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- Comentario de Texto , MANIFIESTO DE MANZANARES - Lucía García Santana 2ºbach A

En el año 1854, bajo el reinado de Isabel II, después de una crisis parlamentaria provocada por la suspensión
de las Cortes vulnerando la Constitución de 1845. surge en Manifiesto de Manzanares, cuya autoría
pertenece a un joven Antonio Cánovas del Castillo y es firmado por el general O’Donnel, perteneciente al
Partido Conservador, y dirigente del pronunciamiento militar. Este documento, conocido por la Vicalvarada,
destaca la necesidad de una regeneración política en España. A través de proclamaciones, se lucha por el
retorno a un régimen representativo, reformas electorales, Garantía de la libertad de imprenta y aspiraciones
económicas, como la suspensión y reducción de impuestos.

En el contexto del reinado de Isabel II, las ideologías políticas se dividieron en dos grandes partidos: el
Partido Moderado (y la unión liberal) y el Partido Progresista (y los demócratas). Estas fuerzas políticas
representaban visiones opuestas sobre la organización del Estado, el poder del monarca y la distribución del
poder.

El partido moderado abogaba por una monarquía constitucional más conservadora, mientras que el partido
progresista buscaba reformas más liberales. Otros actores políticos relevantes incluían a los republicanos,
callistas y diferentes facciones con diversas perspectivas ideológicas.

La fragilidad de la monarquía isabelina se manifiesto en el atraso económico y la base político-social.La


economía española enfrentaba desafíos estructurales y la falta de apoyo generalizado debilitaba la estabilidad
del régimen. A su vez la lucha entre los partidos dinásticos, junto con los desafíos económicos y la falta de
apoyo social, marcó la fragilidad de la monarquía isabelina en la primera mitad del siglo XIX en España.

La década Moderada, que abarca desde 1845 hasta 1854, se caracteriza por el gobierno del Partido
Moderado, la promulgación de la Constitución de 1845, el Concordato con la Santa Sede, la creación de la
Guardia Civil y la centralización de la Ley de Ayuntamientos. sin embargo, Hacia 1852, la suspensión de las
cortes y el gobierno a través de decretos generan descontento, incluso entre los miembros del propio partido,
como Narváez, debido al incumplimiento de la constitución de 1845.

Es en este contexto que surge la Vicalvarada, dirigida por O’Donnel, dando inicio a la Revolución de 1854.
Isabel II convoca al general Espartero, del partido Progresista, para formar gobierno, siguiendo las premisas
del Manifiesto de Manzanares. Así comienza el Bienio Progresista, Marcado por reformas como la
Desamortización Civil de Madoz y la Ley de Ferrocarriles.

No obstante, este periodo reformista enfrenta desafíos considerables. La revuelta obrera en Cataluña,
provocada por la introducción de máquinas y la crisis de desabastecimiento debido a la exportación del trigo
a Europa durante la guerra de Crimea, generan tensiones. La oposición de moderados y la iglesia, contrarios
a ciertos aspectos de la Constitución, también contribuyen a la complejidad del momento.

La dimisión de Espartero conduce a O’Donnel al poder, dando inicio al Bienio Moderado. Entre sus primeras
acciones, destaca el cierre de la Asamblea Constituyente y la aprobación de la Constitución de 1845 con un
Acta Adicional, buscando apaciguar las tensiones con algunas concesiones progresistas.

En conclusión, el Manifiesto de Manzanares marca el inicio de una nueva etapa política en el reinado de
Isabel II, revelando la influencia del ejército en la vida política del siglo XIX en España. Las luchas entre
partidos, los pronunciamientos y los cambios del gobierno por la fuerza caracterizan esta época, dejando una
huella que perdura a lo largo de los siglos XIX y XX.

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