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EMBARAZO

INTERRUPCIÓN LEGAL DEL


EMBARAZO
SISTEMA
REPRODUCTOR
FEMENINO
SISTEMA
REPRODUCTOR
MASCULINO
OVULACIÓN
ESPERMATOZOIDES
FECUNDACIÓN
INFECCIONES
DE TRANSMISIÓN
SEXUAL
PRESERVATIVOS
PASTILLAS
ANTICONCEPTIVAS-
IMPLANTE
SUBDÉRMICO
SALUD
GÉNERO
VÍNCULOS AFECTIVOS-
EMOCIONES
DESEOS MIEDOS
PLACER FANTASÍAS
DERECHOS LIBERTAD
CULTURA CUERPO
MENTE INTIMIDAD
IDENTIDAD
ORIENTACIÓN SEXUAL
RESPONSABILIDAD
AMOR RESPETO
ENAMORAMIENTO
MITOS
COSTUMBRES
VALORES
NIÑEZ VEJEZ
PERSONALIDAD
RIESGOS
DECISIONES
ELECCIÓN
FAMILIA
DERECHOS
DIVERSIDAD
LEYES
EDUCACIÓN
MENOPAUSIA
Nuestra sexualidad nos acompaña desde que nacemos hasta
que morimos y la desarrollamos a lo largo de toda nuestra vida.
Se relaciona con nuestro cuerpo, con lo que sentimos y, más
adelante, con el hecho de compartirla con otras personas
decidiendo quién, cuándo y cómo.

Tiene que ver con la forma con la que aprendo a relacionarme


con las otras personas. Del trato que me doy, del trato que doy
a las demás personas, del trato que recibo de las demás
personas.

Tiene que ver con la experiencia, con el aprendizaje y con el


cambio.

Se relaciona con los derechos que nuestra sociedad reconoce


respecto a ella.
Se relaciona con tomar decisiones, y para ello es interesante
que nos preguntemos ¿cómo quiero vivir mi sexualidad? ¿por
qué quiero tener relaciones sexuales?

La sexualidad la vivo a través de mi CUERPO, de lo que yo


SIENTO y de las DECISIONES que tomó respecto a ella.

Leer con atención las siguientes preguntas. Debatir en grupo las respuestas y
responder en sus carpetas

1. ¿A quién podría acudir una amiga/o de tu edad frente a un atraso en la


menstruación o sospecha en la pareja de un posible embarazo?
2. ¿Pensás que los jóvenes encuentran en la escuela personas de confianza
para pedir ayuda sobre temas de sexualidad en sentido amplio?
3. ¿Cómo calificarían estos ámbitos entre “amigable” , “poco amigable” y “nada
amigable” según la confianza para dialogar sobre temas de sexualidad?
escuela- centros de salud- familia- pareja- grupo de amigos-

Leer con atención las siguientes preguntas. Debatir en grupo las respuestas y
responder en sus carpetas

1. ¿A quién podría acudir una amiga/o de tu edad frente a un atraso en la


menstruación o sospecha en la pareja de un posible embarazo?
2. ¿Pensás que los jóvenes encuentran en la escuela personas de
confianza para pedir ayuda sobre temas de sexualidad en sentido
amplio?
3. ¿Cómo calificarían estos ámbitos entre “amigable” , “poco amigable” y
“nada amigable” según la confianza para dialogar sobre temas de
sexualidad? escuela- centros de salud- familia- pareja- grupo de
amigos-

Leer con atención las siguientes preguntas. Debatir en grupo las respuestas y
responder en sus carpetas

4. ¿A quién podría acudir una amiga/o de tu edad frente a un atraso en la


menstruación o sospecha en la pareja de un posible embarazo?
5. ¿Pensás que los jóvenes encuentran en la escuela personas de
confianza para pedir ayuda sobre temas de sexualidad en sentido
amplio?
6. ¿Cómo calificarían estos ámbitos entre “amigable” , “poco amigable” y
“nada amigable” según la confianza para dialogar sobre temas de
sexualidad? escuela- centros de salud- familia- pareja- grupo de
amigos-
Leer con atención las siguientes preguntas. Debatir en grupo las respuestas y
responder en sus carpetas

7. ¿A quién podría acudir una amiga/o de tu edad frente a un atraso en la


menstruación o sospecha en la pareja de un posible embarazo?
8. ¿Pensás que los jóvenes encuentran en la escuela personas de
confianza para pedir ayuda sobre temas de sexualidad en sentido
amplio?
9. ¿Cómo calificarían estos ámbitos entre “amigable” , “poco amigable” y
“nada amigable” según la confianza para dialogar sobre temas de
sexualidad? escuela- centros de salud- familia- pareja- grupo de
amigos-

LOS ANTICONCEPTIVOS Y LA REVOLUCIÓN FEMENINA

Por: Mariana Calvo Pérez8.03.2023

Hay muchos hitos durante la historia que cambiaron la vida de las mujeres, como el derecho a estudiar,
a trabajar, o a votar. Pero se habla poco de un hecho que revolucionó la manera cómo las mujeres
vivimos nuestra vida y nuestro rol en la sociedad: la creación y distribución masiva de los
anticonceptivos.

Los anticonceptivos fueron ideados por Margaret Sanders, enfermera estadounidense que había visto
a su madre morir luego de tener 11 hijos. «Las mujeres necesitan una píldora anticonceptiva confiable
que sea tan fácil de tomar como una aspirina»- declaró Sanders. Fue Katherine Dexter, heredera de
una gran fortuna, quien financió, motivada por las ideas de Sanders, la investigación y creación de las
píldoras anticonceptivas, en conjunto con el fisiólogo Gregory Pincus, y el ginecólogo John Rock[1].
En 1956 las primeras píldoras anticonceptivas fueron probadas en humanos, y solo en 1960 la FDA
aprobó la primera píldora anticonceptiva oral, cuya comercialización causó la indignación de grupos
conservadores de la época, que creían que esta era inmoral y que iría contra los valores tradicionales
de la familia. Nada pudo parar, sin embargo, su masificación, probablemente gracias a las leyes de
oferta y demanda. Para el año 2017, 63% de las mujeres en pareja usaba algún método
anticonceptivo.
Los anticonceptivos revolucionaron la vida de las mujeres, impactando principalmente en 2 aspectos:
Primero, permitió a las familias planificar cuántos hijos querían tener. Antes de 1960, las mujeres en el
mundo tenían un promedio de 5 hijos[2]. Es decir, una mujer que se casaba joven rápidamente tenía
los hijos «que Dios mande», imposibilitando de planificar ya sea terminar una carrera, o avanzar en el
trabajo antes de convertirse en mamá. Nada de esto era posible para una mujer sexualmente activa,
con lo cual sus posibilidades de desarrollarse fuera de las funciones de madre se encontraban
limitadas.
Para el 2020, el promedio de hijos por mujer había disminuido hasta llegar a 2,3, lo cual ha tenido un
impacto directo en la reducción de la pobreza de las familias, y las posibilidades laborales de las
mujeres.
El segundo aspecto en el cual los anticonceptivos fue revolucionario fue en el de la liberación de la
sexualidad femenina. La virginidad fue una virtud impuesta a las mujeres por temas ideológicos
(conectados a la religión), pero también a un tema práctico: ninguna familia quería hacerse cargo de
una joven soltera, embarazada y sin ingresos. De esa manera, mientras era socialmente aceptado que
los hombres tengan experiencias, y diversas parejas antes de casarse, lo mismo no aplicaba a las
mujeres.
La masificación de los anticonceptivos les regaló a las mujeres la posibilidad de decidir sobre sus
propios cuerpos, y elegir cuando tener una relación con el fin de procrear, y cuando tener relaciones
simplemente por placer. Les permitieron tener múltiples parejas antes de decidir casarse o tener hijos,
además de postergar la maternidad para después de cumplir metas académicas y profesionales, y en
consecuencia ser económicamente independientes. ¡Toda una revolución!
No queda duda que Sander y Dexter fueron feministas liberales, que creían que las mujeres tenían el
derecho a cumplir con sus metas y sueños individuales, retando al conservadurismo y el rol que este
había establecido para el género femenino, y poniendo los deseos individuales de las mujeres por
encima de los colectivos.
Este 8 de marzo, celebro especialmente al paquetito de pastillas que llevo en mi cartera, y a las
mujeres que hicieron posible que pueda comprarlo con mi propio dinero.

Lee el artículo y respondé en tu carpeta : ¿ Qué relación establece la autora entre


anticonceptivos y “revolución femenina"?

LOS ANTICONCEPTIVOS Y LA REVOLUCIÓN FEMENINA

Por: Mariana Calvo Pérez8.03.2023

Hay muchos hitos durante la historia que cambiaron la vida de las mujeres, como el derecho a estudiar,
a trabajar, o a votar. Pero se habla poco de un hecho que revolucionó la manera cómo las mujeres
vivimos nuestra vida y nuestro rol en la sociedad: la creación y distribución masiva de los
anticonceptivos.

Los anticonceptivos fueron ideados por Margaret Sanders, enfermera estadounidense que había visto
a su madre morir luego de tener 11 hijos. «Las mujeres necesitan una píldora anticonceptiva confiable
que sea tan fácil de tomar como una aspirina»- declaró Sanders. Fue Katherine Dexter, heredera de
una gran fortuna, quien financió, motivada por las ideas de Sanders, la investigación y creación de las
píldoras anticonceptivas, en conjunto con el fisiólogo Gregory Pincus, y el ginecólogo John Rock[1].
En 1956 las primeras píldoras anticonceptivas fueron probadas en humanos, y solo en 1960 la FDA
aprobó la primera píldora anticonceptiva oral, cuya comercialización causó la indignación de grupos
conservadores de la época, que creían que esta era inmoral y que iría contra los valores tradicionales
de la familia. Nada pudo parar, sin embargo, su masificación, probablemente gracias a las leyes de
oferta y demanda. Para el año 2017, 63% de las mujeres en pareja usaba algún método
anticonceptivo.
Los anticonceptivos revolucionaron la vida de las mujeres, impactando principalmente en 2 aspectos:
Primero, permitió a las familias planificar cuántos hijos querían tener. Antes de 1960, las mujeres en el
mundo tenían un promedio de 5 hijos[2]. Es decir, una mujer que se casaba joven rápidamente tenía
los hijos «que Dios mande», imposibilitando de planificar ya sea terminar una carrera, o avanzar en el
trabajo antes de convertirse en mamá. Nada de esto era posible para una mujer sexualmente activa,
con lo cual sus posibilidades de desarrollarse fuera de las funciones de madre se encontraban
limitadas.
Para el 2020, el promedio de hijos por mujer había disminuido hasta llegar a 2,3, lo cual ha tenido un
impacto directo en la reducción de la pobreza de las familias, y las posibilidades laborales de las
mujeres.
El segundo aspecto en el cual los anticonceptivos fue revolucionario fue en el de la liberación de la
sexualidad femenina. La virginidad fue una virtud impuesta a las mujeres por temas ideológicos
(conectados a la religión), pero también a un tema práctico: ninguna familia quería hacerse cargo de
una joven soltera, embarazada y sin ingresos. De esa manera, mientras era socialmente aceptado que
los hombres tengan experiencias, y diversas parejas antes de casarse, lo mismo no aplicaba a las
mujeres.
La masificación de los anticonceptivos les regaló a las mujeres la posibilidad de decidir sobre sus
propios cuerpos, y elegir cuando tener una relación con el fin de procrear, y cuando tener relaciones
simplemente por placer. Les permitieron tener múltiples parejas antes de decidir casarse o tener hijos,
además de postergar la maternidad para después de cumplir metas académicas y profesionales, y en
consecuencia ser económicamente independientes. ¡Toda una revolución!
No queda duda que Sander y Dexter fueron feministas liberales, que creían que las mujeres tenían el
derecho a cumplir con sus metas y sueños individuales, retando al conservadurismo y el rol que este
había establecido para el género femenino, y poniendo los deseos individuales de las mujeres por
encima de los colectivos.
Este 8 de marzo, celebro especialmente al paquetito de pastillas que llevo en mi cartera, y a las
mujeres que hicieron posible que pueda comprarlo con mi propio dinero.
Lee el artículo y respondé en tu carpeta : ¿ Qué relación establece la autora entre
anticonceptivos y “revolución femenina"?

LOS ANTICONCEPTIVOS Y LA REVOLUCIÓN FEMENINA

Por: Mariana Calvo Pérez8.03.2023

Hay muchos hitos durante la historia que cambiaron la vida de las mujeres, como el derecho a estudiar,
a trabajar, o a votar. Pero se habla poco de un hecho que revolucionó la manera cómo las mujeres
vivimos nuestra vida y nuestro rol en la sociedad: la creación y distribución masiva de los
anticonceptivos.

Los anticonceptivos fueron ideados por Margaret Sanders, enfermera estadounidense que había visto
a su madre morir luego de tener 11 hijos. «Las mujeres necesitan una píldora anticonceptiva confiable
que sea tan fácil de tomar como una aspirina»- declaró Sanders. Fue Katherine Dexter, heredera de
una gran fortuna, quien financió, motivada por las ideas de Sanders, la investigación y creación de las
píldoras anticonceptivas, en conjunto con el fisiólogo Gregory Pincus, y el ginecólogo John Rock[1].
En 1956 las primeras píldoras anticonceptivas fueron probadas en humanos, y solo en 1960 la FDA
aprobó la primera píldora anticonceptiva oral, cuya comercialización causó la indignación de grupos
conservadores de la época, que creían que esta era inmoral y que iría contra los valores tradicionales
de la familia. Nada pudo parar, sin embargo, su masificación, probablemente gracias a las leyes de
oferta y demanda. Para el año 2017, 63% de las mujeres en pareja usaba algún método
anticonceptivo.
Los anticonceptivos revolucionaron la vida de las mujeres, impactando principalmente en 2 aspectos:
Primero, permitió a las familias planificar cuántos hijos querían tener. Antes de 1960, las mujeres en el
mundo tenían un promedio de 5 hijos[2]. Es decir, una mujer que se casaba joven rápidamente tenía
los hijos «que Dios mande», imposibilitando de planificar ya sea terminar una carrera, o avanzar en el
trabajo antes de convertirse en mamá. Nada de esto era posible para una mujer sexualmente activa,
con lo cual sus posibilidades de desarrollarse fuera de las funciones de madre se encontraban
limitadas.
Para el 2020, el promedio de hijos por mujer había disminuido hasta llegar a 2,3, lo cual ha tenido un
impacto directo en la reducción de la pobreza de las familias, y las posibilidades laborales de las
mujeres.
El segundo aspecto en el cual los anticonceptivos fue revolucionario fue en el de la liberación de la
sexualidad femenina. La virginidad fue una virtud impuesta a las mujeres por temas ideológicos
(conectados a la religión), pero también a un tema práctico: ninguna familia quería hacerse cargo de
una joven soltera, embarazada y sin ingresos. De esa manera, mientras era socialmente aceptado que
los hombres tengan experiencias, y diversas parejas antes de casarse, lo mismo no aplicaba a las
mujeres.
La masificación de los anticonceptivos les regaló a las mujeres la posibilidad de decidir sobre sus
propios cuerpos, y elegir cuando tener una relación con el fin de procrear, y cuando tener relaciones
simplemente por placer. Les permitieron tener múltiples parejas antes de decidir casarse o tener hijos,
además de postergar la maternidad para después de cumplir metas académicas y profesionales, y en
consecuencia ser económicamente independientes. ¡Toda una revolución!
No queda duda que Sander y Dexter fueron feministas liberales, que creían que las mujeres tenían el
derecho a cumplir con sus metas y sueños individuales, retando al conservadurismo y el rol que este
había establecido para el género femenino, y poniendo los deseos individuales de las mujeres por
encima de los colectivos.
Este 8 de marzo, celebro especialmente al paquetito de pastillas que llevo en mi cartera, y a las
mujeres que hicieron posible que pueda comprarlo con mi propio dinero.

Lee el artículo y respondé en tu carpeta : ¿ Qué relación establece la autora entre


anticonceptivos y “revolución femenina"?

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