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Introducción a los sistemas abiertos,

cerrados y aislados
¿Qué es un sistema?
¿Qué es un SISTEMA, en ciencias?
En ciencias, un sistema es toda porción del universo que se aísla para
su estudio.

Clasificación de los sistemas


Sistemas abiertos
Sabemos muy bien que dentro de un laboratorio no podemos comer ni beber
alimentos, por lo que nos decidimos a hacer un café caliente. Batimos el café
soluble, le ponemos agua bien caliente para afrontar el frío de la mañana. Lo
dejamos sobre la mesada un rato mientras prendemos nuestra computadora y
agarramos nuestros cuadernos y apuntes de ciencias naturales. La profesora
nos pidió clasificar a los sistemas, pero no tenemos ni idea de cómo hacerlo,
por dónde empezar, qué analizar. ¡Pero tranquilos! El haber dejado el café
caliente sobre la mesa nos dio una interesante idea.

Sucede que, al cabo de un tiempo, nos damos cuenta que nuestro café está
más frío que antes. En otras palabras, su temperatura cambió. ¿Qué pasó? El
ambiente estaba a menor temperatura que nuestro rico café. Pensando, nos
dimos cuenta que la energía presente en el café pasó al ambiente y nuestra
bebida se nos enfrió un poquito. ¡Qué interesante! Algo sucedió con la energía.
Pasó del café al ambiente. ¿Hubiese pasado lo mismo si ponía el café dentro
de mi vaso térmico o dentro de un termo?
La mayoría de los sistemas tienen la particularidad de permitir que la energía
entre y salga de ellos. Sin embargo, sólo algunos de ellos permiten que la
materia entre y salga. Pensando en el café, hemos visto que de la taza pudo
salir energía hacia el ambiente (por eso se enfrió). Le contamos esto a nuestro
compañero de laboratorio y nos dijo que le pasó algo parecido: la botella de
hielo que había llevado a clases se calentó y ya tenía un poco de agua líquida.
Me ofrece un poco, pero prefiero seguir pensando en cómo usar esta
información para clasificar a los sistemas antes de que la profesora de
Ciencias Naturales me ponga un uno.

Cuando un sistema está abierto, como nuestra botella de hielo o nuestra taza
de café caliente, permite que haya una transferencia de materia y de energía
con el ambiente. Así, por ejemplo, el café se enfrió y, además, pudo ingresar a
mi cuerpo. ¡Nada mejor que una rica taza de café en invierno! Lo mismo sucede
con la botella de agua, aunque la hubiera preferido un poco menos fría para
estas alturas del año. La profesora entra a clases y escribe en el pizarrón:

Un sistema abierto es un sistema que intercambia materia y energía con el


entorno; es decir, permite la entrada y salida de materia y energía.
Ejemplo de sistema abierto
Ahora que lo pensamos, es exactamente igual a lo que sucedió con nuestro
café. Hubo una entrada de energía (la luz del Sol pudo ingresar a la taza e
iluminarla) y una salida de energía (la energía térmica del café salió desde allí
hacia el ambiente). También hubo una entrada de materia (pudo haber caído
polvo dentro de la taza) y una salida de materia (el café pasó de la taza a mi
cuerpo). Es, entonces, un excelente ejemplo de sistema abierto.

Los sistemas cerrados


Algunos sistemas no tienen la capacidad de intercambiar materia con el
ambiente. Sólo intercambian energía. Por ejemplo, la botella de hielo que tenía
nuestro compañero de laboratorio. Esa botella permanecía cerrada la mayor
cantidad de tiempo, con una tapa, para evitar que pierda contenido y provoque
un desastre en su mochila. En otras palabras, había un ingreso de energía
(entra luz y calor) y un egreso de energía (podíamos ver el contenido de la
botella porque la luz que entró a la botella “revotó” en el hielo y llegó a
nuestros ojos). Pero en ningún momento, con la tapa puesta, hubo entrada o
salida de materia. Esto es lo que caracteriza a un sistema cerrado.

Un sistema cerrrado -escribió la profe- es un sistema que no intercambia


materia pero sí energía con el ambiente.

Un buen esquema sería el siguiente:


Los sistemas cerrados son bastante comunes de hallar en la vida cotidiana.
Ejemplos pueden ser las latas o los cartones de leche o bebidas en las
góndolas de un supermercado, un ahabitación con las ventanas y las puertas
cerradas, una cartuchera cerrada y un montón de ejemplos más.

Los sistemas aislados.


Los sistemas aislados son muy difíciles de encontrar en la naturaleza. En
ellos, no hay intercambio de materia ni de energía. Son tan difíciles de hallar
que prácticamente podemos decir que no existen, dado que un sistema aislado
-como un termo o un iglú herméticamente cerrado- tarde o temprano terminará
ganando o perdiendo energía. Pero, si analizamos el caso poniendo ejemplos
ideales, podríamos pensar en algún que otro ejemplo, tales como los
mencionados en este párrafo.

¿Por qué es un sistema aislado un termo? Sucede que un termo mantiene la


temperatura de lo que tiene dentro por un buen rato. Esto significa que, si no
se abrió, no entra materia ni sale materia y tampoco hay intercambio de
energía que haga que el contenido se caliente o enfríe.

La gran profe escribió entonces:

Un sistema no intercambia ni materia ni energía con el ambiente.


Conclusión
Se denomina Sistema Abierto a un sistema capaz de
intercambiar energía y materia con el entorno; un Sistema
Cerrado sólo intercambia energía y un Sistema Aislado no
intercambia ni materia ni energía.

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