos minutos. Siro
sabía que tenía sus propios pensamientos profundos para reflexionar.
Asumió que Serge lo hacía, también. No podría ser fácil ser un tri-omega
que solía ser un cazador. Por supuesto, Serge había renunciado a todo
cuando se encontró con sus compañeros y se enteró de que era un shifter y
no un ser humano. Pero aún así…
—¿Alguna vez lamentas encontrar a Vasiliy y a Niko y venir aquí?
—No, nunca, —respondió Serge sin dudarlo—. Vaska y Niko fueron
las mejores cosas que me han pasado.
Siro sonrió a su hermano. —Creo que puedo entender eso. —
Ciertamente nunca esperaba que sus compañeros fueran a ser hombres
como Conner y Yuri, pero ahora que los había encontrado, no iba a
renunciar a ellos.
Si pudiera superar el miedo de Yuri y Conner sobre su culpabilidad,
sólo podrían tener la oportunidad de una gran vida juntos. Siro se volvió 280
hacia su hermano cuando un plan comenzó a formarse en su cabeza. —

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Serge, ¿estarías dispuestos a ayudarme un poquito con algo?


—Claro, ¿qué necesitas?
—¿No quieres saber qué es antes de que estés de acuerdo?
—No.
Siro sonrió. Había pasado un montón de años sin su hermano, pero
estaba condenadamente contento de que Serge estuviera aquí ahora. —
Bueno, esto es lo que necesito…

—No me contesta, Yuri.


Yuri puso los ojos en blanco. —Está bien, Conner. Dijo que se
trataba de una sorpresa. Probablemente no dirá nada porque no quiere que
sepamos lo que está haciendo.
—Pero… —Conner nerviosamente retorció las manos. Si cualquier
cosa le sucediera a Siro, nunca se lo perdonaría. Ya había decepcionado a
un compañero. No quería hacerlo a dos. Dios, la jodía tanto cuando se
trataba de sus compañeros. Le sorprendió que se pegaran alrededor.
—Sería más seguro para ambos si sólo pateáis mi culo a la acera.

—Cierra la boca, Conner, —espetó Siro a través de su enlace,


sorprendiendo a Conner lo suficiente que se detuvo en seco. No creía que
Siro estuviera hablando con él—. No te vamos a patear a la acera.
—Pero…

—¡No! —Gruñó Siro—. Ahora, mueve el culo a nuestro dormitorio.


Necesitamos discutir algunas cosas.
281

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Eso no suena muy prometedor.


—Sólo tienes que moverte, Conner. Te lo prometo, no es mala cosa.

—Está bien, Siro. —Conner exhaló un suspiro tembloroso —. Lo que


sea que digas.
Siro se rió. —Eso es un comienzo.
Conner frunció el ceño, no muy seguro de lo que esa declaración
significaba. Se apresuró a ponerse junto a Yuri, que estaba empezando a
subir las escaleras, asegurándose de dar un montón de espacio a Yuri. —
Estoy preocupado por Yuri, Siro. Todavía salta si pongo una mano sobre
él.
—Lo sé, cariño. Esa es una de las cosas que quiero discutir con los
dos. Sé que Yuri estaba herido, pero esto tiene que parar. No está
durmiendo nada porque tiene miedo de cerrar los ojos. Va a empezar a
enfermar muy pronto, y no podemos permitir que eso suceda.
—¿Qué vamos a hacer?

—No te preocupes, cariño. Tengo un plan.

Conner estaba tan curioso que sus pasos se levantaban. Estaba de pie
justo detrás de Yuri cuando el hombre abrió la puerta del dormitorio.
Conner se dio cuenta del plan de Siro con una sola mirada y bloqueó la
puerta cuando Yuri se volvió y trató de salir.
—Yuri, Siro te ama. Yo te quiero. Ninguno de los dos haría
cualquier cosa que te hiciera daño.
—No puedo…
—Sí, puedes. —Conner empujó a Yuri de regresó a la habitación. Se
encontró con muy poca resistencia física, pero la angustia en los ojos de
Yuri casi hizo que Conner cancelara la completa cosa —. Mira, cariño. — 282

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Conner señaló la cama—. Nadie va a atarte o herirte de ninguna manera.


Tan pronto como fueron hacia la puerta, Conner la cerró y cerró con
llave. Mantuvo la llave fuera para Yuri. —Puedes irte cuando quieras.
Yuri miró la llave en la mano de Conner y luego sobre la cama. Se
lamió los labios, como si de repente estuvieran secos. —¿Puedo irme
cuando quiera?
—Tú estás a cargo, Yuri, —dijo Siro desde el centro de la cama —.
Puedes salir. Puedes sentarte al margen mientras Conner me jode o puedes
joderme. La elección es tuya.
Conner sabía que no quería que Yuri saliera, pero no podía decir
honestamente si el chico quería sentarse a un lado, así que Conner podría
joder a Siro o si quería ver a Yuri joder a Siro. Pero estaba esperando que
alguno de ellos estuviera jodiendo a Siro, y pronto.
Siro estaba arrrodillado sobre sus manos y rodillas, con las piernas
abiertas. Sus bolas y polla colgaban y rebotaban entre las piernas y estaban
en visualización perfecta. Tenía el aspecto de cada deseo de Navidad que
Conner había tenido alguna vez dentro de él. Las únicas cosas que Siro
llevaba eran las restricciones en las muñecas y los tobillos que le ataban a
la cama y el tapón en el culo. Por lo demás, no había nada más que piel
dorada gloriosa desde un extremo de su cuerpo de ensueño al otro.
—Tal vez sólo voy a ver esta vez, —murmuró Yuri. Retrocedió a
través de la habitación hasta que se topó con una silla. No era capaz de
despegar sus ojos de Siro. Incluso cogió la silla y se deslizó un poco más
cerca de la cama antes de sentarse en ella.
—Eso significa que tengo que joder a Siro. —Conner no perdió nada
de tiempo en despojarse de la ropa. Parte de ello se debía a que tenía miedo
de que Yuri lo dejara antes de que este pequeño experimento pudiera
desarrollarse. Y parte de ello era porque Conner anhelaba follar a su 283

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

compañero.
Una vez que estuvo desnudo, Conner se dirigió al extremo de la
cama y sólo miró fijamente. No sabía cómo Siro se había atado a sí mismo
como estaba, y tendría que preguntarle sobre esto más adelante, pero por
ahora, estaba impresionado por la magnífica vista de su compañero
colocado encima de la cama y atado para el placer de Conner.
Conner agarró su polla dolorida y le dio un par de largos
movimientos de la raíz
estaría allí y miraría a lamientras
a Siro punta ysehacia abajo deNo
masturbaba. nuevo. Talmucho
tardaría vez sólo
en
hacerle venirse.
—¿Vas a permanecer allí y mirarlo? —Preguntó Yuri—. ¿O vas a
subir a la cama y follarle?
—A decir verdad, todavía estoy decidiendo.
—¡Conner! —El gruñido áspero de Yuri fue suficiente para
conseguir la atención de Conner. Las cejas de Yuri se bajaron sobre su
rostro mientras apuntaba a la cama—. Levántate ahí y dale lo que quiere.
Conner parpadeó. —Sí, señor.
Rápidamente se subió a la cama y se arrodilló detrás de Siro. —Hey,
cariño, —murmuró mientras se inclinaba sobre el cuerpo Siro y acarició
sus manos a lo largo de los lados de Siro—. ¿Te sientes cómodo así?

—Conner, sabes que te quiero, pero he tenido este tapón en mi culo


durante más de una hora. O me jodes o me desatas para que pueda
masturbarme. He estado duro durante tanto tiempo que me temo que mi
polla se va a caer.
Conner sonrió. —Bueno, no podemos tener eso, ahora, ¿verdad?
Se echó hacia atrás y agarró los bordes del tapón. En lugar de tirar de
284
él hacia fuera como Siro habría esperado, Conner lo removió alrededor

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

hasta que la cabeza de Siro se echó hacia atrás y aulló al hombre.


—¿Qué estás haciendo? —espetó Yuri.
La mandíbula de Conner cayó mientras observaba a Yuri acercarse
furioso a la cama y tirar su brazo del camino. —¡Yuri!
—¿Por qué estaba gritando?
—Porque se sentía bien, —gruñó Siro—. Ahora, o te unes a nosotros
o te callas y te sientas.
Yuri miró a Siro por un momento y luego volvió a su silla. El
corazón de Conner le dolía al ver un rojo rubor llenar el rostro de Yuri. —
¿Estás seguro de que es una buena idea, Siro? —susurró a través de su
vínculo.
—Sí, cariño, estoy seguro.

Conner seguro como el infierno que lo esperaba o estaban en grave


peligro de pérdida de su compañero. Poniendo su confianza en Siro,
Conner alcanzó el tapón de nuevo. Mantuvo una estrecha vigilancia sobre
Yuri cuando empezó a mover el tapón en el culo alrededor de Siro. Los
labios de Yuri apretaron, pero no dijo nada.
—Oh mierda, sí, —gimió Siro mientras empujaba hacia atrás contra
el tapón—. Más duro, cariño.
Conner casi pierde su agarre sobre el tapón cuando la boca de Yuri
se abrió. Cuando otro rubor llenó la cara de Yuri, comenzó a preguntarse si
tal vez Siro tenía razón. Conner agarró los bordes del tapón y comenzó a
tirar de él hacia fuera y empujar de nuevo dentro, follando el culo de Siro
con el tapón de goma rojo brillante.
Conner no sabía si Siro estaba actuando o no cuando el hombre
comenzó a gemir y empujarse a sí mismo de nuevo en el tapón, joderse a sí
285
mismo con él. Pero fue un maldito buen espectáculo, uno que estaba

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

conduciendo a Conner a la locura.


—¿Le gusta realmente eso? —Yuri susurró a lo largo de su enlace.

—¿Por qué no vienes aquí y lo ves por ti mismo? —Después de todo


el rechazo que había recibido en el último par de semanas, cuando trató de
acercarse a Yuri, Conner estaba totalmente sorprendido cuando Yuri se
puso de pie y caminó hasta el extremo de la cama.
Yuri pareció dudar por un momento. Conner contuvo el aliento. Siro
se sentía todavía debajo de él. Cuando Yuri endureció sus labios y alcanzó
los botones de su camisa, Conner sintió ganas de gritar su triunfo al mundo.
En su lugar, sacó su felicidad en el culo de Siro, empujando y tirando
y moviendo el tapón hasta que Siro estaba gritando su placer en un largo y
continuo, gemido.
—¿Puedo probar?

Conner no dijo ni una palabra. Sólo se movió entre las piernas de


Siro y dejó que Yuri tomara su lugar. A Yuri le tembló la mano mientras
agarraba el tapón y lentamente comenzó a moverlo dentro y fuera del culo
de Siro.
—¿Así, Siro?
—Joder, sí, cariño. —Siro se estremeció y empujó de nuevo —. Más
duro, Yuri. Jódeme con él más duro.
—¿Más duro?
Yuri no esperaba respuesta de Siro, pero Conner podía verle morder
su labio inferior mientras empezaba a mover la mano más rápido. Conner
sonrió, sabiendo que Yuri tenía la parte de las cosas bajo control.
Rápidamente se trasladó a la cabecera de la cama y cogió el
lubricante que mantenían bajo la almohada. Conner lubricó los dedos y 286

luego los deslizó hacia abajo hasta que su polla rebotaba contra la cara de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

Siro, y luego
agujero antes separó las piernas
de empujar y alcanzó
uno arriba hasta elentre ellos y comenzó a tocar su
nudillo.
—Oh infierno, Conner, —jadeó Siro.
—¿Qué? —preguntó Yuri.— ¿Qué está haciendo?
—Ven a verlo por ti mismo.
Justo cuando el rostro de Yuri apareció sobre los hombros de Siro,
Conner atravesó el culo con un segundo dedo, empujándolos tan profundo
como fueran.
—¡Oh mierda! —Susurró Yuri.
Conner sonrió y empezó a follar duro y profundo. Su polla rebotaba
hacia arriba y hacia abajo, golpeando a Siro en la cara cada vez. Siro
comenzó tratando de perseguir la dura erección alrededor de sus labios.
Conner empujó un tercer dedo en su culo apretado justo cuando Siro
finalmente atrapó su polla. Cálido, sedoso calor lo envolvió.
Conner gritó, sus caderas surgiendo y empujando su polla más
profundo en la boca de Siro. —Oh sí, Siro, tómame profundo, —exigió con
voz ronca—. Chupa mi polla, cariño.
—Lo estoy, —dijo Siro a través de su vínculo —. Así que cállate la
boca y consigue tu culo estirado. Mi polla te necesita.
Conner se echó a reír y tiró de sus dedos libres antes de deslizarse
bajo Siro. Lamentó el hecho de que no tuviera la boca caliente de Siro
todavía envuelta alrededor de él, pero una polla en el culo era mejor en
todos los niveles.
—Um… —Siro miró hacia abajo entre sus cuerpos y luego a las
restricciones en sus manos—. Esta posición podría no funcionar.
—Oh, va a funcionar. —Conner alcanzó arriba y agarró dos de las 287

almohadas de la parte superior de la cama. Llevó un poco de maniobra,

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

pero finalmente
culo al fue capaz de empujarlas debajo de sus caderas, elevando su
nivel perfecto.
Conner abrió las piernas tanto como pudo y le guiñó un ojo hacia
Siro. —Mi culo está esperando.
Siro lo miró un momento y luego se echó a reír. —Conner.
—Yuri, ¿crees que podrías ayudar a Siro de nuevo allí? Parece estar
teniendo un pequeño problema con encontrar el agujero.
Conner sonrió a Siro cuando oyó la suave risa de Yuri. —Te amo, —
articuló él.
La sonrisa de Siro se hizo más amplia. —Te amo, también —musitó
de nuevo.
Esto era mejor, mucho mejor. Conner prefería mucho más que
estuvieran riendo y divirtiéndose mientras tonteaban en torno a la fría
distancia que se había desarrollado entre ellos después de salir de la
manada McGregor.
Conner gimió y sus ojos se cerraron cuando sintió la gruesa erección
de Siro comenzar a presionar contra su apretado anillo de músculos. Podía
sentir el brazo de Yuri en contra de su culo así que sabía que el hombre
estaba guiando la polla de Siro en él, y de alguna manera, eso lo hizo aún
mejor.

Cuando sólo la cabeza de la polla de Siro empujó dentro, el hombre


detuvo el movimiento. Conner casi gritó de frustración. Sus ojos se
abrieron y miró a Siro. —¿Qué estás haciendo? Muévete, maldita sea.
¡Jódeme!
—Es-espera. —Siro mordió el labio hasta que se volvió blanco.
Cuando se estremeció y se quedó sin aliento, Conner arqueó una ceja sobre
él. Podía sentir la excitación de Siro en el engrosamiento repentino de la 288

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

polla del hombre.


Joder, si Siro estaba más excitado, rasgaría el culo de Conner en dos.
—Realmente le gusta mucho lo que estás haciendo, Yuri.
Los ojos de Siro se estrecharon hacia él.
—Hazlo de nuevo. —Conner no tenía ni idea de lo que Yuri estaba
haciendo, pero le encantaba el efecto que tuvo sobre Siro. Pequeños
temblores recorrieron a Siro y justo abajo en Conner.
—¿Qué está haciendo?
Siro sonrió maliciosamente. —Espera por ello.
Siro estaba empujado repentinamente hacia adelante. La fuerza
empujó la polla de Siro profundo en el culo de Conner. Conner gimió y
envolvió sus piernas alrededor de las caderas de Siro. Yuri estaba jodiendo
a Siro. Podía sentirlo. Cada vez que Yuri empujaba hacia adelante,
conducía la polla de Siro más profundo.
—Oh, sí, —se quejó Conner—. Eso es bueno.
—Se trata de mejorar. —Siro empujó hacia arriba, enterrando su
polla profundamente dentro del acogedor cuerpo de Conner. Y entonces se
detuvo.
Y fue entonces cuando Conner lo sintió, una vibración más profunda
en su culo. Parecía abarcar toda la polla de Siro, haciendo que todo el
asunto vibrara dentro del culo de Conner. No había duda de que el hombre
golpeaba el punto dulce de Conner. Las vibraciones eran tan fuertes que el
culo completo de Conner se movía.
—Siro… oh joder… oh… oh… oh… joder… Siro… —Conner
pestañeó hacia arriba a Siro con asombro total. Nunca había sentido algo
así en su vida. 289

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

largo, El cuerpo
casi de Siro surgió
frenéticamente. más fuertemente
Conner en el suyo,
jadeó y agarró más durodey Siro
los hombros más
fuertemente. Presionó los talones en la espalda baja de Siro para empalarse
a sí mismo más profundo sobre la gruesa polla de su compañero.
—Más duro, Siro, Yuri, jódeme más duro.
Conner consiguió exactamente lo que pedía. Los dos hombres
comenzaron a moverse más rápido, más profundo. Conner pensó que sus
ojos ibannecesitaba
hicieran, a rodar de nuevo
algo dentro
más de de su cabeza. Pero antes de que lo
su pareja.
—Siro.
Sin decir una palabra, Siro inclinó la cabeza hacia un lado. Conner
gemía y hundió sus colmillos en la garganta de su compañero. Un rugido
llenó sus oídos, y por un momento, Conner pensó que era la sangre
corriendo a través de su cuerpo. Entonces sintió la salpicadura caliente de
la semillas de Siro llenar su culo.
El culo golpeando. El calor liberado. Las vibraciones en el culo. La
sangre de su compañero. La reafirmación de la unión entre ellos. Todo se
sumó a una vorágine de sensaciones que arrancó el orgasmo de Conner de
él con un alto grito de éxtasis.
Conner sacó los dientes libres y dejó caer la cabeza hacia atrás en la
cama mientras su polla entraba en erupción y hasta la última gota de fuerza
se retiró de su cuerpo. Tan pronto como se movió, Yuri tomó su lugar.
Conner parpadeó sorprendido al ver a Yuri morder a Siro. El hombre sí
revoloteaba y un profundo gemido salió de sus labios mientras se
estremecía.
Siro se dejó caer y apoyó su cuerpo en la parte superior del de
Conner. Conner gruñó cuando vio a Yuri desplegarse en la parte superior
de Siro. Estaba siendo aplastado, pero por un momento, quería disfrutar de 290
ello. Los tres estaban conectados todavía, y trajo a Conner una sensación de

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

paz que no había sentido desde justo antes de que visitaran la manada
McGregor.
Tal vez reconectar era lo que necesitaban.
—Está bien, —dijo Conner finalmente mientras empezaba a
moverse—. El montón del perro ha acabado. Estoy aplastado. —Tan pronto
como Siro sacó la polla, Conner lo desató y entonces se deslizó hasta la
parte superior de la cama. Siro se dio la vuelta a su lado.
La mandíbula de Conner cayó cuando Yuri cayó entre él y Siro. Siro
parecía sorprendido también. Levantó la cabeza y miró a Yuri por un
momento y luego se encogió de hombros como si no fuera gran cosa
cuando Conner sabía que lo era. Yuri no se había permitido a sí mismo ser
encerrado así desde su regreso. Diablos, había tenido que dormir en otro
lugar sólo porque no sucedería.
Ahora, parecía tan feliz como podía ser.
Siro agarró las sábanas desde el borde de la cama y las puso sobre
todos ellos. Yuri suspiró y se acurrucó en el pecho de Siro. Metió la mano
hacia atrás y agarró el brazo de Conner, tirando de él más cerca hasta que el
hombre se quedó metido entre ellos.
—Ajusta la alarma para las seis, Siro, —murmuró Yuri—. Tenemos
servicio de patrulla en la mañana.
—Ya está lista, cariño.
—Está bien. —Bostezó Yuri—. Despiértame si quieres volver a
jugar.
Conner parpadeó cuando los pequeños ronquidos vinieron de Yuri un
momento después. Levantó la cabeza y miró a Siro. —¿Era tan fácil sacar a
Yuri de su miedo?
291
Siro se encogió de hombros, pero Conner podía ver las lágrimas en

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

sus
vez ojos mientras miraba
sólo necesitaba la cabeza
saber que vamosque se acurrucaba
a estar aquí para élennosuimporta
pecho. lo—que
Tal
pase.
—¿Y piensas que el sexo pervertido hizo eso?
—No, creo que se niega a renunciar a él sin importar cual sea su
problema. —Sonrió Siro a Conner cuando llegó a acariciar su rostro —.
Recuerda el lema de la familia, cariño.
—Somos más fuertes si permanecemos juntos que si estamos solos.
—El dicho había sido prácticamente perforado en su cabeza durante los
últimas pocas semanas, pero esta vez, sonaba diferente. Parecía cierto.
Tal vez eran más fuertes permaneciendo juntos que si estaban solos.

292

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

293

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf
5/21/2018 StormyGlenn -SerieTriOmegas07-DeseosPeligrosos.pdf-slidepdf.com

THE DREAM OF DESIRE

MARZO 2 13

294

http://slidepdf.com/reader/full/stormy-glenn-serie-tri-omegas-07-deseos-peligrosospdf

También podría gustarte