Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Desde una perspectiva psicológica, la comunidad no solo se trata de la ubicación física de las
personas, sino también de las relaciones y redes sociales que se forman entre ellas. La comunidad
puede proporcionar un sentido de pertenencia, apoyo emocional, identidad compartida y
oportunidades de participación y colaboración.
En psicología comunitaria, se estudian las interacciones entre individuos y su entorno social, así
como también se busca promover el bienestar y la salud mental en el contexto de la comunidad.
Se analizan los factores que influyen en la cohesión comunitaria, la resiliencia frente a desafíos y
crisis, y se desarrollan intervenciones para fortalecer los lazos sociales y fomentar el
empoderamiento y la participación de los miembros de la comunidad.
Rama de la psicología cuyo objeto es el estudio de los factores psicosociales que permiten
desarrollar, fomentar y mantener el control y poder que los individuos pueden ejercer sobre su
ambiente individual y social para solucionar problemas que los aquejan y lograr cambios en esos
ambientes y en la estructura social.
La mayoría de los autores define a la psicología comunitaria como aquella que trata de la
comunidad y que es realizada con la comunidad, ya que esto supone una característica que es
realmente la primera y primordial, es decir, la esencial de la psicología comunitaria: lo comunitario
incluye el rol activo de la comunidad, su participación. Y no sólo como invitada, o como
espectadora aceptada o receptora de beneficios, sino como agente activo con voz, voto y veto.
Los cambios en esos grupos transforman a las personas. Se produce así una relación dialéctica de
transformaciones mutuas.
• Concibe a la comunidad como ente dinámico compuesto por agentes activos, actores sociales
relacionados constructores de la realidad en que viven.
1. Normas y valores sociales: La cultura establece las normas y valores que guían el
comportamiento aceptable dentro de una sociedad. Estas normas y valores definen lo que se
considera correcto o incorrecto, apropiado o inapropiado en diferentes situaciones. Por
ejemplo, en algunas culturas, la puntualidad puede ser altamente valorada, mientras que en
otras, la flexibilidad en los horarios puede ser más común.
2. Roles sociales: La cultura define roles sociales específicos que los individuos desempeñan en la
sociedad. Estos roles pueden estar determinados por factores como el género, la edad, el
estatus socioeconómico, entre otros. Por ejemplo, en algunas culturas, se espera que las
mujeres asuman roles de cuidado del hogar y la familia, mientras que en otras, se promueve la
igualdad de género y la participación equitativa en diferentes ámbitos.
4. Creencias y religión: Las creencias religiosas y espirituales son una parte importante de
muchas culturas y pueden influir significativamente en la conducta y las prácticas sociales. La
religión puede dictar normas morales, rituales, ceremonias y prácticas de vida cotidiana.
La cultura ejerce una influencia profunda y multifacética en la conducta de una comunidad. Aquí
hay algunas formas específicas en las que la cultura afecta el comportamiento comunitario:
4. Roles y estructuras sociales: La cultura define roles sociales y estructuras de poder dentro de
la comunidad. Estos roles pueden estar determinados por factores como el género, la edad, la
ocupación y el estatus socioeconómico, y dictan las expectativas de comportamiento y las
relaciones sociales entre los miembros de la comunidad.
La cultura permea todos los aspectos de la vida comunitaria y ejerce una influencia significativa en
la forma en que los individuos interactúan, se relacionan y se comportan dentro de su comunidad.
Esta influencia cultural es dinámica y está en constante evolución, moldeada por la interacción
entre las tradiciones arraigadas y las influencias externas en un mundo cada vez más globalizado.
1. Comunidades urbanas:
Diversidad: Las comunidades urbanas suelen ser muy diversas en términos de cultura, etnia,
religión y clase social, lo que puede promover la tolerancia y el entendimiento intercultural,
pero también puede generar tensiones y conflictos.
2. Comunidades rurales:
Resistencia al cambio: Las comunidades rurales a veces pueden ser más conservadoras y
resistir el cambio social y cultural, lo que puede generar tensiones entre la tradición y la
modernidad.
3. Comunidades suburbanas:
Conformidad social: En algunas comunidades suburbanas, puede haber presión social para
adherirse a ciertas normas y expectativas de comportamiento, lo que puede influir en la
autoimagen y la autoestima de los individuos.
4. Comunidades virtuales:
Conectividad: Las comunidades virtuales permiten a los individuos conectarse con otros que
comparten intereses, valores o identidades similares, proporcionando un sentido de
pertenencia y apoyo emocional.
Estas son solo algunas características generales y pueden variar según la comunidad específica y su
contexto sociocultural. Las comunidades son dinámicas y están sujetas a cambios a lo largo del
tiempo, lo que puede influir en las características psicológicas de sus miembros.
1. Comunidades urbanas:
2. Comunidades rurales:
Cohesión y solidaridad: Las comunidades rurales suelen caracterizarse por un fuerte sentido
de cohesión y solidaridad entre sus miembros. Esto puede fomentar el apoyo social y la
resiliencia en tiempos de crisis.
Estigma y acceso limitado a servicios: A pesar de los lazos comunitarios fuertes, las
comunidades rurales pueden enfrentar desafíos en términos de acceso limitado a servicios de
salud mental y estigma asociado con la búsqueda de ayuda psicológica. La psicología
comunitaria trabaja para superar estas barreras y promover el acceso equitativo a la atención
psicológica.
3. Comunidades suburbanas:
4. Comunidades virtuales:
En cada tipo de comunidad, la psicología comunitaria busca comprender las necesidades y los
desafíos específicos de sus miembros y desarrollar intervenciones que promuevan el bienestar
psicológico, la resiliencia y la justicia social dentro de ese contexto particular.