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♦REVISIÓN

Revisión sobre enfermedad por reflujo


gastroesofágico (ERGE)
Jorge A Olmos,1 María Marta Piskorz,1 Marcelo F Vela2
1
División Gastroenterología. Hospital de Clínicas José de San Martín, Universidad de Buenos Aires. Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina.
2
División Gastroenterología y Hepatología. Mayo Clinic. Arizona, Estados Unidos.

Acta Gastroenterol Latinoam 2016;46:160-172


Recibido: 18/04/2016 / Aprobado: 22/04/2016 / Publicado en www.actagastro.org el 04/07/2016

Resumen Abreviaturas
La ERGE es una enfermedad altamente prevalente en nues- ERGE: Enfermedad por reflujo gastroesofágico.
tro país. La misma conlleva una alteración significativa en la GERD: Gastroesophageal reflux disease.
calidad de vida de los pacientes con los consecuentes altos cos- ERNE: Enfermedad por reflujo no erosiva.
tos en salud. La comprensión de su fisiopatología es de funda- ERE: Enfermedad por reflujo erosiva.
mental importancia para el uso racional de los métodos diag- EEI: Esfínter esofágico inferior.
nósticos y la implementación de la terapéutica apropiada en UGE: Unión gastroesofágica.
cada situación clínica. En esta revisión se trata a esta entidad CD: Crura diafragmática.
en base a la mejor evidencia disponible, haciendo hincapié en DIS: Espacios intercelulares dilatados.
los mecanismos fisiopatogénicos, la epidemiología, los métodos IMC: Índice de masa corporal.
diagnósticos modernos y las normas de manejo actuales. IBP: Inhibidores de la bomba de prótones.
Anti-H2: Antagonistas de los receptores de histamina-2.
Palabras claves. Enfermedad por reflujo gastroesofágico. NNT: Número necesario a tratar.

La ERGE ha sido definida de distintas formas a través


del tiempo, algunas de las cuales han generado confusión
Gastroesophageal Reflux Disease Review
y controversias. En los últimos años se han llevado a cabo
(GERD) distintos consensos basados en evidencias para tratar el tó-
Summary pico y dar una definición operativa y normas de manejo
GERD is a highly prevalent disease in our country. It has a consensuadas. El primero fue el de GENVAL 99`1 y el últi-
deep impact in patient´s quality of life, representing extreme- mo fue el “multicontinental” de Montreal en el 2006.2 En
ly high costs regarding health. The correct understanding of éste se definió a la ERGE como aquel contenido gástrico
its pathophysiology is crucial for the rational use of diagnoses que refluye al esófago y que genera síntomas molestos y/o
methods and the implementation of appropriate treatment complicaciones esofágicas o extraesofágicas. Recientemen-
adjusted to each individual case. In this review we evaluate te se han establecido las guías de ERGE, las cuales tuvie-
this disorder based on the best available evidence, focusing ron en cuenta la información previa y utilizaron el sistema
in pathophysiological mechanisms, its epidemiology, modern GRADE3 para establecer los niveles de evidencia.4 En estas
diagnosis methods and current management standards. guías ERGE se define por consenso como los síntomas o las
complicaciones resultantes del reflujo del contenido gástri-
Key words. Gastroesophageal reflux disease. co hacia el esófago, la cavidad oral (incluida la laringe) o
los pulmones. Asimismo, se subdivide en dos formas: la no
erosiva (ERNE) (presencia de síntomas pero sin erosiones
en el examen endoscópico) y la erosiva (ERE) (presencia
Correspondencia: Jorge A Olmos de síntomas y erosiones en el examen endoscópico).4 Esto
Av Callao 875 piso 2do. Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina
Tel: +54 911 5950-8794 tiene como finalidad establecer diferentes fenotipos que
Correo electrónico: jorge.a.olmos@gmail.com conllevan distintas normas de manejo.

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Fisiopatología Por otro lado, se reconoce en la actualidad que el re-


Se sabe desde un principio que la ERGE es una en- flujo ácido que ocurre en el período postprandial inme-
tidad multifactorial, pero existió una tendencia entre los diato tiene que ver con el llamado “acid pocket”. El mismo
clínicos a explicarla como un concepto unidimensional. es consecuencia del pool de ácido que se encuentra en el
En un primer momento fue equiparada a la hernia hiatal, estómago proximal por encima del quimo y que expone
luego al esfínter esofágico inferior (EEI) hipotensivo y fi- al esófago ante el fracaso de la barrera antirreflujo.13-15
nalmente a las relajaciones transitorias del EEI. Actualmen- Con respecto a la secreción ácida gástrica y de pepsina, a
te se comprendió que todos estos elementos interactúan pesar que intuitivamente pensaríamos que está aumentada en la
en la ERGE haciéndola una entidad multifactorial.5 En el ERGE, varios estudios muestran que no es de relevancia y hasta
modelo fisiopatológico actual, la ERGE resulta como con- está disminuida significativamente en algunos pacientes.16
secuencia de la interacción de distintos factores en el tracto Trastornos motores del esófago. Los trastornos en la mo-
gastrointestinal superior. Entre ellos se incluyen el material tilidad del esófago están presentes en alrededor de un 30%
gástrico (ácido, pepsina, sales biliares, enzimas pancreáti- de los pacientes con ERGE; la motilidad esofágica inefectiva
cas) que es potencialmente nocivo para el esófago, la barre- es la alteración más prevalente.17 A pesar de la presencia de
ra antirreflujo en la unión gastroesofágica (UGE) que tiene trastornos motores en algunos pacientes con ERGE, su rele-
como fin evitar el ascenso del contenido gástrico hacia el vancia como mecanismo patogénico todavía no es clara. De
esófago, y mecanismos de defensa y reparación en el epite- hecho, se debate si la alteración en la motilidad del esófago
lio esofágico que contrarrestan los efectos de la exposición es un fenómeno primario o secundario a la inflamación.18
al ácido.6 Cuando la barrera antirreflujo se ve superada con Saliva. La deglución de saliva promueve no sólo la pe-
frecuencia de tal manera que los mecanismos de defensa se ristalsis primaria sino que permite la neutralización del
vuelven insuficientes, el paciente desarrolla ERGE. reflujo ácido dada la presencia de bicarbonato.19 Varias
Barrera antirreflujo. La UGE está constituida por el publicaciones reportaron que el flujo de saliva está dismi-
EEI y la crura diafragmática (CD).5 Normalmente estas nuido en pacientes con ERGE.20
dos fuerzas actúan en una forma integrada y sinérgica. Reflujo biliar. El rol del reflujo biliar en la fisiopatolo-
Hay que resaltar que la CD juega un rol fundamental gía de la ERGE ha sido subestimado. Sin embargo, existe
en la prevención del reflujo inducido por esfuerzos y que suficiente evidencia que muestra que no sólo la cantidad
las relajaciones transitorias del EEI son un mecanismo fi- sino también la composición del contenido refluido pue-
siopatogénico más frecuente que el EEI hipotensivo.7 La den ser importantes en la patogénesis de la ERGE. Varios
degradación mecánica de la UGE está conceptualizada estudios muestran que la concentración total de ácidos
como un continuo que comienza con alteraciones fun- biliares en el aspirado del esófago está aumentada en pa-
cionales sutiles y termina con una hernia hiatal evidente. cientes con ERGE con esofagitis moderada y severa.21, 22
Los factores que interactúan en la alteración de la UGE La mayoría de los ácidos biliares presentes en pacientes
tienen que ver con: la falla de sinergismo y/o la laxitud con ERGE no tratados con inhibidores de la bomba de
del anclaje entre el EEI-CD, un incremento en su disten- protones están en su forma conjugada (con glicina y tau-
sibilidad como así también un incremento de la presión rina) en una relación 3:1. Por otro lado, los inhibidores
intrabdominal.5 Existen además factores de riesgo para de la bomba de protones provocan sobrecrecimiento bac-
la alteración de la UGE como la edad y la obesidad. La teriano intestinal en una considerable proporción de pa-
obesidad central promueve la aparición de ERGE por cientes. Algunas de estas bacterias tienen la capacidad de
un aumento en la presión intraabdominal y el desarrollo desconconjugar los ácidos biliares cambiando la propor-
de hernia hiatal.8-10 Además de esto, la grasa abdominal ción con respecto a la forma conjugada en una relación
metabólicamente activa puede predisponer al desarrollo de 1:3. Los ácidos biliares no conjugados son solubles y
de esófago de Barrett y al adenocarcinoma del esófago a activos a un pH entre 4 y 6, y además son más dañinos
través de mecanismos independientes de la ERGE que (citotóxicos) que la formas conjugadas.23
promueven la progresión de la inflamación a metaplasia Estudios de diferentes grupos mostraron que el 60%
y neoplasia. Éstas incluyen alteraciones en los niveles de de los pacientes con ERGE refractario tienen tiempo de
adipokinas, citoquinas y quemoquinas.5, 11 exposición biliar patológico a pesar del tratamiento con
Factores gástricos. El retraso en el vaciamiento gástrico inhibidores de la bomba de protones.18
puede provocar reflujo debido a que el estómago está lleno Mecanismos de defensa de la mucosa esofágica. Por otro
durante más tiempo. Asimismo, el aumento en la presión lado, hay que resaltar la importancia fisiopatológica de
intragástrica puede gatillar relajaciones transitorias del EEI.12 los mecanismos de defensa de la mucosa esofágica. El pri-

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mero de estos mecanismos es preepitelial y tiene que ver 31,3% según una revisión sistemática realizada sobre 8
con la presencia de una capa de agua que tiene limitada estudios (1 de Argentina, 5 de Brasil y 2 de México).31 En
capacidad de buffer. Esta fina capa está principalmente Argentina, fue realizado un estudio poblacional para eva-
compuesta de bicarbonato de la saliva y bicarbonato se- luar la prevalencia de ERGE, utilizando un cuestionario
cretado por la glándulas de la mucosa. El segundo, inclu- de auto-informe validado. La población estudiada consistió
ye las proteínas de adhesión epiteliales. Éstas impiden la en 1.000 individuos de 18 a 80 años de edad, provenientes
difusión de hidrógeno y el paso de otras sustancias lumi- de 17 áreas representativas de la Argentina, y se estratificó
nales como los ácidos biliares y la tripsina. Las proteínas por edad, sexo, área geográfica y tamaño relativo de la po-
intercelulares están disminuidas tanto en los pacientes blación. Se incluyeron 839 sujetos con una edad media de
con ERNE como en aquellos con ERE. El tercer nivel de 39,9 años +/-15,4. La prevalencia de pirosis y/o regurgita-
defensa es el post-epitelial e incluye la neutralización del ción, al menos semanal, fue de 23%.32 En un metaanálisis
hidrógeno por el bicarbonato sanguíneo.18 recientemente publicado, se consignó que Argentina junto
Integridad de la mucosa esofágica. En la actualidad no con EE.UU., Reino Unido, Turquía y Suecia, tienen las
hay discusión sobre el rol que juega la alteración de la in- prevalencias de ERGE más altas del mundo.33
tegridad de la mucosa en pacientes con esofagitis erosiva. Con respecto a la prevalencia de esofagitis erosiva, un
Hopwood describió por primera vez a fines de 1970 que estudio realizado en nuestro país incluyó 397 pacientes
los pacientes con esofagitis tienen espacios intercelulares sometidos a endoscopía gastrointestinal. Los pacientes
dilatados (DIS) en las zonas no erosionadas.24 Más de 15 tenían 18 a 65 años de edad y todos sufrían síntomas típi-
años después esto fue confirmado y aún descripto en pa- cos de ERGE al menos 2 días por semana. La prevalencia
cientes con ERNE.25-27 de esofagitis por reflujo fue de 35%, de las cuales el 80%
Actualmente se ha utilizado la medición de la impedan- fueron formas leves o moderadas y solamente un 20%
cia basal como parámetro de integridad de la mucosa. En mostró formas severas. Además, el 60% tuvieron formas
este sentido se ha visto que tanto los pacientes con ERE no erosivas y el 5% esófago de Barrett. Las variables clí-
como aquellos con ERNE tienen disminuidos los valores de nicas asociadas con mayor injuria de la mucosa fueron los
impedancia basal comparados con los controles sanos.28, 29 síntomas de reflujo nocturno [CP: 2,55 (IC 95%: 1,55-
En conclusión, en la actualidad se acepta que la ERGE 4,18)] y un IMC mayor a 25 kg/m2 [CP: 1,91 (IC 95%:
es una enfermedad multifactorial antes que determinada por 1,03- 3,55)].34 Estas tasas son similares a la prevalencia
un solo mecanismo dominante como se creía previamente. observada en el estudio Canadian Adult Dyspepsia Em-
Los factores intervinientes como la obesidad, la edad, los fac- piric Treatment - Prompt Endoscopy (CADET-PE), en el
tores genéticos, el embarazo y el trauma pueden contribuir cual el 43% de los pacientes que se presentaban al con-
al deterioro de la unión gastroesofágica, resultando en la apa- sultorio de atención primaria con síntomas abdominales
rición de reflujo patológico y los síndromes acompañantes. superiores sufría de esofagitis por reflujo.35
La progresión de la enfermedad a través de la perpetuación La incidencia de la enfermedad está creciendo en las
de factores como la obesidad, la disfunción neuromuscular y últimas décadas, lo cual trae como consecuencia un incre-
la fibrosis llevan al desarrollo de hernia hiatal evidente. Esta mento en la tasa de complicaciones -la más indeseable es
última es un elemento central que impacta en la mayoría el adenocarcinoma del esófago- como así también un in-
de los mecanismos que subyacen a la ERGE (relajaciones cremento en los costos en salud. En un trabajo realizado
transitorias del EEI, EEI hipotensivo, vaciamiento gástrico, en EE.UU. se observó que los costos asociados a la ERGE
acid pocket) y explica su asociación con la severidad de la en- típica resultaron en US$ 9 billones y llamativamente los
fermedad y el daño de la mucosa. de la ERGE extraesofágica resultaron discretamente in-
feriores a los costos globales por cáncer (US$ 50 billones
Epidemiología y síntomas vs US$ 58 billones). Esta situación condujo en EE.UU.
La prevalencia de ERGE en la población fue estima- a realizar una adecuación de las normas de manejo para
da en base a la presencia de síntomas típicos (pirosis y controlar los costos inusitados que devienen fundamen-
regurgitación). Una revisión sistemática mostró una pre- talmente de la sintomatología extraesofágica.36
valencia del 10-20% en Occidente con una prevalencia Los síntomas se subdividen en esofágicos (pirosis y regur-
más baja en Asia.30 En Asia, la prevalencia de ERGE es gitación) y extraesofágicos. El dolor de pecho, luego de haber
muy inferior a la de Europa y América del Norte, y tí- descartado patología cardiológica, puede ser un síntoma de
picamente varía entre 2,5% y 6,7%. En Latinoamérica, ERGE. El mismo anteriormente se consideraba una mani-
la prevalencia de ERGE en la población fue de 11,9% a festación extraesofágica de reflujo y actualmente fue incluido

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como una manifestación esofágica. Aunque la disfagia pue- enfermedad orgánica, es decir, aquellos con trastornos
de ser un síntoma de ERGE no complicada, su presencia funcionales como la pirosis funcional (pacientes con en-
requiere una meticulosa evaluación a fin de descartar otras doscopía y monitoreo ambulatorio de reflujo normales).
entidades (trastornos motores del esófago, estenosis o ma- Por otro lado, durante la endoscopía es fundamental la
lignidad), es un síntoma de alarma que requiere una pronta evaluación endoscópica en retroflexión del ángulo de His
evaluación. Por otra parte, los síntomas extraesofágicos in- a través de la clasificación válvula flap (Clasificación Hill).
cluyen la tos crónica, el asma y la laringitis crónica. Es importante recordar que los hallazgos histológicos
Asimismo, un 38% de los pacientes pueden presen- frecuentemente atribuidos a la ERGE tienen sensibilidad
tar síntomas de dispepsia (epigastralgia, saciedad precoz, y especificidad subóptimas, por lo tanto, en la actualidad
náuseas, eructos) en forma concurrente (sobreposición).37 no está recomendada la realización de biopsias del esó-
En un estudio epidemiológico basado en la población fago de rutina en pacientes con síntomas de ERGE sin
realizado en nuestro país se observó que la sobreposición hallazgos anormales en la endoscopía45 excepto cuando
entre ERGE y dispepsia fue del 13,6%.38 la presentación clínica sugiere esofagitis eosinofílica, en
cuyo caso las biopsias son sustanciales para diagnosticar
Diagnóstico esta entidad. La manometría de esófago tiene un valor
El diagnóstico de ERGE se realiza utilizando una limitado para el diagnóstico primario de ERGE, ya que ni
combinación de síntomas, estudios endoscópicos, moni- el EEI hipotensivo ni las alteraciones motoras del esófago
toreo ambulatorio de reflujo y respuesta a inhibidores de son específicas de ERGE. La manometría debe ser usada
la bomba de protones (IBP).4 Los síntomas típicos (piro- para localizar el EEI antes de la realización de impedan-
sis y regurgitación) mostraron en una revisión sistemáti- ciometría/ph y antes de considerar una cirugía antirre-
ca una sensibilidad del 30-76% y una especificidad del flujo, con el objeto de descartar trastornos motores del
62-96% para la presencia de ERGE.39 La respuesta a la esófago (acalasia o hipomotilidad severa) que contrain-
administración empírica de IBP es una alternativa razo- diquen la funduplicatura de Nissen.4 El monitoreo am-
nable para confirmar la ERGE, aunque un metaanálisis bulatorio de reflujo (phmetría o impedanciometría/ph)
mostró algunas limitaciones de este abordaje, mostrando es el único test que permite determinar la presencia de
una sensibilidad del 78% y una especificidad del 54%.40 exposición ácida anormal del esófago, la frecuencia del
El esofagograma baritado no es un estudio recomendado reflujo y la asociación entre los síntomas y los episodios
para el diagnóstico de ERGE, ya que su sensibilidad para de reflujo. Tiene una excelente sensibilidad y especifici-
la detección de signos de esofagitis es extremadamen- dad (77-100% y 85-100%, respectivamente) en pacientes
te baja. Asimismo, la presencia de reflujo espontáneo o con esofagitis erosiva, aunque en pacientes con ERGE no
provocado no aumenta la sensibilidad del test. Su única erosiva la sensibilidad es menor (<71%).46 El agregado de la
utilidad en la actualidad es la evaluación de pacientes con impedanciometría a la phmetría sola incrementa la sensibi-
disfagia concurrente.41, 42 A pesar de que la mayoría de los lidad del monitoreo del reflujo a casi el 90% ya que permi-
pacientes no presentarán hallazgos anormales en la endos- te la evaluación del reflujo débilmente ácido y no ácido.47
copía,43 la misma debe ser la herramienta fundamental en La cápsula inalámbrica para el monitoreo de pH ofre-
esta entidad ya que permite categorizar adecuadamente ce un incremento en la tolerancia del paciente y la opción
la enfermedad, estableciendo los diferentes fenotipos que de extender el estudio por 48 o hasta 96 hs. Esto permite
conllevan distintas normas de manejo. En este sentido, evaluar en el mismo estudio la respuesta a IBP.4 Sin em-
deberían suspenderse los IBP al menos 15 días previos bargo, solo detecta pH ácido, aunque la prolongación del
a la realización de la misma. Los hallazgos endoscópicos estudio en el tiempo permite aumentar el rédito diagnóstico.
asociados a ERGE incluyen esofagitis erosiva en sus dis- El monitoreo ambulatorio de pH tiene indicación en
tintos grados de severidad establecidos por la clasificación pacientes refractarios a IBP y en la evaluación de manifes-
de Los Ángeles, la estenosis péptica y el esófago de Ba- taciones extraesofágicas en las que haya dudas en cuanto
rrett.44 Hay que tener en cuenta que los pacientes con a su relación con ERGE y en pacientes que se vayan a
endoscopía normal se subdividen en varios grupos: 1) someter a una intervención quirúrgica antirreflujo.
ERNE, es decir, pacientes con endoscopía normal pero El monitoreo ambulatorio de reflujo sirve para catego-
con evidencia de ERGE en el monitoreo ambulatorio de rizar a los pacientes en los siguientes fenotipos:
reflujo; 2) pacientes sin ERGE, pero con otra enferme- 1. ERGE definido por una exposición acida patoló-
dad que explica los síntomas, como por ejemplo acalasia gica o episodios excesivos de reflujo ácidos o no ácidos
o esofagitis eosinofílica; y 3) pacientes sin evidencia de (fracaso de barrera)

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2. Esófago hipersensible: reflujo fisiológico con asocia- que en la ERNE y en las esofagitis leves más que en las se-
ción temporal entre los episodios de reflujo y los síntomas. veras. Con respecto al control sintomático, la ganancia te-
3. Pirosis funcional. Reflujo fisiológico sin asociación rapéutica es mayor para la pirosis que para la regurgitación.
entre los síntomas y los episodios de reflujo. Los IBP han sido asociados a mayores tasas de resolu-
ción de la esofagitis y menores tasas de recaída en compa-
Es importante destacar que el manejo ulterior va a
ración a los anti-H2 y placebo en pacientes con esofagitis
depender de esta categorización ya que en pacientes con
erosiva.53 En pacientes con ERGE no erosiva, una revisión
ERGE hay que optimizar el manejo antirreflujo, en cam-
sistemática de Cochrane demostró superioridad de los IBP
bio los pacientes sin ERGE es poco probable que respon-
frente a los anti-H2 y proquinéticos para la mejoría de la
dan a estas medidas. Por otro lado, la asociación sintomá-
pirosis.54 El riesgo relativo (RR) para remisión de la pirosis
tica es otro determinante de la respuesta al tratamiento
en estudios controlados con placebo fue del 0,37 para IBP,
antirreflujo, ya que los pacientes en los que hay correla-
0,77 para anti-H2 y 0,86 para proquinéticos.54
ción temporal entre los síntomas de ERGE y los episodios
Por lo antedicho, los IBP se han convertido en el tra-
de reflujo van a presentar una mejor respuesta al trata-
tamiento de primera línea. En general, hay pocas dife-
miento que aquellos en los que no existe dicha asociación.
rencias entre los distintos IBP disponibles. Sin embargo,
Manejo de la ERGE en pacientes con respuesta terapéutica insuficiente a dosis
estándares de IBP pueden beneficiarse del cambio a otro
Aunque está generalmente recomendado realizar mo- IBP o de la duplicación de la dosis.5
dificaciones en el estilo de vida, las evidencias que las Existen en la actualidad seis clases de IBP disponibles
avalan son prácticamente anecdóticas. Es importante, (omeprazol, lanzoprazol, rabeprazol, pantoprazol, esome-
por lo tanto, limitar estas recomendaciones a una dieta prazol y dexlanzoprazol). Es importante recalcar que, aunque
saludable y evitar o utilizar con moderación alimentos o globalmente la efectividad de los IBP es similar, los estudios
actividades específicas que desencadenen los síntomas.5 farmacodinámicos han evidenciado que existen algunas dife-
También es razonable recomendar que se evite la ingesta rencias intra-sujeto. De esto surge que cambiar de IBP es una
de alimentos, sobre todo con alto contenido graso, por al estrategia razonable en pacientes con respuesta insuficiente.4
menos dos o tres horas antes de recostarse, una medida El esomeprazol mostró un relativo aumento en la pro-
que resultó en mejoría de los síntomas de ERGE y expo- babilidad de curación en la esofagitis erosiva del 5% a las
sición esofágica al ácido en estudios caso-control.48, 49 8 semanas, con un NNT de 25.55 En este metaanálisis no
Un abordaje mucho más importante tiene que ver con fue incluido el dexlanzoprazol. Todos los IBP (salvo el
el control del peso y del perímetro abdominal. Existen dexlanzoprazol) deben ser administrados 30-60 minutos
numerosos estudios que han demostrado la correlación antes de las comidas para asegurar su máxima eficacia. El
entre la obesidad y la ERGE. Hay evidencia que indica la dexlanzoprazol es un IBP de liberación dual. Los estudios
eficacia de la reducción de peso en la diminución de los comparativos (sólo con lanzoprazol) demostraron superio-
síntomas de ERGE. Uno de estos estudios mostró que ridad con respecto a los valores de pH esofágico.56 Por otro
una pequeña disminución en el IMC de 3,5 kg/m2 con- lado, un estudio open label demostró que es posible realizar
lleva a un 40% de disminución en el riesgo de ERGE, la disminución de la dosis en pacientes que reciben IBP a
aún en mujeres con IMC normal.50 Asimismo, el bypass doble dosis a una dosis única de 30 mg de dexlanzoprazol.57
gástrico ha demostrado ser efectivo en la reducción de los A pesar de estas diferencias estadísticamente significativas
síntomas de ERGE.51 en algunos de los estudios, desde el punto de vista clínico
La estrategia de manejo más aceptada para la ERGE es todos los IBP pueden considerarse equivalentes. Asimismo,
la de reducir la secreción ácida gástrica. Las opciones de es importante reconocer que existe variabilidad intra-sujeto
tratamiento médico incluyen antiácidos, anti-H2 o IBP. en cuanto a la respuesta a distintos IBPs por diferencias en
Un metaanálisis demostró un efecto placebo global del el metabolismo de los distintos fármacos.
20% en pacientes con ERGE.52 Es de resaltar que este Debe mantenerse el tratamiento con IBP en pacientes
efecto placebo es mayor en pacientes con ERNE que con que han tenido complicaciones como la esofagitis erosiva en
ERE y dentro de estos últimos es mayor en los pacientes su forma severa o el esófago de Barrett y en los pacientes con
con formas leves que en las severas. Un concepto impor- recidiva de los síntomas luego de la suspensión de los IBP.
tante para medir efectividad es el la ganancia terapéutica Por otro lado, los pacientes con ERGE no erosiva pueden ser
que es el beneficio de la intervención sobre el placebo. En manejados satisfactoriamente con IBP a demanda.58 En los
este sentido, la ganancia terapéutica es mayor en la ERE pacientes con enfermedad no erosiva se observa una recaída

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de los síntomas en 2/3 de los pacientes a lo largo del tiem- La cirugía antirreflujo es un procedimiento seguro
po.59 Cerca del 100% de los pacientes con esofagitis, Los cuando es realizado por cirujanos experimentados. La
Ángeles C y D, recidivarán en un lapso de 6 meses.60 mortalidad postoperatoria dentro de los 30 días es rara,
Las opciones terapéuticas para los pacientes con res- según los reportes disponibles, menor al 1%.68 Por otro
puesta insuficiente a los IBP son limitadas. Los anti-H2 lado, el efecto adverso más común asociado a la fundu-
nocturnos han sido recomendados como una alternativa plicatura es el síndrome de hinchazón postprandial, que
luego de que algunos estudios demostraron control del pH se da como consecuencia a la incapacidad de llevar aire
intragástrico durante la noche. Sin embargo, la taquifilaxia del estómago al esófago y se caracteriza por distensión
parecería ser un hecho frecuente al mes de tratamiento.61 abdominal, saciedad precoz, náuseas, dolor epigástrico,
El tratamiento con drogas proquinéticas como la me- imposibilidad de eructar y vomitar. Se observa hasta en
toclopramida junto con los IBP se ha considerado como el 85% de los pacientes y aparece inmediatamente luego
otra opción terapéutica para estos pacientes. La meto- de la cirugía, aunque dentro del primer año suele mejorar
clopramida ha demostrado aumentar la presión del EEI, o resolverse.68 Por otro lado, suele observarse algún grado
aumentar la peristalsis y estimular el vaciamiento gástri- de disfagia a sólidos en las primeras 2 a 3 semanas luego
co.62 Sin embargo, el uso de metoclopramida se limita por de la cirugía, la cual se resuelve dentro de los 2 a 3 meses.
los efectos adversos a nivel del sistema nervioso central.63 Sin embargo, un 3-24% de los pacientes experimentan
Actualmente se sabe que en ausencia de gastroparesia no disfagia que persiste más allá de los 3 meses y que necesita
existe un rol claro en cuanto al uso de la metoclopramida evaluación. La diarrea es una complicación frecuente (18-
en la ERGE.4 El mismo concepto se aplica para otros pro- 33%) que aparece dentro de las 6 semanas de la cirugía.68
quinéticos como la domperidona.64 La duración de la cirugía antirreflujo en términos de con-
trol de los síntomas ha sido un tópico de interés reciente.
Tratamiento quirúrgico de la ERGE En el seguimiento a 10 años del Veterans Affairs Hospital
Con respecto al tratamiento quirúrgico de la ERGE, trial se observó que el 92% de los pacientes tratados médi-
la opción actual es la funduplicatura laparoscópica.4 Las camente continuaban recibiendo medicación antirreflujo
indicaciones quirúrgicas incluyen el deseo de disconti- y sorprendentemente el 62% de los que habían recibido
nuar la medicación, la falta de adherencia, la presencia tratamiento quirúrgico habían reiniciado la misma (50%
de efectos adversos, la presencia de una hernia hiatal gi- IBP, 50% anti-H2). Además, el 16% de los pacientes qui-
gante, la esofagitis refractaria al tratamiento médico o la rúrgicos habían requerido una nueva cirugía antirreflujo.69
ERGE refractaria documentada. Los pacientes con docu- Por otro lado, los síntomas extraesofágicos no parecen
mentación por impedanciometría/ph de reflujo no ácido mejorar significativamente luego de la funduplicatura.
sintomático estando bajo tratamiento con IBP, también Aunque la cirugía puede ser efectiva en pacientes cuida-
son candidatos a la cirugía.65 Es poco probable que los dosamente seleccionados con síntomas extraesofágicos
síntomas de dispepsia como las náuseas, vómitos y la o atípicos, la tasa de respuesta a la misma es menor que
epigastralgia presenten mejoría luego de una cirugía. Los en pacientes con pirosis.64 Es particularmente importante
síntomas típicos de ERGE (pirosis y/o regurgitación) y evaluar detalladamente a los pacientes con la denominada
con buena respuesta a IBP o los pacientes que tienen una laringitis por reflujo antes de recomendar una funduplica-
phmetría donde se demuestra correlación sintomática, tura. La respuesta a IBP es crítica. En ausencia de respuesta
son los que mejor responden al tratamiento quirúrgico.66 al tratamiento con IBP, la cirugía es poco probable que sea
En esta cohorte de pacientes se espera una tasa de remi- efectiva, aún con un monitoreo de reflujo anormal.70
sión en el largo término. En una revisión muy reciente de La revisión de Cochrane concluye que existe una in-
Cochrane se evaluaron cuatro estudios (1.200 pacientes) certidumbre considerable entre los beneficios vs los daños
aleatorizados a recibir tratamiento médico o quirúrgico.67 de la cirugía laparoscópica antirreflujo comparada con el
La calidad general de la evidencia fue pobre o muy po- tratamiento médico a largo plazo y que se necesitan más
bre. La diferencia entre la funduplicatura laparoscópica ensayos clínicos de calidad.67
y el tratamiento médico en función de la calidad de vida La mejoría de la barrera antirreflujo a través de un
(HRQol) se calculó a través de la diferencia de media es- dispositivo magnético, (Linx Reflux Management System;
tandarizada (SMD), resultando ser imprecisa en el corto Torax® Medical, Inc. 4188 Lexington Avenue North. Sho-
término (SMD 0,14; IC 95%: 0,02-0,30), mediano tér- review, MN 55126) ha mostrado efectividad en el control
mino (SMD 0,03; IC 95%: 0,19-0,24) y largo término de los síntomas y del pH esofágico en pacientes seleccio-
(SMD 0,28; IC 95%: 0,27- 0,84). nados (síntomas típicos, respuesta al menos parcial a IBP,

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Revisión sobre enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) Jorge A Olmos y col

hernia hiatal menor de 3 cm, ausencia de esofagitis severa: El uso crónico de IBP puede promover el crecimien-
Los Ángeles C o D).71, 72 Este dispositivo fue aprobado en el to de la microflora intestinal.77 Una revisión sistemática
2012 por la FDA y es el único procedimiento que restaura mostró un incremento de la susceptibilidad a la infec-
la competencia mecánica de la barrera antirreflujo sin uti- ción por Salmonella (RR 4,2-8,3), Campylobacter (RR
lizar el fundus gástrico. En el trabajo realizado a 5 años se 3,5-11,7) y Clostridium difficile (RR 1,2-5).78 En base a
observó una mejoría en los índices de calidad de vida luego las evidencias actuales, se podría decir que el uso de IBP
del procedimiento de 27 a 4, disminución del uso de IBP puede ser un factor de riesgo para Clostridium difficile y
a 15,3%, mejoría de la regurgitación de 57% a 1,2%. Ade- otras infecciones entéricas y debe ser utilizado con cautela
más, todos los pacientes reportaron habilidad para eructar en pacientes susceptibles.4
o vomitar si lo necesitaban.72 En esta serie se observó que la El aumento en el riesgo de neumonía adquirida en
tasa de síndrome de hinchazón postprandial fue del 52% y la comunidad no pudo ser claramente documentado en
disminuyó al 8,3% en un seguimiento a 5 años.72 asociación con el uso crónico de IBP.79-82
En pacientes obesos mórbidos se observó que los tra- Con respecto al metabolismo del calcio, en el estudio
tamientos quirúrgicos para la obesidad son efectivos en con mayor tiempo de seguimiento a la fecha, se observó
el manejo de la ERGE.73 El procedimiento más efectivo que el uso de IBP los 5 años previos no estuvo asociado
para el manejo de la ERGE en este subgrupo de pacientes con osteoporosis.83
parecería ser el bypass gástrico en Y de Roux, en compara- En el año 2009 la FDA emitió un alerta con respecto
ción con la banda y la manga gástrica. al potencial aumento en los eventos cardiovasculares en
Los tratamientos endoscópicos para la ERGE han pacientes que utilizaban concomitantemente IBP (parti-
sido desarrollados, pero aún no han demostrado eficacia cularmente omeprazol, lanzoprazol y esomeprazol) y clo-
a largo plazo y por lo tanto no pueden ser recomenda- pidogrel. Esto ocurriría porque ambas drogas comparten
dos. Estos tratamientos incluyen la radiofrecuencia del el CYP 2C19. Los estudios inicialmente mostraban que
EEI, la inyección de silicona en el EEI y la sutura endos- existía una reducción de la inhibición plaquetaria del clo-
cópica de la UGE.74 pidogrel en presencia de IBP.84, 85 Sin embargo, esto no
fue corroborado en estudios clínicos.86
Potenciales riesgos asociados a los IBP Por otro lado, estudios recientes muestran una posible
Entre los potenciales efectos adversos de los IBP se in- asociación entre el uso crónico de IBP con la demencia en
cluyen: cefalea, diarrea, dispepsia en menos del 2% de los mayores de 75 años (OR 1,44; IC 95% 1,36- 1,52) y con
pacientes. Otros problemas potenciales incluyen deficien- la falla renal crónica. Hay que tener en cuenta que se trata
cias de vitaminas y minerales, la asociación con neumonía de estudios retrospectivos, con problemas metodológicos
y diarrea adquirida en la comunidad, fractura de cadera y que no prueban causalidad.87-89
y osteoporosis, y un aumento en los eventos cardiovas-
culares en pacientes que están bajo tratamiento conco- ERGE refractario al tratamiento con IBP
mitante con clopidogrel. Para aclarar estas situaciones, se Se estima que hasta un 40% de los pacientes con
han desarrollado múltiples metaanálisis.4 Con respecto al síntomas atribuidos a ERGE fallan en responder sinto-
potencial déficit de vitamina B12 en pacientes bajo trata- máticamente, en forma parcial o completa, a una dosis
miento con IBP, hay que considerar que la absorción de estándar de IBP.90 Una revisión sistemática reciente en-
cobalamina tiene que ver en primera instancia con la pre- contró síntomas típicos de ERGE persistentes (pirosis y
sencia de ácido gástrico y pepsina, con el objeto de liberar regurgitación) en un 32% de los pacientes en estudios
la cobalamina de las proteínas de la dieta. En dos revisio- aleatorizados y en un 45% en estudios observacionales.91
nes recientes, no se encontró evidencia que documente el La mayoría de los pacientes que no responden a IBP co-
déficit de vitamina B12 en usuarios de IBP crónicos.73, 74 rresponden a los subgrupos ERNE y pirosis funcional. Es
Sin embargo, en un estudio reciente se observó que en pa- importante recalcar que los pacientes con pirosis funcio-
cientes ancianos institucionalizados que reciben IBP debe nal en realidad no tienen ERGE sino más bien un trastor-
considerarse la deficiencia de vitamina B12.75 no gastrointestinal funcional.
El ácido gástrico también es necesario para la absorción La definición de la ERGE refractaria continúa siendo
de hierro. La anemia ferropénica ha sido reportada en pa- un punto de controversia. La mayoría de los investigado-
cientes con gastritis atrófica, resección gástrica o vagotomía. res creen que sólo los pacientes que exhiben una respues-
No hay evidencia en la actualidad que demuestre el desarro- ta parcial o falta de respuesta a una doble dosis de IBP
llo de anemia ferropénica en pacientes que reciben IBP.76 deben ser considerados dentro de esta categoría, aunque

166 Acta Gastroenterol Latinoam 2016;46(2):160-172


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para otros la falta de respuesta a una dosis simple de IBP Un aspecto a evaluar acerca del monitoreo del reflujo
sería un criterio suficiente. es si el mismo debe realizarse tomando IBP (ON IBP) o
La ERGE refractaria tiene un gran impacto en la re- luego de suspender el mismo (OFF IBP). Actualmente
ducción de la calidad de vida.91 no existe un consenso claro en cuanto a cuál es el método
El objetivo diagnóstico más importante en este de testeo en pacientes con reflujo refractario. El tipo de
subgrupo de pacientes es el de diferenciar a los que tienen test por lo tanto se elige en base a la probabilidad pretest
ERGE persistente como causa de la refractariedad de los de reflujo. Sin embargo, hay que considerar que el estu-
síntomas, de los que no tienen ERGE. La proporción de dio OFF IBP es más adecuado para la evaluación de la
pacientes con ERGE extraesofágico que no responden a asociación entre los síntomas y los episodios de ERGE
IBP está menos documentada. (asociación sintomática).
El primer paso en la evaluación de la ERGE refractaria El monitoreo de reflujo OFF IBP (siete días luego de
es optimizar el tratamiento con IBP, reevaluando la ad- la interrupción de los IBP) puede realizarse con cualquie-
herencia al tratamiento y asegurándonos que la dosis sea ra de las técnicas disponibles (pHmetría con catéter o ina-
apropiada. Una pobre adherencia está asociada con una lámbrica, o con impedanciometría/pH). Si el monitoreo
falta de respuesta a IBP.92 En un estudio poblacional se de reflujo OFF IBP es negativo (exposición ácida normal
observó sólo una adherencia a IBP del 60% en pacientes y asociación sintomática negativa) la ERGE es poco pro-
con ERGE.93 La eficacia de los IBP se maximiza cuando es bable. Por lo tanto, en este grupo de pacientes pueden
administrado antes de las comidas.94 Sólo un 46% de los suspenderse los IBP. Por otro lado, un test positivo ofrece
pacientes recibe los IBP de manera óptima.95 Todo pacien- evidencia objetiva de reflujo, pero no provee evidencia del
te con ERGE refractario tiene que tener chequeada la dosis mecanismo de la refractariedad del mismo.
y la forma de administración de los IBP. Una vez que es- El monitoreo de reflujo ON IBP solamente debe rea-
tamos seguros de una adecuada adherencia al tratamiento, lizarse con impedanciometría/pH para poder evaluar el
puede intentarse rotar a otro IBP.96 Un estudio controlado reflujo no ácido, ya que en estos pacientes debido a la
y aleatorizado en pacientes con ERGE persistente a pesar supresión ácida, el reflujo se transforma predominan-
de una dosis diaria de IBP mostró que tanto aumentar la temente en no ácido.98, 99 Aunque es raro de encontrar,
dosis de IBP a dos por día o cambiar a otro IBP resul- un test con exposición ácida patológica en pacientes que
taron en mejoría sintomática en el 20% de los pacientes, toman IBP muestra la falla terapéutica o una falta en la
sin una clara ventaja de una estrategia sobre la otra.97 Los adherencia. Una revisión sistemática mostró que el reflu-
pacientes con síntomas persistentes a pesar de la optimiza- jo no ácido es la causa de la mayoría de los episodios de
ción del tratamiento con IBP requieren ser investigados. reflujo en pacientes refractarios y es la principal causa de
A aquellos que tienen síntomas típicos se les debe realizar persistencia de los síntomas a pesar del tratamiento con
una endoscopía digestiva para excluir desórdenes esofági- IBP.100 Finalmente, una impedanciometría/pH negativa
cos diferentes a la ERGE, como la esofagitis eosinofílica y ON IBP demuestra que los síntomas del paciente no son
además buscar erosiones (poco frecuente en este subgru- debidos a reflujo persistente.
po de pacientes), cuyo hallazgo hablaría de la persistencia En este grupo de pacientes con pirosis funcional, el
del reflujo ácido. Si la endoscopía es negativa, el siguiente uso de drogas antinociceptivas en dosis bajas (antidepre-
paso es el de realizar un monitoreo ambulatorio de reflujo sivos tricíclicos e inhibidores de la recaptación de seroto-
para cuantificar el mismo y determinar la relación entre nina), es de suma utilidad.
el reflujo y los síntomas del paciente.4 El monitoreo del
reflujo permite además la caracterización del paciente con Síntomas extraesofágicos: asma, tos crónica,
síntomas refractarios, ya que el estudio puede revelar: 1) laringitis
falla de los IBP, con persistencia del reflujo ácido, que re- El espectro clínico de las manifestaciones atribuidas
quiere revaluación del tratamiento y eventual aumento de a ERGE se ha ampliado de las manifestaciones típicas
la dosis; 2) adecuado control del ácido pero persistencia (pirosis y regurgitación), a una serie de manifestacio-
de síntomas asociados a reflujo no ácido; y 3) sin reflujo. nes extraesofágicas que incluyen síntomas laríngeos
Entre los pacientes con ERGE refractario con un monito- y respiratorios. Varios estudios epidemiológicos han
reo del reflujo negativo, aquellos que tienen pirosis pueden identificado una asociación entre la ERGE y síntomas
ser clasificados como pirosis funcional. Por otro lado, los extraesofágicos que incluyen manifestaciones respira-
que tienen síntomas extraesofágicos (asma, tos, laringitis) torias y laríngeas, pero no se logró establecer causa-
necesitarán la reevaluación de causas no asociadas a reflujo. lidad. Una revisión sistemática encontró síntomas de

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Revisión sobre enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) Jorge A Olmos y col

ERGE en el 59% de los pacientes con asma y pHme- debe tenerse en cuenta que estos hallazgos se observaron
tría anormal en el 51%, pero concluyó que hay poca en casi el 80% de los controles sanos en un estudio pros-
información para establecer causalidad.101 Estudios de pectivo.112 Además es importante tener en cuenta que los
cohorte sugirieron que la ERGE puede ser la causa de signos de irritación laríngea pueden ser también el resul-
tos crónica en el 21-41% de los casos.102 Un estudio de tado de causas diferentes de las de ERGE, como son las
casos y controles encontró asociación aumentada para alergias, el tabaco o el abuso de la voz. Por lo tanto, se
faringitis (OR: 1,60), afonía (OR: 1,81) y laringitis recomienda que el diagnóstico de laringitis por reflujo
crónica (OR: 2,01) en pacientes con esofagitis o es- no se haga en base a los hallazgos laringoscópicos. Un
tenosis esofágica comparada con controles.103 El Con- metaanálisis de 8 estudios controlados y aleatorizados no
senso de Montreal reconoció que existe una relación mostró ventajas de los IBP sobre el placebo en pacientes
establecida entre ERGE y asma, tos crónica y laringi- con laringitis crónica.113
tis, considerando que estos trastornos habitualmente Una de las estrategias de manejo consiste en la ad-
tienen un mecanismo multifactorial y que la ERGE ministración empírica de IBP en aquellos pacientes con
suele ser un cofactor más que la causa. El Consenso síntomas típicos de ERGE. Dos estudios controlados y
de Montreal también reconoció que los síntomas ex- aleatorizados mostraron mejoría del asma luego del tra-
traesofágicos raramente son atribuibles a ERGE en tamiento con IBP.114, 115 Sin embargo, un metaanálisis de
ausencia de síntomas típicos.2 Actualmente, las herra- 11 estudios concluyó que el tratamiento con IBP en adul-
mientas diagnósticas para establecer a la ERGE como tos con asma mejora en una pequeña proporción el flujo
causa de los síntomas extraesofágicos tienen serias li- espiratorio pico. Por lo tanto, no existe suficiente eviden-
mitaciones. Por lo tanto, a estos pacientes se les debe cia para recomendar IBP en pacientes con asma de ma-
realizar una evaluación muy cuidadosa sobre las causas nera rutinaria si no existen otros síntomas de ERGE.116
no relacionadas a ERGE. La endoscopía digestiva alta Con respecto a la tos crónica, un metaanálisis de 9
puede documentar la ERGE cuando se observa enfer- estudios controlados y aleatorizados no encontró ventaja
medad erosiva, pero esto ocurre sólo en un tercio de en la administración de IBP comparado con placebo en
los pacientes con síntomas de ERGE104 y es aún más cuanto a la resolución total de la tos (OR: 0,46; IC 95%:
rara en pacientes tratados con IBP.105 El monitoreo 0,19-1,15), aunque sí se observó mejoría en los scores de
ambulatorio de ERGE puede confirmar la presencia tos crónica en aquellos pacientes que recibieron IBP.117
de la misma a través de la documentación del reflujo Concluyendo, los IBP parecerían ser una opción razo-
gastroesofágico patológico. En la actualidad se considera nable para pacientes con asma, tos crónica o laringitis que
que el porcentaje total del tiempo con pH < 4 es el discri- también tienen síntomas típicos o evidencia objetiva de
minador más útil entre reflujo fisiológico y patológico.106 ERGE (con endoscopía positiva o monitoreo ambulatorio
Existe una gran variabilidad en la prevalencia reportada de de reflujo patológico). El tratamiento empírico de los pa-
pHmetría anormal en pacientes con asma, tos crónica y larin- cientes que no presentan síntomas típicos o datos objetivos
gitis.101, 107, 108 Por otro lado, la documentación de reflujo pa- de ERGE, no puede ser recomendado de manera rutinaria.
tológico en el monitoreo ambulatorio no establece causalidad
entre la ERGE y los síntomas extraesofágicos. Un monitoreo Complicaciones asociadas con la ERGE
de reflujo negativo obliga a descartar otras causas distintas a la Numerosas complicaciones han sido asociadas con la
ERGE. Además de determinar la presencia o no de ERGE, el ERGE incluyendo la esofagitis erosiva, las estenosis y el
monitoreo ambulatorio de reflujo puede ser utilizado para de- esófago de Barrett. La obesidad ha mostrado ser un fac-
terminar la asociación entre los síntomas y el reflujo. Los dos tor de riesgo de enfermedad erosiva, esófago de Barrett y
métodos más utilizados para determinar esta asociación son el adenocarcinoma.118
índice sintomático109 y la asociación probabilística de los sínto- Aunque han sido utilizados muchos sistemas de clasi-
mas.110 La asociación sintomática puede documentar una rela- ficación de la esofagitis erosiva en la literatura, un sistema
ción temporal entre los episodios de reflujo y los síntomas. A de clasificación introducido en 1994 parece ser el mejor
pesar de esto, la sensibilidad y especificidad de este método son en la práctica clínica. La clasificación de los Ángeles ha
limitadas y no existen estudios que avalen el tratamiento del sido validada y mostró tener buena variabilidad inter e
ERGE extraesofágico solamente basado en este parámetro.106 intra-observador.43 La esofagitis erosiva se observa en una
Los hallazgos en la laringoscopía, especialmente ede- minoría de pacientes con ERGE sintomático, la mayoría
ma y eritema, son frecuentemente utilizados para diag- de éstos son Los Ángeles A o B. Las esofagitis Los Ángeles
nosticar laringitis inducida por reflujo.111 Sin embargo, C y D han sido descriptas como severas y tienen la me-

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Revisión sobre enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) Jorge A Olmos y col

nor tasa de curación con IBP.119 Las esofagitis severas son 2. Vakil N, van Zanten SV, Kahrilas P, Dent J, Jones R. The Mon-
treal definition and classification of gastroesophageal reflux disea-
más comunes en los ancianos y en general existe recaída
se: a global evidence-based consensus. Am J Gastroenterol 2006;
si no se instituye un tratamiento de mantenimiento. Está 101: 1900-1920.
recomendado repetir la endoscopía luego de un mínimo 3. Guyatt GH, Oxman AD, Kunz R, Jaeschke R, Helfand M, Li-
de ocho semanas de tratamiento con IBP en pacientes berati A, Vist GE, Schünemann HJ, for the GRADE working
con esofagitis severa para descartar la presencia de un esó- group. Rating quality of evidence and strength of recommenda-
fago de Barrett.120 Por otro lado, no ha sido demostrada tions: Incorporating considerations of resources use into grading
recommendations. BMJ 2008; 336: 1170-1173.
la utilidad de repetir la endoscopía en pacientes que no 4. Katz P, Gerson L, Vela M. Guidelines for the Diagnosis and Ma-
tienen Barrett en la endoscopía de control o en los que la nagement of Gastroesophageal Reflux Disease. Am J Gastroente-
endoscopía inicial fue normal.121 rol 2013; 108: 308-328.
Las estenosis pépticas son infrecuentes dado el uso 5. Boeckxstaens G, El-Serag H, Smout A, Kahrilas P, Symptomatic
generalizado de los tratamientos antisecretores. Las este- reflux disease: the present, the past and the future. Gut 2014; 63:
1185-1193.
nosis tienden a ocurrir más frecuentemente en pacientes
6. A Barlow WJ, Orlando RC. The pathogenesis of heartburn in
ancianos y con una larga duración de síntomas no trata- nonerosive reflux disease: a unifying hypothesis. Gastroenterology
dos en el contexto de una motilidad esofágica anormal.122 2005; 128: 771-778.
El esófago de Barrett es la única complicación de la 7. Sloan S, Rademaker AW, Kahrilas PJ. Determinants of gastroe-
ERGE con potencial de malignidad. El esófago de Barrett sophageal junction incompetence: hiatal hernia, lower esophageal
se encuentra en el 5 al 15% de los pacientes a los que se sphincter, or both? Ann Intern Med 1992; 117: 977-982.
8. Robertson EV, Derakhshan MH, Wirz AA. Central obesity in
les realiza endoscopía por síntomas de reflujo.123 Las guías asymptomatic volunteers is associated with increased intrasphinc-
actuales recomiendan que los pacientes con Barrett en- teric acid reflux and lengthening of the cardiac mucosa. Gastroen-
doscópico confirmado deben ser enrolados en programas terology 2013; 145: 730-739.
de vigilancia en búsqueda de displasia.124 9. Lee YY, Wirz AA, Whiting JG, Robertson EV, Smith D, Weir
A, Kelman AW, Derakhshan MH, McColl KE. Waist belt and
Conclusión central obesity cause partial hiatus hernia and short-segment acid
reflux in asymptomatic volunteers. Gut 2014; 63: 1053-1060.
La ERGE, cuya prevalencia ha alcanzado proporciones 10. Pandolfino JE, El-Serag HB, Zhang Q, Shah N, Ghosh SK,
de epidemia, es una de las entidades clínicas más frecuen- Kahrilas PJ. Obesity: a challenge to esophagogastric junction inte-
temente enfrentadas tanto por el gastroenterólogo clínico grity. Gastroenterology 2006; 130: 639-649.
11. Duggan C, Onstad L, Hardikar S. Association between markers
como por el médico general y genera importantes costos of obesity and progression from Barrett’s esophagus to esophageal
en salud. Nuestra comprensión acerca de la fisiopatología adenocarcinoma. Clin Gastroenterol Hepatol 2013; 11: 934-943.
de esta enfermedad se ha ido refinando, de tal manera que 12. Gonlachanvit S, Maurer AH, Fisher RS, Parkman HP. Regional
ahora sabemos que la ERGE ocurre como una consecuen- gastric emptying abnormalities in functional dyspepsia and gas-
cia de la interacción de múltiples factores. Esta clara con- tro-oesophageal reflux disease. Neurogastroenterol Motil 2006;
18: 894-904.
cepción de la fisiopatología es clave para poder planificar el
13. Fletcher J, Wirz A, Young J. Unbuffered highly acidic gastric juice
enfoque diagnóstico más adecuado, y asimismo escoger el exists at the gastroesophageal junction after a meal. Gastroentero-
tratamiento más racional de acuerdo a la presentación del logy 2001; 121: 775-783.
paciente. El uso juicioso de los métodos de diagnóstico ac- 14. Beaumont H, Bennink RJ, de Jong J, Boeckxstaens GE.The po-
tuales permite categorizar adecuadamente a los pacientes, sition of the acid pocket as a major risk factor for acidic reflux in
descartar patologías diferentes a la ERGE de manera pre- healthy subjects and patients with GERD. Gut 2010; 59: 441-451.
15. Kahrilas PJ, McColl K, Fox M, O'Rourke L, Sifrim D, Smout AJ,
cisa y orientar a la terapéutica más oportuna para cada si- Boeckxstaens G. The acid pocket: a target for treatment in reflux
tuación clínica. En el futuro, una mejor compresión de los disease. Am J Gastroenterol 2013; 108: 1058-1064.
mecanismos fisiopatogénicos llevará al refinamiento de las 16. Hirschowitz BI. A critical analysis, with appropriate controls, of
técnicas diagnósticas, de los recursos farmacológicos y de gastric acid and pepsin secretion in clinical esophagitis. Gastroen-
los procedimientos terapéuticos mínimamente invasivos. terology 1991; 101: 1149-1158.
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Acta Gastroenterol Latinoam 2016;46(2):160-172 169


Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8
https://doi.org/10.30944/20117582.111

ARTÍCULO DE REVISIÓN

Acalasia, una visión actual


Achalasia, a current view
Robin Germán Prieto1, Jhon Edison Prieto2, Fernando Casas3, Hernán Ballén4

1
Médico, especialista en Cirugía General, subespecialista en Gastroenterología, Centro de Enfermedades Hepáticas y Digestivas,
CEHYD SAS, Bogotá, D.C., Colombia
2
Médico, especialista en Medicina Interna, subespecialista en Gastroenterología, Centro de Enfermedades Hepáticas y Digestivas,
CEHYD SAS, Bogotá, D.C., Colombia
3
Médico, especialista en Cirugía General, subespecialista en Gastroenterología, Hospital Central de la Policía, Bogotá, D.C.,
Colombia
4
Médico, especialista en Medicina Interna, subespecialista en Gastroenterología, Hospital Central de la Policía, Bogotá, D.C.,
Colombia

Resumen
La palabra ‘acalasia’ es un neologismo de origen griego, acuñado por el médico inglés Sir Edwin Cooper en 1913,
y significa: sin calidad de relajación.
La acalasia es una enfermedad que se manifiesta clínicamente por disfagia para sólidos y para líquidos, regur-
gitación esofágica, dolor retroesternal, tos, broncoaspiración, neumonía, acidez estomacal y pérdida de peso. Su
fisiopatología corresponde a la ausencia de peristalsis esofágica e insuficiente relajación del esfínter esofágico
inferior. Estas anormalidades motoras se deben a la pérdida de las neuronas mientéricas que coordinan la pe-
ristalsis esofágica y la relajación del esfínter esofágico inferior.
Fue descrita por primera vez por Sir Thomas Willis en 1674. Aunque actualmente se considera idiopática, se han
comenzado a considerar como posibles causas las alteraciones autoinmunitarias y la predisposición genética;
además, las infecciones por virus herpes y por virus herpes zóster se han implicado como causas probables.
Su incidencia anual oscila entre 0,3 y 1,63 por 100.000 personas en adultos, con una prevalencia anual de 10 en
100.000 habitantes. Afecta por igual a los dos sexos, y el grupo etario más afectado es el de 30 a 60 años.
El diagnóstico se sospecha por los síntomas que presenta el paciente, de los cuales la disfagia es el más impor-
tante. Se confirma por medio de la endoscopia de las vías digestivas altas, el esofagograma y la manometría de
alta resolución.
El tratamiento sigue siendo paliativo y se puede orientar por el subtipo de acalasia, según la clasificación de Chi-
cago. Los mejores resultados se obtienen mediante las técnicas de dilatación neumática, miotomía laparoscópica
de Heller y, más recientemente, mediante la miotomía endoscópica peroral (Per-Oral Endoscopic Myotomy, POEM),
descrita por Haruhiro Inoue en Japón en el año 2008. Aún faltan estudios prospectivos aleatorizados con segui-
miento a largo plazo para determinar cuál es la mejor técnica.
Se presenta una revisión actualizada del tema.
Palabras clave: acalasia del esófago; trastornos de la motilidad esofágica; diagnóstico por imagen; manometría;
cirugía endoscópica por orificios naturales; miotomía.

Fecha de recibido: 12/09/2018 – Fecha aceptación: 16/11/2018


Correspondencia: Robin German Prieto, MD, Edificio Acomédica I, Calle 127 N° 19A-28, Consultorio 412, Teléfono: (317) 367-3337,
Bogotá, D.C., Colombia
Correo electrónico: rgprietoo@hotmail.com
Citar como: Prieto RG, Prieto JE, Casas F, Ballén H. Acalasia, una visión actual. Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8. https://doi.
org/10.30944/20117582.111
Este es un artículo de acceso abierto bajo una Licencia Creative Commons - BY-NC-ND https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/deed.es

171
Prieto RG, Prieto JE, Casas F, et al Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8

Abstract
The ord achalasia is a neologism of ree origin, coined by the English physician Sir Ed in Cooper in 1 13,
and means no quality of relaxation. Achalasia is a disease clinically manifested by dysphagia ith both solids
and liquids, esophageal regurgitation, retrosternal pain, cough, bronchial aspiration, pneumonia, heartburn
and eight loss. hysiopathologically it corresponds to the loss of esophageal peristalsis and to an insu cient
relaxation of the lo er esophageal sphincter (LES . These motor abnormalities are due to the loss of myenteric
neurons that coordinate esophageal peristalsis and relaxation of the LES.
First described by Sir Thomas Willis in 1674, and although it is currently considered idiopathic, it has begun to
be considered as possible causes autoimmune components and genetic predisposition; viral infections by herpes
and chic enpox zoster have also been implicated as probable causes.
Its incidence ranges from 0.3 to 1.63 per 100,000 adults, ith a prevalence of 10 in 100,000 inhabitants per year. It
a ects equally any gender, and the age group bet een 30 and 60 years is the most a ected.
The diagnosis is suspected based on the symptomatology, ith dysphagia being the most important symptom. It
is confirmed ith the performance of endoscopy of the upper digestive tract, esophagogram and high resolution
manometry. The treatment remains palliative, and may be guided by the subtype of achalasia, according to the
Chicago classification. The best results are obtained by the techniques of pneumatic dilation, Heller s laparos-
copic myotomy, and more recently by the E technique (per oral endoscopic myotomy , described in 2008 in
Japan by Haruhiro Inoue. There is still a lac of prospective randomized studies ith long term follo up that
determine hich is the best technique. An updated revie of the subject is presented.
Key words: esophageal achalasia; esophageal motility disorders; diagnostic imaging; manometry; natural orifice
endoscopic surgery; myotomy.

Introducción correlación con enfermedades como la neoplasia


La palabra acalasia es un neologismo de origen endocrina múltiple de tipo 2 (Multiple Endocrine
griego, acuñado por el médico inglés Sir Edwin Neoplasia type 2, E 2 y el síndrome de Allgro-
Cooper en 1 13, y significa: sin calidad de relaja- ve; también, se han implicado como probables
ción. La acalasia es una enfermedad que se ma- causas las infecciones por virus herpes y por
nifiesta clínicamente por disfagia para sólidos herpes zóster 2.
y para líquidos, regurgitación esofágica, dolor Su incidencia anual oscila entre 0,3 y 1,63 por
retroesternal, tos, broncoaspiración, neumonía, 100.000 personas en adultos ,6, con una preva-
acidez estomacal y pérdida de peso. Su fisiopa- lencia de 10 en 100.000 habitantes al año. Afecta
tología corresponde a la ausencia de peristalsis por igual a cualquier sexo, y el grupo etario de 30
esofágica e insuficiente relajación del esfínter eso- a 60 años es el más afectado 7,8.
fágico inferior 1,2. Estas anormalidades motoras se
deben a la pérdida de las neuronas mientéricas, Diagnóstico
que coordinan la peristalsis esofágica y la rela- En cualquier paciente que consulte por disfagia,
jación del esfínter esofágico inferior 3. se debe descartar inicialmente re ujo gastroeso-
Fue descrita por primera vez por Sir Thomas fágico, obstrucción mecánica y procesos in a-
Willis 4 en 1674 y, aunque actualmente se consi- matorios o neoplásicos. osteriormente, se debe
dera idiopática, se han comenzado a conside- estudiar la motilidad esofágica por la posibilidad
rar posibles causas autoinmunitarias, debido de acalasia 9.
al hallazgo de anticuerpos circulantes contra el La endoscopia de vías digestivas altas permite
plexo mientérico. En otros estudios se mencio- descartar enfermedad erosiva por re ujo gas-
na una posible predisposición genética, por su troesofágico, anomalías estructurales y cáncer

172
Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8 Acalasia. Una visión actual

de esófago. o obstante, un resultado normal cuente, presenta las tasas de mejoría más bajas
no descarta la existencia de acalasia, ya que la (2 a 6 17 1
. El tratamiento de la acalasia se
endoscopia de vías digestivas altas puede ser enfoca en lograr la disminución de la presión del
normal hasta en el 40 de los pacientes con esfínter esofágico inferior, mediante tratamientos
acalasia 10,11. farmacológicos, endoscópicos o quirúrgicos 20,21.
El esofagograma puede mostrar el clásico as-
pecto de pico de pájaro , dilatación esofágica y
ausencia de peristalsis 12 (figura 1 .
La manometría esofágica de alta resolución
es un estudio que se basa en el análisis de la pre-
sión integrada de relajación (Integrated Relaxa-
tion Pressure, I , la presión integral contráctil
distal (Distal Contractile Integral Pressure, CI y la
latencia distal. ediante procesos algorítmicos,
estas mediciones permiten determinar alteracio-
nes de la motilidad esofágica 13. Actualmente, se
considera la prueba estándar para establecer el
diagnóstico de acalasia 8.
Según la clasificación de Chicago, versión 3.0,
se describen cuatro grandes grupos de anormali-
dades motoras esofágicas: acalasia, obstrucción
de la salida en la unión esófago gástrica, altera-
ciones mayores, y alteraciones menores 14.
Con la introducción de la manometría de alta
resolución en la década de 1 0, el diagnóstico
de acalasia se ha subdividido en tres subtipos,
que se caracterizan por falla de la relajación del
esfínter esofágico inferior, pero poseen diferentes
patrones de contracción esofágica. La acalasia de
tipo I anteriormente, clásica presenta 100
de degluciones fallidas. La acalasia de tipo II, o
acalasia con compresión esofágica, presenta pre-
surización panesofágica, al menos, en el 30 de
las degluciones. La acalasia de tipo III, o espástica,
presenta contracciones prematuras o espásticas
en el esófago distal, al menos, en el 30 de las
degluciones 1 ,16.

Tratamiento
Con base en la clasificación de Chicago, algunos
autores han sugerido que la acalasia de tipo I
responde mejor al tratamiento con la miotomía
de Heller, con tasas de mejoría del 6 al 8 ; la
de tipo II, que es la más común, presenta las tasas
de mejoría más altas (8 a con cualquier
tratamiento, y la de tipo III, que es la menos fre- Figura 1. Esofagograma: aspecto típico de ‘pico de pájaro’

173
Prieto RG, Prieto JE, Casas F, et al Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8

Tratamientos farmacológicos nales en forma temprana y su eficacia disminuye


Se han empleado medicamentos, como los nitra- con el paso de los años; la tasa de éxito es de tan
tos, los bloqueadores de canales de calcio y, más solo el 60 a los tres años. Se puede observar
recientemente, los inhibidores de la fosfodies- re ujo hasta en 33 de los pacientes, por lo que
terasa. Sin embargo, no hay estudios de segui- la dilatación neumática no se recomienda en pa-
miento a largo plazo y su uso ha sido previo a la cientes menores de 40 años y, en aquellos que no
subclasificación de los tipos de acalasia. Aunque mejoran con una sola dilatación neumática, se
los medicamentos relajantes del músculo liso recomienda el tratamiento quirúrgico. La prin-
pueden proporcionar algún beneficio sintomá- cipal complicación informada es la perforación
tico, no son tratamientos duraderos, a menudo esofágica, hasta en 8 de los casos 2 .
se asocian con efectos secundarios intolerables, En algunos estudios europeos multicéntricos,
y no detienen la progresión de la dilatación eso- se ha comparado la miotomía de Heller con la di-
fágica ni la retención de alimentos 13. latación neumática y se ha encontrado hasta 0
La toxina botulínica se ha empleado desde de efectividad, sin una diferencia significativa entre
1 4 y consiste en la inyección endoscópica de ellos. Se debe tener en cuenta que estos estudios
Botox en el esfínter esofágico inferior, lo que fueron anteriores a la subclasificación de la aca-
inhibe la liberación de acetilcolina de las termi- lasia 26,27. En otro estudio europeo, la efectividad
naciones nerviosas y baja el tono del esfínter. La
mejoría de la sintomatología es de hasta 78,7 al
mes del tratamiento, pero baja hasta 40,6 a los
12 meses. Aunque el procedimiento es simple y
casi sin ningún riesgo de complicación, su repe-
tición es menos eficaz y se han informado casos
de morbilidad e, incluso, de mortalidad a causa
de mediastinitis. Actualmente, sigue siendo una
alternativa en pacientes ancianos, en aquellos no
aptos para otro tipo de tratamientos y en casos
de acalasia de tipo III después de un tratamiento
quirúrgico fallido 22 24.

Dilatación neumática
La dilatación neumática se practica con un balón
dilatador cilíndrico de 30, 3 o 40 mm (figura 2 ,
que se ubica a nivel del esfínter esofágico infe-
rior mediante uoroscopia y se in a mediante un
manómetro manual. Actualmente, el más usado
en los Estados nidos es un balón de polietile-
no con marcadores radioopacos en su interior
( igi ex . ecientemente, se ha empezado a
utilizar un dilatador hidráulico de 30 mm, con-
juntamente con la tecnología FLI (Functional
Lumen Imaging Probe), con la cual no se requiere
la uoroscopia 13.
Con esta técnica se logra una mejoría de la
disfagia hasta en el 8 de los casos, pero tiene
poco efecto sobre el dolor retroesternal. Hasta
2 de los pacientes requiere sesiones adicio- Figura 2. Balón de dilatación neumática

174
Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8 Acalasia. Una visión actual

de la dilatación neumática en el tratamiento de tomy, POEM) fue rtega, que publicó su trabajo
la acalasia de tipo II fue del 100 y, debido a su de miotomía endoscópica submucosa en 1 80, la
menor costo y riesgo de perforación, los autores cual no fue aceptada universalmente debido a la
la recomiendan como el tratamiento de elección preocupación de un alto riesgo de perforación 31.
en estos casos 28. asricha publicó un trabajo en el 2007, en el que
describió la realización de un túnel submucoso
Miotomía de Heller esofágico en cerdos, contribución de gran impor-
Fue descrita por Ernest Heller en 1 13, y consiste tancia también 32.
en practicar una miotomía anterior mediante una El paradigma del tratamiento quirúrgico para
incisión longitudinal de 7 cm en el esfínter esofá- la acalasia cambió cuando Inoue practicó en el
gico inferior, que se extienda 2 cm en el cardias año 2008 la primera miotomía endoscópica en un
gástrico y cm en el esófago. Este procedimiento ser humano, y posteriormente, en 2010, publicó la
debe ir acompañado de una cirugía antirre ujo, primera serie de 17 pacientes con acalasia tratados
siendo la de tipo or la más recomendada 13. En mediante miotomía endoscópica peroral, la cual
1 1 se describió la miotomía laparoscópica de demostró buenos resultados y sin complicaciones
Heller 2 , en uso desde hace más de dos décadas graves. urante el seguimiento (media de me-
y considerada actualmente como el tratamiento ses , se necesitó tratamiento o medicación adicional
estándar para la acalasia 24,30. (inhibidores de la bomba de protones en un solo
Algunos estudios muestran resultados si- paciente, que desarrolló esofagitis por re ujo 33.
milares en cuanto a la mejoría de la disfagia, Esta técnica ha sido aceptada rápidamente
cuando se compara la técnica laparoscópica en la mayor parte del mundo y se considera una
con la toracoscópica, pero informan una menor alternativa segura y efectiva para el tratamiento
incidencia de re ujo después de la primera. La de la acalasia. Los pacientes son operados bajo
vía toracoscópica tiene, además, la desventaja anestesia general. eben tener una dieta líquida
de ser técnicamente más dispendiosa y requerir clara durante las 48 horas antes del procedimien-
un tubo a tórax en el periodo posperatorio, por to y ayuno de 12 horas antes del mismo. Algunos
lo cual los pacientes presentan mayor sensación autores recomiendan una profilaxis preopera-
de malestar y dolor 2 . toria con uconazol durante siete días. Se debe
ucha de la evidencia actual respalda el uso suspender la administración de clopidogrel o
de la miotomía laparoscópica de Heller, pero aún de ácido acetilsalicílico durante y 7 días, res-
continúa el debate apoyando el uso de la dila- pectivamente, antes del procedimiento 34. El uso
tación neumática. En un estudio aleatorizado, de dióxido de carbono (C 2 es obligatorio, para
multicéntrico y prospectivo (European Acalasia disminuir el riesgo de eventos adversos asociados
Trial , se comparó la dilatación neumática con con la fuga de gas.
la cardiomiotomía laparoscópica de Heller con La técnica comprende cuatro pasos específi-
fundoplicatura de or, con un seguimiento de cos: mucosotomía, que se debe practicar entre 12
dos años. Se encontró que todos los tipos de aca- y 14 cm por encima de la unión gastroesofágica;
lasia mejoraban de manera similar con estos dos tunelización (sic , la cual debe extenderse 2 a 3
procedimientos, pero hubo mejores resultados a cm dentro del cardias gástrico por debajo de la
largo plazo para los pacientes con acalasia de tipo unión gastroesofágica; miotomía, que debe ini-
III tratados con la cardiomiotomía laparoscópica ciar a 2 cm después de la mucosotomía y termi-
de Heller 14,26. nar en el sitio distal de la tunelización , y cierre
de la mucosotomía, con la técnica tradicional
Miotomía endoscópica peroral mediante clips 35.
no de los principales pioneros en el desarro- En una revisión sistemática de 2016 que in-
llo de esta técnica (Per-Oral Endoscopic Myo- cluyó 1.122 pacientes, los efectos secundarios

175
Prieto RG, Prieto JE, Casas F, et al Rev Colomb Cir. 2019;34:171-8

menores fueron capno neumoperitoneo (30,6 , con células madre, incluida la acalasia 6,40. Este
capno neumotórax (11,0 y enfisema subcutáneo hallazgo abre una ventana a futuras investigacio-
(36,1 , y los mayores fueron fístula del medias- nes, que determinen la predisposición genética o
tino (0,3 y sangrado (1,1 . Solo hubo un caso la detección temprana de la acalasia 41 43.
de muerte (0,0 36
. En aquellos pacientes con acalasia de reciente
El análisis conjunto de tres estudios compa- aparición, se han usado tratamientos antivirales
rativos entre la cardiomiotomía laparoscópica que, se cree, logran eliminar el elemento antigé-
de Heller y la miotomía endoscópica peroral, nico y, por lo tanto, controlar la reacción inmu-
mostró resultados similares en cuanto a efectos nológica 2,44.
secundarios, tasa de perforación y tiempo qui-
rúrgico, y una tendencia no significativa estadís- Conclusión
ticamente hacia una reducción del tiempo de La acalasia es todavía una enfermedad idiopá-
hospitalización en el grupo sometido a miotomía tica, en la que se han estudiado diversas causas,
endoscópica peroral. Considerando que este úl- incluso, las genéticas, las inmunológicas y las
timo es un tratamiento seguro y efectivo para la virales. Aunque todavía existe un importante
acalasia, que mejora subjetiva y objetivamente desconocimiento de su fisiopatología, se sabe
los síntomas relacionados con ella, se necesita que se debe a una pérdida de la peristalsis eso-
adelantar futuros estudios comparativos y alea- fágica y a una relajación inadecuada del esfínter
torizados, para determinar cuál es el tratamiento esofágico inferior.
más efectivo a largo plazo 37 3 . El diagnóstico se sospecha por los síntomas
del paciente, entre los cuales la disfagia es el más
Nuevas perspectivas y futuros importante, y se confirma mediante endoscopia
tratamientos de las vías digestivas altas, esofagograma y ma-
En la última década, se ha fortalecido la hipó- nometría de alta resolución.
tesis de las causas inmunológicas para explicar El tratamiento sigue siendo paliativo y pue-
la fisiopatología de la acalasia. or esta razón, de estar orientado según el subtipo de acala-
se ha considerado teóricamente razonable usar sia, de acuerdo con la clasificación de Chicago.
medicamentos inmunomoduladores en las pri- Los mejores resultados se obtienen mediante
meras etapas de la enfermedad 6. Se conocen tres la dilatación neumática, la cardiomiotomía la-
informes de casos, en los que se administraron paroscópica de Heller y, más recientemente, la
corticosteroides (prednisolona, metilprednisolo- miotomía endoscópica peroral. o obstante, aún
na o beclometasona solos o en combinación con faltan estudios prospectivos aleatorizados con
otros inmunosupresores (metotrexato, azatiopri- seguimiento a largo plazo que determinen cuál
na o ciclofosfamida , y se logró la recuperación es la mejor técnica.
completa de la peristalsis, corroborada por ma-
nometría de alta resolución 2. Sin embargo, hasta Conflicto de interés: o existe ninguno.
el momento, no existe evidencia definitiva que
apoye el uso de esta terapia y son indispensables Fuente de financiación: Este estudio fue finan-
los estudios futuros. ciado por los autores.
En algunos estudios recientes, se ha demostra-
do que las células madre con potencial neurogé- Referencias
nico pueden ser implantadas, sobrevivir y migrar 1. A aiz A, unus , han S, emon , emon A.
con éxito dentro del intestino agangliónico. Exis- Systematic revie and meta analysis of perioperative
outcomes of peroral endoscopic myotomy ( E and
te información preliminar de la recuperación laparoscopic Heller myotomy (LH for achalasia.
funcional en enfermedades gastrointestinales Surg Laparosc Endosc ercutan Tech. 2017;27:123 31.
de tipo agangliónico, mediante el tratamiento doi: 10.10 7 SLE.0000000000000402

176
12 Esofagitis infecciosas
Luis Cortés, Vanesa Bernal
Unidad de Gastroenterología y Hepatología. Hospital de San Jorge, Huesca

Introducción OBJETIVOS DE ESTE CAPÍTULO


Los mecanismos de defensa del esófago frente ❱❱ Conocer los factores que influyen en el
a la infección incluyen la salivación, el peristal- desarrollo de infecciones en el esófago.
tismo, los episodios aislados de reflujo ácido, la
❱❱ Ayudar a identificar con precocidad los
integridad del epitelio y un adecuado equilibrio
síntomas que sugieren la presencia de
entre la flora fúngica y la bacteriana (figura 1).
una esofagitis infecciosa.
Este último puede verse alterado tras la admi-
nistración de antibióticos, al permitir la prolife- ❱❱ Conocer los microorganismos más
ración de microorganismos que forman parte de frecuentemente implicados en el desarrollo
la flora habitual de la orofaringe. La inmunidad de esofagitis infecciosas, así como los
humoral y, sobre todo, la inmunidad celular tie- procedimientos diagnósticos disponibles
nen un papel primordial en la etiopatogenia de y pautas de tratamiento.
las infecciones esofágicas. De hecho, la mayoría
de los pacientes que presentan una esofagitis in-
fecciosa tienen una alteración del sistema inmu- REFERENCIAS CLAVE
ne. Así ocurre con los pacientes infectados por el
virus de la inmunodeficiencia humana1, aquellos 1. Baehr PH, McDonald GB. Esophageal infec-
en tratamiento quimioterápico o radioterápico y tions: risk factors, presentation, diagnosis
and treatment. Gastroenterology 1994;
aquellos sometidos a trasplantes de órganos con
106:509-32,
tratamiento inmunodepresor. En este contexto,
los agentes infecciosos más frecuentes son Can- 2. Pappas PG, Kaufman CA, et al. Clinical
dida albicans, virus herpes simple, Citomegalo- Practice Guidelines for the management of
virus y Mycobacterium tuberculosis. candidiasis: 2009 Update by the Infectious
Diseases Society of America. CID 2009; 48:
Estas infecciones también pueden aparecer en 503-35,
el paciente inmunocompetente, asociadas habi-
3. Genereau T, Lortholary O, Bouchaud O,
tualmente a la presencia de alteraciones esofá-
Lacassin F, Vinceneux P, De Truchis P et al.
gicas subyacentes (que favorecen el estasis pro-
Herpes simplex esophagitis in patients with
longado del contenido luminal), o al tratamiento
AIDS: report of 34 cases. The Cooperative
con corticoesteroides tópicos inhalados. En este Study Group on Herpetic Esophagitis in HIV
contexto, el agente infeccioso más frecuente es Infection. Clin Infect Dis 1996; 22:926-31.
Candida albicans.
Por otra parte, debe considerarse que no todos
los problemas que inciden sobre el esófago de otros medicamentos hace que aumente la inciden-
los pacientes inmunodeprimidos guardan rela- cia de esofagitis medicamentosas.
ción con agentes infecciosos. Por ejemplo, al-
gunos tumores como el sarcoma de Kaposi, el El presente capítulo se centra en la discusión de las
linfoma o el carcinoma escamocelular pueden tres infecciones más frecuentemente observadas
afectar también al esófago de estos pacientes. en el esófago: 1) Candida albicans; 2) virus del her-
A su vez, la toma de fármacos antirretrovíricos y pes simple y 3) Citomegalovirus.

E S Ó F A G O 213
Sección 2. Esófago

Equilibrio en la zona fúngica ellos, el 50% son atribuibles a Candida albicans y


y bacteriana el resto a otro tipo de microorganismos. Es impor-
tante considerar que, a menudo, coexisten distin-
tos tipos de infecciones en un mismo individuo. Por
Salivación tanto, la identificación de Candidas en un examen
endoscópico no excluye una infección concomitan-
te por CMV o VHS, particularmente en pacientes
Peristaltismo
con inmunosupresión grave3 (tabla 1).

Inmunidad
Integridad del Manifestaciones clínicas
humoral
epitelio Los síntomas característicos de la esofagitis por
Inmunidad Candidas son la disfagia y la odinofagia. La intensi-
celular Reflujo ácido dad de los síntomas es variable y puede oscilar des-
fisiológico de una leve disfagia orofaríngea, hasta una grave
dificultad para la deglución con signos de deshidra-
tación y malnutrición. En ocasiones, la odinofagia
únicamente se manifiesta con la deglución de be-
bidas muy calientes o muy frías. Hasta en un 25%
de los casos, los síntomas pueden estar presentes
Figura 1. Causas más frecuentes de hipoproteinemia.
en forma de infección leve, pacientes muy debilita-
dos o enfermos con una candidiasis mucocutánea
(CMC). En el último caso, los pacientes pueden
Infecciones por hongos presentar síntomas de insuficiencia suprarrenal
–hipotensión e hiperpigmentación–, dado que la
Epidemiología CMC puede formar parte de un síndrome MEN-1.
En el otro extremo se sitúan los pacientes con gra-
El hongo que con mayor frecuencia infecta el esófa- ves neutropenias que pueden mostrar síntomas y
go es Candida albicans. Otras especies de Candidas
como C. tropicales, C. glabrata y C. parapsilosis, son
menos frecuentes. Aunque la esofagitis candidiási- TABLA 1. Factores de riesgo para el desarrollo de
ca puede aparecer sin un factor predisponente aso- esofagitis infecciosas
ciado, en la mayoría de los casos se puede observar
al menos uno de los siguientes2: 1) enfermedades ❱ Uso de antibióticos (alteran la flora normal).
que producen estasis grave, como la acalasia o la
❱ Estasis esofágica debida a un trastorno motor.
esclerodermia (la supresión ácida sería un factor
adicional en estos pacientes); 2) el consumo recien- Acalasia.
te de antibióticos de amplio espectro, que rompe Esclerosis sistémica progresiva.
el equilibrio natural entre hongos y bacterias favo- Divertículos.
reciendo la proliferación de levaduras; 3) glucocor- ❱ Estenosis del esófago.
ticoides tópicos, que se administran por vía intra-
❱ uimioterapia o radioterapia del esófago.
nasal u oral para el asma o la rinitis; 4) fármacos
inmunosupresores, que interfieren con la función ❱ Compromiso del sistema inmune.
de los leucocitos polimorfonucleares (corticoste- Diabetes mellitus.
roides, azatioprina, citostáticos); 5) condiciones Edad avanzada.
sistémicas que deterioran la función inmune del Malnutrición.
huésped: diabetes mellitus, insuficiencia suprarre- Alcoholismo.
nal, edad avanzada, alcoholismo y malnutrición;
Abuso de drogas.
6) neoplasias en estado avanzado, especialmente
hematológicas (leucemias, etc.); 5) trasplante de Cáncer avanzado (neoplasias hematológicas).
órganos (por ej., médula ósea) y 7) infección por Uso frecuente de corticoides.
VIH, particularmente cuando el recuento de CD4 es Estado postrasplante (por ej., médula ósea).
inferior a 200/cm3. El 40% de los pacientes con sida Sida.
desarrollan esofagitis de naturaleza infecciosa. De

214
12. Esofagitis infecciosas

signos de sepsis, así como dolor abdominal debido que no responden al tratamiento o cuando se hace
a la formación de abscesos fúngicos en el hígado, necesario descartar otra infección concomitante.
bazo o riñón. En los pacientes con VIH, el muguet Tal es el caso de los enfermos con síntomas graves:
bucal suele predecir una esofagitis concomitante, náuseas y vómitos persistentes, dolor abdominal,
con un valor predictivo positivo del 90% y un valor hemorragia gastrointestinal, tos, fiebre o diarrea;
predictivo negativo del 82%. síntomas que sugieren la implicación de otros mi-
croorganismos en la patogenia del cuadro.
Diagnóstico
El método de elección para establecer el diagnós-
Tratamiento
tico es la endoscopia digestiva alta que muestra En el momento actual se dispone de terapias an-
típicas seudomembranas o placas blanquecinas ad- tifúngicas de reconocida eficacia. Éstas incluyen
heridas a la mucosa esofágica (figura 2). Cuando és- agentes poco absorbibles que ejercen un efecto tó-
tas se desprenden, es característica la visión de una pico, como la nistatina y el cotrimazol, agentes que
escara eritematosa y friable. En las formas graves se absorben por vía oral como el ketoconazol, flu-
las placas tienden a confluir, apareciendo úlceras y conazol e itraconazol, y agentes de uso parenteral
seudomembranas. El diagnóstico puede confirmar- como la anfotericina B, fluconazol e itraconazol. La
se mediante citología por cepillado (más sensible) tabla 2 muestra los agentes disponibles y las dosis
o biopsias (permite excluir otras infecciones como recomendadas. La elección del mejor tratamiento
VHS y CMV, especialmente en el enfermo con sida depende primordialmente del grado de deterioro
o neutropenia severa). El estudio histológico mues- de la condición inmune, de la gravedad de la infec-
tra la presencia de inflamación y de hifas junto con ción y de la capacidad para tolerar la vía oral5. En
masas de hongos en desarrollo (que no suelen ob- todos los casos es esencial identificar y corregir los
servarse cuando existe sólo colonización). El cultivo posibles factores precipitantes. Resultan de utilidad
puede ser útil cuando se sospecha la presencia de las siguientes recomendaciones:
Candidas resistente a los azoles, Mycobacterium
❱ En los pacientes inmunocompetentes se acon-
tuberculosis, esofagitis bacterianas o infecciones
seja el uso de fluconazol por vía oral, a la dosis
por virus, en cuyo caso aquél goza de mayor sensi-
de 200-400 mg/día (3-6 mg/kg) durante 14-21
bilidad que el propio examen histológico4.
días. A diferencia del ketoconazol, la absorción
La endoscopia puede ser innecesaria en los pacien- del fluconazol no es pH dependiente, por lo que
tes con sida que presentan disfagia u odinofagia, puede administrarse a pacientes con hiposecre-
si la orofaringe muestra la presencia de aftas. En ción ácida debida a gastritis atrófica o a la admi-
tal caso, es lícito iniciar tratamiento antifúngico nistración de fármacos antisecretores (anti-H2
empírico, reservando la endoscopia para aquellos o IBP). El fluconazol aumenta los niveles séri-

A B C D
Figura 2. Las figuras a y b corresponden a una esofagitis por Candidas. (A) Múltiples placas blanquecinas y seudomembranas
distribuidas de forma irregular por toda la circunferencia del esófago; (B) las placas confluyen configurando extensos cordones
que afectan longitudinalmente a todo el trayecto del esófago. Las figuras b y c corresponden a una esofagitis herpética; (C) las
vesículas iniciales han dado paso a la aparición de úlceras (mucosa rojiza) de bordes geográficos y ligeramente sobreelevados
(mucosa blanquecina); (D) en la mitad izquierda de la imagen se aprecia una amplia zona de mucosa superficialmente ulcerada.
Las biopsias deben tomarse del borde de las lesiones cuando se sospecha esofagitis herpética y del fondo cuando se sospecha
esofagitis por CMV.

215
Sección 2. Esófago

TABLA 2. Agentes disponibles para el tratamiento de las Si todo ello se descarta, se debe sustituir por
esofagitis fúngicas voriconazol (200 mg/12 horas, oral o intraveno-
so) o posaconazol (400 mg/12 h, solución oral).
La duración habitual del tratamiento es de 2-3
Agente Dosificación
semanas a partir del inicio de la mejoría clínica.
❱ Tópicos Si el paciente no responde a esta pauta debe
Nistatina 1-3 millones de unidades contemplarse la anfotericina B vía i.v..
(10-30 ml) 4-5 veces/día ❱ Pacientes neutropénicos con riesgo de enfer-
Clotrimazol Una tableta de 10 mg, medad diseminada y pacientes con resistencia
5 veces al día a azoles. El fármaco de elección en estos casos
❱ Sistémicos es la caspofungina (50 mg/día, intravenoso, du-
Ketoconazol 200-400 mg una vez al día, rante 14-21 días). La anfotericina B por vía i.v.
por vía oral (0,3-0,7 mg/kg/día) se asocia con una mayor
luconazol 200-400 mg una vez al día,
toxicidad, principalmente renal, pero puede
por vía oral o i.v. usarse en caso de infecciones multirresistentes,
infecciones por otros hongos como Aspergillus
Caspofungina 50 mg una vez al día por
vía i.v. flavus o Histoplasma capsulatum, o embarazo.
La presentación liposomal (3-5 mg/kg/día) es
Anfotericina B 0,3-0,6 mg/kg/día por vía i.v.
mejor tolerada. Si el enfermo presenta insufi-
Voriconazol 200 mg dos veces al día, vía ciencia renal, puede optarse por administrar
oral o i.v.
fluconazol i.v. (eficacia del 80% vs 95% respecto
Posaconazol 400 mg dos veces al día, a la anfotericina B). En este grupo de pacientes
vía oral debe pautarse siempre una nutrición parenteral
total y valorar el empleo de estimulantes de las
colonias de neutrófilos.
cos de algunos fármacos como la ciclosporina,
frecuentemente utilizada para evitar el rechazo Profilaxis
postrasplante, o la fenitoína y puede interaccio-
nar con las warfarinas. Entre sus efectos adversos Se debe considerar la profilaxis en pacientes con
se incluyen la aparición de náuseas y toxicidad enfermedad VIH avanzada, neutropenia inducida
hepática. En caso de interacción farmacológi- por quimioterapia, receptores de trasplante de ór-
ca o desarrollo de efectos adversos, se pueden gano sólido o de células madre, pacientes ingresa-
utilizar antimicóticos tópicos, como nistatina (10- dos en UCI con algún riesgo de candidiasis invasiva
30 ml, 4-5 veces/día durante un máximo de 14 o aquellos con antecedente de candidiasis grave o
días) o clotrimazol (10 mg, 5 veces/día durante recurrente. En estos casos se aconseja el uso de flu-
una semana). En caso de intolerancia a la vía oral conazol oral (200-400 mg/día).
se puede utilizar por vía intravenosa: fluconazol
(400 mg/día), anfotericina B (0,3-0,7 mg/kg/día)
o caspofungina (50 mg/día). Virus del herpes simple (VHS)
❱ Enfermos con deterioro del sistema inmunoló- Tanto el VHS tipo 1 como el tipo 2 son capaces de
gico leve o moderado (por ejemplo, enfermos producir esofagitis, constituyendo la segunda causa
con sida y disminución de CD4, pero sin neu- más común de esofagitis infecciosa. El VHS puede
tropenia). En estos casos, la mera presencia de afectar a personas sanas aunque es más frecuente
lesiones en la orofaringe y síntomas esofágicos que ello ocurra en pacientes que tengan compro-
justifica el empleo de fluconazol (por vía oral o metido el sistema inmune, especialmente en aque-
intravenosa según tolerancia) a la dosis de 200- llos pacientes con trasplante de órgano sólido o de
400 mg/día durante 14-21 días. Sólo si el enfer- médula ósea que requieren fármacos o medidas in-
mo no responde favorablemente en 72 horas munosupresoras significativas, sin olvidar a pacien-
debería realizarse una endoscopia con citología, tes con tratamientos quimioterápicos o infectados
biopsias y cultivo, para excluir una infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
concomitante por otro microorganismo y/o la En las personas sanas, en las que es más frecuente
presencia de una cepa resistente al fluconazol. el VHS tipo 1, se ha descrito después de un ejercicio

216
12. Esofagitis infecciosas

físico extenuante o una situación de estrés, pudien- TABLA 3. Clasificación de las lesiones herpéticas en el
do tratarse de una infección primaria o de la reac- esófago (grados)
tivación de una infección latente. Los factores de
riesgo son similares a los descritos en las esofagitis
por Candidas debiendo incluir, además, la intuba- ❱ I. Aparición de vesículas de tamaño
ción orotraqueal y nasogástrica. variable.
Las manifestaciones clínicas de la esofagitis suelen ❱ II. lceras circunscritas, superficiales,
agruparse en una tríada sintomática consistente de bordes ligeramente sobreelevados
en: fiebre, odinofagia y dolor retroesternal, que no cubiertas de exudado fibrinoso.
siempre están presentes en todos los pacientes. El
❱ III. lceras confluyentes que afectan a
dolor puede faltar en pacientes muy debilitados o
extensas áreas del esófago.
por el contrario ser muy intenso e irradiarse a la es-
palda, impidiendo la deglución y provocando disfa-
gia. A menudo, coexisten signos de gingivoestoma-
titis y lesiones herpéticas nasolabiales. Los casos en El tratamiento difiere en función de la intensidad
los que exista un grave compromiso inmune pue- de los síntomas y el estado inmunológico del pa-
den presentar signos de enfermedad diseminada ciente. Aunque en muchos pacientes no inmuno-
con afectación de órganos como el pulmón, hígado comprometidos con síntomas leves la infección
y sistema nervioso central. se resuelve espontáneamente en dos semanas, la
mayoría recomienda tratar a los enfermos inmuno-
El diagnóstico requiere la realización de una endos- competentes con aciclovir (Zovirax®) a la dosis de
copia. Los hallazgos endoscópicos en la esofagitis 400 mg v.o cada 8 horas, durante 7 días. En el caso
por VHS no difieren significativamente entre los pa- de los pacientes inmunodeprimidos se recomienda
cientes inmunocompetentes o inmunodeprimidos. ampliar dicho tratamiennto a los 14-21 días. Alter-
Estos hallazgos consisten en lesiones típicas locali- nativamente puede utilizarse valaciclovir (1.000 mg
zadas en el esófago medio y distal, que evolucionan v.o. tres veces al día) o el famciclovir (500 mg v.o.
desde vesículas a úlceras aisladas o coalescentes tres veces al día). En los pacientes con síntomas que
(tabla 3), con bordes ligeramente sobreelevados, impiden la deglución, se hace necesaria su hospita-
a diferencia de las úlceras provocadas por el CMV lización para rehidratar al paciente y valorar la ne-
que tienden a ser profundas, lineales o longitudi- cesidad de nutrición parenteral, así como instaurar
nales (figura 2). La probabilidad de confirmar el medidas sintomáticas (tales como la administración
diagnóstico es mayor si las biopsias se toman del de soluciones tópicas de lidocaína viscosa que pue-
borde de las úlceras. El examen histológico puede den aliviar los síntomas orofaríngeos) e iniciar la
mostrar células gigantes multinucleadas y cuerpos administración de aciclovir por vía i.v. (5 mg/kg/día
de inclusión intranucleares tipo Cowdry A. En au- cada 8 horas) durante 7-14 días que puede pasarse
sencia de estos signos, tiene valor la identificación a oral en el caso de que los síntomas reviertan. La
de agregados de grandes células mononucleares administración de foscarnet (40 mg/kg i.v. cada 8
(macrófagos) con núcleos convoluted. Su presencia horas) es un tratamiento de mayor coste y efectos
en el exudado adyacente al epitelio resulta sospe- secundarios, por lo que debe reservarse para los
chosa de esofagitis herpética y obliga a realizar téc- casos resistentes 6,7.
nicas de inmunohistoquímica e hibridación in situ
La profilaxis está indicada en los pacientes con sida
para confirmar la presencia del VHS. El cepillado
y en los receptores de trasplante, con serología po-
de la base de las úlceras puede revelar la presencia sitiva para VHS, que presentan recidivas frecuentes.
de Candidas, no siendo infrecuente que coexistan En estos casos puede administrarse aciclovir a la
ambas infecciones en los pacientes inmunodepri- dosis de 400 mg v.o. dos veces al día.
midos. Las pruebas serológicas son otro método
complementario en caso de hallazgo de títulos ele-
vados de IgM que revelan una primoinfección por Citomegalovirus (CMV)
el VHS. El diagnóstico diferencial de esta entidad
debe hacerse con otras causas de esofagitis infec- Las manifestaciones clínicas derivadas de la in-
ciosas (fundamentalmente Candida y CMV), sin ol- fección por CMV son muy diversas y dependen
vidar la esofagitis secundaria a la toma de pastillas fundamentalmente del estado inmunológico del
(pill esophagitis). paciente. En la mayoría de las personas inmu-

217
Sección 2. Esófago

nocompetentes, la infección por CMV suele ser tos subepiteliales y las células del endotelio. De ahí
asintomática o producir un síndrome de mono- que las biopsias deban tomarse del fondo y no del
nucleosis. Por el contrario, en los pacientes inmu- borde de las lesiones. Los signos típicos incluyen la
nocomprometidos (especialmente trasplantados y presencia de inclusiones intranucleares y la apari-
VIH) puede producir una morbilidad y mortalidad ción de un halo que, de forma característica, rodea
el núcleo de las células. A diferencia de la infección
significativa.
herpética, también pueden apreciarse pequeños
El CMV es un herpes virus ampliamente distribuido cuerpos de inclusión en el citoplasma. Los casos
con una proporción de seroprevalencia que varía sospechosos sin estos hallazgos pueden beneficiar-
entre el 40 y el 100% de la población adulta, sien- se de la inmunohistoquimia y la hibridación in situ.
En algunos puede ser necesario el cultivo de las
do factores de riesgo la edad, la raza y el nivel de
muestras obtenidas para demostrar el DNA por téc-
desarrollo socio-económico de la población. Ello
nicas de PCR. Al igual que en los casos anteriores, el
explica la elevada prevalencia de transmisión del examen citológico y el histológico puede demostrar
virus a través de transfusiones de sangre o con mo- la infección simultánea por otros virus, hongos o
tivo de un trasplante, especialmente de pulmón o bacterias (figura 3).
de corazón (75%). La probabilidad de desarrollar la
enfermedad es alta si no se efectúa profilaxis cuan- El tratamiento de primera línea consiste en la admi-
do el donante es seropositivo y el receptor es se- nistración de ganciclovir a la dosis de 5 mg/kg, por
ronegativo. La utilización de sueros antilinfocíticos vía i.v. cada 12 horas durante 3-6 semanas como
para el tratamiento del rechazo también comporta dosis de inducción, si la respuesta clínica es satis-
un elevado riesgo de infección. En el enfermo con factoria puede entonces ser sustituida por valganci-
sida, el CMV representa la causa más frecuente clovir oral (900 mg v.o. dos veces al día) hasta com-
de úlceras esofágicas, pudiendo también producir
una enteritis o una colitis que se manifiestan por
dolor abdominal y diarrea. Tales condiciones se
Paciente con sida y síntomas de esofagitis
desarrollan especialmente en pacientes con un re-
¿Puede el enfermo tomar medicación por v.o.?
cuento linfocitario de CD4 inferior a 50 /mm3, por
lo que en la actualidad su incidencia ha disminuido
notablemente desde la introducción de la terapia
antirretroviral de gran actividad (TARGA). En el su- Sí No
jeto inmunocompetente, la enfermedad por CMV
puede desarrollarse de forma primaria (primoinfec-
ción) o secundaria a la reactivación de una infec- Tratamiento empírico para
ción latente. Candida albicans
Los síntomas de la esofagitis por CMV pueden ser (Fluconazol 100 mg v.o.)
indistinguibles de los encontrados en una esofagitis
por Candida o VHS. Los enfermos suelen consultar
por disfagia, odinofagia, dolor subesternal, fiebre, Ausencia de mejoría
náuseas, vómitos y dolor abdominal. Los casos más 5-7 días
graves pueden cursar con hematemesis, melenas
y signos de perforación. No es inhabitual la forma-
ción de estenosis o fístulas como complicación evo-
lutiva de las úlceras profundas. En el enfermo con
sida puede aparecer una coriorretinitis por lo que Endoscopia
es recomendable descartar dicha entidad mediante
Cepillado (OHK, PAS, citología)
examen oftalmológico en aquellos casos diagnosti-
Examen histológico
cados de infección por CMV extraocular.
Cultivo (inmunohistoquímica, hibridación,
El diagnóstico de la esofagitis por CMV puede reali- PCR)
zarse por endoscopia. Ésta suele mostrar erosiones
de bordes serpinginosos y no sobreelevados que se
extienden por los tercios medio e inferior del esófa-
go. En las formas más graves las erosiones pueden Figura 3. Algoritmo diagnóstico en el paciente con sida
convertirse en úlceras profundas. A diferencia de la y síntomas de esofagitis.
infección por el VHS, el CMV infecta los fibroblas-

218
12. Esofagitis infecciosas

pletar el periodo de tratamiento. Aunque no existe a quimioterapia antineoplásica. Suele tratarse


una recomendación formal, la administración de de bacterias procedentes de la flora orofaríngea
ganciclovir en pacientes trasplantados de alto ries- (Streptococcus viridans, estafilococo) u otras que
go (donante seropositivo, receptor seronegativo o infectan con facilidad al enfermo con sida (Acti-
administración de anticuerpos antilinfocíticos para nomyces, Bartonella, Nocardia). Estos gérmenes
el rechazo) pueden beneficiarse de la administra- pueden colonizar la mucosa del esófago desvita-
ción de ganciclovir oral o valgancoclovir, durante lizada por la quimioterapia o radioterapia. La en-
un período de 3-6 meses8. Los enfermos con sida doscopia suele mostrar una mucosa eritematosa
que presentan infecciones recidivantes son tributa- y ulcerada con áreas de hemorragia submucosa y
rios de una terapia de mantenimiento con valganci- seudomembranas. La tinción de Gram y el cultivo
clovir por vía oral. En estos casos debe considerarse permiten establecer el diagnóstico y orientar el tra-
el riesgo de mielosupresión, particularmente si van tamiento antibiótico.
asociados antirretrovirales como la zidovudina y la
aparición de resistencias. Los enfermos refractarios Micobacterias
o resistentes pueden responder al foscarnet a la
dosis de 90 mg/kg por vía i.v. dos veces al día, du- La afectación del esófago por micobacterias es
rante 2-3 semanas, seguidos de 90-120 mg/kg en rara, y ocurre con más frecuencia con Mycobacte-
dosis única diaria como terapia de mantenimien- rium tuberculosis que con Mycobacteriun avium 9.
to. Si se utiliza foscarnet debe vigilarse la posible La esofagitis tuberculosa puede ocurrir en el con-
aparición de toxicidad renal. Otra alternativa es el texto de una enfermedad pulmonar reactivada, al
cidofovir que, debido a su larga vida media, puede deglutir elevadas concentraciones de bacilos o, por
ser administrado una vez por semana. extensión directa, desde el mediastino y/o ganglios
linfáticos.
La mayoría de los pacientes con esofagitis tubercu-
Otras causas de esofagitis infecciosas losa no muestran signos de enfermedad pulmonar
en la radiografía de tórax. El diagnóstico debe sos-
Hongos pecharse ante la presencia de disfagia y síntomas
Además de las infecciones por Candida, se ha co- respiratorios que, a menudo, sugieren la presencia
municado la afectación del esófago por otros hon- de una fístula esofagobronquial y se confirma por
gos incluyendo Histoplasma capsulatum, Aspergi- el hallazgo endoscópico de áreas ulceradas y zonas
llus flavus, Blastomyces y mucormicosis. estenóticas (figura 4). La biopsia y la citología por
La infección por Histoplasma capsulatum puede
ocurrir de forma primaria en pacientes inmunode-
primidos (diabéticos, tratados con corticoides o con
sida) o de forma secundaria como complicación de
una histoplasmosis pulmonar con extensión esofá-
gica a través del mediastino. En el último caso, el
diagnóstico suele efectuarse por TC torácica, dado
que la endoscopia no suele mostrar alteración mu-
cosa. Cuando el esófago se ve afectado de forma
primaria, las biopsias endoscópicas demuestran la
alteración del epitelio escamoso.
Los pacientes pueden ser tratados con ketonona-
zol, itraconazol o anfotericina B.
Aspergillus flavus requiere altas dosis de anfoteri-
cina B 2.

Bacterias
La esofagitis bacteriana es una entidad que debe Figura 4. La tuberculosis esofágica es una entidad clínica
ser considerada en cualquier paciente con fiebre poco frecuente, que habitualmente se presenta como una
neoformación ulcerada de gran tamaño, semejando un
y bacteriemia de origen no aclarado, particular- carcinoma de esófago.
mente en individuos con neutropenia secundaria

219
Sección 2. Esófago

cepillado pueden mostrar granulomas caseifican- 2. Tortorano AM, Peman J, Bernhardt H, et al. Epi-
tes con o sin presencia de bacilos ácido-alcohol demiology of candidaemia in Europe: results of
resistentes. El cultivo del esputo puede ser positivo 28-month European Confederation of Medical
incluso en pacientes con Rx de tórax normal. El tra- Mycology (ECMM) hospital-based surveillan-
tamiento es idéntico al de la tuberculosis pulmonar ce study. Eur J Clin Microbiol Infect Dis 2004;
e incluye generalmente la administración durante 23:317–22.
dos meses de isoniacida, rifampicina, pirazinami- 3. Darouiche, RO. Oropharyngeal and esophageal
da y etambutol. Posteriormente se completará el candidiasis in immunocompromised patients:
tratamiento con isoniacida y rifampicina durante treatment issues. Clin Infect Dis 1998; 26:259-72.
cuatro meses más. 4. Baehr PH, McDonald GB. Esophageal infec-
tions: risk factors, presentation, diagnosis and
Bibliografía treatment. Gastroenterology 1994; 106:509-32.
1. Wilcox CM, Monkemuller KE. Diagnosis and 5. Pappas PG, Kaufman CA, et al. Clinical Practice
management of esophageal disease in the Guidelines for the management of candidiasis:
acquired immunodeficiency syndrome. South 2009 Update by the Infectious Diseases Society
Med J 1998; 91:1002-8. of America. CID 2009; 48: 503-35.

220
© 2019 Sociedad de Gastroenterología del Perú

Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional:

ARTÍCULO DE REVISIÓN
¿qué hay nuevo en el 2019?

Diagnostic and therapeutic approach to dyspepsia and functional dyspepsia:


what’s new in 2019?
Adán Lúquez Mindiola1,2, William Otero Regino3,4, Max Schmulson5,6,7
1
Universidad Nacional de Colombia. Bogotá, Colombia.
2
Centro de Enfermedades Digestivas, GutMédica. Bogotá, Colombia.
3
Hospital Universitario Nacional de Colombia, Universidad Nacional de Colombia. Bogotá, Colombia.
4
Centro de Gastroenterología y Endoscopia Digestiva, Bogotá - Colombia.
5
Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México. México DF, México.
6
Laboratorio de Hígado, Páncreas y Motilidad, Unidad de Investigación en Medicina Experimental, Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”. Universidad Nacional
Autónoma de México. México DF, México.
7
Gastroenterología y Endoscopía en Práctica Médica - Centro Médico ABC, México DF, México.
Recibido: 14.05.19
Aprobado: 10.06.19

RESUMEN
La dispepsia abarca un conjunto de síntomas que se originan en la región gastroduodenal. Se caracteriza por dolor o ardor
epigástrico, saciedad precoz y llenura pos-prandial. Según la relación de los síntomas con las comidas se divide en síndrome
de dolor epigástrico y síndrome de malestar pos-prandial. Sin embargo, en la práctica clínica, frecuentemente se sobreponen.
En los últimos años se ha cambiado el paradigma de las alteraciones fisiológicas gástricas y han aumentado las evidencias que
apoya a la eosinofilia duodenal, como una alteración primaria que altera la fisiología gástrica y puede inducir la sintomatología.
Así mismo, cada día hay mayor interés en la alteración de la microbiota. El tratamiento se basa en la supresión de ácido,
procinéticos, neuromoduladores, psicoterapia, terapias alternativas y complementarias. Ningún tratamiento es universalmente
eficaz en todos los pacientes.
Palabras clave: Dispepsia; Duodeno; Microbioma gastrointestinal; Tratamiento (fuente: DeCS BIREME).

ABSTRACT
Dyspepsia encompasses a set of symptoms that originate in the gastroduodenal region. It is characterized by pain or epigastric
burning, early satiety and post-prandial fullness. According to the relationship of symptoms with meals, it is divided into
epigastric pain syndrome and postprandial distress syndrome. However, in clinical practice, they frequently overlap. In recent
years the paradigm of gastric physiological alterations has been changed and evidence supporting duodenal eosinophilia
has increased, as a primary alteration that alters gastric physiology and can induce symptomatology. Every day there is more
interest in the alteration of the microbiota. The treatment is based on the suppression of acid, neuromodulators, prokinetics,
psychotherapy, alternative and complementary therapies. No treatment is effective in all patients.
Keywords: Dyspepsia; Duodenum; Gastrointestinal microbiome, Treatment (source: MeSH NLM).

INTRODUCCIÓN negativamente a la calidad de vida (7,8), la asistencia


al trabajo y la productividad (9-11). Con frecuencia hay
Dispepsia (DP) etimológicamente significa “mala presentismo (asistencia al trabajo, pero sin desempeñar
digestión” o “indigestión (1). Las descripciones el trabajo correctamente) (10). Tiene un alto costo
iniciales de esta entidad se remontan a los escritos económico y en Estados Unidos (USA), genera gastos
de Hipócrates y Galeno (1). La DP describe diversas anuales superiores a 18 billones de dólares (12). Es más
molestias gastrointestinales superiores, de posible frecuente en mujeres, en fumadores y en sujetos que
origen gastroduodenal, que incluyen dolor o ardor utilizan antinflamatorios no esteroideos (AINES) (5).
epigástrico, saciedad precoz y llenura pos-prandial
(2,3)
. De manera frecuente e incorrecta, se le denomina Cuando el origen de la sintomatología no se ha
“gastritis crónica” o “enfermedad ácido-péptica” (4). La estudiado, se considera que se trata de “dispepsia no
DP afecta al 20% de la población mundial (5), aunque investigada” (DNI). Si en los exámenes diagnósticos se
sólo el 40% consulta al médico de nivel primario (5). encuentra una lesión orgánica aparente que explique
No afecta la sobrevida (6), sin embargo, impacta los síntomas, se denomina “dispepsia secundaria”

Citar como: Lúquez Mindiola A, Otero Regino W, Schmulson M. Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional. Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52

Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52 141


Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

(DS) y si no se encuentra una etiología, el diagnóstico antro-corporal o antral respectivamente, determinaría


es “dispepsia funcional (DF)” (13,14). Esta última se la aparición de diferentes micro-organismos en el
diagnostica con los criterios de Roma, de los cuales duodeno y en el resto del intestino delgado (22). En
la versión de Roma IV (Ver más adelante) es la más la actualidad, la “disbiosis” se considera un factor
reciente (13). De todos los pacientes con DNI, menos importante en la fisiopatología de la DF, y puede estar
del 25% tendrán DS (5), cuyas causas más frecuentes asociada o no a H. pylori (23,24).
son esofagitis erosiva (13%), ulcera péptica (10%),
cáncer gastrointestinal (menos del 1%), medicamentos, Más del 75% de los pacientes con DNI tienen
enfermedades pancreáticas (incluyendo cáncer de DF (5). En USA, Canadá y el Reino Unido, el 10% de la
páncreas), parásitos (Giardia lamblia, Strongyloides), población adulta tiene DF con base en los criterios de
enfermedades endocrinas (paratiroides, diabetes Roma IV (25). La decisión y elección de exámenes para
mellitus), gastroparesia y Helicobacter pylori (H. pylori) descartar etiologías primarias en pacientes con DNI
(menos del 5% de los infectados) (2,3). Es de anotar, que es diferente según los países y regiones, dependiendo
la gastroparesia si bien puede ser causa de dispepsia fundamentalmente de la prevalencia de infección por
orgánica en pacientes con diabetes mellitus, por H. pylori y la incidencia de cáncer gástrico (CG) (1). En
ejemplo, también es un mecanismo subyacente que la reciente guía conjunta de USA y Canadá, sobre el
puede estar presente en un subgrupo de pacientes manejo de DP, se recomienda endoscopia digestiva alta
con DF. En el consenso de Kioto, en el cual se (EDA) en pacientes mayores de 60 años (14). En México
clasificó la gastritis crónica y duodenitis, se realizó una se recomienda a los 55 años o más (26), en Colombia
distinción clínica de la DP causada por H. pylori y DF (27)
y en Asia (28) a los 35 años por mayor tasa de
(15)
, y su diagnóstico se establece cuando los síntomas incidencia de CG. En contraste, en todas las guías, se
desaparecen 6 a 12 meses, después de erradicar recomienda la realización de EDA a menor edad si hay
la infección (15). Se desconocen los mecanismos signos o síntomas de alarma independientemente de la
involucrados en la mejoría de los síntomas cuando región geográfica, Tabla 1. Si bien, se ha considerado
se erradica el H. pylori. Si bien la inflamación gástrica que las “banderas rojas” son indicación absoluta de
producida por este microorganismo, puede producir EDA, diferentes estudios han encontrado que esa
múltiples alteraciones en la fisiología y motilidad sintomatología, tienen un bajo valor predictivo positivo
gástrica (16-18), también es plausible que la mejoría para tumores gastro-intestinales superiores, ulcera
se relacione con cambios en la microbiota y no solo péptica y esofagitis (14,29). Por lo anterior, la decisión
por la erradicación per se del H. pylori. En un meta- para EDA basada en la edad, debe ser individualizada,
análisis reciente, se encontró que la mejoría de la DF teniendo en cuenta además, que si no hay mejoría
fue más frecuente cuando en los esquemas se utilizaba con los tratamientos empíricos, también está indicada
metronidazol y tenían una duración mínima de 10 realizarla (14,26-28).
días (19). Además, se ha encontrado que la respuesta
es mayor cuando se erradica H. pylori, y los pacientes
Clasificación de la dispepsia funcional
tienen duodenitis microscópica (20). Estas observaciones
destacan fundamentalmente la importancia de la
Roma IV (13), clasifica ahora a la DF en dos síndromes:
microbiota y la disbiosis asociada a H. pylori. Mas
síndrome de malestar pos-prandial (SDPP) y síndrome
aún, estudios recientes han demostrado que el H.
de dolor epigástrico (SDE), Tabla 2. El SDPP se caracteriza
pylori “no vive solo” en el estómago y su presencia
por saciedad precoz y llenura pos-prandial, las cuales
modifica notablemente la microbiota gástrica no solo
deben estar presentes al menos tres veces por semana.
por las modificaciones en la secreción de ácido, sino
Estos síntomas deben ser crónicos y molestos, deben
también, porque sus productos metabólicos, pueden
estar presentes durante los tres meses previos con inicio
favorecer el crecimiento o la eliminación de otros
de síntomas al menos seis meses antes del diagnóstico
microrganismos (21). Adicionalmente, la hiposecreción (13)
. La saciedad precoz, se identifica cuando el paciente
o hipersecreción de ácido, secundaria a gastritis
siente llenura al consumir una porción pequeña de
alimento, y en el interrogatorio se identifica que siente
Tabla 1. Signos y síntomas de alarma para cáncer llenura, con menos alimentos de “lo usual”. La llenura
gastrointestinal del tubo digestivo superior. pos-prandial, denota que el paciente se “siente lleno”
incluso muchas horas después de haber comido.
Disfagia progresiva
Pueden existir otros síntomas inespecíficos como
Vómito persistente
náuseas, sensación subjetiva de distensión abdominal
Pérdida de peso involuntaria
(bloating), eructos y pirosis. En el 80% de los pacientes
Melenas o hematemesis
los síntomas empeoran con los alimentos (13).
Anemia ferropénica
Masa abdominal palpable
El SDE se caracteriza por dolor o ardor epigástrico,
Antecedente familiar de cáncer gástrico o esofágico
cuya frecuencia debe ser por lo menos una vez por
semana (13). El dolor puede ser inducido o aliviado
142 Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52
Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

Tabla 2. Criterios Roma IV para diagnóstico de Dispepsia Funcional (DF).


A. Dispepsia Funcional
Criterios diagnósticosa,b
1. Uno o más de los siguientes:
- Llenura pos-prandial molesta
- Saciedad precoz molesta
- Dolor epigástrico molesto
- Ardor epigástrico molesto
2. No evidencia de enfermedad estructural (incluyendo alteraciones en la EDA) que puedan explicar los síntomas
a
Debe cumplir criterios para A1. SDPP y A2. SDE
b
Criterios presentes durante los 3 meses previos con inicio de síntomas al menos 6 meses antes del diagnóstico
A1. Síndrome de Malestar Pos-prandial (SDPP)
Criterios diagnósticosa
Debe incluir uno o ambos de los siguientes al menos 3 días por semana:
1. Llenura pos-prandial molesta (es decir, lo suficientemente grave como para impactar en las actividades habituales)
2. Saciedad precoz molesta (es decir, lo suficientemente grave como para impactar en las actividades habituales)
No evidencia de enfermedad orgánica, sistémica o metabólica que pueda explicar los síntomas en las investigaciones de rutina (incluyendo
alteraciones en la EDA)
a
Criterios presentes durante los 3 meses previos con inicio de síntomas al menos 6 meses antes del diagnóstico
Comentarios de apoyo
- Pueden estar presentes, dolor o ardor epigástrico pos-prandial, distensión subjetiva epigástrica, eructos excesivos y náuseas
- El vómito justifica la consideración de otro trastorno
- La pirosis no es un síntoma dispéptico pero frecuentemente puede coexistir
- Los síntomas que se alivian con la evacuación de heces o gases generalmente no deben considerarse parte de la dispepsia
Otros síntomas digestivos individuales o grupos de síntomas, por ejemplo, de ERGE y SII pueden coexistir con SDPP
A2. Síndrome de Síndrome de Dolor Epigástrico (SDE)
Criterios diagnósticosa
Debe incluir por lo menos uno de los siguientes al menos 1 día por semana:
- Dolor epigástrico molesto (es decir, lo suficientemente grave como para impactar en las actividades habituales)
- Ardor epigástrico molesto (es decir, lo suficientemente grave como para impactar en las actividades habituales)
No evidencia de enfermedad orgánica, sistémica o metabólica que probablemente explique los síntomas en las investigaciones de rutina
(incluyendo alteraciones en la EDA)
a
Criterios presentes durante los 3 meses previos con inicio de síntomas al menos 6 meses antes del diagnóstico
Comentarios de apoyo
- El dolor puede ser inducido por ingesta de una comida, aliviado por la ingesta de una comida, o puede ocurrir durante el ayuno
- Pueden estar presentes, distensión subjetiva epigástrica, eructos y náuseas
- El vómito persistente probablemente sugiere otro trastorno
- La pirosis no es un síntoma dispéptico pero frecuentemente puede coexistir
- El dolor no cumple criterios de dolor biliar
- Los síntomas que se alivian con la evacuación de heces o gases generalmente no deben considerarse parte de la dispepsia
Otros síntomas digestivos (tales como de ERGE y SII) pueden coexistir con SDE

por los alimentos y también puede ocurrir en ayuno. intestino irritable (SII). Es importante considerar que en
Las siguientes situaciones deben tenerse en cuenta al pacientes con SDE, pueden coexistir el SII y la ERGE (30).
hacer el diagnóstico: (13): a) Puede coexistir la sensación
subjetiva de distensión abdominal (bloating), eructos La utilización de pictogramas que representan los
y náuseas, b) El vómito, no hace parte del SDE y su diferentes síntomas, ha facilitado la identificación de los
presencia sugiere otro trastorno, c) La pirosis puede mismos, mejorando las descripciones verbales aisladas
coexistir, aunque no es un síntoma dispéptico, sino (31)
. Estas ayudas visuales, mejoran la comprensión del
de enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), d) paciente sobre el significado de las preguntas y logran
El dolor no debe cumplir las características de cólico una mejor evaluación y concordancia entre pacientes
biliar (dolor súbito, irradiado a la espalda, de intensidad y médicos sobre los síntomas de la DF (31). En la mitad
creciente y sin oscilaciones en su intensidad) y no se de los pacientes, estos dos síndromes se pueden
alivia con las deposiciones o con la expulsión de gases. sobreponer (13). La división de DF por Roma IV es muy
Esta última característica, lo diferencia del síndrome de útil para identificar y estandarizar los pacientes en las
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Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

investigaciones y poder excluir los que tienen ERGE (14). ácido gástrico, a nutrientes, y a la distensión gástrica
Sin embargo, en la reciente guía de USA y Canadá, en ayuno y pos-prandial (3,39,40). No obstante, en un
se define DF como un cuadro clínico, caracterizado estudio reciente, no se encontró correlación entre las
fundamentalmente por dolor epigástrico con duración alteraciones motoras gástricas con ninguno de los dos
mínima de un mes, asociado o no a saciedad precoz, subtipos de DF, como tampoco con la sobreposición
llenura pos-prandial, náuseas, pirosis o vómito, en de ambos (41). Estos hallazgos plantean la posibilidad
un paciente en quien la EDA y otras pruebas son de que la disfunción gástrica primaria no es el origen
negativas para otras causas de DP (14). Aunque, esta de los síntomas de la DF (42) y que la división de
última definición, es clínicamente clara y facilita la la DF, no permitiría orientar el tratamiento, como
identificación de los pacientes, hasta el momento no inicialmente se había pensado. Hallazgos similares,
ha sido validada en trabajos de investigación (2,14). han motivado la búsqueda de alteraciones en sitios
diferentes al estómago, que pudieran explicar el origen
Fisiopatología y alteraciones fisiopatológicas en la DF y el sitio más
estudiado al respecto es el duodeno (43-53).
La denominación “funcional”, de los trastornos
funcionales gastrointestinales (TFGI) ahora llamados En el año 2007 Talley et al. demostraron que los
trastornos de la interacción intestino-cerebro (TIIC), pacientes adultos con eosinofilia duodenal, tenían más
significa básicamente una “alteración de la función”. riesgo de DF (54) y hallazgos similares fueron encontrados
No significa “enfermedad producida por el estrés” en los niños (55). En otro estudio, ese grupo encontró
o “ausencia de enfermedad orgánica” (13). Esta que la infiltración de eosinófilos en la segunda porción
consideración es fundamental ya que en la DF, existen del duodeno, fue más frecuente en los pacientes con
claras anormalidades orgánicas como alteración de la SDPP y el compromiso simultáneo del bulbo y la
motilidad, hipersensibilidad y activación del sistema segunda porción fue más frecuente en los pacientes
inmune innato y adaptativo (1,13,32-34), con participación con SDE (56). En un estudio reciente hemos encontrado
variable de los mismos, en cada paciente, lo cual hace eosinofilia duodenal con diferencia significativa en
que en la actualidad, la fisiopatología de esta entidad, pacientes con saciedad precoz (57). El aumento de los
sea muy compleja. Sin embargo, el término “funcional” eosinófilos en el duodeno, podría ser secundaria a la
puede tener una connotación psiquiátrica por lo cual exposición al ácido gástrico y también a diferentes
Roma IV ha eliminado el término en la medida de lo alérgenos presentes en los alimentos (50). La inflamación
posible, aunque no ha sido el caso en DF. Esto no excluye y los productos secretados por los eosinófilos pueden
el hecho de que en pacientes con DF son frecuentes los inducir alteraciones locales al estimular estructuras
trastornos como ansiedad y depresión (35) y la influencia neuronales y contraer el músculo liso, además actuar
en el eje intestino-cerebro es bidireccional (36). Las sobre diferentes receptores (43,53). Los eosinófilos
infecciones gastrointestinales agudas, pueden inducir promueven la proliferación, maduración, supervivencia
la denominada “DF-Pos infección (DF-PI)”, la cual y degranulación de los mastocitos (58). Un estudio
puede aparecer en 10-20% de los pacientes, como ha reciente que comparó hallazgos ultraestructurales en
sido ratificado en un meta-análisis (37). Las principales biopsias duodenales de pacientes con DF y controles
anormalidades gastroduodenales encontradas son sanos, evidenció mayor grado de degranulación en
alteración del vaciamiento gástrico, de la acomodación eosinófilos (p<0,0001) y disminución de la densidad
del fundus, hipersensibilidad duodenal a la distensión granular en eosinófilos (p<0,0001) (59). Con respecto
y otros estímulos intraluminales (1-3). El vaciamiento al recuento y tasa de degranulación de mastocitos los
gástrico retardado se encuentra en el 35% de los resultados son contradictorios. Algunos han encontrado
pacientes, y aunque hay pocos estudios, algunos han aumento de estas dos alteraciones en pacientes con
mostrado también vaciamiento gástrico acelerado (13). DF comparados con los controles sanos (60,61), aunque
otros no encontraron diferencias en la degranulación
La división de DF en SDPP y SDE se basó en de mastocitos en pacientes con DF (62) y los pacientes
la concepción de que diferentes mecanismos con DF tenían un contenido granular más heterogéneo
fisiopatológicos podrían explicar cada uno de estos (p<0,0001) (59). En una revisión sistemática y meta-
subtipos, así como también, orientar el tratamiento análisis que hemos llevado a cabo sobre los mastocitos
inicial de los pacientes. A este respecto, diversos estudios en intestino delgado de pacientes con SII que incluyó
han encontrado, que además de las alteraciones 3 estudios en duodeno, 6 en yeyuno y 5 en el íleon,
motoras gástricas (retardo del vaciamiento, alteración encontramos que no hubo diferencias en el conteo
de la relajación del fundus, hipersensibilidad gástrica), de mastocitos en el duodeno, ni en el yeyuno;
los pacientes con SDPP también tienen un aumento sin embargo, se encontraron incrementados en el
de eosinófilos intraepiteliales en la segunda porción íleon (63). Lo anterior sugiere que el sitio de infiltración
del duodeno (38), (véase más adelante). En contraste, de mastocitos, puede determinar el TIIC que se
los pacientes con SDE presentan menos alteraciones manifiesta, ya sea SII en caso de infiltración del intestino
motoras, pero tienen hipersensibilidad duodenal al delgado distal y por supuesto colon, pero DF en caso
144 Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52
Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

de infiltración del intestino delgado proximal. Por otra e inmunológicas que repercuten en la salud y
parte, es posible que los mastocitos en el futuro sirvan enfermedad, así como también en el eje intestino-
como biomarcadores diagnósticos de SII y DF. cerebro (64). En pacientes con DF, se han encontrado
alteraciones en la microbiota del fluído gástrico
La inflamación secundaria a la infiltración de con respecto a la de los controles sanos, siendo más
eosinófilos, podría producir también alteraciones de la abundantes los Bacteroidetes con menor cantidad
motilidad antro-duodenal, aumento de la permeabilidad de Proteobacteria y ausencia de Acidobacteria (65). Se
de la mucosa e inducir hipersensibilidad a diferentes desconocen las causas de estas diferencias, aunque
sustancias (ácido, lípidos, y otros componentes de los podría estar involucrado el reflujo del contenido del
alimentos) (39,43,53). Además, se han descrito alteraciones intestino delgado hacia el estómago, incluyendo ácidos
en la función neuronal, cambios estructurales en las biliares y bacterias intestinales (66). Además, en pacientes
neuronas entéricas y células gliales en los ganglios de con DF se ha encontrado en el duodeno, aumento
la submucosa duodenal, aumento de la expresión de relativo de Streptococcus y disminución de los géneros
factor neurotrópico derivado de las células gliales que anaeróbicos Prevotella, Veillonella y Actinomyces
sirve para mantener la función de barrera epitelial, con respecto a los controles (66). Por otra parte, en
migración de células inflamatorias principalmente diversos estudios, los pacientes con DF tienen con más
macrófagos CCR2-/CD68 positivos, disminución en la frecuencia sobrecrecimiento bacteriano en el intestino
resistencia eléctrica trans-epitelial y alteraciones en la delgado (SIBO), determinado mediante prueba de
integridad mucosa intestinal, con expresión anormal aliento espirado con lactulosa (23). Se considera que en
de proteínas de adhesión celular a nivel de las uniones algunos pacientes el SIBO, podría generar los síntomas
estrechas, uniones adherentes y desmosomas (47-49,52). después de episodios de gastroenteritis infecciosa.
Esta disminución en la resistencia eléctrica trans-epitelial Las consecuencias metabólicas e inmunológicas
puede permitir el paso de antígenos microbianos a la del SIBO son múltiples e incluyen entre otras las
submucosa que puede desencadenar una activación siguientes: fermentación anormal de carbohidratos por
inflamatoria de bajo grado cuyos mediadores pueden la proliferación aumentada de bacterias coliformes,
estimular las terminales entéricas y así desencadenar produciendo distensión luminal, aumento de la
los síntomas de la DF (52). permeabilidad intestinal, perpetuación de la respuesta
inmune en hospederos predispuestos (67), e incluso
Microbiota induciendo la aparición de enfermedades autoinmunes
y empeorando las ya existentes (68). En cuanto a la DF-
La microbiota intestinal es un “órgano dinámico” PI, esta se presenta por lo menos 6 meses después de
con variedad de funciones bioquímicas, metabólicas un episodio de gastroenteritis aguda y los patógenos

Dispepsia No Investigada

Signos de alarma a cualquier Sin signos de alarma


edad o Edad México < 55 años
Edad > Colombia < 35 años
55 años México USA < 60 años
35 años Colombia
60 años USA
EDA UBT - Antigeno fecal H.pylori (+)
No mejoría
al erradicar
(-) (+)

Dispepsia asociada
Dispepsia funcional Dispepsia secundaria
a H. pylori

H. pylori (+)
No mejoría Mejoría
al erradicar al erradicar

Figura 1. Algorritmo diagnóstico de dispepsia. EDA: endoscopia digestiva alta. UBT: test respiratorio de Urea.
H.pylori: Helicobacter pylori. USA: Estados Unidos.

Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52 145


Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

1 Paciente con plenitud posprandi al recurrente,


saciedad temprana, dolor o ardor epigástrico

2
Historia y exámen
físico

14 3 4 5
Otras enfermedades: ¿Signos de Dispepsia Considerar
tratar en alarma? No no investigada terapía empírica
consencuencia
8 Endoscopia GI alta 6 Síntomas 7 Evaluar y tratar
No Si
No con/sin biopsias resultados en consecuencia

10 9 15 Síndrome de distrés
¿Sólo HO Si ¿A normalidad Saciedad/plenitud
detectado? posprandial
identificada?
Si
(SOP)
11 16 Síndrome de dolor
Tratamiento 14 Dispepsia Dolor/ardor
de erradicación epigástrico
funcional (DF)
(SDE)
No Saciedad/plenitud 17
12 13 SOP
¿Sintomas Si Dispepsia Dolor/ardor +
resueltos? asociada a HP SDE

Figura 2. Algorritmo diagnóstico de Dispepsia Funcional (DF) de la Fundación de Roma. GI: gastrointestinal. HP:
Helicobacter pylori. “Algorritmo reproducido con autorización de la Fundación de Roma; Todos los derechos
reservados” (75).

más frecuentemente implicados son Salmonella gástrico, acomodación, etc), ya que no hay evidencia
spp., Escherichia coli O157, Campylobacter jejuni, definitiva de la asociación de esas molestias con
Yersinia enterocolitica, Giardia lamblia, Rotavirus y trastornos de la motilidad (2,14,72,73). Si los síntomas
Norovirus (69). Mearin et al., encontraron que después predominantes son náuseas y vómito, si se debe
de gastroenteritis aguda por Salmonella enteritidis, el considerar la posibilidad de gastroparesia, e iniciar el
riesgo de padecer DF-PI es 5,2 veces mayor que en los abordaje diagnóstico y terapéutico de la misma (74).
sujetos no expuestos (70). Tack et al. encontraron que el
17% de los pacientes con síntomas dispépticos, tiene El enfoque diagnóstico está determinado por la
antecedentes de gastroenteritis aguda y en ellos es recomendación local o regional para realizar EDA para
alta la prevalencia de alteraciones de la acomodación descartar neoplasias del tubo digestivo superior, con
gástrica atribuible a disfunción a nivel de las neuronas base en la prevalencia de las mismas (14,26-28). Cuando
nitrérgicas (71). los síntomas aparecen por debajo de la edad en la cual
se recomienda la EDA, las opciones son investigar H.
Diagnóstico y tratamiento pylori por métodos no invasivos, tales como la prueba
de aliento espirado con urea o UBT (Urea Breath Test) o
En pacientes con DNI, el abordaje diagnóstico con antígenos fecales, Figura 1. Si el H. pylori es positivo,
debe comenzar con una detallada y completa historia se debe dar terapia de erradicación. En los pacientes
clínica (3,13,14), para identificar las características de la infectados por H. pylori, la eficacia pos-erradicación,
sintomatología (dolor, ubicación, saciedad precoz, se obtiene en 24-84%, con un número necesario a
llenura pos-prandial, empeoramiento con los alimentos). tratar (NNT) de 12,5 (14). Aunque los síntomas de DF no
Así mismo, determinar la presencia de “banderas mejoren, la erradicación del H. pylori trae beneficios
rojas” o signos y síntomas de alarma. También se debe a largo plazo ya que disminuye el riesgo de úlceras y
indagar sobre el uso de medicamentos que producen CG (15,16). En quienes los síntomas no mejoren después
DP tales como aspirina, AINES y otros, precisando si de erradicar el H. pylori, se recomienda EDA y si es
al suspenderlos, se mejora la sintomatología. Aunque necesario, otros exámenes como ecografía hepatobiliar
sean prominentes los síntomas pos-prandiales, no o tomografía de abdomen. En la Figura 2 se presenta el
están indicados los estudios de motilidad (vaciamiento algorritmo diagnóstico de Roma IV. Dicho algorritmo

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Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

en pacientes con DP, inicia descartando signos de considera que, al suprimir el ácido, ayudaría a mejorar
alarma. Si hay alguno presente, se debe realizar EDA y la hipersensibilidad duodenal al ácido encontrada en
ante la presencia de alguna anormalidad identificada, esos pacientes (1,39,43). La utilización de IBP ha generado
se debe tratar al paciente en consecuencia. En caso de preocupación y confusión en los pacientes y en los
encontrar H. pylori, se debe erradicar y si resuelven los médicos, por los potenciales efectos adversos de esos
síntomas, se concluye que se trataba de DP Asociada medicamentos en diferentes órganos y sistemas, sin
al H. pylori. Si no hay ninguna anormalidad en la EDA embargo, hasta el momento, solo se ha encontrado
se trata de una DF y se debe clasificar el subtipo de DF. asociación y no causalidad (83,84). Las investigaciones
Así mismo, si al inicio no hay signos de alarma, se sigue realizadas que les imputan efectos adversos serios, son
la vía de la DNI en la cual se puede dar tratamiento estudios observacionales con múltiples sesgos, que
empírico y si los síntomas no resuelven se debe realizar impiden controlar muchas variables de confusión (84) y no
EDA y ante la ausencia de anormalidades se diagnostica satisfacen los más importantes criterios de causalidad de
DF y se clasifica según el subtipo de DF (75). Bradford Hill (85). Efectos adversos reales incluyen mayor
riesgo de encefalopatía en pacientes con cirrosis y ascitis
Luego de realizar el diagnóstico definitivo de DF, (83,84)
y nefritis intersticial por mecanismos idiosincráticos
la conducta es iniciar un inhibidor de bomba de (84)
, SIBO sobre todo a largo plazo, diarrea, distensión
protones (IBP) (14). Si hay mejoría, se continúa con este abdominal y posible infección por Clostridium difficile (86).
medicamento y en caso contrario, iniciar antidepresivos Expertos (83,84,87) y diferentes asociaciones internacionales
tricíclicos (ATC) a dosis bajas como analgésicos (88,89)
, han publicado sus posiciones oficiales destacando
viscerales (2,14). Si la respuesta es positiva, la conducta fundamentalmente lo anotado y enfatizando que, como
sería continuarlos y si no hay mejoría, se recomendaría cualquier otro medicamento, su prescripción debe estar
iniciar procinéticos (PCN). Este enfoque terapéutico es totalmente indicada y siempre utilizando la mínima dosis
recomendado por la guía conjunta de USA y Canadá necesaria para alcanzar los objetivos terapéuticos. Los
(14)
. El enfoque terapéutico de Roma IV, en términos antiácidos y sucralfato no han demostrado eficacia en
generales es similar al anterior. Sin embargo, tiene en el control de los síntomas de DF y se consideran iguales
cuenta la clasificación de SDE y SDPP, para decidir el al placebo (2).
tratamiento inicial con IBP en el primer subtipo o PCN
en el segundo, respectivamente. Es importante anotar, Procinéticos
que en el manejo de la DF es fundamental, mantener
una excelente relación médico-paciente. La evidencia La calidad de la evidencia sobre la eficacia de los
sobre la utilización de las diferentes terapias, se muestra PCN en DF es baja, además no están disponibles en
a continuación. muchos países y tienen efectos adversos cuando se
utilizan por períodos prolongados (2). En un meta-
Supresión ácida análisis reciente se documentó eficacia de los PCN
en DF (90) con un NNT de 7, el cual aumenta a 12,
Los IBP se consideran medicamentos de primera cuando se excluye cisapride, un procinético retirado
línea cuando los pacientes persisten con síntomas a del mercado hace muchos años por efectos adversos
pesar de la erradicación de H. pylori o son negativos serios (91). Los autores reconocen que la calidad de la
para esta infección (14). En dos meta-análisis se confirmó evidencia es baja y que se necesitan ensayos clínicos
que su eficacia es superior a placebo, con un NNT de alta calidad con adecuado tamaño de la muestra
de 10 (14,76). No hay evidencia sobre la utilidad de los (90)
. Expertos que han analizado esa publicación (92)
antagonistas de receptores de Histamina-2 (H2) (2,14). concluyen que existe notable heterogeneidad entre
Los estudios con IBP han utilizado una dosis al día, por los estudios incluidos y alto riesgo de sesgos. Los PCN
lo cual no son necesarias dosis más altas (14). Si en ocho que demostraron eficacia significativa por encima de
semanas no hay mejoría, se deben suspender (2,14,77). placebo fueron cisapride, tegaserod y acotiamida. Sin
Como la DF es recurrente, el tratamiento con IBP embargo, los dos primeros fueron retirados del mercado
puede ser a demanda (78). El vonoprazan, un inhibidor de USA, aunque está disponible en algunos países
competitivo de los canales de potasio, solo disponible de Latinoamérica como México, y acotiamida solo
en Japón, ha demostrado superioridad con respecto a está disponible en India y Japón (92). Este último es un
los IBP convencionales en la ERGE y en erradicación de novedoso gastroprocinético que aumenta la liberación
H. pylori (79,80), sin embargo, ha sido menos estudiado de acetilcolina en el sistema nervioso entérico vía
en pacientes con DF. El mecanismo por el cual los IBP antagonismo de receptor muscarínico e inhibición
mejoran los pacientes, no se conoce con exactitud, de acetilcolinesterasa, mejorando la acomodación y
pero puede estar relacionado, con la disminución el vaciamiento gástrico (93). En un meta-análisis que
de los eosinófilos en el duodeno, y las diferentes incluyó 7 ensayos clínicos controlados, la acotiamida
alteraciones fisiopatológicas producidas por esas mostró mejoría global de los síntomas dispépticos con
células (81). Ese efecto sistémico de los IBP es similar al respecto a placebo, y al comparar los resultados según
encontrado en la esofagitis eosinofílica (82). También se los subtipos de DF, la mejoría se observó en los pacientes
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Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

con SDPP, sin mejoría en aquellos con SDE (94). molestias gastrointestinales. El rikkunshito (TJ-43)
Los eventos adversos no fueron significativamente es una medicina herbal japonesa que produce
diferentes con placebo (94). En un estudio reciente, relajación del fondo gástrico y mejora el vaciamiento
Tack et al. reportaron en pacientes con SDPP, cuya gástrico (102). Su efecto farmacológico, probablemente
mayoría fueron tratados con acotiamida por más de 50 se relaciona con los niveles plasmáticos de des-acil
semanas, que este tratamiento a largo plazo es seguro y ghrelina (103). En un estudio reciente, los pacientes
al parecer mejora la calidad de vida y la productividad quienes recibieron rikkunshito tuvieron mejoría de los
laboral (95). Una reciente revisión Cochrane concluyó síntomas gastrointestinales, especialmente saciedad
que, por la baja y muy baja calidad de las evidencias, precoz, llenura pos-prandial y distensión subjetiva, y
no se pudo establecer si los PCN son eficaces en DF (96). también mejoría de los síntomas psicológicos (104). El
La guía conjunta USA y Canadá recomienda estos iberogast (STW 5), es otro producto herbal, que ha
medicamentos como tercera línea, si no hay respuesta suscitado interés para el manejo de la DF (105). A nivel
a IBP y ATC, en ese orden (14). gastrointestinal tiene los siguientes efectos: reducción de
la hipersensibilidad visceral, inhibición de la secreción
Neuromoduladores ácida gástrica, relajación del fondo y cuerpo gástrico,
y aumento de la contractilidad (105). En un estudio fue
Su interés en DF está relacionado con el impacto del superior a placebo (106), pero se requiere más estudios
eje cerebro-intestino en los TFGI (97). Los pacientes con para determinar su efectividad y seguridad (107). En
DF más frecuentemente tienen depresión y ansiedad una revisión sistemática, la medicina herbal china, fue
(98,99)
, las cuales pueden preceder hasta tres años los superior a PCN en el alivio de los síntomas globales de
síntomas y el diagnóstico del trastorno funcional (100). DP (108). Otro producto investigado, es la mezcla aceite
La más reciente compilación de trabajos, en un meta- de menta con aceite de alcaravea y en un estudio fue
análisis concluyó que los psicótropos eran eficaces en más eficaz que el placebo en pacientes con SDE y
DF, con un NNT de 6 (101). La eficacia fue encontrada para SDPP, adicionalmente mejoró la calidad de vida (109).
ATC como amitriptilina e imipramina, y antipsicóticos Su principal efecto adverso, fue la aparición de eructos
como sulpiride y levosupiride, sin embargo, produjeron transitorios (109).
más efectos adversos que el placebo (101). La guía
conjunta USA y Canadá recomienda los ATC si el Rifaximina
paciente no responde a IBP, con la recomendación de
utilizarlos antes que los PCN (14). La rifaximina es un antibiótico intraluminal con
efectos antibacterianos exclusivamente en el intestino
Fitoterapia delgado, con efectos antiinflamatorios y citoprotectores,
en el colon, que además fomenta el aumento de
Las preparaciones herbales o fitoterapia, han bacterias benéficas (Bifidobacterium, Lactobacillus y
sido utilizadas desde hace muchos años para tratar

Dispepsia
Funcional

H. pylori (+) H. pylori (-)

Erradicar
SDE SDPP

IBP Procinéticos

Terapias opcionales?
Procinéticos IBP Fitoterapia
Terapia psicológica
Acupuntura

Neuromodulares

Figura 3. Algorritmo terapéutico en Dispepsia Funcional, Roma IV. H.pylori: Helicobacter pylori. SDE: Síndrome
de Dolor Epigástrico. SDPP: Síndrome de Malestar Pos-prandial. IBP: inhibidor de bomba de protones.

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Enfoque diagnóstico y terapéutico de dispepsia y dispepsia funcional Lúquez Mindiola A, et al

Faecalibacterium prausnitzii) y experimentalmente reto. Ningún tratamiento es universalmente eficaz


disminuye la hipersensibilidad visceral (110). Por su probablemente por la gran heterogeneidad de los
excelente actividad en el intestino delgado y mínima pacientes (117). Los diferentes tratamientos actualmente
absorción (0,4%), es un antibiótico ideal para el SIBO. En disponibles, han sido críticamente revisados por
un estudio reciente en el cual se incluyeron 86 pacientes expertos y la más reciente recomendación, ha sido la
con DF comparado con placebo, se encontró que este guía conjunta USA y Canadá la cual propone iniciar el
antibiótico fue más eficaz en aliviar síntomas globales, tratamiento con IBP y según respuesta, ATC y PCN. Las
llenura pos-prandial/distensión abdominal subjetiva y terapias complementarias, alternativas y emergentes,
eructos (111). La respuesta fue mejor en las mujeres (111). se utilizan en pacientes quienes persisten sintomáticos,
sin embargo, los estudios con estos tratamientos son de
Terapia psicológica baja calidad. En la Figura 3, se presenta un algorritmo
de tratamiento para los pacientes con SDE y SDPP (117).
Por la importancia del eje intestino - cerebro en
DF, se ha planteado la utilidad de estas terapias. Existe Conflicto de interés: los autores declaran no tener
controversia sobre la eficacia de las intervenciones conflictos de interés.
psicológicas (psicoterapia, psicodrama, terapia cognitiva-
conductual, relajación e hipnoterapia) en DF (2,107). Una Financiamiento: Ninguno.
revisión Cochrane concluyó que eran ineficaces (112). Sin
embargo, en el meta-análisis de la guía USA y Canadá se REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
encontró que eran eficaces en reducir los síntomas en DF,
con un NNT de 3 (14), aunque los autores reconocieron 1. Koduru P, Irani M, Quigley EMM. Definition, pathogenesis
and management of that cursed dyspepsia. Clin Gastroenterol
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Recientemente, se ha encontrado que el duodeno un 13. Stanghellini V, Chan FK, Hasler WL, Malagelada JR, Suzuki
H, Tack J, et al. Gastroduodenal disorders. Gastroenterology.
sitio clave dentro de la fisiopatología y el tratamiento 2016;150(6):1380-92.
de la DF, especialmente en el subtipo SDPP, por lo cual 14. Moayyedi PM, Lacy BE, Andrews CN, Enns RA, Howden CW,
los expertos recomiendan tomar biopsias de duodeno Vakil N. ACG and CAG Clinical guideline: Management of
Dyspepsia. Am J Gastroenterol. 2017;112(7):988-1013.
en los pacientes con DNI. Por la pobre correlación 15. Sugano K, Tack J, Kuipers EJ, Graham DY, El-Omar EM, Miura
entre los síntomas y alteraciones fisiopatológicas, en S, et al. Kyoto global consensus report on Helicobacter pylori
la actualidad el tratamiento de estos pacientes es un gastritis. Gut. 2015;64(9):1353-67.

Rev Gastroenterol Peru. 2019;39(2):141-52 149


GASTRITIS
• Enfermedad inflamatoria aguda o
crónica de la mucosa gástrica
producida por factores exógenos y
endógenos que produce síntomas
dispépticos atribuibles a la
enfermedad y cuya existencia se
sospecha clínicamente, se observa
endoscópicamente y que requiere
confirmación histológica.
ETIOLOGIA
• Factores exógenos • Factores endógenos
• 1. Helicobacter pylori y otras • 1. Acido gástrico y pepsina
infecciones • 2. Bilis
• 2. AINES • 3. Jugo pancreático
• 3. Irritantes gástricos • 4. Uremia
• 4. Drogas • 5. Inmunes
• 5. Alcohol
• 6. Tabaco
• 7. Cáusticos
• 8. Radiación
PATOGENIA
• El daño de la mucosa gástrica depende del tiempo de
permanencia del factor o factores injuriantes, jugando un
rol importante la capacidad que tiene la mucosa gástrica
a través de la denominada barrera gástrica para resistir a
estos factores o a los efectos deletéreos de sus propias
secreciones.
MECANISMOS DE DEFENSA
• Preepiteliales: la barrera de moco, • Epiteliales: capacidad de
el bicarbonato y los fosfolípidos, restitución del epitelio por las
estos últimos aumentan la células existentes a nivel de la
hidrofobicidad superficial de la región lesionada, los
membrana celular e incrementan transportadores acidobásicos que
la viscosidad del moco. transportan el bicarbonato hacia el
moco y a los tejidos subepiteliales y
extraen el ácido de estos sitios, los
factores de crecimiento epitelial, las
prostaglandinas y el óxido nítrico.
MECANISMOS DE DEFENSA
• Subepiteliales: el flujo sanguíneo
que descarga nutrientes y
bicarbonato en el epitelio, y la
adherencia y extravasación de los
leucocitos, que inducen lesión
hística y quedan suprimidos por las
prostaglandinas endógenas.
PATOGENIA
• El trastorno de uno o más de estos componentes defensivos por factores
etiológicos de la gastritis originan la lesión de la mucosa permitiendo la
acción del ácido, proteasas y ácidos biliares en mayor o menor grado y que
pueden llegar hasta la lámina propia, sitio en el que producen lesión
vascular, estimulan las terminaciones nerviosas y activan la descarga de
histamina y de otros mediadores.
GASTRITIS AGUDA
• Gastritis agudas: infiltrado • Fármacos, agentes químicos, físicos,
inflamatorio que es la isquemia, presencia de un
predominantemente neutrofílico y bezoar, congestión vascular
es usualmente transitorio en su (gastropatía de la hipertensión
naturaleza, puede acompañarse portal, insuficiencia cardiaca, etc.),
de hemorragia de la mucosa, traumas locales como por sondas
erosiones y si las lesiones son muy nasogástricas y las úlceras de
severas asociarse a sangrado. Cameron relacionadas a erosiones
o ulceraciones longitudinales en el
dorso de los pliegues gástricos
localizados dentro de una hernia
diafragmática-
GASTRITIS AGUDA
GASTRITIS CRONICA
• Infiltrado con linfocitos, células • Estas gastritis crónicas en el curso
plasmáticas o ambas, sí además de su evolución presentan
presentan polimorfonucleares toma alteraciones degenerativas de las
la denominación de gastritis células epiteliales con reducción de
crónica activa. la cantidad de glándulas
acompañada de áreas variables
de atrofia glandular tomando el
nombre de gastritis crónica
atrófica, en las que pueden
aparecer zonas de metaplasia
intestinal localizadas en la mucosa
fúndica como en la pilórica.
GASTRITIS CRONICA
METAPLASIA INTESTINAL
• En la metaplasia intestinal el epitelio
de las glándulas gástricas atróficas
es reemplazado por células
columnares absortivas y células
caliciformes semejantes al del
intestino, que si recuerdan el patrón
de intestino delgado se les conoce
como metaplasia completa,
mientras que las de patrón colónico
se les denomina metaplasia
incompleta, siendo esta última
considerada lesión premaligna.
METAPLASIA INTESTINAL
OTRAS GASTRITIS
• Cándida, CMV, strongyloides, criptosporidium.
• Granulomatosas: TBC, sífilis, sarcoidosis, Crohn.
• Otras: urémica, Sd Zollinger Ellison, Enfermedad de Menetrier
GASTRITIS ATRÓFICA CORPORO
FUNDICA
• Gastritis atrófica corporal difusa,
denominada también como gastritis
autoinmune o gastritis tipo A
• Se asocia con anemia perniciosa,
asociada a anticuerpos anticélulas
parietales u oxínticas, factor intrínseco y
la bomba productora de protones con
aclorhidria o hipoclorhidria de acuerdo
al grado de atrofia, deficiencia de
vitamina B12, y en casos avanzados
aparición de anemia perniciosa,
incrementándose el riesgo de cáncer
gástrico y de tumores carcinoides.
DIAGNOSTICO
• Para el diagnóstico de gastritis no existe una buena correlación de las
manifestaciones clínicas, los hallazgos endoscópicos e histológicos, ya que
es posible encontrar en ocasiones severas gastritis en individuos
asintomáticos o mucosas gástricas normales en pacientes con síntomas
acentuados atribuibles a gastritis.
CLINICA
• Ardor, dolor o molestias postprandiales en epigastrio, llenura precoz, pirosis,
nausea, distensión abdominal, síntomas que también pueden estar
presentes en dispepsia no ulcerosa, úlceras o neoplasias gástricas o
duodenales y aún en el colon irritable.
• Hemorragias crónicas o agudas que podrían llegar a ser masivas con
hematemesis y melena.
ENDOSCOPIA
• Edema, eritema, mucosa hemorrágica, punteados hemorrágicos,
friabilidad, exudados, erosiones, nodularidad, pliegues hiperplásicos,
presencia de signos de atrofia de la mucosa dada por visualización de
vasos submucosos con aplanamiento o pérdida de los pliegues
acompañados o no de placas blanquecinas que corresponden a áreas de
metaplasia intestinal.
• Estos signos endoscópicos pueden localizarse topográficamente a nivel del
antro, cuerpo o en todo el estómago, denominándose gastritis antrales,
gastritis corporal o pangastritis respectivamente
DIAGNÓSTICO
• Hallazgos histológicos: No se debe abusar del diagnóstico de gastritis,
por lo que se requiere realizar la biopsia para confirmación
histológica, establecer la presencia o ausencia de Helicobacter pylori
o de otras formas de gastritis especificas.
DIAGNOSTICO LABORATORIO
• Detección de H pylori
• Pruebas serológicas para anticuerpos contra Citomegalovirus, Herpes, Sífilis,
anticuerpos contra células parietales gástricas, factor intrínseco y de la
bomba de protones productora de ácido
• En algunos casos el examen de heces puede aclarar la etiología como en
el caso de strongyloidiasis. Ante la sospecha de Síndrome de Zollinger Ellison,
el dosaje de gastrina puede definir el diagnóstico
TRATAMIENTO
• Dieta (alcohol, tabaco, café, aji, picantes ???)
• Suspender los AINES y aspirina (de ser posible)
• Bloquedores H2 (Ranitidina 150 a 300 mg 1 o 2 veces al día)
• IBP (Omeprazol, esomeprazol, pantoprazol de 20 a 40 mg 1 o 2 veces al dia,
lansoprazol dexlansoprazol 30 a 60 mg al dia)
• Erradicación del H pylori
• Tratamiento gastropatías específicas (Antibióticos, antivirales, corticoides,
inmunosupresores)
• Vigilancia clínica y endoscópica
Hemorragia digestiva alta (HDA)

• Pérdida sanguínea producida


por una lesión situada en el
tracto gastrointestinal sobre el
ángulo de Treitz
HDA epidemiología

• Una de las condiciones clínicas mas prevalentes de los


servicios de Urgencia y Gastroenterología
• Incidencia de 48 a 160 casos por 100.000 habitantes por
año
• Las lesiones de origen péptico son su causa mas
frecuente
• Descenso HDA, aumento de HDB
Presentación clínica

• Hematemesis
• Melena
• Hematoquecia
• En una serie de pacientes con hematoquecia grave el 74% tenía
lesiones colónicas, el 11% lesiones gastroduodenales y un 9%
lesiones de intestino delgado. En un 6% no logró demostrarse la
causa del sangrado.
• Anemia.
Causas HDA

• Ulcera gastroduodenal
• Gastritis y duodenitis
• Cáncer (esofágico, gástrico, duodenal)
• Síndrome de Mallory Weiss
• Hemorragia por Hipertensión portal (Várices esofágicas y GDHP)
• Esofagitis por reflujo
• Estomago en sandía
• Angiodisplasias
• Lesión de Dielafoy
Causas HDA

Ulcera gástrica Ulcera duodenal


Causas HDA

Gastritis Duodenitis
Causas HDA

Cancer de esófago Cáncer gástrico


Causas HDA

Síndrome de Mallory Weiss Sangrado Variceal


Causas HDA

GDHP Esofagitis por reflujo


Causas HDA

Angiodisplasias Estómago en sandía


Clasificación de Forrest de las úlceras
gastroduodenales
Evaluación inicial

• HISTORIA CLINICA
• Indagar síntomas de reflujo, disfagia, vómitos con esfuerzo, pérdida de
peso, cirugía gástrica previa, quimioterapia, discrasias sanguíneas.
• Ingesta de fármacos (AINES, anticoagulantes, antiagregantes
plaquetarios, betabloqueantes e hipotensores)
• Indagar datos que orienten a una hepatopátia crónica (ingesta enólica,
hepatitis B o C, estigmas cutáneos de hepatopatía crónica)
• Confirmar que se trate de una hemorragia (descartar falsas melenas por
alimentos o medicamentos, descartar epistaxis o hemoptisis, tacto
rectal, aspirado por SNG, urea elevada)
Evaluación inicial peor pronóstico

• Forma de presentación del cuadro (Hematemesis o con


inestabilidad hemodinámica)
• Edad del paciente (sobre 65 años)
• Enfermedades asociadas (comorbilidad cardiovascular,
neumológica, neurológica, renal, neoplásica)
Evaluación de la volemia

• HDA leve: asintomático, SV normales, piel normocoloreada


• HDA moderada: TA sistólica mayor a 100 mmHg, discreta
vasoconstricción periférica (palidez, frialdad).
• HDA grave: TA sistólica menor a 100 mmHg, FC 100 a 120 ppm,
• Taquipnea, intensa vasoconstricción periférica (palidez intensa,
frialdad, sudoración), agitación, oliguria.
• HDA masiva: Shock hipovolémico, intensa vasoconstricción
periférica y colapso venoso, estupor o coma, anuria.
MEDIDAS GENERALES

• Disponer de un buen acceso venoso, 2 vías periféricas 14 o 16G


• Via central en casos graves y luego de fluidoterapia inicial por vía
periférica.
• Analítica: biometría, urea, creatinina, glucosa, electrolitos, tiempos de
coagulación, tipificación sanguínea.
• Sonda vesical en en la HDA grave
• ECG y valoración cardiológica en pacientes con cardiopatía o mayores a
60 años.
• Pacientes con inestabilidad hemodinámica o graves considerar UCI.
Reposición de la volemia

• Se debe realizar con cristaloides o coloides, a un ritmo que


permita conseguir una TAS mayor a 100 mmHg y una diuresis
mayor a 30 ml/hora.
• Ajustar la reposición a las necesidades de cada caso.
Transfusión sanguínea

• Estrategia transfusional restrictiva: transfundir glóbulos rojos


cuando la Hb sea inferior a 7 g/dl para mantenerla entre 7 y 9
g/dl.
• En pacientes con enfermedades cardiovasculares (síndrome
coronario agudo, enfermedad cardiaca isquémica, accidente
cerebrovascular, ataque isquémico transitorio) considerar la
transfusión de glóbulos rojos cuando la Hb sea inferior a 9 g/dl
• Coagulopatía considerar plasma fresco
• Plaquetopenia inferior a 50000 considerar transfusión de
plaquetas.
Criterio para dedicir el alta de emergencia
sin endoscopia en HDA

• Sospecha de HDA y un puntaje menor a 2 en el índice de Glasgow


Blatchford se puede considerar el alta sin necesidad de una
endoscopía digestiva alta
Escala de Blatchford
Tratamiento clínico

• Si el paciente tiene 2 o mas puntos del índice de Glasgow


Blatchford iniciar tratamiento
• 1: Omeprazol 80 mg IV en bolo, seguido de 80 mg cada 12 horas o
en bomba de infusión a 8 mg/hora.
• Si se sospecha de hemorragia variceal iniciar ocreótide 50 ug en
bolo seguido de 50 ug hora por 3 a 5 días y antibiótico (ceftriaxona
1 gramo cada 24 horas).
• Tramitar endoscopía digestiva alta preferentemente antes de las
24 horas del ingreso, y en casos graves o con sospecha de HDA
variceal antes de las 12 horas.
Consideraciones previas a la endoscopia

• Pacientes graves riesgo de broncoaspiración. Considerar


intubación orotraqueal.
• Valorar riesgo-beneficio en síndrome coronario agudo,
insuficiencia respiratoria o sosecha de perforación.
• Complicaciones de la endoscopía: broncoaspiración,
hipoventilación, hipotensión, perforación y hemorragia.
• Riesgo de la endoscopía es máximo en: infarto agudo de
miocardio, arrítmias graves, insuficiencia cardíaca o respiratoria
grave y en pacientes incapaces de cooperar.
Tratamiento endoscópico HDA no variceal

• Indicado en pacientes con sangrado activo o vaso visible no


sangrante (Lesiones pépticas Forrest IA, IB y IIA). En II B
discutido. En lesiones II C y III no se requiere tratamiento
endoscópico.
• En ulcera gástrica y neoplasias hay que tomar biopsias para
estudio anatomopatológico. Si las características de la lesión
desaconsejan la toma de biopsias por riesgo de hemorragia, es
preferible tomarlas en una segunda endoscopía.
Tecnicas de tratamiento endoscópico

Técnica inyectable Método térmico


Técnicas de tratamiento endoscópico

Técnica mecánica Técnica mecánica


Tratamiento endoscópico

Ligadura con bandas de goma Ligadura de bandas de goma


Alta precoz luego de la endoscopía

• Los pacientes con puntaje menor o igual a 2 en el índice


de Rockall pueden ser dados de alta precozmente luego
de la endoscopía.
Indice de Rockall
Medidas generales en la HDA variceal

• La reposición de la volemia debe ser restrictiva para no aumentar


la HTP
• Antibióticos
• Prevención de la encefalopatía hepática
Fracaso del tratamiento endoscópico

• Segundo tratamiento endoscópico


• Angiografía con microembolización
• Tratamiento quirúrgico
• TIPS
• Derivación portosistémica quirúrgica
Prevención de resangrado

• HDA no variceal: tratamiento del H pylori, evitar AINES


• HDA variceal: betabloqueantes
45 Cálculos biliares
y sus complicaciones
Carla Jerusalén, Miguel Ángel Simón*
Servicio de Aparato Digestivo
Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza
*Departamento de Medicina, Psiquiatría y Dermatología. Universidad de Zaragoza.

Introducción OBJETIVOS DE ESTE CAPÍTULO


La litiasis biliar es una de las principales enfer- ❱❱ Conocer las causas, historia natural y
medades digestivas en la actualidad. Su preva- complicaciones de la litiasis biliar.
lencia en los países occidentales oscila entre el
❱❱ Conocer los recursos disponibles para
10% y el 20%, siendo mayor en edades avanza-
establecer el diagnóstico de la litiasis biliar
das y mujeres. Aunque la mayoría de las litiasis
y sus complicaciones.
biliares son silentes, en un 20% de los casos apa-
recen síntomas o complicaciones. ❱❱ Proporcionar criterios para el tratamiento
de las complicaciones de la litiasis biliar.
En función de su composición podemos diferen-
ciar tres tipos de cálculos: 1) cálculos de coles-
terol que representan el 75% de los cálculos en REFERENCIAS CLAVE
los países occidentales, 2) cálculos de pigmentos 1. Martín L, Vázquez J. Litiasis biliar. En:
marrones (20%) formados fundamentalmente Ponce J, Gomollón F, Martín de Argila C,
por sales de calcio de bilirrubina no conjugada Mínguez M, Miño G, eds. Tratamiento de las
y 3) cálculos de pigmentos negros (5%) que se enfermedades gastroenterológicas (AEG),
asocian típicamente a hemolisis crónica, cirrosis DOYMA, S.L., Barcelona, 2001.
y pancreatitis y cuyo componente principal es el 2. Horton JD, Bilhartz LE. Litiasis biliar y sus
bilirrubinato cálcico1,2. Los cálculos de colesterol complicaciones. En: Feldman M, Friedman
y los de pigmentos negros se forman en la ve- LS, Sleisenger M, eds. Sleisenger & Fordtran.
sícula, mientras que los cálculos de pigmentos Enfermedades gastrointestinales y hepáticas.
marrones pueden originarse en el árbol biliar y Fisiopatología, diagnóstico y tratamiento,
en la vesícula, siendo el resultado de infecciones 7.ª Ed. Editorial Médica Panamericana, S.A.,
anaerobias de la bilis e infestaciones parasita- Buenos Aires, 2004:1126-1152.
rias.
Aunque los cálculos biliares se pueden localizar
en cualquier punto del árbol biliar, la localiza-
ción más frecuente es la vesícula (85%). El 10%
de los individuos presentan coledocolitiasis con-
comitante y en unos pocos sólo hay cálculos en
particularmente frecuente en Chile, y en las pobla-
la vía biliar. La existencia de cálculos en las vías
ciones escandinavas. Prevalencias intermedias se
intrahepáticas es excepcional en países occiden-
tales3. observan en poblaciones afroamericanas y las más
bajas corresponden a las poblaciones negras del
frica subsahariana y a la población del Este Asiáti-
Epidemiología co. También existen diferencias en cuanto a la com-
La prevalencia de colelitiasis tiene una varia- posición de los cálculos. En los países occidentales,
bilidad geográfica y étnica importante. Las los cálculos de colesterol son los más frecuentes,
prevalencias más elevadas se observan en las mientras que en Asia oriental, los cálculos pigmen-
poblaciones con ancestros amerindios, siendo tarios marrones son los predominantes1.

P Á N C R E A S Y V Í A S B I L I A R E S 667
Sección 5. Páncreas y vías biliares

Factores de riesgo y factores protectores Entre los factores protectores deben destacarse el
ácido ascórbico o la vitamina C, el consumo mode-
(tabla 1) rado de café y el consumo de proteínas vegetales.
Existen tres factores de riesgo principales para el
desarrollo de cálculos biliares. En primer lugar, Historia natural
la edad. A medida que avanza la edad, la bilis se
vuelve más litogénica aumentando la prevalencia Colelitiasis asintomática
de cálculos. El sexo femenino (probablemente por
influencia de los estrógenos) también aumenta el En la mayoría de los pacientes (60-80%), la colelitia-
riesgo. inalmente la obesidad que se asocia a un sis es asintomática y se diagnostica incidentalmen-
aumento en la producción y posterior eliminación te al indicar una ecografía por otros motivos (figu-
de colesterol por las vías biliares2. No es infrecuen- ra 1). El riesgo medio anual de desarrollar síntomas
te, en este contexto, la aparición de un cólico biliar es del 2% y la incidencia anual de complicaciones y
tras una dieta de adelgazamiento con pérdida ace- cáncer de vesícula es 0,3% y 0,02% respectivamen-
lerada de peso, debido a la eliminación masiva de te4. Por ello, no es necesario realizar colecistecto-
colesterol por las vías biliares. mía profiláctica a todos los pacientes. Existen varias
excepciones a esta recomendación2,4:
❱ Pacientes con alto riesgo de desarrollar cáncer

I
de vesícula:
TABLA 1. Factores de riesgo asociados a la formación de Existencia de pólipos vesiculares con creci-
litiasis biliar miento rápido o mayor de 1 cm.
Vesícula en porcelana.
❱ Factores de riesgo asociados a la formación de
cálculos de colesterol. Cálculo mayor de 3 cm.
Edad. Mujer joven de origen amerindio.
Sexo femenino.
❱ Pacientes con riesgo mayor de desarrollar sínto-
Obesidad.
mas:
Pérdida de peso rápida.
Joven con anemia drepanocítica. En estos pa-
Nutrición parenteral total.
cientes las crisis de dolor abdominal podrían
Embarazo. hacer difícil el diagnóstico diferencial con un
Multiparidad. cólico biliar o una colecistitis aguda.
ármacos.
– Estrógenos exógenos.
– Anticonceptivos orales.
– Clofibrato.
– Octreótido.
– Ceftriaxona.
Hipertrigliceridemia o niveles bajos de HDL.
Diabetes resistente a la insulina.
Enfermedades del íleon terminal.
– Enfermedad de Crohn.
Lesiones en la médula espinal.
Etnia (nativos americanos y escandinavos).
❱ Factores de riesgo asociados a la formación de
cálculos de pigmentos negros.
Figura 1. Imagen ecográfica de litiasis biliar. El cálculo (C ) se
Anemia hemolítica crónica. observa como una imagen hiperecogénica en el interior de
Cirrosis hepática y pancreatitis. la vesícula biliar (VB) que deja una sombra acústica (S) bien
definida. LHD: lóbulo hepático derecho.

668
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

S
❱ Otro subgrupo de pacientes que podría benefi- La colecistografía oral se utiliza, fundamentalmen-
ciarse de una colecistectomía profiláctica serían te, cuando la vesícula biliar no se puede identificar
aquellos en los que se realiza cirugía abdominal mediante ecografía (por ejemplo: cuando está llena
por otro motivo, especialmente si es cirugía ba- de cálculos y contraída) y para valorar la motilidad
riátrica, y en el transplante cardiaco. vesicular y la permeabilidad del cístico antes de ini-
ciar un tratamiento de disolución oral o litotricia.
Colelitiasis sintomática no La tomografía computarizada del abdomen (TC) y la
complicada: cólico biliar simple resonancia magnética (RMN) no son necesarias en
Aproximadamente, el 65% de los pacientes sinto-
ausencia de complicaciones. Pro
máticos presentarán recurrencia clínica en los dos tratamiento
primeros años con una incidencia anual de compli-
caciones del 1-2%.
d
Durante el episodio de cólico biliar se aconseja
reposo digestivo, calor local y analgesia. Se reco-
ClíniCa mienda el uso de AINE, ya que además de aliviar los
El único síntoma atribuible a la colelitiasis es el síntomas, pueden prevenir la progresión del cuadro

I
dolor biliar. Se produce por la obstrucción intermi- hacia una colecistitis aguda5.
tente del conducto cístico por un cálculo y se ma- Tras la presentación de un primer episodio de cóli-
nifiesta como un episodio de dolor visceral, locali- co biliar se debe proponer la realización de colecis-
zado en el epigastrio-hipocondrio derecho. En un tectomía diferida. La colecistectomía laparoscópica
50% de los casos el dolor irradia hacia el hombro
derecho o la escápula, y se manifiesta como un do-
o la de pequeña incisión permite una menor estan- p
cia hospitalaria que la colecistectomía abierta, sin
lor constante, que aumenta gradualmente durante
que existan diferencias significativas en cuanto a la
15 minutos-1 hora, se mantiene durante 1 hora o
tasa de complicaciones o mortalidad6.
más y desaparece lentamente. Cuando el dolor se
prolonga por un tiempo superior a 5-6 horas, debe El tratamiento no quirúrgico presenta baja eficacia
sospecharse la posibilidad de una colecistitis agu- y altas tasas de recurrencia. Por ello, sólo debe-
da. A menudo se acompaña de diaforesis, náuseas, ría ofrecerse a aquellos pacientes con alto riesgo
vómitos e inquietud. El gas, la distensión abdomi- quirúrgico o que no deseen someterse a cirugía6
nal, la flatulencia y la dispepsia no están relaciona- (figura 2). El tratamiento médico más usado actual-
dos con los cálculos en sí mismos. Estos síntomas mente es el tratamiento oral disolutivo. Se utiliza
se encuentran con una frecuencia parecida en pa- ácido ursodesoxicólico (a dosis de 8-10 mg/kg de

E
cientes sin colelitiasis y, por tanto, no cabe esperar peso/día, antes de acostarse). Este ácido disuelve
que la colecistectomía resuelva estos síntomas. La
los cálculos, disminuyendo la secreción biliar de
exploración física suele ser normal en el curso de
colesterol y desaturando la bilis. El tratamiento se
un cólico biliar simple, mostrando únicamente lige-
mantiene hasta que se comprueba la disolución
ra hipersensibilidad a la palpación en el hipocon-
de los cálculos en dos ecografías consecutivas rea-
drio derecho.
lizadas en un intervalo de un mes y se debe inte-
DiagnóstiCo rrumpir si no es bien tolerado por el paciente, si
presenta complicaciones de la colelitiasis durante
Los parámetros de laboratorio son normales en un
el mismo o si los cálculos no se han disuelto en 6
cólico biliar que no se acompaña de complicacio-
meses. En el hipotético caso de que la disolución
0ro- nes. El patrón oro para el diagnóstico es la ecografía
abdominal, única exploración necesaria para certi- sea parcial después de 6 meses, el tratamiento
ficar la presencia de cálculos en la vesícula biliar (fi- puede prolongarse hasta 2 años, interrumpiendo
gura 1). Se trata de una técnica inocua, de bajo cos- el mismo si no se logra la disolución total de los
te y disponible en la mayoría de los centros con una mismos. Este tratamiento únicamente es aplicable
sensibilidad y especificidad superior al 95% para los a pacientes muy seleccionados (menos del 15% de
cálculos de tamaño superior a 4 mm2. Típicamen- los pacientes sintomáticos) (tabla 2). El tratamiento
te detecta cálculos móviles, declives y con sombra disolutivo tiene éxito en un 20-70% de los pacien-
acústica posterior. Cuando la sospecha clínica es tes tratados, con un riesgo de recidiva del 50% a los
elevada y la ecografía es negativa, puede indicarse 5 años. En los cálculos de tamaño superior a 10 mm
una ecoendoscopia. se puede asociar litotricia extracorpórea.
3

669
Sección 5. Páncreas y vías biliares

Paciente con
colelitiasis

No - Actitud expectante
Sintomático
- Colecistectomía profiláctica en
situaciones especiales (ver texto)

¿Cálculos radiolucentes?
¿Riesgo quirúrgico No 10 mm Tratamiento
aceptable? Vaciamiento vesicular correcto sintomático
Cístico permeable

Colecistectomía Tratamiento disolutivo oral


laparoscópica litotricia extracorpórea

Figura 2. Algoritmo terapéutico para colelitiasis sintomática.

Actualmente, se encuentran en fase de investiga- res, síndrome de Mirizzi, vesícula en porcelana y la


ción otros fármacos que podrían ser útiles: ezeti- neoplasia vesicular.
miba, estatinas o moduladores de los receptores
nucleares involucrados en la secreción biliar de Colecistitis aguda
lípidos.
La colecistitis aguda (CA) es una entidad clínica ca-
Colelitiasis sintomática con racterizada por la inflamación de la pared vesicular.
complicaciones Su mortalidad global está en torno al 10%, siendo
mayor en las formas acalculosas, en pacientes con
Las complicaciones de la colelitiasis incluyen: cole- una edad igual o superior a los 75 años y en pre-
cistitis aguda, coledocolitiasis que puede producir sencia de ciertas comorbilidades (diabetes, inmu-
colangitis o pancreatitis aguda biliar, fístulas bilia- nodeprimidos )7.

TABLA 2. Criterios para el tratamiento disolutivo de litiasis etiopatogenia


biliar
La litiasis biliar es la causante del cuadro en el
90% de los pacientes. Dos factores determinan la
❱ Características necesarias para administrar trata- progresión a CA: el grado y la duración de la obs-
miento disolutivo oral. trucción. Si la obstrucción del conducto cístico es
Colelitiasis sintomática y sin complicaciones parcial y de corta duración el paciente experimen-
(preferiblemente cólicos biliares leves y poco ta un cólico biliar. Si la obstrucción es completa y
frecuentes). duradera se produce un aumento en la presión in-
Conducto cístico permeable, comprobado travesicular que asociado a la irritación mucosa, la
mediante colecistografía oral, y vaciamiento de activación de la respuesta inflamatoria aguda y la
la vesícula correcto. disminución del flujo vascular de la pared, secun-
Cálculos de colesterol de pequeño tamaño dario a la distensión, conducen a la aparición de
(diámetro 10 mm, preferiblemente 6 mm). esta complicación7. La infección de la bilis proba-
blemente tiene un papel aditivo, pero secundario,

670
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

al desarrollo de CA, ya que sólo el 50% de los pa- TABLA 3. Criterios diagnósticos para colecistitis aguda
cientes la presentan. Los microorganismos hallados
más comúnmente son: Escherichia coli, Klebsiella
pneumoniae, Enterococcus faecalis, Enterobacter ❱ A. Signos locales de inflamación.
spp y Streptococcus faecalis. En los casos más gra- 1. Signo de Murphy.
ves pueden encontrarse también anaerobios como 2. Dolor, masa o sensibilidad en HCD.
Bacteroides fragilis o Clostridium perfringens8. ❱ B. Signos sistémicos de inflamación.
1. iebre.
DA A A 9
2. Elevación de PCR ( 3mg/dl).
Clínica 3. Leucocitosis.
El síntoma principal es el dolor abdominal agudo, ❱ C. Hallazgos de imagen característicos de CA.
constante, en HCD, de duración mayor de 5 horas, Ver descripción en tabla 4.
típicamente irradiado a espalda, y que se acompa-
ña frecuentemente de náuseas, vómitos y fiebre
Diagnós co efini o
que oscila entre 37,5 C y 39 C. En la exploración
física destaca un área de hipersensibilidad en HCD (1) Un ítem en A y un ítem en B son positivos.
y la palpación manual durante la inspiración pro- (2) C confirma el diagnóstico de sospecha.
funda a ese nivel produce dolor y cese inspiratorio
(signo de Murphy). En pacientes ancianos, espe- NOTA: Nivel PCR 3 mg/dl con imágenes ecográficas
cialmente si son diabéticos, el cuadro clínico puede compatibles tiene una sensibilidad y especificidad
no ser típico y no es inhabitual que el enfermo no de 97% y 76% respectivamente, y un valor predictivo
manifieste dolor, por lo que es preciso un elevado positivo de 95%.
índice de sospecha. En algunos de estos casos, la
CA puede expresarse por las manifestaciones de
una sepsis con hipotensión. mayoría de los casos (figura 3). Su sensibilidad y es-
Algunos signos, como inestabilidad hemodinámica, pecificidad son del 88% y 80% respectivamente, y a
fiebre alta, acidosis metabólica o íleo indican ma- pesar de que es una técnica operadordependiente,
yor gravedad y obligan a considerar la presencia de tiene un valor predictivo positivo del 92%. Los sig-
una colecistitis gangrenosa o una perforación de la nos ecográficos que apoyan el diagnóstico han sido
vesícula. enumerados en la tabla 4. Una gammagrafía con
derivados del ácido iminodiacético (HIDA) marcado
pruebas de laboratorio
con Tc puede ser de utilidad cuando existe duda
En un paciente con CA, el laboratorio suele infor- diagnóstica a pesar de la exploración ecográfica.
mar de la presencia de una leucocitosis con neu- La TC abdominal sólo es necesaria si se sospechan
trofilia (puede observarse neutropenia en casos de complicaciones (figura 4).
sepsis grave) y un incremento de la proteína C reac-
tiva (PCR). En algunos casos puede observarse un tratamiento
leve incremento de la actividad aminotransferasa y medidas generales
de los niveles de amilasa, habitualmente inferiores
a 3 veces el límite superior de la normalidad (LSN),y El manejo de la CA precisa de ingreso hospitalario,
hasta en un 20% de casos, sobre todo en pacientes reposo en cama, dieta absoluta, fluidoterapia, anti-
con CA grave, ictericia con niveles de bilirrubina in- bioterapia y analgesia.
feriores a 4 mg/dl. Ello refleja la inflamación y ede- ❱ analgesia. Se recomienda el uso de AINE que
ma de la vía biliar o a la compresión directa de la vía además de aliviar el dolor, pueden alterar la his-
por la vesícula distendida. Sin embargo, concentra- toria natural del cuadro como se ha explicado
ciones superiores deben hacer sospechar coledo-
previamente.
colitiasis o síndrome de Mirizzi (ver más adelante).
❱ An iote a ia A . El tratamiento con ATB
pruebas de imagen
es aconsejable salvo en aquellos pacientes con
La técnica de elección es la ecografía abdominal un cuadro leve en quienes la observación y el
y es suficiente para confirmar el diagnóstico en la tratamiento con AINE pueden ser suficientes.

671
Sección 5. Páncreas y vías biliares

Figura 3. Diagnóstico ecográfico de colecistitis aguda. A) Vesícula biliar (VB) con presencia de múl-
tiples cálculos en su interior y un engrosamiento con laminación de su pared. LHD: lóbulo hepático
derecho; B) barro biliar con varias litiasis en su seno. Marcado engrosamiento parietal. Ecos en la
zona superior vesicular que corresponden a gas intravesicular. Cortesía del Dr. Juan Nerín. Unidad
de Ecografía Digestiva del HCU Lozano Blesa de Zaragoza.

modificar la pauta. En los casos leves-modera-


TABLA 4. Criterios ecográficos para el diagnóstico
dos puede ser suficiente con una monoterapia
de colecistitis aguda
con piperacilina-tazobactam (4/0,5 g iv/ 6 horas)
❱ Signo de Murphy ecográfico: dolor con el transduc- o una cefalosporina de primera o segunda ge-
tor colocado. neración. En los casos más graves se debe ad-
❱ Engrosamiento de la pared vesicular 4 mm (si el ministrar ATB de mayor espectro. De primera
paciente no tiene hepatopatía crónica y/o ascitis elección serían las cefalosporinas de tercera o
y/o insuficiencia cardiaca derecha). cuarta generación asociadas a metronidazol8. Es
❱ Aumento del diámetro vesicular 8 cm. importante tener en cuenta que el uso inapro-
❱ Demostración de litiasis biliar. piado de ATB de amplio espectro puede incre-
❱ Colecciones líquidas pericolecísticas. mentar las resistencias antibióticas. En la tabla 5
❱ Presencia de barro biliar.
se muestran varias pautas empíricas eficaces en
este contexto.
❱ Trilaminación de la pared vesicular.
❱ Banda intermedia continua y focal hiperecogénica. tratamiento quirúrgico
La colecistectomía es el tratamiento de elección
para la CA (figura 5). Ello es así por diversas razo-
Los factores que se deben tener en cuenta en el
nes, pero fundamentalmente por el hecho de que
momento de elegir la antibioterapia son: la ac-
aquellos casos que finalmente se resuelven con
tividad antimicrobiana contra los gérmenes más
frecuentes, la gravedad de la CA, la presencia de tratamiento médico-conservador (50% aproxima-
insuficiencia renal o hepática, la toma previa de damente), precisarán un reingreso por un evento
ATB por el paciente y las resistencias locales. El similar, al menos en el 20% de los casos. Todo ello
coste es una variable importante a considerar. comporta morbilidad, pérdida de calidad de vida
Inicialmente, se comienza con una pauta empí- (y en algunos casos de productividad laboral) y un
rica y se realizan hemocultivos y cultivos biliares elevado coste sanitario. El cómo y el cuándo
siempre que sea posible. Si se reciben cultivos realizar la colecistectomía ha sido tema de debate
positivos para algún germen no cubierto se debe durante años.

672
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

Figura 4. La TC abdominal está indicada si se sospechan complicaciones. A) Absceso perivesicular en relación


con una colecistitis aguda. Se observa una colección líquida heterogénea que capta contraste en su periferia
(flechas) adyacente a la vesícula biliar (VB). LHD: lóbulo hepático derecho; LHI: lóbulo hepático izquierdo; A:
aorta; E: estómago; B: bazo. B) Colecistitis enfisematosa. Se observa la presencia de abundante gas en el
lecho vesicular (flechas). Cortesía del Dr. Francisco Uribe. Servicio de Radiología. Hospital San Jorge de Huesca.

TABLA 5. Opciones de tratamiento antibiótico empírico


para cubrir gérmenes gram negativos y anaerobios

❱ Monoterapia.
Ampicilina-sulbactam (3 g/6 h).
Piperacilina-tazobactam (4,5 g/6 h).
Ticarcilina-clavulánico (3,1 g/4 h).
❱ Terapia combinada
Cefalosporina de 3. gen. (ej: ceftriaxona
1 g/24 h) metronidazol (1,5 g/24 h iv).
❱ Pautas alternativas (de segunda elección).
luorquinolona ( ej: levofloxacino/24 h)
Metronidazol ( 1,5 g/24 h iv).
Monoterapia con carbapenem (imipenem
500 g/6 h, meropenem 1 g/8 h o ertapenem
1 g/24 h).

❱ n o es e o ento ó o a a ea i a
la colecistectomía en los casos de Ca?
Varios RCT han demostrado que la colecistectomía Figura 5. La colecistectomía es el tratamiento de elección de la
por vía abierta de forma temprana (en los primeros colecistitis aguda. Cortesía del Dr. Lamata. Servicio de Cirugía
General. Hospital Clínico de Zaragoza.
7 días desde la aparición de los síntomas) no incre-
menta la morbi-mortalidad respecto a la cirugía
diferida (a partir de la 6. semana) y presenta una A pesar de los resultados de algunos estudios pre-
menor estancia hospitalaria y un menor tiempo liminares que informaban elevadas tasas de con-
operatorio. Sin embargo, la cirugía diferida incre- versión a cirugía abierta cuando los enfermos eran
menta el riesgo de nuevas complicaciones de ori- tratados de un modo precoz por laparoscopia, los
gen biliar en el tiempo de espera10. resultados de metaanálisis posteriores han demos-

673
Sección 5. Páncreas y vías biliares

trado que estos temores eran infundados. Una re- ❱ n o ea i a co ecistosto a


visión sistemática11 que evaluó los resultados de la
En los pacientes de alto riesgo quirúrgico con enfer-
colecistectomía laparoscópica precoz frente a dife-
medades graves, como insuficiencia hepática, pul-
rida en la CA ha permitido establecer las siguientes
monar o cardiaca, es preferible la colecistostomía
conclusiones:
que la colecistectomía. Tras resolverse el cuadro se
No hay diferencias significativas entre ambos debería realizar colecistectomía laparoscópica si el
procedimientos en lo que se refiere a compli- estado general del paciente lo permite.
caciones o tasas de conversión a colecistecto-
Por todo ello podemos concluir que la colecistec-
mía abierta.
tomía laparoscópica en los primeros 7 días desde
La estrategia precoz disminuye la estancia la aparición de los síntomas es el tratamiento de
hospitalaria y evita el riesgo de cirugía de elección en la colecistitis aguda en los pacientes
urgencia por episodios no resueltos o recu- promedio (figura 6).
rrentes, que además presentan altas tasas de
conversión.
Un 17,5% de los casos de cirugía diferida
acaban precisando cirugía de urgencia en el
tiempo de espera, cifra que probablemente
Paciente con colecistitis
sea mayor en la práctica clínica habitual ya
aguda (CA)
que en muchas ocasiones el tiempo de espe-
ra es superior a las doce semanas.
Al comparar los resultados de los casos in-
tervenidos en los primeros 4 días y los inter- Dieta absoluta
venidos en los primeros 7 días tampoco se Fluidoterapia
encuentran diferencias. Sin embargo, ningún Analgesia
Antibioterapia
RCT ha evaluado el tratamiento quirúrgico
óptimo de la CA según la gravedad del cua-
dro.
❱ o ecistecto a a ie ta o a a oscó ica ¿> 7 días de Sí Colecistectomía
evolución? electiva
A pesar de que desde hace años la colecistectomía
laparoscópica es el tratamiento de elección en la No
colelitiasis sintomática, existían dudas acerca de su
indicación en el caso de la CA, debido a la elevada ¿Riesgo quirúrgico No Colecistectomía
aceptable? percutánea
tasa de lesiones de la vía biliar principal (entre el
1,3% y el 5,5%, según las series) que presentaba. Sí
Sin embargo, la experiencia adquirida ha hecho
que la incidencia de estas lesiones en la actualidad Sí Colecistectomía
¿CA acalculosa? percutánea
esté alrededor del 0,4%, por lo que hoy en día es
considerada como el tratamiento de elección de la
No
CA. Se ha comprobado que la tasa de mortalidad
es similar a la de la cirugía abierta, siendo la mor-
Colecistectomía
bilidad incluso algo menor en el caso de la colecis- laparoscópica
tectomía laparoscópica. En pacientes con CA grave,
debe ser realizada por un cirujano experto. Si las
condiciones anatomoquirúrgicas son difíciles, no se
debe dudar en convertir a cirugía abierta, o incluso Figura 6. Diagrama de decisión terapéutica para colecistitis
a colecistostomía, con el propósito de prevenir po- aguda.
sibles lesiones12.

674
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

Colecistitis aguda alitiásica masculino y en pacientes con diabetes mellitus y


enfermedad vascular periférica. La ecografía po-
Alrededor del 10% de las CA ocurren en ausencia
see una sensibilidad y una especificidad menores
de cálculos biliares. En la mayoría de las ocasio-
que la radiografía simple o que la TC (figura 7). Los
nes sucede en pacientes en estado crítico, o bien
gérmenes aislados con mayor frecuencia son Clos-
asociada a diabetes mellitus, insuficiencia cardiaca
congestiva, insuficiencia renal terminal o sida. tridium y E. coli. La colecistectomía inmediata es el
tratamiento de elección (figura 5).
La tasa de mortalidad está en torno al 30 %, debido,
en gran medida, a su rápida evolución a gangrena Coledocolitiasis (CDL)
y perforación. Dada la inespecificidad del cuadro
clínico es preciso un alto grado de sospecha en Se define como la presencia de cálculos en los con-
pacientes en estado crítico, con hallazgos clínicos ductos biliares.
compatibles con sepsis o ictericia sin ninguna otra
causa que lo justifique.
etiopatogenia

Aunque la colecistectomía ha sido históricamente Los cálculos de la vía biliar pueden provenir de la
el tratamiento de elección, actualmente la cole- vesícula biliar o formarse en el conducto. En los paí-
cistostomía percutánea se ha convertido en una ses occidentales, el 95% de los pacientes con CDL
alternativa eficaz y mínimamente invasiva, sobre tienen también colelitiasis. A la inversa, solo el 10-
todo en pacientes de alto riesgo quirúrgico. En el 15% de los pacientes con colelitiasis tienen una CDL
caso de no obtener una mejoría a las tres semanas concomitante3.
de la colocación del drenaje, se debería reconside-
rar el diagnóstico, y en caso de confirmación, reali- ClíniCa
zar una colecistectomía de forma urgente. Aproximadamente el 10% de los pacientes con CDL
permanecen asintomáticos durante años, pero las
Colecistitis enfisematosa pruebas disponibles indican que su evolución natu-
Es una entidad poco frecuente, con una mortali- ral no es tan benigna como en las colelitiasis asin-
dad en torno al 15%. Es más prevalente en el sexo tomáticas.

Figura 7. Colecistitis enfisematosa o gangrenosa en un un paciente con diabetes mellitus. El diagnóstico se sospechó tras obser-
var en la radiografía simple de abdomen una imagen redondeada de densidad aérea en el cuadrante superior derecho (flechas).
Debido a la presencia de gas en la pared vesicular, en la ecografía abdominal no se puede identificar correctamente la vesícula,
apareciendo únicamente un arco hiperecogénico (puntas de flecha).

675
Sección 5. Páncreas y vías biliares

La obstrucción biliar por cálculos suele ser incom- ❱ Ecoendoscopia y colangiorresonancia


pleta. Cuando se produce de forma aguda, el pa-
Ambas tienen una sensibilidad y especificidad para
ciente presenta dolor, similar al del cólico biliar
detectar CDL comparables con la colangiopancrea-
simple, aunque generalmente más prolongado, e
tografía retrógrada endoscópica (CPRE). Su princi-
ictericia, habitualmente moderada y de curso in-
pal inconveniente es que carecen de posibilidades
termitente. Si la obstrucción se desarrolla gradual-
terapéuticas.
mente se puede manifestar como prurito o ictericia
solamente. En las obstrucciones de larga duración ❱ CPRE
(más de 5 años) puede producirse una cirrosis biliar
secundaria. Hoy en día, es considerada el patrón oro para el
diagnóstico y tratamiento de la CDL y tiene una sen-
DiagnóstiCo sibilidad y especificidad del 95% aproximadamen-
te. Sin embargo, la posibilidad de causar yatrogenia
pruebas de laboratorio
explica que cuando la probabilidad de CDL es baja,
Las alteraciones de laboratorio observadas en la deban realizarse primero otros estudios menos in-
CDL reflejan la dificultad para la excreción del flu- vasivos (figura 8).
jo biliar y explican la elevación de los enzimas de
❱ Colangiografía transhepática percutánea
colestasis (fosfatasa alcalina y GGT), presentes en
el 94% y 91% de los pacientes, respectivamente. Se trata de una prueba en desuso, limitada a situa-
Cuando la obstrucción es parcial, los niveles de ciones especiales. Se realiza principalmente cuan-
bilirrubina plasmática no están elevados (colesta- do la CPRE no está disponible o no ha tenido éxito
sis anictérica o disociada). No es infrecuente, sin técnicamente, aunque actualmente se utiliza la
embargo, encontrar elevaciones transitorias de la ecoendoscopia para facilitar la exploración.
bilirrubina cuya magnitud suele ser proporcional
al grado de obstrucción. No es inhabitual detectar tratamiento
niveles en torno a 2 y 5 mg/dl y generalmente no La coledocolitiasis se asocia a una elevada tasa de
superiores a 12 mg/dl. Los picos transitorios de complicaciones graves, incluso en pacientes asin-
aminotransferasas o amilasa indican paso del cál- tomáticos por lo que se recomienda realizar trata-
culo del colédoco al duodeno2. miento en casi todos los casos.
pruebas de imagen
La obstrucción de la vía biliar produce dilatación
que se puede detectar mediante pruebas de ima-
gen. Sin embargo, hay que tener en cuenta, que en
pacientes que han tenido ataques recurrentes de
colangitis o en aquellos en quienes la obstrucción
es poco intensa o intermitente, el conducto puede
no aparecer dilatado.
❱ Ecografía abdominal
El examen con ultrasonidos es la prueba de elec-
ción para iniciar la investigación de un paciente con
sospecha de CDL, aunque sólo llegan a visualizarse
en el 50% de los casos. Sin embargo, su sensibilidad
para detectar la dilatación del colédoco (superior a
6 mm en pacientes con vesícula y a 8 mm en cole-
Figura 8. Coledocolitiasis. La CPRE permite el diagnóstico y la
cistectomizados) es de un 75% aproximadamente2. extracción de los cálculos del colédoco tras la realización de
❱ TC abdominal una esfinterotomía. Colangiografía en la que se observan varios
defectos de repleción redondeados en el interior del colédoco
La TC convencional tiene mayor sensibilidad en la compatibles con coledocolitiasis. Imagen endoscópica de una
detección de la CDL que la ecografía (70-90%) pero esfinterotomía endoscópica y de la extracción de un cálculo del
colédoco con ayuda de la cesta de Dormia, una vez realizada la
su disponibilidad es menor y comporta mayor coste esfinterotomía
y radiación para el paciente.

676
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

Existen varias opciones terapéuticas que incluyen minuyen su tamaño permitiendo la extracción pos-
el tratamiento de disolución, las técnicas de inter- terior con CPRE. El tratamiento definitivo con pró-
vención radiológicas y endoscópicas y la cirugía. La tesis sólo debería ser considerado en pacientes con
estrategia más adecuada dependerá de muchos importante comorbilidad y esperanza de vida corta.
factores: presentación clínica, comorbilidad del
paciente, experiencia de los especialistas, técnicas En pacientes con coledocolitiasis de gran tamaño
disponibles... (figura 9). se emplean métodos alternativos como la litotricia
mecánica, litotricia piezomecánica, litotricia con lá-
te a ca ser o litotricia extracorpórea con ondas de choque
Generalmente es el tratamiento de elección. La es- tras colocar un drenaje endoscópico. Recientemen-
finterotomía es el tratamiento que más se emplea te se ha introducido la dilatación neumática forzada
en la CLD y tiene éxito en más del 90% de los casos con balones de más de 15 mm tras realizar esfinte-
(figura 8). Consiste en la sección del esfínter biliar rotomía endoscópica con buenos resultados.
de la papila y el infundíbulo papilar. Una vez abier- La litotricia mecánica es una opción terapéutica
to, los cálculos pueden salir de forma espontánea,
cuando la extracción de cálculos mediante CPRE es
o bien se extraen mediante cestas de alambre o un
técnicamente difícil por diversos factores: cálculos
balón de oclusión. La CPRE terapéutica presenta
de gran tamaño, impactación del cálculo en colédo-
una tasa de mortalidad inferior al 1% y una tasa de
co no dilatado, litiasis sobre estenosis Tiene éxito
complicaciones del 5-10%, que incluyen hemorra-
en el 90-95% de los casos.
gia digestiva, pancreatitis, colangitis y perforación
retroduodenal. Su aplicación está limitada en pa- Cualquiera que sea el abordaje terapéutico de la
cientes con divertículos duodenales, en pacientes CDL debe proponerse la colecistectomía ulterior
con coledocoyeyunostomía en de Roux, en gas- de forma programada, salvo en ancianos con otras
trectomizados con reconstrucción tipo Billroth II y comorbilidades graves.
cuando existen cálculos de gran tamaño (mayores
de 2 cm)6. CompliCaCiones De la ColeDoColitiasis
En ocasiones, cuando no se pueden extraer los cál- o angi s ag a A
culos, la inserción de una prótesis biliar plástica o
Es una infección sistémica que tiene como origen la
un catéter nasobiliar es un tratamiento puente
infección del árbol biliar.
en espera del tratamiento definitivo. Incluso, hay
varios estudios que muestran, que los cálculos dis- ❱ Etiopatogenia2, 7

Coledocolitiasis (CDL)

CDL conocida antes CDL identificada durante CDL en


de la colecistectomía la colecistectomía colecistectomizados

Conversión a
Colecistectomía colecistectomía CPRE/EE Si tubo
CPRE/EE Colecistectomía de Kehr:
laparoscópica abierta
preoperatoria laparoscópica extracción
+ +
y + radiológica
Exploración Exploración
colecistectomía CPRE/EE del cálculo
intraoperatoria del colédoco y
laparoscópica postoperatoria
del colédoco extracción del
cálculo

Figura 9. Algoritmo diagnóstico en la coledocolitiasis.

677
Sección 5. Páncreas y vías biliares

Para que se produzca una CLA es necesaria la com- y shock se denomina pentada de Reynolds, general-
binación de dos factores: 1) infección biliar, y 2) mente asociada a una CLA grave y alta mortalidad.
incremento de la presión intraductal en la vía bi- La fiebre y el dolor abdominal son los signos más
liar. La forma de colonización bacteriana de la vía frecuentes, presentando una incidencia cada uno
biliar más frecuente es la vía ascendente desde el de ellos del 80% o más. Sin embargo, la ictericia
duodeno, pero existe otra vía más inusual que es la sólo se observa en un 60-70% de los casos. La inci-
vía portal. Generalmente, esta colonización en au- dencia de la tríada completa es menor del 70% y la
sencia de obstrucción no suele progresar a CLA. Sin de la pentada de Reynolds es extremadamente rara
embargo, si hay incremento de presión intrabiliar, (3,5-7,7% de los pacientes). En pacientes de edad
aumenta la permeabilidad del epitelio, permitien- avanzada, diabéticos o en tratamiento con corti-
do la traslocación bacteriana al sistema vascular coesteroides los cuadros de CLA se presentan fre-
venoso hepático (reflujo colangiovenoso) y final- cuentemente de manera atípica. Por ello, es impor-
mente la bacteriemia. Así, la CLA progresa desde tante un alto grado de sospecha para no retrasar
una infección biliar local a un cuadro de infección el diagnóstico y el comienzo del tratamiento. Los
sistémica. pacientes con historia de litiasis biliar, cirugía biliar
La coledocolitiasis es la causa más frecuente de previa o inserción de prótesis biliar tienen más pro-
CLA (85%), pero hay muchas otras causas de obs- babilidades de desarrollar una CLA.
trucción (estenosis biliares benignas o malignas, Las CLA pueden clasificarse en función de su grave-
infecciones parasitarias, anomalías congénitas de dad, de manera que los casos en los que responden
los conductos biliares ) que pueden producirla. de forma satisfactoria al tratamiento son clasifica-
Cuando la obstrucción es completa, como suele
dos como leves y aquellos en los que se detecta
ocurrir en las estenosis malignas, es más difícil que
disfunción multorgánica son categorizados como
se produzca reflujo duodenobiliar de bacterias,
graves. La ausencia de ambos criterios indicaría un
siendo menos frecuente la aparición de CLA en es-
grado moderado 13. La mortalidad global se sitúa en
tos casos. Sin embargo, hay que tener en cuenta,
el 10-30%.
que el grado de regurgitación de las bacterias de
la bilis hasta la sangre venosa es directamente pro- En pacientes con CLA grave que ha pasado desaper-
porcional a la presión biliar, y por tanto, al grado cibida pueden producirse abscesos intrahepáticos
de obstrucción. Por ello, las manipulaciones instru- como complicación tardía.
mentales de una vía biliar con un grado de obstruc-
ción elevado se infectan con frecuencia. ❱ Diagnóstico

Generalmente, las bacterias aisladas en la bilis tie- El diagnóstico de CLA se basa en la asociación de
nen un origen gastrointestinal. Las bacterias aeró- signos y síntomas de infección con los propios de
bicas aisladas más frecuentemente son Echerichia una obstrucción biliar.
coli, Klebsiella, Enterococcus y Enterobacter, Strep-
Pruebas de laboratorio
tococcus spp, Pseudomona y Proteus son menos
frecuentes. También se aíslan a menudo bacterias Los hallazgos de laboratorio indican inflamación
anaeróbicas, como Clostridium y Bacteriodes, pero (leucocitosis y elevación de proteína C reactiva) y
en la mayoría de estos pacientes se trata de infec- colestasis (hiperbilirrubinemia y elevación de tran-
ciones polimicrobinas junto a gérmenes aerobios. saminasas, fundamentalmente GGT y A). Se obje-
No debe olvidarse que en las CLA nosocomiales, tiva elevación de A y GGT en más del 90% de los
sobre todo las relacionas con intervenciones qui- casos. No es infrecuente la elevación de las transa-
rúrgicas previas o manipulaciones instrumentales, minasas (AST y ALT) que refleja un aumento en la
son frecuentes las bacterias multirresistentes (Sta- permeabilidad de la membrana de los hepatocitos,
lococcus meticilinresistente, nterococcus metici- fenómeno común en la obstrucción biliar acompa-
linresistente, Pseudomona ). ñada de infección. De ahí la frecuencia con que el
❱ Clínica perfil hepático muestra un patrón mixto de citolisis
y colestasis en una colangitis aguda.
La CLA se caracteriza clínicamente por dolor abdo-
minal en hipocondrio derecho o epigastrio, fiebre, En todos los pacientes con sospecha de CLA deben
generalmente alta y con escalofríos, e ictericia (tría- obtenerse hemocultivos y cultivos de bilis, si es po-
da de Charcot). Cuando se añade confusión mental sible. La tasa de hemocultivos positivos oscila entre

678
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

el 21-71% y generalmente, los gérmenes aislados causante. El uso de cefalosporinas de tercera o


son los mismos que se encuentran en la bilis13. cuarta generación (ej: ceftriaxona 1 g/24 h) asocia-
do a metronidazol (1,5 g/24 h) también es un ré-
Pruebas de imagen
gimen antibiótico adecuado y bastante extendido.
La ecografía y la TC permiten valorar la existencia No obstante, hay que tener en cuenta que no cubre
de dilatación de vía biliar, generalmente secundaria el espectro de los enterococos. Si los antibióticos de
a obstrucción, o la etiología de la misma. También primera elección no son efectivos o no se pueden
nos permiten detectar posibles complicaciones utilizar por la existencia de alergias, las fluorquino-
como los abscesos hepáticos. El resto de las prue- lonas o los carbapenems constituyen una buena
bas ya han sido comentadas con anterioridad. alternativa (tabla 5).
❱ Tratamiento En aproximadamente un 80% de los casos, la infec-
ción se controla mediante tratamiento médico (el
El tratamiento de la CLA se dirige hacia los dos com-
estado del paciente mejora en 6-12 horas), permi-
ponentes etiológicos del cuadro: la obstrucción y la
tiendo una evaluación etiológica y un manejo elec-
infección. Así, se basa en la combinación de anti-
tivo similar a los casos de ictericia sin colangitis. Sin
bioterapia y el drenaje biliar.
embargo, en un 15% de los casos el estado clínico
Tratamiento antibiótico (ATB) empeora y es obligado realizar un drenaje biliar
precoz14.
En todos los pacientes en los que se sospeche una
CLA se debe comenzar tratamiento antibiótico em- Drenaje biliar15
pírico tan pronto como sea posible y siempre tras la
extracción de hemocultivos. Métodos de drenaje

La duración del tratamiento antibiótico depen- El drenaje biliar se puede realizar mediante CPRE,
derá de la gravedad del cuadro y de la respuesta colangiografía transparietohepática (CTPH), drena-
clínica al tratamiento. En las formas leves, 2 ó 3 je guiado por ecoendoscopia o cirugía abierta. Los
días de ATB pueden ser suficientes. En las formas dos primeros métodos son los más usados. No hay
moderadas o graves, el tratamiento antibiótico de- ensayos clínicos aleatorizados y controlados que
bería mantenerse como mínimo durante 5-7 días. los comparen. Sin embargo, la CTPH presenta una
Algunos casos necesitan un tratamiento más pro- mayor tasa de complicaciones, mayor gravedad
longado, ante la presencia de bacteriemia o mala de las mismas, hospitalización más larga y es más
respuesta clínica al mismo (persistencia de fiebre, agresiva para el paciente. Por ello, la CPRE sigue
no descenso de leucocitosis o niveles de PCR ). siendo el método de elección y, sólo en el caso de
que no esté disponible o fracase en la resolución
Para la elección del tratamiento antibiótico intrave- del cuadro, se realiza CPTH. Mediante CPRE se pue-
noso se deben tener en cuenta los mismos factores den colocar prótesis o drenajes nasobiliares que se-
que en el caso de colecistitis aguda. Además, un rían suficientes para lograr un adecuado drenaje bi-
factor en controversia actualmente es la penetra- liar. La adición de esfinterotomía es recomendable,
ción biliar del antibiótico, ya que se sabe que en si las condiciones del paciente lo permiten, ya que
presencia de obstrucción la eliminación biliar de en muchas ocasiones será el tratamiento definitivo.
los antibióticos es prácticamente nula. El contexto La utilización de drenaje mediante ecoendoscopia
clínico también es importante ya que, por ejemplo, todavía está poco extendida y el drenaje quirúrgico
se conoce que los anaerobios son más frecuentes urgente se reserva para aquellos pacientes en quie-
en los cuadros graves. De la misma manera, las CLA nes han fallado los métodos anteriores o no han
nosocomiales en muchas ocasiones son causadas resultado factibles.
por gérmenes multirresistentes como se ha expli-
cado previamente. ¿Cuándo realizar el drenaje?
La pauta más aceptada en el momento actual es la Si la CLA es grave o moderada debería realizarse lo
combinación de una penicilina de amplio espectro antes posible. Para los casos leves, que responden
con un inhibidor de b-lactamasa, como por ejem- favorablemente al tratamiento médico, se reco-
plo: piperacilina-tazobactam 4-5 g/6 horas. Ade- mienda llevarlo a cabo en las primeras 24-48 horas.
más, la combinación piperacilina-tazobactam sería Como siempre, la colecistectomía está indicada tras
de elección si Pseudomona spp fuese el organismo la resolución de la colangitis aguda de origen biliar.

679
Sección 5. Páncreas y vías biliares

profilaxis nas. La obstrucción suele ser intermitente, lo que


dificulta el diagnóstico. No es infrecuente que estas
La manipulación de una vía biliar obstruida conlleva pacientes presenten una clínica de vómitos paroxís-
un riesgo elevado de provocar colangitis aguda. Se ticos recidivantes con intervalos libres de síntomas
recomienda tratamiento antibiótico siempre que de duración variable hasta que se produce la im-
no se consiga un drenaje biliar completo hasta que pactación definitiva. Ésta suele ocurrir con mayor
se logre el mismo. Más controvertido es el uso de frecuencia en el área ileocecal por ser la más es-
dosis única previa. trecha (60%). Cuando la obstrucción se produce en
la salida gástrica recibe el nombre de síndrome de
Complicaciones menos frecuentes Bouveret. Sólo entre un 50% y 70% de los pacientes
tienen datos clínicos de obstrucción de intestino
ístula colecistoentérica e íleo biliar delgado. La ictericia acompaña al cuadro en un 15%
de los pacientes.
(figura 10)
La prueba diagnóstica de elección es la Rx de ab-
Se produce una fístula colecistoentérica cuando un domen. Los datos característicos son: obstrucción
cálculo de la vesícula biliar (generalmente situado intestinal, neumobilia y visualización de un cálculo
en el cuello) atraviesa su pared y se introduce en biliar en localización aberrante. Hay que destacar
una víscera hueca El duodeno es el punto de en- que sólo de un 10% a un 20% de los cálculos son
trada más frecuente. Inicialmente los síntomas son radioopacos.
similares a los de una colecistitis aguda, aunque a
veces son asintomáticas. La resolución del cuadro es, prácticamente siem-
pre, quirúrgica. Se centra en extraer el cálculo para
Si el cálculo es mayor de 20 mm de diámetro puede solucionar la obstrucción. Generalmente, y ante la
producir obstrucción al entrar y migrar por el intes- naturaleza urgente de la técnica, la edad avanzada
tino produciéndose un íleo biliar. Esta complicación de los pacientes y la complejidad de la fístula co-
de la colelitiasis es más frecuente en mujeres ancia- lecistoentérica, se realiza inicialmente enterotomía

Figura 10. Íleo biliar. Radiografia simple de abdomen con una imagen cálcica de unos 3 cm en cuadrante inferior izquierdo y
discreta distensión de asas de intestino delgado. Corte sagital de la TC en el que se visualiza el cálculo impactado a nivel de un
asa de intestino delgado. Corte transversal de la TC en el que se observa la presencia de aire en el interior de la vesícula, así
como aerobilia (flechas), consecuencia de la fístula colecistoduodenal formada.

680
45. Cálculos biliares y sus complicaciones

quirúrgica para extraer el cálculo y revisión del in- TC se puede visualizar la calcificación intraparietal
testino para descartar la presencia de más cálculos. característica.
Posteriormente, en un segundo tiempo, se realiza
una colecistectomía programada con reparación de
la fístula.
Bibliografía
1. Tazuma S. Gallstone disease: Epidemiology,
Síndrome de Mirizzi (figura 11) pathogenesis, and classification of biliary sto-
nes (common bile duct and intrahepatic). Best
Existen dos tipos de síndrome de Mirizzi. En el tipo I, Pract Res Clin Gastroenterol 2006;20:1075-83.
un cálculo situado en el cuello de la vesícula o en el 2. Browning J, Sreenarasimhaiah J. Colelitiasis.
cístico comprime extrínsecamente al colédoco pro- En: eldman M, riedman L, Brandt L, eds. Slei-
duciendo obstrucción. En el tipo II, un cálculo se ha senger ordtran. Enfermedades digestivas y
introducido en el colédoco a través de una fístula hepaticas. isiopatología, diagnostico y trata-
colecistocoledocócica produciendo obstrucción. Clí- miento, 8. Ed. Elsevier España S.A., Madrid,
nicamente se manifiesta por episodios repetidos de 2008:1387-1418.
dolor abdominal, fiebre e ictericia. 3. Naranjo Rodríguez A, Rodríguez Ramos C.
Litiasis biliar, colangitis aguda y colecistitis
Vesícula en porcelana aguda. En: Ponce J, Castells A, Gomollon ,
editores. Tratamiento de las enfermedades
Es una calcificación intraparietal de la pared vesicu- gastroenterológicas, 3. Ed. Elsevier España
lar, generalmente asociada a cálculos. No produce S.A.,2011:415-426.
síntomas por sí misma, pero incrementa el riesgo 4. Portincasa P, Mosche a A, Petruzzelli M, Palas-
de carcinoma de la vesícula hasta un 20%, sobre ciano G, Di Ciaula A, Pezzolla A. Gallstone di-
todo si la calcificación es focal. Por ello, es reco- sease: Symptoms and diagnosis of gallbladder
mendable la realización de una colecistectomía stones. Best Pract Res Clin Gastroenterol 2006;
profiláctica. En las radiografías de abdomen o en la 20:1017-29.

Figura 11. Síndrome de Mirizzi. Colangiografía con la presencia de dos defectos de repleción (flechas) en el conducto cístico
que hacen impronta en el colédoco. Colangiografía con un defecto de repleción asimétrico y fijo en el colédoco (flechas) que se
correspondió con la existencia de un gran cálculo impactado en el conducto cístico.

681
♦MANUSCRITO ORIGINAL

Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda


Martín Guidi,1 Cecilia Curvale,1 Analía Pasqua,2 Hui Jer Hwang,1 Hugo Pires,3 Sandra Basso,4
Diego Haberman,5 Pilar Vizcarra,3 Marisa Canicoba,6 Raúl Matanó,1 Oscar Mazza2
1
Hospital de Alta Complejidad en Red “El Cruce”. Florencio Varela, provincia de Buenos Aires.
2
Hospital Italiano de Buenos Aires. Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
3
Hospital Interzonal General de Agudos “General San Martín”. La Plata, provincia de Buenos Aires.
4
Hospital de Gastroenterología “Dr. Carlos Bonorino Udaondo”, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
5
Centro Rossi. Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
6
Hospital Nacional “Alejandro Posadas”. El Palomar, provincia de Buenos Aires.

Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323

Recibido: 31/01/2018 / Aceptado: 03/11/2019 / Publicado online: 17/12/2019

Resumen hospitalización. Cada sección de este documento presenta


La pancreatitis aguda (PA) es una condición inflamatoria recomendaciones claves vinculadas a cada tópico, seguido
del páncreas que puede causar injuria local, síndrome de de un resumen de recomendaciones.
respuesta inflamatoria sistémica, fallo orgánico y muerte.
Palabras claves. Pancreatitis aguda.
Es una de las patologías gastrointestinales que más común-
mente requieren hospitalización. Su manejo ha cambiado
en los últimos años debido a una mejor comprensión de Update on the initial management of acute
su fisiopatología, la evolución del arsenal terapéutico, los pancreatitis
avances en el soporte nutricional, la correcta utilización de
los antibióticos y las mejoras en las técnicas miniinvasivas Summary
para el tratamiento de las complicaciones locales. Las so- Acute pancreatitis (AP) is an inflammatory condition of
ciedades médicas realizan guías de tratamiento multidisci- pancreas that can cause local injury, systemic inflammatory
plinario y estandarizado que no llegan a tener repercusión response syndrome, organ failure and death. It is one of
clínica, ya que el grado de cumplimiento internacional de the gastrointestinal pathologies that most commonly require
ellas es escaso. Este reporte está focalizado en diez medi- hospitalization. Its management has changed in recent years
das trascendentes para el manejo inicial (dentro de las 72 due to a better understanding of its pathophysiology, the
horas) de la PA, período en el cual la toma de decisiones evolution of the therapeutic arsenal, advances in nutrition-
puede alterar el curso de la enfermedad y la duración de la al support, the correct use of antibiotics and improvements
in minimally invasive techniques for the treatment of local
complications. The medical societies carry out multidisci-
plinary and standardized treatment guidelines that do not
have clinical repercussions, since the degree of internation-
al compliance of them is scarce. This report focuses on ten
important measures for the initial management (within 72
hours) of the PA, a period in which decision-making can
alter the course of the disease and the length of hospital-
ization. Each section of this document presents key recom-
Correspondencia: Cecilia Curvale
mendations linked to each topic, followed by a summary of
Av. Calchaquí 5401, Florencio Varela. provincia de Buenos Aires, recommendations.
Argentina / Tel.: 11-40878193
Correo electrónico: cecicurvale@hotmail.com Key words. Acute pancreatitis.

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Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

Abreviaturas rrecta utilización de los antibióticos y las mejoras en las


PA: Pancreatitis aguda. técnicas miniinvasivas para el tratamiento de las compli-
caciones locales. En un paciente con PA está demostrado
PAL: Pancreatitis aguda leve.
que la identificación de los signos de gravedad durante las
FO: Fallo orgánico. primeras 72 horas mejora el pronóstico y reduce la mor-
PAM: Pancreatitis aguda moderada. talidad. En los últimos años se han publicado diferentes
guías de tratamiento. Un estudio publicado por Anders-
PAG: Pancreatitis aguda grave.
son y colaboradores en 2012 concluye que solo el 51% de
PAC: Pancreatitis aguda crítica. los hospitales de Suecia disponen de un protocolo estan-
EUS: Ecoendoscopía. darizado de tratamiento, aunque la gran mayoría están
HAART: Terapia antirretroviral altamente efectiva. interesados en participar en un registro sobre PA.4 En
otro estudio realizado en Gran Bretaña, Irlanda y Canadá
NPI: Necrosis pancreática infectada. solo el 23% de los hospitales encuestados disponen de un
Pa/FiO2 : Presión arterial de oxígeno/fracción inspirada de grupo multidisciplinario para el manejo de la PA.5 Otros
oxígeno. dos estudios indican un grado muy bajo de cumplimiento
BISAP: Bedside index for severity of acute pancreatitis. de las medidas principales de las guías de tratamiento pu-
blicadas.6, 7 En resumen, las sociedades médicas realizan
SIRS: Síndrome de respuesta inflamatoria sistémica.
guías de tratamiento multidisciplinario y estandarizado
AINES: Antinflamatorios no esteroides. que no llegan a tener repercusión clínica, ya que el gra-
PCA: Bomba de analgesia controlada por el paciente. do de cumplimiento internacional de esas guías es escaso.
Este reporte está focalizado en diez medidas trascendentes
NMDA: N-metil de aspartamo.
para el manejo inicial (dentro de las 72 horas) de la PA,
ANDT: Antidepresivos tricíclicos. período en el cual la toma de decisiones puede alterar el
5HT: 5 hidroxitriptamina. curso de la enfermedad y la duración de la hospitaliza-
PCR: Proteína C reactiva. ción. Cada sección de este documento presenta recomen-
daciones claves vinculadas a cada tópico, seguidas de un
TC: Tomografía computada. resumen de recomendaciones en la Tabla 3.
MN: Malnutrición.
MODS: Síndrome de disfunción múltiple de órganos. Definiciones
NE: Nutrición enteral. Pancreatitis aguda leve (PAL): Se caracteriza por la au-
SN: Soporte nutricional. sencia tanto de necrosis (peri) pancreática como de fallo
LB: Litiasis biliar. orgánico (FO).
CPRE: Colangiopancreatoscopía retrógrada endoscópica. Pancreatitis aguda moderada (PAM): Se caracteriza
por la presencia de cualquier tipo de necrosis (peri) pan-
creática estéril o FO transitorio.
La pancreatitis aguda (PA) es una condición inflama-
toria del páncreas que puede causar injuria local, síndro- Pancreatitis aguda grave (PAG): Se caracteriza por la
me de respuesta inflamatoria sistémica, fallo orgánico y presencia de cualquier tipo de necrosis (peri) pancreática
muerte. Es una de las patologías gastrointestinales que infectada o FO persistente.
más comúnmente requieren hospitalización en todo el Pancreatitis aguda crítica (PAC): se caracteriza por la
mundo, con una incidencia anual reportada de 13-45 presencia de necrosis (peri) pancreática infectada y FO
casos cada 100.000 personas en EE.UU. y un gasto en persistente (peor pronóstico que la PAG).
salud que excede los 2,5 billones de dólares.1 En Latino- FO transitorio: datos de FO que se resuelven en un
américa se reportó en 2006 una incidencia de 15,9 casos período de 48 horas tras la aplicación de medidas de so-
cada 100.000 habitantes en Brasil, una prevalencia del porte adecuadas.*
3% en México, en 2001, y en Perú, según las estadísti-
cas del Ministerio de Salud del año 2009.2, 3 Su mane- FO persistente: datos de FO que no se resuelven en
jo ha cambiado en los últimos años debido a una mejor un período 48 horas tras aplicar las medidas de soporte
comprensión de su fisiopatología, la evolución del arsenal adecuadas.*
terapéutico, los avances en el soporte nutricional, la co- *La Surviving Sepsis Campaing considera que de no

308 Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

presentarse respuesta favorable luego de la aplicación de parecen tener niveles basales de lipasa mayores que los
las medidas de reanimación se podría clasificar el cuadro no diabéticos.8 En el caso de la amilasa, existen fuentes
como FO persistente, sin necesidad de aguardar 48 horas. extrapancreáticas de la misma y puede estar elevada por
Definición de FO: criterios de Marshal modificados. diferentes causas (macroamilasemia, insuficiencia renal,
enfermedad de las glándulas salivales o ginecológicas,
Pancreatitis aguda: consideraciones diagnós- apendicitis, colecistitis, obstrucción o isquemia intestinal,
ticas úlcera péptica).
En la práctica cotidiana se acepta que el diagnóstico En el caso de los pacientes críticamente enfermos,
de PA requiere, al menos, dos de los siguientes tres cri- internados en unidades cerradas por diferentes motivos
terios: dolor abdominal característico, amilasa y/o lipasa (infarto de miocardio, por ejemplo), el diagnóstico de
(triacilglicerol acilhidrolasa) plasmáticas > 3 veces su valor una PA es especialmente dificultoso ya que suelen estar
de referencia máximo y/o evidencia radiológica de pan- imposibilitados de manifestar dolor, por sedación y de-
creatitis.8, 9 terioro de la conciencia, y pueden presentar múltiples
causas de hiperlipasemia y/o hiperamilasemia.14, 15 Los
Sin embargo, cualquier combinación de estos criterios
pacientes con cetoacidosis diabética pueden presentar do-
merece sus consideraciones.
lor abdominal y elevación de enzimas pancreáticas por
El dolor característico es epigástrico, de inicio agudo, la misma condición.15 Otra causa de dolor abdominal e
intenso, persistente y, a menudo, irradiado a dorso, pero hiperenzimemia podría ser la inflamación de tejido pan-
en algunos pacientes el dolor puede no ser típico. creático ectópico (pancreatitis ectópica).16 En todos estos
Es importante tener en cuenta que la lipasa y/o ami- escenarios las imágenes tienen un rol importante y, en el
lasa pueden estar elevadas < 3 veces su valor de referencia caso de la tomografía, es conveniente recordar que el uso
máximo y esto podría explicarse por las diferencias en la de contraste iodado podría estar contraindicado, depen-
cinética de ambas enzimas, ya que la lipasa comienza a diendo del caso.
elevarse dentro de las 4-8 horas posteriores al inicio de Independientemente de todas estas consideraciones,
la PA, presenta un pico a las 24 horas y comienza a des- en la práctica diaria el valor de las enzimas pancreáticas
cender dentro de los 8-14 días, mientras que la amilasa a no es un parámetro útil para predecir severidad, definir
menudo aumenta a las 6-24 horas, usualmente presenta pronóstico ni establecer el momento adecuado para re-
un pico a las 48 horas y típicamente tiende a normalizarse iniciar la alimentación, realizar una colecistectomía (de
durante los siguientes 5-7 días. Además, la determinación ser pertinente de acuerdo con la etiología) o externar a
de amilasa puede ser normal en pancreatitis causadas por un paciente. La medición seriada de enzimas pancreáticas
alcohol o por hipertrigliceridemia.8 luego de confirmado el diagnóstico de PA no resulta de
Existen aislados casos publicados de PA con lipasa y utilidad en líneas generales; una excepción podría ser la
amilasa normales y esto podría atribuirse a una determi- presencia de signos clínicos de inflamación pancreática o
nación muy temprana o muy tardía en la evolución de la peripancreática persistente.17, 18
PA, entre otras posibilidades tales como los sueros hiper- Con respecto a las imágenes, en la práctica cotidiana
lipémicos en las PA por hipertrigliceridemia marcada.10-12 la ecografía es el estudio inicial por imagen más utiliza-
Por otra parte, además de la PA, existen otras situacio- do. La tomografía computada y la resonancia magnética
nes que pueden presentar elevación de estas enzimas.13 La usualmente no son necesarias para establecer el diagnós-
lipasa se produce principalmente en las células acinares tico de pancreatitis, y tienen un rol principalmente en
pancreáticas, pero también en la lengua, esófago, estóma- los casos donde existe duda diagnóstica.8 La resonancia
go, duodeno, leucocitos, tejido adiposo, hígado y pulmo- magnética con técnica de colangiopancreatografía permi-
nes; sus niveles pueden aumentar en pancreatitis crónica, te establecer el diagnóstico de PA y también definir su
tumores pancreáticos, colecistitis aguda, úlceras duodena- etiología en muchos casos.
les, infarto u obstrucción intestinal, trauma, infección por
VIH, cetoacidosis diabética y otras condiciones asociadas
con isquemia pancreática prolongada. Además, dado que Recomendaciones
la lipasa se excreta por vía renal, puede estar elevada en el • El diagnóstico de PA requiere, al menos, dos de los
plasma de pacientes con una tasa de filtrado glomerular siguientes tres criterios: dolor abdominal característico,
deteriorada. La macrolipasemia es otra causa de aumento amilasa y/o lipasa plasmáticas > 3 veces su valor de refe-
del nivel plasmático de lipasa. Los pacientes diabéticos rencia máximo y/o evidencia radiológica de pancreatitis.

Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323 309


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

• La tomografía computada y la resonancia mag- (RR: 4,12; IC95%: 1,98-8,6). Los fumadores que dejan
nética usualmente no son necesarias para establecer el el hábito tóxico disminuyen el riesgo de PA a niveles co-
diagnóstico de pancreatitis y tienen un rol especial- rrespondientes de los no fumadores después de 20 años
mente en los escenarios que planteen dudas diagnós- de la suspensión.28, 29
ticas.
El consumo de cannabis podría ser responsable del
• El valor de las enzimas pancreáticas no es un pa- 2% de los casos de PA idiopática.30
rámetro útil para predecir severidad, definir pronósti-
Entre el 5 y 7% de la PA puede ser causada por tu-
co ni establecer el momento adecuado para reiniciar la
mores periampulares sólidos o tumores quísticos de pán-
alimentación, realizar una colecistectomía o externar a
creas. Se deben considerar estas etiologías principalmente
un paciente.
en personas mayores de 40 años.23
Etiología de la pancreatitis aguda
Recomendaciones
La inflamación aguda del páncreas es el resultado
de la combinación de varios factores, incluyendo me- • En nuestro país la etiología biliar es la causa más
canismos obstructivos, tóxicos, anomalía anatómica frecuente de PA, seguida del consumo de alcohol.
y/o genética. • Descartadas ambas, calcemia y trigliceridemia deben
El diagnóstico etiológico de la PA es crucial para pre- solicitarse dentro de las primeras horas.
venir la recurrencia. En la mayoría de los casos no hay • El tabaquismo es un factor independiente de PA.
dificultad en definir la causa. Sin embargo, aproximada- Debe descartarse patología tumoral en pacientes mayores
mente el 20-30% de los pacientes presentan PA idiopáti- de 40 años con PA idiopática.
ca a pesar del análisis de laboratorio (incluye trigliceride-
mia y calcemia), la ecografía abdominal, la tomografía y/o
la colangior resonancia magnética. Predictores de severidad

En nuestro medio, la litiasis biliar es la principal causa Los pacientes con PA tienen cursos clínicos variables,
de PA, mayor al 80%, seguida por el alcohol.19, 20 Sola- con un 20% de episodios severos, alcanzando en este gru-
mente el 2% de las colelitiasis asintomáticas y el 2-3% de po una mortalidad del 30%.31-33 Predecir el grado de se-
los alcohólicos van a desarrollar PA.21, 22 veridad es uno de los puntos claves en el manejo inicial
de la PA, ya que define el traslado a centros de referencia,
Dado que la microlitiasis no diagnosticada por eco- el ingreso en unidad de cuidados intensivos y/o la imple-
grafía abdominal es responsable de 60-80% de las PA mentación de terapéuticas específicas.34, 35
idiopáticas, se sugiere una segunda línea de estudios como
la colangioRMN y la ecoendoscopía (EUS).23, 24 Gran cantidad de scores han sido diseñados, valida-
dos y puestos a prueba durante las últimas décadas, sin
En pacientes en quienes ya se descartó causa litiásica embargo, persisten las inconsistencias y la falta de con-
y alcohólica, debe solicitarse trigliceridemia y calcemia en senso. Los scores más históricos y precisos (APACHE y
las primeras horas de la admisión, debido a que el ayuno RANSON) están conformados por múltiples determi-
y el estado hipercatabólico disminuyen su concentración naciones y se completan a las 48 horas del ingreso, lo
en sangre rápidamente.19, 25 que les resta practicidad clínica, mientras que los mar-
Las drogas más estudiadas como causantes de PA cadores individuales promisorios no están ampliamente
son: la azatioprina y 6-mercaptopurina (riesgo de PA: disponibles.
3,2-6%), mesalazina, metronidazol, codeína, enalapril, Los principales determinantes de mortalidad en
isoniazida, simvastatina, ácido valproico, terapia antirre- el curso de una PA son el fallo persistente de órgano
troviral altamente activa (HAART).26, 27 (FOP) durante la primera semana, y la necrosis pancreá-
El tabaquismo es un factor de riesgo independiente tica infectada (NPI), pasados los 5-7 días del inicio del
para PA. En la PA de causa no biliar los fumadores activos cuadro.35, 36 El FOP se define como aquel que se pro-
(más de 20 paquetes-año) tienen 2 veces más riesgo (RR: longa por más de 48 horas con compromiso de alguno
2,29; IC95%: 1,63-3,22) comparados con no fumadores. de los siguientes parámetros: PaO2/Fio2, creatininemia,
El efecto tóxico del tabaco es sinérgico con el alcohol, tensión arterial (score de Marshall).37 Un score de 2 o más
de manera que en fumadores con consumo de alcohol (> puntos en cualquier órgano implica la presencia de fallo
400 gr/mes) se incrementa 4 veces el riesgo de sufrir PA de órgano (Tabla 1).

310 Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

Tabla 1. Score de Marshall: severidad de pancreatitis aguda.

Score de Marshall 0 1 2 3 4

Respiratorio (PaO2/Fio2) > 400 301-400 201-300 101-200 < 101

Renal < 1,4 1,4-1,8 1,9-3,6 3,6-4,9 > 4,9

Cardiovascular (TA sistólica en mmHg) > 90 < 90 < 90 < 90 < 90


Responde a fluidos No responde a fluidos pH < 7,3 pH < 7,2

Los predictores de mayor efectividad en las primeras score con otras determinaciones, como las que forman
48 horas son la escala de la Sociedad Japonesa (que cuen- parte del BISAP, incrementa la especificidad y mejora la
ta con 21 determinaciones) y el BISAP (Bedside Index exactitud diagnóstica.40
for Severity of Acute Pancreatitis) (Tabla 2). Este último La presencia de dos o más de los ítems previos implica
cuenta con una sensibilidad de 72%, especificidad 99%, el diagnóstico de SIRS. Cuanto más precoz sea su inicio
valor predictivo positivo 83%, valor predictivo negativo en el curso de la PA, con más cantidad de determinacio-
98%.35, 38, 39 Sus principales ventajas son: simplicidad y nes positivas y más prolongado en el tiempo (> 48 horas):
capacidad de ser calculado con mínimos requisitos. La mayores posibilidades de severidad en el curso de la PA.41
mortalidad de los pacientes se incrementa significativa-
mente a partir de los 3 puntos, alcanzando un 22% con Entre las determinaciones individuales, la urea y el
los 5 puntos. hematocrito han demostrado tener valor pronóstico. Un
valor de urea elevado al ingreso, que no disminuye luego
de 24 horas de hidratación amplia, se correlaciona con
Tabla 2. Índice de severidad de pancreatitis aguda: BISAP. aumento de la mortalidad. En el mismo sentido, la he-
moconcentración (definida con un hematocrito > a 44)
Score BISAP
se asocia con necrosis pancreática.34, 42
1. BUN > 25 mg/dl Si bien no forman parte de las determinaciones del
2. Deterioro del estado mental (escala de Glasgow < 15) ingreso, vale la pena comentar que la proteína C reactiva
ha sido validada como marcador de severidad, y la pro-
3. SIRS: definido como 2 o más de los siguientes: calcitonina predice con elevada exactitud el desarrollo de
necrosis pancreática. Aunque se encuentran disponibles
a. Temperatura < 36 ºC o > 38 ºC
y su determinación resulta muy sencilla, ambas deben
b. Frecuencia respiratoria > 20 x minuto o PaCO2 < 32 mmHg ser medidas alrededor de las 72 horas del comienzo del
cuadro, lo cual les resta significancia en el momento de
c. Frecuencia cardíaca > 90 x minute
mayor definición.34, 35, 42
d. Leucocitos < 4.000 o >12.000 cel/mm3 o reticulocitos > 10% Debe remarcarse el concepto de que los valores de
4. Edad > 60 años
amilasa y lipasa tienen relevancia en el diagnóstico del
episodio de pancreatitis y no así en el pronóstico de esta.
5. Derrame pleural
Los actuales sistemas pronósticos han alcanzado su
máxima eficacia de predicción. Las combinaciones so-
fisticadas de determinaciones bioquímicas y estudios por
El diagnóstico de síndrome de respuesta inflamato-
imágenes incrementan mínimamente la exactitud tornan-
ria sistémica (SIRS), que forma parte de los criterios del
do engorrosa su aplicación clínica.43
BISAP, cuenta con la mayor sensibilidad entre los marca-
dores tempranos (95%), pero carece de valor predictivo
positivo (15%).35 Esto generaría un falso pronóstico de Recomendaciones
gravedad entre pacientes con cuadros leves (principal- • El fallo de órgano persistente (score de Marshall) y la
mente en poblaciones de baja incidencia), pero evitaría infección del tejido pancreático y/o peripancreático son
descuidar a pacientes de curso severo. Complementar este los determinantes de severidad.

Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323 311


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

• Se sugieren como marcadores pronósticos el BISAP Entre las más utilizadas para el tratamiento del dolor
(que incluye SIRS) + uremia y hematocrito (al ingreso y a agudo se encuentran el ibuprofeno, el diclofenac, el ke-
las 24 horas de un tratamiento de hidratación adecuado). torolac y los denominados AINES atípicos, dipirona y
paracetamol. Son buenos analgésicos para el dolor leve
• Amilasa y lipasa NO son determinantes de severidad a moderado, aunque encuentran techo analgésico a dosis
ni de pronóstico. máximas. Ibuprofeno 2400 mg/día, diclofenac 150 mg/
día y ketorolac 90 mg/día son las dosis recomendadas.
Tratamiento del dolor en la PA En el caso del ketorolac no debe utilizarse más de cinco
días por el alto riesgo de complicaciones gastrointestina-
El páncreas recibe inervación simpática, parasimpática
les (úlcera, perforación, hemorragia) y renales. La dipiro-
y sensorial. Casi toda la inervación sensorial del páncreas
na o metamizol merece alguna consideración aparte, es
proviene del sistema esplácnico izquierdo, pero algunas
una excelente droga analgésica y antipirética, con escasa
fibras esplácnicas derechas cruzan la línea media para
acción antiinflamatoria y algún mecanismo de acción a
inervarlo. En contraste con el sistema nervioso somático,
nivel central en las vías de neuromodulación. Las dosis de
en el visceral no existe distinción precisa entre recepto-
dipirona pueden variar de 1 a 1,5 gr cada 6-8 horas.
res sensoriales nociceptivos y no nociceptivos. Al parecer,
cuanto más intenso es el estímulo, y más receptores lo Así como los AINES encuentran techo en su acción
captan, más se transforma este de inocuo a nocivo. Por analgésica, los opioides potentes no lo tienen. Esta es la
ello, la lesión localizada de una víscera abdominal no sue- principal ventaja del uso de opioides en el tratamiento
le ser nociva, mientras que la estimulación generalizada, del dolor moderado a severo. El opioide más extendi-
como la distensión de un órgano hueco o la inflamación do en el uso clínico es la morfina, y existen alternativas
sí causan dolor. como meperidina, buprenorfina, tramadol, etc. Ningu-
no de ellos ha demostrado tener mejores resultados. Si
El dolor atribuido a inflamación pancreática a menu-
bien se propone que la acción anticolinérgica de la me-
do se irradia al tórax o a los flancos, y causa espasmos re-
peridina contrarresta la acción sobre el esfínter de Oddi,
flejos de la musculatura de la espalda, que aparecen como
no hay evidencia clínica de este beneficio. También po-
consecuencia de la convergencia del sistema nervioso so-
dría tener un mejor perfil terapéutico el tramadol, que
mático con aferentes viscerales en el asta medular dorsal.
además de tener acción agonista Mu, actúa en la mo-
Las respuestas simpáticas descendentes ocasionadas por la
dulación del asta posterior medular; sin embargo, este
percepción dolorosa producen una serie de alteraciones
opioide tiene techo de dosis.
indeseables, como íleo, taquicardia, agitación, hiperten-
sión, aumento del consumo de oxígeno, etc., que pueden Las dosis de los opioides equipotentes por vía intra-
controlarse, al menos en parte, con una buena analgesia. venosa en el manejo del dolor agudo son las siguientes:
Las intervenciones analgésicas en la PA suelen basarse Meperidina: 1 mg/kg + 3-4 mg/kg/día. Rescates: 0,3
en la administración IV de drogas analgésicas. Los fárma- mg/kg/dosis.
cos más utilizados pertenecen a los grupos de los AINES
Morfina: 0,15 mg/kg + 0,3 – 0,5 mg/kg/día. Rescates:
y los opioides. Existen también intervenciones analgési-
0,03 mg/kg/dosis.
cas más complejas o invasivas, como el bloqueo peridural
lumbotorácico, con buenos resultados analgésicos, aun- Tramadol: 1 mg/kg + 3-4 mg/kg/día. Rescates: 0,3 mg/
que aún se espera mayor evidencia, especialmente en los kg/dosis.
pacientes con inestabilidad hemodinámica.44 También El uso de bombas de analgesia controlada por el pa-
existen alternativas terapéuticas como el bloqueo inter- ciente (PCA) reduce el consumo total de opioides y au-
pleural o del plexo celíaco. menta la calidad de la analgesia.
Los opiáceos pueden ser una opción apropiada para el El hecho de que la nocicepción es un mecanismo
tratamiento del dolor en pancreatitis aguda. Comparados complejo con sistema de modulación a diferentes nive-
con otras opciones analgésicas, pueden reducir la necesi- les hace posible el uso de analgesia multimodal, es decir
dad de analgesia complementaria. Actualmente, no hay la sumatoria de fármacos que actúen a diferentes niveles
diferencias en el riesgo de complicaciones de la pancreati- de la vía del dolor. Es común la asociación de un AINE
tis ni en los eventos adversos clínicamente graves entre los con acción periférica y un opioide con acción central. Asi-
opiáceos y otras opciones de analgesia. mismo, se pueden sumar otras drogas con mecanismos
Los AINES conforman un amplio grupo de drogas. de acción diferentes a modo de coadyuvantes, podemos

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nombrar a la ketamina por sus acciones sobre el receptor La OMS ha desarrollado la escalera analgésica para
N-metil de aspartamo (NMDA), o a los antidepresivos los pacientes con dolor oncológico, que se ha adaptado al
tricíclicos (ANDT) por sus acciones sobre la 5 HT, así manejo del dolor agudo y crónico no oncológico con el
como la gabapentina y la clonidina. transcurso del tiempo (Figura 1).

Figura 1. Escalera analgésica de la Organización Mundial de la Salud (modificada por Vargas Schaffer).45

Persistencia del dolor


+
Cuarto escalón:

- Segundo escalón:
Tercer escalón:
Uso de opioides de alta
Tratamiento
intervencionista

Primer escalón: potencia (morfina, etc.) +/- opioides de alta


Uso de opioides de baja
potencia
Uso de AINES potencia (codeína, etc.) +/- drogas no
(paracetamol, aspirina) opiáceas/AINES +/- drogas no
+/- drogas no
opiáceas/AINES
+/- drogas adyuvantes opiáceas/AINES +/- drogas adyuvantes
(ketamina, ADTC, +/- drogas adyuvantes
gabapentina, clonidina) +/- drogas adyuvantes

Resucitación con fluidos en PA uso de coloides se desaconseja, por el riesgo de falla renal
En la PA, la inflamación del páncreas y la respuesta y muerte, principalmente ante sepsis severa, con acuerdo
inflamatoria sistémica asociada conducen a la extrava- en toda la literatura.53-55
sación de fluidos al tercer espacio. En los casos severos En el protocolo de administración, varios trabajos han
se produce hipovolemia, hipoperfusión y falla orgánica. demostrado que la hidratación rápida y no controlada au-
La hipovolemia afecta la microcirculación pancreática y menta los riesgos de infección, síndrome compartimen-
puede influir en el desarrollo de necrosis, además de com- tal, necesidad de asistencia respiratoria mecánica y mor-
prometer las funciones renal y cardíaca. El objetivo de la talidad.46, 47, 51, 54, 56-60 Por otro lado, la hidratación escasa
hidratación es mejorar el volumen de fluidos circulante, también es inapropiada.
para mejorar la oxigenación tisular. Por todo lo expuesto,
la hidratación es uno de los puntos trascendentales en el Debe tenerse en cuenta que la influencia favorable de
manejo de la PA en etapas tempranas. la hidratación sobre la cascada inflamatoria ocurre en las
primeras veinticuatro horas, pero el paciente en ocasiones
En la resucitación de fluidos deben evaluarse tres pará- llega más allá de este lapso.
metros: tipo de hidratación, protocolo de administración
y medición de respuesta al tratamiento implementado. La velocidad óptima de infusión es de 5-10 ml/h/kg;
en la mayoría de los pacientes, la infusión de 2500-4000
Respecto del tipo de hidratación, la mayoría de los
ml en las primeras 24 horas es adecuada. No obstante,
trabajos y guías recomiendan el uso de cristaloides, en
debe individualizarse según edad y comorbilidades.
particular el Ringer lactato, basados en trabajos que eva-
lúan la mejoría de la proteína C reactiva (PCR) y de la La evaluación de la respuesta es fundamental; para ello
respuesta inflamatoria sistémica (SIRS).46, 47 No obstante, deberán considerarse parámetros hemodinámicos, pre-
la supremacía del Ringer lactato sobre otros cristaloides sión arterial media de 65-85 mmhg, frecuencia cardíaca
no ha podido demostrarse en otros estudios, que argu- menor a 120/min, respiratoria, saturación de oxígeno y
mentan la falta de impacto en la evolución final.48-53 El diuresis (mayor a 0,5-1 ml/h/kg peso) y parámetros bio-

Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323 313


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

químicos como hematocrito, urea, creatinina y lactato. nado por la magnitud y duración del SIRS. Consideran-
En pacientes en unidad de terapia intensiva se utilizan do lo expresado es simple comprender que la TC no tiene
parámetros invasivos: variación de volumen sistólico e in- un rol establecido en la fase temprana de la PA. Las imá-
tratorácico. La presión venosa central ha demostrado no genes se correlacionan pobremente con la severidad del
ser un marcador adecuado.61-63 cuadro, el estatus anatómico del páncreas y las eventuales
complicaciones locales no predicen gravedad, la cual está
Pese a la gran cantidad de trabajos que aluden al tema,
determinada por la presencia de falla multiorgánica.
aún hay muchos aspectos que reforzar con evidencia clara.
La TC permite determinar complicaciones loca-
Recomendaciones
les tempranas, entre las que se destacan las colecciones
necróticas agudas. De todas maneras, su presencia no
• Realizar hidratación con cristaloides, sin que se pue- modifica la conducta en las primeras 72 horas, excep-
dan recomendar alguno en particular. cionalmente van a necesitar resolución y no es necesario
• Velocidad de infusión a considerar según comorbi- documentarlas.64, 65
lidades. La capacidad de la TC para detectar necrosis permi-
• Realizarla dentro de las primeras 24 horas de la PA. te estratificar a los pacientes, de acuerdo con el subtipo
de PA, en edematosa o necrotizante. En la fase temprana
• Monitorear la respuesta con parámetros clínicos y
este método tiene baja sensibilidad en el diagnóstico de
bioquímicos.
necrosis, la cual se desarrolla paulatinamente a medida
que se instala y persiste la hipoperfusión (consecuencia de
Utilidad de la tomografía computada en las pri-
alteración en la microcirculación). En los primeros días
meras 72 horas
algunas áreas hipodensas en las imágenes pueden generar
Aquellos pacientes que al momento de su admisión confusión entre edema (pancreatitis edematosa / intersti-
hospitalaria reúnan los dos primeros criterios no van a cial) o presencia de necrosis establecida. En la fase tardía,
requerir estudios por imágenes para confirmar el diag- las necrosis, tanto pancreática como peripancreáticas, se
nóstico. De ser necesaria una evaluación mediante imá- delimitan, teniendo la TC elevada precisión en su deter-
genes, en esta etapa de la enfermedad la ecografía abdo- minación.66, 67
minal es por disponibilidad, costo y rapidez el método
En definitiva, las indicaciones para la realización de
más utilizado.
una TC en las primeras 72 horas de una PA son escasas.
La tomografía computada (TC) es una técnica de
gran disponibilidad y cuenta con grandes ventajas, par- No tiene indicación para el diagnóstico de la enfer-
ticularmente vinculadas a su confiabilidad y precisión, medad, excepto que la clínica y/o el laboratorio no sean
siendo en la actualidad el método de elección ante la concluyentes. En este escenario, la ecografía abdominal
duda diagnóstica. suele ser la primera modalidad de imagen. De no ser
categórica, la TC tendría un rol, dada su capacidad de
El protocolo adecuado incluye imágenes en las si- establecer diagnósticos alternativos a PA que cursan con
guientes fases: cuadro clínico similar.
• Fase sin contraste intravenoso: permite evaluar la es- Respecto de la etiología de la PA, la TC tampoco cum-
tructura y densidad basal del páncreas. ple un rol determinante. La causa biliar, la más frecuente,
• Fase parenquimatosa pancreática: se obtiene aproxi- suele diagnosticarse mediante laboratorio y ecografía.
madamente a los 40 segundos del inicio de la inyección No es útil para definir en forma certera el subtipo de
del contraste intravenoso. Es la fase de máximo realce del pancreatitis en los primeros días, ya que subestima la ne-
parénquima pancreático y donde observaremos alteracio- crosis en la fase temprana. No tiene rol pronóstico donde
nes focales y/o defectos de perfusión. los scores clínicos predicen mejor la severidad.
• Fase portal: se realiza aproximadamente a los 65
segundos; contribuye a la detección y caracterización de Recomendaciones
complicaciones locales.
• La TC tiene indicación establecida en las primeras
La PA es una enfermedad dinámica y evolutiva, que 72 horas de la enfermedad ante un paciente que presente
consta de dos fases. La fase temprana tiene una duración deterioro clínico significativo o signos de sepsis que hagan
aproximada de una semana y el pronóstico está determi- sospechar infección de una colección necrótica aguda.

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Uso racional de antimicrobianos negativos en 20%-29% y falsos positivos en 4%-10%.81


La utilización de antimicrobianos en las primeras 72 Muestras de múltiples sitios pueden aumentar el rédito.86
horas de la PA es un tema controversial. Por un lado, Las opciones de tratamiento empírico inicial de la NPI,
es indiscutible su rol en el tratamiento de las infecciones basadas en la penetración pancreática y la potencial resis-
establecidas, y se ha propuesto que evitaría el desarrollo tencia antimicrobiana, son imipenem o meropenem en
de infecciones locales o sistémicas. Por otro lado, su uso monoterapia, piperacilina-tazobactam en monoterapia, o
inapropiado está asociado a numerosos efectos adversos, cefepime más metronidazol, a ajustar según aislamiento
como la emergencia de resistencia antimicrobiana, el des- microbiológico.81, 85
plazamiento hacia infecciones fúngicas o el surgimiento Respecto del uso profiláctico de antimicrobianos en
de diarrea por antimicrobianos, incluyendo la infección la PA, numerosos metaanálisis de estudios recientes han
por C. difficile.68-70 reportado su falta de eficacia para evitar infecciones extra-
Considerando la fisiopatogenia de la PA, es espera- pancreáticas, NPI y reducir la mortalidad asociada a las
ble la presencia de un síndrome de respuesta inflamatoria mismas.81, 87-89
sistémica (SIRS) durante las primeras 48 horas de evolu-
ción, por lo que su identificación no es motivo suficiente Recomendaciones
para indicar antibioticoterapia.71 Asimismo, las infeccio-
• No se recomienda el uso de profilaxis antibiótica
nes más frecuentes en esta etapa son extrapancreáticas
en la PA.
(colangitis concomitante, bacteriemia, neumonía, infec-
ción del tracto urinario, infección asociada a catéter), con • En caso de sospecha de infección, evaluar causas ex-
una incidencia de 25-32%,72, 73 las cuales requieren un trapancreáticas en primera instancia.
manejo diagnóstico y terapéutico particular. • Frente a la sospecha de NPI en esta etapa, inten-
Una de las complicaciones más devastadoras de la tar documentarla: gas (peri) pancreático y/o cultivo de
PA es la necrosis (peri)pancreática infectada (NPI), con punción con aguja fina positivo para microorganismo
una incidencia del 18% y una mortalidad asociada del compatible.
15-35%.74, 75 Sin embargo, su presentación suele ser tar-
• Ante falta de evidencia de infección, suspender los
día, con una mediana de 13-26 días desde la hospitali-
antimicrobianos lo antes posible.
zación.75-78 Solo en el 7% de los casos fue diagnosticada
durante los primeros 7 días.79, 80 Se ha propuesto que la • Involucrar al Servicio de Infectología en la toma de
presencia de gas en la zona de necrosis (peri)pancreática, decisiones tras el manejo inicial.
el compromiso extenso (>30%), la bacteriemia previa,
valores de hematocrito mayores a 50% y procalcitonina Manejo nutricional en PA en sus primeras 72
elevada son factores de riesgo para presentar NPI ulterior, horas
aunque no de forma concluyente.75, 77, 81, 82 Dado que la La PA es una enfermedad altamente metabólica con
patogenia de la NPI suele ser por traslocación intestinal, activación de una cascada inflamatoria, en la que la tera-
los microorganismos más frecuentemente involucrados pia nutricional puede modular el estrés oxidativo, man-
son enterobacterias (E. coli, K. pneumoniae), seguidas tener la función intestinal, preservar la estructura acinar,
por P. aeruginosa, Enterococcus spp, Staphylococcus spp y disminuir el catabolismo evitando la malnutrición (MN)
cándida, siendo polimicrobiana en hasta el 32% de los o agravamiento de esta, y obtener el equilibrio inmuno-
casos.77, 83 Estudios observacionales realizados en centros inflamatorio.90
de tercer nivel de atención identificaron que el 35-56%
Se recomienda realizar una evaluación nutricional
de los microorganismos causantes de la NPI eran multi-
dentro de las 24-48 horas de ingreso a la institución, para
rresistentes, impactando en la elección del tratamiento
determinar la presencia y el grado de MN y permitir una
empírico inicial.84, 85
intervención nutricional adecuada (Figura 2).91, 92 Los pa-
Frente a la sospecha de NPI en las primeras 72 horas, cientes con PA deberán clasificarse con un nivel modera-
tras descartar otras causas de persistencia de SIRS o em- do a elevado de riesgo nutricional, por el impacto de la
peoramiento clínico, y considerando su baja frecuencia enfermedad en el estado nutricional.90, 93
en esta etapa, se sugiere la toma de hemocultivos y even-
Requerimientos calórico-proteicos:8, 94
tual punción con aguja fina guiada por imágenes de la
zona de necrosis para tinción de Gram, cultivo y antibio- En PA leve (PAL) = 25-30 kcal/kg/d de energía y 1,2-
grama, teniendo en cuenta que esta técnica presenta falsos 1,5 g/kg/d de proteínas.

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Figura 2. Manejo nutricional en PA.

Inicio alimentación VO (24-48 horas).


Tipo alimentación: sólida baja en grasas,
rica en hidratos carbono y proteínas
Pancreatitis aguda leve

Preferible la VO
Evaluación nutricional dentro de En el caso de no poder iniciar (3°-4° d)
las 24-48 h. Formular una Pancreatitis aguda moderada se recomienda iniciar SN (NE)
intervención nutricional apropiada

Tipo de SN: NE
Pancreatitis aguda grave
Tipo de fórmula: polimérica o
semielemental

Iniciará NP: si no es bien Tipo de vía: gástrica


tolerada la NE, cuando
no se cubren los requeri- Forma infusión: continua
mientos nutricionales,
ante íleo prolongado

En PA moderada (PAM) - PA grave (PAG) = 35 kcal/ La alimentación oral sólida, comparada con una dieta
kg/d de energía y 1,5-2 g/kg/d de proteínas.* con líquidos claros, es bien tolerada y nutricionalmente
más beneficiosa, ya que disminuye la estadía hospitala-
*(Este límite debe reducirse a 15-20 kcal/de peso ac-
ria, se recomienda una alimentación rica en hidratos de
tual/día en los casos SIRS o MODS y cuando el paciente
carbono y proteínas, con bajo contenido de grasa.90, 92, 93,
está en riesgo de síndrome de realimentación). 98
En cuanto a la consistencia, se puede considerar una
dieta blanda, debido a que el aumento en la ingesta de
1. Nutrición en PAL grasa produce saciedad precoz y retraso en el vaciamien-
• Inicio nutrición oral to gástrico. En este caso, reduciendo la cantidad total de
grasa en cada comida y / o la utilización de fuentes de
Se recomienda iniciar alimentación por vía oral tem-
grasas líquidas podrían mejorar la ingesta oral y promover
prana (dentro de las 24-48 horas)48, 88, 93 una vez que dis-
el vaciamiento gástrico.90 Se considerará iniciar con fibra
minuya el dolor abdominal y los marcadores inflamato-
soluble en aquellos pacientes que experimentan diarrea
rios comiencen a mejorar, sin necesidad de esperar a que
como resultado de la inflamación pancreática.90
el dolor o los parámetros bioquímicos (amilasa y/o lipasa)
se resuelvan completamente, y cuando los pacientes ma- 2. Nutrición en PAM
nifiesten tener apetito, ya que es factible y segura.9, 68, 95-97
Este subgrupo de pacientes con PA tiene falla orgá-
Aproximadamente, el 20% de los pacientes experimentan
nica transitoria, que desaparece dentro de las 48 horas.
una recaída del dolor cuando comienzan con alimenta-
Al igual que con todos los tipos de PA es preferible la vía
ción oral.90, 93 En caso de no poder iniciar la vía oral al 3°-
oral, pero en caso de no poder iniciarla al 3°- 4° día, la
4° día,48, 88 la vía de elección será la nutrición enteral (NE)
NE es la vía de elección en pacientes que requieran SN.
en pacientes que requieran soporte nutricional (SN).90
• Composición del plan de alimentación. 3. Nutrición en PAG
Líquidos claros versus dieta sólida con bajo contenido • Cuándo iniciar SN y tipo de SN
de grasa. La alimentación temprana puede mejorar la MN aso-

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ciada a la PA y reducir significativamente la tasa de infec- semana y limitar la extensión de las lesiones pancreáticas
ción.90, 93, 99 Las Guías de Práctica Clínica recomiendan en y peripancreáticas. Los autores concluyeron que, a pesar
aquellos pacientes que no toleren la vía oral y que requie- de la existencia de obstrucción biliar, no hubo beneficios
ran SN emplear NE, tan pronto como sea posible (dentro en realizar CPRE precoz en el curso de la enfermedad.107
24-48 horas).88, 90, 92-94, 98 La NE es la vía de elección. Un metaanálisis realizado en 2012 concluyó que en
• Vías de acceso, tipo de fórmula y métodos de admi- casos de PA biliar asociada a colangitis la CPRE precoz
nistración disminuyó significativamente la mortalidad, como así
también las complicaciones locales y sistémicas. No ocu-
Las guías actuales recomiendan administrar la NE a rrió lo mismo cuando se trató de obstrucción biliar sos-
través de la vía gástrica o yeyunal.90, 92, 93 Ambas vías de tenida.108
nutrición son factibles y seguras.48, 88, 90 En cuanto al tipo
de fórmula enteral se pueden utilizar tanto las poliméricas Con la evidencia actual, la realización de CPRE en PA
como las semielementales.90, 93 No hay evidencia sobre el podría resumirse de esta manera:109
uso de fórmulas enterales enriquecidas con farmaconu- • PA leve: no está indicada la CPRE.
trientes: probióticos,90, 93 prebióticos, simbióticos, argi-
• PA con colangitis: indicación de CPRE precoz.
nina,90 glutamina,90 ácidos grasos ω 3,90 no habiéndose
apreciado mejoría clínica significativa con el uso de estos • PA severa: estaría indicada la CPRE ante signos de
inmunonutrientes en los pacientes con PAG. Se necesitan empeoramiento clínico asociados a obstrucción biliar
más trabajos randomizados para establecer la eficacia y sostenida.
seguridad de estas fórmulas en pacientes con PA.90 Las
fórmulas enterales con fibras mixtas (solubles e insolu- Es importante destacar que:109
bles) no se recomiendan en pacientes con riesgo de isque-
• No se ha demostrado que la realización de la CPRE
mia intestinal o dismotilidad severa, por lo que probable-
durante la evolución de una PA provoque exacerbación o
mente deberían evitarse en las fases iniciales de la PAG.90
empeoramiento del curso de esta.
Método de administración: se recomienda administrar la
fórmula a través de infusión continua sobre la cíclica.92 • Por último, está bien establecido que la desobstruc-
NP: debe ser utilizada como terapia de segunda línea ción de la vía biliar no modifica la evolución de la PA.
si la NE no es tolerada, cuando no se logra cubrir los
requerimientos nutricionales o ante la presencia de íleo Oportunidad de la colecistectomía en la PA biliar
prolongado.48, 92, 93, 100 Tipo de fórmula parenteral: podría Hasta el 80% de los casos detectados en la Argentina
considerarse el uso glutamina (que la solución de aminoá- tendrán como etiología la presencia de litiasis biliar.101
cidos contenga 0,3-0,57 g/kg/día) por un lapso de 5 a 10 La publicación original de Acosta en 1974 tuvo el in-
días6, 9 pero no de forma rutinaria en pacientes críticos.96 menso valor de establecer la relación entre la migración
transpapilar de una litiasis canalicular y la fisiopatología
de la PA biliar.110
CPRE: indicaciones en la pancreatitis aguda
La litiasis biliar (LB) es la causa más común de PA.101 Por tal motivo, la remoción quirúrgica de la vesícula
biliar cobra importancia como el principal gesto tera-
La CPRE resulta ser efectiva para resolver la obstruc- péutico para evitar la recurrencia de este cuadro.111 Por
ción biliar, con tasas de éxito superiores al 90%. Sin em- lo general, con la demostración de la litiasis vesicular es
bargo, es una práctica que conlleva riesgo de eventos ad- suficiente para atribuir a esta la causa de la pancreatitis.
versos, especialmente en pacientes que cursan PA.102 Por ende, salvo que el paciente tenga firmes anteceden-
Desde hace varias décadas se discute el rol de la CPRE tes como tabaquismo o alcoholismo severo, o dudas en
en pacientes con PA. Múltiples estudios fueron diseña- la presentación clínica, no son necesarios mayores estu-
dos para evaluar su seguridad y beneficio. Estos presentan dios para categorizar a una pancreatitis como de proba-
diferencias importantes en lo que respecta a criterios de ble origen biliar.
selección de pacientes, severidad de la PA e indicación de Por tal motivo, la colecistectomía disminuye el ries-
la colangiografía.103-106 go de volver a padecer otro episodio de PA a menos del
El trabajo de Oria y colaboradores tuvo como objeti- 10%.112 Ese porcentaje de recurrencia incluye tanto a pa-
vo evaluar si la terapéutica endoscópica precoz era capaz cientes con litiasis coledociana residual o recidivada, como
de reducir el score de falla orgánica durante la primera a pacientes con otra causa subyacente distinta a la LB.

Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323 317


Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

El mejor momento en la evolución de una PA para el lito ya habrá migrado a duodeno. Por tal motivo sería
realizar la colecistectomía ha sido motivo de controversias aconsejable certificar previamente la litiasis canalicular
en las últimas décadas. En la actualidad, sin embargo, se mediante ecografía, resonancia o ecoendoscopía.
ha logrado llegar a ciertos consensos desde un punto de La segunda opción corre el riesgo de que la CPRE po-
vista conceptual. soperatoria fracase en la extracción del cálculo condenan-
En los casos de PA severa la colecistectomía debe dife- do al paciente a un nuevo procedimiento para lograrlo.
rirse hasta la completa resolución del cuadro inflamatorio La tercera opción es una estrategia que ha demostrado
local y sistémico.113 No tiene sentido operar a un paciente ser segura en pacientes con PA no severa en nuestro medio.
en el curso de una falla orgánica, o ante la presencia de
Por otra parte, la descompresión biliar de urgencia
colecciones líquidas o necróticas agudas. Se corre el riesgo
mediante CPRE debería quedar relegada principalmente
de infectar colecciones estériles, y de lidiar con mayores
a pacientes con coexistencia de colangitis aguda y
dificultades técnicas por el proceso inflamatorio. En el
pancreatitis.56, 108
caso excepcional de coexistir una colecisitis aguda con
una pancreatitis severa se puede contemporizar la situa-
ción con una colecistostomía percutánea. Recomendaciones
• En la PA severa la colecistectomía debe diferirse has-
Por otra parte, en los casos de PA no severa, se acon-
ta la resolución del cuadro inflamatorio local y sistémico.
seja realizar la colecistectomía laparoscópica en forma
precoz.114 Aun así, existen controversias de qué tan pre- • En las PA no severas, la colecistectomía debe reali-
cozmente debe realizarse. Hasta las guías publicadas pre- zarse precozmente para evitar la recurrencia de un ata-
sentan diferencias en este punto. Algunos autores procla- que, preferentemente en la misma internación, previo al
man realizar la colecistectomía entre las 2 a 4 semanas alta. La vía laparoscópica pura o combinada con el uso
posteriores al alta. Sin embargo, diferir el acto quirurgico de CPRE selectiva perioperatoria son las estrategias más
puede ser riesgoso ya que, en la espera, pueden ocurrir utilizadas en nuestro medio.
eventos biliopancreáticos agudos (33,8%) y pancreatitis
recurrentes (15%).115
Conclusiones
Por tal motivo, la mayoría de los centros presenta
La PA es una enfermedad trascendente que afecta a millo-
como criterio actual realizar la colecistectomía en ausen-
nes de personas en el mundo entero. Este trabajo intenta
cia de colecciones líquidas o necróticas, luego de resuelto
reducir las variaciones que existen en el enfoque inicial de
el cuadro clínico, sin presencia de disfunción orgánica y
la PA en nuestro medio, y promover los cuidados de alta
en la misma internación del ataque.113, 116, 117
calidad para los pacientes que la padecen. Se han descrip-
Algunos autores proclaman incluso la colecistectomía to diez medidas, cada una de ellas por un especialista en
en las primeras 48 h de internación, en casos leves. Sin el tema, primordiales durante las primeras 72 horas de la
embargo, este concepto no es universalmente acepta- admisión, período en el cual la toma de decisiones puede
do.118, 119 alterar el curso de la enfermedad y la duración de la hospi-
En cuanto a cuál es la mejor estrategia para lidiar con talización. Las medidas a adoptar deben caracterizarse por
una eventual litiasis coledociana, la discusión se centra su aplicabilidad y sencillez. Por ello, deseamos que este ar-
en cuatro alternativas. Una resuelve todo por vía laparos- tículo resulte una herramienta útil en el manejo inicial de
cópica mediante la instrumentación de la vía biliar, y las la PA. En el horizonte, la llave para mejorar los resultados
otras 3 utilizan la CPRE. Estas últimas opciones son: posiblemente será el desarrollo de terapias que se orien-
ten específicamente a minimizar la respuesta inmunoló-
1. CPRE inicial y colecistectomía laparoscópica pos-
gica causada por la autodigestión pancreática. Mientras
terior.
tanto, deberíamos evitar el denominado “síndrome de
2. Colecistectomía laparoscópica + colangiografía in- la PA solitaria”, definido como aquella PA abandonada
traoperatoria + CPRE posoperatoria. en una sala sin vigilancia posterior. Para ello disponemos
de tratamientos protocolizados y multidisciplinarios que
3. Colecistectomía laparoscópica + colangiografía in-
aseguran la gestión y seguridad del paciente que ingresa al
traoperatoria + instrumentación biliar laparoscópica.
hospital con una PA.
La primera opción corre el riesgo de realizar 70% de Para finalizar, adjuntamos una tabla con un resumen y las
CPRE no terapéuticas, ya que al momento de realizarse recomendaciones (Tabla 3).

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Actualización en el manejo inicial de la pancreatitis aguda Martín Guidi y col.

Tabla 3. Resumen y recomendaciones.

Diagnóstico Requiere dos de los siguientes tres criterios: dolor abdominal característico, lipasa y/o amilasa plasmáticas > 3
veces su valor de referencia máximo, y/o evidencia radiológica de pancreatitis.

Etiología En nuestro país la etiología biliar es la causa más frecuente de PA, seguida por el consumo de alcohol.

Predictores de severidad Se sugieren como marcadores pronósticos el BISAP (que incluye SIRS) + uremia y hematocrito (al ingreso y a las
24 horas de un tratamiento de hidratación adecuado).

Manejo del dolor La analgesia es fundamental en el tratamiento de la PA. No existe una pauta analgésica de elección basada en la
evidencia. Los fármacos deben elegirse en función de la intensidad del dolor, desde los analgésicos no opiáceos
hasta los opiáceos.

Hidratación Realizar hidratación con cristaloides dentro de las primeras 24 horas, monitoreando la respuesta con parámetros
clínicos y bioquímicos.

Rol de las imágenes La TC está indicada en las primeras 72 horas, ante un paciente que presente deterioro clínico significativo o
signos de sepsis que hagan sospechar infección de una colección necrótica aguda.

Uso racional de antibióticos No se recomienda el uso de profilaxis antibiótica en la PA.

Nutrición en PA Iniciar alimentación temprana (24-48 horas) por vía oral, sólida baja en grasa. En el caso de no poder iniciar (3°-
4° d) se recomienda iniciar SN (NE).
NP: cuando no es tolerada la NE, no se cubran requerimientos nutricionales o el íleo es prolongado.

CPRE en PA PA leve: no está indicada la CPRE.


PA con colangitis: indicación de CPRE precoz.
PA severa: estaría indicada la CPRE ante signos de empeoramiento clínico asociados a obstrucción biliar
sostenida.

Timing de la colecistectomía en PA En la PA severa la colecistectomía debe diferirse hasta la resolución del cuadro inflamatorio local y sistémico.
En las PA no severas, la colecistectomía debe realizarse precozmente para evitar la recurrencia de un ataque.

Referencias 6. Foitzik T, Klar E. (Non-)compliance with guidelines for the ma-


1. D Yadav. The epidemiology of pancreatitis and pancreatic can- nagement of severe acute pancreatitis among German surgeons.
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Acta Gastroenterol Latinoam 2019;49(4):307-323 319


43 Pancreatitis crónica
y sus complicaciones
J. Enrique Domínguez
Servicio de Aparato Digestivo. Hospital Clínico Universitario de Santiago

Concepto OBJETIVOS DE ESTE CAPÍTULO


La pancreatitis crónica se define como una enfer- ❱❱ Conocer la patogenia y los factores de
medad inflamatoria crónica del páncreas, con fi- riesgo involucrados en el desarrollo de la
brosis del parénquima y pérdida de tejido funcio- pancreatitis crónica.
nal que comporta en fases avanzadas insuficiencia
❱❱ Describir las características clínicas de la
exocrina y endocrina de la glándula. Clásicamente
pancreatitis crónica y los procedimientos
se considera la pancreatitis crónica como una le-
disponibles para su diagnóstico.
sión irreversible, que persiste e incluso progresa
a pesar de eliminar el factor etiológico primario. ❱❱ Facilitar guías para un enfoque terapéutico
No obstante, el conocimiento más profundo de la de los pacientes con pancreatitis crónica y
enfermedad, sobre todo de sus distintas etiologías, sus complicaciones.
obliga a aceptar la posibilidad de reversibilidad del
proceso en determinados casos, con la aplicación REFERENCIAS CLAVE
de las medidas terapéuticas oportunas. El ejemplo
1. Domínguez Muñoz JE. Diagnosis of chronic
más claro en este sentido lo constituye la pancreati-
pancreatitis: Functional testing. Best Pract
tis crónica autoinmune, cuyas lesiones pueden me-
Res Clin Gastroenterol 2010.
jorar e incluso desaparecer con el tratamiento es-
teroideo, y la pancreatitis crónica obstructiva, que 2. Domínguez Muñoz JE. Chronic pancreatitis
puede mejorar tras el tratamiento de la obstrucción and persistent steatorrhea: What is the
del conducto pancreático. correct dose of enzymes? Clin Gastroente-
rol Hepatol 2011;9:541-6.
Desde el punto de vista histológico, la pancreatitis
3. LaRusch J, Whitcomb DC. Genetics of
crónica está definida por la presencia de un infiltra-
pancreatitis. Curr Opin Gastroenterol
do inflamatorio crónico, fibrosis del parénquima y
2011;27:467-74.
pérdida progresiva de tejido exocrino, con relativa
preservación de islotes de Langerhans y del epitelio 4. Braganza JM, Lee SH, McCloy RF, Mc-
ductal. La aparición de calcificaciones y atrofia glan- Mahon MJ. Chronic pancreatitis. Lancet
dular constituye el estadio final de la enfermedad. 2011;377:1184-97.

Epidemiología
La pancreatitis crónica puede permanecer asin- que sujetos que ingieren cantidades socialmente
tomática durante años, por lo que basar su diag- aceptadas de alcohol pueden igualmente pade-
nóstico en síntomas sugestivos conlleva inexora- cer la enfermedad. A todas estas dificultades hay
blemente un infradiagnóstico de la enfermedad. que añadir la escasa sensibilidad de los métodos
Aunque el abuso de alcohol sigue siendo la causa diagnósticos no invasivos, tanto funcionales como
más frecuente, cerca de la mitad de los pacientes de imagen, que limitan la relevancia de cualquier
diagnosticados presentan una etiología distinta al resultado epidemiológico poblacional. Todos estos
alcohol1. Debe conocerse, por otra parte, que la factores condicionan en gran medida la exactitud
susceptibilidad del páncreas al alcohol muestra una de los datos publicados. En España, por ejemplo,
importante variabilidad interindividual, de forma la incidencia de pancreatitis crónica alcanza cifras

P Á N C R E A S Y V Í A S B I L I A R E S 645
Sección 5. Páncreas y vías biliares

de 14 nuevos casos por 100.000 habitantes y año cohol es probablemente multifactorial, inclu-
y una prevalencia de unos 18 casos por 100.000 yendo fenómenos de hipertensión intraductal,
habitantes. Sin embargo, estudios en autopsias disminución del flujo sanguíneo pancreático,
demuestran la presencia de pancreatitis crónica estrés oxidativo, toxicidad directa sobre la célu-
en más del 70% de sujetos alcohólicos que fallecen la acinar, cambios en la síntesis proteica, incre-
por causas no relacionadas con el alcoholismo. Al mento de la respuesta inflamatoria, y/o estimu-
lación de la fibrogénesis pancreática.
ser una enfermedad incurable, la prevalencia de la
pancreatitis crónica, depende de la incidencia de la ❱ Distintas taciones gen cas se han relacio-
enfermedad y de la supervivencia de los pacientes. nado con la activación intracelular del tripsinó-
Estudios publicados demuestran una supervivencia geno (PRSS1), que es causa de pancreatitis he-
media desde el momento de diagnóstico de entre reditaria, con la disminución de la capacidad de
12 y 20 años. Aceptando la incidencia de 14 nuevos inactivación de tripsina intracelular (SPINK1) y
casos por 100.000 habitantes y año, aunque muy con la alteración de la secreción de bicarbonato
(C TR), que predisponen al desarrollo de pan-
probablemente está infravalorada en función de
creatitis crónica3.
los datos expuestos más arriba, y una superviven-
cia media de 16 años, la prevalencia real de la en- ❱ En la actualidad se reconocen dos tipos de pan-
fermedad es superior a los 200 casos por 100.000 c ea s a toin ne. El tipo 1 se asocia a afec-
habitantes. tación autoinmune de otros órganos (colangitis
esclerosante, enfermedad inflamatoria intesti-
nal, etc.) y elevación de los niveles séricos o ti-
Clasificación etiopatogénica sulares de IgG4; por el contrario, el tipo 2 afecta
Se conocen distintos factores predisponentes para exclusivamente al páncreas y presenta niveles
el desarrollo de pancreatitis crónica. Según la clasi- séricos de IgG4 normales4. El reconocimiento
ficación actual TIGAR-O, éstos pueden ser divididos de esta etiología autoinmune es de suma im-
en tóxico-metabólicos, idiopáticos, genéticos, au- portancia por su buena respuesta al tratamien-
toinmunes, pancreatitis aguda grave y recurrente y to esteroideo.
obstructivos (tabla 1)2. El avance producido en los ❱ Los cambios de reparación producidos tras un
últimos años en el conocimiento etiopatogénico de episodio de anc ea s ag a g a e o tras
la pancreatitis crónica hace que progresivamente episodios de pancreatitis aguda recidivante
vayan disminuyendo los casos alcohólicos e idio- pueden conducir a la aparición de fibrosis pan-
páticos, mientras aumentan básicamente los casos creática, fenómenos obstructivos y de atrofia
autoinmunes y, sobre todo, aquellos relacionados glandular, factores que determinan la progre-
con mutaciones genéticas1: sión hacia pancreatitis crónica.
❱ En los países industrializados, el alcohol es la ❱ Por último, cualquier o st cción e con cto
causa del 50-70% de los casos de pancreatitis anc e co puede favorecer el desarrollo de
crónica. El daño pancreático inducido por al- atrofia glandular en los segmentos proximales.

TABLA 1. Clasificación etiológica TIGAR-O de la Manifestaciones clínicas


pancreatitis crónica El diagnóstico de la pancreatitis crónica se ve li-
mitado porque el índice de sospecha clínica en
ausencia de alcoholismo crónico suele ser bajo.
❱ Tóxico-metabólica. Los síntomas y signos de pancreatitis crónica son
Alcohol, tabaco. inespecíficos. La edad de presentación clínica está
Hipercalcemia, insuficiencia renal crónica. en relación con la etiología de la enfermedad. En
la pancreatitis crónica alcohólica los síntomas apa-
❱ Idiopática.
recen frecuentemente entre la tercera y la quinta
❱ Genética. década de la vida. Las formas hereditarias, sin em-
Mutaciones del PRSS1, SPINK1, C TR. bargo, suelen debutar en las primeras dos décadas
❱ Autoinmune. de la vida, en forma de episodios de pancreatitis
aguda recidivante. Las formas idiopáticas y otras
❱ Recidivante. formas pueden debutar en edades más tardías.
Pancreatitis aguda grave o recidivante.
❱ El o o abdominal es el síntoma más frecuen-
❱ Obstructiva. te. Habitualmente se localiza en epigastrio y
frecuentemente irradia a la espalda o al hipo-

646
43. Pancreatitis crónica y sus complicaciones

condrio izquierdo. Es muy frecuente que el do- mellitus en un sujeto en la sexta década de la
lor no guarde una clara relación con la ingesta. vida.
Ello obedece a que la causa más frecuente de
❱ La pancreatitis crónica se asocia a alteracio-
dolor es la infiltración inflamatoria de los ner-
nes de la motilidad gastrointestinal que son la
vios intrapancreáticos. Cuando el dolor es de
causa de s nto as is cos, de predominio
predominio postprandial, debe sospecharse un
postprandial. Son frecuentes la hinchazón ab-
proceso obstructivo ductal pancreático. El dolor dominal y el meteorismo por sobrecrecimiento
secundario a pancreatitis crónica puede ser más bacteriano, así como la pesadez postprandial.
o menos continuo, pero frecuentemente apare- Estos síntomas dispépticos tipo dismotilidad
ce de forma recidivante, con ausencia de dolor pueden constituir la única manifestación clínica
entre las crisis. La pancreatitis crónica supone de una pancreatitis crónica.
hasta el 3% de los pacientes con dispepsia no
investigada y la cuarta parte de los pacientes ❱ La i a e eso es una manifestación muy
diagnosticados de dispepsia funcional tipo sín- tardía de la pancreatitis crónica y su origen es
drome de dolor epigástrico, lo que da una idea multifactorial, pudiendo estar involucrada una
de su elevada prevalencia real5. Ocasionalmen- reducción de la ingesta condicionada por las
te, la primera manifestación clínica de una pan- molestias abdominales postprandiales, la mal-
creatitis crónica es un episodio de pancreatitis digestion secundaria a insuficiencia pancreática
aguda. Contrariamente a lo que ocurre en la exocrina y el alcoholismo crónico.
pancreatitis crónica de inicio precoz, en la de
comienzo tardío, el dolor es poco frecuente y de
intensidad menos relevante.
Métodos diagnósticos
Las dificultades clásicas asociadas a la toma de
❱ La presencia de diarrea crónica con esteatorrea biopsias del páncreas han limitado el papel de la
es una manifestación tardía de la enfermedad, histología en el diagnóstico de la pancreatitis cró-
y requiere de la pérdida de más de un 90% de nica. Aunque el advenimiento y desarrollo de la
la función exocrina pancreática. Sin embargo, ecografía endoscópica y la punción guiada por la
y debido al retraso diagnóstico de muchos pa- misma pueden y deben cambiar esta situación en
cientes, hasta un tercio de los casos presentan un futuro, el diagnóstico de la pancreatitis crónica
insuficiencia pancreática exocrina en el momen- sigue basándose en la demostración de los cambios
to del diagnóstico de la enfermedad. La pérdi- morfológicos y/o funcionales que son consecuencia
da de la función exocrina se produce de forma de las lesiones histológicas.
progresiva, a lo largo de muchos años. Esto hace
que el paciente con pancreatitis crónica adap- Pruebas de imagen
te progresivamente su dieta, a menudo de un
modo inconsciente, evitando comidas ricas en La pancreatitis crónica determina la aparición de
grasa, lo que justifica la ausencia de diarrea en lesiones histopatológicas de curso progresivo que
muchos casos. De hecho, no es inhabitual en- condicionan alteraciones tanto ductales, como pa-
contrar pacientes con insuficiencia pancreática renquimatosas. Las primeras pueden detectarse
exocrina y estreñimiento. Es interesante reseñar por colangiopancreatografía retrógrada endoscópi-
que alrededor del 6% de los pacientes diagnos- ca (CPRE), colangiopancreatografía por resonancia
ticados de síndrome de intestino irritable con magnética (CPRM) o ultrasonografía endoscópi-
predominio de diarrea presentan en realidad ca (USE). Las segundas pueden demostrarse por
pancreatitis crónica con insuficiencia pancreáti- USE, tomografía computarizada (TC) o resonancia
ca exocrina y, de hecho, el tratamiento enzimá- nuclear magnética (RNM). Tanto unas como otras
tico sustitutivo se asocia a la desaparición de los pueden definirse de acuerdo con la clasificación de
síntomas6. Cambridge (tabla 2). En la actualidad se considera
la USE como el método más sensible y eficaz para
❱ La insuficiencia pancreática endocrina se ma- el diagnóstico de pancreatitis crónica mediante la
nifiesta en forma de hiperglucemia y diabetes valoración de los criterios que se muestran en la
mellitus insulinodependiente. Este hallazgo es, tabla 37. La CPRM con secretina (sCPRM) asociada
lógicamente, poco específico de pancreatitis a la RNM con gadolinio ofrecen una eficacia diag-
crónica, pero cualquier diabetes de difícil con- nóstica similar a la USE. La decisión de realizar USE
trol, con tendencia a la hipoglucemia, debe ha- o sCPRM RNM en pacientes con sospecha de pan-
cer sospechar la presencia de esta enfermedad. creatitis crónica depende básicamente de la dispo-
No es infrecuente que una pancreatitis crónica nibilidad de estas técnicas en los diferentes ámbitos
idiopática de inicio tardío debute como diabetes y de la experiencia del explorador en la evaluación

647
Sección 5. Páncreas y vías biliares

pancreática. La TC muestra una sensibilidad clara- los estudios de eficacia diagnóstica en pancreatitis
mente inferior a la USE y a la sCPRM/RNM en casos crónica siempre están limitados por la ausencia de
no avanzados de la enfermedad, mientras que la un patrón oro aceptado, la presencia de 3 o más
CPRE en la actualidad ha perdido en gran medida criterios ecoendoscópicos de pancreatitis crónica
su papel diagnóstico. Tanto la ecografía abdominal es muy sugestiva de la presencia de esta enferme-
como la radiografía simple de abdomen muestran dad, con una especificidad que aumenta progresi-
una sensibilidad muy baja para el diagnóstico de vamente a medida que se incrementa el número
pancreatitis crónica, limitándose prácticamente a de criterios8. De hecho, el diagnóstico es altamente
los casos avanzados de calcificaciones pancreáticas. probable en casos con 5 o más criterios, mientras
que es dudoso en casos con 3-4 criterios. Además,
A D A A
los estudios que emplean la histología como patrón
La USE permite el estudio con alta definición tan- oro demuestran que la pancreatitis crónica en es-
to del parénquima pancreático como del conduc- tadios iniciales puede presentarse con menos de
to principal y sus colaterales7. Su sensibilidad es 3 criterios ecoendoscópicos de la enfermedad. Más
muy alta para la detección de cambios precoces recientemente, y con el fin de optimizar la eficacia
de pancreatitis crónica. Una ventaja adicional es diagnóstica de esta técnica, un grupo de expertos
la posibilidad de llevar a cabo una punción guiada ha dividido los criterios ecoendoscópicos en ma-
del parénquima pancreático para su estudio histo- yores y menores en la denominada clasificación
patológico. Los criterios ecoendoscópicos de pan- de Rosemont (tabla 3)7. No obstante esta clasifica-
creatitis crónica se resumen en la tabla 3. Aunque ción no ha sido todavía adecuadamente validada.

TABLA 2. Criterios para el diagnóstico morfológico de la pancreatitis crónica mediante CPRE o sCPRM (criterios ductales)
y TC o RNM (criterios parenquimatosos)
Criterios ductales Criterios parenquimatosos

Cambios equívocos CPP normal y < 3 ramas colaterales Ligero aumento del tamaño
anormales glandular
Cambios leves CPP normal y > 3 ramas colaterales Ligero aumento del tamaño
anormales glandular y parénquima
heterogéneo
Cambios moderados CPP irregular y/o ligeramente dilatado Contorno glandular irregular, y/o
quistes 10mm, y/o pancreatitis
focal
Cambios graves CPP marcadamente irregular Calcificaciones, y/o quistes
y dilatado, y/o calcificaciones intraductales 10 mm, y/o afectación de
órganos vecinos

CPRE colangiopancreatografía retrógrada endoscópica; sCPRM colangiopancreatografía por resonancia magné-


tica tras inyección iv de secretina; TC tomografía computarizada; RNM resonancia nuclear magnética;
CPP conducto pancreático principal.

TABLA 3. Criterios ecoendoscópicos de pancreatitis crónica

Criterios parenquimatosos Criterios ductales

Puntos hiperecogénicos con sombra acústica Cálculos en conducto pancreático principal


Lobularidad con o sin patrón en panal de abeja Contorno irregular del conducto pancreático principal
Puntos hiperecogénicos sin sombra acústica Dilatación de ramas colaterales
uistes Dilatación del conducto pancreático principal
Bandas hiperecogénicas Márgenes hiperecogénicos del conducto pancreático
principal

648
43. Pancreatitis crónica y sus complicaciones

tre el 83-100% en la detección de dilatación duc-


tal, el 70-92% en la identificación de estenosis, y el
92-100% en la detección de defectos de repleción
intraductal, según las series. La sensibilidad de la
sCPRM en el diagnóstico de pancreatitis crónica es
cercana al 90%, con un valor predictivo negativo de
A B enfermedad de hasta de un 98%. La sCPRM permi-
te, por último, disponer de información indirecta
sobre la capacidad funcional del páncreas exocrino
mediante la evaluación del volumen de secreción.
Otras ventajas de la sCPRM frente a la CPRE son el
hecho de ser una prueba no invasiva y, por tanto, no
asociada a la morbilidad de aquélla y su capacidad
C D para evaluar los segmentos proximales a una obs-
trucción total del conducto pancreático.

Figura 1. Hallazgos ecoendoscópicos de pancreatitis crónica. Las alteraciones parenquimatosas que caracterizan
A) Lobularidad del parénquima pancreático. B) Puntos y a la pancreatitis crónica se muestran en la tabla 2.
bandas hiperecogénicas. C) Calcificaciones pancreáticas. El papel de la TC en el diagnóstico de pancreatitis
D) Pseudoquiste. crónica es muy limitado. Su utilidad en la práctica
clínica se centra básicamente en la detección de las
complicaciones de la enfermedad. La eficacia de la
AA ADA A RNM es muy similar a la de la TC pero, sin embargo,
AD A permite evaluar el grado de fibrosis parenquimato-
Las alteraciones ductales que definen la presencia sa a través del estudio dinámico de la intensidad
de pancreatitis crónica se resumen en la tabla 2. de señal pancreática tras la inyección intravenosa
La eficacia de la CPRM para el estudio del sistema de gadolinio. Una relación de intensidad de señal
ductal pancreático es muy elevada. No obstante, es pancreática tras gadolinio vs basal inferior a 1,7 en
imprescindible el estudio pancreático basal y tras la fase arterial, y/o un pico retrasado de realce tras
inyección intravenosa de secretina para obtener la inyección de gadolinio presenta una sensibilidad
unas cifras de sensibilidad diagnóstica adecuadas9. cercana al 80% y una especificidad del 75% en el
Sin el empleo de secretina, el valor de la CPRM es diagnóstico de pancreatitis crónica precoz, com-
claramente inferior a la de otras técnicas de ima- parado con una sensibilidad del 50% obtenida me-
gen para el estudio del sistema ductal pancreático diante el análisis de las alteraciones morfológicas
y su uso no es recomendable. Teniendo esto en del parénquima pancreático9. Estas características,
cuenta, la concordancia entre la CPRE y la sCPRM junto a la posibilidad de realizar la sCPRM en la
en el diagnóstico de pancreatitis crónica oscila en- misma sesión, hacen de la RNM un método óptimo

Figura 2.Colangiopancreatografía por resonancia magnética


tras inyección de secretina en un paciente con pancreatitis Figura 3.Resonancia nuclear magnética con gadolinio de un
crónica. Irregularidad del conducto pancreático principal con paciente con pancreatitis crónica. Relación intensidad máxi-
dilatación de colaterales y presencia de un pequeño cálculo ma de contraste vs basal menor a 1,7. Máximo realce del
prepapilar (flecha). parénquima pancreático obtenido en fase venosa tardía.

649
Sección 5. Páncreas y vías biliares

para el diagnóstico por imagen de pancreatitis cró- co (cuantificación de la concentración de bicarbo-


nica, claramente superior a la TC. nato tras inyección de secretina) durante la realiza-
ción de una ecoendoscopia en casos en los que los
Pruebas de función pancreática hallazgos ecoendoscópicos no sean concluyentes.
Las pruebas que permiten evaluar la función exocri- D A A A
na del páncreas incluyen básicamente métodos que A A D
requieren intubación duodenal, métodos orales y
La cuantificación de grasa fecal (test clásico de
métodos en heces (tabla 4). La eficacia diagnóstica
Van de Kamer) sigue siendo el patrón oro para el
de estas pruebas es muy variable, lo que obliga a
diagnóstico de insuficiencia pancreática exocrina
una elección adecuada de las mismas en función
con maldigestión grasa. Se basa en el cálculo del
de su indicación. El diagnóstico funcional de la pan-
coeficiente de absorción grasa mediante el conoci-
creatitis crónica en fases iniciales solo es posible
miento de la grasa ingerida y excretada durante 72
mediante los métodos de intubación duodenal. Por
horas consecutivas. Este método tiene importantes
el contrario, otras pruebas como la cuantificación
inconvenientes tanto para el paciente (dieta es-
de grasa fecal y el test del aliento con 13C-triglicé-
tricta con una cantidad concreta de grasa durante
ridos mixtos son de elección para el diagnóstico de
5 días y recolección de la cantidad total de heces
insuficiencia pancreática exocrina con maldigestión
excretadas durante los últimos 3 días) como para
grasa en pacientes previamente diagnosticados de
el personal de laboratorio (trabajo con un volumen
pancreatitis crónica. Entre ambos extremos se sitúa
elevado de heces). Este hecho, unido al desarrollo
el test de elastasa fecal, cuya utilidad se centra en
del test de aliento con 13C-MTG, hace de la cuantifi-
el diagnóstico de pacientes con pancreatitis crónica
cación de grasa fecal un test poco adecuado para la
moderada o grave.
práctica clínica diaria.
D A D D A El objetivo del test de aliento con 13C-MTG es el
Se basan en la cuantificación de la secreción pan- diagnóstico de insuficiencia pancreática exocrina
creática de enzimas y/o bicarbonato en muestras con maldigestión grasa como alternativa al test de
de jugo duodenal obtenidas mediante intubación cuantificación fecal de grasa en pacientes con pan-
duodenal durante la estimulación submáxima del creatitis crónica conocida. Tras la administración
páncreas con secretina y/o CCK o ceruleína. El test de una comida de prueba con 13C-MTG se evalúa
clásico de secretina-CCK es el más eficaz para el mediante espectrometría de masas o infrarrojos el
diagnóstico de pancreatitis crónica, con cifras de porcentaje de 13CO2 recuperado en aire espirado,
sensibilidad y especificidad que alcanzan el 95%10. que es proporcional a la cantidad de grasa digerida
No obstante, este test tiene los inconvenientes de (normal 29% a las 6 horas)10. Este test, que permi-
su invasividad (requiere de la colocación de una te reemplazar a la cuantificación de grasa fecal en
sonda nasoduodenal), complejidad, elevado coste la práctica clínica, es muy eficaz en el diagnóstico
y falta de estandarización, por lo que su empleo de maldigestion grasa, así como en el control de la
queda reducido a unidades especializadas en en- eficacia del tratamiento enzimático sustitutivo.
fermedades del páncreas. Más recientemente ha
sido desarrollado el test endoscópico de función
pancreática que, a diferencia del test clásico, obtie- Dentro de la cuantificación de enzimas pancreáticas
ne el jugo pancreático mediante la aspiración del en una muestra aislada de heces, la quimotripsina
contenido duodenal tras la inyección de secretina fecal se ha visto claramente superada por la cuan-
en el curso de una endoscopia digestiva alta10. El tificación de elastasa fecal. La elastasa es más sen-
futuro del diagnóstico funcional de la pancreatitis sible y específica que la quimotripsina y es un buen
crónica pasa probablemente por el test endoscópi- test de cribado de pancreatitis crónica en pacientes

TABLA 4. Test de función pancreática con aplicabilidad clínica actual

Test de intubación duodenal Test orales Test en heces

Test de secretina-CCK Test de aliento con 13C-MTG Cuantificación de grasa fecal (C A)


Test endoscópico Elastasa fecal
uimotripsina fecal
MTG triglicéridos mixtos; C A coeficiente de absorción grasa.

650
43. Pancreatitis crónica y sus complicaciones

con sospecha clínica de esta enfermedad. El test de pérdida de peso. Todas estas circunstancias obligan
elastasa fecal es muy simple y fácilmente aplica- a descartar patología pancreática (pancreatitis cró-
ble a la práctica clínica. Los pacientes con cambios nica o cáncer de páncreas). Un elevado nivel de sos-
moderados o graves de pancreatitis crónica tienen pecha debe tenerse igualmente en pacientes con
típicamente una concentración fecal de elastasa in- enfermedades asociadas de origen autoinmune.
ferior a 200 g/g10. La cuantificación de la actividad
de quimotripsina fecal muestra una baja eficacia En caso de sospecha elevada, el primer méto-
en el diagnóstico de pancreatitis crónica. Su uso ha do diagnóstico a aplicar es la ecoendoscopia o la
quedado relegado al control del cumplimiento tera- sCPRM/RNM. En el resto de casos con sospecha
péutico con suplementos pancreáticos. clínica de pancreatitis crónica es adecuado comen-
zar el estudio con una ecografía abdominal y la
cuantificación de elastasa fecal. La sensibilidad de
Diagnóstico de pancreatitis crónica la ecografía abdominal para el diagnóstico de pan-
en la práctica clínica (figura 4) creatitis crónica es muy baja, pero la demostración
de calcificaciones y/o marcada dilatación del Wir-
La clave diagnóstica en pancreatitis crónica es una sung es altamente específica de la enfermedad. La
adecuada sospecha clínica. La situación de menor elastasa fecal debe ser utilizada en asociación a la
dificultad la constituye el paciente con pancreati-
ecografía abdominal. Si la sospecha clínica persiste
tis aguda recidivante o de una pancreatitis aguda
y la ecografía abdominal es normal, debe realizar-
alcohólica o idiopática, dado que todas estas con-
se una USE o, como alternativa, la sCPRM RNM
diciones requieren de una exploración adecuada
en función de la disponibilidad y de la experiencia
del páncreas. La presencia de dolor epigástrico que
no cede con inhibidores de la bomba de protones o local. La normalidad de estas pruebas permite des-
que se irradia a la espalda, o incluso de un dolor de cartar la presencia de enfermedad pancreática. La
espalda (dorsal bajo o lumbar alto) sin patología os- realización de USE o sCPRM RNM es igualmente
teoarticular o renal que lo justifique, obligan a sos- necesaria en pacientes diagnosticados de pancrea-
pechar enfermedad pancreática. Lo mismo ocurre titis crónica mediante ecografía y/o test de función
con el paciente que refiere una historia de into- para una adecuada caracterización y estadificación
lerancia a las comidas grasas, la aparición de una de la enfermedad. Tras el diagnóstico, es necesaria
diabetes mellitus de difícil control con tendencia la realización de un test de aliento con 13C-MTG o
a la hipoglucemia (en este caso es imprescindible cuantificación de grasa fecal para detectar insufi-
descartar un cáncer de páncreas), o la presencia de ciencia pancreática exocrina y, en su caso, estable-
episodios de diarrea crónica o de repetición, espe- cer la indicación de tratamiento enzimático susti-
cialmente si se asocian a la ingesta de grasa o de tutivo.

Sospecha clínica de
pancreatitis crónica

Ecoendoscopia Ecografía abdominal


o sCPRM/RNM elastasa fecal

Diagnóstico de Estudios normales, persiste Diagnóstico distinto a


pancreatitis crónica sospecha clínica pancreatitis crónica

Descartar insuficiencia
Diagnóstico
pancreática exocrina
etiológico
y endocrina

Figura 4. Algoritmo diagnóstico de pancreatitis crónica en la práctica clínica.

651
Sección 5. Páncreas y vías biliares

De suma importancia es realizar un diagnóstico puesta clínica, mediante la resección quirúrgica


etiológico, ya que el enfoque terapéutico depende de la misma.
en gran medida del mismo. El estudio debe de in-
cluir una adecuada anamnesis (consumo de alcohol ❱ i e tensión int a cta e int a anc e ca
y tabaco, enfermedades asociadas, antecedentes el dolor secundario a hipertensión intrapan-
de enfermedades pancreáticas y autoinmunes), creática presenta típicamente un predominio
estudios apropiados de imagen del páncreas y, en postprandial. En estos casos, el tratamiento
determinados casos, la realización de estudios de debe ir dirigido a reducir la secreción postpran-
inmunidad y genéticos. dial pancreática. La administración de derivados
de somatostatina, el tratamiento endoscópi-
co de obstrucciones del conducto pancreático
Enfoque terapéutico principal, o las intervenciones de derivación
El tratamiento de la pancreatitis crónica incluye quirúrgica del conducto pancreático constitu-
tres aspectos primordiales: identificar y corregir la yen el armamentario terapéutico global en este
causa de la enfermedad, controlar sus manifesta- escenario. El tratamiento de elección lo consti-
ciones clínicas (dolor, maldigestion y diabetes melli- tuye el drenaje quirúrgico (pancreaticoyeyunos-
tus) y tratar las complicaciones (ver más adelante). tomía laterolateral), que consigue una mayor
eficacia analgésica y calidad de vida que el dre-
Respecto al tratamiento etiológico, resulta obligada naje endoscópico11. No obstante, la respuesta
la abstinencia absoluta de alcohol y de tabaco en analgésica al drenaje endoscópico mediante la
todos los casos independientemente de la etiología colocación de un stent plástico puede permitir
de la enfermedad. El tratamiento con corticoides predecir la respuesta a la derivación quirúrgica,
es de elección en pancreatitis crónica de etiología
por lo que puede ser empleado como técnica
autoinmune, mientras que el tratamiento endoscó-
inicial para una mejor selección del paciente
pico o quirúrgico de un proceso obstructivo ductal
candidato a la cirugía.
está indicado en pancreatitis obstructiva. En ambos
casos, es posible la reversibilidad o mejoría de la ❱ o icaciones pseudoquistes pancreáticos cró-
lesión pancreática. nicos, obstrucción del colédoco intrapancreático
Tratamiento del dolor o de segmentos duodenales pueden causar dolor
abdominal en pacientes con pancreatitis crónica.
Existen cuatro causas básicas de dolor abdominal Aunque el papel de estas complicaciones en la
en pancreatitis crónica. Cada una de ellas puede patogenia del dolor en estos pacientes es discu-
tener un enfoque terapéutico diferente: tible, su presencia requiere en todo caso de un
❱ n a ación ag a e nc eas estos pacien- tratamiento adecuado.
tes presentan episodios recidivantes de reagu- El primer paso en el tratamiento del dolor en pan-
dización de la pancreatitis crónica, hallándose creatitis crónica lo constituye siempre la a s nen-
frecuentemente asintomáticos entre los epi- cia a so ta e e i as a co ó icas ta aco. Esta
sodios. Clínicamente los episodios de reagudi- medida consigue eliminar el dolor incluso en más
zación se comportan como pancreatitis aguda, de un 50% de los pacientes. Una dieta pobre en gra-
habitualmente leve y, por tanto, el tratamiento
sas con el fin de reducir la estimulación postpran-
del dolor en estas circunstancias es similar al del
dial de la secreción pancreática solo tiene sentido
proceso agudo. Algunos autores recomiendan
en pacientes con dolor de predominio postpran-
el tratamiento con antioxidantes de manteni-
miento en un intento de disminuir la frecuen- dial en los que, en cualquier caso, el tratamiento
cia de las reagudizaciones, aunque la evidencia de descompresión endoscópica o quirúrgica es de
científica al respecto es muy limitada. elección.

❱ nfi t ación in a ato ia e as te inaciones La administración mantenida de an o i antes (se-


ne iosas int a anc e cas: la inflamación lenio 600 mg/día vitamina C 540 mg/día b-caro-
neural y perineural es una constante en pan- teno 9.000 U/día vitamina E 270 U/día metioni-
creatitis crónica y probablemente la causa más na 2 g/día) es recomendable en todo paciente con
relevante y frecuente de dolor en estos pacien- pancreatitis crónica, no solo por su efecto positivo
tes. En estos casos la administración de analgé- sobre el dolor, sino también en un intento de frenar
sicos es la base del tratamiento. La presencia la progresión del proceso inflamatorio. La eviden-
de una masa inflamatoria, habitualmente de cia científica sobre el papel de los antioxidantes en
cabeza de páncreas, causante de dolor, puede la progresión de la enfermedad es, sin embargo,
ser tratada adecuadamente, con una buena res- inexistente.

652
43. Pancreatitis crónica y sus complicaciones

El tratamiento analgésico se realiza siguiendo el El tratamiento quirúrgico mediante resección de


protocolo habitual escalonado: 1) analgésicos no una masa inflamatoria de páncreas y/o el drenaje
opioides, 2) asociación de analgésicos no opioides del conducto pancreático principal mediante pan-
con un opioide suave (p. ej.: tramadol), 3) opioides creaticoyeyunostomía latero-lateral es muy efecti-
potentes (p. ej.: morfina, buprenorfina, parches de vo en el alivio del dolor secundario a pancreatitis
fentanilo) (tabla 5). Paracetamol y metamizol son crónica (figura 5)13. No obstante, su eficacia dis-
los fármacos de elección en el tratamiento inicial minuye a largo plazo, por lo que nuevamente es
del dolor por pancreatitis crónica. En determinados fundamental una buena selección, tanto del can-
casos en los que se sospecha un importante com- didato quirúrgico como de la técnica a realizar. En
ponente inflamatorio, puede ser de utilidad asociar este sentido, la adecuada respuesta analgésica a la
un antiinflamatorio no esteroideo a los analgésicos descompresión endoscópica es un buen factor pre-
anteriores. La evidencia científica actual permite dictivo de respuesta a la descompresión quirúrgica.
recomendar el uso de analgésicos habitualmente
empleados en el tratamiento del dolor neuropáti- Por último, señalar como alternativa temporal
co (pregabalina) en pacientes con respuesta insu- el o eo e e o ce iaco mediante inyección
ficiente al tratamiento analgésico inicial y antes de percutánea o guiada por ecoendoscopia de cor-
prescribir un fármaco opioide12. ticoides básicamente en pacientes con adicción
La inhibición de la secreción pancreática mediante a los opiáceos, en un intento de suspender dicho
altas dosis de en i as anc e cas puede ser de uti- tratamiento. Algunos autores proponen el uso de
lidad en algunos pacientes con dolor de predominio a iote a ia a bajas dosis como tratamiento del
postprandial, pero su eficacia es, al menos, contro- dolor grave e intratable por los métodos anteriores
vertida. El uso de derivados de la so atosta na en en pacientes con pancreatitis crónica sin dilatación
el tratamiento del dolor en la pancreatitis crónica está ductal ni masa inflamatoria y, por tanto, sin clara
limitado a casos concretos, como prueba del papel indicación quirúrgica.
patogénico de la secreción pancreática en el origen
La figura 6 resume las distintas opciones terapéu-
del dolor. Ello ayuda a seleccionar pacientes para tra-
ticas para el tratamiento del dolor en pancreatitis
tamientos más invasivos, básicamente quirúrgicos.
crónica en función de su probable etiopatogenia.
Los casos de dolor secundario a obstrucción del
conducto pancreático principal por estenosis, pseu- Tratamiento de la insuficiencia
doquiste o cálculos, pueden beneficiarse del trata-
miento endoscópico de dichos procesos. La eficacia
pancreática exocrina
de estos procedimientos (esfinterotomía pancreáti- La insuficiencia pancreática exocrina define la si-
ca, dilatación con balón del Wirsung, colocación de tuación en la cual el páncreas no es capaz de man-
endoprótesis, extracción de cálculos, etc.) es con- tener su función digestiva normal. Por tanto, y por
trovertida y depende de una adecuada selección de definición, la insuficiencia pancreática exocrina
los pacientes11. se asocia a maldigestión y cualquier paciente con

TABLA 5. Analgésicos empleados para el tratamiento del dolor en pancreatitis crónica y su dosis

Tipo de fármaco Nombre Dosis habitual

Analgésicos no opioides Paracetamol 0,5-1 g/6-8 h


Metamizol 500 mg/6-8 h

Antiinflamatorios no esteroideos Diclofenaco 50-100 mg/8-12 h


Naproxeno 250-500 mg/12 h

Antiepilépticos Pregabalina 150-300 mg/12 h

Opioides de baja potencia Tramadol 50-100 mg/6-8 h

Opioides potentes entanilo 25-50 g/h (parche transdérmico)


Buprenorfina 35-52,5 g/h (parche transdérmico)
Morfina 5-10 mg/4-8 h

653
Sección 5. Páncreas y vías biliares

insuficiencia pancreática exocrina requiere trata- dilatación del conducto pancreático principal, se
miento enzimático sustitutivo independientemen- asocian muy frecuentemente a insuficiencia pan-
te de su modo de expresión clínica. La esteatorrea creática exocrina14.
clínicamente evidente no es frecuente en la pan-
creatitis crónica, ya que la reducción progresiva de El tratamiento de la insuficiencia pancreática exocri-
la función pancreática a lo largo de los años hace na se basa en la administración de preparados enzi-
que el paciente adapte su dieta limitando la ingesta máticos en minimicroesferas (con el fin de asegurar
de grasas, frecuentemente de manera inconscien- el vaciamiento gástrico de las enzimas en paralelo
te. Así, no es raro encontrar pacientes con maldi- con el de la comida), y con cubierta entérica con
gestion grasa y estreñimiento. La pérdida de peso el fin de evitar la inactivación de la lipasa mediada
como manifestación de insuficiencia pancreática por el ácido gástrico. Se recomienda la ingesta de
exocrina es un signo demasiado tardío. Es frecuen- estos preparados junto con las comidas principales.
te la presencia de datos bioquímicos de malnutri- La dosis inicial debe ser de 40.000-50.000 Eur.Ph.U.
ción, por maldigestion, en pacientes por otra parte de lipasa en cada comida y 20.000-25.000 Eur.Ph.U.
asintomáticos. Por ello, es importante descartar con la merienda15. Esta dosis es suficiente para nor-
la presencia de insuficiencia pancreática exocrina malizar la digestión en más de la mitad de los casos
mediante un test de aliento con 13C-MTG o cuanti- de insuficiencia pancreática exocrina secundaria a
ficación del coeficiente de absorción grasa en todo pancreatitis crónica16. En caso de respuesta insufi-
paciente diagnosticado de pancreatitis crónica13. ciente, demostrada bien por test de aliento o por
Como alternativa, una adecuada valoración nutri- la no normalización del estado nutricional, la aso-
cional antropométrica y bioquímica permite detec- ciación de un inhibidor de la bomba de protones
tar pacientes con un estado nutricional deficiente a dosis doble (antes de desayuno y cena) permite
y, por tanto, con alta probabilidad de insuficiencia normalizar la digestión grasa en la mayoría de los
pancreática exocrina. Del mismo modo, hallazgos pacientes, al elevar el pH en intestino proximal y
morfológicos compatibles con pancreatitis crónica así facilitar la liberación de la lipasa en los tramos
avanzada, como la presencia de calcificaciones y la proximales del intestino y evitar la precipitación de

A B

C D E

Figura 5. Intervención de Puestow. A) Puede apreciarse el Wirsung tortuosamente dilatado en un paciente con una pancrea-
titis crónica y dolor intratable (wirsungrafía preoperatoria). B) TC abdominal en la que se aprecia la dilatación del Wirsung.
C) Pancreatectomía longitudinal. D) Imagen del yeyuno con el que se va a realizar la anastomosis. E) Cierre de la anastomosis
pancreaticoyeyunal. Por cortesía de los Drs. Omedes y Ligorred.

654
43. Pancreatitis crónica y sus complicaciones

las sales biliares17. En caso de respuesta insuficien-


te debe incrementarse progresivamente la dosis de Abstinencia de alcohol y tabaco
enzimas hasta 80.000-100.000 Eur.Ph.U. en cada
comida (40.000-50.000 Eur.Ph.U. con la merienda), Antioxidantes
así como descartarse causas extrapancreáticas de
maldigestion, básicamente sobrecrecimiento bac- Probable origen
teriano. obstructivo

Las e i as iet cas, salvo la abstinencia alcohó- Descompresión – Analgésicos no


lica, juegan un papel secundario en el tratamiento endoscópica opioides/AINE
de la insuficiencia pancreática exocrina. Salvo en
pacientes con dolor de predominio postprandial, la
restricción de la grasa en la dieta no es necesaria.
Solo en los casos excepcionales de esteatorrea in- Descompresión
controlable mediante las medidas comentadas ante- quirúrgica
riormente se recomienda la sustitución de las grasas Pregabalina
de la dieta por triglicéridos de cadena media.

Tratamiento de la insuficiencia
pancreática endocrina Analgésicos
Aunque la insuficiencia pancreática endocrina se- opioides
cundaria a pancreatitis crónica debe ser tratada
por endocrinólogos, conviene conocer sus hechos
diferenciales con respecto a la diabetes mellitus
primaria. Básicamente, la diabetes secundaria a Resección
pancreatitis crónica se asocia a alteración de la sín-
quirúrgica
tesis y liberación tanto de insulina como del resto
de hormonas de los islotes de Langerhans, como el
glucagón. Por ello, estos pacientes presentan una
importante tendencia a los episodios de hipogluce-
Figura 6. Tratamiento del dolor abdominal secundario a pan-
mia, que dificultan el tratamiento insulínico.
creatitis crónica. El paso al siguiente escalón terapéutico está
justificado en caso de fracaso del tratamiento aplicado.
Complicaciones y su tratamiento (+) Descompresión endoscópica eficaz en términos de alivio
del dolor. (-) Descompresión endoscópica ineficaz en térmi-
Todo paciente diagnosticado de pancreatitis cró- nos de alivio del dolor.
nica debe ser sometido a revisiones periódicas.
Como norma general, un control analítico anual
incluyendo hemograma y bioquímica habitual, y menticia) o si se complica (infección, rotura, pseu-
una ecografía abdominal son suficientes junto con doaneurisma). El tamaño del pseudoquiste per se
la anamnesis y la exploración física para descartar no es indicación de tratamiento. Siempre que sea
complicaciones relevantes. Otras exploraciones posible, un pseudoquiste pancreático debe drenar-
más invasivas o costosas, como la ecografía endos- se endoscópicamente, bien a través de la papila, si
cópica, la sCPRM RNM o la TC deben reservarse a existe comunicación entre el quiste y el conducto
situaciones de duda diagnóstica o para planificar la pancreático, o mediante drenaje transgástrico o
terapéutica más adecuada en cada caso. Las com- transduodenal guiado por USE, en caso contrario.
plicaciones relevantes que deben ser descartadas El drenaje percutáneo o quirúrgico es la alternati-
en cada control, se muestran en la tabla 6. va en caso de fracaso o imposibilidad de drenaje
endoscópico. La erosión de una arteria por el quis-
Las complicaciones más frecuentes de la pancreati-
te con producción de un pseudoaneurisma es una
tis crónica incluyen los pseudoquistes pancreáticos
complicación grave. El tratamiento de elección en
y la estenosis del colédoco intrapancreático con
estos casos lo constituye la embolización del vaso
ictericia obstructiva secundaria. Hasta un tercio de
afecto guiada por radiología vascular.
los pacientes con pancreatitis crónica desarrollan
pseudoquistes, habitualmente únicos y frecuente- La progresión del proceso fibrótico del parénqui-
mente asintomáticos. Un pseudoquiste pancreáti- ma pancreático conlleva la estenosis del colédoco
co crónico debe tratarse solo en caso de producir intrapancreático en hasta la mitad de los casos de
síntomas (habitualmente dolor o intolerancia ali- pancreatitis crónica, y su tratamiento es quirúrgico.

655
Sección 5. Páncreas y vías biliares

En estos casos, el tratamiento de drenaje biliar en- TABLA 6. Complicaciones de la pancreatitis crónica
doscópico mediante la colocación de endoprótesis
solo puede considerarse como un tratamiento pro-
visional en aquellos casos en los que el tratamiento ❱ Pseudoquiste pancreático.
quirúrgico definitivo se retrase por cualquier mo- ❱ Absceso pancreático.
tivo.
❱ Estenosis biliar.
Otras complicaciones poco frecuentes (menos del ❱ Obstrucción duodenal.
5%) incluyen la trombosis de la vena esplénica o
trombosis portal, cuyo tratamiento es el de sus ❱ Cáncer de páncreas.
complicaciones (hemorragia digestiva alta por va- ❱ Trombosis de la vena esplénica y/o portal.
rices esofágicas o gástricas), la estenosis duodenal, ❱ Pseudoaneurisma.
cuyo tratamiento es quirúrgico, o el absceso pan-
❱ Enfermedades extrapancreáticas.
creático. No debe olvidarse que la pancreatitis cró-
nica supone un factor de riesgo para el desarrollo
de cáncer de páncreas, que alcanza hasta el 4% a
los 20 años tras el diagnóstico de la enfermedad18.
Por último, los pacientes con pancreatitis crónica 11. Cahen DL, Gouma DJ, Laramée P, Nio , Rauws
son frecuentemente bebedores y fumadores, por EA, Boermeester MA et al. Long-term Outcomes
lo que presentan el riesgo de las enfermedades ex- of Endoscopic Versus Surgical Drainage of the
trapancreáticas propias de estos hábitos. Pancreatic Duct in Patients With Chronic Pan-
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Clin Gastroenterol 2010.

656
8 Estreñimiento
Fermín Mearin, Agustín Balboa, Miguel A. Montoro
Instituto de Trastornos Funcionales y Motores Digestivos
Servicio de Aparato Digestivo. Centro Médico Teknon. Barcelona
Unidad de Gastroenterología del Hospital de San Jorge. Huesca

Introducción OBJETIVOS DE ESTE CAPÍTULO


El estreñimiento constituye un motivo muy fre- ❱❱ Describir los tipos de estreñimiento
cuente de consulta entre los pacientes que acu- y proporcionar las claves para una
den a centros de Atención Primaria. Aunque la evaluación diagnóstica coste-efectiva.
mayoría de estos enfermos pueden ser tratados
❱❱ Conocer los recursos terapéuticos
eficazmente por el médico de familia, algunos
disponibles para el tratamiento del
son derivados a servicios de Gastroenterología
estreñimiento crónico funcional y las
para recibir una atención especializada. Discer-
bases para un uso racional de los mismos.
nir qué tipo de pacientes será subsidiario de
pruebas complementarias específicas, es una ❱❱ Describir someramente las complicaciones
decisión importante que requiere de un juicio asociadas al estreñimiento y su
clínico bien ponderado. Éste debe de susten- pronóstico.
tarse en el conocimiento de las claves que pro-
porciona la historia, el examen físico y algunas REFERENCIAS CLAVE
pruebas analíticas elementales. El objetivo del
1. Longstreth GF, Thompson WG, Chey
presente capítulo es proporcionar al lector los
WD, Houghton LA, Mearin F, Spiller RC.
recursos necesarios para establecer un diag-
Functional Bowel Disorders. Gastroentero-
nóstico clínico eficiente y el modo en que estos
logy 2006;130: 1480-91.
pacientes pueden ser tratados de una manera
coste-efectiva. 2. Bharucha AE, Wald A, Enck P, Rao S.
Functional anorectal disorders. Gastroen-
Definiciones y nomenclatura terology 2006;130:1510-8.
3. Ford AC, Suares NC. Effect of laxatives
Para las sociedades occidentales, los límites nor-
and pharmacological therapies in chronic
males del ritmo deposicional oscilan entre tres
idiopathicconstipation: systematic review
deposiciones diarias como máximo y tres de-
and metaanalysis. Gut 2011;60:209-18.
posiciones semanales como mínimo. Debe ha-
cerse notar que estas frecuencias consideradas
normales se hicieron públicas para atenuar la
preocupación, a menudo obsesiva, de las socie-
dades occidentales por los hábitos defecatorios.
Sin embargo, aunque el médico suele centrar
su atención en la frecuencia del ritmo deposi- consigue evacuar, a pesar de experimentar el de-
cional, los resultados de una encuesta realizada seo consciente de la defecación. Solo el 32% de la
sobre población general demuestran que este población define el estreñimiento como una baja
síntoma tiene significados diversos para las per- frecuencia en el ritmo deposicional. Otras acepcio-
sonas1. Así, el 52% entiende por estreñimiento nes incluyen la sensación de evacuación incomple-
la necesidad de un esfuerzo defecatorio excesi- ta o la simple ausencia de deseo por la defecación
vo o desproporcionado; un 44% considera que (tabla 1). Por lo tanto, desde la perspectiva global
padece estreñimiento cuando exterioriza heces del médico y del paciente, una función defecatoria
duras y de escaso volumen y un 34%, cuando no saludable es aquella en la que la persona realiza,

S Í N T O M A S G A S T R O I N T E S T I N A L E S F R E C U E N T E S 147
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

TABLA 1. Distintas acepciones del estreñimiento para el litar la expulsión (extracción digital o compresión
paciente 1 del suelo pélvico), o evacúa menos de tres veces
por semana (tabla 2)2.

❱ Esfuerzo y/o dificultad excesivos para expulsar el Estreñimiento funcional


contenido fecal.
❱ Heces de menor volumen y consistencia dura. Los pacientes con un cuadro de estreñimiento que
no puede ser atribuido a una patología orgánica
❱ Deseo de defecar sin conseguirlo.
reconocible o al efecto de un fármaco estreñi-
❱ Disminución en la frecuencia de las miento secundario se considera que padecen un
deposiciones.
trastorno primario o funcional de la función defe-
❱ Sensación de evacuación incompleta. catoria. Como en cualquier trastorno funcional se
❱ Ausencia de deseo de defecar. trata de pacientes con un cortejo sintomático ge-
neralmente de curso crónico y recidivante que no
puede ser atribuido a una alteración estructural o
al menos tres evacuaciones por semana, es indolo- bioquímica. De acuerdo con los criterios de Roma
ra y se realiza sin un esfuerzo excesivo. Además el III, la definición de estreñimiento funcional preci-
individuo debe alcanzar una sensación de desocu- sa que el paciente haya presentado en los últimos
pación completa del recto. Los criterios de Roma III 3 meses y con un inicio de los síntomas al menos
han permitido conciliar la dispersión de criterios y 6 meses antes del diagnóstico, dos o más de los
acepciones, incorporando términos cuantitativos y síntomas asociados al estreñimiento expuestos
cualitativos. con anterioridad (tabla 2). Además, las heces líqui-
das deben ser infrecuentes si no hay consumo de
Estreñimiento laxantes y el paciente no debe reunir criterios de
síndrome del intestino irritable (SII) (no debe tener
Según los criterios de Roma III se considera que dolor abdominal relacionado con la deposición)2.
un paciente sufre estreñimiento cuando en más
del 25% de las deposiciones, presenta dos o más Epidemiología
de los siguientes síntomas: precisa de un esfuer-
zo excesivo, presenta heces duras o caprinas, no La prevalencia de estreñimiento entre la pobla-
logra una sensación confortable de desocupación ción general oscila entre un 2% y un 28% según las
rectal, tiene sensación de obstrucción en el área fuentes consultadas3-6. Este amplio rango de varia-
anorrectal, utiliza maniobras manuales para faci- bilidad refleja, en gran medida, la diversidad de
acepciones y definiciones de este síntoma (véase

TABLA 2. Criterios de Roma III para el diagnóstico de estreñimiento 2

❱ 1. Debe reunir dos o más de los siguientes síntomas:


Esfuerzo defecatorio en más del 25% de las deposiciones.
Heces duras o caprinas en más del 25% de las deposiciones.
Sensación de evacuación incompleta en más del 25% de las deposiciones.
Sensación de obstrucción anorrectal en más del 25% de las deposiciones.
Necesidad de maniobras manuales para facilitar la defecación en más del 25% de las deposiciones
Menos de tres deposiciones por semana.
❱ 2. Heces líquidas infrecuentes si no hay uso de laxantes.
❱ 3. No debe reunir criterios para síndrome del intestino irritable.

Estos criterios deben cumplirse en los últimos 3 meses, con inicio de los síntomas al menos 6 meses antes del
diagnóstico.

148
8. Estreñimiento

más arriba). El estreñimiento es más frecuente en estreñimiento. En los niños, las infecciones urina-
las clases sociales más bajas7. Durante la infancia es rias, la enuresis nocturna y el reflujo vesicoureteral;
más frecuente en los niños, pero en la edad adulta en los ancianos, la úlcera estercorácea, el prolapso
afecta más al sexo femenino que al masculino, en rectal, la incontinencia y el vólvulo con isquemia.
una relación aproximada de 3:1. Por encima de los Muchos de estos problemas constituyen un factor
65 años, la prevalencia aumenta en ambos sexos, determinante del traslado de pacientes de edad
de forma que un 34% de las mujeres y un 26% de avanzada, desde sus hogares hasta instituciones
los varones se autodefinen como estreñidos. Estas cerradas, lo que también grava los costes sanita-
cifras aumentan en personas ancianas hospitaliza- rios12,13.
das o en instituciones geriátricas7.
Tipos de estreñimiento
Calidad de vida
El tipo más frecuente de estreñimiento es el deno-
La calidad de vida relacionada con la salud (CVRS) minado estreñimiento crónico simple o constipa-
se ve notablemente deteriorada en los pacientes ción idiopática . Existen, sin embargo, otras causas
con estreñimiento funcional8. Su carácter crónico de estreñimiento condicionadas por la presencia de
y recurrente y el disconfort propiciado por los sín- alteraciones orgánicas o por un trastorno secun-
tomas referidos repercuten de manera clara y evi- dario de la función motora, cuyo origen puede re-
dente sobre el bienestar psicológico9. Este hecho es lacionarse con el consumo de determinados fárma-
más significativo entre los pacientes que muestran cos o con la presencia de enfermedades sistémicas
un tiempo de tránsito colónico normal (véase más de naturaleza endocrinometabólica, neurógena o
adelante). En un estudio realizado sobre una pobla- neuromuscular (tabla 3). Es importante discernir la
ción en la que se detectó una prevalencia de estre- presencia de cualquiera de estas afecciones, dado
ñimiento funcional del 7,8%, el estreñimiento llegó
que su identificación y tratamiento ayudan a corre-
a afectar a la función mental en mayor medida que
gir el trastorno, evitando con ello incomodidad a
otros trastornos funcionales como la pirosis funcio-
los pacientes, pruebas complementarias superfluas
nal, la dispepsia funcional y el SII10. Recientemente
y un coste inapropiado para las administraciones
se ha validado en nuestro país un cuestionario es-
sanitarias13.
pecífico de CVRS para pacientes con estreñimiento,
una herramienta muy útil si queremos valorar por
ejemplo el impacto de un tratamiento11.
Estreñimiento secundario a una
dolencia orgánica gastrointestinal
Repercusiones económicas
❱ Enfermedad del tracto digestivo superior: algu-
Aunque solo una minoría de los pacientes con es- nas circunstancias como la acalasia, la estenosis
treñimiento llega a consultar con el médico (1,2%), pilórica y las neoplasias, pueden provocar estre-
solo en los EE.UU., esta cifra representa más de 2,5 ñimiento relacionado con un menor grado de
millones de consultas facultativas anuales. Un 4% vaciamiento del alimento (figura 1).
de estas personas (100.000/año) son derivadas a
un medio especializado. El impacto económico de ❱ Enfermedades que causan obstrucción del co-
este problema viene condicionado por tres hechos: lon: la obstrucción de la luz intestinal determina
1) el coste de los laxantes, que en los EE.UU. re- la aparición de un estreñimiento, generalmente
presenta entre 350-400 millones de dólares, solo asociado a otros síntomas de cierre abdominal.
en productos dispensados sin receta médica; 2) el Deben distinguirse las causas extraluminales de
coste de las exploraciones complementarias. Por las intraluminales. Entre las primeras cabe citar
ejemplo, la colonoscopia, una exploración frecuen- algunas que pueden resolverse con tratamien-
temente indicada para excluir una dolencia orgáni- to conservador (hernias reductibles, bridas,
ca, implica un gasto aproximado de 150 en nues- vólvulos) y otras que requieren una resolución
tro país. Por lo tanto, es una grave responsabilidad quirúrgica (compresión extrínseca por tumores
del clínico determinar qué pacientes deben ser o o mesenteritis retráctil). Respecto a las causas
no tributarios de una atención especializada. 3) Un intraluminales, la mayoría de ellas obedecen a
tercer aspecto a considerar es el gasto imputable a tumores o a procesos de naturaleza isquémica
las complicaciones, a menudo graves, asociadas al o inflamatoria que ocluyen la luz durante la fase

149
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

TABLA 3. Causas secundarias de estreñimiento debidas a cicatricial: diverticulitis, colitis isquémica o en-
alteraciones de la función neuromuscular fermedad inflamatoria.
❱ Alteraciones anorrectales: determinadas patolo-
❱ Enfermedades endocrinometabólicas: gías que afectan al anorrecto como fisuras, he-
Diabetes mellitus: acidosis, neuropatía. morroides, fístulas o tumores pueden favorecer
Hipotiroidismo. la aparición o agravamiento de un estreñimiento,
Uremia. al provocar una hipertonía del esfínter anal.
Hipercalcemia.
Porfiria. Estreñimiento secundario a
eocromocitoma. enfermedades que alteran la función
Glucagonoma.
motora del colon
Panhipopituitarismo.
Intoxicación por plomo. ❱ Trastornos endocrinometabólicos: algunos tras-
❱ Causas neurógenas: tornos metabólicos van acompañados de estre-
– Enfermedades que afectan al sistema nervioso ñimiento (tabla 3). Los más frecuentes son el
entérico. hipotiroidismo y la diabetes mellitus. El hipoti-
Enfermedad de Hirschsprung. roidismo provoca un trastorno motor que en-
Hipoganglionosis. lentece el ritmo eléctrico básico intestinal14. En
Hiperganglionosis (displasia neuronal intestinal). la mayoría de los casos, éste se corrige al resti-
Ganglioneuromatosis. tuir la función tiroidea a la normalidad. La dia-
Enfermedad de Chagas. betes también puede provocar estreñimiento.
Neuropatía visceral paraneoplásica (Ca de De hecho, un 60% de los pacientes diabéticos
pulmón, tumor carcinoide). muestran formas leves o moderadas de estre-
– Trastornos que comprometen a la inervación ñimiento. El trastorno puede llegar a ser grave
extrínseca del colon. en los casos que cursan con neuropatía autóno-
Traumatismos medulares. ma15. Dentro de este apartado debe considerar-
Mielomeningocele sacro. se igualmente la hipercalcemia que acompaña
Tabes dorsal. al hiperparatiroidismo, la sarcoidosis o el cáncer
Esclerosis múltiple. (hipercalcemia paraneoplásica).
Tumores.
❱ Enfermedades neurógenas: la actividad motora
– Enfermedades que afectan al cerebro.
del colon depende de una adecuada coordina-
Demencia.
ción de distintos sistemas que incluyen la iner-
Accidentes vasculares cerebrales.
vación extrínseca (simpática y parasimpática) y
Esclerosis múltiple.
el propio sistema nervioso entérico. Una disre-
Enfermedad de Parkinson.
gulación de estos sistemas puede conducir a es-
Neoplasias.
tados de constipación, bien por alteraciones del
– Trastornos psiquiátricos.
sistema nervioso central o del sistema nervioso
Depresión.
periférico (tabla 3).
Psicosis.
Anorexia nerviosa ❱ Alteraciones del sistema nervioso entérico: el
❱ Enfermedades que afectan al músculo liso ejemplo más representativo de este trastorno
intestinal: es la enfermedad de Hirschsprung, caracteri-
Miopatías congénitas o adquiridas que originan zada por una ausencia de células ganglionares
pseudoobstrucción intestinal.
intramurales, tanto en la submucosa como en el
Miopatía hereditaria del esfínter anal
interno.
plexo mientérico. Este defecto anatómico deter-
Esclerosis sistémica progresiva.
mina un fallo en la relajación del esfínter inter-
Amiloidosis.
no del ano, en respuesta a la distensión rectal,
Distrofias musculares (por ej.: distrofia
y una dilatación progresiva del colon proximal.
miotónica). El diagnóstico viene sugerido por la manometría
❱ ármacos (véase tabla 5). anorrectal al demostrar la ausencia del reflejo
rectoanal inhibitorio, y se confirma mediante
biopsia rectal. Aunque la mayoría de los casos

150
8. Estreñimiento

TABLA 4. Factores que explican la aparición de


estreñimiento en la enfermedad de Parkinson

❱ Inactividad física.
❱ Disminución del nº de neuronas que contienen
dopamina en el plexo mientérico.
❱ Hipomotilidad secundaria al efecto anticolinérgico
de las drogas antiparkinsonianas.
❱ Fallo en la relajación del músculo estriado del suelo
pélvico.

La enfermedad de Parkinson, puede provocar


estreñimiento de origen multifactorial16 (tabla
4). A su vez, la esclerosis múltiple, que puede
afectar tanto al cerebro como a la médula, con-
duce a situaciones de constipación.
❱ Enfermedades psiquiátricas: en la depresión,
la constipación puede ser una manifestación
Figura 1. Algunos casos de estreñimiento están condicio- somática del trastorno afectivo o una conse-
nados por un menor vaciado del alimento al intestino. La
imagen corresponde a un esófago tortuosamente dilatado
cuencia del efecto anticolinérgico de los anti-
en un paciente con acalasia. depresivos. En una mujer joven con signos de
adelgazamiento, el estreñimiento obliga a con-
siderar la anorexia nerviosa en el diagnóstico
se descubren en los seis primeros meses de diferencial. inalmente, la constipación puede
vida, algunos pacientes son descubiertos en ser el primer motivo de consulta de un cuadro
edades más avanzadas, al estudiar un estreñi- psicótico.
miento crónico inveterado.
❱ Enfermedades que afectan a la inervación ex-
Enfermedades que alteran la
trínseca del colon: en este apartado se incluyen musculatura lisa intestinal
básicamente los traumatismos que provocan
Algunas enfermedades pueden producir estre-
lesiones medulares, sobre todo los que inciden
ñimiento al alterar el músculo liso de la pared in-
sobre los segmentos sacros de la médula. Debe
testinal. Entre ellas deben citarse las miopatías
considerarse que la integración neural, tanto del congénitas o adquiridas que provocan cuadros de
control esfinteriano, como de la actividad pro- pseudoobstrucción intestinal, la miopatía heredita-
pulsora del recto-sigma, se localiza fundamen- ria del esfínter anal interno, la esclerosis sistémica
talmente en el nivel D5-S3. Una grave lesión progresiva, en la que el músculo liso es sustituido
medular a este nivel conduce a un estado de por tejido fibroso y las distrofias musculares (in-
constipación grave asociada tanto a un estado cluyendo la distrofia miotónica), en las que puede
de hipomotilidad, como a un descenso del tono existir afectación concomitante del músculo liso y
y sensibilidad del recto. Otros trastornos que al- estriado17.
teran la inervación extrínseca incluyen el mielo-
meningocele sacro, la tabes dorsal, la esclerosis ármacos
múltiple y los tumores.
Se ha descrito una amplia miscelánea de fármacos
❱ Enfermedades del sistema nervioso central: los causantes de estreñimiento. Entre ellos cabe desta-
accidentes vasculares cerebrales, las neoplasias car la utilización de opiáceos, frecuentes en el con-
que afectan al cerebro y la demencia senil pue- trol del dolor crónico de pacientes oncológicos y los
den alterar la percepción visceral o deteriorar medicamentos con propiedades anticolinérgicas.
la atención sobre el hábito regular de la defe- Entre ellos, los antidepresivos tricíclicos, anties-
cación, abocando a estados de estreñimiento. pasmódicos, fenotiacinas, utilizadas como agentes

151
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

TABLA 5. Medicaciones de uso frecuente que pueden afectar a la función colónica y causar estreñimiento*

Grupo farmacológico Indicaciones comunes Ejemplos

Antiácidos Alivio del ardor y la pirosis Fórmulas con aluminio


Bismuto Terapia anti-Helicobacter pylori Subsalicilato de bismuto
Ranitidina-bismuto
Anticolinérgicos Alivio de los síntomas del Parkinson, Diciclomina, amitriptilina,
depresión, ansiedad y nerviosismo levodopa y carbodopa
Anticonvulsivantes Antiepilépticos y trastornos vertiginosos Fenitoína, ácido valproico
Antidepresivos Tratamiento de la depresión Amitriptilina, imipramina
Antihipertensivos Control de la hipertensión Metildopa, clonidina
Antipsicóticos Tratamiento de la esquizofrenia Haloperidol, risperidona
Quelantes de las sales biliares Hipercolesterolemia Colestiramina, colestipol
Calcioantagonistas Tratamiento de la angina Diltiazem, nifedipina,
y de la hipertensión verapamilo
Suplementos de calcio Osteopenia y osteoporosis Carbonato cálcico, fosfato cálcico
Suplementos de hierro Anemia y deficiencias de hierro Sulfato ferroso
Opiáceos Alivio del dolor oncológico Fármacos que contienen morfina o
codeína
* Adaptado de Harmful Effects of Medicine on the Adult Digestive System. National Digestive Diseases Information
Clearinghouse and Evaluation and Treatment of Constipation. Scott Harris, MD. IFFGD Publication nº 118. 2004.

neurolépticos y las drogas antimuscarínicas em- Estreñimiento crónico idiopático


pleadas en el Parkinson. Los calcioantagonistas, los
antiácidos que poseen aluminio en su composición (estreñimiento simple o primario)
y los recientemente incorporados antagonistas de En la mayoría de los pacientes no logra identificarse
los receptores de la serotonina, también deben ser una causa reconocible que explique los síntomas.
considerados entre la lista de fármacos capaces de Tales casos presentan un estreñimiento idiopático
justificar la aparición de estreñimiento (tabla 5). y su patogenia se relaciona con un trastorno prima-
rio de la motilidad colónica o anorrectal. Durante
Trastornos anorrectales largo tiempo se ha estimado que las dietas pobres
o del suelo pélvico en fibra y la inactividad física ejercen una influencia
determinante en la aparición de este trastorno. Sin
Se trata de problemas que afectan de forma selecti-
embargo, no existen claras evidencias que susten-
va a la región anorrectal o el suelo pélvico generan-
ten estos postulados18-22. Algunos pacientes mejo-
do una seria dificultad para completar la evacua-
ran con el ejercicio físico y suplementos de fibra.
ción. Estos incluyen el rectocele o prolapso rectal,
Otros, sin embargo, no obtienen una mejoría con-
más frecuente en mujeres con antecedentes de
sistente. La tabla 6 enumera los factores de riesgo
histerectomía, el síndrome del periné descendente
(debilidad de los músculos del periné), igualmente tradicionalmente vinculados al estreñimiento cró-
frecuente en mujeres con antecedentes de trau- nico idiopático.
mas obstétricos y el síndrome de la úlcera solitaria
del recto. Todos estos problemas se asocian a un
Fisiopatología
esfuerzo defecatorio excesivo, proctostasia, y sen- Desde un punto de vista fisiopatológico el estre-
sación de evacuación incompleta. Algunos de ellos ñimiento primario puede categorizarse en cuatro
pueden beneficiarse de un tratamiento quirúrgico. subgrupos12.

152
8. Estreñimiento

TABLA 6. Factores ambientales que han sido relacionados


con la aparición de estreñimiento Músculo
Recto puborrectal

❱ Sexo femenino.
❱ Edad avanzada.
❱ Inactividad física.
❱ Ingesta baja en calorías.
❱ Ingesta deficitaria en fibra.
❱ Bajo nivel socioeconómico.
❱ Bajo nivel educativo.
❱ Consumo de fármacos (tabla 5).
❱ Depresión.
❱ Historia de abusos o maltratos físicos
o psicológicos.

❱ Disfunción cólica o estreñimiento por tránsito Esfínter anal


lento. En este tipo se identifica una progresión interno
Canal anal
lenta y defectuosa del contenido fecal desde el
colon proximal hasta el colon distal y recto. Den- Esfínter anal
tro de esta categoría se han descrito dos subti- externo
pos: a) Inercia cólica, propiamente dicha, cuya
patogenia se relaciona con un descenso del nú-
mero de ondas propulsivas de alta amplitud. Su Figura 2. Anatomía de la región rectoesfinteriana y pubo-
rrectal. En la disinergia rectoesfinteriana el esfínter externo
ausencia determina un tiempo superior de per- no se relaja durante el esfuerzo de la defecación, sino que se
manencia del residuo fecal en el colon derecho. contrae, de forma paradójica, aumentando la presión.
b) El segundo grupo está constituido por pacien-
tes que presentan un incremento de la actividad meno viene favorecido por el hecho de reprimir
motora descoordinada en el colon distal que, al de forma voluntaria la defecación debido a con-
oponer una resistencia al bolo fecal, favorece la dicionantes personales o de tipo social8.
retropropulsión de las heces.
❱ Disminución de la prensa abdominal. En algu-
❱ Obstrucción funcional distal. En esta categoría nos pacientes la expulsión de las heces se ve
se incluyen un grupo heterogéneo de trastornos dificultada por la imposibilidad de aumentar la
caracterizados por una disfunción anorrectal presión abdominal, y por ende la intrarrectal,
selectiva que provoca una dificultad para la durante la maniobra defecatoria. Este es el caso
eyección del bolo fecal. El más importante es la de los enfermos con lesiones medulares altas,
disinergia rectoesfinteriana o disfunción de los con miopatías, o personas de edad avanzada.
músculos del suelo pélvico. Básicamente con-
siste en una ausencia de la relajación o incluso Evaluación diagnóstica
contracción paradójica del músculo puborrectal
y del esfínter externo durante la defecación (fi- Historia clínica
gura 2). Ello conduce a un esfuerzo defecatorio
desproporcionado. Algunos pacientes presen- La anamnesis constituye la piedra angular para una
tan ambos trastornos (constipación de tránsito aproximación coste-efectiva al paciente con estre-
lento y obstrucción funcional distal). ñimiento. De hecho, en el ámbito de una consulta
especializada, aquella debería ser guiada por un
❱ Percepción rectal anómala. Este subgrupo de cuestionario dirigido con el fin de no soslayar nin-
pacientes no experimenta el deseo normal de
gún aspecto relevante13. A continuación se enume-
la defecación porque cuando llegan las heces al
ran los aspectos que pueden proporcionar informa-
recto no lo notan. En algunos casos, este fenó-
ción crucial para el diagnóstico:

153
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

❱ Edad. Como en otros trastornos funcionales, la causa orgánica. Así, con la excepción de la en-
edad debe ser justamente ponderada a la hora fermedad de Hirschsprung, el estreñimiento de
de evaluar la probabilidad de una lesión malig- larga duración sugiere el padecimiento de un
na. De hecho, el cáncer colorrectal debe de ser trastorno funcional idiopático. Por el contrario,
firmemente considerado en cualquier persona un cambio reciente en el hábito intestinal, en un
que consulta por este problema a partir de los sujeto que ordinariamente presentaba un ritmo
50 años. La sospecha adquiere mayor peso es- deposicional regular, debe hacer sospechar la
pecífico cuando existen antecedentes familiares existencia de una dolencia orgánica.
de neoplasias colorrectales o cuando el enfer-
mo refiere otros síntomas de alarma (véase más 2. ¿En qué consiste realmente su estreñimien-
adelante). to?: ¿ausencia de deseo o esfuerzo excesivo
durante la evacuación?
❱ Comorbilidades. Como ya se ha mencionado,
la coexistencia de determinadas enfermedades El paciente que no experimenta la sensación
puede explicar la presencia de estreñimiento espontánea de defecar, al menos de un modo
(tabla 3). Es importante, por consiguiente, re- frecuente y regular, probablemente padece
cabar información acerca del padecimiento de una constipación originada por un trastorno
enfermedades endocrinometabólicas como la de la motilidad (tránsito lento) o ha suprimido
diabetes o el hipotiroidismo, enfermedades los reflejos defecatorios normales por falta de
desmielinizantes como la esclerosis múltiple, al- hábito (percepción rectal anómala). Por su par-
teraciones medulares de naturaleza infecciosa, te, los pacientes que refieren dificultad para la
traumática o tumoral, especialmente si afectan evacuación (esfuerzo defecatorio excesivo, sen-
a la cola de caballo, y alteraciones congénitas sación de bloqueo anorrectal o de evacuación
como el mielomeningocele sacro o la propia en- incompleta), pueden ser portadores tanto de un
fermedad de Hirschsprung, un diagnóstico que problema orgánico (impactación fecal, carcino-
puede pasar desapercibido durante la infancia. ma de recto), como funcional.
Algunos cuadros como la enfermedad de Par- 3. ¿Ha observado un cambio reciente en el há-
kinson pueden producir estreñimiento, no solo bito deposicional?
por el impacto que ejercen sobre la actividad
motora del colon, sino por las propiedades anti- Aun en el caso de que se trate de un paciente
colinérgicas de algunos de los fármacos emplea- con estreñimiento habitual, un cambio recien-
dos para su tratamiento. te en el hábito intestinal debe alertar sobre el
padecimiento de una lesión orgánica. Una ex-
❱ Fármacos. a se ha insistido en la necesidad de cepción a esta regla es el trastorno del ritmo
verificar la posible influencia que cualquier me- deposicional que se inicia coincidiendo con un
dicación pueda ejercer sobre un estreñimiento cambio en los hábitos higienicodietéticos, con
de reciente aparición (tabla 5). En ocasiones, la aparición de un suceso vital estresante o un
el paciente olvida mencionar la toma habitual viaje, o con la toma de determinados fármacos.
o frecuente de algunos medicamentos de libre
prescripción y de uso muy común incluyendo 4. ¿Cada cuánto tiempo efectúa una deposi-
antiácidos que contienen calcio o aluminio en ción?
su composición o analgésicos que contienen co-
Aunque los actuales criterios de Roma contem-
deína.
plan otras acepciones para definir el estreñi-
❱ Descripción del síntoma guía. Como en cual- miento, la frecuencia del ritmo deposicional
quier otro apartado de la medicina clínica, una sigue siendo primordial para mensurar la mag-
correcta descripción del síntoma guía constitu- nitud del problema. Con frecuencia el pacien-
ye una valiosa ayuda para orientar la etiología te contesta con poca precisión a ésta y a otras
del trastorno. El clínico dispone de siete pregun- cuestiones relacionadas con las características
tas claves para cumplir este objetivo23. de las deposiciones. Este aspecto puede mejo-
rar sensiblemente mediante la administración
1. ¿Cuándo comenzó el estreñimiento?
de un diario de síntomas donde el enfermo pue-
La duración del problema guarda una relación de consignar con mayor detalle la información
inversa con la posibilidad de encontrar una solicitada por el clínico.

154
8. Estreñimiento

Tránsito lento
Figura 3. La escala de Bristol
(por ej., 100 horas) permite evaluar de forma
sencilla el aspecto y
características de las heces.
Tipo 1

Tipo 2

Tipo 3

Tipo 4

Tipo 5

Tipo 6

Completamente Tránsito rápido


Tipo 7
líquidas (por ej., 10 horas)

5. ¿Cómo son las deposiciones? 7. ¿Tiene dolor coincidiendo con la deposición?


Debe interrogarse al paciente sobre la consis- El estreñimiento funcional rara vez se caracte-
tencia, aspecto y morfología de las deposicio- riza por dolor importante. El dolor abdominal
nes. Nuevamente, puede requerirse la ayuda de cólico de intensidad relevante, particularmente
sistemas de apoyo visual como la escala de Bris- si se asocia con un estreñimiento de aparición
tol que ha demostrado ser una herramienta de reciente, sugiere obstrucción intestinal. Debe
gran valor para describir la forma y consistencia recordarse, no obstante, que el dolor cólico o
de las heces (figura 3). el malestar abdominal que alivia tras la deposi-
6. ¿Tiene la sensación de haber vaciado el in- ción constituye uno de los criterios de Roma III
testino por completo? para el diagnóstico de SII. En este último caso,
los síntomas suelen ser intermitentes y no de
Una respuesta negativa implica la existencia carácter progresivo, como ocurre en el enfer-
de residuos fecales en la luz rectal (proctosta- mo con una neoplasia colorrectal estenosante.
sia) o una ausencia de relajación adecuada de inalmente el dolor anorrectal que aparece du-
los músculos rectales y pélvicos, tras la expul- rante o después de la defecación sugiere la pre-
sión de las heces. La distinción puede hacerse sencia de una patología del canal anal (fisura,
fácilmente por examen digital o proctoscopia,
hemorroides).
dado que normalmente no existen heces en
la luz rectal, salvo inmediatamente antes de la ❱ Síntomas de alarma. Algunos síntomas sugie-
deposición. ren poderosamente la presencia de una dolen-

155
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

cia orgánica y obligan a realizar pruebas com-


plementarias para certificar la sospecha clínica.
Entre ellos tiene gran valor la pérdida de peso
inexplicable y la presencia de sangre o pus en
las heces. El moco no se considera un produc-
to patológico, aunque a menudo está presente
en las heces de pacientes con grandes pólipos
vellosos del colon (figura 4). El dolor abdominal
intenso en forma de crisis intermitentes debe
de sugerir la posibilidad de una porfiria aguda
intermitente o una intoxicación por plomo. El
dolor abdominal postprandial cólico e inten-
so que se acompaña de distensión abdominal
sugiere obstrucción. Debe tenerse en cuenta
que cualquier antecedente familiar de cáncer
colorrectal, enfermedad inflamatoria o enfer-
medad celiaca aumenta la probabilidad de una
patología orgánica en estos pacientes (algunos
enfermos con celiaquía padecen estreñimien-
to). inalmente, el clínico debe de estar atento
a cualquier síntoma sospechoso de hipotiroidis- Figura 4. Imagen de un pólipo velloso en el sigma. Los
mo, incluyendo la sensación de frío, el aumento pólipos adenovellosos pueden ser causa de pérdida de moco
de peso y la alopecia. en la deposición.
❱ nto as gast ointes na es asocia os No es
infrecuente que un paciente con estreñimiento
crónico de origen funcional presente otros sín- suceso vital estresante ocurrido en los últimos
tomas gastrointestinales como pirosis, plenitud meses (pérdida de un ser querido, separación
postprandial, saciedad precoz, náuseas, hincha- conyugal, enfermedad grave) haya propiciado
zón o flatulencia. Ello refleja el padecimiento de la aparición de los primeros síntomas o hacer
un trastorno funcional que afecta a la globalidad que el enfermo comience a preocuparse por
del aparato digestivo. Algunos de estos pacien- una clínica hasta entonces infravalorada. Debe
tes deberán ser categorizados como portadores observarse cualquier cambio en el estilo de vida
de un SII. o en el patrón de comportamiento, y buscar de
❱ s o e i a itos iet cos Es importan- forma intencionada síntomas que puedan suge-
te recabar información sobre los hábitos dieté- rir el comienzo de una depresión; por ejemplo,
ticos del paciente, incluyendo número de inges- insomnio, pérdida de energía o de vitalidad,
tas en las 24 h, aporte diario de fibra y volumen falta de concentración, pérdida de autoestima
de líquidos ingerido. Algunos pacientes omiten o sentimientos de desesperanza o culpabilidad.
voluntariamente el desayuno por diversas razo- No es raro que detrás de un estreñimiento gra-
nes. Ello representa un inconveniente impor- ve y refractario exista una historia de abusos o
tante dado que el reflejo gastrocólico es más maltratos físicos o sexuales en épocas anterio-
intenso por las mañanas, al despertarse o tras el res (incluso en la infancia). Con frecuencia este
desayuno. No ingerir alimento en un momento tipo de información no es fácil de obtener en
tan propicio es privar al colon de un importante la primera visita, pero puede aflorar en visitas
estímulo fisiológico. sucesivas, si el clínico ha sido capaz de ganar el
crédito y la confianza de su paciente17,24.
❱ Consumo de laxantes. Es igualmente impor-
tante interrogar al enfermo sobre la utilización Exploración física
habitual de laxantes debiendo consignar la for-
mulación, dosis y periodicidad de la adminis- La exploración física puede proporcionar signos
tración. A veces, existe una historia familiar de sugestivos de neuropatía, endocrinopatía o enfer-
abuso de laxantes. medad sistémica. Algunos datos de la exploración
❱ Factores psicosociales. Antes de finalizar la his- abdominal pueden ser de valiosa ayuda. Tal es el
toria clínica, el médico debería obtener infor- caso de una cicatriz de laparotomía previa, la pre-
mación acerca del motivo que ha conducido al sencia de distensión o peristaltismo de lucha o la
enfermo a consultar. No es infrecuente que un palpación de una masa en el abdomen. No es infre-

156
8. Estreñimiento

cuente la palpación de heces duras en el cuadrante clínica. En algunas ocasiones puede ser de utilidad
inferior izquierdo del abdomen. Es igualmente im- investigar la presencia de leucocitos o sangre oculta
portante realizar un examen minucioso de la región en las heces. De hecho, la colitis ulcerosa que afecta
perineal y del recto. La inspección anorrectal puede al colon izquierdo puede cursar con estreñimiento.
revelar escoriaciones, la presencia de fisuras o de
hemorroides. Un ligero pinchazo en los cuatro cua- Pruebas complementarias
drantes de la región perianal permite comprobar la
ExPlOrACiOnES PArA DESCArTAr
preservación del reflejo anal (contracción del esfín-
lESiOnES ESTruCTurAlES
ter). Su ausencia permite sospechar la presencia de
una neuropatía. inalmente, el tacto rectal puede ❱ rx simple de abdomen: A menudo, una radio-
detectar la presencia de una estenosis, una masa o grafía simple de abdomen proporciona pruebas
sangre mezclada con las heces. Debe aprovecharse en relación con una excesiva cantidad de heces
el tacto rectal para explorar la respuesta del esfínter en el colon y puede ser de utilidad en la valo-
anal externo al esfuerzo simulado de la defecación. ración de pacientes ancianos con estreñimiento
Esta maniobra debería provocar la relajación del inveterado que requieren ser valorados en el
esfínter anal externo y del perineo descendente. área de urgencias. No es infrecuente que la pro-
La ausencia de este fenómeno sugiere obstrucción pia Rx simple de abdomen muestre la imagen
funcional o disinergia rectoesfinteriana (anismo)25. típica de un vólvulo de sigma o la presencia de
una impactación fecal en la ampolla rectal.
Exámenes de laboratorio
❱ Enema opaco. El enema opaco es de escasa uti-
Una analítica elemental, incluyendo hemograma y lidad; permite evaluar el tamaño y morfología
VSG, así como las determinaciones bioquímicas ha- del colon y establecer el diagnóstico de un doli-
bituales, calcemia y hormonas tiroideas pueden ser cocolon o un megacolon, pero pocas veces exis-
de utilidad, para evaluar la condición general del te una relación entre la longitud o el diámetro
paciente, detectar signos de alarma (p. ej.: anemia
del colon y la intensidad del estreñimiento. A su
microcítica) o una condición endocrinometabólica
que pudiera explicar los síntomas (p. ej.: diabetes, vez, el enema baritado puede descubrir una es-
hipotiroidismo). Otras investigaciones más avanza- tenosis residual de origen isquémico o inflama-
das como el estudio de porfirinas en orina, niveles torio (colitis isquémica o enfermedad de Crohn)
plasmáticos de cortisol, parathormona (PTH) o o la presencia de una neoplasia colorrectal que
anticuerpos antinucleares deberían solicitarse úni- estenosa de forma parcial la luz del colon (figura
camente sobre la base de una fundada sospecha 5). La diverticulosis es una condición que puede

Figura 5. El enema opaco permite apreciar


una estenosis de origen neoplásico o
a b inflamatorio. Estas últimas pueden origi-
narse durante la fase de colagenización
reparativa de una lesión ulcerativa de origen
isquémico, actínico o inflamatorio. a) Visión
radiológica de un carcinoma estenosante del
colon ascendente. b) Imagen endoscópica
del mismo tumor. c) Enema opaca que
muestra una estenosis de origen inflama-
torio en el ángulo esplénico en un paciente
de 42 años con enfermedad de Crohn. d)
Imagen endoscópica de una estenosis de
c d naturaleza inflamatoria en un paciente con
enfermedad de Crohn.

157
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

estar o no asociada al estreñimiento y que se de-


muestra mejor en un estudio baritado (figura 6).
❱ Colonoscopia. El examen endoscópico del colon
goza de una mayor sensibilidad para la detec-
ción de pólipos y neoplasias colorrectales, así
como para la evaluación de condiciones infla-
matorias (p. ej.: colitis ulcerosa) que, a menudo,
cursan con estreñimiento y que pueden pasar
desapercibidas en un estudio radiológico. A su
vez, permite la toma de biopsias para el estudio
anatomopatológico de estas enfermedades (fi-
gura 5).
ExPlOrACiOnES PArA EvAluAr
lA FunCión mOTOrA DEl COlOn
El estudio funcional de la defecación y de la fisiopa-
tología del estreñimiento es útil no solo desde un
punto de vista diagnóstico, sino también terapéu- Figura 6. La diverticulosis es una condición frecuentemente
tico ya que en algunos casos permite la utilización asociada a estreñimiento que se demuestra mejor en un
de técnicas de reeducación (biofeedback). Las téc- estudio baritado. La imagen demuestra la presencia de
nicas que aportan información acerca de la función numerosos divertículos en el colon descendente.
y motilidad recto-cólica incluyen: la manometría
anorrectal, la electromiografía del suelo pélvico, el
estudio del tiempo de tránsito colónico, el estudio torno, el intento de la defecación se ve frustra-
de la motilidad colorrectal y el estudio dinámico de do por una ausencia de relajación o incluso un
la defecación. incremento paradójico de la presión del esfínter
externo provocando una verdadera obstrucción
❱ manometría anorrectal. Es una técnica que
permite obtener información tanto de la pre- funcional distal25. Algunos de estos pacientes
sión generada por la actividad contráctil del muestran, a su vez, un incremento en el umbral
recto, como de la actividad de la región esfin- sensorial del recto, asociado en ocasiones, a
teriana. A su vez, permite realizar una estima- un incremento en la complianza del recto. Este
ción de la sensación rectal, de su complianza y trastorno condiciona que el nivel de presión ne-
del funcionamiento del reflejo rectoanal. Este cesario para suscitar el deseo de la defecación
tipo de información es importante para excluir, sea más alto en estos enfermos. La manometría
por ejemplo, la disfunción observada en la en- permite evaluar también este aspecto25.
fermedad de Hirschsprung. Normalmente, la ❱ ect o iog a a e s e o ico La actividad
distensión provocada por un balón intrarrectal eléctrica de los músculos del suelo pélvico se
provoca una relajación del esfínter interno del registra mediante electromiografía. Para ello se
ano, mediada por el reflejo mientérico. Esta res- utilizan electrodos que recogen la actividad del
puesta refleja está ausente en la enfermedad de esfínter anal y del músculo puborrectal tanto en
Hirschsprung. A su vez, la manometría permite reposo, como durante la contracción voluntaria
evaluar la función anorrectal durante el acto de y la defecación. Esta técnica es útil para el estu-
la defecación (figura 2). En condiciones norma- dio del estreñimiento provocado por disinergia
les, cuando el individuo experimenta el deseo rectoesfinteriana. En estos casos, se registra un
consciente de la defecación, se eleva la presión aumento de la actividad eléctrica de la muscu-
del recto, a la vez que se inicia la fase de relaja- latura esfinteriana y puborrectal durante el in-
ción del esfínter externo del ano. Este mecanis- tento de defecación. Las molestias que ocasiona
mo sincrónico y voluntario forma parte de una la electromiografía han hecho que su uso haya
conducta aprendida. La incapacidad para llevar disminuido y se utilice más la manometría.
a cabo este movimiento de forma coordinada ❱ st io e e o e t nsito co ónico Se
constituye la piedra angular en la fisiopatología trata de una técnica muy útil para determinar
de la disinergia rectoesfinteriana. En este tras- la velocidad del tránsito del contenido fecal a

158
8. Estreñimiento

través del colon, soslayando la inexactitud con ❱ Estudio dinámico de la defecación. La dinámica
que los pacientes hacen referencia al ritmo y de la defecación se puede estudiar mediante la
frecuencia de sus hábitos defecatorios (no es in- observación de las maniobras de expulsión de
habitual, por ejemplo, que el tiempo de tránsito un balón introducido en el recto, y también me-
colónico sea normal en pacientes severamen- diante técnicas radiológicas tales como el proc-
te estreñidos en los que subyace algún tipo tograma y la defecografía.
de psicopatología). La medición del tiempo de
Durante las maniobras de expulsión del balón
tránsito colónico se realiza de acuerdo al méto-
intrarrectal se pueden valorar, el comporta-
do de Metcalf-Chaussade que permite el cálculo
miento del esfínter anal, la capacidad expulsiva,
del tiempo de tránsito colónico y segmentario
así como el volumen intrarrectal, lo que puede
con la práctica de una única radiografía realiza-
ayudar a detectar pacientes estreñidos con disi-
da al cuarto día y otra al séptimo día tras ingerir nergia del suelo pélvico27.
dos cápsulas que contienen 10 marcadores só-
lidos radiopacos durante tres días consecutivos El proctograma utiliza un balón relleno de con-
(figura 7)26. traste que se introduce en el interior del recto.
Posteriormente se practican radiografías del pa-
❱ st io e a o i a co ónica El estudio de ciente sentado tanto en reposo como durante el
la motilidad colónica entraña numerosas dificul- intento de defecación. De esta forma se valora
tades técnicas por lo que es una técnica todavía el ángulo anorrectal, el nivel de descenso peri-
con escasa aplicación clínica. Puede realizarse neal durante la defecación y la capacidad de ex-
mediante registro de presiones intraluminales pulsión del balón. Además, permite identificar
por manometría o de la actividad mioeléctrica posibles alteraciones de la pared rectal como el
por electromiografía. Su mayor utilidad es el rectocele.
registro de la actividad motora en niños con
constipación grave. La ausencia de ondas pro- La defecografía se realiza introduciendo en el
pulsoras de gran amplitud es sinónimo de un recto 150 ml de una solución de bario de con-
trastorno grave de la motilidad y podría apoyar sistencia similar a la de las heces, y observando
la indicación de una resección cólica segmenta- a través de un sistema de vídeo al paciente en
ria o total25. reposo y durante el intento de defecación. Con

Figura 7. Imagen radiológica de un estudio de tránsito colónico. Pueden verse los marcadores radiopacos distribuidos a lo largo
del colon.

159
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

esta técnica se valoran los mismos parámetros familiar positiva. Deben revisarse todos los fárma-
que con el proctograma y, además, se observa cos que toma el enfermo, incluyendo aquellos de
la apertura del canal anal y el vaciado del recto. libre prescripción, y llevar a cabo una breve historia
dietética que permita estimar la cantidad de fibra
Algoritmo de actuación ingerida. El examen del recto permite explorar el
tono del esfínter y la relajación voluntaria del mús-
El manejo del enfermo estreñido comienza con una culo puborrectal, así como la presencia de masas o
valoración global e individualizada de cada caso28. sangre en la ampolla rectal. Una analítica elemental
Este principio es importante dado que a menudo puede descubrir condiciones subyacentes como la
se dictan normas generales que pueden resultar in- diabetes o el hipotiroidismo que pueden contribuir
adecuadas para un paciente concreto. Como ya se a la patogénesis de los síntomas. A su vez, una colo-
ha mencionado, la historia y el examen físico pro- noscopia o un examen baritado del colon permiten
porcionan las claves esenciales para una correcta excluir cualquier lesión estructural. Sin embargo,
orientación. Los enfermos deben ser interrogados este tipo de exploraciones implican un coste adicio-
acerca de la frecuencia de sus movimientos intes- nal por lo que su indicación debería restringirse a
tinales, así como de la consistencia de las heces, el los pacientes con síntomas o signos de alarma. Los
esfuerzo necesario para la defecación, la sensación estudios que permiten evaluar la función motora
de evacuación incompleta y la presencia de sangre anorrectal se reservan para casos seleccionados
en la deposición. El cáncer de colon, por ejem- (véase más arriba). Las figuras 8 y 9 muestran en
plo, debería sospecharse en cualquier paciente forma de algoritmo la secuencia de actuación ante
de más de 50 años que refiere un cambio recien- un paciente con estreñimiento de reciente apari-
te en el ritmo deposicional, con sangre visible en ción y la pauta recomendada para el diagnóstico
las heces, especialmente si presenta una historia del paciente con estreñimiento crónico29.

Considerar: Considerar:
Anamnesis, exploración física,
Fármacos Endocrinopatía
analítica elemental
Gestación Depresión

Sospecha de patología
Esfuerzo defecatorio Signos Cambio reciente en
anorrectal aguda (fisura
excesivo - Sensación de de cierre estilo de vida y/o dieta
anal, congestión hemo-
bloqueo anorrectal abdominal Suceso vital estresante
rroidal, absceso)

Tacto rectal
Inspección anal Rectosigmoidoscopia Introducir cambios
Rx simple
Anuscopia Manometría dietéticos/laxantes/
de abdomen
anorrectal1 evaluar otros T D3

Fecaloma impactado
Neoplasia Oclusión
Obstrucción funcional mecánica/íleo2
distal

1
Indicar según el contexto clínico
2
Véase capítulo 25: “Oclusión y seudooclusión intestinales”.
3
TFD: trastornos funcionales digestivos.

Figura 8. Algoritmo diagnóstico en un paciente con estreñimiento de reciente aparición.

160
8. Estreñimiento

Anamnesis, exploración física, Considerar enfermedad


Considerar Hemograma, VSG, glucemia, sistémica o
fármacos Ca, Mg, TSH endocrinometabólica

Sí ¿Síntomas de alarma?
No
¿Sospecha de daño estructural?

Enema opaca vs. ¿Criterios de


colonoscopia intestino irritable

No Sí
Evidencia de patología
orgánica
Tratamiento
Sí No Estreñimiento crónico
idiopático

Tratamiento
Ensayo terapéutico.
Cambios de estilo
de vida y dieta

Ausencia de respuesta

Patrón de defecación Esfuerzo excesivo para


infrecuente la defecación

Tiempo de tránsito Manometría anorrectal (MA)


colónico (TTC) Test de expulsión con balón (TEB)
Defecografía (D )

Retención de Disfunción del suelo pélvico


Tránsito Defecto anatómico
Normal radiomarcadores
lento – Enfermedad de Hirschsprung
en el recto
– Prolapso (rectocele)
Sensación rectal disminuida
Evaluación psicológica – Alteración sensorial
– Neuropatía

Figura 9. Algoritmo diagnóstico en un paciente con estreñimiento crónico.

161
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

Tratamiento chazan este suplemento, optando por otras formu-


laciones de mejor sabor. En este sentido, el enfer-
El tratamiento del estreñimiento crónico primario mo debe de ser instruido para leer el etiquetado de
o idiopático debe desglosarse en cuatro apartados: los alimentos que incorporan fibra (p. ej.: cereales)
1) Medidas higienicodietéticas y educativas; 2) Uso para verificar su contenido porcentual (All-Bran®:
racional de laxantes; 3) Biorretroalimentación (bio- 26,70%; Cornflakes®: 11%; Krispies®: 4,51%). Otros
feddback); y 4) Cirugía. alimentos como las legumbres y algunas frutas
como los kiwis o las ciruelas pasas poseen una
Medidas higienicodietéticas cantidad de fibra considerable. Debe explicarse al
paciente que el efecto terapéutico de la fibra no es
EDuCACión
tan inmediato como el obtenido con otros laxantes
El manejo integral del paciente con estreñimien- y que su administración, a menudo va acompañada
to debería incluir una breve explicación sobre la por un cuadro transitorio de flatulencia debido al
fisiología de la defecación. Con frecuencia los mé- incremento en la producción de gas por parte de
dicos son instruidos en una serie de consejos que las bacterias intestinales. Por este motivo, se reco-
podrían ser beneficiosos para los pacientes, pero mienda que el aporte de suplementos de fibra se
pocas veces el médico dispone del tiempo suficien- realice de un modo gradual28.
te para explicar al enfermo la importancia de estas
medidas educativas. Esta dificultad, podría sosla- Laxantes
yarse entregando al paciente una hoja informativa
donde se razonen este tipo de medidas. Es impor- Los laxantes siguen siendo el recurso más utilizado
tante que la información escrita pueda ser asumi- para tratar el estreñimiento. Un informe mostró
ble por la mayoría de las personas con un nivel in- que solo en los EE.UU. el gasto en laxantes de libre
telectual medio. Debe subrayarse que los consejos prescripción, sin receta médica alcanzó la cifra de
acerca de determinados hábitos dietéticos o del 821 millones de dólares. Su clasificación, mecanis-
estilo de vida deberían apoyarse en una explicación mo de acción y efectos secundarios han sido objeto
fisiopatológica comprensible. La tabla 7 muestra un de recientes revisiones sistemáticas y metaanáli-
ejemplo que puede ser modificado o adaptado a sis29,31,32. Uno de los mayores inconvenientes para
cada entorno. Brevemente, los enfermos deberían evaluar de forma crítica los resultados de estos
ser instruidos sobre la importancia de un ejercicio estudios es que la mayoría de ellos han emplea-
regular, la necesidad de incrementar el contenido do como parámetro de eficacia clínica la frecuen-
de fibra en la dieta, la ingesta de líquidos abundan- cia de las deposiciones, obviando otros síntomas,
tes (1,5-2 litros/24 h) y el beneficio que comporta igualmente importantes para el paciente, como el
el adoptar un horario regular para la defecación esfuerzo defecatorio, la emisión de heces duras o la
(especialmente después del desayuno) y también sensación de evacuación incompleta, aspectos que
el perjuicio que conlleva reprimir con frecuencia el deberían ser tenidos en consideración en inves-
deseo consciente de la evacuación. tigaciones futuras. A continuación se resumen las
propiedades, indicaciones y efectos adversos más
FibrA DiETéTiCA frecuentes de los laxantes más utilizados.
El promedio de consumo de fibra en el mundo oc- AgEnTES FOrmADOrES DE vOlumEn
cidental oscila entre 10-15 gramos por día. Un in- A
cremento de 15-20 gramos, hasta completar la can-
tidad de 30 gramos al día determina un aumento Muchos pacientes no se sienten confortables con
del volumen de las deposiciones, una disminución el suplemento de fibra en la dieta y el médico aca-
de su consistencia y una reducción del tiempo de ba prescribiendo preparados comercialmente dis-
ponibles conocidos como agentes formadores de
tránsito colónico30. Este hecho es particularmen-
volumen o mucílagos. Su mecanismo de acción es
te cierto en aquellos pacientes con estreñimien- similar al de la fibra dietética y requieren ser ad-
to y tránsito colónico normal. Los enfermos con ministrados junto con abundante agua. Entre ellos
un tiempo de tránsito enlentecido, obstrucción se incluyen mucílagos naturales obtenidos a partir
funcional distal o megacolon suelen empeorar al de la semilla del psilio (procedentes de plantas del
aumentar la ingesta de fibra. El salvado de trigo género Plantago) o de algas marinas (agar-agar) y
constituye la fuente principal de aporte de fibra otros derivados semisintéticos de la fibra vegetal
(44 g/100 g). Algunos pacientes, sin embargo, re- como la metilcelulosa y carboximetilcelulosa. La

162
8. Estreñimiento

TABLA 7. Información escrita donde se explican las funciones del colon y la importancia de algunas medidas
higienicodietéticas para evitar el estreñimiento

❱ El colon es un órgano cuya misión primordial es favorecer la propulsión (arrastre) del contenido procedente del
intestino delgado y facilitar su expulsión a través del ano (defecación). Diariamente, entran en el colon unos 1.000
cm3 de líquido procedente de los jugos digestivos y de la propia ingesta. El colon es capaz de reabsorber la mayoría
de este líquído, reduciendo la cantidad de agua de las heces a la décima parte aproximadamente (100 cc). La fibra
que contiene la dieta retiene agua en las heces contribuyendo de este modo a que éstas aumenten de volumen, se
vuelvan más blandas y se deslicen mejor a lo largo del intestino. Por la misma razón, ingerir un volumen de 1,5-2
litros diarios de agua puede ser beneficioso para mejorar la función intestinal.
❱ El colon descendente es un conducto a través del cual las heces son conducidas hasta el sigma, un segmento
donde las heces son almacenadas, permitiendo que gran parte de su contenido acuoso se absorba a través de la
mucosa. La incorporación del bolo fecal desde el sigma hasta el recto tiene lugar por medio de un movimiento pe-
ristáltico. Este último suele desencadenarse en respuesta al llenado del estómago, un fenómeno que conocemos
como reflejo gastroentérico o gastrocólico. Éste suele ser más enérgico tras el desayuno, si bien algunas personas
perciben esta sensación en la práctica totalidad de las comidas. Por esta razón, es buena costumbre adquirir el
hábito regular de intentar la evacuación cuando el enfermo percibe esta sensación después de las comidas.
❱ Una vez que las heces alcanzan el recto, la distensión de sus paredes pone en marcha el deseo consciente de la
defecación, al tiempo que se relaja el esfínter interno del ano. En este momento se inicia la fase voluntaria de la
defecación. Durante esta fase tiene lugar la relajación de los músculos del suelo de la pelvis y del esfínter externo
del ano (un músculo que en condiciones normales evita la salida espontánea de las heces o incontinencia). La
contracción de las paredes del recto y de la propia musculatura abdominal y del diafragma permiten finalmente la
exteriorización del bolo fecal. Del conocimiento de estos mecanismos se deducen tres importantes consecuencias
prácticas:
El ejercicio físico permite fortalecer los músculos del abdomen haciendo más efectiva la prensa abdominal en
el momento de la evacuación.
La fase voluntaria de la defecación es una conducta aprendida durante la infancia. Algunas personas, sin
embargo, tienen dificultades para relajar el esfínter externo del ano y los músculos del suelo de la pelvis en el
momento de la defecación. Incluso pueden experimentar una contracción paradójica y no deseada de estos
músculos. Este fenómeno determina que el esfuerzo necesario para la defecación sea desproporcionado.
De hecho, algunos pacientes experimentan una sensación de bloqueo anorrectal, precisando de maniobras
manuales para favorecer la extracción de las heces. Es importante que este tipo de personas intenten relajarse
durante el acto de la defecación, buscando un lugar cómodo y apropiado, evitando la sensación de urgencia y
distrayendo su atención mediante la lectura de un texto relajante. En algunas clínicas especializadas se dispo-
ne de métodos de reeducación (biofeedback) para mejorar este tipo de estreñimiento.
Reprimir el deseo consciente de la defecación de forma frecuente o continuada acaba por alterar la coordi-
nación de los mecanismos descritos y puede conducir a situaciones de estreñimiento crónico. En definitiva,
el ejercicio regular, una ingesta adecuada de fibra y de líquidos, así como el adquirir el hábito de intentar
la defecación cuando surge el deseo consciente y espontáneo de la misma (especialmente después del desayu-
no), así como procurar un ambiente cómodo y relajado, puede mejorar el estreñimiento de una proporción
mayoritaria de los pacientes, evitando con ello un consumo excesivo o inadecuado de laxantes.

dosis debe incrementarse de un modo gradual, te para la limpieza intestinal antes de un enema
dado que poseen los mismos efectos secundarios baritado o una colonoscopia. La eficacia de este
que la fibra dietética. tipo de laxantes se basa en que tanto el magnesio
lAxAnTES OSmóTiCOS como el ion sulfato son escasamente absorbidos
por el tubo digestivo, por lo que tienen un efecto
laxantes salinos osmótico dentro de la luz intestinal, incrementan-
Se trata de sales de magnesio (hidróxido, citrato o do con ello el contenido de agua de las heces y la
sulfato de magnesio) o de sodio (fosfato de sodio), frecuencia deposicional. Además de este mecanis-
este último reservado como solución evacuan- mo se les atribuye también un efecto mediado por

163
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

prostaglandinas (PGE2) o por hormonas (colecisto- uso debería reservarse para tratar episodios transi-
quinina). Debido a su bajo coste y eficacia, la Aso- torios de estreñimiento intenso o cuando el enfer-
ciación Americana de Gastroenterología (AGA) los mo no ha respondido a otro tipo de regímenes. La
recomienda como primer paso cuando las medidas melanosis coli es una pigmentación característica
higienicodietéticas no han sido suficientes. Las sa- de la mucosa del colon que aparece en personas
les de magnesio se desaconsejan en casos de insu- que consumen regularmente derivados antraqui-
ficiencia renal por su toxicidad. nónicos (figura 10).
Azúcares no absorbibles AgEnTES EmOliEnTES
Cuando el tratamiento con fibra no es suficiente, A D D D
otra de las opciones terapéuticas válidas son los
En este grupo se incluyen el dioctilsulfosuccinato
azúcares no absorbibles. Estos incluyen el manitol,
sódico, también denominado docusato sódico y
sorbitol, lactulosa, lactitol y polietilenglicol. Al llegar
los aceites minerales incluyendo el aceite de pa-
al colon intactos, son metabolizados por las bacte-
rias del colon, formando por un lado, ácidos grasos rafina. Actúan como detergentes favoreciendo la
de cadena corta que tienen un efecto osmótico y mezcla del componente graso de las heces con el
estimulante de la motilidad, y, por otro, anhídri- componente hidrófilo. El resultado es un reblan-
do carbónico, que es el responsable de uno de los decimiento de las heces, por lo que resultan muy
principales efectos secundarios de estos fármacos: beneficiosos en personas encamadas, en ancianos
la flatulencia. Por su aplicabilidad en la clínica des- que presentan frecuentes episodios de impacta-
tacan la lactulosa, el lactitol, y más recientemente, ción fecal y en pacientes que reciben opiáceos
el polietilenglicol, que incluso ha demostrado ser para el tratamiento del dolor. El aceite de parafina
más eficaz que la lactulosa tal como se comprueba ejerce además un efecto lubricante que favorece el
en un reciente metaanálisis33. El polietilenglicol se deslizamiento de las heces. Cuando se administran
emplea además como solución evacuante para lim- aceites minerales existe el riesgo de neumonitis
piar el colon de forma rápida antes de efectuar un lipoideas por aspiración. Por este motivo resul-
enema de bario o una colonoscopia. Al igual que los tan desaconsejables en pacientes encamados con
anteriores, este tipo de laxantes de acción rápi- dificultades para incorporarse o en personas con
da son de utilidad en todas aquellas condiciones problemas neurológicos que hacen difícil la deglu-
en las que se desea evitar un esfuerzo defecatorio ción. Se ha comunicado que el consumo crónico de
intenso como ocurre en patologías agudas del ca- aceite mineral produce malabsorción de vitaminas
nal anal, después de la cirugía rectal o durante el liposolubles. Sin embargo, este efecto solo ha sido
embarazo. Su uso continuado se asocia a una pér- descrito en niños que ingerían aceite mineral junto
dida de efectividad clínica, por lo que se aconsejan con las comidas. Se recomienda, por consiguiente,
ciclos terapéuticos cortos e intermitentes. El lactitol que su administración se lleve a cabo en momentos
y la lactulosa siguen siendo de elección en el enfer- en que el estómago este vacío de alimento28.
mo cirrótico con encefalopatía hepática.
A D A A A
A
Los agentes de contacto también denominados
laxantes estimulantes actúan sobre el plexo mien-
térico activando la peristalsis y promoviendo la
secreción de agua y electrolitos. Bajo esta denomi-
nación se incluyen los derivados antraquinónicos
(sen, cáscara sagrada o áloe) y los polifenólicos (fe-
nolftaleína, bisacodilo y picosulfato sódico). Existe
controversia acerca de los efectos nocivos que el
uso continuado de estos agentes produce sobre el
plexo mientérico29. En cualquier caso, se desacon-
seja un uso frecuente o prolongado de este tipo de
laxantes por el riesgo de causar disturbios hidro- Figura 10. Imagen endoscópica de una melonosis coli.
electrolíticos (hiponatremia, hipopotasemia). Su

164
8. Estreñimiento

PrEPArADOS DE uSO rECTAl TABLA 8. Agentes procinéticos y estimulantes de la


A secreción intestinal en el tratamiento del estreñimiento
La administración de enemas debe de ser firme-
mente considerada como alternativa en pacientes ❱ Parasimpaticomiméticos:
con heces acumuladas en la región rectosigmoide, Betanecol.
un hecho frecuente en pacientes con constipación Neostigmina.
crónica y en enfermos que permanecen internados
❱ Agonistas de la motilina:
en residencias geriátricas28. La administración de
Eritromicina.
cualquiera de los laxantes mencionados con an-
terioridad suele producir dolor cólico y distensión ❱ Antagonistas de la CCK:
abdominal en este tipo de pacientes. Pueden em- Dexloxiglumida.
plearse enemas de agua templada en un volumen ❱ Estimulantes de la motilidad y la secreción:
no superior a 600 cm3 o enemas de fosfato sódico Misoprostol.
(igualmente efectivos). Se desaconseja, sin embar-
Colchicina.
go, el uso de enemas de agua jabonosa dado que
❱ Agonistas de los receptores 5-HT4:
se han comunicado casos de colitis con necrosis
mucosa y shock anafiláctico13. Prucaloprida.
Velusetrag.
glicerina
ATI-7505.
Se utiliza en forma de supositorios y es de gran uti- ❱ Estimulantes de la secreción:
lidad en niños y ancianos. Estimula la evacuación al Lubiprostona.
promover la incorporación rápida de líquidos hacia
Linaclotida.
la luz intestinal, ejerciendo además un efecto lubri-
cante sobre las heces. Los supositorios de glicerina
pueden ayudar a conseguir un hábito defecatorio,
pero no son un buen tratamiento para el estreñi- peos. En un reciente metaanálisis en el que se re-
miento. unían datos de siete estudios clínicos se concluye
que prucaloprida es significativamente más eficaz
Estreñimiento difícil de tratar que el placebo en el control del estreñimiento32.
Otros agonistas 5-HT4 que están siendo desarrolla-
ESTrEñimiEnTO COn TránSiTO lEnTO dos son el velusetrag y el ATI-7505.
En condiciones ideales, el estreñimiento grave aso- Otra reciente opción de tratamiento son los laxan-
ciado a un tiempo de tránsito lento (inercia cólica) tes estimulantes de la secreción, de los que hay ya
debería ser tratado con agentes procinéticos que dos fármacos desarrollados: la lubiprostona, co-
estimulasen de forma selectiva el peristaltismo del mercializada en Estados Unidos de América, y la li-
colon. Desafortunadamente, y desde la retirada de naclotida que se encuentra en la fase final de desa-
la cisaprida o del tegaserod por sus efectos adver- rrollo, y que muy probablemente se comercializará
sos cardiovasulares, tal agente no está disponible próximamente tanto en Europa como en Estados
para su uso clínico. La tabla 8 muestra un listado Unidos. Ejercen su acción estimulando la secreción
de fármacos con efecto laxante que se han utilizado intestinal de cloro lo que se acompaña de un au-
en pacientes que no han respondido al tratamien- mento de la secreción de agua en la luz intestinal.
to con los laxantes comentados con anterioridad y Ambos fármacos han demostrado su eficacia en el
otros nuevos laxantes cuyo desarrollo está ya muy control del estreñimiento, tanto aislado como aso-
avanzado34. Así, la colchicina (0,6 mg/8 h) o el miso- ciado al SII en varios ensayos clínicos comparados
prostol, en ensayos controlados y doble ciego han con placebo32,36. Además linaclotida ha mostrado
demostrado acortar el tiempo de tránsito colónico tener efecto antinociceptivo controlando no solo el
y mejorar la frecuencia del ritmo deposicional35. estreñimiento sino también el dolor abdominal en
pacientes con SII36.
Entre los nuevos laxantes procinéticos, que son
agonistas de los receptores 5HT4, la prucaloprida Estos nuevos laxantes probablemente puedan re-
es el fármaco cuyo desarrollo está más avanzado, emplazar en el futuro a los laxantes estimulantes,
estando ya comercializada en algunos países euro- evitando con ello sus efectos deletéreos25.

165
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

Obstrucción funcional distal


Los casos de estreñimiento producidos por disfun-
ción del suelo pélvico o disinergia rectoesfinteriana
pueden responder al tratamiento con biorretroali-
mentación o biofeedback, una técnica cuyo objeti-
vo es restablecer el patrón normal de la defecación
mediante la utilización de un programa de reedu-
cación basado en un sistema de apoyo visual que
permite al paciente comprobar, en la pantalla de
un ordenador, la adecuada relajación esfinteriana
durante la maniobra defecatoria37. Mediante este
procedimiento, el 60-70% de los pacientes pueden
mejorar no solamente la disinergia rectoesfinteria-
na, sino el umbral de percepción sensorial rectal,
deteriorado en el 60% de aquellos. A menudo se
requieren varias sesiones para obtener buenos re-
sultados38.
impactación fecal
Algunos pacientes crónicamente estreñidos, fre-
cuentemente encamados o de muy avanzada edad,
presentan fenómenos de impactación fecal que Figura 11. Imagen de un fecaloma impactado en la ampolla
requieren de una extracción digital del fecaloma rectal con gran distensión del colon.
(figura 11). Esta maniobra puede ser extremada-
mente molesta e incluso dolorosa, requiriendo de
sedación e incluso anestesia. Tras la extracción T7, que presentan muy frecuentemente estreñi-
deben adoptarse medidas para prevenir nuevos miento (86%) con dificultad defecatoria, debido a
episodios. En algunos casos se hace necesaria la incapacidad para aumentar la presión intraabdo-
administración de supositorios de glicerina o de minal y a la ausencia de relajación anal durante la
bisacodilo que pueden alternarse con enemas de maniobra defecatoria; patrón B, en pacientes con
agua templada o de fosfato sódico (véase más arri- lesión medular por debajo de T7 y con reflejos sa-
ba). Alternativamente, algunos pacientes pueden cros preservados, en los que el estreñimiento no
beneficiarse de la administración de laxantes sali- es tan frecuente (50%) pero tienen importante di-
nos u osmóticos. Un estudio multicéntrico y doble ficultad evacuatoria debida a que aunque en este
ciego ha demostrado que la administración de una caso pueden aumentar la presión intraabdominal,
solución de polietilenglicol (PEG-4000) a la dosis de presentan un aumento de la resistencia anal y de
14,6 g dos veces al día mejora no solamente la fre- la presión del esfínter anal externo que dificulta la
cuencia de las deposiciones, sino que disminuye su defecación; y patrón C, en pacientes con lesión me-
consistencia y el esfuerzo defecatorio39. dular por debajo de T7 y sin reflejos sacros, en los
Estreñimiento en el paciente con lesión medular que el estreñimiento no es tan frecuente pero sí lo
es la incontinencia anal, debido fundamentalmente
La lesión medular es un problema médico, social y a una incapacidad para aumentar la resistencia anal
económico de primera magnitud. Estos pacientes y la presión del esfínter anal externo41. Según las ca-
tienen en muchas ocasiones dificultad de control racterísticas del paciente pueden necesitar laxantes
de los esfínteres, de forma que el 77% requiere del orales o rectales, tacto rectal, enemas, e incluso in-
uso de laxantes para conseguir una evacuación, el
yección de toxina botulínica en el esfínter anal para
68% precisa tacto rectal, y un 18% necesita más
lograr una evacuación satisfactoria.
de una hora para la defecación40. Se han definido
3 patrones neuropatofisiológicos dependiendo de
Cirugía en el estreñimiento refractario
la altura del nivel de la lesión medular y de si los
reflejos sacros están preservados o no: patrón A, La cirugía debería ser considerada como el últi-
en pacientes con lesión medular por encima de mo recurso para el tratamiento del estreñimiento

166
8. Estreñimiento

crónico inveterado. Antes de considerar esta alter- Megacolon funcional adquirido


nativa debe excluirse la presencia de un trastorno
neuromuscular generalizado con afectación de Su prevalencia es superior entre niños trastornados
la globalidad del intestino, siendo imprescindible y portadores de psicopatías. Su tratamiento con-
realizar una manometría gastrointestinal25. Las op- siste en la descompresión total y continuada del
ciones incluyen la colectomía segmentaria, la colec- intestino dilatado en exceso (figura 12). La adminis-
tomía subtotal con anastomosis ileorrectal o la co- tración de varios enemas diarios asociados o no a
lectomía total con ileostomía. El advenimiento de un laxante suave puede ayudar al colon a recuperar
la cirugía laparoscópica ha contribuído a disminuir su tono muscular.
el trauma operatorio. Es importante subrayar que
la colectomía no mejorará los síntomas que depen- Vólvulo de sigma
den de una obstrucción funcional distal a menos Con frecuencia los pacientes con un dolicomegaco-
que la disinergia haya sido corregida con anteriori-
lon funcional adquirido presentan fenómenos de
dad. Igualmente, la colectomía no proporciona ali-
torsión (vólvulo) del sigma que requieren de una
vio a los pacientes estreñidos con dolor abdominal
desvolvulación endoscópica o quirúrgica para evi-
o problemas psicosociales25,42,43.
tar la necrosis gangrenosa del asa comprometida
Estreñimiento en el niño, el anciano (figura 13).

y la mujer embarazada Resumen y conclusiones


El estreñimiento que aparece en edades extremas El estreñimiento constituye la causa más frecuente
de la vida o en el embarazo representa una situa- de consulta médica por síntomas gastrointestinales
ción especial cuyo abordaje escapa al propósito entre la población general. El consumo de laxantes
editorial de esta obra. Existen excelentes revisiones y la utilización de recursos humanos y técnicos en
de los problemas gastrointestinales en la infancia, el ámbito especializado elevan considerablemente
el enfermo anciano y el embarazo, donde el lector los costes sanitarios para el manejo de este proble-
puede ampliar esta información44,45. ma de salud. Por dicho motivo, es necesario selec-
cionar cuidadosamente a aquellos pacientes que
Complicaciones del estreñimiento serán tributarios de una evaluación especializada.
La decisión de llevar a cabo una prueba comple-
Impactación fecal
Como ya se ha mencionado, ocurre con frecuencia
en pacientes ancianos, debilitados o sometidos a en-
camamiento prolongado. La acumulación de las he-
ces en la ampolla rectal es un fenómeno progresivo,
que endurece paulatinamente el bolo fecal, dificul-
tando su eliminación. La disquecia inicial va dando
paso de forma paulatina a una ausencia de deseos
por defecar, debido a la pérdida de tono muscular
que implica la progresiva distensión de aquella. No
es infrecuente la aparición de una diarrea paradó-
jica con incontinencia, por rebosamiento de heces
líquidas por encima del fecaloma. El diagnóstico no
es difícil si se efectúa un tacto rectal. En los casos
de duda puede procederse a una proctoscopia. Su
tratamiento ha sido comentado más arriba.

lcera estercorácea
Suele ser una consecuencia de la situación anterior
y su patogénesis hay que buscarla en la necrosis is-
quémica secundaria a la compresión ejercida por el
Figura 12. Megacolon adquirido en un caso de constipación
fecaloma. Su localización habitual es la cara poste-
crónica.
rior del recto.

167
Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

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mentaria para excluir una lesión estructural debe vida en los pacientes con estreñimiento funcio-
sustentarse en los datos que proporciona la historia nal. Gastroenterol Hepatol 2004;27:32-8.
clínica, el examen físico y una analítica elemental. 9. Glia A, Lindberg G. uality of life in patients
El cáncer de colon es una causa rara de estreñi- with di erent types of functional constipation.
miento, siendo más probable en aquellos pacien- Scanf J Gastroenterol 1997;32:1083-9.
tes mayores de 50 años, que presentan un cambio 10. Koloski NA, Talley NJ, Boyce PM. The impact of
reciente en el ritmo intestinal, particularmente si functional gastrointestinal disorders on quality
presentan síntomas de alarma, incluyendo la pre- of life. Am J Gastroenterol 2000;95:67-71.
sencia de sangre en las heces, la pérdida de peso 11. Perona M, Mearin , Guilera M, Mínguez M,
y la existencia de una historia familiar positiva. El Ortiz V, Montoro M, Serra J, Casanova C, Rey
tratamiento de un estreñimiento crónico idiopáti- E, Alarcón O, Bujanda L, Lima A, Andreu M,
co incluye básicamente medidas educativas y un Castro M, López A, Carrillo R, Sempere L, Ba-
uso juicioso de laxantes. Aunque la mayoría de los día . Study group on functional gastrointesti-
nal disorders from the Spanish Association of
pacientes responden a este tipo de medidas, algu-
Gastroenteroloy (AEG). Cuestionario específico
nos casos seleccionados requerirán una evaluación de calidad de vida para pacientes con estre-
compleja de la función motora anorrectal y un ma- ñimiento: desarrollo y validación del CVE-20.
nejo especializado del problema. La disinergia rec- Med Clin (Barc) 2008;131:371-7.
toesfinteriana puede beneficiarse de técnicas de 12. Harris MS. Evaluation and treatment of consti-
biorretroalimentación (biofeedback), en tanto que pation. International oundation for functional
la cirugía se reserva para casos muy seleccionados Gastrointestinal Disorders. 2004. www.i gd.org
de constipación grave secundaria a inercia cólica. 13. Montoro M, Guirao R, Jiménez JC. Estreñimien-
Antes de tomar una decisión de este tipo se hace to crónico y estreñimiento de nueva aparición.
necesaria una profunda evaluación psicológica del Cómo enfocar el problema En: Montoro M,
paciente. Bruguera M, Gomollón , Santolaria S, Vilardell

168
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Sección 1. Síntomas gastrointestinales frecuentes

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170
Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17

Artículos de Revisión

Hemorragia digestiva baja


Roque Sáenz F.

Servicio
Gastroenterología,
Departamento de Lower gastrointestinal bleeding
Medicina, Facultad de
Medicina Universidad
del Desarrollo, Clínica
Lower GI bleeding originates distal to the angle of Treitz. Bleeding could be trivial or even massive and
Alemana de Santiago. risky. It represents one third of the total of GI bleeding cases. It is more frequent in men and older patients.
Its mortality is considered among 3-6%. It has worse prognosis if it begins during hospital stay. It is less
Recibido: 6 de abril
de 2015 severe than upper GI bleeding and stops spontaneously in 80% of cases. There is less consensus regarding
Aceptado: 14 de its treatment than in case of upper GI bleeding. Nine percent is originated in the small bowel and 6% has
mayo de 2015 an undetermined origin. It could be active, recent, or chronic. Acute: with less than 3 days of persistence,
Correspondencia a: causing hemodynamic instability, anemia and/or need for blood transfusion. Chronic: any rectal slow or
Dr. Roque Sáenz intermittent bleeding. The need for a transfusion or the occurrence of hemodynamic instability are rare. I
Fuenzalida
Teléfono: [+56 2] 258
tis necessary to identify the bleeding site, for therapy. It recurs in about 25% of cases. Colonoscopy is the
66032 most relevant study, allowing for diagnosis and localized therapy. Endoscopic hemostatic interventions
rsaenz@alemana.cl are available with several options. “Haemospray” has merged as a modern promising new device. Non-
invasive imaging studies are becoming more and more relevant and available, as well as interventional
radiology for therapeutic purposes; a modern approach to this pathology. It helps to obtain information
about bleeding activity, its anatomic origin, and also focuses the study, in order to perform endo-vascular
therapy or suggests the localized endoscopy approach. This review represents our approach to the mana-
gement of lower GI bleeding.
Key words: Lower gastrointestinal bleeding, colonoscopy, CT- tomography, management.

Escenario clínico1-3 Las hemorragias crónicas se presentan con sangre


oculta en deposiciones, episodios ocasionales de
Es importante conocer las causas de sangrado melena, o incluso rectorragia en pequeña cuantía o
oculto, moderado y grave. Las diferencias de enfo- anemia ferropriva.
que en pacientes estables e inestables y las opciones El definir el sitio de origen de la hemorragia o su
terapéuticas, desde las mini invasivas hasta la ciru- pronóstico ha sido impreciso.
gía4. Enfrentamos la HDB según el escenario clínico,
Es importante considerar la estabilización del como HDB aguda, crónica o masiva.
paciente y su transferencia a un hospital con mayo- La estabilidad hemodinámica y la forma de sangrar
res recursos, privilegiando técnicas mini-invasivas indicarán el orden en el cual realizar procedimientos
y manejo multidisciplinario con gastroenterólogo, diagnósticos y terapéuticos. Un hematocrito de inicio
radiólogo intervencionista, intensivista y cirujano5. menor de 35%, signos vitales anormales luego de una
La presentación más común de la hemorragia di- hora de iniciado el manejo médico, y la presencia de
gestiva baja (HDB) es la hematoquezia; puede haber abundante sangre al examen rectal, indican de HDB
rectorragia, melena, inestabilidad hemodinámica, grave y pronóstico adverso.
anemia y dolor abdominal. Evaluar presencia de patología orificial, causa
Hematoquezia es sangre en el papel después de de- frecuente de sangre fresca. Dolor anal, prurito, sangre
fecar o mezclada con las deposiciones. Rectorragia es roja fresca en el papel, sugieren fisura anal o patología
expulsión de sangre fresca (roja, brillante), sin deposi- hemorroidal. La inspección anal, anoscopia y examen
ciones, y melena, deposiciones negras características. rectal son de regla.
Se presenta frecuentemente como rectorragia o he- En todos los casos de HDB, confirmados o con sos-
matoquezia, y puede aparecer como melena en casos pecha de origen orificial, se debe realizar un estudio
de constipación o tránsito lento. con colonoscopia diagnóstica preventiva. El motivo
En tránsito acelerado o sangrado masivo, 10% de por el cual el paciente se realiza el procedimiento
los casos de rectorragia obedecen a hemorragia diges- es porque se encuentra motivado por descartar otras
tiva alta (HDA)6. lesiones coexistentes.

S 12
HEMoRRAGIA DIGESTIVA BAJA - R. Sáenz F.

Artículos de Revisión

La HDB asociada a elevación del BUN o bilirrubi- en sangrado intermitente o lesiones fuera del alcance
na, hace más probable el origen alto. Una sonda naso- del colonoscopio11. Pueden conducir a un diagnóstico
gástrica puede ayudar al diagnóstico. La presencia de precoz, con terapia dirigida y más costo-efectiva,
aspirado gástrico claro no descarta la HDA. La pre- evitando procedimientos innecesarios. Suelen ser de
sencia de bilis hace menos probable el sangrado alto. mayor utilidad en sangrado activo12.
La presencia de sangre, coágulos o “coffee ground La cintigrafía con glóbulos rojos marcados es me-
material” significa realizar endoscopia digestiva alta. nos exacta y disponible y ha perdido terreno frente a
La disponibilidad, sencillez y certeza de la endosco- otros estudios de imágenes.
pia digestiva alta, apoyan su realización para descartar Si la hemorragia arterial es de 0,5 ml/min, la arte-
fuente de sangrado en el tubo digestivo superior. riografía puede demostrar extravasación del contraste
La sonda nasogástrica, descartada la HDA, sirve al lumen, identificando el sitio de la hemorragia. Es
para la preparación intestinal: 3-4 litros de PEG (1 litro un procedimiento efectivo, pero invasivo; se asocia
cada 30 min). El PEG o la fosfosoda (45 ml x 2) son a complicaciones como daño renal por contraste,
usualmente administrados vía oral. Permiten una pre- daño arterial e isquemia mesentérica. Su rendimiento
paración adecuada del colon en 3-4 h. Los proquiné- es variable ya que requiere un sangrado activo y la
ticos evitan vómitos y aseguran el avance del laxante. mayoría de las HDB son intermitentes. Suele ser de
En niños y jóvenes se evaluará alergia a la leche difícil acceso en algunos escenarios, pero posee alta
de vaca, pólipos, divertículo de Meckel, enfermedad especificidad para localizar el sitio del sangrado y
inflamatoria intestinal, además de patología orificial. permite un diagnóstico preciso en patología vascular
En pacientes añosos, en quienes aumenta este diag- característica. La arteriografía informa sobre alteracio-
nóstico7, pensar en enfermedad diverticular, angio- nes vasculares neoplásicas y su localización exacta, o
displasia, enfermedad isquémica, cáncer colorrectal, el aspecto radiológico inequívoco de la angiodisplasia
enfermedad inflamatoria intestinal, pólipos, uso de además, permite intervención hemostática endarterial.
AINE, lesiones actínicas (antecedentes de radiotera- El angio-TC multi-corte, nueva herramienta diag-
pia) y descartar la patología orificial. Considerar otras nóstica no-invasiva, ha desplazado al resto de estudios
malformaciones vasculares. En mujeres jóvenes, plan- de imágenes como enfoque inicial13-18.
tear endometriosis y programar el estudio próximo a Es una herramienta cada vez más disponible. Eva-
la menstruación. lúa el tronco celíaco y arterias mesentéricas, además,
permite obtener imágenes y caracterización de irriga-
ción de la pared intestinal, malformaciones vasculares
Indicaciones y contraindicaciones específicas locales y del sitio de la hemorragia. Orienta respecto
para procedimientos diagnósticos y del sitio de sangrado, su causa, magnitud y sugiere
terapéuticos7,8 la estrategia terapéutica adecuada. Tiene sensibilidad
de 70% para detectar vasos anormales en la pared
Es necesario el enfoque de acuerdo al escenario colónica, contraste venoso precoz y ensanchamiento
clínico y disponibilidad de recursos. (Concepto de de arterias distales.
cascadas). Es útil para representar la irrigación esplácnica y la
Pacientes con sangrado activo o con inestabilidad anatomía de las ramas arteriales mesentéricas.
hemodinámica requieren diagnóstico urgente y una Se usan microcoils, partículas de alcohol polivi-
intervención para lograr la hemostasia. nílico o trombina (coágulos autólogos), para ocluir
La colonoscopia precisa el sitio de sangrado en vasos sangrantes, reemplazando infusiones de vaso-
HDB, entre 72-86%, alcanzando el ciego hasta en presina o terlipresina intrarteriales, con resultados más
95%. El rendimiento de la colonoscopia es mayor, en permanentes. La vasopresina intra-arterial reduce la
forma precoz. Los pacientes con HDB en quienes se hemorragia en 70-80%, pero transitoriamente. El uso
realizó colonoscopia tienen una estadía hospitalaria de somatostatina es controversial.
menor9. Permite diagnosticar la mayoría de las causas La disminución del flujo esplácnico permite una
de HDB, además de tratar en forma directa los casos detención espontánea del sangrado, facilitando el
de HDB aguda. tratamiento endoscópico local.
Para la mayoría de los pacientes con HDB la colo- El enema baritado no tiene utilidad en el estudio
noscopia es la única intervención necesaria10. de la HDB y debe evitarse. Tiene bajo rendimiento
No requiere de sangrado activo para diagnosticar y dificulta estudios endoscópicos o angiográficos
y tratar la fuente del sangrado. (Electrocoagulación, posteriores.
clips hemostáticos, Hemospray®, etc.). La HDB puede originarse en el intestino delgado.
La angiografía, los métodos modernos de imagen La enteroscopia de empuje doble o monobalón y la
y la cirugía, aparecen en instancias de sangrado que cápsula endoscópica mejoran el enfoque en el estudio
no permiten estabilización o preparación de colon, de la HDB20.

Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17 S 13


HEMoRRAGIA DIGESTIVA BAJA - R. Sáenz F.

Artículos de Revisión

La cápsula endoscópica es considerada “gold significativa, obliga a realizar un estudio durante la


standard” en HDB de origen oscuro. Su costo es una hemorragia, usando los recursos disponibles: Angio-
limitante, no obstante, se debe considerar su costo- TC, angiografía de urgencia, embolización, uso de
beneficio. En 58% de los pacientes tiene hallazgos cápsula endoscópica, cintigrafía con glóbulos marca-
positivos en cápsula endoscópica versus 28% con dos e ileocolonoscopia.
otros estudios de imágenes. Se utiliza luego de una co- La colonoscopia tendría su lugar hoy, después de la
lonoscopia negativa. Existen evidencias que aconsejan Angio TC, donde se disponga de este recurso y se rea-
su uso precoz como primer examen en hemorragias liza antes de la arteriografía o cirugía, focalizando su
del tubo digestivo medio. estudio en la zona señalada de actividad de la hemo-
La enteroscopia es útil también en estudio de he- rragia. La HDB persistente o con repercusión clínica
morragias digestivas de origen oscuro o en aquellos y hemodinámica significativa requiere de radiología
con estudio angiográfico, cintigráfico o cápsula con intervencional (embolización) o cirugía.
definición de área específica a explorar o tratar. Su
uso como instrumento diagnóstico/terapéutico de
Algoritmo de aproximación a la HDB
primera línea debe evaluarse con estudios controlados
randomizados.
Lo primero, en casos graves, es reanimar y hospi-
Los enteroscopios actuales permiten la realización
talizar en una unidad de mayor complejidad e iniciar
de tratamientos locales como coagulación, polipec-
la reanimación al mismo tiempo que el estudio etio-
tomías o resecciones de mucosa, con el tratamiento
lógico comenzando por la instalación de vía venosa
quirúrgico-endoscópico definitivo de dichas lesiones.
gruesa y realizar exámenes de laboratorio básicos.
La cápsula endoscópica es fácil de realizar, no re-
Estudio de coagulación, hemoglobina, clasificación
quiere sedación, y es un procedimiento que cada vez
de grupo sanguíneo. La preparación del colon con
es más barato y disponible. La enteroscopia es un exa-
polietilenglicol es una buena opción.
men largo, requiere sedación, requiere de un experto
Es frecuente la medicación que disminuye la capa-
para su realización y de la tecnología más actualizada
cidad de coagular y debe considerarse en el manejo.
posible. Si la cápsula endoscópica muestra una lesión
se realizará la enteroscopia para biopsiar o realizar el
tratamiento local. Angio-TC en el diagnóstico y manejo
Los enteroscopios de doble y mono balón exploran de la hemorragia digestiva aguda13-18
mayor extensión y tienen mayor maniobrabilidad. El
enteroscopio “spiro”, utiliza la disposición anatómica Una vez estabilizado el paciente, lo que correspon-
en espiral del intestino delgado, facilitando su ejecu- de es identificar la causa y lugar de sangrado para su
ción. tratamiento correspondiente.
Excepcionalmente se realiza un estudio endoscó- La colonoscopia tendría sólo 52,9% de sensibili-
pico intraoperatorio, por hemorragia persistente de dad, por las dificultades para obtener un colon limpio
probable origen en el intestino delgado o en caso de y visión óptima.
no disponer de enteroscopia para su estudio. La angiografía convencional se utiliza hoy con
La resección del segmento sangrante es una alter- fines terapéuticos, una vez identificada una lesión
nativa. Los cirujanos deben ser parte, desde el inicio, vascular.
del equipo que evalúa los casos de HDB, tomando La TC multi-detector está disponible en la mayor
las mejores y más oportunas decisiones terapéuticas. parte de los hospitales modernos. Es el examen de
La cirugía está indicada con transfusión de más de elección con sus imágenes de alta resolución. Sería
6 unidades de glóbulos rojos, hemorragia persistente positivo con sangrado de hasta 0,35 ml/min.
o recurrente e inestabilidad hemodinámica. Con sitio Se realizan reconstrucciones multi-planares o
de hemorragia conocido se puede realizar una resec- tridimensionales con mejor definición de la lesión
ción segmentaria. Si éste es incierto, se realizaría sangrante.
una colectomía total si no se identifica el sitio en el El diagnóstico se sustenta en la observación de
intraoperatorio. La mortalidad global de la cirugía en extravasación del contraste yodado al lumen, esto es
esta condición clínica es de 5-10%. presencia de un foco de atención en fase arterial y que
En pacientes añosos y con comorbilidades, la deci- se intensifica en fase portal o venosa.
sión de realizar cirugía debe considerarse precozmente Este foco puede ser lineal, espiroidal, en jet o nu-
y evitar la politransfusión, inestabilidad, disfunción mular. Las limitantes son la radiación y las precaucio-
cardiovascular o trastornos de la coagulación. En nes necesarias respecto al uso de contrastes.
ocasiones contribuye una exploración endoscópica Aparece precozmente en el algoritmo en casos
intraoperatoria, con o sin enterotomía. de sangrado significativo y que se cuente con esta
La hemorragia continua, persistente o clínicamente tecnología.

S 14 Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17


HEMoRRAGIA DIGESTIVA BAJA - R. Sáenz F.

Artículos de Revisión

Técnica de la colonoscopia19 Descripción de los procedimientos hemostáticos

Comienza con la reanimación y estabilización La terapia endoscópica local se utiliza en aquellos


cardiovascular del paciente sangrante, se debe iniciar pacientes con sangrando activo, que sangran en forma
inmediatamente la preparación del colon. recurrente o tienen una lesión potencialmente sangran-
Realizar la colonoscopia en las primeras 12-24 h te susceptible de terapia endoscópica.
del ingreso hospitalario. Algunas veces el vaso sangrante se observa en el
En el caso de Angio TC, arteriografía o cintigrafía domo de un divertículo. Se debe buscar dirigídamente
previas, se focaliza el estudio en los segmentos com- este sitio como origen de la hemorragia. En estos ca-
prometidos. sos se debe usar clips o ligaduras elásticas.
En procedimientos prolongados, evitar sobre- Si se demuestra una hemorragia originada en un
distender el colon y el intestino delgado, (válvula divertículo, sin identificar el vaso, inyectar epinefrina
ileocecal incompetente). Una opción es utilizar CO2 en su borde. Si se identifica una arteria a este nivel,
cuando esté disponible. El procedimiento debe incluir tratar con terapia local.
la ileoscopia terminal. La ausencia de sangre a este Si el sitio de la hemorragia muestra sangre fresca.
nivel hace improbable el origen en el intestino del- Se observa en las proximidades del epicentro coágulos
gado. El retiro es cuidadoso y metódico, en busca de y líquido color rojo vinoso.
hemorragia activa o estigmas de hemorragia, similar Si se detecta el sitio de origen del sangrado, inyec-
a lo que se realiza en la HDA. Se debe realizar lavado tar solución de epinefrina 1:10.000 o 1:20.000. En pa-
local de cada segmento; un irrigador endoscópico cientes añosos o con patología vascular, la epinefrina
facilita esta acción. debe ser restringida o usada diluida.
En vaso visible se debe usar métodos combinados
como inyectoterapia y endoclips o algún método tér-
Preparación del paciente mico. En coágulo adherente, guillotinarlo y tratar la
lesión subyacente con precisión. El uso de Heather
Previo al estudio, el paciente y familiares deben probe, APC y electrocauterio tiene similares resul-
estar informados sobre la situación clínica, probable tados.
evolución, plan de diagnóstico y/o tratamiento, riesgos Se debe marcar la lesión utilizando tinta china
asociados y posibles soluciones. Se requiere firma (SPOT) o un clip hemostático para permitir su fácil
del consentimiento informado para realizar todos identificación, para nuevos estudios, tratamiento local
los procedimientos necesarios para resolver el caso, o cirugía. En vaso no sangrante, o sospechoso, usar
incluyendo la cirugía. algún método térmico.
El uso local de epinefrina en angiodisplasias o
angiomas no es aconsejable previo al APC. Las lesio-
Sedación nes desaparecen con la vasoconstricción, haciendo el
tratamiento posterior casi imposible.
Es recomendable contar con un anestesiólogo, Usar solución salina para realizar una pápula
quien se hará cargo de la reanimación y estabilidad submucosa, sobre todo en el ciego y colon derecho,
cardiovascular, durante el tiempo necesario. haciendo estos procedimientos más seguros. También
se aconseja aspirar el exceso de aire para asegurar un
grosor aceptable de la pared.
Equipamiento y accesorios
Aspectos particulares de la HDB
Utilizar instrumental con canal de trabajo ancho
y asistencia de un técnico de endoscopia experimen- Las causas más frecuentes de hemorragia digestiva
tado. baja son la enfermedad diverticular y la angiodispla-
Disponer de todos los accesorios necesarios en sia.
óptimas condiciones. Inyectores, APC, Heather pro- El 60% de los pacientes con HDB tiene divertícu-
be, electrocauterio, clips, loops y ligaduras elásticas; los; habitualmente no son la causa de la hemorragia.
últimamente, Hemospray® o polvo hemostático. Je- Los portadores de divertículos colónicos que usan
ringas de 100 ml o irrigador para el lavado vigoroso AINEs están en riesgo elevado de presentar HDB. (La
y permanente, y paciencia del endoscopista. Se puede mitad de los pacientes con sangrado diverticular ha-
inyectar por el canal de trabajo, fluidos detergentes bría consumido AINEs). La lesión local corresponde
que permitan mejorar la visión. El agua oxigenada a erosiones, sangrado activo y vaso visible.
debe evitarse, porque produce burbujas al contacto La hemorragia diverticular se presenta como hema-
con la sangre, dificultando la visión. toquezia, sangre color marrón o rojo brillante.

Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17 S 15


HEMoRRAGIA DIGESTIVA BAJA - R. Sáenz F.

Artículos de Revisión

Las angiodisplasias son causa frecuente de HDB Ante la presencia de una mucosa de aspecto azul
y se ubican habitualmente en colon derecho y ciego. oscuro, negro o verde, se recomienda manejo quirúr-
Si se confirman como origen de la hemorragia o son gico, evitando perforación y peritonitis.
el único hallazgo en un paciente con HDB iterativa, En caso de estenosis vascular crítica, realizar ci-
deben ser tratadas. rugía, radiología intervencionista con angioplastia o
El 30-40% de los pacientes con hemorragias ocul- endoprótesis.
tas positivas tienen angiodisplasias. La colonoscopia Los pólipos también son causa de hemorragia y
detecta 80-90% de los casos y es potencialmente deben ser tratados con polipectomía.
terapéutica. La polipectomía o mucosectomía es causa frecuen-
Estudios de autopsia muestran angiodisplasias en te de sangrado iatrogénico. Es necesario prevenir el
50% de los casos. sangrado en estos casos, utilizando clips o loops,
Otras causas de HDB que requieren tratamiento inyectoterapia con epinefrina, que produce vasocons-
endoscópico son las ectasias vasculares y las lesio- tricción, permitiendo mejor coagulación y la inflama-
nes de Dieulafoy. En estos casos se recomienda usar ción local de la arteria que permite la hemostasia. La
inyectoterapia más algún procedimiento endoscópico constricción con el asa por algunos minutos permite
como coagulación o tratamiento térmico o mecánico que se active la coagulación dentro de los vasos para
(clips y ligaduras elásticas). luego electro-coagular y resecar la pieza.
En algunos casos en que el vaso es difícil de tratar, El sangrado postpolipectomía debe tratarse de in-
o se ha detectado mediante la angio-TC un sangrado mediato con re-resección con asa del tallo, inyección
evidente, se recurre a la radiología intervencionista de adrenalina, electrocoagulación, APC, etc., o con
(embolización) o cirugía. elementos mecánicos como clips y loops.
En el sangrado rectal, la colonoscopia es el examen En 2-5% casos de polipectomías pueden sangrar
primero. A veces no es posible en pacientes inestables hasta el día 17, post procedimiento (5° día en prome-
o puede no diagnosticar la causa. Las imágenes 3D de dio); la mitad requiere transfundirse.
MDCT y Angio-CT ofrecen una opción diagnóstica, Se recomienda suspender AINEs, Ginko-biloba,
especialmente en sangrado activo e inestabilidad he- aspirina® y anticoagulantes antes de la polipectomía
modinámica. Las causas más frecuentes de esta situa- (5 días antes).
ción son várices rectales, malformaciones vasculares, Reemplazar temporalmente anticoagulantes por he-
colitis isquémica, enfermedad inflamatoria intestinal, parina subcutánea. En pacientes con riesgo de sangrar,
colitis infecciosa y cáncer rectal18. usar electrocoagulación y clips y loops.
El uso de CT angiografía con multidetector La sobre distensión temporal puede generar falla
(MDCT), gracias a su velocidad, resolución, técnicas transitoria en la circulación, provocando lesiones ulce-
multiplanares y capacidades angiográficas permiten radas en la mucosa precozmente post-procedimiento.
excelente visualización tanto del intestino delgado No ocurre con uso de CO2.
como del grueso. Es un excelente método tiempo- El cáncer de colon es causa de HDB, para estos
eficiente para dirigir y planificar la terapia16. casos el tratamiento local está indicado en lesiones
El 2-6% de las HDB significativas corresponden incipientes y como paliación. La mayoría de los cán-
a enfermedad inflamatoria. Son más frecuentes en ceres de colon que sangran deben someterse a cirugía.
enfermedad de Crohn que en colitis ulcerosa; el san- El uso de Hemospray local es una alternativa actual.
grado puede ser difuso. En ocasiones se identifica un La colitis o rectitis actínica es también causa co-
vaso en una úlcera, susceptible de terapia local. La mún de HDB. La indicación de radioterapia a la pelvis
cirugía es necesaria en alrededor de 20-30% de estos esta aún vigente en pacientes con cáncer de próstata
casos. La colitis infecciosa causa lesiones difusas, que o ginecológico.
responden al tratamiento específico. Las arañas vasculares (spiders) son causa de estas
La colitis isquémica es la tercera causa de HDB. Se hemorragias. Es útil el tratamiento local con APC o
presenta como complicación de otro estado mórbido coagulación multipolar. En recto inferior usar retro-
como enfermedad arterial oclusiva, envejecimiento flexión.
de la población, consumo de cocaína, atletas de alto
rendimiento, cirugía cardiovascular con hipotensión Conclusión3-5
y el uso de terapia hormonal. Es más frecuente en
el ángulo esplénico, colon descendente y sigmoides. Hemos realizado una revisión de aspectos relevan-
Sospechar compromiso isquémico ante la presencia tes, prácticos y actualizados del manejo de la HDB.
de vesículas azules, áreas ulceradas y la presencia de Cada vez más importante, es el aporte en el diag-
vasos con escaso o nulo sangrado al biopsiar. Puede nóstico de estudios de imágenes como la Angio-TC,
haber compromiso asimétrico. Se puede ver estenosis, que precisan en forma no invasiva los datos del san-
en especial si se trata de un segundo episodio. grado digestivo; actividad, localización y magnitud.

S 16 Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17


HEMoRRAGIA DIGESTIVA BAJA - R. Sáenz F.

Artículos de Revisión

Aportan en terapéutica con embolización mediante Puede presentarse como activa, reciente o crónica.
catéteres angiográficos y sustancias que ocluyen el Aguda: con menos de 3 días de evolución, que cause
vaso sangrante. inestabilidad hemodinámica, anemia y/o necesidad de
La colonoscopia diagnóstica terapéutica es el mé- transfusión. Crónica: cualquier hemorragia a través
todo más ampliamente disponible y eficaz. Se cuenta del recto, con pérdida de sangre lenta o intermitente.
con métodos de hemostasia endoscópica como la La necesidad de transfusión o inestabilidad hemodi-
inyectoterapia, clips y loops, APC y hemospray entre námica son raras. Es necesario identificar el sitio de
otros. sangrado para su terapia, ya que recurre en 25% de
los casos. La colonoscopia es el estudio más rele-
Resumen vante, que permite diagnóstico y terapia localizada.
Existen intervenciones endoscópicas que permiten la
La hemorragia digestiva baja (HDB) se origina hemostasia con varias opciones, a las que se agrega
distal al ángulo de Treitz. Se puede presentar desde recientemente el Hemospray®. Destaca el progresivo
un sangrado trivial, hasta una hemorragia masiva y relevante rol del estudio de imágenes no-invasivo
con riesgo vital. La HDB representa un tercio de los en el enfrentamiento diagnóstico de la HDB, como
casos de hemorragia gastrointestinal. Más frecuente gran avance en el enfrentamiento moderno de esta
en hombres y pacientes añosos. Tiene una mortali- patología. Evidencia la actividad del sangrado, el ori-
dad entre 3-6%. De peor pronóstico si se presentare gen anatómico, focaliza el estudio, y permite realizar
durante la hospitalización. Menos grave que la alta; terapia endo-vascular o focalizar la terapia endoscó-
cesa espontáneamente en 80% de los casos. Existe pica. El presente artículo, señala nuestra forma de
menos consenso terapéutico que en la hemorragia di- enfrentar la HDB.
gestiva alta. El 9% se origina en el intestino delgado. Palabras clave: Hemorragia digestiva baja, colo-
En 6% de los casos no se puede determinar su origen. noscopia, angiotomografía, manejo.

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Gastroenterol. latinoam 2015; Vol 26, Supl Nº 1: S 12-S 17 S 17


https://doi.org/10.31434/rms.v6i2.645
Revista Médica Sinergia
Vol.6 Num.2, Febrero 2021, e645
revistamedicasinergia@gmail.com

Síndrome intestino irritable


Irritable bowel syndrome

1
Dra. Nathalya Zeledón Corrales
Área de salud de Oreamuno, Cartago, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0001-9540-1840

2
Dr. José Antonio Serrano Suárez
Investigador independiente, San José, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0003-0304-1986

3
Dr. Sebastián Fernández Agudelo
Investigador independiente, San José, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0002-3871-6827

Recibido Corregido Aceptado


25/08/2020 16/09/2020 05/12/2020

RESUMEN
El síndrome de intestino irritable es una patología frecuente en la práctica clínica. Está caracterizado
por dolor abdominal, alteración en el hábito intestinal, distensión abdominal y flatulencias. Los criterios
Roma IV son una herramienta para ayudar al clínico a definir el diagnóstico y la necesidad de realizar
pruebas en el paciente. No hay una causa especifica identificada, es conocido que existe una alteración
en el eje bidireccional cerebro-intestino el cual está influenciado por múltiples factores. Existen 4
subtipos, síndrome de intestino irritable con constipación, con diarrea, mixto e inespecífico. De acuerdo
con el subtipo se designa el mejor tratamiento. Existen terapias farmacológicas y no farmacológicas que
permiten brindar al paciente el enfoque multidisciplinario que requiere esta patología debido a su
heterogénesis.

PALABRAS CLAVE: síndrome intestino irritable; colitis; enfermedades del sistema digestivo; diarrea;
estreñimiento.
ABSTRACT
Irritable bowel syndrome is a frequent pathology in clinical practice. It is characterized by abdominal pain,
alteration in bowel habit, bloating and flatulence. The Rome IV criteria are a tool to help the clinician
define the diagnosis and the need to carry out tests on the patient. There is no specific cause identified,
it is known that there is an alteration in the bidirectional brain-intestine axis which is influenced by multiple
factors. There are 4 subtypes, irritable bowel syndrome with constipation, with diarrhea, mixed and
nonspecific. According to the subtype, the best treatment is designated. There are pharmacological
and non-pharmacological therapies that allow providing the patient with the multidisciplinary approach
1
Médica general, graduada de la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED), cod. MED15226 Correo: nathaliazeledon30@gmail.com
2
Médico general, graduado de la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED), cod. MED15665. Correo: jose_serrano07@hotmail.com
3
Médico general con Maestria universitario en Fisiología de la Universidad de Valencia, graduado de la Universidad de Ciencias Médicas
(UCIMED), cod. MED15221 . Correo: sebastian.fernandez.cr.1992@gmail.com

e645 Revista Médica Sinergia Vol.6 (2), Febrero 2021 - ISSN:2215-4523 / e-ISSN:2215-5279
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Síndrome intestino irritable - Dra. Nathalya Zeledón Corrales, Dr. José Antonio Serrano Suárez, Dr. Sebastián Fernández Agudelo

that this pathology requires due to its heterogenesis.

KEYWORDS: irritable bowel syndrome; colitis; digestive system diseases; diarrhea; constipation.

INTRODUCCIÓN MÉTODO

El síndrome del intestino irritable (SII) es un Para esta revisión bibliográfica la búsqueda
trastorno gastrointestinal funcional común. de información se realizó en la base de datos
Esta afección crónica es caracterizada por PubMed y Scielo. Se utilizaron los siguientes
dolor abdominal, alteración en el hábito descriptores: Síndrome de intestino irritable,
intestinal, distensión abdominal e hinchazón Colitis, Distensión abdominal. Fueron
(1). seleccionados artículos científicos de
Los criterios de Roma IV, fueron revisión y metaanálisis publicados entre el
establecidos por un grupo de expertos en 2016 y el 2020. Para la selección de las
trastornos gastrointestinales funcionales y publicaciones se analizó el texto completo y
constituyen el estándar actual para se identificaron las más relevantes para
diagnosticar el SII. Según estos criterios el desarrollar el artículo.
SII se clasifica en cuatro subtipos: SII con
diarrea, SII con estreñimiento, SII con EPIDEMIOLOGÍA
síntomas mixtos de estreñimiento y diarrea,
o SII inespecífico (2). La prevalencia mundial del SII es del 10% al
Con una prevalencia del 10% al 20% el SII 20%. Es el trastorno gastrointestinal más
tiene un impacto negativo en la calidad de comúnmente diagnosticado. El SII a menudo
vida de las personas y productividad laboral, se manifiesta en la infancia, aunque la
como consecuencia los pacientes sufren prevalencia máxima parece ser en la edad
disminución en sus ingresos, dificultad a la adulta temprana. Las mujeres se ven
hora de socializar y de viajar. afectadas en una proporción de 2: 1 con
Además, representa una carga respecto a los hombres y hasta la mitad de
socioeconómica importante porque los las personas afectados buscan atención
pacientes afectados utilizan más recursos médica (4).
sanitarios (1,3). En 2018 se realizó un estudio liderado por
El SII es una condición heterogénea expertos en el campo del SII y financiado por
compleja con patogenia multifactorial por lo la industria farmacéutica donde se destacó
que no existe un tratamiento que sea la importancia de considerar el efecto del SII
beneficioso para todos los pacientes. El en todo el mundo. El estudio de reveló que a
tratamiento debe ser individualizado basado las personas con SII les toma en promedio 4
en el subtipo y gravedad de cada paciente años recibir un diagnostico con la sensación
(2). de que su médico no las toma en serio.
El objetivo de este trabajo es revisar la Además, el estudio mostró que las personas
bibliografía más actualizada para pueden sentirse estigmatizadas por su
comprender mejor esta patología y así tomar diagnóstico y pueden experimentar
mejores decisiones en cuanto a manejo y problemas para acceder a un tratamiento y
terapia para estos pacientes. apoyo efectivo (3).

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FISIOPATOLOGÍA inflamatorias como el factor de necrosis


tumoral alfa, la interleucina 6, el factor de
La fisiopatología del SII es compleja y inducción linfocitario, el factor de
multifactorial. Todavía no se ha determinado crecimiento nervioso y la interleucina 1.
una causa especifica. Numerosos estudios La inflamación provocada por estos
han desarrollado hipótesis sobre la factores causa un aumento en la
fisiopatología del SII. Existen varios factores permeabilidad de la barrera con una
o mecanismos involucrados en la consecuente pérdida de fluido intersticial
patogénesis del SII capaces de ejercer hacia la luz intestinal que puede explicar
influencia en el eje bidireccional cerebro- la aparición súbita de diarrea y el
intestino así como en el intestino de manera estreñimiento al normalizarse los niveles
local (4). Dentro de estos se pueden resaltar: (4).

• Genética: muchos pacientes con SII


• Trastornos en la motilidad y
refieren tener familiares con el mismo
sensibilidad visceral: en los pacientes
diagnóstico, los estudios han analizado
con SII se ha demostrado que hay un
la agregación familiar del SII y sugieren
aumento de retención de gas
un componente genético subyacente.
acompañado de una disminución en la
Las investigaciones se han centrado en
velocidad del tránsito intestinal desde el
tratar de identificar posibles marcadores
duodeno hasta el recto. Este aumento de
genéticos en el SII. Se ha sugerido que
los niveles de gas acompañado del
un polimorfismo genético en el promotor
tiempo de tránsito intestinal causa un
de la región del gen SLC6A4 que codifica
aumento en la sensación de distensión
el transportador de recaptación de
abdominal y dolor visceral en sujetos con
serotonina (SERT) podría estar asociada
SII (4).
con el SII. Otros estudios han
identificado variantes patogénicas raras
• Alimentación: los pacientes con
en genes que codifican sacarasa-
frecuencia refieren que ciertos alimentos
isomaltasa, un canal de sodio
desencadenan sus síntomas
dependiente de voltaje, lo que sugiere
abdominales. Algunos pacientes con SII
que los síntomas del SII en una pequeña
han reportado un beneficio sintomático al
proporción de pacientes podrían estar
reducir las cantidades de oligosacáridos
relacionados con intolerancia a los
fermentables, disacáridos,
disacáridos o canalopatías iónicas. A
monosacáridos y polioles (FODMAP) en
pesar de estos hallazgos todavía falta
su dieta. Estas moléculas tienen un
esclarecer si realmente contribuyen a los
efecto osmótico, lo que aumenta la carga
mecanismos fisiopatológicos (3).
de líquido en el tracto gastrointestinal y
aumenta la distensión intestinal.
• Sistema inmunitario y trastornos de la También conducen a la fermentación
barrera epitelial: los pacientes que bacteriana con una mayor producción de
sufren de SII suelen tener un aumento en gas en el tracto intestinal (5).
varias células proinflamatorias como los
mastocitos y los linfocitos, así como un • Microbioma y disbiosis
aumento en ciertas citocinas gastrointestinal: investigaciones han

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evidenciado que una interrupción en la sensibilidad visceral, que, a su vez media


biodiversidad, riqueza y composición del en la sintomatología del SII, como el
microbiota intestinal (proceso llamado tránsito y el hábito intestinal o la
disbiosis), juega una función clave en la percepción del dolor. Del mismo modo,
patogénesis del SII. La disbiosis puede los cambios en el intestino pueden dar
ocurrir a través de varios mecanismos retroalimentación al cerebro, lo que
como crecimiento excesivo o la resulta en efectos sobre el bienestar
desaparición de especies bacterianas psicológico y la salud. Es importante
específicas, alteraciones en la riqueza de tener en cuenta que los síntomas
bacterias y mutación o transferencia de psicológicos pueden haberse
genes. En pacientes con SII, la disbiosis desarrollado como consecuencia de la
gastrointestinal se ha asociado con un gravedad y el efecto del SII en el
aumento de la percepción visceral del paciente, o podrían haber estado
dolor y una mayor permeabilidad de la presentes antes del inicio de los
mucosa provocada por defectos en la síntomas gastrointestinales (1,3).
barrera epitelial mucosa, que interfiere
con la homeostasis inmune intestinal y • Sexo femenino: hay una mayor
posteriormente promueve la inflamación prevalencia de SII en pacientes
intestinal y aumenta la activación femeninas,
inmunitaria celular y mucosa. También Las variaciones biológicas en las
se ha asociado con cambios en la hormonas sexuales, los mecanismos
motilidad intestinal y alteraciones del serotoninérgicos, las vías del dolor, los
sistema nervioso entérico. Existe problemas psicosociales y la
también un eje microbiota- intestino- comorbilidad uroginecológica dan como
cerebro ya que se demostró que la resultado diferencias entre pacientes
microbiota intestinal puede verse femeninos y masculinos. Las mujeres
afectada en cuanto a motilidad intestinal, presentan mayor percepción del dolor,
secreción y función inmune, por la esto se ve manifestado en los efectos de
actividad cerebral (6). las hormonas sexuales en la sensación
del dolor, una mayor activación de los
• Factores psicológicos: centros asociados con las emociones
tradicionalmente, el SII se ha visto como cerebrales durante la estimulación
un trastorno del cerebro-intestino debido visceral, el estrés, el dolor en los
a su alta asociación con condiciones primeros años de la vida y diferencias en
psiquiátricas y psicológicas coexistentes. los mecanismos serotoninérgicos (7).
El estrés, la ansiedad o la depresión se
asocia con frecuencia al SII y a la CLÍNICA
exacerbación de síntomas. La
interacción entre el sistema nervioso Los síntomas característicos del SII pueden
central y el sistema entérico es ser variados dependiendo de la vía
importante en la fisiopatología del SII y fisiopatológica que sea dominante en cada
funciona de manera bidireccional. El paciente. El dolor abdominal es a menudo el
sistema nervioso central puede alterar la principal síntoma de esta enfermedad y
fisiología intestinal, como la motilidad o la usualmente se asocia a la defecación,
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aunque es normal que esté presente que la sensibilidad y la especificidad de los


también durante períodos de estreñimiento. criterios de Roma oscilan entre 69% –96% y
La distensión abdominal también es un 72% - 85%, respectivamente (2).
síntoma común y está asociado a un Según los criterios Roma IV, el SII se
aumento en la cantidad de gas intestinal que clasifica en cuatro subtipos: SII con diarrea,
puede llevar a un aumento del meteorismo. SII con estreñimiento, SII con síntomas
El SII tiene un componente interesante ya mixtos de estreñimiento y diarrea, o SII no
que puede variar el patrón defecatorio de los especificado. En la TABLA 2 se citan los
sujetos y producir tanto diarrea como criterios para los subtipos de SII. Los
estreñimiento. Este comportamiento puede criterios Roma IV para subtipos de SII se
ser predominantemente de uno de estos dos basan en la percepción del paciente de su
tipos o puede tener un componente mixto. La tipo predominante de consistencia de heces
frecuencia y la forma de las deposiciones utilizando la escala de Bristol. Determinar el
está directamente relacionado al subtipo de patrón de síntomas predominantes de un
SII que se padezca (2–4). En la FIGURA 1 paciente es útil para guiar el manejo ya que
se puede apreciar la escala de Bristol que es los subgrupos responden de manera
una herramienta útil para poder medir diferente a las diversas intervenciones
objetivamente el patrón de heces y así poder terapéuticas. Se debe recalcar que los
determinar si predomina más la diarrea o el patrones de síntomas individuales pueden
estreñimiento. cambiar con el tiempo (10).
Diferentes guías y estudios sobre el manejo
DIAGNÓSTICO del SII establecen que, si un paciente
presenta síntomas que cumplen con los
El diagnóstico de SII comienza con una criterios Roma IV y no presenta signos de
historia clínica detallada. Aparte de evaluar alarma, el médico puede hacer un
la clínica detallada anteriormente es diagnóstico positivo de SII sin recurrir a
importante tomar en cuenta la cronicidad de exámenes de gabinete. Solicitar estudios de
los síntomas (2). laboratorio o morfológicos de forma rutinaria
Manning y colaboradores fueron los no está respaldado por la evidencia
primeros en proponer un método para científica, a excepción de que el médico
diagnosticar el SII basado en la presencia de observe signos de alarma o sospecha clínica
ciertos síntomas gastrointestinales de patología orgánica o metabólica (1,9).
reportados por el paciente. Esto condujo al Si el médico tiene la sospecha de que existe
desarrollo de los criterios de Roma que, en otra patología puede realizar más estudios
los últimos 20 años, se han convertido en el con el objetivo de descartar patología
estándar de oro para el diagnóstico de SII. orgánica. Se recomienda solicitar exámenes
La versión más reciente, Roma IV, se publicó sencillos primero como un examen de
en 2016 (8). En la TABLA 1 se citan los sangre, pruebas de función metabólica.
criterios de Manning y los criterios de Roma Estas pruebas deben ir dirigidas en orden de
IV. aclarar una sospecha clínica especifica
Los criterios deben cumplirse durante los como por ejemplo si el paciente además
últimos tres meses y los síntomas haber presenta síntomas relacionados con
comenzado un mínimo de seis meses antes hipertiroidismo o hipotiroidismo se deben
del diagnóstico (9). Los estudios muestran solicitar pruebas de función tiroidea o si el

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FIGURA 1. Escala de heces de Bristol

Fuente: . "File:Escala de Bristol.1.png" by Cabot Health, Bristol Stool Chart is licensed with CC BY-SA 3.0.
To view a copy of this license, visit https://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0

TABLA 1. Criterios diagnósticos del síndrome de intestino irritante


Criterios de Manning Criterios de Roma IV

Para establecer el diagnóstico de SII debe de haber Para establecer el diagnóstico de SII debe de haber
3 o más criterios positivos: dolor abdominal recurrente por más de un día a la
semana por 3 meses o más durante los últimos 6
1. Alivio del dolor con la defecación meses previos al diagnóstico asociado a dos o más
criterios positivos:
2. Heces pastosas al inicio del dolor
3. Inicio del dolor asociado a un aumento de 1. Dolor asociado a la defecación
los movimientos intestinales 2. Cambios en la frecuencia de las heces
4. Distensión abdominal visible 3. Cambios en la apariencia de las heces
5. Diarrea con moco
6. Sensación de evacuación incompleta

Fuente: traducida y adaptado por Zeledón N. y Fernández S. de Sultan S, Malhotra A. Irritable Bowel Syndrome.
Ann Intern Med. 6 de junio de 2017;166(11):ITC81-96.

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TABLA 2. Criterios diagnósticos de los suptipos de síndrome de intestino irritante


Subtipo Criterio de Roma IV
>25% de las heces catalogadas con la Escala de
SII-C (SII con predominio de estreñimiento) Bristol 1-2 y <25% de las heces catalogadas con la
Escala de Bristol 6-7
>25% de las heces catalogadas con la Escala de
SII-D (SII con predominio de diarrea) Bristol 6-7 y <25% de las heces catalogadas con la
Escala de Bristol 1-2
>25% de las heces catalogadas con la Escala de
Bristol 1-2 y >25% de las heces catalogadas con la
SII-M (SII con hábitos intestinales mixtos)
Escala de Bristol 6-7
Los paciente cumples con los criterios para el
SII-U (no clasificado) diagnóstico de SII pero su patrón de heces no se
puede categorizar en ninguno de los otros subtipos
Abreviatura: SII: síndrome de intestino irritante

Fuente: traducido y adaptado de Grad S, Dumitrascu DL. Irritable Bowel Syndrome Subtypes: New Names for Old Medical
Conditions. Dig Dis. 2020;38(2):122-7

paciente recientemente recibió antibióticos 280µg/g. Se vio que valores mayores a


es importante descartar una infección por 100µg/g de asocian a >15% de
Clostridium difficile por lo que se debe probabilidad de SII. Se determinó que
realizar un análisis de heces (2,8). esta prueba tiene un alto valor predictivo
Es importante tener en cuenta la medición de negativo pero un muy bajo valor
biomarcadores para el diagnóstico del SII. predictivo positivo por lo que es capaz de
Un metaanálisis desarrollado en el 2015 por excluir el SII.
Menees et al. Donde se compararon • Cuarto, la lactoferrina fecal tiene 74% de
diferentes marcadores séricos y fecales en valor predictivo positivo a los 2960µg/g
adultos con SII revelo las siguientes de heces, pero es incapaz de diferenciar
conclusiones: entre SII y enfermedad inflamatoria
• Primero, la proteína C reactiva demostró intestinal por lo que su utilidad
tener una alta probabilidad predictiva diagnóstica es limitada (11).
para el SII de hasta 45,7% a los 1,3mg/dl Ninguno de los marcadores séricos o fecales
en sangre. Pero esta bajó es capaz de identificar con precisión el SII,
considerablemente a menos de 10% a pero la proteína C reactiva y la calprotectina
los 2,7mg/dl. fecal sirven para descartar enfermedad
• Segundo, la velocidad de inflamatoria intestinal en pacientes con
eritrosedimendación (VES) tuvo un valor síntomas de SII. Es razonable que el médico
predictivo de 6,9% a 10mm/h. tratante ordene niveles de proteína C
• Tercero, la calprotectina fecal tiene un reactiva y calprotectina fecal como un
valor predictivo de 11,6% a 20µg/g de examen complementario para aumentar la
heces y de 7,6% a los 1000µg/g con una seguridad en el diagnóstico de SII, sin
probabilidad pico de 18,8% a los embargo, no es recomendable utilizarlo

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como única herramienta diagnostica ya que TRATAMIENTO


no tiene suficiente valor predictivo positivo y
solo sirven para excluir diagnósticos El tratamiento del síndrome de intestino
diferenciales. La lactoferrina y la VES no irritable requiere un enfoque
demostraron ser de utilidad en esta patología multidisciplinario debido a su heterogénesis.
(2,8,11). Se debe iniciar identificando el subtipo de SII
Con la evidencia disponible, no se y la gravedad de los síntomas que presenta
recomienda la realización de colonoscopía el paciente para así determinar el mejor
en individuos jóvenes con sospecha de SII, tratamiento. Los pacientes deben estar
sin signos de alarma, esta debe reservarse tranquilos sobre el curso benigno del SII, es
para personas mayores o que presenten muy importante explicar las distintas terapias
exámenes de gabinete alterados o signos de al paciente para lograr un correcto apego al
alarma (8). tratamiento. Existen medidas
No se ha demostrado que la realización de farmacológicas y no farmacológicas que han
radiología simple de abdomen o de enema demostrado mejorar considerablemente los
opaco tenga utilidad para encontrar síntomas (1,2,12).
características morfológicas que ayuden a
realizar el diagnóstico (9). No farmacológicos

• Dieta: inicialmente se recomienda


SIGNOS DE ALARMA realizar cambios en la dieta. Se debe dar
educación nutricional al paciente sobre
Es importante también tomar en cuenta los
alimentos que podrían desencadenar
signos de alarma a la hora de hacer el
síntomas como distención y dolor
diagnóstico de esta patología ya que estos
abdominal. Se ha demostrado que la
nos ayudan a identificar otros diagnósticos
dieta baja en oligosacáridos
diferenciales del SII que pueden
fermentables, disacáridos,
potencialmente ser mucho más graves (2).
monosacáridos y polioles (FODMAP)
Los signos de alarma incluyen pérdida de
reduce los síntomas en pacientes con
peso, despertar nocturno debido a síntomas
SII. La disminución de los alimentos
gastrointestinales, sangre en las heces,
fermentables reduce la distensión
antecedentes familiares de cáncer de colon
gaseosa, alterando así la respuesta al
o enfermedad inflamatoria intestinal, uso
dolor (12). El paciente debe evitar
reciente de antibióticos y fiebre (2,8).
comidas grasosas, legumbres, repollo,
coliflor, brócoli, algunos carbohidratos,
DIAGNÓSTICOS DIFERENCIALES exceso de cafeína y bebidas
carbonatadas. Investigaciones
Entre los diagnósticos diferenciales para el
científicas han demostrado que algunos
SII podemos destacar las patología
pacientes muestran mejoría de síntomas
tiroideas, la infección por Clostridium difficile,
al llevar una dieta libre de gluten, sin
enfermedad celiaca, enfermedad
embargo, no todos presentan este
inflamatoria intestinal, diverticulitis, la colitis
beneficio. Es muy importante que los
microscópica y las neoplasias intestinales
cambios en la dieta se realicen bajo
principalmente el cáncer de colon y recto
supervisión nutricional (1,2). Aunque el
(2,4,5).
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incremento de fibra en la dieta se ha constipación ya que como efecto


recomendado durante muchos años se secundario podría empeorar el
ha visto que las fibras insolubles pueden estreñimiento (12,14).
exacerbar algunos síntomas
principalmente en pacientes con SII-C. • Antidiarreicos: están indicados en el
Sin embargo, existen reportes de SII-D. La Loperamida actúa prolongando
pacientes se han visto beneficiados al el tránsito intestinal. Dicho medicamento
aumentar la fibra en la dieta (1,12). mejora la consistencia de las heces; sin
embargo, no causa alivio en el dolor
• Atención psicológica: es importante abdominal. Se debe de tomar en cuenta
brindar educación sobre estrés que su uso continuo no ha demostrado
psicosocial y crear estrategias para que una mejoría de síntomas.
los pacientes puedan manejar el estrés. La Asociación Canadiense de
El ejercicio moderado, prácticas como Gastroenterología (CAG según sus
yoga y la meditación pueden ayudar a siglas en inglés) no lo aconseja teniendo
disminuir el estrés. en cuenta que es una recomendación
Es importante buscar otras causas de condicional por su evidencia de muy baja
estrés como trastornos del sueño ya que calidad.
al corregirlos se ha visto mejoría (2). Se Otro medicamento utilizado es el
realizó un estudio para determinar cuál eluxodoline, un agonista de los
tratamiento no farmacológico era más receptores opioides μ y κ y antagonista
efectiva para el SII, dentro de las terapias del receptor opioide δ, que actúa
que se analizaron se encuentran el mejorando la consistencia de las heces y
manejo del estrés, terapia cognitivo reduce el dolor abdominal en algunos
conductual, terapia de relajación, pacientes. Dentro de los efectos
hipnoterapia y meditación. secundarios presenta nauseas,
No se logró identificar cuales tienen estreñimiento y dolor abdominal. La CAG
mejores resultados, pero se observó una lo recomienda para tratar el SII con
mejoría considerable en los pacientes diarrea, pero solo como tratamiento
con cualquier subtipo de SII que sintomático y no como tratamiento de
realizaron este tipo de terapia. Se ha uso diario (5,15,16).
visto que a largo plazo la hipnoterapia es
la que demostró mejores resultados (13). • Antagonistas del receptor 5-
hidroxitriptamina (5-HT) tipo 3: como
Farmacológicos: el Alosetrón y Ondasetron los cuales
tienen un efecto sobre las neuronas
• Antiespasmódicos: son utilizados
entéricas, periféricas y centrales que
independientemente del subtipo de SII,
afectan la regulación del dolor visceral,
representan la primera línea para aliviar
las secreciones gastrointestinales y el
dolor abdominal tipo cólico y espasmos.
tránsito colónico, los cuales se
Actúan relajando el musculo liso y
relacionan con la fisiopatología del SII.
causan alivio por periodos cortos de
Actualmente está indicado solo en
tiempo. Sin embargo, su uso tiene que
mujeres con SII-D grave (13).
ser limitado en el subtipo de SII con

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• Secuestradores de sales biliares: con respecto al placebo, mientras que


como colestiramina que se une a los los inhibidores de la recaptación de
ácidos biliares lo que puede aumentar el serotonina y norepinefrina tienen poca
tiempo de tránsito de las heces (4). evidencia para respaldar su uso (12).

• Laxantes: estos medicamentos son • Probióticos: los probióticos son


utilizado para los pacientes que utilizados para lograr una homeostasis
presentan SII con constipación. Este en la microbiota intestinal. Dentro de los
grupo de medicamentos tiene un efecto efectos adversos presenta un aumento
positivo en reducir la constipación, pero en la producción de gas, causando
no tiene efectos sobre el dolor meteorismo y distención abdominal. Se
abdominal. Dentro de los más realizó un metaanálisis donde se
comúnmente utilizados se puede observó que el uso de un solo probiótico
mencionar lactulosa, leche magnesia y por 8 semanas es beneficial para los
polietilenglicol (PEG). El PEG es de los pacientes. Sin embargo, concluyó que se
más utilizados ya que presenta menos necesita más investigación científica
efectos adversos y proporciona una para recomendarlo como tratamiento
reducción del discomfort abdominal. Si (4,16,17).
los síntomas de estreñimiento persisten
o si el paciente no puede tolerar el PEG, • Canabinoides: dentro de las nuevas
se puede adicionar lubiprostone o alternativas de tratamiento se ha
linaclotida. El lubiprostone es un utilizado canabidiol (CBD) que se podría
activador de los canales de cloro que recomendar para SII ya que se ha visto
suavizan las heces y facilita la una disminución en dolor abdominal y
evacuación de estas, también ha espasmos, sin embargo se necesita más
demostrado ser útil en el manejo del SII investigación para considerarlo como
(2,5,12). tratamiento (4,18).

• Antidepresivos: los antidepresivos En la TABLA 3 se resumen los principales


tienen propiedades analgésicas además tratamientos específicos para los subtipos
de mejorar del estado de ánimo. Los SII-C y SII-D.
antidepresivos tricíclicos (TCAS según
sus siglas en inglés) reducen el tiempo CONCLUSIÓN
de tránsito intestinal por sus efectos
anticolinérgicos, lo que favorece su uso El SII es una condición prevalente y
en el SII con diarrea. Un metaanálisis multifactorial con un alto impacto
realizado en el 2015 concluyó que los socioeconómico que afecta de manera
antidepresivos tricíclicos en adultos significativa la calidad de vida de los
fueron significativamente más efectivos pacientes. Si el paciente cumple con los
que el placebo para mejorar los síntomas criterios Roma IV, no presenta signos de
globales del SII (14). También se ha alarma y el médico no sospecha de patología
demostrado que los inhibidores orgánica se puede realizar el diagnóstico de
selectivos de la recaptación de SII sin necesidad de enviar exámenes de
serotonina (ISRR) mejoran los síntomas laboratorio.
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TABLA3. Principales tratamientos para los subtipos de síndrome de intestino irritable


Subtipo Terapias farmacológicas
• Fibras solubles como el lubiprostone y el PEG
3350.
SII-C (SII con predominio de estreñimiento)
• Fibras insolubles.
• Agua.
• Loperamida.
• Eluxodoline.
• Antiespasmódicos como la hiosciamina y la
diciclomina.
SII-D (SII con predominio de diarrea) • ISRR y TCAS como la fluoxetina y las
amitriptilina. Secuestradores de sales biliares
como la colestiramina.
• Antagonistas del receptor 5HT3 como el
alosetron
Abreviatura: SII: síndrome de intestino irritante. TCAS: antidepresivos tricíclicos. ISRR: inhibidores selectivos de la recaptación de
serotonina
Fuente: adaptada de Defrees DN, Bailey J. Irritable Bowel Syndrome: Epidemiology, Pathophysiology, Diagnosis, and Treatment.
Prim Care Clin Off Pract. 1 de diciembre de 2017;44(4):655-71.

El tratamiento de cada paciente debe ser Existen múltiples factores o mecanismos


individualizado de acuerdo con el subtipo de capaces de ejercer influencia en el eje
SII que presente. Además, la terapia debe bidireccional cerebro-intestino los cuales no
ser multidisciplinaria y orientada con son comprendidos completamente y algunos
respecto a los factores de riesgo de cada todavía no han sido estudiados por lo que
paciente. Las terapias no farmacológicas brindan una ventana de investigación para
como cambios en la dieta, manejo del estrés, desarrollar mejores terapias y dar mejor
terapia cognitivo conductual, terapia de calidad de vida a los pacientes de difícil
relajación, hipnoterapia y meditación han manejo.
demostrado ser efectivas en los pacientes.

REFERENCIAS

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60 Cirrosis hepática
Vanesa Bernal*, Jaume Bosch**

* Unidad de Gastroenterología y Hepatología. Hospital de San Jorge, Huesca


**Unidad de Hepatología. Instituto de Enfermedades Digestivas y Metabólicas IDIBAPS. CIBERehd
Hospital Clinic. Barcelona. Universidad de Barcelona

Introducción OBJETIVOS DE ESTE CAPÍTULO


La cirrosis constituye la culminación de un largo ❱❱ Describir el origen de la hipertensión portal
proceso que aboca finalmente a la formación de en la cirrosis hepática y las consecuencias
septos fibrosos y nódulos de regeneración, que clínicas del shunt porto-sistémico.
representan el sustrato morfológico de esta en-
❱❱ Conocer el impacto de la cirrosis hepática
fermedad (figura 1). La fibrosis hepática juega
sobre otros órganos y sistemas.
un papel determinante en la evolución a cirrosis
a partir de diversas enfermedades hepáticas, y ❱❱ Proporcionar recursos para una
consiste en un aumento difuso de la matriz ex- aproximación al diagnóstico de la cirrosis
tracelular en respuesta a un daño persistente en hepática y recomendaciones para el
el hígado. manejo general de estos pacientes.

El alcohol y el virus de la hepatitis C siguen sien-


REFERENCIAS CLAVE
do los dos factores etiológicos más frecuente-
mente implicados en nuestro medio, seguidos 1. Bosch J, D’Amico G, García-Pagán JC.
de la enfermedad por depósito de grasa no al- Portal hypertension. En: Schiff ER, Sorrell
cohólica. Cuando no se logra identificar ninguna MF, Maddrey WC, eds. Schiff’s Diseases of
de estas causas, debe realizarse una minuciosa The Liver. Lippincott Williams & Wilkins.
investigación para descartar enfermedad auto- Philadelphia, 2002:429-86.
inmune, genética o metabólica, toxicidad por 2. Navasa M, Arroyo V. Ascites and Sponta-
fármacos, así como cirrosis de causa biliar o con- neous Bacterial Peritonitis. En: Schiff ER,
gestiva (tabla 1). Sorrel MF, Maddrey WC (eds). Diseases of
the liver (9th edition). Lippincot-Williams &
La historia natural de la cirrosis se caracteriza Wilkins. Philadelphia, 2003: 559-595.
por una fase asintomática, denominada cirrosis
3. De Franchis R. Revising consensus in portal
hepática compensada, seguida de una fase sin-
hypertension: Report of the Baveno V
tomática y rápidamente progresiva, en la que se
consensus workshop on methodology of
manifiestan complicaciones derivadas de la hi-
diagnosis and therapy in portal hyper-
pertensión portal y de la insuficiencia hepática.
tension. J Hepatol (2010),doi: 10.1016/j.
Esta última fase se conoce como cirrosis hepática
jhep.2010.06.004
descompensada. El fenómeno clave que marca
el paso de una fase a la siguiente, es el aumento
de la presión portal. A lo largo de este capítulo
analizaremos como acontece la progresión de la
cirrosis y sus principales consecuencias1.
rencia entre la presión portal y la presión en la vena
Hipertesión portal y vasodilatación cava inferior o en la vena suprahepática). Los valo-
res normales son de 1 a 5 mmHg. El método más
esplácnica utilizado para medir el gradiente de presión por-
La hipertensión portal se define como un incre- tal consiste en la determinación del gradiente de
mento del gradiente de presión portal (la dife- presión en la vena hepática (GPVH) definido como

H Í G A D O 867
Sección 6. Hígado

TABLA 1. Clasificación etiológica de la cirrosis.

❱ Alcohol
❱ Hepatitis vírica
❱ Obstrucción biliar
Cirrosis biliar primaria
Cirrosis biliar secundaria
ej., colangitis esclerosante primaria
❱ Enfermedad metabólica congénita Figura 1. Histología de la cirrosis hepática: la imagen muestra
las dos características más relevantes: nódulos de regenera-
Hemocromatosis ción y septos fibrosos (Cortesía del Dr. Marigil).
Enfermedad de Wilson
Déficit de alfa-1-antitripsina
ibrosis quística
lar se debía exclusivamente a un factor mecánico,
Galactosemia
ligado a la distorsión de la arquitectura vascular
Glucogenosis tipos III y IV originada por la fibrosis, los nódulos de regene-
Tirosinemia ración y fenómenos de microtrombosis u oclusión
Intolerancia hereditaria a la fructosa vascular. Sin embargo, hoy sabemos que a este
Telangiectasia hemorrágica hereditaria componente, relativamente fijo del incremento de
la resistencia vascular, se suma otro componente
❱ Enfermedad metabólica adquirida
dinámico, dependiente de la contracción activa
Esteatohepatitis no alcohólica de las células estrelladas perisinusoidales, que se
❱ Causas vasculares activan en la cirrosis hepática y desarrollan capa-
Hígado de estasis crónico. cidades contráctiles que les permiten funcionar
Enfermedad veno-oclusiva del hígado como pericitos sinusoidales. También se incluyen
a los miofibroblastos periportales y las células del
❱ Hepatitis autoinmune
músculo liso de las vénulas portales.
❱ Drogas y toxinas
❱ Sífilis La activación de estos elementos contráctiles se
ve favorecida por un estado de disfunción endo-
❱ Sarcoidosis
telial en los sinusoides, que da lugar a una insu-
❱ Bypass yeyuno-ileal ficiente producción de factores vasodilatadores
❱ Hipervitaminosis A endógenos, como el óxido nítrico (ON), junto con
❱ Idiopática o criptogenética el aumento de factores vasoconstrictores, como el
tromboxano A2, la endotelina y el sistema renina-
angiotensina.
la diferencia entre la presión venosa hepática de
El conocimiento de estos mecanismos resulta de
enclavamiento (u ocluida) y la presión libre. Existe
gran importancia, dado que el componente diná-
hipertensión portal cuando el GPVH está eleva-
mico de la resistencia vascular intrahepática es
do. Si la elevación es inferior a 10 mmHg, consi-
reversible y, por tanto, una diana terapéutica. De
deramos que la hipertensión portal es subclínica,
hecho, la mayoría de los tratamientos existentes
mientras que valores del GPVH mayores o iguales
para la hipertensión portal se centran en la correc-
a 10 mmHg definen lo que se denomina como hi-
ción de las alteraciones hemodinámicas mediante
pertensión portal clínicamente significativa pues a
fármacos vasoactivos (terlipresina, somatostati-
partir de estos valores pueden aparecer todas las
na, betabloqueantes no selectivos). A su vez, el
complicaciones de la hipertensión portal.
componente mecánico podría modificarse favora-
El factor inicial que conduce a la aparición de hi- blemente mediante tratamientos que mejoren la
pertensión portal en la cirrosis es el aumento de la enfermedad hepática subyacente (abstención de
resistencia vascular hepática. Tradicionalmente se alcohol, tratamiento antiviral, fármacos antifibró-
pensaba que este aumento de la resistencia vascu- ticos, etcétera).

868
60. Cirrosis hepática

dilatadores con efectos paracrinos (VIP, calcitonina,


sustancia P) y/o la intervención de endocannabio-
esión s a noides y de un reflejo neural sensorial que inhibe
el tono vascular, se conjugan para inducir un estado
de vasodilatación esplácnica. Este fenómeno con-
Sustrato Sustrato tribuye a explicar la disfunción circulatoria obser-
dinámico morfológico vada en la cirrosis hepática con hipertensión portal,
con repercusiones sobre el pulmón y la circulación
renal2. La vasodilatación esplácnica es responsable
Incremento de la de la circulación hiperdinámica, que se manifiesta
resitencia vascular por un descenso de la presión arterial y de la resis-
intrahepátia tencia vascular periférica, aumento del gasto car-
diaco y elevación del aflujo de sangre al territorio
portal. Este hiperaflujo contribuye a elevar y man-
tener la hipertensión portal en fases avanzadas de
HIPERTENSIÓN PORTAL
la cirrosis (figura 2)3. El estrés de rozamiento (shear
stress) provocado por la circulación hiperdinámica,
Aumento del a través de la inducción de eNOs (óxido nítrico sin-
flujo venoso tetasa endotelial), constituye otra fuente de produ-
portal ción de ON1.
Desarrollo
de colaterales En años recientes se ha comprobado asimismo que
portsistémicas en la cirrosis se activan fenómenos angiogénicos
Circulación
(Shunt p-s) dependientes del factor de crecimiento vascular de-
hiperdinámica
rivado de endotelio (VEG ) y de plaquetas (PDG ), y
que este fenómeno contribuye en gran medida a la
progresión de la cirrosis y de la hipertensión portal,
Figura 2. Factores implicados en la hipertensión portal del pues contribuyen a la activación de las celulas es-
enfermo con cirrosis hepática.. trelladas, a la fibrogénesis e inflamación hepáticas,
y a la vasodilatación esplácnica y formación de co-
laterales portosistémicas. De hecho, al antagonizar
El aumento de la presión portal determina la aper- la vía de señalización de VEG /PDG se disminuye
tura y desarrollo de una extensa red de colaterales muy significativamente la fibrosis hepática, la vaso-
portosistémicas, cuya finalidad es derivar una pro- dilatación esplácnica, la formación de colaterales y
porción significativa del flujo esplácnico hasta la cir- la presión portal, por lo que se han propuesto te-
culación general, sin pasar por el hígado. Ello com- rapias antiangiogénicas para el tratamiento de la
porta múltiples consecuencias relevantes, entre hipertensión portal y la cirrosis4,5.
las que destaca la formación de varices esofágicas,
evento clave en la historia natural de la cirrosis he- Historia natural de la cirrosis
pática. De otra parte el shunt portosistémico permi-
La historia natural de la cirrosis comprende dos
te que bacterias o productos bacterianos de proce-
períodos bien diferenciados. Durante el primer
dencia intestinal alcancen la circulación general, lo
período, el enfermo permanece asintomático
que favorece la liberación de citocinas (mediadoras
y, de hecho, la enfermedad puede permanecer
de la inflamación) que promueven tanto la síntesis
oculta durante años, de tal manera que su descu-
de óxido nítrico (ON), como de prostaciclina (PGI2)
brimiento ocurre de forma accidental, al detectar
en la circulación extrahepática, donde provocan
una intensa vasodilatación y atenúan la respuesta una hepatomegalia de borde duro y cortante o el
a estímulos vasoconstrictores. inalmente, a través hallazgo de anomalías de laboratorio en el curso
del shunt circulan péptidos gastrointestinales con de una analítica rutinaria (cirrosis compensada). El
poder vasoactivo (por ejemplo, glucagón) que es- segundo período se caracteriza por una fase clínica
capan al catabolismo hepático ejerciendo efectos rápidamente progresiva marcada por el desarro-
vasodilatadores sistémicos. Éstos y otros mecanis- llo de complicaciones (cirrosis descompensada).
mos vinculados a la intervención de péptidos vaso- La progresión de la cirrosis va a depender direc-
tamente de la causa y de su posible tratamiento.

869
Sección 6. Hígado

Por ejemplo, el desarrollo de complicaciones en un el desarrollo de varices esofágicas o episodios de


paciente con cirrosis hepática de etiología alcohó- descompensación.
lica que continúa consumiendo alcohol es rápido,
La prevalencia de varices en esta fase es del 44%,
como también puede serlo la estabilización de la
mientras que en la fase de cirrosis descompensada
enfermedad en el caso de que se mantenga la abs-
es del 73%. A partir de un gradiente de presión por-
tinencia alcohólica.
tal por encima de 10 mmHg, se pueden presentar
Recientemente, se ha propuesto un nuevo esque- varices y otras complicaciones de la hipertensión
ma en la historia natural de la cirrosis que describe portal.
cuatro fases con unas características clínicas y un
La mortalidad en esta fase es baja, estimándo-
pronóstico bien diferenciados6:
se en un 2-4% al año, siendo más importante en
❱ Estadio 1: ausencia de varices esofágicas y de el subgrupo de pacientes con varices esofágicas7.
ascitis: 1% de mortalidad al año. En ellos se incrementa la mortalidad a expensas
de la asociada a episodios de sangrado por varices,
❱ Estadio 2: varices esofágicas sin antecedente de
cuya mortalidad es de alrededor del 15% a las 6
hemorragia y sin ascitis: 3,4% de mortalidad al
semanas.
año.
❱ Estadio 3: presencia de ascitis con o sin varices Eventos clave en el curso clínico
esofágicas: 20% de mortalidad al año. de la cirrosis hepática descompensada
❱ Estadio 4: hemorragia gastrointestinal por hi-
pertensión portal, con o sin ascitis: 57% de mor-
Ascitis e hidrotórax, hiponatremia
talidad al año. dilucional y síndrome hepatorrenal
Los estadios 1 y 2 corresponden a pacientes con la En una etapa inicial de la cirrosis, cuando la pre-
fase de cirrosis hepática compensada mientras que sión portal supera un umbral crítico y aumenta la
los estadios 3 y 4 corresponden con la fase de cirro- concentración de óxido nítrico, se produce una
sis hepática descompensada (figura 3). vasodilatación sistémica y, como consecuencia,
una disminución de la volemia efectiva que acti-
La incidencia de hepatocarcinoma celular es del 3% va los mecanismos de compensación, como el eje
al año independientemente del estadio de la cirro- renina-angiotensina-aldosterona (RAA), el sistema
sis. Su presencia se asocia a una progresión más rá- nervioso simpático y la secreción no osmótica de
pida de un estadio a otro y, por lo tanto, a un peor ADH (vasopresina). Estos sistemas favorecen la re-
pronóstico. Aunque las complicaciones propias de tención de Na y H2O, a la vez que tienden a evitar
la fase descompensada se describen con mayor una disminución adicional de la resistencia perifé-
minuciosidad en otras secciones de esta obra, el rica, normalizando la homeostasis circulatoria. En
lector puede encontrar en este capítulo una des- tal situación, la retención de Na se desactiva y el
cripción somera de la fisiopatología de la cirrosis enfermo no desarrolla ascitis.
hepática y su interrelación con la evolución natural
de la cirrosis, incluyendo los eventos claves de las En una fase más avanzada, la disfunción circulatoria
diferentes fases de esta enfermedad. se acentúa, bien sea por la propia evolución natural
de la enfermedad o por la intervención de un factor
Eventos clave en el curso clínico intercurrente (transgresión enólica, intervención
quirúrgica, sepsis, hemorragia). En cualquiera de
de la cirrosis hepática compensada estas circunstancias, el trastorno hemodinámico
En el momento del diagnóstico de la cirrosis hepá- se agrava, de manera que los mecanismos mencio-
tica, aproximadamente la mitad de los pacientes se nados resultan inadecuados para mantener la ho-
encuentran en una fase compensada. El acúmulo meostasis circulatoria. Ello provoca una exacerbada
de fibrosis es un proceso lento y asintomático re- retención de Na y H2O, fenómeno que, unido a la
lacionado con la actividad inflamatoria de la enfer- trasudación linfática secundaria a la hipertensión
medad de base. La formación de septos fibrosos y portal, explica la formación de ascitis (figura. 4).
pequeños nódulos se asocia significativamente con Un tiempo después, la disminución del aclaramien-
un aumento de la presión portal. La progresión de to de agua libre inducido por la ADH determina
la fibrosis y de la hipertensión portal condicionan una desproporcionada retención de agua, supe-

870
60. Cirrosis hepática

1%
No varices
Estadio 1
No ascitis
i osis e ca 7% 7%
co ensa a 3,4%
Estadio 2 Varices
No ascitis
6,6% Éxitus
Varices ± 20%
Estadio 3
Ascitis
i osis e ca 7,6% 4%
esco ensa a
57%
Estadio 4 HDV ±
Ascitis

HDV: Hemoragia digestiva varicosa

Figura 3. Historial natural de la cirrosis hepática: probabilidad de progresión al año según el estadio clínico..

La vasoconstricción arteriolar renal inducida por las


sustancias vasoactivas descritas provoca isquemia
renal. Durante un tiempo, el riñón es capaz de com-
pensar esta situación, incrementando la producción
de sustancias vasodilatadoras (prostaglandinas, óxi-
do nítrico, péptidos natriuréticos), lo que permite
mantener el estado de la función renal. Sin embar-
go, a medida que se agrava el trastorno hemodiná-
mico, aumenta la producción de sustancias vaso-
constrictoras, provocando intensa vasoconstricción
arteriolar, descenso del filtrado glomerular y fallo
prerrenal. Este esquema fisiopatológico explica
cómo la administración de AINEs, en el paciente
con cirrosis y ascitis, puede precipitar un fallo renal,
al inhibir la producción local de prostaglandinas y
romper el equilibrio existente entre elementos va-
sodilatadores y vasoconstrictores (figura 5). El capí-
tulo 62 explica con detalle las distintas fases evolu-
tivas de la ascitis y de los trastornos de la función
renal en el enfermo con cirrosis hepática.
El hidrotórax hepático consiste en la acumulación de
Figura 4. Descompensación ascítica en un paciente con líquido en la cavidad pleural y puede llegar a afectar
cirrosis hepática de etiología enólica. Obsérvese la circulación al 10% de los pacientes con cirrosis y ascitis (figura
colateral en el flanco derecho del abdomen.
6). Aunque el mecanismo fisiopatológico exacto se
desconoce, diversas observaciones indican que la
rior a la de Na, lo que explica la coexistencia de una causa más probable es el paso de ascitis a la cavidad
baja concentración plasmática de aquél, en pre- pleural a través de pequeños defectos diafragmáti-
sencia de un pool sistémico elevado (hiponatremia cos. Este paso de una cavidad a otra es favorecido
dilucional)2. por la presión intratorácica negativa. Se pueden ob-

871
Sección 6. Hígado

Vasodilatación esplácnica

Infrallenado del compartimiento vascular

Eje renina-angiotensina- Sistema nervioso simpático ADH


aldosterona (norepinefrina) (vasopresina)

Retención de NA Aclaramiento de agua libre


1
(hiponatremia dilucional)
Vasoconstricción
arteriolar renal
Predominio de
Producción adecuada de elementos vasoconstrictores
vasodilatadores (PGS, NO) (adenosina, endotelina,
angiotensina II)

Función renal Insuficiencia renal


3
conservada funcional

Figura 5. Fisiopatología de los trastornos de la función renal del cirrótico con hipertensión portal.

servar casos de hidrotórax sin ascitis concomitante o intravaricosa supera el límite elástico de su pared, se
con ascitis grado I. Ello acontece cuando el trasvase genera una tensión excesiva que produce su rotura
de líquido al espacio pleural ocurre en una tasa equi- (teoría de la explosión). El riesgo es más alto entre
valente a su producción en el abdomen8. los pacientes con mala función hepática y varices
de gran tamaño o con signos de color rojo (estrías
Hemorragia por varices longitudinales o manchas de color rojo cereza sobre
esofagogástricas la superficie de la variz) (figura 7). Por ejemplo, un
paciente con un grado Child C, ascitis a tensión y
El incremento de la presión portal y los fenómenos varices de gran tamaño con signos endoscópicos de
de angiogénesis asociados promueven la apertura riesgo, presenta una probabilidad de sangrado del
de colaterales y la consiguiente formación de va- 76%. La tabla 2 muestra los parámetros de Child-
rices esofagogástricas, que desvían una parte del Pugh para evaluar la función del hígado10.
flujo sanguíneo hacia la vena cava. Globalmente, la
probabilidad de que un enfermo con cirrosis hepá- Cualquier circunstancia que conduce a un deterioro
tica desarrolle varices esofágicas es del 5% al año de significativo de la función hepática o a un agrava-
establecer el diagnóstico y del 12% a los tres años. miento de la hipertensión portal puede ser el de-
Este hecho no es probable que ocurra sin un gra- tonante de un episodio de sangrado. Es el caso de
diente de presión portal superior a 10 mm Hg9. Con una transgresión enólica, una cirugía mayor recien-
el tiempo, el aumento de la presión portal produce te, una infección bacteriana (especialmente la pe-
una dilatación progresiva de la variz y un adelgaza- ritonitis bacteriana espontánea) o una transfusión
miento de su pared. Cuando la presión hidrostática de hemoderivados.

872
60. Cirrosis hepática

de la función cerebral, responsable de un conjun-


to de síntomas y signos neuropsiquiátricos (figura
8). Los factores que contribuyen al desarrollo de
este síndrome no han sido totalmente aclarados,
existiendo diversas hipótesis no excluyentes entre
sí11-13. El hígado es capaz de aclarar la mayoría de
toxinas que son conducidas desde el intestino a
través de la vena porta, evitando con ello su incor-
poración a la circulación sistémica. En fases avanza-
das de la enfermedad, el shunt portosistémico y el
deterioro de la función hepática permiten la incor-
poración de elevadas concentraciones de toxinas,
Figura 6. Imagen de un hidrotórax en un caso de cirrosis
hepática. principalmente amonio, de procedencia intestinal
a la circulación general. Como consecuencia se
puede producir edema cerebral y encefalopatía. A
La mortalidad de la HDA por hipertensión portal os- este fenómeno también contribuye la emaciación
cila entre un 10-15% para cada episodio y depende, muscular característica del enfermo con cirrosis
no solamente del carácter exanguinante del san- avanzada debido a que el músculo también inter-
grado, sino de otros factores, como la magnitud del viene en la conversión del amonio en glutamina.
incremento del GPVH (GPVH mayor de 20 mmHg),
El amonio circulante sensibiliza al cerebro frente a
la coexistencia de otra patología (fallo renal, hetitis
alcohólica, hepatocarcinoma, trombosis portal) y la posibles daños e interfiere con su normal funcio-
aparición de recidiva precoz (mayor frecuente en namiento, contribuyendo al desarrollo de encefa-
las primeras 48 horas) o el fallo multiorgánico que lopatía (el lector puede ampliar información sobre
conlleva el deterioro de la función hepática. la patogénesis de la encefalopatía hepática en el
capítulo 63). Cuando un paciente cirrótico con hi-
Encefalopatía hepática pertensión portal desarrolla un cuadro de encefa-
lopatía, con frecuencia logra identificarse un factor
El shunt portosistémico y la insuficiencia hepática precipitante. Éste puede provocar encefalopatía,
explican, en gran medida, la aparición de este sín- bien por deteriorar la función hepatocelular, bien
drome caracterizado por una disfunción reversible por incrementar la carga proteíca en la luz intestinal

TABLA 2. Clasificación de Child-Pugh modificada para evaluar el estado de la función hepática. Fuente: Arun J Sanyal.
Prediction of variceal hemorrhage in patients with cirrhosis. Uptodate, 2006.

Puntuación asignada

Parámetro 1 2 3
Bilirrubina (mg/dl) 2 2-3 3
Albúmina (g/dl) 3,5 2,8-3,5 3,5
Tiempo de protrombina
Segundos sobre el control 1-3 4-6 6
INR 1,7 1.8-2.3 2,3
Ascitis Ausente Leve Moderada
Encefalopatía No Grado I-II Grado III-IV

Grado A (5-6 puntos): enfermedad bien compensada;


Grado B (7-9 puntos): el compromiso de la función del hígado empieza a ser significativo;
Grado C (10-15): enfermedad gravemente descompensada.

873
Sección 6. Hígado

Figura 7. Signos endoscópicos de riesgo para la hemorragia por varices esofágicas: a) varices esofágicas de gran tamaño; b)
manchas rojas sobre la superficie de la variz; c) “red wale marks” (estrías longitudinales y sinuosas de color rojo sobre la superfi-
cie de la variz) sobre unas varices de gran tamaño..

o por inducir cambios en el tono gabaérgico inhibi-


TABLA 3. Factores precipitantes de encefalopatía dor de la transmisión cerebral (tabla 4). Por ejem-
hepática plo, una hipopotasemia puede explicar la aparición
de una encefalopatía hepática en un paciente que
❱ 1. Drogas ha presentado vómitos, diarreas o un tratamiento
Benzodiazepinas
con diuréticos. Se aduce que, en estas circunstan-
cias, se produce una salida del potasio intracelular
Narcóticos
para replecionar los depósitos extracelulares. Para
Alcohol garantizar una carga neutral en el interior celular,
❱ 2. Incremento en la producción de amonio el K intracelular es sustituido por H . La acido-
Ingesta excesiva de proteínas sis tubular renal consiguiente genera una síntesis
Estreñimiento compensadora de amonio por parte del riñón. La
Hemorragia gastrointestinal
alcalosis metabólica, que a menudo acompaña a
los estados de hipopotasemia, determina, además,
Infección
que el ion amonio (NH4) –que no atraviesa la ba-
Trastornos hidroelectrolíticos (hipopotasemia) rrera hematoencefálica–, sea convertido en amo-
Alcalosis metabólica níaco (NH3), que sí puede penetrar en el cerebro.
❱ 3. Deshidratación Son distintos ejemplos que subrayan la necesidad
Vómitos de que el clínico sea capaz de identificar qué factor
Diarrea
ha podido desencadenar un estado de encefalopa-
tía, dado que su rápida corrección es esencial para
Hemorragia
resolver este cuadro. La tabla 3 muestra un listado
Diuréticos de los factores que pueden precipitar un estado de
Paracentesis de gran volumen encefalopatía14.
❱ 4. Shunt portosistémico
TIPS (DPPI) Infecciones
Derivación porto-cava (quirúrgica) Las infecciones bacterianas constituyen una ma-
Espontáneo nifestación común en la cirrosis hepática. Compa-
❱ 5. Oclusión vascular (isquemia) rado con el 5-7% de tasa de infección nosocomial
Trombosis de vena porta
descrita en la población general, los pacientes con
cirrosis presentan una tasa del 30-40%. Los factores
Trombosis de arteria hepática
de riesgo más importantes para el desarrollo de in-
❱ 6. Hepatocarcinoma fecciones son la hemorragia gastrointestinal y el de-
terioro avanzado de la función hepática. Las infec-
ciones más frecuentes son la peritonitis bacteriana

874
60. Cirrosis hepática

Conducta inapropiada
Trastornos del sueño
Somnolencia
Euforia/depresión
Confusión
Desorientación
Inconsciencia

Psiquiátricos

Síntomas neurológicos

Nistagmus Coma

Grado de EH Asterixis Ataxia e e os a te a os i a e e e os

O I II III IV
Uptodate 2006 (ref 11)

Figura 8. Evolución de la encefalopatía hepática.

espontánea (25%), infecciones del tracto urinario meabilidad intestinal y alteraciones del sistema in-
(20%), neumonía (15%) y bacteriemia espontánea mune. Todo ello favorece la migración de bacterias
(12%). La mortalidad en pacientes cirróticos que procedentes de la luz intestinal hasta los ganglios
desarrollan infecciones bacterianas es alta, entre el linfáticos y, desde allí, hasta la circulación general.
25-50%15. Este hecho se conoce como traslocación bacteriana
y se considera el principal mecanismo en la pato-
La secuencia de hechos fisiopatológicos que favo-
génesis de la infección en la cirrosis. Los factores
recen el desarrollo de infecciones en los pacientes
que predisponen al sobrecrecimiento bacteriano
con cirrosis comienza en la luz intestinal, donde se
ha comprobado una elevada incidencia de sobre- son la hipomotilidad intestinal y probablemente el
crecimiento bacteriano, un aumento de la per- consumo de inhibidores de la bomba de protones.
El aumento de la permeabilidad intestinal se debe
a alteraciones estructurales del intestino, principal-
TABLA 4. Síntomas que permiten sospechar
mente congestión vascular, edema, aumento de los
el padecimiento de un hepatocarcinoma espacios intracelulares e inflamación. inalmente,
en el curso evolutivo de la cirrosis hepática en el paciente con cirrosis se han descrito diversas
alteraciones inmunes tanto a nivel local (intestinal)
como sistémico que favorecen la traslocación bac-
❱ Dolor continuo y gravativo en el hipocondrio
teriana. La principal defensa frente a las infeccio-
derecho
nes hematógenas es el sistema reticuloendotelial,
❱ Pérdida progresiva de peso localizado en el hígado y encargado de eliminar
❱ iebre de origen no aclarado las bacterias y sus productos. Este objetivo está
❱ Hemoperitoneo agudo comprometido en los pacientes con cirrosis debido
❱ Crisis paroxísticas de disnea (microembolismos a la existencia de shunts portosistémicos y a una
pulmonares) disfunción de las células de Kup er. También se ha
❱ Dolores óseos generalizados (metástasis) descrito una reducción en la actividad bactericida
❱ Poliglobulia (eritropoyetín dependiente)
de las células fagocíticas, de la capacidad de opso-
nización y de los niveles de complemento. Todo ello
❱ Hipocalcemia (parathormona dependiente)
explica por qué los pacientes con niveles bajos de
❱ Hipoglucemia (insulín-dependiente) proteínas en el líquido ascítico (menor de 1 g/dl)
❱ Diarrea crónica presentan un mayor riesgo de peritonitis bacteria-
na espontánea (véase capítulo 64).

875
Sección 6. Hígado

TABLA 5. Signos que pueden encontrarse en la exploración son complejos, habiéndose observado alteraciones
física del enfermo con cirrosis hepática. en los receptores beta-adrenérgicos y en el ECG y
ecocardiografía, así como un aumento de sustan-
cias cardiodepresoras y vasodilatadoras, como el
❱ Arañas vasculares óxido nítrico.
❱ Telangiectasias Las principales características de la miocardiopatía
❱ Eritema palmar del cirrótico son:
❱ Estrías ungueales
❱ unción sistólica normal en reposo, pero que se
❱ Enrojecimiento del 1/3 distal de las uñas puede convertir en patológica cuando el pacien-
❱ Dedos en palillo de tambor te es sometido a un estrés, ya sea fisiológico o
❱ Contractura de Dupuytren farmacológico.
❱ Ginecomastia ❱ Disfunción diastólica en reposo y bajo estrés.
❱ Atrofia testicular
❱ Alteraciones electrofisiológicas como la presen-
❱ Distribución feminoide del vello pubiano cia en el electrocardiograma de un intervalo T
❱ Hepatomegalia prolongado.
❱ Esplenomegalia
❱ Alteraciones estructurales y posibles cambios
❱ Circulación colateral en los flancos del abdomen histológicos en el corazón.
❱ Circulación periumbilical en “cabeza de medusa”
❱ Niveles elevados de marcadores séricos suges-
❱ Signo de Cruveilhier-Baumgarten
tivos de disfunción cardiaca.
❱ Abdomen distendido (“en batracio”)
❱ oetor hepático
Estas características deben estar presentes en
ausencia de enfermedad cardiaca conocida e inde-
❱ Ictericia
pendientemente de la etiología de su enfermedad
❱ Asterixis hepática.
❱ Equimosis y hematomas
La verdadera importancia de la miocardiopatía ci-
❱ Lesiones por rascado
rrótica es desconocida y puede haber sido subesti-
❱ Hiperpigmentación 1 mada ya que en la práctica clínica no es frecuente
observar en estos enfermos síntomas de insufiencia
1
En hemocromatosis y cirrosis biliar primaria. cardiaca. Ello guarda relación con el patrón hemo-
dinámico mencionado previamente (disminución
de la postcarga y aumento del gasto cardiaco) que
explica que el corazón funcione aparentemente con
normalidad y que esta entidad habitualmente pase
Miocardiopatía cirrótica inadvertida. Sin embargo, estudios electrofisiológi-
Como consecuencia de la hipertensión portal, el cos han permitido documentar alteraciones en el
paciente con cirrosis hepática presenta una circula- comportamiento cardiaco 40-60% de pacientes con
ción hiperdinámica caracterizada por un aumento cirrosis. En esta fase de la enfermedad, cualquier
del gasto cardiaco y un descenso de la resistencia evento clínico que exija mayor rendimiento al siste-
vascular sistémica. Este fenómeno nace como un ma cardiocirculatorio (trasplante hepático, PBE, co-
mecanismo compensatorio del sistema nervioso locación de una DPPI, etc.) puede desencadenar un
central frente a la disminución de la volemia efec- cuadro de insuficiencia cardiaca descompensada
tiva y a la hipoxia tisular producida por la vasodila- así como un síndrome hepatorrenal. Sin embargo,
tación esplácnica y el shunt portosistémico. Con la ello contrasta con la evidencia clínica de ausencia
progresión del fallo hepático, la circulación hiper- de episodios de insuficiencia cardiaca en la inmen-
dinámica se agrava, los mecanismos de compensa- sa mayoría de pacientes tratados con DPPI, incluso
ción se tornan insuficientes y se ha propuesto que en el contexto de complicaciones agudas o de asci-
en determinadas circunstancias, como la sepsis y tis refractaria y síndrome hepatorrenal. Obviamen-
el síndrome hepatorrenal tipo 1, el gasto cardiaco te, son precisos datos más estrictos que cambios
puede llegar a disminuir ( miocardiopatía del cirró- electrocardiográficos no específicos para definir
tico). Los mecanismos etiopatogénicos implicados una alteración como una real miocardiopatía, por

876
60. Cirrosis hepática

Pulmón
Hematíes

Arteria pulmonar Vena pulmonar

O2

Shunt derecha-izquierda

Reducción en la capacidad Alteración


Hipoxemia
de difusión pulmonar ventilación-perfusión

Figura 9. Fisiopatología del síndrome hepatopulmonar: los hematíes tienden a circular por el centro de los capilares. Cuando el
lecho arteriolo-capilar está dilatado, los hematíes se alejan del alvéolo, lo que explica su menor saturación de O2 a su paso por el
pulmón (shunt dcha.-izqda.).

las implicaciones pronósticas que este diagnóstico siste en el descenso de la PaO2 mayor de 10%, al
lleva aparejadas. incorporarse desde la posición de decúbito. La pla-
tipnea expresa el acortamiento de los movimientos
Se ha sugerido que complicaciones como la perito-
respiratorios al adoptar la sedestación, momento
nitis bacteriana espontánea y la traslocación bacte-
en que el desplazamiento de la sangre a las porcio-
riana estén relacionadas con la miocardiopatía del
nes más declives acentúa el deterioro en la relación
cirrótico16. ventilación/perfusión. En fases más avanzadas, el
síndrome hepatopulmonar provoca disnea de mo-
Síndrome hepatopulmonar
derados esfuerzos, cianosis y acropaquia, síntomas
e hipertensión portopulmonar que generalmente revierten tras el trasplante17.
El síndrome hepatopulmonar se produce por la va- La hipertensión portal es una de las causas recono-
sodilatación del lecho arteriolo-capilar pulmonar, cidas de hipertensión arterial pulmonar. La hiper-
así como la aparición de anastomosis arteriove- tensión portopulmonar se define por la presencia
nosas, predominantemente localizadas en las por- de una presión arterial pulmonar media superior a
ciones más declives del pulmón, condicionando un 25 mmHg junto con una presión capilar pulmonar
efecto shunt derecha-izquierda. En estas circuns- enclavada inferior a 15 mmHg, en un paciente con
tancias, un porcentaje de la sangre dependiente del hipertensión portal. El mecanismo fisiopatológi-
flujo de la arteria pulmonar no se satura suficien- co de esta entidad no se conoce con exactitud. El
temente de oxígeno (O2) a su paso por el pulmón desarrollo de hipertensión portal y la circulación
(figura 9). Estos pacientes presentan alteraciones hiperdinámica son elementos claves que pueden
en la relación ventilación/perfusión, así como una contribuir a los cambios vasculares observados
reducción en la capacidad de difusión pulmonar y en la hipertensión portopulmonar (hipertrofia del
una desaturación de oxígeno (síndrome hepatopul- músculo liso vascular, fibrosis concéntrica de la
monar). No es infrecuente, por consiguiente, en- capa íntima, arteriopatía plexogénica y vasculitis
contrar a enfermos con cirrosis hepática y una PaO2 necrotizante). El hecho de que esta complicación
en el rango de 60-70 mmHg (figura 10). Existen dos pueda aparecer en el mismo contexto clínico que
signos que permiten sospechar el padecimiento de el síndrome hepatopulmonar, sugiere que ambas
un síndrome hepatopulmonar. La ortodeoxia con- entidades pueden compartir un mismo origen sien-

877
Sección 6. Hígado

do el grado de disfunción endotelial el que deter-


mine el desarrollo de una u otra (una descripción
más detallada de ambos síndromes se expone en
el capítulo 65)18.

Expresión de la enfermedad por órganos


y sistemas
Síntomas y signos constitucionales
La cirrosis hepática se acompaña frecuentemen-
te de desnutrición proteinocalórica. Su incidencia
y gravedad varía en función de la etiología de la
cirrosis, siendo más frecuente en la cirrosis alco-
hólica y en la cirrosis biliar primaria avanzada. Los
mecanismos que producen la desnutrición son
múltiples e interrelacionados entre sí, destacando
la disminución de la ingesta, la malabsorción gas-
trointestinal, el aumento del gasto energético y la
presencia de un estado hipercatabólico persistente.
La anorexia es más frecuente en la hepatopatía de
origen enólico. No en vano, la ingesta de alcohol
aporta 7 calorías por cada gramo consumido. Este
hecho contribuye a la malnutrición característica
de estos pacientes, al disminuir la necesidad de Figura 5. Angiografía pulmonar que muestra la presencia de
ingerir una dieta equilibrada. El alcohol produce dilataciones del lecho vascular en las porciones más declives
malabsorción intestinal y maldigestión debido a del pulmón (reproducida con permiso de Michael J. Krowka,
su efecto tóxico directo. Una colestasis prolonga- M.D [ref 6]).
da también produce una malabsorción de lípidos
y favorece la hiporexia. Por último, en la cirrosis
existe un estado hipermetabólico que produce un fección bacteriana, debiendo obtenerse muestras
aumento del gasto energético en reposo y que para el análisis bacteriológico de sangre, orina y
se relaciona con el aumento de la actividad beta- líquido ascítico (capítulo 64). Otras causas implica-
adrenérgica y del TN - 19. Como consecuencia de la das en la etiología de una fiebre de bajo grado son
desnutrición calórico-proteica se produce pérdida la endotoxinemia circulante, el déficit en el catabo-
de peso, astenia, osteoporosis y atrofia muscular. lismo hepático de pirógenos esteroideos (etiocola-
Todo esto repercute notablemente en la calidad de nolona) o la presencia de un hepatocarcinoma.
vida del paciente y en su pronóstico vital. De hecho,
tradicionalmente se pensaba que la ingesta de una Síntomas gastrointestinales
dieta hiperproteica podía precipitar un episodio de
encefalopatía hepática aconsejando por este moti- La hipertrofia de parótida es un hallazgo frecuente,
vo dietas muy restrictivas. Sin embargo, el consu- especialmente en la cirrosis alcohólica (50%).
mo prolongado de una dieta hipoproteica puede En otra sección de este capítulo se ha informado
empeorar el estado nutricional, favorecer la atrofia sobre la importancia del desarrollo de colaterales
muscular y precipitar o empeorar la encefalopatía gastroesofágicas en la patogénesis de la hemorra-
hepática. gia digestiva por hipertensión portal. La endoscopia
La febrícula es un signo constitucional frecuente en permite detectar la presencia de varices esofago-
la cirrosis avanzada. Su origen podría relacionarse gástricas antes de que éstas originen complicacio-
con la liberación de sustancias pirógenas produci- nes. Ello es muy importante, pues disponemos en
das por la necrosis hepatocelular. Este hecho ocu- la actualidad de tratamientos eficaces para reducir
rre con mayor probabilidad en el paciente enólico, el riesgo de sangrado. Una proporción significativa
coincidiendo con un brote de hepatitis alcohólica. de estos pacientes desarrollan, además, varices
Siempre debe considerarse la posibilidad de una in- rectales, que es preciso distinguir de las hemorroi-

878
60. Cirrosis hepática

des. La hemorragia por rotura de varices rectales es periférica y signos característicos de degeneración
menos amenazante para la vida, pero se han descri- hepatolenticular. Se han descrito casos de mielopa-
to casos de hemorragia grave o persistente que re- tía portosistémica, expresados como una mielitis
quieren la colocación de un balón, escleroterapia e transversa con signos de paraplejía espástica.
incluso procedimientos de derivación portosistémi-
Otras manifestaciones se relacionan con el consu-
ca20. En algunos pacientes la endoscopia puede re-
mo crónico de alcohol y la desnutrición, y no con
velar signos de ectasia vascular (gastropatía portal
hipertensiva). Su importancia radica en la frecuen- la hepatopatía crónica propiamente dicha. Tal es el
cia con que provoca anemización consecutiva a caso de la encefalopatía de Wernicke o la neuro-
pérdidas de sangre oculta o a verdaderos episodios patía periférica, que puede observarse hasta en el
de hemorragia digestiva. Ésta puede venir precipi- 40% de los pacientes con cirrosis de etiología alco-
tada por fenómenos de vasocongestión, isquemia hólica.
e hipoxia tisular. Igualmente, se ha documentado
una mayor prevalencia de hernia hiatal, así como Alteraciones hematológicas
de gastropatía por alcohol y úlcera péptica. Los trastornos en la hemostasia constituyen la
La diarrea es un síntoma frecuente entre los en- manifestación hematológica fundamental en la ci-
fermos con cirrosis hepática. Su patogenia podría rrosis hepática. No en vano, todos los factores de
relacionarse con fenómenos de malabsorción aso- la coagulación, excepto el factor VIII, son sintetiza-
ciados a la ingesta crónica de alcohol, sobrecreci- dos en el hígado. Este hecho se había considerado
miento bacteriano intestinal y, en ocasiones, el como un factor de riesgo para fenómenos hemo-
propio tratamiento de la encefalopatía hepática rrágicos, si bien esto se limita a los enfermos con
con disacáridos no absorbibles (lactulosa, lactitol). trombocitopenia extrema (menor de 25.000 por
mm3), alteraciones en la función plaquetaria o es-
inalmente, en la cirrosis es característico el de- tados de fibrinólisis. La coagulopatía intravascular
sarrollo de cálculos biliares pigmentarios. Su pa- diseminada no es frecuente en la cirrosis hepática,
togenia se relaciona con una hiperproducción de salvo en casos de sepsis sobreañadida o en los por-
bilirrubina (hiperesplenismo). Los cálculos de bili- tadores de un shunt de Le Veen. Recientemente, se
rrubinato cálcico son más amorfos que los de coles- ha descrito un aumento del riesgo de trombosis en
terol. Por tanto, los episodios de impactación biliar los pacientes con cirrosis hepática. Los principales
son menos frecuentes. La pancreatitis crónica es anticoagulantes endógenos (proteína C, proteína S
más común cuando el alcohol ha sido la causa de y antitrombina III) también se sintetizan en el híga-
la enfermedad20. do y en los pacientes con cirrosis se ha observado
una disminución de su producción favoreciendo un
Síntomas neurológicos estado de hipercoagulabilidad.
a se ha mencionado la importancia de la ence- La anemia es un rasgo comúnmente observado
falopatía portosistémica en el origen de los sínto- en los enfermos con cirrosis. Su patrón puede ser
mas neuropsiquiátricos típicos de la enfermedad microcítico, debido a pérdidas gastrointestinales,
avanzada. El flapping tremor o asterixis es un signo macrocítico, por déficit de folato (alcohol) o mixto.
característico que aparece en relación con una su- Con frecuencia, la anemia se asocia a leucopenia
presión del sistema reticular descendente. Su inhi- o trombocitopenia, como una manifestación de hi-
bición conduce a estados de rigidez, anormalidades peresplenismo. En otras ocasiones, la hemólisis se
en los reflejos piramidales y flapping20. Este último,
ve enmascarada por un incremento de la síntesis
sin embargo, no es específico de la encefalopatía
eritrocitaria y sólo puede sospecharse por la pre-
hepática. De hecho, se ha descrito en otras anoma-
sencia de reticulocitosis, hiperbilirrubinemia no
lías metabólicas, como en la uremia, hipoglucemia,
conjugada o un aumento de la LDH. Ello ocurre con
intoxicación por barbitúricos y narcosis por dióxido
frecuencia en pacientes portadores de una DPPI.
de carbono. Se trata de un fenómeno bilateral y re-
Otros pacientes muestran acantocitosis, debido a
versible, directamente relacionado con los niveles
la acumulación de colesterol libre en la membrana
de amonio en sangre.
de los hematíes. Ello resulta más frecuente cuando
En estados avanzados de la cirrosis puede apreciar- la hemólisis va asociada a hipercolesterolemia e in-
se exageración de los reflejos tendinosos profun- filtración masiva de grasa por alcohol (síndrome de
dos con signo de Babinski, rigidez de la musculatura Zieve). El alcohol provoca, a su vez, hemosiderosis,

879
Sección 6. Hígado

rasgo comúnmente observado en la cirrosis de este hallazgo inespecífico que puede aparecer en otras
origen. entidades, como el embarazo, el hipertiroidismo y
la artritis reumatoidea. Otros signos característicos
Sistema musculoesquelético son los cambios observados en las uñas. A menu-
do se aprecian unas bandas o estrías horizontales
Es bien conocida la osteopenia dependiente de una
blanquecinas separadas entre sí por otras zonas de
malabsorción de vitaminas liposolubles en la cirro-
color normal (uñas de Muehrcke). Su patogenia se
sis biliar primaria. Algunos pacientes con cirrosis de
ha relacionado con estados de hipoalbuminemia.
etiología alcohólica desarrollan osteoporosis. Su
De hecho, también se observan en el síndrome
mecanismo no es bien conocido, pero puede tener
nefrótico. Es también característica la desaparición
relación con un deterioro de la función osteoblásti-
de las lúnulas ungueales y el enrojecimiento de la
ca o un aumento de la resorción ósea. El sedenta-
porción distal de las uñas.
rismo, frecuente en los pacientes con enfermedad
hepática avanzada, también favorece la amioatro-
fia y la osteopenia. Éste es un aspecto importante,
Sistema endocrino
porque la pérdida de masa ósea puede acelerarse El fallo hepático en el catabolismo de algunas hor-
en el postrasplante, debido a los esteroides y otros monas condiciona la aparición de algunas anoma-
factores que conducen a una mayor incidencia de lías endocrinológicas en la cirrosis hepática21. El
fracturas y colapsos vertebrales. En raras ocasio- alcoholismo, por ejemplo, origina una sobrepro-
nes, se ha documentado la presencia de periostitis, ducción de débiles esteroides andrógenos que son
dedos en palillo de tambor y sinovitis. La contrac- transformados en estrógenos en los tejidos perifé-
tura de Dupuytren es el resultado de un engrosa- ricos (piel, tejido adiposo, músculo y hueso). El hi-
miento y acortamiento de la fascia palmar (figura perestrogenismo contribuye a la formación de spi-
11) y se atribuye a una proliferación de fibroblastos ders, y eritema palmar, así como a los cambios en la
y a un anormal depósito de colágeno en la fascia. distribución del vello corporal. La ginecomastia es
Su prevalencia es superior entre la cirrosis alcohóli- un signo típico, agravado por el uso de espirolacto-
ca, pero también se ha observado en personas con na, y consiste en la proliferación de tejido glandular
hábito tabáquico y enólico, diabetes, algodistrofia y en la mama del varón.
en la enfermedad de Peyronie.
El hipogonadismo representa un efecto directo del
consumo de alcohol y menos de la cirrosis en sí20.
Sistema dermatológico De hecho, no es habitual en otro tipo de cirrosis,
En la cirrosis hepática son característicos algunos salvo en la hemocromatosis donde existe un de-
estigmas cutáneos. Aisladamente poseen poca es- pósito de hierro, tanto en la hipófisis, como en los
pecificidad, pero la confluencia de varios de ellos testículos. Ambos sexos son afectados por eleva-
en un mismo paciente resulta orientativa para das tasas de infertilidad, cambios en los caracteres
sospechar el padecimiento de la enfermedad. En- sexuales secundarios y pérdida de la líbido. En el
tre ellos destacan, por su prevalencia, los spiders varón se ha documentado atrofia testicular, impo-
o arañas vasculares, consistentes en lesiones vas- tencia y oligospermia. En la mujer son caracterís-
culares con una pequeña arteriola central rodeada ticas la oligomenorrea y una disminución en los
de pequeños vasos (figura 11). Pueden apreciarse niveles de estradiol y progesterona. No obstante,
predominantemente en la cara, tronco y extremi- el embarazo es posible y puede culminar con éxito.
dades superiores. Las arañas vasculares no son es-
La prevalencia de diabetes es superior entre los
pecíficas de la cirrosis hepática. De hecho, pueden
pacientes con cirrosis hepática. Suele manifestarse
verse también en el embarazo, los estados de mal-
por hiperglucemia, leve glucosuria e intolerancia
nutrición e incluso en personas normales. Aunque
a la glucosa. Su origen debe relacionarse con una
su patogenia es desconocida, se aduce que guar-
resistencia periférica a la acción de la insulina. No
da relación con una alteración en el metabolismo
son habituales, sin embargo, las lesiones vasculares
de las hormonas sexuales, habiéndose observado
o la cetoacidosis.
un aumento en la relación estradiol/testosterona
libre. Su número y tamaño guardan relación con Los pacientes críticos, principalmente aquellos en
la probabilidad de presentar una hemorragia di- shock séptico, pueden presentar una insuficiencia,
gestiva por varices y síndrome hepatopulmonar. El funcional o relativa, del eje hipotálamo-hipófisis-
eritema de las eminencias tenar e hipotenar es un adrenal que disminuye la respuesta cardiovascular

880
60. Cirrosis hepática

Figura 11. Signos frecuentemente encontrados en la ci-


rrosis hepática. A la izquierda superior: una araña vascular
(obsérvese la arteriola central). En la derecha superior:
arañas vasculares y telangiectasias en la región pectoral.
En la inferior: contractura bilateral de Dupytren.

al estímulo del sistema renina-angiotensina-aldos- inductores de enzimas microsomales, capaces de


terona y del sistema nervioso simpático, y aumenta activar procarcinógenos y de deteriorar la repara-
la mortalidad. En los pacientes con cirrosis hepática ción del DNA. Así, se ha documentado una mayor
se ha descrito una alta incidencia de insuficiencia prevalencia de cáncer de páncreas, cardias, colon y
adrenal relativa, independientemente de la presen- del propio hígado.
cia de sepsis o inestabilidad hemodinámica, que se
El hepatocarcinoma es un fenómeno ligado a la
relaciona con la gravedad de la enfermedad. Sin
historia natural de la cirrosis, particularmente si su
embargo, la administración de dosis bajas de hidro-
etiología guarda relación con el alcohol, el virus de
cortisona en los pacientes cirróticos críticos, no ha
las hepatitis B y C, la hemocromatosis o la porfiria
demostrado beneficio en cuanto a disminución de
hepatocutánea tarda. Aunque el espectro de posi-
la mortalidad22.
bilidades sintomáticas de este tumor es amplio (ta-
a se ha mencionado la importancia del hiperal- bla 4), algunos hepatomas pueden diagnosticarse
dosteronismo secundario en la patogénesis de la en pacientes asintomáticos, en una fase en la que
retención de sodio en el cirrótico con hipertensión la cirugía de exéresis, el propio trasplante o la alco-
portal. inalmente, se han documentado niveles re- holización del tumor, pueden llegar a ser curativas.
ducidos de hormonas tiroideas, fiel reflejo de una Ello se consigue cuando se efectúan programas de
disminución de su síntesis hepática, así como eleva- cribado basados en la realización de ecografías de
ciones de los niveles plasmáticos de PTH, relaciona- control23.
dos con hipovitaminosis D. Esta última anomalía es
más frecuente en la cirrosis biliar primaria. Diagnóstico
El proceso diagnóstico de una cirrosis hepática in-
Asociaciones oncológicas cluye cuatro fases primordialmente:
Algunas neoplasias inciden con mayor frecuencia
❱ Sospechar la enfermedad.
en el enfermo cirrótico. Ello puede guardar relación
con la mayor prevalencia de determinados hábitos ❱ Confirmar el diagnóstico.
tóxicos, como el consumo de tabaco y alcohol, lo
❱ Establecer la etiología.
que justifica una mayor frecuencia de cáncer orofa-
ríngeo o de esófago, o con mecanismos complejos ❱ Estratificar el riesgo.

881
Sección 6. Hígado

Sospechar la enfermedad patente al incrementar la presión con la maniobra


de Valsalva. El descubrimiento de cualquiera de es-
El descubrimiento de una cirrosis hepática puede tos signos debe alertar al clínico acerca del pade-
llevarse a cabo por distintas circunstancias24: cimiento de una enfermedad hepática avanzada y
❱ El hallazgo de estigmas característicos de una ordenar una investigación.
enfermedad crónica del hígado en el examen
físico.
anOmalíaS dE labOratOrIO

❱ El descubrimiento de anomalías de laboratorio No es infrecuente que el diagnóstico de una cirrosis


en el curso de una analítica rutinaria. hepática venga sugerido por la detección de ciertas
anomalías de laboratorio que aparecen al indicar
❱ La aparición de signos de descompensación de una analítica rutinaria, a menudo en el contexto
la enfermedad. de un screening de salud laboral. Es muy habitual
❱ El hallazgo de cirrosis hepática en el curso de que un enfermo con una hepatopatía crónica sea
una laparotomía o de una necropsia indicadas derivado a un medio especializado por haberse
por otra causa. detectado alteraciones en las pruebas de función
hepática , término a menudo utilizado de forma
HallazGOS En El ExamEn fíSIcO incorrecta, dado que esta nomenclatura debería
Como ya se ha mencionado, los enfermos con cirro- ceñirse únicamente a las pruebas que exploran la
sis hepática presentan a menudo una serie de es- capacidad biosintética del hígado (concentración
tigmas característicos cuya mera presencia permite de albúmina y tiempo de protrombina, básicamen-
despertar la sospecha clínica (tabla 5). Algunos de te). Otras alteraciones, como el nivel de amino-
los signos se descubren al palpar el abdomen del transferasas (transaminasas) o de fosfatasa alcalina
enfermo en el curso de una exploración rutinaria. o GGT, expresan otro tipo de alteraciones (daño
La exploración del abdomen en los enfermos con ci- necroinflamatorio o colestasis, respectivamente). A
rrosis hepática permite descubrir en muchos casos continuación se desglosan las anomalías de labora-
una hepatomegalia de borde duro, cortante o no- torio más frecuentemente observadas en la cirrosis
dular. La ausencia de hepatomegalia, sin embargo, hepática.
no excluye la enfermedad e incluso puede sugerir
un peor pronóstico (la atrofia del hígado es un sig- ❱ aminotransferasas (aSt/alt). El aumento
no de enfermedad avanzada). La esplenomegalia es de la actividad aminotransferasa refleja daño
un hallazgo igualmente frecuente. Aunque su pre- necroinflamatorio en mayor o menor grado.
sencia se ha relacionado con la hipertensión portal, Usualmente los niveles de AST y ALT están leve-
no existe una correlación clara entre el tamaño del mente elevados en la cirrosis hepática, aunque
bazo y el grado de hipertensión portal, por lo que es frecuente que sean normales. Aunque la re-
es probable que en su patogenia intervengan otros lación AST/ALT suele ser inferior a 1 (salvo en las
factores. La presencia de ascitis viene sugerida por hepatopatías de origen enólico) en realidad, a
la presencia de matidez en ambos flancos. Sin em- medida que una enfermedad hepática crónica
bargo, se requiere una acumulación de al menos progresa hacia cirrosis, esta relación puede in-
1.500 cc de líquido en la cavidad peritoneal para vertirse. Una elevación marcada de las transa-
que este signo sea evidente en la exploración físi- minasas en el contexto de una cirrosis hepática
ca. Aunque la vena umbilical suele obliterarse en debe sugerir una agresión de origen tóxico (fár-
el momento del nacimiento, en los casos de hiper- macos o alcohol), una hepatitis vírica injertada o
tensión portal avanzada llega a repermeabilizarse un daño isquémico inducido por shock o colap-
permitiendo que la sangre del sistema venoso por- so cardiovascular.
tal pueda drenar a través de las venas de la pared
abdominal determinando la aparición de una típica ❱ fosfatasa alcalina. Esta enzima suele estar ele-
cabeza de medusa en la parte anterosuperior vada pero menos de dos o tres veces el rango
del abdomen. En algunos casos se identifica un normal. Elevaciones más altas deben sugerir
murmullo o zumbido venoso a la auscultación que una cirrosis de origen biliar (colangitis esclero-
refleja el paso rápido de la sangre desde el terri- sante primaria o cirrosis biliar primaria). Tam-
torio venoso portal hasta la vena umbilical (signo bién se observa elevación de la fosfatasa alcali-
de Cruveilhier-Baumgarten). Este signo se hace más na en casos de hepatocarcinoma.

882
60. Cirrosis hepática

❱ a ag ta i t ans e asa La elevación ❱ K sérico. La elevación de los niveles del potasio


de la GGT en la cirrosis hepática es un hecho sérico suele ocurrir en enfermos cirróticos trata-
inespecífico. Cuando existe un componente co- dos con diuréticos de acción distal (espirolacto-
lestásico, su elevación ocurre de forma paralela na, triamterene, amiloride). La hipopotasemia
a la de la fosfatasa alcalina. Una elevación signi- puede ser el resultado de pérdidas relacionadas
ficativa aislada debe sugerir alcoholismo activo con el uso de diuréticos del asa, vómitos o dia-
o inducción enzimática por fármacos. rrea. Puede ser un factor inductor de encefalo-
patía (véase más arriba).
❱ bilirrubina. Los niveles de bilirrubina pueden
ser normales en la cirrosis compensada pero, a ❱ alteraciones hematológicas. En la cirrosis he-
medida que la enfermedad progresa, se elevan pática es común observar diversas alteraciones
de un modo gradual. De hecho, la bilirrubina es hematológicas, incluyendo trastornos de la coa-
uno de los parámetros utilizados en la clasifica- gulación y diversos grados de citopenia.
ción de Child-Pugh para evaluar el estado de la
anemia. Puede tener un origen multifacto-
función hepática. En los pacientes con cirrosis
rial e incluye pérdidas crónicas de sangre por
biliar primaria, la elevación de los niveles de bi-
el tubo digestivo, déficit de ácido fólico, toxi-
lirrubina constituye un indicador de mal pronós-
cidad directa por alcohol, hiperesplenismo y
tico y una indicación para plantear el trasplante
supresión de la médula ósea.
de hígado.
trombocitopenia. La plaquetopenia es un
❱ albúmina. La albúmina es sintetizada exclusi-
fenómeno común atribuido a la hipertensión
vamente por el hígado. De ahí que sus niveles
portal y a la esplenomegalia congestiva. El
desciendan a medida que la función hepática
bazo puede llegar a secuestrar el 90% de las
se deteriora. Debe considerarse que una tasa
plaquetas circulantes, aunque es raro obser-
baja de albúmina puede verse también en la in-
var niveles de plaquetas inferiores a 50.000
suficiencia cardiaca congestiva, en el síndrome
cc.
nefrótico y en la enteropatía pierdeproteínas
(capítulo 26). leucopenia y neutropenia. Son también una
consecuencia del hiperesplenismo.
❱ tiempo de protrombina. El hígado interviene
en la síntesis de la mayoría de las proteínas im- alteraciones de la hemostasia. La cirrosis he-
plicadas en los mecanismos de la coagulación. pática conduce a la aparición de numerosas
Por lo tanto, el tiempo de protrombina refleja alteraciones hemocoagulativas, asociadas al
con gran precisión el estado de la función hepá- deterioro de la función del hígado. Éstas inclu-
tica y aumenta gradualmente en la medida que yen, no solamente un descenso de las proteí-
ésta se deteriora. nas que intervienen en los mecanismos de la
coagulación, sino fenómenos de coagulación
❱ Globulinas. Las gammaglobulinas pueden estar
intravascular diseminada, deficiencia de Vit
incrementadas en la cirrosis hepática con hiper-
K, estados de disfibrinogenemia y fibrinolisis
tensión portal. De hecho, sus niveles constitu-
que, unidos a la trombocitopenia ya mencio-
yen, en gran medida, un marcador indirecto del nada, contribuyen a la diátesis hemorrágica
grado de shunt portosistémico. Ello obedece a característica de la cirrosis.
que las bacterias de procedencia intestinal no
fagocitadas por las células de Kup er estimulan SIGnOS dE dEScOmPEnSacIón
al sistema inmunocompetente incrementando
En algunos pacientes, la cirrosis hepática no se
los niveles séricos de Igs. Una marcada eleva-
descubre hasta que aparece una descompensación
ción de IgG debe de sugerir una posible etiolo-
(figura 3). Ésta puede ocurrir de forma espontánea
gía inmune. La IgM está elevada en más del 90%
o relacionarse con un factor precipitante1,14,24. No
de los pacientes con cirrosis biliar primaria.
es infrecuente, por ejemplo, que una infección bac-
❱ na sérico. La hiponatremia es común en los teriana sea el detonante de un primer episodio de
pacientes con cirrosis hepática con ascitis y se ascitis o de encefalopatía (capítulo 64). Otras cir-
relaciona con la incapacidad del riñón para ex- cunstancias que pueden ser determinantes de los
cretar agua libre, debido a un incremento de los primeros síntomas son: una transgresión enólica
niveles de ADH (capítulo 62). (a menudo asociada a una exacerbación del daño

883
Sección 6. Hígado

necroinflamatorio), una cirugía mayor reciente o cortante y nodular, con signos de hiperesplenismo,
la propia hemorragia por varices esofagogástricas. alteraciones evidentes de la función hepática y una
marcada hipergammaglobulinemia. Un paciente de
Ante un primer episodio de hemorragia digestiva
estas características probablemente pueda evitar la
por hipertensión portal, en una cirrosis hepática
biopsia hepática y con ello soslayar el riesgo poten-
hasta entonces inadvertida, debe considerarse la
cial de complicaciones asociadas al procedimiento.
posibilidad de una trombosis portal que complica
la evolución de un hepatocarcinoma insospechado. Los datos que proporciona una prueba de imagen
De hecho, no es excepcional que las primeras ma- como la ecografía pueden ser suficientes, al de-
nifestaciones de la cirrosis guarden relación con la mostrar la presencia de un hígado de ecoestructura
aparición de un hepatoma injertado sobre la enfer- heterogénea, borde festoneado y signos indirec-
medad de base23. En este caso, el paciente puede tos de hipertensión portal. Distinta es la situación
presentarse con dolor sordo y continuo en el hipo- de un paciente que presenta episodios de ascitis
condrio derecho, pérdida de peso, fiebre inexplica- recurrente sin apenas alteraciones de la función
ble o un hemoperitoneo agudo (tabla 4). hepática, y sin otras alteraciones biológicas suges-
tivas (hiperesplenismo, hipergammaglobulinemia),
laParOtOmía O nEcrOPSIa
máxime cuando no existe una etiología sugestiva
inalmente, no es inhabitual que una cirrosis hepá- (alcoholismo, infección por el virus de la hepatitis
tica sea descubierta en el curso de una laparotomía C, etc.). Establecer un diagnóstico de cirrosis hepá-
indicada por otra causa o durante el examen post tica en un caso de estas características puede ser
mortem de un paciente fallecido por otra enferme- muy arriesgado e incluso pasar por alto un cuadro
dad. De hecho, en algunas series históricas, hasta de hipertensión portal de otro origen (por ejem-
un 30-40% de los casos de cirrosis eran diagnostica- plo, un síndrome de Budd-Chiari o una pericarditis
dos en el curso de una autopsia25. constrictiva).

Confirmar el diagnóstico Recientemente, se ha incorporado una nueva téc-


nica para evaluar el grado de fibrosis, la cirrosis e
El patrón oro para el diagnóstico de la cirrosis hepá- incluso la hipertensión portal. Se trata de la elas-
tica es el examen histológico del hígado24. Éste pue- tografía hepática, una técnica incruenta, sencilla y
de ser obtenido por medio de una biopsia hepática rápida, que utiliza una onda de vibración pulsátil
transcutánea dirigida por ultrasonidos (técnica más y otra de ultrasonidos que se transmiten al tejido
habitual) o por otros procedimientos, incluyendo la hepático (evalúa un volumen 100 veces superior
biopsia hepática obtenida por laparoscopia o por al de la biopsia). La velocidad de propagación de la
vía transyugular. En otras ocasiones la biopsia se onda de ultrasonidos se correlaciona con la dure-
obtiene en el curso de una laparotomía (incluyendo za del tejido e, indirectamente, con el estadio de
el momento del trasplante hepático). fibrosis hepática. Valores de elastografía de transi-
La biopsia hepática posee una sensibilidad del 80- ción superiores a 13,6 KPa en un paciente con una
100% para el diagnóstico, en dependencia del pro- infección por virus C de la hepatitis o a 20 KPa en un
cedimiento utilizado y del tamaño y número de las paciente alcohólico son fuertemente sugestivos de
muestras obtenidas. En algunas ocasiones, el exa- la existencia de cirrosis hepática.
men histológico puede incluso sugerir la causa de la
enfermedad, especialmente en los casos de estea- Determinar la causa de la cirrosis
tohepatitis no alcohólica y en algunas enfermeda- Una vez establecido el diagnóstico de cirrosis hepá-
des de causa metabólica, incluyendo la hemocro- tica, es obligado llevar a cabo una investigación para
matosis hereditaria, la enfermedad de Wilson y el determinar la causa de la enfermedad. Las dos cau-
déficit de -1-antitripsina.
sas más frecuentes en el mundo occidental son el
En la práctica clínica habitual, sin embargo, habi- alcoholismo y el virus de la hepatitis C. Hoy en día,
tualmente se establece el diagnóstico de cirrosis el diagnóstico de cirrosis criptogenética representa
hepática de acuerdo con criterios clínicos, bio- menos del 15% de los casos, debido probablemen-
lógicos y de imagen, especialmente si existe una te al creciente reconocimiento de la esteatohepati-
etiología clara. Un ejemplo sería un paciente con tis no alcohólica (EHNA) como causa de enferme-
alcoholismo inveterado que presenta estigmas de dad hepática crónica (capítulo 56). En cualquier
hepatopatía crónica, ascitis y un hígado de borde caso, es importante disponer de información clara

884
60. Cirrosis hepática

sobre la etiología de la cirrosis, dado que ello puede Recomendaciones generales en el manejo
ser esencial para adoptar determinadas decisiones
terapéuticas, proporcionar consejo genético a los de la cirrosis hepática
familiares y predecir ciertas complicaciones. Ejem- Una vez establecido el diagnóstico de cirrosis he-
plos claros son las cirrosis de origen autoinmune, pática, el enfermo debe ser controlado en un me-
que pueden obtener un beneficio tangible con la dio especializado. La periodicidad de los controles
administración de corticosteroides e inmunosu- depende, en gran medida, de la condición clínica
presores; la hemocromatosis, que puede mejorar del enfermo. Es importante que el paciente sea
de forma espectacular tras iniciar un programa de evaluado por un mismo facultativo en las visitas
flebotomías, o la cirrosis secundaria al virus de la sucesivas. De hecho, en pocas enfermedades cró-
hepatitis B, indicación firme de tratamiento anti- nicas resulta tan necesario un especialista de ca-
viral con un análogo de nucleótidos/nucleósidos becera . Este concepto no está en contraposición
potente, rápido y con un perfil de resistencias ópti- con la intervención, a menudo crucial, de un médi-
mo, como son entecavir y tenofovir. Determinadas co de familia bien preparado que, sin duda, forma
causas de cirrosis como las producidas por virus o parte del equipo que atiende a estos pacientes.
la propia hemocromatosis suponen un riesgo ma- Los enfermos deben ser informados de la natura-
yor de hepatocarcinoma que otras entidades, como leza de su enfermedad y de los recursos disponi-
la hepatitis autoinmune o la EHNA y requieren, por bles para su tratamiento, incluyendo el trasplante
tanto, un programa de vigilancia más exhaustivo. hepático. Aunque esta información puede y debe
Las tablas 6 y 7 muestran las claves clínicas y los ser proporcionada por su propio médico, existen
procedimientos esenciales para alcanzar un diag- páginas informativas dirigidas a pacientes con
nóstico etiológico en la cirrosis hepática24. cirrosis hepática en numerosas fuentes de reco-
nocida solvencia científica (www.uptodate.com),
Estratificar el riesgo incluyendo asociaciones nacionales (www.aeeh.
Actualmente, el riesgo de mortalidad en los pacien- org) e internacionales (www.easl.ch; www.aaasld.
tes con cirrosis se estratifica de acuerdo con el es- org) dedicadas al estudio de las enfermedades del
tadío en el que se incluye el paciente basado en el hígado y fundaciones que proporcionan numero-
sistema propuesto en la Conferencia de Consenso sos recursos a los pacientes con enfermedades del
de Baveno IV (figura 3)6. Sin embargo, la mayoría hígado (www.liverfoundation.org). El tratamiento
de los pacientes con cirrosis hepática compensada de estos pacientes incluye una serie de recomen-
desarrollarán un episodio de descompensación o daciones generales, la prevención de complicacio-
un hepatocarcinoma antes de morir. Es por ello que nes y el manejo de las descompensaciones26.
en la práctica clínica resulta más interesante estra-
tificar a los pacientes en fase compensada según el Recomendaciones generales
riesgo de desarrollo de estos eventos. Ello permite
implantar estrategias de cribado o medidas preven- Dieta
tivas. Ambos acontecimientos, el episodio de des- Los enfermos con enfermedad compensada no re-
compensación o el desarrollo de hepatocarcinoma, quiren una dieta específica. Es más, hoy en día, exis-
están íntimamente relacionados con la presencia
ten claras evidencias que apoyan la necesidad de no
de hipertensión portal clínicamente significativa y
restringir ninguno de los principios inmediatos esen-
el grado de insuficiencia hepática, valorado por el
ciales (incluyendo las proteínas) dado que el estado
índice MELD, un índice pronóstico que incluye en
de nutrición es esencial en estos pacientes14,19. Por
una fórmula matemática compleja, la bilirrubina, el
supuesto, deben evitarse todas aquellas sustancias
INR y la creatinina.
que pueden contribuir a exacerbar el daño hepático,
En los pacientes en fase descompensada, la pun- especialmente el alcohol y algunos remedios her-
tuación total en la clasificación de Child-Pugh (tabla barios, que pueden resultar hepatotóxicos. Sin em-
2) o el antecedente de hemorragia digestiva, insu- bargo, se debe recomendar la ingesta de alimentos
ficiencia renal o hepatocarcinoma, son los factores como fruta, verdura fresca y chocolate negro, que
predictivos independientes más importantes rela- por su alto contenido en antioxidantes pueden favo-
cionados con el riesgo de muerte. recer un descenso de la presión portal27.

885
TABLA 6. Claves clínicas y procedimientos esenciales para el diagnóstico etiológico de la cirrosis hepática.

886
Laboratorio/
a sa Datos e i e io ógicos ani estaciones c nicas e as co e enta ias isto og a icaciones te a cas

Alcohol 40-60 g de alcohol/día 15 Desde casos asintomáticos hasta Elevación desproporcionada de Necrosis centrolobulillar. Abandono del hábito enólico.
años ( 20-30 g en la mujer) formas graves de hepatitis alcohólica AST en relación a la ALT ( 2). Hialina de Mallory. Complejo B.
Sección 6. Hígado

con anorexia marcada, ictericia, Niveles de AST y ALT generalmente Infiltración por PMN.
fiebre, hepatomegalia y ascitis. inferiores a 300 UI/l. ibrosis perivenular.
VCM aumentado. Extensión de la fibrosis al resto del
Elevación significativa de GGT si lobulillo si persiste el hábito enólico.
enolismo activo.
VHC Antecedentes de transfusión de Desde casos asintomáticos hasta ALT AST Permite evaluar severidad histológica Es posible plantear tratamiento
sangre o hemoderivados. formas severas de descompensación. Anti-VHC ( ) y estimar la influencia de otros antiviral en casos seleccionados de
Adicción a drogas por vía Coexistencia de manifestaciones RNA-VHC ( ) factores concomitantes (ej.: alcohol). cirrosis compensada.
parenteral. extrahepáticas sugestivas:
Exposición nosocomial. - Crioglobulinemia
Otros: acupuntura, tatuajes... - Aplasia medular
VHB Antecedentes de transfusión de Desde casos asintomáticos ALT AST Presencia de HbcAg en el núcleo de Posibilidad de indicar
sangre o hemoderivados. hasta formas severas de HbsAg ( ) los hepatocitos. antivirales específicos
Adicción a drogas por vía parenteral. descompensación. HbeAg y DNA-v ( ) Presencia de HbsAg en citoplasma. (lamivudina, adefovir, entecavir)
Contacto con pareja HbsAg ( ). Anti-Hbe ( ) y DNA-v ( ) Permite evaluar severidad histológica gammaglobulina anti-VHB en caso
Transmisión vertical. (formas mutantes) y estimar la influencia de otros de trasplante.
Otros: acupuntura, tatuajes factores concomitantes (ej.: alcohol).
EHNA Coexistencia de sobrepeso, Obesidad. Coexistencia frecuente de: Alteraciones indistinguibles de la Control de los factores metabólicos
diabetes o dislipemia, bypass Dismetabolismo (síndrome ). - Hiperglucemia hepatopatía por alcohol. asociados a la patogenia de la
digestivo para el tratamiento de la Síntomas precedidos de un largo - Hipercolesterolemia. EHNA, incluyendo el sobrepeso.
obesidad, entre otros factores de período asintomático.
riesgo (capítulo 49).
Ausencia de un consumo significativo
de alcohol.
Cirrosis Predominio franco en la mujer Asintomática. Astenia, prurito e osfatasa alcalina ( 3 veces). Obliteración y posterior destrucción Reposición de vitaminas
biliar ( 90%) hiperpigmentación. Hepatomegalia Aumento de colesterol. y desaparición de los ductos biliares liposolubles (A,D,K,E).
primaria ( frecuente esplenomegalia). Elevación de IgM y de AMA. precedida de cambios inflamatorios. cido ursodesoxicólico.
Elevación tardía de los niveles de
bilirrubina plasmática.
TABLA 7. Claves clínicas y procedimientos esenciales para el diagnóstico etiológico de la cirrosis hepática.

Laboratorio/
a sa Datos e i e io ógicos ani estaciones c nicas e as co e enta ias isto og a icaciones te a cas

Colangitis Predominio en el varón ( 90%). Prurito. Elevación de fosfatasa alcalina Ductopenia progresiva. Reposición de vitaminas
esclerosante Coexistencia con enfermedad Esteatorrea. y GGT con AMA (-). Cambios inflamatorios menos liposolubles (A,D,K,E).
primaria inflamatoria intestinal, Malabsorción de vitaminas Ig M elevados (50%). prominentes que en la cirrosis cido ursodesoxicólico.
especialmente colitis ulcerosa (90% liposolubles (A, D, K, E). P-Ancas positivos. biliar primaria. Metronidazol.
cuando se efectúa biopsia rectal). Osteopenia y osteoporosis. Haplotipo DRw52 del HLA (50-100%)
Colangitis de repetición. CPRE/CRMN: áreas de estenosis
Puede debutar con colangiocarcinoma multifocales con dilataciones saculares
o con cáncer de colon. de los conductos biliares.
Ausencia de cirugía previa. VIH (-)
Hepatitis Predominio en la mujer. Episodios fluctuantes de remisión Hipergammaglobulina marcada. Infiltrado de células mononucleares Corticoesteroides.
autoinmune Coexistencia con otros y exacerbación. ANA, ASMA, anti-actina, anti-LSP/LP portales y periportales. Inmunosupresores
fenómenos autoinmunes. o ANCA (tipo 1). Presencia de células plasmáticas. (azatioprina,
Anti-LKM-1 o anti-ALC (citosol) (tipo 2). ormación de rosetas. mercaptopurina).
Considerar síndrome overlap
(AMA ) y colangiopatía
autoinmune (ANA, ASMA ).
Hemocromatosis Historia familiar de cirrosis. Diabetes, hiperpigmentación, Saturación de transferrina 60% ndice hepático de hierro 1,9 lebotomías.
hereditaria Comorbilidades asociadas. seudogota, miocardiopatía, ( 50% en la mujer) en más del 90% de sugiere un estado homocigótico. Especial vigilancia para el
Los estados heterocigóticos no hipogonadismo. los estados homocigóticos. IHH: cribado de hepatoma.
suelen desarrollar cirrosis, salvo erritina 300 ng/mL ( 200 ng/ml en ( mol/g / edad en años).
que existan otros factores asociados: mujer) sugieren sobrecarga de hierro.
-Hepatitis viral Test genético de hemocromatosis.
-EHNA.
Enfermedad de 45 años. Síntomas extrapiramidales. Ceruloplasmina: 20 mg/dl Concentración de Cu tisular: D-penicilamina.
Wilson Historia familiar. Anillo de Kayser leischer. ( 85% de los casos). 250 mcg/g de tejido seco. Trientina.
Hepatitis fulminante. Cu sérico no unido a ceruloplasmina Trasplante hepático.
25 mcg/dl.
Cupruria 100 mcg (1,6 mmol).
Déficit de alfa- Niños. Enfisema pulmonar. Niveles de alfa-1-AT 11 mol Inclusiones globulares PAS Trasplante hepático.
1-antitripsina Adultos con enfermedad Paniculitis necrotizante. (80 mg/dl) son compatibles positivas en el citoplasma.
pulmonar obstructiva Glomerulonefritis con un déficit severo.

887
60. Cirrosis hepática

crónica (2-3%). membranoproliferativa.


Sección 6. Hígado

Ejercicio pueden tener efectos impredecibles, por lo que


no pueden recomendarse, debiendo recurrir a
En general, el ejercicio regular y moderado es bien otras alternativas.
tolerado por los pacientes que presentan una en-
fermedad bien compensada. Debe conocerse, sin Profilaxis de infecciones
embargo, que, en pacientes con enfermedad avan-
zada, especialmente si han desarrollado ascitis o En los enfermos con cirrosis hepática debería cono-
presentan varices esofágicas, el ejercicio puede cerse su estado de inmunización frente a los virus
incrementar la presión intravaricosa y precipitar de las hepatitis A y B y, en su caso, proceder a la va-
una hemorragia digestiva. Este riesgo desaparece cunación frente a éstos, dado que la exacerbación
en pacientes que reciben tratamiento con betablo- del daño necroinflamatorio que produce la infec-
queantes no selectivos. ción aguda puede tener consecuencias fatales en
un enfermo con una cirrosis subyacente. Igualmen-
Medicaciones te debe considerarse la vacunación anual frente a
El médico debe tener conocimiento de los medi- gripe, neumococo y el virus influenza.
camentos que el paciente toma regularmente y
aconsejar al enfermo sobre el riesgo potencial de amiliares
complicaciones asociadas a su consumo. Como regla Los familiares de un paciente con cirrosis hepática
general, los pacientes con una disfunción hepática deben conocer la naturaleza de la enfermedad y,
leve o moderada pueden tomar las medicaciones en algunos casos, ser informados de la convenien-
prescritas habitualmente en el resto de las personas cia de ser investigados para detectar precozmente
sanas. Sin embargo, a medida que la función hepáti- alguna de las causas de enfermedad crónica del
ca empeora, la susceptibilidad a padecer efectos ad- hígado de carácter hereditario (por ejemplo, la en-
versos aumenta debido a cambios en la farmacociné- fermedad de Wilson y la hemocromatosis).
tica. Un problema de creciente interés es el manejo
del dolor en la cirrosis hepática. Algunas recomenda- Prevención de complicaciones
ciones deben llevarse a cabo en este contexto.
❱ El paracetamol sigue siendo el fármaco de elec- Hemorragia por varices
ción en primera instancia. Debe considerarse, Es esencial indicar una endoscopia en el momen-
no obstante, que, en el enfermo con alcoho- to del diagnóstico para comprobar si el paciente
lismo activo, el riesgo de hepatotoxicidad por ha desarrollado varices esofágicas. Si no es así, es
paracetamol aumenta considerablemente, de-
razonable verificar este punto cada 2 años. Si el
biendo limitarse a un máximo de 2 g/día.
enfermo desarrolla varices esofagogástricas, espe-
❱ El uso de AINE va asociado a un riesgo incre- cialmente si no son pequeñas (grado I) o presentan
mentado de hemorragia por varices, insuficien- signos de riesgo, debe recibir tratamiento con beta-
cia renal y resistencia al tratamiento diurético bloqueantes o ligadura endoscópica para disminuir
en el enfermo con ascitis. el riesgo del primer episodio de sangrado (véase
capítulo 61).
❱ El consumo de inhibidores de la CO -2 implica
menos riesgo de estos efectos adversos, pero Detección precoz de encefalopatía
incrementa el riesgo de accidentes cardiovascu-
lares. Se carece de experiencia contrastada de hepática
su utilización en el enfermo con cirrosis por lo En las visitas de control es importante investigar la
que su recomendación no puede ser sustentada presencia de cualquier síntoma o signo sugestivo
en evidencias. de encefalopatía. A menudo, los primeros síntomas
❱ Los opiáceos deben ser utilizados con precau- consisten en dificultad para conciliar el sueño o una
ción en el enfermo con cirrosis hepática. Tanto somnolencia inapropiada. Este punto es importan-
el fentanilo (frecuentemente utilizado como te, por cuanto el enfermo puede decidir tomar me-
sedoanalgesia en endoscopia), como la meta- dicaciones sedantes que pueden agravar un estado
dona, parecen seguros. La morfina puede ser de encefalopatía incipiente o poner en peligro la
utilizada a dosis más reducidas y en intervalos vida del paciente y la de otras personas (al propiciar
más prolongados. La codeína y el tramadol un accidente de circulación, por ejemplo).

888
60. Cirrosis hepática

Cribado del hepatocarcinoma ❱ Los nuevos conceptos sobre el manejo de la


encefalopatía hepática, donde se subraya la
El riesgo de desarrollar un hepatocarcinoma es importancia de garantizar el estado nutricional
más alto entre los pacientes con cirrosis hepática, del enfermo, haciendo prevalecer este aspecto
especialmente aquellas producidas por virus, la sobre las restricciones en el aporte de proteínas
hemocromatosis y la porfiria hepatocutánea tarda. en la dieta, uno de los enfoques más clásicos en
Es pertinente, por lo tanto, efectuar un cribado de el manejo de este síndrome11,14,19.
esta complicación potencialmente letal, mediante
la determinación periódica de los niveles plasmá- ❱ inalmente, el concepto de que el enfermo con
ticos de alfafetoproteína y un examen ecográfico cirrosis hepática puede beneficiarse de un tras-
cada 6 meses. plante hepático (TH), cuando las expectativas de
un tratamiento conservador son inferiores a las
Manejo de las descompensaciones que ofrece esta modalidad terapéutica en tér-
minos de supervivencia31.
El tratamiento de la ascitis y de los trastornos de la
función renal, así como las medidas para el control Evaluación del riesgo quirúrgico
y prevención de la hemorragia por hipertensión
Con relativa frecuencia se plantea la necesidad
portal, las infecciones bacterianas y la encefalopa-
de una cirugía (electiva o urgente) en un enfer-
tía, han quedado expuestos en los capítulos de-
mo con cirrosis hepática. El riesgo de mortalidad
dicados específicamente a estas complicaciones.
y de complicaciones en estos pacientes es mayor
No obstante y a modo de glosario, merecen ser
y su magnitud depende de la gravedad de la en-
comentados algunos de los avances más signifi-
fermedad hepática, del procedimiento quirúrgico
cativos de las últimas décadas, por el impacto
y del tipo de anestesia. Las tablas 8 y 9 describen
que han tenido sobre la supervivencia de estos
los factores comúnmente asociados a un mayor
pacientes28-31:
riesgo y las contraindicaciones formales para la
❱ La detección precoz de la peritonitis bacteriana cirugía, respectivamente. Las intervenciones que
espontánea (infección espontánea del líquido requieren una laparotomía, incluyendo la colecis-
ascítico) mediante el análisis del líquido ascítico tectomía, la gastrectomía y la colectomía, así como
obtenido tras una paracentesis. La administra- la cirugía cardiovascular comportan, en general,
ción iv de cefalosporinas de 3. generación y peor pronóstico. Globalmente, la estimación del
la expansión plasmática con seroalbúmina han riesgo quirúrgico puede llevarse a cabo con una
mejorado de forma significativa el pronóstico de razonable aproximación mediante la clasificación
estos pacientes32. de Child-Pugh. Varios estudios cifran el riesgo de
mortalidad postoperatoria en un 10, 31 y 76% para
❱ El advenimiento de nuevos métodos farmaco- los pacientes pertenecientes a los estadios A, B y
lógicos y endoscópicos para el control y pre- C, respectivamente. Por otro lado, en los pacien-
vención de la hemorragia digestiva por varices tes con un grado A de Child, pero con hipertensión
esofágicas, incluyendo la colocación de bandas portal significativa, el riesgo de desarrollar ictericia,
elásticas, que logran interrumpir el flujo sanguí- ascitis o encefalopatía en el postoperatorio es alto.
neo a través de la variz29. El sistema de puntuación de MELD, un modelo es-
❱ El papel decisivo de nuevos métodos no quirúr- tadístico que permite predecir la supervivencia en
gicos para derivar la corriente sanguínea desde pacientes en diferentes estadios de la enfermedad,
el territorio portal hasta la circulación sistémica, ha demostrado una buena correlación con la clasi-
mediante la implantación de un shunt portosis- ficación de Child-Pugh, en la predicción de supervi-
témico transyugular (DPPI o TIPS). Este procedi- vencia, especialmente en situaciones de cirugía de
emergencia.
miento ha resultado eficaz, tanto para el rescate
de los pacientes con hemorragia digestiva no Existen excelentes revisiones acerca de las reco-
respondedores a los fármacos vasoactivos y al mendaciones a seguir para optimizar los resultados
tratamiento endoscópico, como para aquellos de la cirugía en los enfermos con cirrosis hepática
pacientes considerados de alto riesgo (Child B donde el lector puede ampliar la información. Estas
con hemorragia activa en el momento de la en- recomendaciones incluyen medidas para mejorar
doscopia y Child C)28. las condiciones hemocoagulativas (vit. K, plasma

889
Sección 6. Hígado

TABLA 8. Factores predictivos de morbimortalidad en los TABLA 9. Contraindicaciones a la cirugía electiva en


pacientes con cirrosis hepática sometidos a cirugía. pacientes con hepatopatía.

❱ Asociados al tipo de cirugía ❱ Hepatitis alcohólica aguda


Abdominal ❱ Hepatitis viral aguda
a) Colecistectomía ❱ Cirrosis hepática (Child C)
b) Gastrectomía ❱ Hepatitis fulminante
c) Colectomía ❱ Hepatitis crónica grave
Hepatectomía ❱ Alteración grave de la coagulación:
Cirugía cardiaca 3 segundos a pesar tras administración de vit. K
Cirugía de emergencia Plaquetas 50.000 mm3
❱ Asociados al tipo de paciente ❱ Complicaciones extrahepáticas:
Ictericia Insuficiencia renal aguda
Ascitis Cardiomiopatía
Encefalopatía Hipoxemia
Infección
Hipertensión portal avanzada uente: riedman, LS. The risk of surgery in patients
Child-Pugh BC with liver disease. Hepatology 1999;26-1617.
Anemia
Hipoxemia
Hipoalbuminemia dental. El abuso de alcohol y la infección por el VHC
Tiempo de protrombina ( 2,5 por encima constituyen las causas más frecuentes en nuestro
del control que no se corrige tras vit. K iv). medio. La mayoría de las manifestaciones clínicas
y biológicas de esta enfermedad tienen su origen
en el deterioro progresivo de la función hepática y
en las consecuencias del shunt portosistémico aso-
fresco, factor VIIA recombinante), un tratamiento ciado a la hipertensión portal. El diagnóstico viene
agresivo de la ascitis (dado que aumenta el riesgo sugerido por el hallazgo de estigmas característicos
de dehiscencia de suturas y de eventración posto- en el examen físico, el descubrimiento de anoma-
peratoria), así como de los trastornos electrolíticos lías de laboratorio en el curso de una analítica ru-
y de la función renal. La presencia de hipokaliemia tinaria o por la aparición de signos de descompen-
y/o alcalosis metabólica, por ejemplo, aumentan sación de la enfermedad. Aunque el manejo de la
el riesgo de arritmias. Igualmente se aconseja un cirrosis y de sus complicaciones requiere de un me-
control estricto de todos los factores que pueden dio especializado, el médico de atención primaria
precipitar una encefalopatía hepática. Aunque la puede desempeñar un papel primordial, si conoce
cirugía, por sí misma, no representa un factor de los principios básicos que ayudan a prevenir y tratar
riesgo de hemorragia por hipertensión portal, se las complicaciones.
aconseja prudencia en la reposición de líquidos
para evitar una sobreexpansión plasmática exce- Bibliografía
siva. inalmente, y puesto que los pacientes con
cirrosis hepática a menudo están malnutridos, se 1. Bosch J, D Amico G, García-Pagán JC. Portal hy-
recomienda un soporte nutricional perioperatorio, pertension. En: Schi ER, Sorrell M , Maddrey
WC, eds. Schi s Diseases of The Liver. Lippin-
dado que éste reduce las complicaciones postope-
co Williams Wilkins. Philadelphia, 2002:
ratorias y la mortalidad a corto plazo33.
429-86.
Resumen 2. García-Pagán JC, Bosch J. The Splanchnic Circu-
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La cirrosis hepática representa una de las principa- RW. Ascites and Renal Dysfunction in Liver Di-
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890
60. Cirrosis hepática

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892
Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1):S35-S46
1):S01-S46 36
© Prensa Médica Latinoamericana. 2010 ISSN 0250-3816 - Printed in Uruguay - All rights reserved.

Hepatitis virales
Coordinador: Dr. Federico García Fasoli. Asistente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR. Montevideo.

Introducción tratamiento específico dirigido a la erradicación del mismo.


Se reconocen además virus que determinan hepatitis,
Dra. Marcela Zurmendi llamados no hepatotropos primarios, que provocan la infla-
Profesora Adjunta de Clínica Médica. Internista. Infectóloga. mación del paréquima hepàtico en el contexto de otros cua-
Facultad de Medicina. UdelaR. Moontevideo. dros clínicos. Éstos son los virus de la familia Herpesviridae,
como el Virus Herpes Simple 1, y 6, Virus Epstein Barr, Virus
Dr. Federico García Varicela Zoster, y Citomegalovirus.
Asistente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR.
Montevideo.

Las hepatitis virales son enfermedades infecciosas fre-


virus de Hepatitis A
cuentes, que representan un grave problema de salud públi-
dra. verónica Bartesaghi
ca. Determinan la inflamación del parénquima hepático, en
Residente de Medicina Interna. Facultad de Medicina.
general mediada por una respuesta inmune, y en algunos
UdelaR. Hospital Maciel.
casos un efecto citopático directo.
En su etiología se reconocen los virus hepatotrópos pri-
ePIdeMIologíA
marios, reconociéndose los virus de hepatitis A (VHA), el vi-
rus de hepatitis B (VHB), virus de hepatitis C (VHC), virus de
El virus de la hepatitis A (VHA) es la causa más frecuente
hepatitis D (VHD) y el virus de la hepatitis E (VHE). Desde el
de hepatitis viral en todo el mundo. Se estima que 1,5 millo-
punto de vista clínico éstos se manifiestan de forma similar,
nes de casos clínicos de hepatitis A se producen cada año (1).
si bien la gran diferencia es la posibilidad de evolución a la
La infección por el VHA está estrechamente relacionada con
cronicidad.
el nivel socioeconómico. La prevalencia de anticuerpos anti-
Se describen 4 fases clínicas características en todas las
VHA en la población general varía de 15 a 100% en diferen-
hepatitis:
tes partes del mundo (2).
Una fase de incubación, variable según el tipo de hepati-
Aparece en brotes individuales en general vinculados a
tis. Una fase prodrómica en la cual predominan los síntomas
núcleos cerrados o en brotes epidémicos.
inespecíficos, con mialgias, artralgias, repercusión del esta-
do general, febrícula y hepatalgia. Posteriormente aparece
una fase ictérica, la cual puede no existir, y posteriormente
una fase de convalecencia.
Los virus VHA y VHE son virus de transmisión fecal-oral,
relacionados estrechamente con el nivel socioeconómico, y
que pueden presentarse en brotes epidémicos, destacándo-
se que determinan hepatitis aguda, en general autolimitadas,
excepto en pacientes embarazadas con infección por VHE
en la cual puede determinar cuadros graves, destacando que
ninguna de las dos evoluciona a la cronicidad.
El VHB es una enfermedad de transmisión parenteral,
sexual predominantemente, que evoluciona a la cronicidad
determinando cirrosis y hepatocarcinoma en un porcentaje
variable, dependiendo fundamentalmente de la edad de ad-
quisición. Fig. 1. Extraído de: Centers for Disease Control and Prevention (CDC), Atlanta,
El VHD es un virus defectivo, que necesita del VHB para EE.UU.:10.

provocar infección y que puede determinar cuadros más gra-


ves. Su distribución es universal, con grandes variaciones
El VHC es también un virus de transmisión parenteral, geográficas, existiendo zonas de alta, mediana y baja ende-
que determina una hepatitis crónica en un porcentaje eleva- micidad (Figura 1). En las zonas de alta endemicidad la infec-
do, con variadas manifestaciones extrahepáticas, existiendo ción se adquiere en la primera infancia, siendo habitualmente

Curso de Actualización para Postgrados. Semana Médica del Hospital Maciel 2010, Montevideo. Sala Sagra . 26 al 29 de mayo de 2010.
Correspondencia: Dr. Federico García Fasoli. E-mail: fedegf@montevideo.com.uy
Semana Médica del Hospital Maciel 2010 37

asintomática, por lo que la prevalencia de anticuerpos en la fase prodrómica preictérica


edad adulta supera el 90%. En las zonas de baja endemi- Se caracteriza por síntomas inespecíficos, con náuseas,
cidad la enfermedad ocurre principalmente en adolescentes vómitos, astenia, anorexia, hepatalgia, mialgias, disgeusia, y
y adultos jóvenes, sobre todo en grupos de riesgo, presen- febrícula.
tándose como enfermedad clínicamente evidente y de mayor
severidad. Esta historia natural puede modificarse con la in- Fase ictérica
munización activa. La ictericia suele estar precedida de coluria, existen for-
En nuestro país la enfermedad es endemo-epidémica y mas colestásicas, siendo el VHA el patógeno más frecuente-
tiene una prevalencia intermedia aunque con variaciones en mente involucrado en las formas ictéricas.
relación a la edad y a las condiciones sanitarias.
fase de recuperación-convalescencia
cArActerístIcAs La recuperación clínica completa puede llevar hasta 6
meses.
Se trata de un virus miembro de la familia de los Picor- El VHA nunca evoluciona a la cronicidad y las pruebas
navirus. Posee un ARN de cadena lineal simple. Sólo existe de función hepática se normalizan siempre antes de un año.
un serotipo, pero se han descrito múltiples genotipos (7); sin
embargo, presentan una íntima relación antigénica por lo que MANIfestAcIoNes MeNos frecueNtes
la infección con uno de ellos confiere inmunidad frente a los
demás. No se sabe si el genotipo influye en la gravedad de la Colestasis
presentación clínica o en el pronóstico (1,3,5). Coliuria, hipocolia e ictericia.

PAtogeNIA Insuficiencia hepática fulminante


Desarrollo de fallo hepático grave dentro de las primeras
La infección por VHA se transmite principalmente por vía 8 semanas del inicio de los síntomas. Se observa en menos
fecal-oral y por contacto directo interpersonal o por la ingesta de 1% de los casos de infección por VHA (6).
de alimentos o aguas contaminadas. El virus puede transmi-
tirse por contacto sexual y aunque es raro, se han descrito Hepatitis recidivante
casos de transmisión sanguínea. Tiene alta transmisibilidad Se estima una incidencia de 1 a 11%, se produce de 4 a
entre las personas que tienen un contacto estrecho y prolon- 15 semanas tras la enfermedad inicial y las anomalías clíni-
gado (1-3). cas y bioquímicas son similares al cuadro inicial.
Los grupos de riesgo son los siguientes: niños, especial-
mente lactantes, viajeros a zonas endémicas, cuidadores de Manifestaciones extrahepáticas
niños y de enfermos, usuarios de drogas inyectables, hombres Artritis, crioglobulinemia, vasculitis cutánea, insuficiencia
que tienen sexo con hombres, pacientes con enfermedad he- renal, pancreatitis, prolongación del PR y del QT, convulsio-
pática, pacientes con trastornos de la coagulación, manipula- nes, mononeuritis múltiple, Guillén Barré, anemia aplásica y
dores de alimentos y zonas con bajo nivel socioeconómico (2,6). mielitis transversa (6).
Conocer éstos grupos de riesgo es útil y deben ser tenidos
en cuenta al momento de realizar la inmunización activa. diagnóstico serológico
La puerta de entrada es esencialmente la mucosa intestinal, En el inicio de la enfermedad se detectan anticuerpos
excretándose los viriones por la bilis; sin causar lisis celular séricos frente al VHA. Al comienzo se identifican IgM e IgG
directa, por lo cual se invoca un efecto citopático inmuno- específicos antiVHA (Figura 2). Tras 3-12 meses IgM des-
mediado. La inmunopatogénesis de la hepatitis A se corre- aparece y persiste IgG, la que confiere inmunidad de por vida
laciona con las características clínicas de la enfermedad. La (4)
. El diagnóstico de infección aguda por VHA se realiza ante
relación inversa entre la edad y la severidad de la presen- el hallazgo de IgM anti VHA en una persona con síntomas y/o
tación clínica podría estar relacionada con la inmadurez del signos bioquímicos de hepatitis (1).
sistema inmune en individuos más jóvenes. De esta forma,
los niños se transforman en fuentes de infección, pues per-
manecen asintomáticos e infectantes por mayores períodos
de tiempo, incluso hasta 5 meses luego de la viremia inicial
(2)
.
El VHA puede sobrevivir en el ambiente durante perío-
dos prolongados y es resistente al éter y al ácido. Es inacti-
vado por altas temperaturas, formol y cloro.

clíNIcA

La hepatitis A es una enfermedad infecciosa, aguda y


autolimitada.
Las características clínicas de la HVA aguda, no difieren
de las de otros tipos de hepatitis, pudiendo ir desde formas
asintomáticas hasta fulminantes. Figura 2. Serología de la hepatitis A. Extraído de: Stapleton JT and Lemon
Clásicamente se describen 4 fases clínicas: SM. Hepatitis A and hepatitis E. In: Hoeprich PD, Jordan MC, and Ronald AR,
eds. Infectious Diseases, 5th ed. Philadelphia, Lippincott Co, 1994:790-797,40
with permission (http://lww.com). Summary of clinical, virologic, and serologic
Período de incubación
findings in uncomplicated acute hepatitis A.
Varía de 10 a 50 días con un promedio de 30 días (1,6).
Siendo el período de mayor transmisibilidad (2).
38 Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1)

trAtAMIeNto Inmunización pasiva


Se utiliza como profilaxis a personas que viajan a zonas
No existe tratamiento antiviral específico para la infec- de alta endemicidad y en la post-exposición al VHA.
ción aguda por el VHA. El tratamiento es de sostén y de ma- La administración de inmunoglobulinas debe realizarse
nejo ambulatorio. La internación debe reservarse para aque- dentro de las 2 semanas de haber estado en contacto con
llos pacientes con insuficiencia hepatocítica. Varios estudios el paciente infectado, con una eficacia superior al 85% (10).
controlados han demostrado que tras la resolución de los sín- Es costosa y sólo proporciona protección a corto plazo (3-5
tomas la actividad normal no enlentece la recuperación. La meses) (3,8).
modificación de la dieta no ha demostrado mejorar los sínto-
mas, acortar la enfermedad ni mejorar el pronóstico. Pueden BIBlIogrAfíA
emplearse antieméticos en pacientes con náuseas o vómitos.
Debería evitarse el alcohol en la enfermedad aguda. Los fár- 1. Curry.M, Chopra S, Hepatitis viral aguda. En: Enfermedades
macos antivirales no están recomendados (9). Se recomien- Infecciosas, Principios y Práctica Vol 1 (Mandell,G.L., Bennet,
da evitar toda medicación con opioides y/o hipnóticos por el J.D., Dolin.R.,)5ª Buenos Aires: Panamericana; 2002.p.1426-
1440.
riesgo de sedación. Se puede continuar con tratamiento con
2. Lemon S. Type A viral hepatitis: epidemiology, diagnosis, and
anticonceptivos orales, aunque por lo general deben evitarse prevention. Cl Ch1997; 43(8B):1494-1499.
todos los fármacos salvo los claramente necesarios (9). 3. Cordeiro, N, Taroco. R, Chiaparelli. H, Virus de las hepatitis. En:
Temas de bacteriología y virología. (27); 477-513.
PreveNcIóN 4. Inmunization, Vaccines and Biologicals. Weekly Epidemiological
La tendencia mundial actual es hacia la inmunización Record, 2000, 75:38-42, Disponible en: http//www.who.int/wer/
activa, con una buena relación costo efecto, junto con las pdf/2000/wer7505.pdf.
mejoras en las condiciones sociosanitarias. 5. Echavarría,J. Etilogía y patogenia de las hepatitis víricas. Enf Inf
Microb Cl 2006;24(1):45-56.
Existen 2 tipos de inmunización, la pasiva y la activa:
6. Aguilera. A, Romero. S, Benito, J. Regueiro, F. Epidemiología y
Clínica de las hepatitis víricas. Enf Inf Microb Cl 2006;24(4):264-
Inmunización activa contra el vHA 76.
La indicación de la vacunación debe basarse en la ende- 7. Buck. M, Routine hepatitis A vaccination in the United States.
micidad de la hepatitis. En los países donde la hepatitis A es Pediatr Pharm. 2006;12(4).Disponible:www.healthsystem.vir-
altamente endémica, la exposición al VHA es casi universal a ginia.edu/internet/pediatrics/ pharma-news/home.cfm.
la edad de 10 años. En éstos países la hepatitis A es general- 8. Novak.R, Williams. I, Update: Prevention of Hepatitis A After
mente un problema menor de salud pública y en gran escala Exposure to Hepatitis A Virus and in International Travelers.
Updated Recommendations of the Advisory Committee on Im-
las actividades de inmunización contra ésta enfermedad no
munization Practices (ACIP). CDC. MMWR.Weekly 2007 /
deberían llevarse a cabo. 56(41);1080-1084
En los países con baja endemicidad pero donde la inci- 9. Hepatitis A, World Health Organization, Department of Commu-
dencia de la hepatitis puede ser elevada en ciertos grupos, nicable Disease surveillance and response.Disponible en: http://
la vacunación contra la hepatitis A puede ser recomendada. www.who.int/csr/disease/hepatitis/whocdscsredc2007/
En los países de endemicidad intermedia, donde la 10. Prevention of Hepatitis A Through Active or Passive Immu-
transmisión se produce principalmente de persona a per- nization: Recommendation of the Advisory Committee on
sona, el control de la hepatitis A puede lograse a través de Immunization Practices (ACIP. MMWR Recommend Rep.
1999:48(RR12);1-37.
programas de vacunación generalizada (4). Durante los bro-
11. Weekly epidemiologycal record. Relevé épidémiologique Heb-
tes epidémicos se recomienda la vacunación en relación a domadaire2000;75(15):37-44 Disponible en: http://www.who.int/
la epidemiología de la hepatitis A en la comunidad y la po- wer .
sibilidad de implementar un programa rápido extendido de
vacunación (11).
En nuestro país, la vacunación contra el VHA ésta inclui-
da en el esquema de vacunación obligatoria desde el 2005, Hepatitis viral B
con una primera dosis a los 15 meses de edad y una segun-
da dosis a los 21 meses de edad (4,8). dra. lorena vargas
En la actualidad se dispone de 2 vacunas a virus inacti- Residente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR.
vados. Ambas son muy inmunogénicas y eficaces, logrando Hospital Maciel.
niveles protectores de anticuerpos en los primeros 30 días
desde la dosis inicial en niños, adolescentes y adultos entre dr. Nicolás Asteggiante
97 y 100% (1,2). Residente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR.
En diferentes estudios controlados se han detectado Hospital Maciel.
niveles protectores de anticuerpos hasta 25 años después
de la inmunización, aunque faltan estudios prospectivos al INtroduccIóN
respecto (9). Este hecho concluyó que no es necesaria la ad-
ministración de una dosis de refuerzo, cómo se creía ante- El virus de la hepatitis B (VHB) es una causa frecuen-
riormente (2). te de enfermedad hepática infecciosa endémica en todo el
Un esquema de vacunación acelerado puede utilizarse mundo, habitualmente aguda y autolimitada, que en un por-
previo a viaje a zonas endémicas y consiste en la administra- centaje variable de casos evoluciona a la cronicidad y es ca-
ción de 3 dosis a los días 0, 7 y 21, seguido de una dosis de paz de desarrollar cirrosis y hepatocarcinoma.
refuerzo al año. Representa un problema sanitario mundial importante lo
Desde el año 2007 se recomienda la vacunación post que obliga a intervenciones terapéuticas para mejorar la ex-
exposición en pacientes sanos, menores de 40 años en lugar pectativa de vida.
de la inmunidad pasiva (8).
Semana Médica del Hospital Maciel 2010 39

ePIdeMIologíA Existen 8 genotipos (A-H) que presentan una distribu-


ción geográfica característica. En Uruguay el genotipo más
Si bien su incidencia está disminuyendo globalmente en frecuente es el F (5-7).
los últimos años debido a los programas de vacunación, exis-
ten 350-400 millones de personas infectadas de forma cróni-
ca (1). Un 15 a 40% de éstas últimas van a desarrollar cirrosis,
insuficiencia hepática y carcinoma hepatocelular; dependien-
do dicha evolución de factores relacionados con el huésped
y el propio virus (1-3).
Aunque la distribución es universal; existe gran variabili-
dad geográfica, dependiendo fundamentalmente de la vía de
contagio y de la edad de adquisición de la infección (Figura 1).

MecANIsMos de trANsMIsIóN (1,4)

Sexual: vía principal de contagio, responsable de hasta


un 30%. Fig. 2.
Parenteral: transfusión sanguínea, usuarios de drogas
intravenosas (UDIV) compartiendo jeringas, hemodiálisis e Su genoma presenta una elevada tasa de mutación de-
instrumental quirúrgico contaminado. bido a la ausencia de mecanismos de reparación de errores
Vertical: madre-hijo y perinatal, cursando habitualmen- durante la replicación viral. Así se generan una diversidad
te en forma asintomática, pasando 70-90% a la cronicidad, de variantes genéticas o quasiespecies. Muchas no tendrán
pudiendo desarrollar en la evolución cirrosis y hepatocarci- traducción clínica pero muchas de ellas determinan una no
noma. respuesta a los tratamientos antivirales, cuadros clínicos más
Horizontal: contacto estrecho intrafamiliar, probablemen- graves e incluso la posibilidad de eludir la respuesta inmune.
te por lesiones imperceptibles. Dichas mutaciones se dividen en naturales y secundarias a
La infección aguda adquirida en la niñez (antes de los 5 tratamientos antivirales. (3)
años) pasa a la cronicidad hasta en 50%, mientras que la ad- Dentro de las mutaciones naturales, la más importante
quirida posteriormente el riesgo de evolución a la cronicidad es la denominada G1896A, que determina la síntesis de la
es de 5 a 10%. proteína core sin la fracción precore, lo que implica la ausen-
Uruguay se ubica en áreas de baja prevalencia para la cia de secreción del HBeAg.
hepatitis B crónica (0,3 a 2%) (Ministerio de Salud Pública Se han descripto otras mutaciones sobretodo en el gen
(MSP). División Epidemiología.) y la vía principal de contagio S que puede determinar mutaciones de escape a la vacuna,
es la parenteral, constituyéndose como población de riesgo escape a la inmunoprofilaxis secundaria, así como la ausen-
los UDIV. (5). cia de HBsAg, expresándose serológicamente por la ausen-
cia del anticuerpo anti-HBc; otra mutación afecta al antígeno
de superficie que produce una forma viral frente a la cual los
anticuerpos inducidos por la vacunación no son protectores.
Por último, se describió una mutación múltiple donde el VHB
no expresa ningún antígeno viral.
En cuanto a las mutaciones producidas por tratamientos
antivirales, estos provocan mutaciones en el gen de la poli-
merasa. La más conocida es la llamada YMDD secundaria al
tratamiento con Lamivudina. Más recientemente se ha des-
crito la mutación que genera resistencia al Adefovir.
El VHB ingresa por interacción con receptores de su-
perficie del hepatocito siendo discutido su efecto citopático
directo, invocándose un mecanismo inmunomediado. Es im-
portante destacar que se excretan viriones completos e in-
completos, sobretodo fragmentos de pared celular que con-
tienen el antígeno de superficie Australia (HBsAg), y antígeno
e del core (HBeAg), lo cual tiene implicancias en la respuesta
Fig. 1. Geographic distribution of hepatitis B infection worldwide, 2006. (Data
from Center for Disease Control. Travelers’ health: yellow book. Atlanta, GA: inmune y en el diagnóstico serológico.
U.S. Department of Health and Human Services, CDC; 2008.
clíNIcA e HIstorIA NAturAl de lA eNferMedAd
geNoMA y MutAcIoNes
Las manifestaciones clínicas y las diferentes fases de la
El VHB es un virus ADN, miembro de la familia Hepadna- infección no se diferencian del resto de las hepatitis.
viridae, siendo su único huésped natural el hombre. Está for-
mado por dos cadenas de ADN con cuatro fragmentos. El pri- Hepatitis aguda
mer fragmento, codifica del antígeno de superficie (HBsAg). La hepatitis aguda puede ser asintomática, sintomática
El segundo, denominado Core/pre-C sintetiza una proteína ictérica o anictérica, o fulminante (1% de los casos) (3).
en la cual se identifican dos zonas la pre-Core y Core, la El diagnóstico se sospecha por el antecedente epidemio-
transcripción de este fragmento dará lugar al antígeno e y al lógico, la clínica, la elevación de las transaminasas y se con-
antígeno del Core (HBeAg y HBcAg). Los otros 2 fragmentos firma por la positividad de los marcadores virales entre las 2
codifican proteínas no estructurales (Figura 2). y 8 semanas tras la exposición (Figura 3).
40 Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1)

El HBsAg, es marcador de infección, aparece 1 a 3 se- res puede tener un curso más agresivo.
manas tras la exposición, desapareciendo entre las 22 a 24
semanas (1). Hepatitis crónica
El HBeAg, es marcador de replicación viral activa, apa- Como ya fue mencionado, la edad de adquisición de la
rece en el suero dos semanas posteriores a la aparición del infección determina la probabilidad de evolución a la cronici-
HBsAg y desaparece con rapidez antes que lo haga el antí- dad. En la infección perinatal es de 90%, si se produce 1 y
geno de superficie. Los anticuerpos antiantígeno e (anti-HBe) 5 años, evolucionará a la cronicidad el 30-50% y 5-10% de
se pueden detectar en el suero cuando ya no se detecta el los adultos inmunocompetentes (1,3,8). Se caracteriza la hepa-
antígeno e (cercano las 22 semanas) y pueden estar presen- titis B crónica por un proceso dinámico en el cual pueden
tes hasta 1 a 2 años luego de la resolución de la infección. reconocerse diferentes fases que no son necesariamente
El anti-HBc aparece 3 a 5 semanas luego de la aparición secuenciales.
del HBsAg en sangre. Pueden detectarse hasta 6 años luego Estas fases están en relación con el nivel de replicación
de la resolución de la infección. Son de dos tipos, IgM e IgG. viral y la respuesta inmunológica del huésped (inmunotole-
El anti-HBc IgM es el único marcador de infección aguda. No rancia, inmunoeliminación inactiva y de reactivación). Se ca-
se detecta antígeno core en sangre porque el mismo no es racteriza por la persistencia del HBsAg por más de 6 meses,
secretado de forma activa, como sucede con el antígeno e, y ADN-VHB mayor de 10.000 copias/ml, elevación de las tran-
permanece en el núcleo del hepatocito. saminasas en forma persistente o intermitente y biopsia he-
En la clínica habitual puede aparecer como único mar- pática con actividad necroinflamatoria (índice de Knodell > 4).
cador de infección por VHB los anticuerpos anti-HBc (con
HBsAg y anti-HBs negativos). Esto puede suceder por varias
razones: la primera posibilidad es que se trate de un falso po-
sitivo, pero no se detectará ADN-VHB en sangre. La segunda
posibilidad es que se trate de una infección oculta por VHB
donde no se detecta el antígeno de superficie, ni el anticuer-
po contra el antígeno de superficie, llamado período ventana,
la detección de ADN-VHB será positiva. La última posibilidad,
es que se trate de una infección pasada muchos años atrás
y no se detecten los anti-HBs por haberse perdido los estí-
mulos antigénicos, en este caso no se detectará ADN viral.
El ADN viral se detecta por técnica de PCR, es indicador
de replicación viral activa, se utiliza para monitorizar la res-
puesta al tratamiento, aparece en sangre poco después del
antígeno de superficie.
Fig. 4. Serología crónica VHB

Se distinguen dos tipo de pacientes, los infectados con la


cepa salvaje que serán HBeAg positivos (aproximadamente
el 50%) y los infectados por la cepa mutante precore HBeAg
negativos:
Hepatitis crónica B con HBeAg positivo: presenta el HBe-
Ag positivo, niveles de replicación viral constantes, planteán-
dose la existencia de una inmunotolerancia, lo que explica
porque la infección perinatal, con un sistema inmune aún in-
maduro y con una actividad T helper escasa, tiene un mayor
riesgo de evolución a la cronicidad. Luego de años, en un 10
a 15% de los pacientes infectados, puede verse una serocon-
versión dada por la aparición de anticuerpos anti-HBe. Esto
Fig. 3. Serología VHB aguda
se asocia con una mejoría clínica, funcional e histológica,
que se denomina aclaramiento del HeAg. De estos pacien-
La evolución del proceso es hacia la curación en 90 a tes, un 1% anual evolucionará a la resolución espontánea de
95% de los casos, con normalización de las transaminasas la enfermedad, con desaparición del HBsAg y aparición del
y seroconversión de los marcadores virales: negativización anticuerpo anti-HBs.
del HBsAg, aparición anti-HBs el que puede persistir durante Hepatitis crónica B con HBeAg negativo que no expresa
años y le confiere protección contra la reinfección y AcHBc el HBeAg y tienen índices de replicación ADN-VHB, se pre-
IgG positivo. sentan generalmente en sujetos de edades más avanzadas y
De 5% a 10% de los casos de adultos inmunocompe- tienen una mayor actividad histológica. Más de 50% presen-
tentes, la hepatitis B evoluciona a la cronicidad y 1% puede tan cirrosis hepática en el momento del diagnóstico y altos
desarrollar fallo hepático agudo con elevada mortalidad. niveles de replicación.
Esta historia natural puede verse modificada por la co- Estos dos tipos de hepatitis evolucionan hacia la cirrosis
infección con el virus de la hepatitis D (VHD), situación que con una frecuencia anual entre 2 y 5,4%. Existen factores
determina un mayor riesgo de hepatitis fulminante (3). de riesgo para evolucionar a cirrosis como ser: la replicación
La coinfección por el VHC y VIH determinan cuadros viral, genotipo C, HBeAg negativo, coinfección con VHD,
más agresivos, con mayor tendencia a la cronicidad y con un VHC y/o VIH. Otros factores de riesgo descriptos son la ma-
ritmo evolutivo acelerado. yor edad, sexo masculino, estadío de fibrosis hepática en el
Por último, la HVB aguda en el contexto de una hepato- momento del diagnóstico, ingesta de alcohol y/o fármacos
patía crónica, alcoholismo o tratamiento con inmunosupreso- hepatotóxicos.
Semana Médica del Hospital Maciel 2010 41

El riesgo de desarrollo anual de hepatocarcinoma es de HBAge positivos, en caso de ser negativos no se debe tratar.
0,1% en portadores asintomáticos, 1% en hepatitis crónica Se recomienda el uso de entecavir y/o tenofovir, no recomen-
sin cirrosis y de 2,2% en pacientes con cirrosis. dándose el uso de interferón. En caso de cirrosis descom-
pensada, independientemente de la presencia del antígeno e
Portador asintomático no se recomienda tratamiento y debe ser enviado a un centro
Presenta HBsAg positivo más de 6 meses, HBeAg nega- de transplante hepático. (9,10)
tivo y Anti-HBe positivo, ADN-VHB menos a 10.000 copias/
ml, valores de transaminasas normales de forma persistente, trAtAMIeNto eN sItuAcIoNes esPecIAles
y biopsia hepática con nula o mínima actividad necroinfla-
matoria (índice de Knodell < 4). La posibilidad de resolución coinfección vHd
completa de la enfermedad es de 1 a 2% anual. El objetivo es la supresión de la replicación del virus D,
lo cual se sigue habitualmente de una mejoría en las tran-
trAtAMIeNto saminasas y de la inflamación y necrosis hepática. El único
tratamiento aprobado a la fecha es el IFN alfa; los estudios
El objetivo del tratamiento es la supresión permanente más recientes señalan un mejor resultado con el interferón
de la replicación viral (niveles de ADN viral indetectables) y pegilado.
la remisión de la enfermedad hepática, evitando el desarrollo
de cirrosis y hepatocarcinoma. coinfección vHc
En pacientes con HBeAg positivo la seroconversión a No existe aún recomendación basada en estudios rando-
anti-HBe, es otro de los objetivos terapéuticos. mizados, se está probando tratamiento con ribavirina e IFN
La desaparición del genoma viral no debe ser un objetivo pegilado.
terapéutico (9,10).
coinfección vIH
Indicaciones de tratamiento vHB crónica Depende de la presencia o no de tratamiento antirretro-
Deben tenerse en cuenta varios elementos antes de de- viral de alta eficacia para el VIH. En pacientes no tratados y
cidir tratar al paciente con hepatitis B. Entre los parámetros en aquellos que no se vislumbra tratamiento TARGA en breve
se incluyen el nº de copias de ADN viral, el valor de transa- plazo se recomienda IFN alfa o adefovir. En caso de recibir
minasas, la presencia de HBAg e, la presencia de cirrosis TARGA se recomienda la asociación de lamivudina más te-
y en casos seleccionados la biopsia hepática que muestre nofovir o emtricitabina.
elementos inflamatorios y de fibrosis.
tratamiento inmunosupresor
En pacientes que reciben tratamiento quimioterápico y/o
tabla I inmunomoduladores se ha visto un aumento de la replicación
viral y de las transaminasas, en general cursando una hepa-
titis asintomática (60%) (9). Esta reactivación se ve con más
CONDUCTA EXPECTANTE
ASAT <2 frecuencia en pacientes tratados con el uso de corticoides y
EVENTUAL BIOPSIA
veces lo con el uso de rituximab.
(en > 40 años, con AF de
ADN normal Por tanto, todo paciente que será sometido a estos tra-
HBAg e hepatocarcinoma)
viral tamientos deben ser estudiados con HBsAg y anti-HBc para
POSITIVO TRATAMIENTO
>20.000 ASAT>2 realizar profilaxis. Debe tenerse en cuenta el número de co-
(esperar pérdida del HBAg
veces lo pias ADN viral. Se recomienda el uso de lamivudina y/o tel-
e espontáneamente por 6
normal
meses) bivudina en pacientes con tratamientos cortos. En pacientes
con tratamientos prolongados se recomienda el uso de teno-
fovir o entecavir.
En este grupo de pacientes se prefiere el uso de IFN
alfa pegilado, el tenofovir y/o el entecavir, siendo el objetivo Screening de hepatocarcinoma
terapéutico la negativización del AgVHBe y la aparición de Debe realizarse de manera seriada con ecografía abdo-
anti HBAge. minal y/o dosificación de alfabeto poteína cada 6-12 meses,
Los pacientes que presentan HBAg e negativo, es decir en pacientes de alto riesgo:
aquellos con la variante mutante precore también se benefi- - Pacientes con cirrosis y/o AF de hepatocarcinoma
cian del tratamiento con antivirales. En estos se inicia el trata- - Hombres asiáticos > 40 y mujeres > 50 años, o africanos
miento con valores menores de ADN viral y también tomando > 20 años.
en cuenta el valor de transaminasas: - ASAT elevadas persistentemente y/o ADN viral elevado
persistentemente elevado.
< 2.000 copias de ADN viral y transaminasas normales, no La respuesta al tratamiento incluye:
tratar - Normalización de las transaminasas
> 2.000 copias de ADN viral y transaminasas levemente ele- - Descenso del ADN-VHB < 10.000 copias/ml
vadas, deben realizarse biopsia hepática para definir tra- - Disminución de los niveles de HBeAg o detección de
tamiento. anti-HBe
> 2.000 copias de ADN viral y transaminasas elevadas al - Mejoría histológica al menos dos grados sobre la previa
doble de su valor normal, deben recibir tratamiento, con Se considera respuesta completa lo anteriormente ex-
IFN alfa pegilado, tenofovir o entecavir, por plazos pro- puesto más la pérdida del HBsAg. (9)
longados aún no establecidos, como no existe un objeti-
vo o end point claramente establecido. Profilaxis
Por último, los pacientes con cirrosis secundaria a VHB La infección por VHB es prevenible, con programas de
deben recibir tratamiento si están compensados y si son educación sexual y reproductiva para la población, políticas
42 Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1)

de promoción de salud dirigidas a los grupos de riesgo, como 6. Cordeiro, N, Taroco. R, Chiaparelli. H, Virus de las hepatitis. En:
son UDIV y personal de salud; además de la implementación Temas de bacteriología y virología. (27); 477-513.
de medidas de bioseguridad en diálisis, trasplante y servicios 7. Mitchell L. Shiffman, Management of Acute Hepatitis B. Cl Liv
Dis 14 (2010) 75–91
de hemoterapia.
8. Aguilera. A, Romero. S, Benito, J. Regueiro, F. Epidemiología y
vacuna Clínica de las hepatitis víricas. Enf Inf Microb Cl 2006;24(4):264-
Desde 2000 se incorpora al Esquema Nacional de Va- 76
cunación la vacuna contra la hepatitis B (incorporada en 9. Anna.S, McMahon,B. Chronic Hepatitis B: Update 2009. AASLD
la pentavalente que se administra a los 2, 4 y 6 meses de PRACTICE GUIDELINES. Hepatology 2009; 50(3): 1-36.
vida). El objetivo de la vacunación es prevenir la infección. 10. Zoulim,F Perrillo, Hepatitis B: Reflections on the current ap-
Existen dos generaciones de vacunas. En la actualidad se proach to antiviral therapy. J Hep 2008;48: S2-S19.
utilizan las de segunda generación, que se obtienen por téc-
nicas de ingeniería genética, y está formada por fracciones
purificadas del antígeno de superficie. Se administra en tres
dosis, una inicial, a los dos y a los seis meses de la pri-
Hepatitis c
mera, e inducen una respuesta protectora de anticuerpos
dra. gabriela torres
antiantígeno de superficie en un 95% de los adultos vacu-
Residente de Clinica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR.
nados. Se considera como títulos protectores de anti-HBs
Montevideo.
aquellos mayores a 10 UI. La determinación de los títulos de
anti-HBs con el objetivo de confirmar la seroconversión se
INtroduccIóN
realiza en pacientes con muy alto riesgo, o tras punciones
accidentales con material HBsAg positivo, o personas con
El virus de la hepatitis C (VHC) es el agente causal más
cierto grado de inmunodeficiencia, adolescentes (G12-14) y
frecuentemente vinculado a las hepatitis postranfusionales,
grupos de riesgo.
siendo una de las causas más frecuentes de enfermedad he-
pática terminal y de transplante hepático. Aproximadamente
Inmunoprofilaxis pasiva
un 80% de los infectados por VHC evolucionará a la cronici-
Contiene una concentración de anti-HBs de 100.000 UI/
dad y hasta un 20% desarrollará cirrosis y hepatocarcinoma.
ml. Es eficaz frente a la profilaxis de la trasmisión vertical,
Además la gran variabilidad antigénica y el escaso conoci-
sexual, accidente laboral y reinfección en trasplantado. Se
miento de la respuesta inmune hacen que a la fecha no exis-
utiliza combinada con la vacunación. Debe ser administrada
ta aún una vacuna disponible (1).Se transmite con relativa fa-
dentro de las 24 horas siguientes al contacto. Dicha protec-
cilidad por vía parenteral, sobretodo por exposición a sangre
ción se mantiene por 30 días.
y fluídos corporales, conociéndose solamente 2 reservorios:
No existen contraindicaciones para la vacunación contra
humanos y chimpancés.
hepatitis B o la administración de inmunoglobulina durante el
embarazo y lactancia.
ePIdeMIologíA
Deben ser vacunados en el momento del nacimiento to-
dos los recién nacidos de madres con antígeno de superficie
En el año 2000 la OMS estimó en 170 milllones la preva-
positivo durante el embarazo y deberían recibir inmunopro-
lencia de la infección por VHC en el mundo; para el año 2004,
filaxis todos los recién nacidos de madres cuyo HBsAg se
el G.B of VHC Working Group, al servicio de la OMS estimó
desconoce en el parto.
una prevalencia de 130 millones de infectados en el mundo,
No está contraindicada la vacuna contra la HB en pa-
por lo cual se estima su incidencia viene en descenso. Es
cientes infectados VIH. Los pacientes VIH positivos que no
responsable de 27% de las cirrosis y de 25% de los hepa-
están infectados con el VHB deben ser vacunados. Se ha
tocarcinomas (1,6). No existen datos de prevalencia en la po-
observado una menor respuesta antigénica en pacientes
blación general en nuestro país. Los estimados por tamizaje
severamente inmunodeprimidos, por lo que se recomienda
en bancos de sangre muestran una seroprevalencia menor a
realizarla con niveles de CD4 > a 200/mm3.
2%, valor que puede subestimar la prevalencia real del virus,
En pacientes inmunodeprimidos (en tratamiento antineo-
ya que los donantes son una población muy seleccionada (7).
plasicos, trasplante) deben recibir profilaxis y se puede pro-
La distribución por edades presenta dos picos, un grupo en-
longar el esquema de vacunación aumentando en número de
tre 30 y 45 años cuya infección deriva principalmente del uso
dosis de la misma.
de drogas intravenosas y otro grupo de mayores de 65 años
a consecuencia transfusiones (8).
BIBlIogrAfíA

1. Curry.M, Chopra S, Hepatitis viral aguda. En: Enfermedades


Infecciosas, Principios y Práctica Vol 1 (Mandell,G.L., Bennet,
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Semana Médica del Hospital Maciel 2010 43

etIologíA y PAtogeNIA y hemoderivados explican la mayoría de las infecciones ad-


quiridas antes de 1994, actualmente la mayoría de las ad-
El VHC es un ARN virus de la familia de los Flavivirus, quisiciones de la infección a VHC se relaciona con el uso
género Hepacivirus, descubierto en 1989. Es una partícula de drogas intravenosas y con la hemodiálisis, así como con
viral esférica de 30-60 nm, con una envoltura lipoprotéica el transplante de órganos. Los accidentes laborales con ob-
que contiene dos glucoproteinas transmembrana (E1 y E2) y jetos punzantes tienen un riesgo de transmisión de un 3%.
una nucleocápside formada por una única proteína, conocida Hay que destacar que no existe tratamiento específico post
como antígeno del core que contiene en su interior una cade- exposición. Otras vías capaces de transmitir VHC pero con
na simple de ARN (1,2). una muy baja probabilidad de transmisión son: tatuajes, agu-
La cadena de ARN codifica para una sola poliproteína de jas de acupuntura y la colocación de piercing (8,9,16). Existe a
3.000 aminoácidos que se escinde en una serie de proteínas su vez transmisión perinatal, lo cual explica hasta un 15%
estructurales (proteínas de membrana y la proteína de la nu- del total de las hepatitis C. El riesgo oscila entre un 4 a 6%,
cleocápside C: Core-C), y no estructurales con actividades aumentando el riesgo si existe coinfección por el VIH (8,10). La
funcionales. Los aislamientos de VHC indican la presencia vía sexual es posible pero mucho menos frecuente que por el
de altos niveles de variabilidad genética existiendo seis ge- VHB, siendo el riesgo < 1% por año de exposición (4). Existe
notipos predominantes, con amplia variabilidad geográfica. un alto porcentaje en el que no se detecta una clara noción
En cuanto al genotipo predominante en el Uruguay, en un de posible vía de adquisición, y no está claro si se transmite
estudio realizado en nuestro país, de 125 pacientes con VHC si no hay solución de continuidad (8,10).
con viremia positiva un 68,8% correspondieron al genotipo 1,
un 25,5% al genotipo 3 y un 5,8% al genotipo 2 (2,3). La impor- MANIfestAcIoNes clíNIcAs
tancia en el conocimiento del genoma viral viene dado por las
diferentes tasas de respuesta al tratamiento. Hepatitis aguda
Habitualmente es asintomática o paucisintomática, solo
un 25% de los pacientes refieren síntomas que son similares
a los de otras formas de hepatitis viral, apareciendo a las 7- 8
semanas luego de la exposición. Las fases de incubación,
prodrómica, ictérica y de resolución no varían significativa-
mente con el resto de las hepatitis (2). Cabe destacar, que los
niveles de ALT sérica pueden ser muy variables en la etapa
aguda, y que la normalización de ALT no es un marcador fia-
ble de recuperación, ya que hay pacientes que permanecen
con alta carga de viremia con valores normales de transami-
nasas. Se destaca además que una única muestra negativa
. aislada de ARN VHC no prueba la resolución de la infección.
Esto conlleva la repetición de la prueba 12 meses posterio-
Fig. 2. OMS 2009 – Global Overview. res al diagnóstico para probar que la infección se ha resuel-
to (11,12). Los estudios demuestran que cerca de un tercio de
El ciclo viral del VHC se inicia con la unión de la par- los pacientes son capaces de negativizar el ARN-VHC des-
tícula viral al hepatocito a través de la interaccion entre la pués de la infección inicial. Esta negativización ocurre más
glucoproteina E2 y moléculas que se cree juegan papel de frecuentemente en aquellos que han desarrollado un cuadro
receptores. Luego de la replicación viral el genoma se en- de hepatitis aguda sintomática, sobretodo ictérica, pacientes
capsida en el retículo endoplasmático siendo exteriorizado de sexo femenino, afroamericanos, menores de 45-50 años
por exocitosis (2,4,5). y con pico elevado de ALT durante la enfermedad aguda (11).
El VHC posee una alta frecuencia de mutaciones debida Más de 60% de los pacientes no son capaces de eliminar
a la alta tasa de error de las ARN polimerasas, enzimas que la infección, dando lugar a una hepatitis crónica(8).
carecen de mecanismos de reparación de errores (1,2).
Hepatitis crónica
PAtogéNesIs Se define que un paciente es portador de una hepatitis
crónica C cuando presenta una alteración de las transami-
El mecanismo íntimo de lesión hepática aún está por de- nasas > 1,5 veces el valor normal por más de 6 meses, con
terminarse, se involucra un efecto citopático directo del virus, una infección por virus C confirmada por determinaciones
daño inmunomediado por actividad T citotóxica y por secre- serológicas y virológicas. Un 25% pueden tener bioquímica
ción de citoquinas proinflamatorias. Los estudios realizados normal, a pesar de tener viremia detectable y distintos grados
durante la infección natural en los seres humanos indican de lesión histológica (16). La escasa o nula sintomatología oca-
que la cronicidad de la hepatitis C está relacionada con la siona un subdiagnóstico o un diagnóstico tardío, pudiendo
rápida producción de partículas virales, una falta de respues- evolucionar a cirrosis y hepatocarcinoma en forma silente.
ta de las células T y la aparición de variantes del VHC (mu- Se ha visto que la elevada tasa de mutaciones permi-
tantes) que escapan al control inmunológico. La esteatosis te al virus escapar de la vigilancia inmune, denominándo-
hepática es también un rasgo característico de la hepatitis C se fenómeno de escape. Así, se explica porque luego de la
y contribuye a la progresión de la enfermedad hepática y al replicación viral en el hígado, con la subsiguiente viremia y
desarrollo fibrosis. elevación de transaminasas, sobreviene una etapa de des-
censo con una mejoría de todos los parámetros hasta que
Mecanismos de transmisión se genera una nueva generación de VHC (mutantes de es-
Es un virus de transmisión parenteral, sanguínea pre- cape) y se reitera el ciclo (5). La velocidad de progresión de la
dominantemente. Mientras que las transfusiones de sangre enfermedad no es uniforme, 1/3 tienen un perfil de elevada
agresividad, desarrollando cirrosis en menos de 20 años (lla-
44 Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1)

mados fibrosadores rápidos), 1/3 tienen una evolución lenta and control of hepatitis C virus (HCV) infection and HCV-re-
(fibrosadores lentos), y el tercio restante tienen una evolución lated chronic disease.” Centers for Disease Control and Pre-
intermedia (8,13). vention. Recomm Rep 1998;47(RR-19):1-39.
La progresión hacia la cirrosis tiene como factores de Indicación de biopsia hepática: una biopsia hepática
riesgo: sexo masculino, alcoholismo, la coinfección por el debe ser considerada en pacientes con transaminasas per-
VIH y VHB. El riesgo de desarrollar hepatocarcinoma es de 1 sistentemente elevadas así como para obtener información
a 4% anual en los individuos que desarrollan cirrosis por VHC sobre la etapa de fibrosis ya sea con fines pronósticos o para
(8)
. Una serie de estudios clínicos indican que la esteatosis decidir tratamiento (Clase IIa, Nivel B) (16).
hepática es un hallazgo frecuente en pacientes con VHC y
que podría desempeñar un papel relevante en la progresión trAtAMIeNto
de la enfermedad.
Manifestaciones extrahepaticas de la hepatitis C: gene- El objetivo del tratamiento de la hepatitis C es la depu-
ralmente son manifestaciones de autoinmunidad que inclu- ración completa del virus, a diferencia de la hepatitis B. La
yen: glomérulonefritis, queratoconjutivitis, artritis, vasculitis infección por VHC puede ser erradicada por completo(16).
sistémica, porfiria cutánea tarda, crioglobulinemia.
Indicaciones de tratamiento
dIAgNóstIco de lABorAtorIo Hepatitis C crónica con elevación de la ASAT > 1,5 veces
el valor normal por 6 meses.
Dos clases de pruebas se utilizan en el diagnóstico: PCR RNA HVC detectable en el suero.
pruebas serológicas que detectan anticuerpos específicos Enfermedad hepática compensada.
frente al virus de la hepatitis C (anti-VHC tipo IgG) indicado- Fibrosis portal en PBH.
res de infección resuelta o presente; y la detección de ARN Manifestaciones extrahepáticas del virus C, como son
viral. Estos ensayos no tienen ningún papel en la evaluación crioglobulinemia mixta, vasculitis, glomérulonefritis membra-
de la severidad de la enfermedad o del pronóstico (14). noproliferativa y porfiria cutánea tarda, independientemente
Serología: En los casos de infección aguda por el VHC, del grado de afectación hepática (16).
la aparición de anticuerpos luego de la exposición oscila en- Debe existir abstinencia de drogas y alcohol, y ausencia
tre 3-8 semanas. La técnica de screening serológica que se de contraindicaciones a la terapia.
usa es ELISA. Se utiliza también el MEIA con una especifici- Factores asociados a mala respuesta al tratamiento:
dad cercana a 99% - sexo masculino
Pruebas moleculares: Las pruebas moleculares detec- - edad > 40 años
tan ARN del VHC siendo un elemento de replicación viral, - carga viral > 800.000 U/ml
aparece en suero luego de 1-2 semanas post exposición. - genotipo diferentes al 2 y 3
(8,12,14). Puede ser cualitativo o cuantitativa por técnica de - negativización lenta del ARN del VHC
PCR o transcripción amplificada mediada (TMA)ambas con - estadío de fibrosis
una especificidad cercana al 100%(2). La respuesta al tratamiento se realiza monitorizándose
la carga viral durante el tratamiento, y según ésta se define
el tiempo y la dosis a administrar e incluso la interrupción
tabla I. Interpretación de resultados AAsld Practice del mismo. Los pacientes con buena respuesta al tratamiento
guideline - Modificado pueden erradicar la infección por VHC, determinándose res-
puesta serológica sostenida a aquel individuo que presenta
luego del tratamiento y a los 6 meses del mismo, la negati-
AntivHc ArN vHc Interpretación
vización del ARN viral (15). Se denomina respuesta virológica
Positivo Positivo Infección Aguda precoz (RVP) aquella en la cual la carga viral disminuye al
menos 2 logaritmos decimales en la semana 12 de tratamien-
Infección curada y/o infección to. Así, los pacientes que no presenten una RVP se interrum-
Positivo Negativo
crónica con viremia baja pe el tratamiento. A su vez, existe un subgrupo con respuesta
virológica rápida, que negativizan el ARN viral medida por
Negativo Positivo Infección aguda y/o falso positivo
PCR, presentando a largo plazo una respuesta virológica
Negativo negativo Sin infección por VHC sostenida (RVS). La duración del tratamiento depende de la
RVP y del genotipo (15,16).
El tratamiento actual está basado en la asociación de
genotipificación ribavirina más interferón pegylado subcutáneo una vez por
La determinación del genotipo del VHC tiene valor en semana, siendo este el tratamiento que ha demostrado ma-
predecir la respuesta al tratamiento. yores tasas de respuesta virológica sostenida (16). La duración
Indicación de screning para VHC: del tratamiento varía según el genotipo, carga viral y predic-
- Usuarios de drogas intravenosas tores de buena respuesta.
- Hepatitis no A no B
- Hepatitis crónica con elementos de autoinmunidad ProfIlAxIs
- Transplantados antes del 1992
- Hijos de madres con HCV No hay vacunas disponibles para el VHC, siendo de
- Exposición laboral difícil realización dada la gran variabilidad antigénica deter-
- VIH minada por la alta tasa de mutaciones. No existe además
- Hemofílicos transfundidos antes 1995 profilaxis pasiva con Ig luego de exposiciones accidentales.
- Pacientes en hemodiálisis
Tabla adaptada de “Recommendations for prevention BIBlIogrAfíA
Semana Médica del Hospital Maciel 2010 45

1. Te.H, Jensen.D, Epidemiology of Hepatitis B and C Viruses: A Es un virus de 36 nm de diámetro, satélite, y defectivo que
Global Overview Cl Liv Dis 2010;14: 1–21 necesita por tanto del VHB para su propia replicación y ex-
2. Cordeiro, N, Taroco. R, Chiaparelli. H, Virus de las hepatitis. En: presión. Requiere además que éste se esté replicando para
Temas de bacteriología y virología. (27); 477-513.
poder infectar (1,2,4).
3. Mogdasy M. Uriarte M. Caracterización molecular del virus de la
hepatitis C en Uruguay. Rev Med Uruguay 2002; (18): 76-82
Presenta una envoltura constituida por el HBsAg (que
4. Pawlotsky JM. Virology of hepatitis B and C viruses and antiviral toma del VHB), y que en su interior contiene el antígeno delta
targets. J Hepatol 2006; 44 S10–S13 (HDAg) y una molécula de ARN (4). La síntesis del VHD supri-
5. Echavarría J. Etiología y patogenia de las hepatitis víricas. Enf me de forma temporal la replicación del VHB. (oms)
Inf Microb Cl 2006;24(1):45-56
6. Hernández.M, Rodríguez. JL, Martínez.J, Pena.M, Hepatitis clíNIcA
aguda por el virus de la hepatitis C en la población adulta. Gas-
troenterol Hepat2009;32(10):677–680
Presenta las mismas fases que el resto de las hepatitis,
7. Sociedad Uruguaya de Gastroenterología. Consenso Nacional
de Hepatitis C. Montevideo 2001. Rev Med Uruguay.2002.
con un período de incubación de 60 a 90 días.
8. Galve M, Navarrete E, Iborra J, Hepatitis por el virus C. Se debe tener alta sospecha de infección por virus hepa-
Hepatitis por el virus B y otros virus hepatotropos. Medicine titis D en las siguientes situaciones:
2008;10(9):548-54. hepatitis aguda B especialmente en drogadictos
9. MacCannell.T, Laramie.A, Gomaa.A , Perz.J. Occupational Ex- hepatitis aguda de etiología desconocida en portador
posure of Health Care Personnel to Hepatitis B and Hepatitis C: crónico HBsAg.
Prevention and Surveillance Strategies. Clin Liv Dis 14 (2010) agravación de una hepatitis B crónica
23–36.
pacientes con infección VHB que se tornan anti-HBe po-
10. Dienstag. J, Hepatitis viral crónica cap. 112 en Enfermedades
Infecciosas, Principios y Práctica Vol 1 (Mandell,G.L., Ben-
sitivos, pero persisten signos de hepatitis crónica.(1,2,4)
net, J.D., Dolin.R.,)5ª ed. Buenos Aires:Panamericana;2002 Se pueden distinguir 3 patrones clínicos:
.p.1441-1464 Coinfección: en forma simultáneacon la adquisición del
11. Alberti A. Benvegnu L. Management of hepatitis C. J Hepat VHB, con anti-HBc IgM positivo. Suele producir hepatitis agu-
2003;38:104-118. da, indistinguible clínicamente de la hepatitis aguda B. En
12. Mondelli M, Cerino A, Cividini A, Acute hepatitis C: diagnosis UDIV puede producir con más frecuencia fallo hepático fulmi-
and management J Hepatol 2005;42: S108–S114 nante. El riesgo de progresión a la cronicidad depende de la
13. Hoofnagle J. Hepatitis vírica aguda. Cecil Tratado de Medicina
HB, aunque la coinfección en parte protege de la evolución a
Interna. Barcelona: Elsevier; 2009. p.1101- 1108
14. Ghany M, Strader D, Thomas D, Seeff L. Diagnosis, Manage-
la cronicidad de la hepatitis B (4).
ment, and Treatment of Hepatitis C: An Update. Hepatology Sobreinfección, superinfección: en paciente con HBsAg
2009; 49(4) positivo, anti-HBc IgG. Cursa como una hepatitis aguda gra-
14. Fernández.C, Rodríguez.A, López.S. Optimización del trata- ve, o como una exacerbación clínica de una hepatitis crónica.
miento de la hepatitis crónica por virus C. Gastroenter Hepa- La progresión a la cronicidad es lo más frecuente, induciendo
tol;2010;33(2):119–125 una enfermedad hepática más severa, de rápido progresivi-
15. Strader.D, Wright.T, Thomas.D, Seeff.L Diagnosis, Manage- dad, y determinando cirrosis hepática y mayor prevalencia de
ment, and Treatment of Hepatitis C AASLD Practice Guideline
hepatocarcinoma. (2,4,OMS)

dIAgNóstIco
Hepatitis d o delta
Requiere los marcadores diagnósticos de VHB y se con-
Dra. Sofía San Román firma con anti-VHD. Aparece antígeno delta (HDAg) seguido
Residente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR. de la respuesta anti-delta en forma de IgM e IgG. La respues-
Montevideo. ta IgM aparece en forma temprana, y de manera transitoria
pero persiste durante la infección crónica por lo que no es útil
INtroduccIóN para diferenciar fase aguda de crónica. La IgG anti-delta es
indetectable una vez desaparecido el HBsAg (1,2,4).
El virus de la hepatitis D es un virus defectivo que ne-
cesita del VHB para su propia replicación y expresión. Fue trAtAMIeNto
aislado por primera vez en 1980, y desde ese momento se
ha asociado a formas agudas y crónicas más severas de en- No existe tratamiento específico; el mismo está dirigido
fermedad hepática. a tratar la hepatitis B. Todas las estrategias para disminuir
la prevalencia del virus de hepatitis B son efectivas para el
ePIdeMIologíA virus D.
No existe al momento actual inmunización pasiva ni ac-
Infrecuente, 5% de pacientes con hepatitis B crónica se tiva para el VHD.
coinfectan con el VHD (1,2,4).
Es endémica en las mismas zonas que la hepatitis B,
siendo de transmisión principalmente por vía parenteral
(UDIV), siendo la vía sexual menos eficiente que la de VHB,
Hepatitis e
y muchísimo menos frecuente la vía perinatal (4).
Dra. Sofía San Román
Residente de Clínica Médica. Facultad de Medicina. UdelaR.
etIoPAtogeNIA
Montevideo.
Presenta desde el punto de vista taxonómico un pare-
INtroduccIóN
cido con los viroides y los ARN virus de los vegetales (1,2,4).
46 Arch Med Interna 2010; XXXII(Supl 1)

La hepatitis por virus E es considerada una enfermedad en la fase aguda y posteriormente IgG-VHE. La fase de con-
emergente a nivel mundial (7). La infección es en general au- valecencia se asocia a un grado variable de IgG, (duración
tolimitada y no requiere tratamiento específico. Sin embargo promedio entre 1 y 4,5 años), lo que genera interrogantes
puede determinar cuadros severos en embarazadas y en acerca de la protección ante una nueva re infección.Se de-
personas con hepatopatía crónica. Tiene una mortalidad de 1 mostró la persistencia de anticuerpos a los 14 años, aunque
a 3% y en embarazadas llega hasta un 15-25% (1,4,7). no se pudo determinar si se trató de una reexposición. (4,7)

ePIdeMIologíA trAtAMIeNto

Es una enfermedad enigmática que plantea interrogan- No existe tratamiento específico, se debe hacer medidas
tes epidemiológicas que carecen de respuesta. Si bien preva- de sostén. Actualmente no se cuenta con vacunas, ni con
lece en países en vías de desarrollo, (África, Asia, y México) inmunoprofilaxis pasiva, las que están en etapa de desarrollo
los anticuerpos (anti-HVE) tienen una distribución global (1,4,7).
Se trasmite por vía fecal oral en general por ingesta de
aguas contaminadas. Se discute si existe transmisión por vía
sexual y/o vertical (4). La cloración del agua para consumo Hepatitis virus No Hepatotropos
destruye el VHE. (OMS)
Dra. Sofía San Román
Residente de Medicina Interna. Facultad de Medicina.
UdelaR. Montevideo.

INtroduccIóN

Los virus de la familia Herpesviridiae que producen he-


patitis son el citomegalovirus (CMV) o herpesvirus humano
5; el virus de Epstein-Barr (VEB) o herpesvirus humano 4; el
virus herpes simple (VHS) o herpesvirus humano1; el virus
varicela-zóster (VVZ) o herpesvirus humano 3, y el herpesvi-
rus humano 6 (HVH6).
Son ADN virus, que determinan inflamación hepática
por efecto citopático directo. Los hepatocitos no son la diana
Fig. 1. Geographic distribution of hepatitis E. Source: Centers of Disease Con- principal de los virus herpes, por ello la hepatitis no es una
trol and Prevention (CDC), Atlanta, EE.UU.:11.
manifestación característica de esta enfermedad (8).
Se caracterizan por determinar una infección latente
A diferencia de la hepatitis A es infrecuente el contagio de por vida siguiendo a la primo-infección y reactivarse de
persona- persona (1%), y se produce mayormente en adultos acuerdo al estado inmunitario del paciente.
jóvenes, en brotes epidémicos.
Podría corresponder a una zoonosis, ya que se detecta- ePIdeMIologíA
ron Ac anti-VHE en gran cantidad de animales, (cerdos, ga-
tos, ovejas, vacas, monos, y ratas) (4,7). Las infecciónes por VHS, VVZ, CMV y VEB, tienen una
alta prevalencia en la población general, siendo en adultos
etIologíA inmunocompetentes de hasta un 50 a 90%.
Es un ARN virus de 27-34 nm de diámetro, de forma ico- clíNIcA
saédrica, simétrica, y no encapsulado (OMS). Existen 4 genoti-
pos diferentes (5). En general los virus de la familia Herpes ocasionan una
La lesión hepática es sobre todo inmunomediada, por hepatitis leve, de curso benigno, autolimitado, en el contexto
sobre el efecto citopático directo. de otras manifestaciones clínicas. La expresión clínica de la
infección es variable, pudiendo pasar con frecuencia inadver-
clíNIcA tida. La hepatitis clínica no es habitual (2,8).
La presentación como hepatitis fulminante por VHS es
Cursa las mismas 4 fases de las hepatitis, con un perío- excepcional, pero puede ocurrir en neonatos, embarazadas,
do de incubación promedio 40 días. Clínicamente se presen- e inmunodeprimidos, y es importante conocerla por su grave-
ta indistinguible de la hepatitis A, si bien la severidad de las dad y posibilidad de tratamiento
infecciones por VHE es algo mayor que la de las infecciones El compromiso hepático de laboratorio es habitual en la
por virus A, con una mortalidad cercana al 1% (1,4,7,OMS). La mononucleosis por CMV, y VEB.
insuficiencia hepática fulminante aparece en el 0,5 a 3% de En receptores de trasplante hepático, la hepatitis a CMV
los pacientes, siendo un grupo de riesgo elevado las muje- es la manifestación más común.
res embarazadas. También la coinfección con VHA determi-
na habitualmente cuadros más graves y con mayor mortali- dIAgNóstIco
dad. (1, 4,7)
La infección por VHE, no evoluciona a la cronicidad (1,4,7). El diagnóstico de enfermedad es clínico-serológico, rara
vez se requiere la realización de biopsia hepática para su
dIAgNóstIco confirmación.
Se plantea que la infección aguda por VEB o CMV pue-
Se realiza por la determinación de anticuerpos IgM-VHE, de determinar un falso positivo para anti-VHE y por tanto en
Semana Médica del Hospital Maciel 2010 47

estos casos debe solicitarse ADN VHE que será negativo. BIBlIogrAfíA

trAtAMIeNto 1. Dienstag. J, Hepatitis viral crónica cap. 112 en Enfermedades


Infecciosas, Principios y Práctica Vol 1 (Mandell,G.L., Bennet,
El gran valor de conocer estos virus como agentes capa- J.D., Dolin.R.,)5ª ed Buenos Aires:Panamericana; 2002.p.1441-
1464
ces de determinar hepatitis viene dado por la posibilidad de
2. Galve M, Navarrete E, Iborra J, Hepatitis por el virus C.
hepatitis fulminante por VHSsimple, que presenta una exce- Hepatitis por el virus B y otros virus hepatotropos. Medi-
lente respuesta al tratamiento con Aciclovir o Valaciclovir (8,11). cine.2008;10(9):548-54.
3. Echavarría. J, Etilogía y patogenia de las hepatitis víricas. Enf
Inf Microb Cl 2006;24(1):45-56
4. Cordeiro, N, Taroco. R, Chiaparelli. H, Virus de las hepatitis. En:
tabla I. Principales caracteristicas de las hepatitis por Temas de bacteriología y virología. (27); 477-513.
virus herpes (8) 5. Aguilera. A, Romero. S, Benito, J. Regueiro, F. Epidemi-
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2006;24(4):264-76
virus tipo de hepatitis Características clínicas 6. Fainboim. H, Schroeder.T, Estepo.R, Enfoque general hepati-
hepatitis leve y tis aguda En Infectologia y Enfermedades Infecciosas. (Emilio
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Fuente: Enferm. Infecc. Microbiol.clin.2006;24(6):392-8. Modificado

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