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¿Qué es la inteligencia artificial?

“La IA es una de las cosas más profundas en las que estamos trabajando la
humanidad. Es más profunda que el fuego o la electricidad”, dijo el líder
ejecutivo de Alphabet Inc. (Google), Sundar Pichai.

Andrew Ng , El director del laboratorio de Inteligencia Artificial en Stanford y ex


jefe de I.A de Google , la llama "la electricidad del siglo XXI".
Es cierto que muchos han definido a la I.A., entre ellos John McCarthy (el
responsable de introducir el término “inteligencia artificial”, concepto que acuñó
en la Conferencia de Dartmouth en 1956. También se le atribuye el concepto
de cloud computing.), que en 1956 la definió como “la ciencia e ingeniería de
hacer máquinas que se comporten de una forma que llamaríamos inteligente si
el humano tuviese ese comportamiento”

Robert Sternberg, psicólogo de la Universidad de Yale define inteligencia como:


“la actividad mental que sirve para adaptar o conformar entornos relevantes
para nuestra vida personal”.

Atento a todo lo hasta aquí dicho podemos colegir que la I.A tiene su
basamento en el uso de datos y algoritmos.

En el 2017 el Parlamento Europeo estableció que los algoritmos pueden


definirse como: “conjuntos bien definidos de pasos para lograr una
determinada meta”

La I.A. se aplica a programas, máquinas o robótica. Estos programas logran


una experticia superior a la humana. Tiene una ventaja que se basa en la
capacidad de almacenamiento y procesamiento de un gran volumen de datos
(Big Data). Utilizan algoritmos. Los mismos se pueden definir como: “el
procedimiento para encontrar la solución a un problema mediante la reducción
del mismo a un conjunto de reglas” (Benítez, Escudero, Kanaan, & Masip
Rodó, 2013, 13.) Mejora la toma las decisiones. Es un conocimiento que se
aplica a tareas concretas. En este punto, supera a la I.H. (Inteligencia humana)

Existen distintos niveles de I.A.


Inteligencia artificial débil o estrecha y la inteligencia artificial fuerte

La Inteligencia artificial débil: Este tipo de Inteligencia Artificial se


especializa únicamente en un área, por eso se le considera débil. Por
ejemplo, existen robots que pueden vencer a campeones mundiales de
ajedrez, pero si se les pide que aprendan a almacenar información de otra
forma, no lo logran. Solo pueden realizar la función para la que fueron
programados. Acciones como la visión computarizada, el procesamiento del
lenguaje y el reconocimiento de imágenes y sonidos todavía se encuentran en
esta etapa; incluso el traductor de Google y los sistemas de auto-conducción
son Inteligencia Artificial Narrow.

Aunque se le da el nombre de “débil”, sus acciones son muy funcionales tanto


para trabajos físicos como cognitivos, lo que significa que puede agilizar y
sustituir la mano de obra humana en múltiples procesos. Un gran ejemplo de
Inteligencia Artificial Narrow es el programa AlphaGo, diseñado por Google.
Este programa fue creado única y exclusivamente para jugar al popular juego
de mesa Go, el cual destaca sobre todo en Asia por tratarse de uno de los
juegos más complicados. AlphaGo logró vencer 4 a 1 al surcoreano Lee
Sedol, campeón mundial del juego gracias a que es capaz de aprender y
mejorar sus propias estrategias. Sin embargo, el programa perdió la última
partida cuando Lee cambió de estrategia para lograr vencerlo.
La inteligencia artificial fuerte También conocida como Fuerte o de Nivel
Humano, esta categoría se refiere a máquinas que pueden realizar cualquier
actividad intelectual que los seres humanos hagan. A diferencia de
otros tipos de Inteligencia Artificial, crear estos procesadores es mucho más
difícil y todavía no se ha logrado. Es la I.A. de la que tanto trata el cine como
por ejemplo en películas como Blade Runner [25] y en los videojuegos como
Detroit Become Human [26].

Realmente, a pesar de la gran cantidad de investigaciones y de avances que


se han realizado en el campo de la robótica y de la Inteligencia Artificial, es
muy difícil definir el alcance que debería tener un procesador para lograr
el nivel de la inteligencia humana. Esto se debe a que estos tipos de
Inteligencia Artificial deberían de ser capaces de generar múltiples
pensamientos al mismo tiempo, percibir el entorno y producir recuerdos que no
necesariamente se relaciona de forma directa con la toma de decisiones de la
máquina. Hasta el momento, lo más cercano a la Inteligencia Artificial General
son los robots humanoides que son capaces de e imitar, analizar y registrar
expresiones humanas.

Las opiniones respecto al desarrollo de este tipo de Inteligencia Artificial se


encuentran bastante divididas. Mientras que Elon Musk, fundador de Tesla
Motors, teme que podamos convertirnos en las mascotas de la Inteligencia
Artificial; otros expertos como Peter Norvig, director de Google, afirman que ni
siquiera es necesario crear tipos de Inteligencia Artificial que alcancen los
niveles de la inteligencia humana, ya que no serían realmente tan funcionales
como las máquinas Narrow.

De acuerdo con Nick Bostrom, experto en Inteligencia Artificial de la


Universidad de Oxford, para lograr la súper-inteligencia las máquinas tendrían
que volverse mucho más inteligente que los mejores cerebros humanos
en prácticamente todos los campos, incluida la creatividad científica, la
sabiduría general y las habilidades sociales. Sin embargo, nadie está seguro de
que esto pueda lograrse ni de que, en caso de que ocurra, qué va a pasar
cuando la Inteligencia Artificial nos supere.
Algunos científicos como Stephen Hawking creen que cuando logremos tipos
de Inteligencia Artificial que superen la inteligencia humana será el fin
potencial de la humanidad. A pesar de que vivimos un momento histórico
lleno de avances tecnológicos, aún no hemos conquistado todos los tipos de
Inteligencia Artificial. Realmente, este terreno todavía tiene muchas aristas que
no han sido exploradas y, aunque parezca sorprendente, todavía nos
encontramos en la categoría Narrow.
Por otro lado, la IA fuerte plantea que al modelar una mente se está,
efectivamente, creando una nueva mente. Es decir, una IA que modela un
proceso mental no es un modelo, sino más bien, una mente como tal.
Es la I.A. de la que tanto trata el cine como por ejemplo en películas como
Blade Runner y en los videojuegos como Detroit Become Human

https://youtu.be/ACGE2fHviO8 (Blade Runner Conversación con el creador)

https://youtu.be/gvJ3eSurq5Y (Blade Runner Test Emocional)

Esto quiere decir que, a pesar de que nuestros conocimientos sobre


Inteligencia Artificial aumentan cada día, todavía no hemos llegado a fabricar
una máquina que iguale las capacidades de un ser humano.

La pregunta, entonces es….¿por qué?

Inteligencia Humana
Según Linda Gottfredson (psicóloga y escritora estadounidense), definió en
1997 a la inteligencia humana ,como "una capacidad mental muy general que,
entre otras cosas, incluye la aptitud para razonar, planear, resolver problemas,
pensar de forma abstracta, comprender ideas complejas, aprender
rápidamente y aprender de la experiencia”, por lo que, para estar en este nivel
de Inteligencia Artificial, la máquina debería poder realizar todas esas acciones.

Por ejemplo, analicemos el caso de la robot Yona. Yona fue creada por la
compañía londinense Auxuman y entrenada usando IA (inteligencia artificial),
se alimenta con música y literatura, y aprende de las reacciones a su música
publicada en Internet.

Produce música para adolescentes y hasta logra crear nuevas canciones.


Estas son frecuentemente perfectas. No obstante, no logra una aceptación
masiva, ¿por qué? Porque no logra transmitir los sentimientos y emociones
que todo artista comunica, como una expresión del interior de su ser, de su
“ser humano”, de eso que sienten y que quieren compartir con el mundo. Es
decir, un acto significante, que además de comunicar, transmite emociones
valiéndose de la imagen, la música, la palabra etc.

En la actualidad, los robots realizan imitaciones del sentimiento humano


(sonrisas, expresiones de tristeza, etc), pero no sienten. Esa es la limitación.
No tienen sentimientos propios. Tampoco pueden desarrollar un juicio ético
completo.
https://youtu.be/gT2D5_CTzb4 (música y letra de Yona)

Los avances que se venían produciendo hasta la década anterior, hacían


pensar que se podía llegar a lograr que la I. A tuviera un dominio completo
sobre la I.H (dominio de la máquina sobre la persona humana). No obstante, ha
entrado, en la década actual, en una meseta.

A pesar de esta meseta hay expectativas de cómo será el futuro al respecto. Y


al respecto nos preguntamos

¿Podrán los robots pensar como el ser humano?

Detengámonos en la siguiente definición de persona: “Sustancia individual de


naturaleza racional” (Boecio). La naturaleza racional es lo distintivo. Nos habla
de un alma, pero no cualquier alma (ni vegetal, ni animal…), se refiere a un
alma espiritual. Esta alma espiritual posee dos potencias: la Inteligencia (que
nos permite alcanzar la verdad, conocer la esencia de todas las cosas) y la
voluntad (nos permite tender al bien). Además, la persona humana posee la
libertad (libre albedrío)

Dicho esto, ¿podemos concluir que la I.H. es más completa y compleja?


Veamos….la I.H tiene la capacidad de captar la esencia de las cosas y
expresarlas a través de un lenguaje. Analicemos los siguientes conceptos
relacionándolos entre sí: IDEA- LENGUAJE- PALABRA- SIMBOLO. Podemos
afirmar que los procesos que se llevan a cabo, en la persona humana, serían:

Emisor: Idea-Codificación simbólica-expresión

Receptor: a una estimulación perceptual le sigue una decodificación simbólica y


una significación (subjetiva). Esto último es lo que aun la I.A no ha alcanzado,
la subjetividad humana

El lenguaje… un mundo simbólico


Cuando se estudia la conciencia se dice que es la posibilidad de saber y
conocer acerca de uno mismo, es ese darse cuenta de nuestra propia
experiencia y de nuestra propia realidad. Ese “darse cuenta”, en tanto se le
ponga palabras, permite que cada hombre pueda captar su mundo y el mundo
compartido. La estructura “dialogante” de la palabra es lo que posibilita que
ésta sea el mediador que pone la experiencia y el mundo a disposición del
hombre
El lenguaje es la función humana por excelencia. Es el lenguaje lo que le
permite al hombre manifestar lo que siente y lo que piensa. Al hablar, el
hombre se muestra a sí mismo y se muestra a los otros.
Lo que nosotros producimos cuando pensamos son “realidades espirituales” y
ello es así por lo que ya explicamos más arriba y es que la Inteligencia es una
potencia del alma que le permite conocer, captar la esencia de las cosas. Esta
capacidad no termina ahí. El conocimiento permite la capacidad de
relacionarse con otros seres humanos y también con un Ser superior que le
explique lo que sucede en el mundo y en su propia vida.

Podríamos concluir, entonces que el conocimiento humano se plantea cosas


que al menos hoy, no puede plantearse la I.A. (el sentido del dolor, de las
alegrías, qué es y en qué consiste la felicidad y dónde encontrarlo…). Hoy la
máquina no es capaz de esto

Para concluir este análisis podemos decir que la persona es un ser racional:
un ser con capacidad de conocer las cosas, conocerse a sí mismo y
buscar una Verdad trascendente que le dé sentido a su existencia.

Prof. Ana Mac Nally

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