Puebla Complejo Regional Nororiental Práctica Fisiología del Gusto Asignatura: Fisiología del ejercicio
Docente: Martha Lucia Ita - Amador
Integrantes del equipo:
Sebastián Rivera Correa Hansel Naín Rodríguez García Gildardo Tapia De La Cruz Irvin Joan Vivero Márquez Percepción del gusto El sentido del gusto es uno de los sentidos que mas utilizamos en la vida diaria, y es uno de los mas satisfactorios por obvias razones. La sensación del gusto se produce al estimular receptores específicos que están en la boca y la lengua. Para poder percibir un sabor se necesita que los “químicos” de la comida contacten con los receptores que les corresponden. Para percibir sabor necesitamos de un segundo sentido, el sentido del olfato. Ambos están relacionados estrechamente. Cuando se estimulan, las células gustativas liberan neurotransmisores y péptidos que activan las fibras aferentes de las ramas del nervio craneal Glosofaríngeo IX que inerva la lengua y el paladar blando por medio de el cual se va a trasmitir la información sensitiva al sistema nervioso central. Se dice que hay 5 sabores primarios: Dulce, salado, amargo, ácido y umami. También se dice que cada sabor tiene su propio receptor. Las células receptoras tipo I abarca cerca de el 50% y son activadas por las respuestas sensitivas provocadas por NaCl (sal). Los receptores tipo II abarcan un 19% aproximadamente y se activan con los sabores dulces, amargos y umami. Los TRC tipo III se activan con los sabores ácidos. También son sensibles y producen respuestas gustativas al agua y la carbonatación. Sin importar el sabor y la vía o receptor estimulado el proceso de discreción de los sabores será el mismo, llevando a una acumulación de calcio a la hendidura sináptica. Esto provoca la exocitosis del neurotransmisor en la membrana presináptica lo que genera un potencial de acción neuronal. En cuanto se recibe el estímulo gustativo durante milésimas de segundo el estimulo es máximo y después regresa al nivel estacionario. Comparación Bruce con paciente Durante la practica de laboratorio tomamos como referencia para el experimento a Bruce de la película Matilda para poder definir cuál es la percepción de un paciente con obesidad al sabor dulce comparándolo con un paciente sin obesidad. Se realizaron pruebas con 2 pacientes de peso normal tomando en cuenta edad y estatura. La prueba consistió en colocar en 8 zonas distintas de la lengua granos de azúcar morena para que los pacientes percibieran esta sustancia. Durante la practica el grupo llego a la conclusión de que no era posible comer tanto pastel como Bruce, y no por la cantidad de comida en peso, sino por el dulce de el pastel ya que la mayoría llego a la misma conclusión; El pastel es demasiado dulce para comerlo tan rápido. Tomando en cuenta que el paciente Bruce es obeso y suponiendo que tiene la misma edad que nosotros (19-22 años). Sabemos en la teoría que para poder percibir el sabor dulce de manera “adecuada” se deben cumplir ciertos factores, ya que por ejemplo al consumir bebidas endulzadas frías, la percepción de este sabor se ve considerablemente disminuido debido a que los cambios de temperatura en la lengua pueden alterar la percepción del gusto. Por ejemplo, al enfriar gaseosas endulzadas a unos 5-12 °C reduce la intensidad del dulzor de la sacarosa. Sabemos que la leptina es una hormona que promueve la perdida de peso mediante la modificación de el apetito y procesos metabólicos y esta actúa también en la percepción de el sabor dulce debido a que gracias a los resultados de la experimentación en ratas se determino que esta hormona puede llegar a modular la respuesta al sabor dulce ya que actúa uniéndose al “receptor obeso” un receptor de citocinas de tipo I que se expresa en células de papilas circunvaladas y fungiformes. Ya que esta hormona actúa cuando se está bajando de peso y podemos asumir que Bruce no estaba bajando de peso podemos decir que su respuesta al sabor dulce era alta o normal ya que al comparar la respuesta de los pacientes sanos obtenemos lo siguientes resultados. Se coloco azúcar en 8 zonas distintas de la lengua, un paciente solo pudo detectar el sabor dulce en 3 ocasiones mientras que el otro paciente solo pudo detectar el azúcar en 2 ocasiones, variando los tiempos de reacción entre 4 y 10 segundos.