UNIVERSITARIA UNIAGUSTINIANA

CÁTEDRA AGUSTINIANA

ESTUDIANTE: Yency Daniela Moreno Pinto

DOCENTE: Luis Alejandro Sepulveda Zotaquira

Cuestionario

1. En el aspecto literario, ¿Qué hizo Agustín durante el retiro de Casiciaco?

2. ¿Cuántos personajes crees que aparecen en Los Soliloquios? y ¿Cuáles son?

3. ¿Por qué las Confesiones se pueden llamar "Carta a Dios"?

4. Explica los motivos que llevaron a Agustín a componer la Ciudad de Dios.

5. La Ciudad de Dios es una obra “CIRCUNSTANCIAL”; trata de explicar esto.

6. Narra brevemente el disgusto que tuvo san Agustín con los libros sobre la Trinidad.

7. ¿Qué diferencia crees que hay entre una carta que recibes o escribes a un amigo y las cartas
que escribía san Agustín?

8. ¿Cuál es la fuente o bibliografía más usada por san Agustín en la predicación?

9. ¿Qué son las Revisiones? ¿Por qué se las llama LAS ÚLTIMAS CONFESIONES?

10. Existen dos obras con el nombre de Soliloquios; ¿Cuál es de san Agustín y cuál no? ¿A qué
género pertenece esta última?
 Solución

1. Durante su retiro en Cassiciacum, Agustín experimentó una búsqueda espiritual y

reflexiva tras varias transformaciones en su vida. Dedicó tiempo a la oración, meditación
y a profundizar en reflexiones filosóficas y teológicas. Estudió las Escrituras y participó
en discusiones con amigos. Este período fue crucial en su camino hacia la conversión al
cristianismo, ayudándole a aclarar sus ideas y superar conflictos internos. En el año 387,
Agustín fue bautizado por San Ambrosio, obispo de Milán, marcando un hito
significativo en su vida. Se convirtió en uno de los padres de la Iglesia y un influyente
pensador cristiano.
2. En términos de personajes, la obra generalmente se centra en el propio Agustín y su
diálogo interno con Dios. No hay una variedad extensa de personajes en el sentido
tradicional, ya que la obra se enfoca principalmente en la introspección y la relación entre
Agustín y lo divino. Es una obra que explora las cuestiones filosóficas y teológicas desde
una perspectiva personal, con Agustín reflexionando sobre la naturaleza de Dios, el bien
y el mal, entre otros temas.
3. La idea de llamar a las "Confesiones" de San Agustín "Carta a Dios" podría surgir debido
a la naturaleza de la obra, que se presenta como una comunicación directa y personal con
la divinidad. A lo largo de las Confesiones, Agustín se dirige a Dios, compartiendo sus
pensamientos más íntimos y buscando una comprensión más profunda de la fe y de sí
mismo. La obra sirve como una especie de confesión y oración en la que Agustín
reflexiona sobre su vida, sus pecados y su búsqueda espiritual.
4. "La Ciudad de Dios" fue escrita con el propósito de ofrecer una defensa sólida del
cristianismo, abordar las críticas contemporáneas y proporcionar una visión teológica y
filosófica que trascendiera los eventos históricos y destacara la importancia de la fe en
Dios, como por ejemplo Agustín quería refutar las acusaciones de que el declive de Roma
estaba relacionado con el abandono de los dioses paganos y la adopción del cristianismo.
A través de "La Ciudad de Dios", argumentó que la Ciudad Terrenal (representada por
Roma) es temporal y susceptible a la decadencia, mientras que la Ciudad de Dios es
eterna y trasciende las vicisitudes terrenales.
 5. La obra fue escrita en respuesta a circunstancias o eventos específicos de su tiempo,
algunas razones por las cuales se podría decir que "La Ciudad de Dios" es una obra
circunstancial es como por ejemplo que Agustín utiliza las circunstancias de su tiempo
para reflexionar sobre cuestiones teológicas más amplias, como la relación entre la
voluntad divina y los eventos terrenales. El saqueo de Roma proporciona un contexto
específico para desarrollar sus ideas sobre la Ciudad de Dios y la Ciudad Terrenal.

6. El concepto de un Dios trino, compuesto por Padre, Hijo y Espíritu Santo en una unidad
indivisible, le resultaba difícil de reconciliar con su comprensión anterior de la divinidad.
Su disgusto inicial con los libros sobre la Trinidad reflejaba su lucha por entender y
aceptar las doctrinas cristianas fundamentales antes de su eventual conversión. Este
periodo de descontento intelectual contribuyó a su búsqueda espiritual y a su posterior
desarrollo teológico una vez que abrazó el cristianismo y se convirtió en uno de los
pensadores cristianos más influyentes.

7. Los escritos de Agustín a menudo abordaban cuestiones doctrinales, éticas y morales, así
como temas relacionados con la fe y la vida espiritual. En contraste, las cartas entre
amigos las cuales son mas informales sin contrastes éticos o morales de por medio.

8. En sus escritos y sermones, Agustín se basó en una amplia gama de fuentes, siendo la
Biblia la fuente más fundamental, sin embargo, se basó también en textos filosóficos y
teológicos de la antigüedad como, por ejemplo:

Platón: Agustín estudió y apreció las obras de Platón, y se pueden encontrar influencias
platónicas en su teología y filosofía, especialmente en conceptos como la realidad de las ideas y
la búsqueda de la verdad.

Cicerón: Agustín también fue influenciado por las obras de Cicerón, un destacado orador y
filósofo romano. La retórica de Cicerón y su énfasis en la elocuencia tuvieron un impacto en el
estilo y la presentación de Agustín en sus sermones.
Plotino: Agustín se familiarizó con el neoplatonismo a través de las obras de filósofos como
Plotino. El neoplatonismo influyó en su comprensión de la relación entre el alma y Dios.

Escritores cristianos anteriores: Agustín también leyó y se inspiró en los escritos de algunos
padres de la iglesia y teólogos cristianos anteriores, como Ambrosio de Milán y Orígenes.

9. La actitud de Agustín hacia la revisión y la reflexión constante se alinea con su énfasis en

la importancia de la búsqueda continua de la verdad y el crecimiento espiritual. Su
enfoque en la confesión y la humildad intelectual también se refleja en su disposición a
corregir y revisar sus propias ideas a medida que avanzaba en su viaje espiritual y
teológico. En "Las Confesiones", San Agustín relata su vida y su conversión al
cristianismo. Describe sus experiencias, luchas, reflexiones filosóficas y su relación con
Dios. La obra es única porque, en lugar de ser una confesión privada dirigida a un
sacerdote, es una confesión pública escrita en forma de oración a Dios.
Si se menciona "Las Últimas Confesiones", podría sugerir una interpretación específica
de "Las Confesiones" en el contexto de las últimas etapas de la vida de Agustín o como
una reflexión final antes de su fallecimiento. Es posible que alguien haya utilizado esta
expresión para referirse a una edición o interpretación específica de la obra que destaca
los aspectos finales de la vida y el pensamiento de San Agustín.
10. “Soliloquios" de San Agustín: Esta obra, conocida como "Soliloquia" en latín, es una
obra filosófica escrita por San Agustín de Hipona. En ella, Agustín explora diversas
cuestiones filosóficas y teológicas a través de un diálogo interno consigo mismo. La obra
se compone de una serie de reflexiones personales y preguntas que Agustín se plantea a sí
mismo en un formato de monólogo, abordando temas como la naturaleza de Dios, el alma
y la búsqueda de la verdad.
"Soliloquios" de Boecio: Boecio, un filósofo y escritor romano del siglo VI, también
escribió una obra titulada "Consolatio Philosophiae", se encuentra dentro de su obra más
amplia y es un diálogo filosófico en el que Boecio explora temas filosóficos y reflexiona
sobre cuestiones relacionadas con la fortuna, la providencia y el libre albedrío.