ELECCIONES MUNICIPALES 28 MAYO 2023: UN NUEVO AYUNTAMIENTO

El próximo 28 de mayo celebramos y es muy apropiado este verbo conjugado en plural,

elecciones municipales de las que saldrá un nuevo Ayuntamiento. Sea cual sea el signo político
de la candidatura vencedora, vaya por delante un saludo agradecido a todos los que se
implican y dan un paso adelante, comprometiéndose con su pueblo, desde la tolerancia y
respeto al adversario. Algunos alegaran que lo hacen por sus intereses, en realidad no
sabemos las motivaciones de cada cual, pero siempre será preferible que haya personas
dispuestas a trabajar por su pueblo que otras que critican y creen emitir sentencias sin saber
ni siquiera el daño que puedan hacer, ya saben, la ignorancia es muy atrevida.

Así pues, respeto a todas las fuerzas políticas y pedir que éste sea el criterio que rija las
relaciones entre ellas, así como tolerancia, palabra que viene según el diccionario etimológico
de Corominas , del latín “tolerare”: soportar,aguantar, imprescindible si atendemos a su raíz
etimológica tollere, levantar. Levantar pues, no tirar. Una máxima que deberíamos asumir
todos, excluyendo a aquellas personas que no estén dispuestas a ello.

No sabemos cuál será la candidatura vencedora y el Ayuntamiento resultante. No obstante, ya

advertimos una circunstancia peculiar en estas elecciones que puede devenir en una
efemérides histórica: las candidaturas que han gobernado en Alcalá, PSOE e IU, están ambas
encabezadas por una mujer, por lo que no es extraño que la próxima legislatura, nuestro
Ayuntamiento esté presidido por una mujer, que tengamos una alcaldesa, Ilustrísima
Alcaldesa. Lejos de mí pensar que por ser mujer será mejor la Alcaldía ( ¿o sí?), por respeto a
ambas no afirmaré tal cosa, ellas valen por sí mismas, no por el género con el que se
identifican. Pero sí podemos afirmar que con este hecho nuestro pueblo consolida los avances
en la igualdad de género, refuerza el discurso feminista que toda persona debiera compartir
para que no haya mas que diferencias biológicas entre mujer y hombre, y todas las personas
puedan definir su sexo y ejercer su sexualidad, si quiere, con absoluta libertad. Nos queda
avanzar en la igualdad social, esperemos que todas las fuerzas políticas, y toda la sociedad,
luche por ello.

No sabemos cuál será la candidatura vencedora, así como tampoco la persona que asumirá la
alcaldía. Pero sean cuales sean los resultados, sepan todos que ese día no acaba el proceso de
constitución del Ayuntamiento, que obligatoriamente las personas electas o sus
representantes tendrán que verse las caras para negociar. No sabemos qué, eso dependerá de
los resultados, si se referirá a formas de traspaso o de organización del futuro Ayuntamiento.
En cualquier caso, negociar. Y en toda negociación, además de discreción, que debiera ser
obligatoria (no digo secretismo, discreción), se impone la generosidad, de todos, del que tenga
más votos, pero también del que tenga menos. Los resultados serán públicos y todos los
ciudadanos tenemos derecho a saber qué y cómo hayan transcurrido las conversaciones y sus
resultados posteriores. El actual alcalde lo ha sido durante tres legislaturas, ninguna con
mayoría absoluta y teniendo la oposición más concejales, le han dejado gobernar, tener
dedicación exclusiva , liberados y gestionar como han querido. Esa generosidad fortalece la
democracia.

No sabemos los resultados, cada uno haga sus análisis, predicciones y hasta porras si a esta
prásctica son aficionados. El que esto escribe tiene su predicción, basada no en augurios ni
bolas de cristal, sino en análisis, informaciones varias, observaciones y escuchas atentas. Pero
no la voy a revelar. En cambio, queridos paisanos (vivan en el núcleo de población que vivan y
vengan de donde vengan, si aquí están empadronados, son de aquí y votan aquí) me voy a
atrever a sugerir humildemente algunas prácticas sencillas para valorar candidaturas.

En primer lugar, pensar que no son elecciones generales ni autonómicas. Todos tenemos una
ideología reconocible o no, al menos tenemos ideas, opiniones políticas. Pues bien, piensen
que ahora elegimos una lista para gobernar nuestro Ayuntamiento, no el país ni la comunidad
autónoma, sino nuestro pueblo, y las competencias son las que son, ni van a cambiar sistemas
políticos, ni económicos, ni leyes algunas. Van a dirigir la vida de nuestro pueblo, nuestro
entorno más inmediato y es por ello que valoramos más a las personas. Siempre lo decimos,
en unas municipales se vota a las personas. Y es lógico que así sea.

En segundo lugar, vean las listas. Por supuesto, considerando solo listas encabezadas por
personas de nuestro pueblo. Ni prestar atención a quien presenta una lista con una persona
ajena a Alcalá al frente, solo para obtener votos de cara a la Diputación Provincial. Sí, fíjense,
aquellos que tanto critican los “chiringuitos”, hacen lo que sea para tener uno. Así pues,
consideremos sólo las encabezadas por vecinos o vecinas de nuestro pueblo y en ellas, nos
detengamos en saber a qué se dedican, quién necesita ocupar un puesto político, quién tiene
la vida resuelta, porque eso es garantía de que no necesita ningún cargo para vivir y podrá
mantener su opinión y posición, luchando por su pueblo, ante entidades e instituciones
superiores. Ya sabemos, si mi cargo lo debo a un partido político, que gobierna aquí o allá,
está claro que el partido me controlará. Garantizar la independencia de criterio y actuación se
llama esto.

En tercer lugar, la trayectoria de las fuerzas políticas, su historia y recorrido a nivel local, de las
personas que lo integran. Dónde han estado estos años, qué han hecho en estos años duros de
pandemia y crisis, qué actividades han organizado, qué personas han recibido, qué gestiones
han realizado. Recordar y tener memoria. Esto es algo muy distinto de usar tiempos pasados
como excusas para justificar las propias acciones o inacciones. Herencias recibidas dicen,
algunos doce años después las siguen invocando. Y con medias verdades. La más peligrosa de
las manipulaciones.

En cuarto lugar, atender a quien ponga el acento, no en fórmulas mágicas, que no existen, sino
en la participación, garantizando la implicación de toda persona o entidad. Un pueblo está vivo
cuando se mueve y se mueve cuando se le escucha e invita a participar, en la resolución de
problemas ( seguridad ciudadana, limpieza…), debatiendo con entidades vecinales, diseñando
carnavales con carnavaleros, organizando con los jóvenes sus actividades, no haciendo las
fiestas en pleno período electoral, porque la juventud no es tonta, es libre y quiere hacerse
escuchar; las actividades deportivas con los deportistas; las actividades del Hogar con
pensionistas; los problemas y actividades educativas con la comunidad educativas.
Participación. Participar es fortalecer la democracia y darle bríos as nuestro pueblo, lo
necesita.

En fin, nuestro pueblo, como todos, quiere vivir bien, seguro, limpio, con futuro, pensando no
en el mes que queda para las elecciones, sino en sus hijos, en sus mayores, Con esta voluntad,
veamos las listas, pensemos en Alcalá del Río, Esquivel, El Viar y San Ignacio del Viar.
A los candidatos no les deseo suerte, esto no es juego, les deseo fuerza, diálogo, mucha
capacidad de diálogo, serenidad, que les afecte en lo personal lo mínimo, porque es una tarea
agotadora y pasen por la vida municipal, porque más tarde o temprano tendrán que pasar (ya
son doce las elecciones municipales) y lo hagan sin rasguños, sin heridas, con la cabeza bien
alta, regresando a su vida anterior, sabiendo que algunas personas, algunas, le agradecerán su
esfuerzo. Pero la satisfacción de trabajar por tu pueblo es imborrable. Siempre estará.