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LIDERAZGO Y GESTIÓN DE EQUIPOS DE ALTO

RENDIMIENTO
Escuela Técnica

Técnico en administración de
Lic. Byron Estuardo Bran Lira empresas con especialidad en
Retail.
Clase 2
Estilos de Liderazgo
El estilo de liderazgo es la manera en que los
líderes guían a sus colaboradores. Ese sello
personal que imprimen al dirigir, forma o
método con que el jefe ejerce la autoridad y de
igual forma también cómo se manifiestan las
relaciones entre jefes y subordinados, se
pueden expresar en varios tipos de estilos
Métodos de liderazgo:
• Puro ejercicio del poder.
• Intrigas políticas.
• Uso de las relaciones.
• Poner el ejemplo.
• Persuasión.
• Compartir el poder.
• Carisma.
• Involucrar en la meta a los seguidores.
• Varias combinaciones de éstos y otros métodos.
• Puro ejercicio del poder. "A mi manera o nada". Si no se hace lo que el
líder exige, no importa cuán poco razonable, se está despedido. Las
decisiones del líder no están abiertas a cuestionamiento o debate y
nadie más toma decisiones.

• Política de intrigas. Sucede cuando el líder pone en contra a las


personas, crea fracciones dentro de la organización, cultiva "aliados" y
aísla "enemigos", y acumula (a través de favores o evadiendo malos
resultados) la deuda personal, la cual puede cobrar en el momento
necesario, con el fin de manipular a las personas y los eventos.
• Uso de las relaciones. El líder desarrolla fuertes relaciones
positivas con todos o con la mayoría de las personas en la
organización, y utiliza estas relaciones para guiar a las personas
hacia direcciones particulares. La gente hace lo que le piden a
causa de su relación con el líder, en lugar de motivos
relacionados con las tareas propias.

• Poner el ejemplo. El líder puede o no pedir o requerir un


comportamiento o acciones particulares, pero demostrará, y
dará a entender o esperará que otros lo sigan.
•Persuasión. El líder convence a la gente a través de argumentos,
razonamiento, técnicas de venta u otros métodos de persuasión, de que lo
quiere es, en realidad, la mejor alternativa o la más cercana a la que todos
quieren.

•Compartir el poder. Algunos líderes deciden ejercitar por lo menos algún


liderazgo a través de los otros integrantes de la organización. En esta
situación, pueden ceder cierto poder personal a cambio de que otras
personas responsables en la toma de decisiones obtengan mayor sentido
de propiedad sobre las decisiones, metas y la organización misma
• Carisma. Algunos líderes son suficientemente carismáticos para
simplemente reunir a otros únicamente el poder de su personalidad.
Pueden, de hecho, promover y lograr cosas maravillosas, pero lo hacen a
través de la lealtad de la gente y la admiración que todos sienten por él.

• Involucrar en la meta a los seguidores. El líder induce a otros a asimilar su


visión de la organización y a hacerla suya. El líder podría lograrlo por
medio del carisma, la fuerza de su propia creencia en el poder y la
rectitud de la visión y/o por la naturaleza de ésta.
Liderazgo autocrático
Se sitúa al extremo contrario del anterior tipo de liderazgo, el democrático.
En el liderazgo autocrático son los jefes los que ostentan y demuestran su
poder sin que nadie pueda mostrar disconformidad con sus decisiones ni
expresar su opinión.

Es una manera de liderazgo negativa porque puede generar estrés, baja


autoestima o reducir la productividad de sus empleados. Su máxima es
que el jefe manda y los trabajadores obedecen. Por lo tanto, la
comunicación es unidireccional.
Características que definen a la forma de liderar autocrática:

1. Existe una dominación constante por parte del jefe.


2. Hay metas a alcanzar que son muy específicas.
3. Quien está al mando, es quien carga con la mayor parte del trabajo, ya que no
delega sus funciones.
4. Hay recompensas para quien demuestra ser eficiente, pero también castigos para
quien retrasa al equipo o lo afecta negativamente.
5. Solamente el líder es quien tiene acceso a la información más importante.
6. No hay espacio para las opiniones o aportaciones de los demás miembros del
equipo.
7. Las elecciones del líder nunca están a discusión, incluso si no son del agrado de
todos.
Ventajas del líder autocrático:

• Se encarga de cumplir con eficiencia y en el menor plazo de tiempo posible, todas las
tareas necesarias para cumplir un objetivo.
• Es muy exhaustivo con el trabajo de cada subordinado, lo que garantiza un trabajo de alta
calidad.
• Se especializa en trabajar bajo presión y aún con el tiempo y numerosas circunstancias por
encima.
• No le teme a las decisiones rápidas y es capaz de hacer lo necesario para mantener a flote
un proyecto difícil.
• Siempre controla hasta el más mínimo detalle, para no dar lugar a errores o retrasos.
• Cuando es necesario despedir a un elemento negativo para el trabajo en equipo, lo hace
sin vacilación.
Desventajas del líder autocrático:

• Provoca frustración y sentimientos negativos en sus subordinados.


• Impide el crecimiento de una compañía o proyecto, al dejar fuera buenas ideas de
parte de otros miembros del equipo.
• No brinda la motivación necesaria a los trabajadores, para que se mantengan dando
el 100% en sus obligaciones.
• Fomenta la competencia a tal punto, que las personas en vez de colaborar entre sí,
pueden llegar a sabotearse.
• No existe comunicación entre el líder y la gente que está a su cargo, a no ser por los
fallos que puedan cometer estos últimos.
• No se fortalece con la participación de los empleados.
Liderazgo democrático
Los líderes que apuestan por esta tipología creen firmemente en la relevancia de la
implicación de sus empleados. Promueven su participación y genera en ellos un
entusiasmo porque sienten que sus opiniones son tenidas en cuenta.

Por lo tanto, este tipo de liderazgo huye también de las actitudes autoritarias y
estimula la comunicación interna. El trabajo en equipo adquiere mucha importancia y
las opciones de todos y cada uno de ellos.

Es cierto que la decisión final recaerá en el responsable, pero ejecutar un liderazgo


democrático le permitirá tener una visión más amplia y, consecuentemente, mejorar su
visión empresarial.
Características que definen a la forma de liderar democrática:

• El líder toma en cuenta todo el tiempo las sugerencias e ideas de quienes le siguen, e
incluso los alienta a participar y a dar su opinión.
• Las decisiones saben ser delegadas, para que quien está a cargo no tenga que cargar
con un exceso de trabajo.
• Nunca se deja a nadie fuera de las actividades en grupo, ni se discrimina con base en
diferencias de ningún tipo.
• Las opiniones de cada individuo son escuchadas, sin importar que exista desacuerdo
de algunas personas o del propio líder.
• Se busca que los objetivos a alcanzar vayan a beneficiar a todos en partes iguales.
• El líder siempre se ofrece para orientar y aconsejar a cualquier miembro de su grupo,
que no se sienta a gusto con la dinámica.
Ventajas del líder democrático:

• Promueve la iniciativa de las personas. Siempre es más fácil trabajar con quienes están dispuestos a
cooperar y dar buenas ideas, y los líderes democráticos tienen la responsabilidad de lograr eso en sus
grupos.
• Brinda oportunidades de desarrollo para todos. Además de ver resultados eficaces, las personas que
trabajan en un mismo proyecto pueden crecer profesionalmente y obtener muy buenas experiencias,
pues se busca que todos se sientan a gusto.
• Ayuda a crear un vínculo entre todos los participantes y el líder. Valores como la confianza y hasta la
amistad pueden verse desarrollados cuando se trata de liderar democráticamente.
• Se le da más importancia a la participación que a la competencia. Al contrario que ocurre con otros
tipos de liderazgo, el que se maneja democráticamente es más relajado y ofrece buenos ratos de
recreación para quienes le siguen.
• Favorece la necesidad de identidad de las personas. Sucede que todos sentimos tarde o temprano que
debemos identificarnos con un grupo. El liderazgo democrático hace que esto, de alguna manera, se
vuelva posible.
Desventajas del líder democrático:

• A veces no se pueden superar los desacuerdos entre dos o más partes del grupo. En la democracia se
busca contentar a la mayoría, por lo que siempre habrá una minoría a la que no le guste como se
maneja la situación. Esto puede dar lugar a circunstancias negativas.
• Si no se establecen reglas mínimas de control, el grupo puede derivar en problemas como la anarquía
o desviarse de sus objetivos establecidos. A veces depositar toda la confianza en varios individuos, no
es la mejor forma de establecer un orden determinado.
• El líder debe tener bastante habilidad para mantener la motivación y la colaboración de quienes le
siguen, así como plena confianza en sí mismo, incluso para soportar críticas y actitudes de
desprestigio. De lo contrario, el equilibrio de un conjunto de individuos se quiebra.
• Es un camino lento a la hora de alcanzar una meta, en comparación con otros estilos de liderazgo. En
contraparte con los beneficios que ofrece esta forma de liderar, es posible ver que es menos
probable que rinda frutos a corto plazo.
Liderazgo Laissez-faire
Es un líder que trabaja en positivo, confiando en el saber hacer de sus
empleados. Este responsable es consciente de que sus trabajadores están
preparados para desempeñar las tareas que les ha encomendado y por, lo
tanto, hay que “dejarles hacer”.

Este líder se caracteriza por dejar libertad a sus empleados para que
realicen las tareas como más práctico les resulte. Al final cuentan los
resultados y no tanto el procedimiento. Eso no quiere decir que se
mantengan siempre al margen. Cuando es necesario aconseja u orienta,
pero nunca impone su criterio. ¿El resultado? Aumenta la motivación de los
trabajadores y son más eficaces.
Ventajas
Para algunos empleados, la autonomía es liberadora, mejora
la creatividad y ayuda a sentirse más satisfecho con el trabajo que se
realiza. Este tipo de liderazgo puede ser usado en situaciones donde los
subordinados son apasionados y gozan de una alta motivación
intrínseca.

Por otro lado, en ocasiones este tipo de liderazgo permite que las
personas más especializadas en su trabajo o que aportan un mayor
valor añadido no se vean constreñidas por las formalidades y una
excesiva rigidez organizativa y hagan lo que mejor saben hacer.
Desventajas
Hay que tener en cuenta que no todos los empleados poseen esas características. Este
estilo no es apropiado cuando se trabaja con empleados que no poseen las
competencias arriba mencionadas.

Muchas personas no son buenas a la hora de asignarse sus propios plazos de entrega,
gestionarse sus propias tareas y resolver los problemas que puedan ir surgiendo. Dicho
de otro modo, tienen un estilo de trabajo mucho más pasivo en el que todo depende de
que tengan instrucciones muy específicas y, en situaciones de ambigüedad, no tienen
por qué aplicar el sentido común o tienden a trabajar menos a la espera de más
información.
Liderazgo transaccional
Se basa en el intercambio, habitualmente de incentivos económicos, del
jefe al empleado, como recompensa por el trabajo bien hecho o la
consecución de sus objetivos. Ambas partes salen beneficiadas. Por un
lado, el trabajador ve recompensado su esfuerzo y, por otro lado, el líder
motiva a sus subordinados consiguiendo que las ventas y los ingresos
empresariales crezcan.

Es un liderazgo positivo porque aumenta el sentimiento de pertenencia a


la empresa, la productividad, el clima laboral y los beneficios económicos.
Todos ganan con este tipo de liderazgo.
Ventajas
Es un tipo de liderazgo orientado a los objetivos y, por tanto, los seguidores son motivados con
recompensas por los resultados conseguidos. El líder transaccional crea estructuras claras, donde queda
bien definido lo que requiere de sus subordinados y las recompensas que van a percibir. Por eso, este tipo
de liderazgo se centra en aspectos objetivos y en unidades de análisis fácilmente reconocibles, con las que
es relativamente sencillo operar.

Desventajas
El perfil de seguidor del líder transaccional es un individuo racional, motivado por el dinero y otros
beneficios o recompensas, cuyo comportamiento es bastante predecible. Los líderes transaccionales se
centran en el presente y son muy buenos para conseguir que la organización funcione sin problemas y con
eficiencia. Sin embargo, aunque el liderazgo transaccional implica seguir ciertas reglas y funciona muy bien
en momentos de estabilidad, en el mundo cambiante que nos encontramos hoy en día, donde el éxito de
las compañías muchas veces depende de los cambios continuos, existen estilos de liderazgo más efectivos.
Liderazgo transformacional
El líder transformacional se centra en el capital humano de la
empresa, es decir, en sus trabajadores. Es consciente de que la
transformación solo es posible si incide en el compromiso de los
trabajadores, confía en ellos y permite una comunicación fluida
con los jefes.

Este liderazgo se caracteriza por fomentar la creatividad y


participación de todos los miembros de la compañía, no tener
miedo a afrontar riesgos, motivar a los empleados y estimular la
confianza bidireccional.
Ventajas
Este es uno de los tipos de liderazgo que aportan mayor flexibilidad al funcionamiento de las empresas. De esta
manera, los líderes que trabajan a partir de esta filosofía motivan y aumentan la productividad y la eficiencia
del grupo. Poseen una visión muy amplia del trabajo a realizar, gracias a la cual lideran el cambio dentro de la
organización y son capaces de cambiar las expectativas, percepciones y motivaciones del equipo.
Cuando estos líderes y sus seguidores trabajan juntos, llegan a un nivel superior de moral y motivación. La clave
está en el impacto que tienen sobre los seguidores, ya que dichos líderes se ganan la confianza, respeto y
admiración de los mismos.

¿Desventajas?
El liderazgo transformacional, en lugar de analizar y controlar transacciones específicas utilizando reglas,
instrucciones e incentivos, se concentra en cualidades intangibles, como la visión, los valores compartidos y las
ideas, con el propósito de crear relaciones, de dotar de mayor significado a las actividades independientes y de
ofrecer una visión compartida que permita funcionar conjuntamente con los seguidores en el proceso de
cambio.
Este énfasis en el clima laboral puede llegar a ser contraproducente en situaciones de crisis en las que hay que
reaccionar rápidamente a una crisis que puede hacer colapsar a la organización a corto plazo, en cuestión de
semanas.
Modelo de Liderazgo Situacional:
Paul Hersey y Ken Blanchard diseñaron el modelo de liderazgo situacional. Este
modelo se basa en el análisis de una situación determinada, teniendo en cuenta el
nivel de madurez de los componentes del equipo, para luego adoptar un estilo de
liderazgo acorde con esa situación y nivel de madurez.

Para entender el modelo, tenemos que partir de la base que existen dos estilos
directivos, uno más de apoyo o colaborador y otro más directivo.

1. Comportamiento directivo: El líder define las funciones y tareas; indicar como


llevarlas a cabo y controla el resultado.
2. Comportamiento de apoyo: El líder fomenta la participación y la toma de
decisiones, aporta valor y colabora con el equipo.
El líder puede emplear ambos tipos de estilos
directivos (dirección o apoyo) en diferentes
grados dando como resultado cuatro estilos de
liderazgo:

1. Dar ordenes E1: Dar instrucciones


específicas y supervisión continua.
2. Persuadir E2: Explicar tus decisiones como
jefe de proyecto, intentando proveer la
información necesaria para que el equipo
acepte tus ideas.
3. Participar E3: Compartir ideas y facilitar la
toma de decisiones
4. Delegar E4: Baja presencia del líder, las
decisiones son tomadas por miembros del
equipo
EN RESUMEN

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